LA NUTRICIÓN DE LOS SERES VIVOS

Anuncio
LA NUTRICIÓN DE LOS SERES VIVOS
Los alimentos son las sustancias que ingieren los seres vivos. Están
formados por componentes inorgánicos (agua, minerales, sales) y por
componentes orgánicos (hidratos de carbono o azúcares, lípidos o grasas,
proteínas y vitaminas). Todos estos componentes se denominan
nutrientes.
La nutrición es el conjunto de procesos donde los seres vivos
intercambian materia y energía con el medio que los rodea. Por medio de
la nutrición se obtiene energía y se aportan los nutrientes para crear o
regenerar la materia del organismo.
La función de nutrición incluye varios procesos: la captación de
nutrientes, su transformación, su distribución a todas las células y la
eliminación de sustancias de desecho que se producen como resultado del
uso que se hace de los nutrientes en las células. Todos estos procesos son
comunes tanto para animales como para vegetales. Para que se pueda
llevar a cabo la nutrición, los seres vivos poseen órganos y sistemas
especializados. En los animales, esos órganos forman parte de los
sistemas digestivo, respiratorio, cardiovascular y excretor.
De acuerdo a la forma en que obtienen los alimentos, los seres vivos se
clasifican en autótrofos y heterótrofos.
Son autótrofos los organismos capaces de sintetizar su propia materia
orgánica. Es la nutrición propia de las plantas, que utilizan la energía solar
y la clorofila presente en los cloroplastos.
Los organismos heterótrofos no sintetizan sus alimentos, con lo cual es la
nutrición propia de los seres que consumen a otros organismos vivos.
La nutrición consiste en tomar nutrientes y oxígeno del medio para
obtener energía, para luego recoger y expulsar sustancias de desecho. Se
realiza en las siguientes fases: toma de alimentos, transformación de esos
alimentos mediante la digestión, absorción de nutrientes, transporte de
nutrientes y obtención de energía. Como último paso de la nutrición se
realiza la recolección, el transporte y la eliminación de sustancias de
desecho producidas en las células.
NUTRICIÓN DE LOS VEGETALES
Las algas y los vegetales se nutren de forma autótrofa. Para ello toman
del medio el agua, el dióxido de carbono y las sales minerales. Por medio
de las raíces toman el agua y las sales minerales del suelo y por los
estomas de las hojas el dióxido de carbono de la atmósfera. Por el tallo se
distribuye hacia las hojas el agua y las sales, y hacia todas las partes del
vegetal los productos sintetizados en la fotosíntesis. Por lo tanto la raíz,
además de fijar el vegetal al suelo absorbe el agua y las sales por unos
pelos muy finos que existen en la zona pilífera. Esa agua y sales forman la
savia bruta que se transporta por vasos llamados xilema a través de todo
el tallo. La fuerza necesaria para que la savia bruta pueda ascender no es
otra que la evaporación del agua de las hojas por transpiración.
Una vez que han llegado el agua y las sustancias inorgánicas a la hoja, se
absorbe por los estomas de las propias hojas el dióxido de carbono, que
junto con la energía del sol y en presencia de clorofila transforman dentro
de los cloroplastos la savia bruta en savia elaborada. Esta savia elaborada,
rica en azúcares y materia orgánica, es distribuida al resto del vegetal por
otro tipo de vasos denominados floema.
Una vez que el vegetal ha adquirido la materia orgánica por fotosíntesis,
la utiliza para generar energía. Los vegetales también necesitan de
energía para crecer, dar flores y frutos, reponer partes de la planta y
relacionarse con el medio. Esa energía la toman del uso que hacen de los
azúcares y demás compuestos elaborados en la fotosíntesis. La materia
orgánica entra en las mitocondrias de las células y en presencia de
oxígeno se realiza la respiración celular. De esta forma, la materia
orgánica es transformada en dióxido de carbono (que se elimina a la
atmósfera), agua y energía en forma de ATP (trifosfato de adenosina).
