Subido por Luigi Valentino

Oportunidades desperdiciadas, otro aspecto a combatir en la lucha contra el cambio climático

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5. Elabore un ensayo que articule el contenido desarrollado en el módulo 2 con una problemática
concreta derivada del contexto local o mundial. Por ejemplo: Ética y Pandemia COVID-19.
El ensayo debe contener al menos 3 citas bibliográficas de los textos presentados como recursos
principales, opcionales o recomendados.
El ensayo tendrá una extensión entre 800 a 1200 palabras.
La corrupción es la raíz de todos los males
A lo largo de la historia es conocido como diferentes personajes han traicionado sus principios o los
acuerdos establecidos con otro
Corrupción viene
La corrupción en américa latina está asociada con la política y el éxito, en esa cultura de viveza de criolla
en que lo correcto es quien aprovecha las oportunidades y le saca ventaja a todo incluso si esas son
contraproducentes a otros o los afectan con un impacto letal
Como articular los actos de la sociedad si estos siempre se los ven entorpecidos
Oportunidades desperdiciadas, otro aspecto a combatir por el cambio climático
Las oportunidades desperdiciadas son un problema para el cambio climático puesto que por un
sistema corrupto que responde a cierto interés se genera una descoordinación de esfuerzos y
empleo de recursos desencadenando un empleo adicional de labores para cumplir objetivos o,
en su defecto, el descarte total de lo ejecutado, es decir, desperdicio físico.
El desperdicio según el Papa francisco (2015) es un subproducto de una sociedad llena con la
cultura del descarte, donde son dispensables recursos, animales y hasta personas. Sin embargo,
existe un aspecto poco explorado que es cuando un sistema, puede ser administrativo, tiene
desperdicio, siendo otra característica a entender de esta cultura, pues se convierten en
oportunidades desperdiciadas.
Consecuentemente al entrever un sistema administrativo como el público, no es difícil detectar
ciertas incongruencias producto de intereses generados, (Stevens, 2006) como el caso del
Congreso de Estados Unidos donde ciertos representantes de diferentes estados del país, al ser
financiados por empresas petroleras, tanto en su campaña como a nivel personal; estos se
oponen sistémicamente al empleo de nuevas leyes que favorezcan al desarrollo sostenible y por
lo tanto emprenden campañas mediáticas, en coalición con ciertos grupos también financiados
por empresas petroleras, para desacreditar la evidencia científica bajo la cual se sustentaron
estas leyes.
Esto es un claro ejemplo de las oportunidades desperdiciadas, puesto que un debate real de una
problemática con respaldo científico tuvo la oportunidad de ejecutarse, pero gracias a un sistema
corrompido en respuesta a los intereses de las empresas se desestimó cualquier opción al debate
y, por el contrario, se emplearon una serie de recursos innecesarios para dividir la opinión
pública. Lo que según Avedaño (2015) se denomina “La captura del Estado”, un tipo de
corrupción que es muy común, ostentando los poderes económicos y políticos en respuesta a un
solo grupo privilegiado, cuyos beneficios distan mucho de los fines esenciales del estado.
Otro caso es el de Chile después del terremoto de 2010, donde (Aravena, 2017) como antecede
ocurre que producto de una catástrofe se activan mecanismos por parte del gobierno central
para establecer soluciones con propósito de reconstruir la ciudad de Constitución, fuertemente
golpeada por el tsunami que vino producto del terremoto. Es entonces que el grupo de
arquitectos encargados de diseñar las posibles soluciones se topan con que había el incentivo por
parte de empresas constructoras de la creación de un muro que contenga las aguas, algo que es
ineficiente al largo plazo, por su alto valor contractual de alrededor de 42 millones de dólares.
Además, se demostró que este era un proyecto aislado a otros 3 que quisieron implementar en
la misma área, pero desde diferentes ministerios, sin saber de la existencia del otro.
El antecedente de este caso se articula como un ejemplo de descoordinación puesto que, dados
los intereses de ciertos grupos, se presionó desde diferentes instituciones estatales la creación
de proyectos en un mismo punto, pero conforme agendas particulares, lo cual se pudo haber
convertido en una pérdida de millones de dólares, vidas humanas y potencialmente casas. Puesto
que las posibles implementaciones de estas soluciones no hubiesen sido capaces de mitigar los
efectos de la naturaleza y, por lo tanto, al ocurrir el siniestro natural desaparecería grandes
porciones de la ciudad. En consecuencia, llevando todo ese desperdicio y contaminantes de
vuelta al ambiente. Demostrando que los alcances de la corrupción aparte de ser contaminantes,
pueden ser letales.
Afortunadamente, en el caso chileno (Aravena, 2017) la razón primó por sobre todo lo demás,
pudiéndose articular una propuesta que prime soluciones aterrizadas por la participación de los
habitantes a la realidad local, carente de espacios públicos. Esto generó una suerte de áreas
verdes con una lógica espacial que logre mitigar los efectos de un potencial tsunami a través de
la disposición de elementos naturales que generen fricción, logrando así proteger a la ciudad y
sus habitantes. Y todo esto con un presupuesto menor al sumatorio total de los presupuestos de
los otros 3 proyectos, lo cual benefició al estado y los intereses de los ciudadanos de Constitución.
