TEMA 1: LOS TÍTULOS-VALORES. Introducción (no hay que aprendérselo de memoria). Son unos documentos de los que se valen los empresarios en el desarrollo de su actividad empresarial. Los empresarios, en el desarrollo de su actividad empresarial, celebran contratos con terceros. Permite a los empresarios adquirir productos sin que su negocio se vea afectado por la cantidad que tiene que pagar. Por ejemplo, un empresario que se dedica a fabricar pan y que necesita comprar materia prima para su elaboración. En esa compra de materia prima a los terceros, con motivo de ese contrato de compraventa, el derecho pone a su alcance una serie de documentos (títulos-valores) que le aportan facilidad y flexibilidad en el pago de la materia prima que adquieren del tercero. Por ejemplo, le permite fraccionar el pago de la materia prima y pagarlo de manera aplazada en el tiempo, lo que aumenta el volumen de ventas. Ej: 20.000 euros de harina – 10 letras de cambio de 2.000 euros. Si tuviera que pagarlo todo en el momento, no compraría esa cantidad. Cuando hablamos de títulos valores, fundamentalmente encontramos 3: letra de cambio, pagaré y cheque. La letra de cambio y pagaré permiten el pago fraccionado y aplazado. La fecha de vencimiento es el momento en el que hay que pagar la cuantía de la letra de cambio o el pagaré. Hasta que no llegue la fecha indicada, el deudor no tiene que pagar la cuantía que figura en ese título-valor. Antes de ese momento, el acreedor no le puede exigir esa cantidad, puesto que las partes lo han pactado previamente así. Cuando se emiten estos títulos, el título se lo queda el vendedor (acreedor). Todos los que plasman su firma en un título, responden en el pago. El acreedor no sólo no firma, sino que poseerá materialmente el título, y por ello estará legitimado para cobrar el importe de ese título. La posesión del documento es el que le otorga legitimación para reclamarle al deudor el pago de la cuantía del título el día de su vencimiento. Sólo el que posee puede reclamarlo. Cuando el acreedor antes del vencimiento necesita ese dinero, al deudor no se puede dirigir puesto que no está obligado a pagar. El acreedor podría acudir al contrato de descuento bancario (el acreedor entrega a la entidad de crédito el título-valor físicamente a cambio del importe de ese título-valor menos un determinado %, y la entidad de crédito es la que reclamará el pago al deudor). Esa posibilidad de transmitir el crédito antes del vencimiento, permite que el vendedor pueda adquirir nuevas mercancias para revenderlas. A partir de aquí, diapositivas. El título-valor es un concepto doctrinal (no viene en el Código de comercio ni en el CC). Es un documento papel esencialmente transmisible cuya posesión es necesaria para ejercitar el derecho a cobrar una determinada cuantía. En cuanto a su naturaleza, son cosas muebles corporales. La causa de la emisión de los títulos-valores es la existencia de un negocio jurídico del que se deriva una deuda. Debe ser un contrato del que se derive un pago. El contrato y el título tienen fuerza para obligar por sí solos, sin estar condicionados entre ellos. Esto quiere decir que el poseedor del título no tiene que ir con el contrato, sino que le basta la posesión del título-valor para poderle reclamar al firmante el importe del título, puesto que ese documento tiene fuerza obligatoria por sí misma. Cuando se genera un título, estamos ante dos obligaciones distintas: - Obligacion fundamental (extracartular o extracartácea): obligación de pago que deriva del negocio jurídico subyacente (contrato). Obligación cartular o cartácea: obligación derivada de la emisión del título-valor. Hasta que no llegue el vencimiento de la obligación cartular, la acción de pago derivada de la acción fundamental queda suspendida. El pago de la obligación cartular extingue ambas obligaciones (la cartular y la fundamental). La incorporación de un derecho a un documento. Cuando se emite un título, el título incorpora un derecho que le corresponde a su poseedor. Tiene tres características: Legitimación por posesión: El que posee el título-valor posee un derecho: el derecho a ejercer el derecho que incorpora el título. Por tanto, su posesión SIEMPRE es necesaria para ejercer el derecho incorporado, aunque NO SIEMPRE es suficiente. A veces es suficiente (por ejemplo, en un cheque al portador) aunque en otras es insuficiente (en un cheque nominativo). La persona no sólo necesita la posesión del título, sino que tiene que concordar con la persona que figura en el título. La posesión también es necesaria para la transmisión del título (y el derecho incorporado). Literalidad: Hay que distinguir entre los títulos-valores completos y títulos-valores incompletos (por ejemplo, las