Cabe señalar que los vegetales carecen de estructuras especializadas para
la excreción de desechos. Por otra parte, la cantidad de desechos
vegetales es muy baja. El dióxido de carbono producido por respiración
celular se elimina al exterior a través de los estomas de las hojas, aunque
una parte de ese gas puede ser reutilizado para la fotosíntesis. Las
sustancias nitrogenadas de desecho se emplean para la síntesis de nuevas
proteínas. Algunos desechos son almacenados dentro de las células de la
propia planta.
NUTRICIÓN DE LOS ANIMALES
Los animales necesitan energía para vivir, pero no pueden tomarla del sol
directamente como lo hacen los vegetales. Sólo pueden obtener la energía
de la transformación de los alimentos y del oxígeno que toman del aire.
Así se realiza la nutrición heterótrofa. Los seres unicelulares toman del
medio externo las sustancias que necesitan. En los seres pluricelulares
existen células que se especializan en tejidos, éstos se asocian en órganos
y los órganos a su vez en sistemas que realizan funciones específicas
dentro del organismo general.
Los sistemas que intervienen en la nutrición de los animales son los
siguientes:
1- Sistema digestivo: digiere los alimentos para obtener nutrientes, los
absorbe para que sean utilizados por las células y elimina la materia no
aprovechable en forma de excrementos.
2- Sistema circulatorio: distribuye nutrientes y oxígeno a todas las células
del cuerpo y recoge los residuos y el dióxido de carbono llevándolo a los
órganos excretores.
3- Sistema respiratorio: toma el oxígeno necesario para la vida celular y
expulsa el dióxido de carbono que produjo la célula tras realizar la
respiración celular.
4- Sistema excretor: elimina del organismo todas las sustancias
nitrogenadas que produce la célula a raíz de su metabolismo.
SISTEMA DIGESTIVO
Es el encargado de transformar los alimentos que ingresan al organismo
(ingestión) en sustancias más sencillas (digestión) para que puedan pasar
a la sangre (absorción) y de ahí ser distribuidas a todas las células del
organismo, desechando todo aquello que no ha sido utilizado (egestión).
Vale decir que las etapas que cumple el proceso digestivo son la ingestión,
digestión, absorción y egestión. La egestión se produce por defecación,
cuando los excrementos son compactos y poseen poco agua (mamíferos)
o por deyección, cuando son acuosas y se eliminan por la cloaca (aves).
La mayor parte de los animales tienen un aparato digestivo formado por:
-Un tubo digestivo con una abertura anterior (cavidad bucal) para entrada
de alimentos y una salida posterior (ano) para la expulsión de
excrementos. Los órganos principales que forman la parte tubular del
sistema digestivo son: cavidad bucal, faringe, esófago, estómago,
intestino delgado, intestino grueso, recto y ano.
-Glándulas accesorias que colaboran en los procesos digestivos y de
absorción, como las glándulas salivales, el hígado, el páncreas y el
hepatopáncreas, este último en organismos invertebrados.
La digestión fragmenta y reduce a los alimentos de dos formas:
-Física: a través de la masticación en la cavidad bucal y por los
movimientos que realiza el estómago y los intestinos cuando las
sustancias ingeridas llegan a estos órganos.
-Química: por la acción de enzimas digestivas producidas a lo largo del
tracto digestivo.
Sistema digestivo en los mamíferos
Los órganos que poseen los mamíferos son los siguientes.
Cavidad bucal: contiene órganos accesorios como la lengua y los dientes.
La lengua colabora en acomodar los alimentos y mezclarlos con saliva
durante la masticación (insalivación), con lo cual forman el bolo
alimenticio. Los dientes actúan en la digestión mecánica, ya que se
utilizan para cortar, desgarrar, triturar y moler los alimentos. La saliva
contiene una enzima llamada ptialina que actúa sobre los hidratos de
carbono, poniendo en marcha la digestión química. Por otra parte, ejerce
una función mecánica al lubricar la boca y humedecer el alimento que
ingresa a la cavidad bucal.
