OBRAS RECOPILADAS DEL PARTIDO COMUNISTA DEL PERÚ VOLUMEN 2 - 1988-1990 ¡Proletarios de todos los países, uníos! Presidente Gonzalo CONTENIDO DOCUMENTOS FUNDAMENTALES ................................................................................................... 5 I. SOBRE EL MARXISMO-LENINISMO-MAOÍSMO. ...................................................................... 5 II. ACERCA DEL PENSAMIENTO GONZALO .............................................................................. 14 III. PROGRAMA Y ESTATUTOS .................................................................................................... 17 BASES DE DISCUSIÓN PARA LA LÍNEA POLÍTICA GENERAL DEL PCP .................................... 20 REVOLUCIÓN DEMOCRÁTICA .................................................................................................... 20 LINEA MILITAR .............................................................................................................................. 31 LINEA DE CONSTRUCCION .......................................................................................................... 50 LINEA DE MASAS........................................................................................................................... 59 LINEA INTERNACIONAL............................................................................................................... 71 ENTREVISTA AL PRESIDENTE GONZALO ..................................................................................... 84 OBJETIVOS ...................................................................................................................................... 84 I. CUESTIONES DE IDEOLOGIA.................................................................................................... 85 II. SOBRE EL PARTIDO .................................................................................................................. 95 III. GUERRA POPULAR ................................................................................................................ 113 IV. SOBRE SITUACION POLITICA NACIONAL ......................................................................... 136 V. POLITICA INTERNACIONAL .................................................................................................. 160 OTROS PUNTOS ............................................................................................................................ 176 ELECCIONES, NO! GUERRA POPULAR, SI! .................................................................................. 183 I. ELECCIONES CRUCIALES PARA LA REACCION. ................................................................. 183 II. SE ACENTÚA LA CRISIS POLÍTICA, AUMENTAN LAS CONTRADICCIONES. ................. 184 III. EL BOICOT DESARROLLA LA TENDENCIA DEL PUEBLO CONTRA LAS ELECCIONES Y SIRVE A LA GUERRA POPULAR. ............................................................................................... 188 IV. ELECCIONES, NO! GUERRA POPULAR SI!.......................................................................... 218 DOCUMENTOS FUNDAMENTALES I. SOBRE EL MARXISMO-LENINISMO-MAOÍSMO. La ideología del proletariado internacional, en el crisol de la lucha de clases, insurgió como marxismo deviniendo marxismo-leninismo y, posteriormente, marxismo-leninismo-maoísmo. Así, la todopoderosa ideología científica del proletariado, todopoderosa porque es verdadera, tiene tres etapas: 1) marxismo, 2) leninismo, 3) maoísmo; tres etapas, momentos o hitos de su proceso dialéctico de desarrollo; de una misma unidad que en ciento cuarenta años, a partir del "Manifiesto", en la más heroica epopeya de la lucha de clases, en encarnizadas y fructíferas luchas de dos líneas en los propios partidos comunistas y la inmensa labor de titanes del pensamiento y la acción que solamente la clase podía generar, sobresaliendo tres luminarias inmarcesibles: Marx, Lenin, Mao Tse-tung, mediante grandes saltos y tres grandiosos nos ha armado con el invencible marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente maoísmo de hoy. Sin embargo, mientras el marxismo-leninismo logró reconocimiento de su validez universal, el maoísmo no es reconocido plenamente como tercera etapa; pues, mientras unos niegan simplemente su condición de tal, otros sólo llegan a su aceptación como "pensamiento Mao Tse-Tung". Y, en esencia, en ambos casos, con las obvias diferencias que entre sí tienen, niegan el desarrollo general del marxismo hecho por el Presidente Mao Tse-tung; no reconocerle su carácter de "ismo", de maoísmo, es negarle vigencia universal y, en consecuencia, su condición de tercera, nueva y superior etapa de la ideología del proletariado internacional: el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente maoísmo que enarbolamos, defendemos y aplicamos. Como INTRODUCCION para mejor comprender el maoísmo y la necesidad de luchar por él, recordemos a Lenin. Nos enseñó que conforme la revolución se adentraba al Este expresaba condiciones específicas que, si bien no negaban principios o leyes, eran nuevas situaciones que el marxismo no podía ignorar so pena de exponer la revolución al fracaso. Y que pese a la grita que particularmente la intelectualidad atiborrada de liberalismo y falsamente marxista, pedante y libresca, levantara en contra de lo nuevo, lo único justo y correcto es aplicar el marxismo a la realidad concreta y resolver las nuevas situaciones y problemas que toda revolución necesariamente enfrenta y resuelve; ante el espanto y farisaicas "defensas de la ideología, de la clase y del pueblo" que proclaman revisionistas, oportunistas y renegados, o los furibundos y ciegos ataques de embrutecidos académicos y plumíferos del viejo orden, envilecidos de podrida ideología burguesa, dispuestos a defender la vieja sociedad que parasitan. Más aún, expresamente Lenin dijo que la revolución en Oriente depararía nuevas y grandes sorpresas para mayor asombro de los adoradores de seguir sólo los caminos conocidos e incapaces de ver lo nuevo; y, como todos sabemos, encomendó a los camaradas orientales resolver problemas que aún el marxismo no había resuelto. Además, tener muy presente que cuando el camarada Stalin justa y correctamente planteó que habíamos entrado a la etapa del leninismo como desarrollo del marxismo, también hubo oposición y quienes rasgaron sus vestiduras en supuesta defensa del marxismo; tener muy presente que, también del leninismo hubo quienes dijeron que solamente era aplicable a los países atrasados; pero en medio de lucha la práctica lo consagró como gran desarrollo del marxismo y la ideología del proletariado brilló victoriosa ante el mundo como marxismo-leninismo. Hoy, el maoísmo enfrenta situaciones similares; y como siempre lo nuevo y el marxismo se han abierto paso a través de la lucha, el maoísmo así también se impondrá y será reconocido. En cuanto al CONTEXTO en que se desenvolvió el Presidente Mao Tse-Tung y se forjó el maoísmo, internacionalmente sobre la base del imperialismo, guerras mundiales, movimiento proletario internacional, movimiento de liberación nacional, lucha entre marxismo y revisionismo y restauración del capitalismo en la URSS, tres grandes hitos históricos cabe destacar en el presente siglo: primero, la revolución de Octubre, 1917, que abre la era de la revolución proletaria mundial; segundo, triunfo de la revolución china, 1949, cambiando la correlación de fuerzas a favor del socialismo; y tercero, gran revolución cultural proletaria, iniciada el 66, como continuación de la revolución bajo la dictadura del proletariado para mantener el rumbo hacia el comunismo. Baste resaltar que el Presidente Mao dirigió dos de estos gloriosos hechos históricos. Y en China, donde como centro de la revolución mundial se concretó el maoísmo, dentro de la más compleja convergencia de contradicciones, intensa y cruenta lucha de clases signada por las pretensiones de las potencias imperialistas de despedazar y repartirse China, el derrumbe del imperio manchú (1911), el movimiento antiimperialista del 19, las rebeliones del inmenso campesinado, los veintidós años de lucha armada de la revolución democrática, la gran contienda por la construcción y desarrollo del socialismo y los diez años de tormenta revolucionaria por llevar adelante la revolución cultural, en medio de la más aguda lucha de dos líneas en el P.C.Ch especialmente contra el revisionismo, y todo enmarcado en el panorama internacional descrito. Es de este conjunto de hechos históricos que debemos extraer cuatro de extraordinaria importancia: la fundación del Partido Comunista de China en 1921; el Levantamiento de la Cosecha de Otoño iniciando el camino del campo a la ciudad, en 1927; la fundación de la República Popular, 1949; y la Gran Revolución Cultural Proletaria, 1966-76; en todos los cuales el Presidente Mao fue protagonista y principalmente el más alto dirigente como jefe reconocido de la revolución china. Así de la biografía del Presidente Mao Tsetung podemos decir que, nacido el 26 de diciembre de 1893, abrió los ojos en un mundo agitado por las llamas de la guerra; hijo de campesinos tenía siete años cuando la "Guerra de los boxers"; estudiante para maestro estaba por los dieciocho cuando se derrumbó el imperio, se alistó como soldado para después ser gran organizador de campesinos y jóvenes, en Junán su tierra natal. Fundador del Partido Comunista y del Ejército Rojo de obreros y campesinos; estableció el camino de cercar las ciudades desde el campo, desarrolló la guerra popular y con ella la teoría militar del proletariado; teórico de la Nueva Democracia fundó la República Popular; gestor del Gran Salto Adelante e impulsor del desarrollo del socialismo; guía de la lucha contra el revisionismo contemporáneo de Jruschov y sus secuaces, jefe y mando de la Gran Revolución Cultural Proletaria. Estos son hitos que jalonan una vida dedicada cabal y plenamente a la revolución. Tres gigantescos triunfos tiene el proletariado en este siglo; dos corresponden al Presidente Mao y si uno es suficiente gloria, dos lo son más. Sobre el CONTENIDO del maoísmo, obviamente lo sustancial del mismo, debemos apuntar a las cuestiones básicas siguientes: 1. Teoría. El marxismo tiene tres partes: filosofía marxista, economía política marxista y socialismo científico; el desarrollo en todas ellas que genere un gran salto cualitativo del marxismo en su conjunto, como unidad a un nivel superior implica una nueva etapa. En consecuencia, lo esencial es mostrar que el Presidente Mao ha generado, como puede verse en la teoría y en la práctica, tal gran salto cualitativo. Por necesidad expositiva veamos ésto en el presente y siguientes puntos. En la filosofía marxista desarrolló lo medular de la dialéctica, la ley de la contradicción estableciéndola como única ley fundamental; y aparte de su profunda comprensión dialéctica de la teoría del conocimiento, cuyo centro son los dos saltos que conforman su ley, (de la práctica al conocimiento y de éste a aquélla, siendo principal el del conocimiento a la práctica), resaltar que aplicó magistralmente la ley de la contradicción a la política; y más aún llevó la filosofía a las masas cumpliendo la tarea que Marx dejara. En economía política marxista. El presidente Mao aplicó la dialéctica para analizar la relación basesuperestructura y prosiguiendo la lucha del marxismo-leninismo contra la tesis revisionista de las "fuerzas productivas", concluyó que la superestructura, la conciencia pueden modificar la base y con el poder político desarrollar las fuerzas productivas. Y desarrollando la idea leninista de la política como expresión concentrada de la economía, estableció la política es el mando, (aplicable en todos los planos) y el trabajo político es la línea vital del trabajo económico; lo cual lleva a un verdadero manejo de la economía política y no a una simple política económica. Una cuestión que se soslaya, no obstante su importancia, especialmente para quienes enfrentan revoluciones democráticas, es la tesis maoísta del capitalismo burocrático; esto es, el capitalismo que se desenvuelve en las naciones oprimidas por el imperialismo y con diverso grado de feudalidad subyacente u otras anteriores incluso. Este es un problema vital principalmente para Asia, Africa y América Latina, pues, de su comprensión deriva una buena conducción revolucionaria, máxime si de la confiscación del mismo depende, económicamente, la base para llevar adelante la revolución socialista como segunda etapa. Pero, lo principal es que el Presidente Mao Tsetung ha desarrollado la economía política del socialismo. Es de suma importancia su crítica a la construcción socialista en la URSS; asimismo sus tesis sobre cómo desenvolver el socialismo en China: tomar la agricultura como base y la industria como dirigente; la industrialización guiándose por la relación entre la industria pesada, la ligera y la agricultura, tomando como centro de la construcción económica a la industria pesada y simultáneamente prestar plena atención a la industria ligera como a la agricultura. Cabe destacar el Gran Salto Adelante y las condiciones para su ejecución: uno, línea política que le dé justo y correcto rumbo; dos, formas orgánicas pequeñas, medianas y grandes de mayor a menor cantidad respectivamente; tres, un gran impulso, un gigantesco esfuerzo de las masas para ponerlo en marcha y llevarlo al éxito; salto adelante cuyos resultados se aprecian más por el proceso puesto en movimiento y su perspectiva histórica que por sus logros inmediatos; y su ligazón con la cooperativización agrícola y la comuna popular. Finalmente, tener muy en cuenta sus enseñanzas sobre la objetividad y subjetividad en la comprensión y manejo de las leyes del socialismo; que las pocas décadas de socialismo no han permitido ver su pleno desarrollo y por tanto el mejor conocimiento de sus leyes y su especificación; y principalmente la relación entre revolución y proceso económico, concretada en "empeñarse en la revolución y promover la producción". Sin embargo, pese a su trascendental importancia poco se trata este desarrollo de la economía política marxista. En el socialismo científico el Presidente Mao desarrolló la teoría de las clases analizándolas en los planos económico, político e ideológico; la violencia revolucionaria como ley universal sin excepción alguna; la revolución como sustitución violenta de una clase por otra, estableció su gran tesis "El Poder nace del fusil" y resolvió la cuestión de la conquista del Poder en las naciones oprimidas a través del camino de cercar las ciudades desde el campo, estatuyendo sus leyes generales. Definió brillantemente desarrollándola la teoría de la lucha de clases en el socialismo, que en él prosigue la lucha antagónica entre proletariado y burguesía, entre camino socialista y capitalista y entre socialismo y capitalismo; que concretamente no estaba definido quién vencería a quién, problema cuya solución demandaría tiempo, el desenvolvimiento del proceso de restauración y contrarrestauración para que el proletariado se afincara definitivamente en el Poder mediante la dictadura del proletariado; y final y principalmente la grandiosa solución de trascendencia histórica de la Gran Revolución Cultural Proletaria como continuación de la revolución socialista bajo la dictadura del proletariado. Estas cuestiones básicas, casi simplemente enunciadas pero conocidas e innegables, muestran el desarrollo del Presidente de las partes integrantes del marxismo y la evidente elevación del marxismo-leninismo a una nueva, tercera y superior etapa: el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente maoísmo. Prosiguiendo esta visión sintética, veamos otros puntos específicos que si bien derivan de lo anterior deben considerarse, aunque sea enumerativamente, para por lo menos destacarlos llamando la atención sobre ellos. 2. La Nueva Democracia. Primeramente es un desarrollo de la teoría marxista del Estado el establecimiento de los tres tipos de dictadura: 1) de la burguesía, en las viejas democracias burguesas como Estados Unidos, tipo al cual es asimilable la dictadura existente en las naciones oprimidas como las latinoamericanas; 2) la dictadura del proletariado como en la Unión Soviética o China antes de la usurpación del Poder por los revisionistas; y 3) la Nueva Democracia como dictadura conjunta basada en la alianza obrero-campesina dirigida por el proletariado encabezado por el Partido Comunista, lo que en China se plasmara a lo largo de su revolución democrática y en el Perú se concreta hoy en comités populares, bases de apoyo y República Popular de Nueva Democracia en organización. Es fundamental resaltar, dentro de este desarrollo de la teoría del Estado, la diferenciación clave entre sistema de Estado como dictadura de la clase o clases que ejercen el Poder, que es lo principal, y sistema de gobierno entendida como organización para el ejercicio del Poder. Por otro lado, la Nueva Democracia, uno de los extraordinarios desarrollos del Presidente Mao, nos concreta magistralmente la revolución burguesa de nuevo tipo la que sólo puede dirigir el proletariado, en síntesis la revolución democrática dentro de la nueva era de la revolución proletaria mundial en que nos desenvolvemos. Revolución de Nueva Democracia que implica nueva economía, nueva política y nueva cultura, obviamente derrumbando el viejo orden y levantando lo nuevo con fusiles, única forma de transformar el mundo. Finalmente, es importante resaltar que la Nueva Democracia, como revolución democrática si bien cumple, principalmente, las tareas democráticas también, complementariamente, avanza en algunas tareas socialistas; de esta forma se resuelve a fondo la cuestión de las dos etapas, democrática y socialista, que corresponden a países como el nuestro garantizándose, concluída la democrática, la prosecución como revolución socialista sin intermedio alguno, ininterrumpidamente. 3. Los tres instrumentos. El problema de la construcción de los instrumentos de la revolución plantea al Partido la comprensión de la interrelación del Partido, el ejército y el frente único; y, comprender y manejar la construcción interrelacionada de los tres en medio de la guerra o en el mantenimiento del nuevo Estado basado en el poderío del pueblo armado expresa una justa y correcta labor de dirección. La construcción se guía por principio de la justa y correcta línea ideológica lo decide todo, y es sobre esta base ideológico-política que simultáneamente se desarrolla la construcción organizativa, en medio de la lucha entre la línea proletaria y la burguesa y en la tempestad de la lucha de clases, principalmente de la guerra, como forma principal de lucha ya sea actuante o potencial. En cuanto al Partido, el Presidente Mao parte de la necesidad del Partido Comunista, de un partido de nuevo tipo, un partido del proletariado, hoy diríamos un partido marxista-leninista-maoísta; un partido cuyo objetivo es conquistar el Poder y defenderlo, por lo cual está indesligablemente ligado a la guerra popular, ya sea para iniciarla, desarrollarla o librarla para defenderse; un partido sustentando en las masas ya sea por la propia guerra popular que es guerra de masas o del frente único que siendo frente de clases se basa en las masas mayoritarias. El Partido se desarrolla y cambia según las etapas de la revolución y los períodos que aquellas tengan; y el motor de su desarrollo es la contradicción concretada en su seno como lucha de dos líneas, entre línea proletaria y línea burguesa o no proletaria en general, en esencia y principalmente una lucha contra el revisionismo. Esto lleva a la importancia decisiva de la ideología en la vida partidaria y al desarrollo de campañas de rectificación que sirvan al mayor ajuste de todo el sistema de organizaciones partidarias y la militancia a las líneas ideológicas y políticas justas y correctas, en función del predominio de la línea proletaria y el mantenimiento de la dirección partidaria en sus férreas manos. El Partido sirve al establecimiento del Poder del proletariado, ya sea como clase dirigente de la Nueva Democracia y principalmente a la instauración de la dictadura del proletariado, su fortalecimiento y desarrollo para mediante revoluciones culturales conquistar la gran meta final, el comunismo; por eso el Partido tiene que llegar a dirigir todo omnímodamente. El ejército revolucionario es de nuevo tipo, esto es un ejército para el cumplimiento de las tareas políticas que el Partido establece en función de los intereses del proletariado y del pueblo; carácter que se concreta en tres tareas: combatir, producir para no ser carga parasitaria y movilizar a las masas. Es un ejército que se basa en la construcción política a partir de la ideología del proletariado, del marxismo-leninismomaoísmo (hoy), y la línea política general cuanto militar que el Partido establezca. Es un ejército que se basa en los hombres y no en las armas; un ejército surgido de las masas y siempre ligado a ellas a quienes sirve de todo corazón, permitiéndole moverse en su seno como el pez en el agua. Sin un ejército popular nada tendrá el pueblo, dice el Presidente Mao a la vez que nos enseña la necesidad de la dirección absoluta del Partido sobre el ejército y sienta su gran principio: El Partido manda al fusil y jamás permitiremos lo contrario. Además de establecer cabalmente los principios y normas de la construcción de un ejército de nuevo tipo, el mismo Presidente llamó a conjurar el uso del ejército para la restauración capitalista usurpando la dirección mediante un golpe contrarrevolucionario, y desarrollando tesis de Lenin sobre la milicia popular llevó más adelante que nadie el armamento general del pueblo, abriendo trocha y señalando el camino hacia el mar armado de masas que nos guiará a la -emancipación definitiva del pueblo y del proletariado. Es el Presidente Mao Tsetung quien por vez primera desarrolla una teoría completa sobre el frente único y establece sus leyes. Un frente basado en la alianza obrero-campesina como garantía de la hegemonía del proletariado en la revolución; un frente de clases dirigido por el proletariado representado por el Partido; en síntesis un frente único bajo dirección del Partido Comunista; un frente único para la guerra popular, para la revolución, para la conquista del Poder en beneficio del proletariado y el pueblo. Así, en concreto, el frente único es la agrupación de las fuerzas revolucionarias contra las fuerzas contrarrevolucionarias para librar la lucha entre revolución y contrarrevolución principalmente mediante la guerra popular, armadamente. El frente único, como es evidente, no es igual en cada etapa de la revolución y, más aún, tiene sus especificaciones según los diversos períodos de cada etapa; asimismo el frente único en una revolución concreta no es igual que a nivel mundial, aunque ambos sigan las mismas leyes generales. Aparte de esto, es importante resaltar la relación entre frente y Estado que el Presidente Mao establece planteando que el frente único es una forma de dictadura conjunta, cuando se desenvolvía la guerra antijaponesa, cuestión que merece estudiarse especialmente por quienes afrontamos revoluciones democráticas. 4. La guerra popular es la teoría militar del proletariado internacional; en ella se resume, por vez primera en forma sistemática y completa, la experiencia teórica y práctica de las luchas, acciones militares y guerras libradas por el proletariado y la larga experiencia de la lucha armada popular y especialmente de las guerras campesinas de China. Es con el Presidente Mao que la clase logra tener su teoría militar; sin embargo, hay bastante confusión e incomprensión sobre este problema. Y la misma comienza por cómo se ve la guerra popular en China, generalmente se la considera, reducida y despectivamente como una simple guerra de guerrillas; ésto ya denota no comprender que con el Presidente Mao la guerra de guerrillas adquiere carácter estratégico; pero además, no se comprende el desarrollo de la guerra de guerrillas como desde su fluidez esencial desarrolla movilidad, guerra de movimientos, guerra de posiciones, desenvuelve grandes planes de ofensiva estratégica y conquista de ciudades pequeñas, medianas y grandes, de millones de habitantes, combinando el ataque desde fuera con la insurrección desde dentro. Así, en conclusión los cuatro períodos de la revolución china y principalmente desde la guerra agraria a la guerra de liberación popular, considerando entre ambas la guerra antijaponesa, muestran las diversas facetas y complejidades de la guerra revolucionaria librada durante más de veinte años, en una gigantesca población y una inmensa movilización y participación de las masas; en esa guerra hay ejemplos de todo tipo; y lo que es principal ha sido extraordinariamente estudiada y magistralmente establecidos sus principios, leyes, estrategia, táctica, normas, etc. Es, pues, en ese fabuloso crisol y sobre lo establecido por el marximo-leninismo que el Presidente Mao estableció la teoría militar del proletariado, la guerra popular. Debemos tener muy presente que, posteriormente, el propio Presidente, con conocimiento de la existencia de bombas atómicas y cohetes y poseyéndolos, sostuvo y desarrolló la guerra popular para librarla en las nuevas condiciones de armas atómicas y guerra con potencias y superpotencias; en síntensis la guerra popular es el arma del proletariado y el pueblo incluso para enfrentarse a guerras atómicas. Una cuestión clave y decisiva es la compresión de la validez universal de la guerra popular y su consecuente aplicación, teniendo en cuenta los diferentes tipos de revolución y las condiciones específicas de cada revolución. Servirá a esta cuestión clave considerar que no se ha repetido una insurrección como la de Petrogrado, la resistencia antifascista y las guerrillas europeas en la II Guerra Mundial, así como las luchas armadas que se libran en Europa actualmente; y ver que al fin y al cabo, la Revolución de Octubre no fue sólo insurrección sino una guerra revolucionaria que duró varios años. En consecuencia, en los países imperialistas la revolución sólo puede concebirse como guerra revolucionaria y ésta hoy es simplemente guerra popular. Finalmente, hoy más que nunca los comunistas y los revolucionarios, el proletariado y el pueblo, necesitamos forjarnos en: "Sí, somos partidarios de la teoría de la omnipotencia de la guerra revolucionaria; eso no es malo; es bueno, es marxista"; lo que significa ser partidarios de la invencibilidad de la guerra popular. 5. La Gran Revolución Cultural Proletaria en perspectiva histórica es lo más trascendental del desarrollo del marxismo-leninismo por el Presidente Mao; es la solución del gran problema pendiente de la continuación de la revolución bajo la dictadura del proletariado; "representa una nueva etapa, aún más profunda y más amplia, en el desarrollo de la revolución socialista de nuestro país". Qué situación se presentó? Como dice la Decisión del P.C.Ch. sobre la GRCP: "Aunque derrocada, la burguesía todavía trata de valerse de las viejas ideas, cultura, hábitos y costumbres de las clases explotadoras para corromper a las masas y conquistar la mente del pueblo en su esfuerzo por restaurar su Poder. El proletariado debe hacer exactamente lo contrario: debe propinar golpes despiadados y frontales a todos los desafíos de la burguesía en el dominio ideológico y cambiar la fisonomía espiritual de toda la sociedad utilizando sus propias nuevas ideas, cultura, hábitos y costumbres. Nuestro objetivo actual es aplastar, mediante la lucha, a los que ocupan puestos dirigentes y siguen el camino capitalista, criticar y repudiar a las "autoridades" reaccionarias burguesas en el campo académico, criticar y repudiar la ideología de la burguesía y demás clases explotadoras, y transformar la educación, la literatura y el arte y los demás dominios de la superestructura que no corresponden a la base económica del socialismo, a fin de facilitar la consolidación y el desarrollo del sistema socialista". En estas condiciones se produjo el más estremecedor proceso político y la mayor movilización de masas que ha visto la Tierra, cuyos objetivos los definió así el Presidente Mao: "La Presente Gran Revolución Cultural Proletaria es completamente necesaria y muy oportuna para consolidar la dictadura del proletariado, prevenir la restauración del capitalismo y construir el socialismo". Destaquemos además dos cuestiones: 1) que la GRCP implica un hito en el desarrollo de la dictadura del proletariado hacia el afianzamiento del proletariado en el Poder, que se concretó en los Comités Revolucionarios; y 2) la restauración del capitalismo en China, después del golpe contrarrevolucionario del 76, no es la negación de la GRCP sino llanamente parte de la contienda entre restauración- contrarrestauración y, por el contrario, nos muestra la trascendental importancia histórica que tiene la GRCP en la inexorable marcha de la humanidad al comunismo. 6. Revolución mundial. El Presidente Mao acentúa nuevamente la importancia de la revolución mundial como unidad, partiendo de que la revolución es la tendencia principal en tanto la descomposición del imperialismo es mayor cada día, el papel de las masas más inmensas año a año que hacen y harán sentir su fuerza transformadora incontenible y en la gran verdad, por él reiterada de: todos entramos al comunismo o no entra nadie. Dentro de esta perspectiva específica en la época del imperialismo el gran momento histórico de los "próximos 50 a 100 años", y en su contexto el período que se abre de lucha contra el imperialismo yanqui y el socialimperialismo soviético, tigres de papel que se disputan la hegemonía y amenazan al mundo con una guerra atómica frente a la cual, primero hay que condenarla y luego prepararse anticipadamente para oponerle la guerra popular y hacer la revolución. Por otro lado, a partir de la importancia histórica de las naciones oprimidas y más aún de su perspectiva, así como de las relaciones económicas y políticas que están desenvolviéndose por el proceso de descomposición del imperialismo, el Presidente planteó su tesis de "tres mundos se delinean". Todo lo cual lleva a la necesidad de desarrollar la estrategia y la táctica de la revolución mundial. Lamentablemente poco o casi nada conocemos de los escritos y planteamientos del Presidente Mao sobre estas trascendentales cuestiones; sin embargo, lo muy poco conocido muestra las grandiosas perspectivas que avizoraba y los grandes lineamientos que debemos seguir para comprender y servir a la revolución proletaria mundial. 7. Superestructura, ideología, cultura, educación. Estos problemas y otros concernientes han sido sutil y profundamente estudiados y resueltos por el Presidente; por tanto, es también ésta otra cuestión básica que merece atención. Concluyendo, el contenido visto en estas cuestiones básicas muestran, a quien quiere ver y entender, en forma palmaria que tenemos, pues, una tercera, nueva y superior etapa del marxismo: el maoísmo; y que ser marxista en la actualidad demanda ser marxista-leninista-maoísta y principalmente maoísta. Lo expuesto en el contenido nos lleva a dos interrogantes: ¿Qué es lo fundamental del maoísmo? Lo fundamental del maoísmo es el Poder. El Poder para el proletariado, el Poder para la dictadura del proletariado, el Poder basado en una fuerza armada dirigida por el Partido Comunista. Más explícitamente: 1) El Poder bajo dirección del proletariado, en la revolución democrática; 2) el Poder para la dictadura del proletariado, en las revoluciones socialista y culturales; 3) el Poder basado en una fuerza armada dirigida por el Partido Comunista, conquistado y defendido mediante la guerra popular. ¿Y qué es el maoísmo? El maoísmo es la elevación del marxismo-leninismo a una tercera, nueva y superior etapa en la lucha por la dirección proletaria de la revolución democrática, el desarrollo de la construcción del socialismo y la continuación de la revolución bajo la dictadura del proletariado, como revolución cultural proletaria; cuando el imperialismo profundiza su descomposición y la revolución ha devenido la tendencia principal de la historia, en medio de las más complejas y grandes guerras vistas hasta hoy y la lucha implacable contra el revisionismo contemporáneo. Sobre la LUCHA EN TORNO AL MAOISMO. Escuetamente, en China la lucha por establecer el pensamiento Mao Tsetung comienza en 1935, en la Reunión de Tsunyi, cuando el Presidente Mao asume la dirección del Partido Comunista de China; el 45, el VII Congreso acordó que el PCCh se guiaba por el marxismo-leninismo y las ideas Mao Tsetung, especificación suprimida por el VIII, pues, en él primó una línea derechista. El IX Congreso del 69, resume la GRCP y sanciona que el P.C.Ch. se guía por el marxismo-leninismo-pensamiento Mao Tsetung; hasta ahí se avanzó. A nivel internacional adquiere influencia a partir de la década del 50; pero es con la GRCP que se difunde intensamente y su prestigio se eleva poderosamente y el Presidente Mao pasa a ser reconocido jefe de la revolución mundial y generador de una nueva etapa del marxismo-leninismo; así gran número de Partidos Comunistas asumen la denominación marxismo-leninismo-pensamiento Mao Tsetung. A nivel mundial el maoísmo se enfrentó abierta y encarnizadamente con el revisionismo contemporáneo desenmascarándolo profunda y contundentemente, igualmente lo hizo en las propias filas del PCCh, lo cual elevó más aún la gran bandera roja del Presidente: la tercera, nueva y superior etapa de la ideología del proletariado internacional. En la actualidad el maoísmo afronta el triple ataque del revisionismo soviético, chino y albanés. Pero, además, hay incluso quienes reconocen grandes aportes del Presidente y hasta su desarrollo del marxismo, unos consideran que seguimos en la etapa del marxismo-leninismo y otros que solamente aceptan pensamiento Mao Tsetung pero en modo alguno maoísmo. En el país, obviamente los revisionistas que siguen el bastón de mando de sus diferentes amos Gorbachov, Teng, Alía o Castro atacaron y siguen atacando furiosamente al maoísmo; entre éstos hay que condenar, desenmascarar y combatir implacablemente al encallecido revisionismo de Del Prado y su pandilla del llamado "Partido Comunista Peruano"; las sinuosidades rastreras del autodenominado "Partido Comunista del Perú, Patria Roja" que de autoerigirse en "grandes maoístas" pasaron a siervos de Teng, luego de haberlo condenado cuando su defenestración del 76; así como el antimaoísmo de la denominada "Izquierda Unida" en cuyo seno pululan todos los revisionistas y hasta posiciones antimarxistas pasando por los falsos marxistas y oportunistas de diversa laya. Enarbolar el maoísmo como espejo revelador de revisionistas para combatirlos implacablemente en función del desarrollo de la guerra popular y el triunfo de la revolución democrática en marcha, es insoslayable e inabdicable tarea de carácter estratégico. El Partido Comunista del Perú, a través de la fracción dirigida por el Presidente Gonzalo que impulsó la reconstitución, asumió el marxismo-leninismo-pensamiento Mao Tsetung el año 1966; el 79 la consigna de Enarbolar, defender y aplicar el marxismo-leninismo-pensamiento Mao Tsetung!; el 81: Hacia el maoísmo!; y, el 82 el maoísmo como parte integrante y desarrollo superior de la ideología del proletariado internacional: el marxismo-leninismo-maoísmo. Es con la guerra popular que hemos comprendido más profundamente lo que implica el maoísmo y asumido el solemne compromiso de Enarbolar, defender y aplicar el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente maoísmo!; y, bregar incansablemente por coadyuvar a ponerlo como mando y guía de la revolución mundial, única rojísima e inmarcesible bandera que es garantía de triunfo para el proletariado, las naciones oprimidas y los pueblos del mundo en su inexorable marcha combatiente, de legiones de hierro hacia el dorado y por siempre resplandeciente comunismo. II. ACERCA DEL PENSAMIENTO GONZALO En su proceso de desarrollo toda revolución, por la lucha del proletariado como clase dirigente y, sobre todo, del Partido Comunista que enarbola sus irrenunciables intereses de clase, genera un grupo de jefes y principalmente uno que la representa y dirige, un jefe de autoridad y ascendiente reconocidos; en nuestra realidad ésto se ha concretado, por necesidad y casualidad históricas, en el Presidente Gonzalo, jefe del Partido y de la revolución. Pero, además, y éste es el fundamento de toda jefatura, las revoluciones generan un pensamiento que las guía, resultado de la aplicación de la verdad universal de la ideología del proletariado internacional a las condiciones concretas de cada revolución; pensamiento guía indispensable para alcanzar la victoria y conquistar el Poder y, más aún, para continuar la revolución y mantener el rumbo siempre hacia la única grandiosa meta, el comunismo; pensamiento guía que, llegado a un salto cualitativo de decisiva importancia para el proceso revolucionario que dirige, se identifica con el nombre de quien lo plasmó teórica y prácticamente. En nuestra situación este fenómeno se especificó primero como pensamiento guía, luego como pensamiento guía del Presidente Gonzalo y, posteriormente, como pensamiento Gonzalo; porque es el Presidente quien aplicando creadoramente el marxismo-leninismo-maoísmo a las condiciones concretas de la realidad peruana lo ha generado, dotando así al Partido y a la revolución de un arma indispensable que es garantía de triunfo. El pensamiento Gonzalo se ha forjado a lo largo de años de intensa, tenaz e incesante lucha de enarbolar, defender y aplicar el marxismo-leninismo-maoísmo, de retomar el camino de Mariátegui y desarrollarlo, de reconstitución del Partido y, principalmente de iniciar, mantener y desarrollar la guerra popular en el Perú sirviendo a la revolución mundial y a que el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente maoísmo, sea en la teoría y en la práctica su único mando y guía. Es necesidad partidaria sustantiva estudiar el pensamiento Gonzalo para una más justa y correcta comprensión de la línea política general y principalmente de la línea militar, apuntando a profundizar las particularidades de la revolución peruana, lo específico y propio que magistralmente ha destacado el Presidente Gonzalo; así serviremos al "gran plan de desarrollar bases", al desarrollo de la guerra popular y la perspectiva de conquistar el Poder en todo el país. Debemos estudiar el pensamiento Gonzalo partiendo del contexto histórico que lo generó; ver la base ideológica que lo sustenta; precisar su contenido, más sustancialmente expresado en la línea política general y la línea militar que es su centro; apuntar a lo fundamental en él, el problema del Poder, de conquistar el Poder aquí, en el Perú, ligado inextrincablemente a la conquista del Poder por el proletariado en todo el mundo; y prestar suma atención a su forja en la lucha de dos líneas. Sintéticamente, estas cuestiones fundamentales pueden tratarse aplicando el esquema que sigue: 1. CONTEXTO HISTORICO. Internacional. En cuanto hechos: 1) Del desarrollo de la II Guerra Mundial en adelante; 2) el poderoso movimiento de liberación nacional y dentro de éste el proceso y triunfo de la revolución china; 3) la revolución cubana y su repercusión en América Latina; 4) la gran lucha entre marxismo y revisionismo; 5) la Gran Revolución Cultural Proletaria. Pero la clave es ver cómo en esa grandiosa lucha de clases a nivel mundial, el pensamiento Gonzalo considera que surge una tercera etapa de la ideología del proletariado: primero como marxismo-leninismo, pensamiento Mao Tsetung; luego, marxismo-leninismo-pensamiento Mao Tsetung; y, posteriormente, definirla como maoísmo comprendiendo su validez universal; y de esa manera llegar al marxismo-leninismo-maoísmo. principalmente maoísmo como la expresión actual del marxismo. Nacional: 1) La sociedad peruana de postguerra y en ella la lucha política, el llamado Frente Democrático Nacional, la acción aprista, el golpe de Odría y la lucha contra el Ochenio, la contienda entre apristas y comunistas; y particularmente, el desarrollo del capitalismo burocrático de la década del 60 y parte de los 70 y la aguda lucha de clases que la acompañó, el "velasquismo" y su llamada revolución, la colusión y pugna entre la burguesía compradora y burguesía burocrática, (facciones de la gran burguesía) y el oportunismo y principalmente el revisionismo como apoyantes. 2) La lucha de clases en el movimiento campesino; 3) el proceso del movimiento obrero; 4) el movimiento intelectual; 5) la lucha armada en el país, especialmente la del MIR y ELN del 65, así como sus antecedentes en Blanco, Vallejos y Heraud; y 6) el problema del Partido: cómo un Partido fundado sobre claras bases marxista-leninistas degeneró en partido revisionista, la necesidad de retomar el camino de Mariátegui desarrollándolo y reconstituir el Partido, el Partido Comunista del Perú que el propio Mariátegui fundara el 28 y cómo a través de la reconstitución se construyó un Partido marxista-leninista-maoísta. Aquí es básico cómo el pensamiento Gonzalo comprende profundamente la sociedad peruana centrando en el problema crucial del capitalismo burocrático, ve la necesidad de reconstituir el Partido y de conquistar el Poder y defenderlo con la guerra popular. 2. BASE IDEOLOGICA Sin marxismo-leninismo-maoísmo no se puede concebir el pensamiento Gonzalo, porque éste es la aplicación creadora de aquél a nuestra realidad. La cuestión clave de este punto está en la comprensión del proceso histórico del desarrollo de la ideología del proletariado, de sus tres etapas plasmadas en marxismo-leninismo-maoísmo y del maoísmo como la principal; y esencial, principalmente, es su aplicación del marxismo-leninismo-maoísmo como verdad universal a las condiciones concretas de la revolución peruana; de ahí que el pensamiento Gonzalo sea específicamente principal para el Partido Comunista del Perú y la revolución que dirige. Habiendo llegado el pensamiento guía a un salto cualitativo de decisiva importancia para el Partido y la revolución, ha devenido en pensamiento Gonzalo marcando, así, un hito en la vida partidaria. 3. CONTENIDO a. La teoría. Cómo comprende y aplica las tres partes integrantes del marxismo- leninismo-maoísmo, principalmente el maoísmo; destacar la importancia que da a la filosofía marxista, la necesidad de formarnos en ella y especialmente su aplicación de la ley de la contradicción al estudio de todo problema, apuntando siempre a definir el aspecto principal y el proceso de las cosas; en economía política la preocupación por las relaciones de explotación y muy especialmente por el capitalismo burocrático, orientándose a la maduración de la revolución y la repercusión de la guerra popular en la base, así como su atención a las relaciones económicas del imperialismo buscando sus consecuencias políticas; en socialismo científico cómo centra en la guerra popular y su concreción en el país, cómo tiene siempre presente el problema del Poder y, particularmente, su plasmación y desarrollo como Nuevo Estado. b. Sobre contenido. La parte más sustantiva y más desarrollada del pensamiento Gonzalo se encuentra en la línea política general del Partido; este pensamiento sustenta, pues, directamente la línea y sus cinco elementos, siendo el punto de partida de esta sustentación cómo comprende y mantiene firmemente el rumbo del Programa. c. En el pensamiento Gonzalo debemos resaltar el notable cumplimiento de las exigencias planteadas por el Presidente Mao: solidez teórica, comprensión de la historia y buen manejo práctico de la política. 4. CUAL ES LO FUNDAMENTAL Lo fundamental en el pensamiento Gonzalo es el problema del Poder; en concreto, la conquista del Poder en el Perú, cabal y completamente en todo el país, como consecuente aplicación de la verdad universal del marxismo-leninismo-maoísmo a nuestra revolución. Pero siendo pensamiento comunista, comprende la conquista del Poder en el Perú como parte de la conquista del Poder para el proletariado a nivel mundial; y que la conquista del Poder en el país, hoy plasmándose en Comités Populares, bases de apoyo y República Popular de Nueva Democracia en formación en la perspectiva de establecer la República Popular del Perú, sirve a instaurar la dictadura del proletariado en nuestro país porque sin ella no se puede marchar al comunismo. Y, todo en función de servir firme y decididamente al establecimiento de repúblicas populares y principalmente de la dictadura del proletariado en todo el mundo, bajo la conducción de Partidos Comunistas, con ejércitos revolucionarios de nuevo tipo, mediante la guerra popular y el desarrollo de revoluciones culturales para que el comunismo ilumine toda la Tierra. 5. FORJA EN LA LUCHA DE DOS LINEAS Es a través de una persistente, firme y sagaz lucha de dos líneas, defendiendo la línea proletaria y derrotando líneas contrarias como se ha forjado el pensamiento Gonzalo. Entre las luchas más saltantes merecen destacarse las libradas contra el revisionismo contemporáneo, aquí representado especialmente por Del Prado y sus secuaces; contra el liquidacionismo de derecha de Paredes y su pandilla; contra el liquidacionismo de izquierda encabezado por el que fue Sergio y sus autodenominados "bolcheviques"; y contra la línea oportunista de derecha opuesta al inicio de la lucha armada. Sin lucha el pensamiento Gonzalo no se hubiera podido desarrollar; y su notable manejo de la lucha de dos líneas en el Partido es cuestión fundamental que debemos estudiar y aprender. Estudiar y principalmente aplicar el pensamiento Gonzalo es decisivo para servir más y mejor al Partido, al desarrollo de la guerra popular y a la revolución proletaria mundial; así como aprender del Presidente Gonzalo es decisivo para servir de todo corazón al pueblo. III. PROGRAMA Y ESTATUTOS PROGRAMA El Partido Comunista del Perú se fundamenta y guía por el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente maoísmo y, específicamente, por el pensamiento Gonzalo como aplicación creadora de la verdad universal a las condiciones concretas de la revolución peruana hecha por el Presidente Gonzalo, jefe de nuestro Partido. El Partido Comunista del Perú, vanguardia organizada del proletariado peruano que es parte integrante del proletariado internacional, asume muy especialmente los siguientes principios básicos: 1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8. 9. 10. La contradicción, ley fundamental única de la incesante transformación de la materia eterna; Las masas hacen la historia y "La rebelión se justifica"; Lucha de clases, dictadura del proletariado e internacionalismo proletario; Necesidad del Partido Comunista marxista-leninista-maoísta que aplique con firmeza la independencia, la autodecisión y el autosostenimiento; Combatir el imperialismo, el revisionismo y la reacción indesligable e implacablemente; Conquistar y defender el Poder con la guerra popular; oMilitarización del Partido y construcción concéntrica de los tres instrumentos de la revolución; Lucha de dos líneas como fuerza impulsora del desarrollo partidario; Transformación ideológica constante y poner siempre la política al mando; Servir al pueblo y a la revolución proletaria mundial; y Desinterés absoluto y justo y correcto estilo de trabajo. El Partido Comunista del Perú tiene el comunismo como meta final; por tanto, dado que la sociedad peruana actual es oprimida y explotada por el imperialismo, el capitalismo burocrático y la semifeudalidad, la revolución tiene una primera etapa democrática, una segunda socialista para, posteriormente, desenvolver sucesivas revoluciones culturales. En el presente con la guerra popular el Partido desarrolla la revolución democrática, teniendo como meta inmediata culminarla conquistando el Poder en todo el país; por ello enarbolamos los siguientes objetivos: PROGRAMA GENERAL DE LA REVOLUCION DEMOCRATICA 1.Demolición del Estado peruano, dictadura de los explotadores dirigida por la gran burguesía, de las fuerzas armadas y represivas que lo sustentan y de todo su aparato burocrático. 2.Barrer la opresión imperialista, principalmente yanqui, del socialimperialismo soviético y de cualquier potencia o país imperialista; confiscar en general sus monopolios, empresas, bancos y toda forma de su propiedad incluida la deuda externa. 3.Destruir el capitalismo burocratico, tanto particular como estatal; confiscar todas sus propiedades, bienes y derechos económicos en beneficio del nuevo estado, igualmente que los correspondientes al imperialismo. 4.Liquidacion de la propiedad semifeudal y toda modalidad subsistente de la misma, confiscándola para entregar las tierras al campesinado, principalmente pobre, aplicando el principio de "La tierra para quien la trabaja". 5.Respeto de la propiedad y derechos de la burguesía nacional, o burguesía media, tanto en el campo como en la ciudad. 6.Combatir por la instauración de la República Popular del Perú, como frente de clases basado en la alianza obrero-campesina dirigida por el proletariado encabezado por su Partido Comunista; como plasmación de la nueva democracia que lleve adelante una nueva economía, una nueva política y una nueva cultura. 7.Desarrollar la guerra popular que, mediante un ejército revolucionario de nuevo tipo bajo dirección absoluta del Partido, destruya por partes el viejo poder, principalmente sus fuerzas armadas y represivas y sirva a construir el nuevo poder para el proletariado y el pueblo. 8.Culminar la formación de la nación peruana unificando realmente el país para defenderlo de toda agresión imperialista y reaccionaria, salvaguardando los derechos de las minorías. 9.Servir al desarrollo del proletariado peruano como parte de la clase obrera internacional, a la formación y fortalecimiento de verdaderos partidos comunistas y a su unificación en un redivivo movimiento comunista internacional guiados por el marxismo-leninismo-maoísmo; todo en función de que el proletariado cumpla su gran misión histórica como última clase. 10.Defender las libertades, derechos, beneficios y conquistas que la clase obrera y las masas han logrado a costa de su propia sangre, reconociéndolos y garantizando su auténtica vigencia en una "Declaracion de Derechos del Pueblo". Respetar, particularmente, la libertad de conciencia religiosa, pero en su cabal amplitud, tanto de creer como de no creer. Asimismo combatir toda disposición lesiva a los intereses populares, máxime cualquier forma de trabajo gratuito o carga personal y los agobiantes impuestos que recaen sobre las masas. 11.Real igualdad para la mujer; un futuro mejor para la juventud; protección para la madre y la niñez; respeto y apoyo para la ancianidad. 12.Una nueva cultura como arma de combate para concretar la nacionalidad, que sirva a las masas populares y se guíe por la ideología científica del proletariado. Dar especial importancia a la educación. 13.Apoyar las luchas del proletariado internacional, de las naciones oprimidas y de los pueblos del mundo; luchando contra las superpotencias, Estados Unidos y Unión Soviétiva, el imperialismo en general, la reacción internacional y el revisionismo de todo tipo; concibiendo la revolución peruana como parte de la revolución proletaria mundial. Pugnar tenaz y heroicamente por el triunfo cabal y completo de la revolución democrática en todo el país y culminada esta etapa, de inmediato, sin intermedio alguno, pasar a la revolución socialista para, junto al proletariado internacional, las naciones oprimidas y los pueblos del mundo, a través de revoluciones culturales, proseguir la marcha de la humanidad hacia su meta final, el comunismo. Pero considerando que la revolución democrática en el país atraviesa un período caracterizado por: 1.profundización de la crisis general de la sociedad peruana, principalmente del capitalismo burocrático; 2.mayor reaccionarización del Estado, hoy con un gobierno aprista, fascista y corporativista, encabezado por el genocida García Pérez; 3.agudización de la lucha de clases, las masas asumen más la necesidad de combatir y resistir; 4.la guerra popular se desarrolla vigorosa y creciente; y 5.el pueblo necesita una República Popular construida según los principios de la Nueva Democracia. BASES DE DISCUSIÓN PARA LA LÍNEA POLÍTICA GENERAL DEL PCP REVOLUCIÓN DEMOCRÁTICA INTRODUCCION Enarbolando, defendiendo y aplicando el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente el maoísmo, el Presidente Gonzalo establece que la revolución peruana en su curso histórico ha de ser primero revolución democrática, luego revolución socialista y que tendrá que desenvolver revoluciones culturales a fin de pasar al Comunismo, todo en un proceso ininterrumpido aplicando la guerra popular y especificándola. Para llegar a esta conclusión parte de lo que Marx enseñó, que en Alemania deberían reeditarse las guerras campesinas del siglo XVI, que habría que canalizar la energía democrática del campesinado; de lo que luego Lenin desarrolla, que siendo la burguesía una clase ya caduca y habiendo el campesinado enarbolado la destrucción de la feudalidad, sólo podría concretarla bajo la dirección del proletariado; y de lo que después, el Presidente Mao establece "Sobre la Nueva Democracia", que forma parte de la revolución proletaria mundial, que se propone una dictadura conjunta de clases revolucionarias opuesta a la dictadura burguesa, que es una etapa de transición y que sólo puede cumplirse bajo la dirección del proletariado. Y toma en cuenta las condiciones específicas del Perú, que en su proceso histórico no ha habido una revolución burguesa ya que no hubo una burguesía capaz de conducirla y que, por tanto, el problema de la tierra y el problema nacional son dos problemas aún pendientes a resolver; que estamos en la época del imperialismo y de la revolución proletaria mundial, por tanto el proletariado es la clase que asume la destrucción del imperialismo, del capitalismo burocrático y de la semifeudalidad no en beneficio de la burguesía sino del proletariado, del campesinado principalmente pobre, la pequeña burguesía y la burguesía media; que el proletariado peruano ha madurado como Partido Comunista de nuevo tipo capaz de dirigir la revolución; que ya no cabe revolución democrática de viejo tipo sino una revolución burguesa de nuevo tipo; que este tipo y toda revolución hoy solamente puede cumplirse a través de la guerra popular, forma principal de lucha, y las fuerzas armadas revolucionarias, forma principal de organización. Así establece el carácter de la sociedad peruana semifeudal, semicolonial sobre la cual se desenvuelve un capitalismo burocrático, fija los blancos de la revolución, las tareas a emprender, define las clases sociales y plantea la esencia de la revolución democrática y también cómo se concreta hoy y su perspectiva. 1. CARACTER DE LA SOCIEDAD PERUANA CONTEMPORANEA Basándose en el materialismo histórico analiza el proceso peruano y muestra que en la vieja sociedad se desenvolvió un orden agrario basado en el ayllu, era un orden comunitario agrario y en éste recién se empezaba a desarrollar una forma esclavista, el imperio incaico erigido a través de guerras de dominación; luego en el siglo XVI los españoles trajeron un sistema feudal caduco y lo impusieron por las armas contra la resistencia de los nativos y el Perú devino en feudal y colonial; posteriormente, con la emancipación se rompe con el dominio español, pero no así con el sistema feudal, los emancipadores eran terratenientes y los campesinos no logran conquistar la tierra. El siglo XIX expresa intensa pugna entre Inglaterra y Francia por dominarnos; y, a mediados de siglo se dan brotes de capitalismo, desenvolviéndose sobre la base feudal existente; y todo este proceso en el Perú va a significar un cambio: pasar de feudal a semifeudal y de colonial a semicolonial. Luego, caracterizando la sociedad peruana contemporánea, el Presidente Gonzalo dice: "... el Perú contemporáneo es una sociedad semifeudal y semicolonial en la cual se desenvuelve un capitalismo burocrático"; carácter que si bien Mariátegui lo definiera en el punto 3 del Programa de la Constitución del Partido es a la luz del marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente del maoísmo que el Presidente Gonzalo ha demostrado cómo el carácter semifeudal y semicolonial se mantiene y desarrollan nuevas modalidades, y particularmente cómo es que se ha desarrollado el capitalismo burocrático sobre esta base en todo el proceso de la sociedad contemporánea, problema de trascendencia para comprender el carácter de la sociedad y de la revolución peruana. El capitalismo burocrático es una tesis fundamental del Presidente Mao que no es aún comprendida ni aceptada por todos los marxistas en el mundo y que obviamente por razones históricas no fuera conocida por Mariátegui y que el Presidente Gonzalo la aplica a las condiciones concretas de nuestro país. Sustenta que para analizar el proceso social contemporaneo hay que partir de tres cuestiones íntimamente ligadas: los momentos que atraviesa el capitalismo burocrático; el proceso del proletariado plasmado en su más alta expresión: el Partido Comunista; y, el camino que ha de seguir la revolución. Así, pues, nos enseña que en la sociedad peruana contemporánea se pueden diferenciar tres momentos a partir de 1895: I momento. Desarrollo del capitalismo burocrático. Constitución del PCP. Señalamiento y esbozo del camino de cercar las s ciudades desde el campo; II momento. Profundización del capitalismo burocrático. Reconstitución del PCP. Establecimiento del camino de cercar las ciudades desde el campo; y III momento. Crisis general del capitalismo burocrá tico. Dirección del PCP de la guerra popular. Aplicación y desarrollo del camino de cercar las ciudades desde el campo. Al mismo tiempo plantea que la sociedad peruana contemporánea está en crisis general, enferma, grave, incurable y sólo cabe transformarla a través de la lucha armada como lo viene haciendo el Partido Comunista del Perú dirigiendo al pueblo y, que no hay otra solución. ¿Por qué es semifeudal? El Presidente Gonzalo plantea: "El caduco sistema semifeudal sigue subsistiendo y marcando al país desde sus bases más profundas hasta sus más elaboradas ideas y, en esencia, manteniendo persistente el problema de la tierra, motor de la lucha de clases del campesinado, especialmente pobre que es la inmensa mayoría", nos remarca que el problema de la tierra sigue subsistiendo porque se mantiene relaciones semifeudales de explotación evolucionando la semifeudalidad, problema básico de la sociedad que se expresa en tierra, servidumbre y gamonalismo; condición que debemos verla en todos los aspectos, económico, político e ideológico, en la base y en la superestructura; demuestra cómo es que el campesinado constituye alrededor de un 60% de la población, que durante siglos trabaja la tierra pero está atado a la gran propiedad y a la servidumbre; nos enseña que existe gran concentración de tierras en pocas manos, con formas asociativas y no asociativas y, la inmensa mayoría del campesinado es campesinado pobre que no tienen tierras o si las tienen son muy pocas dando así lugar al minifundio sometido a la voracidad del latifundio. Esta condición aplasta al campesinado en un sistema de servidumbre que como Lenin enseñara se presenta de una y mil formas pero su esencia es la sujeción personal, así vemos formas centradas en relaciones serviles como el trabajo gratuito en las SAIS, CAPS, Grupos campesinos, en Cooperación Popular, PAIT, PROEM, etc.; por lo demás, sabido es que en el campo de cada tres campesinos que pueden trabajar, solamente uno trabaja y el Estado pretende canalizar la mano de obra desocupada en beneficio del trabajo gratuito; también podemos observar particularmente en la Sierra una economía autárquica al margen de una economía nacional. Reafirmándose en el marxismo-leninismo-maoísmo, el Presidente Gonzalo enarbola el principio de que la reforma agraria es la destrucción de la propiedad terrateniente feudal, entrega individual al campesinado bajo el lema de "Tierra para quien la trabaja" y que se logra con guerra popular y nuevo Poder, dirigida por el Partido Comunista; igualmente la tesis de Lenin de que existen dos caminos en el agro: el terrateniente que es reaccionario, evoluciona la feudalidad y lleva a viejo Estado y el campesino que es avanzado, destruye la feudalidad y lleva a nuevo Estado. Luego, certeramente sienta el carácter y los resultados de las leyes agrarias dadas por el viejo Estado probando la subsistencia de la semifeudalidad que hoy se pretende negar; caracteriza la Ley de Bases de Pérez Godoy del 62, la Ley 15037 del 64 y la Ley 17716 del 69, (esencialmente corporativa que fomenta la gran propiedad asociativa), de ser tres leyes de compra-venta, ejecutadas por el aparato burocrático del Estado para desarrollar el capitalismo burocrático; advierte que la Ley de Fomento Agropecuario del 80 da por concluido el problema de la tierra y a la vez propugna la propiedad asociativa y el retorno de los gamonales para impulsar el capitalismo burocrático, también bajo control de los grandes banqueros y directa participación del imperialismo yanki. Camino que prosigue el gobierno aprista fascista y corporativo que vuelve a tomar la "reforma agraria" fascista y corporativa de Velasco, lanzando voces de "revolucionarizar el agro" para así también fortalecer el gamonalismo, da por concluido el problema de la tierra y centra en productividad, da ley de comunidades, ley de rondas campesinas a fin de profundizar el capitalismo burocrático y llevarlo a todos los rincones del país llamando a las masas a la corporativización, apuntando a las comunidades campesinas como base de sus afanes corporativos, a lo que igualmente sirven la creación de las microrregiones, las Regiones, CORDES y otros engendros fascistas y corporativos. Todo esto, no significa sino nuevas modalidades de concentración de la vieja propiedad latifundista no destruida y es el viejo camino terrateniente seguido en el Perú contemporáneo que se impulsara en los años 20, se profundizara en los 50 y especialmente en los 60, prosiguiéndose hasta hoy, en nuevas condiciones. Este camino terrateniente se expresa políticamente en el viejo Estado a través del gamonalismo; como dice Mariátegui, el gamonalismo no designa sólo una categoría social y económica sino todo un fenómeno representado no tan sólo por los gamonales propiamente dichos sino también comprende una larga jerarquía de funcionarios, intermediarios, agentes, parásitos, etc., y que el factor central del fenómeno es la hegemonía de la gran propiedad semifeudal en la política y en el mecanismo del Estado contra el cual se debe atacar en su raíz. Y el Presidente Gonzalo destaca expresamente la manifestación de la semifeudalidad en la política y en el mecanismo del Estado, al concebir que el gamonalismo es la manifestación política de la semifeudalidad sobre la cual se sostiene este régimen de servidumbre en el que actúan mandones y lacayos representantes del viejo Estado en los más recónditos pueblos del país aunque cambien de ropaje según el gobierno de turno; factor contra el cual se dirige la punta de lanza de la revolución democrática en cuanto guerra agraria. ¿Por qué es semicolonial? El Presidente Gonzalo nos enseña que la economía peruana moderna nace subyugada por el imperialismo, fase final del capitalismo caracterizado magistralmente como monopolista, parasitario y agonizante; imperialismo que si bien consiente nuestra independencia política, según sirva a sus intereses, controla todo el proceso económico peruano: nuestras riquezas naturales, productos de exportación, industria, banca y finanzas; en síntesis, chupa la sangre de nuestro pueblo, devora nuestras energías de nación en formación y hoy además saltantemente nos exprime mediante la deuda externa como lo hace con otras naciones oprimidas. Primeramente se reafirma en la tesis de Lenin que el Presidente Mao desarrolló certeramente, para definir el carácter semicolonial de nuestra sociedad. Lenin en síntesis planteó que hay multitud de formas de dominio imperialista pero dos son las típicas: colonia, esto es el dominio completo del país imperialista sobre la nación o naciones oprimidas y, una forma intermedia: semicolonia, esto es independiente políticamente pero económicamente sometida, una República independiente pero que se encuentra sometida en la maraña ideológica, política, económica y militar del imperialismo por más gobierno propio que tenga. Rechaza así lo que por los años 60 usó el revisionismo: "neocolonia", cuyo fondo es concebir que el imperialismo aplica una forma más suave de dominio y los derivó a la caracterización de "país dependiente". Luego, aplicando la tesis del Presidente Mao de que se abre un período de lucha contra las dos superpotencias que pugnan por repartirse el mundo y que hay que especificar el enemigo principal del momento, define que el imperialismo principal que nos domina es el imperialismo yanqui pero afirma, que hay que conjurar al socialimperialismo ruso que cada día penetra más en el país, como también la acción de las potencias imperialistas no superpotencias; así el proletariado al dirigir la revolución democrática no se ata a ninguna superpotencia ni potencia imperialista y mantiene su independencia ideológica, política y organizativa. En conclusión, demuestra que la sociedad peruana sigue siendo una nación en formación y que su carácter semicolonial subsiste pudiendo verse en todos los campos y en las nuevas condiciones. En cuanto al capitalismo burocrático, el Presidente Gonzalo nos plantea que comprenderlo es clave, sustantivo para entender la sociedad peruana. Tomando las tesis del Presidente Mao nos enseña que éste tiene cinco caracteres: 1) que el capitalismo burocrático es el capitalismo que el imperialismo desenvuelve en los países atrasados, que comprende capitales de los grandes terratenientes, los grandes banqueros y los magnates de la gran burguesía; 2) ejerce explotación sobre el proletariado, el campesinado y la pequeña burguesía y restringe a la burguesía media; 3) atraviesa un proceso por el cual el capitalismo burocrático se combina con el poder del Estado y deviene capitalismo monopolista estatal, comprador y feudal, de lo que se deriva que en un primer momento se desenvuelve como gran capital monopolista no estatal y en un segundo, cuando se combina con el Poder del Estado, se desenvuelve como capitalismo monopolista estatal; 4) madura las condiciones para la revolución democrática al llegar a la cúspide de su desarrollo; y, 5) confiscar el capitalismo burocrático es clave para dar cima a la revolución democrática y decisivo para pasar a la revolución socialista. Al aplicarlo concibe que el capitalismo burocrático es el capitalismo que genera el imperialismo en los países atrasados, atado a la feudalidad que es caduca y sometido al imperialismo que es última fase del capitalismo, que no sirve a las mayorías sino a los imperialistas, a la gran burguesía y a los terratenientes. Ya Mariátegui planteaba que los burgueses al crear bancos por ejemplo generan un capital enfeudado al imperialismo y atado a la feudalidad; el Presidente Gonzalo establece magistralmente que el capitalismo que se desenvuelve en el Perú es un capitalismo burocrático entrabado por los grilletes subsistentes de la semifeudalidad que lo atan y por otro lado sojuzgado al imperialismo que no permite desarrollar la economía nacional, es, pues, un capitalismo burocrático que oprime y explota al proletariado, al campesinado y a la pequeña burguesía, y que constriñe a la burguesía media. Por qué? porque el capitalismo que se desarrolla es un proceso tardío y no consiente sino una economía para sus intereses imperialistas. Es un capitalismo que representa a la gran burguesía, a los terratenientes y al campesinado rico de viejo tipo, clases que constituyen una minoría y explotan y oprimen a las grandes mayorías, a las masas. Analiza el proceso que ha seguido el capitalismo burocrático en el Perú, desde 1895 a la II Guerra Mundial, primer momento en que se desarrolla, durante el cual en los años 20 la burguesía compradora asume el control del Estado desplazando a los terratenientes pero respetando sus intereses. Un segundo momento de la II Guerra Mundial a 1980, de profundización, durante el cual una rama de la gran burguesía deviene en burguesía burocrática, remontándose al 39, primer gobierno de Prado en que se inicia la participación del Estado en el proceso de la economía. Esta participación, posteriormente más y más creciente se debe a que la gran burguesía no es capaz por falta de capitales de profundizar el capitalismo burocrático. Y así comienza a generarse una contienda entre ambas facciones de la gran burguesía, la burocrática y la compradora. En el 68 la burguesía burocrática va a tomar la dirección del Estado a través de las fuerzas armadas mediante el golpe militar de Velasco y va a generarse un gran crecimiento de la economía del Estado, así las empresas estatales por ejemplo, pasaron de 18 a 180; el Estado pasa, pues, a ser motor de la economía dirigido por la burguesía burocrática, pero es durante este momento que la economía entra en grave crisis. Y un tercer momento de 1980 para adelante en que el capitalismo burocrático entra en crisis general y a su destrucción final, momento que se inicia con la guerra popular. Siendo un capitalismo que nace crítico, enfermo, podrido, ligado a la feudalidad y sometido al imperialismo, en este momento entra en crisis general, a su destrucción y ninguna medida lo salvará, a lo más alargará su agonía y, por otro lado, como bestia agonizante se defenderá buscando aplastar la revolución. Si vemos este proceso desde el camino del pueblo, en el primer momento se constituyó el PCP con Mariátegui, el 28 y la historia del país se dividió en dos; en el segundo, se reconstituyó el PCP como Partido de nuevo tipo con el Presidente Gonzalo y se depuró del revisionismo; y en el tercero el PCP entró a dirigir la guerra popular, hito trascendental que cambia radicalmente la historia al dar el salto cualitativo superior de concretar la toma del Poder por medio de la fuerza armada y la guerra popular. Todo esto no prueba sino el aspecto político del capitalismo burocrático que casi no se resalta y que el Presidente Gonzalo lo considera parte clave: el capitalismo burocrático madura las condiciones para la revolución y hoy al entrar a su parte final, madura las condiciones para el desarrollo y triunfo de la revolución. Es también muy importante cómo ve que el capitalismo burocrático está conformado por el capitalismo monopolista no estatal y por el capitalismo monopolista estatal, a esto sirve la diferenciación que hace de las dos facciones de la gran burguesía, la burocrática y la compradora, para no caer a la cola de ninguna, problema que a nuestro Partido llevó a 30 años de táctica equivocada. Es de importancia concebirlo así, pues de la confiscación del capitalismo burocrático por el Nuevo Poder deriva que se remate la revolución democrática y se avance a la revolución socialista, ya que si sólo se apuntara al capitalismo monopolista estatal, se dejaría libre la otra parte, el capitalismo monopolista no estatal, y la gran burguesía compradora se mantendría económicamente pudiendo levantar cabeza para arrebatar la dirección de la revolución y frustrar su pase a revolución socialista. Pero además, el Presidente Gonzalo va a generalizar que el capitalismo burocrático no es un proceso particular de China o del Perú, sino que obedece a las condiciones tardías en que los imperialismos sojuzgan a las naciones oprimidas de Asia, Africa y América Latina y cuando éstas aún no han destruido la feudalidad subsistente y menos desarrollado capitalismo. En síntesis, cuestión clave para comprender el proceso de la sociedad peruana contemporánea y el carácter de la revolución es esta tesis marxista-leninista-maoísta, pensamiento Gonzalo sobre capitalismo burocrático, que es un aporte a la revolución mundial y que los marxista-leninista-maoístas, pensamiento Gonzalo asumimos. ¿Qué tipo de Estado sostiene esta sociedad semifeudal y semicolonial sobre la que se desenvuelve un capitalismo burocrático? Habiendo analizado la sociedad peruana contemporánea, basándose en la magistral tesis maoísta "Sobre la Nueva Democracia" que plantea que los múltiples sistemas de Estado en el mundo pueden reducirse a tres tipos fundamentales, según su carácter de clase: 1) república bajo la dictadura de la burguesía, lo constituyen también los Estados de vieja democracia y pueden incluirse los Estados bajo la dictadura conjunta de terratenientes y gran burguesía; 2) república bajo dictadura del proletariado, y 3) república bajo la dictadura conjunta de las clases revolucionarias. El Presidente Gonzalo establece que el carácter del viejo Estado reaccionario en el Perú es del primer tipo, de dictadura conjunta de terratenientes y grandes burgueses, burocráticos o compradores que en colusión y pugna contienden por la dirección del Estado; siendo la tendencia histórica en el Perú que la burguesía burocrática se imponga, lo que necesariamente implicará una muy aguda y larga lucha; estando hoy la burguesía burocrática al mando del viejo Estado terrateniente-burocrático. A la vez diferencia entre sistema de Estado y sistema de gobierno, que son partes de una unidad; siendo el primero el lugar que ocupan las clases dentro del Estado y el segundo la forma en que se organiza el Poder, como lo enseña el Presidente Mao, destacando que lo principal es definir el carácter de clase de un Estado ya que las formas de gobierno que introduzcan pueden ser civil o militar, con elecciones o de facto, demoliberal o fascista y siempre representarán la dictadura de las clases reaccionarias; al no ver así el viejo Estado se cae en el error de identificar dictadura con régimen militar y pensar que un gobierno civil no es dictadura poniéndose a la cola de una de las facciones de la gran burguesía tras el cuento de "defender la democracia" o "cuidarse de los golpes militares", posiciones que en vez de destruir el viejo Estado lo sostienen y defienden, tal es el caso de los revisionistas y oportunistas de la Izquierda Unida. Viejo Estado sometido al imperialismo, yanqui principalmente en nuestro caso, sostenido en su columna vertebral que son las fuerzas armadas reaccionarias y que cuenta con una burocracia cada vez más creciente; teniendo las fuerzas armadas el mismo carácter del Estado que sostienen y defienden. El Presidente Gonzalo claramente nos dice: "Y es éste el sistema social que usufructúan y defienden a sangre y fuego las clases dominantes y su amo imperialista yanqui, mediante su Estado terratenienteburocrático sustentado en su fuerza armada reaccionaria; ejerciendo constantemente su dictadura de clase (de gran burguesía y terratenientes), ya sea mediante un gobierno militar de facto... o mediante gobiernos surgidos de elecciones y llamados constitucionales..." y "...caduco sistema de explotación dominante destruye y sofrena las poderosas fuerzas creadoras del pueblo, las únicas fuerzas capaces de la más profunda transformación revolucionaria...". 2. BLANCOS DE LA REVOLUCION DEMOCRATICA Nos enseña el Presidente Gonzalo que hay tres blancos en la revolución democrática: el imperialismo, el capitalismo burocrático y la semifeudalidad, siendo uno de ellos principal según el momento por el que atraviese la revolución; hoy en el período de la guerra agraria el blanco principal es la semifeudalidad. El imperialismo, para nosotros el yanqui principalmente porque es el imperialismo principal que nos domina y que viene asegurando más su dominio y remachando nuestra situación de país semicolonial; pero también conjurar la penetración del socialimperialismo ruso y de otras potencias imperialistas; utilizar las diversas facciones del viejo Estado para agudizar sus contradicciones y aislar al enemigo principal para golpearlo. El capitalismo burocrático montaña constante de la revolución democrática que actúa manteniendo la semifeudalidad y la semicolonialidad al servicio del imperialismo. Y la semifeudalidad que subsiste bajo nuevas modalidades pero que constituye el problema básico del país. 3. TAREAS DE LA REVOLUCION DEMOCRATICA 1) Destruir el dominio imperialista, principalmente el yanqui para nosotros, conjurando la acción de la otra superpotencia, el socialimperialismo ruso y la de las otras potencias imperialistas. 2) Destruir el capitalismo burocrático, confiscando el gran capital monopolista estatal y no estatal. 3) Destruir la propiedad terrateniente feudal confiscando la gran propiedad asociativa y no asociativa, entrega individual de la tierra bajo el lema "Tierra para quien la trabaja" a los campesinos pobres primero y principalmente. 4) Apoyar al capital medio al que se le permite trabajar imponiéndole condiciones. Todo lo cual implica derrumbar el viejo Estado a través de la guerra popular con fuerza armada revolucionaria y la dirección del Partido Comunista construyendo un nuevo Estado. 4. CLASES SOCIALES EN LA REVOLUCION DEMOCRATICA El Presidente Gonzalo define las clases sociales a las cuales unir: proletariado, campesinado principalmente pobre, pequeña burguesía y la burguesía media según las condiciones de la revolución. Y las clases contra las cuales apuntar: terratenientes de viejo y nuevo cuño y gran burguesía burocrática o compradora. Nos dice el Presidente Gonzalo: "...el campesinado fuerza motriz principal.... con una varias veces centenaria reivindicación fundamental `Tierra para quien la trabaja' que pese a su indesmayable lucha aún no logra satisfacerla"; "...el proletariado ... clase dirigente de nuestra revolución... que en larga lucha pujante arranca mendrugos salariales y conquistas a sus explotadores para perderlos a través de cada crisis económica que la sociedad padece; un proletariado que así se debate en un siniestro círculo de hierro..."; "una pequeña burguesía, de muy amplias capas, como corresponde a un país atrasado, que ve destrozados sus sueños al compás de la pauperización inexorable que el orden social imperante le impone"; y, "una burguesía media, una burguesía nacional que débil y carente de capitales se desenvuelve bamboleante y dual entre revolución y contrarrevolución....". "Cuatro clases que históricamente conforman el pueblo y fuerzas motrices de la revolución pero de ellas es el campesinado principalmente pobre la fuerza motriz principal". Da particular importancia a la organización científica de la pobreza, tesis que viene desde Marx y que para nosotros implica organizar al campesinado principalmente pobre y a las masas más pobres de las ciudades, en Partido Comunista, Ejército Guerrillero Popular y Nuevo Estado que se concreta en Comités Populares. Establece una relación, que hablar del problema campesino es hablar del problema de la tierra, y hablar del problema de la tierra es hablar del problema militar, y hablar del problema militar es hablar del problema del Poder, del nuevo Estado al cual llegamos con revolución democrática dirigida por el proletariado a través de su Partido, el Partido Comunista. Establece que en la guerra popular el problema campesino es base y el militar es guía. Además, sin campesinado en armas no hay hegemonía en el Frente. Es, pues, de gran significación comprender que el problema campesino es básico y sustento de toda la acción en la revolución democrática, incluso en la revolución socialista es importante. El proletariado es clase dirigente y, nos enseña que es la clase que garantiza el rumbo comunista de la revolución, que unido al campesinado conforma la alianza obrero-campesina base del Frente; proletariado que se concentra mayoritariamente en la capital y proporcionalmente mayor que en China, pero que día a día va decreciendo porcentualmente en el Perú, situación específica que se nos presenta al aplicar la revolución democrática por lo que hacemos guerra popular en las ciudades como complemento. Clase que ha llegado hoy a plasmar un Partido Comunista, marxista-leninista-maoísta, pensamiento Gonzalo, partido que ha generado un Ejército Guerrillero Popular al que dirige absolutamente y un Nuevo Estado al que dirige en dictadura conjunta, que en casi cerca de 20 años de reconstitución y 7 de dirección de la guerra popular ha impreso al pueblo un gran salto histórico. Siendo vital comprender su papel dirigente en la revolución democrática, pues garantiza el rumbo correcto hacia el comunismo; y, sin la dirección del proletariado la revolución democrática derivaría en acción armada bajo dirección de la burguesía y caería bajo el tutelaje de una superpotencia o potencia imperialista. A estas dos clases se suma la pequeña burguesía y juntas son el tronco constante del Frente revolucionario, que no es sino un Frente para la guerra popular y armazón de clases que conforman el nuevo Estado, los Comités Populares en el campo y el Movimiento Revolucionario de Defensa del Pueblo en las ciudades. En cuanto a la burguesía media, hoy no participa en la revolución pero sus intereses son respetados y no es blanco de la revolución democrática; es una clase que sufre restricciones cada vez mayores de la reacción pero su carácter es dual y en el proceso de la revolución democrática en unos momentos puede estar al lado de la revolución. Si no se tiene en cuenta los intereses de la burguesía media entonces la revolución cambiaría de carácter, ya no sería democrática sino socialista. De todo esto deriva que el nuevo Estado que conformamos en la revolución democrática sea una dictadura conjunta, alianza de cuatro clases dirigidas por el proletariado a través de su Partido, el Partido Comunista: dictadura de obreros, campesinos, pequeño burgueses y bajo ciertas condiciones la burguesía nacional o media; dictadura que hoy es de tres clases ya que la burguesía media no participa en la revolución pero sus intereses son respetados. Clases que se conforman como una dictadura de Nueva Democracia en cuanto a sistema de Estado, en Asamblea Popular en cuanto a sistema de gobierno. 5. CONTRADICCIONES FUNDAMENTALES EN LA REVOLUCION DEMOCRATICA Establece que en la revolución democrática existen tres contradicciones fundamentales: contradicción nación-imperialismo, contradicción pueblo-capitalismo burocrático y contradicción masas-feudalidad; de éstas cualquiera puede ser la contradicción principal según los períodos de la revolución. Como nos desenvolvemos hoy en una guerra agraria, si bien apuntamos a las tres, la contradicción principal es masas-feudalidad, la que tiene un proceso de desarrollo en las distintas fases de la guerra, así en nuestro caso la contradicción principal masas-feudalidad se ha desenvuelto como masas-gobierno, posteriormente como nuevo Estado-viejo Estado y su perspectiva es Partido Comunista-fuerzas armadas reaccionarias. 6. ETAPAS DE LA REVOLUCION El Presidente Gonzalo nos enseña que la revolución democrática es indispensable primera etapa en las naciones oprimidas la que atravesará diversos períodos según se resuelvan las contradicciones. Concibe una relación indesligable y un camino ininterrumpido entre revolución democrática y la segunda etapa que es la revolución socialista y su perspectiva es una serie de revoluciones culturales para llegar al Comunismo sirviendo a la revolución mundial. Por tanto, cumplimos un programa máximo y uno mínimo, el mínimo es el programa de la revolución democrática que va especificándose en cada período y que implica una nueva política: dictadura conjunta de cuatro clases; nueva economía: confiscación del gran capital imperialista, del capitalismo burocrático y de la gran propiedad terrateniente feudal y entrega individual de tierra a los campesinos pobres principalmente; nueva cultura: nacional o sea antiimperialista, democrática o sea para el pueblo y científica esto es basada en la ideología del marxismoleninismomaoísmo, pensamiento Gonzalo. El programa máximo implica tener en cuenta que como comunistas apuntamos a eliminar las tres desigualdades entre ciudad y campo, entre trabajo intelectual y manual y, entre obreros y campesinos. Dos programas por los que damos nuestras vidas contra toda clase de injurias, vejámenes y abyecciones, y sólo los comunistas podemos bregar porque la revolución mantenga su rumbo. Así, el Presidente Gonzalo nos plantea: "Esta revolución democrática qué es en esencia? es guerra campesina dirigida por el Partido Comunista, pretende crear un nuevo Estado conformado por cuatro clases para aplastar al imperialismo, la gran burguesía, los terratenientes y de esa manera cumplir sus cuatro tareas. Así, la revolución democrática tiene una forma principal de lucha: la guerra popular, y una forma principal de oganización: la fuerza armada, es pues, la solución del problema de la tierra, del problema nacional, de la destrucción del Estado terrateniente burocrático, de las fuerzas armadas reaccionarias, columna que lo sustenta, para cumplir el objetivo político de construir un nuevo Estado, un Estado de nueva democracia y hacer la República Popular de Nueva Democracia avanzando de inmediato a la revolución socialista. En síntesis, la revolución democrática se concreta en guerra campesina dirigida por el Partido Comunista, toda otra modalidad no es sino servicio al Estado terrateniente-burocrático". En síntesis el Presidente Gonzalo demuestra la vigencia de las dos etapas de la revolución en las naciones oprimidas y establece que la revolución proletaria mundial tiene tres tipos de revolución, por tanto al plasmar la revolución democrática el Partido Comunista del Perú está sirviendo a la revolución mundial y el Presidente Gonzalo está aportando a la revolución mundial. Los marxista-leninista-maoístas, pensamiento Gonzalo asumimos la línea sobre la revolución democrática establecida por el Presidente Gonzalo. 7. COMO SE APLICA HOY LA REVOLUCION DEMOCRATICA? En más de siete años de guerra popular en el Perú se demuestra la justeza y corrección del pensamiento Gonzalo y vemos que el Partido Comunista del Perú, con la Jefatura del Presidente Gonzalo, está dirigiendo al campesinado, principalmente pobre, en armas, está plasmando una dictadura conjunta de obreros, campesinos y pequeño burgueses bajo la hegemonía del proletariado, respetando los intereses de la burguesía media, destruyendo trece siglos de Estado reaccionario; dictadura que marcha en los Comités Populares, hoy clandestinos, expresiones del nuevo Estado que ejercen el Poder a través de Asambleas Populares en las que todos opinan, eligen, juzgan o sancionan aplicando la verdadera democracia y, no dudan en usar la dictadura, coerción para mantener su poder y defenderlo de las clases explotadoras, opresoras, gamonales o lacayos; especificando así una nueva política y un avance en la toma del Poder desde abajo. Se está destruyendo la base misma de la sociedad, la semifeudalidad e introduciendo nuevas relaciones sociales de producción aplicando una nueva economía teniendo en cuenta la táctica agraria de combatir la evolución de la semifeudalidad apuntando a la propiedad asociativa y conjurando la no asociativa, neutralizar al campesinado rico, ganarse al campesinado medio y apoyarse en el campesinado pobre; el programa agrario "Tierra para quien la trabaja" mediante confiscación y entrega individual a través de un proceso: con planes de arrasamiento cuyo objetivo concreto es destruir las relaciones semifeudales para desarticular el proceso productivo dirigiendo la punta de lanza a descoyuntar el poder gamonal con acciones armadas; aplicando siembras y levantamiento de cosechas colectivas cuando aún no tenemos el Poder y el EGP suficientemente desarrollados, todos los campesinos trabajan la tierra de todos y colectivamente favoreciendo siempre al campesinado pobre principalmente y en caso de excedentes se fija una especie de tributos y se reparte productos o semillas a los más pobres y a los medios, las tierras de los campesinos ricos no se tocan salvo si faltara pero se les impone condiciones; política que ha tenido resultados altamente positivos, se beneficia a los más pobres, se eleva la calidad de los productos y sobre todo se defiende mejor; la perspectiva de esta política es invasión de tierras y reparto individual. También en zonas campesinas nuevas, particularmente, hemos aplicado invasiones de tierras y reparto individual prendiendo la lucha en el campo y perturbando los planes del viejo Estado, del gobierno de turno, en una coyuntura específica, organizando la defensa armada. Hoy, hemos generalizado las invasiones de tierras en todo el país. Además, se está logrando organizar la producción de todo un pueblo, intercambio de productos o semillas, recojo de leña o cochinilla, por ejemplo, tiendas comunales, comercio, arrieraje. Proceso al que sirven las acciones en ciudades, sabotajes contra organismos estatales demoburgueses o fascistas corporativos, bancos estatales o particulares e imperialistas, centros imperialistas de superpotencias o potencias, fabriles o de "investigación", empresas del capitalismo burocrático como por ejemplo Centromin Perú; también los aniquilamientos selectivos y las campañas de agitación y propaganda armadas. Y sobre esa nueva política y nueva economía se está levantando una nueva cultura que late en los campesinos pobres principalmente; la educación básica es un problema que nos merece fundamental atención y se desenvuelve bajo la coeducación, educación y trabajo y con un programa básico para los niños, adultos y para las masas en general; es realmente importante. Los problemas de salud y de recreación de las masas son también de vital importancia. Así, las masas están organizadas plasmándose su movilización, politización, organización y armamento, apuntando a mar armado de masas, basadas en la ideología: el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento Gonzalo, bajo la dirección del Partido, con la experiencia de la guerra popular y sobre todo y principalmente en nuevo Poder, ejerciéndolo, conquistándolo, defendiéndolo y desarrollándolo, como Comités Populares, Bases de Apoyo y avanzando en la República Popular de Nueva Democracia. Esta es la revolución democrática que el Partido en la sociedad peruana está especificando, derrumbando el imperialismo, el capitalismo burocrático y la semifeudalidad en el país a través de una guerra popular unitaria, campo principal y ciudad complemento y no la "revolución democrática" pregonada falsamente por el actual gobierno aprista, fascista y corporativo que niega el carácter de la sociedad peruana, las clases y la lucha de clases, especialmente el carácter de dictadura terrateniente-burocrático del viejo Estado, así como la necesidad de la violencia para derrumbarlo. Revolución democrática marxistaleninista-maoísta, pensamiento Gonzalo que constituye una llama ardiente y en expansión sirviendo a la revolución proletaria mundial y garantizada por la magistral dirección del Presidente Gonzalo. íABAJO EL ESTADO TERRATENIENTE - BUROCRATICO! íPOR LA REPUBLICA POPULAR DE NUEVA DEMOCRACIA! íVIVA LA REVOLUCION PERUANA! 1988 PARTIDO COMUNISTA DEL PERÚ LINEA MILITAR INTRODUCCION Enarbolando, defendiendo y aplicando el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente el maoísmo, el Presidente Gonzalo ha establecido la línea militar del Partido. En la I Conferencia Nacional Ampliada de noviembre de 1979 fue acordada como centro de la línea política general y la está desarrollando a lo largo de la guerra popular. El Presidente Gonzalo ha integrado persistentemente la verdad universal del marxismo-leninismomaoísmo con la práctica concreta de la revolución peruana combatiendo y aplastando el revisionismo y a líneas oportunistas de derecha; aplicando el materialismo dialéctico a la cuestión de la guerra, por eso la línea militar expresa también el pensamiento filosófico del Presidente Gonzalo y resume las leyes de la guerra, de la guerra revolucionaria en general y de las leyes específicas de la guerra revolucionaria en el Perú. La línea militar es vital para nuestro trabajo ideológico, político, militar, económico y cultural y nos permite diferenciar a la línea militar proletaria de la línea militar burguesa. La línea militar son las leyes que rigen la guerra popular para la conquista del Poder y la defensa del mismo. Consta de tres elementos: 1) Guerra popular, que en nuestro caso se especifica como guerra popular unitaria, campo principal, ciudad complemento; 2) Construcción de las fuerzas armadas revolucionarias, que en nuestro caso se especifica como Ejército Guerrillero Popular, que tiene como particularidad la incorporación de la milicia para avanzar hacia el mar armado de masas, y; 3) Estrategia y táctica que se plasma a través de campañas de cerco y aniquilamiento y contracampañas de cerco y aniquilamiento, que en nuestro caso se especifica aplicando planes políticos y militares que cuentan con estrategia política y estrategia militar concretados en campañas con contenidos específicos. I. LA GUERRA POPULAR 1. SOBRE LA GUERRA POPULAR EN EL PERU. El Presidente Gonzalo reafirmándose en la ley de la violencia revolucionaria como ley universal, asume la teoría militar más alta del proletariado establecida por el Presidente Mao: la guerra popular que tiene validez universal y rige para todo tipo de países, debiendo especificarse a las condiciones de cada revolución. Así la guerra popular mundial es la forma principal de lucha que el proletariado y los pueblos oprimidos del mundo deben enarbolar para contraponerla a la guerra mundial imperialista. Parte de que la guerra popular es una guerra de masas y sólo puede realizarse movilizando a las masas y apoyándose en ellas. Dice: "Las masas nos dan todo, desde los mendrugos del pan que se quitan de la boca hasta su preciosa sangre que late junto a la de los combatientes y los militantes regando el camino de la guerra popular por el nuevo Poder". Y que las masas deben ser organizadas armadamente en el Ejército guerrillero Popular; en las Bases de apoyo todos los hombres y mujeres de cada Comité Popular están organizados militarmente, en las ciudades también actúa el Ejército Guerrillero Popular y se aglutina progresivamente a las masas en las diversas organizaciones nuevas en y para la guerra popular; el Movimiento Revolucionario de Defensa del Pueblo es la concreción del Frente en las ciudades y su objetivo es llevar a las masas a la resistencia, servir a la guerra y en función de la futura insurrección. Sostiene que para llevar adelante la guerra popular hay que tener en cuenta cuatro problemas fundamentales: 1) La ideología del proletariado, el marxismo-leninismo-maoísmo que debe especificarse en un pensamiento guía, por eso nos basamos en el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento Gonzalo, principalmente en éste; 2) La necesidad del Partido Comunista del Perú que dirige la guerra popular; 3) La guerra popular especificada como guerra campesina que sigue el camino de cercar las ciudades desde el campo; y 4) Bases de apoyo o nuevo Poder, la construcción de las Bases de apoyo, es la esencia del camino de cercar las ciudades desde el campo. Analiza el proceso histórico de nuestro pueblo y demuestra que éste siempre ha luchado, que "se ha acunado y avanzado en la violencia revolucionaria, es en ella, en sus diversas formas y gradaciones, que nuestro pueblo conquistó reivindicaciones, derechos y libertades, pues nada le cayó del cielo ni le fue dado, `malgrado lo que digan los traidores' todo lo conquistó en definitiva con violencia revolucionaria, en ardorosa contienda contra la violencia reaccionaria; así se conquistaron las ocho horas, así se conquistaron tierras y se retuvieron, así se arrancaron derechos y se derrumbó tiranos. La violencia revolucionaria es, pues, esencia misma de nuestro proceso histórico... es fácil entender que el desarrollo y triunfo de la revolución peruana, de nuestra revolución democrática, de la emancipación del pueblo y de la clase, será lograda únicamente a través de la más grandiosa guerra revolucionaria de nuestro pueblo, alzando en armas a la masa a través de la guerra popular". Saca la lección de que los hechos políticos y militares son los que han definido los grandes cambios en el país, nos dice que primero se da el hecho militar y después el cambio político. Así se reafirma en que la guerra es la continuación de la política por otros medios. Nos enseña cómo las masas de nuestro pueblo han luchado contra los explotadores, así desde el siglo VII en que surge el Estado en el Perú, las masas han combatido la opresión y explotación. Que el imperio incaico estableció su dominación a través de guerras de conquista y se definió su predominio en la batalla de Yahuarpampa contra los Chancas para luego expandirse a través de guerras; éste fue un hecho político y militar. La conquista por la corona española fue otro hecho político y militar que se impuso aplastando la resistencia de los indígenas y utilizando las luchas internas dentro de los conquistados; sin embargo debe resaltarse entre otras la lucha de Manco Inca que condujo una rebelión contra los españoles. La imposición del Virreinato fue otro hecho político y militar que aplastó a los propios conquistadores y para mantenerse tuvo que enfrentar grandes levantamientos campesinos como el de Juan Santos Atahualpa; y en 1780 el poderoso movimiento de Túpac Amaru que llegó a levantar 100 mil hombres y se extendió desde Cusco y Puno hasta Bolivia, y puso en grave riesgo el dominio virreinal repercutiendo en Argentina, Colombia y México y removió América; movimiento derrotado pero que removió y socavó el Virreynato preparando así condiciones para la Emancipación; pero recordar que Túpac Amaru fue un cacique para ver su carácter de clase. La Emancipación es otro hecho político y militar y tiene tres momentos: primero, en el siglo XVIII levantamientos campesinos, Túpac Amaru por ejemplo; segundo, levantamientos en ciudades, como la de Zela en Tacna y las guerrillas, resaltándose las de Cangallo y Yauyos a más de muchas otras; tercero, enfrentamiento de grandes ejércitos que rematan las gestas libertarias con San Martín y Bolívar, definiéndose en la batalla de Ayacucho de 1824. Comprender que si bien la Emancipación fue dirigida por los criollos tuvo el mérito de romper con el dominio de la corona española; que San Martín fue un gran estratega militar y Bolívar demostró condiciones de estratega político y militar, ambos combatieron por emancipar varios países de América sin buscar beneficio alguno, mostrando que para servir a una gran causa hay que poner siempre por delante el interés general y nunca el personal, y esto sin ser comunistas. En la República seguían mandando los terratenientes pero enfrentando a sangre y fuego grandes luchas campesinas, entre ellas la de Atusparia y Uscho Pedro o la de Llaccolla en Ocros. Aquí tenemos el negro capítulo de la guerra con Chile donde se enfrentaron ambos países movidos por los intereses de los ingleses y de los franceses que buscaban nuestras riquezas del guano y el salitre; guerra que frenó el incipiente desarrollo capitalista del país y mostró el sucio papel de las clases dominantes, parte de las cuales capitularon ante Chile; pero hay que resaltar la heroica resistencia de las masas contra el invasor en defensa del pueblo y la integridad territorial, resistencia que tuvo especial fuerza en las serranías del Centro-Sur del país donde se formaron las guerrillas; Cáceres, que era un militar terrateniente, cumplió un papel importante en esa circunstancia. La guerra con Chile que se dió desde 1879 a 1883, llevó al hundimiento de la economía peruana; para entrar recién en 1895 al comienzo del capitalismo burocrático que inicia el desarrollo de la sociedad peruana contemporánea. El siglo XIX nos va a dejar el pasar de ser colonia a ser semicolonia y de ser feudal a ser semifeudal y comienza a desarrollarse el capitalismo burocrático ligado al imperialismo yanqui que va a desplazar a los ingleses. Surge el proletariado moderno y cambia los términos de la lucha política. De todo este proceso histórico salen las siguientes lecciones: que el pueblo siempre ha luchado, no es pacífico y aplica la violencia revolucionaria con los medios que tiene a su alcance; que las luchas campesinas son las que más han remecido los cimientos de la sociedad y que éstas no han podido triunfar porque les faltó la dirección del proletariado representado por el Partido Comunista; y que los hechos políticos y militares definen los grandes cambios sociales. Desde la posición de la línea militar, el Perú contemporáneo tiene tres momentos ligados a la aparición del proletariado que funda su Partido para tomar el Poder a través de la violencia revolucionaria, especificando su camino, lo que se sintetiza en el proceso de la línea militar del Partido. En el primer momento, de 1895 a 1945, se constituye el Partido Comunista del Perú y en cuanto a la línea militar Mariátegui establece el "Señalamiento y esbozo del camino". Las heroicas luchas obreras por salario, jornada de ocho horas y condiciones de trabajo, los movimientos campesinos de la Sierra Sur del país por tierras y los del proletariado agrícola, a más de las luchas de los universitarios por la reforma van a ser un complejo agudizamiento de la lucha de clases en que el proletariado peruano madura y Mariátegui funda el Partido Comunista del Perú, el 7 de octubre de 1928, bajo el marxismo-leninismo. Señala y esboza ideas fundamentales sobre la violencia revolucionaria, dice: "no hay revolución mesurada, equilibrada, serena, plácida", "el Poder se conquista a través de la violencia... se conserva el Poder sólo a través de la dictadura". Concibe la guerra como prolongada: "una revolución no se cumple sino en muchos años. Con frecuencia tiene períodos alternados de predominio de las fuerzas revolucionarias y de predominio de las fuerzas contrarrevolucionarias"; establece la relación entre política y guerra; comprendió que la revolución genera un ejército de nuevo tipo con tareas propias y diferentes a las de los explotadores; así también comprendió el papel del campesinado y la participación vital de la clase obrera dirigente; que la revolución bajará de los Andes, que "abatida la feudalidad latifundista, el capitalismo urbano carecerá de fuerzas para resistir a la creciente clase obrera"; que para que haya revolución se necesita fusiles, programa y doctrina; concebía la revolución como una guerra total en la que se conjuncionan los elementos políticos, sociales, militares, económicos y morales y cada bando pone en tensión y mueve todos los recursos que puede. Rechazó totalmente un camino electorero. Muerto Mariátegui, en abril de 1930, la derecha con Ravines va a usurpar la dirección del Partido y se produce el cuestionamiento y la negación del camino de Mariátegui, de palabra invocan insurrección pero caen en electorerismo. El llamado "Congreso de Constitución" del Partido de 1942 sanciona la táctica capituladora de la "Unión nacional", tanto en la política interna como en la internacional. El Partido va a ser influenciado por las ideas browderistas, que son un antecedente del revisionismo contemporáneo, donde hay un claro abandono de la violencia revolucionaria, una táctica electorera y centrar en el "Frente Democrático Nacional". Sin embargo, la línea roja pugnó por defender las posiciones marxista-leninistas aunque fue duramente combatida y la lucha interna se resolvía a través de expulsiones. En el segundo momento, de 1945 a 1980, se reconstituye el Partido Comunista del Perú y en cuanto a línea militar el Presidente Gonzalo establece la "Definición y Bases del Camino". Este segundo momento tiene dos partes: La primera del 45 al 63 que es de "Nuevos impulsos por el desarrollo del Partido e inicios de la lucha contra el revisionismo" y la segunda parte, del 63 al 80 que es del "Establecimiento de la línea política general y reconstitución del Partido". En la primera parte del segundo momento, a mediados de la década del 50 se inicia la lucha por reactivar el Partido que había quedado deshecho después del golpe de Estado de Odría. Posteriormente, en el Partido comienza a abrirse paso la lucha contra el revisionismo; este proceso se da en medio de la repercusión de la revolución cubana y principalmente porque empieza a desenvolverse a nivel mundial la lucha entre marxismo y revisionismo. Comienza a discutirse el camino de la revolución, se vuelve a hablar de lucha armada y en el IV Congreso del Partido, en 1962, se acuerda que en el Perú son factibles las llamadas "dos vías": "la pacífica y la violenta", asimismo que "la revolución puede seguir el camino de cercar las ciudades desde el campo como de la ciudad al campo", pero, pese a esta palabrería en esencia subsistía el viejo electorerismo concretado entonces en el llamado "Frente de Liberación Nacional", estaba el revisionismo de Jruschov. Aquí empieza a destacarse las posiciones políticas del Presidente Gonzalo que sienta bases de la línea roja y adhiere a las posiciones del Presidente Mao en la lucha entre marxismo y revisionismo. En la segunda parte del segundo momento, de 1963 a 1980, tenemos el "Establecimiento de la línea política general y reconstitución del Partido", esta tarea la llevó adelante el Presidente Gonzalo constituyendo la fracción roja del Partido en una intensa brega de más de quince años y a través de tres políticas estratégicas: Del 63 al 69 guió a la fracción roja bajo la política estratégica de seguir el "Camino de cercar las ciudades desde el campo"; del 69 al 76 guió al Partido con la política estratégica de "Reconstitución del Partido para la guerra popular" y del 76 al 79 con la política estratégica de "Culminar la Reconstitución y Sentar Bases" para el inicio de la lucha armada. Durante la primera política estratégica de seguir el "Camino de cercar las ciudades desde el campo", los comunistas del Perú son conmovidos profundamente por la lucha entre marxismo y revisionismo y las posiciones marxistas calan en la organización. En la década del 60 va a darse un gran movimiento campesino que movilizó 300 a 500 mil campesinos que lucharon por la tierra pero que no se convirtió en lucha armada por una dirección revisionista; se va a producir un gran movimiento de lucha huelguística en la clase obrera, también la lucha universitaria se desarrolla a más alto nivel. Todo esto va a repercutir en el Partido y el Presidente Gonzalo va a forjar a la fracción roja en Ayacucho, con ideas claras de que el Partido es para tomar el Poder, que debe basarse en la teoría marxista; desencadena una lucha frontal contra el revisionismo que tenía su centro en la Unión Soviética, adhiere firmemente a las posiciones del Partido Comunista de China y principalmente del Presidente Mao; plantea que: "el campo es un poderoso fermento revolucionario", "al campo y a los campesinos pobres hay que prestar especialísima atención", que "nuestra revolución será del campo a la ciudad" y confluye con las distintas bases del Partido para expulsar al revisionismo y a sus encallecidos representantes Jorge del Prado, Acosta, Juan Barrio, en la IV Conferencia Nacional, enero del 64. Así nuestro Partido va a ser uno de los primeros en romper y expulsar al revisionismo de sus filas. El Presidente Gonzalo se abocó a parar el Partido en el Comité Regional de Ayacucho; puso el centro del trabajo partidario en el campo; en la ciudad organizó a las masas pobres en la Federación de Barrios, reorganizó el Frente Estudiantil Revolucionario; pero lo trascendental es que pese a la oposición de la nueva dirección central montó el "Trabajo especial" aplicando un acuerdo partidario; esto es, el trabajo militar del regional y le dió tres funciones: política, militar y logística; posteriormente, en aguda lucha de dos líneas contra las posiciones de la dirección central que quería controlar el trabajo militar, combatió el militarismo, el mercenarismo y el foquismo. En estas circunstancias se van a dar las guerrillas del MIR, posición que expresa la lucha de nuestro pueblo desde un punto de vista pequeño burgués, sigue una línea militarista y soslaya al Partido, y a pesar del desfasamiento con el ascenso campesino mostraba la factibilidad de la lucha armada como perspectiva, siempre y cuando fuera dirigida por una línea justa y correcta y bajo la dirección del Partido; por eso el Presidente Gonzalo se opuso a que el Partido se disuelva y se ponga a la cola del MIR y del ELN en un supuesto Frente. En 1967, en la reunión de setiembre del Buró Político Ampliado nos va a plantear un Plan Estratégico donde están un conjunto de medidas que debía tomar el Comité Central para la construcción de los tres instrumentos, teniendo como tarea principal el formar las fuerzas armadas que era acuerdo de la V Conferencia Nacional del 65; esto se da en medio de una lucha de fracciones donde especialmente las fracciones de "patria roja" y la del liquidacionismo de derecha de Paredes contienden por copar la dirección del Partido, y Paredes pretende reeditar la táctica de ponerse a la cola de una facción de la gran burguesía y los de "patria roja" se van a desbordar en oportunismo de derecha. Durante la segunda política estratégica de "Reconstituir el Partido para la guerra popular", el Presidente Gonzalo va a plantear que subyace el revisionismo dentro del Partido y que es necesario la reconstitución del mismo sobre la base de unidad partidaria: el marxismo-leninismo-pensamiento Mao Tsetung, el pensamiento de Mariátegui y la línea política general; posiciones que fueron combatidas por las otras dos fracciones mencionadas y con el mal manejo de la lucha de dos líneas que hizo Paredes va a llevar a la explosión del Partido. El Presidente Gonzalo comprendió la necesidad de la reconstitución del Partido y la necesidad de librar una lucha interna por concretarla, barriendo el revisionismo como lo prueban los editoriales que escribió en Bandera Roja de diciembre del 67 "Desarrollar a fondo la lucha interna" y la de abril de 1968 "Profundizar e intensificar la lucha interna en la práctica revolucionaria". Va a trabajar por concretar la violencia revolucionaria en guerra popular, en el camino de cercar las ciudades desde el campo cumpliendo la tarea principal que demandaba el Partido: la construcción de las fuerzas armadas revolucionarias, planteando que la base insustituible es el desarrollo del trabajo campesino revolucionario, que sin un buen trabajo en las masas campesinas, esto es, orientado por el marxismo-leninismopensamiento Mao Tsetung, dirigido por el Partido Comunista no puede haber desarrollo de la fuerza armada ni de la guerra popular. Luego, dijo que no sólo hay que retomar la vigencia de Mariátegui sino desarrollarlo. Establece el Programa Agrario del Partido, en mayo del 69 y el 72 establece el Plan Estratégico del Comité Regional de Ayacucho. Derrota al liquidacionismo de derecha y en el Partido quedan dos fracciones: la fracción roja fundamentalmente en Ayacucho, dirigida por el Presidente Gonzalo y la fracción "bolchevique" que principalmente actuaba en Lima, los así llamados "bolcheviques" desarrollaron una línea liquidacionista de izquierda, forma de revisionismo que aislaba al Partido de las masas, concebían que bajo el fascismo no se podía luchar, que bastaba línea y en lo militar se oponían a la guerra popular; fueron aplastados y sus cabezas huyeron, el 75. Durante la tercera política estratégica de "Culminar la Reconstitución y Sentar Bases" para iniciar la lucha armada, el problema era culminar, dar por terminada la Reconstitución del Partido y sentar bases para iniciar la lucha armada; esto se va a definir en el VII Pleno de abril del 77 en que todo el Partido va a trabajar bajo la consigna de "Construir en función de la lucha armada", en lucha contra los inicios de la línea oportunista de derecha que decía que Velasco había hecho la reforma agraria, que había que organizar a los campesinos en torno a la Confederación Campesina del Perú y que la guerra popular había que hacerla por las "reivindicaciones más sentidas de las masas" olvidándose del problema de la tierra y del Poder. Y, en las ciudades desarrollaron "obrerismo" centrando a la clase en gremialismo y oponiéndose a que cumpliera su papel dirigente. Aplastadas estas posiciones, el Presidente Gonzalo pone en marcha el "Plan Nacional de Construcción", en junio del 77; decenas de cuadros son desplazados al campo en función de las necesidades estratégicas de la guerra popular y de construir Comités Regionales teniendo en cuenta las futuras Bases de Apoyo. En el VIII Pleno, de julio del 78 establece el "Esquema para la lucha armada", éste en esencia nos plantea que la guerra popular en el Perú debe desarrollar la guerra popular como una unidad tanto en campo como en ciudad, siendo el campo el teatro principal de las acciones armadas, siguiendo el camino de cercar las ciudades desde el campo y, además tener en cuenta el proceso histórico social del país en lo militar especialmente, la importancia de la Sierra y principalmente del Centro al Sur en nuestra historia, la importancia de la Capital y ubicar al Perú dentro del consorcio de América Latina, en Sudamérica, particularmente, y dentro del contexto internacional y la revolución mundial. Todo el Partido entró a reorganización general poniéndose el centro en el campo para desarrollar la forma principal de lucha y la forma principal de organización y se pusieron bases de la construcción de los tres instrumentos de la revolución. En síntesis, todo el proceso de la Reconstitución nos deja un Partido de nuevo tipo preparado para iniciar la guerra popular y dirigirla hasta la conquista del Poder en todo el país, proceso en el cual se forjó el contingente histórico que con la ideología del proletariado y bajo la dirección del Presidente Gonzalo estaba presto a asumir la conquista del Poder a través de la guerra popular. En el tercer momento del Partido, de 1980 a adelante, el Partido entra a dirigir la guerra popular y en cuanto a línea militar se plasma la "Aplicación y desarrollo del Camino"; este tercer momento tiene cuatro hitos: 1) Definición; 2) Preparación; 3) Inicio; 4) Desarrollo de la guerra de guerrillas. 