ESCUELA DE INGENIERÍA EN SISTEMAS Tema: La conciencia moral como criterio subjetivo de la moralidad de la profesión. Autor: Nathaly Andrea Micolta Chicaiza Nivel: Octavo Semestre Ensayo La conciencia moral como criterio subjetivo de la moralidad de la profesión. Introducción La conciencia se parte del siguiente cuestionamiento: ¿cuándo y cómo surge la conciencia moral en cada sujeto humano? Tradicionalmente, y de acuerdo con una concepción intelectualista de la conciencia se ha venido aceptando que ésta aparece con el “uso de razón”. Cuando el niño es capaz de razonar, comienza a distinguir entre el bien y el mal. Se puede aceptar esta respuesta si estuviese claro el significado de “uso de razón” y si razón e inteligencia fuesen la misma cosa. Conforme a lo que se ha dicho de la conciencia, se puede afirmar que su aparición coincide o equivale a la aparición de la personalidad misma en cada individuo. La ley moral señala el carácter de bondad o maldad de una acción en general, es decir, su moralidad objetiva; la conciencia, en cambio, indica la moralidad de una acción personal para el sujeto humano respectivo concreto, es decir, nos habla de su moralidad subjetiva. La distinción que estamos introduciendo será fundamental para entender el modo como se estructura la respuesta moral de la persona desde su propia conciencia. Se debe tener claro que la conciencia moral surge como comprensión de la conducta en referencia a un determinado canon de perfección, canon que viene dado por el cuadro de valores que posee una persona y por la obediencia y discernimiento que ella (en orden a tales valores) deba a la ley moral. Se hablará que el subjetivismo moral o subjetivismo ético es una doctrina filosófica que afirma que lo bueno y lo malo, en la moral o ética, es reducible a nuestras actitudes y opiniones personales. Argumentos Hume confía en que el ser humano posee sentimientos morales comunes tales como la c lemencia, la caridad, la amabilidad hacia los niños y el amor a la vida, por lo cual más q ue un subjetivista moral Hume ha sido calificado por John Rawls como un fideísta de la naturaleza. Teórico del subjetivismo moral, quien adopto una perspectiva emotivista, de hecho, Ste venson en su libro Ética y lenguaje (1944) dice: “Cualquier descripción acerca de cualq uier hecho que cualquier hablante considere que probablemente cambiará actitudes pued e aducirse como una razón a favor o en contra de un juicio ético." Según Rachels, el subjetivismo simple no puede explicar nuestra falibilidad, el hecho no torio de que ninguno de nosotros es infalible. Al hacer una evaluación o un juicio, no est amos exentos de equivocarnos y al darnos cuenta del error probablemente queramos cor regirlo. Así que el subjetivismo simple no puede ser correcto porque entonces cada uno de nosotros sería infalible. Hume confiaba en el sentido de la moral era propio de la naturaleza humana y que era estable, compartido por todos los hombres. Por lo que David Hume fue el principal representante del subjetivismo moral. La conciencia moral y ética es la capacidad para sentir, juzgar, deliberar (argumentar) y actuar conforme a valores morales de modo coherente, persistente y autónomo. Sin valores no hay conciencia moral; como no hay pensamiento sin conceptos. Al ver la personas en necesidad y sentirme involucrado y obligado actuar se debe a que en mi existe un valor de justicia, solidaridad u otro. La autoconciencia o conciencia ética no nos dice como actuar; sin embargo, optimización la conciencia moral haciéndola más clara en sus contenidos, perfeccionando sus procesos y haciéndola más coherente. Sin embargo, la ética busca formular valores o deberes deliberadamente y de carácter "mundial", o sea a un grado de generalidad que trasciende loa valores particulares. Los valores no son otra cosa que medios que me permiten caminar hacia un ideal, porque son sus condiciones de posibilidad misma. Por ejemplo ¿por qué creemos en la honestidad, en la cortesía, en la justicia? Porque nos conducen a lo que nosotros estimamos que es el ideal de la armonía y la paz humana. La capacidad u órgano humano que posibilita que un costo moral determine la conducta humana y, de aquel modo, lo ideal se realice que existe (fáctico), es la conciencia moral. El proceso de desarrollo de la conciencia moral pasa de conocer los valores a convertirlos en deberes y al final en virtudes o carácter. Los deberes, no son otra cosa que los valores presentándose a nuestra conciencia en forma imperativa. Sobre la interacción entre la conciencia moral y los valores, debemos poner en claro que no hablamos de que la conciencia exista primero para después adueñarse los valores. La conciencia nace del proceso mismo de tomar posesión -construir estos valores.; de igual modo que el raciocinio nace en el proceso mismo de edificar el razonamiento. Esto involucra que la conciencia moral nace al calor, ejemplificando de interrelaciones como la amistad, en la que aprendemos a ser honestos. La conciencia moral es una fuerza; ya que puede operar sobre la conducta humano por medio de los valores que se transforman en deberes y virtudes. La moral elaborada conciencia nos hace reconocer y nos ordena a actuar en conformidad con el perfeccionamiento de las personas en sus interrelaciones consigo mismo, los demás y la naturaleza o mundo. Por esa razón para Hostos la moral comprende 3 gigantes divisiones: la moral personal, la moral social y la moral natural. Conclusiones Es indudable que el ser humano encuentra el sentido de la vida, en una diversidad de positivas y enriquecedoras actividades culturales, científicas, artísticas, deportivas, en las que invierte su ser persona y gana humanidad. Es cierto, por tanto, que existe todo un campo de posibilidades dadoras de sentido, pero también es cierto, que el auténtico y verdadero sentido, el tratar de encontrarle sentido a la vida es algo sumamente difícil, una tarea que le corresponde a cada ser humano, a cada hombre y mujer, a cada quien; una lucha interna que puede durar toda la existencia personal. Incluso habrá el que nunca lo logre o, al que nunca le interese hallarlo. La conciencia es condición para optar por el camino del bien y ser honesto con uno mismo, de lo contrario se cae en el auto engaño. Para acertar hay que poner todo el empeño en asegurar su correcta formación, venciendo la ignorancia, de modo que la reflexión se sustente en un conocimiento de la realidad. El hombre sin conciencia podría hacer todo, por eso se puede encarcelar al que quiere mejorar el mundo por medio del crimen (los delincuentes). La libertad de conciencia tiene límites cuando no está bien formada; por lo tanto, no es lícito aceptar hacer lo que la conciencia manda. Bibliografía Rachels, James (2007). Introducción a la filosofía moral. México: Fondo de Cultura Ec onómica. Zavadivker, Nicolás (2006), “El subjetivismo axiológico de David Hume”, en Revista Humanitas nº 33, Tucumán: F acultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de Tucumán. Williams Jr, Robin (1979), "Valores", en Enciclopedia Internacional de Ciencias Sociales, Madrid: Aguilar. Hooker, Brad (2001). Voz "Subjectivism" en Becker, Charlotte, Encyclopedia of Ethics. Tomo tres. Nueva York: Routledtge, pp. 1665-1668.