Faringe: una vez que el bocado es deglutido, pasa hacia la faringe
(garganta). En los animales superiores, por este órgano pasan los
alimentos y el aire que va desde y hacia los pulmones, por lo que es un
órgano que pertenece a los sistemas digestivo y respiratorio.
Esófago: es un conducto que nace en la faringe y conduce el bolo
alimenticio hacia el estómago.
Estómago: en los mamíferos es el lugar donde se inicia la digestión de las
proteínas, gracias a la acción del ácido clorhídrico y de las enzimas
provenientes del jugo gástrico.
Intestino delgado: continúa la digestión de las proteínas y se inicia la
digestión de las grasas y de los hidratos de carbono, por acción de
enzimas del jugo pancreático, del jugo intestinal y de la bilis segregada
por el hígado. En el intestino delgado se produce la absorción de la mayor
cantidad de nutrientes a través de las vellosidades intestinales. Esos
nutrientes pasan a los capilares sanguíneos y linfáticos y se dirigen al
hígado, para luego distribuirse a todas las células del organismo.
Intestino grueso: su principal función es concentrar y almacenar los
desechos sólidos y transformar el contenido intestinal (quimo) en materia
fecal.
Las células presentes en intestino grueso reabsorben agua del quimo,
sales minerales y algunas vitaminas.
Recto: última porción del sistema digestivo, ubicado entre el intestino
grueso y el ano. La función del recto es almacenar la materia fecal para
luego ser expulsada por la abertura anal.
Sistema digestivo en las aves
Es bastante parecido al de los mamíferos, ya que prácticamente poseen
los mismos órganos y funciones similares. La cavidad bucal está
representada por un pico, con una lengua puntiaguda en su interior,
glándulas salivales y ausencia de piezas dentales. El pico se continúa con
la faringe y luego con el esófago, que se ensancha en la parte anterior
dando lugar al buche, utilizado para almacenar alimento y favorecer su
ablandamiento. En algunas especies el buche elabora sustancias nutritivas
para alimentar a las crías. Luego continúa el estómago, que se divide en
dos partes: una anterior, el proventrículo que segrega jugo gástrico, y una
parte posterior, la molleja, de gran musculatura donde se trituran los
alimentos con la ayuda de piedritas que las aves tragan para favorecer el
macerado. Más tarde el bolo ingresa al intestino que se dispone de
manera muy flexuosa
como en los mamíferos. El intestino desemboca en dos ciegos alargados,
que a su vez dan origen al recto que desemboca en la cloaca por donde se
deyectan los excrementos.
Sistema digestivo en los reptiles
Hay variaciones según sea el tipo de animal que se trate. Las tortugas
carecen de dientes, mientras que los caimanes y cocodrilos presentan
dentición desarrollada. Las serpientes, algunas venenosas, tienen
colmillos dentro de la cavidad bucal. El estómago de los reptiles, de gran
capacidad, se continúa con el intestino delgado y luego con el intestino
grueso que termina en una cloaca. En las serpientes, tanto el esófago
como el estómago tienen una importante capacidad para distenderse,
hecho que favorece la deglución de presas de gran tamaño. El hígado y el
páncreas de los reptiles cumplen las mismas funciones que en los
mamíferos y aves.
Sistema digestivo en los anfibios
Presentan una cavidad bucal, faringe, esófago, estómago, intestino
delgado, intestino grueso y cloaca. En general, el sistema digestivo de los
anfibios es bastante similar al de los reptiles.
Sistema digestivo en los peces
Formado por un largo tubo que se inicia en la cavidad bucal y se continúa
con la faringe, el esófago, el estómago y los intestinos. Como no tienen
glándulas salivales se reemplazan por estructuras secretoras de moco. En
la parte lateral de la faringe se originan las branquias, órganos de la
respiración. De la zona esofágica nace la vejiga natatoria. Una derivación
del esófago forma la vejiga natatoria, órgano hidrostático de muchos
peces que ayuda a mantener el equilibrio.