1) Definición. En esencia, el Partido toma el acuerdo histórico y trascendental de iniciar la guerra popular en el Perú, fue definido en el IX Pleno Ampliado de Junio del 79. Acuerdo que fuera logrado en medio de tres intensas luchas: la primera, contra la línea oportunista de derecha que se oponía a iniciar la lucha armada negando situación revolucionaria, inexistencia de condiciones y que había "estabilidad"; se los expulsó y el Partido acordó una nueva etapa y una nueva meta. La segunda lucha fue contra una nueva línea derechista que consideraba que iniciar la lucha armada era imposible, que era un "sueño", que no había necesidad de tomar ese acuerdo porque era cuestión de principio. La tercera lucha fue con las divergencias en la izquierda, en la que se vieron los matices sobre cómo desarrollar la guerra popular estableciéndose que el matiz proletario era el del Presidente Gonzalo y por lo tanto era el que debía imponerse; todo el Partido hizo un compromiso de guiarse por la dirección del Presidente Gonzalo. En cuanto a la construcción de las fuerzas armadas se tomó la medida de formar cuadros militares, grupos propios para acción y minar las fuerzas reaccionarias apuntando a soldados. En estrategia y táctica se replanteó el sistema orgánico. 2) Preparación. En este hito se sanciona el Programa del Partido, la línea política general de la revolución peruana y los Estatutos partidarios, se resuelven problemas de estrategia política referentes a la violencia revolucionaria, la guerra popular y Partido, Ejército y Frente Unico y se asume la siguiente Decisión: "Forjar en los hechos la I Compañía! Florezca la violencia concretada en iniciar y desarrollar la lucha armada; abramos con plomo y ofrendemos nuestra sangre para escribir el nuevo capítulo de la historia del Partido y nuestro pueblo y forjemos en los hechos la I Compañía. Perú, 3 de diciembre de 1979". El Partido preparó la lucha armada tratando dos cuestiones: 1) Problemas de Estrategia Política que dan el contenido, los objetivos de la guerra popular en perspectiva y en lo inmediato, así como las directrices que ha de tener la guerra popular, los planes militares y la construcción de los tres instrumentos y su ligazón con el nuevo Poder; 2) El Inicio de la lucha armada, este problema capital decisivo, mereció especialísima atención del Presidente Gonzalo quien estableció el "Plan de Inicio" guiado por la consigna "Iniciar la lucha armada!" que era la condensación de la política principal que debía plasmarse militarmente, y cuyo contenido comprendía: Primero, las tareas políticas a cumplir, esto es iniciar la lucha armada, boicotear las elecciones, impulsar armadamente la lucha armada por la tierra y sentar las bases de lo nuevo especialmente del Poder; segundo, formas de lucha: guerrilla, sabotaje, propaganda y agitación armadas, aniquilamiento selectivo; tercero, formas orgánicas y militares: destacamentos armados, con o sin armas modernas; cuarto, cronograma, día del inicio y duración del Plan, acciones simultáneas para fechas específicas; quinto, consignas: "Lucha Armada!", "Gobierno de obreros y campesinos!" y "Abajo el nuevo gobierno reaccionario!". La Preparación se dio en lucha contra las posiciones derechistas que negaban condiciones y decían que el Partido no estaba preparado o que las masas no nos iban a apoyar, desertando el cabeza de estas posiciones las cuales fueron aplastadas. 3) Inicio. El 17 de Mayo de 1980 se inició la guerra popular en el Perú, "fue un desafiante golpe político de gran trascendencia que desplegando rebeldes banderas rojas e izando hoces y martillos proclamaba `La rebelión se justifica' y `El Poder nace del fusil', convocando al pueblo, al campesinado pobre en especial a ponerse en pie armadamente, a encender la hoguera y estremecer los Andes, a escribir la nueva Historia en los campos y entresijos de nuestra tumultuosa geografía, a derrumbar los podridos muros del orden opresor, a conquistar las cumbres, a asaltar los cielos con fusiles para abrir la nueva aurora. Los comienzos fueron modestos, casi sin armas modernas, se combatió, se avanzó y construyò de lo pequeño a lo grande y del material débil, fuego inicial, devino el gran incendio turbulento y rugiente que se expande sembrando revolución y explosionando más impetuosa guerra popular". Este tercer hito duró de mayo a diciembre del 80 y se resolvió el problema de cómo iniciar la lucha armada, de pasar de efectivos de paz a efectivos de guerra, fue clave la militarización del Partido a través de acciones y el magistral Plan de Inicio; así nació lo nuevo: la forma principal de lucha, la lucha armada y la forma principal de organización, los destacamentos y pelotones. Las acciones más destacadas en el campo fueron las acciones guerrilleras de Ayrabamba y Aysarca y en la ciudad el incendio al Municipio de San Martín; siendo el boicot a las elecciones en el pueblo de Chuschi la acción que dio inicio a la guerra popular. Este plan se cumplió derrotando las posiciones derechistas que decían que el Plan era "hoxhista" y que las acciones se centraban en la ciudad, pues potenciaban la apariencia y confundían la esencia, ya que la propaganda reaccionaria daba grandes titulares a los sabotajes en ciudades y minimizaba las acciones en el campo. Es una especificación de la guerra popular en el Perú hacer del campo el teatro principal de las acciones y de las ciudades complemento necesario. 4) Desarrollo de la guerra de guerrillas. Se ha cumplido a través de tres planes militares: Desplegar la guerra de guerrillas, Conquistar Bases y Desarrollar Bases. En cuanto a Desplegar la guerra de guerrillas se cumplió con un plan que duró de mayo 81 a diciembre 82 y tiene un período previo, de enero 81. "Abrir zonas guerrilleras en función de Bases de Apoyo"; implicó un salto ideológico-político al poner como base de unidad partidaria el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento guía del Presidente Gonzalo; militarmente se abrieron las guerrillas como un abanico en todo el país. "Conquistándose armas y medios, Removiendo el campo con acciones armadas y Batir para avanzar hacia las Bases de Apoyo" planes parciales cumplidos siendo el último "Batir" el eslabón con el siguiente plan; se avanzó en arrasar las relaciones feudales de producción apuntando contra el gamonalismo como punta de lanza y combatiendo los operativos policiales conjuntos; se cumplieron multitud de asaltos a puestos policiales y aniquilamientos selectivos al poder gamonal, generándose una gran movilización de masas campesinas que se incorporaban a las milicias, dando lugar a un vacío de Poder de la reacción y surgen así y se multiplican los Comités Populares. Aparecen así y se especifican las Bases de Apoyo. Resaltemos las acciones como el asalto a la cárcel de la ciudad de Ayacucho dónde por primera vez actuó la Compañía, se jaqueó la ciudad y se arrancó decenas de prisioneros de guerra; los asaltos a los puestos policiales de Vilcashuamán, de Totos, de San José de Secce; los sabotajes a la red eléctrica y a las vías de comunicación; arrasamientos como los de Pincos, Toxama, Allpachaca, Huayllapampa entre otros. En las ciudades los sabotajes al capitalismo burocrático y al imperialismo, así como el apoyo a las huelgas con acciones armadas. Aquí las posiciones derechistas que se combatieron fueron las de poder personal y feudo y también el retroceso en los hechos. Desplegar la guerra de guerrillas nos dio la más importante conquista: el nuevo Poder, los Comités Populares clandestinos que son el sustento de las Bases de Apoyo. Ante el avance de la guerra popular el gobierno reaccionario de Belaúnde lanzó desde el comienzo mismo la persecución, la represión, la tortura, la cárcel y la muerte sobre los militantes, combatientes y las masas; han montado operativos policiales independientes y conjuntos de sus fuerzas policiales, Guardia Civil, Guardia Republicana, Policía de Investigaciones, a más de los cuerpos antisubversivos como los "sinchis". Promulgaron el D.L. N 046 verdadera ley terrorista que viola los más elementales principios del derecho penal burgués; pero el resultado de todos sus planes ha sido el más rotundo fracaso, las masas rechazaron y resistieron la agresión. Ante el surgimiento del nuevo Poder se quebró la reticencia del gobierno de Belaúnde, que al comienzo minimizó el problema para guardar su falsa imagen democrática y se impuso la necesidad de clase de los explotadores, de los grandes burgueses y terratenientes bajo amparo del imperialismo yanqui, principalmente, y se encomendó a las fuerzas armadas (Ejército, Marina de Guerra y Fuerza Aérea), a la columna vertebral del Estado, el restablecimiento del órden público con el apoyo de las fuerzas policiales, poniendo en estado de emergencia y bajo control político-militar a la región de Ayacucho, Apurímac y Huancavelica desde Diciembre del 82 hasta hoy. El Presidente Gonzalo, ante el desarrollo de la guerra popular y la respuesta contrarrevolucionaria, que implicaba un salto cualitativo, planteó el Gran Plan de Conquistar Bases en el Comité Central Ampliado de Enero-Marzo del 83 donde definió las cuatro tareas políticas: reorganización general del Partido, creación del Ejército Guerrillero Popular, del Frente Revolucionario de Defensa del Pueblo y su concreción como Comités Populares en el campo y como Movimiento Revolucionario de Defensa del Pueblo en las ciudades y el Plan Militar de Conquistar Bases. Políticamente, la contradicción nuevo Estado - viejo Estado se fue abriendo paso y bajo la consigna de "Defender, desarrollar y construir" las Bases de Apoyo se desarrolla una dura contienda armada en la que la reacción lucha por restablecer el viejo Poder y la revolución por contrarrestablecer el nuevo Poder, esto es lo que llamamos lucha entre restablecimiento y contrarrestablecimiento y abarca los años 83 y 84. Se especificaron Planes militares para los zonales aplicando la táctica de dar vueltas y golpear el punto débil del enemigo; se cumplieron dos campañas exitosas en las que el nuevo Poder salió templado pasando su primera prueba de fuego; el Partido se fogueó y el Ejército Guerrillero Popular se desarrolló. Las fuerzas armadas reaccionarias condujeron la guerra contrarrevolucionaria siguiendo las concepciones de su amo el imperialismo yanqui, la teoría establecida por éste sobre la guerra contrarrevolucionaria en base a su experiencia, principalmente a la extraída de Vietnam y, particularmente, de la sacada del combate contra la lucha armada en América Latina, en especial de Centro América; ésa es la fuente teórica básica a la que se añade la experiencia "antiterrorista" de Israel y de sus pares de Argentina, así como la asesoría de Alemania Federal, Taiwán, España, etc. A lo que añade la experiencia de los pocos meses de lucha antiguerrillera del año 65 y la más circunscrita de su lucha en La Convención. Las operaciones están bajo la dirección del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas que actúa según lo dispuesto por el Consejo de Defensa Nacional que encabeza el Presidente hoy Alan García, de ahí la directa e ineludible responsabilidad de éste. Estrategia contrarrevolucionaria que ha sido vencida reiteradas veces, aplastada y derrotada cabal y completamente por la guerra popular, mostrando ante el mundo una y otra vez la superioridad de la estrategia del proletariado sobre la del imperialismo. Políticas específicas que aplicaron: masas contra masas; genocidio, fosas comunes; desapariciones hasta de pueblos enteros, en síntesis, desataron el terror blanco en el campo, especialmente en Ayacucho, Huancavelica y Apurímac. El resultado de este genocidio es de ocho mil setecientos peruanos muertos, de ellos cuatro mil setecientos asesinados de los más pobres y explotados del campesinado principalmente y de los barrios y barriadas de las ciudades y cuatro mil desaparecidos. Genocidio que no ha dado el resultado que ellos buscaban pues no aplastó la guerra popular sino que "la guerra popular arrecia golpeando contundente y desarrollándose", probando lo que el Presidente Mao enseña que la represión lo que hace es atizar la revolución. Dentro del Plan de Conquistar Bases se ubica el "Plan del Gran Salto" que sujetándose a la estrategia política específica de "dos Repúblicas se expresen, dos caminos, dos ejes" y a la estrategia militar de "generalizar la guerra de guerrillas", ha plasmado cuatro campañas exitosas bajo las guías políticas de "Abrirnos campo político", "Contra las elecciones generales del 85, entrabándolas, perturbándolas e impidiéndolas ahí dónde nos fuera factible", "Contra la asunción del nuevo gobierno aprista" y "Socavar el montaje fascista y corporativo aprista". La guerra popular se desarrolló en la región de Ayacucho, Huancavelica y Apurímac y se expandió a Pasco, Huánuco y San Martín, cubriendo un ámbito desde el departamento de Cajamarca, en la frontera con Ecuador, en el Noroeste, hasta Puno en la frontera con Bolivia en el Sureste del país golpeando y remeciendo en las ciudades, especialmente en la Capital. Así, la guerra popular ocupa la Sierra fundamentalmente, esto es el eje histórico de la sociedad peruana y su parte más atrasada y pobre, para convertirla en el gran teatro de la guerra revolucionaria; avanza en la ceja de Selva y en las cabeceras de Costa. Así, pues, la guerra popular no fue concebida en una sola región sino en varias a desarrollar simultáneamente, pero en forma desigual, con una principal que puede variar de ser necesario y todo dentro de un plan estratégicamente centralizado y tácticamente descentralizado. Entre las acciones más saltantes vemos los golpes a las bases de combate antiguerrilleras en el departamento de Ayacucho; la destrucción de los nucleamientos; entrabamiento al montaje de las microrregiones; en Huancavelica voladura de torres de la red eléctrica y destrucción de la red vial; arrasamiento de las asociativas agrarias de Cinto y Vichincha con reparto de ganado y apropiación de tierras; penetración en Apurímac; en el Centro emboscadas como la de Michivilca, sabotaje a la subestación de Centromín, sabotaje a la SAIS Túpac Amaru; en el Norte invasiones de tierras bajo la consigna "Conquistar la tierra!" que movilizó a 160 mil campesinos y confiscó 320 mil hectáreas mayormente pastizales y 12 mil reses, sabotaje al oleoducto norperuano, a la casa matriz del APRA en la ciudad de Trujillo, en el Sur se ha removido el problema de la tierra movilizando a más de 10 mil campesinos; en el Huallaga asalto al puesto policial de Aucayacu, arrasamiento de la gran empresa tealera, emboscada a la Guardia Republicana; en Lima Metropolitana sabotajes a embajadas como la del socialimperialismo ruso, a decenas de locales políticos del APRA, a los bancos y fábricas, todo lo que llevó a poner en estado de emergencia y toque de queda a la Capital bajo la responsabilidad de las fuerzas armadas en febrero de 1986. Alan García Pérez prosigue la política contrarrevolucionaria de su antecesor y busca aplastar la guerra popular mediante genocidios como el de Accomarca, Llocllapampa, Umaru, Bellavista en el campo y en la Capital de la República ha desatado dos genocidios contra los prisioneros de guerra, el primero el 4 de Octubre de 1985 donde aniquilaron a 30 militantes y combatientes en la luminosa trinchera de combate de Lurigancho, pero eso no doblegó la heroica resistencia de los prisioneros de guerra quienes con su sangre plasmaron el Dia del Prisionero de Guerra y, el segundo el 19 de Junio de 1986 el más vil y execrable crimen premeditado con alevosía para aplastar la guerra popular y aniquilar los prisioneros de guerra quienes con una resistencia feroz infligieron la más grave derrota política, militar y moral al genocida gobierno aprista haciendo saltar y definir su dilema de servir a la gran burguesía, a su facción burocrática para desarrollar fascismo y corporativismo, quedando para siempre bañado en sangre el genocida de García y el partido aprista. Se plasmó el Día de la Heroicidad con la trilogía monumental de los 250 muertos en las luminosas trincheras de combate de El Frontón, Lurigancho, y el Callao. Condenamos y desenmascaramos el oportunismo y revisionismo en sus diversas variantes: pro ruso, pro chino, a los falsos mariateguistas, a todos los que han actuado y actúan como delatores sirviendo de furgón de cola a la contrarrevolución, negando y combatiendo la guerra popular y tildándola de terrorismo repitiendo lo que Reagan y la reacción peruana y mundial dicen, no pudiendo nunca probar sus imputaciones y simplemente adjetivando y condenando la violencia "venga de donde viniere" y prosiguiendo sus viejas posiciones electoreras para pretender encasillar al pueblo en el cretinismo parlamentario, hundiéndose cada día más en la salvaguarda del viejo orden, su podrido parlamento, sus farsas electoreras, su constitución y sus leyes y viven temblando de temor reverencial ante las fuerzas armadas y el golpe de Estado; condenamos la actitud rastrera y capituladora de Barrantes Lingán, sus secuaces y compinches. La estrategia política del Gran Plan de Conquistar Bases cumplida desde 1983, a través de las dos campañas de defender, desarrollar y construir I y II y del Plan del Gran Salto con sus cuatro campañas hasta diciembre de 1986, nos muestran el avance de la guerra popular, que estamos firmemente ligados a las masas, pese a todo lo que digan en contrario pues los hechos los desmienten irrebatiblemente; la guerra popular ha conquistado el ámbito que extendiéndose en Sierra, Selva y Costa marcha vigorosa y pujante construyendo lo nuevo y abriendo el porvenir; y, las Bases de Apoyo que son la médula del camino de cercar las ciudades desde el campo han sido conquistadas. En cuanto al Gran Plan de Desarrollar Bases tiene una ubicación especial en la guerra popular, pues, la esencia de la guerra popular es desarrollar Bases de Apoyo, por eso el Gran Plan de Desarrollar Bases tiene que ver con la construcción del nuevo Poder y su desarrollo, tiene que ver con la perspectiva que se abre de la conquista del Poder en todo el país; así, la estrategia política es Desarrollar Bases y la estrategia militar es Desarrollar la guerra popular sirviendo a la revolución mundial, Plan que se cumple mediante un plan piloto. Para triunfar la revolución engendra y aplasta una poderosa contrarrevolución; entramos, pues, a años decisivos en que el APRA sigue sin tener un plan estratégico; habla de "nueva estrategia" pero no hay tal, lo único que puede hacer es dotar de mayores medios, dar leyes políticas, económicas y sociales, fortalecer a los militares para facilitar que las fuerzas armadas nos combatan mediante un nuevo genocidio en nuevas condiciones, tanto para nosotros como para ellos. Para nosotros el genocidio en marcha se presenta en nuevas circunstancias, ya hemos pasado el genocidio del 83 y 84 que mostró el gran repudio popular y el fortalecimiento de la revolución. La reacción no puede sino aplicar genocidio pero fortalecerá a la guerra popular; podrá haber iniciales repliegues e inflexiones pero ganaremos persistiendo en el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento Gonzalo, en nuestra política de los cinco desarrollos, en la invencibilidad de la guerra popular y en el apoyo del pueblo que hace y hará la historia siempre bajo la dirección del Partido Comunista. Sobre las situaciones concretas y posibilidades que se nos presentan en el nuevo Gran Plan de Desarrollar Bases tener presente que: 1) Aparecen grupos armados como el MRTA y el CRP que se han refundido pero no tienen una definida concepción marxista, marchando así a servir al imperialismo, al socialimperialismo y al supuesto diálogo fascista al cual ya le han dado treguas unilaterales. 2) El APRA ya ha entrado a desenvolver fascismo y corporativismo encontrando serias y crecientes dificultades, como su creciente y sinuosa colusión y pugna con la burguesía compradora, entre otras contradicciones más importantes aún. 3) La lucha de clases se agudiza más, las masas pasan a defenderse y resistir; de darse explosiones citadinas, podrían ser usadas por el socialimperialismo y la reacción en general, a través de sus representantes. 4) Puede darse un golpe de Estado y, además, el propio García Pérez promover un autogolpe a fin de preservarse para el futuro. 5) En perspectiva, la reacción también podría jugar con un gobierno tipo Allende, usando al aprista Barrantes o a otro similar; dentro de esta posibilidad hay que considerar el siniestro papel de la Izquierda Unida. 6) El Estado peruano tiene problemas fronterizos que pueden atizarse en cualquier momento, como lo muestra la experiencia de otros países latinoamericanos; este problema debe verse seriamente. 7) El envio de tropas yanquis ya es un hecho real y no una simple posibilidad, su presencia está ligada a lo mismo en otros países, especialmente limítrofes y debe verse en relación con medidas militares tomadas por Brasil. 8) Las guerras imperialistas y sus agresiones siguen aumentando; y la guerra mundial por la hegemonía entre USA y URSS sigue preparándose a través de colusión y pugna de dimensión global y, en consecuencia, la guerra popular es necesidad perentoria y la guerra popular mundial insoslayable perspectiva. Todas estas posibilidades hay que tenerlas seriamente en cuenta para manejar la guerra popular con la política al mando y, particularmente, la perspectiva de la conquista del Poder en todo el país que se puede presentar y hay que asumirla; por tanto estar ideológica, política y organizativamente firmemente preparados. La I Campaña del Plan Piloto del Gran Plan de Desarrollar Bases ha significado el más grande remecimiento y la mayor repercusión nacional e internacional; se está fracturando más el viejo Estado, nunca había sido remecido de esta manera por nadie en el Perú. ¡Ahora nos corresponde cumplir la necesidad política e histórica de “Culminar brillantemente estableciendo un hito histórico!" en la II Campaña. Entendiendo que el Plan Piloto es como la batalla inicial de todo el Gran Plan de Desarrollar Bases. En conclusión, yendo a los ocho años de guerra popular hemos cumplido más de cuarentaicinco mil acciones que revelan alta calidad de las acciones; el Partido militarizado se ha templado; el Ejército Guerrillero Popular se ha desarrollado y aumentado su belicosidad; y, tenemos cientos de organismos de nuevo Poder y las masas más pobres nos apoyan cada vez más. La guerra popular ha elevado la lucha de clases de nuestro pueblo a su forma más alta y eso repercute en la propia lucha de las masas impulsándolas a incorporarse por saltos y progresivamente a la guerra popular. Así la "guerra popular está volviendo el país al revés, el `viejo topo' está hozando profundamente en las entrañas de la vieja sociedad, nadie lo detendrá, el futuro ya mora entre nosotros, la vieja y podrida sociedad se hunde irremediablemente, la revolución prevalecerá. ¡Viva la guerra popular!". Nuestra tarea es desarrollar la guerra popular sirviendo a la revolución mundial bajo las banderas del marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento Gonzalo. 2. EL CAMINO DE CERCAR LAS CIUDADES DESDE EL CAMPO Y LA BASE DE APOYO REVOLUCIONARIA El Presidente Mao ha establecido el camino de cercar las ciudades desde el campo y su médula las Bases de apoyo, teniendo en cuenta que los poderosos imperialistas y sus reaccionarios aliados chinos se hallaban atrincherados en las principales ciudades y que si la revolución se negaba a capitular y quería perseverar en la lucha tenía que convertir las atrasadas zonas rurales en avanzadas y sólidas Bases de apoyo, en grandes baluartes militares, políticos, económicos y culturales de la revolución desde donde luchar contra el fiero enemigo, que atacaba las zonas rurales utilizando las ciudades, y llevar paso a paso la revolución a la victoria completa a través de una guerra prolongada. En base a esta tesis maoísta, el Presidente Gonzalo ha establecido llevar adelante una guerra popular unitaria donde el campo es el teatro principal de las acciones armadas, pues, en nuestro país tenemos una inmensa mayoría de masa campesina y ahí deben construirse las Bases de apoyo ya que, como dice el Presidente Mao: "La prolongada lucha revolucionaria sostenida en tales Bases de apoyo revolucionarias es, en lo fundamental, una guerra de guerrillas de los campesinos dirigida por el Partido Comunista de China. Por lo tanto, es erróneo ignorar la necesidad de utilizar las zonas rurales como Bases de apoyo revolucionarias, desatender el arduo trabajo en los campesinos y descuidar la guerra de guerrillas". Pero, además, el Presidente Gonzalo especifica que en las ciudades como complemento se deben llevar adelante acciones armadas ya que como lo demuestra la experiencia internacional y la nuestra, esto es factible; y, saca lección de, por ejemplo, lo que pasó a la guerrilla en Filipinas que se refundió en el campo y dejó quietas las ciudades, especialmente la Capital, provocando el aislamiento de las guerrillas. En Brasil, los revolucionarios también aplicaron acciones armadas en campo y ciudad, sólo que no especificaron cuál era principal. En Vietnam se han hecho importantes acciones armadas también en las ciudades. Asimismo, teniendo en cuenta las peculiaridades de las ciudades en América Latina, donde el porcentaje del proletariado y de masas pobres en ciudades es elevado, las masas están prestas a desarrollar acciones de complemento a las del campo; sólo que en las ciudades no se construye el nuevo Poder, Base de apoyo, sino Frente concretado en Movimiento Revolucionario de Defensa del Pueblo con Centros de Resistencia que hacen la guerra popular y preparan la futura insurrección, que se dará cuando las fuerzas del campo asalten las ciudades en combinación con la insurrección desde dentro. Las Bases de apoyo son las bases estratégicas sobre las cuales se apoyan las fuerzas guerrilleras para cumplir sus tareas estratégicas y lograr el objetivo tanto de conservar y aumentar sus fuerzas como de aniquilar y arrojar al enemigo. Sin tales Bases estratégicas no habría nada en que apoyarse para ejecutar cualquiera de nuestras tareas estratégicas y alcanzar el objetivo de la guerra. El Presidente Mao plantea tres requisitos para la creación de las bases de apoyo: tener fuerzas armadas, derrotar al enemigo y movilizar a las masas. Estos se han especificado en nuestra guerra popular cuando en 1982, aplicando el Plan de Desplegar la guerra de guerrillas en su parte de Batir al enemigo se apuntó a arrasar las relaciones feudales de producción, se asaltaron puestos policiales, se aplicaron aniquilamientos selectivos del poder gamonal y así las fuerzas policiales abandonaron el campo y se replegaron en las capitales provinciales; las autoridades del viejo Poder renunciaron masivamente, generándose vacío de Poder y decenas de miles de masas fueron movilizadas, es en estas condiciones que surgen las Bases de apoyo que se especifican en los Comités Populares clandestinos. Es, pues, erróneo tomar dogmáticamente la experiencia china ya que si las condiciones estaban dadas y los principios regían había que construir las Bases de apoyo; acordar esto implicó una lucha contra el derechismo que argumentaba que no se había derrotado grandes fuerzas enemigas, cuando el problema es que las fuerzas enemigas habían abandonado el campo como consecuencia de la derrota de sus planes políticos y militares. El Presidente Gonzalo ha establecido un sistema de Bases de apoyo rodeado por zonas guerrilleras, zonas de operaciones y puntos de acción teniendo en cuenta las condiciones políticas y sociales, la tradición de lucha, los caracteres geográficos y el desarrollo del Partido, del Ejército y de las masas. Es fundamental sostener la validez del camino de cercar las ciudades desde el campo y su médula la Base de apoyo ya que, con guerrillas de insurrectos errantes el Ejército Guerrillero Popular no tendría la Base de apoyo que viene a ser la retaguardia que lo sustenta y tampoco se construiría nuevo Poder. Estamos totalmente en contra del foquismo. 3. LA GUERRA PROLONGADA La guerra popular es prolongada porque deriva de la correlación entre los factores del enemigo y los nuestros que están determinados por las siguientes cuatro características fundamentales: La primera es que el Perú es una sociedad semifeudal y semicolonial sobre la cual se desenvuelve un capitalismo burocrático; la segunda es que el enemigo es fuerte; la tercera es que el Ejército Guerrillero Popular es débil; y, la cuarta es que el Partido Comunista dirige la guerra popular. De la primera y cuarta características se desprende que el Ejército Guerrillero Popular puede crecer y derrotar al enemigo; de la segunda y tercera características se desprende que el Ejército Guerrillero Popular no puede crecer con mucha rapidez ni derrotar pronto a su enemigo. Estas peculiaridades determinan el carácter prolongado de la guerra. El enemigo es fuerte y nosotros somos débiles, en eso reside el peligro de nuestra derrota pero el enemigo tiene una sola ventaja, el numeroso contingente de sus fuerzas y el armamento con que cuenta, pero todos los demás aspectos constituyen sus puntos débiles: su objetivo es defender el viejo y podrido Poder del Estado terrateniente-burocrático; tiene una línea militar burguesa; es un ejército mercenario; no tiene disciplina consciente y su moral es baja; tiene fuertes contradicciones entre oficiales y soldados y está desprestigiado ante las masas; además, la base misma del ejército reaccionario son de procedencia obrera y campesinos quienes pueden ser desintegrados ante una guerra injusta; por lo demás las fuerzas armadas en el Perú nunca han ganado guerras y son expertas en derrotas. Además, ellas han contado y cuentan con el apoyo de la reacción internacional pero nosotros contamos con el apoyo de las naciones oprimidas, de los pueblos del mundo y el proletariado internacional, que son las fuerzas nuevas. El Ejército Guerrillero Popular tiene un solo punto débil, su insuficiente desarrollo y los restantes aspectos constituyen valiosas ventajas: lleva adelante una guerra popular por crear un nuevo Poder; tiene una línea militar proletaria, dirigido absolutamente por el Partido Comunista; está basado en el valor de clase y el heroísmo revolucionario por tanto tiene una disciplina consciente, su moral es alta y hay estrecha unión entre oficiales y soldados y es un ejército compuesto por el mismo pueblo, obreros y campesinos principalmente pobres. Pero el hecho objetivo es que hay una disparidad grande entre las fuerzas del enemigo y las fuerzas nuestras y para pasar, nosotros, de débiles a fuertes requerimos un tiempo en el cual los defectos del enemigo se expresen y nuestras ventajas se desarrollen. Por eso decimos que el ejército nuestro es aparentemente débil pero en esencia es fuerte y el ejército enemigo es aparentemente fuerte pero en esencia débil. Así, para pasar de débiles a fuertes tenemos que llevar adelante la guerra prolongada y ésta tiene tres etapas: la primera es el período de la ofensiva estratégica del enemigo y la defensiva estratégica nuestra. La segunda será el período de la consolidación estratégica del enemigo y de nuestra preparación para la contraofensiva. La tercera será el período de nuestra contraofensiva estratégica y de la retirada estratégica del enemigo. El Presidente Gonzalo así nos enseña que la guerra popular es prolongada, larga, cruenta pero victoriosa y nos dice que el tiempo de su duración se extenderá o acortará dentro de su carácter prolongado en la medida que más combatamos ceñidos a la línea militar proletaria, pues el derechismo es el peligro principal que puede causar serios tropiezos a la guerra. Hoy nos encontramos en el período de la ofensiva estratégica del enemigo y de defensiva estratégica nuestra y tenemos que potenciar la guerra popular aplicando la guerra de guerrillas generalizada sentando bases para la siguiente etapa pagando el costo que sea necesario, pero bregando porque sea el menor posible. II. CONSTRUCCION DEL EJERCITO GUERRILLERO POPULAR Para librar la guerra popular se tiene que contar con la forma principal de organización que es el Ejército Guerrillero Popular, pues, la columna vertebral del viejo Estado es la fuerza armada reaccionaria y para destruir el viejo Estado hay que destruir sus fuerzas armadas reaccionarias y el Partido tiene que contar con un poderoso ejército: "Sin un ejército popular nada tendrá el pueblo", así nos enseña el Presidente Mao. La construcción del Ejército se ve en la línea de construcción basada en el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento Gonzalo. En síntesis, el Presidente Gonzalo ha aportado con incorporar las milicias al Ejército Guerrillero Popular, su creación como tal es un paso al mar armado de masas y solución de pasar de masas desorganizadas a masas militarmente organizadas. III. ESTRATEGIA Y TACTICA El Presidente Gonzalo destaca siete puntos sobre estrategia y táctica del Presidente Mao especificando algunos de ellos, a éstos hay que prestarles suma atención para la dirección de la guerra popular. 1. Sobre Estrategia y Táctica. Parte de la tesis del Presidente Mao de que la tarea de la estrategia como ciencia es estudiar las leyes de la dirección de operaciones militares que influyen sobre la situación de la guerra en su conjunto. La tarea de la ciencia de las campañas y de la táctica es estudiar las leyes de la dirección de operaciones militares de carácter parcial. Y hace un desarrollo estratégico de cómo conducir la guerra en el conjunto del país y en cada zona, teniendo en cuenta su vinculación con la situación internacional; nos plantea los ejes, sub ejes, direcciones de movimiento y líneas de movimiento los cuales nos permiten mantener el rumbo estratégico de la guerra en cualquier circunstancia y enfrentar todo tipo de operaciones políticas y militares que monte la contrarrevolución. Sobre esta base, establece el Plan Militar Nacional que es estratégicamente centralizado y tácticamente descentralizado, partiendo de que todo plan es una ideología, que debe reflejar la realidad y los vericuetos que ésta ha de expresar; tomando a Stalin, liga estrategia con táctica y establece los Planes estratégico-operativos que en concreto son cómo la estrategia se vincula con las operaciones tácticas; y así, cada Comité tiene que elaborar sus Planes estratégico-operativos dentro del Plan estratégico general y específicamente dentro del Plan estratégicooperativo común a todo el Partido. La disposición correcta emana de la justa decisión del mando, todo plan militar debe basarse en reconocimientos indispensables y en un cuidadoso estudio de la situación del enemigo, la situación propia y las interrelaciones de ambas, esto es, siempre deben tenerse presentes "las dos colinas"; debe guiarse por una estrategia política y por una estrategia militar. Para la elaboración de los Planes siempre tenemos en cuenta los siguientes lineamientos generales: 1) La lucha de clases internacional entre revolución y contrarrevolución; la ideología; el movimiento comunista internacional; el MRI. 2) La lucha de clases en el país; la contrarrevol ución; la coyuntura política; la guerra contrasubversiva. 3) El desarrollo de la guerra popular; balance; leyes y lecciones. 4) Necesidad de investigar. 5) La guerra popular y la construcción. 6) La guerra popular y las masas. 7) La lucha de dos lineas. 8) Programación y Cronograma. 9) Actitud y consignas. "Ser superiores a las dificultades y conquistar victorias más altas!". En casi 8 años de guerra popular tenemos cuatro planes: Plan de Inicio; Plan de Desplegar; Plan de Conquistar Bases; y, Plan de Desarrollar Bases. 2. Principio básico de la guerra. Todos los principios orientadores de las operaciones militares provienen de un solo principio básico: hacer todo lo posible por conservar las propias fuerzas y aniquilar las del enemigo. Toda guerra impone un precio, a veces sumamente elevado y para conservar nuestras fuerzas tenemos que aniquilar las del enemigo, pero para aniquilar al enemigo tenemos que pagar un costo a fin de preservar el conjunto. El Presidente Gonzalo nos enseña que hay que estar dispuestos a pagar el más alto costo de la guerra pero que debemos bregar porque éste sea el menor posible, es una contradicción y el problema reside en actitud y buena planificación y es principalmente una cuestión de mandos. Nos forja en el "reto a la muerte", en "heroicidad revolucionaria" y en "conquistar lauros a la muerte". En la guerra siempre vemos los dos aspectos, el destructivo y el constructivo y principal es el segundo. 3. La táctica guerrillera o táctica básica. "Cuando el enemigo avanza, retrocedemos; cuando el enemigo se detiene, le hostigamos; cuando el enemigo se fatiga, le atacamos; cuando el enemigo se retira, le perseguimos". Esta táctica básica hay que encarnarla y aplicarla dando vueltas con el enemigo y buscando su punto débil para golpearlo. 4. Campañas de "cerco y aniquilamiento" y las contracampañas, forma principal de la guerra popular. Es una ley que la contrarrevolución para aplastar la revolución desate campañas de "cerco y aniquilamiento" contra cada unidad del Ejército Guerrillero Popular o contra las Bases de apoyo; las operaciones del Ejército Guerrillero Popular adoptan la forma de contracampañas y el Presidente Mao ha establecido nueve pasos para aplastar una campaña de "cerco y aniquilamiento": 1) La defensa activa; 2) La preparación de una contracampaña; 3) La retirada estratégica; 4) La contraofensiva estratégica;5) La iniciación de la contraofensiva; 6) La concentración de fuerzas; 7) La guerra de movilidad; 8) La guerra de decisión rápida; y, 9) La guerra de aniquilamiento. El Presidente Gonzalo aplicando esta ley a las condiciones de nuestra guerra popular nos ha planteado las cinco partes de la campaña, las cuales nos permiten derrotar los planes políticos y militares de la reacción; teniendo cada campaña un objetivo político y militar específico cumpliéndose con sorpresa, golpeando cuando queremos, donde queremos y como queremos. También ha especificado los cinco pasos que debe seguir cada una de las acciones militares sirviendo siempre al objetivo político, combatiéndose los criterios de acción por acción. Nos remarca la importancia de diferenciar la esencia de la apariencia de los movimientos del enemigo; y también nos ha establecido las cuatro formas de lucha de la guerra popular: 1) La acción guerrillera con sus dos formas el asalto y la emboscada; 2) El sabotaje; 3) Aniquilamiento selectivo; y 4) Propaganda y agitación armadas; así como los diversos procedimientos. 5. Papel estratégico de la guerra de guerrillas. El Presidente Mao ha elevado la guerra de guerrillas a nivel de estrategia, antes de él solamente se la consideraba como un problema táctico, que no servía a decidir el desenlace de la guerra; pero si bien la guerra de guerrillas no decide la guerra porque ésta necesita de guerra regular, cumple una serie de tareas estratégicas que llevan al desenlace favorable de la guerra. Concebimos la guerra de guerrillas en vasta escala, guerra de guerrillas generalizada que tiene que sostener la guerra prolongada y encarnizada, de ahí que apliquemos los 6 problemas estratégicos de la guerra de guerrillas: 1) Iniciativa, flexibilidad y planificación en la realización de operaciones ofensivas dentro de la guerra defensiva, batallas de decisión rápida dentro de la guerra prolongada y operaciones en las líneas exteriores dentro de la guerra en las líneas interiores. 2) Coordinación con la guerra regular. 3) Creación de Bases de apoyo. 4) Defensa estratégica y ataque estratégico en la guerra de guerrillas. 5) Transformación de la guerra de guerrillas en guerra de movimientos. 6) Relaciones de mando. 6. Los diez principios militares. En diciembre de 1947 el Presidente Mao sintetizó magistralmente en 10 principios militares la línea estratégica justa y correcta seguida en más de 20 años de guerra popular, como se ve en su escrito "La situación actual y nuestras tareas", parte tercera. Estos principios nosotros los aplicamos y es muy importante profundizar su encarnamiento. 7. Resumen brillante de estrategia y táctica. El Presidente Mao ha resumido de manera brillante la estrategia y la táctica de la guerra popular en la siguiente frase: "Ustedes combaten a su manera y nosotros a la nuestra: combatimos cuando podemos vencer y nos marchamos cuando no podemos". "En otras palabras, ustedes se apoyan en el armamento moderno y nosotros en las masas populares con una alta conciencia revolucionaria; ustedes ponen en pleno juego su superioridad y nosotros la nuestra; ustedes tienen sus métodos de combate y nosotros los nuestros. Cuando ustedes quieren atacarnos, no les permitimos hacerlo y ni siquiera encontrarnos. Pero cuando nosotros los atacamos a ustedes, damos en el blanco, les asestamos golpes certeros y los aniquilamos. Cuando podemos aniquilarlos, lo hacemos con toda decisión; cuando no podemos aniquilarlos, tampoco nos dejamos aniquilar por ustedes. El no combatir cuando hay posibilidad de vencer es oportunismo. El obstinarse en combatir cuando no hay posibilidad de vencer es aventurerismo. Todas nuestras orientaciones estratégicas y tácticas se basan en nuestra voluntad de combatir. Nuestro reconocimiento de la necesidad de marcharnos se basa ante todo en nuestro reconocimiento de la necesidad de combatir. Cuando nos marchamos, lo hacemos siempre con miras a combatir y a aniquilar final y completamente al enemigo. Sólo apoyándonos en las amplias masas populares, podemos llevar a la práctica esta estrategia y esta táctica. Y aplicándolas, podemos poner en pleno juego la superioridad de la guerra popular y constreñir al enemigo a la posición pasiva de ser golpeado, por superior que sea en equipos y sean cuales fueren los medios que emplee, conservando siempre la iniciativa en nuestras manos". ¡Citado en “Viva el triunfo de la guerra popular!", setiembre de 1965. La aplicación de este principio nos permite demostrar la invencibilidad de la estrategia superior de la guerra popular, porque el proletariado como última clase en la historia ha creado su forma superior de guerra y ninguna otra clase, entre ellas la burguesía con sus más altos estrategas políticos y militares es capaz de vencerla, que sueñe la reacción en elaborar "estrategias superiores" a la guerra popular porque están condenadas al fracaso ya que están contra la historia. Nuestra guerra popular en casi ocho años arde victoriosa demostrando la invencibilidad de la guerra popular. Los militantes del Partido Comunista del Perú asumimos cabal y completamente la línea militar del Partido, establecida por el Presidente Gonzalo que basándose en lo más alto que ha creado el proletariado internacional, el marxismo-leninismo-maoísmo ha especificado con el pensamiento Gonzalo nuestra línea militar, dotándonos de una arma invencible, la guerra popular unitaria campo principal y ciudad complemento, que como forma principal de lucha la llevamos adelante siendo una antorcha encendida ante el mundo pregonando la validez universal del siempre vivo marxismo-leninismo-maoísmo. ¡VIVA LA LINEA MILITAR DEL PARTIDO! ¡LA GUERRA POPULAR ES INVENCIBLE! 1988 PARTIDO COMUNISTA DEL PERÚ LINEA DE CONSTRUCCION INTRODUCCION. El Presidente Gonzalo establece la línea de la construcción de los tres instrumentos de la revolución enarbolando, defendiendo y aplicando el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente el maoísmo. Nos enseña que Marx dijo que la clase obrera crea organizaciones a su imagen y semejanza, esto es, organizaciones propias. En el siglo XIX con Marx y Engels partimos dotados de una concepción científica, con doctrina propia, con objetivo propio, con meta común, cómo tomar el Poder y el medio para hacerlo: la violencia revolucionaria; todo ésto en lucha de dos líneas bastante dura. Marx sentó que el proletariado no puede actuar como clase más que constituyéndose él mismo en partido político distinto y opuesto a todos los partidos políticos creados por las clases poseedoras. Que por tanto el proletariado desde que aparece en un proceso prolongado crea sus formas de lucha y sus formas de organización propias, que así el Partido es la forma más alta de organización, el ejército la forma principal de organización y el Frente es el tercer instrumento, que todos estos tres instrumentos son para tomar el Poder por medio de la violencia revolucionaria. Nos dice que Engels a fines del siglo XIX llegó a la conclusión que la clase no tenía ni las formas orgánicas ni las formas militares propias para tomar el Poder y mantenerlo, pero nunca dijo que abandonáramos la revolución sino que trabajáramos por ella buscando la solución a esos problemas pendientes, esto hay que entenderlo bien pues los revisionistas lo tuercen para vender su oportunismo. Que en el siglo XX Lenin comprendió que la revolución estaba madura y crea el Partido proletario de nuevo tipo, plasma la forma de lucha: la insurrección y la forma de organización: los destacamentos, que eran formas móviles y que superaban las barricadas del siglo pasado, que eran formas fijas. Lenin plantea la necesidad de crear organizaciones nuevas, clandestinas, pues, el paso a las acciones revolucionarias significaba la disolución de las organizaciones legales por la policía y que este tránsito sólo es posible si se realiza pasando por encima de los antiguos líderes, pasando por encima del viejo Partido, destruyéndolo. Que el Partido debía tomar como ejemplo al ejército moderno, con disciplina propia y con una única voluntad y ser flexible. Que con el Presidente Mao la clase comprende la necesidad de construir los tres instrumentos de la revolución: Partido, Ejército y Frente Unico interrelacionadamente. Así resuelve la construcción de los tres instrumentos en un país atrasado, semifeudal y semicolonial, a través de la guerra popular. En concreto resuelve la construcción del Partido en torno al fusil y que es el heroico combatiente que dirige su propia construcción, al Ejército y al Frente. El Presidente Gonzalo plantea la militarización de los Partidos Comunistas y la construcción concéntrica de los tres instrumentos. La militarización de los Partidos Comunistas es directriz política que tiene contenido estratégico, pues, es "el conjunto de transformaciones, cambios y reajustes que necesita para dirigir la guerra popular como forma principal de lucha que genere el nuevo Estado" por tanto la militarización de los Partidos Comunistas es clave para la revolución democrática, la socialista y las culturales. Define el principio de la construcción: "Sobre la base ideológico-política, construir simultáneamente lo organizativo, en medio de la lucha de clases y la lucha de dos líneas, todo dentro y en función de la lucha armada por la conquista del Poder". Además, liga todo el proceso de la construcción con la fluidez de la guerra popular partiendo de que "la movilidad de las operaciones militares y la variabilidad de nuestro territorio dan a todos los trabajos de construcción... un carácter variable", como dice el Presidente Mao. Así, para ver la línea de construcción hay que partir de las formas de lucha y las formas de organización; del principio de construcción y de la construcción ligada a la fluidez de la guerra popular que es la forma principal de lucha hoy en el mundo. 1. SOBRE LA CONSTRUCCION DEL PARTIDO - Carácter del Partido. Nos basamos en el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento Gonzalo, principalmente pensamiento Gonzalo, esto es en la ideología del proletariado expresión más alta de la humanidad única verdadera, científica e invencible. Luchamos por el Programa Comunista cuya esencia es organizar y dirigir la lucha de clases del proletariado porque éste conquiste el poder político, realice la revolución democrática, la revolución socialista y las revoluciones culturales hacia el Comunismo meta inalterable hacia la cual marchamos. Contamos con la línea política general de la revolución, esto es con las leyes que rigen la lucha de clases por la toma del Poder; establecida por el Presidente Gonzalo con sus cinco elementos: 1) Línea internacional; 2) Revolución democrática; 3) Línea militar; 4) Línea de construcción de los tres instrumentos de la revolución; y, 5) Línea de masas. La línea militar es el centro de la línea política general. Nos forjamos en el internacionalismo proletario pues concebimos nuestra revolución como parte de la revolución proletaria mundial. Y mantenemos independencia ideológica, política y organizativa apoyándonos en nuestros propios esfuerzos y en las masas. Partido de nuevo tipo que ha generado al Jefe de la revolución peruana, el Presidente Gonzalo, el más grande marxista-leninista-maoísta viviente, que dirige el Partido, es garantía de triunfo de la revolución y nos llevará hasta el Comunismo. - La militarización del Partido Comunista y la construcción concéntrica. El Presidente Gonzalo plantea la tesis de que a los Partidos Comunistas del mundo les corresponde militarizarse por tres razones: Primero, porque estamos en la ofensiva estratégica de la revolución mundial, vivimos el barrimiento del imperialismo y la reacción de la faz de la Tierra en los próximos 50 a 100 años, época signada por la violencia en que se expresan todo tipo de guerras, veamos cómo la reacción está militarizándose cada vez más, militarizando los viejos Estados, su economía, desarrollando guerras de agresión, traficando con las luchas de los pueblos y apuntando a una guerra mundial, pero siendo la revolución la tendencia principal en el mundo la tarea de los Partidos Comunistas es enarbolar la revolución plasmando la forma principal de lucha: la guerra popular, para oponer la guerra revolucionaria mundial a la guerra contrarrevolucionaria mundial. Segundo, porque hay que conjurar la restauración capitalista. La burguesía cuando pierde el Poder se introduce dentro del Partido, utiliza al ejército y busca usurpar el Poder, destruir la dictadura del proletariado para restaurar el capitalismo, por tanto los Partidos Comunistas deben militarizarse y ejercer la dictadura omnímoda de los tres instrumentos, forjarse en la guerra popular y potenciar la organización armada de las masas, la milicia popular, para que engulla al ejército. Por esto nos dice "forjar a los militantes como comunistas, primero y principalmente, como combatientes y como administradores"; por eso todo militante está forjado en la guerra popular y alerta contra cualquier intento de restauración. Tercero, porque marchamos a una sociedad militarizada. Militarizando el Partido plasmamos un paso hacia la militarización de la sociedad que es la perspectiva estratégica para garantizar la dictadura del proletariado. La sociedad militarizada es el mar armado de masas de que nos hablaran Marx y Engels, que cautela la conquista y la defensa del Poder conquistado. Tomamos la experiencia de la revolución china, de la base antijaponesa de Yenán que era una sociedad militarizada donde de la boca de los fusiles nacía todo, Partido, Ejército, Estado, nueva política, nueva economía, nueva cultura. Y así desarrollar el comunismo de guerra. En la I Conferencia Nacional, noviembre de 1979, el Presidente Gonzalo planteó la tesis de la necesidad de la militarización del Partido Comunista del Perú; luego, en los primeros meses de 1980 cuando el Partido se preparaba para iniciar la guerra popular planteó desarrollar la militarización del Partido a través de acciones, basándose en el gran Lenin que dice reducir el trabajo no militar para centrarlo en lo militar, que concluían los tiempos de paz y entrábamos a los tiempos de guerra por lo que todos los efectivos debían ser militarizados, así, tomando al Partido como eje de todo construir en su entorno el Ejército y con estos instrumentos, con la masa en guerra popular construir en torno a ambos el nuevo Estado. Que la militarización del Partido sólo puede ser llevada adelante a través de acciones concretas de la lucha de clases, de acciones concretas de tipo militar; esto no quiere decir que sólo realicemos, exclusivamente, acciones militares de diverso tipo (acción guerrillera, sabotajes, aniquilamiento selectivo, propaganda y agitación armadas), sino que debemos realizar principalmente estas formas de lucha a fin de incentivar y desarrollar la lucha de clases adoctrinándola con hechos, en este tipo de acciones como formas de lucha principal de la guerra popular. La militarización del Partido tiene sus antecedentes en Lenin y en el Presidente Mao, pero es un problema nuevo desarrollado por el Presidente Gonzalo teniendo en cuenta las nuevas circunstancias de la lucha de clases y hay que ver que se presentarán problemas nuevos que a través de la experiencia se irán resolviendo. Que implicará necesariamente un proceso de lucha entre lo viejo y lo nuevo para que se desarrolle más siendo la guerra la forma más alta de resolver las contradicciones, potencia las facultades de los hombres para encontrar las soluciones. Es la militarización del Partido la que nos ha permitido iniciar y desarrollar la guerra popular; y, consideramos que esta experiencia tiene validez universal por lo cual es una demanda y necesidad que los Partidos Comunistas del mundo se militaricen. La construcción concéntrica de los tres instrumentos es la plasmación orgánica de la militarización del Partido y en síntesis se resume en lo que el Presidente Gonzalo enseña: "El Partido es el eje de todo, dirige omnímodamente los tres instrumentos, su propia construcción, absolutamente al ejército y al nuevo Estado como dictadura conjunta apuntando a la dictadura del proletariado". - Los seis aspectos de la construcción del Partido. La construcción ideológica. Se forja la militancia en la base de unidad partidaria el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento Gonzalo, principalmente pensamiento Gonzalo; decimos marxismo-leninismo-maoísmo porque es la ideología universal del proletariado, última clase de la historia, ideología que debe aplicarse a las condiciones concretas de cada revolución y generar su pensamiento guia, en nuestro caso, la revolución peruana ha generado el pensamiento Gonzalo porque el Presidente Gonzalo es la más alta expresión de la fusión de la ideología universal con la práctica concreta de la revolución peruana. La construcción política. Se forja la militancia en Programa y Estatutos; línea política general y línea militar como centro, líneas específicas; política general, políticas específicas; y, planes militares del Partido. La política siempre debe estar al mando y es nuestro punto fuerte. La construcción orgánica. Lo orgánico sigue a lo político y teniendo en cuenta que no basta línea simultáneamente hay que montar los aparatos orgánicos viendo la estructura orgánica, el sistema orgánico y el trabajo partidario. Estructura orgánica, el Partido se basa en el centralismo democrático, principalmente en el centralismo; se establecen dos redes partidarias armadas, la red territorial que abarca una jurisdicción y la red móvil cuya estructura se desplaza. Sistema orgánico es la distribución de las fuerzas en función del punto principal y secundarios donde actua la revolución. Trabajo partidario es la relación entre trabajo secreto que es principal y trabajo abierto; importancia de las cinco necesidades: el centralismo democrático, la clandestinidad, la disciplina, la vigilancia y el secreto, particularmente del centralismo democrático. La dirección. Somos plenamente conscientes de que ninguna clase ha logrado en la historia instaurar su dominio si no ha promovido a sus jefes políticos, a sus representantes de vanguardia, capaces de organizar el movimiento y dirigirlo; y el proletariado peruano en medio de la lucha de clases ha generado la dirección de la revolución y su más alta expresión: la Jefatura del Presidente Gonzalo que maneja la teoría revolucionaria, tiene un conocimiento de la Historia y una comprensión profunda del movimiento práctico; quien en dura lucha de dos líneas ha derrotado al revisionismo, al liquidacionismo de derecha e izquierda, a la línea oportunista de derecha y al derechismo; ha reconstituido el Partido, lo dirige en guerra popular y ha devenido en el más grande marxista-leninista-maoísta viviente, gran estratega político y militar, filósofo; maestro de comunistas, centro de unificación partidaria. La reacción tiene dos principios para destruir la revolución: aniquilar dirección y aislar la guerrilla de las masas pero en síntesis su problema es aniquilar dirección pues es la que permite mantener el rumbo y materializarlo. Nuestro Partido ha definido que la dirección es clave y es obligación de todos los militantes bregar constantemente por defender y preservar la dirección del Partido y muy especialmente la dirección del Presidente Gonzalo, nuestra jefatura, contra cualquier ataque dentro y fuera del Partido y sujetarnos a su dirección y mando personal enarbolando las consignas de "Aprender del Presidente Gonzalo" y "Encarnar el pensamiento Gonzalo". Nos basamos en la dirección colectiva y en la dirección unipersonal y tenemos en cuenta el papel de los dirigentes y cómo a través de la guerra popular, en medio de la renovación de dirección, se está cuajando y templando la dirección de la revolución. Mantenemos el principio de que el mando nunca muere. Los marxista-leninista-maoístas, pensamiento Gonzalo nos sujetamos al Presidente Gonzalo y encarnamos el pensamiento Gonzalo. Lucha de dos líneas. El Partido es una contradicción dónde se expresa la lucha de clases como lucha de dos líneas entre izquierda y derecha. La lucha de dos líneas es la que motoriza el desarrollo del Partido, de su manejo justo y correcto deriva que la izquierda se imponga. Combatimos la conciliación porque amamanta la derecha; y el principio de la crítica y la autocrítica, todos, militantes, cuadros, dirigentes deben practicarla, combatientes y masas también, asumiendo la filosofía de la lucha y yendo contra la corriente, teniendo en cuenta que el Comité Central es el vórtice de la tormenta, pues, ahí se expresa la más aguda contienda de clases. El manejo justo y correcto que hace el Presidente Gonzalo de la lucha de dos líneas ha servido para mantener la unidad del Partido y desarrollar la guerra popular; tiene en general al revisionismo como peligro principal aunque en el Partido sigue desenvolviéndose contra criterios, opiniones, actitudes y posiciones de derecha, como lucha en el seno del pueblo. Es necesario organizar la lucha de dos líneas para imponer la línea del Partido, mediante un plan para desarrollarla organizadamente. Trabajo de Masas. Aplicamos el principio de: "Las masas hacen la historia". El Partido dirige la lucha de masas en función del Poder que es la principal reivindicación; desenvolvemos el trabajo de masas en y para la guerra popular basándonos en las masas básicas, obreros y campesinos principalmente pobres, en la pequeña burguesía y neutralizamos o ganamos a la burguesía media según las condiciones. Nos sujetamos a la ley de incorporación de las masas y a la única táctica marxista de "ir a lo hondo y profundo", educarlas en la violencia revolucionaria y en la lucha implacable contra el revisionismo. El trabajo de masas del Partido se hace a través del Ejército y se moviliza, politiza, organiza y arma a las masas en nuevo Poder en campo y en Movimiento Revolucionario de Defensa del Pueblo en ciudades. En síntesis, por la brega y dirección del Presidente Gonzalo tenemos un Partido marxista-leninistamaoísta, pensamiento Gonzalo, Partido de nuevo tipo que dirige la guerra popular y ha abierto la perspectiva de la conquista del Poder total en el país sirviendo a la revolución mundial. 2. SOBRE LA CONSTRUCCION DEL EJERCITO GUERRILLERO POPULAR - Carácter del Ejército. El Ejército Guerrillero Popular es un ejército de nuevo tipo que cumple las tareas políticas de la revolución establecidas por el Partido. Aplica el principio maoísta "El Partido manda al fusil y jamás permitiremos que el fusil mande al Partido". Cumple tres tareas: combatir que es principal, como corresponde a la forma principal de organización; movilizar, es muy importante y por la cual se cumple el trabajo de masas del Partido, politiza, moviliza, organiza y arma a las masas; producir, aplicando el auto sostenimiento, buscando no ser carga para las masas. Es un ejército en lo fundamental campesino dirigido absolutamente por el Partido. El Presidente Gonzalo nos enseña: "Las legiones de hierro del Ejército Guerrillero Popular se sustentan en el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento guía, que es la base de su invencibilidad; y son forjados en la vida dura, el sacrificio y el reto a la muerte, que las elevan hasta la heroicidad revolucionaria". - El Ejército Guerrillero Popular. Marx planteó que el proletariado tenía necesidad de un ejército propio y la tesis del armamento general del pueblo. Lenin creó el Ejército Rojo y estableció la tesis de la milicia popular con funciones de policía, ejército y administración. El Presidente Mao desarrolló la construcción de las fuerzas armadas revolucionarias con la inmensa participación de las masas. La guerra popular concreta su carácter de masas en tres grandes coordinaciones. El Presidente Gonzalo basándose en estas tesis marxista-leninista-maoístas y teniendo en cuenta la situación específica de la guerra popular planteó la conformación de un Ejército Guerrillero Popular. Desde la Preparación de la guerra popular el Presidente Gonzalo concibió la necesidad de construir la forma principal de organización para llevar adelante la guerra popular, derrotar al enemigo y construir el nuevo Estado. Y el 3 de diciembre del 79 se acordó conformar la "I Compañía de la I División del Ejército Rojo"; en 1980, con el Inicio, se plasmaron los destacamentos y pelotones y nos propusimos el pasar de masas desorganizadas a masas militarmente organizadas. El 83 necesitábamos dar un salto en la construcción de las fuerzas armadas revolucionarias, se nos presentó un gran crecimiento de las milicias populares lo que demostraba cómo las masas querían combatir; además, las fuerzas armadas reaccionarias habían ingresado a combatirnos. Así en el CCA de marzo de ese año, el Presidente Gonzalo propuso plasmar el Ejército Guerrillero Popular. ¿Por qué Ejército?, porque era una necesidad política para enfrentar al enemigo y desarrollar la guerra popular. Todo el Partido lo acordó en medio de la lucha de dos líneas contra el derechismo que se opuso a la incorporación de las milicias al Ejército. ¿Por qué guerrillero?, porque aplica la guerra de guerrillas en el hito de "Desarrollar la guerra de guerrillas"; no es un ejército regular sino guerrillero pero sus características permitirían incluso, si fuera necesario, desenvolverse como una especie de ejército regular. Por qué popular?, porque está conformado por las masas populares, por los campesinos principalmente pobres; sirven al pueblo, pues, representan sus intereses. Una situación muy importante es cómo el Presidente Gonzalo concibe el Ejército Guerrillero Popular incorporando a las milicias populares, conformado por tres fuerzas: principales, locales y de base, que actúa en campo principal y en ciudad como complemento; esto es un gran paso hacia el mar armado de masas. - La construcción del Ejército Guerrillero Popular. La formación del ejército se basa en los hombres y no en las armas; nuestro ejército está compuesto por campesinos principalmente pobres, proletariado y pequeña burguesía; arranca las armas al enemigo y también usa toda clase de armas elementales. Nuestra consigna es “¡Conquistar armas!" al enemigo pagando todo el costo necesario. La formación debe diferenciarse de la construcción. La construcción ideológico-política es principal, se basa en el marxismo-leninismo- maoísmo, pensamiento Gonzalo; en las líneas políticas y militares del Partido, estando bajo dirección partidaria todo su trabajo político y de masas. Se organiza Partido en todos los niveles del ejército, se aplica el doble mando: político y militar, y se desenvuelve la lucha de dos líneas entre la línea militar proletaria y la línea militar burguesa. Además, el ejército revolucionario demanda la conformación de tres Departamentos: Político, Militar y Logístico. La construcción militar es importante. Armado con la teoría y práctica de la guerra popular, la línea militar y los planes militares del Partido, se organiza en pelotones, compañías y batallones en el campo y en las ciudades en destacamentos especiales, destacamentos y milicias populares. Esta construcción se basa también en la lucha de dos líneas. Las tres fuerzas: principales, locales y de base cumplen un papel específico como sostén del nuevo Estado. "¡Desarrollar las compañías, fortalecer los pelotones apuntando a batallones!" sigue siendo una consigna válida. La instrucción es necesaria e indispensable. Apunta a elevar la belicosidad; el ensayo no se puede soslayar y el don de mando es clave para la acción. El adiestramiento especializa, eleva las formas de lucha. La organización del valor tiene carácter de clase y potencia la belicosidad porque se combate con desinterés absoluto y pleno convencimiento de la justicia de nuestra causa. En síntesis, el Presidente Gonzalo ha creado el Ejército Guerrillero Popular como ejército de nuevo tipo, ha establecido la línea de su construcción basado en el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento Gonzalo para que cumpla las tareas políticas de la revolución. Es un ejemplo ante el mundo y sirve a la revolución mundial. 3. SOBRE LA CONSTRUCCION DEL NUEVO ESTADO. - Carácter del nuevo Estado. El Poder es la tarea central de la revolución y el Frente es el tercer instrumento; así aplicando la magistral tesis del Presidente Mao "Sobre la Nueva Democracia", el Presidente Gonzalo nos enseña que concebimos una dictadura conjunta que plasma la República Popular de Nueva Democracia. Partiendo de la ligazón entre Estado-Frente, se concreta el Frente Revolucionario de Defensa del Pueblo a partir de Comités Populares en el campo y en las ciudades simplemente como Movimiento Revolucionario de Defensa del Pueblo. El nuevo Estado lo construimos en el campo hasta finalmente plasmar el Poder en todo el país. Como sistema de estado es una dictadura conjunta de obreros, campesinos, principalmente pobres, y pequeña burguesía que respeta los intereses de la burguesía media bajo dirección del proletariado representado por el Partido que aplica su hegemonía a través de la alianza obrero-campesina. Como sistema de gobierno funciona a través de Asambleas Populares. - El nuevo Estado y la fluidez de la guerra. La construcción del nuevo Estado sigue la fluidez de la guerra popular, puede expandirse o contraerse, desaparecer en un lugar y aparecer en otro. Es fluido. Como nos enseña el Presidente Mao: "Nuestra República democrática de obreros y campesinos es un Estado, pero actualmente no lo es en el pleno sentido de la palabra... nuestro Poder está todavía muy lejos de tener la forma completa de Estado... nuestro territorio es aún muy pequeño y el enemigo sueña constantemente con aniquilarnos". Tener siempre en cuenta el sistema de Bases de Apoyo, de zonas guerrilleras, de zonas de operaciones y puntos de acciones, pues constituyen el ámbito en el cual se desenvuelve el nuevo Estado y es clave para mantener el rumbo estratégico; dentro de tal ámbito se mueve como su columna vertebral, el EGP, dirigido por el Partido. - La construcción del nuevo Estado. "¡Fortalecer los Comités Populares, desarrollar las Bases y hacer avanzar la República Popular de Nueva Democracia!", es la consigna que sigue guiando su construcción. Luchamos por un Poder para el proletariado y el pueblo no por un poder personal. Estamos en contra del errantismo y del soslayamiento de las Bases de Apoyo. El nuevo Estado se construye en medio de la guerra popular y sigue un proceso de desarrollo específico, construyéndose en nuestro caso primero en el campo hasta cercar las ciudades y plasmarlo en todo el país; proceso en el que va destruyéndose el viejo Estado y expresándose la contradicción viejo Estado-nuevo Estado; haciendo fracasar todos los planes políticos y militares de la reacción e incorporando a las masas. El Presidente Gonzalo en la Conferencia Nacional Ampliada de noviembre de 1979 estableció la relación entre Frente-Nuevo Estado aplicando la teoría del Presidente Mao; y en la I Escuela Militar de Abril de 1980, nos dijo: "...en nuestra mente, en nuestro corazón, en nuestra voluntad va invívito el Poder popular, lo llevamos nosotros... Camaradas, no olvidemos el Poder popular, el Estado de la clase obrera; el Estado de obreros y campesinos marcha con nosotros, lo llevamos en la punta de los fusiles, anida en nuestra mente, palpita en nuestras manos y estará con nosotros siempre ardiendo en nuestro corazón. No lo olvidemos nunca, es lo primero que debe estar en la mente. Camaradas, nacerá frágil, débil porque será nuevo pero su destino será desarrollarse a través del cambio, de la variación, de la fragilidad, como una tierna planta. Las raices que pondremos desde el inicio que sean el futuro de un vigoroso Estado. Todo eso camaradas, comienza a nacer de las más modestas y simples acciones que mañana hemos de iniciar". En 1980 surgen los Comités de Reparto, germen del nuevo Estado; en 1982 surgen los primeros Comités Populares los que se van a multiplicar a fines de ese mismo año, llevando a la reacción a disponer el ingreso de las fuerzas armadas reaccionarias a combatir la guerra popular pues vió amenazado su Poder. En 1983 acordamos el Gran Plan de Conquistar Bases una de cuyas tareas era la conformación del Comité Organizador de la República Popular de Nueva Democracia. A partir de allí hemos seguido la lucha entre el restablecimiento del viejo Poder por el enemigo y el contrarrestablecimiento del nuevo Poder, aplicando la defensa, desarrollo y construcción. Así, el nuevo Poder atravesando el baño de sangre se desarrolla, los Comités Populares se están templando en duro combate contra el enemigo regándose con la sangre de las masas campesinas, de los combatientes y de los militantes. En el Comité Central Ampliado de Marzo 83, el Presidente Gonzalo desarrolla más la línea de construcción del Frente-Nuevo Estado. Plantea los niveles en que se organiza el nuevo Estado: Comités Populares; Bases de apoyo y República Popular de Nueva Democracia. Las funciones de la Base de apoyo y del Comité Organizador de la República Popular de Nueva Democracia son de dirección, planificación y organización; y cada Base debe elaborar su propio Plan específico. Establece que los Comités Populares son concreciones del nuevo Estado, son Comités del Frente Unico; dirigidos por Comisarios que asumen funciones estatales por encargo, elegidos en la Asambleas de Representantes y sujetos a remoción. Son hasta hoy, clandestinos, marchan con Comisiones, dirigidos por el Partido aplicando los "tres tercios": un tercio de comunistas, un tercio de campesinos y un tercio de progresistas y sostenido por el Ejército; aplican la dictadura popular, la coerción y la seguridad ejerciendo con firmeza y decisión la violencia a fin de defender al nuevo Poder contra sus enemigos y proteger los derechos del pueblo. El conjunto de Comités Populares constituyen la Base de Apoyo y el conjunto de Bases de Apoyo es el collar que arma la República Popular de Nueva Democracia, hoy en formación. Hemos pasado de Conquistar Bases a Desarrollar Bases que es la estrategia política actual. Tenemos que sembrar más y más nuevo Poder por lo cual tenemos que aplicar las cinco formas establecidas máxime hoy cuando las condiciones se enrumban en perspectiva a la conquista del Poder en todo el país. En síntesis, el Presidente Gonzalo ha establecido la línea de construcción del Nuevo Estado y dos repúblicas, dos caminos, dos ejes se contraponen; hemos avanzado en establecer nuevas relaciones sociales de producción y la República Popular de Nueva Democracia en formación brilla desafiante contra el viejo Estado y se abre la perspectiva de la conquista del Poder total. Este ejemplo alienta a los revolucionarios del mundo y muy especialmente al proletariado internacional. Como marxista-leninista-maoístas, pensamiento Gonzalo, principalmente pensamiento Gonzalo asumimos la línea de la construcción de los tres instrumentos de la revolución, del Partido Comunista del Perú, forma más alta de organización y primera sociedad política; del Ejército Guerrillero Popular, forma principal de organización y del Frente-Nuevo Estado, tarea central de la revolución. Instrumentos que al fragor de la guerra popular se vienen construyendo en nuestra patria cruzando el rio de sangre en el que heroicamente los comunistas, combatientes y masas dan su vida por plasmar la línea política justa y correcta establecida por el Presidente Gonzalo, y que aquéllos que sobrevivan asuman la bandera de proseguirla al servicio de nuestra meta el comunismo. ¡VIVA LA MILITARIZACION DEL PARTIDO COMUNISTA DEL PERU! ¡VIVA EL EJERCITO GUERRILLERO POPULAR! ¡VIVA LA REPUBLICA POPULAR DE NUEVA DEMOCRACIA EN FORMACION! ¡POR LA CONSTRUCCION CONCENTRICA DE LOS TRES INSTRUMENTOS! 1988 PARTIDO COMUNISTA DEL PERÚ LINEA DE MASAS INTRODUCCION El Presidente Gonzalo enarbolando, defendiendo y aplicando el marxismo-leninismo- maoísmo ha establecido la línea de masas del Partido. Parte reafirmándose en la concepción proletaria que debe tenerse para enjuiciar el problema de las masas; plantea el papel político que tienen las masas, la lucha por el Poder a través de la guerra popular y que la lucha reivindicativa debe servirla; cuáles son las masas a las que debemos ir, a las masas básicas principalmente, obreros y campesinos y a los diversos frentes según sus reivindicaciones específicas; aplicando la única táctica marxista de ir a lo hondo y profundo, educarlas en la violencia revolucionaria y en la lucha contra el oportunismo. Especifica que el trabajo de masas del Partido que dirige la guerra popular se hace a través del ejército; señala la importancia de los organismos generados, una de las formas de organizarlas; y que hacemos el trabajo de masas en y para la guerra popular. 1. REAFIRMACION EN EL PRINCIPIO "LAS MASAS HACEN LA HISTORIA" Se reafirma en el poderoso principio marxista "Las masas hacen la historia" y nos enseña a forjarnos en nuestra concepción comunista en lucha contra la burguesa de centrar en el individuo como eje histórico. Dice: "Las masas son la luz misma del mundo... ellas son la fibra misma, el latido inagotable de la historia... cuando hablan todo se estremece, el orden empieza a temblar, las altas cumbres se agachan, las estrellas tienen otro rumbo porque las masas hacen y pueden todo". Esta reafirmación tiene gran importancia ya que es parte de la concepción del proletariado, sustenta la línea de masas y se aplica en todo, permite juzgar desde la cuestión internacional hasta las políticas específicas, es pues un problema ideológico. Ningún hecho histórico, ningún movimiento transformador, ninguna revolución puede hacerse sin la participación de las masas. Se aplica al Partido pues éste tiene carácter de masas y no puede desligarse de ellas si no se extingue o se diluye y, las masas para garantizar el rumbo de su lucha deben ser dirigidas por el Partido. El Partido tiene masas: los militantes, para quienes como comunistas este principio es una necesidad encarnarlo y en brega constante derrotar el podrido individualismo que no es concepción proletaria, en nuestro proceso de guerra popular se observa cómo es que ésta coadyuva poderosamente a tal transformación; además un principio de dirección es "de las masas a las masas". Para la guerra popular también rige, pues se trata de una guerra de masas, las masas son la fuente misma de la guerra popular y con esta concepción marxista hacemos la guerra popular. Acentúa particularmente en la rebelión de las masas hacedoras de la historia, nos dice: "Desde los viejos tiempos las masas viven sujetas a opresión y explotación y siempre se han rebelado, es una larga e inagotable historia... Desde siempre, desde que combaten las masas han clamado por organizar la rebelión, su armamento, su levantamiento, que se las dirija, que se las conduzca. Siempre ha sido así y seguirá siendo y después que haya otro mundo seguirá siendo sólo que de otra manera". "Las masas claman por organizar la rebelión por tanto el Partido, sus dirigentes, cuadros y militantes tienen una obligación hoy perentoria, un destino: organizar el Poder desorganizado de la masa y sólo se hace con las armas en la mano. Hay que armar a la masa poco a poco, parte por parte, hasta el armamento general del pueblo y cuando eso llegue no habrá explotación sobre la Tierra". Aquí expresa su absoluta convicción en la masa, en su necesidad histórica y política de rebelarse, de armarse, en la exigencia que se las dirija y organice; emplaza a los Partidos Comunistas a cumplir la demanda que viene desde Marx y Engels quien nos enseñó dos poderes hay sobre la Tierra: la fuerza armada de la reacción y la masa desorganizada. El Presidente Gonzalo nos plantea que si ese Poder lo organizamos lo que es potencia deviene en acto, y lo que es posibilidad realidad, que todo es un castillo de naipes si no se sustenta en la masa y que en concreto el problema es pasar de masas desorganizadas a masas militarmente organizadas. Organizar a las masas con las armas en la mano, pues ellas claman organizar la rebelión, por tanto, aplicando la guerra popular que es la forma principal de lucha, organizarlas para la toma del Poder dirigida por el Partido. Se compagina plenamente con la contradicción principal en el mundo hoy, con la ofensiva estratégica de la revolución mundial, con la tendencia principal en el mundo, la revolución; apunta además a plasmar lo que Marx señaló, el armamento general del pueblo a fin de garantizar el triunfo de la revolución y a conjurar la restauración, pensamiento de gran perspectiva que nos lleva hasta el Comunismo; solamente organizando ese mar armado de masas se podrá defender lo conquistado y desarrollar las revoluciones democráticas, socialistas y culturales. Rechaza a quienes plantean que las masas no quieren hacer la revolución o que las masas no apoyarán la guerra popular; nos enseña que el problema no está en las masas porque éstas están prestas a rebelarse sino en que los Partidos Comunistas asuman su obligación de dirigirlas y levantarlas en armas. Deslinda con aquellas posiciones que hoy día sostienen "la acumulación de fuerzas", que plantean el aglutinar parsimoniosamente a las masas a través del uso de los llamados "espacios democráticos" o uso de la legalidad, acumulación de fuerzas que no corresponde al momento de la lucha de clases internacional y nacional, que no cabe en el tipo de revolución democrática que desenvolvemos y que en la revolución socialista tendrá otros caracteres ya que vivimos una situación revolucionaria en desarrollo desigual en el mundo. Es opuesto y condena las posiciones oportunistas de llevar a las masas a la cola de la gran burguesía, por un camino electorero o por una acción armada bajo el mando de una superpotancia o potencia. Así, pues, enarbola la gran divisa del Presidente Mao "La rebelión se justifica" y concibe que el problema de masas hoy está en que los Partidos Comunistas movilicen, politicen, organicen y armen a las masas para tomar el Poder especificando la guerra popular. Especifica la necesidad de organizar científicamente la pobreza, el Presidente Gonzalo remarca que los más prestos a rebelarse, quienes más claman organizar la rebelión son los más pobres de las masas, y que hay que prestar particular atención a la organización revolucionaria, científica de las masas; ésto no va contra el criterio de clases, pues nos demuestra que la pobreza tiene su origen en la explotación, en la lucha de clases: "Existe miseria y está junto a fabulosa riqueza, hasta los utópicos lo sabían, que ambas andan juntas: ingente y desafiadora riqueza junto a denunciadora y clamante pobreza. Y es así porque la explotación existe". Tesis entroncada con Marx quien descubrió la potencia revolucionaria de la pobreza y la necesidad de organizarla científicamente, esto es para la revolución, quien nos enseñó que el proletariado no teniendo propiedad es clase creadora y única que destruirá la propiedad y se destruirá a sí misma como clase. Con Lenin, quien nos enseña que la revolución social no surge de los programas sino del hecho de que millones de personas dicen antes de vivir padeciendo de hambre preferimos morir por la revolución. Y con el Presidente Mao, quien concibe que la pobreza impulsa el anhelo de cambio, de acción, de revolución, que es una hoja de papel en blanco, desnuda y en ella se pueden escribir las palabras más nuevas y hermosas. Toma en cuenta las condiciones específicas de nuestra sociedad y nos enseña que, en el Perú hablar de masas es hablar de masas campesinas, de campesinado pobre, que los años 20, 40, 60 del presente siglo demuestran que son las luchas campesinas las que remecen la base misma del Estado pero faltándoles la guía: la ideología marxista-leninista-maoísta, pensamiento Gonzalo, el motor: la guerra popular y la dirección justa y correcta del Partido Comunista, no pudieron enrumbarse correctamente hacia el Poder y su sangre derramada fue usada para aherrojarlas y amoldarlas al viejo orden; baños de sangre inolvidables que dejan extraordinarias lecciones. Los 80 muestran que ha empezado la verdadera movilización de las masas campesinas armadas organizadas en Partido Comunista, Ejército Guerrillero Popular y están dando su preciosa sangre por el nuevo Poder que florece y se desarrolla a través de la guerra popular. Esta particularidad es estratégica porque permite comprender que la revolución en el mundo se define por el lado de los más pobres, que constituyen la mayoría y son los más prestos a rebelarse y que a su vez en cada revolución debe irse a los más pobres aplicando los tres requisitos que requiere organizar la pobreza científicamente: ideología, guerra popular y Partido Comunista. Así, nos dice: "La pobreza es una fuerza impulsora de la revolución, los pobres son los más revolucionarios, la pobreza es el más hermoso canto; ...la pobreza no es un baldón, es honra, nuestras serranías con sus masas son la fuente de nuestra revolución que con sus manos dirigidas por el Partido Comunista va a construir un nuevo mundo; guía: la ideología, motor: la lucha armada, dirección: el Partido Comunista". 2. LO PRINCIPAL DEL TRABAJO DE MASAS ES EL PODER, LA LUCHA REIVINDICATIVA ES NECESARIA Basándose en el Presidente Mao quien generaliza la violencia revolucionaria como ley universal para la toma del Poder y establece que la forma principal de lucha es la lucha armada y la forma principal de organización es la fuerza armada; que antes del estallido de una guerra, todas las luchas y organizaciones deben servir a prepararla y una vez iniciada la guerra deben servir a desarrollarla, el Presidente Gonzalo nos enseña que en el trabajo de masas la lucha por el Poder y la lucha reivindicativa son dos caras de una misma moneda siendo la lucha por el Poder la primera y principal reivindicación de la masa. Organizar a las masas para que vayan más allá de lo que permite el ordenamiento legal existente, que luchen por destruir el viejo orden y no para mantenerlo, esto es en los tres instrumentos de la revolución: Partido a donde concurren los menos, Ejército van más y en nuevo Estado-Frente que es la base que aglutina a las masas por saltos y progresivamente, en el campo en Comités Populares y en las ciudades en Movimiento Revolucionario de Defensa del Pueblo. Romper así la tradición electorera frentista que aplican los revisionistas y oportunistas de soslayar la lucha del campesinado y en las ciudades no tomar lo principal, esto es, el Poder por la guerra. Centrar en el Poder exige también organizarlas en las diversas formas nuevas que demandan las nuevas formas de lucha, pues la guerra imprime cambios en la lucha y organización de las masas. Como Lenin nos enseña, en épocas de revolución hay que conformar organizaciones nuevas e ir contra los viejos dirigentes que lo que buscan es vender la revolución por acomodarse dentro del sistema reaccionario. Ya no se puede, pues, usar las viejas formas de lucha y de organización de las masas. La lucha por el Poder como principal no quiere decir que desde el comienzo vamos a incorporar a las masas de una sola vez, pues el Presidente Mao nos enseña que desarrollando Bases de apoyo y fuerza armada es que se generará el auge de la revolución; tiene pues, que ver con la ley de incorporación de las masas a la revolución, establecida en el Partido en el II Pleno de 1980, incorporación que será por saltos y progresivamente; a más guerra popular mayor incorporación de las masas, pues, la guerra popular es un hecho político que va machacando con acciones contundentes las ideas en la mente de los hombres, quienes poco a poco van entendiendo su único y verdadero camino, desarrollando así su conciencia política; la guerra popular convoca a todos los revolucionarios y al desarrollarse se abre camino a sí misma. Las masas están ávidas de política y a los comunistas nos incumbe organizarlas y dirigirlas. En todas partes las masas tienen problemas concretos y debemos preocuparnos por ellos y atenderlos, el trabajo de masas se hace dentro de la lucha de clases y no al margen de ella. Si nosotros no lo hacemos los reaccionarios y revisionistas los utilizarán para sus fines ya sea desarrollar fascismo y corporativizarlas o para entregar sus luchas a otro amo imperialista, son dos voluntades distintas y opuestas. Las masas buscan la voz de los que afirman no de los que dudan. En nuestro Partido, en el Inicio, el Presidente Gonzalo demandó que nunca nadie dude de las masas, combatir a aquellos ciegos y sordos a la voz de las masas, escuchar su más leve rumor y atender sus problemas concretos y cotidianos; a las masas nunca se las engaña, ni se las fuerza, deben saber los riesgos que han de afrontar, convocarlas a la cruenta y larga lucha por el Poder pero teniendo tal fin éstas comprenderán que será una lucha victoriosa y necesaria. Así la lucha por el Poder es principal pero no se puede separar de la lucha reivindicativa, son dos caras de una misma moneda y esta última es lucha necesaria. Cómo concebir la lucha reivindicativa? Se nos imputa no tener línea específica para la lucha económica y política de las masas; lo que pasa es que aplicamos otra manera, otra forma, otra política contraria a la oportunista o revisionista, una manera nueva y distinta a la tradicional. El Presidente Gonzalo nos enseña que la lucha reivindicativa es la otra cara de una moneda, que tiene el Poder al anverso y es totalmente erróneo separarlas, hablar solamente de lucha reivindicativa es revisionismo. Y especificando la tesis de Marx a nuestra sociedad nos dice: "La crisis nos plantea dos problemas: primero, cómo defender lo conquistado ya que, si bien en las crisis las conquistas se pierden más se perdería cuanto menos se las defienda; ésa es la necesidad de la lucha reivindicativa..., lucha económica y lucha política..., además va forjando a la clase y a los trabajadores en su lucha por el Poder. Segundo, cómo acabar con las crisis? No se podrá acabar con ellas si no se acaba con el orden social predominante... necesidad de la lucha revolucionaria para que sirva a la toma del poder por la lucha armada bajo la dirección de su Partido... no se puede separar una de la otra. La relación de ambos problemas se concreta en desarrollar la lucha reivindicativa en función del Poder". Para llevar adelante la lucha reivindicativa se utiliza el sindicato y la huelga que es la forma principal de la lucha económica del proletariado, desarrollándola como guerra de guerrillas que educa a la clase en la lucha por el Poder y elevándola a través de acciones armadas concretas que potencia esta forma de lucha dándole una calidad más alta. Así, hay que desarrollar la lucha reivindicativa en función del Poder, éste es un principio político del trabajo de masas. 3. A QUE MASAS IR? Hay que partir del criterio de clase para resolver a qué masas ir; hay que ver que éstas se organizan según los intereses comunes de las clases a que pertenecen; esto es muy importante, nos enseña el Presidente Gonzalo, pues, sirve para combatir a quienes pretenden separar masas de clases con el cuento de la "unidad" y lo que hacen es traicionar los verdaderos intereses de las masas traficando con sus luchas. También porque permite comprender que las masas son siempre arena de contienda y burguesía y proletariado pugnan por dirigirlas y sólo el Partido Comunista es el único capaz de dirigirlas porque es el único que puede representar y bregar por sus intereses; quienes hablan de "democracia de masas" o montan organismos de masas abiertos como si fueran forma de Poder y sin violencia no mantienen sino posiciones burguesas que niegan la dirección del proletariado, su dictadura. Partir del criterio de clases tiene que ver con el carácter de la revolución, con las clases que conforman el pueblo y que deben ser unidas bajo dirección del proletariado; en nuestro caso de revolución democrática el proletariado dirigente, el campesinado principal, la pequeña burguesía firme aliado y la burguesía media, dual, por tanto las masas básicas a las cuales hay que ir son el proletariado y el campesinado principalmente pobre, a la pequeña burguesía y también a la burguesía media. Teniendo en cuenta las reivindicaciones específicas de las masas, debe diferenciarse cuáles son los sectores de las masas que sufren más opresión a fin de organizarlas para que luchen por arrancar conquistas y resolver su contradicción específica. Se refiere a los frentes de las masas en los cuales hay que trabajar; son los obreros, el proletariado, clase dirigente de todas las revoluciones, clase cuyo objetivo político principal y decisivo es la conquista del Poder por la guerra popular para emanciparse, emancipar a las demás clases y finalmente destruirse como clase, tiene como reivindicaciones específicas arrancar conquistas y derechos como salario, jornada y condiciones de trabajo. Para lo cual hay que desarrollar el movimiento obrero, sus luchas, movilizaciones, marchas, agitaciones, huelgas con acciones armadas, "preocuparse por los problemas fundamentales de la clase y también de los trabajadores, de sus problemas generales y concretos por los cuales cotidianamente combaten". Los campesinos que siendo la fuerza principal, especialmente los campesinos pobres luchan por la conquista de la tierra por medio de las armas bajo la dirección del Partido Comunista, no verlo así lleva a "toma de tierras" y amoldarse al viejo orden. Desarrollar más el movimiento campesino aplicando los "tres con" vivir, trabajar y luchar con ellos y hacerlos campesinos con mente proletaria. Las mujeres que son la mitad del mundo y desarrollar el movimiento femenino por la emancipación de la mujer, tarea que es obra de las mujeres mismas pero bajo la dirección del Partido; combatir la tesis burguesa de la liberación de la mujer. Ellas luchan contra el alza constante del costo de vida que golpea la integridad física de la clase y del pueblo; movilizar a las mujeres obreras, campesinas, intelectuales, etc... . Los intelectuales para que cumplan su papel de intelectuales revolucionarios al servicio del proletariado, del campesinado, en la guerra popular; dentro de ellos están los estudiantes secundarios, universitarios, profesionales, etc.; ver sus reivindicaciones específicas, que defiendan lo conquistado y apunten a una nueva cultura nacional, científica y de masas, haciéndolos conscientes que sólo lo lograrán con la revolución. Movilizar a las masas pobres de las ciudades que están en los barrios y las barriadas, contra el hambre y la miseria, que combatan por el programa de la revolución, convocarlos a la guerra popular, que arranquen conquistas y derechos cada día más conculcados; no permitir que sean golpeados impunemente y que aprendan a defenderse, que resistan a la agresión del enemigo usando todos los medios de que disponen; aplicar el "Combatir y resistir!", que es consigna común para la clase. Movilizar a los jóvenes para que participen directamente en las primeras líneas de las trincheras de combate de la guerra popular; jóvenes obreros, campesinos, estudiantes; que desarrollen sus luchas por un nuevo mundo, su derecho a educarse, contra la desocupación y demás males que los azotan. Hacer que los niños participen activamente en la guerra popular, pueden cumplir diversas tareas a través de las cuales vayan comprendiendo la necesidad de transformar el mundo, ellos son el futuro y a fin de cuentas quienes vivirán el nuevo mundo; cambiar su ideología y que adopten la del proletariado. 4. PERSISTIR EN LA UNICA TACTICA MARXISTA-LENINISTA- MAOISTA Partiendo de la tesis de Engels: "En un país de movimiento político y obrero tan antiguo hay siempre un montón colosal de basura tradicionalmente heredada que es preciso limpiar por grados"; que Lenin estableció: "La única línea marxista en el movimiento obrero mundial consiste en explicar a las masas que la escisión con el oportunismo es inevitable e imprescindible, en educarlas para la revolución en una lucha despiadada contra él"; y que el Presidente Mao señaló que se abre un período de lucha contra el imperialismo y el revisionismo, siendo el revisionismo una de las fuentes principales de guerras imperialistas y para los comunistas en general un peligro dentro del Partido. El Presidente Gonzalo llama a persistir en la única táctica marxista que implica cuatro cuestiones: Primero, barrer el montón colosal de basura que es el revisionismo y el oportunismo principalmente electorero, ninguno de estos revisionistas ni oportunistas, ni ninguno de sus congéneres puede representar ni menos defender a las masas, pues, así como ayer sólo defendieron a los explotadores de turno hoy son furgón de cola del gobierno aprista fascista y corporativo, arrastrando siniestramente en ese rumbo a las organizaciones gremiales de ellos dependientes. Todas estas organizaciones políticas y gremiales y sus dirigentes no representan al pueblo sino a esa costra de la aristocracia obrera, a la burocracia sindical y a los partidos obreros burgueses que siempre pretenden desviar a las masas de su camino y no son sino parte de ese montón colosal de basura que debe ser necesariamente barrido por partes y gradualmente como dijera Engels. Segundo, ir a lo hondo y profundo de las masas que constituyen la mayoría, que en nuestro país son los obreros y campesinos principalmente pobres, a la pequeña burguesía y también tener en cuenta la burguesía media; pero de éstas las que son básicas son obreros y campesinos principalmente pobres y a ellos principalmente debemos ir tanto en campo como en ciudad. Impulsar su propio movimiento, dirigirlo, movilizarlos por el Poder para así traer abajo y derrumbar el viejo Estado. Esta es la cuestión principal de la táctica. Así, en las masas es necesario distinguir la nata superficial que es la costra que sirve a la reacción, de las inmensas mayorías hondas y profundas que emergerán más y más hasta el barrimiento del caduco Estado peruano, más aún si una guerra popular viene desmoronando el viejo Estado peruano. Tercero, a las masas hay que educarlas en la guerra popular, en su teoría y práctica, pues, educarlas en la paz de las bayonetas es permitir que las sigan degollando; las masas ya no deben derramar su sangre impunemente para ser traicionadas por sus falsos dirigentes, para la capitulación, sino que esa preciosa sangre debe servir para la conquista del Poder para la clase y el pueblo. Cuarto, necesidad de lucha implacable contra el revisionismo y el oportunismo, combatirlo como peligroso cáncer dentro y fuera del Partido y en las propias masas si no éstas no concretarán su camino. Lucha que venimos librando desde la reconstitución del Partido y que hoy en plena guerra popular es más urgente e implacable por la forma crecientemente delatora en que actúan contra nosotros, el pueblo y la revolución, máxime si tras ellos opera el socialimperialismo dentro de su colusión y pugna con el imperialismo yanqui por la hegemonía mundial. Lo que es aplicable al revisionismo y oportunismo de toda ralea cualquiera sean sus representantes. Al respecto el Presidente Gonzalo nos dice: "Levantarse sobre esa miasma, esa superficie revisionista, oportunista, electorera y cabalgadora de las masas; lo principal es que debajo se agita la masa colosal y autoimpulsada sobre la cual operamos nosotros con el más poderoso instrumento de la rebelión que existe sobre la Tierra: la acción armada. Somos el grito que dice: `La rebelión se justifica' ". 5. LA ORGANIZACION DE LAS MASAS El Presidente Gonzalo partiendo de las bases ideológicas y políticas y simultaneamente la construcción organizativa, establece las formas de lucha y las formas de organización de las masas. Nos enseña cuál es el proceso seguido en el trabajo de masas del Partido: En la Constitución. Nos dice que Mariátegui sienta bases para el trabajo de masas del Partido y fija líneas específicas librando lucha de dos líneas contra el anarquismo que soslayaba la necesidad del Partido y también contra el Apra que negaba la concepción marxista-leninista y la capacidad de la clase para constituirse en Partido Comunista, centrando en Frente. En los años 30, muerto Mariátegui se abandona su línea y se centra en masas poniéndolas a la cola de la gran burguesía desviándolas hacia "frentismo", elecciones, revisionismo pese a los esfuerzos de la línea roja por oponerse; táctica errónea que duró más de 30 años. En la Reconstitución. El Presidente Gonzalo establece la línea de masas del Partido y las formas orgánicas, esto es un periodo de más de 15 años de dura lucha de dos líneas concretando saltos parciales. Así, en la primera política estratégica de la Reconstitución desenvuelve los inicios del trabajo de masas del Partido, todos los militantes en Ayacucho hacían trabajo campesino y con los obreros de construcción civil, por ejemplo, también con los intelectuales y masas pobres de los barrios; apoyó las invasiones de tierras, realizó eventos campesinos, siendo de trascendencia la I Convención Regional de Campesinos de Ayacucho donde se estableció el programa agrario; dirigió las históricas luchas del 20, 21 y 22 de Junio de 1969 de Ayacucho y Huanta, movilizando a las masas de estudiantes secundarios y padres de familia contra el decreto 006 de Velasco consiguiendo su derogación; organizó el Frente de Defensa del Pueblo de Ayacucho, reorganizó el Frente Estudiantil Revolucionario (FER), creó el Movimiento Femenino Popular (MFP), el Centro de Trabajo Intelectual Mariátegui (CETIM), el Frente Revolucionario de Estudiantes Secundarios (FRES) y el principal de todos el Movimiento de Campesinos Pobres (MCP). Así, sentó nuevas políticas en trabajo de masas, nuevas formas de lucha y nuevas formas orgánicas. En lucha de dos líneas lidió contra el revisionismo que llevaba a las masas al electorerismo, contra la violencia revolucionaria y a preservar el viejo orden; combatió a Patria Roja forma de revisionismo que traficaba como hasta hoy con el lema el "Poder nace del fusil", negaba la semifeudalidad centrando en pequeña burguesía, especialmente en estudiantes y maestros. Derrotó también al liquidacionismo de derecha que diluía la dirección del Partido en las masas, pregonaba legalismo y decían todo a través de la Confederación Campesina del Perú (CCP), que los campesinos no entendían confiscación sino expropiación y que debía profundizarse las medidas fascistas y corporativas de Velasco. En la segunda política estratégica de la Reconstitución, establece los Organismos Generados acordados en el III Pleno del 73: "Los movimientos propios como organizaciones generadas por el proletariado en los diferentes frentes de trabajo; sus tres caracteres 1) Adheridos a Mariátegui, 2) Organizaciones de masas y 3) Ceñidos al centralismo democrático". Fundamentó el carácter, contenido y papel de los Organismos Generados aplicando las tesis de Lenin sobre el Partido clandestino y puntos de apoyo del Partido en las masas, con la experiencia china sobre el trabajo abierto y secreto. Especificó la necesidad de que para desarrollar la Reconstitución del Partido éste debía abrirse más a las masas, política que para acordarse y plasmarse tuvo que derrotar al liquidacionismo de izquierda que partía de que el fascismo barre todo, aislaba al Partido de las masas apuntando a su extinción, menospreciaba al campesinado, al proletariado y pregonaba "basta línea". Derrotada la línea liquidacionista de izquierda los vínculos con las masas crecen y se va a formar las Escuelas Populares, escuelas de politización de las masas en la concepción y línea del Partido, que cumplieron un importante papel en la agitación y propaganda ligando la lucha reivindicativa con la lucha por el Poder; cumpliendo un estudio sistemático y planificado en base a esquemas, librando la lucha de dos líneas y desarrollando trabajo de masas. El avance del trabajo de los Organismos Generados llevó a que el Presidente Gonzalo plantee el desarrollarlos como un solo torrente, bajo la guía política de iniciar la lucha armada y se pasó a conformar el trabajo zonal y se estableció la Coordinación Metropolitana para las ciudades aplicando las tesis de Lenin para el trabajo abierto, del Presidente Mao sobre el trabajo en ciudad y que las luchas de las masas deben desenvolverse con razón, ventaja y límite. Su aplicación nos permitió mantener el Partido clandestino, emboscado en las masas, mover buen número de activistas, en corto tiempo distribuir la propaganda, facilitó la agitación y movilización bajo un plan centralizado por el Partido. Todo ésto es lo que llamamos "las tres patitas" para el trabajo de masas en las ciudades: Organismos Generados, Escuelas Populares y la Coordinación Metropolitana. Para el campo aplicamos las dos primeras formas. En la tercera política estratégica de la Reconstitución, el Partido desarrolló ampliamente su trabajo de masas en las zonas de la Sierra vinculándose al campesinado pobre principalmente y en las ciudades con el proletariado y las masas de barrios y barriadas. Los organismos generados han jugado un buen papel dentro de la culminación de la reconstitución y sentar bases para la lucha armada. Se desarrolló aun más las líneas específicas, así para el Movimiento de Obreros y Trabajadores Clasistas (MOTC) se plantean las 15 tesis básicas para el movimiento obrero; en el Movimiento de Campesinos Pobres (MCP) se les politiza en el programa agrario especificado a las nuevas condiciones; en el Movimiento Clasista Barrial (MCB) se publicó el Pliego de denuncias y demandas del pueblo; en el Frente Estudiantil Revolucionario (FER) se desarrolló más la tesis de la Defensa de la Universidad contra la corporativización; en el Frente Revolucionario Estudiantil Secundario (FRES) se impulsó la lucha de los secundarios por la educación popular; en el Movimiento Femenino Popular (MFP) se enarboló la tesis de la Emancipación de la mujer impulsando la movilización de las mujeres obreras, campesinas, barriales, estudiantiles. Además, se participó en el Sindicato Unico de Trabajadores de la Educación Peruana en el que por los años 70 se sentó su línea específica clasista. También se conformó la Federación Nacional de Docentes de la Universidad Peruana. Y todo este trabajo entró a una amplia movilización ideológica-política para iniciar la guerra popular. En síntesis, todo el trabajo de masas del Partido en la Reconstitución fue para preparar el inicio de la guerra popular, pues, como nos enseña el Presidente Mao antes de iniciar la guerra todo es para prepararla y una vez iniciada todo es para desarrollarla. El Presidente Gonzalo ha aplicado y desarrollado firmemente este principio. En la dirección de la guerra popular se va a dar un gran salto en el trabajo de masas del Partido, salto cualitativo, pues se plasma la forma principal de lucha: la guerra popular y la forma principal de organización: el Ejército Guerrillero Popular; esta altísima tarea es llevada adelante a través de la militarización del Partido y en lo que respecta al trabajo de masas significa que todo el trabajo de masas se hace a través del Ejército Guerrillero Popular, pues como es ejército de nuevo tipo tiene que cumplir tres tareas: el combatir, el movilizar y el producir; concebimos que la segunda tarea del ejército que es la movilización implica movilizar, politizar, organizar y armar a las masas, tarea que no se contrapone con el combatir que es la principal, ya que se aplica el principio de concentrar para el combate y dispersar para la movilización, aparte que las masas se van educando en la guerra; principio que rige en las tres fuerzas: principales, locales y de base en las que se especifican diversos grados de acciones. Para la movilización de las masas, el Partido a través del EGP lleva adelante las Escuelas Populares, conforma los Organismos Generados, los grupos de apoyo, política que aplica de una manera en el campo puesto que ahí se conforma nuevo Poder y de otra en las ciudades, pues allí se conforma Movimiento Revolucionario de Defensa del Pueblo apuntando a la futura insurrección. En el campo, ahí donde tenemos Poder, Bases de Apoyo, Comités Populares hacemos participar a toda la masa armadamente, organizada en Partido, Ejército y Frente-Estado. Si no se organiza a toda la masa el nuevo Poder no podrá sostenerse por mucho tiempo, no cabe masas amorfas ni Poder sin masas organizadas bajo la dirección del Partido. En las ciudades el trabajo de masas se cumple igualmente a través del Ejército y lo principal es la lucha por el Poder a través de la guerra popular, siendo la lucha reivindicativa en función del Poder necesario complemento; obviamente, con acciones armadas diversas a fin de concretar las formas nuevas de organización. Plasmamos el Movimiento Revolucionario de Defensa del Pueblo (MRDP), aglutinando masas obreras, campesinas, barriales, pequeñoburguesas; neutralizando a la burguesía media, apuntando a las fuerzas democráticas que estén por la guerra. El objetivo es llevar a las masas a la resistencia y a la elevación de sus luchas en guerra popular, para entrabar, socavar y perturbar al viejo Estado y servir a la futura insurrección preparando a las ciudades con guerra popular especificada como complemento. Usamos la doble política de desarrollar formas propias que es lo principal y penetrar todo tipo de organizaciones. Aplicamos Combatir y Resistir!. En cuanto a los Organismos Generados, en la guerra popular han expresado un desarrollo y sus caracteres han tenido una variación; siguen siendo organismos de masas del Partido y hoy en día: 1) Se guían por el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento Gonzalo; 2) Se rigen por el centralismo democrático y 3) Sirven a desarrollar la guerra popular. En el campo los Organismos Generados son militarizados, en las ciudades se puede aplicar diversos grados de militarización. Hoy tenemos los siguientes: MOTC, MCP, MCB, MFP, MJP, MIP; es importante el Socorro Popular del Perú que ha surgido en la guerra popular como parte de la lucha por los prisioneros de guerra y desaparecidos. Para el trabajo partidario en el extranjero también se ha conformado el Movimiento Popular Perú (MPP) con sus tareas específicas. Hoy a casi ocho años de guerra popular el Partido ha dado un gran salto en su trabajo de masas probando lo justo y correcto de desenvolver el trabajo de masas en y para la guerra popular. Como resultado de su aplicación nuestro pueblo está aprendiendo cada día más que la lucha de clases lleva necesariamente a la lucha por el Poder y es muy expresiva su participación creciente en la guerra popular la cual si bien todos no alcanzan a comprenderla ven en ella la esperanza concretada de su emancipación; están desarrollando sus luchas con formas nuevas de lucha y organización y la lucha de clases en el Perú se ha elevado hasta su forma principal: la guerra popular; las masas están organizadas en guerra popular y son base y sustento de ésta, están organizadas en Partido Comunista, en Ejército Guerrillero Popular y principalmente en Nuevo Poder, conquista principal de la guerra popular en el que obreros, campesinos y pequeña burguesía participan de éste y lo ejercen como nunca antes en la Historia. Saltos cualitativos que dan condiciones para el nuevo capítulo en el trabajo de masas en y para la guerra popular hacia la conquista del Poder en todo el país. Los marxista-leninista-maoístas, pensamiento Gonzalo asumimos el encarnar la línea de masas del Partido y aplicarla dando nuestras vidas para que el Partido tome el Poder en el país y sirva a la revolución mundial. ¡ENCARNAR LA LINEA DE MASAS DEL PARTIDO! ¡ORGANICEMOS EL CLAMOR DE LAS MASAS POR SU REBELION! ¡DAR EL GRAN SALTO EN LA INCORPORACION DE LAS MASAS EN Y PARA LA GUERRA POPULAR! 