acciones de las SA, donde lo escrito en el documento no incorpora la totalidad de los derechos que dispone su poseedor. En los títulos valores completos (letra de cambio, cheque y pagaré) , su poseedor solo tiene derecho a ejercer el derecho literal y escrito en el propio documento. Autonomía. Tanto la emisión del título como las transmisiones que se realicen del título derivan de relaciones jurídicas distintas de las anteriores. Son autónomos e independientes de los anteriores. Si se realizan 3 transmisiones, se han llevado a cabo 4 relaciones jurídicas (la emisión del título y las 3 transmisiones). El deudor y el acreedor originarios se encuentran vinculados por la escritura del título y por relación jurídica subyacente que originó su emisión. El deudor podrá oponer frente al tenedor del mismo excepciones personales derivadas de la relación jurídica subyacente, tendentes a evitar el pago. El deudor puede oponerse al pago sobre la base del incumplimiento de la obligación del acreedor. Ejemplo: cuando se crea el contrato pactan que será el vendedor quien le entregue la mercancía en tres meses, tras el trascurso de los tres meses, el deudor no recibe la mercancía, pero el acreedor llegado el día del vencimiento le reclama el cumplimiento del titulo. En estas circunstancias el deudor podrá oponerse por incumplimiento de lo pactado por el acreedor). LA CUESTIÓN DE LA DESMATERIALIZACIÓN DE LOS TÍTULOS-VALORES. La causa es la existencia de un elevado número de títulos-valores (y su inmanejabilidad). Un título-valor NO puede ser desmaterializado. LA SUSTITUCIÓN DEL TÍTULO POR LA ANOTACIÓN EN CUENTA. La acción se representa por medio de anotación en cuenta (por medio electrónico). NO HAY título-valor, sino que es un valor, puesto que no hay título o documento. ¿Esto implica que estemos ante un título-valor desmaterializado? NO, porque estamos ante un valor, no un título-valor. La sustitución del título por la anotación en cuenta se puede realizar sólo en títulosacciones de la S.A. - Se trata de un sistema de representación voluntario en S.A que no cotizan en bolsa pero OBLIGATORIO en S.A que cotizan en bolsa. Sistema irreversible. Eso quiere decir que si la acción está representada por medios de anotaciones en cuenta no puede volver a otro sistema. - La titularidad del derecho se adquiere por la inscripción contable (Registro Contable especial). Por tanto, la titularidad y todos los derechos que esta conlleva la tiene la persona inscrita (nominativa). - Ejercicio del derecho. Mediante certificados de inscripción contable. - Transmisión del derecho: mediante transferencia contable. LA SUSTITUCIÓN DE LA PRESENTACIÓN AL PAGO DEL TÍTULO POR LA COMUNICACIÓN ELECTRÓNICA. Presupuestos. 1) Que el tenedor del título entregue en la entidad de crédito de la que es cliente dicho título para presentarlo al pago; y 2) Que el domicilio de pago sea una entidad de crédito. La entidad de crédito (que recibe el título) no remite (presenta al pago) el título a la entidad de crédito domiciliataria, sino que esa remisión se sustituye por una comunicación por vía telemática a la entidad de crédito domiciliataria. Presupuestos. 1) Que el tenedor del título entregue a la entidad de crédito de la que es cliente dicho título para presentarlo al pago; y 2) Que el domicilio de pago sea el del deudor principal. La entidad de crédito (que recibe el título) no remite (presenta al pago) el título al deudor principal en su domicilio sino que esa remisión se sustituye por un aviso de próximo vencimiento a dicho deudor. La ley permite que se sustituya la presentación material al pago del título por una comunicación electrónica, pero NO se está sustituyendo el título, sino facilitando la gestión de COBRO del título. El acreedor, en vez de ir a presentarle el título al deudor para el pago, se sustituya por una comunicación electrónica. Ocurre fundamentalmente cuando es una entidad de crédito. RÉGIMEN APLICABLE A LA LETRA DE CAMBIO, CHEQUE Y PAGARÉ ELECTRÓNICOS. No se le puede aplicar la LCCh (falta el documento papel). NO son título valores, sino que son documentos que incorporan un derecho de crédito frente a otra persona. El régimen aplicable sería la regla general aplicable a los créditos (y, en su caso, las referidas a la cesión de créditos). CLASIFICACIÓN DE LOS TÍTULOS-VALORES. 1.- Por su incidencia sobre el nacimiento del derecho incorporado. Títulos constitutivos. El derecho que incorpora el título nace de la emisión del título (Letra de cambio, cheque, pagaré). Títulos declarativos. El derecho que incorpora el título nace con anterioridad (al margen) a la emisión del título (el título-acción en la S.A). 2.