Sistema digestivo en
los insectos
Está formado por un tubo algo enrollado que se extiende desde la boca al
ano. Se divide en tres regiones separadas por esfínteres que regulan el
pasaje de los alimentos. Esas regiones son el estomodeo, el mesenterón y
el proctodeo.
-Estomodeo: formada por el esófago, el buche (ensanchamiento final del
esófago) y los proventrículos, que en su parte final presenta la válvula
estomoideal que regula el paso de alimentos hacia la siguiente región.
-Mesenterón: representa el intestino medio, con forma de saco alargado
de diámetro uniforme. En su interior presenta pliegues para la absorción
de los nutrientes. El mesenterón contiene jugos digestivos y enzimas para
la digestión.
-Proctodeo: se divide en íleo, delgado tubo que es continuación del
mesenterón y en recto, parte final con forma de saco ubicado en la parte
posterior del abdomen.
SISTEMA CARDIOVASCULAR
El sistema cardiovascular (cardiocirculatorio) tiene las siguientes
funciones:
-Transportar la sangre con oxígeno y nutrientes hacia todas las células del
organismo
-Llevar los desechos celulares y el dióxido de carbono hacia los órganos
encargados de su eliminación.
-Transportar hacia los tejidos sustancias como el agua, hormonas,
enzimas y anticuerpos, entre otros.
-Mantener constante la temperatura corporal.
Una vez que los heterótrofos han digerido los alimentos en los intestinos y
obtenido así los nutrientes, estos son absorbidos hacia la sangre, quien
los ser transportará hacia todas las células del organismo.
El transporte de nutrientes se realiza por medio del sistema
cardiovascular, formado por el corazón, las arterias, las venas y los
capilares sanguíneos, estos últimos muy pequeños y en estrecho contacto
con las células del organismo. Es la sangre que corre por dichos vasos
quien transporta a las proteínas, glúcidos, lípidos, agua, sales, enzimas,
hormonas, oxígeno, etc. hacia todas las células para que puedan cumplir
sus funciones vitales.
Los órganos que componen el sistema cardiovascular de los vertebrados
son el corazón y los vasos sanguíneos, estos últimos diferenciados en
arterias, arteriolas, venas, vénulas y capilares sanguíneos. Las arterias
salen del corazón transportando sangre hacia el organismo. Poseen una
capa muscular bien desarrollada capaz de soportar la presión de la sangre
que es bombeada por el corazón. Las venas llegan al corazón
transportando sangre desde el organismo. A diferencia de las arterias, las
venas tienen válvulas para evitar el movimiento retrógrado de la sangre.
Luego de múltiples ramificaciones donde el diámetro de los vasos
arteriales se va reduciendo de centímetros a micrones se forman los
capilares sanguíneos, cuya misión es entregar oxígeno y nutrientes a las
células y recibir dióxido de carbono y desechos del metabolismo celular.
El corazón presenta aurículas y ventrículos. Las aurículas reciben sangre
proveniente de las venas. Los ventrículos impulsan la sangre fuera del
corazón.
La circulación de los animales puede ser:
-Simple: cuando la sangre circula solo una vez por el corazón, como en los
peces, que poseen una aurícula y un ventrículo.
-Doble: la sangre pasa dos veces por el corazón ya que existe un circuito
pulmonar y otro general, tal como sucede en aves y mamíferos. Estos
animales tienen dos aurículas y dos ventrículos.
-Incompleta: cuando la sangre venosa se mezcla con la sangre arterial,
como en los reptiles y los anfibios.
-Completa: la sangre arterial y la venosa nunca se mezclan (aves y
mamíferos).
-Cerrada: cuando la sangre circula únicamente por vasos y no toma
contacto con el exterior. Es propia de los anélidos y los vertebrados.