1988 PARTIDO COMUNISTA DEL PERÚ LINEA INTERNACIONAL INTRODUCCION El Presidente Gonzalo ha establecido la línea internacional del Partido Comunista del Perú y nos enseña que como internacionalistas proletarios partimos de desenvolver la revolución peruana como parte y al servicio de la revolución proletaria mundial mediante la guerra popular marchando a nuestra meta inalterable el Comunismo; teniendo en cuenta que cada revolución se desenvuelve dentro de los zigzages de la política mundial. El Presidente Gonzalo parte de la tesis de Lenin al enjuiciar la situación mundial: "Las relaciones económicas del imperialismo constituyen la base de la situación internacional hoy existente. A lo largo de todo el siglo XX se ha definido por completo esta nueva fase del capitalismo, su fase superior y última", y de que la distinción entre países opresores y países oprimidos es un rasgo distintivo del imperialismo. Por tanto, para ver la situación actual no podemos partir de la contradicción fundamental del capitalismo, pues, estamos en su fase superior y última, el imperialismo. Además, enarbolando lo que nos enseña el Presidente Mao de que el imperialismo y todos los reaccionarios son tigres de papel y el pueblo es el realmente poderoso, y de que: "El revisionismo soviético y el imperialismo norteamericano, confabulándose entre sí han perpetrado tantas maldades e infamias que los pueblos revolucionarios del mundo entero no les dejarán impunes. Los pueblos de todos los países están levantándose. Se ha iniciado un nuevo período histórico de lucha contra el imperialismo norteamericano y el revisionismo soviético", nos plantea que la destrucción del imperialismo y la reacción mundial llevada adelante por los Partidos Comunistas, dirigiendo al proletariado y a los pueblos del mundo, será una realidad incontrovertible, nos hace un llamado a luchar contra las dos superpotencias imperialistas, el imperialismo yanqui y el socialimperialismo ruso, contra las potencias imperialistas y la reacción mundial, especificando las condiciones de cada revolución para determinar el enemigo principal y conjurar la acción de los demás. 1. LA NUEVA ERA Con el triunfo de la Revolución de Octubre, 1917, se marca un hito extraordinario en la historia mundial, el término de la revolución burguesa y el comienzo de la revolución proletaria mundial. Esta nueva era signada por la potenciación de la violencia expresa la caducidad de la burguesía para dirigir la revolución y la madurez del proletariado para tomar, dirigir y mantener el Poder de la dictadura del proletariado; dentro de la cual se enmarcan también las revoluciones de las naciones oprimidas. En medio de un complejo sistema de guerras de todo tipo se hundirá el imperialismo y la reacción mundial y surgirá el socialismo; en consecuencia, revolución y contrarrevolución están conscientes que sólo a través de la guerra se definen los cambios políticos. Teniendo la guerra carácter de clase, hay guerras imperialistas como la I y II guerras mundiales que son guerras de rapiña por un reparto del mundo; o guerras de agresión imperialista a una nación oprimida como la de Inglaterra a Las Malvinas, la del imperialismo yanqui a Vietnam, la del socialimperialismo a Afganistán; guerras de liberación nacional como las que se dan en Asia, Africa y América Latina. Y siendo la guerra popular en el Perú marxistaleninista-maoísta, pensamiento Gonzalo la que por su carácter justo y su correcta dirección, sin sujetarse a las superpotencias ni potencias imperialistas, es la que está a la vanguardia, es una realidad que nos demuestra que los comunistas deben poner el acento en el aspecto principal de desarrollar la guerra popular como la forma principal de lucha en el mundo para servir a la revolución. Ante esta situación de que sólo con las guerras se transforma el mundo, enarbolamos la omnipotencia de la guerra revolucionaria, esto es de la guerra popular, como la teoría militar más alta, la del proletariado trazada por el Presidente Mao y que debe ser especificada a cada tipo de países ya sean imperialistas o atrasados. Así, la guerra popular mundial es la respuesta adecuada que sirve para impedir la guerra imperialista o si ésta se da, transformarla en guerra popular. Pero como comunistas hacemos la guerra para destruir la guerra a través de la guerra y establecer la "Paz perdurable"; somos los únicos que combatimos por la paz no como los Reagan y Gorbáchov que cuanto más hablan de paz más hacen la guerra, ellos son los guerreristas. Al apreciar el mundo en esta era, vemos que se expresan cuatro contradicciones fundamentales: 1) contradicción entre capitalismo y socialismo, se refiere a la contradicción entre dos sistemas radicalmente distintos, abarcará toda esta época y será una de las últimas a resolverse, perdurará aún después de tomar el Poder; 2) contradicción entre burguesía y proletariado, es la contradicción entre dos clases opuestas y persistirá también después de la toma del Poder, manifestándose de múltiples formas ideológicas, políticas y económicas hasta su solución cuando se llegue al Comunismo; 3) contradicciones interimperialistas, es la contradicción entre los imperialistas por la hegemonía en el mundo y se da entre superpotencias entre sí, entre superpotencias y potencias imperialistas y entre las propias potencias imperialistas, esta contradicción se resolverá en la época de los 50 a 100 años; 4) contradicción naciones oprimidas e imperialismo es la lucha por la liberación de las naciones oprimidas para destruir el imperialismo y la reacción, cuya solución se enmarca también dentro de los 50 a 100 años siendo durante este tiempo la principal aunque cualquiera de las cuatro contradicciones fundamentales puede ser principal según la circunstancia específica de la lucha de clases, transitoriamente o en determinados países. Los marxistas-leninistas-maoístas, en perspectiva, para llegar a nuestra meta final el comunismo tenemos que llevar adelante tres tipos de revoluciones: 1) revolución democrática, es la revolución burguesa de nuevo tipo dirigida por el proletariado para los países atrasados, que instaura la dictadura conjunta de las clases proletariado, campesinado, pequeña burguesía y, en ciertas condiciones la burguesía media, bajo la hegemonía del proletariado; 2) revolución socialista, en los países imperialistas y capitalistas, que instaura la dictadura del proletariado; 3) revoluciones culturales, son las que se hacen para continuar la revolución bajo la dictadura del proletariado, para someter y eliminar toda generación de capitalismo y combatir también con las armas los afanes de restauración capitalista, sirve a fortalecer la dictadura del proletariado y a marchar al Comunismo. Así como a ninguna clase en el mundo le cupo tomar el Poder de una sola vez, sino a través de un proceso de restauraciones y contrarrestauraciones, cuando el proletariado toma el poder y establece su dictadura, se potencian los afanes de la burguesía por restaurar el capitalismo y se abre un proceso histórico de lucha entre el proletariado por mantener y defender su dictadura y conjurar la restauración capitalista y la burguesía que quiere recuperar el poder. Esta lucha entre restauración y contrarrestauración es una ley histórica innegable hasta que se instaure en definitiva la dictadura del proletariado. En la historia mundial, cuando la clase feudal era avanzada en China demoró 250 años para aplastar en definitiva la restauración del esclavismo; cuando la burguesía en occidente luchó contra la feudalidad para aplastar los intentos de restauración o las restauraciones de la feudalidad, le demandó 300 años el instaurarse en definitiva en el Poder; y, tratándose de una revolución en que el proletariado definitivamente se instaura en el Poder, la lucha entre restauración y contrarrestauración es sumamente aguda y enconada y le demandará aproximadamente unos 200 años, arrancando desde la Comuna de París, en 1871. Las experiencias de la restauración en la URSS y en China nos dejan grandes lecciones, tanto positivas como negativas; especialmente, destacar los pasos gigantescos de avance en la plasmación del nuevo Estado y cómo la Gran Revolución Cultural Proletaria es la solución para conjurar la restauración. Los marxistas-leninistas-maoístas, pensamiento Gonzalo nos reafirmamos en la violencia revolucionaria como ley universal para tomar el poder y en que es medular para sustituir una clase por otra. Las revoluciones democráticas son con violencia revolucionaria, las revoluciones socialistas son con violencia revolucionaria y, ante las restauraciones recuperaremos el poder a través de la violencia revolucionaria y mantendremos la continuación de la revolución bajo la dictadura del proletariado con violencia revolucionaria mediante las revoluciones culturales y, al comunismo sólo iremos con la violencia revolucionaria y mientras haya un lugar en la Tierra en que exista explotación la acabaremos con la violencia revolucionaria. Así, nueva era nos arma riquísimamente y los comunistas tenemos que potenciarnos ideológica, política y orgánicamente para asumirla como corresponde. 2. PROCESO DE LA REVOLUCION MUNDIAL Existen dos corrientes que operan en el movimiento comunista internacional: el movimiento proletario internacional y el movimiento de liberación nacional, siendo el primero directriz y el segundo base. El movimiento de liberación nacional, se libra en las naciones oprimidas contra el imperialismo y la reacción. En la década del 10 Lenin prestó suma atención a la lucha en India, China, Persia planteando que la revolución socialista no sería única y exclusivamente de los proletarios contra sus burguesías sino también de todas las colonias contra sus opresores; dice que hay fusión de dos fuerzas, el movimiento proletario internacional y el movimiento de liberación nacional y, que el peso de la masa en las naciones oprimidas constituye la mayoría de la población en el globo terráqueo y será decisivo en la revolución mundial. Llega a la conclusión que la revolución se desplaza a las naciones oprimidas pero no niega la revolución en Europa sino que demuestra que un Estado socialista como era la URSS, podía desenvolverse en medio del cerco imperialista. Desarrollando a Marx sienta las bases de la estrategia de la revolución mundial para socavar al imperialismo, unir la lucha del movimiento de liberación nacional con las luchas del movimiento proletario internacional y desarrollar la revolución y, si bien para los comunistas el lema es "Proletarios de todos los países, uníos!" plantea que el lema que debe guiar la lucha de las dos fuerzas debe ser "Proletarios de todos los países y pueblos del mundo, uníos!". El Presidente Mao Tsetung desarrolla la estrategia de Lenin centrando en la gran trascendencia que tiene para la revolución mundial el movimiento de liberación nacional pues, el imperialismo esquilma más y más a las naciones oprimidas las cuales se levantan en poderosas tormentas revolucionarias debiendo ser dirigidas por sus partidos comunistas. Así, se funden el movimiento de liberación nacional con el movimiento proletario internacional y estas dos fuerzas impulsan el desarrollo de la historia mundial. El Presidente Gonzalo nos enseña que la estrategia que tenemos que desenvolver los comunistas debe partir de las bases puestas por Lenin y desarrolladas por el Presidente Mao. El movimiento proletario internacional, es la teoría y práctica del proletariado internacional. El proletariado lucha en tres planos: teórico, político y económico y desde que aparece en la historia como última clase, lo hace luchando destacándose los siguientes hitos: 1848, cuando en el Manifiesto Comunista elaborado por Marx y Engels se establecen los fundamentos y el programa del proletariado; 1871, la Comuna de París donde por primera vez el proletariado toma el Poder; 1905, el ensayo general de la revolución; 1917, triunfo de la Revolución de Octubre en Rusia, la clase establece la dictadura del proletariado y abre una nueva era; 1949, triunfo de la revolución china, se establece la dictadura conjunta dirigida por el proletariado y se resuelve el paso a la revolución socialista, cambiándose la correlación de fuerzas en el mundo; y, en la década del 60 con la Gran Revolución Cultural Proletaria, dirigida por el Presidente Mao Tsetung, se continúa la revolución bajo la dictadura del proletariado en la aguda lucha entre restauración y contrarrestauración. El proletariado en su lucha reivindicativa genera el sindicato y la huelga, que no son sólo instrumentos para la lucha económica sino que forjan a la clase "para las grandes batallas por venir". La huelga es instrumento principal de la lucha económica y la huelga general es complemento de la insurrección, pero es erróneo lo que Sorel plantea, los anarquistas y otros de que con huelga general se toma el Poder. Nosotros desenvolvemos la lucha reivindicativa en función del Poder. El proletariado genera aparato político: Partido Comunista totalmente opuesto y distinto a los demás partidos con el objetivo de tomar el poder político, así lo definió Marx. Lenin estableció los caracteres del Partido de nuevo tipo combatiendo la influencia socavadora del viejo revisionismo que generó partidos obreros burgueses basados en la aristocracia obrera, la burocracia sindical, el cretinismo parlamentario y amoldados al orden. El Presidente Mao Tsetung desarrolló la construcción del Partido en torno al fusil y planteó la construcción de los tres instrumentos. El Presidente Gonzalo establece la tesis de la militarización de los partidos comunistas y la construcción concéntrica de los tres instrumentos. El proletariado genera ideología: el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente maoísmo para la revolución mundial y el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento Gonzalo, principalmente pensamiento Gonzalo para la revolución peruana. El marxismo fue el fundamentado por Marx. Marx y Engels cogen lo mejor que había producido la humanidad: la Filosofía clásica alemana, la Economía Política inglesa y el Socialimo francés para fundamentar la ideología del proletariado. El marxismo no ha dado un paso en la vida sin lucha contra posiciones erróneas, así tuvo que enfrentarse contra Proudhon y el anarquismo, contra las desviaciones derechistas y supuestos desarrollos creadores de Dühring, contra posiciones oportunistas que surgen en el partido social demócrata alemán. Posteriormente, el viejo revisionismo va a desenvolverse después de la muerte de Engels con Bernstein y Kautsky y Lenin los va a derrotar. En síntesis, el marxismo en su primera etapa va a establecer la filosofía marxista o materialismo dialéctico, la economía política marxista y el socialismo científico. Lenin desarrolla el marxismo y lo eleva a una segunda etapa, el marxismo-leninismo. Esto lo hizo en dura lucha contra el viejo revisionismo que negaba la filosofía marxista diciendo que había que basarse en el neo-kantismo que es idealismo y no materialismo dialéctico. En economía política negaban la pauperización creciente por tanto el imperialismo, el capitalismo, satisfacía demandas del proletariado; negaban la plusvalía y el imperialismo. En socialismo científico apuntaron contra la lucha de clases, contra la violencia revolucionaria y propalaban el pacifismo. El revisionismo es revisar los principios marxistas invocando las nuevas circunstancias. Lenin dijo que el revisionismo es avanzada de la burguesía en las filas del proletariado y que para luchar contra el imperialismo hay que luchar contra el revisionismo pues son dos caras de una misma moneda. Lenin destaca que el revisionismo apunta a dividir el movimiento sindical y político del proletariado y que genera la escisión del socialismo. En esta certera e implacable lucha contra el revisionismo Lenin plantea además, en la coyuntura de la Primera Guerra Mundial, convertir la guerra imperialista en guerra revolucionaria, desenmascarando a los viejos revisionistas como social-patriotas; nos plantea que en tiempos de revolución hay que hacer organizaciones nuevas, pues la reacción golpea las organizaciones legales y debemos montar aparatos clandestinos incluso para el trabajo de masas. Luego, plasma la Revolución de Octubre con Partido Comunista y mediante la insurrección. Stalin va a continuar la obra de Lenin y en el proceso de construcción del socialismo en la URSS va a luchar contra las desviaciones de Trotsky, Zinoviev y Kamenev que concluyen en 1937; llevó una lucha de 13 años y es falso que resolviera las cosas de manera administrativa. Asumimos la posición del Presidente Mao sobre el papel del camarada Stalin de que 70% es positivo. Los comunistas hoy tenemos la tarea de hacer un análisis adecuado de la Segunda Guerra Mundial, el balance de la Internacional Comunista y particularmente estudiar bien su VII Congreso y dentro de esto el papel del camarada Stalin, la acción del revisionismo en Francia, Italia, etc. El Presidente Mao Tsetung desarrollando el marxismo-leninismo eleva el marxismo a su cumbre más alta deviniendo la teoría del proletariado en marxismo-leninismo-maoísmo. Esta tarea la cumplió en medio de una tenaz y persistente lucha aplastando líneas oportunistas de derecha dentro del Partido Comunista de China, resaltando aquí el aplastamiento de la línea revisionista de Liu Shao-chí y Teng Siao-ping; y en el plano internacional dirigió la lucha y derrotó al revisionismo contemporáneo de Jruschov. Plasmó la revolución democrática en China, el paso a la revolución socialista y la Gran Revolución Cultural Proletaria. Lo fundamental del maoísmo es el Poder, el Poder para el proletariado, el Poder para la dictadura del proletariado, basado en una fuerza armada dirigida por el Partido. El maoísmo es la aplicación del marxismo-leninismo a los países atrasados, de la ofensiva estratégica de la revolución mundial y de la continuación de la revolución bajo la dictadura del proletariado. Así, los comunistas tenemos tres grandes espadas: nuestro fundador Marx, el gran Lenin y el Presidente Mao Tsetung, siendo nuestra tarea grandiosa enarbolar, defender y aplicar el marxismo-leninismomaoísmo, principalmente el maoísmo poniéndolo como mando y guía de la revolución mundial. Continuando el desarrollo del marxismo-leninismo-maoísmo, el Presidente Gonzalo enarbola, defiende y aplica esta nuestra invicta e inmarcesible ideología, constituyendo el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento Gonzalo la base de unidad del Partido, desarrollando la revolución peruana y aportando a la revolución mundial. El pensamiento Gonzalo es lo principal que tenemos que encarnar porque es garantía de triunfo que nos lleva a la revolución democrática, a la revolución socialista, a las revoluciones culturales hasta el Comunismo. Por otro lado, el Presidente Gonzalo nos plantea que en el proceso de la revolución mundial de barrimiento del imperialismo y la reacción de la faz de la tierra hay tres momentos: 1 Defensiva estratégica; 2 Equilibrio estratégico; y 3 Ofensiva estratégica de la revolución mundial. Esto lo hace aplicando la ley de la contradicción a la revolución pues la contradicción rige en todo y toda contradicción tiene dos aspectos en lucha, en este caso revolución y contrarrevolución. La defensiva estratégica de la revolución mundial opuesta a la ofensiva de la contrarrevolución arranca desde 1871 con la Comuna de París y termina en la II guerra mundial; el equilibrio estratégico se da en torno al triunfo de la revolución china, a la Gran Revolución Cultural Proletaria y al desarrollo del poderoso movimiento de liberación nacional; posteriormente la revolución entra a la ofensiva estratégica, este momento se puede ubicar en torno a los 80 en que vemos signos como la guerra Irán-Irak, Afganistán, Nicaragua, el inicio de la guerra popular en el Perú, época inscrita en los "próximos 50 a 100 años"; de ahí para adelante se desarrollará la contradicción entre el capitalismo y el socialismo cuya solución nos llevará al comunismo. Concebimos un proceso largo y no corto, con la convicción de entrar al comunismo así se pase por una serie de sinuosidades y reveses que necesariamente habrá. Además no es extraño que apliquemos los tres momentos a la revolución mundial, pues, el Presidente Mao los aplicó al proceso de la guerra popular prolongada. Y como comunistas debemos mirar no sólo el momento, sino los largos años por venir. 3. SITUACION ACTUAL Y PERSPECTIVA. En la situación actual y la perspectiva hemos entrado a la ofensiva estratégica de la revolución mundial dentro de los "50 a 100 años" en que se hundirá al imperialismo y la reacción mundial y entraremos a que el proletariado se afinque definitivamente en el poder y establezca su dictadura, de ahí para adelante la contradicción será entre socialismo y capitalismo en marcha hacia el comunismo. El que se hayan dado las restauraciones en la URSS y China no niega el proceso de desarrollo pujante del proletariado internacional, sino que muestra cómo se da la lucha entre restauración y contrarrestauración de la cual los comunistas extraemos lecciones para conjurar la restauración y establecer definitivamente la dictadura del proletariado. Nos reafirmamos en la tesis del Presidente Mao Tsetung de que se ha abierto un período de lucha contra el imperialismo norteamericano y el socialimperialismo ruso; así están definidos los dos enemigos principales a nivel mundial, tanto para los que hacen revolución democrática o revolución socialista incluídos los que hacen movimientos nacionalistas, y lo que corresponde es que cada revolución o movimiento especifique su enemigo principal y conjurar el dominio de la otra superpotencia o de las demás potencias. En el Perú nos domina el imperialismo yanki coludido con la gran burguesía y los terratenientes. Sin embargo, a nivel mundial hay una contienda entre las dos superpotencias por la hegemonía mundial, nosotros luchamos contra el imperialismo norteamericano, contra la feudalidad y el capitalismo burocrático, pero no podemos permitir que lo sustituya el dominio del socialimperialismo ni de potencia alguna. En Afganistán la agresión directa es del socialimperialismo ruso que contiende por la hegemonía con el imperialismo yanki y otras potencias de occidente y China, ahí debe librarse lucha contra el socialimperialismo como principal y no permitir ingresar el dominio del imperialismo norteamericano ni de otras potencias; el problema es que la lucha no se desenvuelve correctamente por falta de dirección política, de Partico Comunista. En síntesis, hay dos superpotencias que son los enemigos principales siendo uno el principal en cada caso y, no eximimos la acción de las potencias. Consideramos que es justa y correcta la tesis del Presidente Mao Tsetung de que tres mundos se delinean y se entronca con la tesis de Lenin sobre la distribución de fuerzas en el mundo basada en el análisis de clases y contradicciones. Rechazamos la tergiversación oportunista y revisionista de Teng Siao-ping de los tres mundos que lleva a ponerse a la cola de los EE.UU. y vender la revolución. Partiendo de esto el Presidente Gonzalo analiza la situación actual de tres mundos se delinean y demuestra que es una realidad, en cuanto al primer mundo son las dos superpotencias, EE.UU. y URSS que son las que contienden por la hegemonía mundial y pueden desatar una guerra imperialista, son superpotencias porque son más poderosas económica, política y militarmente que las demás potencias; EE.UU. tiene economía centrada en el monopolio de propiedad no estatal, políticamente desenvuelve una democracia burguesa de creciente restricción de derechos, es un liberalismo reaccionario, militarmente es la más poderosa en Occidente y tiene un proceso de desarrollo más prolongado. URSS económicamente centrada en monopolio estatal, políticamente dictadura fascista de una burguesía burocrática y militarmente potencia de alto nivel aunque su proceso de desarrollo es más corto. EE.UU. busca mantener sus dominios y también expandirlos. URSS apunta más a la expansión porque es una superpotencia nueva y económicamente le interesa capturar Europa para estar en mejores condiciones. En síntesis son dos superpotencias que no constituyen un bloque sino que tienen contradicciones, claras diferencias entre sí y se mueven dentro de la ley de la colusión y pugna por el reparto del mundo. El segundo mundo son las potencias imperialistas no superpotencias, es decir de menor poderío económico, político y militar como Japón, Alemania, Francia, Italia, etc que tienen contradicciones con las superpotencias porque soportan por ejemplo, la devaluación del dólar, las restricciones militares y las imposiciones políticas; estas potencias imperialistas quieren aprovechar la contienda entre las superpotencias para ellas salir como nuevas superpotencias, desatan también guerras de agresión contra las naciones oprimidas y entre ellas además, se dan también agudas contradicciones. El tercer mundo está compuesto por las naciones oprimidas de Asia, Africa y América Latina, son colonias o semicolonias donde no se ha destruído la feudalidad y sobre esa base se desenvuelve un capitalismo burocrático, se encuentran sujetas a una u otra superpotencia o potencia imperialista, tienen contradicciones con el imperialismo, además que luchan contra sus propias grandes burguesías y terratenientes, ambas al servicio y coludidas con el imperialismo, especialmente con las superpotencias. Todo esto nos da bases para que los comunistas establezcamos la estrategia y táctica de la revolución mundial. El Presidente Mao Tsetung ha llegado a establecer la estrategia y la táctica de la revolución mundial pero los revisionistas chinos la ocultan por lo que a nosotros nos corresponde extraerla de sus propias ideas, máxime si hay nuevas situaciones sobre todo en perspectiva. Nuestro Partido sostiene que en el mundo actual hay tres contradicciones fundamentales: 1) Contradicción naciones oprimidas, de un lado, contra superpotencias imperialistas y potencias imperialistas, de otro lado, ahí está encerrada la tesis de tres mundos se delinean y formulamos así porque el meollo de esa contradicción es con las superpotencias imperialistas pero también se da contradicciòn con las potencias imperialistas. Esta es la contradicción principal y su solución es el desarrollo y triunfo de revoluciones de nueva democracia. 2) Contradicción proletariado-burguesía, tiene como solución la revolución socialista y en perspectiva la revolución cultural proletaria. 3) La contradicción interimperialista: entre las superpotencias, superpotencias y potencias imperialistas y potencias imperialistas entre sí, lo que lleva a guerra por la hegemonía mundial y guerras imperialistas, de rapiña a las que el proletariado debe contraponer la guerra popular y en perspectiva la guerra popular mundial. La contradicción socialismocapitalismo no la ponemos hoy porque sólo se da a nivel ideológico y político pues no existe como Estado, hoy no hay sistema socialista, lo hubo y sotener que existe hoy es plantear en esencia que la URSS es socialista, lo cual es revisionismo. La necesidad de ver las contradicciones sirve para analizar la situación mundial y definir su estrategia y táctica y dentro de ella zonas estratégicas y conflictivas. Hoy los puntos conflictivos más candentes son el Sudeste Asiático donde la lucha en Vietnam, Laos y Campuchea es un punto focal de la inmensa región estratégica de Asia, región de gran concentración de masas por ejemplo India que si tuvieran Partidos Comunistas suficientemente desarrollados servirían poderosamente al avance de la revolución. Medio Oriente, gran centro petrolero, donde también hay una aguda contienda entre las superpotencias y potencias ligada a la cuestión del cercano Oriente y a movimientos nacionalistas y hasta reaccionarios. Sudáfrica donde se dan movimientos guerrilleros que son usurpados por las superpotencias o potencias para convertirlos en fuerzas de ocupación y dominarlos. América Latina, importantes luchas de Centro América (Nicaragua y El Salvador) y la explosividad de las Antillas (Haití, etc.). Y la guerra popular en el Perú, marxista-leninista-maoísta, pensamiento Gonzalo que lucha por una auténtica revolución democrática sin sujetarse a ninguna superpotencia ni potencia alguna. Y Europa donde se desarrollan persistentes acciones militares antiimperialistas, siendo necesario estudiar la ideología y la política que los sustenta, la clase a la cual sirven, su ligazón con la ideología del proletariado y su papel dentro de la revolución proletaria mundial, como su posición frente al revisionismo contemporáneo; movimientos que expresan la existencia de situación revolucionaria en desarrollo desigual en el Viejo Continente. En cualquiera de estos puntos conflictivos podría saltar la chispa para que se encienda una guerra mundial imperialista, situación que se dará cuando se defina la superioridad estratégica de una de las superpotencias, por lo que es cada vez más urgente y perentorio contar con partidos comunistas basados en el marxismo-leninismo-maoísmo y forjados para y en la guerra popular mediante su militarización. Definir estratégicamente las zonas de importancia principales y secundarias para hacer la revolución mundial es clave para establecer el papel que han de cumplir cada región y cada partido en la revolución mundial. Para los Partidos Comunistas el problema no es centrar la atención en la guerra mundial imperialista sino en la guerra popular, pues, sólo de ella derivará el poder dirigido por el proletariado. Consideramos que mientras haya imperialismo hay margen para que se den guerras mundiales imperialistas y es certero lo que dijo el Presidente Mao o la revolución conjura la guerra o la guerra mundial atiza la revolución; para que se dé una guerra mundial imperialista tiene que definirse la superioridad estratégica de una de las superpotencias y según los teóricos militares reaccionarios ésta se desenvolvería con un primer momento de uso de armas atómicas, contundente bombardeo atómico de ambas partes y, un segundo momento en que participarán grandes contingentes de millones y se entrará a guerra convencional para ocupar territorios pues el objetivo es el reparto del botín, especialmente las naciones oprimidas; y se entrará a una matanza feroz y grande que a su vez repercutirá en contra de los imperialistas y las razones para que las naciones oprimidas, los pueblos y la clase se levanten en guerra popular serán mayores. Así, pues, si se presenta la guerra imperialista mundial, primero estamos en contra, segundo, no le tememos y centramos en la revolución; tercero centrar en revolución es hacer la guerra popular dirigida por el proletariado a través de sus partidos comunistas; y cuarto, esta guerra popular debe especificarse en cada tipo de países según el tipo de revolución. Está, pues, a la orden del día la guerra popular mundial. 4. EL MOVIMIENTO COMUNISTA INTERNACIONAL. EL MOVIMIENTO REVOLUCIONARIO INTERNACIONALISTA. La historia del movimiento comunista internacional es un glorioso proceso de lucha a través del cual los comunistas en el mundo han bregado y bregan por unirse al servicio de la consecución de su meta inalterable, la sociedad comunista. En esta heroica brega se han concretado tres Internacionales. La Asociación Internacional de los Trabajadores o I Internacional fue fundada por Marx y Engels en 1864 y en dura lucha y aplastamiento de las posiciones anarquistas de Bakunin, establece que es una sola la doctrina del proletariado: el marxismo. Lenin dice el papel que cumplió la I Internacional es el poner las bases ideológicas de la doctrina del proletariado. La Internacional se dividió y se imputó a Marx y Engels el haber escindido, ellos respondieron que si esa división no se hubiera producido, la Internacional de todas maneras hubiera muerto asesinada por la unidad poniendo de lado los principios. La II Internacional fue fundada por Engels en 1889, va a servir a la multiplicación de las organizaciones y los partidos; muerto Engels se produce desenfreno del viejo revisionismo el cual va a ser combatido y aplastado por Lenin; esta Internacional entró en bancarrota en la Primera Guerra Mundial cuando sus dirigentes, como Kautsky, Berstein, en vez de combatir la guerra imperialista y transformarla en revolución apoyan esa guerra de rapiña, y a sus burguesías deviniendo en socialpatriotas. En 1919 Lenin forma la III Internacional, la Internacional Comunista, y la concibió como máquina de combate que tiene que asumir la revolución mundial y la construcción de la dictadura del proletariado. En la IC surgen en los años 20 dos problemas de gran repercusión, el problema de Alemania, o sea, la revolución en un país avanzado y el problema de China o sea la revolución en un país atrasado. Posteriormente, la situación se agudiza con el surgimiento y el triunfo del fascismo y sobre cómo concebir el Frente; había criterios revisionistas de Togliatti y Thorez que buscaban sostener el orden y no derrumbarlo y centraban sólo en la lucha contra el fascismo. Para los comunistas y para nuestro Partido hacer el balance de la Internacional Comunista, especialmente de su VII Congreso, ligado a la guerra mundial y al papel del camarada Stalin, es tarea perentoria. En 1943 fue disuelta la Internacional y quedó un Comité de Información. La lucha de los comunistas por unirse a nivel internacional es dura y compleja y ésta se da después de la Segunda Guerra Mundial contra el revisionismo contemporáreo. En 1948 se condena a Tito. Las ideas de Browder también causaron un nefasto papel. En los años 1957 y 60 se reúnen los partidos comunistas y obreros en Moscú, estos eventos se realizaron después del XX Congreso del Partido Comunista de la Unión Soviética (PCUS), año 56, en que Jruschov ya ha usurpado la dictadura del proletariado en la URSS y la ataca so pretexto de combatir al camarada Stalin. El peso de la URSS era muy grande en el mundo y en estas circunstancias las reuniones del 57 y el 60 acuerdan posiciones ambiguas no obstante la firme posición de principios sostenida por el PCCh, especialmente por el Presidente Mao, y del Partido del Trabajo de Albania. La posición del Presidente Mao hizo cambiar algunas posiciones del PCUS. En 1961 se celebra el XXII Congreso del PCUS, allí se sistematiza las posiciones del revisionismo contemporáneo. El Presidente Mao dirigiendo al Partido Comunista de China (PCCh) caló la esencia del revisionismo nuevo que se sistematiza en las "tres pacíficas" y los "dos todos". La coexistencia pacífica, Jruschov tuerce esta tesis de Lenin que diferencia la relaciones entre Estados de las que se dan dentro de los Estados y va a plantear que la línea general del movimiento comunista internacional es "la coexistencia pacífica"; para Jruschov el problema era impedir la guerra porque según él las armas atómicas no distinguían explotadores de explotados y que los hombres debían confraternizar para impedir la desaparición de la humanidad. La "transición pacífica" plantea que la revolución ya no necesitaba la violencia revolucionaria sino que se podía cambiar un sistema social por otro a través de la "vía pacífica", a través de las elecciones, del parlamentarismo. La "emulación pacífica" aquí sostenía que el sistema socialista para destruir al sistema imperialista lo que debía hacer es una emulación para demostrar a los imperialistas que el sistema socialista es superior y así los imperialistas se iban a pasar al socialismo. El "Estado de todo el pueblo" tesis revisionista con la que Jruschov pretendía negar el carácter de clase del Estado y apuntaba concretamente contra la dictadura del proletariado y, el "partido de todo el pueblo" es otro engendro que negaba el carácter de clase del Partido como Partido del proletariado. Así, Jruschov sostuvo que el XXII Congreso del PCUS era el nuevo programa de los comunistas y sustituyó el Manifiesto Comunista por la consigna burguesa de "libertad", "igualdad" y "fraternidad". El Manifiesto es el programa de los comunistas y su negación atizó y agudizó la lucha entre marxismo y revisionismo. El 14 de junio de 1963 se publica la "Proposición acerca de la línea general del movimiento comunista internacional", conocida también como "la carta china" y fue seguida por la difusión de "los 9 comentarios" en los que brillantemente el Presidente Mao y el PCCh desenmascararon y aplastaron al revisionismo contemporáneo en todas sus facetas. Entendemos que el Presidente Mao y el PCCh consideraban que no era conveniente en tales circunstancias el conformar una nueva Internacional Comunista porque no estaba definida la base ideológico-política, ésta debía ser el marxismo-leninismo-pensamiento Mao Tsetung, pero especialmente el Partido del Trabajo de Albania dirigido por Hoxha no aceptaba el pensamiento Mao Tsetung y pretendía una Internacional basándose sólo en el marxismo-leninismo sin considerar el nuevo desarrollo que éste tenía porque en esencia Hoxha era opuesto al pensamiento Mao Tsetung. Con la Gran Revolución Cultural Proletaria se desenvuelve la influencia creciente del Presidente Mao por el mundo, el PCCh centró en problemas muy urgentes como recuperar el Poder en la República Popular China de la usurpación revisionista de Liu Siao-chí y Teng Siao-ping y, cómo continuar la revolución bajo la dictadura del proletariado. Así el Presidente Mao en la lucha de clases a nivel nacional e internacional contra el revisionismo se convierte en el gran maestro del proletariado y en el Jefe de la revolución mundial, y su pensamiento deviene en la tercera etapa del marxismo, en esa época los comunistas decíamos marxismo-leninismo-pensamiento Mao Tsetung. El Partido Comunista del Perú en la VI Conferencia Nacional en enero del 69 adoptó como base de unidad partidaria el marxismo-leninismopensamiento Mao Tsetung como producto de la lucha del Presidente Gonzalo y de la fracción roja del partido que desde 1966 ya adhería al marxismo-leninismo-pensamiento Mao Tsetung aunque el Presidente Gonzalo ya en el 62 va a adherir a las posiciones del Presidente Mao y en esa concepción va a forjar a la fracción roja. Los auténticos comunistas esperábamos que fuera el PCCh el que definiera maoísmo como tercera etapa del marxismo pero muerto el Presidente Mao, en setiembre de 1976, los revisionistas chinos que dieron un golpe contrarrevolucionario apuntaron contra el Presidente Mao y su pensamiento. Así, la unidad de los marxistas entró en graves y complejos problemas, pero el Partido Comunista del Perú se mantuvo firme e inconmovible en la defensa del marxismo-leninismo-pensamiento Mao Tsetung y desenmascaró el golpe contrarrevolucionario y la usurpación revisionista dada en China, fue entonces que el Buró Político Ampliado de octubre del 76 acordó "Ser marxista es adherir al marxismo-leninismopensamiento Mao Tsetung". Con la muerte del Presidente Mao y la usurpación revisionista en China por Teng y sus compinches, los comunistas nos quedamos desperdigados en el mundo sin centro ni base de la revolución mundial; la contrarrevolución sacó sus garras para negar al Presidente Mao y la validez del marxismo-leninismopensamiento Mao Tsetung y se desencadenó el triple ataque revisionista de Teng Siao-ping (revisionismo chino), Hoxha (revisionismo albanés) y Brezhnev (revisionismo ruso). Ante esto el Presidente Gonzalo en la I Conferencia Nacional de noviembre del 79 llamó a todo el Partido a enarbolar, defender y aplicar el marxismo-leninismo-pensamiento Mao Tsetung contra el triple ataque revisionista. En estas posiciones el Partido se mantuvo firme y llevó una inalterable posición de principios. En 1980 el PCP inició la guerra popular basándose en el marxismo-leninismo-pensamiento Mao Tsetung y es aplicando y desarrollando la guerra popular que avanzó más en la comprensión del maoísmo como tercera etapa del marxismo, por lo que en la II Conferencia Nacional de mayo del 82 acordó que el marxismo-leninismo-maoísmo era la tercera etapa del marxismo, así el PCP fue el único partido en el mundo que estuvo a la vanguardia en la defensa del maoísmo y asumió el bregar por la unidad de los marxistas-leninistas-maoístas en el mundo para que esta ideología sea mando y guía de la revolución peruana y mundial. La aplicación del marxismo-leninismo-maoísmo debe ser especificada a cada revolución para no caer en una aplicación mecánica y es por esta razón que, la revolución peruana ha generado al Presidente Gonzalo y al pensamiento Gonzalo que es principal en la base de unidad partidaria. Así, cada revolución debe especificar su pensamiento guía sino no hay aplicación del marxismo-leninismo-maoísmo ni desarrollo de una revolución. En el otoño de 1980, trece Partidos y organizaciones comunistas suscribieron una declaración: "A los marxistas-leninistas, a los obreros y a los oprimidos de todos los países" por la cual llaman a los comunistas a unirse en torno al marxismo-leninismo y toman al Presidente Mao pero sin considerarlo una nueva etapa y que no tiene vigencia universal, labor conducida por el Partido Comunista Revolucionario de los EE.UU, principalmente. El año 83 el PCR de los EE.UU. se vinculó con el PCP y lo invitó a suscribir la declaración del 80, el PCP no estuvo de acuerdo porque no estaba ahí considerado el pensamiento Mao Tsetung y más aún nosotros ya nos basábamos en el marxismo-leninismo-maoísmo. En marzo del 84 se llevó a cabo la II Conferencia de estas organizaciones donde se acordó la conformación del Movimiento Revolucionario Internacionalista (MRI) y aprobaron una declaración conjunta en la que se habla de unirse en torno al marxismo-leninismo-pensamiento Mao Tsetung. Nuestra posición sobre la incorporación del PCP al MRI está condensada en una carta escrita al Comité del Movimiento Revolucionario Internacionalista, de octubre del 86: "Dos cuestiones quisiéramos reiterar acerca de este punto. Primeramente, desde el inicio de nuestras vinculaciones el punto de partida de nuestras divergencias fue el sustancial y decisivo problema del marxismo-leninismo-maoísmo como única, verdadera y nueva etapa del desarrollo de la ideología del proletariado, de vigencia universal y principalmente el maoísmo como clave de la cuestión; y, en consecuencia, nuestra disconformidad con la nominación de marxismo-leninismo-pensamiento Mao Tsetung. Sin embargo, hemos pensado y pensamos que resolver éste, para nosotros indispensable punto de partida, es complejo, demanda tiempo y, especialmente desarrollar la revolución". "En segundo lugar, al suscribir la Declaración derivada de la II Reunión que creó el MRI, lo hicimos con observaciones y hasta claras contraposiciones expresamente planteadas en forma breve, así como reiteradas en reuniones, informes o comunicaciones que obviamente muestran divergencias sobre contradicción principal, situación revolucionaria de desarrollo desigual, guerra mundial y algunos criterios sobre el papel del Movimiento y, puntos más importantes aún como la validez universal del marxismoleninismo-maoísmo y particularmente la vigencia general de la guerra popular, expresión de la teoría militar del proletariado que recién con el Presidente Mao Tsetung la clase ha plasmado cabal y completamente, así como nuestra insistencia en elevar siempre el gran lema "Proletarios de todos los países, uníos". No obstante, pensábamos y pensamos que la Declaración encerraba y encierra aún una base de unidad relativa cuyo desarrollo y superación lo exigirían el propio avance del Movimiento, como los hechos ya lo están demostrando palmariamente". Hoy día, la Declaración ha sido tachada por unos de oportunista, por otros que no sirve para resolver los problemas candentes que la revolución exige y que por tanto se debe marchar a una nueva declaración. El PCP considera que el MRI enfrenta problemas en diferentes planos: en lo ideológico avanzar en la comprensión del marxismo-leninismo-maoísmo, este avance es principal y de él depende incluso desarrollar políticamente; en lo político avanzar en definir las contradicciones fundamentales y la principal en el mundo, la cuestión de la tercera guerra mundial y que la revolución es la tendencia principal y de darse guerra imperialista transformarla en guerra popular; en cuanto a la construcción qué lineamientos hemos de seguir para llegar a conformar la Internacional que necesitamos que debe ser continuación del glorioso Movimiento Comunista Internacional; en cuanto a trabajo de masas partimos de nuestras divisas "las masas hacen la historia" y "la rebelión se justifica" y "el montón colosal de basura" y que el trabajo de masas es para iniciar o desarrollar la guerra popular; en cuanto a dirección, es clave y requiere tiempo para su formación, desarrollo y autoridad reconocidas; y en cuanto a lucha de dos líneas no se la maneja como corresponde. Estos son problemas de desarrollo pero que si no son justa y correctamente manejados pueden devenir en fenómenos de desarticulación y estas posibilidades negativas no pueden menos que preocupar. Consideramos que el Comité del MRI apunta a imponer la denominación "marxismoleninismo-pensamiento Mao Tsetung", a encuadrarnos dentro de la declaración y a resolver los problemas de dirección del Comité que dan margen a pensar en la existencia de tendencias hegemonistas. Teniendo en cuenta esta situación, nos reafirmamos en la IV Conferencia Nacional del PCP de octubre 86 de desenvolvernos como fracción dentro del Movimiento Comunista Internacional para que el marxismoleninismo-maoísmo, principalmente el maoísmo sea mando y guía de la revolución mundial y llamamos a Enarbolar, defender y aplicar el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente el maoísmo!, puesto que, solamente así el proletariado internacional mediante sus Partidos Comunistas será capaz de dirigir la conquista del Poder y emancipar a los oprimidos para emanciparse a sí mismo como clase. Estamos por la reconstitución de la Internacional Comunista y consideramos al Movimiento Revolucionario Internacionalista como un paso en ese rumbo, al cual servirá en tanto se sustente y siga una línea ideológica política justa y correcta. La lucha por imponer el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente el maoísmo como mando y guía de la revolución mundial será larga, compleja, dura pero al final los marxista-leninista-maoístas de la Tierra lo impondremos porque el marxismo no ha dado ni un solo paso en la vida sin lucha. GLORIA AL PROLETARIADO INTERNACIONAL ! VIVA LA REVOLUCION PROLETARIA MUNDIAL ! ENARBOLAR, DEFENDER Y APLICAR EL MARXISMO-LENINISMO-MAOISMO, PENSAMIENTO GONZALO, PRINCIPALMENTE EL PENSAMIENTO GONZALO ! 1988 PARTIDO COMUNISTA DEL PERÚ ENTREVISTA AL PRESIDENTE GONZALO OBJETIVOS EL DIARIO: Bien. ¿Por qué el Presidente Gonzalo se anima a concretar esta entrevista, por qué se decide a hablar después de un prolongado silencio, por qué escogió a El Diario para lograr esta entrevista? PRESIDENTE GONZALO: Quisiéramos decirles que el Partido Comunista del Perú, que dirige la guerra popular hace ya más de ocho años, se ha venido expresando a través de diferentes documentos que son de conocimiento público. Hemos considerado siempre que era mucho más importante el pronunciamiento del propio Partido para que así quede nítido y claro que es el PCP el que se ha atrevido a iniciar la guerra popular, a dirigirla y a llevarla adelante. En cuanto a por qué hablamos en esta ocasión personalmente en una entrevista como ésta, que es la primera vez que tenemos el gusto de dar y precisamente a ustedes, tiene que ver con el Congreso. Nuestro Partido ha cumplido una tarea histórica pendiente: el concretar su Congreso. Durante décadas hemos bregado por conseguirlo pero sólo ha sido la guerra popular la que nos ha dado las condiciones para plasmarlo; así nos decimos, el Primer Congreso es hijo de dos grandes padres: del Partido y de la Guerra Popular. Este Congreso marca un hito, como dicen los documentos oficiales, un hito de victoria, pues, en él nuestro Partido ha hecho un balance del largo camino recorrido; ha establecido su base de unidad partidaria, en sus tres elementos: la ideología, esto es, el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento Gonzalo, el programa y la línea política general; y, además, también este Congreso ha establecido sólidas bases para marchar a la conquista del Poder en perspectiva. El Congreso, pues, es una gran victoria y es ésta una principal razón por la cual damos esta entrevista. También tiene que ver la situación que vive nuestro país, la profunda crisis; tiene que ver con el desarrollo cada vez más creciente y poderoso de la lucha de clases de las masas; y, con la situación internacional, con cómo la revolución en el mundo es la tendencia principal. En cuanto a por qué damos esta entrevista a El Diario; una simple y sencilla razón: porque es una trinchera de combate y hoy la única tribuna que realmente sirve al pueblo. Creemos que si bien hubiéramos podido entrevistarnos con otros, incluso extranjeros, más conveniente y acorde con los principios es entrevistarnos precisamente con un periódico como El Diario que realmente brega todos los días en condiciones difíciles para servir al pueblo, a la revolución. Esa es la razón. EL DIARIO: Presidente Gonzalo, ¿Ud. ha sopesado la implicancia que puede tener esta entrevista? Yo le hago una pregunta, ¿no corre usted ningún riesgo al hablar públicamente en esta oportunidad? PRESIDENTE GONZALO: Los comunistas siéndolo no tenemos miedo a nada; más, el Partido nos ha forjado en retar a la muerte y llevar la vida en la punta de los dedos para entregarla en el momento que la revolución nos lo demande. Entendemos que esta entrevista más bien tiene importancia, trascendencia: sirve a nuestro Partido, sirve a la revolución, sirve a nuestro pueblo, sirve a nuestra clase y sirve también, por qué no decirlo, al proletariado internacional y a los pueblos del mundo, a la revolución mundial. Cualquier riesgo así no es nada, máxime -reitero- si estamos formados como el Partido nos ha hecho. I. CUESTIONES DE IDEOLOGIA EL DIARIO: Presidente, ahora hablemos de uno de los sustentos ideológicos del PCP, el maoísmo. ¿Por qué considera que el maoísmo es la tercera etapa del marxismo? PRESIDENTE GONZALO: Este es un punto de vista vital y de inmensa trascendencia. Para nosotros, el marxismo es un proceso de desarrollo y este grandioso proceso nos ha dado una nueva, tercera y superior etapa. ¿Por qué decimos que estamos frente a una nueva, tercera y superior etapa, que es el maoísmo? Decimos esto porque viendo las tres partes integrantes del marxismo es palmariamente evidente que el Presidente Mao Tsetung ha desarrollado cada una de estas tres partes. Así, simplemente para enumerar: en la filosofía marxista nadie puede negar su grandioso desarrollo en la dialéctica, centralmente en la ley de la contradicción estableciendo que es la única ley fundamental; si nos planteáramos el problema de la economía política, podemos decir que en este campo basta destacar dos cosas: una, para nosotros de importancia inmediata y concreta, el capitalismo burocrático, y, dos, el desarrollo de la economía política del socialismo, pues, en síntesis, podríamos decir que es él quien ha realmente establecido y desarrollado la economía política del socialismo; en cuanto al socialismo científico bastaría con destacar la guerra popular, pues, es con el Presidente Mao Tsetung que el proletariado internacional logra una teoría militar cabal, desarrollada y nos da así la teoría militar de la clase, del proletariado, con aplicación en todas partes. Creemos que estas tres cuestiones nos demuestran que hay un desarrollo de carácter universal. Visto el problema de esta manera, entonces estamos frente a una nueva etapa y la llamamos tercera porque el marxismo tiene dos etapas precedentes: la de Marx y la de Lenin, de ahí que hablemos de marxismo-leninismo. En lo pertinente a superior: en el maoísmo, la ideología del proletariado universal logra el más alto desarrollo adquirido hasta hoy, su más alta cumbre; pero en el entendimiento de que el marxismo es una -disculpen la reiteración- unidad dialéctica que da grandes saltos y esos grandes saltos son los que generan etapas. Así, para nosotros, lo que existe en el mundo hoy es marxismo-leninismo-maoísmo y principalmente maoísmo. Consideramos que en la actualidad ser marxistas, ser comunistas, nos demanda necesariamente ser marxista-leninista-maoístas y principalmente maoístas; de otra manera no podríamos ser comunistas verdaderos. Quisiera destacar una situación que es poco tenida en cuenta y que bien merece estudiar a fondo en la actualidad; me refiero al desarrollo que ha hecho el Presidente Mao Tsetung de la gran tesis de Lenin sobre el imperialismo. Esto es de suma importancia hoy y en la perspectiva histórica en la cual nos desenvolvemos. En el mismo plan simplemente enumerativo podríamos destacar lo siguiente: ha establecido la ley del imperialismo cuando nos plantea que éste crea disturbios y fracasa para volverlos a generar y volver a fracasar y así hasta su ruina final; también nos ha especificado un momento dentro del proceso de desarrollo del imperialismo, lo que él llamó "los próximos 50 a 100 años", años, como él dijera, sin igual en la Tierra y en los cuales, entendemos, hemos de barrer al imperialismo y a la reacción de la faz del globo; también nos ha precisado un período que no podemos soslayar hoy menos que nunca, él nos dijo "se ha abierto un período de lucha contra el imperialismo norteamericano y el socialimperialismo soviético"; además todos conocemos su gran tesis estratégica de que "el imperialismo y todos los reaccionarios son tigres de papel", esta tesis es de extraordinaria importancia y debemos tener muy presente que esa misma tesis la aplicó el Presidente Mao al imperialismo norteamericano y al socialimperialismo soviético a quienes no hay que temerles. Pero también debemos insistir en que se tenga en cuenta cómo concibe el desarrollo de la guerra siguiendo precisamente lo que Lenin planteara sobre la era de guerras que se había abierto en el mundo; el Presidente nos ha enseñado que un país, una nación, un pueblo, aún pequeños, si así lo fueren, pueden vencer al más poderoso explotador y dominante de la Tierra si es que se atreven a tomar las armas; nos ha enseñado además cómo entender el proceso de la guerra y cómo no caer nunca bajo el chantaje nuclear. Creo que estas son algunas cuestiones que deberíamos tener en cuenta para comprender cómo el Presidente Mao Tsetung desarrolló la gran tesis de Lenin sobre el imperialismo. ¿Y por qué insisto en esto? Porque nosotros entendemos que así como Lenin se levanta sobre la gran obra de Marx, el desarrollo hecho por el Presidente Mao Tsetung se levanta sobre la grandiosa obra de Marx y de Lenin, sobre el marxismoleninismo. No podríamos nunca entender maoísmo sin marxismo-leninismo. Consideramos que estas cosas son de mucha importancia hoy y para nosotros ha sido decisivo llegar a comprender en la teoría y en la práctica el maoísmo como una tercera, nueva y superior etapa. EL DIARIO: Presidente Gonzalo, ¿Ud, consideraría de que José Carlos Mariátegui si estuviera vivo asumiera los aportes y las tesis del Presidente Mao? PRESIDENTE GONZALO: En síntesis, Mariátegui era marxista-leninista; más aún, en él, en Mariátegui, en el fundador del Partido, encontramos tesis similares a las que el Presidente Mao ha establecido a nivel universal. En consecuencia, para mí concretamente, Mariátegui sería hoy marxistaleninista-maoísta; y esto no es especulación, es simplemente producto de la compresión de la vida y obra de José Carlos Mariátegui. EL DIARIO: Bueno, pasando a otra pregunta. ¿Qué es la ideología del proletariado y qué papel cumple en los procesos sociales del mundo actual? ¿Qué significado tienen los clásicos, Marx, Lenin y Mao, para el PCP? PRESIDENTE GONZALO: Hoy, mañana y en estas tormentosas décadas que estamos viviendo, vemos la grandiosa importancia y trascendencia que tiene la ideología del proletariado. Primero - aunque recalemos en cosas conocidas- es la teoría y la práctica de la última clase de la historia, la ideología del proletariado es el producto de la lucha del proletariado internacional; también implica el estudio y la comprensión de todo el proceso histórico de la lucha de clases antes del proletariado, de la lucha del campesinado particularmente de éste por las grandes gestas que ha librado, la comprensión y el estudio de lo más alto que ha dado la ciencia. En síntesis, la ideología del proletariado, la gran creación de Marx, es la más alta concepción que ha visto y verá la Tierra; es la concepción, es la ideología científica que por vez primera dotó a los hombres, a la clase principalmente y a los pueblos, de un instrumento teórico y práctico para transformar el mundo. Y todo lo que él previera hemos visto cómo se ha ido cumpliendo. El marxismo se ha ido desarrollando, hemos devenido marxismoleninismo y hoy marxismo-leninismo-maoísmo y vemos cómo esta ideología es la única capaz de transformar el mundo y hacer la revolución y de llevarnos a la meta inclaudicable: el comunismo. Su importancia es extraordinaria. Quisiera resaltar de paso esto: es ideología pero científica. Sin embargo deberíamos comprender muy bien que no podemos hacer concesión alguna a las posiciones burguesas que quieren reducir la ideología del proletariado a un simple método, pues, de esa manera se la prostituye, se la niega. Para nosotros la ideología del proletariado y, disculpen la insistencia, pero el Presidente Mao dijo "no basta decir una vez sino cien veces, no basta decir a pocos sino a muchos", acogiéndome a esto digo, la ideología del proletariado, el marxismo-leninismo-maoísmo y hoy principalmente el maoísmo, es la única ideología todopoderosa porque es verdadera y los hechos históricos lo están demostrando. Es producto, aparte de lo antedicho, de la extraordinaria labor de figuras históricas extraordinarias como Marx, Engels, Lenin, Stalin y el Presidente Mao Tsetung, para destacar notables cumbres; pero entre ellas resaltamos a tres: a Marx, a Lenin y al Presidente Mao Tsetung como las tres banderas que se concretan, una vez más, en marxismo-leninismo-maoísmo y principalmente maoísmo. Y nuestro problema hoy ¿cuál es precisamente?, es enarbolarlo, defenderlo y aplicarlo y bregar esforzadamente sirviendo a que sea mando y guía de la revolución mundial. Sin ideología del proletariado no hay revolución, sin ideología del proletariado no hay perspectiva para la clase y el pueblo, sin ideología del proletariado no hay comunismo. EL DIARIO: Hablando de ideología, ¿por qué el Pensamiento Gonzalo? PRESIDENTE GONZALO: El marxismo siempre nos ha enseñado que el problema está en la aplicación de la verdad universal. El Presidente Mao Tsetung fue sumamente insistente en este punto; si el marxismo-leninismo-maoísmo no se aplica a una realidad concreta no se puede dirigir una revolución, no se puede transformar el viejo orden, ni destruirlo ni crear un orden nuevo. Es la aplicación del marxismo-leninismo-maoísmo a la revolución peruana la que ha generado el pensamiento gonzalo, en la lucha de clases de nuestro pueblo, del proletariado principalmente, de las incesantes luchas del campesinado y en el gran marco estremecedor de la revolución mundial; es en medio de todo este fragor, aplicando de la manera más fiel posible la verdad universal a las condiciones concretas de nuestro país, como se ha plasmado el pensamiento gonzalo. Este fue antes nominado pensamiento guía; y si hoy el Partido en el Congreso ha sancionado pensamiento gonzalo es porque se ha producido un salto en ese pensamiento guía, precisamente en el desarrollo de la Guerra Popular. En síntesis, el pensamiento gonzalo no es sino la aplicación del marxismo-leninismo-maoísmo a nuestra realidad concreta; esto nos lleva a que específicamente es principal para nuestro Partido, para la guerra popular y para la revolución en nuestro país, subrayo específicamente principal. Pero, para nosotros, viendo la ideología en términos universales lo principal es el maoísmo reiterándolo una vez más. EL DIARIO: ¿Cómo actúa el revisionismo y cómo lo combaten Uds.? PRESIDENTE GONZALO: Primeramente quisiéramos recordar que el marxismo no ha dado un paso en la vida sino en medio de lucha; y en ese proceso de desarrollo del marxismo, surgió el viejo revisionismo que se hundió en la I Guerra Mundial. Pero luego los comunistas nos enfrentamos a un nuevo revisionismo, el revisionismo contemporáneo que comenzó a desenvolverse con Jruschov y sus secuaces y actualmente desata una nueva ofensiva contra el marxismo teniendo como centros más importantes la Unión Soviética y China. El revisionismo insurgió pregonando una negación completa del marxismo, el revisionismo contemporáneo ha vuelto a hacer lo mismo, como siempre apuntando contra la filosofía marxista para sustituirla por una filosofía burguesa; yendo contra la economía política, particularmente para negar la pauperización creciente y la inevitabilidad del hundimiento del imperialismo; afanándose por falsear y torcer el socialismo científico para oponerse a la lucha de clases y la revolución, pregonar el cretinismo parlamentario y el pacifismo. Todas estas situaciones han sido desenvueltas por los revisionistas y así han apuntado y apuntan a la restauración del capitalismo, a impedir y socavar la revolución mundial, a negar la invicta concepción de la clase. Pero aquí merece precisar algunos puntos para concretar: el revisionismo actúa como cualquier imperialismo; por ejemplo la Unión Soviética, el socialimperialismo soviético predica y aplica el cretinismo parlamentario, monta y maneja acciones armadas en función de conquistar la hegemonía mundial, genera agresiones, contrapone pueblos contra pueblos, lanza masas contra masas, divide a la clase y al pueblo; el revisionismo soviético combate de mil y una maneras todo lo que es verdaderamente marxista y sirve a la revolución. Nosotros somos un ejemplo de eso. Así el socialimperialismo de la URSS en el mundo desarrolla un protervo plan para convertirse en superpotencia hegemónica usando todos los medios a su alcance: entre los cuales hay que destacar el mantenimiento de falsos partidos, comunistas de membrete, "partidos obreros burgueses" como decía Engels. Y de igual manera actúa el revisionismo chino y todo revisionismo según sus condiciones y bastón de mando que siguen. Así, para nosotros, el problema es combatir al revisionismo y combatirlo implacablemente. Hay que recordar, se nos ha enseñado que no se puede combatir al imperialismo sin combatir al revisionismo, y nuestro Congreso dice hay que combatir al imperialismo, al revisionismo y a la reacción mundial indesligable e implacablemente. ¿Cómo combatirlo? En todos los planos, partiendo de los tres planos clásicos: en lo ideológico, en lo económico y en lo político; en los tres planos tenemos que combatirlos. Si nosotros no cumpliéramos con combatir al revisionismo no seríamos comunistas. Un comunista tiene la obligación de combatir al revisionismo, incansable e implacablemente. Nosotros lo hemos combatido. Sí, lo hemos combatido y desde sus comienzos; hemos tenido la suerte de poder aportar aquí, en nuestro país, a expulsarlo del Partido en el año 1964, realidad que siempre quiere ocultarse. Debe quedar bien claro que la inmensa mayoría del Partido Comunista se unió tomando las banderas de la lucha contra el revisionismo que el Presidente Mao Tsetung había enarbolado; que se apuntó y se golpeó al revisionismo en las filas del Partido Comunista de entonces hasta expulsar a Del Prado y su pandilla. De ahí hasta hoy seguimos combatiendo al revisionismo y no solamente aquí sino también en el extranjero. Lo combatimos internacionalmente, combatimos al socialimperialismo soviético de Gorbachov, al revisionismo chino de ese protervo Teng Siao-ping, el revisionismo albanés de Ramiz Alía, ese seguidor del revisionista Hoxha; como combatimos a todos los revisionistas que siguen el bastón de mando del socialimperialismo o del revisionismo chino o albanés o de quien fuere. EL DIARIO: Presidente. ¿En el caso peruano cuál sería la expresión más elevada del revisionismo? Me refiero a sus exponentes. PRESIDENTE GONZALO: El llamado como etiqueta Partido Comunista Peruano, ése que publica o publicaba Unidad, quinta columna del revisionismo soviético, ése que encabeza el encallecido revisionista Jorge Del Prado, a quien algunos consideran un "consagrado revolucionario". Y, en segundo lugar, Patria Roja, esa agencia del revisionismo chino con sus caudillos adoradores de Teng. EL DIARIO: ¿Ud. cree que la influencia del revisionismo en las masas populares del país crea situaciones adversas para la revolución? PRESIDENTE GONZALO: Si tomamos en cuenta lo que el propio Lenin nos enseñó y el Presidente Mao lo ha vuelto a reiterar desarrollándolo, el revisionismo es una avanzada de la burguesía en las filas del proletariado y de ahí deriva el que escinde, divide el movimiento comunista y los partidos comunistas, de ahí deriva el que escinde, divide el movimiento sindical, escinde, divide el movimiento popular. El revisionismo obviamente es un cáncer, un cáncer que tiene que ser implacablemente barrido, de otra forma no podremos avanzar en la revolución; y recuérdese lo que dijo Lenin, sintéticamente, hay que forjar en dos cuestiones, forjar en la violencia revolucionaria y forjar en la lucha implacable contra el oportunismo, contra el revisionismo. En nuestro país creo que hay que ver no solamente esta cuestión para considerar la situación de las masas. Hay que ver también el problema de lo que Engels llamó el "colosal montón de basura"; nos enseñó que un movimiento que tiene décadas, como lo tiene el movimiento del proletariado en nuestro país y más aún el del pueblo en general, genera basura que tiene que ir siendo barrida parte por parte. Esto también hay que considerar; pensamos que es una necesidad. ¿Cuánto puede influenciar en las masas? En las masas lo que hacen los revisionistas es servir a la capitulación ante la reacción interna, en concreto, ante la gran burguesía y los terratenientes, ante la dictadura terrateniente-burocrática que es el actual Estado Peruano. Internacionalmente, capitulan ante el imperialismo y sirven a la hegemonía del socialimperialismo o a los afanes de potencias entre las cuales hoy la actual China está desenvolviéndose. Creemos que conforme la revolución con la guerra popular se desarrolla, conforme la lucha de clases se agudiza el pueblo, el proletariado van comprendiendo más y más cada vez; y, por otro lado, necesariamente conforme ven actuar a los revisionistas y oportunistas de toda laya traicionando cada día y los verán más mañana, tendrán el proletariado y el pueblo que cumplir con su misión de barrerlos de todos los rincones lo más que se pueda, porque lamentablemente no se puede acabar de una sola vez según nos enseñara Engels, pues son parte del "colosal montón de basura". EL DIARIO: ¿Consideraría usted que el revisionismo está siendo derrotado en el país definitivamente?. PRESIDENTE GONZALO: Reiterando lo enseñado por los fundadores del marxismo; conforme ellos actúan participando en el Estado reaccionario, las masas comprenderán su nefasta labor; conforme los ve actuar, conforme todo el pueblo y la clase los ve actuar no pueden menos que ir comprendiendo cada vez más su nocivo papel, su condición de traficantes, de vendeobreros, de oportunistas y traidores. El revisionismo ya comenzó a perder la partida hace buen tiempo atrás, no es sólo con la Guerra Popular; el revisionismo ya comenzó a perder la partida cuando fue expulsado de las filas del Partido, porque ahí comenzó a formarse otra hornada de consecuentes comunistas que son los que después han devenido en éstos que hoy, bajo el Partido Comunista del Perú, dirigen la Guerra Popular; y, pensamos que las masas con ese instinto de clase del cual hablaba Mariátegui, cada vez más pronto comprenderán como ya están comprendiendo. El revisionismo ya perdió la partida, el resto es tiempo; el problema ya está definido la basura ha comenzado a ser barrida, incendiada; reitero, el problema es tiempo. La partida ya la comenzaron a perder hace muchos años. Y si fuéramos más allá, a los principios, la partida la perdieron desde que se convirtieron en revisionistas, pues la partida se pierde desde que se abandonan los principios, desde ahí. El resto es cómo la lucha de clases se desarrolla y cómo un Partido como el nuestro es capaz de cumplir su papel y cómo las masas lo sustentan, lo apoyan y llevan adelante, cómo van comprendiendo que es su Partido, que defiende sus intereses; y son las propias masas las que darán buena cuenta y justa sanción a quienes por decenios han traficado y siguen traficando y también condenarán, sancionarán a quienes quieran traficar o quienes comiencen a hacerlo. EL DIARIO: ¿Qué opinión le merece la Nueva Evangelización planteada por el Papa? PRESIDENTE GONZALO: Marx nos enseñó "la religión es el opio del pueblo", es una tesis marxista plenamente válida hoy y mañana lo seguirá siendo; que la religión es un fenómeno social producto de la explotación y que se irá extinguiendo conforme la explotación vaya siendo barrida y una nueva sociedad surgiendo. Estos son principios que no podemos soslayar y que debemos tener siempre presentes. Ligado a lo anterior está recordar también que el pueblo tiene religiosidad, lo que jamás ha sido ni será óbice para que luche por sus profundos intereses de clase sirviendo a la revolución y en concreto a la guerra popular; debiendo quedar sumamente claro que esa religiosidad la respetamos como un problema de libertad de conciencia religiosa, como lo reconoce el programa sancionado por el Congreso. Así que la cuestión planteada tiene que ver, a nuestro juicio, con la jerarquía eclesiástica, con el Papado, con esa vieja teocracia. Esa vieja teocracia supo organizarse y devenir en un poderoso instrumento ya en la época romana, luego ajustarse a las condiciones de la feudalidad y adquiere un inmenso poder, más grande aún; pero en cada circunstancia sofrenando la lucha popular y defendiendo los intereses de los opresores y explotadores, ideológicamente como un escudo reaccionario, para luego de cambiadas las condiciones adaptarse a la nueva situación. Esto lo podemos ver claramente si pensamos en la relación entre la Iglesia y la revolución burguesa, la vieja revolución burguesa, me refiero a la de Francia por ejemplo; la iglesia defendió tenazmente a la feudalidad, luego a través de muchas contiendas y después de haber sido derrocada la feudalidad, reitero a través de muchas contiendas-, se va ajustando al orden burgués y otra vez pasa a ser un instrumento al servicio de los nuevos explotadores y opresores. En la situación actual entonces qué vemos; hay una perspectiva histórica incontenible, la revolución proletaria mundial la nueva era iniciada en 1917, es el problema de cómo el proletariado dirige revoluciones para cambiar el orden caduco y generar una nueva y verdadera sociedad, el comunismo. Pues bien, ante esto ¿la Iglesia cómo actúa?, actúa con la experiencia anterior, quiere buscar sobrevivir, de ahí la celebración del Concilio Vaticano II donde la Iglesia busca condiciones que le permitan, primero, defender el orden viejo como siempre lo ha hecho y, luego, ajustarse y acomodarse para servir a nuevos explotadores, para seguir superviviendo, eso es lo que busca, eso es en esencia el Vaticano II. El problema de la "nueva evangelización" se refiere expresamente a cómo ven los jerarcas eclesiásticos, el Papado en concreto, el papel de América Latina; como ellos mismos lo dicen, la mitad de los católicos del mundo están en América Latina -así decía ya el actual Papa en el año 84-. En consecuencia, están buscando utilizar el medio milenio del descubrimiento de América para llevar adelante un llamado movimiento de "nueva evangelización". En síntesis lo que ellos piensan es esto: con el descubrimiento de América se inició la evangelización en el año 1494, oficialmente; pues bien, al cumplirse este nuevo centenario quieren desarrollar una "nueva evangelización" en función de defender el bastión, la mitad de su feligresía, la mitad del bastión que sustenta su poder, eso es lo que buscan. Así, los jerarcas, el Papado apuntan a defender sus posiciones en América y servir al imperialismo norteamericano que es quien domina principalmente en América Latina. Pero hay que entender este plan dentro de una campaña y un plan mundiales, ligado a las relaciones con la Unión Soviética con motivo del milenio de su cristianización, o los vínculos con el revisionismo chino, las acciones de la Iglesia en Polonia, en Ucrania, etc; es un plan mundial, dentro de eso juega la "nueva evangelización". Pretenden como siempre defender el orden social existente, ser su escudo ideológico porque la ideología de la reacción, la ideología del imperialismo ha caducado, y después acomodarse y seguir sobreviviendo, mas la perspectiva será diferente, no como fue antes, se seguirá la ley que Marx estableció: la religión se irá disolviendo conforme vaya destruyéndose y disolviéndose la explotación y la opresión; y como ellos sirven a clases explotadoras y la que viene no es una clase explotadora, el Papado no podrá sobrevivir; y la religiosidad tendrá que irse disolviendo, entretanto hay que reconocer la libertad de conciencia religiosa hasta que los hombres, avanzando en nuevas condiciones objetivas, puedan tener una conciencia clara, científica y transformadora del mundo. Para nosotros, en consecuencia, habría que ver, en síntesis, la "nueva evangelización" dentro de ese plan de la Iglesia por sobrevivir en las nuevas condiciones de una transformación que sabe que necesariamente se viene. EL DIARIO: De acuerdo a la definición que hace Ud., Presidente, ¿se podría concluir -o Ud. podría indicar esto- de que las continuas visitas del Papa al país tienen alguna relación con la guerra popular y el apoyo que éste estaría dando al régimen de García Pérez? PRESIDENTE GONZALO: Yo creo que es correcto, realmente es así. Generalizando, sus visitas a América tienen que ver con la importancia que América Latina tiene y sus visitas al Perú hasta con cómo incluso emplazarnos a deponer las armas a la vez que bendice las armas genocidas, como lo ha hecho en reiteradas ocasiones, en las dos veces que ha venido al Perú. EL DIARIO: Ahora, Presidente, ¿cuál sería la actitud del PCP en torno a la teocracia religiosa cuando este Partido asuma el Poder del Estado en el país? PRESIDENTE GONZALO: El marxismo nos ha enseñado separar Iglesia de Estado, es lo primero que hacemos; y en segundo lugar, reitero, lo que hacemos es respetar la libertad de conciencia religiosa de las personas aplicando el principio plenamente: la libertad de creer como también la libertad de no creer, la de ser ateo. De esa manera. II. SOBRE EL PARTIDO EL DIARIO: Y pasando a otro tema tan importante en esta entrevista que es el Partido, ¿cuáles considera Ud. que son las lecciones más importantes del proceso del PCP? PRESIDENTE GONZALO: Sobre el proceso del Partido y sus lecciones. Nosotros comprendemos la historia del Partido en tres partes correlativas con los tres momentos de la sociedad peruana contemporánea. El primer momento, la primera parte, la Constitución del Partido. En ella hemos tenido la suerte de contar con José Carlos Mariátegui, un marxista-leninista a carta cabal, pero Mariátegui, como tenía que ser, fue combatido en vida, fue negado, se abandonó su línea y nunca se cumplió con el Congreso de Constitución que él dejara como tarea pendiente pues el congreso que le llaman de constitución aprobó -como bien sabemos _ la llamada línea de "unidad nacional" totalmente opuesta a las tesis de Mariátegui; así el Partido va a ir despeñándose en el oportunismo, sufre la influencia del browderismo al cual está ligado Del Prado y luego la del revisionismo contemporáneo. Todo este proceso va a llevarnos a un segundo momento, el de la Reconstitución del Partido: ésta es una lucha en síntesis contra el revisionismo, es un período que comienza a desenvolverse desde los comienzos de los 60 en forma ya más clara y más intensa; este proceso va a llevar a las bases del Partido a unirse contra esa dirección revisionista y, como dijera antes, a expulsarla en la IV Conferencia de enero del 64. El proceso de Reconstitución va a desenvolverse en el Partido hasta el año 78-79, en torno a esos años va a terminar este período y se va a entrar a un tercer momento, el momento de la Dirección de la guerra popular que es en el cual estamos viviendo. ¿Qué lecciones podríamos sacar? La primera lección, la importancia de la base de unidad partidaria y su relación con la lucha de dos líneas; sin esta base y sus tres elementos [1) marxismo-leninismomaoísmo, pensamiento gonzalo, 2) programa y 3) línea política general] no hay sustento para la construcción ideológico-política del Partido; pero sin lucha de dos líneas no hay base de unidad partidaria. Sin una firme y sagaz lucha de dos líneas en el Partido no puede cogerse firmemente la ideología, no puede establecerse el programa ni la línea política general así como tampoco defenderlos, aplicarlos y menos desarrollarlos. La lucha de dos líneas para nosotros es fundamental y tiene que ver con concebir el Partido como una contradicción en concordancia con el carácter universal de la ley de la contradicción. Una segunda lección, la importancia de la guerra popular; un Partido Comunista tiene como tarea central la conquista del Poder para la clase y el pueblo; un Partido una vez constituido y considerando las condiciones concretas tiene que bregar por plasmar esa conquista y solamente puede hacerlo mediante la guerra popular. Tercera lección importante es la forja de una dirección, la dirección es clave; y, una dirección no se improvisa, requiere de largo tiempo, dura brega, ardua lucha para forjar una dirección, particularmente para que sea una dirección de la guerra popular. Una cuarta lección que podríamos sacar es la necesidad de construir la conquista del Poder, porque así como se hace la guerra popular para conquistar el Poder, hay que también construir esa conquista del Poder; ¿qué queremos decir?, que hay que generar organismos superiores a los de la reacción. Creemos que éstas son importantes lecciones. Una final es el internacionalismo proletario, en siempre desenvolverse como parte del proletariado internacional, siempre concebir la revolución como parte de la revolución mundial, desarrollar la guerra popular -como dice la consigna partidaria- sirviendo a la revolución mundial; ¿por qué?, porque un Partido Comunista al fin y al cabo tiene una meta final insustituíble: el comunismo, y a él, como ha sido establecido, ingresamos todos o no ingresa nadie. Creemos que éstas son las más saltantes lecciones que podríamos plantear. EL DIARIO: Presidente, ¿qué significado tiene José Carlos Mariátegui para el Partido Comunista del Perú? PRESIDENTE GONZALO: Para el PCP Mariátegui es su fundador, construyó el Partido sobre claras bases marxista-leninistas, lo dotó en consecuencia de una posición ideológica clara, para él el marxismo-leninismo era el marxismo de su época, de su momento; dotó al Partido de una línea política general; Mariátegui, el más grande marxista que ha dado América hasta hoy, nos dejó su más grande obra en la conformación del Partido Comunista del Perú. Nosotros comprendemos muy bien lo que implicó para el Partido su pérdida, pero debe quedar claro que él dio su vida misma por plasmar su gran obra; fundar el Partido le llevó la vida, es lo que queremos decir; pero no tuvo tiempo para cuajar y desarrollar el Partido -piénsese que él murió a menos de 2 años de constituirlo- y un Partido requiere tiempo para cuajar, desarrollar y para poder cumplir su tarea histórica. Quisiéramos precisar algo, ya el año 66 planteamos que nunca se debió abandonar el camino de Mariátegui y que el problema era retomar su camino y desarrollarlo, subrayo, desarrollarlo. ¿Por qué?, por cuanto a nivel mundial el marxismo ya había entrado a una nueva etapa, la del hoy maoísmo, y en nuestro propio país se había desarrollado particularmente el capitalismo burocrático, esto al margen de la inagotable lucha del proletariado y del pueblo peruano que nunca han dejado de luchar; por eso planteamos retomar a Mariátegui y desarrollarlo. Hemos servido a redescubrir a Mariátegui y su vigencia en cuanto a leyes generales porque son las mismas leyes sólo que especificadas en una nueva circunstancia nacional e internacional, como acabo de decir; hemos servido a eso. Pudiéramos decir muchas cosas pero más vale resaltar, creo, algunas. En el año 75 se publicó "Retomar a Mariátegui y reconstituir su Partido"; en ese breve documento demostramos, frente a la negación de muchos que hoy se dicen mariateguistas, que Mariátegui era marxista-leninista "convicto y confeso" como él mismo, con justeza y razón, dijera; hemos planteado los cinco elementos constitutivos de su línea política general. Hemos hecho ver que en Mariátegui se encuentran tesis similares a las del Presidente Mao, basta recordar cuestiones referentes al frente único o al importante problema de la violencia. Mariátegui dice "el Poder se conquista con la violencia y se defiende con la dictadura", "la revolución es el parto sangriento del presente" y a lo largo de muchos años de su gloriosa vida reiteró persistentemente el papel de la violencia revolucionaria y de la dictadura; también decía que por más mayoría que se pudiera tener en un parlamento podría servir para licenciar un gabinete pero nunca a la clase burguesa, sumamente claro; asimismo debemos destacar porque es clave en su pensamiento: Mariátegui era antirrevisionista. Pues bien, hemos lidiado en síntesis por retomar y desarrollar el camino de Mariátegui. Pero permítanme decir algo más: sería bueno preguntar a algunos que hoy se dicen mariateguistas qué pensaban de Mariátegui, lo negaban, clara y concretamente; me refiero a los del hoy PUM, sí, a esos que han provenido de la llamada "nueva izquierda", que pregonaban la caducidad de Mariátegui pues era cosa del pasado, así era de simple su argumentación en esencia. Pero más importante es aún; éstos y otros ¿son realmente mariateguistas?; supongamos Barrantes Lingán ¿qué tiene de mariateguista si es la negación completa de las claras tesis marxista-leninistas que en su momento sostuvo Mariátegui con firmeza y decisión?. Mariátegui nunca fue electorero, planteaba utilizar las elecciones como campaña de propaganda y agitación; fueron revisionistas como Acosta quienes sostuvieron el 45 que esa tesis ya había caducado y que el problema era ganar curules; y eso es lo que hacen hoy los falsos mariateguistas, redomados impenitentes del cretinismo parlamentario. Nosotros, en síntesis, pensamos así: Mariátegui es el fundador del Partido, su papel está definido en la historia, nadie lo podrá negar jamás y su obra es imperecedera; pero era una necesidad continuarla, desarrollarla precisamente prosiguiendo su camino; la prosecución de un fundador marxista-leninista como era Mariátegui en cuyo pensamiento hay tesis -reitero- similares a las del Presidente Mao, es lógicamente ser marxista-leninista-maoístas como somos nosotros, los miembros del Partido Comunista del Perú. Nosotros pensamos que la figura del fundador es un grandioso ejemplo y tenemos a timbre de orgullo haber sido fundados por él. EL DIARIO: Presidente, ¿qué influencia tuvo José Carlos Mariátegui en el desarrollo clasista de los trabajadores peruanos? PRESIDENTE GONZALO: Mariátegui cumplió una gran tarea en medio de una intensa lucha y disculpen que abuse de su pregunta para agregar otras cosas. El ya era marxista antes de ir a Europa, primera cosa que quisiéramos nos permitan insistir pues siempre se dice que allí devino marxista; que allí se desarrollara, eso es otra cosa, obviamente la experiencia europea le fue sumamente importante. Mariátegui libró una lucha muy importante en el plano ideológico; una lucha por lo que él llamaba socialismo, término que el usaba, según explicó, porque aquí no estaba manido ni prostituido como en Europa, pero lo que él difundía y sostenía era el marxismo-leninismo. Libró una lucha política de gran trascendencia por la conformación del Partido y esto tiene que ver con un problema que hoy día está siendo llevado y traído y torcido artera y burdamente, el problema del debate entre Mariátegui y Haya de la Torre; la cuestión, en síntesis, es bien clara: Mariátegui planteó la formación de un Partido Comunista, de un Partido del proletariado; Haya de la Torre la formación de un frente similar al Kuomintang pues alegaba que el proletariado en el Perú era minúsculo e inmaduro para poder generar un Partido Comunista, ésas eran argucias nada más; es bueno tenerlo en cuenta, pero además el Apra cuando se funda en el Perú lo hace a semejanza del Kuomintang de Chiang Kaishek, esto es, del verdugo de la revolución china que dio el golpe contrarrevolucionario del año 27, esto debemos tenerlo muy presente. ¿Por qué resalto este problema?, porque ahora se nos está hablando de un haya-mariateguismo, hasta de un haya-leninismo, ¡absurdo!; Mariátegui sí fue marxista-leninista, Haya nunca ha sido ni marxista ni leninista, ¡nunca!, se ha opuesto siempre a las tesis de Lenin. Esto es necesario destacar porque no se puede consentir estas infamias que al fin y al cabo no son sino un frangollo, un engendro para fomentar una alianza de la IU con el Apra en la actualidad, ése es el fondo, el resto supercherías bastardas. Bien, pero voy a su pregunta. Todo esto lo hizo Mariátegui ligado a la masa, al proletariado, al campesinado; él está teórica y prácticamente ligado a la conformación de la CGTP que es producto de su trabajo, principalmente, pero de la CGTP que él fundó, de ésa de la parte final de los años 20, no de la actual cgtp que es la negación completa de lo que Mariátegui planteara. Desarrolló también trabajo con el campesinado; el problema campesino en él es sustantivo, es el problema de la tierra y en esencia el del indio como muy bien lo dijera. Asimismo desarrolló trabajo con intelectuales, como con mujeres y jóvenes. Mariátegui ha desarrollado pues su labor ligado a las masas dándoles camino, estableciendo sus formas orgánicas y actuando decisivamente para el desarrollo orgánico del proletariado y del pueblo en el Perú. EL DIARIO: Seguimos con el mismo tema. ¿Por qué el PCP le da tanta importancia a la fracción, aquella fracción que reconstituyó el Partido? PRESIDENTE GONZALO: Es un tema importante y poco conocido fuera de las filas del Partido. Comencemos por esto, Lenin nos planteó el problema de la fracción concibiéndola como el conjunto de hombres sólidamente cohesionados para actuar aplicando los principios en su forma más pura, y que una fracción debería plantear abiertamente sus posiciones políticas para llevar la lucha y desarrollar el Partido; es este concepto leninista que hemos tomado para formar la fracción. La fracción comienza a formarse en los inicios de los años 60 y está ligada a la lucha entre marxismo y revisionismo a nivel mundial que obviamente repercutió en nuestro país. La fracción comienza a plantearse el problema de cómo desenvolver la revolución en el Perú y va a encontrar estas cuestiones en las obras del Presidente Mao Tsetung que por entonces comenzaban a llegar. ¿Qué cuestiones nos planteamos?, nos planteamos que la revolución en el Perú necesitaba de un Partido bien sustentado ideológica y políticamente, que el campesinado era la fuerza principal en nuestra sociedad en tanto que el proletariado era la clase dirigente y que el camino que teníamos que seguir era del campo a la ciudad; así nos hemos desenvuelto. La fracción ha servido a la lucha contra el revisionismo de Del Prado y hemos sido parte de todos aquellos que nos unimos para barrer de las filas del Partido y expulsar a la camarilla de Del Prado. La fracción va a seguirse desenvolviendo en una circunstancia en que en el Partido se dan varias fracciones, una fracción encabezada por Paredes y otras dos fracciones que actuaban encubiertamente, no aplicando los criterios leninistas de fracción sino actuando como un partido dentro de otro, me refiero a Patria Roja, con su llamado "grupo Ching-kang", y al autodenominado "grupo bolchevique"; y la fracción nuestra cuyo centro era la región de Ayacucho. La fracción se abocó a plantear cómo -ya habiendo definido línea en la V Conferencia del año 65- debería verse el problema de los tres instrumentos de la revolución; esto va a atizar una lucha interna y mal conducida, huérfanos de suficiente cohesión el Partido va a explosionar. Así, primero va a salir Patria Roja; pero salió expulsada del Partido por seguir una línea oportunista de derecha, por negar al Presidente Mao Tsetung, por negar a Mariátegui, por negar la existencia de situación revolucionaria en el Perú. Quedaron tres fracciones. Luego, en la VI Conferencia del año 69, se acordó la base de unidad partidaria y la Reconstitución del Partido, dos problemas que había planteado la fracción, así como el año 67 había planteado cuestiones fundamentales en una reunión de la comisión política ampliada de entonces; Paredes y su grupo no estaban de acuerdo con la Reconstitución del Partido ni con la base de unidad partidaria y montaron un plan para volar el Partido pues no podían controlarlo, ése fue su plan siniestro. Se libró una dura lucha contra ese liquidacionismo de derecha; de esta forma vamos a quedar dos fracciones: la nuestra y la del autodenominado "grupo bolchevique", éste va a desenvolver un liquidacionismo de izquierda, planteaban posiciones tales como que había estabilidad y en consecuencia no había situación revolucionaria, que el fascismo lo destruía todo, que no se podía hacer trabajo de masas, que había que formar militancia en seminarios, etcétera. Esta lucha llevó a que la fracción asuma sola la Reconstitución del Partido. Lenin dice que llegado un momento una fracción que es consecuente tiene que reconstruir el Partido; ésa fue la tarea que asumió la fracción. Aquí cabría preguntarse: por qué la fracción asumió la Reconstitución del Partido, por qué no se fundó otro como era la moda y lo sigue siendo hoy. La primera razón, porque el Partido fue fundado el 28 sobre claras bases marxista-leninistas y tenía entonces una gran experiencia, experiencia que está hecha de lecciones positivas y negativas, de ambas; pero hay algo más, Lenin nos dice que cuando uno está en un Partido que se desvía, se desenrumba o despeña en el oportunismo, tiene la obligación de bregar por reenrumbarlo y no hacerlo es un crimen político. Así, la fracción tiene la importancia de haber cumplido ese papel, de haber servido a la Reconstitución del Partido a partir de su construcción ideológico-política, basándose en el maoísmo, que entonces llamábamos pensamiento maotsetung y en el establecimiento de una línea política general. La fracción tiene el gran mérito de haber reconstituido el Partido y teniéndolo había ya el instrumento, el "heroico combatiente", el Partido Comunista de nuevo tipo, marxista-leninista-maoísta, la vanguardia política organizada, y no la "organización político-militar" como erroneamente suelen decir, el Partido necesario para lanzarse a la conquista del Poder con las armas en la mano a través de la guerra popular. EL DIARIO: ¿Qué cambios se han producido en el Partido con la guerra popular? PRESIDENTE GONZALO: Lo primero, lo principal, en base al trabajo anterior la guerra popular nos ha servido para llegar a comprender el maoísmo como una nueva, tercera y superior etapa del marxismo; nos ha servido para desarrollar la militarización del Partido y su construcción concéntrica; la Guerra Popular ha servido para forjar un ejército guerrillero popular pues éste se forjó, se formó recién en el año 1983. El Ejército Guerrillero Popular es importante, es la forma principal de organización correspondiente a que la guerra popular es la forma principal de lucha; el ejército guerrillero popular que hemos fundado, y se desarrolla pujante, está hecho a la luz de las tesis del Presidente Mao Tsetung y de una muy importante de Lenin sobre la milicia popular: nos dice que el ejército puede ser usurpado y manejársele para generar una restauración, por eso él planteó la milicia popular la que debía asumir funciones de ejército, de policía y de administración, una gran tesis que si bien no la llegó a plasmar por circunstancias históricas no quiere decir que no sea importante y válida, y tan válida es que el propio Presidente Mao se preocupó bastante por el problema de desarrollar la milicia popular. Entonces nuestro ejército sale con esos caracteres, está hecho teniendo en cuenta esas experiencias pero tiene su peculiaridad; nosotros tenemos una conformación de tres fuerzas: una fuerza principal, una fuerza local y una fuerza de base, no tenemos una milicia independiente sino que ella está en la base misma del ejército, está hecho con ese criterio; también podríamos decir que no podía hacerse el Ejército Guerrillero Popular de otra manera en nuestras condiciones concretas, pero realmente fueron los principios los que nos guiaron. Este ejército, no obstante esos caracteres, ha podido actuar en toda situación y puede tener los reajustes y reorganizaciones que sean necesarios. Otra cuestión derivada de la guerra popular, su principal logro, es el Nuevo Poder. El problema del Nuevo Poder lo vemos ligado al problema del frente, basándonos en lo que el Presidente Mao dice en su obra Sobre la Nueva Democracia; hemos tenido en cuenta además la larga y podrida experiencia del frentismo en el Perú donde se traficó y sigue traficándose con el frente único, ayer con el llamado "Frente de Liberación Nacional" y hoy principalmente con la autodenominada Izquierda Unida y otros engendros en formación como la cacareada "Convergencia Socialista". O sea, siempre tenemos en cuenta los principios y las condiciones concretas de nuestra realidad; por eso no entendemos por qué se nos dice dogmáticos, en fin, el papel aguanta todo. Esto nos ha llevado a formar el Frente Revolucionario de Defensa del Pueblo; acá hay otra cosa: fuimos nosotros quienes creamos el primer frente de defensa del pueblo en Ayacucho, ejemplo que después, como creación heroica, deformándolo, se apropió Patria Roja para hacer sus "FEDIP" hasta cuyo nombre es erróneo, pues si es un frente de defensa del pueblo ¿cómo no va a defender los intereses del pueblo?. El Frente Revolucionario de Defensa del Pueblo solamente lo construimos en el campo y lo concretamos como Poder, como comité popular y esos comités populares en un área conforman una base de apoyo y el conjunto de las bases es lo que llamamos la República Popular de Nueva Democracia en formación. El problema para las ciudades lo planteamos mediante la conformación del Movimiento Revolucionario de Defensa del Pueblo que también sirve a librar la guerra popular en la ciudad, a nuclear fuerzas, a socavar el orden reaccionario y a desenvolverse la aglutinación de las clases en función de la futura insurrección. Otros cambios tienen que ver con la forja de la militancia; obviamente la guerra forja de otra manera, templa, nos permite encarnar más profundamente la ideología, generar una militancia más férrea con el criterio de reto a la muerte o con el de arrancar a la muerte laureles de victoria. También podríamos decir que otro cambio en el Partido, ya en otro plano u otra repercusión, mejor diré, tiene que ver con la revolución mundial; la guerra popular ha permitido al Partido mostrar palmariamente cómo cogiendo el marxismo-leninismo-maoísmo podemos desenvolver una guerra popular sin estar sujetos a ningún bastón de mando, a ninguna superpotencia ni potencia alguna; a cómo es factible apoyándonos en nuestros propios esfuerzos llevar adelante la guerra popular. Todo esto ha dado al Partido un prestigio a nivel internacional como nunca antes ha tenido y no es ninguna orgullosa afirmación, lejos de nosotros la fatuidad, es un simple hecho; y nos permite también servir como nunca antes al desarrollo de la revolución mundial. De esa manera el Partido mediante la guerra popular está cumpliendo su papel de Partido Comunista del Perú. EL DIARIO: ¿Cómo participan los obreros y campesinos en el Ejército Guerrillero Popular? PRESIDENTE GONZALO: Participa principalmente el campesinado, pobre en especial, como combatientes y mandos en los diferentes niveles, de esa manera participan. Los obreros de igual forma aunque el porcentaje que ahora tenemos es insuficiente. EL DIARIO: Presidente, ¿dónde se desarrolla mós el nuevo Poder, en el campo o en la ciudad? PRESIDENTE GONZALO: El Nuevo Poder solamente lo desarrollamos en el campo, en las ciudades se dará en la parte final de la revolución. Es problema del proceso de la guerra popular; creo que si viéramos guerra popular ahí se puede tratar un poco más este punto. EL DIARIO: Presidente, cambiando un poco, en los documentos del Partido Comunista se plantea que Ud. es el Jefe del Partido y de la revolución. ¿Qué implicancia tiene y cómo se opone a la tesis revisionista del culto de la personalidad? PRESIDENTE GONZALO: Aquí tenemos que recordar la tesis de Lenin sobre el problema de la relación masas-clases-Partidos-jefes. Consideramos que la revolución, el Partido, la clase generan jefes, generan un grupo de jefes; en toda revolución ha sido así. Si pensamos, por ejemplo, en la Revolución de Octubre, tenemos a Lenin, Stalin, Sverdlov y unos cuantos nombres más, un pequeño grupo; lo mismo en la revolución China, también tenemos un pequeño grupo de jefes: el Presidente Mao Tsetung, y los camaradas Kang Sheng, Chiang Ching, Chan Chung-chao entre otros. Toda revolución es así, entonces esto también se da en la nuestra; no podríamos ser excepción, acá no vale que toda regla tiene excepción, acá se trata del cumplimiento de leyes. Todo proceso, pues, tiene jefes pero tiene un jefe que sobresale sobre los demás o que encabeza a los demás, según las condiciones porque no podríamos ver a todos los jefes con igual dimensión: Marx es Marx, Lenin es Lenin, el Presidente Mao es el Presidente Mao, y cada uno es irrepetible y nadie es igual a ellos. En nuestro Partido, revolución y guerra popular, el proletariado ha generado también un conjunto de jefes por necesidad y casualidad históricas, en el sentido de Engels; es una necesidad que se generen jefes y un jefe, pero quiénes lo sean en concreto lo define la casualidad, o sea el conjunto de condiciones específicas que se concretan en un lugar y momento determinados. Así también en nuestro caso se ha generado una Jefatura; primero fue reconocida en el Partido, en la Conferencia Nacional Ampliada de 1979; pero esta cuestión encierra una cuestión básica insoslayable que merece destacar: no hay Jefatura que no se sustente en un pensamiento, cualquiera sea el grado de desarrollo que el mismo tenga. El que haya devenido quien habla en jefe del Partido y de la revolución, como dicen los acuerdos, tiene que ver con la necesidad y la casualidad histórica y, obviamente, con el pensamiento gonzalo; nadie sabe qué es lo que la revolución y el Partido pueden hacer con cada uno de nosotros, y cuando tal cosa se especifica lo único que cabe es asumir la responsabilidad. Nos hemos movido dentro de la tesis de Lenin que es justa y correcta; el problema del culto a la personalidad es una posición revisionista. Ya Lenin nos advirtió contra el problema de la negación de los jefes, así como destacó la necesidad de que la clase, el Partido, la revolución promuevan a sus propios dirigentes, más dirigentes a jefes y a Jefatura. Hay una diferencia que vale resaltar, dirigente es un cargo orgánico en tanto que jefes y Jefatura los entendemos como reconocimiento de autoridad partidaria y revolucionaria, adquirida y probada en larga brega, de quienes en la teoría y la práctica demuestran que son capaces de encabezarnos y guiarnos hacia el avance y la victoria en la consecución de nuestros ideales de clase. Jruschov levantó el problema del culto a la personalidad para combatir al camarada Stalin, pero ése fue un pretexto como sabemos todos, en el fondo era para combatir la dictadura del proletariado. Hoy mismo Gorbachov vuelve a enarbolar el culto a la personalidad, como también lo hicieron los revisionistas chinos Liu Shao-chi y Teng Siao-ping. Es en consecuencia una tesis revisionista que apunta en esencia contra la dictadura del proletariado y contra las jefaturas y jefes del proceso revolucionario general para descabezarlo. En nuestro caso a dónde apuntaría en concreto, a descabezar la guerra popular; nosotros no tenemos aún dictadura del proletariado sino un Nuevo Poder que se desenvuelve según normas de nueva democracia, o de dictadura conjunta de obreros, campesinos y progresistas. En nuestro caso apunta pues, principalmente, a descabezar; y bien sabe la reacción y sus sirvientes por qué lo hacen, porque no es fácil generar jefes y jefatura. Y una guerra popular, así como se desarrolla en el país, necesita de jefes y de una Jefatura, de alguien que la represente y la encabece y de un grupo capaz de comandarla indoblegablemente. En síntesis, el culto a la personalidad es una siniestra tesis revisionista, que no tiene nada que ver con nuestra concepción sobre jefes que se ciñe al leninismo. EL DIARIO: ¿Qué significado tiene para Ud. y su Partido la celebración del I Congreso del Partido Comunista del Perú? PRESIDENTE GONZALO: Volviendo a esto quisiéramos decir algunas cuestiones. Reiteramos es un hito de victoria; es cumplir con una deuda pendiente que incluso el propio fundador estableciera. Hemos celebrado el Primer Congreso del Partido Comunista del Perú. ¿Qué implica esto? Reafirmamos que ninguno de los 4 congresos habidos hasta el 62, época en la cual nos desenvolvíamos dentro del Partido de entonces, ninguno de ellos es un congreso marxista, ninguno de ellos se ha ceñido estrictamente a la concepción del proletariado. Por eso nuestro Congreso es marxista para resaltar lo que acabo de decir; pero desenvolviéndonos en el momento histórico en que estamos, el Congreso es marxista-leninista-maoísta, porque el maoísmo es la tercera, nueva y superior etapa, y es, al fin y al cabo, la principal de las tres. Pero también es pensamiento gonzalo porque el Congreso se sustenta en ese pensamiento que ha sido generado en el proceso de aplicación de la verdad universal, del marxismo-leninismo-maoísmo, a la situación concreta de nuestra realidad. Por todo esto es un "Congreso marxista, Congreso marxista-leninista-maoísta, pensamiento gonzalo". Este Congreso nos ha permitido hacer un balance de todo el proceso seguido y sacar las lecciones positivas y negativas. Este Congreso nos ha permitido sancionar la base de unidad partidaria conformada con sus tres elementos: 1) la ideología, el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento gonzalo, 2) el programa y 3) la línea política general, con su centro la línea militar. El Congreso también ha logrado sentar sólidas bases para la conquista del poder en perspectiva, reitero en perspectiva. El Congreso solamente lo hemos podido cumplir en medio de la guerra popular, y decimos esto porque ya en 1967 nos planteamos realizar el quinto congreso y el 76 nos planteamos hacer el Congreso de la reconstitución. Durante varios años hicimos intentos, sin embargo no los pudimos plasmar, ¿por qué?; expresa lo que se ha visto en muchos partidos, que cuando se preparan para ingresar a la lucha armada, a tomar las armas, se enzarzan en grandes luchas intestinas que llevan a divisiones, a voladuras. Y así se frustra el desarrollar la conquista del Poder con las armas en las manos. Esto nos llevó en el año 78 a posponer el congreso para realizarlo cuando estuviéramos en plena guerra popular; hicimos un razonamiento sencillo y simple, estando en guerra quién se iba a oponer a la guerra popular; un congreso y un partido con las armas en las manos, con una guerra popular pujante, cómo podría haber quienes se opusieran a desarrollar la guerra popular, ya no podrían generarnos ningún daño. El Congreso ha desarrollado otras situaciones, ha hecho ver y comprender más profundamente el proceso de la guerra popular, y particularmente la necesidad de construir la conquista del Poder. También el Congreso ha dado un salto en la lucha y eso es bueno; y es necesario decirlo con claridad, aunque algunos lo quieran mal entender, pero en fin, estamos curados de malas interpretaciones, de elementos extraños y no revolucionarios. En el Congreso se ha definido que la lucha de dos líneas en el Partido se desenvuelve contra el revisionismo como peligro principal. Esto merece una pequeña explicación. En el Partido no hay una línea oportunista de derecha; en estos momentos se dan solamente actitudes, ideas, criterios y hasta posiciones de derecha aislados. Pero precisamente profundizando el problema, el Congreso ha concluido que plantearnos combatir el revisionismo como peligro principal es la mejor forma como el Partido puede prevenirse y conjurar y que en él pueda expresarse una línea oportunista de derecha que sería revisionista. El Presidente Mao demandó preocuparse siempre por el revisionismo, porque ése es el peligro principal que tiene la revolución en el mundo. De esta manera también nos compaginamos con la situación fuera de nuestras filas, pues toda expresión que pueda darse en el Partido de actitudes, ideas, criterios y posiciones de corte derechista tienen que ver con la dinámica ideológica; con la repercusión de la lucha de clases, de las campañas del Estado reaccionario, con la propia acción del revisionismo en el país, con las contrarrevolucionarias actividades del imperialismo, especialmente con la contienda entre las dos superpotencias y la siniestra labor del revisionismo a nivel mundial. De esta manera el Partido, nos vacuna, nos prepara y elevamos la guardia; y así, aplicando una firme y sagaz lucha de dos líneas en el seno del pueblo, porque reitero no hay línea oportunista de derecha, podemos evitar que pudiera presentarse una línea revisionista. Lo dicho puede ser mal interpretado, pero hay que decir las cosas y enseñar al pueblo; a nosotros el Congreso nos arma y manda ¡Cuidarse del revisionismo! y ¡Combatirlo implacablemente! doquiera se presente, comenzando por conjurar y combatir cualquier expresión que se pudiera dar del mismo en el propio Partido. Y así estamos mejor armados para combatir el revisionismo fuera de nuestras filas y a nivel mundial. Este es uno de los puntos más importantes del Congreso. El Congreso nos ha dado una gran unanimidad; sí unanimidad, pues nos ceñimos a lo que demandaba Lenin: un partido para enfrentar situaciones complejas y difíciles, como las que enfrentamos diariamente, más en momentos decisivos en los cuales nos estamos desenvolviendo y nos desenvolveremos, debe tener unanimidad. Hay que desplegar lucha para tener una línea clara, definida, e igual comprensión, para tener unidad férrea y golpear contundentemente. Eso nos ha dado el Congreso también, unanimidad pero lograda, insisto, a través de la lucha de dos líneas. Así es como actuamos; y ¿por qué es así?, reitero una vez más, el Partido es una contradicción y la contradicción tiene dos aspectos en lucha, así es y de eso nadie puede escapar. Nuestro Partido entonces está hoy más unido que nunca, y más unido por las altas tareas que tiene que acometer con resolución y firmeza. En otro plano, el Congreso, obviamente, seleccionó el Comité Central, y si es Primer Congreso tenemos el Primer Comité Central. El Congreso nos ha dado todas estas cosas y, finalmente, como bien sabemos todos, es el nivel supremo de un partido, lo que ahí se ha sancionado ha quedado convalidado al nivel orgánico más elevado. Hoy día todo nos hace más fuertes, más unidos, más decididos, más resueltos; pero hay algo que vale destacar nuevamente: el Congreso es hijo del Partido y de la guerra, sin la guerra popular no se hubiera cumplido esa tarea histórica pendiente casi 60 años desde la fundación en el 28, pero lo importante está en que el Congreso potencia el desarrollo de la guerra popular, le devuelve a la guerra popular con creces lo que ha hecho por su plasmación. La guerra popular ahora es más fuerte y se potenciará mucho más que ayer. Por todo esto el Congreso para nosotros, miembros del Partido Comunista del Perú, es un hito imperecedero de victoria y estamos seguros que quedará estampado en nuestra historia partidaria. Esperamos de él grandes resultados que sirvan al proletariado del Perú y al pueblo peruano, que sirvan al proletariado internacional, a las naciones oprimidas y a los pueblos del mundo. EL DIARIO: Algunos señalan que la realización del Primer Congreso del PCP, por las mismas condiciones en que se realizó, de intensa guerra popular, significó un duro golpe para las fuerzas reaccionarias, ¿qué nos dice de esto? PRESIDENTE GONZALO: Nos parece que ésa es una certera opinión que demuestra como hay en este país una clase y un pueblo que entienden lo que estamos haciendo, lo que el Partido está haciendo; para nosotros es un gran reconocimiento que nos lleva a esforzarnos más por ser merecedores de esa confianza, de esa esperanza. EL DIARIO: ¿El Partido Comunista del Perú se habría depurado antes de la realización del Congreso? PRESIDENTE GONZALO: No, en nuestro caso la fuerte depuración que hemos tenido ha sido para iniciar la guerra popular, en el IX Pleno del año 79; ahí dimos dura lucha contra una línea oportunista de derecha que se oponía a iniciar la guerra popular, fue ahí que se produjeron expulsiones y una depuración del Partido; pero como está bien establecido la depuración fortalece y nos fortalecimos, la prueba es que ingresamos a la guerra popular y ya estamos llevándola ocho años. En el Congreso no ha habido tal depuración. EL DIARIO: Muchos se preguntan y no entienden ¿dónde radica la fortaleza y decisión del militante del PCP? ¿Será acaso su sólida formación ideológica?. ¿Cómo se da este proceso en la militancia? PRESIDENTE GONZALO: La fortaleza de los militantes del Partido realmente se sustenta en la formación ideológica y política; se sustenta en que los militantes abrazan la ideología del proletariado y su especificación, el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento gonzalo, el programa y la línea política general y su centro la línea militar. A partir de esto se desarrolla la fortaleza de la militancia. Una cosa que nos preocupó bastante para el inicio de la guerra popular fue la militancia; en la preparación de la guerra popular nos planteamos cómo templar la militancia y nos impusimos altas exigencias: romper con la vieja sociedad, dedicación cabal y completa a la revolución y dar nuestra vida; es muy expresivo recordar la Plenaria del Comité Central del año 80 y la escuela militar, al término de estos eventos toda la militancia hizo un compromiso, todos asumimos ser iniciadores de la guerra popular, fue un compromiso solemne que luego se hizo en todo el Partido. ¿Cómo se da este proceso? Parte primero de cómo se va forjando cada uno de los futuros militantes, antes de serlo, en la lucha de clases; cada uno va participando en la lucha de clases, va avanzando, va trabajando más cercanamente a nosotros, hasta que llega el momento en que uno individualmente toma la gran resolución de pedir su ingreso al Partido, éste analiza sus condiciones, sus méritos, también sus limitaciones porque todos las tenemos, y le otorga la militancia si la merece. En el Partido comienza ya la formación ideológica sistemática; es en él que nos vamos haciendo comunistas, es él que nos va haciendo comunistas. La circunstancia de los últimos años tiene como característica que la militancia se templa en la guerra; y más quienes ingresan lo hacen a un Partido que dirige la guerra, por tanto, si ingresan es para desenvolverse como comunistas primero y principalmente, como combatientes del Ejército Guerrillero Popular y como administrador en el caso que corresponda en los niveles del Nuevo Estado que organizamos. Entonces la guerra popular es otro elemento de mucha importancia que coadyuva a la forja de la militancia. Sintetizando, si bien partimos de lo ideológico-político, la guerra misma va forjando al militante, en esa ardorosa fragua, según el Partido nos va modelando; y así vamos avanzando todos nosotros y sirviendo. Sin embargo, siempre tenemos una contradicción entre la línea roja que prima en nuestra cabeza y la línea contraria, se dan las dos pues no hay comunista ciento por ciento; y en nuestra mente se libra la lucha de dos líneas y esta lucha es clave también para la forja de la militancia, apuntando a que siempre prime en nosotros la línea roja. Eso es lo que buscamos. Así se está forjando la militancia; y los hechos muestran el grado de heroísmo revolucionario al que son capaces de llegar los militantes, así como otros hijos del pueblo. EL DIARIO: ¿Ud. considera que una de las expresiones más elevadas del heroísmo de la militancia del PCP se haya dado en los penales el 19 de Junio de 1986? PRESIDENTE GONZALO: Es una alta expresión, sí; pero consideramos que el más alto heroísmo revolucionario derrochado a raudales se expresó al enfrentar el genocidio de los años 83 y 84, cuando enfrentamos a las fuerzas armadas que recién entraban; ése ha sido hasta hoy el mayor genocidio masivo, y en él se han dado grandiosos ejemplos de combatividad popular lo que es vital y principal y, además, se da una expresión masiva de heroísmo, de entrega, de dar la vida y no solamente de los comunistas, sino de campesinos, de obreros, de intelectuales, de hijos del pueblo; ahí se dio la más grande muestra de heroísmo revolucionario masivo y nuestra más grande forja también. Entonces podrían decirnos por qué toman el 19 de junio como "Día de la Heroicidad". El 19 es una fecha que muestra ante nuestro pueblo y el mundo lo que son capaces de hacer comunistas firmes y revolucionarios consecuentes, porque no solamente han muerto comunistas, la mayor parte han sido revolucionarios. De ahí que deriva como símbolo porque hay una fecha específica, en tanto que el genocidio general son dos años, son muchos hechos dispersos; el 19 es un solo hecho de gran repercusión y ejemplo que estremeció el Perú y el mundo. Por eso hemos tomado el 19 de junio como "Día de la Heroicidad". EL DIARIO: Presidente, ¿cómo el PCP puede sostener materialmente el gigantesco aparato partidario, incluyendo el Ejército Guerrillero Popular? PRESIDENTE GONZALO: Creo que esto merece algunas precisiones. Sobre el Partido, el Presidente Mao nos enseña, como lo han enseñado siempre Marx, Lenin y los grandes marxistas, que el partido no es partido de masas, que el partido tiene carácter de masas; carácter de masas en tanto que siendo el partido una organización selecta, una selección de los mejores, de los probados, de los que tienen madera como decía Stalin, siendo pocos numéricamente en proporción a la inmensa masa, el partido defiende los intereses del proletariado, asume el interés de clase del proletariado en tanto asume la emancipación del proletariado que solamente llegará con el comunismo. Pero como en la revolución actúan otras clases que conforman el pueblo, el partido también defiende sus intereses en consonancia con que el proletariado solamente puede emanciparse emancipando a los demás oprimidos, de otra forma no puede emanciparse. Por eso el partido tiene carácter de masas pero el partido no es de masas; el partido de masas del cual tanto se está hablando hoy no es sino expresión, una vez más, de podridas posiciones revisionistas; son esos partidos de adherentes, de funcionarios, esas máquinas organizativas. Nuestro Partido es un partido de militantes, de dirigentes, una máquina de guerra tal como demandara el propio Lenin. Bien, creo que en refuerzo de esto podemos pensar cuántos bolcheviques había cuando triunfó la revolución de Octubre: 80 mil en un país de 150 millones de habitantes. El partido es un sistema de organizaciones y obviamente tiene necesidades. La formación de un ejército que es numéricamente mucho más grande, más amplio, también tiene necesidades. Cómo resolver el problema, también el marxismo nos ha enseñado y el Presidente Mao en especial. El PCCh por instrucción del Presidente Mao Tsetung concluyó que el apoyo económico que se daba a los partidos era un corrosivo y que era un criterio revisionista porque un partido debe apoyarse en las propias fuerzas; esto es lo que hemos seguido, apoyarnos en las propias fuerzas. Apoyarnos en las propias fuerzas tiene que ver con las necesidades económicas pero principalmente, a nuestro entender, tiene que ver con cómo orientarse ideológica y políticamente, y partiendo de eso es que podemos ver cómo asumir las necesidades económicas que siempre se presentan; sería erróneo decir que no existen. Pues bien, basándonos en estos criterios hemos resuelto el problema y lo seguiremos resolviendo apoyándonos en las masas; son las masas de nuestro pueblo, es el proletariado, nuestra clase, porque ésa es nuestra clase, a ella nos debemos, a ella le servimos, es nuestro campesinado principalmente pobre, es la intelectualidad, la pequeña burguesía, los avanzados, los revolucionarios, los que quieren la transformación radical, la revolución en un término, quienes sustentan al Partido, principalmente el campesinado y el proletariado, ellos son los que sustentan. Y si más allá vamos, el campesinado pobre principalmente es el que se quita un mendrugo de la boca para darnos, el que nos da un pedazo de su manta, el que nos da un lugarcito en su choza, es ése el que nos sostiene, nos apoya y nos da hasta su propia sangre, como también la da el proletariado, como también la dan los intelectuales; así es como nos estamos desenvolviendo. Nos basamos en eso. Este problema nos lleva a las siguientes cuestiones. Partir de este fundamento nos permite tener independencia, no depender de bastón de mando alguno porque en el comunismo internacional se acostumbró a bastón de mando, Jruschov era un campeón del bastón de mando, como lo es hoy Gorbachov o como lo es Teng, ese siniestro personaje; independencia porque cada Partido Comunista tiene que decidir él mismo porque es responsable de su revolución, lo cual no implica desligarse de la revolución mundial sino precisamente para servirla. Esto nos permite autodecisión, el decidir por nosotros mismos. El presidente Mao decía así: muchos consejos se nos dieron, algunos buenos y algunos malos, los buenos los aceptábamos, los malos los rechazábamos; pero si hubiéramos aceptado un principio erróneo la responsabilidad no hubiera sido de quien nos lo dio sino de nosotros mismos. ¿Por qué?, porque tenemos autodecisión, se compagina con la independencia y eso nos lleva al autosostenimiento, a tener que basarnos en nuestras propias fuerzas. ¿Quiere decir esto que desconocemos el internacionalismo proletario?, no, al contrario, somos practicantes fervientes y consecuentes del internacionalismo proletario; y, estamos convencidos del apoyo que nos brindan el proletariado internacional, las naciones oprimidas, los pueblos del mundo, los propios partidos u organizaciones que se mantienen fieles al marxismo cualquiera sea su grado de desarrollo, y reconocemos que lo primero que nos dan, su primer apoyo es su propia lucha; la propaganda o las celebraciones que hacen es un apoyo que va ganando opinión pública y así se va expresando el internacionalismo proletario; también está en los consejos que nos dan, en las opiniones que vierten pero, insisto, nosotros somos los que tenemos que decidir si los aceptamos o no, si son justos bienvenidos, obviamente, porque entre partidos tenemos obligación de ayudarnos más en estos tiempos difíciles y complejos. Entonces, reiterando, toda la lucha que libran el proletariado, las naciones oprimidas, los pueblos del mundo, los partidos y organizaciones firmes y fieles al marxismo, toda esa lucha es la primera gran ayuda concreta del internacionalismo proletario. Sin embargo, la más grandiosa ayuda que tenemos es el inmarcesible marxismo-leninismo-maoísmo, la ideología del proletariado internacional, lo que ha generado la clase obrera en largos decenios y miles de combates en todo el mundo; ésa es la más grandiosa ayuda que recibimos porque es la luz, sin esa luz nuestros ojos no verían nada, pero con esa luz nuestros ojos pueden ver y nuestras manos actuar. Así vemos este problema y así avanzamos. EL DIARIO: Presidente, podría estar de más hacerle esta pregunta, pero quisiéramos saber su opinión respecto a qué piensa Ud. de los partidos revisionistas que viven de las fundaciones internacionales y de las grandes potencias imperialistas y del socialimperialismo. PRESIDENTE GONZALO: Que han traicionado la revolución mundial y traicionan la revolución en cada país, a la clase y el pueblo, porque servir a superpotencias o potencias imperialistas, servir al revisionismo especialmente al socialimperialismo, ir tras bastón de mando, ser fichas de ajedrez en el juego por el dominio del mundo es traicionar a la revolución. III. GUERRA POPULAR EL DIARIO: Presidente, ahora hablemos de la guerra popular. ¿Qué significa la violencia para el Presidente Gonzalo? PRESIDENTE GONZALO: En cuanto a la violencia partimos de un principio establecido por el Presidente Mao Tsetung: la violencia es una ley universal sin excepción alguna, quiero decir la violencia revolucionaria; esa violencia es la que nos permite resolver las contradicciones fundamentales con un ejército y a través de la guerra popular. ¿Por qué partimos de la tesis del Presidente Mao? porque creemos que con él el marxismo se ha reafirmado y ha llegado a establecer que no hay excepción alguna; Marx ya nos planteó la violencia como partera de la historia que sigue siendo plenamente válida y grandiosa; Lenin nos planteó la violencia, y nos habló del panegírico de la violencia revolucionaria hecho por Engels; pero ha sido el Presidente quien nos ha dicho que es una ley universal sin excepción alguna, por eso partimos de esa tesis. Es una cuestión sustantiva del marxismo porque sin violencia revolucionaria no se puede sustituir una clase por otra, no se puede derrumbar un viejo orden para crear uno nuevo, hoy un nuevo orden dirigido por el proletariado a través de partidos comunistas. El problema de la violencia revolucionaria es una cuestión que cada vez más se pone sobre el tapete, así los comunistas y revolucionarios tenemos que reafirmarnos en nuestros principios. El problema de la violencia revolucionaria es cómo concretamos la guerra popular; para nosotros la cuestión es que el Presidente Mao Tsetung al establecer la guerra popular ha dotado al proletariado de su línea militar, de su teoría y práctica militar de validez universal, por tanto, aplicable en todas partes según las condiciones concretas. El problema de la guerra lo vemos así: la guerra tiene dos aspectos, uno de destrucción y otro de construcción, principal es el de construcción, y no ver de esa manera es socavar la revolución, debilitarla. Por otro lado, desde que el pueblo toma las armas para derrumbar el viejo orden, desde ese momento la reacción busca aplastarlo, destruirlo, aniquilarlo y usa todos los medios disponibles en sus manos, llegando al genocidio; en nuestro país lo hemos y estamos viendo y veremos aún más hasta demoler el caduco Estado Peruano. En cuanto a la llamada guerra sucia preferiría simplemente plantear que se nos imputa que la fuerza armada reaccionaria ha aprendido de nosotros la tal guerra sucia; esa imputación es una clara expresión de no entender lo que es una revolución, es no entender qué es una guerra popular. La reacción aplica a través de sus fuerzas armadas y represivas en general el querer barrernos y desaparecernos. ¿Y por qué razón?, porque nosotros queremos lo mismo para ellos, barrerlos y desaparecerlos como clase; ya Mariátegui decía que solamente destruyendo, demoliendo el viejo orden se podía generar un nuevo orden social. Nosotros enjuiciamos, en último término, estos problemas a la luz del principio básico de la guerra establecido por el Presidente Mao: el principio de aniquilar las fuerzas del enemigo y preservar las propias; y sabemos muy bien que la reacción ha aplicado, aplica y aplicará el genocidio, de eso estamos sumamente claros. Y, en consecuencia se nos plantea el problema de la cuota; la cuestión de que para aniquilar al enemigo y preservar las propias fuerzas y más aún desarrollarlas hay que pagar un costo de guerra, un costo de sangre, la necesidad del sacrificio de una parte para el triunfo de la guerra popular. En cuanto al terrorismo. Se nos imputa que somos terroristas; solamente quisiera responder de esta manera para que todos reflexionemos. ¿Ha sido o no el imperialismo yanqui y particularmente Reagan quien ha tildado de terrorismo a todo movimiento revolucionario, sí o no?. Así se pretende desprestigiar y aislar para aplastar, es lo que sueñan; pero no sólo el imperialismo yanqui y las demás potencias imperialistas combaten el llamado terrorismo, también lo hacen el socialimperialismo, el revisionismo y hoy el propio Gorbachov plantea unirse para luchar contra el terrorismo. Y no es simple coincidencia que en el VIII Congreso del Partido del Trabajo de Albania, Ramiz Alía se dedique también a combatirlo. Pero será muy útil que todos recordemos lo que Lenin escribiera: "¡Vivan los iniciadores del Ejército Popular revolucionario! Esto no es ya un complot contra un personaje cualquiera odiado, no es un acto de venganza, no es una salida provocada por la desesperación, no es un simple acto de 'amedrentamiento', no: esto es el comienzo, bien meditado y preparado, calculado desde el punto de vista de la correlación de fuerzas, es el comienzo de las acciones de los destacamentos del ejército revolucionario". "Afortunadamente, han pasado los tiempos en que por falta de un pueblo revolucionario 'hacían' la revolución terroristas revolucionarios aislados. La bomba ha dejado de ser el arma del 'petardista' individual y ha pasado a ser elemento necesario del armamento del pueblo". Ya Lenin nos enseñaba que los tiempos habían cambiado, que la bomba pasó a ser arma de combate de la clase, del pueblo; que ya no era una conjura, una acción individual aislada, sino la acción de un Partido, con un plan, con un sistema, con un ejército. Así las cosas, ¿dónde está el imputado terrorismo?; infamia pura. Finalmente, debe tenerse muy presente que en la guerra contemporánea, en especial, es precisamente la reacción quien usa el terrorismo como uno de sus medios de lucha y lo es, como está probado hasta la saciedad, una cotidiana forma de lucha de las fuerzas armadas del Estado peruano. Visto lo anterior podemos concluir que quienes juzgan con desesperación porque la tierra tiembla bajo sus pies, quieren imputar terrorismo para ocultar la guerra popular, pero ésta es tan estremecedora que ellos mismos reconocen que tiene dimensión nacional y que ha devenido en el problema principal que enfrenta el Estado Peruano, y qué terrorismo es así, ninguno; y más aún ya no pueden negar que un Partido Comunista dirige la guerra popular. Pero en estos momentos hay quienes comienzan a recapacitar; no hay que poner cruces anticipadas a nadie, hay quienes pueden avanzar. Otros, como Del Prado, jamás. EL DIARIO: ¿Cuáles son las particularidades de la guerra popular en el Perú y cómo se diferencia de otras luchas del mundo, en América Latina y el MRTA? PRESIDENTE GONZALO: Es una buena pregunta. Les agradezco porque sirve para ver una vez más el supuesto "dogmatismo". Hay incluso quienes dicen que mal aplicamos al Presidente Mao en una época que ya no corresponde; en fin, tanto parlotean que cabe preguntar si sabrán de qué hablan entre otros el condecorado senador especialista en violencia. La Guerra Popular se aplica universalmente, según el carácter de la revolución y se especifica en cada país, de otra manera no puede hacerse. En nuestro caso, las particularidades son muy claras. Es una lucha que se libra en campo y ciudad así fue establecido ya el año 68, en el esquema para la guerra popular. Allí ya tenemos una diferencia, una particularidad, es en campo y en ciudad. Creemos que tiene que ver con específicas situaciones nuestras, América Latina por ejemplo tiene ciudades proporcionalmente más grandes que las que tienen otros continentes. Es una realidad de América Latina que no se puede desconocer, basta ver la capital del Perú que tiene un alto porcentaje poblacional. Así para nosotros la ciudad no podía ser dejada de lado y también tenía que desenvolverse la guerra en ella, pero lo principal es la lucha en el campo, la de la ciudad es complemento necesario. Ahí tenemos ya una particularidad, hay otra. Nosotros al ingresar a la guerra popular nos vamos a enfrentar a las fuerzas policiales ésa fue la realidad, porque recién el año 82, en diciembre, ingresan las fuerzas armadas; no quiere decir que antes no hayan estado cumpliendo un papel de apoyo, lo han estado haciendo, aparte de estudiar el proceso que desenvolvíamos. Es una particularidad, porque generamos vacío en el campo y tuvimos que crear Nuevo Poder sin haber derrotado grandes fuerzas armadas porque éstas no habían ingresado y si lo hicieron, si ingresaron, fue porque creamos Poder Popular. Esa fue la situación política concreta que se dio en el país. Si no lo hubiéramos hecho aplicando a rajatabla lo que dice el Presidente Mao Tsetung estaríamos sentados esperando que las fuerzas armadas ingresaran. Nos hubiéramos empantanado. Otra particularidad fue la conformación del ejército al cual ya me referí. Todas éstas son particularidades; nos hemos referido ya a campo y ciudad, a cómo hacer la guerra, al ejército, a cómo se da el Nuevo Poder y el propio Partido militarizado es otra particularidad. Son situaciones específicas que corresponden a nuestra realidad, a la aplicación del marxismo-leninismomaoísmo, de la teoría del Presidente Mao sobre la guerra popular a las condiciones de nuestro país. Esto nos diferencia de otras luchas, sí. ¿Por qué nos diferenciamos de otros?, porque hacemos la guerra popular, eso nos diferencia de otras luchas de América Latina. En Cuba no se hizo guerra popular, pero también tuvo sus particularidades que se las han olvidado adrede; antes dijeron que fue un caso excepcional -dijo Guevara- el no ingreso del imperialismo norteamericano y luego lo olvidaron. Aparte de que ahí no hubo Partido Comunista que dirigiera; son cuestiones del cubanismo y sus cinco caracteres de: insuficiente diferenciación de clases que demandaba de redentores para redimir a los oprimidos, revolución socialista o caricatura de revolución, frente único pero sin burguesía nacional, no necesidad de base de apoyo y la ya anotada no necesidad de Partido; lo que hoy estamos viendo en América Latina no es sino un desarrollo de esas mismas posiciones, sólo que cada vez más al servicio del socialimperialismo y su contienda con el imperialismo yanqui por la hegemonía mundial, Centroamérica lo demuestra palmariamente. El MRTA, de lo poco que conocemos, está dentro de esos criterios. Finalmente otra cuestión que nos diferencia, y disculpen que insista, es que independencia, autodecisión y autosostenimiento; otros no lo tienen por eso son fichas de ajedrez, nosotros no. Y una trascendental diferencia, nos sujetamos al marxismo-leninismo-maoísmo, otros no. En síntesis, la gran diferencia, la diferencia fundamental está en el punto de partida, en la ideología de la cual partimos, nosotros del marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente maoísmo aplicado a las condiciones específicas de nuestro país, e insisto he ahí una vez más, con claras particularidades que demuestran la falsedad del supuesto dogmatismo que nos imputan y que incluso lo hacen por mandato de sus amos. EL DIARIO: Presidente, ¿entonces el MRTA estaría jugando un papel contrarrevolucionario en el país? PRESIDENTE GONZALO: El MRTA tiene posiciones que deben hacer pensar; por ejemplo, la tregua que le dio al Apra, según dijeron hasta que golpeara al pueblo, pero todos sabemos que el mismo día que García Pérez asumió la presidencia reprimía a las masas en la propia capital de la república. En octubre del 85, genocidio en Lurigancho. ¿Era el pueblo golpeado o no? y ¿cuánto tiempo esperaron para terminar su tregua? Son cosas que uno tiene que preguntarse. EL DIARIO: Siendo tan importante la Base de Apoyo, ¿cómo ésta se construye en el país?. ¿Qué piensa Ud. de la insurrección y cómo preparan a las ciudades? PRESIDENTE GONZALO: La base de apoyo es lo medular de la guerra popular, sin ella no se la puede desenvolver. Me he referido antes a cuál fue la circunstancia específica que se nos presentó en la segunda mitad del año 82. Desarrollamos la parte final de la campaña de desplegar, apuntamos a destruir relaciones semifeudales de explotación, apuntamos contra el gamonalismo que es la base del poder del Estado y lo será en tanto no lo barramos; seguimos golpeando y le dimos contundentes y humillantes derrotas a las fuerzas policiales, no lo digo yo, lo han dicho periodistas del Expreso por ejemplo, creo que impecables de posición revolucionaria. Entonces, habiendo generado vacío de Poder en el campo, se nos planteó el problema, de ¿qué hacer? y resolvimos crear comités populares, o sea dictaduras conjuntas, un Nuevo Poder; nos planteamos hacerlos clandestinos, porque luego tendría necesariamente que ingresar la fuerza armada, eso lo sabíamos. Esos Comités Populares se han centuplicado, los que están en un área forman una base de apoyo y el conjunto de éstas la República Popular de Nueva Democracia en formación. De esta manera es como surgieron los comités, las bases y está en formación la RPND. Cuando ingresó la fuerza armada, tuvimos que desarrollar una dura lucha: ellos aplicaron el restablecimiento del viejo poder, nosotros aplicamos el contrarrestablecimiento para volver a levantar el Nuevo Poder. Se produjo un genocidio altamente cruento e inmisericorde; hemos peleado ardorosamente. La reacción y las fuerzas armadas en concreto, creyeron que el 84 ya nos habían derrotado, me remito a documentos que ellos conocen muy bien porque son suyos y donde se decía incluso que ya no éramos peligro, sino que el peligro era el MRTA; pero el resultado cuál ha sido, que los comités populares y las bases de apoyo se multiplicaron, eso nos ha llevado posteriormente ya a desarrollar las bases, eso es en lo que estamos hoy. En cuanto a la insurrección, creo que es un problema sumamente importante. En el caso de un país como el nuestro, la situación revolucionaria en desarrollo permitió iniciar la guerra popular, teniendo ya Partido reconstituido y una ideología clara; el propio desarrollo de las bases, el desarrollo del Ejército Guerrillero Popular y el de la guerra popular, van generando el impulso y desenvolvimiento mayor de la situación revolucionaria. Así, teniendo en cuenta lo que dice el Presidente Mao todo esto lleva a lo que él denomina auge, lo que en términos de Lenin es crisis revolucionaria. Llegados a ese momento es que se produce la insurrección; ésa es la teoría de la guerra popular y es en la que estamos incursos y desenvolviéndonos. Pues bien, entonces, nuestro proceso de la guerra popular tiene que llevarnos al auge, en consecuencia tenemos que preparar la insurrección que viene a ser, en síntesis, la toma de las ciudades. Nosotros pensamos y preparamos la insurrección porque es una necesidad, sino no podríamos triunfar en todo el país. El problema de la ciudad qué nos plantea. Hemos desarrollado trabajo en las ciudades y en el campo, sí, hace muchos años lo hemos hecho. Ha tenido un giro y un cambio con la guerra popular, cierto. La situación nuestra ahora nos lleva a cómo ir preparando la ciudad o las ciudades para generalizar. Esto tiene que ver con desarrollar el trabajo de masas, pero en y para la guerra popular; lo hemos hecho y lo seguimos haciendo, el problema está en que hemos empezado a desenvolverlo más. Pensamos que nuestra acción en las ciudades es indispensable y tiene que impulsarse cada vez más y más porque ahí está concentrado el proletariado y no podemos dejarlo en manos del revisionismo ni del oportunismo. En las ciudades, existen las barriadas, las inmensas masas barriales. Nosotros desde el año 76 tenemos una directriz para el trabajo en las ciudades. Tomar barrios y barriadas como base y proletariado como dirigente, ésa es nuestra directriz y la seguiremos practicando, ahora en condiciones de guerra popular. A qué masas apuntamos, claramente se ve. De lo antedicho se deriva nítidamente que las inmensas masas de barrios y barriadas son como cinturones de hierro que van a encerrar al enemigo y que retienen a las fuerzas reaccionarias. La clase obrera tenemos que irla ganando más y más hasta que ella y el pueblo nos reconozcan. Tenemos una clara idea, la de que se requiere tiempo y reiterados hechos para que la clase vea, comprenda y se reafirme en que tal es su vanguardia, en que el pueblo vea que tiene un centro que lo dirige. Tienen ese derecho ¡por todo cuánto han estafado a las masas!, al proletariado, a las barriales, a la pequeña burguesía, a la intelectualidad, ¡cuánta esperanza frustrada! Hay que pensar que tienen derecho a exigir, claro que lo tienen y nosotros la obligación de trabajar y hacerles ver y demostrarles que somos realmente su vanguardia y que la reconozcan. Nosotros diferenciamos entre ser vanguardia y ser vanguardia reconocida. La clase tiene ese derecho y nadie puede negárselo, el pueblo tiene ese derecho y nadie puede negárselo. Así pensamos. No creemos que de la noche a la mañana el proletariado y el pueblo nos van a reconocer como su vanguardia y único centro, porque eso es lo que tenemos que ser para poder cumplir la revolución como corresponde. Entonces tenemos que hacer un trabajo tesonero e imprimir en el trabajo de masas formas diferentes, formas distintas que aprendan de la propia guerra popular, que aprendan el valor del arma, la importancia del fusil. El Presidente Mao nos dice que el campesinado tiene que aprender la importancia del fusil, es una realidad; entonces trabajamos de esa manera, cumplimos nuevas formas y así vamos desenvolviendo el trabajo de masas en y para la guerra popular. Tiene que ver también con otra circunstancia, otra situación, con el Movimiento Revolucionario de Defensa del Pueblo, porque la clave del mismo es el Centro de Resistencia, lo decimos con toda claridad; son otras formas orgánicas , otras formas de lucha las que corresponden a una guerra popular, no pueden ser las usuales, no pueden ser, son de otra manera, eso es lo concreto. Desarrollamos en consecuencia Partido, Ejército Guerrillero Popular y Movimiento Revolucionario de Defensa del Pueblo, así como organismos generados para los diversos frentes del trabajo. Necesitamos acicatear la combatividad, que se exprese la potencialidad de la masa, la potencialidad de la clase. Veamos una cuestión: Hoy tenemos grandes alzas, por qué es que no hay una protesta popular, quién ata a las masas; Lenin nos decía, la marcha hace temblar a la reacción, cuando la clase marcha en las calles la reacción tiembla, eso es lo que nosotros queremos aplicar, lo que nos enseña el marxismoleninismo-maoísmo. La clase nace y se desarrolla combatiendo y el pueblo igual; lo que necesitamos es ir sintetizando las propias experiencias de la masa, del pueblo, ir estableciendo sus formas orgánicas, sus formas de lucha y que vayan cogiendo en sus manos formas cada vez más desenvueltas y crecientes de lucha en ciudad, así se van formando. Qué pensamos; la cosa es clara, el centro está en el campo pero para la insurrección se cambia el centro, el centro pasa a ser la ciudad y para eso incluso así como al comienzo se desplaza combatientes y comunistas de las ciudades al campo, después hay que desplazar del campo a la ciudad; también se da y así vamos traspasando el peso y preparando la insurrección. Tenemos que ir viendo condiciones para que converjan la acción del Ejército Guerrillero Popular con la acción insurreccional en las ciudades, o en una o en varias. Eso es lo que necesitamos. La insurrección apunta a la captura de las ciudades para rematar la guerra popular en todo el país; pero tiene que buscar la preservación de los medios productivos que la reacción querrá destruir, proteger a los revolucionarios prisioneros de guerra o revolucionarios conocidos que ellos quieran aniquilar, así como también cazar a los enemigos para ponerlos a buen recaudo, y eso es lo que se nos enseñó y es una insurrección; Lenin nos enseñó cómo se armaba una insurrección y el Presidente Mao nos ha enseñado cómo es la insurrección en la guerra popular, así es como la vemos y la preparamos. Es el camino que tenemos que seguir y que estamos siguiendo. Una cosa hay que tener bien claro, la insurrección no es una simple explosión espontánea, no, eso sería peligroso, sin embargo puede darse, por eso es que tenemos que preocuparnos desde ahora por la insurrección y lo hacemos. Pensamos que hay quienes puedan querer usar la guerra popular en su beneficio. Hemos analizado ya en un evento del Comité Central, hace buen tiempo, posibilidades y una de ellas es que el revisionismo u otros generen "insurrecciones" o para hacer abortar el proceso de desarrollo o para ganar posiciones y servir a su amo socialimperialista o a cualquier potencia que los mande porque muchos centros pudieran querer utilizarnos. EL DIARIO: Presidente, ¿qué haría el Partido en esas circunstancias? PRESIDENTE GONZALO: En esas circunstancias lo que hizo Lenin, decir a las masas que no es el momento, pero si las masas se lanzan pelear con ellas, para juntos poder hacerlas replegarse adecuadamente y sufran lo menos posible y si morimos con ellas soldamos más nuestras sangres. Eso fue lo que Lenin nos enseñó en las famosas luchas de julio del 17; porque no podemos decir a las masas que están mal y que los hechos las hagan entender; no, no podemos decir eso, la masa es la masa, la clase es la clase y si no están bien enrumbadas y las condiciones las desesperan y las lanzan a situaciones o incluso hay quienes las lanzan adrede, tenemos que estar con ellas para juntos hacerles ver la inoportunidad pero combatiendo con ellas, ayudarles a replegarse en la mejor forma posible, y entonces verán que estamos con ellas en las buenas y en las malas y será la mejor manera de que entiendan, comprendan y se convenzan más que somos su Partido. Así actuaríamos. EL DIARIO: Presidente, una pregunta, y cuando Ud. habla de las formas de lucha en la ciudad, ¿qué papel le asigna a los sindicatos? PRESIDENTE GONZALO: El que le asignó Marx en "Pasado, presente y futuro de los sindicatos". Marx nos decía en el siglo pasado, los sindicatos al comienzo han sido simple agremiación para defenderse económicamente, ése es su pasado; su presente es ya organizarse más y desarrollarse políticamente y su futuro servir a la conquista del Poder. Eso ya nos dijo Marx; entonces el problema cuál es, cómo combinamos las dos luchas, la lucha por la reivindicación que es una guerra de guerrillas como nos dijo el propio Marx: la lucha por el salario, por la jornada, las condiciones de trabajo y otros derechos que desarrolla la clase, el proletariado y el pueblo y se lanza a una huelga es una guerra de guerrillas en la cual no solamente lucha por una cuestión concreta económica o política, si es de interés general, sino que se está preparando para los grandes momentos por venir y ésa es su esencia histórica fundamental; entonces nuestro problema cuál es, compaginar la lucha reivindicativa con la conquista del Poder, a eso le llamamos desarrollar el trabajo de masas en y para la guerra popular. EL DIARIO: Presidente, Ud. habló de la crisis revolucionaria, ¿Ud. cree que a corto plazo se vislumbra esta situación? PRESIDENTE GONZALO: La cuestión es el triunfo de la guerra popular y tiene que ver, principalmente, con cuanto más y mejor luchemos; y la insurrección, como ya dijera, es el remate que debemos preparar y estamos haciéndolo seriamente, prever posibilidades de que otros quieran traficar con ella, es algo que tenemos que pensar; pero el problema principal es la oportunidad de la insurrección, calcular el momento oportuno. EL DIARIO: ¿Por qué el Partido Comunista del Perú inició la guerra popular el 80?, ¿cuál es la explicación militar e histórica de este hecho?, ¿cuál fue el análisis social, económico y político que hizo el PCP para iniciar esta guerra? PRESIDENTE GONZALO: Hemos investigado el país, y lo hemos estudiado particularmente de la II guerra mundial en adelante y vimos que el proceso de la sociedad peruana entraba a situaciones complejas. Los propios análisis estatales mostraban que la década del 80 tenía cuestiones críticas. En el Perú se ve que cada 10 años se da una crisis en la segunda mitad de la década y cada crisis es peor que la anterior. Luego hemos analizado el capitalismo burocrático, éste madura la revolución, las condiciones de la revolución. El año 80 tenía que entregarse el gobierno a través de elecciones, eso iba a requerir más o menos entre año y medio a dos años para que el nuevo gobierno pudiera armar el manejo del Estado. Así concluimos: el capitalismo burocrático había madurado la revolución, se presentaba la difícil década del 80, la crisis, un gobierno por elecciones, etc; y todo daba una coyuntura muy favorable para iniciar la guerra popular y que desmiente el criterio de que no se puede iniciar lucha armada o en nuestro caso guerra popular cuando hay un nuevo gobierno; los hechos han demostrado la falsedad de esa posición. Eso fue lo que calculamos, así como la situación en que entraba el nuevo gobierno, que los militares salían después de 12 años y fácilmente no podrían asumir una lucha inmediata contra nosotros, ni podrían de inmediato retomar el timón del Estado, porque se habían desgastado políticamente y desprestigiado; eran hechos concretos, una realidad. Nosotros ya habíamos planteado desde antes que la participación en la Constituyente era incorrecta; que sólo cabía el boicot, porque participar en la Constituyente era simplemente servir a la reestructuración del Estado Peruano y a que se diera una constitución como la que tenemos; y todo eso era previsible, no había nada que no se pudiera prever en este caso; por tanto nos planteamos ya desde antes sentar bases para el inicio, arrancar antes de que comenzara el nuevo gobierno y así lo hemos hecho puesto que comenzamos el 17 de mayo, un día antes de las elecciones. Como lo hemos hecho, pensamos que en esas condiciones podríamos desenvolver nuestra acción y llegar hasta desplegarla y avanzar lo más que pudiéramos pensando en que en la segunda parte del decenio tenía que darse una crisis más grave que la anterior y, por tanto, mejores condiciones para avanzar. Sobre estas consideraciones se planificó el inicio de la guerra popular, pero dicen que no hemos pensado sino aplicado dogmáticamente, ¿en qué?; hay quienes hablan de dogmas siendo beatos que comulgan con ruedas de molino. Por eso escogimos ese momento, los hechos nos han confirmado; era obvio que Belaúnde, y también lo ventilamos, tendría un temor: el golpe de Estado y por tanto restringiría a la fuerza armada; ¿era difícil de prever?, no, por la experiencia que tuvo el año 68; eran cosas calculables y se nos ha enseñado a calcular, a analizar, a sopesar, así nos han enseñado, el Presidente ha sido muy exigente en esos problemas sobre todo en cuanto se refiere a preparación. Creemos que los hechos nos han confirmado, dos años y no pudieron entrar las fuerzas armadas; ¿fue así o no?. Hoy día nos están diciendo que habían quemado la información de Inteligencia que tenían; en fin, el nuevo gobierno tendría problemas para armar su administración y los hechos lo han demostrado; luego ha venido la crisis; han entrado los militares con contingentes mayores cada vez y lidiando con ellos varios años estamos más pujantes, vigorosos y en desarrollo. Esas fueron las razones de iniciar el 80 y los hechos demuestran que no erramos o, por lo menos, no erramos en los grandes lineamientos que es en lo que no hay que errar. EL DIARIO: Teniendo en cuenta que en la guerra son dos las estrategias que se enfrentan, ¿podría Ud. explicar cómo se ha especificado el proceso de desarrollo de sus planes militares, logros y qué problemas han tenido? PRESIDENTE GONZALO: Nosotros partimos de una situación. Cada clase genera su forma específica de guerra y por tanto su estrategia; el proletariado ha creado la suya: la guerra popular y es una estrategia superior, la burguesía nunca podrá tener una estrategia superior a ésa, más, no habrá estrategia más desarrollada que la del proletariado; es un problema de comprobación del proceso militar del mundo, cada clase siempre generó su forma de hacer la guerra y su estrategia, y siempre la estrategia superior ha vencido a la inferior y la nueva clase siempre tiene la estrategia superior y la guerra popular lo es, las pruebas lo demuestran. Hay tratadistas militares que dicen así: los comunistas cuando han aplicado sus principios nunca han perdido una guerra, solamente la han perdido cuando no han aplicado sus principios. Por tanto, partimos de eso, que tenemos una estrategia superior como teoría probada universalmente, nuestro problema era cómo hacer la nuestra, ahí está el problema, entonces se da el margen al yerro. Lo primero que nos planteamos fue eso, la no aplicación mecánica de la guerra popular porque el Presidente Mao Tsetung nos ha advertido que la aplicación mecánica lleva al oportunismo y lleva a la derrota. En el año 80 que fue cuando decidimos iniciar, nos planteamos en el Comité Central del Partido tener muy presente la aplicación específica, no al dogmatismo, no al mecanicismo, esos fueron los planteamientos, de eso partimos. Bien, aquí podemos resaltar el primer problema que tuvimos; el primer problema que hemos tenido ha sido la lucha antagónica contra una línea oportunista de derecha que se oponía a iniciar la guerra popular, ése es el primer problema que hemos tenido; lo finiquitamos en su parte fundamental en el IX Pleno y sus saldos los barrimos cabalmente en el Pleno de febrero del 80; ése ha sido el primer problema que hemos tenido, de ahí pues que se dio esta depuración de la cual hablábamos antes, y hemos tenido que podar fuertemente al propio Comité Central, así es, pero fue como nos fortalecimos y pudimos ingresar a iniciar. Ya teníamos el esquema para librar una guerra en campo y ciudad. El primer plan que nos vamos a proponer fue el del Inicio. El Buró Político fue encomendado de definir cómo desarrollar las acciones armadas y fue el organismo que presentó el plan partiendo de destacamentos en cuanto a forma militar; ese plan lo cumplimos el 80, pero debemos decir que a las dos semanas de iniciar hubo una reunión del Buró Político ampliado para analizar cómo habíamos comenzado y se concluyó que lo nuevo había nacido y lo nuevo era la guerra popular, eran las acciones armadas, eran los destacamentos. Luego desenvolvimos el plan de Desplegar, este plan fue más largo, abarcó dos años pero se cumplió en varias campañas, es al término del mismo que se concretan las nuevas formas de Poder, surgen los Comités Populares. A fines del 82 ingresan las fuerzas armadas; ya con anticipación de más de un año, el Comité Central había estudiado el ingreso de las fuerzas armadas y definió que sería progresivo hasta sustituir a las fuerzas policiales que pasarían a segundo plano y así ha sido, de otra manera no podía ser en esa situación. Nos habíamos preparado y, no obstante esto, vamos a tener un segundo problema, repercutió el ingreso de la fuerza armada; ellos entraron aplicando genocidio desde el comienzo, formando mesnadas y usando masas presionadas poniéndolas delante, como parapeto; esto debe decirse con claridad, ahí se ve no solamente la política de usar masas contra masas, una vieja política reaccionaria ya vista por Marx, sino el cobarde uso de las masas: ponerlas delante de ellos; las fuerzas armadas no tienen de qué gloriarse, por eso con razón les hemos dicho experta en derrotas y diestra en cebarse en masa desarmada, ésas son las fuerzas armadas del Perú. Frente a esto tuvimos una sesión ampliada del CC, muy amplia en concurrencia y tiempo, ha sido una de las más largas, en ella se establece el Plan de Conquistar Bases, se creó el Ejército Guerrillero Popular para responder a una fuerza que obviamente tenía más nivel que la policial; ahí fue que nos planteamos también el problema del Frente-Estado, entre ótros. Así surge un segundo problema, el problema de enfrentar el genocidio, es el genocidio de los años 83 y 84, está en los documentos del Partido; no será necesario abundar, pero sí queremos resaltar que fue un genocidio bárbaro e inmisericorde; creyeron que así "nos iban a barrer del mapa" y tan cierto es que a finales del 84 comenzaron a distribuir, entre sus oficiales, su documentación sobre aniquilamiento. La lucha ha sido intensa, dura, han sido momentos complejos y difíciles. Frente al uso de mesnadas y la acción militar reaccionaria respondimos contundentemente con una acción: Lucanamarca, ni ellos ni nosotros la olvidamos, claro, porque ahí vieron una respuesta que no se imaginaron, ahí fueron aniquilados más de 80, eso es lo real; y lo decimos, ahí hubo exceso, como se analizara en el año 83, pero toda cosa en la vida tiene dos aspectos: nuestro problema era un golpe contundente para sofrenarlos, para hacerles comprender que la cosa no era tan fácil; en algunas ocasiones, como en ésa, fue la propia Dirección Central la que planificó la acción y dispuso las cosas, así ha sido. Ahí lo principal es que les dimos un golpe contundente y los sofrenamos y entendieron que estaban con otro tipo de combatientes del pueblo, que no éramos los que ellos antes habían combatido, eso es lo que entendieron; el exceso es el aspecto negativo. Entendiendo la guerra y basándonos en lo que dice Lenin, teniendo en cuenta a Clausewitz, en la guerra la masa en el combate puede rebasar y expresar todo su odio, el profundo sentimiento de odio de clase, de repudio, de condena que tiene, ésa fue la raíz; esto ha sido explicado por Lenin, bien claramente explicado. Pueden cometerse excesos, el problema es llegar hasta un punto y no pasarlo porque si lo sobrepasas te desvías; es como un ángulo, hasta cierto grado puede abrirse, más allá no. Si a las masas les vamos a dar un conjunto de restricciones, exigencias y prohibiciones, en el fondo no queremos que las aguas se desborden; y lo que necesitábamos era que las aguas se desbordaran, que el huayco entrara, seguros de que cuando entra arrasa pero luego vuelve a su cauce. Reitero, esto está explicado por Lenin perfectamente; y así es cómo entendemos ese exceso. Pero, insisto, ahí lo principal fue hacerles entender que éramos un hueso duro de roer, y que estábamos dispuestos a todo, a todo. Marx nos ha enseñado: no se juega a la insurrección, no se juega a la revolución; pero cuando uno enarbola la insurrección, cuando uno toma las armas, no arría la bandera, la mantiene victoriosa hasta el triunfo, sin arriarla jamás; así nos enseñó y ¡no importa cuánto nos cueste!. Bien, Marx pues nos ha armado, así como Lenin y, principalmente, el Presidente Mao Tsetung nos enseña lo que es cuota, lo que es aniquilar para preservar, lo que es mantener la bandera en alto, pase lo que pase. Y, decimos, así, con esa decisión, hemos sobrepasado ese siniestro, vil, cobarde y bárbaro genocidio; porque alguien -ese que funge de presidente- habla de barbarie sin sonrojarse, cuando es un aspirante a Atila, jugando con sangre ajena. ¿Hemos pasado momentos difíciles?, sí; pero, ¿qué ha demostrado la realidad?: que si se persiste, se mantiene la política al mando, se mantiene la estrategia política, se mantiene la estrategia militar, se tiene un plan claro, definido, entonces se avanza, y se es capaz de enfrentar cualquier baño de sangre (para el baño de sangre nos comenzamos a preparar desde el año 81, porque tenía que venir; así que ya estábamos preparados ideológicamente, eso es lo principal). Todo esto llevó a que crecieran nuestras fuerzas y se multiplicaran. Ese ha sido el resultado; se cumple lo que dijo el Presidente: Sueña la reacción cuando quiere ahogar en sangre la revolución, sepa que la riega, y es una ley inexorable. Entonces esto mismo nos reafirma en cómo tenemos que ser cada vez más fieles, firmes, resueltos en los principios y tener siempre confianza inalterable en las masas. Así, salimos fortalecidos con un Ejército mayor, con más Comités Populares y Bases de Apoyo y con más Partido; todo lo contrario de lo que imaginaron. Ya hemos hablado, creo, de los sueños de sangre de la reacción, no son sino eso, sueños de sangre que al fin y al cabo terminan siendo pesadillas. Pero insisto, persistiendo en los principios y combatiendo con el apoyo de las masas, principalmente del campesinado pobre, es que hemos podido afrontar esa situación; es ahí cuando se ha expresado ese heroísmo del cual hablé antes, ese heroísmo masivo. Posteriormente vamos a desenvolver un nuevo plan, el Plan de Desarrollar Bases, en el cual estamos. ¿Qué podemos decir? Si uno ve estos problemas, creo que debemos tener en cuenta una lección: todo plan se aprueba, se aplica y se hace su balance en medio de lucha de dos líneas y esa lucha es más intensa cuando tiene que aprobarse un nuevo plan; ésa es una realidad, es una lección, la tenemos muy en cuenta y nos ha adoctrinado bastante y nos ha enseñado mucho, así es. Al fin y al cabo, la guerra popular genera un altísimo grado de unidad pero en medio de intensa lucha; sí, porque pese a enfrentar problemas, situaciones complejas y difíciles, pese a los reflejos externos, la dinámica ideológica, quienes están empeñados en la guerra popular tienen su vida dada a la revolución, y un comunista tiene su vida dedicada al comunismo aunque no lo vea porque realmente no lo hemos de ver, yo al menos no lo he de ver, pero ése no es el problema, no ver la meta por la cual bregamos solamente nos lleva a una reflexión, tomar los grandiosos ejemplos que nos ha dado el marxismo; en tiempos de Marx él sabía que no vería el triunfo de la revolución y ¿a qué lo llevó?, a redoblar más su esfuerzo para el avance de la revolución. Son lecciones que hemos sacado y nos hemos guiado por esos grandiosos ejemplos. Insisto una vez más no implica comparación alguna, es sólo tomar las estrellas polares siempre como rumbo, como guía. Bien, si pensamos en la lucha armada, en la guerra popular, podemos decir que el inicio nos permitió desenvolver la guerrilla porque en el inicio pasamos de destacamento a pelotón y así abrimos las guerrillas; el plan de Desplegar nos dio los Comités Populares; el de Conquistar Bases nos ha dado Bases de Apoyo y un amplio ámbito, es bueno recordar: hemos tomado como columna vertebral para desenvolver la guerra y conquistar el Poder en todo el país la serranía, sí, la Sierra de nuestra patria y hemos cubierto un ámbito que va de una frontera a la otra, de Ecuador a Bolivia y Chile; pero también hemos desarrollado el trabajo en la ceja de Selva, en las cabeceras de la Costa y a su vez en las ciudades. Hoy podemos decir que tenemos cientos de Comités Populares y múltiples Bases; claro que hay una principal y en cada zona también. Finalmente, de los planes cabía decir, hemos aprendido cómo manejar la guerra con un plan estratégico único aplicando el principio de centralización estratégica y descentralización táctica; nosotros manejamos la guerra mediante un plan único con partes, por campañas, con planes estratégico- operativos, planes tácticos y planes concretos para cada acción; pero la clave de todo es el plan estratégico único, es lo que permite manejar la guerra como una unidad y eso es clave en la dirección de la guerra popular. Creo que eso es lo que podría decir. EL DIARIO: Presidente, en estos ocho años de guerra popular, ¿qué resultado ha obtenido la estrategia antisubversiva y cuáles son sus problemas actuales? PRESIDENTE GONZALO: Es una pregunta que preferiría responderla de esta manera, en síntesis, la propia reacción dice que fracasan y siguen fracasando, ellos lo saben muy bien. "A confesión de parte, relevo de pruebas", utilizando un término de abogados. EL DIARIO: ¿Cuándo cree Ud. que el Ejército Guerrillero Popular estará en condiciones de desarrollar guerra convencional, de defensa de posiciones territoriales y de un abierto enfrentamiento con las fuerzas armadas? ¿Está este tipo de lucha en los planes del PCP? PRESIDENTE GONZALO: Sobre estos problemas hemos meditado, discutido y establecido lineamientos partidariamente, ya sobre esto tratamos desde el año 81, lo hemos hecho también en otras ocasiones. Hemos partido de cómo el Presidente Mao Tsetung concibe la guerra popular a partir de la contradicción, son dos aspectos que contienden: uno parte débil y otro transitoriamente fuerte y tiene que transcurrir un tiempo de defensiva estratégica, uno segundo de equilibrio estratégico y uno tercero de ofensiva estratégica. Nosotros aún nos desenvolvemos dentro de la defensiva estratégica y, en esas condiciones, la guerra de guerrillas sigue siendo nuestra forma principal, una guerra de guerrillas generalizada, amplia tanto en campo como en ciudad, siendo el campo lo principal y la ciudad complemento, y combatimos casi en todo el país. Esto en cuanto a en qué momento estamos. La guerra de movimientos, dentro de los términos del Presidente Mao Tsetung, la estamos comenzando a desenvolver y se desenvolverá más, conforme la reacción necesariamente tenga que llevar una guerra contrasubversiva más desarrollada; pero aún en ese caso tendremos que seguir librando la guerra de guerrillas como la principal y una guerra de movimientos como complemento y en ella sí caben algunas modalidades específicas de guerra de posiciones como está escrito en "Sobre la guerra prolongada". Pensamos que al potenciarse la guerra popular tiene que darse necesariamente una elevación de la guerra contrasubversiva y va a tener como centro el genocidio y esto nos va a llevar en perspectiva al equilibrio estratégico, en el entendimiento, claro está, de que persistamos en tener una línea ideológica y política justas y correctas y tener en consecuencia, una línea militar justa y correcta y nosotros las tenemos. Así persistiendo en todo esto, más los planes siniestros que están elaborando y que llevarán al genocidio, en el cual quieren comprometer al pueblo peruano porque se sienten impotentes, pueblo que no podrá seguirlos porque no puede ir contra sus intereses de clase, van a llevar al equilibrio estratégico, insisto, en el entendimiento de mantener la corrección y la justeza en lo ideológico, en lo político, en lo militar y todas sus derivaciones. Es ahí dónde tenemos que plantearnos el problema de cómo desenvolver la guerra popular para la toma de ciudades y preparar la parte referente a la ofensiva estratégica. Más por hoy no podríamos plantear. EL DIARIO: Para potenciar la guerra, como Ud. refiere ¿es necesario potenciar el armamento del Ejército Guerrillero Popular? ¿Cómo piensan resolver esto? PRESIDENTE GONZALO: Sí, éste es un elemento. Permítannos partir de una cuestión, siempre nos hemos acostumbrado y persistimos en partir de nuestros principios, así es como iluminados por ellos podemos resolver nuestros problemas concretos. El Presidente Mao Tsetung nos dice que lo principal es el hombre, el arma es útil; entonces, nuestro problema especialmente apunta al hombre, al fortalecimiento ideológico y político, a la construcción ideológico-política del ejército en este caso, así como a su construcción militar. De ahí partimos. En cuanto a lo referente a las armas, el Presidente nos decía que las armas las tiene el enemigo, en consecuencia el problema es arrancárselas y, eso es lo principal; y las armas modernas son necesarias pero funcionan según la ideología del hombre que las maneja, eso ya nos enseñó Lenin. Podemos afirmar que estamos desarrollando las emboscadas y la fuerza armada sabe muy bien cómo se están desenvolviendo y los duros golpes que han sufrido, me refiero solamente a una relacionada con Cayara, la emboscada de Erusco, son 25 soldados aniquilados, sólo uno se ha salvado herido. Por eso su bárbara respuesta genocida; los hechos no son como los están pintando y conste que han movido grandes fuerzas, y no han podido cazarnos y conste también que nos llevamos las armas; y, ellos muy bien que lo saben y no volamos un solo carro sino los dos carros porque fue minado todo un kilómetro de carretera y no tenían escapatoria posible; lo que nos ha presentado en la televisión y periódico ese que funge de presidente y los que han ido en esa llamada "Comisión" son, como se dice, "muñequitos en el aire", "dibujitos en el agua". En consecuencia, hace tiempo ya ha comenzado el creciente traspaso de armas de ellos a nosotros y ellos tienen la obligación de traérnoslas, es su obligación y llevárnoslas a donde estemos y hay que reconocer, comienzan a cumplir. ¿Por qué planteamos así? porque los hemos desperdigado, los hemos abierto en diversos puntos y los hemos hecho asentarse pasivamente, están como un elefante enfangado en un lodazal por tanto más fácilmente golpeables, esto debe pensarlo seriamente el ejército, la fuerza armada en general. Lo que estoy diciendo no es sino aplicación de lo que el Presidente Mao enseñó cuando dijo que a Chiang Kay-shek, al término de la guerra, había que darle un premio por haberse comportado como buen furriel, como un buen portador de las armas. Así que eso ya comenzó y la fuerza armada lo sabe muy bien; y el plan que traman, todo lo que maquinan, la gran ofensiva que quieren llevar adelante, bienvenida sea, pues no impedirán el traspaso de armas y fracasarán porque no van a lograr mover al pueblo peruano en contra de sus propios intereses, y ellos son la reacción más negra y podrida hoy manejada por este gobierno aprista, fascista, corporativo encabezado por un genocida vil y miserable. El pueblo peruano, lo demostró la historia, no sigue al fascismo y no se deja corporativizar, eso ya se ha establecido y el problema no es de hoy, tiene décadas en el Perú. Entonces, las armas del enemigo, arrancándoselas, son nuestra principal fuente. La humilde dinamita, además, seguirá cumpliendo un buen papel y las minas son armas del pueblo y nosotros, por principio, buscamos las armas más simples que toda la masa pueda manejar porque la guerra nuestra es masiva sino no es popular y la nuestra lo es. Bien, esto lleva a una segunda cuestión, la elaboración de medios; estamos esforzándonos por avanzar en la confección de medios y ya ellos, también conocen muy bien, las notificaciones directas en Palacio de Gobierno, lanzadas con morteros hechos con nuestras propias manos, con las manos del pueblo, no lo dicen pero lo sabemos. El otro medio usual es el de la compra, porque son tres las formas: la principal arrancárselas al enemigo, la segunda confeccionarlas y el tercero comprarlas. En esto se tiene problemas por el alto costo de las armas y nosotros llevamos adelante la guerra popular más económica de la Tierra, así es porque tenemos muy escasos medios que son los que las masas nos proveen. Reitero una vez más. ¿Cómo resolver el problema? Lenin decía que tiene que conquistarse armas en grandes cantidades, cualquiera sea el costo que tal cosa demande y ya hablé de lo que el Presidente Mao nos enseñó. Esto es lo que nosotros aplicamos. EL DIARIO: ¿Prevé Ud. que con el triunfo y avance de la revolución que Ud. dirige se desencadenará una invasión militar norteamericana? ¿qué haría en ese momento el PCP? PRESIDENTE GONZALO: Si bien, ya está interviniendo el imperialismo yanqui, en concreto sobre la pregunta diríamos esto. Estados Unidos puede movilizar a países colindantes, no olvidemos que incluso hay pendientes reclamos territoriales y problemas fronterizos, pese a que se callan insisto; y, bien sabemos el papel que tiene asignado Brasil; puede a su vez intervenir directamente, con sus propias tropas y ya tienen aquí gente entrenándose. Hace tiempo decidimos en el Comité Central que cualquiera sea el enemigo que venga a hollar estas tierras, lo enfrentaremos y lo derrotaremos; en esas circunstancias cambiaría la contradicción, entraría a desenvolverse como principal la contradicción: nación-imperialismo y eso nos daría más amplios márgenes para aglutinar a nuestro pueblo. EL DIARIO: La reacción y el revisionismo y el oportunismo de la IU, dicen que están aislados de las masas. ¿Qué puede decir al respecto? PRESIDENTE GONZALO: Creo que de todo lo que estamos diciendo se ve que hay apoyo de las masas; a quienes tal cosa dicen, a esos revisionistas y oportunistas les haríamos una pregunta ¿Cómo explicar la existencia de un movimiento que desarrolla una guerra popular durante ocho años sin ayuda internacional si no tuviera apoyo de las masas? EL DIARIO: Durante ocho años los grupos y partidos de derecha, del revisionismo, del oportunismo y de toda la reacción han dicho y gritado que el PCP es una organización "demencial", "mesiánica", "sanguinaria", "polpotiana", "dogmática", "sectaria", "narcoterrorista", el PUM agrega que ponen al campesinado entre dos fuegos, que son militaristas y, últimamente, Villanueva ha dicho que son "terroristas genocidas" y otros calificativos. ¿Qué diría Ud., de estos cargos?. ¿Y a dónde han estado dirigidos esos calificativos? PRESIDENTE GONZALO: Para mí son infundios e incapacidad de comprender una guerra popular y los entiendo, nunca la podrán entender los enemigos de la revolución. En cuanto a que ponemos al campesino entre dos fuegos, ésa es una elucubración, porque es precisamente el campesinado la parte inmensamente mayoritaria que conforma el Ejército Guerrillero Popular; el problema está en entender que el Estado Peruano con sus fuerzas armadas y represivas quiere ahogar la revolución en sangre. Eso es nuestro entender y le recomendaríamos a estos señores que estudien un poco sobre la guerra en general, la guerra revolucionaria y principalmente sobre la guerra popular y el maoísmo, aunque dudo que lo entiendan porque para hacerlo hay que tener posición de clase. En cuanto a lo que dice el Sr. Villanueva de "terroristas genocidas" me parece que es un burdo remedo y plagio de querer aplicarnos a nosotros el término de genocidas que a ellos les viene como anillo al dedo, ante el país y ante el mundo está claramente visto quiénes son los genocidas; son ellos, es el gobierno aprista que dirige este Estado reaccionario, es la fuerza armada reaccionaria, son las fuerzas represivas, son ellos los viles genocidas; las palabrejas nunca cambiarán los hechos, la historia ya está escrita, mañana será confirmada. Además, ¿cuánto tiempo durará Villanueva? y ¿cuál será su futuro?, sería mejor que pensara en eso. EL DIARIO: ¿Qué cambios considera Ud. que se han producido en la política peruana, en la base económica de la sociedad y en las masas como consecuencia de ocho años de Guerra Popular? PRESIDENTE GONZALO: La primera cuestión que se ha producido es el desarrollo de una guerra popular que avanza incontenible, lo cual implica que la revolución democrática ha pasado a hacerse realmente por vez primera en este país, eso ha cambiado todos los términos de la política peruana. De ahí que la propia reacción, sus compinches comenzando por los revisionistas y sus apoyantes de turno o lo que sean, concluyen que el primer problema y principal que tiene el Estado Peruano es la guerra popular. Así estamos cambiando el mundo en este país y se deriva lo más importante y principal que hemos logrado, el surgimiento y desarrollo de un Nuevo Poder en marcha que terminará extendiéndose en todo el país. En la base económica, en el Nuevo Poder estamos estableciendo nuevas relaciones de producción, una muestra concreta de ésta es la forma como aplicamos la política de tierras, utilizando el trabajo colectivo y la organización de la vida social con una nueva realidad, con una dictadura conjunta, en donde por vez primera mandan obreros, campesinos y progresistas, entendiendo por tales quienes quieren transformar este país de la única manera como puede hacerse, con la guerra popular. En cuanto a ellos, a los reaccionarios, sin recordarles el forado económico que implica la guerra popular y combatirla, estamos hundiendo el capitalismo burocrático y hace tiempo socavando la base gamonal de las relaciones semifeudales que sostienen todo este armazón, al mismo tiempo golpeando al imperialismo. Para las masas de nuestro pueblo, esas heroicas masas, principalmente para el proletariado, clase dirigente que siempre reconoceremos, por vez primera asumen el Poder y han comenzado a saborear la miel en los labios, no se quedarán ahí, querrán todo y lo tendrán. EL DIARIO: ¿Cómo ve la situación actual y la perspectiva de la Guerra Popular en el Perú? ¿Qué destino le depara al pueblo peruano de no triunfar a corto plazo la revolución que Ud. viene dirigiendo desde hace más de ocho años? ¿Cree Ud. que este gobierno u otro tenga alguna salida para esta grave crisis?. El PCP en el documento "Bases de Discusión" ha señalado que entramos a años decisivos, en que el Apra sigue sin un plan estratégico, ¿Acaso estarÿamos a puertas del triunfo de la revolución y la toma del Poder por el PCP? PRESIDENTE GONZALO: El pueblo peruano cada vez se moviliza más y se agudiza la lucha de clases, eso está directamente ligado a la guerra popular, porque no somos sino continuación de la lucha de clases con las armas en la mano. ¿Qué destino le depara?, yo creo que el heroico destino de destruir el viejo Estado y el glorioso de empezar a construir una nueva sociedad, será un grandioso esfuerzo, serán tiempos de sacrificios y dificultades pero el pueblo saldrá victorioso y, al fin y al cabo, bastaría con recordar sin la guerra popular ¿dejarán de morir 60.000 niños sin llegar a un año de edad, como está ocurriendo hoy en el Perú? No, por tanto el pueblo seguirá haciendo todo el esfuerzo y atravesará dificultades pero cada día más consciente pagará el costo necesario pues sabe que va a vencer. ¿Salida? Consideramos que no tienen salida. Nuestra interpretación del proceso de la sociedad peruana contemporánea plantea que a partir del 80 ha entrado el capitalismo burocrático en destrucción y como consecuencia se viene abajo todo el sistema y no tienen salida. Y si las cosas vemos, hay una crisis grave pero se les ha juntado dos décadas, la del 80 y la del 90, ambas críticas, no tienen salida alguna. En cuanto a años decisivos, entendemos por tales una más recia tempestad entre guerra popular y guerra contrarrevolucionaria, y creemos, reitero, que de ahí va a derivar el equilibrio estratégico. Sobre tiempo, el Presidente Mao decía menos tiempo cuanto más y mejor combatamos, de nuestra parte es nuestra obligación hacerlo, lo hacemos y lo haremos pero tenemos condiciones objetivas extraordinarias. Las condiciones de crisis general en que ha entrado el caduco sistema de la sociedad peruana nos plantea que estos años decisivos pueden acelerar y de hecho van a acelerar poderosamente las condiciones y desarrollar la situación revolucionaria. Nuestro problema hoy ¿cuál sería? En síntesis, más guerra popular, más Poder Nuevo, más Ejército, más incorporación de la masa y así creemos que el triunfo en perspectiva es nuestro. EL DIARIO: Finalmente, ¿puede desarrollar su posición acerca de la guerra popular mundial? En el caso de una guerra mundial entre las superpotencias ¿cuáles serían los resultados para la humanidad? PRESIDENTE GONZALO: ¿Puede haber una guerra mundial?, sí puede haberla; las condiciones existirán en tanto no barramos su raíz. Las superpotencias preparan la guerra y hacen grandes planes, es evidente, pero creemos que los comunistas y los revolucionarios, las masas, el pueblo, los hombres que ya no podemos consentir que haya tanta iniquidad en el mundo, tenemos que apuntar a centrar nuestra atención, no en la guerra entre las superpotencias porque de ella no va a derivar nuestra liberación, porque sería una guerra de rapiña para un nuevo reparto del mundo. La guerra mundial de las potencias es por la hegemonía, nada más eso. De ellas ¿qué podríamos esperar? grandes matanzas, grandes genocidios, cientos de millares de muertos, pero, a buen seguro, la inmensa mayoría de la humanidad subsistirá. No podemos aceptar las siniestras ideas levantando hoy las armas atómicas y todas las armas sofisticadas que exhiben, ni podemos aceptar que las usen como un chantaje para paralizarnos. Muchas veces en el mundo se ha hablado por los reaccionarios de armas decisivas y definitivas, de desaparición de la humanidad, pero siempre ha sido para aquietar, para contener, para mantener su viejo dominio. Nosotros por eso pensamos que el problema está en centrar la atención, nuestro esfuerzo, nuestra pasión, nuestra voluntad en desarrollar la guerra popular, porque de ella sí devendrá la emancipación del pueblo y del proletariado que es la definitiva y verdadera emancipación. Pensamos que una guerra popular mundial es la respuesta a una guerra mundial imperialista, pensamos que el problema es prepararla y la concebimos como que los que ya estamos en guerra popular la desarrollemos más, los que no la han iniciado comiencen a desarrollarla y así iremos demoliendo el dominio imperialista, el dominio de la reacción y los iremos barriendo de la faz del mundo. No concebimos la guerra popular mundial como un hecho que se dé simultáneamente en un día y hora exactos, la concebimos como la proyección en perspectiva, ligada a los 50 a 100 años que estableciera el Presidente Mao Tsetung, la concebimos como grandes olas de guerra popular hasta que al fin converjan todas ellas como legiones de hierro de un gran ejército rojo mundial como dijera el propio Lenin. Así es como la concebimos, creemos que ése es el único camino a seguir; el problema, insisto, está en que la guerra mundial es un riesgo y será una inmensa matanza pero de ella solamente vendrá: miseria, iniquidad, dolor, muerte, pero más razones para acabar con ellos y la solución sólo es una, en consecuencia, la guerra popular que concebida en esas oleadas lleve a esa guerra popular mundial y a esa convergencia de las legiones de hierro del proletariado internacional, de los pueblos que, al fin y al cabo, cumpliremos con la misión histórica que nos ha correspondido en gran suerte, vivir estos decenios en los cuales el imperialismo y la reacción serán barridos porque lo que el Presidente Mao previó se cumplirá. Si no lo vemos nosotros lo verán quienes continúen porque las legiones se incrementan más y más. El problema ¿en dónde estaría? la clave ¿cuál sería? Poner al mando el marxismo-leninismo-maoísmo y con el maoísmo principalmente asumir la guerra popular aplicable universalmente, considerando el carácter de cada revolución y las condiciones específicas de cada país. IV. SOBRE SITUACION POLITICA NACIONAL EL DIARIO: Presidente, ¿cuál es el análisis del PCP sobre el proceso del Estado Peruano y a dónde marcha? PRESIDENTE GONZALO: Tenemos una comprensión del proceso de la sociedad peruana contemporánea, entendiendo por tal la que se inició en 1895, consideramos que de ahí arranca el proceso que estamos viviendo y pensamos que tiene tres momentos. Un primer momento en que sienta bases para el desenvolvimiento del capitalismo burocrático; un segundo momento después de la II Guerra Mundial porque hasta allí abarca el primero, de profundizar el capitalismo burocrático; esa profundización del capitalismo burocrático va a madurar las condiciones para la revolución y con el inicio de la guerra popular, en el año 80, entramos al tercer momento de crisis general del capitalismo burocrático; ha comenzado la destrucción de la sociedad peruana contemporánea porque ha caducado históricamente, en consecuencia, lo que vemos es su final y lo que cabe es bregar, combatir, luchar para enterrarla. EL DIARIO: ¿Por qué Ud. considera fundamental la tesis del capitalismo burocrático? PRESIDENTE GONZALO: Consideramos clave esta tesis del Presidente Mao Tsetung porque sin comprenderla y manejarla no es factible desarrollar una revolución democrática y menos concebir su continuación ininterrumpida como revolución socialista. Es realmente muy inconveniente que esta tesis del Presidente Mao sea soslayada y que simplemente se enrede el análisis en hablarnos de desarrollo del capitalismo en países atrasados o de capitalismo dependiente que a nada conducen sino a cambiar el carácter de la revolución; creemos que es partiendo del Presidente Mao Tsetung que nosotros vamos a entender bien la sociedad peruana y las sociedades llamadas atrasadas. Entendemos que el capitalismo burocrático, comienza a darse en el Perú desde el 95 del siglo pasado, en los tres momentos que acabo de esbozar. Lo concebimos de esta forma, sobre una base semifeudal y bajo un dominio imperialista se desarrolla un capitalismo, un capitalismo tardío, un capitalismo que nace atado a la feudalidad y sometido al dominio imperialista, son esas condiciones las que generan lo que el Presidente Mao Tsetung ha denominado capitalismo burocrático. Pues bien, el capitalismo burocrático se desenvuelve ligado a los grandes capitales monopolistas que controlan la economía del país, capitales formados, como lo dice el Presidente Mao, por los grandes capitales de los grandes terratenientes, de los burgueses compradores y de los grandes banqueros; así se va generando el capitalismo burocrático, atado, reitero, a la feudalidad, sometido al imperialismo y monopolista, y esto hay que tomarlo en cuenta, es monopolista. Este capitalismo, llegado a cierto momento de evolución se combina con el Poder del Estado y usa los medios económicos del Estado, lo utiliza como palanca económica y este proceso genera otra facción de la gran burguesía, la burguesía burocrática; de esta manera se va a dar un desenvolvimiento del capitalismo burocrático que era ya monopolista y deviene a su vez en estatal, pero este proceso lo lleva a generar condiciones que maduran la revolución; éste es otro concepto importante, políticamente hablando, que el Presidente plantea sobre el capitalismo burocrático. Si comprendemos el capitalismo burocrático, podemos muy bien entender cómo en el Perú se da una situación semifeudal, un capitalismo burocrático y un dominio imperialista, principalmente yanqui. Eso es lo que debemos comprender, lo cual permite entender y manejar la revolución democrática. Ahora, ¿qué otra importancia más tiene el capitalismo burocrático? el Presidente nos dice que la revolución democrática cumple algunos avances socialistas lo cual, dice, ya se expresaba por ejemplo en la ayuda mutua que se daba en el campo, en las bases de apoyo; pues bien, para pasar de la revolución democrática a la socialista es clave, desde el punto de vista económico, la confiscación de todo el capitalismo burocrático, lo cual permite al Nuevo Estado controlar la economía, manejarla y servir a desarrollar la revolución socialista. Entendemos que este concepto estratégico es de gran importancia y, reitero, lamentablemente se le soslaya y mientras se le siga soslayando no se entenderá bien lo que es una revolución democrática, en las actuales circunstancias en que nos debatimos. Es erróneo considerar que el capitalismo burocrático es el capitalismo que desarrolla el Estado con los medios económicos de producción que tiene en sus manos; es erróneo, eso no se compagina con la tesis del Presidente Mao Tsetung. Bastaría pensar en esto, si el capitalismo burocrático fuera solamente el estatal, se confiscaría ese capitalismo estatal y el otro, capitalismo monopolista no estatal ¿en qué manos quedaría? en las de la reacción, en las de la gran burguesía. Esa interpretación de identificar capitalismo burocrático con capitalismo monopolista estatal es una concepción revisionista y en nuestro partido fue sostenida por el liquidacionismo de izquierda. Por eso este problema, entendemos, que es muy importante. Además, políticamente nos permite diferenciar con mucha nitidez la gran burguesía de la burguesía nacional o media; y, eso nos da instrumentos de comprensión para no ponernos a la cola de ninguna de las facciones de la gran burguesía, ni de la compradora ni de la burocrática, que es lo que en el Perú ha hecho el revisionismo y el oportunismo y siguen haciéndolo, décadas de esa siniestra política de rotular a una facción de la gran burguesía como burguesía nacional, progresista, y apoyarla. La comprensión del capitalismo burocrático nos permitió entender bien la diferenciación, reitero, entre burguesía nacional y gran burguesía y comprender la táctica correcta que teníamos que seguir, retomando precisamente lo que Mariátegui estableciera. Por eso consideramos sumamente importante la tesis del capitalismo burocrático. EL DIARIO: ¿Cuál es en síntesis su análisis político y económico de la coyuntura actual y la perspectiva?, ¿acaso esta situación es favorable para el PCP?, ¿cómo lo es para la reacción, el revisionismo y el oportunismo? PRESIDENTE GONZALO: Concebimos que el capitalismo brocrático ha entrado en crisis general; mas aún, pensamos que ese capitalismo burocrático nace enfermo porque es derivado de la semifeudalidad o está ligado a ella y del imperialismo, la semifeudalidad es obviamente caduca y el imperialismo agonizante; de dos padres condenados a muerte por enfermedad incurable, ¿qué tipo de hijo puede salir?, un engendro enfermo que ha entrado en su fase de destrucción. Pensamos que las crisis se agudizan cada vez más; que, incluso como dicen algunos economistas, son 30 años más o menos de crisis de la cual no podemos salir sino pequeñas ondulaciones de recuperación, o, como dice el Apra en sus propios documentos internos, es una crisis que viene desde mediados de la década del 70. Entendemos que cada crisis nueva es peor que la anterior; y si le sumamos a esto que se le juntan dos décadas críticas, las de los 80 y 90, las situación ya está clara. ¿Que dicen ellos mismos?, que este gobierno va a dejar la situación sumamente grave y el que viniere, en el supuesto caso de que venga, en su renovación electoral, tendría que buscar subsanar los problemas dejados y que, en consecuencia, solamente a partir del 95 habría que pensar en desarrollar. Y esto, se dice, en un país en el cual tenemos 20 años de rezago; por eso creemos que su perspectiva es sumamente negra. ¿Esto es favorable a la revolución, a la guerra popular, al Partido?. Sí, sí es favorable, primero y principalmente, a la clase y al pueblo porque toda nuestra labor es para ellos, para que la clase mande, dirija, para que el pueblo ejerza su libertad y pueda pues satisfacer hambre centenaria. No vemos perspectiva alguna para la reacción y el revisionismo, creemos que están unidos, son siameses, así es que los dos marcharán a la tumba. Eso es lo que pensamos. EL DIARIO: ¿Por qué caracterizan al gobierno aprista de fascista y corporativo? ¿cuál es la sustentación de esto? ¿Qué opina del discurso de Alán García Pérez en el Congreso de la Juventud aprista en Ayacucho y del que dio en Paita, de las medidas económicas del nuevo gabinete? PRESIDENTE GONZALO: Sobre la caracterización del gobierno aprista, sin entrar a ver su problema histórico porque tiene otras implicancias que no necesitamos ver hoy; la situación concreta que se presentó en el Apra, cuando le entregaron por acuerdo la dirección del Estado Peruano, el Apra entró en una situación dilemática, dos tendencias se daban en ella, una de criterios fascistas y otra de criterios demoliberales. Eso es lo que se daba en el Apra y entendemos, en este caso, por criterios demoliberales, el mantenimiento de este orden constitucional reaccionario, establecido en el año 20, en el año 33 y en el año 79, eso entendemos por ese orden demoliberal. El Apra tenía un problema, la necesidad de inversiones para poder hacer avanzar la economía o más concretamente, presentarnos una vitrina de éxitos, porque eso es lo que ha hecho, consumir lo poco que tenían para presentarnos una vitrina de éxitos tan frágil como el vidrio y la prueba la estamos viendo hoy; de ahí que no se pueda decir de modo alguno que el plan del Apra era un buen plan económico, porque de tan buen plan económico ¿cómo tan malos resultados? no tiene sentido. Bien, así el Apra tuvo que acudir a los capitales de la burguesía compradora y ésta obviamente exigió condiciones; y, en los propios documentos del Apra se dice que, a fines del año 85, ya la gran burguesía, particularmente la compradora, comenzaba a recuperar y a capitalizar. El año 86 fue su paraíso, obtuvieron miles de millones de ganancia en dólares como ellos mismos lo han dicho, creyendo que luego iban a invertir; pero ese plan no iba a funcionar, necesariamente iba a entrar en crisis y a fracasar y, por tanto, no podían invertir; desde ahí se agudizó más la pugna entre ellos, de ahí las luchas entre ambas facciones de la gran burguesía. El Apra, por otro lado, por el lado del pueblo se encontró frente a unas inmensas necesidades insatisfechas en las masas y demagógicamente como siempre se comprometió con todos; demagógicamente, porque lo que buscaba el Apra era simplemente tratar de desarrollar, desenvolver el proceso económico reaccionario y ése no se hace sino restringiendo los ingresos del pueblo, porque ¿de dónde salen las ganancias?, de la plusvalía; entonces, tenía, pues, un problema con las masas y lo sabía, de ahí su política represiva, antipopular, antisindical, antiobrera, eso desde el comienzo se ve. Pero había otras circunstancias, la guerra popular; el Apra aunque no quisiera tenía que afrontarla y la guerra popular era ya entonces un problema principal. Todas esas condiciones son las que van a determinar que se produzcan cambios dentro del Apra, que se defina el dilema; pero éste ¿cuándo se va a definir?, el dilema se va a definir con el genocidio del año 86, la lucha de clases de las masas, la guerra popular, principalmente y la acción genocida llevaron al Apra a definirse por el fascismo y al triunfo de la facción fascista. Ahí consideramos que se produjo y comenzó, como todos ya lo reconocen, el desprestigio y el descalabro del Apra, no solamente en el Perú sino ante el mundo. ¿Por qué le llamamos fascista? la facción fascista que ya existía en el Apra va a tomar medidas políticas para ir implementando la corporativización, aunque eso ya está en el primer discurso que presentó García Pérez en julio del 85. ¿Qué entendemos por fascista y corporativo? Para nosotros el fascismo es la negación de los principios demoliberales, es la negación de los principios demoburgueses nacidos y desarrollados en el siglo XVIII en Francia; esos principios han ido siendo abandonados por la reacción, por la burguesía en el mundo, así es como ya la Iª Guerra Mundial nos hizo ver la crisis del orden demoburgués, por eso es que posteriormente insurge el fascismo. Entonces, en el Apra lo que se da es esa negación de los principios del orden demoburgués y cotidianamente comprobamos la negación de todas las libertades y derechos constitucionalmente establecidos. Consideramos al fascismo también en el plano ideológico como un sistema ecléctico, no tiene una filosofía definida, es una posición filosófica hecha de retazos, coge de aquí y de allá lo que le conviene; esto se expresa claramente en García Pérez: cuando va a Harare en Africa es africano y saluda a los africanos, a Kenneth Kaunda, cuando va a la India saluda a Gandhi es gandiano, cuando va a Méjico saluda a Zapata es zapatista, cuando vaya a la Unión Soviética si es que fuere va a ser salvador de la Perestroika; él es así, es que ésa es la formación ideológica, filosófica del fascismo, no tiene una definida posición, es un eclecticismo, toma lo que está a la mano. En cuanto a su corporativismo. Entendemos por corporativismo el montar el Estado en base a corporaciones, lo cual implica la negación del parlamentarismo, es una cuestión esencial que ya Mariátegui la destacó en "Historia de la crisis mundial", él nos decía, la crisis de la democracia burguesa se expresa claramente en la crisis del parlamentarismo; si uno ve aquí el Parlamento, si bien es cierto que en las últimas décadas ha sido el Ejecutivo el que ha dado las leyes más importantes del país, es en este gobierno aprista donde más ha sido el Ejecutivo el que ha acaparado todas las leyes fundamentales que ha dado para sus fines, no hay ninguna ley importante que haya dado el Parlamento, eso es real y todo ha sido darle facultades al Ejecutivo para que haga y deshaga. Todo es una negación del parlamentarismo. El problema del corporativismo en el país no es reciente; ya en el año 33, cuando se debatía la Constitución en la segunda reestructuración del Estado peruano de este siglo, Víctor Andrés Belaúnde ya planteó la corporativización de la sociedad peruana; Villarán que fue ponente de la Constitución, se opuso planteándo ¿cómo vamos a corporativizar si es que no hay corporaciones?, fue una manera de zafar el cuerpo; así, ya tenemos algunos antecedentes. Cabe recordar, ahora que tanto hablan de ese señor Belaúnde, cuyas obras acaban de publicar, su criterio de: frente al liberalismo que centra en el dinero y contra el comunismo que niega la persona humana, lo que cabe son los sistemas corporativos a imagen de los modelos medievales; es bueno tenerlo en cuenta para ver su filiación y su raíz, y a su vez tener muy presente que está íntimamente ligado a los planteamientos del Papado a partir del siglo pasado. Velasco también intentó corporativizar el país, por eso comenzó la conformación de corporaciones de productores agrarios por ejemplo; su propia ley agraria, la 17716, políticamente, apuntaba a establecer bases corporativas; la ley industrial también, ¿cómo? a través de la comunidad industrial; su famosa organización política que no llegó a cuajar también planteaba criterios nítidamente fascistas y la corporativización, pero eso no se pudo plasmar en el Perú. ¿Y, qué es lo que pretenden, qué quieren: la conformación de corporaciones, esto es organizar corporativamente a los productores y a todos los elementos que componen la sociedad, supongamos: productores fabriles, productores agrarios, comerciantes, profesionales, estudiantes, Iglesia, Fuerzas Armadas, Fuerzas Policiales, todos ellos nombran sus delegados y así conforman un sistema corporativo. Eso es lo que buscan y lo que el Apra está haciendo; y las regiones y microrregiones, ¿qué significan?. Todo ese plan de regiones de hoy día sirve a la corporativización del país; por eso tenemos que oponernos abiertamente, no sólo porque son manejos políticos del Apra en posiciones electoreras, sino porque es un sistema corporativo y, además, está poniendo en riesgo a un país que ni siquiera tiene una unidad nacional conformada. Son cosas sumamente serias. Por estas razones es que decimos que es un gobierno fascista y corporativo y cuyo camino lo está queriendo impulsar, de ahí su gran preocupación por las regiones que se las quiere imponer a cómo dé lugar; esto lo estamos viendo, he ahí todas esas asambleas parlamentarias extraordinarias que no han podido cumplir con lo que García dijo, el año pasado planteó: o se forman las regiones o dejo de llamarme Alán García Pérez; pasó el año, no sé cómo se llamará hoy día, porque no están formadas las regiones; ahora, dicen que a fines de este año, veremos. En cuanto al problema de identificar fascismo con terror, con represión, nos parece que es un error, lo que pasa en este caso es lo siguiente: si uno recuerda el marxismo, el Estado es la violencia organizada, ésa es la definición que nos han dado los clásicos y todo Estado usa violencia porque es dictadura, si no ¿cómo contendría para oprimir y explotar? no podría hacerlo; lo que sucede, en consecuencia, es que el fascismo desarrolla una violencia más amplia, más refinada, más siniestra, pero no se puede identificar fascismo igual violencia, es un craso error. Esas son ideas que después de la Segunda Guerra Mundial van a desarrollarse aquí en el Perú y son ideas que ha difundido y planteado muchas veces Del Prado y son ideas que también ha planteado Dammert. La identificación de fascismo con terror es no comprender a Mariátegui quien en "Figuras y Aspectos de la vida mundial", cuando habla de H.G. Wells, nos dice que el Estado burgués tiene un proceso de desarrollo y que es ese proceso de desarrollo el que lo lleva a un sistema fascista y corporativo; esto se entiende muy bien si vemos las obras de Mariátegui, la citada "Historia ..." o "La Escena Contemporánea", recordemos que él lo vivió, estudió y conoció, directamente. En el país hay que ver el fascismo en sus diversos aspectos desde su ideología, su política, su forma orgánica, ver cómo usa la violencia, su terror; hoy vemos cómo es que aplica una violencia refinada y más desarrollada, más amplia, brutal y bárbara eso es lo que se llama terror; pero, por lo demás, el terror blanco siempre ha sido aplicado ¿o no? siempre los reaccionarios cuando se han visto en dificultades han aplicado el terror blanco; así que no podríamos nunca, pues, identificar y reducir todo el fascismo a simplemente terror; debemos entender que es una violencia más refinada y que desarrolla terrorismo, sí, pero eso no es todo es un componente, es su modalidad de desenvolver la violencia reaccionaria. En cuanto al discurso de García Pérez en el Congreso de la Juventud aprista; en síntesis, en el Apra hay una intensa lucha y tiene que ver con su próximo Congreso y el problema está en si García Pérez mantiene o no el control sobre ese Partido en función de perpetuarse en el Poder coludido con la Fuerza Armada. Hace tiempo se ve que la juventud aprista cuestiona la labor gubernamental, se ha producido grandemente en ese Congreso de Ayacucho y García Pérez ha tenido que viajar desesperado para explicar , justificarse y presentarse como el salvador; eso es lo que quiere, porque ve la importancia que tiene el ganarse a la juventud en función de sus apetitos de führer. Esa es, creo, la esencia, el problema de lo que haya hablado sobre nuestro Partido y la supuesta admiración que dice tenerle, simplemente nos revela la lucha en el Apra, porque admiración no nos puede tener quien es un genocida y un asesino cotidiano del pueblo, de los combatientes, de los comunistas; son demagógicas poses, debocados apetitos ligados al congreso del Apra y en función de sus perspectivas políticas porque él juega a muchas cartas, pues es hombre bastante joven. De Paita, el "discurso de Paita", en síntesis es un discurso fascista, abiertamente fascista; no es como se dice que es un tirón de orejas a los parlamentarios que hicieron un bochinche, lo cual es común entre ellos y no tiene nada de extraordinario, eso no ha sido; es un discurso estrictamente fascista, García Pérez quiere desenvolverse como führer por algo lo llaman "conductor", muchas veces el propio diputado Roca lo llama así: "conductor" y ¿conductor no es igual a führer? quiere decir lo mismo en alemán; por eso creo que es correcto cuando algunos le dicen "aprendiz de führer", pero al fin y al cabo lo que está demostrando es ser un demagogo barato con grandes apetitos desenfrenados, dispuesto a todo por satisfacerlos, la egolatría creo que es una de sus características. En cuanto a las medidas económicas del nuevo gabinete, como tenía que ser, nadie está de acuerdo con ellas; claro, nadie está de acuerdo con ellas y el pueblo menos aún que es lo que nos interesa. Entonces se desenvuelve una doble contradicción: la primera, una contradicción con la burguesía compradora porque las medidas económicas son insuficientes, al gobierno aprista le piden más medidas y le exigen definición de su plan porque presenta uno para 18 meses pero en líneas generales sin concretar problemas importantes; (el Apra se va a pasar así estos 5 años de un plan de emergencia a otro plan de emergencia y a un nuevo plan de emergencia; de emergencia en emergencia, lo cual implica la descompaginación completa de los planes que pensó aplicar en su gobierno, me remito a sus propios documentos). Y a la segunda contradicción con el pueblo, obviamente como tenía que ser ajustar las correas al pueblo para que haya una recapitalización; ¿de dónde y cómo sacar capitales?, pues reduciendo el salario. Esas son, en síntesis, las medidas y por eso le crean al Apra más problemas que los que tuvo; mientras sigue, demagógicamente, posponiendo lo que el propio orden en el cual se mueve le impone y lo que él mismo hace bajo cuerda porque ya está coludido hace tiempo con Estados Unidos, con el imperialismo, su relación con el Banco Mundial es sumamente clara, su vinculación con el BID sumamente clara y esos son los instrumentos que están usando más ahora los imperialistas dado el desprestigio del FMI aunque la perspectiva es que vuelvan a su regazo. Así, pues, estas medidas económicas no salvan la situación, la van a agravar y tendremos una situación económica sumamente grave y crítica que se va a extender más recayendo drásticamente sobre las masas. EL DIARIO: Presidente ¿Cómo enjuicia las próximas elecciones, la posibilidad de un golpe de Estado o de un autogolpe? PRESIDENTE GONZALO: Si me permitieran, les diría que lo principal de las elecciones es boicotearlas y si es posible impedirlas. ¿Por qué planteamos esto? ¿Qué va a ganar el pueblo? Nada. Nada va a ganar con la renovación electoral, eso creo que es una cosa muy clara en la historia del país. En el documento "Desarrollar la Guerra Popular sirviendo a la Revolución Mundial" hicimos ver, hemos demostrado, y nadie lo ha desmentido, hemos demostrado cómo el porcentaje de votos de la IU es la situación que impidió que la mayoría se expresara contra las elecciones; creo que eso está demostrado, por tanto, hemos planteado, y los hechos nos demuestran, que la tendencia en el Perú es a no esperar nada de las elecciones ni de un nuevo gobierno, la tendencia es a rechazar las elecciones. El problema ¿dónde está?, en cómo el revisionismo y el oportunismo siguen traficando con las elecciones, ése es el problema, de ahí viene. Entonces el punto clave ¿cuál sería?, golpear y desenmascarar qué implica un proceso electoral, que no implica sino permitir la renovación de autoridades de este viejo y podrido orden, nada más significa; porque no nos van a decir que implica mantener el campo democrático, esos son viejos cuentos que ya nadie va a creer, son los cuentos que nos contaron los que hoy son PUM allá cuando la Constituyente, allá cuando el 80, que había campos democráticos, que se estaba en situación pre-revolucionaria y que con el uso parlamentario como tribuna pasaríamos a situación revolucionaria, para después decirnos que había que centrar en defender el orden existente. Creo que eso sería lo principal para el pueblo, que la mayoría exprese su rechazo a las elecciones, aunque fuere votando simplemente en blanco, aunque fuere simplemente así; eso es importante porque de esa manera entonces se expresará la voluntad de la masa de nuestro pueblo, la inmensa mayoría que ya comprende que por ese camino electorero no hay solución. Creo que, han querido jugar con las elecciones adelantando ya la campaña electoral para, de esa manera, buscar que el pueblo centre su vista en los comicios; pero vemos que ese plan les ha fracasado y les ha fracasado por dos razones: una, primera, los graves problemas que tiene el pueblo y cómo aumenta su combatividad cada día, a la cual sirve la Guerra Popular; y en segundo lugar, por las propias contradicciones que han convertido en coladeras a todas sus instituciones políticas, supongamos la IU es una coladera de contradicciones, ese llamado FREDEMO es otra coladera de contradicciones y el Apra es una olla de grillos, realmente es así. Y sí su afán de desviar la atención del pueblo ha fracasado y si las condiciones son una guerra popular de gran perspectiva como realmente lo son, lo que tenemos que impulsar todos los hombres revolucionarios que queremos que este país se transforme es que el pueblo rechace ese proceso, allá ellos que vean cómo cambian sus autoridades, es su problema no el nuestro. Creemos que es así. En cuanto a que haya un golpe de Estado, bueno, en el país siempre está lista la posibilidad de golpe de Estado; más, entendemos que ellos mismos ya se asustan planteando que el ejército no ve ninguna fuerza política capaz de enfrentar la Guerra Popular. Si así dice el ejército, quiere decir que el golpe puede darse en cualquier momento pero puede tener muchas maneras de darse, ésa es otra cuestión; podría darse algo similar como en el Uruguay con Bordaberry, quien en este caso sería García Pérez; podría producirse un autogolpe, es otra de las cartas que tiene en la manga García Pérez, porque un golpe de Estado lo sacaría como víctima no como el fracaso político que es y siendo jóven, de aquí a un tiempo, podría volver como mártir y defensor de la democracia, por eso es otra de las cartas de la baraja de ese demagogo prestidigitador. Y si pensamos más, realmente cada vez más las fuerzas armadas tienen que ir desenvolviendo una lucha contrarrevolucionaria más desarrollada que aumenta su poder, eso es así; y creemos que la contradicción marcha en la perspectiva de que tengamos que enfrentarnos por un lado, el de la revolución, el Partido Comunista del Perú dirigiendo la guerra popular y por el otro, el de la reacción, las fuerzas armadas dirigiendo la guerra contrarrevolucionaria en el Perú. EL DIARIO: Presidente ¿Ud. aceptaría dialogar con Alán García Pérez? PRESIDENTE GONZALO: El diálogo está siendo muy llevado y traído y es parte también del juego de las superpotencias, particularmente del socialimperialismo. Nosotros vemos de esta manera la situación, hay un momento en el que se dan relaciones y tratos diplomáticos y son una necesidad en el desarrollo de una guerra popular; por ejemplo la reunión del Presidente Mao con Chiang Kai-shek; así que es un fenómeno conocido, lo hemos visto también en el caso de Viet Nam, es una faceta del desarrollo de una guerra revolucionaria, más de una guerra popular. Pero, hay que partir de que en las reuniones diplomáticas sólo se firma en la mesa lo que está refrendado en el campo de batalla porque nadie entrega lo que no ha perdido obviamente, eso se entiende. Bien, uno se preguntaría ¿ha llegado ese momento en el Perú? No ha llegado ese momento, entonces ¿qué razón tiene el plantear el diálogo?, el diálogo simplemente apunta a frenar, a socavar la guerra popular, a eso apunta, a nada más, e insisto, la razón es que no ha llegado el momento de vínculos y tratos diplomáticos, no tienen razón de ser. Por lo demás, creo que es una cuestión demagógica que vienen agitando desde la época de Belaunde, a raíz de una propuesta aceptada hecha por un elemento de la Izquierda Unida, el entonces presidente planteaba que no había interlocutor válido; palabras, en el fondo no era sino una demagogia barata sin ton ni son y, hoy día, sigue siendo lo mismo. ¿Y quiénes hablan de diálogo? los revisionistas, los oportunistas y los que tienen esperanzas en el Apra, en este orden demoburgués, en este orden reaccionario, son ellos; pero ¿no son a su vez los mismos que están planteando la pacificación, nuestra destrucción? ¿los que proponen cómo pacificar mejor que implica cómo barrernos porque son también sus negros sueños para saciar sus apetitos?; son los mismos, ¡qué coincidencia!, entonces, pues, ese diálogo es un siniestro tráfico. Uno se podría preguntar además ¿cómo pueden hablar de diálogo ésos que incluso habiendo pactado una amnistía con García Pérez éste nunca la cumplió?. Por eso para mí, la cháchara sobre el diálogo no es sino, reitero, buscar socavar la guerra popular, pues no corresponde a la realidad. Cuando llegue llegue el momento necesariamente la guerra popular tendrá que desenvolver tratos diplomáticos; pero nuestra diplomacia apuntará a la conquista del Poder en todo el país, cabal y completamente, no queremos Viet Nam del Norte y Viet Nam del Sur, no queremos Corea del Norte y Corea del Sur, no queremos Perú del Norte y Perú del Sur, queremos un solo Perú. Esa es nuestra condición, la rendición cabal, completa y absoluta ¿están dispuestos a eso?; no, lo que están tramando es nuestra destrucción, así que el diálogo no es sino parte del mismo plan pese a todo su cacareo demagógico y filisteo. EL DIARIO: ¿Qué piensa de IU y su línea política?, ¿qué destino le depara Ud. a este frente revisionista? Y sobre ANP ¿qué posición tiene el PCP? PRESIDENTE GONZALO: Sobre eso quisiera ser escuetamente breve, primero porque, ¿cuál es la línea de Izquierda Unida en estos momentos? No la sabemos, de documentos anteriores plantea que es "un frente de masas de tendencia socialista", y se ha centrado como es evidente en el cretinismo parlamentario. En el fondo de sus posiciones ¿qué hay? una cuestión bien simple creer que pueden tomar el gobierno y luego, como dicen ellos, el poder; pues que entiendan que no se toma el uno sin el otro, más aún, primero tomas el Poder y luego haces su gobierno, porque el problema esencial del Estado es el sistema de Estado, lo que quiere decir la dictadura que se ejerce, de qué clase es, y lo derivado de eso es el sistema de gobierno. Lo demás son elucubraciones baratas de revisionistas podridos; si uno ve sus planteamientos no están por la destrucción del Estado reaccionario sino por un gobierno que les permita seguir evolucionando este orden caduco y podrido, eso es lo que buscan proclamando que con ese gobierno y reformas pueden marchar al socialismo; y todo esto es sencillamente revisionismo desenfrenado ya condenado por Lenin. Por otro lado, habrá que ver pues sus tesis políticas y su congreso; en cuanto a sus tesis políticas, recién las van a publicar. Creo que en la IU, que es un frente no hay que olvidarlo, lo que se ve es una reedición del viejo frentismo electorero oportunista que hemos visto muchas veces en el Perú. Ese frente es la negación de un Partido que dirija y si no hay partido del proletariado que dirija no hay transformación, no hay revolución; y la revolución nunca se ha hecho a través del Parlamento, ni se hará jamás, están reeditando con afeites nuevos viejas cuestiones ya discutidas en los años 60. A la IU, para ser sintético ¿cómo la veo? como una coladera de contradicciones, como una colusión y pugna, ¿qué los une? la colusión, afanes, seguir el camino del cretinismo parlamentario, reeditar viejos fracasos o, de usarlos la reacción como una carta, jugar papeles siniestros como Ebert en Alemania, el protervo y vil asesino de la revolución del 19. Creo que eso es lo que los une y ¿qué los divide? sus pugnas, sus bases, sus apetitos y que tienen diversos amos, por tanto dependen de cómo sus amos definan la situación, porque ahí hay revisionistas que sirven al PCUS, ahí hay revisionistas que sirven a Teng, dependen de qué dicen sus amos o los intermediarios de esos amos; y esto sin contar los vínculos con otros centros de poder. Así que ahí está el problema. Hay cosas que a quienes verdaderamente quieren la revolución deben hacerles pensar; hay quienes tienen la obligación de pensar si realmente están por la revolución, tienen que romper ese frentismo electorero rastrero e inútil que es una rémora, y asumiendo su posición de clase, según la clase a la que defiendan, convergir en un frente verdaderamente revolucionario, que lo hagan y que converjan en los hechos; no basta decir sectarios hay que demostrar que no se es, y para demostrar que no se es primero hay que dejar de ser oportunista, hay que dejar de ser revisionista y para otros hay que dejar de querer llevarnos por inconducentes caminos de social-cristianismo. Si quieren la revolución que lo demuestren y para eso que expresen en hechos el abandono de ese camino erróneo que siguen, de estar a la cola del revisionismo soviético y chino, eso es lo primero que tendrían que hacer, aparte, reitero, de que no nos vengan con posiciones de caminos socialcristianos; que entiendan realmente el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente el maoísmo y mientras no lo entiendan no van a avanzar; que entiendan lo que es hacer una revolución a través de una guerra popular, y que comprendan y abran los ojos, porque la verdad es machacante y no pueden negar lo que todo el mundo ve excepto ellos. Los apetitos no pueden ser tantos y que asuman claramente sus limitaciones de clase, y acepten que es el proletariado el que dirije como clase a través de un Partido Comunista y esto es lo que nos interesa principalmente. En cuanto a la Asamblea Nacional Popular. Bueno, la ANP es una cosa interesante, por un lado, se dice "es germen de poder", muy bien, "germen de poder", pregunto ¿están queriendo formar soviets?, ¿están reeditando la experiencia boliviana cuando Juan José Torres? ¿puede crearse un poder así? Levantar ese supuesto "germen de poder" es simple y llanamente oponerse al Nuevo Poder que nosotros estamos construyendo real y concretamente. Por otro lado, también esta ANP, se dice, que es "un frente de masas", ¿o sea que es competidora de la IU, también es un "frente de masas"? Bueno, que se defina qué cosa es pues, ¿es "germen de poder" o es "frente de masas"?, qué cosa es en concreto y que se plantéen claramente cómo se forja poder. ¿Qué se ve?, simplemente que la ANP es manejada por el revisionismo; pruebas al canto, sus paros siguen el rumbo y hasta las fechas que fija el revisionismo a través de la CGTP por tanto, también es ahí cabeza el revisionismo y los revolucionarios no pueden seguir a los revisionistas; y quienes realmente quieran a la revolución, reitero, que lo demuestren con hechos y entiendan, primero que nada, el proceso de guerra popular auténticamente revolucionario que aquí en el país se está dando, pues mientras no lo entiendan no van a poder cumplir el papel que muy bien pueden cumplir muchas personas que lo que tienen es simplemente buenas intenciones, pero falta absoluta de claridad pese a que ellos crean lo contrario. EL DIARIO: Presidente ¿Cómo ve Ud. la situación de la lucha de clases de las masas? ¿cómo a las organizaciones existentes? PRESIDENTE GONZALO: En cuanto a cómo vemos la lucha de clases de las masas, yo quisiera partir de esto: nuestro pueblo es heroico, nuestra clase, el proletariado, más aún; como todo pueblo y todo proletariado son persistentes combatientes de la lucha de clases, nunca han cejado, ni cejarán jamás, hasta que lleguemos al comunismo. Creo que lo primero que tenemos nosotros que hacer es reconocer esa grandiosidad de nuestro pueblo, de nuestro proletariado; lo segundo, es reconocer y agradecer, ver claramente y decirlo con firmeza que sin su apoyo, sin su sustento no habríamos hecho ¡nada!, ¡absolutamente nada!. Porque son las masas las que crean la historia, creemos fervientemente en ello; así como creemos que "La rebelión se justifica", es otro principio clave de las masas. ¿Cómo vemos a las masas? Con regocijo profundo de comunistas, mi saludo a esa creciente riada de masas ascendentes que está comenzando a reeditar viejas glorias y cumpliendo nuevas páginas históricas. Las masas han entrado y seguirán en un agudo proceso de lucha de clases y el pesimismo que reina en la IU, como lo reconoce el mismo señor Moreno que dirije Patria Roja, no va a calar en las masas porque las masas no son pesimistas; recordemos que el Presidente Mao nos dijo: pesimistas solamente los revisionistas y los señores oportunistas, el proletariado y los comunistas somos siempre optimistas; porque el futuro es nuestro y está definido históricamente mientras políticamente marchamos en nuestro rumbo. Las masas no van a caer en pesimismo, nunca han caído, eso es absurdo, es infamarlas; las masas combaten pero para combatir necesitan una dirección, un Partido porque no hay movimiento de masas que pueda desenvolverse, mantenerse y menos desarrollarse sin un partido que las dirija. Nosotros vemos con regocijo revolucionario cómo las masas están combatiendo y, cómo sus propias acciones lo demuestran, aprendiendo de esas masas ya incorporadas a la guerra popular; y cómo las masas comienzan a aplicar esa gran consigna ¡Combatir y Resistir!. No es tiempo ya solamente de recibir, hay que