Demostrando que una administración efectiva de recursos es favorable para la resiliencia y el
combate al cambio climático.
Además, este ejemplo muestra como la participación ciudadana se articula para la propuesta de
soluciones lo cual se pudo lograr en lo que Landeta (2020) denomina espacio de democracia
donde se pudo gestar el diálogo entre diferentes actores además de delimitar a profundidad la
problemática y las implicaciones de la misma, algo que se complementa al aspecto educativo de
la participación ciudadana, puesto que una decisión informada es una buena gestora de
soluciones y más aún si esta tiene que ver con el empleo eficaz y prudente de recursos en el
tiempo como en el caso de Constitución.
Pero que ocurre cuando la realidad es todo lo contrario al último caso expuesto, donde no solo
que no existe una coordinación producto de un sistema corrupto, sino que resultado de aquello
se requiere el empleo de esfuerzos adicionales o enfrentar las consecuencias irreparables de
estas. Bajo este contexto se presenta el caso de Ecuador, donde según Torres (2022) el Instituto
Ecuatoriano de Seguridad Social, mismo que se encarga con el pago de pensiones para jubilados
y de prestación de servicios médicos para los afiliados, presenta una serie de irregularidades
producto de la corrupción de sus funcionarios en la que se ha detectado alrededor de 64
contratos de adquisición de insumos con sobreprecio, generando un perjuicio para la institución
de alrededor de 3 millones de dólares. Esto ha generado una suerte de actos vandálicos en pos
de borrar evidencias y evitar acusaciones en las altas esferas administrativas que ha incurrido
hasta en la quema de los insumos dentro de las bodegas que las contenían, ahondado aún más
la precaria situación.
Además, para acrecentar más la crisis según Mella (2020) funcionarios del IESS han dejado
caducar alrededor de 6 millones de pastillas, denotando la ineficaz administración que la
sustenta. Bajo la cual se entorpecen todos los esfuerzos empleados para atender adecuadamente
a los pacientes, pues no se cuenta ni con las herramientas necesarias ni los insumos adecuados
para el tratamiento de estos y, justamente, son los que menos acceso tienen a otro tipo de
atención médica, los más pobres, quienes son los más perjudicados. Puesto a que es su salud la
que está en riesgo.
Esto se pudo observar en los inicios de la pandemia en la ciudad de Guayaquil, pues (The New
York Times, 2020) producto de una ineficiente administración de los recursos, un precario estado
de los equipos, la incorporación de personal poco preparado para gestionar los diferentes
equipamientos de la institución, además de altos funcionarios corruptos; sentó las bases de una
tormenta perfecta que desembocó en la peor crisis del manejo de los casos de COVID de una
ciudad latinoamericana y, por consiguiente, una alza en los contagios que derivaron finalmente
en una alta tasa de mortandad por la enfermedad, algo que institucionalmente se buscó ocultar
a través de diagnósticos diferentes a los causales y el empleo de personal y maquinaria adicional
para desechar cadáveres en fosas comunes.
En el caso ecuatoriano, es notorio que la corrupción institucionalizada condena a una secuencia
de actos en cadena que siempre buscan suplir los déficits generados por la administración
ineficiente, o la respuesta a esos intereses particulares, volviéndose un círculo vicioso que
requiere de más actos deplorables para mantener a flote el estatus quo y, por consiguiente, la
fuente de dinero y poder, llevando a la perdida física y económica de la institución. Esto
repercutió en última instancia a los más vulnerables, los pacientes, por los cuales debería velar
la institución.
En conclusión y tal como lo muestra el último caso, las oportunidades desperdiciadas a lo largo
de la toma de decisiones en las diferentes etapas de gestión y servicio pueden desembocar en la
pérdida innecesaria e irreparable de vidas y recursos, por consiguiente incide la producción de
desperdicios peligrosos –como los médicos- lo cual ante los deficientes organismos de gestión de
desechos sólidos los disponen a la intemperie en el medio ambiente, lo cual lo convierte en un
problema del cambio climático.
Referencias
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Incluir
a
la
comunidad
en
el
proceso
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YouTube.
https://www.youtube.com/watch?v=o0I0Poe3qlg&t=276s
The New York Times. (2020, 21 de abril). How Coronavirus Ravaged Ecuador: From First
Confirmed
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Dead
[Video].
YouTube.
https://www.youtube.com/watch?v=Hdgrtko-EEA
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0corrupci%C3%B3n%20viene,a%20alguien)%20%E2%80%9CAn%C3%B3nimo%E2%80%9
D.
Landeta, Iván (2020). Retos éticos que demanda el contexto socioambiental. Archivo en Word.
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Mella, C. (2020, October 20). El IESS dejó caducar medicinas en los 101 hospitales de su red.
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los presbíteros y a los diáconos, a las personas consagradas y a todos los fieles laicos sobre
el
cuidado
de
la
casa
común.
Disponible
http://www.vatican.va/content/francesco/es/encyclicals/documents/papafrancesco_20150524_enciclica-laudato-si.html (Consulta: 2020/ 22/ 06).
Stevens, F. (Director). (2016). Antes de que sea tarde [documental]. National Geographic.
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Torres, W. (2022). Escándalo de corrupción en hospital del IESS suma siete nuevos acusados.
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