-Abierta: cuando la sangre no circula completamente por los vasos,
abriéndose en un tramo con el exterior para bañar directamente a las
células. Es propia de moluscos y artrópodos, donde la sangre (hemolinfa)
sale de los vasos para entregar nutrientes a los tejidos y luego vuelve a
penetrar en los vasos para llegar al corazón.
Los animales inferiores no tienen un verdadero sistema circulatorio
(esponjas o celentéreos).
Circulación en las aves y mamíferos
En el corazón de las aves y de los mamíferos existen cuatro cámaras: dos
aurículas, una derecha y otra izquierda y dos ventrículos, derecho e
izquierdo. La sangre pobre en oxígeno recogida de todas las células del
organismo ingresa a la aurícula derecha del corazón a través de las venas
cavas. Pasa al ventrículo derecho, luego a la arteria pulmonar y llega a los
pulmones para oxigenarse. Esa sangre oxigenada es conducida por las
arterias pulmonares al corazón, más precisamente a la aurícula izquierda.
La sangre pasa luego al ventrículo izquierdo que la impulsa con gran
presión hacia todo el cuerpo a través de la arteria aorta.
La circulación de las aves y mamíferos es doble, cerrada y completa, ya
que la sangre atraviesa dos veces el corazón, no se comunica con el
exterior y nunca se mezcla.
Circulación en los reptiles y anfibios
Poseen un corazón con tres cavidades, dos aurículas (derecha e izquierda)
y un ventrículo. La sangre desoxigenada de todo el cuerpo llega a la
aurícula derecha, pasa al ventrículo y llega a los pulmones a través de la
arteria pulmonar. En los pulmones se oxigena y regresa por las venas a la
aurícula izquierda, pasa nuevamente al único ventrículo y es llevada por la
arteria aorta a todo el organismo. Los reptiles y anfibios tienen una
circulación doble, cerrada e incompleta. No obstante, la mezcla entre la
sangre oxigenada y desoxigenada es menor, ya que el ventrículo está
parcialmente dividido.
El cocodrilo, uno de los mayores predadores del planeta, es un reptil cuyo
corazón posee cuatro cavidades bien definidas (dos aurículas y dos
ventrículos), como las aves y los mamíferos.
Circulación en los peces
El corazón de los peces tiene forma de tubo, con una aurícula y un
ventrículo. La sangre desoxigenada es transportada por las venas hacia la
aurícula y luego al ventrículo, que la impulsa hacia las branquias para que
pueda oxigenarse. Luego circula por las arterias y llega a todas las células
del organismo para entregar oxígeno y nutrientes. Es de notar que la
sangre pasa una sola vez por el corazón en cada circuito. Es por ello que la
circulación de los peces es simple, cerrada y completa. Los anfibios no
adultos, como los renacuajos, tienen una circulación similar a la de los
peces.
Circulación en los insectos
Estos animales poseen un corazón y un solo vaso que transporta
hemolinfa. El corazón tiene forma de tubo, con aberturas laterales
llamadas ostiolos. La hemolinfa circula por todo el cuerpo y luego regresa
al corazón, de ahí a una pequeña arteria dorsal y luego a todos los tejidos
para irrigarlos nuevamente. La hemolinfa distribuye todos los nutrientes a
las células pero no el oxígeno, que es llevado exclusivamente por el
sistema respiratorio a través de las tráqueas.
SISTEMA
RESPIRATORIO
La función del sistema respiratorio es tomar el oxígeno de la atmósfera o
del agua (peces) y llevarlo, a través del sistema circulatorio, a las células
del organismo. También actúa desalojando el dióxido de carbono
producido en las células como material de desecho. La respiración de los
vertebrados terrestres consiste en una inspiración, donde penetra el
oxígeno atmosférico por las cavidades nasales rumbo a los pulmones para
ser entregado por la sangre a las células, y en una espiración, donde el
dióxido de carbono es eliminado al exterior. El intercambio que se produce
entre el oxígeno y el dióxido de carbono se denomina hematosis.
En los distintos organismos animales existen diferentes tipos de
respiración.