ser corteses, también hay que devolver y doble para ser doblemente corteses; y creo que las masas lo están haciendo dando muestras realmente ejemplares que hacen ver la brillante perspectiva que ellas mismas la verán, porque son ellas las que hacen la revolución, el Partido solamente las dirige; creo que, es un principio que todos sabemos y no está de más recordar. En cuanto a las organizaciones, nos parece que hoy más que nunca debemos estudiar seriamente lo que enseñó Lenin, en su obra "La bancarrota de la II Internacional", capítulo VIII; nos dice que el Estado de explotadores, el Estado burgués, el Estado reaccionario permite la existencia de organizaciones que le sustentan, le sirven para mantenerse y sobrevivir; y que esas organizaciones para mantenerse lo que hacen es vender la revolución por un plato de lentejas. Creo que les viene como anillo al dedo, pero nos dice más aún, de esas organizaciones nada va a esperar la revolución; la revolución tiene que crear sus propias organizaciones para desarrollar los tiempos de guerra, de revolución como los que estamos viviendo y viviremos más de aquí en lo inmediato y en el futuro ha de triunfar. En consecuencia, Lenin nos decía, hay que crear nuevas organizaciones que sirvan a la revolución aunque tengamos que pasar sobre la cabeza de los vendeobreros, de los traidores de la revolución. Creo que son palabras de Lenin, nos merecen a todos inmenso respeto y nos deben mover a profunda y seria reflexión, de otra manera no estaríamos sirviendo a la clase, al pueblo; y tenemos que decir la necesidad urgente de coadyuvar a que todos tomen cada vez más conciencia de clase, que se vivan como lo que son, como clase obrera o como pueblo con interés opuesto, antagónico al de los explotadores; que sientan claramente el poder que tienen cuando con una huelga paran la producción y entiendan, y sientan y lleven adelante una huelga como una Escuela de guerra, como una Escuela de comunismo y que sigan desenvolviendo sus huelgas como forma principal de lucha en el campo económico, porque lo es, pero que en las circunstancias actuales tienen que estar indesligablemente unidas a la conquista del Poder. Así pues, unamos la lucha por la reivindicación con la lucha, con la guerra popular, por la conquista del Poder, porque es la defensa de sus intereses de clase, es la defensa de los intereses del proletariado, del pueblo; eso es lo que necesitamos y creemos que nuestras masas avanzan cada vez más. En nuestro Partido concluimos hace tiempo lo que llamamos la ley de las masas, la ley de incorporación de las masas, en la guerra, en la revolución, tal como la desenvolvemos y es lo que corresponde aquí; las masas se van incorporando por saltos, y por saltos cada vez más grandes, ése es el rumbo que estamos siguiendo y nuclearemos al 90% del pueblo peruano ¿para qué?, para que las masas hagan triunfar la revolución y culminen la obra que ellas están iniciando hace 8 años y llevando adelante con su propia sangre, porque es de ellas, de ellas ha salido, de sus entrañas; ellas, las masas, hacen la historia, insisto, el Partido solamente dirige; creo que es así. EL DIARIO: Presidente: ¿En qué sectores políticos y sociales busca sus aliados el PCP?; ¿tienen alguna afinidad con algún grupo político del país? El oportunismo les imputa de ser sectarios ¿Cómo definen su política de frente? ¿cuál es el peso del Partido en el campo, en el movimiento obrero, en el pueblo en general? PRESIDENTE GONZALO: Si me permiten, primero partir de cómo vemos el frente; ya hemos dicho como lo estamos llevando adelante, pero lo que necesitamos precisar aquí, es cómo concebimos el frente único del cual hablaba el Presidente Mao y digamos de paso, es él quien ha establecido las leyes del frente, las seis leyes del frente, no hubo tales leyes antes de él. Acorde con esos criterios del marximo-leninismo-maoísmo, nuestro problema es un frente de clases, del proletariado como clase dirigente, del campesinado como fuerza principal, de la pequeña burguesía como aliada a la cual debemos prestar atención y en particular a los intelectuales, porque son necesarios a la revolución, como también el Presidente Mao enseñó; y en ese frente incluso, en determinadas circunstancias y condiciones, puede participar y participa la burguesía nacional. Esto es lo que entendemos nosotros por frente único, ese frente tiene un basamento: la alianza obrero-campesina, ésta se forja en el campo, es la que nosotros estamos forjando hoy, desde hace 8 años con las armas en la mano; y ¿por qué es necesaria la alianza obrero-campesina?, porque sin ella no hay hegemonía del proletariado y todo ésto requiere un Partido Comunista que dirija ese frente, ésa es nuestra posición. Somos absolutamente opuestos a la teoría revisionista que aplican en Centroamérica, y quieren difundir a otras partes, de "todos son revolucionarios", "todos son marxistas", "no hay necesidad de Partido Comunista que dirija", "basta simplemente unir a todos y basarse en un frente para conducir una revolución"; ésa es la negación del marxismo, es la negación de Marx, es la negación de Lenin, es la negación del Presidente Mao; no hay ningún marxista que haya puesto de lado la dirección del Partido, sino ¿cómo se concreta la hegemonía del proletariado?, sólo a través del Partido Comunista realmente tal, ésto es, un partido marxista-leninista-maoísta, que sirva consecuente y firmemente a los intereses de la clase y defienda los del pueblo. Así es como vemos, y eso es lo que estamos plasmando y desarrollando. Para nosotros el problema del frente tiene que ver con la consabida tesis de que siendo el Partido siempre una selección de los mejores, y siendo la necesaria dirección, pero no quien hace la revolución porque son las masas quienes la hacen, surge en consecuencia la necesidad del frente para aglutinar al 90% de la población, a la inmensa mayoría, eso es lo que buscamos, eso es lo que perseguimos y eso es lo que estamos haciendo. En cuanto a organismos, hemos tenido, en diversas ocasiones vinculaciones con organizaciones y cuando las hemos tenido los hemos tratado como corresponde, de igual a igual, y hemos intercambiado experiencias; en algunos casos, han pedido que el Partido les ayude políticamente y lo hemos hecho, son varios casos de esos, pero nombres por ahora mejor no. Sobre si somos sectarios, disculpen que lea lo que dice el documento "Desarrollar la guerra popular sirviendo a la revolución mundial", son las palabras de nuestro fundador y las usamos precisamente éstas, porque quienes se dicen mariateguistas deben serlo de verdad, pero no se puede ser seguidor de Mariátegui sin ser marxista-leninista-maoísta, decía Mariátegui: "Vivimos en un período de plena beligerancia ideológica. Los hombres que representan una fuerza de renovación no pueden concertarse ni confundirse, ni aún eventual o fortuitamente, con los que representan una fuerza de conservación o de regresión. Los separa un abismo histórico. Hablan un lenguaje diverso y no tienen una intuición común de la historia". "Pienso que hay que juntar a los afines no a los dispares. Que hay que aproximar a los que la historia quiere que estén próximos. Que hay que solidarizar a los que la historia quiere que sean solidarios. Esta me parece la única coordinación posible. La sola inteligencia con un preciso y efectivo sentido histórico". "Soy revolucionario pero creo que entre hombres de pensamiento neto y posición definida es fácil entenderse y apreciarse, aún combatiéndose. Con el sector político que no me entenderé nunca es el otro: el del reformismo mediocre, el del socialismo domesticado, el de la democracia farisea". A eso nos atenemos. No somos sectarios, no hay ninguna acción nuestra que lo demuestre; lo que nadie nos puede exigir es que vayamos a la charca. Lenin nos enseñó: si algunos deciden y quieren ir a la charca, tienen derecho a hacerlo, pero no a llamarnos a que vayamos al mismo fango; Lenin decía, nosotros debemos seguir nuestro camino, empinado difícil hasta la cumbre y, en otras frases, tenemos que afrontar la metralla del enemigo pero seguiremos avanzando. No somos, pues, sectarios ni dogmáticos, somos simplemente comunistas y nos sujetamos a estas sabias palabras de Mariátegui, más bien, demandamos, a quienes se dicen seguirlo que realmente lo sigan y que lo prueben. En cuanto al peso del Partido en el campo, concretamente lo que les podríamos decir, es que, la mayoría de nuestra militancia es campesina, la inmensa mayoría; y, una limitación que tenemos es el insuficiente número de obreros, es una seria limitación pero hacemos y haremos más esfuerzos para subsanarla porque necesitamos comunistas proletarios, obreros, pues dan temple, dan su acero, porque lo tienen como clase. Sabemos, además, cómo en el pueblo en general, nuestra fuerza y repercusión crecen; podemos decir que el Ejército Guerrillero Popular está formado por masas, por campesinos, por obreros, intelectuales, pequeño burgueses, son miles de hombres; tenemos cientos de Comités Populares organizados en Bases de Apoyo y ejercemos Poder sobre decenas de miles de personas. Esa es nuestra realidad, la influencia del Partido está creciendo, estamos repercutiendo cada vez más en las masas; aplicamos, como plantea el marxismo, enseñar al proletariado, al pueblo, a las masas con hechos contundentes para con ellos remachar las ideas en la mente. Creemos que nuestro crecimiento en las masas ha empezado un gran salto, eso es lo que les podemos decir, deseamos y es una tarea nuestra y parte de nuestro plan dar un gran salto en el trabajo de masas. Las masas en el país necesitan la dirección del Partido Comunista; esperamos, con más teoría y práctica revolucionaria, con más acciones armadas, con más guerra popular, con más Poder llegar al corazón mismo de la clase y del pueblo y realmente ganarlo, ¿para qué? para servirlo. Eso es lo que queremos. EL DIARIO: Presidente, otras organizaciones o no definen o vagamente hablan de revolución socialista para el Perú ¿cuáles son las razones por las que el PCP define que la revolución peruana tiene etapas? ¿cómo es esta revolución democrática? ¿cómo será la revolución socialista y cómo serán las Revoluciones Culturales Proletarias que impulsará el PCP al triunfo y derrota de las fuerzas contrarrevolucionarias? ¿Serán éstas similares a las que desarrolló el Presidente Mao en China? PRESIDENTE GONZALO: Un problema clave es definir el carácter de la revolución, para nosotros, siguiendo lo que estableciera el propio Congreso del Partido, la revolución es democrática. Tomando el maoísmo hemos podido desarrollar una comprensión un poco más amplia de la situación en nuestro país, consideramos que la sociedad peruana es una sociedad semifeudal y semicolonial sobre la cual se desarrolla un capitalismo burocrático, en consecuencia, la revolución es democrática. Consideramos que esta revolución democrática tiene tres montañas a las cuales enfrentar: el imperialismo principalmente yanqui, el capitalismo burocrático y la semifeudalidad. Esta revolución democrática demanda emprender una guerra popular, por eso nos hemos empeñado en ella, esta guerra popular es la que nos permitirá destruir esas tres montañas y conquistar el Poder en todo el país en una perspectiva, a nuestro juicio, no tan lejana; en fin, eso depende del esfuerzo mayor que empeñemos todos los que combatimos en la guerra popular y de que las masas vayan adhiriéndose más y más a ella. Esta revolución democrática debe ser seguida ininterrumpidamente por una revolución socialista, sobre esto quisiéramos precisar, tomando lo que el Presidente Mao nos enseñara con mucha clarividencia pensando en las cosas que podrían surgir; él nos dice que la revolución democrática termina el mismo día en que se toma el Poder en todo el país y se funda la República Popular, ese mismo día y hora comienza la revolución socialista y en ella tenemos que desenvolver una dictadura del proletariado y así llevar adelante las transformaciones básicas para desenvolver el socialismo. Consideramos que hay un tercer tipo de revolución. Estudiando al Presidente Mao Tsetung y los acuerdos del PCCh estamos comprendiendo cada vez más la importancia de la gran revolución cultural proletaria como continuación de la revolución bajo la dictadura del proletariado y su carácter de indispensable; sin ella la revolución no puede proseguir su marcha al comunismo. Consideramos que serán sucesivas revoluciones culturales pero pensamos que esa revolución cultural tendrá que ser especificada; si bien hemos de tomar la tesis del Presidente y la grandiosa experiencia del PCCh, tenemos que aplicar a nuestra propia realidad -en eso también somos antidogmáticos, no podemos ser mecanicistas, estaríamos contra el maoísmo-. Pensamos como Partido Comunista que nuestra meta es una: el comunismo, pero que a él -y disculpen que reitere- solamente habremos de llegar todos en la Tierra o nadie entra al comunismo; somos absolutamente opuestos a las tesis revisionistas de Jruschov quien nos habló del comunismo en la URSS para el año 80; el Presidente Mao Tsetung reafirmó una vez más que todos o nadie entraríamos al comunismo, por eso es que nuestra revolución está indesligablemente unida a la revolución mundial; ésa es nuestra meta final y definitiva, las demás son etapas, pasos, momentos y creemos que la perspectiva para llegar al comunismo es larga, nos parece que la proyección del Presidente Mao Tsetung es certera. EL DIARIO: Se dice que el PCP al conquistar el Poder en el país confiscará todo tipo de propiedad. ¿Es ésto cierto, cómo actuará con la deuda externa? PRESIDENTE GONZALO: El programa del Partido ya vemos que aclara estas cuestiones. Una revolución democrática como la que estamos llevando adelante apunta contra las tres montañas ya aludidas, o sea que estamos por romper el dominio del imperialismo principalmente yanqui pero a su vez bregamos para no permitir jamás que el socialimperialismo ni cualquier potencia imperialista ejerza su dominio sobre nosotros; estamos por destruir la semifeudalidad aplicando el gran lema que sigue siendo válido, -esto es bueno destacarlo porque muchas cosas se dicen-, "la tierra para quien la trabaja", el Presidente Mao volvió a reafirmarse en este lema que para nosotros esto implica destruir la propiedad semifeudal y entregar la tierra al campesinado en propiedad principalmente al pobre; y estamos por confiscar el capitalismo burocrático y, volviendo a repetir, es muy importante porque eso da base económica al Nuevo Poder para dirigir la economía y enrumbar al socialismo. Estamos contra esas tres montañas. En cuanto a la burguesía nacional o media, el problema es respetar sus derechos, a eso nos atenemos, más allá no podemos ir, sería cambiar el carácter de la revolución. La idea de "confiscar toda propiedad" no es sino parte de los infundios y las mentiras que siempre han pregonado contra los comunistas; como magistralmente nos enseñara Marx, para oponerse al comunismo siempre la reacción y los enemigos de la revolución han elaborado falsedades y mentiras; si ese grandioso fundador del marxismo en el mundo sufrió todas esas infamias, mentiras y tergiversaciones de sus sabios planteamientos, creemos que lo que se dice contra nuestro Partido no es sino la continuación de la vieja escuela reaccionaria y de los enemigos de la revolución. EL DIARIO: ¿Cómo actuará con la deuda externa el Partido? PRESIDENTE GONZALO: Siendo propiedad imperialista será confiscada y, creo que podríamos agregar, es la única forma de barrer realmente con este peso inmenso que está agobiando a tantos países y esquilmando naciones y pueblos, sólo con la revolución, no hay otra forma; todos los demás, medios y criterios que se plantean son simplemente quererles sacar las castañas del fuego al imperialismo y creemos que ésa es la experiencia histórica, además. EL DIARIO: Y el Partido Comunista, ¿cómo está resolviendo el problema de la tierra y qué planes aplica el Apra y el PUM? PRESIDENTE GONZALO: El problema de la tierra, fundamental porque realmente es este problema el que se resuelve en la revolución democrática aparte de las otras cuestiones ya conocidas. Lo que aplicamos es la destrucción de las relaciones semifeudales de explotación y la entrega de la tierra a los campesinos pobres principalmente y luego a los campesinos medios y, si hubiera o fuera conveniente, puede darse a los campesinos ricos así como también si es conveniente o necesario podemos quitarles, si es que faltaran tierras; incluso con los terratenientes, como el Presidente ha enseñado, si ellos quieren trabajar que ganen, como se dice, el pan con el sudor de su frente y que aprendan lo que es labrar la tierra y no vivir simplemente de la renta. Seguimos esa política. La política del Partido se ha ido desarrollando en este problema; una de las cuestiones importantes que hemos hecho ha sido el impulsar un movimiento de invasión de tierras, muy importante, en el departamento de La Libertad, ahí han sido repartidas más de 300.000 has. y se han movilizado 160.000 campesinos; viendo el conjunto de movilizaciones que hemos tenido ésa es la que más masa ha logrado mover; este movimiento se impulsó para socavar los planes del Apra y también lo aplicamos en Puno, y somos nosotros los que hemos empezado las invasiones de tierras también en Puno mientras el PUM discutía con el Apra sobre qué y cómo hacer, ésa es la pura y simple realidad; luego el gobierno se ha visto obligado a dar disposiciones para Puno en particular, disposiciones que no las ha cumplido. En este caso, como en otros de la Sierra, el Apra ha apuntado a aplicar el redimensionamiento que planteara Morales Bermúdez cuando fue presidente y la disputa con el PUM ha sido cómo hacerlo, si lo hacía sólo el gobierno o participaban las organizaciones. ¿Qué han buscado el gobierno y el PUM? Bajar la presión de las aguas, eso es lo que han buscado y una vez más vemos reeditar lo que hicieron el 74, cuando eran "Vanguardia Revolucionaria", con las "tomas de tierra" en Apurímac donde fueron movilizados miles de campesinos y llevados ¿a qué? a acogerse y a pactar dentro de la ley 17716, ley corporativa del fascismo de Velasco, como prueba están las actas famosas de Toxama y Huancahuacho. Alguien debe responder por ello, sería bueno recordarles la memoria; ¿sirvieron o no al régimen? sirvieron porque aplicaban entonces el criterio de que la ley 17716 era buena, y que su error era no ser socialista; lo cual es una estupidez política porque el problema de la tierra es una reivindicación democrática elemental, sino habría que corregir el marxismo. Eso es lo que han reeditado hoy en colusión con el Apra; bien, hay cosas que mucho se dicen, pero sería bueno que siendo como son, se pongan la mano al pecho, hagan acto de contrición y vean si no han servido, incluso delatando para que sean golpeadas nuestras fuerzas, sería bueno que meditaran. Está probado y lo sabemos desde los años sesentas y por un nuevo estudio que hiciéramos en los años setentas, que la simple consecución de la tierra, si no está ligada a una guerra popular, a una lucha por la conquista del Poder, lo que genera es simplemente un acoplamiento al sistema, y se deviene en un sostén del mismo, y se sigue en el mismo proceso vegetativo semifeudal, pruebas al canto: Pomacocha y Ccaccamarca, en el departamento de Ayacucho, creo que ésas son cosas que tenemos que pensar; las experiencias de Apurímac el 74, las "tomas de tierra" de Vanguardia ¿a qué sirvieron?, a que se montara un sistema corporativo, desarrollando las formas asociativas, eso ¿era o no lo que quería Velasco?. En consecuencia acoplarse al sistema, evolucionar la feudalidad cuando el problema es arrasarla, destruírla, eso es lo que el PUM hasta hoy no entiende, ni va a entender; se requiere pensar desde otra ideología, desde la marxista, para entender cómo se conquista y cómo se defiende la tierra, con armas en la mano, ése es el hecho. El Apra además, sigue otros planes; particularmente, hay que prestar atención muy importante a los planes que tienen para las tierras eriazas de la Costa con los últimos decretos y los "planes de desarrollo" para quien tenga capacidad de invertir en función de generar productos de exportación; y eso está llevando a una repartija, a una rebatiña de tierras en Lambayeque, en La Libertad, en Ica, y en la Costa peruana en general. Con sus últimas disposiciones se pueden entregar hasta 450 hectáreas, ¿van a ser los pobres los que van a adquirir esas tierras?, ¿con qué dinero podrían hacer pozos tubulares, por ejemplo para extraer agua?, imposible. Son suculentos planes cuyo resultado ya quedó claro, es la repartija ¿qué están haciendo sino en La Libertad? ¿en beneficio de quiénes? del Apra, sus dirigentes y asociados, entre los cuales juega un papel muy destacado y económico, el señor ministro Remigio Morales Bermúdez, socio de grandes empresas monopolistas. Eso no beneficia al campesinado y en la Costa también hay campesinado que necesita tierras, y las tierras deben ser para ellos; de ahí el escándalo que hemos visto no hace mucho en La Libertad con motivo de denuncios de tierras de las futuras irrigaciones. Otros problemas. La entrega de tierras en la Selva: 30 mil hectáreas, ¿quién las podrá manejar?: Dionisio Romero u otro similar; no las podrá controlar ni menos se las darán a un campesino pobre, pero la tierra es para quien la trabaja, principalmente para el campesinado pobre. Por otro lado, el Apra ha fracasado rotundamente en sus planes contrarrevolucionarios sobre el llamado trapecio andino; y abiertamente le decimos que, como otros incluso le han dicho antes, nosotros hemos hecho ver que existía la Sierra en el Perú, es sobre eso que García Pérez ha redescubierto su trapecio andino para hacer su propia vitrina, pero sus planes siniestros han fracasado, están deshechos y paralizados. Sino, ¿qué pasa con el plan del Cachi en Ayacucho?, inaugurado por el que funge de presidente, yendo en helicóptero y gran propaganda a explicar desde las punas lo que no sabe ni entiende; o ¿qué es del plan de Rasuwilca?, lo hemos deshecho por contrasubversivo y porque no podemos consentir que las tierras no sean para los campesinos que las necesitan, principalmente los pobres. Pero también creo que merecería decir por lo menos algo sobre otras cosas: las rondas, las rondas campesinas; ¿qué han hecho de esas creaciones que las masas generaron para defenderse?, organismos que hoy día están bajo el control del Estado, de las fuerzas armadas y policiales, eso es lo claro y concreto; y son ellos, los de la IU, los que con orgullo aprobaron la famosa ley y hoy día están pataleando contra el reglamento de la misma, pero el reglamento no es sino derivación de la ley, si aprobaste la ley aguántate el reglamento. En el fondo, lo que han hecho es simplemente coadyuvar a lo que el ejército, las fuerzas armadas exigían, una ley que convalidara las mesnadas o los "comités de defensa" que ellos montaban, decían no hay una ley que los ampare, pues bien esa ley es la que se llama ley de rondas campesinas. ¿Las usan o no las fuerzas policiales, las usa o no el ejército, las usa o no el gamonalismo?, ésa es la realidad, de eso deberían respondernos, dar cuenta; esto ya sin entrar a cómo son, pues, sus estatutos, ¿realmente son marxistas?, ¿están hechos desde un punto de vista de la clase, del pueblo? ¿no encierran un trasnochado incaísmo? ¿no expresan una posición de personalismo cristiano? ¿no trabajan ligados a la Iglesia? sino ¿por qué le publican sus documentos? y cuando hablo de la Iglesia, hablo de la jerarquía eclesiástica. Sería bueno que cuando tengan tiempo, como que se distraen, lean esos reglamentos, son sumamente expresivos. Denunciamos, también, el plan del Apra en el Alto Huallaga que con el pretexto de combatir el narcotráfico permite el uso de los insecticidas mortíferos "spike" que los propios monopolios yanquis dicen son como pequeñas bombas atómicas. EL DIARIO: Presidente, ¿cuáles van a ser las características principales de la República Popular de Nueva Democracia que proponen usted y su Partido? PRESIDENTE GONZALO: Las características son sustancialmente las de una dictadura conjunta; insisto en esto porque en el Perú debe pensarse seriamente sobre el problema del Estado y analizarlo desde el marxismo-leninismo-maoísmo; y el problema del Estado lo primero que nos plantea es la cuestión del sistema de Estado o la dictadura de clase que se ejerce, en nuestro caso es una dictadura conjunta. En la actualidad solamente de tres: de proletariado, de campesinado y de progresistas (pequeña burguesía); no participa la burguesía nacional pero respetamos sus derechos, eso sí. El sistema de gobierno que se deriva de lo anterior es un sistema basado en Asambleas Populares, ¿cómo lo concretamos? como Comités, y esos Comités Populares agrupados forman las Bases de Apoyo, y el conjunto de las bases de apoyo la República Popular de Nueva Democracia, eso es lo que estamos desenvolviéndo, y es lo que desenvolveremos hasta el término de la revolución democrática. Lo que quisiera insistir es en que el Partido ha decidido "Sembrar Poder" para que el pueblo empiece a ejercerlo, aprenda a manejar el Estado, porque una vez que aprenda a manejar el Estado aprenderá que ése Estado sólo se mantiene por el Poder de las armas, que así como se le conquista se le defiende. "Sembrar Poder" nos lleva a ir sembrando en la mente la necesidad del Nuevo Poder y que lo vean en los hechos, eso es lo que estamos haciendo. Como cuestiones de República Popular de Nueva Democracia se cumplen funciones generales de dirección, de construcción y de planificación. Creo que eso sería suficiente sobre este punto, porque otras cosas están explicadas ya en los documentos. V. POLITICA INTERNACIONAL EL DIARIO: Presidente, hablemos ahora de política internacional, siendo vuestra meta el comunismo, ¿cómo ve las condiciones para la revolución mundial, y qué problemas deben resolver los comunistas?. PRESIDENTE GONZALO: Partimos de que la revolución es la tendencia principal y sigue siendo así, lo que el Presidente Mao afirmó sigue desarrollándose. Consideramos que después de la II Guerra Mundial no ha habido estabilidad, ni relativa siquiera, todo el mundo ha sido removido por grandes tormentas revolucionarias; en oleadas, de acuerdo, así es, porque no podría ser de otra manera. Consideramos que existen tres contradicciones fundamentales en esta situación de perspectiva en que nos estamos desenvolviendo: primera y principal contradicción, entre naciones oprimidas, por un lado, y superpotencias imperialistas y potencias imperialistas, por otro lado, -aunque sea redundancia, preferimos enumerarlas de esa manera para que quede claro-; tal contradicción se resuelve mediante la revolución democrática a través de la guerra popular. Una segunda contradicción fundamental es proletariado-burguesía, ésta se resuelve a través de revoluciones socialistas y revoluciones culturales proletarias, también mediante la guerra popular, reitero, considerando el tipo de revolución y las condiciones específicas de cada país. Una tercera contradicción es la interimperialista, entre las superpotencias, entre las superpotencias y potencias imperialistas, y entre las propias potencias imperialistas; esas contradicciones entre ellos, se resuelven a través de agresiones, de guerras imperialistas, y tienden a definir la hegemonía de dominio sobre el mundo a través de una III Guerra Mundial. Las ponemos en ese orden ¿por qué?, porque consideramos que en ese orden es su importancia; nosotros insistimos en que la contradicción naciones oprimidas, por un lado, y, por el otro, superpotencias imperialistas y potencias imperialistas es la principal y de gran trascendencia para la revolución mundial; tiene que ver, a nuestro juicio, con el peso de la masa en la historia, es evidente que la inmensa mayoría de las masas que pueblan la Tierra viven en las naciomes oprimidas; es evidente, también, que éstas crecen cuatro veces más rápidamente de lo que crecen las poblaciones que viven en países imperialistas. Si aplicamos el principio de las masas hacen la historia, si tenemos en cuenta que la II Guerra Mundial ha puesto a las masas de pie políticamente (cómo, incluso, reconocen hasta asesores reaccionarios de los EE.UU.), pensamos que la contradicción interimperialista al generar una guerra mundial, ésta sería una nueva guerra interimperialista por la hegemonía mundial y repartirse la Tierra; en consecuencia, es por repartirse el botín y el botín son las naciones oprimidas y por tanto, tendrían que pasar a ocupar para dominarnos, y así nuevamente vuelve a ser principal la contradicción naciones oprimidas, de un lado, y superpotencias imperialistas y potencias imperialistas, del otro. Creemos firmemente en esto y no es por un chauvinismo de ser pertenecientes, como dicen algunos, a países o naciones oprimidas, no es eso; ésa es la tendencia que se ve en la historia y ése es el peso de la masa en la historia y es que los hechos, además, vienen demostrando que donde se está hundiendo y socavando más y más el imperialismo es en la lucha que se libra en las naciones oprimidas; son hechos irrebatibles, por lo tanto, consideramos que esa contradicción principal es de gran trascendencia y va a definir el barrimiento del imperialismo y de la reacción de la faz de la Tierra, siempre y cuando se ponga como mando y guía de la revolución mundial el marxismo-leninismo-maoísmo, que se desarrollen partidos comunistas sobre esa ideología y que se asuma la guerra popular, una vez más, según el tipo de revolución y las condiciones específicas. En este sentido pensamos la gran importancia de la contradicción principal que planteamos. Hay quienes no creen así y piensan que en el fondo no creemos en la revolución en los países imperialistas; creemos que estas revoluciones son una necesidad histórica y que el desarrollo de la contradicción principal les da condiciones mejores, y que hasta una guerra mundial dará mejores condiciones para que hagan la revolución y se hará porque es una necesidad; al fin y al cabo, tienen que confluir las dos grandes fuerzas, las dos grandes revoluciones: la revolución democrática y la revolución socialista para que triunfe la revolución en el mundo, sino no se podría barrer al imperialismo ni a la reacción de todo el globo. Eso es lo que pensamos. Para nosotros, se nos plantea, cuál es el punto clave: es el marxismo-leninismo-maoísmo porque el problema es tener una línea ideológica y política justas y correctas, y no puede haber línea política justa y correcta si no hay justa y correcta ideología; por eso creemos que la clave de todo es la ideología: el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente el maoísmo. En segundo lugar: desarrollar partidos comunistas, ¿por qué?, porque las masas están sedientas de revolución, las masas están expeditas y claman revolución; así que el problema no está en ellas, el proletariado clama revolución, las naciones oprimidas, los pueblos del mundo claman revolución, entonces necesitamos desarrollar partidos comunistas, el resto, reitero, lo hacen las masas que son la que hacen la historia y van a barrer al imperialismo y a la reacción mundial con guerra popular. EL DIARIO: ¿Qué papel está jugando el imperialismo norteamericano en el mundo? ¿qué opina de la "guerra de las galaxias"? ¿qué de los llamados planes de desarme entre USA-URSS y otros países europeos? PRESIDENTE GONZALO: En síntesis, el imperialismo norteamericano después de la II Guerra Mundial insurgió como gendarme de la reacción en el mundo, pero después ha entrado en contienda por la hegemonía mundial con el socialimperialismo, así ambos son quienes elaboran grandes planes en pro de su hegemonía. A eso está ligado el problema de la "guerra de las galaxias", o en otras palabras "la iniciativa de defensa estratégica" que es su nombre oficial. El gobierno norteamericano y particularmente con Reagan, ha comenzado a elaborar grandes planes estratégicos que abarcan decenios del próximo siglo; o sea, están pensando en su supervivencia y en cómo mantener su hegemonía y derrotar al socialimperialismo; dentro de esto, la "guerra de las galaxias", no es sino un plan que pretende tender un escudo que impida llegar a sus ciudades cohetes con cargas atómicas y a su vez les permita protegerse si descargan ataque atómico contra el socialimperialismo. Pero éstos son planes y deseos, porque frente a un plan hay otro; no hace mucho los soviéticos respondieron que habían formas de superar el supuesto escudo y que de esa manera no habría, en consecuencia, la supuesta invulnerabilidad de EE.UU. En cuanto a la cuestión de los planes de desarme entre las superpotencias, Estados Unidos y la Unión Soviética, debemos partir de lo que el marxismo enseña y también nuestro propio fundador: cuanto más hablan de paz, más se preparan para la guerra. Mucha palabrería, mucha demagogia embaucadora se está haciendo en torno a los planes de desarme que han firmado para la retirada de cohetes en Europa, de cohetes de alcance intermedio; porque lo que se desarma es el cohete, o sea el vehículo, pero se mantiene la carga para usarla cada quien según le convenga. Esa es la esencia de la farsa. Las potencias europeas, obviamente, se encuadran dentro del marco de ambas superpotencias y quisieran impedir que la guerra se libre en Europa de darse una guerra mundial; eso es lo que quisieran, porque en el fondo sus afanes son, así como los del Japón, que se pelearan dos tigres para luego uno de ellos insurgir como gran potencia, como el dominante supremo, eso sueña Japón, Alemania Federal, etc., son sus sueños. Pero una guerra mundial también se libraría en Europa y las dos superpotencias saben bien de estos afanes; así el problema lleva a contradicciones entre las potencias y las superpotencias que se desenvuelven, no puede ser de otra manera, en complejas colusiones y pugnas. Es evidente, también, como las potencias bregan por plasmar sus sueños: Japón con su dominio sobre Asia y América del Sur, Europa con el suyo sobre Africa y América Latina; y su acción no sólo en esas regiones, de ahí sus ajetreos y sus intermediaciones, de ahí sus políticas propias y discordantes en cuanto defienden sus propios intereses. Creemos que todo esto son debates demagógicos que solamente tienden a encubrir grandes planes para contender por la hegemonía mundial; eso es lo que creemos, porque el imperialismo no dejará de serlo hasta que lo barramos, su esencia es explotar y oprimir, reducir a las naciones a la condición de semicolonias y de ser posible colonias; y, de paso, es tiempo ya que volvamos a usar estos términos, son términos científicamente establecidos por Lenin. Pero la cuestión es que frente a estos planes lo principal no es simplemente desenmascararlos, sino prepararse contra ellos y no hay sino una forma de hacerlo, prepararse mediante la guerra popular; el Presidente Mao nos decía: hay que prepararse y prepararse desde ahora contra una guerra imperialista y principalmente contra una guerra atómica; cómo les vamos a responder, pues, sólo con guerra popular, de otra manera no, eso es lo principal. Desenmascararlos es parte de hacer una campaña de propaganda que muestre ante el mundo sus siniestros y macabros planes de genocidio mayúsculo, pero eso nunca detiene una guerra, claramente lo dijo Stalin; esas campañas nunca paran una guerra, así lo único que cabría, si queremos impedir una guerra, es desarrollar la revolución. Como enseñó el Presidente: o la revolución impide la guerra mundial o ésta atiza la revolución. Esa es creo la situación que podríamos plantear. EL DIARIO: Presidente, ¿qué piensa usted del Estado Soviético? últimamente se habla mucho de la Perestroika ¿cómo ve usted este problema?, ¿qué opina de los ataques a Stalin? PRESIDENTE GONZALO: La Perestroika últimamente es un tema llevado y traído. La Perestroika hasta donde he podido ver, porque creo que hay que estudiarlo con detenimiento y ver toda la podre revisionista que encierra, es parte de esa nueva ofensiva del revisionismo contemporáneo que los comunistas enfrentamos. Gorbachov es un revisionista de cabo a rabo, de la cabeza a los pies. El plantea que un hecho histórico de transcendencia en la URSS fue el XX Congreso del PCUS, ese nefasto Congreso en el cual se atacó a la dictadura del proletariado tras el pretexto de combatir a Stalin; él admira a Jruschov, lo pinta como un gran hombre, audaz, decidido, cuyo problema, dice, estuvo en que cayó en subjetivismo, no elaboró planes correctos sino planes excesivos, inaplicables y fracasaron. Jruschov es maestro de Gorbachov y éste saca lecciones de aquél, así como también las ha sacado de su otro maestro Brezhnev, aunque él quiera distanciarse. De la Perestroika hay que sacar una cuestión central; el mismo Gorbachov dice: de muchas maneras puede definirse a la Perestroika, pero si elegimos "la clave que exprese su esencia más exactamente, entonces podemos decir así: perestroika es una revolución", pero hay quienes no quieren verla de esa manera. Hay que prestar suma atención a esto, no es una revolución es más bien un desarrollo de la contrarrevolución, es un desenvolvimiento de la restauración del capitalismo más desenfrenado para barrer lo poco que quede y que pueda servir a la clase y al pueblo para combatir el socialimperialismo. El dice: es una revolución porque se plantea una aceleración en el plano económico-social, cambio radical y una marcha a un nuevo tipo de Estado; ¿cuál sería ese nuevo tipo de Estado? , un Estado más descaradamente burgués, estructurado de una nueva modalidad que aún no atinan a precisar porque no la han precisado ni siquiera en su última Conferencia. Tiene toda esta desvergüenza; por eso es conveniente llamar la atención sobre ese término pues por lo general se dice "perestroika es una reestructuración" y punto; pero Gorbachov dice que el término que perfectamente le corresponde es "revolución", y eso es una irrisión, un sarcasmo, una burla inaudita. ¿Qué otra cosa nos plantea este individuo?. Está desarrollando posiciones de Jruschov. Escojamos el problema de la guerra. El dice que una guerra mundial lleva a la desaparición de la humanidad; en sus propias palabras: "en esa guerra no habrá ni vencedores ni vencidos. Es que no habrá sobrevivientes", "si estalla una guerra nuclear toda cosa viviente será borrada de la faz de la Tierra" y "en un conflicto nuclear global no habrá ni ganadores ni perdedores: la civilización del mundo perecerá inevitablemente". Pero ¿qué agrega?, permítanme leer: "La política debe basarse en realidades. Y hoy, la más formidable realidad mundial son los vastos arsenales militares, tanto convencionales como nucleares, de los Estados Unidos y de la Unión Soviética. Eso otorga una responsabilidad especial a nuestros dos países frente a todo el mundo". ¿Qué es esto? descaradamente nos está diciendo que su poderío se basa en el poder bélico y lo enarbola junto al poder bélico del imperialismo yanqui vociferando que son la gran realidad de la Tierra. En consecuencia, de ellos dependemos; eso es lo que plantea, la más descarada y desenfrenada política de superpotencias que hemos visto. Pero no sólo una guerra atómica pone en riesgo a la humanidad, sino que, según él, también una guerra convencional, dados los instrumentos mortíferos y sofisticados que hoy existen puede cumplir igual fin. Así Gorbachov pretende imponernos la más monstruosa política del sometimiento, frente a la cual enarbolamos más aún "La rebelión se justifica" del Presidente Mao Tsetung. Sus elucubraciones revisionistas llevan al jerarca ruso a plantear "un nuevo pensamiento", ¡ojo!; un "nuevo pensamiento" que "tenga en cuenta, por encima de las ideologías y las diferencias, el interés supremo de la humanidad"; ¿dónde quedó el recuerdo formal del criterio de clase? ¿no es una reedición al más alto nivel de lo que predicó Jruschov?, evidentemente. Y parte sustantiva de ese "pensamiento" es que la guerra ya no es la continuación de la política por medios bélicos; en sus propios términos: "el aforismo de Clausewitz, de que 'la guerra es una continuación de la política, sólo que con diferentes medios', que fue clásico en su tiempo, resulta ahora cada vez más desesperadamente anticuado. Está destinado a las bibliotecas". Pero ésta es tesis sostenida por Lenin y reiterada por el Presidente Mao en este siglo y es clave en la teoría militar del proletariado, y a ella nos atenemos en la guerra popular. Así, Gorbachov choca abiertamente con Lenin, como chocó Jruschov; y las llamadas "nuevas condiciones" que llevan a revisar principios del marxismo es un antiguo cuento que viene desde el viejo revisionismo; y que no le sirva de consuelo a este nuevo gonfalón revisionista el que según dice: "menos mal tanto en el Oeste como en el Este surgen nuevos pensamientos, nuevos hombres que ya están viendo cómo pueden ponerse de acuedo porque lo único que cabe es la cooperación"; la colusión, decimos nosotros, entre las dos superpotencias mientras no haya condiciones para lidiar en una tercera guerra mundial si no los barremos antes. Ese es el fondo; y, creo que es necesario destacar bastante como Gorbachov siniestramente yendo contra Lenin tiene la artería desvergonzada de llamarse "seguidor de Lenin", que está aplicando "una vuelta a Lenin" y "haber aprendido mucho de Lenin", pues es lo que nos dice y creo que son cosas muy corrosivas. Por otro lado, luego de plantear "basar la política internacional en normas morales y éticas comunes a todo el género humano", Gorbachov dice: "¿Qué ocurrirá con el complejo industrial-militar?, preguntan... para empezar, cada trabajo en el complejo industrial-militar cuesta dos o tres veces más que en una industria civil. En su lugar se podrían crear tres puestos de trabajo. En segundo lugar, los sectores actuales de la economía militar están conectados con la economía civil y hacen mucho por esta última. Este es un punto de partida para utilizar sus posibilidades con propósitos pacíficos. En tercer término, la Unión Soviética y los Estados Unidos podrían realizar extensos programas conjuntos, combinando recursos y potenciales científicos e intelectuales para resolver los más diversos problemas en beneficio de la humanidad". Así replica como Jruschov y va contra cómo concibió Lenin el imperialismo y el proceso económico; aquí también es anti-leninista, lo es en todo, como se ve en sus criterios, similares a los de Teng, de separar partido de Estado o impulsar el crecimiento económico más y más al servicio de la burguesía y del imperialismo. Asimismo, como los demás imperialistas, el socialimperialista Gorbachov plantea combatir el llamado terrorismo, y se compromete a hacerlo y a usar las Naciones Unidas también para este objetivo. Merece, creo, finalmente decir algo sobre cómo ve América Latina y Nicaragua en particular; que en Nicaragua una dictadura, la de Somoza, fue derrocada por una revolución popular, ratifica entonces los criterios que han guiado y guían el proceso nicaragüense, esto es sumamente expresivo. Y de América Latina que los soviéticos no tienen interés en perturbar el dominio, o como dicen, las relaciones entre Estados Unidos y América Latina, esto nos atañe directamente. ¿Qué quieren los socialimperialistas de la URSS? Están en una etapa de ver cómo resolver problemas urgentes, en un momento de colusión como principal y por ello buscan contener o desaguar puntos conflictivos a fin de abocarse a desarrollar sus sistemas económicos, mientras siguen preparando sus grandes planes para contender por la hegemonía mundial. La colusión es transitoria, la pugna como la lucha, es lo absoluto. En conclusión, la perestroika es un siniestro plan de continuación del revisionismo contemporáneo que Jruschov iniciara, es una nueva ofensiva contrarrevolucionaria del revisionismo. En cuanto al ataque a Stalin Jruschov lo hizo, Gorbachov también pero yendo más a fondo y rehabilitando a quienes Stalin condenara. Una de las cosas que debe hacer pensar bastante es la rehabilitación de Bujarín, así como la de otros, y hasta reconocida su condición de militante; habría que preguntarse ¿quién falta? Trotsky, ya no falta sino ése. El ataque a Stalin sigue siendo lo mismo, es utilizarlo como pretexto para profundizar la restauración del capitalismo, desarrollar sus planes políticos y barrer, pues, con todo lo que quede y pudiera servir a que el pueblo vuelva a hacer la revolución, ese es su sueño, pero no será sino un simple sueño. Del camarada Stalin mucho se habla y se le ataca pero es lamentable que otros también lo hagan, imputándole multitud de errores y denigrándolo. Creemos que el camarada Stalin es un gran marxistaleninista. Lo que el Presidente Mao dijera de él es correcto, erró en un 30 por ciento y la raíz de ese error estuvo en sus limitaciones del manejo de la dialéctica; pero nadie puede negar su condición de gran marxista. Los ataques de Gorbachov y sus secuaces a Stalin deben hacer pensar, pues, a otros que diciéndose comunistas también atacan y denigran al camarada Stalin; deben pensar bien en esas coincidencias, no son simples ataques. EL DIARIO: ¿Cómo enjuicia a la actual dirección en China? ¿Estarán en el campo de la contrarrevolución?. ¿Cuál será la salida del pueblo chino? PRESIDENTE GONZALO: La actual dirección de China es una dirección revisionista y dirigida realmente por un siniestro personaje, un viejo y podrido revisionista, Teng Siao Ping; éste fue claramente desenmascarado en la Gran Revolución Cultural Proletaria y ante el mundo quedó como lo que fue y sigue siendo, un redomado revisionista, el segundón de Liu Shao Chi. Es Teng quien está llevando a China, la que fue socialista, a una acelerada y desenfrenada restauración del capitalismo; y es pertinente advertir, incluso, que cuestiones planteandas por Gorbachov las planteó Teng antes, según sus condiciones. ¿En qué campos están? China actúa como potencia, ésa es la política que desarrolla, coludida y pugnando con potencias y superpotencias. Su sueño, ser superpotencia en el próximo siglo; ése es su sueño. La salida, en éste como en otros casos, la revolución, la guerra popular. Recordemos que el Presidente Mao, en la parte final de su luminosa vida, planteó a la camarada Chiang Ching que ella podría llevar la bandera de la revolucion y alcanzar la cumbre, señalándole: si no lo logras te despeñarás, tu cuerpo se destrozará, tus huesos se quebrantarán, entonces habrá que hacer una vez más la guerra de guerrillas; él nos dio la solución. Es parte de un poema, no recuerdo bien el texto, pero esas son las ideas. Ahí lo central es habrá que hacer nuevamente la guerra de guerrillas, la guerra popular. EL DIARIO: Presidente ¿considera que hay países socialistas en la actualidad? PRESIDENTE GONZALO: Simplemente no, no creo. Hay quienes creen, por ejemplo, que Albania lo es. Yo les diría, a quienes creen que Albania es socialista, que estudien bien por ejemplo el VIII Congreso del Partido del Trabajo de Albania, sería bueno, ahí se dice que el centro de la reacción mundial es el imperialismo norteamericano, ¿y el soviético?, ¿dónde quedó son dos los enemigos que se debe combatir? Siempre fueron palabras; en el propio Hoxha fueron palabras, porque siempre dedicó más párrafos a combatir el imperialismo yanqui que el socialimperialismo. También, dice el mismo Congreso, que nunca ha estado la humanidad más cerca de su exterminio. Repite igual que los otros, lo cual no es mera coincidencia; pero ¿qué nos propone hacer?, concretamente desenmascararlos. Esa no es la solución, el desenmascaramiento no frena una guerra mundial; la solución es desarrollar la revolución haciendo la guerra popular. Y si uno ve todo lo que allí está dicho sobre los serios problemas económicos que tienen, a las claras se ve cuál es el camino al que Albania ha entrado; pero no ha sido Ramiz Alía, su actual dirigente, quien lo inició sino el mismo Hoxha, éste el año 78, en un discurso ante el electorado, planteó que en Albania no había clases antagónicas. Sabemos muy bien lo que esto implica pues la cuestión ha sido dilucidada perfectamente por el Presidente Mao Tsetung; y si sumamos sus arteros ataques al Presidente Mao, al desarrollo del marxismo, ¿qué es? un revisionista. Así, Albania no es socialista. Si uno ve Vietnam, el camino que sigue es de un instrumento de la Unión Soviética que hoy clama por ayuda del imperialismo, con una economía en crisis y desecha; tanta sangre ¿para qué?. Es que ahí hubo un Ho Chi Minh, un indefinido, como se comprueba en su famoso testamento donde dice que le duele ver cómo se contiende en el seno del Movimiento Comunista Internacional, cuando el problema era de qué lado estar en la lucha entre marxismo y revisionismo y un comunista no tiene sino una solución, ponerse de lado del marxismo; Ho Chi Minh nunca lo hizo. Después vino Le Duan un podrido revisionista. De ahí la situación actual de Vietnam. Por esto pienso que no hay países socialistas hoy. Todo lo cual hace reflexionar seriamente y entender el problema de la restauración y la contrarrestauración, no es problema de lamentación ni de jeremiadas quejumbrosas como algunos tratan de difundir; el problema es afrontar la realidad y comprenderla, y la comprendemos si tomamos la cuestión de la restauración y la contrarrestauración que el propio Lenin ya planteara y que el Presidente Mao magistralmente desarrolló. Ninguna clase nueva en la historia se asentó de una sola vez en el Poder; lo conquistó y lo perdió, lo recuperó y volvió a perderlo hasta que, en medio de grandes luchas y contiendas, lograba afirmarse en el Poder, igual cosa pasa con el proletariado, pero grandes lecciones nos han dejado, incluso en la construcción socialista, por tanto es una grandiosa experiencia. Al fin y al cabo es el proceso de la historia y lo que debe preocuparnos es cómo prevenir la restauración del capitalismo, y toda revolución que está en marcha debe pensar, como se nos enseñara, en los largos años por delante, en los largos años por venir y estar seguros de que el proceso de desarrollo del proletariado en la conquista del Poder, en el establecimiento de la dictadura del proletariado, en su defensa y conducción de la revolución ya están definidos, que ya hay grandes hitos históricos y que, en consecuencia, la perspectiva es que la clase, sacando lecciones, va a conquistar el Poder y establecer la dictadura del proletariado en todo el orbe; y que el proletariado ya no será derrocado sino que proseguirá su camino de transformación hasta extinguir el Estado cuando nos adentremos en el comunismo. EL DIARIO: Presidente. Con el triunfo de la revolución ¿cómo sería la relación internacional del Nuevo Estado con los gobiernos burgueses, principalmente con el Estado yanqui y con el socialimperialismo? PRESIDENTE GONZALO: Es concreta la situación. Nosotros tenemos que acabar con la dominación del imperialismo yanqui sobre nuestro país, a su vez conjurar que se introduzca el dominio del socialimperialismo, como también conjurar que pueda introducirse el dominio de potencia alguna; eso es en síntesis. EL DIARIO: Presidente. ¿No habría el peligro de un aislamiento total que haría peligrar el Nuevo Estado? PRESIDENTE GONZALO: Creemos lo siguiente, tenemos que seguir un camino que nos lleve a la emancipación de la clase, que nos lleve al comunismo y ese camino nos demanda mantener nuestra independencia para plasmar los intereses del proletariado dentro de la revolución mundial. Creemos que, como es conocido, hay contiendas, contradicciones interimperialistas y ellas pueden ser utilizadas por ejemplo para la adquisición de algunos medios; como el mercado es cada vez más estrecho y hay una concreta guerra comercial, encontraremos quién nos pueda vender, claro que nos sacará la pepita del alma, le pagaremos con nuestras maldiciones como decía Lenin. Pero a su vez existen naciones oprimidas, revoluciones en marcha, existe proletariado internacional, hay pueblo en todo el orbe, Partidos Comunistas, ellos nos ayudarán y tenemos que aprender, porque por internacionalismo proletario acudirán a nuestro llamado y serán bien recibidos; ya vemos cómo se abren vínculos entre países atrasados, incluso como se utiliza el trueque. Encontraremos las formas adecuadas. Este problema aún no lo hemos estudiado lo suficiente porque son problemas venideros, tenemos lineamientos generales pero seguimos en lo que Lenin dijo: ¿quieres saber cómo es la guerra? hazla; y tengamos inagotable confianza en el proletariado internacional, en las naciones oprimidas, en los pueblos de la Tierra; y, muy particularmente, en los comunistas, en los partidos y en las organizaciones cualquiera que fuere su grado de desarrollo, tengamos confianza en ellos y aferrándonos a nuestra ideología al marxismo-leninismo-maoísmo, saldremos adelante, aunque comencemos dando pasos de ciego, encontrando soluciones transitorias o para la circunstancia o para un momento, hasta encontrar la definitiva, pues, como nos enseñara Lenin: ninguna revolución puede ser concebida totalmente desde el comienzo y muchas veces se da pasos a ciegas, y se camina a tientas y se encuentran soluciones transitorias o para un momento, pero así se avanza. Partimos de esto porque nuestra arma fundamental es la ideología; partimos de lo que dijo Marx: qué fácil sería entrar a la revolución teniendo la seguridad absoluta de vencer y todo el problema resuelto, fácil sería pero así no es la revolución. El problema es asumirla y llevarla adelante, cualquiera que fuera el costo, el esfuerzo que tengamos que hacer y cómo las masas crean la historia, nuestro pueblo lo hará y como hemos de armar al pueblo aplicando el armamento general que nos enseñara Marx, entonces defenderemos nuestro Estado porque nos mantendremos por la fuerza de nuestras armas, porque ningún Estado revolucionario se mantiene con la bendición del imperialismo y de la reacción; y de esa manera, con esa firmeza, con esa decisión, con esa convicción que da el marxismo-leninismo-maoísmo, el maoísmo principalmente, encontraremos caminos y nuevos caminos. El Presidente Mao nos ha enseñado que debemos pensar de otra manera y generar nuevas formas, es una cuestión fundamental; él nos planteó en el problema económico la cuestión se reduce a esto: una línea política clara, aparatos orgánicos y un gran esfuerzo. En todos los problemas, especialmente en los no resueltos que enfrentaremos, partir de la firme convicción maoísta de que mientras haya Partidos Comunistas y masas todos los milagros serán hechos. EL DIARIO: ¿Cómo ve el PCP el internacionalismo proletario hoy y en perspectiva? PRESIDENTE GONZALO: Primeramente como un principio, un gran principio, reitero nuevamente, porque el proletariado es una clase internacional y los comunistas somos internacionalistas porque de otra manera no podríamos servir al comunismo. Nuestro partido siempre se ha preocupado por forjar a su militancia, a los combatientes y a las masas en el internacionalismo proletario; educarlos en el marxismo-leninismo-maoísmo, en servir a la revolución mundial y en luchar incansable e indoblegablemente porque el comunismo florezca en la Tierra. Durante un tiempo perdimos vínculos con otros partidos; posteriormente, se han restablecido y así estamos coadyuvando a bregar por el Movimiento Comunista Internacional, de ahí que seamos miembros del Movimiento Revolucionario Internacionalista al cual consideramos un paso en la reagrupación de los auténticos comunistas. Creemos que su perspectiva es compleja, porque si complejo y difícil es formar un Partido y llevarlo adelante, cuán complejo será pugnar para que los comunistas, a través de sus diversos partidos y organizaciones, se unan. Sabemos que es una tarea ingente pero indispensable, creemos que hay quienes concurren, combaten y combatimos -diré también-, con todas las limitaciones que podamos tener, por servir a que el internacionalismo proletario nos vuelva a unir a los comunistas en el mundo y juntos bregar porque nuestra meta definitiva sea plasmada. Comprendemos que el problema es sumamente complejo y difícil pero los comunistas estamos hechos para ese tipo de tareas. EL DIARIO: ¿Cómo analiza el Presidente Gonzalo las diversas luchas que se libran hoy en las naciones oprimidas, qué de las acciones armadas en Europa y de los movimientos nacionalistas? PRESIDENTE GONZALO: En las naciones oprimidas hay múltiples luchas, tenemos luchas en Africa, en América Latina, en Asia, una zona de tanta importancia y peso en el mundo. Asia nos debe merecer siempre especialísima atención, por el peso de la masa en la historia y por lo que nos ha enseñado el propio marxismo. Creemos que el problema de las luchas en naciones oprimidas está en la carencia o insuficiente desarrollo de los Partidos Comunistas; sí, realmente hay partidos que van a tener que cumplir con grandes aportes. Creemos, por otro lado, que la cuestión está en que no se desarrollan guerras populares. En consecuencia, pensamos en la necesidad de coadyuvar tesoneramente a que el marxismo-leninismo-maoísmo sea mando y guía de la revolución mundial, a que sobre esa base se formen y desarrollen poderosos partidos, llevando adelante guerras populares. Nos parece que ésa es la gran limitación. Hay movimientos nacionalistas en Medio Oriente, Palestina en concreto, en Sudáfrica, etc.; pero creemos que las revoluciones, para seguir realmente la senda abierta por la nueva era que inició la Revolución de Octubre, necesitan desarrollar partidos comunistas, porque si no los hay se hacen revoluciones a medias. De éstas Africa nos da varias muestras, Argelia, por ejemplo; allí hubo lucha armada y muy dura, pero no se construyó el socialismo porque faltó partido comunista para dirigir una verdadera lucha revolucionaria. Sin partidos comunistas se desarrollan movimientos nacionalistas que buscan simplemente ser reconocidos como naciones, para pasar de colonias a semi-colonias y quedar dependiendo del imperialismo o, en otros casos, cambiar de amo. Lo hemos visto en diversos movimientos ligados a Inglaterra o Francia, por ejemplo. En otros casos se desarrollan luchas armadas para que las Naciones Unidas resuelvan y definan la situación, como en Chipre. En consecuencia, el problema no es simplemente la lucha armada, en el fondo, el problema es guerra popular, Partido Comunista y marxismo-leninismo-maoísmo; sin embargo, todos esos movimientos suman fuerzas para la lucha contra el imperialismo, pero sólo podrán servir radicalmente a barrerlo si es un Partido Comunista con guerra popular quien los dirige. En cuanto a las acciones armadas en Europa, vemos largas luchas armadas; son expresión de una realidad objetiva, en consecuencia, la cuestión no es condenar sino comprender, estudiar, analizar y ver cómo están expresando también que en la vieja Europa hay situación revolucionaria; más aún, que hay hombres que toman las armas entendiendo que es la única forma de conquistar el Poder; esto es un duro golpe al revisionismo, porque en la propia Europa, considerada uno de sus bastiones, el revisionismo comienza a ser abandonado, cualquiera sea el grado alcanzado y los problemas pendientes, es innegable un importante avance. En algunos se trata de cuestiones nacionales como Irlanda, en otros casos se plantean cómo hacer sus revoluciones. Creemos que estas luchas deben ser seriamente estudiadas, que el problema está en ver qué ideología tienen, qué política les guía, a qué clase sirven, cómo enfrentan el problema de las superpotencias. Creemos que nos deben merecer mucha atención, máxime cuando hay organizaciones que se plantean volver a Mao Tsetung, o que comienzan a plantearse la necesidad del Partido, o que es insuficiente la simple lucha armada. Debemos ver esto como un nuevo despertar y comprender que se pueden cometer muchos errores, al fin y al cabo quién no los comete, pero ellos mismos irán sacando lecciones de sus errores como lo están haciendo, avanzarán, cogerán el marxismo-leninismo-maoísmo y formarán sus partidos y harán sus guerras populares, según el carácter socialista de su revolución y según sus condiciones específicas. En síntesis, es una muestra, reitero, de que en Europa también hay situación revolucionaria en desarrollo desigual, que hay hombres hastiados del podrido revisionismo y que, en condiciones tan difíciles, en las entrañas imperialistas donde la lucha es compleja, dura, toman los fusiles para cambiar el mundo, la única forma de hacerlo. Esto da más esperanza y sirve a ver cómo la tendencia principal es la revolución, y cómo Europa también se orienta hacia la revolución. Veamos incluso que, después de ser pioneros, están abriendo brecha y, al fin y al cabo, más esperanza; y más comprensión nos merecen cuando hay quienes ya se preocupan por Partido y por volver a Mao Tsetung, eso es querer volver al marxismo, a cogerlo a fondo como marxismo-leninismo-maoísmo. En Europa se libran estas luchas que tienen también limitaciones y errores, como todas; pero debemos verlas como una expresión de la marcha incontenible de la revolución, y cómo cada vez más países y pueblos, expresan tomar fusiles para derrocar el orden existente, sacan experiencia y se enrumban hacia el Partido y la ideología del proletariado, el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente maoísmo. Para mí es motivo de alegría ver que en Europa comienza a abrirse paso la revolución y cualquiera que sean los encontronazos, los traspies que puedan darse, hay que tener confianza en las masas y en los pueblos; confianza en que así como en otras partes se da la revolución con las armas en la mano, siguiendo el marxismo, allí también se dará, eso debemos pensar. Insisto, deberíamos ver con dimensión histórica, ver a más largo plazo, estudiar seriamente estos movimientos y alentar todo lo que sea enrumbarse hacia el marxismo-leninismo-maoísmo, a forjar Partido y a desarrollar guerra popular. EL DIARIO: ¿Qué opina de Nicaragua, qué de Cuba?. PRESIDENTE GONZALO: Quisiera reiterar que en una ocasión conversaba con unos amigos sobre estos problemas. Nicaragua hizo una revolución inconclusa y su problema está en que allí no se ha destruido el Poder de toda la gran burguesía, se han centrado en antisomocismo, creo que ése es un problema. Una revolución democrática tiene que barrer las tres montañas y allí no se ha hecho; por otro lado, se desarrolla dentro de criterios cubanistas reajustados en los últimos tiempos y eso simplemente lleva a depender, en último término, de la Unión Soviética. ¿Cómo se comprueba esto?, porque en las conversaciones entre los representantes diplomáticos de las dos superpotencias es donde se trata, se ve y se maneja la situación de Nicaragua, como la de Afganistan o la de Medio Oriente, son muy sintomáticos los pasos de marchas y contramarchas que han dado y muy coincidentes reuniones y acuerdos de las superpotencias las medidas que luego se toman en Nicaragua, en su relación con la "contra". Nos parece que Nicaragua, como bien merece ese heroico pueblo, para seguir el camino correcto tiene que desarrollar la revolución democrática completamente y eso le va a demandar una guerra popular, tiene que romper con el bastón de mando de la Unión Soviética, asumir en sus manos su propio destino y defender su independencia de clase y esto demanda un Partido y, obviamente, sujetarse a la concepción del proletariado; de otra manera seguirá siendo ficha de ajedrez y eso es lamentable. Creemos que ese pueblo ha dado muestra de gran combatividad y su destino histórico no puede sino desarrollar la revolución como corresponde, con Partido basado en el marxismo-leninismo-maoísmo y guerra popular, y desarrollarse independientemente sin tutelaje alguno, de nadie, ni cercano ni lejano. De Cuba sólo podría decir esto en concreto, juega un papel al servicio de la Unión Soviética: no sólo en América Latina, lo cumple en Angola por ejemplo y en otros puntos. Pasó de una mano a otra mano, de un amo a otro; proceso presentado como un "caso excepcional" por los propios cubanos. Hay que recordar bien los criterios que han planteado como guía de su lucha: que no están bien diferenciadas las clases y lo que cabe, en síntesis, es un conjunto de salvadores para redimir oprimidos, criterios que, como los cuatro siguientes, también vemos en documentos que circulan en el Perú, es el problema de no partir de la lucha de clases; "revolución socialista o caricatura de revolución", es plantear una sola revolución en las naciones oprimidas; frente único de tres clases, sin burguesía nacional; no necesidad del Partido Comunista, es poner de lado la dirección del proletariado; y, negación de la guerra popular partiendo de rechazar las bases de apoyo. Son nefastos criterios que ha difundido el cubanismo. Cuba tiene una alta responsabilidad en América porque fue una esperanza; pero hay que recordar muy bien qué pasó el año 70, Fidel Castro dijo que había fracasado la estrategia de la lucha armada, buscando abandonarla, dejar lo que había incentivado y apoyado. Douglas Bravo le salió al frente replicando que no había fallado la estrategia sino la táctica castrista, pero también lamentablemente después Bravo se acogió a la amnistía. Creemos que esas situaciones han generado muchos problemas en América, pero hoy día esos mismos criterios reajustados según la voz del amo socialimperialista se están difundiendo y presentándoseles como un nuevo desarrollo revolucionario que se concretaría en Nicaragua. Es una falsedad. Lo que debemos afirmar y afirmamos es que América Latina ya está madura para la guerra popular y ése es su camino. América Latina tiene un papel importante que cumplir, no olvidemos "el traspatio de Estados Unidos", según dicho del insolente imperialismo yanqui. América Latina tiene importancia también en el mundo, la cumplirá si es que coge la ideología del proletariado, el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente el maoísmo, si forja partidos comunistas y si lleva adelante guerras populares dentro de la revolución mundial. Los latinoamericanos seremos a fines de siglo más de 500 millones de personas; tenemos muchas cosas que nos unen y debemos bregar juntos hasta por cercanía, lo cual no quiere decir que nos desliguemos de la revolución mundial, porque solamente cumpliremos nuestra tarea como parte de la revolución mundial; no basta con América Latina, el comunismo es para todo el Mundo o para nadie. EL DIARIO: ¿Cuál es el aporte del Partido Comunista del Perú a la revolución mundial? PRESIDENTE GONZALO: El principal aporte es plantear el maoísmo como nueva, tercera y superior etapa del marxismo; asumiendo servir y coadyuvar a que esta ideología se constituya en mando y guía de la revolución mundial. Cuestión derivada de esto es mostrar la validez, la perspectiva trascendental del maoísmo. También el mostrar que apoyándose principalmente en los propios esfuerzos, sin seguir bastón de mando de superpotencia ni potencia imperialista alguna, es posible hacer la revolución, y, más aún, es necesario hacerla así; y demostrar la potencialidad de la guerra popular que se expresa pese a todas nuestras limitaciones. Y si cabe, ser como algunos dicen una esperanza, lo cual implica responsabilidad y ser una antorcha para la revolución mundial, un ejemplo que puede servir a otros comunistas. De esta manera estamos sirviendo a la revolución mundial. OTROS PUNTOS EL DIARIO: Presidente, hemos llegado al fin de esta entrevista, más de 12 horas conversando con Ud., ahora quisiéramos hablar sobre su persona, sobre el Dr. Abimael Guzmán Reinoso. ¿Hubo alguien entre su familia o amigos que influyó a desarrollar su vocación y capacidad política? PRESIDENTE GONZALO: Yo diría que lo que ha ido forjando en mí el enrumbarme ha sido la lucha del pueblo. He podido ver la combatividad del pueblo en Arequipa en el levantamiento del 50, cómo la masa ante un atropello bárbaro de asesinar jóvenes responde con furia incontenible, cómo se han batido contra el ejército y lo han hecho replegarse a sus cuarteles, teniendo que traer fuerzas de otras partes para poder aplastarlos. Es un hecho que podría decir, lo tengo bastante grabado. Porque ahí, después de entender a Lenin, comprendí cómo el pueblo, la clase, cuando toma las calles y marcha hace temblar a la reacción pese a todo su poder. Otro hecho, las luchas del 56, el pueblo combatió, otros traficaron, bueno eso es lo que hacen la reacción y los oportunistas; pero el pueblo combatió e impuso condiciones y hubo movimientos masivos, con fuerza. Esos hechos, por ejemplo, han servido para hacerme entender el poder de las masas, que ellas hacen la historia. También he tenido ocasión, retrotrayendo, de vivir el levantamiento del 48 en el Callao, ver con mis propios ojos la bravura y cómo el pueblo derrocha heroicidad y cómo trafican los dirigentes. Y remontando más en recuerdos, creo que la II Guerra Mundial me ha marcado profundamente, sí, recuerdo como en sueños, si cabe, no muy claramente, cuando se inició la guerra en setiembre de 1939, el alboroto y las noticias de los antiguos radios, recuerdo los bombardeos, las grandes noticias, recuerdo también el término de la guerra y cómo fue celebrada, entonces un gran pitar de barcos, de bocinas, un gran alboroto, una alegría por el final de la II Guerra Mundial. Tuve ocasión de ver en los periódicos a los llamados cinco grandes, al camarada Stalin entre ellos, por eso diría que estos hechos han ido marcándome, e imprimiéndome la idea del poder, de las masas y de la capacidad transformadora de la guerra; de una forma elemental, confusa, pero son huellas que a uno le van modelando. Creo que como todo comunista soy hijo de la lucha de clases y del Partido. EL DIARIO: ¿A qué edad abraza el marxismo?. ¿Fue esto en su etapa escolar o universitaria? PRESIDENTE GONZALO: Mi interés por la política comienza a desenvolverse en la parte final de la secundaria, a raíz de los hechos del 50; de los siguientes años, recuerdo que junto con otros compañeros formamos un círculo para estudiar las ideas políticas, teníamos un gran afán para estudiar todas las ideas políticas, ¿se imaginan en qué momento estaba?; ahí comencé. Ya en la universidad, la propia lucha universitaria, he vivido grandes huelgas, enfrentamientos entre apristas y comunistas y debates. Así fue despertándose mi deseo de conocer libros, alguien tuvo a bien prestarme uno, creo que fue "Un paso adelante, dos pasos atrás", me gustó; de ahí ya comencé a estudiar libros marxistas. Luego ha marcado en mí bastante la figura del camarada Stalin; por entonces, las personas que se acercaban al comunismo y que lograban la militancia nos formábamos en "Cuestiones del leninismo", era libro de cabecera, lo estudié como corresponde, seriamente, dada su importancia. Me interesó la vida de Stalin, era para nosotros un ejemplo de la revolución. Tuve problemas para ingresar al Partido Comunista, había un criterio absurdo: para militar había que ser hijo de obrero, y yo no lo era; pero otros tenían otro criterio y así pude ingresar al Partido. He participado en la defensa de Stalin, quitárnoslo entonces era como quitarnos el alma; en esa época se difundía más las obras de Stalin que las de Lenin, así eran esos tiempos. Luego mi viaje a Ayacucho por razones de trabajo y por un tiempo corto a mi entender, un tiempo corto que duró años, pensaba que iba a ser un año, porque así estaban las circunstancias, pero uno se propone y la clase dispone, la masa y el pueblo hace de uno muchas cosas. Ayacucho me sirvió para descubrir al campesinado; entonces Ayacucho era un pueblo muy pequeño, mayormente campo, si uno va a las barriadas, incluso hoy, hay campesinos y si uno sale un cuarto de hora ya está en el campo. Ahí también empecé a entender al Presidente Mao Tsetung, avancé en comprender el marxismo; la contienda entre marxismo y revisionismo ha tenido mucha importancia en mi formación. Alguien tuvo la mala suerte de prestarme la famosa Carta China, la "Proposición acerca de la línea general del Movimiento Comunista Internacional", me la prestó con la obligación de devolvérsela, obviamente el hurto era comprensible. La carta me llevó a adentrarme en la gran lucha entre marxismo y revisionismo. Me aboqué a trabajar en el Partido y barrer el revisionismo; creo que junto con otros camaradas lo logramos, dejamos uno o dos para remedio como dicen, eran ya invariablemente revisionistas. Ayacucho ha tenido para mí trascendental importancia, tiene que ver con el camino de la revolución y lo que el Presidente Mao enseña. Así me fui haciendo marxista y el Partido me fue modelando con temple, con paciencia creo. EL DIARIO: Se conoce que Ud. estuvo en China ¿Conoció al Presidente Mao? PRESIDENTE GONZALO: No tuve esa gran suerte, solamente pude verlo de lejos; pero vi lo que es el reconocimiento y cariño profundo de un pueblo a un gran jefe, extraordinario marxista, a una cumbre del marxismo. No tuve la suerte de conocerlo, repito; la delegación en la que me cupo estar cometió muchos errores y necias petulancias, creo que eso determinó que no se nos confiera ese privilegio. Si he estado en China. En China tuve la posibilidad, que yo deseara para muchos, de estar en una Escuela donde se enseñaba primero política, desde cuestiones internacionales hasta filosofía marxista, eran magistrales lecciones dadas por revolucionarios probados y altamente competentes, grandes maestros. Entre ellos podría recordar al maestro que nos enseñó trabajo abierto y secreto, un hombre que toda su vida la había dedicado al Partido, absolutamente a él, de muchos años, un ejemplo vivo, extraordinario maestro; él nos enseñó muchas cosas, quiso enseñarnos más pero algunos no quisieron, en fin, de todo hay en la vida. Luego nos enseñaban cuestiones militares, pero también se comenzaba por política, la guerra popular, luego construcción de las fuerzas armadas y estrategia y táctica; y la parte práctica correspondiente emboscadas, asaltos, desplazamientos, así como preparar artefactos de demolición. Cuando manejábamos elementos químicos muy delicados, nos recomendaban tener la ideología presente siempre y que ésta nos haría capaces de hacer todo y hacerlo bien; y aprendimos a hacer nuestras primeras cargas para demoler. Para mí es ejemplo y recuerdo imborrable, una gran lección; y un gran paso en mi formación, el haberme formado en la más alta Escuela de marxismo que ha tenido la Tierra. Bueno, si quieren una anécdota, aquí tienen una: cuando terminábamos el curso de explosivos, nos dijeron que todo se podía explosionar; entonces, en la parte final cogíamos el lapicero reventaba, nos sentábamos también reventaba, era una especie de cohetería general, eran cosas perfectamente medidas para hacernos ver que todo podía ser volado si uno se ingeniaba para hacerlo. Muchas veces preguntábamos ¿cómo hacemos esto? ¿cómo hacemos lo otro?; nos respondían, no se preocupen, no se preocupen, ya han aprendido suficiente, piensen que todo lo hacen las masas y ellas tienen un ingenio inagotable, lo que les hemos enseñado las masas lo harán y les volverán a enseñar; así nos decían. Esa Escuela ha servido bastante a mi formación y para comenzar a valorar al Presidente Mao Tsetung. Luego estudié un poco más, he buscado aplicar, y creo que me falta aprender mucho del Presidente Mao Tsetung, del maoísmo, como de su propia acción. No es pretender compararse, es simplemente tomar grandes cumbres como rumbos para nuestros objetivos. Mi estadía en China ha sido una experiencia imborrable. También he estado en otra ocasión, cuando la Gran Revolución Cultural Proletaria comenzaba, solicitamos se nos explicara el Pensamiento Mao Tsetung, según entonces se decía; nos han enseñado nuevamente y eso me ayudó a comprender más o un poco más, mejor diría. Hay una cosa que parece irónica, he comenzado a apreciar y valorar a Mariátegui al entender al Presidente Mao Tsetung; como él nos exige aplicar con creatividad, volví a estudiar a Mariátegui y comprendí que teníamos un marxista-leninista de primera línea, había analizado a fondo nuestra sociedad. Parece irónico, pero es verdad. EL DIARIO: ¿Qué se siente ser el hombre más buscado por las fuerzas represivas de este gobierno? PRESIDENTE GONZALO: Que uno está cumpliendo una responsabilidad y que se esfuerza por cumplir su tarea; el resto es tener más responsabilidad con la revolución, el Partido, el marxismoleninismo-maoísmo, con la clase, el pueblo y las masas. Y pensar siempre que la vida la llevamos en la punta de los dedos, sino no podríamos ser comunistas. En consecuencia, tendrán sus razones; las mías son las que el Partido establece, a ellas espero ser cada vez más fiel y más útil, pues, la vida se queda enredada en cualquier vericueto del camino, además tiene comienzo y tiene fin, tiempo más, tiempo menos. EL DIARIO: ¿Tiene Ud. algún tipo de temor? PRESIDENTE GONZALO: ¿Temor?. Creo que es una contradicción, temer y no temer; el problema es tomar la ideología y potenciar en nosotros el valor, es la ideología la que nos hace valientes, la que nos da valor. A mi juicio, nadie nace valiente, es la sociedad, la lucha de clases las que hacen valientes a los hombres y a los comunistas, la lucha de clases, el proletariado, el Partido y la ideología. ¿Cuál podría ser el máximo temor?, ¿morir?; como materialista creo que la vida termina algún día, lo que prima en mí es ser optimista, con la convicción de que la labor a la cual sirvo otros la han de proseguir la llevarán hasta el cumplimiento de nuestras tareas definitivas, el comunismo. Porque el temor que podría tener sería el que no se prosiguiera, pero ese temor se disuelve cuando uno confía en las masas. El peor temor, al fin y al cabo, es no confiar en las masas, es creerse indispensable, centro del mundo, creo que eso es, y si uno es formado por el Partido con la ideología del proletariado, con el maoísmo principalmente, comprende que las masas hacen la historia, que el Partido hace la revolución, que la marcha de la historia está definida, que la revolución es la tendencia principal, se le esfuma el temor y solamente le queda la satisfacción de ser argamasa y, junto a otras argamasas, servir a poner cimientos para que algún día brille el comunismo e ilumine toda la Tierra. EL DIARIO: ¿Qué hace el Presidente Gonzalo cuando deja la política y la guerra?. ¿Qué libros lee? PRESIDENTE GONZALO: Muchas veces no tengo tiempo para leer lo que quisiera. ¿Qué me gusta leer?. Biografías leo bastante; la literatura me parece una gran expresión del arte, por ejemplo me gusta leer a Shakespeare, sí, y estudiarlo, estudiándolo se encuentran problemas políticos, bien claras lecciones en "Julio César", por ejemplo, en "Macbeth". Me gusta la literatura, pero siempre me gana la política y me lleva a buscar el sentido político, qué hay en el fondo, al fin y al cabo tras todo gran artista hay un político, hay un hombre de su tiempo que contiende en la lucha de clases. Novelas peruanas también he leído, a veces releo. Una vez leí una pequeña obra de Tomás Mann sobre Moisés luego la utilizamos para la interpretación política de la lucha que entonces teníamos. Una parte de esa obra dice se puede quebrantar la ley, pero no negarla; ¿Cómo interpreté?, así: quebrantar la ley es chocar con el marxismo, desviarse, tener ideas erróneas, eso es permisible, pero no se puede consentir negar el marxismo. Creo que muchas cosas se aprenden. He leído "El mundo es ancho y ajeno", "Todas las sangres", y las he estudiado también. Me gusta la literatura; la música, antes me gustaba más, ahora menos. ¿Qué otras aficiones? libros de ciencia. Me gusta la ciencia, en mis tiempos iniciales, universitarios, me matriculé en abogacía porque debía tener una profesión, pero me gustaba la filosofía y me aboqué a ella y en la filosofía descubrí la ciencia, me dediqué bastante a estudiar cuestiones de matemáticas, de física; la física me parece una ciencia extraordinaria, bien puesto está cuando se dice que es "aventura del pensamiento". El problema de la ciencia está en que los científicos, cuyo punto de partida es materialista, son buenos mientras se mantienen dentro de la ciencia, pero cuando quieren ir hacia la filosofía u otros terrenos, si no son materialistas desbarran en idealismo, hasta a Einstein le ha pasado eso. Me gusta la ciencia, me parece una cosa extraordinaria; esta afición por la ciencia se puede ver en la tesis que hice para el bachillerato en filosofía, es un análisis del tiempo y el espacio en Kant desde el punto de vista del marxismo, utilizando la matemática y la física, me gustaría volver a leerla, porque no hay tiempo ahora para volver a estudiar todo eso, pero no tengo ni un ejemplar. EL DIARIO: ¿Le gusta también la poesía? PRESIDENTE GONZALO: Sí, en un tiempo he recorrido la poesía mundial en una antología; y la he estudiado, había en la biblioteca de la universidad unas obras que lo permitieron. Me gusta la poesía, es una de las cosas que también admiro en el Presidente Mao quien era un extraordinario poeta. Sobre la poesía peruana, para mí, Vallejo; sí es nuestro, además él era comunista. EL DIARIO: Algunos dicen que sus discursos: La Bandera e ILA 80, son hermosos poemas políticos de guerra. ¿Qué dice de esto Presidente? PRESIDENTE GONZALO: Yo diría a veces en la política hay que soltar el alma para que la pasión, el profundo sentimiento, impulse nuestra voluntad; en esas circunstancias habla el corazón como se dice, creo que sale la pasión revolucionaria que es indispensable para la guerra. Qué valor tengan literariamente no podría precisarlo. EL DIARIO: ¿Alguna vez Ud. se deprime? PRESIDENTE GONZALO: No. creo que tengo optimismo casi orgánico; y, me muevo más en problemas de comprensión y voluntad, que en problemas de sentimientos y depresión. Al contrario, creo que soy bastante optimista, es el marxismo; el Presidente Mao quien nos ha hecho entender que los hombres, los comunistas en especial somos optimistas. Siempre que me encuentro en momentos difíciles, me esfuerzo por encontrar qué hay de positivo, o qué es lo poquísimo, incluso, que puede tener un momento para desarrollarse; porque nunca todo puede ser negro, ni todo puede ser rojo. Incluso si hubiera, aunque no hayamos tenido hasta hoy una gran derrota, siempre habría una parte buena; el problema está en sacar la lección y sobre eso bueno seguir trabajando; siempre encontrarás quien apoye, quien dé calor intenso, ayudando en el combate porque el comunismo une. EL DIARIO: ¿Tiene amigos? PRESIDENTE GONZALO: No tengo; camaradas sí, y estoy muy orgulloso de tener los camaradas que tengo. EL DIARIO: Presidente hemos llegado al fin de esta entrevista. PRESIDENTE GONZALO: Hemos trabajado bastante y les agradezco profundamente sus esfuerzos, las peripecies que han tenido que pasar para poder reunirnos y ofrecer esta primera entrevista, entrevista que puede ser llevada al pueblo por un periódico como El Diario que brega tenazmente por servir al pueblo. Muchas gracias. EL DIARIO: Gracias a Ud. Presidente. ELECCIONES, NO! GUERRA POPULAR, SI! I. ELECCIONES CRUCIALES PARA LA REACCION. Como concluyera la reciente Sesión del Comité Central, celebratoria del triunfante X ANIVERSARIO DE LA GUERRA POPULAR, la reacción peruana y su amo, el imperialismo yanqui principalmente, necesitan reimpulsar el capitalismo burocrático, volver a reestructurar el Estado y aniquilar la guerra popular. Estas son sus necesidades y sus sueños porque el capitalismo burocrático registra su más profunda crisis económica hasta hoy, hundiendo a toda la vieja sociedad peruana en su mas grave crisis general; en tanto que su Estado, la caduca dictadura de grandes burgueses y terratenientes, reestructurada por tercera vez en este siglo, el año 78, como tenía que ser, sigue siendo una podrida maquinaria burocrático-militar mas opresora y sangrienta cuanto más impotente se presenta ante el desarrollo de la lucha popular; y porque la guerra popular, en estos diez años victoriosos, sustentada en las masas principalmente del campesinado pobre y bajo la dirección del Partido, ha llegado a concretar la estremecedora perspectiva real de conquistar el poder en todo el país para el proletariado y el pueblo. Necesidades, planes y afanes reaccionarios e imperialistas que inevitablemente potenciarán más aún la lucha de clases, desarrollando la lucha de masas y elevando la guerra popular a su mayor expresión. Lo anterior en un contexto en que, las superpotencias (Estados Unidos y Union Soviética) y las potencias, todas ellas imperialistas o socialimperialistas, en colusión y pugna atizan las contradicciones a nivel mundial (naciones oprimidas-superpotencias y potencias imperialistas, superpotencias entre sí y con las demás potencias imperialistas y entre éstas mismas, y burguesía-proletariado; de las tres, principal la primera); desenvolviéndose así colusión y pugna por áreas de dominio y nuevo reparto del mundo que entrañan nuevas guerras circunscritas, regionales y mundial en perspectiva, pese a todos los parloteos de artero pacifismo con que se pretende, una vez más, adormecer al mundo. En circunstancias en que se desenvuelve, desde mediados de la última decada, una nueva ofensiva contrarrevolucionaria revisionista dirigida principalmente por Gorbachov y Teng; ofensiva en los últimos tiempos intensificada y convergente con la desatada por el imperialismo contra el marxismo, vociferando nuevamente la supuesta y propagandizada "caducidad del marxismo"; así la colusión y pugna, y en este caso principalmente la colusión, se da en este siniestro ataque contra el marxismo-leninismo-maoísmo. En condiciones internacionales en que la lucha revolucionaria y, mas aun, la guerra popular adquieren mayor trascendencia en las naciones oprimidas, pues son la base de la revolución proletaria mundial como tendencia principal de la historia mundial. Compleja realidad concreta da en hechos tan llevados y traídos en el país, como Europa del Este que se debate entre la descomposición del revisionismo y la rebatiña imperialista, o Nicaragua cuya revolución democrática inconclusa ha naufragado en las ánforas con negras perspectivas, o el dialogo del M-19 en Colombia de tan aleccionadoras consecuencias, para enumerar unos pocos. Finalmente, la llamada "legitimación" como un objetivo político de la guerra contrasubversiva, en su forma conocida como "guerra de baja intensidad" , en tanto busca gobiernos salidos de elecciones como medio de "darles legitimidad" y "autoridad" reconocida por el pueblo; aparte, según dicen, de que "sirva a satisfacer las necesidades del pueblo". Así las elecciones son, pues, un instrumento de la guerra contrarrevolucionaria. Todo esto hace de las elecciones generales del 90 unas elecciones cruciales para la reacción peruana y el imperialismo, principalmente yanqui. II. SE ACENTÚA LA CRISIS POLÍTICA, AUMENTAN LAS CONTRADICCIONES. En "Contra las ilusiones constitucionales y por el Estado de Nueva Democracia!", el Partido dijo: "SOBRE LAS ELECCIONES. Marx destacó: 'A los oprimidas se les autoriza para decidir una vez cada varios años; qué miembros de la clase opresora han de representarlos y aplastarlos en el parlamento!. Esto es más válido aún tratándose de elecciones para sancionar cartas constitucionales. Así, si las elecciones son el orden regular de renovación de los gobiernos en las dictaduras burguesas de las sociedades capitalistas, incluidas las más democráticas que se pueda imaginar, el medio normal de su funcionamiento político para la preservación y el desarrollo del capitalismo; en los estados terrateniente-burocráticos, como los de América Latina, cuando han cumplido su función de cambio de gobiernos y en los momentos en que más han respetado las normas del sistema demoburgués, las elecciones sólo han sido instrumento de dominio de terratenientes feudales y grandes capitalistas, ya se trate de una periódica renovación, como en Colombia en los últimos años, o del término de un gobierno militar como en Argentina, también en los últimos años, para tomar un ejemplo de los muchos en que es pródiga nuestra América. En el país fácilmente se comprueba lo dicho. Aun que con importantes interrupciones de los periódicos procesos electorales por gobiernos militares, especialmente interrupciones ligadas, por un lado al desarrollo de la lucha popular y, por otro, a las contradicciones entre terratenientes feudales y gran burguesía y entre la burguesía compradora y la burguesía burocrática y, resaltando que los propios gobiernos militares han servido a implementar elecciones ya sea para regularizar su propia situación, terminar su gobierno o garantizarlas, las elecciones en el Perú han servido para preservar o desarrollar el Estado Peruano, la república formal, la dictadura de terratenientes feudales y grandes burgueses. Así las elecciones han sido, como no podía ser de otro modo dentro del orden social imperante, un instrumento en manos de la burguesía compradora primero y después de la burguesía burocrática. Esto ha sido lo principal en los procesos electorales del estado peruano en este siglo y es lo que ha determinado el carácter de clase de las elecciones en el país. Estas cuestiones fundamentales nos plantean: 1) El Estado Peruano es terrateniente-burocrático, una dictadura de terratenientes feudales y de grandes burgueses bajo control del imperialismo norteamericano; contra éste, el pueblo lucha por la construcción de un Estado de nueva democracia que requiere la destrucción del viejo orden existente. 2) El Estado Peruano, como todo Estado, se sustenta, defiende y desarrolla utilizando la violencia; frente a ésta el pueblo necesita de la violencia revolucionaria siguiendo el camino de cercar las ciudades desde el campo. 3) Las elecciones son un medio de dominación de terratenientes y grandes burgueses; no son para el pueblo instrumento de transformación ni medio para derrocar el poder de los dominantes, de ahí la justa orientación de usarlas sólo con fines de agitación y propaganda." Esto dicho en 1978 es plenamente válido; y destaquemos que las elecciones del 80 y 85 lo han comprobado fehacientemente. Así, dentro de esta función de las elecciones en el Perú, similar a las de los demás países, y dentro de su condición de cruciales para la reacción, las elecciones generales del 90 como tenía que ser, se han presentado y desenvuelven como defensa del caduco orden existente y evolución de la sociedad peruana; y en este marco los partidos como Apra, Izquierda Socialista (IS), Izquierda Unida (IU), Fredemo y Cambio 90 sostienen y defienden objetivos y metas fundamentales iguales y sólo tienen diferencias de forma y medios y cómo utilizarlos. En estas elecciones se han movilizado 300 mil miembros de las fuerzas armadas y policiales, la mayor para elección alguna, como lo reconoce los propios aparatos estatales. Además, han puesto en tensión y movimiento a todas sus instituciones; así como desarrollado una desenfrenada propaganda orientada no sólo a capitalizar votos, sino a presionar al pueblo para que vote y a combatir la guerra popular; todo esto aparte de la más baja y vil demagogia. Destaquemos nítidamente cómo se acrecienta más y más la participación abierta de la Iglesia Católica en la política peruana, como lo demuestran palmariamente estas elecciones; pero a su vez debe verse seriamente la actuación del evangelismo en estas elecciones, detrás del cual actúa el imperialismo yanqui. Así, mientras la fuerza armada sigue siendo el gran elector y garante, la Iglesia, el llamado "poder espiritual", se yergue cada vez más como poder político. Estas elecciones más desembozadamente han mostrado que todo vale y que la reacción, en sus propias contiendas internas, es capaz de usar todo en la rebatiña por sus intereses de grupo o facción, de qué no será capaz en su lucha contra el pueblo y la revolución?; en las actuales elecciones generales ha puesto en marcha dos engendros: el racismo y la lucha religiosa, el primero es un nefasto enconamiento de trasnochadas ideas de falsas superioridades totalmente opuestas a la forja de una nacionalidad en formación como la nuestra y, la segunda, la lucha religiosa, la siniestra utilización de la religión no solo como instrumento de la lucha de clases que realmente es sino para lanzar masas contra masas, desenrumbar la lucha popular y sofrenar la revolución en marcha, la guerra popular. Pero no solamente estos engendros han sido puestos en marcha, sino que, como siempre, la reacción y las clases, facciones y grupos que la conforman maniobran protervamente con el golpe de estado, su instrumento tan socorrido, mientras cínicamente declaman sobre su democracia burguesa. Todo esto aparte de las consabidas maquinaciones, trampas, arterías y fraude en los escrutinios, y el trasfondo de represión y genocidio principalmente en el campo. Así el proceso electoral hiede a denso tufo de fascismo. Teniendo en cuenta los datos del "Cómputo total de las elecciones políticas generales del 14 de abril de 1985" del Jurado Nacional de Elecciones, y del "Consolidado Nacional Presidencial" del mismo organismo, difundido el 11 de mayo, se obtienen los resultados que siguen así como los que expondrán más adelante. RESULTADOS GENERALES Inscritos 9'983,4 No votantes 2'116,6 Votantes 7'866,8 PORCENTAJE DE VOTOS Fredemo 27.6 Cambio 90 24.6 Apra 19.1 IU 6.9 IS 4.0 Otros 2.2 Nulos y blancos 15.3 Resalta la bajísima votación de los dos primeros candidatos, ninguno, ni Vargas Llosa ni Fujimori alcanzan siquiera el 30% de los votos emitidos; muy lejos, pues, del 50% más un voto que su constitución demanda para asumir la presidencia. Queda también muy claro, aunque sobre esto volveremos, que el ausentismo, la no concurrencia a votar se ha acrecentado notablemente, llegando al 21.2% de los inscritos y al 27% de los votantes; esto es, el que alcanzó, mayor votación sólo obtuvo 0.6% mas de votos He ahí el auto declarado triunfo de la llamada democracia y la supuesta derrota del llamado terrorismo! El 19% aprista implica la quiebra del tradicional tercio de la votación, tan cacareado por décadas; pero su contingente parlamentario le permite seguir cumpliendo su nefasto papel en la historia peruana. Por otro lado las autoproclamadas "Izquierda Unida" e "Izquierda Socialista" han sido aplastadas por las propias ánforas que ahora juntas ni siquiera alcanzan el porcentaje de votos nulos y blancos; así el desenfrenado cretinismo parlamentario ha sufrido su más catastrófica y humillante derrota, justa paga al revisionismo, al oportunismo y a la traición a la clase y al pueblo. En síntesis, la dispersión de votos y la indefinición marcan las elecciones generales de abril; la segunda vuelta se presenta como una turbia, ambigua y más demagógica contienda de tahures politiqueros. Pero, además el parlamento con la repartija de curules se desenvolverá como agravada colusión y pugna de grupos y facciones de explotadores, pudriendo más el caduco sistema parlamentario. Así, todo muestra que el Estado Peruano se ha debilitado más en sus bases y tendrá que sustentarse más cada vez en sus fuerzas armadas y represivas; y quedará más claro para el pueblo que las fuerzas armadas son la columna vertebral del Estado y que este Estado no es más que la violencia organizada para el mantenimiento de la esclavitud del pueblo peruano. El proceso electoral hace saltar problemas fundamentales de la sociedad peruana, pese a la pretensión de velarlos: la semi-feudalidad subsistente, base de la crisis de la producción agropecuaria, insurgiendo el problema de la tierra que se decía superado; el capitalismo burocrático, sustentado en el atraso y atado al dominio imperialista; el imperialismo, principalmente yanqui, como siempre chupándonos la sangre y aprestándose a succionarnos mas; en síntesis, la crisis general de la caduca sociedad que solo tiene una salida: la revolución, el triunfo de la guerra popular en marcha. Por otro lado, quedan clarísimos los siniestros resultados del gobierno aprista encabezado por el genocida demagogo García Perez. El 85, dijimos que el nuevo gobierno sería mas hambreador y mas genocida, hoy el hambre corroe y devora a la clase y al pueblo; y en tanto que, tomando los datos de la llamada "Comisión de pacificación" del Senado, el gobierno de Belaúnde ensangrentó el país con 5,880 muertos, el actual lo ha empapado con la sangre de 8,504 en el período del 85 al 86 y con la de 3,198, en 1989; se ha cumplido, pues, lo previsible y, concretamente, el gobierno aprista de García Pérez es el mas hambreador y mas genocida de la historia peruana El pueblo no lo olvidará jamas! todo lo que se acentúa y agrava con la indefinición electoral y la postergación del problema para la segunda vuelta. Los partidos políticos han sido violentamente remecidos por los resultados de las elecciones de abril y entran necesariamente en replanteamientos y reagrupaciones, no sólo en función de la segunda vuelta sino, principalmente, para su posterior desenvolvimiento. Durante la campaña electoral enarbolaron el "apartidismo", buscando ganar el voto de los independientes; traficaron con el desprestigio de sus propios partidos políticos y el repudio a los partidos revisionistas en Europa del Este, apuntando , en esencia y perspectiva, contra el partido del proletariado, contra el Partido, pregonando la podrida tesis de la no necesidad de partidos políticos. Recordemos que Lenin dijo: "El sin partidismo es una idea burguesa. El partidismo es una idea socialista" (léase comunista). todo es simplemente muestra de la crisis de los partidos que sustentan el viejo orden; crisis no de hoy, sino agudizada por el proceso electoral y sus resultados; crisis de los partidos que obviamente comprueba el creciente deterioro del viejo Estado Peruano. La primera vuelta ha dejado dos candidatos. Uno, maltrecho y agobiado, Vargas Llosa, del Fredemo; el arrogante pregonero del éxito personal arribista, la libertad individual y la economía de mercado, ganancioso con el premio consuelo de la primera votación con el magro 27%. Otro, catapultado e infatuado, Fujimori, de Cambio 90; el taimado y sinuoso portador del publicitario "Honradez, trabajo y tecnología", gallo de tapada del imperialismo y la reacción que trepó al segundo puesto con el 24 %. Ambos representan a la gran burguesía y el imperialismo; en el caso de Fredemo la cuestión es clara, pero en el de Cambio 90 se siembra confusión con la procedencia de clase de sus candidatos, de pequeña burguesía y burguesía media y con el ocultamiento de sus puntos programáticos, especialmente antes de la primera vuelta. Mas lo planteado por el propio Fujimori y los asesores que, contra el tiempo, preparan su plan de Gobierno: economía de mercado, ni siquiera "economía social de mercado"; reconocer la deuda externa y buscar cómo pagarla; fortalecer la banca; apoyar las exportaciones y hasta la gran minería; propiciar la inversión extranjera y la supuesta "ayuda" internacional; son todas posiciones de la gran burguesía y especialmente de una de sus facciones, la burguesía compradora que es la mayor beneficiada. Pero además, sus asesores son, casi todos formados por el imperialismo y están ligados a instituciones de la gran burguesía, aparte de haber participado en el gobierno aprista, en la IU o provenir del velasquismo; es saltante la vinculación con H. de Soto, personaje profundamente ligado al imperialismo yanqui y avalado directamente por Reagan y Bush, e investigador de la llamada "producción informal" con la que hoy todos pretenden traficar, incluidos Vargas Llosa y Fujimori. Así, tanto Fredemo como Cambio 90 son expresión política de clase de la gran burguesía. Ya la reciente Sesión del Comité Central señaló: "Cambio 90, ese movimiento dirigido por el ex-rector de la Universidad Agraria (Fujimori), es de la misma posición pero no tiene el peso de Fredemo ..."; la apreciación sobre el carácter de clase es certera, mientras el peso definitivo depende de la segunda vuelta, dada la importancia del Ejecutivo. La cuestión es que, si bien ambos centran en los intereses de la burguesía compradora, Vargas Llosa se presenta como defensor de los intereses exclusivos de esa facción; en tanto que Fujimori se presenta como defensor de los intereses de toda la gran burguesía, esto es también de la facción burocrática y, mas aún, obvio que demagógicamente, pretenda defender los intereses de la burguesía media y hasta los de todo el pueblo. Este es el fondo de clase de las posiciones de los dos candidatos que, muy personal y caudillescamente, aunque digan lo contrario, encabezan Fredemo y Cambio 90; y mientras Vargas Llosa afanosamente pretende superar esa limitación invocando al pueblo y promoviendo obras de su autodenominado "programa de apoyo social", Fujimori arma y rearma su plan a la vez que toca puertas buscando nexos y equipo para su posible gobierno. En estas circunstancias se prepara la segunda vuelta en la que el Apra, IU e IS y sus grupos y facciones juegan al mejor postor, orientándose más y más a avalar a Fujimori; el Apra, buscando posiciones importantes en el próximo gobierno; la IU, incluso, ya presentó su pliego de "condiciones" para apoyar a Cambio 90, simples puntos de regateo y mera declamación que justifiquen su electorerismo; y la IS, buscando alguito para sus capitostes. Con todo esto ya se están sentando las bases de lo que será el futuro gobierno, gane quien gane, y las contradicciones que regirán la colusión y pugna en el seno de la reacción y sus lacayos. III. EL BOICOT DESARROLLA LA TENDENCIA DEL PUEBLO CONTRA LAS ELECCIONES Y SIRVE A LA GUERRA POPULAR. Una vez más se pregona a los cuatro vientos la "derrota del terrorismo": desde el genocida demagogo, García Pérez, hasta los autoproclamados y bien pagados "senderólogos"; desde los partidos políticos de la reacción y sus capicostes hasta las sanguinarias fuerzas policiales; desde los turbios y desesperados candidatos presidenciales hasta los venales plumíferos de toda laya; al unísono, como tenía que ser se desgañitan pretendiendo vender al pueblo su supuesta y podrida "derrota de Sendero" para, en defensa de la reacción peruana especialmente de la gran burguesía y del socialimperialismo e imperialismo, yanqui, principalmente, formar opinión pública contrarrevolucionaria en beneficio del Viejo Estado y de los planes contrasubversivos de las fuerzas armadas. Una vez más su cruento sueño negro de aplastar por siempre al pueblo y aniquilar la guerra popular echa a rodar el engendro de la "derrota de Sendero" que se concretaría, según afirman sin probar nada, en fantasmas invocados como "fracaso estratégico", "primer y gran derrotado" y "división y rendición" pues, como reza su consuetudinaria mendacidad la guerra popular se habría empantanado el 89, las elecciones serían gran derrota del boicot y el Partido se estaría dividiendo y los combatientes del Ejército Guerrillero Popular rindiéndose. Comencemos por el llamado "fracaso estratégico" por el "empantanamiento del 89". Nada mejor que partir del Informe sobre "Gran Culminación del Plan Piloto!", presentado al Comité Central en junio del año pasado, una de cuyas partes transcribimos: I. ACCIONES GUERRILLERAS. PLANES Y CAMPAÑAS DURANTE NUEVE AÑOS DE GUERRA POPULAR. El proceso de forja y desenvolvimiento de 9 años de guerra popular abarca cuatro hitos: Definición, Preparación, Inicio y Desarrollo; y la guerra popular, estrictamente, se desarrolla como un proceso de saltos cualitativos a través de cuatro planes hasta hoy; planes cada vez mas amplios y elevados que expresan cómo la guerra se ha ido complejizando. El PLAN DE INICIO, cumplido a través de dos subplanes, abarca menos de un año, de mayo a julio del 80, se cumplieron 280 acciones, ese fue realmente el comienzo; y, de julio a diciembre del 80, impulsar la guerra de guerrillas, cumplió 1,062 acciones, ya se ve un salto, un crecimiento, también el tiempo fue mayor; en total 1,342 acciones. EL PLAN DE DESPLEGAR, fue ya más amplio, los planes han ido abarcando tiempos mayores y teniendo más campañas; Desplegar tuvo un plan previo: "Abrir zonas guerrilleras" que desarrolló pelotones y destacamentos en función de Bases de apoyo. Como el objetivo era desplegar la guerra, abrirla como un abanico en todo el país, se concibieron tres campañas: "Conquistar armas y medios", "Remover el campo con acciones guerrilleras" y "Batir para avanzar hacia las Bases de Apoyo", esta ultima aplicada en dos partes; abarcó dos años y cumplió 5,350 acciones. Si bien el plan anterior dio el inicio de la lucha armada, éste generó el Nuevo Poder; al termino este plan ingresaron las fuerzas armadas a combatirlos directamente (diciembre 82). Este plan fue más complejo; comienza a manejarse varias campañas como parte de un mismo plan, cada campaña especificada por la definición de una estrategia política y una estrategia militar. PLAN DE CONQUISTAR BASES, de mayo 83 a setiembre 86; primero se desenvolvieron dos campañas de "Defender, desarrollar y construir", precisamente el 83-84 que fue el momento más difícil; a las fuerzas armadas se les sofrenó con estas campañas. Este tercer plan desarrolló una campaña de gran importancia con un subplan, el del "Gran Salto" que significó superar largamente los problemas y expandir el ámbito de Cajamarca a Puno, centrando en la Sierra pero abarcando Selva y Costa. Por entonces también, la reacción pensó que nos había aniquilado y barrido la guerra popular. Conquistar abarcó 3 años, 4 meses y concretó 28,621 acciones dio las bases de apoyo y todo el sistema de bases de apoyo, zonas guerrillearas, zonas de operaciones y puntos de acción. GRAN PLAN DE DESARROLLAR BASES (GPDB), con él entramos a un proceso de gran trascendencia porque las bases de apoyo son lo medular de la guerra popular, no hay guerra popular sin bases de apoyo; el CC acordó aplicarlo primero como Plan Piloto, de diciembre 86 a mayo 89, más o menos 2 años, 8 meses con tres campañas, la IIÍ en dos partes; concretó 63,052 acciones; ha demostrado su bondad y rebasado los objetivos, ahora entramos a su aprobación definitiva. Así tenemos el total de acciones en 9 años: 98,365; contando los complementarios son más de 100,000 acciones; principalmente, el gran remate final cumplido en julio, como un segundo remate especial. Los planes son estratégicamente centralizados y tácticamente descentralizados, son Planes Estratégicos que abarcan las acciones y la construcción; se desarrollan a través de campañas, luego los planes comienzan a ser más complejos y de mayor duración, después se desarrollan subplanes o planes circunscritos dentro de los planes generales, y finalmente, al entrar al GPDB, nos planteamos aplicarlo primero como plan piloto. Cada uno tiene su estrategia política y militar. Se aprueban y aplican en lucha; los balances muestran los reajustes a hacer y sobre todo las condiciones para el siguiente plan; las calificaciones de los balances las concretamos en frases claras que permiten manejarlos con facilidad, por ejemplo Gran Culminación del Plan Piloto!. El CC sanciona Planes Estratégico-Operativos; tal como acordara el 79 la Conferencia Nacional Ampliada, planes estratégicamente centralizados que al considerar también la situación operativa establecen formas de lucha: agitación y propaganda, sabotaje, aniquilamiento selectivo y, combates guerrilleros; determinan las partes, establecen períodos y fijan cronograma. Debemos prestar siempre muy seria atención a la centralización estratégica, pues, de ella depende que actuemos todos dentro de un plan y podamos desarrollar oleadas en forma sistemática y simultánea golpeando diversas y amplias zonas, con todas las formas y medios posibles, para propinar duras y graves derrotas al enemigo. Quienes han estudiado los principios y la teoría militar del Presidente Mao, siempre resaltan que él establece un plan estratégicamente centralizado, clave que permite desarrollar la acción; aplicarlo nos ha permitido asestar duros y simultáneos golpes al enemigo en casi todo el país, de esa manera encuentra más dificultades. Debemos persistir en planes estratégicamente centralizados, sin olvidar que son tácticamente descentralizados. Aplicamos Planes Estratégico-Operativos porque éstos establecen el nexo entre la estrategia y la táctica; ya el camarada Stalin planteó ver el nexo entre lo estratégico, el conjunto y las acciones concretas. Resaltemos como hemos comenzado de "la nada", porque así nos enseñó el Presidente Mao; teniendo Partido con línea justa y correcta el problema era comenzar, pues no es problema de cuántos son sino de si quieres iniciar o no. Con la guerra popular hemos desarrollado el Partido, construido el Ejército Guerrillero Popular y plasmado el Nuevo Poder, y nuestro trabajo de masas ha dado grandes saltos cuantitativos y cualitativos; las armas se las hemos arrancado al enemigo y se está produciendo más el traspaso de armas modernas. La guerra popular nos ha traído hasta la Gran Culminación del Plan Piloto! que hemos rematado exitosa y brillantemente, así sellamos trascendentalmente el Plan Piloto del Gran Plan de Desarrollar Bases; de ello deriva la necesidad de Impulsar las Bases de Apoyo, si no concebimos así no tendría sentido haberlo cumplido. Comenzó como plan piloto porque este gran plan implicaba cambios cualitativos muy importantes; ya está probado en la práctica, su necesaria perspectiva es proseguir con Impulsar el desarrollo de las Bases de Apoyo! dentro de un nuevo GRAN PLAN DE DESARROLLAR BASES ES FUNCION DE CONQUISTAR EL PODER en todo el país. En nueve años hemos desarrollado, mediante estos planes, el EGP y el Nuevo Poder y hemos aplicado y persistiremos en que el Partido dirige la guerra popular y dirige absolutamente al ejército, pues nos guiamos por el Partido manda al fusil y jamás permitiremos que el fusil mande al Partido. También debemos persistir en que, como nos enseñara el Presidente Mao, la guerra sigue a la política; nos sujetamos a Lenin: la guerra es la continuación de la política por medios bélicos, así ha sido y seguirá siéndolo, de ahí deriva el carácter de clase de la guerra. Cuando el marxismo