- Por la forma de emitirse. Títulos individuales (efectos de comercio). El negocio jurídico genera la emisión de uno o varios títulos unitarios (e independientes) respecto a los demás (letra de cambio, cheque, pagaré). Títulos en serie (valores mobiliarios). El negocio jurídico genera la emisión de varios títulos de iguales características (el título-acción en la S.A). Títulos en masa. El negocio jurídico genera la emisión de documentos destinados a una colectividad (billetes de transporte en metro). Son al portador. 3.- Por el objeto del derecho incorporado. Títulos pecuniarios. Títulos que incorporan el derecho a cobrar una determinada cantidad de dinero en un determinado momento (Letra de cambio, cheque, pagaré). Títulos de participación social. Títulos que reconocen la condición de socio (y de todos los derechos inherentes a dicha condición) (El título-acción en la S.A). Títulos de tradición (o títulos representativos de mercancías). Título que faculta a su poseedor a exigir la restitución o la entrega de las mercancías mencionadas en el propio título (Transporte Marítimo de Mercancías). • El conocimiento de embarque. Título que emite el porteador (prueba la entrega por el cargador de las mercancías al porteador para su transporte y entrega en el puerto de destino. Otorga a su poseedor el derecho a exigir la entrega de la mercancía en el puerto de destino. Lo habitual es que se expida a la orden (transmisible mediante endoso), aunque es posible también al portador y en forma nominativa directa. Transmisible antes de que la mercancía llegue al puerto de destino. • Los resguardos de depósito en almacenes generales. Título que emite el depositario. Otorga a su poseedor el derecho a exigir la entrega de la mercancía depositada. Puede expedirse nominativamente o al portador. Transmisible antes de la retirada de la mercancía. 4.- Por la forma de designar al titular del derecho incorporado. Títulos al portador. El titular del derecho incorporado es su poseedor (generalmente, con cláusula «al portador»). El requisito para ejercer el derecho incorporado es la presentación del título. Transmisión: título (negocio jurídico) + modo [entrega material del título (intervención de notario si se trata de acciones al portador)]. *La letra de cambio y el pagaré no pueden ser títulos al portador. Títulos nominativos directos. Son los títulos cambiarios no endosables y las acciones nominativas. El titular del derecho incorporado es una persona concreta y determinada. Los requisitos para ejercer el derecho incorporado son la presentación del título y la identificación de quien lo presenta (el indicado en el título o, en su caso, el cesionario -a quien se le transmite). • Tipos y transmisión: 1) Títulos cambiarios no endosables (con cláusula “no a la orden”): acuerdo “transmitente-adquirente” + comunicación de la transmisión al deudor. 2) Acciones nominativas: acuerdo “transmitente-adquirente” + inscripción en libro registro de acciones nominativas. Títulos a la orden (títulos cambiarios sin cláusula “no a la orden”). El titular del derecho incorporado es una persona concreta y determinada. El requisito para ejercer el derecho incorporado es la presentación del título y la identificación de quien lo presenta (el tomador o, en su caso, el endosatario). El tomador es el primer poseedor. Si se queda con el título hasta el vencimiento, es el que está legitimado para cobrar. Pero si antes del vencimiento lo transmite a otra persona, ese tomador se transforma en endosante, y al que se le entrega es el endosatario. Transmisión: cláusula de endoso + entrega material del título al endosatario. Designación de la persona que ejerce el derecho (común títulos a la orden y nominativos). Para ver las diferencias vamos a tener en cuenta la letra de cambio, cheque y pagaré. Estos títulos pueden ser nominativos directos o títulos a la orden. La diferencia radica en la forma de transmisión. - Serán títulos a la orden cuando no incorporan la claúsula “no a la orden”. Serán transmisibles mediante endoso. Serán títulos nominativos directos cuando incorpore la claúsula “no a la orden”. Se transmite mediante cesión de créditos. 5.- Por su incidencia sobre la relación jurídica subyacente de la que trae causa. Títulos causales. Son títulos que incorporan la causa de su emisión, es decir, el negocio jurídico que lo ha originado. (El título-acción; el conocimiento de embarque; el resguardo de depósito en almacenes generales). Títulos abstractos. No hacen mención al negocio jurídico que dio lugar a su emisión. (Letra de cambio, cheque, pagaré). 6.- Por su literalidad. Títulos completos. El título incorpora literalmente los derechos de su titular (Letra de cambio, cheque, pagaré). Títulos incompletos (o por remisión). El título no incorpora la totalidad de los derechos de su titular (El título-acción).