-Respiración pulmonar
Los pulmones son las estructuras respiratorias que toman contacto con el
exterior por medio de una serie de tubos. Están irrigados por una gran
cantidad de capilares sanguíneos. Los pulmones pueden presentar forma
de saco, como en mamíferos, reptiles y anfibios, o forma tubular, como los
sacos aéreos de las aves.
-Respiración branquial
Las branquias son estructuras propias de animales de vida acuática, como
los peces, anfibios, crustáceos y moluscos. Hay branquias externas y
branquias internas, estas últimas más evolucionadas.
-Respiración traqueal
Es la que poseen los insectos y artrópodos terrestres, mediante un
sistema de tubos llamados tráqueas. Estas estructuras ponen en contacto
el oxígeno atmosférico con todas las células del organismo animal. Como
se mencionó anteriormente, el sistema cardiocirculatorio de los insectos
no participa en el transporte de oxígeno, ya que la circulación abierta que
poseen es muy lenta para tal efecto. Los tubos traqueales se conectan con
el exterior por medio de orificios llamados espiráculos.
-Respiración cutánea
El intercambio gaseoso se efectúa a través de la piel, como sucede en los
gusanos terrestres o en animales acuáticos, como medusas y esponjas.
Los anfibios también recurren a este tipo de respiración, que se
complementa con la respiración pulmonar como en ranas, sapos y
salamandras.
Sistema respiratorio en los mamíferos
Los pulmones tienen un gran desarrollo de su superficie interna. El aire
inspirado penetra por las cavidades nasales, pasa por la faringe, la laringe
y la tráquea. Esta estructura se bifurca en el tórax y da origen a dos
bronquios, que penetran en los pulmones y tras sucesivas ramificaciones
dan lugar a la formación de los bronquiolos. Estos también se ramifican en
bronquiolos de diámetro aún menor, que transportan el aire inspirado
hasta los sacos alveolares, formados por muy pequeñas cámaras, los
alvéolos, donde se produce el intercambio gaseoso con la sangre
(hematosis).
Sistema respiratorio en las aves
Los pulmones de las aves tienen forma de conductos donde el aire circula
en una sola dirección. Además, poseen grandes bolsas llamados sacos
aéreos, que tienen conexión con los pulmones, ya que se ubican por
delante y por detrás. A diferencia de los mamíferos que poseen alvéolos
para el intercambio gaseoso, las aves tienen parabronquios para tal
efecto. El aire inspirado pasa de la boca a los sacos aéreos posteriores,
luego a los parabronquios donde se efectúa el intercambio gaseoso y
finalmente a los sacos aéreos anteriores, para ser eliminados con la
espiración. El sistema posee válvulas para evitar la dirección retrógrada
del aire. En determinadas especies, los sacos aéreos se introducen en los
huesos.
Sacos aéreos
Sistema respiratorio en los
reptiles
La respiración de estos animales es por medio de pulmones bien
desarrollados, hecho que le permite la vida terrestre. El aire entra y sale
del organismo a raíz de movimientos de los músculos del tórax. Las
serpientes respiran a través de un solo pulmón alargado que tiene
considerable desarrollo.
Sistema respiratorio en los anfibios
Los pulmones de estos animales suelen ser pequeños. El aire que por
inspiración toman por los orificios nasales llena toda la cavidad bucal.
Luego cierran los orificios nasales y suben el piso de la boca, obligando así
a que el aire pase a los pulmones. Al ser insuficiente este tipo de
respiración, los anfibios también recurren a la respiración cutánea, por lo
que deben mantener en forma permanente la piel muy húmeda.
Sistema respiratorio en los peces
El intercambio gaseoso se realiza a través de prolongaciones de la piel
llamadas branquias. Estas estructuras son simétricas y se ubican detrás
de la cabeza. Las branquias están rodeadas de vasos sanguíneos que
favorecen la entrada de oxígeno y la salida de dióxido de carbono. En los
peces con esqueleto óseo, las branquias están cubiertas y protegidas por
una serie de huesos llamados opérculo. Cuando el pez abre la boca
penetra el agua, pasa a la faringe y el opérculo se cierra. Al cerrar la boca,
el opérculo se abre para que el agua pase por las branquias entregando el
oxígeno del agua. Los peces con esqueleto cartilaginoso (tiburones y
rayas) carecen de opérculo, con lo cual las branquias se comunican de
manera directa con el exterior.