es negado, los comunistas tenemos que reafirmarnos más en nuestros principios. Cuando se enfrenta campañas contrarrevolucionarias como las que se dan a nivel mundial contra el marxismo-leninismo-maoísmo, como las campañas en el país contra el Partido y la guerra popular, son los momentos en que debemos aferrarnos más firmemente a los principios y ver el objetivo indeclinable al que vamos, al comunismo. Insistamos más aún hoy que Gorbachov, Teng y sus secuaces difunden que ya no puede entenderse la guerra con criterios del pasado, que ya no se puede decir que la guerra sea continuación de la política; que lo planteado por Clausewitz, refrendado por Lenin y desarrollado por el Presidente Mao es un principio que no rige hoy, según Gorbachov quien también vocifera que la guerra llevara a la desaparición de la humanidad, que la guerra no tendrá vencedores ni perdedores porque nadie sobrevivirá, siniestras posiciones que le vienen de Jruschov. Condenamos marcando a fuego esas posiciones revisionistas contra la guerra popular; nos reafirmamos persistiendo en que la guerra popular es la continuación de la política por la fuerza de las armas en servicio del proletariado y el pueblo, de sus intereses; si no fuéramos firmes en los principios y flexibles en su aplicación nos desenrumbaríamos de la guerra popular y nos despeñaríamos al revisionismo Por eso debemos persistir en el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento gonzalo, en la guerra popular y en que el Partido Comunista la dirija hasta el comunismo. Y además, destaquemos 1) la centralización; 2) planes mas complejos; 3) nuevo Gran plan de desarrollar bases en función de conquistar el Poder!; y, 4) persistir en principios de la guerra popular. CANTIDAD Y CALIDAD. Campo y ciudad. Formas de combate y paros armados. El Plan Piloto ha sido exitosamente cumplido en tres campañas; la segunda parte de la tercera campaña Gran Culminación del Plan Piloto!, cuyo balance estamos haciendo, ha concretado un incremento de 172% respecto a la primera parte, aumento muy expresivo si bien la segunda parte ha sido de mayor duración que la primera. En 9 años de guerra popular son 100,000 acciones, la cifra no incluye las acciones de los complementarios. El total de acciones de la Gran Culminación del Plan Piloto es de 32,646; y la tercera campaña, en sus dos partes, muestra un inmenso salto con relación a la segunda campaña del Plan Piloto, pues la cuadruplica pese a que sólo duro tres meses más; he ahí uno de los extraordinarios resultados del Primer Congreso del Partido. Agitación y propaganda. Es una de las cuatro formas de la guerra popular y, en consecuencia, es erróneo verla como cosa aparte; no verla como una forma de la guerra lleva a cometer yerros. Lo principal es que se desenvuelve como la más profunda campaña de agitación y propaganda que jamás partido alguno ha hecho en el país; esto es propaganda como difusión de ideas que apuntan al objetivo, y agitación como utilización de problemas concretos por los cuales las masas bregan. Estas acciones, como las demás formas, siembran revolución, guerra popular, política, ideología; hoy día siembran la necesidad de conquistar el Poder en todo el país. Así, se profundiza en las masas más hondas que en gran porcentaje no saben leer ni escribir; Engels enseñó remachar con hechos las ideas en la cabeza de los hombres, es cuestión de principio, es el hecho material el que genera el conocimiento; las cuatro formas de guerra son hechos materiales que quienes los ejecutan, militantes, combatientes y masas o los experimentan, van sufriendo la impresión y el remachamiento de la necesidad de la guerra, de conseguir objetivos políticos, de conquistar el Poder, de la necesidad de la ideología del proletariado. Así, la agitación y la propaganda profundizan en las masas mas hondas del país, remueven la mente, siembran y van remachando; tienen que ver con la real fuente de conocimiento. La agitación y la propaganda se desenvuelven como acción psicológica y guerra psicológica. Lenin decía que la propaganda nunca se pierde por más tiempo que medie entre la siembra y la cosecha y si la acción la hacemos con las armas en la mano, con acción armada que apunta a movilizar masas, ésa es la mejor escuela en que estamos forjando al pueblo en la ideología del proletariado, la política del Partido y la necesidad de la guerra popular para conquistar el Poder. Veamos su gran importancia, está ligada a ganar y formar opinión publica, al hecho de que la guerra popular va generando un espíritu de transformación en las masas como dice Julio C. Guerrero. Tiene mucha perspectiva para sembrar guerra popular, y es fundamental para generar opinión pública, imprimir la guerra popular, los objetivos políticos, la conquista del Poder, el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento gonzalo; la ideología, la política del Partido y las políticas en diversos planos, y debemos tener en cuenta que sin generar opinión pública no se conquista el Poder. Sabotajes. Siguen cumpliendo papel muy importante, golpeando duramente la economía peruana que se desenvuelve en las peores condiciones, en la más profunda crisis de nuestra historia. Sabotear la acción minera tiene mucha trascendencia porque el mayor porcentaje de ingreso de divisas proviene de esta actividad; golpea directamente al Estado peruano porque a más de crearle problemas son golpes que recibe en su propia actividad económica estatal, ejemplo, Centromín. Al mismo Estado le crea problemas, entrampamos sus planes corporativos que están enfangados pero no sólo éso sino sus "medidas sociales", a las que siempre recurren, también son golpeadas y así se va debilitando la propia acción armada contrarrevolucionaria. El sabotaje a la red eléctrica es muy importante; los últimos apagones abarcan 9 departamentos, por el norte hasta La Libertad, por el sur hasta Ica pasando por la propia capital del país, adentrándose a los departamentos de Junín, Pasco, Huánuco, Ayacucho, Huancavelica, la parte del corazón de su sistema económico, el eje mismo de su sistema administrativo que es la capital. Los apagones les están generando cada vez más problemas; "El Comercio" ha difundido que en el ultimo apagón el fluido eléctrico sólo pudo restablecerse, en Lima, 10 días después, que pretendan utilizar más centrales térmicas les implicará un gasto mayor porque el costo de esa energía es altísimo. Aparte que golpea la administración pública y los sistemas de informática de la banca, la industria también tiene serias dificultades. Repercute grandemente en las masas porque quien ve el apagón sabe cuál es la causa y las masas ven como el Estado peruano, expresando su carácter de clase, atiende primero las necesidades de la gran burguesía y pospone las del pueblo; así, las masas se van forjando criterios cada vez más claros. La gran burguesía sufre con los sabotajes de ahí la exigencia de la Sociedad de Minería y Petróleo que plantea se refuercen fuerzas armadas y policiales en las minas. Lo principal es que los efectos del sabotaje se sienten en la zona económica mas importante, más avanzada del país, en la zona económica central que es a la vez zona estratégica para reestructurar la vieja sociedad peruana, su viejo Estado. Aniquilamiento Selectivo. Está aumentando y golpeando autoridades. Nos reafirmamos en que con él se descabeza el funcionamiento del aparato estatal o se le paraliza; algunos, los reaccionarios y sus comparsas los oportunistas, dicen "cómo es posible asesinar vilmente a alcaldes electos por el pueblo", primero, debe plantearse que elección implica instrumento del sistema democrático burgués que es reaccionario, en nosotros nunca va a florecer la estupidez política de quienes hablan solamente de dictadura cuando no hay elecciones, eso podrá decir la IU y sus componentes; pero, un comunista nunca puede pensar así, pues, Estado, primero y principalmente, es dictadura de clase, y los alcaldes, los gobernadores o las autoridades burocráticas, de las CORDES o lo que fuera, son parte de ese sistema estatal, de esa estructura reaccionaria. Por otro lado, al golpear y descabezar autoridades estatales o burocráticas del nivel que sea se entorpece la marcha del Estado y más aún, se genera vacío de Poder. Uno de los problemas que tiene el Estado peruano, ya establecido por Mariátegui, es que nunca ha podido extender su poder a los puntos más recónditos del país; es un hecho que siempre la reacción se ha asentado en los puntos centrales, en ciudades y ha ido extendiendo su poder a ciudades medias, intermedias y de vez en cuando llega a pequeñas; en tanto que anexos o poblados, aldeas o aldehuelas está más allá, no sufren el constante control; es problema que está ligado a las bases semifeudales que lo sustentan. Entonces, es socavar el orden estatal y eso es bueno, sirve a desmoronarlo, porque ese vacío político queda en nuestras manos para ser cubierto y ejercer Poder, y teniendo cinco formas podemos montar cualquiera de ellas. Recordar que hay quienes dicen "el ejemplo de Vietnam es bueno" pero se olvidan que aniquilaron 13,000 autoridades; así, el aniquilamiento hecho por los vietnamitas es bueno y el que nosotros hacemos es malo, por qué? qué objetivos cumplían y cumplen ambos? socavar el orden, problema claramente establecido por Cassinello en su "Guerra de guerrillas y contraguerrillas". Combates guerrilleros. Su cantidad es grande y comienza a crecer más su porcentaje. Las dos formas de combate fundamentales, emboscada y asalto, se están desarrollando. Las emboscadas se desenvuelven, son cada vez más contundentes y se está golpeando a la fuerza armada; golpear oficiales tiene mucha importancia y ya se ve las repercusiones: las peticiones de baja en el ejército están creciendo tanto que han tenido que prohibirlas; las deserciones aumentan y comienzan choques entre ellos; aumenta más la venta de armas y ese comercio seguirá creciendo. Pero en este punto la reacción llega a los extremos del sarcasmo, la estupidez y el ridículo al decir "cobardemente están emboscando", "no dan la cara", en qué emboscada se da la cara? si la clave de la emboscada es la sorpresa; emboscar es norma para nosotros como para todo ejército, pero nosotros no nos debemos dejar emboscar ni contraemboscar. Cuando golpeamos a los militares cacarean "Barbarie!", "Brutal asesinato!"; entonces cómo vociferan "estamos en guerra" y qué papel tienen sus fuerzas armadas? Mercado Jarrin dice que son "póliza de la nación"; sí son póliza de la nación y su columna vertebral, por eso tenemos que aniquilarla total y cabalmente. Los combates guerrilleros, como los aniquilamientos, están bajando la moral de las fuerzas armadas que son tropas levadas que pelean contra su voluntad, con poca instrucción y que se les mantiene aherrojadas con férrea disciplina reaccionaria. Algunos dicen que necesitarían ejército profesional mas reducido, mejor armado con armas sofisticadas y muy bien pagado; pero eso no les sería beneficioso, sólo serviría para que acrecentáramos nuestras fuerzas y la desproporción entre ellos y nosotros, como es sabido, la norma es que cuando una guerrilla es muy desarrollada, la reacción requiere hasta una relación de más de 20 a 1, como lo demuestra la experiencia internacional; en nuestro caso, aunque no estemos muy altamente desarrollados, necesitan incrementar sus fuerzas. En segundo lugar, pueden hacerlo? no; no tienen los medios suficientes, la propia oficialidad está mal pagada y la crisis dura que vive el país no está para grandes inversiones, en consecuencia, necesitan de la ayuda exterior de las superpotencias y/o potencias imperialistas y a ellos recurren y recurrirán cada vez más. La URSS acaba de venderles helicópteros de Afganistan a precio de regalo; y EEUU les da la "ayuda militar", formándolos y dándoles medios, y es obvia su participación en la lucha contra el"narcotráfico" en las palabras y contra la guerra popular en los hechos, y tener muy presente lo ya visto sobre una posible agresión yanqui, considerando especialmente su acción en el Huallaga; recordar lo visto en la revista militar del ejército estadounidense sobre estrategia nacional, sostiene que incluso no habiendo estado de guerra declarada se desarrollan guerras subversivas, insurrecciones, acciones terroristas, narcotráfico y que esas son áreas en las cuales debe participar y combatir la fuerza armada. Así, están entrando en serios problemas con el desarrollo de los combates guerrilleros. En cuanto a calidad se está expresando un salto especialmente en combates guerrilleros; los asaltos son cada vez más importantes, ejemplo el de Uchiza que les generó hasta contradicciones internas entre fuerzas armadas y gobierno y entre fuerzas armadas y fuerzas policiales; y las sucesivas emboscadas muestran un mejor manejo de las mismas. Paro armado. Nueva modalidad de lucha; que implica todo un conjunto de acciones, tiene que manejar las cuatro formas de la guerra: agitación y propaganda, sabotaje, aniquilamiento selectivo y combates guerrilleros; y, a la vez implica movilizar una inmensa masa que vive la fuerza del Nuevo Poder, la existencia del nuevo Estado, el cuestionamiento y la negación del viejo Estado. El paro armado, MILITARMENTE hablando maneja las cuatro formas y repercute en amplísimas masas, llevando a aislar zonas y está demostrándose, además, cuán fácilmente aislable es la capital; ya desde el 79 sabemos que Lima es la capital de América Latina mas vulnerable, tenerlo en cuenta para seguirlos golpeando, y mañana cuando tengamos el Poder en todo el país. La reacción frente a los paros va a apuntar, como ya lo está haciendo, a sofrenarlos e impedirlos, a quebrarlos; llamará a falsos paros o aplicará las armas; por ejemplo en Chosica convocaron a falso paro para hacer demostración de fuerzas, para presionar, intimidar y llevar a que la masa rechace los paros armados; pero, eso no les va a ser suficiente, tendrán que entrar a la represión de los paros armados, a la respuesta militar al paro, ya no solo hacer demostración de fuerza sino quebrar los paros armados a sangre y fuego. Los paros armados también están poniendo en pindingues a los revisionistas, a la burocracia sindical, a los que cabalgan sobre las masas; ellos van a seguir oponiéndose a los paros planteando que es "una imposición autoritaria", que "no son los organismos gremiales los que los convocan"; nuestra respuesta es simple: no se trata de una acción gremial ni sindical sino de una acción militar para ir aislando, golpeando, desgastando y socavando el viejo orden para que cada vez más el pueblo vea la impotencia en que queda reducido el Estado peruano, por tanto, no discutimos una lucha reivindicativa o gremial sino desarrollamos una acción militar para socavar el orden, mostrar su impotencia, formar opinión publica y repercutir sobre más amplias masas; y eso, en perspectiva, encierra el seccionamiento ya del país en forma más amplia lo que tendrá que ver con otro problema del plan que pondremos en marcha, el de pasar de la guerra de guerrillas a la guerra de movimientos. El trabajo militar se desenvuelve en campo y ciudad siguiendo el camino de cercar las ciudades desde el campo, y nuestra condición específica es que también movemos ciudades pero las cuatro formas de guerra se desenvuelven principalmente en el campo y complementariamente en ciudades; y eso va a seguir desenvolviéndose y más, pensar que el paro armado se desenvuelve sobre todo en ciudades, por ejemplo el paro del Centro implicó ciudades importantes como Huancayo, Jauja, Oroya, Huánuco, Cerro de Pasco, o sea, capitales departamentales y provinciales. Es bueno, importantísimo y principal el trabajo en el campo, pero el avance del trabajo en las ciudades es una necesidad que irá creciendo y debemos preocuparnos por ese tipo de trabajo. En síntesis, en cuanto calidad y cantidad podemos decir que cualitativa y cuantitativamente la guerra popular se está desenvolviendo vigorosa y pujante; persistimos en el camino de cercar las ciudades desde el campo, campo es principal y los cercos comienzan ya a estrecharse más cada vez; así pues, la guerra popular ha dado un gran salto en lo cualitativo y cuantitativo en este Plan Piloto y se gesta un más trascendental avance. PLAN DE DESARROLLO ESTRATEGlCO. La investigación muestra que todos se reafirman en que están bien establecidos los ejes, subejes, direcciones y líneas de movimientos y cada vez se los maneja más y mejor, de ahí deriva que en este momento no tendríamos la necesidad de cambiarlos; incluso sería inconveniente variarlos en este momento. La reacción entra en fuertes dificultades y contradicciones; el problema de las elecciones municipales y generales, las dos vueltas y la nueva administración los lleva a colusión y pugna pero toda colusión se sustenta en la pugna y esta revienta en cualquier momento; estas situaciones, de pugna de ruptura que incluso puede llegar hasta el golpe de estado, en este momento de por lo mínimo dos años por delante, nos lleva a aplicar avance audaz, por eso no es conveniente variar los planes y debemos esforzarnos en manejarlos mejor. No olvidar que dentro del plan de desarrollo estratégico se desenvuelve todo nuestro trabajo partidario, sólo que el Partido dirigiéndolo todo. AMBITO. Queda más claro que estamos desenvolviéndonos en la Sierra del país. Históricamente el Perú ha tenido un eje de vertebración: la sierra centro-sur, así fue cuando los incas; en la guerra con Chile fue la parte que más se defendió y donde pueden replegarse fuerzas ante un ataque extranjero. También nos desenvolvemos en la ceja de selva, zona que está mostrando buenas condiciones de masas; allí la mayoría esta ligada al cultivo de coca, la del Alto Huallaga es la más grande zona productora de América latina, más que las de Colombia y Bolivia, por esta razón, además, le preocupa mucho a la reacción. Pero nosotros nos estamos desenvolviendo asimismo en la ceja de selva del Apurimac y hay que resaltar la penetración en la región del Centro. La perspectiva es abarcar la ceja de selva. El ámbito también se está extendiendo en la Costa; de las cabeceras de Costa se penetra a la Sierra, ejemplos el Norte medio y el Sur medio. Esto nos lleva a desarrollar las otras zonas costeras; a desarrollar el trabajo de la costa del Norte y Sur del país. Aparte desarrollar más las ciudades de la Sierra. Es muy importante preocuparse por las ciudades, tiene que ver con la insurrección; y de no prepararse ésta para la toma de las ciudades, a cumplirse en la parte final de la guerra popular, principalmente de las grandes, se retrasaría la toma del Poder en todo el país. El trabajo en Lima debe desarrollarse más teniendo en cuenta que es la capital. También el ámbito nos permite desarrollar incursiones, las que facilitan desarrollar el ámbito o replegarse ante las ofensivas enemigas. En síntesis, el ámbito está mostrando su expansión y la interrelación entre los comités, asimismo la capacidad de incursión que hay entre unos y otros; en consecuencia, la perspectiva del ámbito es vertebrar toda la guerra popular. Con el desarrollo de la guerra habrá que redelimitar los comités, sobre todo conforme se desarrolle el EGP. Así, el AMBITO muestra cómo se esta expandiendo y se da un proceso de vertebración en el que está cuajando el cerco a las ciudades, no solo de la capital sino de todas las demás." Hasta aquí el informe parcialmente transcrito. Pero consideremos el siguiente cuadro: PLANES Y CAMPANAS DE LA GUERRA POPULAR TERCER HITO: INICIO DE LA GUERRA POPULAR I. PLAN DE INICIO (MAYO-DICIEMBRE 1980) 1,342 1,342 INICIAR LA LUCHA ARMADA (ILA) IMPULSAR LA GUERRA DE GUERRILLAS CUARTO HITO: DESARROLLO DE LA GUERRA DE GUERRILLAS II. PLAN DE DESPLEGAR (ENERO 81-ENERO 83) 5,350 ABRIR ZONAS GUERRILLERAS I CAMPAÑA. CONQUISTAR ARMAS Y MEDIOS 5,350 II CAMPAÑA. REMOVER EL CAMPO CON ACCIONES GUERRILLERAS III CAMPAÑA. BATIR PARA AVANZAR HACIA LAS BASES DE APOYO BATIR I BATIR II III. PLAN DE CONQUISTAR BASES (MAYO 83-SET. 86) 28,621 DEFENDER, DESARROLLAR Y CONSTRUIR I DEFENDER, DESARROLLAR Y CONSTRUIR II GRAN SALTO I CAMPAÑA. INICIAR EL GRAN SALTO! II CAMPAÑA. DESARROLLAR EL GRAN SALTO! III CAMPAÑA. DESARROLLAR LA GUERRA POPULAR! IV CAMPAÑA. lra. parte REMATAR EL GRAN SALTO! 2da. parte REMATAR EL GRAN SALTO CON SELLO DE ORO! IV. GRAN PLAN DE DESARROLLAR BASES. PLAN PILOTO (DICIEMBRE 1986-MAYO 1989. I CAMPAÑA. PLAN PILOTO DE DESARROLLAR BASES II CAMPAÑA. CULMINAR BRILLANTEMENTE ESTABLECIENDO UN HITO HISTÓRICO! III CAMPAÑA. lra. parte CONSOLIDAR Y PRINCIPALMENTE DESARROLLAR LA BRILLANTE CULMINACIÓN! 2da. parte GRAN CULMINACIÓN DEL PLAN PILOTO! 63,052 V. GRAN PLAN DE DESARROLLAR BASES EN FUNCIÓN DE CONQUISTAR EL PODER (AGOSTO 89-) I CAMPAÑA. IMPULSAR EL DESARROLLO DE LAS BASES DE APOYO En lo que va de su aplicación, hasta fines del 89 23,090 TOTAL DE ACCIONES 121,455 NOTA. Hasta el momento se han especificado cuatro hitos en el desarrollo de la guerra popular: PRIMERO: DEFlNlCI0N, cuyo centro es el IX Pleno del Comité Central, junio del 79. SEGUNDO: PREPARACIÓN, centrado en la Conferencia Nacional Ampliada, noviembre 79. Además, este cuadro no considera las acciones cumplidas en los complementarios. Demuestra palmariamente el inmenso avance y gran desarrollo de la guerra popular, al menos que alguien pretendiera sostener el absurdo de que hay cambio, salto cuantitativo pero no cualitativo. Se ve clara y contundentemente como cada plan posterior implica un salto más alto que el anterior. Si comparamos los planes III y IV, no obstante que aquél abarco tres años y cuatro meses y éste sólo dos años y seis meses, el segundo mas que duplica al primero. Por otro lado, si consideramos la aplicación del nuevo GRAN PLAN DE DESARROLLAR BASES EN FUNCIÓN DE CONQUISTAR EL PODER iniciado recién en agosto del 89, con la "I Campaña de Impulsar el Desarrollo de las Bases de Apoyo", en sus cuatro meses de ejecución, hasta fines del año pasado, ha concretado 23,090 acciones GUERRILLERAS; en consecuencia, considerando que cuatro meses es la mitad del tiempo de la Gran Culminación del Plan Pilotos!, segunda parte de la campaña anterior, el nuevo gran Plan ya ha logrado el notable incremento del 41.7% en sus acciones GUERRILLERAS; aumento cuya importancia se comprendemejor si se tiene en cuenta el altísimo incremento que implicó esa culminación del Plan Piloto. Y si comparamos resultados, las 23,090 acciones GUERRILLERAS implica el 19% del total de acciones hasta diciembre del 89; al 23.5% de las cumplidas en nueve años; y el 36.6% de todo el Plan Piloto, En cuatro meses el 37% de lo antes conquistado en treinta!. Así, pues, el nuevo Gran Plan ha comenzado resuelta y victoriosamente. Finalmente, si centramos en el año 89, el año del pregonado y supuesto "estancamiento"; considerando desde octubre 88 a diciembre 89, período en el cual se registran las 32,646 acciones de la aludida Culminación y las 23,090 del nuevo Gran Plan, tenemos un total de 55,736 acciones GUERRILLERAS; esto es nada menos que el 46% de todas las acciones cumplidas He ahí la gran "derrota de Sendero"! En cuanto acciones concretas en este período, baste destacar las siguientes. Paro armado regional de Ayacucho, de una semana de duración, en, febrero del 89; en tanto se destruían nucleamientos campesinos controlados por las fuerzas armadas. Cosecha en Huaycán, en la propia capital en el mismo mes; se movilizan dos mil personas con el apoyo del EGP que aniquila al administrador y capataz del Fundo atacado; las masas se apoderan de la producción mediante reparto. Asalto a la base policial antisubversiva DOES-6 de Uchiza, 27 de marzo; la base fue tomada, rindiéndose su contingente: 48, entre ellos 15 heridos, 3 oficiales muertos y 7 policías. Toma de Pampa Cangallo, se mantuvo a raya a 600 soldados que no pudieron salir de su cuartel mientras se tomaba el pueblo quedando la población bajo control del EGP; en abril. Movilización del Comité de Familiares de prisioneros de guerra y desaparecidos, en Lima, contra el ministerio de Justicia, con agitación y sabotaje sofrenó planes de represión a familiares, abogados y genocidio a prisioneros; abril. Asalto a los puestos policiales de Yauricocha, Alto Larán y Clemente, en Sur Medio; también en abril. Paro armado regional del Centro en departamentos le Junín, Cerro de Pasco y Huánuco; 10 al 12 de mayo. Paro armado de Cañete, parte sur del departamento de Lima, los dos primeros días de junio y el 7, asalto al puesto policial de Ambar, parte norte del departamento de Lima. Emboscada al carro de transporte de la escolta presidencial, Húsares de Junín , en pleno centro de la capital del país; 7 soldados muertos y 29 heridos; 3 de junio. También en el mismo mes, paros armados: del 5 al 7 en Huancavelica; el 7 en Huaraz; y del 15 al 20 en el Alto Huallaga. Emboscada al ejército, como parte del paro, el 19 de junio, en Aguaytía; convoy de 6 camiones, en la carretera F. Basadre; fueron aniquilados un mayor (segundo jefe del comando político-militar de Ucayali), un teniente y 14 soldados, además 10 heridos, total 26 bajas. En el mes de julio, paros armados: el 14 en Huamachuco; el 20 en Lima, contra el hambre y la represión, organizado por el MRDP; y del 27 al 29 en Ayacucho; así como sabotaje a ómnibus de soviéticos que depredan riqueza marina del país, 33 heridos, el día 5; y emboscada a patrulla policial del Does, en Azángaro, departamento de Puno, aniquilados un comandante, un capitán, un teniente y tres subalternos, el día 6; y asalto al puesto policial en Pacarán, Cañete, se destruyo el puesto y se voló el puente que une Pacarán en Yauyos y Huancayo. Destrucción del Cuartel de Madre Mía, 150 soldados (120 de infantería y 30 de ingeniería), en el valle del Alto Huallaga; el asalto se produjo el 27 de julio, el día anterior al aniversario nacional; tras duro combate el Ejército Guerrillero Popular destruyó cabal y completamente el cuartel del ejército reaccionario, causándole 64 bajas (39 muertos y 25 heridos) y conquistó buena cantidad de pertrechos. También en esa parte del año pasado se asaltó el puesto policial de Cotahuasi, en el departamento de Arequipa; y el puesto policial de la hidroeléctrica de Huancaray, en Apurimac. Así como en el departamento de Huancavelica se aniquiló a mesnadas de Pachaclla, y se cumplieron numerosas tomas de pueblos en el eje principal de la guerra popular en la zona, generando vació de Poder. Y, emboscada al ejército en Milano, Alto Huallaga; asalto al puesto policial de Julcán, en Otuzco, departamento de La Libertad y al de Cajacay en el departamento de Ancash. Ahora bien, si enfocamos el desarrollo de la guerra popular por las regiones o zonas donde se desarrolla tenemos el siguiente panorama, centrando en la I Campaña de Impulsar. comienzo del nuevo Gran Plan. Ayacucho, la constante y heroica fragua. Si consideramos de Pampa Cangallo al sur del departamento; en octubre se cumplió una serie de acciones contra la fuerza armada y la microrregión; la central fue el hostigamiento y zozobra al cuartel de Vilcashuamán, y el sabotaje a las instalaciones estatales, la propaganda, agitación y movilización en el pueblo cuyo control tomó el EGP; asimismo el hostigamiento y la zozobra golpeó las bases antiguerrilleras de Pampa Cangallo, Cangallo, Puente Matero, Accomarca, Ocros, Cayara, Hualla, Canaria, Huancapi y Chipao. Ante la gran repercusión en las masas, especialmente en las que bajo presión integran las mesnadas, que dejaron de rondar y vigilar, el ejército reaccionó desesperadamente imponiendo el toque de queda, reprimiendo, apresando y rapando cabezas. Las elecciones municipales de noviembre fueron enfrentadas con el paro armado del 5 al 15, qué ha demostrado ser una gran arma para entrabar, boicotear e impedir las elecciones donde sea posible no había candidatos en Concepción, Carhuanca y Huambalpa, Andamarca y Cabana; en Huancapi, Hualla, Colca y Cayora no se sabía quiénes eran; en Vilcashuamán renunciaron todos con excepción de un miembro de IU; en tanto que, dando prueba fehaciente de lo que es la democracia burguesa en Carhuanca y Huambalpa, el mismo día de las elecciones, los sinchis cogieron a dos campesinos en la plaza pública, les informaron: "Ustedes son los candidatos" y a golpes los hicieron aceptar. Así es su democracia y ésas sus elecciones, testigo es el pueblo; pero tampoco lograran su objetivo, la inmensa mayoría no votó. Relacionada con el proceso está la contundente emboscada del 13 a convoy del ejército, en Andamarca, donde se aniquiló a diez soldados y a un funcionario del Jurado electoral. Y aunque parcialmente, la Pequeña Marcha que movilizando cientos de personas, armadas con diferentes medios y portando banderas rojas con hoz y martillo, banderolas y afiches de la guerra popular, recorrió muchos pueblos y aldeas como una pequeña maquina sembradora de Nuevo Poder, desarrollando acciones y removiendo profundamente a las masas. Por otro lado, se descargan duros golpes aniquilando a los recalcitrantes cabezas negras que acaudillan las mesnadas controladas por las fuerzas armadas, como en Huamanquiquia y Sacsamarca, provincia de Huancasancos. A la vez que la guerra se extiende a las cabeceras de Costa con tomas de pueblos como la de Ocaña y la destrucción del puesto policial, en las cercanías de la carretera a Nazca. Considerando la parte norte del departamento de Ayacucho, las provincias de Huamanga, Huanta y La Mar. Las elecciones municipales revestían, obviamente, mayor importancia. En la ciudad de Huanta, la capital provincial, no hubo candidatos, pues todos renunciaron; en Ayacucho, capital departamental, los candidatos renunciaron pero la renuncia del candidato aprista (un ex-belaundista desconocido en Ayacucho, que no estuvo presente ni el día de las elecciones), fue retenida por el apra; mientras la renuncia del candidato de la IU, trasgrediendo las normas electorales, fue retirada con la oposición de su comparsa de lista que persistió en renunciar, desconociéndolo como candidato. Aplicando el boicot, como en otras partes, el Partido llevó adelante el paro armado del 11 al 13 de noviembre en toda la zona; desde el 10 se paralizó el transporte, bloqueando y haciendo zanjas en las carreteras; las masas, a través de las emisoras radiales, incluso, pedían la suspensión del proceso electoral. La fuerza armada, el comando político-militar, respondió aplicando el toque de queda, de 6 a 6, de seis de la tarde a seis de la mañana; esto al día siguiente del ataque del 9, toma simultánea de Ayacucho y Huanta por el EGP; decretando "suspensión de las actividades públicas hasta el 13"; con grandes redadas y amenazas de apresamiento y sometimiento a la justicia, para su sanción drástica, a quienes no votaran, según las disposiciones radialmente propaladas. Ayacucho amaneció el 12 en medio de explosiones y bajo un inmenso despliegue de fuerzas militares y policiales. El genocida demagogo, Garcia Pérez, llegó el mismo día para escenificar el "triunfo de la democracia en Ayacucho"; dio órdenes y contraórdenes como le vino en gana, según su uso cotidiano; realizó un mitin de apristas, mesnadas y soldados vestidos de civil donde bullante histriónico ególatra sancionó su "victoria" personal y la "derrota de Sendero", el triunfante y ejemplar proceso electoral" y el "fracaso del boicot "Pero ni en Huanta hubo elecciones ni Ayacucho eligió alcalde, porque el "izquierdaunidista" escogido por unos cuantos se esfumo por los mas de dos tercios de votos blancos y nulos de la; exigua minoría que votó; éste fue, también, el triunfo que desorbitada celebró la IU desgañitándose con el "ganamos en Ayacucho". A fin de cuentas, hasta el propio Jurado Nacional de Elecciones (JNE) tuvo que declarar la nulidad de la elección. Todo esto aparte de que, como el 85, en algunos puntos las masas a patadas fueron obligadas a votar, tal en San Jose; o las libretas fueron simplemente selladas y los soldado fraguaban los votos, así en Pischa y Acocro; mientras en Llochegua y Churcampa la votación se efectuó en los cuarteles. En Julcamarca el EGP tomó el pueblo y conteniendo a la base antiguerrillera incendio el concejo municipal e impidió las elecciones; así como en Acocro obligo a suspenderlas y en Pacaycasa igualmente, donde los soldados abandonaron la protección de las mesas, dejando solo a su teniente. En síntesis, el boicot fue un brillante triunfo político; el ausentismo fue altamente masivo y hasta la minoría que voto lo hizo mayoritariamente en blanco o nulo. Pero no obstante la importancia del boicot, parte de la guerra popular, una cuestión básica del desarrollo de esta se ve en el gran avance del trabajo en ciudades como Ayacucho y Huanta; la toma de ambas, sitiandolas, el 9 de noviembre, aplicando contención para impedir la salida masiva de las fuerzas armadas y policiales de sus cuarteles y obligando a encerrarse como ratas a los mercenarios extranjeros en sus cubiles del aeropuerto, es una muestra palpable de este avance. Asimismo la incursión a Cooperación Popular en Ayacucho contra el candidato aprista, aniquilando a su protección policial, en octubre; y el ataque a la jefatura departamental de la policía técnica, aniquilando a un teniente y un cabo y dos heridos, en el mismo mes; o los coches bomba, uno a la dirección de educación y otro a treinta metros; de la plaza de armas, en octubre y diciembre, respectivamente. Sin embargo, lo principal y trascendente en el desarrollo de la guerra popular sigue dándose en el campo: la destrucción de las mesnadas en cinco pueblos y acabando con cincuenta de sus defensores recalcitrantes; la demolición de los nucleamientos de Vicus y Huayllay y el aniquilamiento de sus cabezas negras, nucleamientos organizados y sostenidos por las fuerzas armadas contra la voluntad de las masa del campesinado pobre especialmente; la emboscada contra mesnadas en Pichihuilca a un carro del ejército, en Palpapampa trescientos metros de su base antiguerrillera en noviembre y diciembre, respectivamente, y reiterados golpes a la infantería de marina lo muestran con toda claridad. Apurimac también es zona de dura e intensa confrontación. Lo prueban los sabotajes y arrasamientos de instalaciones, locales o propiedad de concejos, microrregiones, cooperación popular, Entel Perú, ministerio de Agricultura, registro electoral, Sierra Centro-Sur, registro militar, Banco de la Nación y antenas de televisión; o los aniquilamientos selectivos de soplones, infiltrados, abigeos, promotores de mesnadas y espías; o los asaltos, emboscadas y múltiples enfrentamientos registrados. Todo esto junto a centenares de agitaciones y movilizaciones y a decenas de tomas de pueblos. Allí el Estado actúa con enconada represión y las fuerzas armadas y policiales con creciente virulencia sanguinaria; una muestra son las correrías genocidas que el ejército aplica, en esta zona como en otras; una de las recientes, de abril, es la que partiendo de la provincia apurimeña de Antabamba llegó hasta el Cuzco, robando, quemando y asesinando en las comunidades campesinas que atravesaba, como fue denunciado en el Parlamento, claro que, como siempre, infructuosamente. Pero ante la matanza se yerguen vigorosas las acciones GUERRILLERAS que en esas tierras impulsan la guerra popular; tal el asalto al puesto policial de Vilcabamba, provincia de Grau, el 14 de mayo del 89, cayendo muertos un policía, un teniente y varios heridos, y se generó un apagón en siete distritos; esta es la verdad y no la superchería de la prensa reaccionaria sobre "15 terroristas fueron abatidos en alrededores de Cotabambas". O la emboscada al ejército en Caraybamba, el 5 de octubre; se aniquilo tres soldados y un teniente, e hirió a siete soldados. Cerca a esta zona se dan las acciones de la provincia de Caravelí del departamento de Arequipa; así la toma de Caraveli el primero de diciembre del 89, donde se saboteó y destruyeron los dos puestos policiales, el registro militar, el Banco de la Nación, la planta eléctrica, la antena de televisión Y el del Ministerio de Agricultura; las viejas autoridades fugaron refugiándose en el puerto de Atico. Y también la toma de Pausa, capital de la provincia Páucar del Sara-Sara, en el departamento de Ayacucho, el 2 de diciembre; se movilizó a las masas, izándose banderas y pintándose consignas revolucionarias; aparte de sabotaje e incendio del concejo, el puesto policial, registro electoral y locales de Ministerio Agricultura, Entel y de Sierra Centro-Sur; este golpe contundente sirvió, además, para destruir el material electoral y, así, se impidieron las elecciones en todo la provincia. Y claro esta, la justa política de fuga aplicada en la cárcel de Caraveli, en diciembre. Huancavelica también tiene en su haber demoledoras emboscadas, el 23 de octubre, asestó otra al ejército en Lachoj; una mina voló dos camiones de un comboy de tres tras la voladura un contundente ataque; y luego un violento combate con los ocho soldados que al mando de un teniente quedaron ha cierta distancia en el tercer camión, de los cuales tres, asimismo, fueron aniquilados; este convoy iba muy fuertemente armado pues llevaba jefes a sus bases antiguerrilleras; los periódicos del hecho, como siempre, minimizando: "fueron aniquilados cuatro oficiales y nueve soldados", cuando realmente se aniquiló a 36. Mas a esta acción se suman 106 enfrentamientos de Santa Inés y Chupamarca y el hostigamiento de Castrovirreyna añadiendo once muertos al total. Así al reaccionario ejército peruano se le aniquilaron 47 soldados, entre ellos 10 oficiales, sin contar heridos que, obviamente, elevan las bajas. Su furiosa respuesta, impotente por no poder golpear a sus emboscadores: se ceba en la masa inerme; en Santa Ana, el 25 de octubre, torturan campesinos preguntando por los guerrilleros y asesinan a cinco; en el mismo lugar, el 28, queman choza de campesino y lo asesinan por ser tío de un combatiente; y en Lachoj, setenta soldados se ubican el 28 en la carretera y deteniendo a quien pasa roban, torturan y violan a las mujeres; y el 31 asesinan otros cuatro en Pucara. El proceso electoral, aquí también, ha sido una enconada lucha de clases armada; la reacción ha montado sus elecciones sustentándolas en sus fuerzas armadas principalmente, por ello trajo mas soldados de Huancayo e infantes de marina del Callao; desde Huancavelica y Ticrapo se han desplazado al campo para hacer campana por las elecciones llamando a votar, amenazando con fusilar a quienes no lo hicieran. Parte de su control fue establecer salvoconducto para viajar; cinco días antes de las elecciones pararon el tren que salía de Huancavelica detuvieron cuatrocientos pasajeros a quienes robaron, torturaron y pasearon por la ciudad mientras vociferaban que lo mismo les pasaría a todos los que no sacaron salvo conducto. En la misma ciudad los soldados hicieron su guerra contra las pintas del Partido y las banderas rojas que arrastraban por las calles fusilándolas, cosechando, en contra de lo que buscaban, la burla del pueblo; pero, además, los allanamientos cotidianos se incrementaron aumentando los asesinados y desaparecidos (entre estos 13 alumnos del Instituto Pedagógico, objeto de reiterados allanamientos); a lo que se le añadió la presión sobre las masas, así los profesores antes te cobrar deben acudir a las charlas del jefe político-militar; y volanteo desde helicóptero: "campesino amigo rechaza al terruco porque es tu enemigo" (cualquier parecido, no es simple coincidencia!). Pero frente a esta campaña siniestra la guerra popular se enfrentó audaz y resueltamente; y como muestra del avance en la propia capital departamental, el 8 de octubre se saboteo el cuartel del ejército, la comisaria y el cafetín de la policía; hubo apagón y lo más importante, se inicia agitación en el cine, la masa sale a la calle y se formo un coro creciente que se torno masa rugiente en la plaza de armas coreando vivas al Presidente Gonzalo, al partido, a la guerra popular y No votar!, en medio de la oscuridad los dinamitazos y la balacera; soldados ni policías salieron y la ciudad la controló el EGP. El 12, día de las elecciones, transcurrió entre el paro y los apagones diarios del 11 al 13 de noviembre; amaneció con banderas rojas con hoz y martillo y violentas detonaciones; fue una ciudad muerta hasta las once del día, hora en que los soldados allanaron domicilios buscando presidentes y miembros de mesas, sacando por la fuerza a la gente para que vote; pero esto solo sirvió para que menos del 40% de los electores de la ciudad misma votaran, pero de los barrios y aledaños no concurrieron a votar, acataron el paro, y además las carreteras de acceso a la ciudad fueron bloqueadas. Si esto ocurrió en la ciudad capital, en las menores y en el campo la cuestión fue peor para la reacción; pues, aparte de no haber candidatos en muchos lugares, no votar era el sentimiento y deseo de las masas ya que, como su experiencia les enseña, nada se logra votando. He aquí, también, un buen ejemplo de cómo usar las elecciones revolucionariamente. La Región del Centro es el corazón del proceso económico de la sociedad peruana cuyo vértice es Lima y es clave dentro del plan geopolítico del Estado; considerando esta realidad se comprende mejor la acción y desarrollo de la guerra popular en esta región. Allí la lucha es intensamente creciente y muestra características más saltantes que en otros lugares; así, los sabotajes son tremendamente contundentes como los arrasamientos contra las Sais Túpac Amaru y Ramón Castilla, o la piscigranja los Andes, o las oficinas y campamento del proyecto Pichis-Palcazu; y entre éstos, de caballos de la Sais Tupac Amaru utilizados por el ejército; y sabotaje a la empresa agrícola de Romero, gonfalonero del capitalismo burocrático y de la gran burguesía, en Chanchamayo, arrasándole 1O,OOO sacos de café. grandes sabotajes contra las empresas estatales; a Enafer, voladura de locomotoras o descarrilamientos como los de Yauli y chucchis Centromin, sabotajes en Casapalca y Morococho, en ésta paralizando concentradora, o en Oroya paralizando la refinería y la fundición, aparte de los descarrilamientos de trenes cargados de minerales; a Electroperú, derribamiento de torres, entre ellas 59 en el paro armado de noviembre, generando así grandes y extensos apagones. Además, voladura de puentes, cuatro en Mucllo, Comas y carretera Concepción-Satipo. Mas no solamente se golpea la minería estatal, también son golpeados otros centros como Allpamina, propiedad de R. Gubbins, connotado miembro de la gran burguesía. Aparte de lo anterior, son de suma importancia las cosechas de ganado e invasiones de tierras, 8,200 ovinos y 10,300 hectáreas, todo para las masas, para el campesinado pobre principalmente. Así la base económica de la sociedad peruana es seriamente golpeada y las bases del Viejo Estado hondamente socavadas en la región, como en ótras. Es a su vez trascendente cómo la guerra popular penetra en la ceja de la selva central desenvolviéndose en las provincias de Tarma, Chanchamayo y Satipo; a la vez que potencia la lucha de clases en Huancayo, la capital departamental, cuyas muestras innegables son las movilizaciones de cinco mil secundarios en julio y quince mil estudiantes en octubre; a más de los aniquilamientos selectivos de autoridades y candidatos que estremecen toda la región (en agosto, en Tarma, solo quedaba el subprefecto como autoridad civil; mientras en Huancayo se aniquiló al subprefecto y al teniente-alcalde electo, y en Concepción al alcalde provincial); y resaltar cómo se eleva la lucha desarrollando emboscada al tren de Centromin y Enafer. En cuanto a las elecciones municipales, para impulsarlas y controlarlas trajeron tropas de las tres armas de Lima, Trujillo, Iquitos y Tacna; desencadenaron genocidio electorero, chantaje y guerra psicológica desplazando miles de soldados y policías de sus fuerzas represivas. El Partido, allí también, aplicó el paro armado del 11 al 13 en toda la región; fue un rotundo triunfo, pues las masas lo acataron, especialmente en Junín y Pasco. La reacción por la fuerza pretendió romper el paro y obligar a votar, por eso desde el día anterior a las elecciones, sobre todo en los barrios marginales de las ciudades más grandes, comenzó a arrear a las masas como ganado; pero fracasaron en su intento de lograr amplia concurrencia, el ausentismo fue masivo; y pese al conchave de revisionistas, oportunistas y reaccionarios las elecciones tuvieron que celebrarlas sólo en capitales departamentales y provinciales. La Región del Huallaga y sobre todo el Alto Huallaga es estratégica y de importancia mayor cada día; no sólo por sus ingentes riquezas potenciales en particular, cuya depredación hace años proyectan el BM, el BID y empresas imperialistas coludidos con la gran burguesía y el Estado peruano; sino, principalmente, por la pujanza con que en ella se desarrolla la guerra popular. La contundencia y avance te ésta se ve nítidamente en los duros golpes propinados a las fuerzas armadas reaccionarias, como la destrucción del cuartel de Madre Mia, del ejército; a ellos siguen sumándose múltiples emboscadas, entre las cuales destacan, en la segunda parte del 89, al ejército, nuevamente, aniquilándole un teniente y siete soldados, aparte de cuatro heridos y la rendición de tres, en el trayecto Uchiza-Progreso; y a la policía en Villa Palma, con aniquilamiento de seis policías y dos heridos; ambas en setiembre. Y, en octubre, emboscada contra convoy del ejército, con 35 efectivos de los cuales 1 oficial y 4 soldados murieron, quedando 12 heridos. Acciones guerrilleras que, dadas las condiciones de su desenvolvimiento, incrementan considerablemente el aniquilamiento contra autoridades, soplones, infiltrados, espías y enemigos de toda ralea. En torno a las elecciones, como en todo el país, arreciaron estas acciones contra autoridades municipales y candidatos especialmente, paralela a una intensa campaña entre las masas llamando a no votar; todo lo que, pese a la sangrienta represión genocida electorera, no pudo impedir un inmenso ausentismo. Por otro lado, es de substantiva importancia para revolución y contrarrevolución (riesgo para esta), la repercusión cada día mayor, de la guerra popular en zonas colindantes del norte de San Martín, todo Huanuco y Ucayali; obviamente, esta perspectiva, como la de todo el país, acrecienta las pesadillas de la reacción remeciendo más su sueño sobresaltado de bestia acosada. Pero la lucha, allí, también golpea justiciera al propio genocida demagogo, a Garcia Perez, arrasando las ganaderías "Acuario" y "Mi sueño" de su propiedad, ubicadas en el Km. 35 de la carretera Federico Basadre y en el Km. 7 de la carretera hacia Nueva Requena; atacadas el 24 de mayo y el 5 de junio del 89, repartiéndose a las masas, (participaron más de setecientas personas), 188 reses y 50 becerros, 6 caballos, 15 lechones, etc.; y destruyéndose calamina, decenas de cilindros de petróleo y aceite, diez tractores, tres motores de luz (grandes), etc. Claro esta, no es nada frente al inmenso daño hecho por este protervo personaje; pero del lobo un pelo, en tanto; un día, el pueblo hará justicia. La situación de la Región del Huallaga plantea en problema fundamental de la intervención del imperialismo yanqui; esta cuestión encierra en perspectiva que la contradicción nación-imperialismo devenga principal, imprimiendo un cambio sustancial al desarrollo de la guerra popular en el Perú. En la revista del ejército de los Estados Unidos se dice: "Finalmente, y más gravemente, Estados Unidos se enfrenta a un aspecto de la insurgencia en Latinoamérica que ofrece la mayor amenaza pero una que quizás aún pueda proveernos del arma con la cual podremos recobrar la superioridad moral que al parecer hemos perdido. Hay una alianza entre algunos narcotraficantes y algunos insurgentes. Varios países en Latinoamérica se enfrentan a la corrupción de sus gobernantes y oficiales militares. Estos países se esfuerzan por tratar el problema con apoyo inseguro de los Estados Unidos y con variables grados de éxito. los dólares ganados por los narcotraficantes se entregan a las cajas de ciertos guerrilleros o, posiblemente en forma de armas y abastecimientos, a las manos de la guerrilla. Una solidificación en la percepción del público y en el Congreso de esta conexión conducirá el necesario apoyo para contrarrestar a los terroristas guerrilleros/ narcotraficantes en este hemisferio. Seria bastante fácil generar tal apoyo una vez probada la conexión y declarada una guerra total por la Autoridad de Mando Nacional. El congreso tendría dificultad en impedir el apoyo para nuestros aliados con el entrenamiento, asesoramiento, y asistencia de seguridad necesarios para cumplir con la misión. los grupos religiosos y académicos que van apoyado incansablemente a la insurgencia en latinoamérica se verían en una posición moral indefensible. Sobre todo, tendríamos una posición moral intachable desde la cual lanzar un esfuerzo ofensivo coordinado para el cual dispondríamos de los recursos del Departamento de Defensa y los de otras fuentes. La reciente operación en Bolivia es un primer paso. En lugar de responder defensivamente a cada insurgencia según el caso individual, podríamos tomar acciones de concierto con nuestros aliados. En lugar de sumergirnos en el enredo legislativo y los constreñimientos financieros que caracterizan nuestra postura de asistencia de seguridad, podríamos responder con la mayor presteza a la amenaza. En lugar de debatir cada amenaza distinta, podemos empezar a percibir al hemisferio como una entidad y por fin llegar a desarrollar la visión que mucho nos hace falta." (Military Review, Edición Hispanoamericana, mayo 1987; págs. 49 a 51). Así, plantea que el llamado "narcoterrorismo" es un "arma para recobrar superioridad moral" del imperialismo yanqui, que le dota de "posición moral para ofensiva coordinada y le proporciona visión hemisférica" de la cual carece. Estos criterios, obviamente mas desarrollados, guían la política yanqui; y vemos muy claramente cuan siniestros son los planes que encierra infamar de "narcoterrorismo" a la guerra popular y a quien sirve; y a donde apunta el Viejo Estado, la reacción, el revisionismo, los oportunistas y sus lacayos de toda ralea cuando desenvuelven desde hace años su archirreaccionaria campaña de imputar y llamar "narcoterrorismo" a la guerra popular. Simple y llanamente promover y apoyar la intervención y agresión del imperialismo yanqui, sirviendo y defendiendo sus intereses, así como los de la reacción peruana. Por esto, debemos desenmascarar mas la negra esencia contrarrevolucionaria de presentar como "terrorismo" o "narcoterrorismo" a la guerra popular; denunciar la creciente intervención yanqui y sus planes de agresión; impulsar la campaña antiimperialista Yankees go home!; apuntar mas y esforzarnos por unir al pueblo peruano, a su inmensa mayoría sobre la base de la alianza obrero-campesina; prepararnos ideológica, política, orgánica y militarmente para seguir desarrollando la guerra popular cualquiera sean las circunstancias, enarbolando mas el marxismoleninismo-maoísmo, pensamiento gonzalo; seguir combatiendo cada día, tenaz e indeclinabiemente por conquistar el Poder en todo el país en función de la revolución proletaria mundial, a la cual estamos mas ligados que nunca por la causa inmarcesible del comunismo; y golpear certera y contundentemente al enemigo cualquiera que sea y mas aun al propio imperialismo yanqui, como ya el ataque a Santa Lucia, su base de agresión antinacional, el 7 de abril, un día antes de las elecciones generales del 90, lo hizo. En el Sur del país la guerra popular se desarrolla principalmente en el departamento de Puno entre sus acciones saltantes esta el asalto y toma de Ananea, provincia de Sandia; se golpearon simultáneamente los dos puestos de la policía y se aniquiló al gobernador, el alcalde, el juez y 9 policías, aparte de un herido y dos rendidos. En Yunguyo, frontera con Bolivia, sabotaje destruye la subprefectura, cerca se reunían Garcia Pérez y el presidente boliviano; esta acción generó, una vez más, patrullaje de las fuerzas armadas del país vecino; como la de Ananea, se cumplió en octubre. En noviembre, mientras se tomaba Azángaro, se hacía juicio popular y propagandizaba contra elecciones, los candidatos, como el de Huancané, renunciaban. En diciembre se tomó Orurillo, provincia de Melgar, aplicándose juicio popular y aniquilamiento selectivo. Pero las acciones no sólo se desarrollan en Puno, también en los departamentos de Cuzco, Arequipa, Moquegua y Tacna, aunque en éstos se desarrolla más la agitación y propaganda armadas y el sabotaje. A su vez, en el Norte del país se tomó Huamachuco, capital de la provincia de Sánchez Carrión, en el mes de octubre, aniquilándose al alcalde. En noviembre aniquilamiento del alcalde de Sanagorán; así como en Trujillo, capital del departamento de La Libertad, cinco sabotajes remecieron la ciudad cerca de donde se reunían los ministros de relaciones exteriores del Grupo de los Ocho y se saboteaba la antena vía satélite de la televisión, acción similarmente ejecutada contra Canal 7 en Santiago de Chuco y dos emisoras radiales del revisionismo en Cajabamba, departamento de Cajamarca. Y en diciembre, ataque a Cachicadán y asalto al puesto policial de Mollebamba. La acción también se desarrolla en la Costa del Norte, aparte de Trujillo, Chimbote, Chiclayo, Piura y Tumbes son, como ciudades (las tres últimas capitales departamentales), escenario de la guerra popular, desenvolviéndose en esas no sólo propaganda y sabotaje sino aniquilamientos selectivos, así contra un capitán del ejército y dos policías, en Tumbes y Chiclayo, respectivamente. Tanto en el Sur como en el Norte el problema de la tierra es fundamental y a él se aplica la política del Partido, impulsando con las armas en la mano las invasiones y el reparto de tierras y asimismo defenderlas; la cuestión es defender y conquistar la tierra con la guerra popular, y de igual manera conquistar y defender las condiciones necesarias para el desarrollo de la producción en beneficio del pueblo. Tanto en el Sur como en el Norte se desarrolló la campaña por el boicot de las elecciones municipales; como en el resto del país se promovieron paros armados apuntando a elevar la conciencia política de las masas, fueron organizados sólo donde era posible garantizarlos, provincias de Azángaro, en Puno, y Santiago de Chuco, Otuzco y Sanchez Carrión en La Libertad; paros armados que paralizaron esas zonas y redundaron en un gran ausentismo electoral y mayor repercusión. En el Norte Medio, parte norte del departamento de Lima y Ancash, atentado contra el presidente del jurado de elecciones de Huacho y aniquilamiento de dos policías en Barranca, ambas acciones en setiembre. Sabotaje a banco en Supe y voladura de concejo, puesto policial en Carquín; destrucción en microrregion en Bolognesi; en Cajatambo ataque a base antisubversiva de la policía, juicio popular a alcalde, sabotaje a dirección zonal de educación; en el Callejón de Huaylas tres días consecutivos se vuelan torres generando apagón en cincuenta pueblos, se izan banderas rojas con hoz y martillo y se pintan consignas contra elecciones; toma de Trillos, en la provincia de Bolognesi y juicio popular; todas estas acciones guerrilleras en octubre. El gobierno decreta estado de emergencia en Barranca, Huaura, Cajatambo y Oyon, provincias del departamento de Lima; y envía batallón del ejército a Huaraz. El día anterior a las elecciones municipales, el EGP toma ómnibus a 25 Kms. de Huaraz, capital del departamento de Ancash, y luego de bajar a los pasajeros lo dinamita (las empresas suspenden servicio); sabotea al domicilio del prefecto y genera apagón general en Aija, Recuay, Yungay, Carhuaz y Huaraz. Asimismo, en el Sur Medio, parte sur del departamento de Lima e Ica, la guerrilla golpea violentamente en la provincia serrana de Yauyos, colindante con los departamentos de Junin y Huancavelica, tomando varios pueblos e hiriendo doce policías en el enfrentamiento de Lincha en setiembre; y en el mismo mes se vuelan torres en Cañete, mientras los propios periódicos gritan "Se adueñan campiña de Ica". Y en octubre, toma de Palpa, capital provincial; son destruidos la comisaria y el puesto de investigaciones aniquilandose un capitán y seis policías; en el mismo mes paro armado de 48 horas en la provincia de Nazca, éxito total pues la ciudad quedó desierta; también en octubre, se toma distrito de Zuñiga, en la provincia de Cañete, aplicándose aniquilamiento; y rematando las acciones del mes se vuela el puente Coyllor. En noviembre se centra en la campaña de boicot, se propagandiza y agita no votar; en este marco se dan acciones contra locales públicos en Nazca, en los distritos San Clemente y Túpac Amaru de la provincia de Pisco, cuya capital vivió un apagón; las acciones apuntan contra domicilios de los candidatos; y se interrumpió mitin aprista en Ica y se suspendió en Pisco. En el Norte Medio se desarrolló intensa campaña por el boicot y contra las elecciones municipales, organizándose paro armado en el Callejón de Huaylas con múltiples acciones guerrilleras; fue un rotundo éxito en todo el Callejón sirviendo a un gran incremento del ausentismo electoral. Tanto el Norte Medio como el Sur Medio son, estratégicamente, de suma importancia para cercar Lima, como a nadie puede escapar. Lima, la capital, con un tercio de la población nacional; macrocefálica capital de una nación oprimida y atrasada, gran concentración de poder económico, político y militar, espejo gigantesco de la crisis general de la sociedad peruana; inmenso tambor de repercusión nacional e internacional; pero a la vez y principalmente centro primordial del proletariado peruano y hogar de hambre y combate de inagotables legiones de masas populares, carne de la carne de nuestro heroico pueblo que brega inagotablemente, día a día, trabajando y combatiendo en la fábrica y en los barrios y barriadas. Es partiendo de estas características saltantes que se puede juzgar la importancia fundamental y trascendente de librar la guerra popular también en la capital; máxime si el camino del campo a la ciudad, de cercar las ciudades desde el campo, debe rematar, tras la ardorosa brega de la guerra prolongada, en la insurrección de las ciudades y principalmente de la capital; y más aún si tenemos en cuenta las peculiaridades de la guerra popular en el Perú, donde si bien seguimos el camino del campo a la ciudad, desarrollamos la lucha en ambos, siendo el campo, como sigue siéndolo aún, principal en tanto la ciudad es complemento como está sentado ya en "Esquema de la lucha armada" del 78, sancionado en el VIII Pleno del Comité Central. Así las cosas, partamos de que parte de la propaganda partidaria va a la capital para servir a su remoción ideológica y política más profunda; allí el proletariado y el pueblo acogen en su mente convirtiéndolo en fuerza de su brazo el mensaje que les llevan: la "Entrevista al Presidente Gonzalo"; la postal "Nueve años de guerra popular" o la publicación gráfica "Día de la heroicidad. Tercer aniversario" y el afiche del P. Mao "Nada es imposible para quien se atreve a escalar las alturas"; o la antología de Lenin sobre "El imperialismo es la antesala de la revolución social del proletariado"; o los folletos "La revolución proletaria y el revisionismo de Jruschov" y "Sobre la dictadura del proletariado"; o "En conmemoración del 40 aniversario de la Revolución China" y "El Partido, la guerra popular y el boicot". Entre las acciones guerrilleras que han estremecido Lima en la 1ra. Campaña de Impulsar, en el tercio final del 89, tenemos, en propaganda y agitación armadas, las sucesivas campañas desenvueltas con las masas mas profundas, con el proletariado, la clase dirigente de la revolución y con las masas pobres de barrios y barriadas, base del trabajo partidario en la capital; esto aparte de las amplias campañas de volanteo en apoyo de la lucha de clases, apuntando siempre a lo más hondo que emerge transformando la vieja sociedad. Esta forma de lucha enarbola desde la simple pinta en las omnipresentes pizarras del pueblo, hasta los desafiantes murales de San Marcos que proclaman la rebeldía de la juventud; desde el mosquito vibrante en las manos, hasta el afiche que estampa guerra popular sobre los muros; desde la roja bandera comandada por la hoz y el martillo que anuncia el nuevo día, hasta las iluminaciones que desde los cerros encienden la noche con revolución; desde la furia condensada en el grito de protesta, hasta el estruendo desatado en la zozobra; desde el férreo espíritu de clase que anima las marchas, hasta el recio desborde de las movilizaciones armadas que revienta en bloqueos y llantas como teas, en molotoves y petardos solidarios; en síntesis, desde la idea que arma la mente hasta los brazos resplandecientes en acciones guerrilleras. Los sabotajes también se expresan, así el de Renasa, acción en apoyo de la lucha del proletariado minero, en setiembre; coches-bomba en las embajadas de la URSS y China y el Consulado de Estados Unidos, acción contra las dos superpotencias imperialistas y parte de la respuesta a la nueva ofensiva contrarrevolucionaria que, a nivel global, encabezan principalmente Gorbachov y Teng; acciones cumplidas en octubre. El incendio de ómnibus, como los diez quemados, también en octubre, así como otros antes y después, es otra forma de sabotaje de fuerte repercusión que golpea a las empresas estatales, principalmente, pues el Estado usa cada vez más políticamente esas empresas apuntando a quebrar las luchas populares. El apagón es otro tipo de sabotaje de cada vez mayor importancia y repercusión; en setiembre, octubre, noviembre y diciembre se han generado apagones de grandes dimensiones, no sólo abarcan desde Marcona, en Ica, hasta Chiclayo, en Lambayeque, pasando por el departamento de Lima y principalmente por la capital, sino que golpean toda la Costa y Sierra centrales; pero además su duración se extiende con todas sus secuelas más allá de los diez días; y en la solución de los problemas derivados se muestra nítidamente qué intereses protege el Estado y a quién beneficia, lo que se ve en a quienes atiende primero y mejor. El aniquilamiento selectivo golpeo contundentemente a soplones, enemigos recalcitrantes de la clase y del pueblo y elementos con deudas de sangre; baste señalar dos: primero el del comandante de la policía nacional y subjefe de la Interpol, quien en Ayacucho se bañó con la sangre del pueblo asesinando hijos de las masas. Segundo, aunque reciente, el del ex-presidente del Seguro Social (IPSS), F.S. Salaverry, cuchillo de todos los asegurados del Perú, traficante de la salud pública y asesino cotidiano de los jubilados del país; este aniquilamiento ha golpeado principalmente a la burocracia (uno de los sustentos fundamentales del Estado, sino el principal que es la fuerza armada); sin embargo, el lamento hipócrita de algunos, no es por el justamente aniquilado, simplemente es conciencia culpable de grandes burócratas opresores sobre cuyas cabezas pende la implacable justicia popular, que puede tardar pero llega. Los combates guerrilleros se concretaron en ataque al puesto policial del Mercado San Ildefonso; fueron aniquilados un teniente y cuatro cabos, quedando heridos un oficial y cinco subalternos, según lo dicen los propios periódicos; se cumplió el 2 de octubre. Y en la emboscada al ejército peruano; se emboscó un ómnibus que transportaba 35 o 40 elementos del servicio de inteligencia del ejército, en el cruce de la avenida Zarumilla y Jirón Pedregal, en el distrito de San Martin de Porres; fueron aniquilados cuatro, quedando quince heridos, algunos de gravedad, según informaron los propios periódicos de la reacción; acción cumplida el 15 de diciembre del 89. Punto aparte merece el paro armado del 3 de noviembre. Este paro en la capital adquiría gran importancia pues iba directamente contra las elecciones municipales, por ello concitó la furia concentrada de la reacción, del revisionismo y de todos sus lacayos en general. Y movieron cielo y tierra en su contra. Pero viendo que era incontenible, acudieron a su gran argumento de siempre, la violencia desenfrenada, he ahí la causa proterva que desencadeno la brutal y desmesurada represión de la Plaza de la Victoria. En ella la policía nacional desato una vez mas su furia sanguinaria, arremetiendo contra el desplazamiento de los deudos y compañeros que por cientos y conducidos por el Comite de Familiares de Prisioneros de Guerra y Desaparecidos, se dirigían portando coronas, ofrendas florales y banderolas, al cementerio para rendir homenaje a los Héroes del Pueblo caídos en la Rebelión de las Luminosas Trincheras de Combate, y demás combatientes e hijos del pueblo que han dado su vida por la revolución y su sangre por la guerra popular; pero frente a la ignominia reaccionaria, brillo el desafiante coraje del pueblo, la aguerrida defensa de los combatientes y el apoyo de las masas. Por eso mueve a profundo rechazo la condena a los infamemente atacados no solo por el enemigos recalcitrantes, sino por quienes llamándose revolucionarios, condenaron a los reprimidos y, en esencia, apoyaron al gobierno y a la reacción. Mas como la represión fue impotente para impedir el rumbo hacia el paro, amenazando frontalmente al electorerismo, la autodenominada Izquierda Unida salto al frente. H. Pease, candidato a la alcaldía de Lima por la IU, salió de gonfalon antiparo en defensa de la llamada "democracia" y contra del supuesto "terrorismo"; y convocó una cruzada anticomunista de rancio tufo fascista, bajo el membrete de "marcha", invocando la unión de todos los "demócratas" en un mitin el 3, el mismo día del paro. La cita se cumplió al amparo de los fusiles genocidas de las fuerzas armadas y policiales y bajo el manto "espiritual" de la Iglesia Católica; a ella concurrieron los candidatos, los capitostes de los partidos, entre estos los jerarcas revisionistas, y los caudillos de la burocracia sindical; y primero que nadie Vargas Llosa, el hoy ganador raquítico de la primera vuelta, con quien H. Pease se unió en expresivo abrazo de negra colusión y pugna; y a fin de cuentas, que sacaron la IU y su candidato, de este nuevo servicio meritorio: la derrota de Pease y la IU en las elecciones municipales del 89 y el gran descalabro de abril; justa y merecida paga. Pero la marcha anticomunista tampoco contuvo el paro; y el paro armado del 3 de noviembre fue un contundente e innegable triunfo del proletariado y del pueblo, un paso más en la incorporación mayor de las masas a la guerra popular. "No importa lo que digan los traidores!" Mas es imposible hablar de la guerra popular, de la indeclinable brega que significa, sin tener muy presentes a quienes, hombres y mujeres, militantes, combatientes e hijos de las masas, combaten cada hora de las veinticuatro del día en las mazmorras de la reacción; a quienes hicieron de ellas Luminosas Trincheras de Combate en todo el país; a quienes a costa de su sangre nos dieron el "Día de la Heroicidad" en el hito de la rebelión histórica, 19 de junio del 86; y a quienes, sin hincar la rodilla jamás, enarbolando al tope el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento gonzalo, siguen y seguirán luchando por el triunfo de la guerra popular, cualquiera sea la trinchera en que estén. Este es el derrotero de diez años de guerra popular y, en síntesis, el gran desarrollo conquistado en el décimo año de la misma; su incontenible y creciente expansión concretada en la multiplicación de los Comités Populares Abiertos, plasmada precisamente en 1989, histórica victoria y trascendental paso hacia la conquista del Poder en todo el país. Así, pues, qué es el llamado "estancamiento del 89 ?; simple y llanamente un vómito negro más de la reacción y sus secuaces a sueldo. Sobre este imaginario "estancamiento" sustentan su cacareado y propagandizado "fracaso estratégico de Sendero" el cual pretenden apuntalar, además, con sus supercherías de "abandono del camino" y "no logro de metas". En qué se basan para parlotear sobre "abandono del camino"?, en nada que no sea el avance de la guerra popular en las ciudades, esto aparte de ser viejo planteamiento de la prensa reaccionaria levantado bastante en torno a las elecciones del 85, lo cual no es simple coincidencia; pero la práctica, criterio de verdad, comprueba, como fluye del recuento de acciones hecho, que el camino de cercar las ciudades desde el campo se aplica firme y consecuentemente; mas este camino, según nuestras condiciones especificas, lo aplicamos siguiendo la norma de desarrollar simultáneamente la guerra popular en campo y ciudad, siendo campo principal y ciudad complemento; además, el avance en las ciudades es también comprobación del desarrollo del camino del campo a la ciudad y, más aún, muestra de que el mismo apunta en perspectiva al traslado del centro de la guerra popular a las ciudades para la conquista del Poder en todo el país; todo lo que está en estricta conformidad con el proceso del camino de cercar las ciudades desde el campo; y, en consecuencia, la guerra popular en el Perú es la aplicación de la teoría de la guerra popular del Presidente Mao Tsetung, como parte del marxismo-leninismo-maoísmo, a las condiciones especificas de la revolución peruana. Por otro lado, en que basan su chachara de "no logro de metas"?; en esto trafican arteramente con el secreto revolucionario, pues obviamente pueden difundirse políticas generales y hasta concretas de diversos campos pero no entrar en especificaciones que servirían al enemigo; y compitiendo por quien sirve mejor a sus amos, la reacción y el imperialismo, yanqui principalmente, vociferan "no han alcanzado sus metas", "no existe el Ejército Guerrillero Popular", "no hay Nuevo Poder", "no cumplieron con alcanzar equilibrio estratégico". En cuanto al Ejército Guerrillero Popular, si no existe que organización armada ha ejecutado mas de ciento veinte mil acciones guerrilleras? que organización armada desarrolla la guerra popular en casi todo el país? a quien combaten hace diez años las fuerzas armadas y las policiales reaccionarias?; nuestra práctica militar esta hecha de solidas realidades contundentes y solo una fuerza armada revolucionaria como el Ejército Guerrillero Popular puede cumplirla y mantenerla; la cuestión esta en que es un ejército de nuevo tipo y se construye, combate y desarrolla según otros principios, el Presidente Mao enseño: "Ustedes combaten a su manera y nosotros a la nuestra; combatimos cuando podemos vencer y nos marchamos cuando no podemos"; gran principio comentado así en 1965: "En otras palabras, ustedes se apoyan en el armamento moderno y nosotros en las masas populares con una alta conciencia revolucionaria; ustedes ponen en pleno juego su superioridad y nosotros la nuestra; ustedes tienen sus métodos de combate y nosotros los nuestros". En cuanto al Nuevo Poder, desde el año 82 venimos destruyendo, demoliendo el Viejo Poder en el campo; generando, en consecuencia, vació de Poder, cada día mayor y en mas amplias zonas, como es archisabido y reconocido; es que ese vació de Poder queda como limbo político, como un interregno de la lucha de clases? es que alguien cree que se destruye el Viejo Poder e impera la nada? es que la destrucción del Viejo Poder no implica, como contraparte, la construcción del Nuevo Poder? no se entiende que destrucción del Viejo Poder y construcción del Nuevo Poder son dos términos de la misma contradicción?; pues bien, sobre la destrucción del Viejo Poder se crea el Nuevo, el de la dictadura conjunta, basado en la alianza obrero-campesina dirigida por el Partido y sustentado por el Ejército Guerrillero Popular; la cuestión es que, como lo dice el abecé del marxismoleninismo-maoismo, el Nuevo Poder sigue en su desarrollo la fluidez de la guerra popular y, obviamente, la especificaciones de nuestra realidad concreta; pero, precisamente, con la multiplicación de los Comités Populares Abiertos, en 1989, el Nuevo Estado tiende a su estabilidad relativa En cuanto al equilibrio estratégico no se le puede traer de los cabellos ni como el tahur que saca un as de la manga; los problemas deben tratarse con seriedad, especialmente los militares por lo demás el punto claro y concreto: la defensiva, el equilibrio y la ofensiva estratégicas, como bien sabemos, son las tres partes de la guerra prolongada, siendo más larga la primera y, como lo demuestra la experiencia internacional, el desenvolvimiento de la segunda y tercera están más profundamente ligadas a complejas situaciones del conjunto de la lucha de clases en el país y de la situación mundial, pues llevan a barrer en todo el país el dominio de la reacción y del imperialismo y a la instauración de una República Popular en todo el ámbito nacional con la consiguiente repercusión en el mundo, comenzando por los países más próximos; ésa es la cuestión suscintamente y el rumbo que la guerra popular en el Perú sigue firme y ascencionalmente, con tenacidad indoblegable; se ha fijado fecha especifica para pasar al equilibrio estratégico? algún plan militar o campaña se fijó tal objetivo? es un "compromiso" no cumplido? una tarea ligada a las elecciones de la reacción? una "meta" de "Rematar el Gran Salto con Sello de Oro" o de otra campaña, como dicen?; puras elucubraciones tendentes a infamar la guerra popular, desprestigiarla ante las masas y sembrar confusión; pues, este engendro se propagandiza, precisamente, cuando, como dice la reciente sesión del Comité Central, la reacción peruana y el imperialismo tienen: "Necesidad de desarrollar la guerra contrasubversiva, potenciando la acción militar, movilizando a las masas y aumentando la intervención yanqui principalmente", y cuando, tras el pretexto de luchar contra el narcotráfico, el propio imperialismo yanqui trama su mayor agresión directa contra la guerra popular; situaciones que ligadas al trascendental avance de la guerra popular en el 89, concretado en el paso de la guerra de guerrillas a la guerra de movimientos, muestran a las claras que el equilibrio estratégico está en la arena de contienda y la revolución se desenvuelve en momentos decisivos; esto también, claro está, dentro de nuestras peculiares condiciones concretas. Así, en conclusión, el pregonado "fracaso estratégico de Sendero" supuestamente basado en el llamado "estancamiento" y apuntalado en las supercherías de "abandono del camino" y "no logro de metas", es simplemente una nueva siniestra campaña reaccionaria dirigida por el propio imperialismo yanqui; es parte de la guerra psicológica y del plan de potenciar la guerra contrasubversiva en marcha. Pero aparte de todo esto que busca en lo inmediato sembrar confusión en el pueblo peruano y socavar la ligazón entre las masas y la guerra popular; merece destacar dos cuestiones para desenmascarar más y marcar a fuego a quienes miserable y arteramente sirven a la reacción y al imperialismo como viles mercenarios. Primero, el soslayamiento de las condiciones concretas de la revolución peruana; cuestión que ellos obviamente no ven ni verán y que siendo siempre muy tenida en cuenta por nosotros desmiente, de paso, la negra imputación de dogmatismo. Y, segundo, que tras su podrido parloteo subyace el viejo criterio revisionista sobre situación revolucionaria que los lleva, hoy, a imaginarse, aunque no lo digan explícitamente, la existencia de crisis revolucionaria y que, por tanto, según ellos, no tomar el Poder implicaría el fracaso de la revolución en general y de la guerra popular en concreto; Lenin, recordemos, planteó tres requisitos para la existencia de crisis revolucionaria: uno que el Poder se le escapara de las manos a la reacción, Segundo que el revisionismo y el oportunismo no ejercieran influencia sobre las masas y tres que las masas cerraran filas en torno del Partido; sin olvidar lo especifico de la crisis revolucionaria en nuestro caso ligada al desarrollo de la guerra popular baste decir primero: la fuerza armada mantiene su capacidad de sostener parte del Viejo Estado, segundo: el revisionismo y el oportunismo aún siguen cabalgando sobre las masas mediante la burocracia sindical y gremial, y tercero: la guerra popular aún debe generar el gran salto en la incorporación de las masas lo que se da en la parte final de la misma. Así, lo que existe es situación revolucionaria en desarrollo creciente por la agudización de la lucha de clases y principalmente por la guerra popular, que no sólo persiste diez años sino que cada vez demoliendo más el Viejo Estado y construyendo un Nuevo Poder apunta a barrer cabal y completamente la caduca y podrida sociedad peruana de opresión y explotación; en consecuencia, la perspectiva de la actual situación revolucionaria en desarrollo creciente es la crisis revolucionaria o el auge de la revolución, en palabras del P. Mao Tsetung. Estrechamente ligada al infundio del "fracaso estratégico" está la patraña de "división y rendición". La farsa de la "rendición" no es nueva, ya al comienzo de su gobierno el genocida demagogo, Garcia Pérez, y las fuerzas armadas la montaron; en "Desarrollar la guerra popular sirviendo a la revolución mundial" leemos: "Siguió el genocidio de Lurigancho de octubre 85 tras el cual el reaccionario gobierno aprista montó la gran farsa de la `capitulación masiva de senderistas' en Llochegua y Corazón-Pampa, provincia de La Mar, departamento de Ayacucho; incluso, como se difundió por todos los medios, se escenificó la entrevista del `jefe supremo' (Garcia Pérez) con `dirigentes rendidos' a quienes acogió en palacio, escena filmada desde lejos de la cual nadie escuchó nada ni vio la cara de nadie por las invocadas `comprensibles razones de seguridad'. Mas el engendro fue rápidamente destripado al publicarse declaraciones del oficial de la marina que participó en el operativo que sirvió de punto de partida: `el mismo oficial al ser entrevistado por este corresponsal explicó que el centenar de personas, entre hombres, mujeres y niños, no se acercó a las bases de Corazón-Pata y Llochegua sino que fue reagrupado por los infantes de marina en las alturas de las serranías y conducidos posteriormente hacia ambas localidades. Cuando se le preguntó al teniente `Aníbal si los campesinos, al momento de entregarse portaban armas, respondió que no...'; según `La República' del 25/X/85, (El subrayado es nuestro). Esa fue la famosa patraña de la `capitulación'". Hoy nuevamente levantan el mismo traposo embuste buscando socavar la guerra popular y encubrir el nucleamiento al que por la fuerza someten al campesinado, para formar mesnadas repitiendo caducos moldes ya antes destruidos por la lucha convergente de las propias masas aherrojadas y las acciones guerrilleras; es evidente que con la reedición de mesnadas, impulsada por las fuerzas armadas, con mayor intensidad en los últimos meses, se apunta a reeditar el genocida baño de sangre de los años 83 y 84, dentro de sus nuevos planes y necesidades contrasubversivas. En cuanto al viejo sueño reaccionario de la "división de Sendero"; este cuento purulento vuelto a contar se "sustenta", como la cacareada "rendición", en el ya refutado "estancamiento" y "fracaso estratégico", y en volantes hechos y difundidos por las fuerzas armadas (parte de su guerra psicológica); Así como a supuestos "cansancio por tanta lucha", "arrepentimiento por excesos y muertes", "vida dura y condiciones difíciles", etc., falsedades que a las claras revelan las instituciones, organizaciones y plumíferos que son fuente de tales engendros, todos ellos sostenedores o defensores del Viejo Estado y la caduca sociedad peruana; enemigos acérrimos de la guerra popular que exculpan al Estado Peruano y a sus fuerzas armadas y represivas del diario genocidio que perpetran contra el pueblo; negadores del principio básico de la guerra, de la cuota que demanda aniquilar al enemigo , del aspecto de construcción que tiene la guerra; pesimistas a quienes hunde el pesimismo histórico de la reacción y del imperialismo a los cuales sirven, incapaces de comprender que la guerra popular está animada e impulsada por el optimismo de clase que le da el marxismo-leninismo-maoismo, pensamiento gonzalo y que cada combatiente del Ejército Guerrillero Popular se guia por el principio de "Servir al pueblo de todo corazón"; supercherías que, claro está, se encuadran también dentro de los planes de contrainsurgencia y apuntan contra la guerra popular y el Partido buscando sofrenar la brillante perspectiva revolucionaria. Pero además, sobre todo quienes tienen problemas internos derivados de sus propios errores y oportunismo, especialmente ligados con su persistente electorerismo, vociferan alborozados la supuesta existencia de dos posiciones en el Partido: "una militarista y otra política"; aparte de ésta errónea diferenciación, pues en el supuesto que elucubran, deberían hablar de una línea oportunista de derecha cuyo componente, en cuanto a línea militar, seria una posición militarista, línea burguesa opuesta a la del Partido, en qué basan tan peregrina elucubración, también en los despanzurrados "reveses y estancamiento del 89" y "fracaso estratégico"; solamente muestran su desesperación e impotencia ante el avance de la guerra popular que amenaza su nefasto cabalgamiento sobre las masas y remece sus capillas de beatos del cretinismo parlamentario. Mas toda esta chachara es su hojarasca ante la refulgente unidad del Partido, sólidamente sustentada en la base de unidad partidaria sancionada en el Primer Congreso y garantía insustituible de desarrollo incesante de la guerra popular. Así las cosas, en síntesis, cuáles son las causas de fondo de la proterva patraña de "división y rendición": las elecciones generales que adquieren un carácter crucial para la reacción y sus lacayos, más aun con el debilitamiento mayor del sistema demoburgués derivado de la votación de abril y las negras perspectivas para quien salga electo en la segunda vuelta; la embravecida ola huelguística, contundente expresión de la violenta agudización de la lucha de clases que día a día asume más la consigna de Combatir y Resistir!; y el pujante y expansivo desarrollo de la guerra popular cuya brillante perspectiva es Conquistar el Poder en todo el país!.Estas son las tres causas de fondo que han llevado a las fuerzas armadas y policiales, indudablemente con la anuencia y apoyo de su "jefe supremo", el genocida demagogo, a montar la burda y ridícula patraña de "división y rendición" que nadie con dos adarmes de seso pueda tomar en serio; campaña venteada también, como parte de su guerra psicológica. Y cada quien, organizaciones, partidos, personajes, candidatos y lacayos, según su colusión y pugna en el seno de la reacción, así como sus apetitos y paga, ha traficado con tan grotesca farsa. Pero quien con más empeño de tahur ha traficado con el engendro del cual es coautor, ha sido Garcia Pérez; el genocida demagogo. La nefasta cabeza del gobierno más hambreador y mas genocida, de la historia peruana, quien, especialmente en los últimos meses, se desgañita pregonando la "derrota de Sendero", así, en su estilo ignorante de verdades elementales, menosprecio de la realidad y charlatanismo, dijo en abril último: "El terrorismo propuso una revolución social, una insurrección generalizada en todo el país. Y en eso fracasó, lo digo categóricamente"; qué busca García Pérez, presentarse él como victorioso y a su gobierno como exitoso para manipulando el descalabro del próximo gobierno retornar como salvador el 95; ése es su sueño, al que sirven también hasta algunos autoungidos revolucionarios. Esta es, pues, la gaseosa patraña de la llamada " división y rendición de Sendero" que como sus antecesoras se esfuma ante el torbellino de la guerra popular. Y como no podía ser de otra manera, las elecciones generales, así como las municipales del 89, sirven para levantar un esperpento hecho de votos y cretinismo parlamentario, el vocinglero "primer y gran derrotado", la imaginaria derrota del boicot. Ya en las elecciones del 85 se chilló lo mismo; entonces Belaúnde, hoy conspicuo miembro del Fredemo sentenció "el gran derrotado es el terrorismo"; mientras Barrantes," el candidato natural de IU", quién hoy no alcanza ni el 5% de los votos emitidos, recitó: "Sendero luminoso fracasará... el resultado electoral del 14 de abril, con la presencia masiva del pueblo, constituyó el mejor rechazo al terrorismo", quién ha fracasado? dónde andará el descalabrado campeón de votos y urnas?; a la vez que, también como hoy, el actual director de "Expreso" pontificaba: "dos grandes derrotados hubo en la elección general del domingo: El senderismo...". Así, pues, la cantaleta no es nueva, la letra y la tonada son las mismas, aunque más angustiadas a la par de inverosímiles; ahora Garcia Pérez el candidato no inscrito pero que prepara su sueño presidencial del 95, quien en las municipales llamaba a votar en blanco o viciado pues, como decía, la cuestión era votar para "defender la democracia contra el terrorismo", el mismo 8 de abril decretó triunfal y arrogante: "Hoy verán que el pueblo en su inmensa mayoría, un 99 por ciento (sic; según el diario aprista Hoy), participa en la democracia a través del voto y sepultará el terrorismo mediante el acto comicial"; mientras los candidatos gananciosos, Vargas Llosa y Fujimori, con el énfasis e interpretación que satisfacía sus afanes, se unían solidarios saludando el "triunfo de la democracia y derrota del terrorismo", repicando y honrando la misma monserga reaccionaria; en tanto que H. Pease, el nuevo adalid de la llamada Izquierda Unida, desde la sima de su 7% de los votos emitidos, proclamaba: "Primer y gran derrotado Sendero"; todo en medio del coro obsecuente de medios de comunicación y plumíferos. De esto fluye una simple conclusión: el mismo libreto y personajes, defensa del orden existente y del Viejo Estado; sólo varían los actores, aumenta la publicidad y crece la demagogia. La misma grotesca farsa cada cinco años. Las elecciones en su desenvolvimiento publicitario tienen una pauta: primero, elevar hasta los cielos la importancia de las elecciones y combatir "el siniestro plan terrorista de impedir las elecciones en todo el país, amenazando con cortar dedos y asesinar a quienes voten"; segundo, celebrar con bombos y platillos la "concurrencia masiva a las ánforas" (en el Perú votar es una obligación, y como lo dicen entendidos de no serlo no concurriría ni la mitad), así como el "triunfo de la democracia", el "fracaso del boicot" y la "derrota de Sendero", mientras se manipulan y adulteran los resultados especialmente de las zonas de emergencia y se oculta principalmente las cifras del ausentismo; y tercero, cuanto más tarde sea posible, comienzan a filtrarse las informaciones hasta la publicación de los maquillados resultados por el Jurado Nacional de Elecciones. Debe tenerse en cuenta este proceso para no dejarse desorientar por la fanfarria electorera y encontrar la verdad en medio de toda esa interesada barahúnda reaccionaria. Pues bien, qué dicen los propios resultados electorales oficiales. Aparte de que cerca del 20 % de personas hábiles para votar no se inscriben en el registro electoral; el 21.2 % de los inscritos no concurrió a votar, porcentaje que se eleva al 27 % si solamente consideramos los votantes, incluídos quienes votaron en blanco o nulo; situándose así, como ya vieranos, a únicamente 0.6 % de Vargas Llosa que alcanzo la primera votación y 2.4 % por encima de Fujimori que obtuvo la segunda. En consecuencia, si comparamos las dos últimas elecciones generales del quinquenio, mientras el ausentismo en el año 85 alcanzo solo el 8.8 % de los inscritos, en abril del 90 el ausentismo ascendido hasta el 21.2 %; el ausentismo se multiplico, pues, por 2.5 veces; en otros términos, el ausentismo del 85 al 90, subió 12.4 %, reiteremos, del 8.8 al 21.2 %. Así, alguien con una pizca de sensatez puede hablar de derrota del boicot? o alguien con una brizna de objetividad puede decir "primer y gran derrotado Sendero"? La cuestión es sumamente clara y contundente, la táctica del boicot aplicada por el Partido, como parte de la guerra popular, es cada vez mas exitosa y rotunda, plasmando en la lucha de clases del país una tendencia creciente contra las elecciones, socavando así uno de los fundamentos del orden demoburgues, del Estado Peruano, dictadura encabezada por la gran burguesía. Tendencia antielectoral que en las municipales del 89, cuando también se vociferó una supuesta derrota del boicot, el ausentismo, según las proyecciones, alcanzó el 17 %; mostrando evidentemente un trascendental rumbo ascensional. El boicot, por tanto, es una realidad incontrovertible y su éxito indiscutible; y muestra palmariamente cómo la política de entorpecer las elecciones, socavarlas e impedirlas donde sea posible es altamente fructífera y, lo principal, genera una tendencia antielectoral, coadyuvando a la formación de la conciencia política del pueblo; táctica de boicot y tendencia antielectoral aplicada y forjada por la guerra popular, y desenvueltas como partes integrantes de la misma, muestra ejemplar de como utilizar las elecciones en función de desarrollar la guerra popular. En cuanto a los votos nulos y blancos, alcanzan el 15.35 % de los votantes; esto es, en abril 90, 1.45 % más que en 1985. Sin! embargo, pese a aumentar, su incremento es mucho menor en relación i al ausentismo dando margen a pensar, fundadamente, en fraude con este tipo de votos y contra quienes los emitieron. Muy expresivo es el siguiente cuadro comparativo; en el merece especial atención el incremento del ausentísmo, principalmente donde la guerra popular se desarrolla mas vigorosamente. COMPARACION ENTRE ELECCIONES GENERALES DE 1985 Y 1990 Nulos y blancos (1) Ausentismo (2) 1985 1990 1985 1990 Ayacucho 35,8 41,3 17,1 48,0 Apurímac 35,5 38,3 17,9 28,0 Huancavelica ------- 36,2 ------- 40,4 Cerro de Pasco 16,45 25,7 13,05 37,1 Junín 16,89 19,9 9,8 49,5 Huanuco 26,62 29,9 14,5 50,1 San Martín 11,49 26,77 14,5 31,4 Puno 24,5 28,45 9,0 23,0 Cuzco 23,6 22,53 12,9 24,4 Cajamarca 22,2 27,03 15,8 27,0 Ancash 22,95 23,97 8,6 27,1 Ucayali 13,0 17,85 14,05 30,0 La Libertad 11,9 15,02 6,45 18,0 Lima 6,87 8,61 7,8 13,0 Departamento (1) Porcentaje en relación a votantes. (2) Porcentaje en relación a inscritos. (3) Documentos del JNE. no registran votos nulos ni blancos, ni hay suma de los datos para formula presidencial ni para senadores; sumando datos presidenciales arroja 70,781 sobre un total de 140,865 votantes. He aquí el boicot y su éxito incontrastable, boicot que desarrolla la tendencia del pueblo contra las elecciones y sirve a la guerra popular; y el resultado de las elecciones de abril del 90, elecciones que, al reves de lo deseado por la reacción y el imperialismo, ha debilitado el sistema socavando su llamada legitimación (problema de importancia para su guerra contrasubversiva), cuestión obviamente de graves repercusiones para el orden inperante. Para concluir, sobre elecciones y boicot baste recordar los siguientes párrafos del ya citado "Desarrollar...": "Lo fundamental de estos cuadros es que la suma de los no inscritos, no votantes y quienes votaron nulo y en blanco suman millones; esta gran masa se integra por no inscritos, esto es quienes se desarrollan al margen del sistema político imperante o están abiertamente en contra del mismo; por no votantes, quienes están en contra de las elecciones o no les interesan; y por votos nulos o blancos de quienes cumpliendo formalmente con la obligación impuesta no esperan nada de las elecciones o no están de acuerdo con ninguno de los partidos participantes. En términos generales esta ingente masa ciudadana expresa rechazo, distanciamiento o indiferencia frente al sistema imperante, sus elecciones para escoger opresores y sus partidos como instrumentos al servicio del mantenimiento del orden, su preservación y evolución; en síntesis, la negación y cuestionamiento objetivos y palmarios de la sociedad peruana y sus instituciones, del sistema social históricamente caduco que debe ser necesariamente barrido, como ya se esta haciendo con las armas pues no hay otra forma de hacerlo en pro de una nueva sociedad que realmente sirva al pueblo." Y: "El Partido Comunista del Perú, en estas últimas elecciones como en anteriores solo se abocó a llamar al boicot, a entorpecerlas y a impedirlas solo donde fuera posible, mas no impedir todo el proceso como la reacción ha pretendido imputar al Partido para conquistar un falso triunfo a falta de verdaderos; pero la tendencia histórica principales la fusión de la guerra popular que dirige el Partido con ese gran torrente que suman los millones de no inscritos, no votantes y quienes votaron en blanco o nulo; es este torrente al cual el Partido está coadyuvando a estructurar como parte del mar de masas armadas que barrerá necesariamente el viejo orden de explotación y opresión." Hasta aquí el desarrollo de la guerra popular y del boicot como parte de la misma; pero lo principal, la cuestión trascendental que concentra nuestra atención como consecuencia necesaria del camino seguido es la conquista del Poder en todo el país como brillante perspectiva de la guerra popular; máxime si consideramos los años turbulentos y decisivos de la sociedad peruana que se potenciarán más aún, y muy en especial la sumamente compleja lucha de clases del mundo actual. Por ello tengamos más presentes que nunca las palabras de Mariátegui: "Soy revolucionario. Pero creo que entre hombres de pensamiento neto y posición definida es fácil entenderse y apreciarse, aún combatiéndose. Sobre todo, combatiéndose. Con el sector político con el que no me entenderé nunca es el otro: el del reformismo mediocre, el del socialismo domesticado, el de la democracia farisea. Además, si la revolución exige violencia, autoridad, disciplina, estoy por la violencia, por la autoridad, por la disciplina. Las acepto, en bloque, con todos sus horrores, sin reservas cobardes." Y sobre todo lo que Marx, el gran fundador del marxismo, estableciera: "Sólo en un orden de cosas en el que ya no existan clases y antagonismo de clases, las evoluciones sociales dejarán de ser revoluciones políticas. Hasta que ese momento llegue, en vísperas de toda reorganización general de la sociedad, la última palabra de la ciencia social será siempre: 'Luchar o morir; la lucha sangrienta o la nada. Es el dilema inexorable"'. IV. ELECCIONES, NO! GUERRA POPULAR SI! Enarbolar más aún el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente el maoísmo, es decisivo para conquistar el Poder en todo el país, construir la República Popular del Perú y servir a la revolución proletaria mundial; coger más firmemente la invicta e inmarcesible ideología del proletariado en sus tres partes integrantes, la filosofía marxista, la economía política proletaria y el socialismo científico, no sólo para comprender el mundo sino principalmente transformarlo. Basar siempre la política en la todopoderosa verdad del marxismo-leninismo-maoísmo; hoy más que nunca cuando el marxismo enfrenta el siniestro ataque convergente de la nueva ofensiva contrarrevolucionaria revisionista encabezada por Gorbachov y Teng y del imperialismo. Más hoy cuando la proterva y sangrienta contrarrevolución mundial sueña con barrer al proletariado y su insustituible papel histórico , apuntando contra el corazón de la clase, su ideología, el marxismo-leninismo-maoismo; clase de la cual el Presidente Mao dijo: "El proletariado es la más grande clase en la historia de la humanidad. Es la clase revolucionaria más poderosa en lo ideológico, en lo político y por su fuerza; puede y debe unir en torno suyo a la aplastante mayoría para aislar al máximo al puñado de enemigos y atacarlo". Por esto, debemos partir de lo establecido por el Primer Congreso del Partido en la primera parte del Programa, resaltando los principios básicos: PROGRAMA El Partido Comunista del Perú se fundamenta y guia por el marxismo-leninismo-maoismo, principalmente maoismo y, específicamente, por el pensamiento gonzalo como aplicación creadora de la verdad universal a las condiciones concretas de la revolución peruana hecha por el Presidente Gonzalo, jefe de nuestro Partido. El Partido Comunista del Perú, vanguardia organizada del proletariado peruano que es parte integrante del proletariado internacional, asume muy especialmente los siguientes principios básicos: * La contradicción, ley fundamental única de la incesante transformación de la materia eterna; * Las masas hacen la historia y "La rebelión se justifica"; * Lucha de clases, dictadura del proletariado e internacionalismo proletario; * Necesidad del Partido Comunista marxista-leninista-maoísta que aplique con firmeza la independencia, la autodecisión y el autosostenimiento; * Combatir el imperialismo, el revisionismo y la reacción indesligable e implacablemente; * Conquistar y defender el Poder con la guerra popular; * Militarización del Partido y construcción concéntrica de los tres instrumentos de la revolución; * Lucha de dos líneas como fuerza impulsora del desarrollo partidario; * Transformación ideológica constante y poner siempre la política al mando; * Servir al pueblo y a la revolución proletaria mundial; y, * Desinterés absoluto y justo y correcto estilo de trabajo." De la ideología del proletariado, del marxismo-leninismo-maoismo necesitamos centrar la atención, hoy, en las siguientes cuestiones, pero en los propios textos de los clásicos. Comencemos por como Marx definio el comunismo, en 1850, en "La lucha de clases en Francia": "el proletariado va agrupándose más y más en torno al socialismo revolucionario, en torno al comunismo,...Este socialismo es la declaración de la revolución permanente, de la dictadura de clase del proletariado como punto necesario de transición para la supresión de las diferencias de clase en general, para la supresión de todas las relaciones de producción en que estas descansan, para la supresión de todas las relaciones sociales que corresponden a esas relaciones de producción, para la subversión de todas las ideas que brotan de estas relaciones sociales."(Lo subrayado esta en cursiva en el original; igualmente será en las citas que siguen). SOBRE LA VIOLENCIA REVOLUCIONARIA Y EL CRETINISMO PARLAMENTARIO. La violencia revolucionaria y el cretinismo parlamentario forman una contradicción antagónica y evidentemente una cuestión fundamental del marxismo. Ya Marx hablo de la violencia como partera de la historia y en el Manifiesto, Junto con Engels, sentó: "Los comunistas consideran indigno ocultar sus ideas y propósitos. Proclaman abiertamente que sus objetivos sólo pueden ser alcanzados derrocando por la violencia todo el orden social existente. Que las clases dominantes también ante una Revolución Comunista. Los proletarios no tienen nada que perder en ella mas que sus cadenas. Tienen, en cambio, un mundo que ganar. !PROLETARIOS DE TODOS LOS PAISES, UNIOS!". Así como Lenin escribió: "Sin una guerra civil no ha habido todavía ninguna revolución importante en la historia, sin una guerra civil ningún marxista serio se imagina el tránsito del capitalismo al socialismo"; reiterando que "entre el capitalismo y el socialismo media un largo período de 'dolores de parto'- que la violencia es siempre la partera de la vieja sociedad" y que el Estado burgues "no puede sustituirse por el Estado proletario (por la dictadura del proletariado) mediante la 'extinción', sino solo, por regla general, mediante la revolución violenta"; así como insistió en que "la necesidad de educar sistemáticamente a las masas en ésta, precisamente en esta idea sobre la revolución violenta, es algo básico de toda la doctrina de Marx y Engels". De igual manera el Presidente Mao Tsetung partiendo de "todos los comunistas tienen que comprender esta verdad: El poder nace del fusil", estableció "...en sociedad de clases las revoluciones y las guerras revolucionarias son inevitables, pues sin ellas no puede haber saltos en el desarrollo social, las clases dominantes reaccionarias no pueden ser derrocadas ni el pueblo puede conquistar el poder político"; "la tarea central y la forma superior de una revolución es la toma del Poder por medio de las armas, es la solución del problema por medio de la guerra. Este principio marxista-leninista de la revolución tiene validez universal, tanto en China como en los demás países"; y, "La experiencia de la lucha de clases en la era del imperialismo nos enseña que sólo mediante el poder del fusil pueden la clase obrera y las masas trabajadoras derrotar a la burguesía y los terratenientes armados; en este sentido podemos decir que solamente con fusiles puede transformarse el mundo entero". En cuanto al cretinismo parlamentario condenado por Marx, Lenin fue sumamente contundente: "Los bernsteinianos aceptaron y aceptan el marxismo con excepción de su aspecto directamente revolucionario. Consideran la lucha parlamentaria no como uno de los medios de lucha que se utiliza particularmente en ciertos períodos históricos, sino como la forma de lucha principal y casi la exclusiva, que hace innecesarias la `violencia', la `toma', la `dictadura'." Y: "Sólo los bribones o los tontos pueden creer que el proletariado debe primero conquistar la mayoría en las votaciones realizadas bajo el yugo de la burguesía, bajo el yugo de la esclavitud asalariada, y que sólo después debe conquistar el Poder. Esto es el colmo de la estulticia o de la hipocresía, esto es sustituir la lucha de clases y la revolución por votaciones bajo el viejo régimen, bajo el viejo Poder."; y: "Esto es ya el más puro y el más vil oportunismo, es ya renunciar de hecho a la revolución acatándola de palabra." (Las citas de Lenin en este párrafo corresponden al folleto "La revolución proletaria y el revisionismo de Jruschov" del PCCH). Ligada a esta contradicción tener en cuenta la posición de Marx sobre las elecciones, ya transcrita, sobre la periódica autorización a los oprimidos para que elijan a sus opresores; y principalmente la del Presidente Mao: "Algunos dicen que las elecciones son algo muy bueno y algo muy democrático. Por lo que a mí respecta, elecciones es sencillamente una palabra rimbombante, y no creo que hayan ningunas elecciones genuinas. El distrito de Pekín me ha elegido a mí para servir como representante a la Asamblea, Nacional Popular, pero cuántos en Pekín realmente me entendían? Yo percibo que el cargo de Premier de Chou Enlai fue un nombramiento del Comité Central." Estrechamente vinculada a la cuestión de la violencia revolucionaria y el cretinismo parlamentario, está la inobjetable y demoledora posición de Lenin sobre el revisionismo en el frente sindical, planteada en "La bancarrota de la II Internacional": "Las organizaciones legales de masas de la clase obrera son tal vez el signo distintivo más importante de los partidos socialistas correspondientes a la época de la II internacional...Era evidente que el paso a las acciones revolucionarias significaba la disolución de las organizaciones legales por la policía, y el viejo partido, desde Legien hasta Kautsky inclusive, sacrificó los objetivos revolucionarios del proletariado al mantenimiento de las actuales organizaciones legales. Por mucho que se quiera negarlo, el hecho está ahí. El derecho del proletariado a la revolución ha sido vendido por el plato de lentejas de unas organizaciones autorizadas por la ley policiaca vigente. Un cuadro muy edificante. Esta gente ha sido tan corrompida y tan embrutecida por la legalidad burguesa que ni siquiera puede comprender la necesidad de otras organizaciones, la necesidad de unas organizaciones ilegales que dirijan la lucha revolucionaria. Esta gente ha llegado a imaginarse que los sindicatos legales, existentes por gracia de la autorización policiaca, representan un límite, mas allá del cual no se puede pasar; que se puede concebir, en general, el mantenimiento de esos sindicados en época de crisis como sindicatos dirigentes. Ahí tenéis la dialéctica viva del oportunismo: el simple crecimiento de los sindicatos legales, la simple costumbre de unos filisteos algo obtusos, aunque concienzudos , a no hacer más que llevar libro de contabilidad, ha tenido por consecuencia que en el momento de la crisis estos concienzudos filisteos se han convertido en unos traidores, en unos tránsfugas, en unos estranguladores de la energía revolucionaria de las masas. Y esto no ha ocurrido por azar. El tránsito a la organización revolucionaria es una necesidad, lo exige el cambio de la situación histórica, lo reclama la época de las acciones revolucionarias del proletariado; pero este tránsito sólo es posible si se realiza pasando por encima de los antiguos líderes, estranguladores de la energía revolucionaria, pasando por encima del viejo partido, destruyéndolo. Pero los filisteos contrarrevolucionarios, como es natural, claman: "anarquismo"; igual que clamaba "anarquismo" el oportunista E. David cuando arremetía contra Carlos Liebknecht. Por lo visto, los únicos socialistas honrados que quedan en Alemania son los dirigentes a quienes los oportunistas acusan de anarquismo..." SOBRE LA LUCHA DE CLASES. La lucha de clases y cómo guiarnos en ella es otra cuestión fundamental, especialmente hoy, del marxismo-leninismo-maoísmo. Veamos lo establecido por Marx sobre la emancipación del proletariado en "Estatutos Generales de la Asociación Internacional de los Trabajadores": "Considerando: que la emancipación de la clase obrera debe ser obra de los obreros mismos; que la lucha por la emancipación de la clase obrera no es una lucha por privilegios y monopolios de clase, sino por el establecimiento de derechos y deberes iguales y por la abolición de todo dominio de clase; que el sometimiento económico del trabajador a los monopolizadores de los medios de trabajo, es decir, de las fuentes de vida, es la base de la servidumbre en todas sus formas, de toda mi seria social, degradación intelectual y dependencia política; que la emancipación económica de la clase obrera es, por lo tanto, el gran fin al que todo movimiento político debe ser subordinado como medio; En su lucha contra el poder unido de las clases poseedoras, el proletariado no puede actuar como clase mas que constituyéndose el mismo en partido político distinto y opuesto a todos los antiguos partidos políticos creados por las clases poseedoras. Esta constitución del proletariado en partido político es indispensable para asegurar el triunfo de la Revolución social y de su fin supremo: la abolición de las clases. La coalición de las fuerzas de la clase obrera, lograda ya por la lucha económica, debe servirle asimismo de palanca en su lucha contra el Poder político de los explotadores. Puesto que los señores de la tierra y del capital se sirven siempre de sus privilegios políticos para defender y perpetuar sus monopolios económicos y para sojuzgar al trabajo, la conquista del Poder político se ha convertido en el gran deber del proletariado". O sobre la lucha sindical en "Salario, precio y ganancia": "el desarrollo de la moderna industria contribuye por fuerza a inclinar la balanza cada vez más en favor del capitalista en contra del obrero, y que, como consecuencia de esto, la tendencia general de la producción capitalista no es elevar al nivel medio normal del salario, sino, por el contrario, a hacerlo bajar, empujando el valor del trabajo mas o menos a su limite mínimo. Pero si la tendencia, dentro de tal sistema, es ésta; quiere esto decir que la clase obrera deba renunciar a defenderse contra los abusos del capital y deponer sus esfuerzos para aprovechar todas las posibilidades que se le ofrezcan para mejorar en parte su situación? Si lo hiciese, veriase degradada en una masa informe de hombres hambrientos y quebrantados, sin posibilidad de redención. Creo haber demostrado que las luchas de la clase obrera por obtener salarios normales son episodios inseparables de todo el sistema del salariado, que en el noventa y nueve por ciento de los casos sus esfuerzos por elevar sus salarios no son más que esfuerzos dirigidos a mantener en pie el valor dado de su trabajo, y que la necesidad de forcejear con el capitalista acerca de su precio va unida a la situación en que se ve colocado el obrero y que le obliga a venderse así mismo como una mercancía. Si en sus conflictos diarios con el capital cediesen cobardemente, se descalificarían ellos mismos para emprender otros movimientos de mayor envergadura. Pero, al mismo tiempo, y aun prescindiendo totalmente del esclavizamiento general que entraña el sistema del salariado, la clase obrera no debe exagerar a sus propios ojos el resultado final de estas luchas diarias. No debe olvidar que lucha contra los efectos, pero no contra las causas de estos efectos; que logra contener el movimiento descendente, pero no cambia su dirección; que aplica paliativos, pero no cura la enfermedad. No debe, por tanto entregarse por entero a esta guerra de guerrillas, que es inevitable y a la que la empujan continuamente los abusos incesantes del capital o las fluctuaciones del mercado. Debe saber que el sistema actual, aun con todas las miserias que vuelca sobre ella, engendra simultáneamente las condiciones materiales y las formas sociales necesarias para la reconstrucción económica de la sociedad. En vez del lema conservador de `Un salario justo por una jornada de trabajo justa!', deberá escribir en su bandera esta consigna revolucionaria: `Abolición del sistema del trabajo asalariado!' Los sindicatos trabajan bien como centros de resistencia contra los abusos del capital. Fracasan, en algunos casos, por usar poco inteligentemente su fuerza. Pero, generalmente, fracasan por limitarse a una guerra de guerrillas contra los efectos del sistema existente, en vez de esforzarse, al mismo tiempo, por cambiarlo, en vez de emplear sus fuerzas organizadas como palanca para la emancipación final de la clase obrera; es decir, para la abolición definitiva del sistema del trabajo asalariado." Y sobre la revolución lo sentado por Engels: "En la política no existen mas que dos fuerzas decisivas: la fuerza organizada del Estado, el ejército y la fuerza no organizada, la fuerza elemental de las masas populares"; así como: "Después del primer éxito grande, la minoría vencedora solía escindirse; una parte estaba satisfecha con lo conseguido; otra parte quería ir todavía mas allá y presentaba nuevas reivindicaciones, que, en parte al menos, iban también en interés real o aparente de la gran muchedumbre del pueblo. En algunos casos, estas reivindicaciones mas radicales prosperaban también; pero, con frecuencia, sólo por el momento, pues el partido mas moderada volvía a hacerse dueño de la Situación; y lo conquistado en el último tiempo se perdía de nuevo, total o parcialmente; y entonces, los vencidos clamaban traición o achacaban la derrota a la mala suerte. Pero, en realidad, las cosas ocurrían casi siempre así: las conquistas de la primera victoria solo se consolidaban mediante la segunda victoria del partido más radical; una vez conseguido esto, y con ello lo necesario por el momento, los radicales y sus éxitos desaparecían nuevamente de la escena. Todas las revoluciones de los tiempos modernos, a partir de la gran revolución inglesa del siglo XVII, presentaban estos rasgos, que parecían inseparables de toda lucha revolucionaria. Y estos rasgos parecían aplicables también a las luchas del proletariado por su emancipación; tanto mas cuanto que precisamente en l848 eran contados los que comprendían más o menos en qué sentido había que buscar esta emancipación." (Introducción a "La lucha de clases en Francia"). Y por el propio Marx en los siguientes párrafos: "Exceptuando unos pocos capítulos, todos los apartados importantes de los anales de la revolución de 1848 a 1849 llevan el epígrafe de Derrota de la revolución! Pero lo que sucumbía en estas derrotas no era la revolución. Eran los tradicionales apéndices prerrevolucionarios, las supervivencias resultantes de relaciones sociales que aún no se habían agudizado lo bastante para tomar una forma bien precisa de contradicciones de clase: personas, ilusiones, ideas, proyectos de los que no estaba libre el partido revolucionario antes de la revolución de Febrero y de los que no podía liberarlo la victoria de Febrero, sino solo una serie de derrotas. En una palabra: el progreso revolucionario no se abrió paso con sus conquistas directas tragicómicas, sino por el contrario, engendrando una contrarrevolución cerrada y potente, engendrando un adversario, en la lucha contra el cual el partido de la subversión maduró, convirtiéndose en un partido verdaderamente revolucionario"("La lucha de clases en Francia de 1848 a 1850"). "Las revoluciones burguesas, como la del siglo XVIII, avanzan arrolladoramente de éxito en éxito, sus efectos dramáticos se atropellan, los hombres y las cosas parecen iluminados por fuegos de artificio, el éxtasis es el espíritu de cada día; pero estas revoluciones son de corta vida, llegan enseguida a su apogeo y una larga depresión se apodera de la sociedad, antes de haber aprendido a asimilarse serenamente los resultados de su período impetuoso y agresivo. En cambio, las revoluciones proletarias, como las del siglo XIX, se critican constantemente a sí mismas, se interrumpen continuamente en su propia marcha, vuelven sobre lo que parecía terminado, para comenzarlo de nuevo desde el principio, se burlan concienzuda y cruelmente de las indecisiones, de los lados flojos y de la mezquindad de sus primeros intentos, parece que sólo derriban a su adversario para que éste saque de la tierra nuevas fuerzas y vuelva a levantarse más gigantesco frente a ellas, retroceden constantemente aterradas ante la vaga enormidad de sus propios fines, hasta que se crea una situación que no permite volverse atrás y las circunstancias mismas gritan: Hic Rhodus, hic salta!" (Aquí está la rosa, baila aquí!; esto es: demuestra con hechos lo que eres capaz de hacer.)."El dieciocho brumario de Luis Bonaparte"]. "En todas las revoluciones, al lado de los verdaderos revolucionarios, figuran hombres de otra naturaleza. Algunos de ellos, supervivientes de revoluciones pasadas, que conservan su devoción por ellas, sin visión del movimiento actual; pero dueños todavía de su influencia sobre el pueblo, por su reconocida honradez y valentía, o simplemente por la fuerza de la tradición; otros, simples charlatanes que, a fuerza de repetir año tras año las mismas declamaciones estereotipadas contra el gobierno del día, se han agenciado de contrabando una reputación de revolucionarios de pura cepa. Después del 18 de marzo salieron también a la superficie hombres de éstos, y en algunos casos lograron desempeñar papeles preeminentes. En la medida en que su poder se lo permitía, entorpecieron la verdadera acción de la clase obrera, lo mismo que otros de su especie entorpecieron el desarrollo completo de todas las revoluciones anteriores. Constituyen un mal inevitable; con el tiempo se les quita de en medio; pero a la Comuna no le fue dado disponer de tiempo." ("La guerra civil en Francia") Y sobre la misma cuestión fundamental, la lucha de clases, veamos lo sentado por Lenin; así sobre insurrección armada y lucha sindical y no contraponerlas: "Es erróneo desde el punto de vista teórico establecer un paralelo entre estas dos tareas, presentándolas como si estuviesen situadas en el mismo nivel: la `tarea de preparar la insurrección armada' y la `tarea de dirigir la lucha sindical'. Una tarea en el primer plano y otra en el segundo. Hablar así significa comparar y establecer un paralelo entre cosas de distinto orden. La insurrección armada es un medio de lucha política en un momento dado. La lucha sindical es una de las manifestaciones de todo el movimiento obrero permanentes, siempre necesarias bajo el capitalismo y obligatorias en todos los momentos. Engels, en un lugar citado por mí en Qué hacer? distingue tres formas fundamentales de la lucha proletaria: la económica, la política y la teórica, esto es, la sindical, la política y la teórica (científica, ideológica, filosófica). Cómo es posible colocar juntas una de estas formas fundamentales de lucha (la sindical) y el método propio de otra forma fundamental de lucha en un momento dado; colocar junto a la lucha sindical, como `tarea', un medio de lucha política que tiene carácter de actualidad y que se halla lejos de ser el único? Esto es simplemente absurdo...Junto a la `tarea de dirigir la lucha sindical' solo se puede colocar la tarea de dirigir toda la lucha política en general, la tarea de sostener la lucha ideológica en general y en su conjunto, y de ningún modo tales o cuales tareas parciales, determinadas y actuales de la lucha política o ideológica. "Desde el punto de vista de la táctica, la resolución, en su forma actual, plantea las tareas de la insurrección armada de una manera muy desafortunada. La insurrección armada es el medio supremo de la lucha política. Para el éxito de la insurrección desde el punto de vista del proletariado, es decir, para el éxito de una insurrección proletaria y dirigida por la socialdemocracia, y no de otra insurrección, es preciso un amplio desarrollo de todos los aspectos del movimiento obrero. Por eso, es archidesacertada la idea de contraponer la tarea de la insurrección a la tarea de dirigir la lucha sindical. Así se rebaja y se empequeñece la tarea de la insurrección. En lugar de la suma y coronación de todo el movimiento obrero en su conjunto, se destaca aparte la tarea de la insurrección. "El centro de gravedad no está en que los sindicatos sean 'estrechos', sino en vincular este aspecto (estrecho por ser uno solo) con los demás. Por consiguiente, o quitar ésto o hablar una vez mas de la necesidad de crear y reforzar la ligazon de un aspecto con todos los demas, impregnar a los sindicatos de un contenido social demócrata (léase comunista). de propaganda socialdemócrata, incorporarlos a toda la labor socialdemócrata, etc." "Los sindicatos podrían ampliar la base de la que nosotros extraigamos la fuerza para la insurrección, de modo que, lo diré una vez más, es erróneo contra poner lo uno a lo otro... "Es preciso no quedar al margen y, por encima de todo, no dar motivo para pensar que hay que quedar al margen, sino esforzarse por participar, por influir, etc. Pues hay una capa especial de obreros, los de edad madura, los que tienen familia, que aportan muy poco en la lucha política ahora, pero mucho en la lucha sindical. Hay que aprovechar esta capa, orientando sus pasos en este aspecto de la lucha. Para la socialdemocracia de Rusia es importante actuar con tino desde el comienzo mismo en los sindicatos, crear enseguida una tradición de iniciativa socialdemócrata , de participación socialdemócrata y de dirección socialdemócrata en este aspecto. Desde luego, pueden faltar fuerzas en la práctica, pero esto ya es una cuestión muy distinta; a demas, si se sabe utilizar todas las diversas fuerzas, siempre las encontraremos también para los sindicatos. Se han encontrado fuerzas para escribir una resolución sobre los sindicatos, es decir, para dirigirlos ideológicamente, y en esto está el quid!" ("A S.I.Gusev"). O hablando de "nuevos métodos de enseñar el dogma", "las verdades del marxismo": "Una época revolucionaria es para la socialdemocracia (como en todos los casos léase comunismo) lo mismo que los tiempos de guerra para un ejército. Es preciso multiplicar los cuadros de nuestro ejército, hacer que de reemplazos de paz se conviertan en reemplazos de guerra, movilizar las reservas, encuadrar bajo las banderas a los permisionarios, organizar nuevos cuerpos, destacamentos y servicios auxiliares. No hay que olvidar que en la guerra es inevitable y necesario completar filas con reclutas menos preparados, reemplazar a cada paso a oficiales con simples soldados, acelerar y simplificar la promoción de soldados como oficiales. Hablando sin metáforas: es preciso ampliar en gran medida toda clase de organizaciones del Partido o afectas a él para ir, siquiera sea en cierto grado, al compás del torrente centuplicado de la energía revolucionaria popular. Esto no significa, claro esta, que se deba relegar la firme preparación y la instrucción sistemática en las verdades del marxismo; pero es preciso tener en cuenta que ahora, en la preparación y en la instrucción, revisten mucha mas importancia las propias acciones militares, que educan a los no iniciados precisa y exclusivamente en nuestro espíritu. Es preciso tener presente que nuestra fidelidad 'doctrinaria' al marxismo se reafirma ahora por el hecho de que el curso de los acontecimientos revolucionarios da en todas partes lecciones concretas a las masas, y todas estas lecciones corroboran precisamente nuestro dogma. Por consiguiente, nosotros no hablamos de renunciar al dogma, ni de atenuar nuestra desconfianza y nuestros recelos hacia los intelectuales indefinidos y los botarates revolucionarios, sino todo lo contrario. Hablamos de los nuevos métodos de enseñar el dogma, métodos que un socialdemócrata no puede olvidar. Hablamos de lo importante que ahora es utilizar las lecciones concretas de los grandes acontecimientos revolucionarios para enseñar, no ya a los círculos, sino a las masas, nuestras viejas lecciones 'dogmáticas' relativas, por ejemplo, a la necesidad de fundir prácticamente el terror con la insurrección de las masas y a que tras el liberalismo de la sociedad instruída rusa es preciso saber advertir los intereses de clase de nuestra burguesía. O sea que no se trata de debilitar nuestras exigencias socialdemócratas y nuestra intransigencia ortodoxa, sino de reforzar lo uno y lo otro por nuevos caminos, con nuevos métodos de instrucción. En tiempos de guerra es preciso instruir a los reclutas directamente en las acciones militares. Asimilad, pues, con más audacia los nuevos métodos de instrucción, camaradas! Formad con más audacia nuevos y nuevos destacamentos, enviados al combate, reclutad más jóvenes obreros, ampliad los marcos habituales de todas las organizaciones del Partido, comenzando por los comités y terminando por los grupos de fábrica, sindicatos de taller y círculos estudiantiles! Recordad que toda lentitud por nuestra parte en esta obra redundará en beneficio de los enemigos de la socialdemocracia, pues los nuevos arroyos buscarán salida inmediatamente y, al no encontrar un cauce socialdemócrata, buscarán otros cauces. Recordad que cada paso práctico del movimiento revolucionario enseñará de manera inevitable e indefectible a los jóvenes reclutas precisamente la ciencia socialdemócrata, puesto que esta ciencia se basa en la apreciación objetiva y exacta de las fuerzas y tendencias de las diferentes clases, y la revolución no es otra cosa que la destrucción de las viejas superestructuras y la acción independiente de las diferentes clases, que tienden a crear a su modo una nueva superestructura. Pero no rebajéis nuestra ciencia revolucionaria reduciéndola a un dogma libresco, no la envilezcáis con frases miserables sobre la táctica-proceso y la organizatiónproceso, con frases que justifican la confusión, la indecisión y la falta de iniciativa. Dejad ancho campo a las más diversas iniciativas de los grupos y círculos más diferentes, teniendo presente que su acierto en la elección de camino está asegurado, no sólo y no tanto por nuestros consejos como por los dictados inexorables de la propia marcha de los acontecimientos revolucionarios. Se ha dicho hace ya mucho que en política hay que aprender a menudo del enemigo. Y en los momentos revolucionarios, el enemigo nos impone siempre justas deducciones con singular ejemplaridad y rapidez."("Nuevas tareas y nuevas fuerzas"). O planteando la necesidad de "arduas acciones preparatorias": "hoy te ponen en la mano la papeleta electoral: tómala aprende a organizarte para golpear con ella a tus enemigos y no para enviar al parlamento a unos prebendados que se aferran al escaño por temor a la cárcel. Mañana te quitan la papeleta electoral y te ponen en la mano un fusil y un excelente cañón de tiro rápido, última palabra de la técnica: toma estos instrumentos de muerte y destrucción, no prestes oído a los jeremías sentimentales que temen la guerra; en el mundo aún quedan demasiadas cosas que deben ser destruidas por el hierro y por el fuego para emancipar a la clase obrera, y si en las masas crecen la ira y la desesperación, si hay una situación revolucionaria, prepárate para crear nuevas organizaciones y para utilizar esos instrumentos tan útiles de muerte y destrucción contra tu gobierno y tu burguesía. No es fácil hacerlo, no cabe duda. Para ello harán falta arduas acciones preparatorias. Se requerirán muchos sacrificios. Es una nueva forma de organización y de lucha, que también debe ser aprendida, pero la ciencia no se adquiere sin errores ni derrotas. Esta forma de la lucha de clases es a la participación en las elecciones lo que el ataque es a las maniobras, a las marchas o a la permanencia en las trincheras. En la historia esta forma de lucha está muy pocas veces a la orden del día, pero en cambio su significación y sus consecuencias se extienden a decenios enteros. Los días en que se puede y se debe poner a la orden del día estas formas de lucha equivalen a veintenas de años de otras épocas históricas."("La bancarrota de la II Internacional"). Así como esta científica conclusión que la clase, el proletariado y el pueblo deben tener muy presente: "Una clase oprimida que no aspirase a aprender el manejo de las armas, a tener armas, esa clase oprimida solo merecería que se la tratara como a los esclavos. Nosotros, si no queremos convertirnos en pacifistas burgueses o en oportunistas, no podemos olvidar -que vivimos en una sociedad de clases, de la que no hay ni puede haber otra salida que la lucha de clases. En toda sociedad de clases -ya se funda en la esclavitud, en la servidumbre, o, como ahora, en el trabajo asalariado-, la clase opresora está armada. No solo el ejército regular moderno, sino también la milicia actual -incluso en las repúblicas burguesas mas democráticas, como, por ejemplo, en Suiza-, representan el armamento de la burguesía contra el proletariado. Esta es una verdad tan elemental, que apenas si hay necesidad de detenerse especialmente en ella. Bastará recordar el empleo del ejército contra los huelguistas en todos los países capitalistas. El armamento de la burguesía contra el proletariado es uno de los hechos más considerables, fundamentales e importantes de la actual sociedad capitalista. Y ante semejante hecho se propone a los socialdemócratas revolucionarios que planteen la `reivindicación' del 'desarme'! Esto equivale a renunciar por completo al punto de vista de la lucha de clases, a renegar de toda idea de revolución. Nuestra consigna debe ser: armar al proletariado para vencer, expropiar y desarmar a la burguesía. Esta es la única táctica posible para una clase revolucionaria, táctica que se desprende de todo el desarrollo objetivo del militarismo capitalista, y que es prescrita por este desarrollo." ("El programa militar de la revolución proletaria"). O sus grandes tesis, plenamente válidas, sobre imperialismo, proceso de la burguesía, situación internacional contemporánea y era de guerra: "Hay que empezar por definir, del modo mas exacto posible y completo, lo que es el imperialismo. El imperialismo es una fase histórica especial del capitalismo que tiene tres particularidades; el imperialismo es: 1) capitalismo monopolista; 2) capitalismo parasitario o en descomposición; 3) capitalismo agonizante." ("El imperialismo y la escisión del socialismo") "El imperialismo es la continuación del desarrollo del capitalismo, su fase superior, en cierto aspecto, una fase de transición hacia el socialismo. No puedo por tanto considerar la adición de una análisis del imperialismo al análisis de las características básicas del capitalismo en general como `mecánica'. El imperialismo, en realidad, no transforma ni puede transformar el capitalismo de arriba abajo. El imperialismo complica y acentúa las contradicciones del capitalismo, `embrolla' el monopolio con la libre competencia, pero no puede eliminar el cambio, el mercado, la competencia, las crisis, etc. El imperialismo es el capitalismo marchitándose, pero que aún no se ha marchitado, agonizante, pero no muerto. No los simples monopolios, sino los monopolios en conjunción con el cambio, los mercados, la competencia, las crisis -tal es la característica esencial del imperialismo en general." ("Materiales para la revisión del programa del Partido"). "La división usual en épocas históricas...es esta: (1) 1789-1871; (2) 1871-1914; (3) 1914-?... La primera época, de la gran revolución francesa a la guerra franco-prusiana, es la época del auge de la burguesía, de su completa victoria. Esta es la línea ascendente de la burguesía, la época de los movimientos democrático-burgueses en general, de los movimientos nacional burgueses en particular, la época del rápido derrumbe de las anticuadas instituciones feudales absolutistas. La segunda época es la época del completo dominio y la declinación de la burguesía, una época de transición de la burguesía progresista al reaccionario, incluso el más reaccionario, capital financiero. Esta es la época cuando se están preparando y se están agrupando lentamente las fuerzas de una nueva clase de democracia contemporánea. La tercera época, que está apenas comenzando, coloca a la burguesía en la misma `posición' que ocuparon los señores feudales durante la primera época. Esta es la época del imperialismo y de las convulsiones imperialistas y de las convulsiones producidas por el imperialismo. .... ... ... Los conflictos internacionales en la tercera época, en lo que respecta a la forma, siguen siendo los mismos conflictos internacionales de la primera época, pero su contenido social y de clase ha cambiado fundamentalmente. El circunambiente histórico objetivo ha pasado a ser enteramente distinto . En lugar de la lucha del capital ascendente que procura la liberación nacional contra el feudalismo, ha aparecido la lucha del mas reaccionario, anticuado y agonizante capital financiero, que va de cabeza a su ruina, contra las nuevas fuerzas. El marco de los estados nacional-burgueses, que en la primera época fue un apoyo para el desarrollo de las fuerzas productivas de la humanidad, en el proceso entonces de liberarse del feudalismo, ha pasado ahora, en la tercera época a convertirse en un obstáculo para el ulterior desarrollo de las fuerzas productivas. De una clase ascendente y avanzada la burguesía se ha convertido en una clase que se hunde, decadente, internamente muerta, reaccionaria. La clase ascendente -en una amplia escala histórica-lo es ahora otra enteramente distinta." ("Bajo una bandera ajena"). "Las relaciones económicas del imperialismo constituyen la base de la situación internacional hoy existente. A lo largo de todo el siglo XX se Ha definido por completo esta nueva fase del capitalismo, su fase superior y ultima." ("El Congreso de la Internacional Comunista"). "Cual es la idea mas importante, la idea fundamental de nuestras tesis? Es la distinción entre pueblos oprimidos y pueblos opresores. Nosotros subrayamos esta distinción, en oposición a la II Internacional y a la democracia burguesa. Para el proletariado y para la Internacional Comunista tiene particular importancia en la época del imperialismo observar los hechos económicos concretos y tomar como base, al resolver las cuestiones coloniales y nacionales, no tesis abstractas, sino los fenómenos de la realidad concreta. El rasgo distintivo del imperialismo consiste en que actualmente, como podemos ver, el mundo se halla dividido, por un lado, en un gran numero de pueblos oprimidos y, por otro, en un numero insignificante de pueblos opresores, que disponen de riquezas colosales y de una poderosa fuerza militar." (Id.). "Hemos visto ya cuantas dificultades causo la guerra civil en Rusia, y como esta se va entrelazando a toda una serie de guerras. Los marxistas no han olvidado jamas que la violencia acompañara inevitablemente a la bancarrota del capitalismo en toda su extensión y al nacimiento de la sociedad socialista. Y esta violencia llenara todo un período histórico mundial, toda una era de las guerras mas variadas: guerras imperialistas, guerras civiles dentro de cada país, combinaciones de unas y otras, guerras de liberación de las nacionalidades oprimidas por el imperialismo, combinaciones diversas entre las potencias imperialistas que intervendrán inevitablemente en diversas alianzas, en esta época de enormes trusts y consorcios capitalistas estatales y monopolios militares. Esta época -de gigantescas bancarrotas, de decisiones masivas tomadas bajo presión de fuerzas militares, de crisis-ya comenzó; la podemos distinguir claramente, pero solo es el comienzo." ("Acerca de los principios de organización del partido del proletariado") Y, finalmente, éstas sobre puntos como: indiferencia política: "La indiferencia política no es otra cosa que saciedad política. El que esta harto es `indiferente ' e `insensible' ante el problema del pan de cada día; pero el hambriento será siempre un hombre `de partido' en esta cuestión". Contradicciones del enemigo y con signas integras: "La clase obrera debe aprovechar todas las posibles vacilaciones del gobierno, al igual que las discrepancias entre la burguesía y el campo reaccionario, para acentuar la presión tanto en el terreno de la lucha económica como en la lucha política. Pero la clase obrera, precisamente para aprovechar con fruto la situación, debe mantener las consignas revolucionarias íntegras". Solo la lucha educa: "la verdadera educación de las masas no puede ir nunca separada de la lucha política independiente, y sobre todo, de la lucha revolucionaria de las propias masas. Solo la lucha educa a la clase explotada, sólo la lucha le descubre el volumen de su fuerza, amplia sus horizontes, eleva su capacidad, aclara su inteligencia y forja su voluntad". Lucha económica y capas mas atrasadas: "De aquí se deduce con toda claridad que sólo la lucha económica, que solo la lucha por un mejoramiento directo e inmediato de su situación, es capaz de poner en movimiento a las capas mas atrasadas de las masas explotadas, de educarlas verdaderamente y convertirlas -en época de revolución en el curso de unos pocos meses, en un ejército de luchadores políticos. Confiar sólo en la fuerza de la clase: "El principio fundamental, el primer precepto de todo movimiento sindical, consiste en lo siguiente: no confiar en el `Estado', confiar únicamente en la fuerza de su clase. El Estado es la organización de la clase dominante... ... No confiéis en las promesas, confiad únicamente en la fuerza de la union y de la conciencia de vuestra clase!". Nadie ayudará a los pobres si él mismo no se ayuda: "Nadie ayudará a los pobres si permanecen aislados. Ningún `Estado' ayudará al obrero asalariado del campo, al brasero, al jornalero, al campesino pobre, al semiproletario, y si él mismo no se ayuda. El primer paso para ello es la organización clasista independiente del proletariado agrícola". Y la vida enseña: "La vida enseña. La lucha real es la que mejor resuelve las cuestiones que hace aún muy poco eran tan discutidas." Y para concluir esta cuestión fundamental, la lucha de clases, en los propios textos de los clásicos del marxismo, veamos lo establecido por el Presidente Mao Tsetung sobre el imperialismo, tema clave por él desarrollado; comencemos por la naturaleza de tigre de papel del imperialismo y la reacción: "Todos los reaccionarios son tigres de papel. Parecen temibles, pero en realidad no son tan poderosos. Visto en perspectiva, no son los reaccionarios sino el pueblo quien es realmente poderoso". Y: "Estados Unidos es un tigre de papel. No crean ustedes en él. Se puede agujerearlo de un solo golpe. La Unión Soviética revisionista también es un tigre de papel". Y sobre el doble carácter del imperialismo y la reacción: "Así como en el mundo no hay nada sin doble naturaleza (ésta es la ley de la unidad de los contrarios), también el imperialismo y todos los reaccionarios tienen un doble carácter: son a la vez tigres auténticos y tigres de papel. En la historia, antes de conquistar el Poder y durante algún tiempo después de haberlo conquistado, la clase de los esclavistas, la clase terrateniente feudal y la burguesía eran vigorosas, revolucionarias y progresistas; eran tigres auténticos. Pero, con el tiempo, como sus contrarios -la clase de los esclavos, el campesinado y el proletariado-crecían y se fortalecían gradualmente, luchaban contra ellas y se volvían más y más formidables, estas clases gobernantes se transformaron poco a poco en su reverso, se transformaron en reaccionarias, en retrógadas, en tigres de papel, y finalmente fueron derrocadas, o serán derrocadas, por el pueblo. Las clases reaccionarias, retrógradas y decadentes conservaban este doble carácter incluso en la lucha a muerte que el pueblo sostenía contra ellas. Por una parte, eran tigres auténticos, devoraban a la gente, la devoraban por millones y decenas de millones. La causa de la lucha popular atravesaba un período de dificultades y penalidades y un camino lleno de recodos. En China, para destruir la dominación del imperialismo, el feudalismo y el capitalismo burocrático, el pueblo chino necesito mas de cien años y perdió decenas de millones de vidas antes de lograr la victoria en 1949. Fíjense! No eran tigres vivos, tigres de hierro, tigres auténticos? Sin embargo, al final se transformaron en tigres de papel, tigres muertos, tigres de requesón de soya. Estos son hechos históricos. No ha visto y oído contar la gente tales hechos?; En verdad ha habido millares y decenas de millares de ellos Millares y decenas de millares! Por lo tanto, el imperialismo y todos los reaccionarios, mirados en su esencia, en perspectiva, desde el punto de vista estratégico, deben ser considerados como lo que son: tigres de papel. En esto se basa nuestro concepto estratégico. Por otra parte, también son tigres vivos, tigres de hierro, tigres auténticos, que devoran a la gente. En esto se basa nuestro concepto táctico." ("Intervención en Reunión del Buró Político en Wuchang"). En cuanto a la ley del imperialismo y, como contraparte, la del pueblo: "Provocar disturbios, fracasar, volver a provocar disturbios, fracasar de nuevo, y así hasta la ruina: ésta es la lógica de los imperialistas y de todos los reaccionarios del mundo frente a la causa del pueblo, y nunca marcharan en contra de esta lógica. Esta es una ley marxista. Cuando decimos que `el imperlalismo es feroz', queremos decir que su naturaleza nunca cambiará, que los imperialistas nunca abandonaran sus cuchillas de carnicero ni se convertirán jamás en Budas, y así hasta su ruina. Luchar, fracasar, volver a luchar, fracasar de nuevo, volver otra vez a luchar, y así hasta la victoria: ésta es la lógica del pueblo, y el tampoco marchara jamás en contra de ella. Esta es otra ley marxista. La revolución del pueblo ruso siguió esta ley, y la ha seguido también la revolución del pueblo chino." ("Desechar las ilusiones, prepararse para la lucha"). Y los pueblos del mundo no necesitan del imperialismo: "Todas las naciones oprimidas quieren la independencia. Todo esta sujeto a cambio. Las grandes fuerzas decadentes tendrán que ceder el lugar a las pequeñas fuerzas nacientes. Las fuerzas pequeñas se transformarán en grandes, porque la gran mayoría de la gente exige el cambio. La fuerza del imperialismo norteamericano, que es grande, pasará a ser pequeña, debido a que el pueblo norteamericano también esta descontento con el gobierno de su país. ... ... ... La dominación de Chiang Kai-shek en China, reconocida por los gobiernos de todos los países del mundo, perduró veintidós años, representando la mayor fuerza del país. Nuestra fuerza era pequeña; aunque, en un tiempo, nuestro Partido llegó a tener unos cincuenta mil militantes, sólo le quedaron unos miles luego de la represión contrarrevolucionaria. El enemigo hacia estragos por todas partes. Pero también esta vez rigió la misma ley: Los poderosos fracasaron, pues se hallaban separados del pueblo, en tanto que los débiles salieron victoriosos, porque estaban vinculados con el pueblo y trabajaban por él. Este fue efectivamente el desenlace. En los tiempos de nuestra guerra contra el Japón, éste era muy poderoso, las tropas kuomintanistas se encontraban arrinconadas en regiones apartadas, y las fuerzas armadas dirigidas por el Partido Comunista sólo podían hacer la guerra de guerrillas en las zonas rurales detrás de las líneas enemigas. El Japón ocupó grandes ciudades como Pekin, Tientsin, Shanghai, Nankin, Wuján y Cantón. Sin embargo, igualmente en virtud de esta ley, el militarismo japonés, así como la Alemania hitleriana, se vino abajo al cabo de unos pocos años. Nosotros pasamos por numerosas dificultades: Fuimos expulsados del Sur y obligados a ir al Norte, y el número de nuestros efectivos se redujo de varios centenares de miles a unas decenas de miles. Al final de la Gran Marcha de veinticinco mil li, sólo nos quedaban veinticinco mil hombres. ... ... ... En la actualidad, el imperialismo norteamericano exhibe una gran fuerza, pero en realidad no la tiene. Políticamente es muy débil, porque está divorciado de las grandes masas populares y no agrada a nadie; tampoco agrada al pueblo norteamericano. Aparentemente es muy poderoso, pero en realidad no tiene nada de temible: Es un tigre de papel. Mirado por fuera parece un tigre, pero está hecho de papel y no aguanta un golpe de viento y lluvia. Pienso que Estados Unidos no es más que un tigre de papel. Toda la historia, la milenaria historia de la sociedad de clases de la humanidad, ha confirmado este punto: Lo poderoso tiene que ceder su lugar a lo débil. Esto también es así en América. Sólo podrá haber paz cuando haya sido eliminado el imperialismo. Llegará el día en que el tigre de papel será destrozado. Pero no desaparecerá por si mismo; para ello hace falta el golpe del viento y la lluvia. Cuando afirmamos que el imperialismo norteamericano es un tigre de papel, estamos hablando en términos estratégicos. Visto como un todo, debemos despreciarlo; pero, en cuanto a cada una de sus partes, debemos tomarlo muy en serio. El posee garras y dientes. Para acabar con él hemos de hacerlo por partes. Si, por ejemplo, tiene diez dientes y en el primer golpe le arrancamos uno, le quedarán nueve; le arrancamos otro más y le quedarán ocho. Cuando le hayamos quitado todos los dientes, le quedaran todavía las garras. Siempre que procedamos paso a paso y de modo concienzudo, conseguiremos finalmente el éxito. Desde el punto de vista estratégico, se debe despreciar por completo al Imperialismo norteamericano, mientras que en lo táctico hay que tomarlo muy en serio. En la lucha contra él, es necesario prestar atención a cada batalla y a cada caso. Actualmente, Estados Unidos es un país poderoso; pero, examinándolo con una óptica amplia, en su conjunto y en perspectiva, se hallará que este tigre morirá sin remedio, porque es impopular, aplica una política que no complace a nadie, y oprime y explota a los pueblos. Vistas así las cosas, no tiene nada de temible y podemos despreciarlo. Sin embargo, Estados Unidos todavía cuenta con cierta fuerza, produce anualmente más de cien millones de toneladas de acero y atropella a la gente por todas partes. Se hace por eso necesario proseguir la lucha contra él, empeñar grandes esfuerzos en ello y arrebatarle posición por posición. Esto requiere tiempo. Todo parece indicar que los países de América, Asia y Africa tendrán que seguir peleando con Estados Unidos hasta el fin, hasta que el viento y la lluvia destruyan este tigre de papel. En interés de la lucha contra el imperialismo norteamericano, los latinoamericanos de ascendencia europea deben unirse con la población indígena en los países donde la haya. Se puede, me parece, diferenciar a los blancos, de ascendencia europea, en dos partes: los dominantes y los dominados. Así, los blancos oprimidos podrán fácilmente acercarse a los indígenas, pues su situación es la misma. Nuestros amigos latinoamericanos, asiáticos y africanos y nosotros estamos todos en la misma posición y realizamos el mismo trabajo haciendo algo en favor de los pueblos para disminuir la opresión que sobre éstos ejerce el imperialismo. Si hacemos bien ese trabajo, podremos liquidar de raíz la opresión imperialista. En este sentido somos camaradas. En la lucha contra la opresión imperialista, ustedes y nosotros tenemos idéntica naturaleza; lo único que nos diferencia es la ubicación geográfica, la nacionalidad y el idioma. En cambio, somos diferentes por naturaleza de los imperialistas y el solo verlos nos produce malestar. Para qué se necesita el imperialismo? No lo necesita el pueblo chino, no lo necesitan los demas pueblos del mundo. No hay necesidad de que exista el imperialismo." ("El imperialismo norteamericano es un tigre de papel"). Y sobre la guerra como continuación de la política y solución del problema de la conquista y defensa del Poder. Comencemos por la condición inevitable de revolución y guerra revolucionaria en la sociedad de clases: "La guerra, que ha existido desde la aparición de la propiedad privada y las clases, -es la forma más alta de lucha para resolver las contradicciones entre clases, naciones, Estados o grupos políticos, cuando estas contradicciones han llegado a una determinada etapa de su desarrollo." ("Problemas estratégicos de la guerra revolucionaria de China"). "En la sociedad de clases, las revoluciones y las guerras revolucionarias son inevitables; sin ellas, es imposible realizar saltos en el desarrollo social y derrocar a las clases dominantes reaccionarias, y, por lo tanto, es imposible que el pueblo conquiste el Poder" ("Sobre la contradicción") "La historia demuestra que las guerras se dividen en dos clases: las justas y las injustas. Todas las guerras progresistas son justas y todas las que impiden el progreso son injustas. Los comunistas nos oponemos a todas las guerras injustas, que impiden el progreso, pero no estamos en contra de las guerras justas, progresistas. Los comunistas, lejos de oponernos a estas últimas, participamos activamente en ellas." ("Sobre la guerra prolongada"). "La guerra, ese monstruo de matanza entre los hombres, será finalmente eliminada por el progreso de la sociedad humana y lo será en un futuro no lejano. Pero solo hay un medio para eliminarla: oponer la guerra a la guerra, oponer la guerra revolucionaria a la guerra contrarrevolucionaria, oponer la guerra revolucionaria nacional a la guerra contrarrevolucionaria nacional y oponer la guerra revolucionaria de clase a la guerra contrarrevolucionaria de clase" ("Problemas estratégicos de la guerra revolucionaria de China"). En cuanto a lado positivo de la guerra: "Una gran revolución no puede evitar pasar por una guerra civil. Esta es una ley. Si no se ve mas que el lado negativo de la guerra y no su lado positivo no se tiene mas que una vision parcial del problema de la guerra. Hablar únicamente del carácter destructivo de la guerra es perjudicial para la revolución popular" ("Notas de lectura sobre el `Manual de Economía' de la Union Soviética"). Y frente a la reaccionaria posición de centrar en las armas: "Esta es la llamada teoría de que `las armas lo deciden todo' teoría mecanicista y punto de vista subjetivo y unilateral sobre el problema de la guerra. Nuestro punto de vista es opuesto a esta teoría; no solo tenemos en cuenta las armas, sino también los hombres. Las armas son un factor importante en la guerra, pero no el decisivo. El factor decisivo es el hombre, y no las cosas. La correlación de fuerzas es determinada no sólo por la potencia militar y económica, sino también por los recursos humanos y el apoyo popular. La potencia militar y económica es manejada por el hombre." (Sobre la guerra prolongada"). Igualmente: "Desde que la historia existe, en las guerras revolucionarias, los que tienen armas de calidad inferior han vencido siempre a los que tienen armas de calidad superior. En China, durante los períodos de la guerra civil, la guerra de resistencia contra el Japón y de la Guerra de Liberación, no teníamos el poder en todo el país y no poseíamos arsenales modernos. Querer disponer absolutamente de las armas más modernas antes de comprometerse en la guerra, antes de emprender la guerra, es desarmarse a si mismo." ("Notas de lectura sobre el 'Manual de Economía' de la Unión Soviética"). Resaltando la actividad consciente en la acción bélica, el Presidente Mao estableció: "La actividad consciente es un rasgo característico del hombre, quien lo manifiesta intensamente en la guerra. La victoria o la derrota en una guerra depende, por supuesto, de las condiciones militares, políticas, económicas y geográficas de ambos bandos, de la naturaleza de la guerra que hace cada uno y del apoyo internacional de que uno y otro gozan, pero no sólo de estos factores; todos ellos no hacen más que proporcionar la posibilidad de la victoria o la derrota, y no deciden por sí solos el desenlace de la guerra. Para decidirlo, es preciso agregar el esfuerzo subjetivo, esto es, la dirección y realización de la guerra, la actividad consciente en ella. Quienes dirigen una guerra no pueden pretender ganarla traspasando los limites impuestos por las condiciones objetivas, pero si pueden y deben, dentro de tales limites, esforzarse con su actividad consciente por alcanzar la victoria. El escenario de la acción para los mandos de una guerra debe construirse dentro de lo que permiten las condiciones objetivas, pero en este escenario pueden dirigir la representación de muchos dramas marciales, grandiosos y llenos de sonido y color. Sobre la base material objetiva dada, los mandos de la Guerra de Resistencia deben poner en juego su capacidad y conducir a todas sus fuerzas para aplastar a los enemigos de la nación, transformar la situación actual en que nuestra sociedad y nuestro país sufren la agresión y la opresión, y crear una nueva China libre e igual en derechos; es en este sentido que puede y debe ejercerse nuestra capacidad subjetiva para dirigir la guerra. No queremos que ninguno de nuestros mandos de la Guerra de Resistencia se aparte de las condiciones objetivas y se convierta en un impulsivo que actúe de manera arrebatada, pero debemos alentar a cada uno de ellos para que se transforme en un jefe valeroso y sagaz. Nuestros mandos deben poseer no sólo el denuedo necesario para aplastar al enemigo, sino también la capacidad para dominar el curso entero de la guerra en todas sus vicisitudes y en todo su desarrollo. Nadando en el océano de la guerra, un mando no sólo debe evitar hundirse, sino también asegurarse la llegada a la orilla opuesta con brazadas medidas. La estrategia y la táctica, como leyes de la dirección de la guerra, constituyen el arte de nadar en el océano de la guerra." ("Sobre la guerra prolongada"). Y en relación con la bomba atómica ("tigre de papel"), el chantaje atómico y la guerra mundial: "Nosotros nos guiamos por estos dos principios: Primero, no queremos la guerra y, segundo, si alguien nos invade, le daremos un resuelto contragolpe. Es en este espíritu en el que educamos a los militantes del Partido Comunista y a todo nuestro pueblo. El chantaje atómico de los EE.UU. no intimida al pueblo chino. Nuestro país tiene 600 millones de habitantes y 9.600.000 Kilómetros cuadrados de superficie. Ese montoncillo de bombas atómicas que poseen los EE.UU. no es suficiente para acabar con los chinos. Aun en el caso de que los EE. UU., contando con bombas atómicas de un poderío mucho mayor que el actual, las arrojaran sobre China hasta horadar el globo terrestre y volarlo, eso, aunque podría ser un acontecimiento de gran magnitud para el sistema solar, no significaría mucho para el universo en su conjunto. Nosotros solemos decir que lo que tenemos es mijo más fusiles. Los EE.UU., en cambio, poseen aviones más bombas atómicas. Pero, si los EE.UU., con sus aviones y bombas atómicas, desencadenan una guerra de agresión contra China, ésta, con su mijo y sus fusiles, saldrá triunfante. Los pueblos del mundo entero nos apoyarán. Como resultado de la Primera Guerra Mundial, en Rusia se liquidó al zar, así como a los terratenientes y a los capitalistas. La Segunda Guerra Mundial condujo al derrocamiento de Chiang Kaishek y de los terratenientes en China y a la emancipación de los países de Europa Oriental y algunos otros países asiáticos. Si los EE.UU. desatan una tercera conflagración mundial--admitamos que dure ocho o diez años--, el resultado será la liquidación de las clases dominantes de los EE.UU. y de lnglaterra y demás países cómplices y la transformación de la mayor parte del mundo en países dirigidos por partidos Comunistas. Las guerras mundiales nunca terminan en favor de los belicistas, sino de los partidos comunistas y los pueblos revolucionarios del mundo. Si los belicistas desencadenan la guerra, no deben culparnos de la revolución en que nos alzaremos, o sea, culparnos de `actividades subversivas', término tan manoseado por ellos. Mientras no desaten la guerra, podrán prolongar un poco su existencia en este planeta. Cuanto más temprano la desaten, más pronto serán barridos de la faz de la Tierra. Llegado ese momento, se fundará una ONU de los pueblos, con sede posiblemente en Shanghai o en algún lugar de Europa o en la misma Nueva York, si para entonces los belicistas norteamericanos han sido liquidados totalmente." ("La bomba atómica no intimada al pueblo chino"). Firme posición ligada al gran llamamiento: "Pueblos de todo el mundo, unámonos y opongamonos a la guerra de agresión que desencadene cualquier imperialismo o el socialimperialismo, opongamonos especialmente a la guerra de agresión en la cual se usen bombas atómicas como armas! Si tal estalla, los pueblos del mundo entero debemos eliminarla con la guerra revolucionaria, y debemos hacer los preparativos ahora mismo! ". Y la trascendental tesis: "En cuanto al problema de la guerra mundial no existen mas que dos posibilidades: o la guerra hace estallar la revolución, o la revolución impide la guerra." Finalmente, en este punto, el centro de la teoría y practica militar del marxismo-leninismo-maoísmo es la guerra popular, planteada en los siguientes términos. en "Sobre el Gobierno de Coalición', partiendo del ejército de nuevo tipo que, bajo la dirección de un verdadero Partido Comunista, es el único capaz de desarrollarla: "Este ejército es poderoso porque todos sus hombres poseen una disciplina consciente; se han unido y luchan, no por los intereses egoístas de unos cuantos individuos o de un reducido grupo, sino por los intereses de las grandes masas populares y de toda la nación. El único propósito de este ejército es mantenerse firmemente junto al pueblo chino y servirlo de todo corazón. Guiado por tal propósito, este ejército tiene un espíritu intrépido; está decidido a vencer a todo enemigo y jamás se dejará someter. Sean cuales fueren las dificultades y privaciones, mientras quede un solo hombre, continuará luchando. Guiado por tal propósito, este ejército ha alcanzado una excelente unidad tanto en lo interno como en lo externo. En el orden interno, existe unidad entre oficiales y soldados, entre los niveles superiores e inferiores y entre el trabajo militar, el político y el de los servicios de retaguardia. En el orden externo, existe unidad entre el ejército y el pueblo, entre el ejército y los organismos gubernamentales y entre nuestras tropas y las tropas amigas. Todo lo que perjudique a la unidad debe ser eliminado. Guiado por tal propósito, este ejército aplica una política correcta para ganarse a los oficiales y soldados del enemigo, así como en el trato a los prisioneros. Acoge y reeduca en forma apropiada a todos aquellos que se rinden voluntariamente, se pasan a nuestro lado o, después de deponer las armas, se muestran dispuestos a incorporarse a la lucha contra el enemigo común. Prohibe matar, maltratar o humillar a los prisioneros. Guiado por tal propósito, este ejército ha elaborado una serie de principios estratégicos y tácticos indispensables para la guerra popular. Sabe realizar la ágil y flexible guerra de guerrillas de acuerdo con las cambiantes condiciones concretas, y también hacer la guerra de movimientos. Guiado por tal propósito, este ejército ha creado un sistema de trabajo político indispensable para la guerra popular y cuyo objetivo es promover la unidad en sus propias filas, la unidad con los ejércitos amigos y la unidad con el pueblo, desintegrar las fuerzas enemigas y garantizar la victoria en el combate. Guiado por tal propósito, todo este ejército, en las condiciones de la guerra de guerrillas, puede dedicarse, y efectivamente se dedica, en los intervalos entre batalla y batalla y en las horas que le deja libres el adiestramiento militar, a la producción de cereales y demás artículos de primera necesidad para poder autoabastecerse totalmente, en un 50 por ciento o en una proporción menor, y así superar las dificultades económicas, mejorar sus condiciones de vida y aliviar la carga del pueblo. Además, en sus diversas bases de apoyo militares, utilizando todas las posibilidades, ha establecido un buen número de pequeñas fábricas de armamento. Este ejército es poderoso, además, porque en coordinación con él combaten vastas organizaciones armadas de masas: los cuerpos populares de autodefensa y las milicias. En las regiones liberadas de China, todos los hombres y mujeres jóvenes o de mediana edad están organizados en cuerpos populares antijaponeses de autodefensa sobre la base de la voluntariedad y de los principios democráticos y sin apartarse de la producción. La flor y nata de dichos cuerpos, excepto aquellos que se incorporan al ejército o a las unidades guerrilleras, pasa a formar las milicias populares. Sin la cooperación de estas fuerzas armadas de masas no seria posible derrotar al enemigo. Este ejército es poderoso, finalmente, porque se divide en dos partes: las fuerzas principales y las fuerzas regionales; las primeras se mantienen listas en todo momento para operar en cualquier región, y las segundas se dedican defender sus propias regiones y atacar allí al enemigo, en coordinación con las milicias populares y los cuerpos de autodefensa. Esta división del trabajo ha recibido el sincero apoyo del pueblo. De no ser por esta correcta división del trabajo, si, por ejemplo, se prestara atención sólo al papel de las fuerzas principales descuidando el de las regionales, tampoco sería posible derrotar al enemigo en las condiciones de las regiones liberadas de China. Las fuerzas regionales han organizado numerosos destacamentos de trabajo armados compuestos de hombres bien preparados y, por lo tanto, más aptos para el trabajo militar, político y de masas, que penetran profundamente en la `retaguardia enemiga dentro de la retaguardia enemiga', lo atacan y movilizan a las masas para la lucha antijaponesa, en coordinación con las operaciones militares frontales de las diversas regiones liberadas. Estos destacamentos han obtenido grandes éxitos. En las regiones liberadas de China, respondiendo al llamamiento del Poder democrático y bajo su dirección, toda la población civil que se opone a la agresión japonesa se ha agrupado en organizaciones obreras, campesinas, juveniles, femeninas, culturales, profesionales, etc., que cumplen fervientemente todo tipo de tareas en apoyo del ejército. Se trata no solamente de movilizar a la gente para que ingrese en el ejército, transporte víveres para éste, se preocupe por las familias de los soldados y ayude a las tropas a superar sus dificultades materiales, sino también de movilizar a las unidades guerrilleras, las milicias populares y los cuerpos de autodefensa, para que ampliamente realicen ataques por sorpresa y coloquen minas, efectúen acciones de reconocimiento, eliminen a los agentes del enemigo, transporten y protejan a los soldados heridos y ayuden directamente al ejército en sus operaciones. Al mismo tiempo, todo el pueblo de las regiones liberadas trabaja con entusiasmo en la construcción política, económica, cultural y sanitaria. A este respecto, lo más importante es que se moviliza a toda la población para la producción de cereales y demás artículos de primera necesidad, y que en todas las entidades oficiales y escuelas, salvo casos excepcionales, se dedica el tiempo libre a la producción con miras al autoabastecimiento; esto, sumado a la campaña por la producción emprendida con el mismo propósito por el pueblo y el ejército, ha creado un gran auge de la producción, lo que ha permitido sostener la prolongada Guerra de Resistencia. El enemigo ha causado daños extraordinariamente graves en las regiones liberadas de China; y las inundaciones, sequías y plagas también las azotan con frecuencia. Sin embargo, bajo la dirección del Poder democrático, el pueblo ha superado y supera en forma organizada esas dificultades, y las grandes campañas de masas para exterminar langosta, domeñar los ríos y proporcionar socorro a las víctimas de las calamidades naturales, han dado resultados sin precedentes en la historia; todo esto nos ha permitido preservar por largo tiempo en la Guerra de Resistencia contra el Japón. En resumen, todo para el frente, todo para la derrota de los agresores japoneses y para la liberación del pueblo chino: esta es la consigna general, la política general del ejército y el pueblo de las regiones liberadas de China. He aquí la verdadera guerra popular. Sólo con una guerra así podemos vencer al enemigo de la nación. El Kuomintang sufre derrotas precisamente porque se opone con frenesí a la guerra popular. Una vez equipado con armas modernas, el ejército de las regiones liberadas de China se hará aún más poderoso y podrá derrotar definitivamente a los agresores Japoneses." Y dentro de esta misma cuestión fundamental, la lucha de clases, en el Presidente Mao, veamos otro tema básico: masas y revolución. Tomemos como punto de partida las siguientes posiciones de principio del maoismo: "El marxismo consiste en miles de verdades, pero todas se reducen a una sola: 'La rebelión se justifica'. Durante miles de años se decía que es justo oprimir, es justo explotar y está mal rebelarse. Este veredicto fue revocado solamente con la aparición del marxismo. Es una gran contribución. Fue mediante la lucha que el proletariado aprendió esta verdad, y Marx sacó la conclusión. Y a partir de esta verdad, sigue la resistencia, lucha y batalla por el socialismo". "La lnternacional y el articulo de Lenin expresan cabalmente un punto de vista y una concepción del mundo marxistas. Lo que dicen es que los esclavos deben alzarse y luchar por la verdad. Nunca ha habido un salvador supremo, ni podemos atenernos a dioses o emperadores. Nuestra salvación : depende completamente de nosotros mismos. Quién ha creado el mundo de los hombres? Nosotros, las masas trabajadoras...". "El pueblo, y sólo el pueblo, es la fuerza motriz que hace la historia mundial". "Bajo la dirección del Partido Comunista, mientras existan los hombres, se podrá realizar toda clase de milagros". "Ir contra la corriente es un principio del marxismoleninismo". "Las clases luchan, unas salen victoriosas, otras quedan eliminadas. Así es la historia, así es la historia de la civilización de los últimos milenios. La interpretación de la historia desde este punto de vista es el materialismo histórico; desde el punto de vista contrario, el idealismo histórico". Y: "Los comunistas jamas renunciaran a su ideal de socialismo y comunismo". Y sobre el proletariado, la ultima clase de la historia: "El proletariado es la mas grande clase en la historia de la humanidad"; "aplicar la enseñanza de Marx de que solo emancipando toda la humanidad puede el proletariado alcanzar su propia emancipación final"; "debemos apoyarnos de todo corazón en la clase obrera"; "la clase obrera debe dirigirlo todo". "Por su parte, la clase obrera debe elevar constantemente su conciencia política en el curso de la lucha". Y: "La clase obrera transforma a toda la sociedad en la lucha de clases y en la lucha contra la naturaleza; al mismo tiempo, se transforma a sí misma. La clase obrera debe aprender sin cesar en el trabajo, superar poco a poco sus defectos, y nunca debe estancarse." Así como sobre el campesinado, principalmente pobre, y sus luchas: "Eso es lo que algunos llaman cometer `excesos', sobrepasar los límites justos al corregir un error' y `cometer actos abusivos'. Tales opiniones parecen razonables, pero en realidad son también erróneas. En primer lugar, son los propios déspotas locales, shenshi malvados y terratenientes sin ley quienes han forzado a los campesinos a actuar así. Por siglos, se han aprovechado de su poder para tiranizar y pisotear a los campesinos; de ahí que estos hayan reaccionado tan enérgicamente. Las rebeliones mas violentas y los desordenes mas graves han tenido lugar invariablemente allí donde los déspotas locales, shenshi malvados y terratenientes sin ley habían perpetrado los peores ultrajes. la mirada de los campesinos es penetrante. Se dan perfecta cuenta de quién es malo y quién no lo es, quién es el peor y quién no es tan perverso, quién merece severo castigo y quién trato clemente, y muy rara vez el castigo no corresponde al crimen. En segundo lugar, hacer la revolución no es ofrecer un banquete, ni escribir una obra, ni pintar un cuadro o hacer un bordado: no puede ser tan elegante, tan tranquila y delicada, tan apasible, amable, cortes, moderada y magnánima. Una revolución es una insurrección, es un acto de violencia mediante el cual una clase derroca a otra. La revolución en el campo es una revolución mediante la cual el campesinado derroca el poder de la clase terrateniente feudal. Sin recurrir a la máxima fuerza, el campesinado jamás lograría derrocar el poder de los terratenientes, profundamente arraigado a través de los milenios. El campo necesita de un poderoso auge revolucionario, pues solo este puede agitar a los millones y millones de campesinos y convertirlos en una gran fuerza. Los `excesos' arriba mencionados son precisamente producto de la fuerza de los campesinos despertada por el poderoso auge revolucionario en las zonas rurales. Estos `excesos' son sumamente necesarios en el segundo período del movimiento campesino, el de acción revolucionaria. En este período, es imprescindible imponer la autoridad absoluta de los campesinos, prohibir toda critica malévola a las asociaciones campesinas, derrocar todo el poder de los shenshi, derribarlos por tierra e, incluso, ponerles el pie encima. Los llamados `excesos' en este segundo período tienen todos un significado revolucionario. Para decirlo con toda franqueza, en todas las aldeas se necesita un breve período de terror. De lo contrario, resulta absolutamente imposible aplastar las actividades de los contrarrevolucionarios en el campo y derrocar el poder de los shenshi. Para corregir un error, hay que sobrepasar los límites justos; de otra manera, el error no será corregido. Los que critican los 'excesos' aparentemente se diferencian de los que gritan `Muy mal', pero en el fondo unos y otros comparten el mismo punto de vista y sostienen la misma teoría de los terratenientes, que defiende los intereses de las clases privilegiadas. No podemos dejar de combatir resueltamente esta teoría, que obstaculiza el ascenso del movimiento campesino y, por consiguiente, socava la revolución. En suma, todos los que en otros tiempos eran despreciados y arrojados al barro y pisoteados por los shenshi y que no tenían un lugar en la sociedad ni derecho a opinar, ahora han levantado la cabeza. No solo han levantado la cabeza sino que se han tomado el Poder. Ellos son ahora los dueños de las asociaciones campesinas de los cantones (el nivel más bajo), a las que han transformado en una fuerza terrible. Levantan sus ásperas y ennegrecidas manos y las ponen sobre la cabeza de los shenshi...Los campesinos dictan órdenes y lo dirigen todo. Aquellos que eran inferiores a todos, están ahora por encima de todos, y por eso se afirma que `el mundo se ha vuelto patas arriba'. Se ha señalado más arriba que los campesinos han llevado a cabo una obra revolucionaría nunca antes realizada y que han cumplido una importante labor para la revolución nacional. Pero es que en esta gran obra revolucionaria, en esta importante labor revolucionaria, han tomado parte todos los campesinos? No. Hay tres categorías de campesinos: ricos, medios y pobres... Los campesinos pobres siempre han sido la fuerza principal en la ardua lucha en el campo. Tanto en la fase de actividad clandestina como en la de actividad abierta, siempre han luchado con energía. Son ellos los más dispuestos a aceptar la dirección del Partido Comunista. Son enemigos jurados de los déspotas locales y shenshi malvados y, sin la menor vacilación, asaltan sus fortalezas. Dicen a los campesinos ricos: 'Ya hace mucho que ingresamos en la asociación campesina. Por qué ustedes siguen vacilando?' Y los campesinos ricos les responden en tono burlón : ' no tienen ustedes ni una teja encima de la cabeza, ni una pulgada de tierra bajo los pies'. !Que les puede impedir afiliarse a las asociaciones campesinas?... La inmensa masa de los campesinos pobres, que representa el 70 por ciento de la población rural, es la columna vertebral de las asociaciones campesinas, la vanguardia en la lucha por el derrocamiento de las fuerzas feudales y los gloriosos pioneros en el cumplimiento de la grandiosa tarea revolucionaria, que durante tantos anos ha estado sin realizar. De no ser por la clase de los campesinos pobres (la `chusma', como les llaman los shenshi), habría sido imposible crear la actual situación revolucionaria en el campo, y no se podría derrocar a los déspotas locales y shenshi malvados y dar cima a la revolución democrática. Por ser los mas revolucionarios, los campesinos pobres han conquistado la dirección de las asociaciones campesinas... . Esta dirección de los campesinos pobres es absolutamente necesaria. Sin los campesinos pobres, no hay revolución. Negar su papel es negar la revolución. Atacarlos es atacar a la revolución. Ellos no se han equivocado en su orientación revolucionaria fundamental." ["Investigación del movimiento campesino de Junan" (déspotas locales y shenshi malvados: los terratenientes, campesinos ricos. Funcionarios retirados o gente acaudalada de la vieja sociedad china que, con su influencia y poder, hacían y deshacían en el campo]. El presidente Mao Tsetung planteo que la lucha de clases había ingresado a una "gran época de cambio radical"; esta tesis de capital importante la debe orientar nuestra lucha y, en consecuencia, tomar del maoísmo todo aquello que sirva a tal fin. Así, partir de lo establecido por él en 1962: "Los próximos 50 a 100 años más o menos, a partir de hoy, serán una gran época de cambio radical del sistema social en el mundo, una época que estremecerá la tierra, una época con la que ninguna otra época histórica anterior podrá compararse. Viviendo en ella, debemos estar listos para librar grandes luchas que tendrán muchas características diferentes a las formas de lucha del pasado." Época dentro la cual precisa, en los siguientes términos, la perspectiva del imperialismo y tarea de los pueblos del mundo: "Los imperialistas no vivirán mucho porque perpetran insistentemente toda clase de maldades. Se dedican exclusivamente a sostener a los reaccionarios antipopulares de distintos países. Invaden y ocupan por la fuerza muchas colonias, semicolonias y establecen muchas bases militares. Amenazan la paz con la guerra atómica. De esta manera, los imperialistas han forzado a más del 90 por ciento de los habitantes del mundo a ponerse en pie y luchar en masa contra ellos o a prepararse para hacerlo. Pero en la actualidad los imperialistas existen todavía, aún mandan a la baqueta en Asia, Africa y América Latina. En Occidente, aún oprimen a las masas populares de sus propios países. Esta situación ha de cambiar. El poner término a la agresión y a la opresión perpetradas por el imperialismo, por el imperialismo de los EE.UU. en particular, es la tarea de los pueblos de todo el mundo." (A los corresponsales de la Agencia Sinjua). De igual forma, define un nuevo período histórico: "El revisionismo soviético y el imperialismo norteamericano, confabulándose entre si, han perpetrado tantas maldades e infamias que los pueblos revolucionarios del mundo entero no les dejarán impunes. Los pueblos de todos los países están levantándose. Se ha iniciado un nuevo período histórico de lucha contra el imperialismo norteamericano y el revisionismo soviético". Esta época y sus condiciones concretas demandan darle importancia pertinente a las contradicciones entre los países imperialistas: "Debemos considerar las luchas entre los países imperialistas como acontecimientos importantes. Lenin y Stalin las consideraban como tales. Calificaban tales luchas de fuerzas de reserva de la revolución China también se benefició de dichas luchas en el tiempo en que organizaba sus bases de apoyo revolucionarias En el pasado existían en China contradicciones entre los diferentes grupos de la clase terrateniente y de los compradores. Detrás de dichas contradicciones se disimulaban las diferentes contradicciones entre los diferentes países imperialistas. Durante el tiempo que hemos podido extraer provecho de estas contradicciones en el plano del imperialismo, no debimos combatir directamente en un mismo período más que una parte de las fuerzas enemigas y no todas esas fuerzas reunidas. Además, a menudo hemos podido encontrar tiempo para descansar y reagruparnos. El número elevado de contradicciones internas del imperialismo ha sido una de las causas más importantes de la consolidación de la victoria de la Revolución de Octubre. En la época hubo una intervención armada de 14 países. Pero las tropas enviadas por cada uno de los países eran poco numerosas Por otra parte, los países no estaban de acuerdo entre ellos y se producían intrigas entre unos y otros. Sucedió la misma cosa durante la guerra de Corea. Los Estados Unidos y sus aliados no actuaron de común acuerdo. La guerra no se extendió pues lo que, por una parte, los Estados Unidos vacilaban y, por otra parte, Inglaterra y Francia no la querían. La burguesía internacional está actualmente muy inquieta. Cada vez que el viento agita la hierba, ella tiene miedo. Es muy vigilante, pero en su casa el desorden es grande. Luego de la Segunda Guerra Mundial, las crisis económicas de la sociedad capitalista son diferentes de las que se producían en tiempos de Marx. Evolucionan. Antes generalmente se producían cada siete, ocho o diez años; ahora, de la Segunda Guerra Mundial hasta 1959, en un lapso de catorce años se produjeron tres crisis económicas capitalistas. La situación internacional actual es mucho más tensa que la que se conoció luego de la Primera Guerra Mundial. En tal momento, el capitalismo se encontraba todavía en un período de estabilidad relativa. La revolución fracaso en todos los países a excepción de la Unión Soviética. Inglaterra y Francia ostentaban un aire orgulloso y la burguesía de todos los países no tenía todavía demasiado a la Unión Soviética. El sistema del colonialismo imperialista permanecía todavía intacto aunque se arrebataron sus colonias a Alemania. Luego de la Segunda Guerra Mundial, tres potencias imperialistas vencidas se hundieron. Inglaterra y Francia, debilitadas, declinaron. La revolución socialista triunfó en mas de diez países. El sistema colonialista se desintegraba, el mundo capitalista no había encontrado la estabilidad relativa que conoció después de la Primera Guerra Mundial. ("Anexo a `Notas sobre Problemas Económicos del Socialismo en la URSS', de Stalin"). Es en este marco y sus características que el Presidente Mao plantea su tesis de "Tres mundos se delinean", concretada así en 1974: "A mi juicio, los EE.UU. y la Unión Soviética constituyen el primer mundo; fuerzas intermedias como el Japón, Europa y Canadá integran el segundo mundo, y nosotros formamos parte del tercero." "El tercer mundo comprende una gran población. Toda Asia, excepto el Japón pertenece al tercer mundo; Africa entera pertenece también a éste , e igualmente América Latina."Tesis absolutamente opuesta a la revisionista "teoría de los tres mundos" de Teng y su pandilla. La tesis de "tres mundos se delinean" está ligada a posiciones sostenidas por el Presidente Mao, el año 46, en "Conversación con A. L. Strong": "Los EE.UU. y Unión Soviética están separados por una extensa zona en que hay muchos países capitalistas, coloniales y semicoloniales de Europa, Asia y Africa. Antes que los reaccionarios norteamericanos hayan subyugado a estos países, no se puede hablar de un ataque a la Unión Soviética." Y, el año 57, en "Discurso en una conferencia de secretarios": "Problemas internacionales. En el Medio Oriente se han producido los acontecimientos del canal de Suez. Un hombre llamado Nasser nacionalizó el canal; otro, llamado Eden, envió allí un contingente de soldados y desató una guerra; enseguida, un tercero llamado Eisenhower trató de expulsar a los ingleses con el fin de apoderarse del lugar. La burguesía inglesa, vieja picara y gran tramposa desde su origen, es una burguesía más hábil que ninguna otra en determinar cuándo se impone llegar a un compromiso. Sin embargo, resulta que ahora ha dejado caer el Medio Oriente en manos de los norteamericanos. Que garrafal error! Cuántos de este calibre pueden contarse en su historia? Pero, por que esta vez perdió la cabeza e incurrió en semejante error? Porque, no pudiendo mantener el aplomo ante la enorme presión de los norteamericanos, trató de recuperar el Medio Oriente y poner a raya a los EE.UU. Era Egipto el principal blanco contra el cual estaba vuelta la lanza de Inglaterra? No. Su acción apuntaba contra los EE.UU al mismo tiempo que la acción norteamericana apuntaba contra Inglaterra. Estos acontecimientos nos permiten ver dónde se halla el punto clave de las luchas en el mundo de hoy. Claro está que los países imperialistas viven contradicciones muy agudas con los países socialistas, pero lo que hacen ahora es tomar como pretexto la lucha contra el comunismo para disputarse esferas de influencia. Cuáles son las esferas que se disputan? Zonas de Asia y Africa habitadas por mil millones de personas. En la actualidad, sus disputas se concentran en el Medio Oriente, región de gran importancia estratégica, y sobre todo en la zona del canal de Suez, en Egipto. En el conflicto que allí se vive convergen dos tipos de contradicciones y tres fuerzas distintas. Esos dos tipos de contradicciones son: primero, las contradicciones interimperialistas, o sea, las existentes entre los EE.UU. e Inglaterra y entre los EE.UU. y Francia y, segundo, las contradicciones entre las potencias imperialistas y las naciones oprimidas. De las tres fuerzas en juego, la primera son los EE.UU., la mayor potencia imperialista; la segunda, Inglaterra y Francia, países imperialistas de segundo orden, y la tercera, las naciones oprimidas. El principal escenario de la actual disputa imperialista lo constituyen Asia y Africa, donde han surgido movimientos de independencia nacional. Los EE.UU. recurren a medios tanto militares como no militares; es así como han actuado en el Medio Oriente." Finalmente en esta cuestión fundamental, la lucha de clases, y particularmente en esta "gran época"; veamos cómo planteamos la lucha por la revolución en función del socialismo y el comunismo, la gran meta insoslayable de la humanidad, siguiendo el maoísmo: "El comunismo es la ideología completa del proletariado y, a la vez, un sistema social. Difieren de cualquier otra ideología y sistema social, y son los más completos, progresistas, revolucionarios y racionales de la historia humana." ("Sobre la nueva democracia"). Y: "El socialismo terminará por reemplazar al sistema capitalista; ésta es una ley objetiva, independiente de la voluntad del hombre. Por mucho que los reaccionarios traten de frenar la rueda de la historia, tarde o temprano se producirá la revolución y, sin duda alguna, triunfará." ("Discurso en la reunión del Soviet Supremo de la URSS en conmemoración de la Gran Revolución Socialista de Octubre"). Este es el punto de partida necesario al cual debe agregarse la necesidad del Partido Comunista: "Para realizar la revolución, hace falta un partido revolucionario. Sin un partido revolucionario, sin un partido revolucionario creado sobre la teoría revolucionaria marxista-leninista y en el estilo revolucionario marxista-leninista, es imposible conducir a la clase obrera y las amplias masas populares a la victoria en la lucha contra el imperialismo y sus lacayos. En más de cien años transcurridos desde el nacimiento del marxismo, sólo gracias al ejemplo que dieron los bolcheviques rusos al dirigir la Revolución de Octubre y la construcción socialista y al vencer la agresión del fascismo, se han formado y desarrollado en el mundo partidos revolucionarios de nuevo tipo. Con el nacimiento de los partidos revolucionarios de este tipo, ha cambiado la fisonomía de la revolución mundial. El cambio ha sido tan grande que se han producido, en medio del fuego y el trueno, transformaciones del todo inconcebibles para la gente de la vieja generación. El Partido Comunista de China es precisamente un partido creado y desarrollado a ejemplo del Partido Comunista de la Unión Soviética. Con el nacimiento del Partido Comunista, la fisonomía de la revolución China tomó un cariz enteramente nuevo. Acaso no es suficientemente claro este hecho? " ("Fuerzas revolucionarias del mundo, unios"). Partido que hoy no puede ser sólo marxista-leninista sino marxista-leninista-maoísta. Partido que se guía por: "El que sea correcta o no la línea ideológica y política lo decide todo. Cuando la línea del Partido es correcta, lo tenemos todo; si no tenemos hombres, los tendremos; si no tenemos fusiles los conseguiremos, y si no tenemos el poder, lo conquistaremos. Si la línea es incorrecta, perderemos lo que hemos conquistado." Partido que tiene en cuenta que: "Para derrocar el Poder político es siempre necesario, ante todo, crear opinión publica y trabajar en el terreno ideológico. Así proceden las clases revolucionarias, y también las clases contrarrevolucionarias." Así como, al dirigir la revolución, que: "Cuando su existencia se ve amenazada, la clase explotadora emplea siempre la violencia. Desde que ella entrevé una revolución se esfuerza por aniquilarla por la violencia...La clase explotadora no emplea solamente la violencia para luchar contra el régimen popular luego del establecimiento por el pueblo de un poder revolucionario; ella utiliza también la violencia para reprimir al pueblo revolucionario, desde el momento en que éste se lanza a tomar el Poder." Y: "Todos los reaccionarios intentan eliminar la revolución por medio de matanzas en masa y piensan que cuanta más gente asesinen tanto más débil será la revolución. Pero, en contra de este de ser subjetivo de la reacción, los hechos muestran que cuanta más gente asesina la reacción, mayor es la fuerza de la revolución y más se acercan los reaccionarios a su fin. Esta es una ley ineluctable." Y principalmente que: "Todas las luchas revolucionarias del mundo tienen por objetivo tomar el Poder y consolidarlo". "Todas las fuerzas reaccionarias al borde de su extinción libran invariablemente luchas de agonía". "Los pueblos y naciones oprimidos no deben, en modo alguno, confiar su liberación a la `sensatez' del imperialismo y sus lacayos. Sólo podrán lograr la victoria fortaleciendo su unidad y perseverando en su lucha". "Pueblos te todo el mundo, tened coraje, atreveos a luchar, desafiad las dificultades y avanzad en oleadas, y así el mundo entero pertenecerá a los pueblos. Todos y cada uno de los monstruos serán liquidados." Partido para el que: "La política es el punto de partida de todas las acciones prácticas de un partido revolucionario, y se manifiesta en el proceso y el resultado final de sus acciones. Toda acción de un partido revolucionario es la aplicación de su política. Si no aplica una política correcta, aplica una errónea; si no aplica determinada política de modo consciente, la aplica a ciegas. Lo que llamamos experiencia es el proceso y el resultado final de la aplicación de una política. Sólo a través de la práctica del pueblo, es decir, por la experiencia, se puede verificar si una política es correcta o errónea y determinar hasta qué grado lo es. Pero la práctica de los hombres, especialmente la práctica de un partido revolucionario y de las masas revolucionarias, esta necesariamente ligada con una u otra política. Por tanto, antes de emprender cualquier acción, debemos explicar a los militantes del Partido y a las masas la política que hemos formulado a la luz de las circunstancias dadas. De otro modo, los militantes del Partido y las masas se apartarán de la dirección de nuestra política, actuarán a ciegas y aplicaran una política errónea." ("Sobre la política concerniente a la industria y el comercio"). Y en cuya construcción se sujeta a lo establecido por el Presidente Mao: "Las formas organizativas revolucionarias deben servir a las necesidades de la lucha revolucionaria. Cuando una forma organizativa ya no concuerda con las necesidades de la lucha, debe ser abolida"; y "la tarea de organización debe estar subordinada a la tarea política." Y a la gran orientación: "el frente único, la lucha armada y la construcción del Partido constituyen las tres cuestiones fundamentales que enfrenta nuestro Partido en la revolución China. Comprender correctamente estas tres cuestiones y su interconexión equivale a dirigir de manera acertada toda la revolución China." Y concibiendo el Partido como una contradicción desarrollarlo en medio de la lucha de dos líneas en su seno, sujetándose a: "O el viento del Este prevalece sobre el del Oeste, o el viento del Oeste prevalece sobre el del Este; no hay lugar a conciliación en el problema de las dos líneas."; así como "campañas de rectificación" para desarrollar la consolidación partidaria en lo ideológico, político y organizativo. Por otro lado, al tratar el problema nacional partir de: "La lucha nacional es, en último término, un problema de la lucha de clases." Tener en cuenta que: "Los grandes países y los países ricos desprecian a los pequeños países y a los países pobres. Los países occidentales despreciaron siempre a Rusia. La China de hoy todavía es despreciada. Y no es sin razón que los otros nos desprecian, puesto que estamos en retraso...El desprecio de otros hacia nosotros nos es, sin embargo, beneficioso. Nos obliga a trabajar y a progresar." Y considerar seriamente el problema de las minorías nacionales: "El numero de personas que pertenecen a las minorías nacionales excede, en nuestro país, los 30 millones. Aun que solo representan el 6 por ciento de la población de China, habitan extensas regiones que constituyen del 50 al 60 por ciento de la superficie total del país. Por eso es de necesidad imperiosa fomentar las buenas relaciones entre la nacionalidad jan y las minorías nacionales. La clave de este problema esta en superar el chovinismo de gran jan. Al mismo tiempo, hay que superar también el nacionalismo local en aquellas minorías nacionales en donde existe. Tanto el chovinismo de gran jan como el nacionalismo lo cual desfavorecen la unidad entre las nacionalidades; éstas son contradicciones en el seno del pueblo que debemos superar." ("Sobre el tratamiento correcto de las contradicciones en el seno del pueblo"). En cuanto a estrategia y táctica: "En el curso de un largo período hemos llegado a formarnos es te concepto para la lucha contra el enemigo: estratégicamente, debemos desdeñar a todos nuestros enemigos, pero tácticamente, debemos tomarlos muy en serio. Es decir, al considerar el todo, debemos despreciar al enemigo, pero tenerlo muy en cuenta en cada una de las cuestiones concretas. Si no despreciamos al enemigo al considerar el todo, caeremos en el error de oportunismo. Marx y Engels no eran más que dos personas, pero ya en su tiempo declararon que el capitalismo seria derribado en todo el mundo. Sin embargo, al enfrentar las cuestiones concretas y a cada uno de los enemigos en particular, si no los tomamos muy en serio, cometeremos el error de aventurerismo. En la guerra, las batallas sólo pueden ser dadas una por una y las fuerzas enemigas, aniquiladas parte por parte. Las fábricas sólo pueden construirse una a una. Los campesinos sólo pueden arar la tierra parcela por parcela. Incluso al comer pasa lo mismo. Desde el punto de vista estratégico, tenemos en poco el comer una comida: estamos seguros de poder terminarla. Pero en el proceso concreto de comer, lo hacemos bocado por bocado. No podemos engullir toda una comida de un golpe. Esto se llama solución por partes. Y en la literatura militar se llama destruir las fuerzas enemigas por separado." "Intervención en la Conferencia de Representantes de los Partidos Comunistas y Obreros de Moscú"). Complementándola con lo que el propio Presidente Mao estableciera en "A propósito de nuestra política": "En las relaciones con las distintas clases del país, aplicar la política fundamental de desarrollar las fuerzas progresistas, ganarse a las intermedias y aislar a las recalcitrantes anticomunistas"; y: "En la lucha contra los recalcitrantes anticomunistas, explotar las contradicciones, ganarse a la mayoría, combatir a una minoría y aplastar a los enemigos uno por uno; luchar con razón, con ventaja y en sobrepasarse." Dentro de esta perspectiva los intelectuales, las mujeres y los jóvenes deben guiarse por: "Sin la participación de los intelectuales revolucionarios, la victoria de la revolución es imposible". "Los intelectuales no lograrán nada si no se integran a las masas de obreros y campesinos. En definitiva, la línea divisoria entre los intelectuales revolucionarios y los no revolucionarios o contrarrevolucionarios consiste en si están dispuestos a integrarse con las masas de obreros y campesinos y si lo hacen en la practica". Las mujeres partiendo de: "La mujer representa la mitad de la población. La condición económica de la mujer trabajadora y la opresión que padece, como nadie, demuestran que la mujer necesita urgentemente la revolución, y que es una fuerza que ha de determinar la victoria o la derrota de la revolución". Y siguiendo el principio maoísta de que la emancipación de la mujer es parte de la emancipación del proletariado, deben coger firmemente: "El día en que las mujeres de todo el país se alcen será el momento de la victoria de la revolución China". "La verdadera igualdad entre el hombre y la mujer sólo puede alcanzarse en el proceso de la transformación socialista de la sociedad en su conjunto"; y: "Unios, tomad parte en la producción y las actividades políticas para mejorar la situación económica y política de la mujer". Y los jóvenes: "El mundo es de ustedes, y también de nosotros; pero, en última instancia, es de ustedes...El mundo les pertenece". "La juventud es la fuerza más activa y vital de la sociedad. Los jóvenes son los mas ansiosos de aprender, y los menos conservadores en su pensamiento". Y: "Cómo Juzgar si un joven es revolucionario? Cómo discernirlo? Sólo hay un criterio: si está dispuesto a fundirse, y se funde en la práctica, con las grandes masas obreras y campesinas. Es revolucionario si lo quiere hacer y lo hace; de otro modo es no-revolucionario o contrarrevolucionario. Si se identifica hoy con las masas obreras y campesinas, es hoy revolucionario; si mañana deja de hacer lo o pasa a oprimir a la gente sencilla, se transformará en no-revolucionario o en contrarrevolucionario". Por su parte, los comunistas, los miembros del Partido Comunista, siempre se sujetarán a estas sabias palabras: "Los comunistas en todo partimos de los intereses supremos de las grandes masas del pueblo...estamos convencidos de la completa justicia de nuestra causa...no nos detendremos ante ningún sacrificio personal y estamos dispuestos en todo momento a dar nuestras vidas por esta causa." Y además: "Deben estar especialmente vigilantes contra los arribistas y conspiradores como Jruschov, y evitar que tales malvados usurpen, sea al nivel que fuere, la dirección del Partido y del Estado." Pero no solamente los comunistas, sino los revolucionarios y todo el pueblo deben tener siempre presente que: "Excepto los desiertos, allí donde hay grupos de gente, éstos se componen invariablemente de izquierda, centro y derecha. Esto seguirá siendo así incluso dentro de diez mil años."Cada vez que se levanta un tifón, los vacilantes, incapaces de resistirlo, se tambalean: Esto es una ley. Les aconsejo a todos ustedes que presten atención a este problema. Después de tambalearse unas cuantas veces, algunas personas cogen experiencia y dejan de hacerlo. Pero hay un tipo de personas que nunca dejarán de vacilar, tal como ocurre con el arroz y otras cultivos semejantes que, por tener un tallo tan delgado, oscilan con cada golpe de viento. El sorgo y el maíz poseen mejores condiciones, pues sus tallos son relativamente gruesos. Sólo los grandes árboles se yerguen inconmovibles. El tifón vuelve cada año, e igual ocurre con los tifones ideológicos y políticos en el plano nacional y en el internacional. Se trata de un fenómeno natural de la sociedad. Un partido es un género de sociedad, una sociedad política. La primera categoría de sociedades políticas la constituyen los partidos. Un partido es una organización de clase." "Cuando se encuentran en una situación desventajosa, los representantes de las clases explotadoras suelen recurrir a la táctica de ofensiva como medio de defensa, con el fin te preservar hoy su existencia y facilitar su desarrollo futuro. Inventan cosas de la nada y fabrican rumores en las narices de la gente, o echan mano de algunas apariencias de un asunto para lanzar ataques contra su esencia, o cantan loas a unos y atacan a otros, o inflan tal o cual problema para `abrir algunas brechas' y colocarnos de este modo en una posición difícil. En resumen, siempre estudian con que tácticas enfrentarnos y `exploran el terreno' para alcanzar su objetivo. A veces, `se tienden haciéndose los muertos' en espera de la oportunidad de un `contraataque'. Tienen largos años de experiencia en la lucha de clases y saben valerse de distintas formas de lucha, tanto legales como ilegales. Nosotros, como militantes revolucionarios, debe conocer sus artimañas y estudiar sus tácticas a fin de vencerlos. No debemos, por ningún motivo, comportarnos como letrados ingenuos abordando de manera simplista la compleja lucha de clases." Y: "En cuanto a nosotros atañe, considero que es malo si una persona, partido, ejército o centro de enseñanza no es atacado por el enemigo, porque eso significa que nos hemos hundido en el mismo pantano que el. Es bueno si el enemigo nos ataca, pues eso prueba que hemos deslindado campos con el. Y mejor aun si el enemigo nos ataca con furia y nos pinta de negro y carentes de toda virtud, porque eso no solo testimonia que hemos deslindado campos, sino también que hemos alcanzado notables éxitos en el trabajo." Y seguros de que: "Un gran desorden bajo los cielos conduce a un gran orden bajo los cielos", guiarnos siempre por estas luminosas palabras del Presidente Mao Tsetung: "El mundo esta progresando y el futuro es brillante; nadie puede cambiar esta tendencia general de la historia... ... ... ... En una palabra, las perspectivas son brillantes, pero el camino tiene vueltas y revueltas." "Siempre que el pueblo de un país pequeño o se levantarse en lucha, se atreva a empuñar las armas y tome en sus manos el destino de su propio país, podrá indefectiblemente derrotar la agresión de un país grande. Esta es una ley de la historia." "La presente Gran Revolución Cultural Proletaria es completamente necesaria y muy oportuna para consolidar la dictadura del proletariado, prevenir la restauración del capitalismo y construir el socialismo." "Subsiste el peligro de una nueva guerra mundial; los pueblos del mundo deben estar preparados. No obstante, la principal tendencia del mundo actual es la revolución." "El reemplazo de lo viejo por lo nuevo es una ley universal, eterna e ineludible." "Nada es imposible en el mundo si uno se atreve a escalar las alturas." SOBRE EL SOCIALISMO Y LA DICTADURA DEL PROLETARIADO. Socialismo y dictadura del proletariado es otra cuestión fundamental del marxismo-leninismo-maoísmo; más aún hoy cuando, convergentemente, la nueva ofensiva contrarrevolucionaria revisionista de Gorbachov y Teng y la nueva arremetida imperialista niegan el socialismo y sus grandes conquistas con Lenin, Stalin y el Presidente Mao, así como central y principalmente la dictadura del proletariado. Por esto, hoy más que nunca, el proletariado, el pueblo y los comunistas, principalmente, debemos enarbolar mas todavía la teoría del marxismo sobre socialismo y dictadura del proletariado, defender las grandiosas victorias del proletariado Internacional en estos campos y proseguir indeclinablemente el mismo camino; pues, es el único camino para la emancipación de la humanidad, para llegar al verdadero reino de la libertad, el comunismo El gran fundador, Marx, en el Manifiesto, nos enseñó: "La revolución comunista es la ruptura mas radical con las relaciones de propiedad tradicionales; nada de extraño tiene que en el curso de su desarrollo rompa de la manera mas radical con las ideas tradicionales." Y en su carta, de 1852, a Weydemeyer: "En cuanto a mi, no me cabe el mérito de haber descubierto ni la existencia de las clases en la sociedad moderna ni su lucha entre si. Mucho antes que yo, algunos historiadores burgueses habían expuesto el desarrollo histórico de esta lucha de las clases y algunos economistas burgueses la anatomía económica de estas. Lo nuevo que yo he aportado ha sido demostrar: l) que la existencia de las clases solo va unida a determinadas fases históricas de desarrollo de la producción; 2) que la lucha de clases conduce necesariamente a la dictadura del proletariado, 3) que esta dictadura no constituye de por si mas que el tránsito hacia la abolición de todas las clases y hacia una sociedad sin clases." Y sobre el socialismo, su limitación y la subsistencia del derecho burgués: "De lo que aquí se trata no es de una sociedad comunista que se ha desarrollado sobre su propia base, sino de una que acaba de salir precisamente de la sociedad capitalista y que, por tanto, presenta todavía en todos sus aspectos, en el económico, en el moral y en el intelectual, el sello de la vieja sociedad de cuya entraña procede. Congruentemente con esto, en ella el productor individual obtiene de la sociedad después de hechas las obligadas deducciones-exactamente lo que ha dado. Lo que el productor ha dado a la sociedad es su cuota individual de trabajo. Así, por ejemplo, la jornada social de trabajo se compone de la suma de las horas de trabajo individual; el tiempo individual de trabajo de cada productor por separado es la parte de la jornada social de trabajo que él aporta, su participación en ella. La sociedad le entrega un bono consignando que ha rendido tal o cual cantidad de trabajo (después de descontar lo que ha trabajado para el fondo común), y con este bono saca de los depósitos sociales de medios de consumo la parte equivalente a la cantidad de trabajo que rindió. La misma cantidad de trabajo que ha dado a la sociedad bajo una forma, la recibe de ésta bajo otra forma distinta. Aquí reina, evidentemente, el mismo principio que regula el intercambio de mercancías, por cuanto éste es intercambio de equivalentes. Han variado la forma y el contenido, porque bajo las nuevas condiciones nadie puede dar sino su trabajo, y porque, por otra parte, ahora nada puede pasar a ser propiedad del individuo, fuera de los medios individuales de consumo. Pero, en lo que se refiere a la distribución de éstos entre los distintos productores, rige el mismo principio que en el intercambio de mercancías equivalentes: se cambia una cantidad de trabajo, bajo una forma, por otra cantidad igual de trabajo, bajo otra forma distinta. Por eso, el derecho igual sigue siendo aquí, en principio, el derecho burgués, aunque ahora el principio y la práctica ya no se tiran de los pelos, mientras que en el régimen de intercambio de mercancías, el intercambio de equivalentes no se da más que como termino medio, y no en los casos individuales. A pesar de este progreso, este derecho igual sigue llevando implícita una limitación burguesa. El derecho de los productores es proporcional al trabajo que han rendido; la igualdad, aquí, consiste en que se mide por el mismo rasero: por el trabajo. Pero unos individuos son superiores física o intelectualmente a otros y rinden, pues, en el mismo tiempo, más trabajo, o pueden trabajar más tiempo; y el trabajo, para servir de medida, tiene que determinarse en cuanto a duración o intensidad; de otro modo, deja de ser una medida. Este derecho igual es un derecho desigual para trabajo desigual. No reconoce ninguna distinción de clase, porque aquí cada individuo no es mas que un obrero como los demás; pero reconoce, tácitamente, como otros tantos privilegios naturales, las desiguales aptitudes de los individuos, y, por consiguiente, la desigual capacidad de rendimiento. En el fondo es, por tanto, como todo derecho, el derecho de la desigualdad. El derecho solo puede consistir, por naturaleza, en la aplicación de una medida igual; pero los individuos desiguales (y no serían distintos individuos si no fuesen desiguales) solo pueden medirse por la misma medida siempre y cuando que se les enfoque desde un punto de vista igual, siempre y cuando que se les mire solamente en un aspecto determinado; por ejemplo, en el caso concreto, sólo en cuanto obreros, y no se vea en ellos ninguna otra cosa, es decir, se prescinda de todo lo demás. Prosigamos: unos obreros están casados y otros no; unos tienen más hijos que otros, etc.,etc. A igual trabajo y, por consiguiente, a igual participación en el fondo social de consumo, unos obtienen de hecho más que otros, unos son más ricos que otros, etc. Para evitar todos estos inconvenientes, el derecho no tendría que ser igual, sino desigual. Pero estos defectos son inevitables en la primera fase de la sociedad comunista, tal y como brota de la sociedad capitalista después de un largo y doloroso alumbramiento. El derecho no puede ser nunca superior a la estructura económica ni al desarrollo cultural de la sociedad por ella condicionado." ("Critica al Programa de Gotha"). Así como sobre el comunismo: "En la fase superior de la sociedad comunista, cuando haya desaparecido la subordinación esclavizadora de los individuos a la división del trabajo, y con ella, la oposición entre el trabajo intelectual y el trabajo manual cuando el trabajo no sea solamente un medio de vida, sino la primera necesidad vital; cuando, con el desarrollo de los individuos en todos sus aspectos, crezcan también las fuerzas productivas y corran a chorro lleno los manantiales de la riqueza colectiva, sólo entonces podrá rebasarse totalmente el estrecho horizonte del derecho burgués, y la sociedad podrá escribir en su bandera: De cada cual, según su capacidad; a cada cual, según sus necesidades!" (Ibídem ). En cuanto a la dictadura del proletariado, la imborrable conclusión sentada en la misma "Critica al Programa de Gotha" "Entre la sociedad capitalista y la sociedad comunista media el período de la transformación revolucionaria de la primera en la segunda. A este período corresponde también un período político de transición, cuyo Estado no puede ser otro que la dictadura revolucionaria del proletariado " Y: "Al destruir las condiciones existentes de opresión mediante la entrega de todos los medios de trabajo a los trabajadores productores, y obligando de esta manera a cada individuo físicamente capaz a trabajar para ganarse la vida, quedara eliminada la única base de la dominación y opresión de clase Pero antes de que pueda con sumarse semejante cambio es necesaria una dictadura del proletariado, y su primera premisa es un ejército del proletariado" ("Discurso con motivo del VII aniversario de la Internacional"). Lenin analizó magistralmente la cuestión fundamental de socialismo y dictadura del proletariado, desarrollando el marxismo; profundizó principalmente el socialismo como "período de transición" y el ejercicio de la dictadura del proletariado. En su gran obra "El Estado y la revolución" sobre el socialismo como primera fase del comunismo escribió: "Esta sociedad comunista, que acaba de salir de la entraña del capitalismo al mundo de Dios y que lleva en todos sus aspectos el sello de la sociedad antigua, es la que Marx llama `primera' fase o fase inferior de la sociedad comunista. Los medios de producción han dejado de ser ya propiedad privada de los individuos. Los medios de producción pertenecen a toda la sociedad. Cada miembro de la sociedad, al ejecutar una cierta parte del trabajo socialmente necesario, obtiene de la sociedad un certificado acreditativo de haber realizado tal o cual cantidad de trabajo. Por este certificado recibe de los almacenes sociales de artículos de consumo la cantidad correspondiente de productos. Deducida la cantidad de trabajo que pasa al fondo social, cada obrero, por tanto, recibe de la sociedad lo que entrega a ésta. Reina, al parecer, la `igualdad'. Pero cuando Lassalle, refiriéndose a este orden social (al que se suele dar el nombre de socialismo, pero que Marx denomina la primera fase del comunismo), dice que esto es una `distribución justa', que es `el derecho igual de cada uno al producto igual del trabajo', Lassalle se equivoca, y Marx pone al descubierto su error. `Aquí -dice Marx-tenemos realmente un `derecho igual', pero esto es todavía `un derecho burgués', que, como todo derecho, presupone la desigualdad. Todo derecho significa la aplicación de un rasero igual a hombres distintos, a hombres que en realidad no son idénticos, no son iguales entre si; por tanto, el `derecho igual' es una infracción de la igualdad y una injusticia'. En efecto, cada cual obtiene, si ejecuta una parte de trabajo social igual que el otro, la misma parte de producción social (después de hechas las deducciones indicadas). Sin embargo, los hombres no son todos iguales, unos son más fuertes y otros más débiles, unos son casados y otros solteros, unos tienen más hijos que otros, etc. `A igual trabajo--concluye Marx--y, por consiguiente, a igual participación en el fondo social de consumo, unos obtienen de hecho más que otros, unos son más ricos que otras, etc. Para evitar todos estos inconvenientes, el derecho tendría que ser no igual, sino desigual...' Consiguientemente, la primera fase del comunismo no puede proporcionar todavía justicia ni igualdad: subsisten las diferencias de riqueza, diferencias injustas; pero no será posible ya la explotación del hombre por el hombre, puesto que no será posible apoderarse, a titulo de propiedad privada, de los medios de producción, de las fabricas, las maquinas, la tierra, etc. Pulverizando la frase confusa y pequeño burguesa de Lassalle sobre la `igualdad' y la `Justicia' en general, Marx muestra el curso de desarrollo de la sociedad comunista, que en sus comienzos se vera a destruir solamente aquella injusticia que consiste en que los medios de producción sean usurpados por individuos aislados, pero que no estará en condiciones de destruir de golpe también la otra injusticia, consistente en la distribución de los artículos de consumo `según el trabajo' (y no según las necesidades). Los economistas... reprochan constantemente a los socialistas el olvidarse de la desigualdad de los hombres y el `soñar' con destruir esta desigualdad. Este reproche solo demuestra, como vemos, la extrema ignorancia de los señores ideólogos burgueses. Marx no solo tiene en cuenta del modo mas preciso la inevitable desigualdad de los hombres, sino que tiene también en cuenta que el solo paso de los medios de producción a propiedad común de toda la sociedad (el `socialismo', en el sentido corriente de la palabra) no suprime los defectos de la distribución y la desigualdad del `derecho burgués' el cual sigue imperando, por cuanto los productos son distribuidos `según el trabajo'. '...Pero estos defectos -prosigue Marx-son inevitables en la primera fase de la sociedad comunista, tal y como brota de la sociedad capitalista, tras largos dolores para su alumbramiento. El derecho no puede ser nunca superior a la estructura económica y al desarrollo cultural de la sociedad por ella condicionado...' Así, pues, en la primera fase de la sociedad comunista (a la que suele darse el nombre de socialismo) el `derecho burgués no se suprime completamente, sino solo parcialmente, solo en la medida de la transformación económica ya alcanzada, es decir, solo en lo que se refiere a los medios de producción. El `derecho burgués reconoce la propiedad privada de los individuos sobre los medios de producción. El socialismo los convierte en propiedad y común. En este sentido -y solo en este sentido-desaparece el `derecho burgués'. Sin embargo, este derecho persiste en otro de sus aspectos, persiste como regulador de la distribución de los productos y de la distribución del trabajo entre los miembros de la sociedad. `El que no trabaja, no come': es el principio socialista es ya una realidad; `a igual cantidad de trabajo, igual cantidad de productos': también es ya una realidad este principio socialista. Sin embargo, esto no es todavía el comunismo, ni suprime todavía el derecho burgués que da una cantidad igual de productos a hombres que no son iguales y por una cantidad desigual (desigual de hecho) de trabajo. Esto es un `defecto', dice Marx, pero un defecto inevitable es la primera fase del comunismo, pues, sin caer en utopismo, no se puede pensar que, al derrocar el capitalismo, los hombres aprenderán a trabajar inmediatamente para la sociedad sin sujeción a ninguna norma de derecho; además, la abolición del capitalismo no sienta de repente tampoco las premisas económicas para este cambio." Y, en la misma obra, sobre el control social y estatal: `Mientras llega la fase `superior' del comunismo, los socialistas exigen el más riguroso control por parte de la sociedad y por parte del Estado sobre la medida de trabajo y la medida de consumo, pero este control sólo debe comenzar con la expropiación de los capitalistas, con el control de los obreros sobre los capitalistas, y no debe llevarse a cabo por un Estado de burócratas, sino por el Estado de los obreros armados. La defensa interesada del capitalismo por los ideólogos burgueses (Y sus acólitos por el estilo de señores como los Tsereteli, los Chernov y Cia ) consiste precisamente en suplantar por discusiones y charlas sobre un remoto porvenir la cuestión mas candente y mas actual de la política de hoy: la expropiación de los capitalistas, la transformación de todos los ciudadanos en trabajadores y empleados de un gran `consorcio' único, a saber, de todo el Estado, y la subordinación completa de todo el trabajo de todo este consorcio a un Estado realmente democrático, el Estado de los Soviets de Diputados Obreros y Soldados." Así como su gran conclusión sobre el "Estado burgués, sin burguesía": "En su primera fase, en `su primer grado, el comunismo no puede presentar todavía una madurez económica completa, no puede aparecer todavía completamente libre de las tradiciones o de las huellas del capitalismo. De aquí un fenómeno tan interesante como la subsistencia del `estrecho horizonte del derecho burgués' bajo el comunismo, en su primera fase. El derecho burgués respecto a la distribución de los artículos de consumo presupone también inevitablemente, como es natural, un Estado burgués, pues el derecho no es nada sin un aparato capaz de obligar a respetar las normas de aquél. De donde se deduce que bajo el comunismo no sólo subsiste durante un cierto tiempo el derecho burgués, sino que subsiste incluso el Estado burgués, sin burguesía! Esto podrá parecer una paradoja o un simple juego dialéctico de la inteligencia, que es de lo que acusan frecuentemente a los marxistas gentes que no se han impuesto ni el menor esfuerzo para estudiar el contenido extraordinariamente profundo del marxismo. En realidad, la vida nos muestra a cada paso los vestigios de lo viejo en lo nuevo, tanto en la naturaleza como en la sociedad. Y Marx no trasplantó caprichosamente al comunismo un trocito de `derecho burgués', sino que tomó lo que es económica y políticamente inevitable en una sociedad que brota de la entraña del capitalismo." (Ibídem). Lenin, en "Economía y política en la época de la dictadura del proletariado",en su parte I trata el "período de transición" y la negación del mismo por revisionistas y oportunistas: "Teóricamente no cabe duda de que entre el capitalismo y el comunismo media cierto período de transición. Este período no puede por menos de aunar los rasgos o las, propiedades de estos dos sistemas de economía social. No puede ser más que un período de lucha entre el capitalismo agonizante y el comunismo naciente o, en otras palabras, entre el capitalismo derrotado, pero no aniquilado, y el comunismo ya con vida, pero todavía muy débil. La necesidad de toda una época histórica caracterizada por estos rasgos del período de transición, tiene que ser evidente por si misma, no sólo para el marxista, sino para cualquier persona culta que de un modo u otro, conozca la teoría del desarrollo. Y sin embargo, todos los razonamientos que sobre el tránsito al socialismo escuchamos de los actuales representantes de la democracia pequeño burguesa (como lo son, pese a su pretendido rótulo socialista, todos los representantes de la II Internacional, incluyendo a individuos tales como Macdonald y Jean Longuet, Kautsky y Friedrich Adler) se distinguen por el completo olvido de esta verdad evidente. Los demócratas pequeñoburgueses se caracterizan por su aversión a la lucha de clases, por sus sueños acerca de la posibilidad de eludir esta lucha, por su tendencia a limar, paliar y conciliar las cortantes aristas. De ahí que esa clase de demócratas se desentiendan de cualquier reconocimiento de toda una etapa histórica de tránsito del capitalismo al comunismo o consideren que su cometido consiste en cavilar planes encaminados a reconciliar a las dos fuerzas beligerantes, en lugar de dirigir la lucha de una de ellas." Así como en la parte IV trata el trascendental punto de la supresión de las clases: "El socialismo es la supresión de las clases. Para suprimir las clases lo primero que hace falta es derrocar a los terratenientes y capitalistas. Hemos cumplido esta parte de la tarea, pero es sólo una parte y no la más difícil. Para acabar con las clases es preciso, en segundo lugar, suprimir la diferencia existente entre obreros y campesinos, convertir a todos en trabajadores. Y no es posible hacerlo de le noche a la mañana. ... ... ... Para resolver esta segunda parte de la tarea que es la más difícil, el proletariado, después de vencer a la burguesía debe mantener de modo inquebrantable la siguiente línea política fundamental respecto de los campesinos: separar, diferenciar a los campesinos trabajadores de los propietarios, a los campesinos laboriosos de los campesinos comerciantes, a los campesinos trabajadores de los campesinos especuladores. En esta diferenciación está la esencia del socialismo." En tanto que, en la V parte, remata magistralmente tratando socialismo, clases y dictadura del proletariado: "El socialismo es la supresión de las clases. La dictadura del proletariado ha hecho para lograrlo cuanto estaba a su alcance. Pero las clases no pueden suprimirse de golpe. Durante la época de la dictadura del proletariado subsisten y subsistirán las clases. La dictadura dejará de ser necesaria cuando no existan clases. Pero éstas no desaparecerán sin la dictadura del proletariado. Subsisten las clases pero cada una de ellas cambió de aspecto en la época de la dictadura del proletariado, lo mismo que cambiaron sus relaciones mutuas. La lucha de clases no desaparece bajo la dictadura del proletariado; lo único que hace es asumir nuevas formas. Bajo el capitalismo, el proletariado era una clase oprimida, carente de toda propiedad sobre los medios de producción, la única clase directa y totalmente contra puesta a la burguesía, y por lo tanto la única capaz de ser revolucionaria hasta el fin. Después de derrocar a la burguesía y de conquistar el poder político, el proletariado ha pasado a ser la clase dominante: tiene en sus manos el poder estatal, dispone de los medios de producción ya socializados, dirige a los elementos y clases vacilantes e intermedios y aplasta la creciente energía de la resistencia de los explotadores. Todas estas son tareas específicas de la lucha de clases, tareas que antes no se planteaba ni podía plantearse el proletariado. La clase de los explotadores, los terratenientes y capitalistas no ha desaparecido ni puede desaparecer en seguida bajo la dictadura del proletariado. Los explotadores han sido derrotados, pero no aniquilados. Conservan una base internacional, el capital internacional, del cual son parte integrante. Conservan, en parte, algunos medios de producción, conservan el dinero, conservan enormes relaciones sociales. Y como consecuencia precisamente de su derrota se ha multiplicado en cien y en mil veces su fuerza de resistencia. El `arte' de dirigir el Estado, el ejército y la economía les da una enorme superioridad, y en consecuencia su importancia es muchísimo mayor que su proporción numérica dentro de la cifra global de la población. La lucha de clase de los explotadores derrocados contra la vanguardia victoriosa de los explotados, es decir, contra el proletariado, se ha hecho encarnizada en grado considerable. Y no puede ser de otro modo, si en realidad nos referimos a la revolución y no suplantamos este concepto (como lo hacen todos los héroes de la II Internacional) por ilusiones reformistas. Por último, el campesinado, como toda la pequeña burguesía en general, ocupa también bajo la dictadura del proletariado una situación intermedia: por una parte se trata de una masa bastante considerable (en la atrasada Rusia, inmensa) de trabajadores, unida por el interés común de los trabajadores, de liberarse de los terratenientes y de los capitalistas; por otra parte, se trata de pequeños patronos, propietarios y comerciantes individuales. Esta situación económica provoca de modo inevitable su actitud vacilante entre el proletariado y la burguesía. Y al agudizarse la lucha entre estas dos clases, al producirse un viraje increíblemente brusco en todas las relaciones sociales, y dado que entre los campesinos y los pequeños burgueses en general se advierte una mayor propensión hacia lo viejo, lo rutinario, lo inmutable, es natural que se manifiesten entre ellos oscilaciones de un campo a otro, vacilaciones, cambios de frente, inseguridad, etc. Con respecto a esta clase o a estos elementos sociales la tarea del proletariado consiste en dirigir, en luchar por someterlos a su influencia. Lo que el proletariado debe hacer es conducir a los vacilantes, a los inseguros, tras de si. Si enfocamos en su conjunto a todas las fuerzas o clases fundamentales, en sus relaciones mutuas, tal como fueron modificadas por la dictadura del proletariado, nos daremos cuenta de cuán ilimitadamente absurdo es, desde el punto de vista teórico, y qué estupidez tan grande representa esa idea pequeñoburguesa corriente del paso al socialismo `a través de la democracia' en general, que encontramos en todos los representantes de la II Internacional. La base sobre la que descansa este error es el prejuicio, heredado de la burguesía, acerca de lo que se considera