Sistema respiratorio en los insectos
En la superficie del cuerpo se disponen unos orificios pequeños, los
estigmas, por donde el oxígeno ingresa a dos troncos traqueales
dispuestos en posición dorsal. A medida que progresan dentro del
organismo, los túbulos traqueales van reduciendo su diámetro hasta
llegar a las células, lugar donde se efectúa por difusión el intercambio
gaseoso.
SISTEMA EXCRETOR
Las funciones del sistema excretor son mantener constantes en el medio
interno las sustancias fundamentales para la existencia, y eliminar del
organismo los productos de desecho del metabolismo celular. Así como el
sistema respiratorio se encarga de expulsar el dióxido de carbono de la
circulación, es el sistema excretor el responsable de eliminar las
sustancias nitrogenadas de la sangre, otro de los desechos del
metabolismo celular. Algunas sustancias también pueden ser eliminadas a
través de la piel, aunque en menor cantidad. Los organismos poco
evolucionados carecen de sistema excretor, ya que eliminan los desechos
directamente al medio en donde viven.
Los productos nitrogenados de desecho se eliminan, según el organismo
que se trate, como urea, ácido úrico y amoníaco.
La urea, cuya fórmula abreviada es (NH2)2CO, resulta ser una sustancia
tóxica que no obstante puede permanecer en el organismo a bajas
concentraciones. Los animales que eliminan urea, llamados ureotélicos,
son los mamíferos, los quelonios (tortugas), los tiburones, las rayas y los
anfibios adultos.
Aquellos animales limitados para acumular importantes cantidades de
agua, como las aves, o que deban restringir pérdidas hídricas, como los
reptiles o los artrópodos, eliminan los productos nitrogenados de desecho
como ácido úrico (C5H4N4O3), en forma sólida y sin pérdida de agua. Este
grupo de organismos se denomina uricotélicos.
La eliminación de productos nitrogenados en forma de amoníaco (NH3) es
propia de los peces con esqueleto óseo. El amoníaco es muy tóxico, por lo
que debe ser expulsado del organismo rápidamente y tomar contacto con
el agua. Es por esa razón que este tipo de eliminación es propia de
animales acuáticos. A los organismos que excretan amoníaco como
desecho se los llama amoniotélicos.
El órgano excretor en organismos vertebrados (mamíferos, aves, reptiles,
anfibios y peces) es el riñón, formado por minúsculos túbulos
denominados nefrones. Estas estructuras se encargan de filtrar la sangre,
recuperando las sustancias útiles para el organismo (agua, sales) y
eliminando los desechos nitrogenados y exceso de agua en forma de
orina.
Sistema excretor en los mamíferos
La orina formada en los riñones circula por dos finas estructuras
tubulares, los uréteres, que desembocan en una vejiga, lugar donde se
almacena esa orina. De la vejiga nace un conducto, llamado uretra, por
donde la orina sale al exterior.
Sistema excretor en las aves, reptiles y anfibios
La orina sale de los riñones por los uréteres que desembocan en la cloaca,
junto con el intestino y los conductos del sistema reproductor.
Sistema excretor en los peces
Estos organismos eliminan la orina directamente hacia el agua. La orina
de los peces es escasa y muy concentrada.
Sistema excretor en los insectos
Poseen túbulos cerrados en un extremo y abiertos en el otro. Este último
desemboca en los intestinos. Dichas estructuras, denominadas tubos de
Malpighi, absorben sustancias útiles de la cavidad interna del cuerpo y
expulsa los desechos nitrogenados hacia el intestino.
Integración de los sistemas en la nutrición
Descargar