como contenido de una `democracia' absoluta, situada por encima de las clases. En realidad, con la dictadura del proletariado también la democracia entra en una fase totalmente nueva, y la lucha de clases se eleva a una etapa superior, haciendo que se supediten a ella cada una de las diversas formas. Las frases generales sobre la libertad, la igualdad y la democracia no son, en realidad, otra cosa que la ciega repetición de conceptos calcados sobre el molde de las relaciones de producción mercantil. Querer resolver por medio de estas frases generales las tareas concretas de la dictadura del proletariado equivale a pasarse en toda la línea a las posiciones teóricas, de principio, de la burguesía. Desde el punto de vista del proletariado, el problema se formula así y sólo así: libertad con respecto a la opresión de qué clase? Igualdad entre qué clases? Democracia en base a la propiedad privada, o en base a la lucha por la abolición de la propiedad privada?, etc. Hace mucho tiempo que Engels explicó en el Anti-Dühring que el concepto de igualdad, calcado sobre el molde de las relaciones de producción mercantil, se convierte en un prejuicio, a menos que la igualdad se entienda en el sentido de la supresión de las clases. Esta verdad elemental acerca de la diferencia entre el concepto democrático-burgués y el socialista de igualdad, suele olvidarse siempre. Cuando no se la olvida, se comprende con toda evidencia que el proletariado, al derrocar a la burguesía, da el paso decisivo hacia la supresión de las clases, y que, para alcanzar esa meta, el proletariado debe proseguir su lucha de clase utilizando para ello el aparato del poder estatal y empleando diversos métodos de lucha, de influencia y acción con respecto a la burguesía derrocada y a la pequeña burguesía vacilante." Y sobre lo central: la dictadura del proletariado, tener presente siempre muy seria y profundamente lo establecido por Lenin: "Quien reconoce solamente la lucha de clases no es aún marxista, puede mantenerse todavía dentro del marco del pensamiento burgués y de la política burguesa. Limitar el marxismo a la doctrina de la lucha de clases significa cercenar el marxismo, tergiversarlo, reducirlo a algo aceptable para la burguesía. Sólo es un marxista quien hace extensivo el reconocimiento de la lucha de clases al reconocimiento de la dictadura del proletariado. En ello estriba la más profunda diferencia entre un marxista y un pequeño (o un gran) burgués ordinario. Esta es la piedra de toque en la que deben comprobarse la comprensión y el reconocimiento reales del marxismo." ("El Estado y la revolución"). "En toda transición del capitalismo al socialismo, la dictadura es necesaria por dos razones principales o en dos direcciones principales. Primero: es imposible vencer y desarraigar el capitalismo sin aplastar implacablemente la resistencia de los explotadores que no pueden ser privados de una vez de sus riquezas, de sus ventajas en cuanto a organización y conocimientos, y en consecuencia tratarán inevitablemente, durante un período bastante largo, de derrocar el odiado Poder de los pobres. Segundo: toda gran revolución, y particularmente una revolución socialista, incluso cuando no existe una guerra exterior, es inconcebible sin guerra interior, es decir, sin guerra civil, que acarrea una ruina aún mayor que la ocasionada por una guerra exterior, que significa miles y millones de casos de vacilación y de paso de un campo a otro, que significa un estado de extrema incertidumbre, desequilibrio y caos. Y naturalmente todos los elementos de descomposición de la vieja sociedad, fatalmente muy numerosos y ligados sobre todo a la pequeña burguesía (pues es a ésta a la que toda guerra y toda crisis arruinan y destruyen en primer termino), no pueden dejar de `manifestarse' en una revolución tan profunda. Y esos elementos de descomposición no pueden `manifestarse' más que por medio de un aumento de la delincuencia, la golfería, el soborno, la especulación y toda clase de excesos. Para acabar con todo esto se requiere tiempo y hace falta una mano de hierro. La historia no conoce ninguna gran revolución en la que el pueblo no sintiera esto instintivamente y no manifestara una firmeza salvadora fusilando a los ladrones en flagrante. La desgracia de las revoluciones anteriores consistía en que el entusiasmo revolucionario de las masas, que las mantenía en un estado de tensión y les daba la Fuerza para reprimir implacablemente a los elementos de descomposición, no duraba mucho tiempo. La causa social, o sea, de clase, de tal inestabilidad del entusiasmo revolucionario de las masas residía en la debilidad del proletariado, el único capaz (si es bastante numeroso, consciente y disciplinado) de atraerse a la mayoría de los trabajadores y explotados (la mayoría de los pobres, empleando un término más sencillo y popular),y de mantener el Poder durante un plazo suficientemente largo para aplastar por completo a todos los explotadores y a todos los elementos de descomposición. Esta experiencia histórica de todas las revoluciones, esta lección -económica y política-histórica mundial, fue sintetizada por Marx en su fórmula breve, aguda, precisa y clara: dictadura del proletariado." ("Las tareas inmediatas del Poder soviético"). "La dictadura del proletariado es la guerra más abnegada y más implacable de la nueva clase contra un enemigo más poderoso, contra la burguesía, cuya resistencia se decuplica con su derrocamiento (aunque no sea más que en un solo país) y cuyo poderío consiste, no sólo en la fuerza del capital internacional, en la fuerza y solidez de las relaciones internacionales de la burguesía, sino, además, en la fuerza de la costumbre, en la fuerza de la pequeña producción. Pues, por desgracia, ha quedado todavía en el mundo mucha y mucha pequeña producción y la pequeña producción engendra capitalismo y burguesía constantemente, cada día, cada hora, de modo espontáneo y en masa. Por todos estos motivos, la dictadura del proletariado es necesaria, y la victoria sobre la burguesía es imposible sin una guerra prolongada, tenaz, encarnizada, a muerte, una guerra que exige serenidad, disciplina, firmeza, inflexibilidad y una voluntad única." ("La enfermedad infantil del `izquierdismo' en el comunismo"). "Nosotros en Rusia (en el tercer año posterior al derrocamiento de la burguesía) estamos dando los primeros pasos en la transición del capitalismo al socialismo, o a la etapa inferior del comunismo. Las clases aún existen y seguirán existiendo durante años, en todas partes, después de la conquista del Poder por el proletariado. Quizás en Inglaterra donde no hay campesinado (pero donde existen pequeños propietarios!), este período pueda ser más corto. Abolir las clases no sólo significa echar a los terratenientes y a los capitalistas, cosa que nosotros hicimos con relativa facilidad; significa también abolir a los pequeños productores de mercancías, y éstos no pueden ser echados o aplastados; hay que vivir en buena armonía con ellos. Se puede (y se debe) transformarlos, reeducarlos, sólo mediante una labor de organización muy prolongada, lenta y prudente. Ellos rodean al proletariado, por todas partes, con un ambiente pequeño burgués que penetra y corrompe al proletariado; provocan constantemente en el proletariado reincidencias en la pusilanimidad pequeñoburguesa, la desunión, el individualismo y la transición de la exaltación al abatimiento. Para contrarrestar esto, para permitir que el proletariado ejerza acertada, eficaz y victoriosamente su papel de organizador (y ése es su papel principal), son imprescindibles la centralización y la disciplina más rigurosas en el partido político del proletariado. La dictadura del proletariado es una lucha persistente, cruenta e incruenta, violenta y pacifica, militar y económica, educacional y administrativa, contra las fuerzas y las tradiciones de la vieja sociedad. La fuerza de la costumbre de millones y decenas de millones de personas es la fuerza más terrible. Sin un partido férreo, templado en la lucha, sin un partido que goce de la confianza de todas las personas honestas de la clase de que se trata, sin un partido capaz de observar el estado de ánimo de las masas e influir sobre él, es imposible llevar a cabo con éxito esta lucha. Es mil veces más fácil vencer a la gran burguesía centralizada que `vencer' a los millones y millones de pequeños propietarios; éstos, con su actividad corruptora, cotidiana, prosaica, invisible, imperceptible, producen los mismos resultados que necesita la burguesía y que restauran a la burguesía. Quien debilita en lo mas mínimo la disciplina férrea del partido del proletariado (en especial durante su dictadura), ayuda de hecho a la burguesía contra el proletariado." (Ibídem). "Entre los ingenieros soviéticos, entre los maestros soviéticos, y entre los obreros privilegiados, es decir, los más calificados y colocados en las mejores condiciones, en las fábricas soviéticas, observamos un constante renacimiento de absolutamente todos los rasgos negativos propios del parlamentarismo burgués, y sólo mediante una lucha repetida, incansable, prolongada y tenaz basada en la organización y la disciplina proletarias estamos venciendo--poco a poco--este mal." ("La enfermedad infantil del `izquierdismo' en el comunismo"). "La revolución que hemos iniciado, que hemos estado realizando durante dos años y que estamos firmemente resueltos a llevar hasta el fin (aplausos), es posible y factible solo a condición de que logremos traspasar el Poder a la nueva clase, a condición de que la burguesía, los esclavistas capitalistas, los intelectuales burgueses, los representantes de todos los poseedores, de todos los propietarios, sean reemplazados de abajo arriba por la nueva clase en todas las esferas del gobierno, en toda la causa de la construcción estatal, en toda la dirección de la nueva vida." ("Informe en el II Congreso de Sindicatos de Toda Rusia"). El Presidente Mao Tsetung en su elevación del marxismo a una nueva, tercera y superior etapa ha desarrollado extraordinariamente el socialismo científico como teoría y practica de la revolución, principalmente con su inmarcesible desarrollo de la gran revolución cultural proletaria. Así, el Presidente Mao con la revolución cultural proletaria, como continuación de la revolución bajo la dictadura del proletariado, profundizo y desarrollo grandiosamente la cuestión fundamental del socialismo y la dictadura del proletariado; estableció la forma como desarrollar la revolución, en las condiciones de la sociedad socialista y bajo el Estado de dictadura del proletariado, para proseguir la marcha inexorable hacia el comunismo. Veamos puntos y situaciones que llevaron a esta conclusión trascendente. Sobre la revolución, en "Sobre la camarilla contrarrevolucionaria de Ju Feng", el Presidente Mao escribió: "Excepto la revolución que sustituyo a la comunidad primitiva por la esclavitud, es decir, que reemplazó un sistema en el que no existía la explotación por otro de explotación, todas las demás revoluciones del pasado concluyeron en el reemplazo de un sistema de explotación por otro. Para ellas no era necesario ni posible aplastar definitivamente la contrarrevolución. Sólo nuestra revolución, la revolución de las masas populares dirigida por el proletariado y el Partido Comunista, tiene como meta la eliminación definitiva de todos los sistemas de explotación y todas las clases". Y sobre la "regla universal" de primero tomar el Poder para transformar la sociedad: "Desde el punto de vista de la historia mundial, la revolución burguesa y el establecimiento de Estados burgueses tuvieron lugar antes y no luego de la revolución industrial. Aquí también la superestructura tuvo que ser transformada primero y el aparato de Estado puesto en su lugar antes que fuesen propagadas las ideas que permitían adquirir el poder real. Resulto de ello un sacudimiento profundo de las relaciones de producción. Cuando las nuevas relaciones de producción fueron bien establecidas, abrieron la vía al desarrollo de las fuerzas productivas. Pero un gran desarrollo de las fuerzas productivas proviene siempre de la transformación de las relaciones de producción. Tomemos el ejemplo de la historia del desarrollo del capitalismo. Al comienzo no hubo sino: un simple reagrupamiento de actividades; luego se crearon fábricas y talleres artesanales. En este estadio se establecieron las relaciones de producción capitalistas, pero los talleres artesanales no eran todavía la producción mecanizada. Las relaciones de producción capitalistas hicieron nacer necesidades de transformaciones técnicas, creando así las condiciones para la utilización de máquinas. En Inglaterra, la revolución industrial (fines del siglo XVIII--comienzos del siglo XIX) se produce luego de la revolución burguesa (que tuvo lugar después del siglo XVII). Igualmente en Alemania, Francia, Estados Unidos y Japón, el gran desarrollo industrial capitalista no comenzó si no luego de la transformación de la superestructura y de las relaciones de producción, transformación cuya forma varió según los países. Primeramente crear opinión pública y apoderarse del poder político. Resolver el problema de los sistemas de propiedad luego, para llegar por fin a un gran desarrollo de las fuerzas productivas, he aquí la regla universal. Sobre tal punto, la revolución proletaria y la revolución burguesa se parecen fundamentalmente a pesar de ciertas diferencias. (Las relaciones de producción socialistas, por ejemplo, no existían antes de la revolución proletaria, mientras que las relaciones de producción capitalistas comenzaron a desarrollarse en la sociedad feudal." ("Notas de lectura sobre el `Manual de Economía Política' de la Unión Soviética"). Así como sobre la necesidad de demoler la vieja superestructura para abolir las antiguas relaciones de producción: "La historia de todas las revoluciones ha probado que no era necesario tener previamente desarrolladas las fuerzas productivas en su plenitud para poder transformar las relaciones de producción envejecidas. La revolución China comenzó por la propagación del marxismo. Gracias a esta propagación, nació una nueva opinión pública, facilitando así la revolución. Es necesario antes que nada demoler la antigua superestructura por la revolución para que las antiguas relaciones de producción puedan ser abolidas. Es después de la eliminación de éstas que se pueden crear nuevas relaciones de producción, abriendo una vía al desarrollo de las fuerzas productivas de la nueva sociedad. Solamente luego se puede desarrollar una gran revolución tecnológica, para desarrollar vigorosamente las fuerzas productivas, continuando al mismo tiempo la transformación de las relaciones de producción y las ideologías. El Manual no habla de las premisas materiales y no aborda más que raramente la superestructura. Es decir el Estado de clase, la filosofía de clase y las ciencias de clase. La ciencia económica tiene por principal objeto de estudio las relaciones de producción. Pero es difícil separar la economía política y la concepción materialista de la historia. Es difícil explicar claramente los problemas relativos a la base económica y a las relaciones de producción sin tener en cuenta los problemas concernientes a la superestructura." (Ibídem). En cuanto a como surgió la Nueva China: "Nuestra República Popular no fue formada de la noche a la mañana, sino que se desarrolló poco a poco partiendo de las bases revolucionarias. Algunas personalidades demócratas se han templado también en la lucha, en mayor o menor grado, y sufrieron junto a nosotros tribulaciones y penas. Algunos intelectuales se templaron en la lucha contra el imperialismo y las fuerzas reaccionarias, y muchos de ellos pasaron, después de la Liberación, por un proceso de transformación ideológica encauzada a trazar una clara distinción entre nosotros y el enemigo. La consolidación de nuestro Estado se debe, además, al hecho de que las medidas económicas que adoptamos son básicamente acertadas, a que la vida del pueblo es segura y mejora gradualmente, a que nuestra política respecto a la burguesía nacional y otras clases es asimismo correcta, etc." ("Sobre el tratamiento correcto de las contradicciones en el seno del pueblo"). Y en cuanto a la dictadura y sus funciones: "Nuestro Estado es un Estado de dictadura democrática popular, dirigido por la clase obrera y basado en la alianza obrero-campesina. Cuáles son las funciones de esta dictadura? Su primera función es reprimir dentro del país a las clases y elementos reaccionarios y a los explotadores que oponen resistencia a la revolución socialista, reprimir a los que sabotean la edificación socialista, es decir, resolver las contradicciones entre nosotros y el enemigo dentro del país. En esta esfera de nuestra dictadura están incluidas, por ejemplo, la detención y la condena a ciertos contrarrevolucionarios y, durante un determinado tiempo, la privación de derechos electorales y libertad de palabra a los terratenientes y los elementos de la burguesía burocrática. Para mantener el orden social y defender los intereses de las grandes masas populares, es igualmente necesario ejercer la dictadura sobre los ladrones, estafadores, asesinos, incendiarios, las bandas de malhechores y los diversos elementos perniciosos que violan seriamente el orden social. La dictadura tiene además otra función: defender nuestro país contra las actividades subversivas y la posible agresión de los enemigos exteriores. Cuando surge tal situación, la dictadura tiene a su cargo la tarea de resolver las contradicciones entre nosotros y el enemigo del exterior. El objetivo de la dictadura consiste en proteger a todo el pueblo para que pueda trabajar en paz y transformar a China , mediante la construcción , en un país socialista con una industria, una agricultura, una ciencia y una cultura moderna. Quiénes ejercen la dictadura? Naturalmente, la clase obrera y el pueblo entero dirigido por ésta. La dictadura no se aplica dentro del pueblo. El pueblo no puede ejercer la dictadura sobre si mismo, ni una parte del pueblo puede oprimir a otra. Los que, en el seno del pueblo, violan las leyes, también deben ser castigados con arreglo a la ley, pero entre esto y la dictadura que reprime a los enemigos del pueblo existe una diferencia de principios. Dentro del pueblo se practica el centralismo democrático." (Ibídem). Y en lo referente a libertad y democracia: "En realidad, en el mundo sólo hay libertad y democracia concretas, y no existen libertad ni democracia abstractas. En una sociedad donde existe lucha de clases, si hay libertad para que las clases explotadoras exploten al pueblo trabajador, no hay libertad para que éste no sea explotado; si hay democracia para la burguesía, no la hay para el proletariado y el resto del pueblo trabajador. En algunos países capitalistas también se permite la existencia legal de los Partidos Comunistas, pero únicamente en la medida en que esto no pone en peligro los intereses fundamentales de la burguesía; no esta permitida mas allá de ese limite. Los que piden libertad y democracia en abstracto creen que la democracia es un fin y no un medio. A veces la democracia parece un fin, pero en realidad es solo un medio. El marxismo nos enseña que la democracia forma parte de la superestructura y pertenece a la categoría de la política. Esto significa que, en fin de cuentas, la democracia sirve a la base económica. Lo mismo ocurre con la libertad. Tanto la democracia como la libertad son relativas y no absolutas, han surgido y se desarrollan en el curso de la historia. En el seno del pueblo, la democracia es correlativa con el centralismo, y la libertad, con la disciplina. Son dos aspectos opuestos de un todo único, contradictorios y a la vez unidos. No debemos recalcar unilateralmente uno de ellos negando el otro. En el seno del pueblo, no se puede prescindir de la libertad, tampoco se puede excluir la disciplina; no se puede prescindir de la democracia, tampoco se puede excluir el centralismo. Tal unidad de democracia y centralismo, de libertad y disciplina, constituye nuestro centralismo democrático. Bajo este sistema, el pueblo disfruta de una democracia y una libertad amplia, pero al mismo tiempo debe mantenerse dentro de los limites de la disciplina socialista. Esta verdad la comprenden bien las grandes masas populares." (Ibídem). Mas ya en marzo del 49 el Presidente Mao dijo: "Triunfar en todo el país es solo el primer paso de una larga marcha de diez mil li. Este paso, aunque sea digno de nuestro orgullo, resulta relativamente minúsculo; lo que aun esta por venir será mucho más digno de nuestro orgullo. La victoria de la revolución democrática popular de China, mirada retrospectivamente después de varios decenios, parecerá solo el breve prólogo de un largo drama. Un drama comienza por el prólogo, pero el prólogo no es la culminación. La revolución China es grandiosa, pero después de la revolución, el camino será aun mas largo y nuestra tarea, aún mas grandiosa y mas ardua". Así como en "Sobre el tratamiento correcto de las contradicciones en el seno del pueblo", su gran obra de febrero del 57, especifico: "Pero nuestro sistema socialista acaba de instaurarse; aun no esta cabalmente establecido ni consolidado por completo". Y: "Toda cosa nueva experimenta dificultades y reveses en su crecimiento. Sueña quien crea que la causa del socialismo es como navegar viento en popa, empresa de éxito fácil en la que no se tropieza con dificultades ni se sufren reveses ni se requieren inmensos esfuerzos". En este mismo texto se reafirma la lucha de clases en el socialismo, y principalmente se sienta que en definitiva no esta resuelto quien vencerá a quien; esto es si el socialismo o el capitalismo vencerá políticamente. es decir en la lucha de clases actualmente en desarrollo, pues históricamente, en perspectiva, el socialismo necesariamente se impondrá; vencerá ineluctablemente: "En China, aunque en lo fundamental se ha consumado la transformación social es la de la propiedad y han terminado las vastas y tempestuosas luchas de clase de las masas, características de los anteriores períodos revolucionarios, subsisten remanentes de las clases derrocadas: la clase terrateniente y la burguesía compradora; subsiste la burguesía, y la transformación de la pequeña burguesía solo acaba de empezar. La lucha de clases no ha terminado. La lucha de clases entre el proletariado y la burguesía, entre las diferentes fuerzas políticas y entre el proletariado y la burguesía en el terreno ideológico, será aun larga, tortuosa y a veces incluso muy enconada. El proletariado aspira a transformar el universo según su concepción del mundo, y la burguesía, según la suya. A este respecto, aun no ha sido resuelta en definitiva la cuestión de quien vencerá: el socialismo o el capitalismo." En "Discurso ante la Conferencia Nacional del Partido Comunista de China sobre el trabajo de propaganda", febrero de 1957, el Presidente Mao trata sobre las grandes transformaciones que genera el socialismo, su consolidación gradual, su necesidad de un largo período histórico para consolidarse y la seguridad de construir un Estado socialista: "Estamos viviendo un período de grandes cambios sociales. Durante un largo tiempo la sociedad China ha estado sufriendo grandes transformaciones. La Guerra de Resistencia contra el Japón fue una de ellas y, la otra, la Guerra de Liberación. Pero el carácter del cambio actual es mucho mas profundo que el de los anteriores. Estamos ahora construyendo el socialismo. Cientos de millones de personas participan en el movimiento de transformación socialista. Las relaciones de clase están cambiando en todo el país. La pequeña burguesía agrícola y artesanal y la burguesía de la industria y el comercio han sufrido ambas un cambio. Se ha transformado el sistema económico de la sociedad; la economía individuales ahora economía colectiva y la propiedad privada capitalista esta siendo transformada en propiedad publica socialista. Cambios de tal magnitud, por supuesto se reflejan en la mentalidad de la gente. La existencia social del hombre determina su conciencia. La gente de diferentes clases, estratos y grupos sociales reaccionan de diverso modo ante los grandes cambios de nuestro sistema social. Las grandes masas del pueblo vehementemente los apoyan, dado que la vida misma confirmó que el socialismo es el único camino para China. Eliminar el antiguo sistema social y establecer uno nuevo, el sistema del socialismo, es una gran batalla, un gran cambio en el sistema social y en las relaciones de los hombres entre si. Debe decirse que, básicamente, la situación es saludable. Pero el nuevo sistema social recién ha sido establecido y requiere tiempo para su consolidación. No debe suponerse que el nuevo sistema puede ser totalmente consolidado en el mismo momento en que se implanta, porque eso es imposible. La consolidación debe ser gradual. Para lograr su firmeza final es necesario no sólo llevar a cabo la industrialización socialista del país y perseverar en la revolución socialista en el frente económico, sino también sostener constante y ardua lucha revolucionaria socialista y poner en ejecución la educación socialista en los frentes político e ideológico. Además, se requiere la contribución de diversos factores internacionales. En China la lucha para consolidar el sistema socialista, la lucha para decidir cual prevalecerá: el socialismo o el capitalismo, cubrirá un largo período histórico. Pero todos debemos advertir que este nuevo sistema del socialismo, incuestionablemente se consolidara. Con toda seguridad podemos construir un Estado socialista con moderna industria, moderna agricultura, y modernas ciencia y cultura." Otro problema sustantivo de la cuestión fundamental analizada, socialismo y dictadura del proletariado, es la construcción y desarrollo del socialismo; sobre éste el maoísmo parte de: "qué pasara si nuestro país no establece una economía socialista? Se convertirá en un país revisionista, de hecho en un Estado burgués, y la dictadura del proletariado se transformara en dictadura de la burguesía; es mas, en una dictadura reaccionaria y fascista. Este es un problema que merece nuestra alta vigilancia y espero que los camaradas reflexionen seriamente sobre él". "En cuanto a la construcción de una poderosa economía socialista, China requiere, no ya 50 años, sino cien o un tiempo aún más largo. En su país (Inglaterra), el desarrollo del capitalismo llevó varios centenares de años. Quedo fuera de la cuenta el siglo XVI, que forma parte de la Edad Media. Del siglo XVII hasta ahora, ya han pasado más de 360 años. En nuestro país, la construcción de una poderosa economía socialista, según mi cálculo, requerirá más de una centuria". "Más de tres siglos de desarrollo han necesitado las fuerzas productivas del capitalismo para llegar a lo que son hoy día. En comparación con el capitalismo, el socialismo tiene muchas ventajas. El desarrollo económico de nuestro país será mucho más rápido que el de los países capitalistas. Sin embargo, China tiene una inmensa población, su base es débil y su economía atrasada". "Si se emplearon tres siglos y varios decenios para construir una poderosa economía capitalista, qué tiene de malo construir una poderosa economía socialista en nuestro país en un período de unos 50 a unos 100?". Y llama a pensar en que: "Respecto a la construcción socialista, aún actuamos muy a ciegas. Para nosotros, la economía socialista es, en muchos aspectos, un incógnito reino de la necesidad". Así como, por otro lado, establece: "Socialismo o comunismo? En qué momento se puede decir que ha acabado la construcción del socialismo? Hemos formulado dos criterios: 1. La conclusión de la construcción del socialismo se manifiesta por la aplicación general del sistema socialista de propiedad de todo el pueblo. 2. Cuando el sistema de propiedad de todo el pueblo haya reemplazado al sistema de propiedad colectiva de las comunas populares. Ciertos camaradas no están de acuerdo en distinguir ambos sistemas de propiedad. Pretenden que en las comunas populares sólo existe el sistema de propiedad de todo el pueblo. En realidad hay dos sistemas: Uno es el sistema de propiedad de todo el pueblo del tipo Aceria de Anshan, el otro es el sistema de propiedad de la gran colectividad de la comuna popular. Si se ignora esto, para qué sirve entonces la edificación socialista? Stalin trazó la línea de demarcación entre los dos sistemas y preconizó tres condiciones para pasar al comunismo. Dichas tres condiciones fundamentales no son malas. Las dos primeras pueden ser resumidas como sigue: 1) aumento de la producción social; 2) pasaje del sistema de propiedad colectiva al sistema de propiedad de todo el pueblo; sustitución del sistema de intercambio de mercancías por un sistema de intercambio de productos; pasaje de la etapa del valor de cambio a la etapa del valor de uso. En China las dos condiciones significan: 1) aumentar enérgicamente la producción y desarrollar simultáneamente la industria y la agricultura, siempre conservando el principio de crecimiento preferencial de la industria pesada; 2) llevar el sistema de propiedad de la pequeña colectividad al nivel de sistema de propiedad de todo el pueblo. Quienes entre nosotros trazan líneas demarcatorias y pretenden que ya entramos en la era del sistema de propiedad de todo el pueblo se equivocan. La tercera condición fijada por Stalin concierne a la cultura: preconiza un incremento de la educación física y de la educación de todo el pueblo. Para alcanzar este objetivo, Stalin propone cuatro medidas: 1) la jornada de trabajo de seis horas; 2) la institucionalización de la educación politécnica; 3) el mejoramiento de las condiciones de vivienda; 4) el aumento de salarios y la disminución de los precios. Las tres condiciones de Stalin son excelentes, pero falta una condición político-ideológica. Dichas condiciones, citadas arriba, tienden esencialmente a aumentar la producción. Una abundancia muy grande de producción facilita, en efecto, el pasaje del sistema de producción colectiva al sistema de propiedad de todo el pueblo. Pero para aumentar la producción es preciso producir más, mas rápidamente, mejor y de una manera más económica. Y si se quiere llegar a ese resultado es preciso poner la política en el puesto de mando y esforzarse para alcanzar simultáneamente los cuatro objetivos: cantidad, rapidez, calidad, economía. También es preciso lanzar movimientos de rectificación para destruir la ideología del poder legal de la burguesía. Sumar una forma de estructura tal como la comuna popular a un país como China es volver más fácil la realización de los cuatro objetivos: cantidad, rapidez, calidad, economía. Cuál es la significación del sistema general de propiedad de todo el pueblo? Este sistema significa: 1) que los medios de producción de la sociedad pertenecen a todo el pueblo; 2) que los productos de la sociedad pertenecen a todo el pueblo. Cuál es la naturaleza de la comuna popular? Es la unidad de base de la estructura social China que agrupa obreros, campesinos, soldados, intelectuales y comerciantes. Actualmente constituye la organización administrativa de base. En cuanto a la milicia, está destinada a enfrentar al extranjero, particularmente al imperialismo. La comuna popular es la mejor forma de organización para la realización de los dos pasajes: el pasaje del socialismo de hoy al sistema general de propiedad de todo el pueblo, y el pasaje del sistema general de propiedad de todo el pueblo al comunismo. Luego de estos pasajes, la comuna popular constituirá la estructura de base de la sociedad comunista." ("Sobre `Problemas económicos del socialismo en la URSS' de Stalin"). Y sobre mercancía, valor y planificación: "Si desarrollamos sensiblemente la producción mercantil, no es teniendo como objetivo un beneficio, sino en el interés del campesinado, de la alianza entre los obreros y los campesinos, del desarrollo de la producción". "Luego de las campañas de rectificación contra los derechistas, el trabajo no es más una mercancía. No se trabaja más para obtener dinero sino para servir al pueblo. Esto es posible solamente si el trabajo no es más una mercancía". "La ley del valor no desempeña un poder regulador. Este papel lo juega la planificación y el principio que consiste en poner la política en el puesto de mando. En la sociedad China, la ley del valor no desempeña un papel regulador, es decir un papel decisivo. Lo que juega un papel decisivo en la producción es la planificación." ("Notas sobre `Problemas económicos del socialismo en la URSS' "). Y: "En el dominio del trabajo de planificación, si rehusamos hacer un balance y adoptamos la política de dejar hacer, si nos mostramos demasiado prudentes y excluimos toda audacia, se termina por destruir el desarrollo proporcionado. Estos métodos de trabajo son ambos erróneos. Un plan es una ideología. La ideología es el reflejo de una realidad y ella actúa sobre la realidad...Ello muestra claramente que cosas como los planes, que forman parte de las ideologías, tienen una gran influencia sobre el progreso o la ausencia de progreso de la economía, tanto como el ritmo de desarrollo económico." ("Notas de lectura sobre el `Manual de Economía Política' de la URSS"). Y combatiendo la posición revisionista de los "estímulos materiales": "Algunos dicen que el socialismo debe prestar mayor atención al estimulo material que el capitalismo. Tal tesis no tiene verdaderamente ningún sentido!" "Considerar la distribución de los medios de consumo como una fuerza motriz decisiva es revisar el punto de vista de Marx..." Así como: "El Manual prosigue en estos términos: `Antes que nada debemos extraer beneficios del factor que es el estimulo material'. Habla como si la actividad creadora de las masas dependiera de los intereses materiales. El Manual no pierde ocasión de hablar de los intereses materiales personales, como si buscara sin cesar llamar a dichos intereses para atraer a la gente. Ello refleja el espíritu de una parte considerable de los cuadros de los servicios económicos y de los cuadros dirigentes. Refleja igualmente una situación en la cual el trabajo político e ideológico no ha retenido suficientemente la atención. En estas condiciones no hay otra salida que apoyarse en los estímulos materiales. La primera mitad de la frase `de cada uno según a su capacidad, a cada uno según su trabajo' se refiere a la necesidad de hacer un esfuerzo máximo por la producción. Por qué entonces recortar dicha frase en dos y hablar de una manera parcial de los estímulos materiales? Si así se publicitan los intereses materiales el capitalismo se convierte en invencible". Y además: "Incluso si se admite que el estimulo material es un principio importante no puede ser de ninguna manera el único. Debe haber otro principio: aquél del estimulo del espíritu en el dominio político-ideológico. Además el estímulo material no puede ser tratado únicamente en términos de intereses personales. Debe ser tratado también en términos de intereses colectivos, de primacía de los intereses colectivos sobre los intereses personales, de prioridad de los intereses a largo plazo sobre los intereses provisorios, de primacía de los intereses generales sobre los intereses particulares." (Ibídem). Y considerando la vital importancia que para el desarrollo del socialismo tiene el campesinado, recordemos lo dicho por el Presidente Mao ya en el período de la resistencia antijaponesa: "Durante miles de años, ha reinado entre las masas campesinas la economía individual, en la cual cada familia y hogar constituye una unidad productiva. Esta forma de producción individual, dispersa, fue el cimiento económico del régimen feudal, y hundió a los campesinos en una pobreza perpetua. El único camino para cambiar tal estado de cosas es la colectivización gradual". Y en 1953, al establecer las transformaciones socialistas de la agricultura como parte de la línea general: "Si hablamos de la agricultura, el único camino para la agricultura de nuestro país es el camino socialista". Así como al criticar el otorgamiento de tierras predicado por el "Manual", plantea el método de trabajo con el campesinado: "Esto significa que el gobierno confisca las tierras para darlas a los campesinos a fin de que ellos puedan redistribuirlas. Se trata aquí de un espíritu de otorgamiento; no se compromete en la lucha de clases ni en los movimientos de masa. Esta concepción es en la realidad una concepción derechista. Nuestro método consiste en apoyarnos en los campesinos pobres, unirnos con los campesinos medios (campesinos medios inferiores) y apoderarnos de las tierra de los terratenientes. El Partido debe asumir la dirección de este proceso sin monopolizar el trabajo. Debemos adoptar una serie de medidas concretas: visitar a los campesinos pobres para encuestarlos sobre sus sufrimientos, reclutar activistas, reunir a todos aquellos que tienen el mismo origen de clase, constituir un núcleo sólido, convocar asambleas para que todos los que sufren cuenten sus sufrimientos, organizar las fuerzas de clase y desatar la lucha de clases." (El ya citado "Notas..."). Y sobre la alianza obrero-campesina, sustento de la dictadura del proletariado, y su desarrollo ligado a las transformaciones socialistas de la agricultura: "Entre nosotros, la alianza de los obreros y de los campesinos pasó ya por dos etapas: la primera fundada sobre la revolución agraria; la segunda fundada en el movimiento de las cooperativas. Sin el movimiento de las cooperativas ciertamente se habría producido una bipolarización del campesinado, impidiendo así la consolidación de la alianza entre los obreros y campesinos tanto como el mantenimiento de una política de compras y ventas agrupadas por el Estado. Es solamente sobre la base de la cooperativización que la política de compras y ventas agrupadas del Estado puede ser mantenida y aplicada. Ahora nuestra alianza obrero-campesina deberá progresar apoyándose en la mecanización. Si no hay más que los movimientos cooperativos y de las comunas populares sin mecanización, la alianza obrero-campesina no podrá consolidarse. En el movimiento de las cooperativas, si no hay más que una pequeña cooperativización, la alianza obrero-campesina no podrá tampoco consolidarse. El movimiento de las cooperativas debe por consiguiente pasar a las comunas populares. Y la propiedad de los equipos de producción de base debe convertirse en propiedad de las comunas populares de base. La propiedad de las comunas populares debe, a su vez, convertirse en propiedad del Estado. Entonces, sobre la base de una combinación de la nacionalización y de la mecanización, nosotros podremos realmente consolidar la alianza obrerocampesina, haciendo desaparecer progresivamente las diferencias entre obreros y campesinos." (Ibídem). Así como sobre la transformación de los intelectuales: "Ahora bien, es preciso transformar no solamente a los intelectuales burgueses sino también a los intelectuales de origen obrero o campesino que en muchos aspectos están influenciados por la burguesía. En el medio literario y artístico esta transformación ha sido demostrada por el caso de Liu Chao-Tang que, convertido en escritor, atacó vigorosamente al socialismo. La concepción del mundo de los intelectuales se manifiesta a menudo en su actitud ante el saber. Este pertenece a ciertos individuos o a todo el mundo? Algunos consideran el conocimiento como su propiedad privada y esperan venderlo al mejor precio. Rehúsan venderlo mientras el precio no sea suficientemente elevado. Ellos son solamente expertos pero no son `rojos'. Ellos dicen que el Partido es `incompetente' por lo tanto incapaz de dirigir a los `competentes'. Los que trabajan en el cine dicen que el Partido no puede dirigir el cine. Los que hacen danza afirman que el Partido no puede dirigir la danza. Y los que se embarcan en la investigación atómica afirman que el Partido no puede dirigir la investigación científica sobre la energía atómica. En una palabra, el Partido no puede dirigir absolutamente nada. En el conjunto del proceso de la revolución socialista y de la edificación socialista, la transformación de los intelectuales constituye un problema muy importante. Nos equivocamos si no subrayamos este problema y adoptamos una actitud de compromiso frente a todo lo que es burgués." (Ibídem). Y en cuanto al proceso de la humanidad, la gran comprensión dialéctica de concebir el paso del socialismo al comunismo y el desarrollo de éste a través de la revolución: "Ciertamente, el pasaje al comunismo no significa el derrocamiento de una clase por otra clase. Pero no puede decirse que no sea una revolución social, puesto que la sustitución de una relación de producción por otra relación de producción es un salto cualitativo, es decir una revolución. En China, la transformación de la economía individualista en economía colectiva y la transformación de la economía colectiva en economía de todo el pueblo constituyen revoluciones en el dominio de las relaciones de producción. No se puede decir que la conversión del principio socialista `a cada uno según su trabajo' en el principio comunista `a cada uno según su necesidad' no constituya una revolución en el dominio de las relaciones de producción. Ciertamente, el principio `a cada uno según sus necesidades' será puesto en aplicación progresivamente. Es posible que cuando el aprovisionamiento de artículos de primera necesidad llegue a ser suficiente, nosotros los distribuyamos a cada uno según sus necesidades. Dicha distribución será extendida a otros artículos a medida que las fuerzas productivas se desarrollen. Tomemos el ejemplo del desarrollo de las comunas populares chinas. En el momento de la conversión del sistema de propiedad en el nivel del equipo de base en sistema de propiedad en el nivel de comuna de base, no se arriesga producir conflictos en una parte de la población? Dicho problema merece ser estudiado. Para realizar esta conversión, una de las condiciones determinantes es que los ingresos que provienen de la economía comunal constituyan más de la mitad de los ingresos globales de la comuna popular. La aplicación del sistema de propiedad en el nivel de la comuna popular de base es provechosa a los miembros ordinarios de la comuna. Por ello estimamos que la inmensa mayoría de la gente no se opondrá a dicho cambio. Pero en el momento del mismo, los antiguos cuadros de los equipos de producción perderán la dirección de dichos equipos y su poder administrativo disminuirá de manera pareja. Se opondrán ellos entonces a dicha transformación? En dicho proceso de transformación, es posible que surja el problema de ciertos `grupos que hayan adquirido privilegios' y ello a despecho de que en una sociedad socialista las clases hayan sido abolidas. Los miembros de estos grupos, satisfechos del sistema existente, no desearan cambiar. La aplicación de los principios `a cada uno según su trabajo' o `ganar más trabajando más', por ejemplo, les es provechosa. En consecuencia, puede suceder que se sientan mal cuando dichos principios cedan su lugar al principio `a cada uno según sus necesidades'.. Ahora bien, el establecimiento de todo nuevo sistema exige necesariamente la destrucción del anterior. La construcción sin destrucción no existe. Si se destruye se provoca la oposición de una parte de la gente. El hombre es un animal extraño. Cuando se encuentra en una situación privilegiada se muestra arrogante...No tener en cuenta ello es muy peligroso." (Ibídem). Y: "Aunque no haya guerra en el sistema socialista, la lucha existe siempre, lucha de diferentes sectores en el seno del pueblo. Aunque en el sistema socialista no haya revolución en el curso de la cual una clase derroquea la otra, la revolución existe siempre. El paso del socialismo al comunismo es una revolución. El paso de un estadio a otro estadio del comunismo es también una revolución. Existen igualmente revoluciones técnicas y revoluciones culturales. El comunismo pasará necesariamente por muchos estadios. Habrá por consiguiente muchas revoluciones."(Ibídem). Fue en estas condiciones y sobre estas bases que el Presidente Mao Tsetung preparó y dirigió la Gran Revolución Cultural Proletaria, en cuya documentación sustancial estableció: "La sociedad socialista cubre una etapa histórica bastante larga. Durante la etapa histórica del socialismo, aun existen clases, contradicciones de clase y lucha de clases; existen la lucha entre el camino socialista y el capitalista y el peligro de restauración capitalista. Es preciso comprender lo largo y complicado de esta lucha y elevar nuestra vigilancia. Es necesario realizar la educación socialista. Es necesario comprender y tratar de manera correcta el problema de las contradicciones de clase y de la lucha de clases y distinguir acertadamente las contradicciones entre nosotros y el enemigo de las existentes en el seno del pueblo, y tratarlas de manera correcta. De otro modo, un país socialista como el nuestro, se convertirá en su contrario, degenerara y se producirá la restauración. De ahora en adelante, debemos hablar de esto cada año, cada mes y cada día, de modo que tengamos una comprensión relativamente clara de este problema y sigamos una línea marxista-leninista."(X Sesión Plenaria del VIII Comite Central del PCCH; 1962). E invocando "no olvidar jamas las clases y la lucha de clase en mayo del 63: "La lucha de clases, la lucha por la producción, y la experimentación científica son los tres grandes movimientos revolucionarios para construir un poderoso país socialista. Estos movimientos constituyen una solida garantía de que los comunistas se verán libres del burocratismo e inmunes contra el revisionismo y el dogmatismo y permanecerán siempre invencibles. Son una garantía segura de que el proletariado será capaz de unirse con las amplias masas trabajadoras y practicar una dictadura democrática. Si, en ausencia de estos movimientos, se dejase surgir a los terratenientes, campesinos ricos, contrarrevolucionarios, elementos nocivos y otros monstruos, y frente a esto nuestros cuadros cerrasen los ojos e incluso, en muchos casos, no distinguieran entre los enemigos y nosotros, sino que colaboraran con ellos y quedaran corrompidos y desmoralizados; si con ello nuestros cuadros fueran arrastrados al campo enemigo o el enemigo lograra colarse en nuestras filas, y si muchos de nuestros obreros, campesinos e intelectuales fueran dejados indefensos ante las tácticas blandas y las duras del enemigo, entonces no haría falta mucho tiempo, tal vez solo algunos años o una década, o varias décadas a lo sumo, para que se produjera inevitablemente una restauración contrarrevolucionaria en escala nacional, el partido marxista-leninista se transformara en partido revisionista o partido fascista y toda China cambiará de color." Así como el punto 17 de la "Proposición acerca de la línea general del Movimiento Comunista Internacional", de junio 63, documento redactado bajo dirección personal del Presidente Mao: "La continuación de la lucha de clases durante un largo período histórico después de la toma del Poder por el proletariado, constituye una ley objetiva, independiente de la voluntad del hombre, sólo que la forma de la lucha de clases difiere de lo que era antes de la toma del Poder. Después de la Revolución de Octubre, Lenin señaló en repetidas ocasiones: a) Los explotadores derrocados tratan siempre, y en mil formas, de recobrar el `paraíso' que les ha sido arrebatado. b) En la atmósfera pequeñoburguesa, se engendran constantemente, por un proceso espontáneo, nuevos elementos capitalistas. c) Debido a la influencia burguesa, así como al cerco y la actividad corruptora del ambiente pequeñoburgues, también pueden surgir elementos degenerados, o nuevos burgueses, en las filas de la clase obrera y entre los funcionarios de las instituciones del Estado. d) El cerco capitalista internacional, la amenaza de intervención armada y las intrigas de descomposición pacífica por parte del imperialismo, constituyen las condiciones exteriores de la continuación de la lucha de clases en los países socialistas. La vida ha confirmado estas conclusiones de Lenin. En ningún país socialista, aunque hayan pasado decenios e incluso más tiempo después de la industrialización socialista y la colectivización de la agricultura, puede decirse que ya no existen lacayos burgueses, parásitos, especuladores, pillos, tunantes, maleantes, desfalcadores de fondos públicos y otros elementos por el estilo, gentes que Lenin denunció con energía y en repetidas ocasiones; ni tampoco se puede decir que a los países socialistas ya no les hace falta cumplir o que ya les es posible abandonar la tarea, planteada por Lenin, de `vencer ese contagio, esa peste, esa llaga que el socialismo hereda del capitalismo.' En los países socialistas, se requiere un largo período histórico para resolver gradualmente la cuestión de `quién vencerá a quien' -el socialismo o el capitalismo. La lucha entre el camino del socialismo y el del capitalismo abarca todo este período histórico. Esta lucha a veces se intensifica y a veces se calma, transcurre a modo de ondas, y en ocasiones incluso se vuelve muy violenta. Sus formas son variadas. La Declaración de 1957 dice muy bien: `para la clase obrera, la toma del Poder no es más que el comienzo de la revolución, y no su coronamiento.' Es erróneo y contrario a la realidad objetiva y al marxismo-leninismo negar la existencia de la lucha de clases en el período de la dictadura del proletariado y negar la necesidad de llevar hasta el fin la revolución socialista en los frentes económico, político e ideológico." En tanto que el 64 reiteraba: "Se requiere un período muy dilatado para resolver la lucha de quién vencerá a quién: el socialismo o el capitalismo, en los frentes político e ideológico. Para conseguir el éxito no bastan unos decenios, se necesitarán de cien a centenas de años. En cuanto al tiempo, más vale prepararse para un período largo' y no para uno corto; en cuanto al trabajo, más vale considerar la tarea como difícil que como fácil. Pensar y actuar de esta manera resulta más provechoso y menos perjudicial" Y el año 65: "El blanco principal del actual movimiento son los elementos con poder seguidores del camino capitalista dentro del Partido". "Entre los elementos con poder seguidores del camino capitalista, algunos actúan sobre el escenario mientras otros operan entre bastidores". Apoyándolos "hay algunas gentes a nivel superior--en las comunas, territorios, distritos, prefecturas, e incluso a nivel provincial y en departamentos centrales--que se oponen a la construcción del socialismo." El poderoso desarrollo de la Gran Revolución Cultural Proletaria comenzó en 1966; en el hito inicial de la misma, la "Circular del Comité Central del Partido Comunista de China", mayo 66, el Presidente Mao escribió párrafos sustantivos. Refiriéndose a los representantes de la burguesía: "Existe un número de tales representantes en el Comité Central del Partido y en los organismos partidarios, gubernamentales y otros a los niveles central, provincial, municipal y de región autónoma". Y: "Acaso se puede permitir igualdad alguna en los problemas fundamentales como la lucha del proletariado contra la burguesía, la dictadura del proletariado sobre la burguesía, la dictadura del proletariado en la superestructura -incluidos los diversos terrenos de la cultura-y los incesantes esfuerzos del proletariado por depurar al Partido Comunista de los representantes de la burguesía infiltrados en sus filas, los cuales agitando `banderas rojas', combaten la bandera roja?. Los viejos socialdemócratas durante las últimas décadas, y los revisionistas contemporáneos desde hace mas de diez años, jamás han permitido que exista igualdad alguna entre el proletariado y la burguesía. Niegan por completo que la historia de la humanidad de los varios milenios es la historia de la lucha de clases, niegan por completo la lucha de clases del proletariado contra la burguesía, y niegan por completo la revolución del proletariado contra la burguesía y su dictadura sobre ella. Por el contrario, ellos son lacayos fieles de la burguesía y el imperialismo y, asociados con éstos, insisten en la ideología burguesa de la opresión y explotación al proletariado y en el sistema social capitalista, y combaten la ideología marxista-leninista y el sistema social socialista. Forman una gavilla de contrarrevolucionarios anticomunistas y antipopulares. La lucha que libran contra nosotros es una lucha a muerte, y en ella no cabe ninguna igualdad. Por lo tanto, nuestra lucha contra ellos tiene que ser también una lucha a muerte. Entre nosotros y ellos no existen en absoluto relaciones de igualdad, sino relaciones de opresión de una clase por otra, es decir, de la dictadura del proletariado sobre la burguesía; no pueden existir relaciones de ninguna otra índole, como las de una supuesta igualdad, de coexistencia pacifica entre las clases explotadas y las explotadoras, de humanidad, justicia y virtud, etc." "No hay construcción sin destrucción. La destrucción significa critica y repudio, significa revolución. La destrucción quiere decir razonamiento, y razonamiento es construcción. La destrucción va primero, y en su curso ya implica la construcción." "De hecho, aquellos elementos con poder seguidores del camino capitalista dentro del Partido que apoyan a los tiranuelos de academia burgueses, y aquellos representantes de la burguesía infiltrados en el Partido que protegen a esos tiranuelos, son en verdad grandes tiranuelos del Partido que no leen libros ni periódicos, que no mantienen contacto con las masas, ni poseen ningún conocimiento, que se apoyan únicamente en `actuar en forma arbitraria y reprimir a la gente con su autoridad' y usurpan el nombre del Partido." "Han dejado salir de sus guaridas a todos los monstruos y demonios, que han saturado, durante muchos años, nuestros periódicos, la radiofusión, revistas y libros, manuales, discursos, obras literarias y artísticas, películas, la ópera y el drama, los quyi (narraciones artísticas), artes plásticas, música, danzas, etc. Al hacer todo esto, no han abogado nunca por la necesidad de aceptar la dirección del proletariado ni de solicitar la ratificación de nadie." "Mantener en alto la gran bandera de la revolución cultural proletaria, denunciar por completo la posición reaccionaria burguesa de las llamadas `autoridades académicas' anti-Partido y antisocialistas, criticar y repudiar a fondo las ideas reaccionarias burguesas en los círculos académicos, educacionales, periodísticos, literarios y artísticos y editoriales, y apoderarse de la dirección en estos dominios de la cultura. Para realizarlo, hay que, al mismo tiempo, criticar y repudiar a los representantes burgueses que se han infiltrado en el Partido, el Gobierno, el ejército y los diversos sectores culturales, y depurar a todos estos de dichos representantes burgueses o remover algunos de ellos de sus cargos. Sobre todo, no debemos confiar a esos elementos la dirección del trabajo de la revolución cultural. Pero, en realidad, muchos de ellos han estado o están asumiendo este trabajo, lo cual resulta extremadamente peligroso." "Los representantes burgueses que se han infiltrado en el Partido, el Gobierno, el ejército y los diversos sectores culturales, son un grupo de revisionistas contrarrevolucionarios que se apoderarán del Poder y convertirán la dictadura del proletariado en dictadura de la burguesía si se les presenta la oportunidad. A algunas de estas personas, ya las hemos calado; a otras todavía no. Y en algunas todavía confiamos y las preparamos para ser nuestros continuadores. Por ejemplo, gente tipo Jruschov todavía anida a nuestro lado; los comités del Partido a todo nivel deben prestar plena atención a esto." Aparte, el Presidente Mao además estableció: "La presente gran revolución cultural es sólo la primera, y en el futuro habrá sin duda muchas otras. En la revolución, el problema de quién vencerá a quién sólo será resuelto en un largo período histórico. Si no se resuelven adecuadamente las cosas, en cualquier momento habrá posibilidad para una restauración capitalista. Todos los miembros del Partido Comunista y el pueblo de todo el país no deben pensar que todo será resuelto después de una o dos grandes revoluciones culturales, o inclusive tres o cuatro. Debemos estar siempre muy alertas y jamás bajar la vigilancia." Y definiendo los objetivos y esencia políticos de esa grandiosa revolución, hito trascendental de la revolución proletaria mundial: "La presente Gran Revolución Cultural Proletaria es completamente necesaria y muy oportuna para consolidar la dictadura del proletariado, prevenir la restauración del capitalismo y construir el socialismo." "La Gran Revolución Cultural Proletaria es, en esencia, una gran revolución política emprendida, en las condiciones del socialismo, por el proletariado contra la burguesía y todos las demás clases explotadoras; es la continuación de la prolongada lucha entre el Partido Comunista de China y las amplias masas populares revolucionarias bajo su dirección, por una parte, y los reaccionarios del Kuomintang, por la otra; es la continuación de la lucha de clases entre el proletariado y la burguesía." Y destacando su función en lo económico: "La Gran Revolución Cultural Proletaria es una poderosa fuerza motriz para el desarrollo de las fuerzas productivas sociales de nuestro país". Y en lo ideológico su problema básico guiado por el principio de "combatir el concepto de lo privado, y criticar y repudiar el revisionismo"; pues, "la gran revolución cultural proletaria es una gran revolución que llega al alma misma de la gente y esta destinada a resolver el problema de su concepción del mundo". Insistiendo sobre este punto, el Presidente, el año 67, ante la delegación militar de Albania dijo: "Ahora me gustaría hacerles una pregunta: Cuál creen Uds. que es la meta de la gran revolución cultural? (Algunos asistentes responden: `luchar contra los dirigentes seguidores del camino capitalista dentro del partido). luchar contra los dirigentes seguidores del camino capitalista es la tarea principal, pero de ninguna manera la meta. La meta es resolver el problema de la concepción del mundo; es la cuestión de extirpar las raíces del revisionismo. El Comite Central ha puesto énfasis una y otra vez en que las masas se deben educar y liberar a si mismas, porque la concepción del mundo no se les puede imponer. Para transformar la ideología es necesario que las causas externas actúen a través de las causas internas, aunque éstas últimas son lo principal. Cómo podría llamarse una victoria la gran revolución cultural si no se transforma la concepción del mundo? Si no se transforma la concepción del mundo, aunque haya ahora 2,000 dirigentes seguidores del camino capitalista en esta gran revolución cultural, habrá 4,000 la próxima vez." Gran Revolución Cultural Proletaria en la cual: "Se justifica la rebelión contra los reaccionarios"; "la clase obrera debe dirigirlo todo" y "El proletariado debe ejercer una dictadura omnímoda sobre la burguesía en la superestructura, incluidos todos los dominios culturales". Revolución cuya complejidad y difícil condición se expresan magistralmente así: "En el pasado, combatimos por el Sur y el Norte; era relativamente fácil hacer tales guerras, pues el enemigo era evidente. Esta Gran Revolución Cultural Proletaria es mucho más difícil que ese tipo de guerra." "El problema está en que se confunden los que han cometido errores ideológicos con aquellos cuyas contradicciones con nosotros son las que existen entre nosotros y el enemigo, y es difícil por un tiempo diferenciarlos." Gran Revolución que en la tempestad revolucionaria de Shanghai, enero del 67, enarboló el llamamiento del Presidente Mao de: "Revolucionarios proletarios, unios para arrebatar el Poder al puñado de dirigentes seguidores del camino capitalista dentro del Partido"; y su importante instrucción: "El ejército Popular de liberación debe apoyar a las amplias masas de la izquierda". Conformándose los comités revolucionarios para ejercer la dirección unificada de la revolución, forma de Poder concretada en: "La experiencia fundamental del comité revolucionario reside en tres puntos: primero, tiene representantes de los cuadros revolucionarios; segundo, tiene representantes de las fuerzas armadas; tercero, tiene representantes de las masas revolucionarias. Se forma así una integración triple revolucionaria. El comité revolucionario debe ejercer una dirección unificada, acabar con la superposición excesiva en la estructura administrativa, tener `menos pero mejores tropas y una administración más simple' y organizar un grupo dirigente revolucionarizado que se mantenga en contacto con las masas." Gran Revolución que asimismo se desarrolló siguiendo el principio de "empeñarse en la revolución y promover la producción, el trabajo y los preparativos para enfrentar la guerra", dentro del concepto estratégico de "hacer preparativos para enfrentar la guerra, hacer preparativos contra las calamidades naturales y hacerlo todo en bien del pueblo". La Gran Revolución Cultural Proletaria, como continuación de la revolución bajo la dictadura del proletariado, marca así el rumbo de la revolución proletaria mundial en su heroica e irrefrenable marcha al comunismo; y en la más gigantesca epopeya revolucionaria de la humanidad conquistó victorias imperecederas para el proletariado internacional. Sin embargo, en 1968, con profunda comprensión de la historia y del internacionalismo proletario, el Presidente Mao nos enseñó: "Hemos conquistado grandes victorias. Pero, la clase derrotada seguirá haciendo forcejeos. Esa gente existe todavía, y también esa clase. Por eso, no podemos hablar de victoria final. No podemos hacerlo incluso en los próximos decenios. No debemos perder la vigilancia. Según el punto de vista leninista, la victoria final de un país socialista no sólo requiere los esfuerzos de su propio proletariado y de sus amplias masas populares, sino que depende, además, del triunfo de la revolución mundial y de la abolición del sistema de explotación del hombre por el hombre en todo el globo terrestre, o sea, la emancipación de toda la humanidad. Por lo tanto, es erróneo, contrario al leninismo, y no corresponde a la realidad hablar a la ligera de la victoria final de la revolución en nuestro país." En abril de 1969, el Presidente Mao dijo: "Parece imprescindible realizar la Gran Revolución Cultural Proletaria, pues nuestra base no es solida. A juzgar por mi observación, temo que en una mayoría bastante grande de fábricas -no digo todas ni la abrumadora mayoría de ellas-la dirección no estaba en manos de los genuinos marxistas y las masas obreras. No es que no hubiera buenas gentes entre aquellos encargados y la dirección de las fábricas. Las había. Había buenas gentes entre los secretarios, subsecretarios y miembros de los comités del Partido y entre los secretarios de las células del Partido pero seguían la línea de Liu Shao-chi, simplemente recurrían al incentivo material, ponían las ganancias al mando y, en vez de promover la política proletaria, daban premios, y cosas por el estilo". "Pero había de hecho gentes malas en las fábricas" "Esto de muestra que no se ha finalizado la revolución." Y apuntando contra el derecho burgués: "Lenin habló de un Estado burgués sin capitalistas construido para proteger el derecho burgués. Nosotros mismos hemos construido un Estado como ese, en que las cosas no difieren mucho de las de la vieja sociedad, pues hay jerarquización y rigen un sistema salarial de ocho categorías, la distribución según el trabajo y el intercambio de valores iguales". Combatiendo el revisionismo del viento revocatorio anti-revolución cultural de Teng y sus secuaces, el Presidente Mao planteo: "Luego de la revolución democrática, los obreros, los campesinos pobres y campesinos medios inferiores no se han detenido y quieren hacer la revolución. En cambio, una parte de los militantes del Partido se muestran renuentes a seguir adelante, y algunos han retrocedido y se han puesto contra la revolución. Por qué? Porque éstos, como altos funcionarios que han llegado a ser, buscan proteger los intereses de los altos funcionarios". "Sucede que la revolución socialista les cae sobre su propia cabeza, y así durante la cooperativización agrícola ya hubo en el Partido quienes se opusieron, y cuando se critica el derecho burgués, su sentimiento es de rechazo. Se está haciendo la revolución socialista, sin embargo no se comprende dónde está la burguesía. Está justamente dentro del Partido Comunista, y son los dirigentes seguidores del camino capitalista en el Partido. Los seguidores del camino capitalista siguen todavía su camino". "Revocar veredictos justos va en contra de la voluntad del pueblo". "Sin lucha es imposible avanzar". "Siendo los millones, podemos prescindir de la lucha?!". "Qué es eso de tomar las tres instrucciones como clave! La estabilidad y su unidad no significan renunciar a la lucha de clases. La lucha de clases es como la cuerda clave de una red y todo lo demás son mallas". "Esta persona no se empeña en la lucha de clases; nunca ha mencionado esta clave. Sigue todavía con su `gato blanco o gato negro', sin hacer distinción entre el imperialismo y el marxismo". Y sintetizando la lucha de clases en China y el PCCH: "Llevamos 50 años cantando La Internacional; sin embargo, en 10 ocasiones aparecieron en nuestro Partido quienes intentaron crear la división. A mi modo de ver, eso va a ocurrir aún 10, 20, 30 veces más. No lo creen ustedes? Aunque no lo crean, yo lo creo de todas maneras. Dejarán de existir las luchas cuando hayamos llegado al comunismo? No lo creo. Aun en el comunismo, habrá igualmente luchas, sólo que serán luchas entre lo nuevo y lo caduco, entre lo correcto y lo erróneo. Incluso de aquí a decenas de miles de años, lo erróneo tampoco valdrá ni podrá sostenerse." "En China, desde que el emperador fue derribado en 1911, ningún reaccionario ha sido capaz de mantenerse por mucho tiempo en el Poder. La dominación más larga de la reacción (Chiang Kai-shek) sólo duró 20 años, pero él también se vino abajo cuando el pueblo se Levantó en rebelión. Chiang Kai shek subió al Poder valiéndose de la confianza depositada en él por Sun Yat-sen y de la Academia de Juangpu que tenía a su cargo y reuniendo en torno suyo a una gran pandilla de reaccionarios. Una vez que él se volvió contra el Partido Comunista, prácticamente toda la clase terrateniente y toda la burguesía lo apoyaron. Además, el Partido Comunista carecía de experiencias en aquél entonces. De este modo, Chiang Kni-shek logró imponerse temporalmente, con gran regocijo. Durante estos 20 años, no obstante, nunca logró unificar el país. Tuvo lugar en ese tiempo la guerra entre el Kuomintang y el Partido Comunista, las guerras entre el Kuomintang y los diferentes caudillos militares, la guerra entre China y el Japón y, finalmente, la guerra civil gran escala, de 4 años, que arrojó a Ching Kni-shek hacia un grupo de islas. Si la derecha lleva a cabo un golpe de Estado anticomunista en China, estoy seguro de que no conocerá tampoco la paz, y muy probablemente su dominación será de corta vida, ya que esto no podrá ser tolerado por ninguno de los revolucionarios, que representan los intereses del pueblo, constituido por más del 90 por ciento de la población." "Conclusión: las perspectivas son brillantes, pero el camino tiene vueltas y revueltas, frases estás ya consabidas." En 1975, "Renmín Ribao" y "Hongqi" publicaron la siguiente Nota a la publicación "Marx, Engels y Lenin, Sobre la dictadura del proletariado": "Nuestro gran líder el Presidente Mao impartió hace poco una importante instrucción acerca de la cuestión de la teoría. El Presidente Mao dijo: POR QUE LENIN HABLABA DE LA NECESIDAD DE EJERCER LA DICTADURA SOBRE LA BURGUESÍA? ES PRECISO TENER UNA CLARA COMPRENSIÓN DE ESTA CUESTIÓN. LA FALTA DE CLARIDAD AL RESPECTO CONDUCIRÁ AL REVISIONISMO. HAY QUE HACERLO SABER A TODA LA NACIÓN. Refiriéndose al sistema socialista, el Presidente Mao indicó: EN UNA PALABRA, CHINA ES UN PAÍS SOCIALISTA. QUE DE LA LIBERACIÓN NO DIFERÍA MUCHO DEL CAPITALISMO. AHORA TODAVÍA PRACTICA UN SISTEMA SALARIAL DE OCHO GRADOS, LA DISTRIBUCIÓN A CADA UNO SEGÚN SU TRABAJO Y EL INTERCAMBIO POR MEDIO DEL DINERO, LOS CUALES APENAS SON DISTINTOS DE AQUELLOS EXISTENTES EN LA VIEJA SOCIEDAD. LO DIFERENTE ES QUE EL SISTEMA DE PROPIEDAD HA CAMBIADO. Señaló: NUESTRO PAÍS PRACTICA AHORA UN SISTEMA DE MERCANCÍAS, Y EL SISTEMA SALARIAL ES DESIGUAL, CUYO EL DE OCHO GRADOS, ETC. ESTO SOLO PUEDE SER RESTRINGIDO BAJO LA DICTADURA DEL PROLETARIADO. COMO CONSECUENCIA, SERIA MUY FÁCIL PARA TIPOS COMO LIN PIAO IMPULSAR EL SISTEMA CAPITALISTA SI SUBIERAN AL PODER. POR ESO, DEBEMOS ESTUDIAR MAS OBRAS MARXISTA-LENINISTAS. El Presidente Mao puntualizó además: LENIN DIJO: "LA PEQUEÑA PRODUCCIÓN ENGENDRA CAPITALISMO Y BURGUESÍA CONSTANTEMENTE, CADA DÍA, CADA HORA, DE MODO ESPONTANEO Y EN MASA". ESTO TAMBIÉN OCURRE EN UNA PARTE DE LOS OBREROS Y UNA PARTE DE LOS MIEMBROS DEL PARTIDO. TANTO EN LAS FILAS DEL PROLETARIADO COMO ENTRE LOS TRABAJADORES DE LOS ORGANISMOS OFICIALES HAY PERSONAS QUE INCURREN EN EL ESTILO DE VIDA BURGUÉS. La instrucción del Presidente Mao dilucida profundamente la teoría marxista sobre la dictadura del proletariado y destaca la suma importancia que tiene el estudio de la teoría de la dictadura del proletariado en la actualidad. Esto debe merecer gran atención de todos los camaradas del Partido y del pueblo entero." SOBRE LA LUCHA CONTRA EL REVISIONISMO. Finalmente, otra cuestión fundamental del marxismo-leninismo-maoísmo es la lucha contra el revisionismo; lucha necesaria, constante e implacable en defensa de la ideología del proletariado, e indispensable para desarrollar la revolución, conquistar el poder y persistir en la emancipación de la humanidad a través de la dictadura del proletariado y la dirección de partidos comunistas. En su época Marx y Engels, en setiembre de 1879, desenmascararon la esencia reformista y burguesa del programa sustentado en el llamado "Examen retrospectivo del movimiento socialista", articulo escrito entre otros por E. Bernstein, el mas tarde pontífice del viejo revisionismo: "El reproche especial que aquí se le hace a Schweitzer es el de haber achatado el lassalleanismo, considerado aquí como un movimiento burgués democrático-filantrópico, reduciéndolo al nivel de una lucha unilateral de los obreros industriales por sus intereses. Pero, en realidad, resulta que Schweitzer acható el movimiento, haciéndolo más profundo, al darle el carácter de lucha de clases de los obreros industriales contra la burguesía. Mas adelante se le reprocha el `haber ahuyentado a la democracia burguesa'. Pero, qué tiene que hacer la democracia burguesa en las filas del Partido Socialdemócrata? (léase Partido Comunista) Si la democracia burguesa está integrada por `personas honradas', no puede desear el ingreso en el Partido; y si a pesar de ello desea ingresar en él, sólo puede ser para hacer daño. ... ... ... Así, pues, según estos señores, el Partido Social demócrata no debe ser un partido unilateralmente obrero, sino el partido universal `de todas las personas de verdaderos sentimientos humanitarios'. Y para demostrarlo, debe renunciar ante todo a las groseras pasiones proletarias y, dirigido por burgueses cultos y de sentimientos filantrópicos, `adquirir gustos finos' y `aprender buenos modales'(pág.85). Entonces, los `toscos modales' de ciertos lideres serán sustituidos por distinguidos `modales burgueses' (como si la indecorosidad externa de aquellos a quienes se alude no fuese el menor de los defectos que se les puede imputar!).Entonces, tampoco tardarán en aparecer `numerosos partidarios procedentes de las clases cultivadas y ricas. Son estos elementos los que deben ser atraídos ante todo...si se quiere que la propaganda alcance éxitos tangibles'. El socialismo alemán `ha atribuido demasiada importancia a la conquista de las masas, a la vez que ha descuidado la propaganda enérgica (1) entre las llamadas capas altas de la sociedad'. Pero `al partido aún le faltan personas que pueden representarlo en el Reichstag', y `es deseable, e incluso necesario, que las credenciales sean entregadas a personas que tengan tiempo y posibilidades de estudiar a fondo los problemas. Los simples obreros y los pequeños artesanos..... sólo muy excepcionalmente pueden disponer del ocio necesario'. Así que, elegid a los burgueses! En una palabra, la clase obrera no es capaz de lograr por si misma su emancipación. Para ello necesita someterse a la dirección de burgueses `cultivados y ricos', pues sólo ellos `tienen tiempo y posibilidades' de llegar a conocer lo que puede ser útil para los obreros. En segundo lugar, la burguesía no debe ser atacada en ningún caso, sino conquistada mediante una propaganda enérgica. Pero si nos proponemos conquistar a las capas altas de la sociedad, o por lo menos a sus elementos bien intencionados en modo alguno debemos asustarlos. Y aquí es donde los tres de Zurich creen haber hecho un descubrimiento tranquilizador: `Precisamente ahora, bajo la presión de la ley contra los socialistas, el partido demuestra que no tiene la intención de recurrir a la violencia e ir a una revolución sangrienta, sino que por el contrario, está dispuesto ...a seguir el camino de la legalidad, es decir, el camino de las reformas'. De este modo, si 500 o 600,000 electores socialdemócratas (la décima o la octava parte del censo electoral), dispersos, además, por todo el país, son lo bastante sensatos para no romperse la cabeza contra un muro y para no lanzarse, en la proporción de uno contra diez, a una `revolución sangrienta', eso demuestra que han renunciado para siempre a utilizar cualquier gran acontecimiento de la política exterior y el ascenso revolucionario por él provocado, e incluso la victoria lograda por el pueblo en el conflicto que pueda producirse sobre esta base. Si alguna vez Berlín vuelve a dar pruebas de su incultura con otro 18 de marzo *, la socialdemocracia no participará en la lucha, como `cualquier chusma ansiosa de lanzarse a las barricadas' (pág.88), sino que `seguirá el camino de la legalidad', apaciguará la insurrección, retirará las barricadas y, en caso necesario, marchará con el glorioso ejército contra la masa unilateral, grosera e inculta. Y si esos caballeros afirman que no era tal la intención de sus palabras, qué era, pues, lo que querían decir? Pero aún falta lo mejor. 'Cuanto más sereno, objetivo y circunspecto sea el partido en su critica al orden actual y en sus propuesta de reforma, menos posibilidades habrá de que se repita la jugada, que ahora ha tenido éxito (al dictarse la ley contra los socialistas), y gracias a la cual la reacción consciente ha logrado meter en un puño a la burguesía, intimidada por el fantasma rojo' (pág. 88). Para liberar a la burguesía de toda sombra de temor, hay que demostrarle clara y palpablemente que el fantasma rojo no es más que eso, un fantasma que no existe en la realidad. Pero el secreto del fantasma rojo está precisamente en el miedo de la burguesía a la inevitable lucha a vida o muerte que tiene que librarse entre ella y el proletariado, está en el temor al inevitable desenlace de la actual lucha de clases. Acabemos con la lucha de clases y la burguesía, lo mismo que `todas las personas independientes', `no temerá marchar del brazo con el proletariado'. Pero éste será precisamente quien se quede con un palmo de narices. Por lo tanto, el partido debe demostrar con su acatamiento y humildad que ha renunciado para siempre a `los despropósitos y a los excesos' que dieron pie a la promulgación de la ley contra los socialistas. Si promete voluntariamente no salirse del marco de esa ley, Bismarck y la burguesía serán naturalmente tan amables que la abolirán, pues ya no será necesaria. `Entiéndasenos bien'; nosotros no queremos `renunciar a nuestro partido ni a nuestro programa, pero consideramos que tenemos trabajo para muchos años si aplicamos todas nuestras fuerzas y todas nuestras energías a lograr ciertos objetivos inmediatos, que deben ser conseguidos por encima de todo antes de ponernos a pensar en tareas de mayor alcance'. Y entonces, los burgueses, los pequeño burgueses y los obreros, que `ahora se asustan...de nuestras reivindicaciones de largo alcance', vendrán a nosotros en masa. No se renuncia al programa; lo único que se hace es aplazar su realización...por tiempo indefinido. Se acepta el programa, pero esta aceptación no es en realidad para sí mismo, para seguirlo durante la vida de uno, si no únicamente para dejarlo en herencia a los hijos y a los nietos. Y mientras tanto, `todas las fuerzas y todas las energías' se dedican a futilidades sin cuento y a un remiendo miserable del régimen capitalista, para dar la impresión de que se hace algo, sin asustar al mismo tiempo a la burguesía. ... ... ... Tal es el programa de los tres censores de Zurich. Es de una claridad meridiana, sobre todo para nosotros, que desde 1848 conocemos al dedillo todos esos tópicos. Aquí tenemos a unos representantes de la pequeña burguesía llenos de miedo ante la idea de que los proletarios, impulsados por su posición revolucionaria, puedan `llegar demasiado lejos'. En lugar de una oposición política resuelta, mediación general; en lugar de la lucha contra el gobierno y la burguesía, intentos de convencerlos y de atraerlos; en lugar de una resistencia encarnizada a las persecuciones de arriba, humilde sumisión y reconocimiento de que el castigo ha sido merecido. Todos los conflictos impuestos por la necesidad histórica se interpretan como malentendidos y se da carpetazo a todas las discusiones con la declaración de que en lo fundamental todos estamos de acuerdo. Los que en 1848 actuaban como demócratas burgueses pueden llamarse hoy socialdemócratas sin ningún reparo. Lo que para los primeros era la república democrática es para los segundos la caída del régimen capitalista: algo perteneciente a un futuro muy remoto, algo que no tiene absolutamente ninguna importancia para la política del momento presente, por lo que puede uno entregarse hasta la saciedad a la mediación, a las componendas y a la filantropía. Exactamente lo mismo en cuanto a la lucha de clases entre el proletariado y la burguesía. Se la reconoce en el papel, porque ya es imposible negarla, pero en la práctica se la difumina, se la diluye, se la debilita. El Partido Socialdemócrata no debe ser un Partido de la clase obrera, no debe despertar el odio de la burguesía ni de nadie. Lo primero que debe hacer es realizar una propaganda enérgica entre la burguesía; en vez de hacer hinca pie en objetivos de largo alcance, que asustan a la burguesía y que de todos modos no han de ser conseguidos por nuestra generación, mejor será que concentre todas sus fuerzas y todas sus energías en la aplicación de reformas remendonas pequeñoburguesas, que habrán de convertirse en nuevos refuerzos del viejo régimen social, con lo que, tal vez, la catástrofe final se transformara en un proceso de descomposición que se lleve a cabo lentamente, a pedazos y, en la medida de lo posible, pacíficamente. Esa gente es la misma que, son capa de una febril actividad, no sólo no hace nada ella misma, sino que trata de impedir que, en general, se haga algo más que charlar; son los mismos que en 1848 y 1849, con su miedo a cualquier acción, frenaban el movimiento a cada paso y terminaron por conducirlo a la derrota; los mismos que nunca advierten la reacción y se asombran extraordinariamente al hallarse en un callejón sin salida, donde la resistencia y la huida son igualmente imposibles; los mismos que se empeñan en aprisionar la historia en su estrecho horizonte de filisteos, y de los cuales la historia jamás hace el menor caso, pasando invariablemente al orden del día. Por lo que respecta a sus convicciones socialistas, ya han sido bastante criticadas en el manifiesto del Partido Comunista, en el capitulo donde se trata del socialismo alemán o socialismo `verdadero'**. Cuando la lucha de clases se deja a un lado como algo fastidioso y `grosero', la única base que le queda al socialismo es el `verdadero amor a la humanidad' y unas cuantas frases hueras sobre la `justicia'. ... ... ... En cuanto a nosotros, y teniendo en cuenta todo nuestro pasado, no nos queda más que un camino. Durante cerca de cuarenta años hemos venido destacando la lucha de clases como fuerza directamente propulsora de la historia, y particularmente la lucha de clases entre la burguesía y el proletariado como la gran palanca de la revolución social moderna. Esta es la razón de que no podamos marchar con unos hombres que pretenden extirpar del movimiento esta lucha de clases. Al ser fundada la Internacional, formulamos con toda claridad su grito de guerra: la emancipación de la clase obrera debe ser obra de los obreros mismos. No podemos, por consiguiente, marchar con unos hombres que declaran abiertamente que los obreros son demasiado incultos para emanciparse ellos mismos, por lo que tienen que ser liberados desde arriba, por los filántropos de la gran burguesía y de la pequeña burguesía." Lenin desarrollo una extraordinaria lucha contra el viejo revisionismo cuya bancarrota se produjo en la I Guerra Mundial; de él dijo: "El revisionismo o `revisión' del marxismo es hoy una de las principales manifestaciones, si no la principal, de la influencia burguesa sobre el proletariado y de la corrupción burguesa de los proletarios". Señalando en 1899 y 1902, respectivamente: "La socialdemocracia internacional atraviesa en la actualidad por un período de vacilación ideólogica. Hasta ahora la doctrina de Marx y Engels era considerada como la base firme de la teoría revolucionaria; pero en nuestros días se dejan oír, por todas partes, voces sobre la insuficiencia y caducidad de esta doctrina. El que se declara socialdemócrata y tiene la intención de publicar un periódico socialdemócrata debe de terminar con exactitud su posición frente a la cuestión que no apasiona solo, ni mucho menos, a los socialdemócratas alemanes. Nosotros nos basamos íntegramente en la doctrina de Marx: ella transformo por primera vez el socialismo, de utopía, en una ciencia, echo las sólidas bases de esta ciencia y trazo el camino que había de tomar, desarrollándola y elaborándola en todos sus detalles. La doctrina de Marx descubrió la esencia de la economía capitalista contemporánea, explicando cómo el empleo del obrero, la compra de la fuerza de trabajo, encubre la esclavización de millones de desposeídos por un puñado de capitalistas, dueños de la tierra, de las fábricas, de las minas, etc. Esta doctrina demostró como todo el desarrollo del capitalismo contemporáneo se orienta hacia la substitución de la pequeña producción por la grande, creando las condiciones que hacen posible e indispensable la estructuración socialista de la sociedad. Ella nos enseñó a ver, bajo el manto de las costumbres arraigadas, de las intrigas políticas, de las leyes sabihondas y teorías hábilmente fraguadas, la lucha de clases, la lucha que se desarrolla entre las clases poseedoras de todo género y las masas desposeídas, el proletariado, quien está a la cabeza de todos los indigentes. La doctrina de Marx estableció las verdaderas tareas de un partido socialista revolucionario: no componer planes de reorganización de la sociedad ni ocuparse de la prédica a los capitalistas y sus acólitos de la necesidad de mejorar la situación de los obreros, ni tampoco urdir conjuraciones, sino organizar la lucha de clases del proletariado y dirigir esta lucha, que tiene por objetivo final la conquista del poder político por el proletariado y la organización de la sociedad socialista." ("Nuestro Programa"). "La socialdemocracia debe transformarse, de partido de la revolución social, en un partido democrático de reformas sociales. Bernstein ha apoyado esta reivindicación política con toda una batería de `nuevos' argumentos y consideraciones bastante armoniosamente concordados. Ha sido negada la posibilidad de fundamentar científicamente el socialismo y de demostrar, desde el punto de vista de la concepción materialista de la historia, su necesidad e inevitabilidad; ha sido negado el hecho de la miseria creciente, de la proletarización y de la exacerbación de las contradicciones capitalistas; ha sido declarado inconsistente el concepto mismo del `objetivo final' y rechazada en absoluto la idea de la dictadura del proletariado; ha sido negada la oposición de principios entre el liberalismo y el socialismo; ha sido negada la teoría de la lucha de clases, pretendiendo que no es aplicable a una sociedad estrictamente democrática, gobernada conforme a la voluntad de la mayoría, etc." ("Qué hacer?"). Y resaltando su característica reptante: "Cuando se habla de lucha contra el oportunismo, no hay que olvidar nunca un rasgo característico de todo el oportunismo contemporáneo en todos los terrenos: su carácter indefinido, difuso, inaprehensible. El oportunista, por su misma naturaleza, esquiva siempre plantear los problemas de un modo preciso y definido, busca la resultante, se arrastra como una culebra entre puntos de vista que se excluyen mutuamente, esforzándose por `estar de acuerdo' con uno y otro, reduciendo sus discrepancias a pequeñas enmiendas, a dudas, a buenos deseos inocentes, etc., etc." ("Un paso adelante, dos pasos atrás"). Asimismo combatiendo la negación de la lucha de clases y desenmascarando la colaboración de clases del revisionismo: "En el campo de la política, el revisionismo intentó revisar realmente la base del marxismo, o sea, la teoría de la lucha de clases. La libertad política, la democracia, el sufragio universal destruyen la base para la lucha de clases -nos decían los revisionistas-y dan un mentira la vieja tesis del Manifiesto Comunista de que los obreros no tienen patria. Puesto que en la democracia impera la `voluntad de la mayoría', no debemos ver en el Estado, según ellos, el órgano de la dominación de clases, ni negarnos a hacer alianzas con la burguesía progresiva, socialreformista contra los reaccionarios. Es indiscutible que estas objeciones de los revisionistas se reducían a un sistema bastante armónico de concepciones, a saber: a las harto conocidas concepciones liberal-burguesas. Los liberales han dicho siempre que el parlamentarismo burgués suprime las clases y las diferencias de clase, ya que todos los ciudadanos sin excepción tienen derecho al voto y a intervenir en los asuntos del Estado. Toda la historia de Europa durante la segunda mitad del siglo XIX, y toda la historia de la revolución rusa, a comienzos del siglo XX, enseñan palpablemente cuan absurdos son tales conceptos. Bajo las libertades del capitalismo `democrático', las diferencias económicas, lejos de atenuarse, se acentúan y se agudizan. El parlamentarismo no elimina, sino que pone al desnudo la esencia de las repúblicas burguesas más democráticas como órganos de opresión de clase. Ayudando a ilustrar y organizar a masas de población incomparablemente mas extensas que las que antes participaban de un modo activo en los acontecimientos políticos, el parlamentarismo prepara así, no la supresión de las crisis y de las revoluciones políticas, sino la mayor agudización de la guerra civil durante estas revoluciones. Los acontecimientos de París, en la primavera de 1871, y los de Rusia, en el invierno de 1905, pusieron de manifiesto, con excepcional claridad, cuán inevitablemente se produce esta agudización. La burguesía francesa, para aplastar el movimiento proletario, no vacilo ni un segundo en pactar con el enemigo de toda la nación, con las tropas extranjeras que habían arruinado a su patria. Quien no comprenda la inevitable dialéctica interna del parlamentarismo y del democratismo burgués, que conduce a solucionar la disputa por la violencia de las masas de un modo todavía más tajante que en tiempos anteriores, jamás sabrá desarrollar, sobre la base de este parlamentarismo, una propaganda y una agitación consecuentes desde el punto de vista de los principios, que preparen verdaderamente a las masas obreras para la participación victoriosa en tales `disputas'. La experiencia de las alianzas, de los acuerdos, de los bloques con el liberalismo socialreformista en la Europa occidental y con el reformismo liberal (demócratas constitucionalistas) en la revolución rusa, muestra de manera convincente que estos acuerdos no hacen más que embotar la conciencia de las masas, no reforzando, sino debilitando la significación real de su lucha, uniendo a los luchadores con los elementos menos capaces de luchar, con los elementos más vacilantes y traidores." ("Marxismo y revisionismo"). Y desentrañando su traición al socialismo y defensa de la democracia burguesa: "La historia enseña que ninguna clase oprimida ha implantado ni ha podido implantar jamás su dominación sin atravesar un período de dictadura, es decir, de conquista del Poder político y de represión violenta de la resistencia opuesta siempre por los explotadores, la más desesperada y furiosa, una resistencia que no reparaba en crímenes. La burguesía, cuyo dominio defienden ahora los socialistas que hablan contra la `dictadura en general' y enaltecen la `democracia en general', conquistó el Poder en los países avanzados a costa de una serie de insurrecciones, de guerras civiles y de represión violenta contra los reyes, los feudales, los esclavistas y contra sus tentativas de restauración. Los socialistas de todos los países, en sus libros y folletos, en las resoluciones de sus congresos y en sus discursos de agitación, han explicado miles y millones de veces al pueblo el carácter de clase de estas revoluciones burguesas y de esta dictadura burguesa. Por eso, la actual defensa de la democracia burguesa en forma de discursos sobre la `democracia en general' y el actual vocerío y clamor contra la dictadura del proletariado en forma de gritos sobre la `dictadura en general', son una traición directa al socialismo, el paso efectivo al lado de la burguesía, la negación del derecho del proletariado a su revolución proletaria, la defensa del reformismo burgués precisamente en un momento histórico en que este reformismo ha fracasado en todo el mundo y en que la guerra ha creado una situación revolucionaria." ("I Congreso de la Internacional Comunista"). Por otro lado, analizando la aristocracia obrera como bastión social del revisionismo; en el II Congreso de la Internacional Comunista: "Una de las principales causas que dificulta el movimiento obrero revolucionario en los países capitalistas desarrollados es que, debido a las posiciones coloniales y a los superprovechos del capital financiero, etc., el capital, en estos países ha logrado separar una capa relativamente mas amplia y mas estable, una pequeña minoría, una aristocracia obrera. Esta goza de mejores condiciones de salario y esta sumamente imbuida del estrecho espíritu gremial y de perjuicios pequeñoburgueses e imperialistas. Este es el verdadero `bastión' social de la II Internacional, de los reformistas y los `centristas' y, en la actualidad, es casi el principal bastión social de la burguesía." "Aquí debemos preguntar: Como se explica la firmeza de tales corrientes en Europa? Y por que este oportunismo es mas fuerte en Europa Occidental que en nuestro país? Porque los países avanzados han creado y siguen creando su cultura mediante la oportunidad que tiene de vivir a expensas de mil millones de gentes oprimidas. Por que los capitalistas de estos países obtienen mucho mas de lo que hubiesen sido capaces de obtener en forma de ganancias provenientes del robo a los obreros de sus propios países. Antes de la guerra se calculaba que los tres países mas ricos -Gran Bretaña, Francia y Alemania- obtenían solo de la exportación de capital, sin contar otros ingresos, ganancias de ocho mil a diez mil millones de francos por año. No hace falta decir que de esta considerable cantidad es posible arrojar aunque sea 500 millones como limosna a los dirigentes obreros, a la aristocracia obrera, con el objeto de sobornarlos de diversa maneras. Todo el asunto se reduce precisamente al soborno. Este se hace de mil maneras diferentes: elevando la cultura en los mas grandes centros. creando instituciones docentes, creando miles de trabajos suaves para los dirigentes de las sociedades cooperativas, para los lideres tradeunionistas y para los lideres parlamentarios. Esto se realiza donde quiera que existan relaciones capitalistas modernas, civilizadas. Y estos miles de millones de superprovechos constituyen la base económica sobre la cual descansa el oportunismo en el movimiento obrero." Y sobre el revisionismo en cuanto producto de la concepción burguesa y de la influencia sobre el proletariado: "En que estriba su (del revisionismo) carácter inevitable en la sociedad capitalista? Por qué es mas profundo que las diferencias debidas a las particularidades nacionales y al grado de desarrollo del capitalismo? Porque en todo país capitalista existen siempre, al lado del proletariado, extensas capas de pequeña burguesía, de pequeños propietarios. El capitalismo ha nacido y sigue naciendo, constantemente, de la pequeña producción. El capitalismo crea de nuevo, infaliblemente, toda serie de `capas medias' (apéndice de las fábricas, trabajo a domicilio, pequeños talleres diseminados por todo el país, en virtud de las exigencias de la gran industria, por ejemplo, de la industria de bicicletas y automóviles, etc.). Estos nuevos pequeños productores se ven nuevamente arrojados también. de modo no menos inevitable, a las filas del proletariado. Es perfectamente natural que la mentalidad pequeñoburguesa irrumpa de nuevo, una y otra vez, en las filas de los grandes partidos obreros." (" Marxismo y revisionismo"). Y: "Así, pues, la exigencia de que la socialdemocracia revolucionaria diese un viraje decisivo hacia el socialreformismo burgués, iba acompañada de un viraje no menos decisivo hacia la crítica burguesa de todas las ideas fundamentales del marxismo. Y como esta ultima crítica contra el marxismo se venía realizando ya desde hacía mucho tiempo, desde de la tribuna política, desde las cátedras universitarias, en numerosos folletos y en una serie de tratados científicos; como toda la nueva generación de las clases ilustradas ha sido educada sistemáticamente, durante decenios, a base de esta critica, no , es de extrañar que la `nueva' tendencia `critica' en el seno de la socialdemocracia haya surgido de golpe, completamente acabada, como Minerva de la cabeza de Júpiter. Por su contenido, esta tendencia no ha tenido que desarrollarse ni formarse; ha sido trasplantada directamente de la literatura burguesa a la literatura socialista." ("que hacer?"). Lenin califico a los revisionistas como "mejores defensores de la burguesía que la propia burguesía", en el II Congreso aludido dijo: "No voy a extenderme sobre la manera concreta en que debemos hacer esto: de esto me ocupo en mis tesis, que ya han sido publicadas mi tarea consiste en señalar las profundas raíces económicas de este fenómeno. La enfermedad es prolongada; la cura es aun mas prolongada que lo que los optimistas esperaban que fuese. El oportunismo es nuestro principal enemigo. El oportunismo en las filas mas altas del movimiento obrero no es socialismo proletario, sino socialismo burgués. La practica ha mostrado que estas gentes activas en el movimiento obrero que adhieren a esta tendencia oportunista son mejores defensores de la burguesía que la propia burguesía. Sin su dirección de los obreros, la burguesía no podría permanecer en el poder. Esto no solo esta probado por la historia del régimen de Kerensky en Rusia; esta también probado por la república democrática en Alemania, encabezada por su gobierno socialdemócrata; esta probado por la actitud de Albert Thomas hacia su gobierno burgués. Esta probado por la experiencia análoga en Inglaterra y los Estados Unidos. He ahí donde está nuestro principal enemigo; y debemos vencer a este enemigo. Debemos abandonar este congreso con la firme determinación de llevar a cabo esta lucha en todos nuestros partidos hasta su verdadero fin. Esta es nuestra tarea principal." Y sobre "la única línea marxista": "Del `partido obrero burgués' de las viejas tradeuniones, de la minoría privilegiada, distingue Engels la `masa inferior', la verdadera mayoría y apela a ella, que no está contaminada de `respetabilidad burguesa'. Ese es el guía de la táctica marxista! Ni nosotros ni nadie puede calcular exactamente qué parte del proletariado es la que sigue y seguirá a los socialchovinistas y oportunistas. Sólo la lucha lo pondrá de manifiesto, sólo la revolución socialista lo decidirá definitivamente. Pero lo que si sabemos con certeza es que los `defensores de la patria' en la guerra imperialista sólo representan una minoría . Y por esto, si queremos seguir siendo socialistas, nuestro deber es ir más abajo y más a lo hondo, a las verdaderas masas: en ello está todo el sentido de la lucha contra el oportunismo y todo el contenido de esta lucha. Poniendo al descubierto que los oportunistas y los socialchovinistas traicionan y venden de hecho los intereses de las masas, que defienden privilegios pasajeros de una minoría obrera, que extienden ideas e influencias burguesas, que, en realidad, son aliados y agentes de la burguesía, de este modo enseñamos a las masas a comprender cuáles son sus verdaderos intereses políticos, a luchar por el socialismo y por la revolución, a través de todas las largas y penosas peripecias de las guerra imperialistas y de los armisticios imperialistas. La única línea marxista en el movimiento obrero mundial consiste en explicar a las masas que la escisión con el oportunismo es inevitable e imprescindible, en educarlas para la revolución en una lucha despiadada contra él, en aprovechar la experiencia de la guerra para desenmascarar todas las infamias de la política obrera liberal-nacionalista, y no para encubrirlas." ("El imperialismo y la escisión del socialismo"). Así como convocó a defender el marxismo y desarrollarlo pese a la grita de los revisionistas: "Y ahora planteamos la pregunta: qué aportaron de nuevo a esta doctrina aquellos bulliciosos `renovadores', que tanto ruido han levantado en nuestros días, agrupándose en torno al socialista alemán Bernstein? Absolutamente nada: no impulsaron ni un paso adelante la ciencia que nos legaron, con la indicación de desarrollarla, Marx y Engels; no enseñaron al proletariado algunos nuevos métodos de lucha; no hicieron más que plegarse, recogiendo fragmentos de teorías atrasada predicando al proletariado, en lugar de la doctrina de la lucha, la de las concesiones a los enemigos más encarnizados del proletariado, a los gobiernos y partidos burgueses, que no se cansan de inventar nuevos métodos de persecución contra los socialistas. Uno de los fundadores y jefes de la socialdemocracia rusa, Plejanov tenía completa razón al someter a una critica implacable la última `critica' de Bernstein, de cuyas concepciones también reniegan ahora los representantes de los obreros alemanes (en el Congreso de Hannóver). Sabemos que estas palabras provocarán un montón de acusaciones que se nos echará encima: gritarán que queremos convertir el partido socialista en una Orden de ortodoxos', que persiguen a los `herejes' por su apostosia del `dogma', por toda opinión independiente, etc. Conocemos todas estas frases cáusticas tan en boga. Pero, ellas no contienen ni un grano de verdad, ni un ápice de sentido común. No puede haber un fuerte partido socialista sin una teoría revolucionaria que agrupe a todos los socialistas, de la que éstos extraigan toda sus convicciones y la apliquen en sus procedimiento de lucha y métodos de acción. Defender la doctrina, que según su más profundo convencimiento es la verdadera, contra los ataques infundados y contra los intentos de empeorarla, no significa, en modo alguno, ser enemigo de toda critica. Nosotros no consideramos, en absoluto, la teoría de Marx como algo acabado e intangible: estamos convencidos, por el contrario, de que esta teoría no ha hecho sino colocar las piedras angulares de la ciencia que los socialistas deben impulsar en todos los sentidos, siempre que no quieran quedar rezagados en la vida. Creemos que para los socialistas rusos es particularmente necesario impulsar independientemente la teoría de Marx, porque esta teoría da solamente los principios directivos generales, que se aplican en particular a Inglaterra, de un modo distinto que a Francia; a Francia, de un modo distinto que a Alemania; a Alemania, de un modo distinto que a Rusia." ("Nuestro Programa ). Y analizando el hundimiento del viejo revisionismo, en su muy importante obra "La bancarrota de la II Internacional" del año 1915, Lenin nos enseñó: "Para los obreros conscientes, el socialismo es una convicción profunda y no una tapadera conveniente para ocultar tendencias conciliadoras pequeñoburguesas y de oposición nacionalista. Por bancarrota de la Internacional, estos obreros entienden la flagrante traición de la mayoría de los partidos socialdemócratas oficiales a sus convicciones y a las solemnes declaraciones hechas durante los discursos pronunciados en los congresos internacionales de Stuttgart y Basilea, en las resoluciones de estos congresos, etc.... Es un hecho reconocido desde hace tiempo que, a pesar de todos los horrores y calamidades que provocan, las guerras reportan un beneficio mas o menos grande al descubrir, denunciar y destruir implacablemente muchos elementos podridos, caducos y muertos de las instituciones humanas." "El oportunismo es el sacrificio de los intereses vitales de las masas en aras de los intereses momentáneos de una minoría insignificante de obreros, o dicho en otros términos, la alianza entre una parte de los obreros y la burguesía contra la masa proletaria. La guerra hace que esta alianza sea tanto mas patente y forzosa. El oportunismo se ha ido incubando durante decenios por la especificidad de una época de desarrollo del capitalismo en que las condiciones de existencia relativamente civilizadas y pacificas de una capa de obreros privilegiados los `aburguesaba', les proporcionaba unas migajas de los beneficios conseguidos por sus capitales nacionales y los mantenía alejados de las privaciones, de los sufrimientos y del estado de ánimo revolucionario de las masas que eran lanzadas a la ruina y que vivían en la miseria." "El socialchovinismo es el oportunismo tan maduro, tan fortalecido y envalentonado durante una larga época de capitalismo relativamente `pacífico', tan cuajado ideológica y políticamente, tan ligado a la burguesía y a los gobiernos, que no es posible tolerar la existencia de tal corriente en el seno de los partidos obreros socialdemócratas." "Antes de la guerra, el oportunismo -si nos referimos a toda Europa-se encontraba, por decirlo así, en la adolescencia. Con la guerra ha llegado a la plena madurez y ya no se le puede devolver su `inocencia' y su juventud. Ha madurado toda una capa social de parlamentarios, de periodistas, de funcionarios del movimiento obrero, de empleados privilegiados y de ciertos estratos del proletariado, capa social que se ha fundido con su burguesía nacional y a la que ésta ha sabido apreciar en su justo valor y `adaptar'. No es posible hacer girar hacia atrás o detener la rueda de la historia; pero lo que si se puede y se debe hacer es avanzar sin miedo y pasar de las organizaciones preparatorias y legales de la clase obrera, prisioneras del oportunismo, a unas organizaciones revolucionarias del proletariado que sepan no limitarse a la legalidad, que sepan ponerse a cubierto de la traición oportunista, a las organizaciones revolucionarias del proletariado que emprende la `lucha por el Poder', por el derrocamiento de la burguesía." Y en "El oportunismo y la bancarrota de la II Internacional", del 16: "El carácter relativamente `pacifico' del período comprendido entre 1871 y 1914 ha alimentado el oportunismo, primero como estado de ánimo, luego como tendencia y, finalmente, como grupo o sector de burocracia obrera y compañeros de ruta pequeñoburgueses. Sólo pudieron tales elementos subordinar el movimiento obrero reconociendo de palabra los objetivos revolucionarios y la táctica revolucionaria. Solo pudieron conquistar la confianza de las masas jurando que todo el trabajo `pacifico' no era sino una preparación para la revolución proletaria. Esa contradicción era un tumor que alguna vez había de reventar y ha reventado. Ahora toda la cuestión consiste en decidir si, como hacen Kautsky y Cía., hay que intentar introducir nuevamente ese pus en el organismo, en aras de la `unificación' (con el pus), o si, para contribuir a la completa curación del organismo del movimiento obrero, es menester eliminar esa podré del modo mas rápido y cuidadoso, aunque este proceso produzca temporalmente agudo dolor."El Presidente Mao Tsetung desarrolló una grandiosa lucha contra el revisionismo contemporáneo de Jruschov y sus secuaces a nivel mundial, apuntando contra la siniestra restauración del capitalismo en la Unión Soviética, desenmascarándolo cabal y completamente como lo demuestra la "Polémica acerca de la línea general del Movimiento Comunista Internacional", documentación redactada bajo su dirección personal. Sin embargo su más trascendental lucha contra el revisionismo la libró en la propia China a través de la Gran Revolución Cultural Proletaria. En su "Discurso en la II Sesión Plenaria del VIII Comité Central", en 1956, dijo: "Respecto al XX Congreso del PCUS, quisiera decir algo. A mi juicio, existen dos `espadas': Una es Lenin y la otra, Stalin. Ahora, una de esas espadas, Stalin, ha sido abandonada por los rusos. Gomulka y algunos húngaros han echado mano de ella para caer sobre la Unión Soviética y combatir el llamado stalinismo. Los Partidos Comunistas de muchos países europeos también están criticando a la Unión Soviética, y es Togliatti quien va a la cabeza. Los imperialistas, a su vez, hacen uso de esta espada para matar a la gente. Dulles, por ejemplo, la blandió durante algún tiempo. Lo ocurrido con esta espada no es que haya sido dada en préstamo, sino simplemente botada. Los chinos no la hemos abandonado. Como primer punto, defendemos a Stalin y, como segundo, criticamos sus errores; es por eso que hemos escrito el artículo `Sobre la experiencia histórica de la dictadura del proletariado'. A diferencia de aquellas gentes que denigran y liquidan a Stalin, nosotros lo tratamos conforme a la realidad. En cuanto a la otra espada, Lenin, no habrá sido abandonada en cierta medida por algunos dirigentes soviéticos? Me parece que lo ha sido en medida considerable. Tiene aun validez la Revolución de Octubre? Puede todavía servir de ejemplo para los demás países? En su informe ante el XX Congreso del PCUS, Jruschov afirmo que era posible conquistar el Poder por la vía parlamentaria, lo que quiere decir que para los demás países ya no es necesario aprender de la Revolución de Octubre. Abierta esta compuerta, el leninismo ha sido prácticamente abandonado. La doctrina leninista es un desarrollo del marxismo. En que aspectos lo es? Primero, en cuanto a la concepción del mundo, es decir, el materialismo y la dialéctica; segundo, en cuanto a la teoría y la táctica de la revolución y, sobre todo, en lo que se refiere a la lucha de clases, la dictadura del proletariado y el partido proletario. Lenin creo, además, la doctrina de la construcción socialista. Desde la Revolución de Octubre de 1917, hubo construcción en medio de la revolución, y al respecto Lenin tuvo siete años de practica, la cual no tuvo Marx. Lo que nosotros estudiamos es precisamente estos principios fundamentales del marxismo-leninismo." E insistiendo en lo mismo y sobre los vacilantes ante las tormentas, el abandono del marxismo y el ataque contra las cosas avanzadas, en "Discursos en una conferencia de secretarios", del año 57: "En el transcurso del año pasado se desataron varias grandes tempestades en el plano internacional. El XX Congreso del PCUS lanzó su violento ataque a Stalin; posteriormente, los imperialistas levantaron dos grandes tormentas anticomunistas y, en el movimiento comunista internacional, también se desplegaron dos grandes y tempestuosas polémicas. Algunos Partidos europeos y americanos salieron seriamente afectados de dichas tempestades y sufrieron pérdidas considerables, en tanto que el impacto y las pérdidas en los Partidos de los países de Oriente fueron relativamente pequeños. Bastó que el XX Congreso del PCUS hiciera lo que hizo para que algunos de los que se habían presentado como fervientes partidarios de Stalin pasaran a combatirlo con igual fervor. En mi opinión, ellos han dejado de lado el marxismoleninismo, no tienen un enfoque analítico de los problemas y, en fin, carecen de moral revolucionaria. El marxismo-leninismo conlleva, entre otras cosas, la moral revolucionaria del proletariado. Ya que ustedes fueron antes tan ardientes partidarios de Stalin, no tendrían que haber explicado de alguna manera su actual viraje? Pero, sin brindar la menor explicación, han dado de repente un viraje de 180 grados, como si estas sus Señorías nunca jamas hubieran sido partidarios de Stalin, no obstante haberse adherido a él, en el pasado, de manera muy fervorosa. El problema de Stalin atañe al movimiento comunista internacional en su conjunto y a los Partidos Comunistas de todos los países. La aplastante mayoría de los cuadros de nuestro Partido están descontentos con el XX Congreso del PCUS y consideran que ha ido demasiado lejos al atacar a Stalin. Este es un estado de ánimo natural, una reacción natural. Sin embargo, unos cuantos vacilaron. Cada vez que se avecina un tifón anunciando un aguacero, las hormigas salen de sus galerías, pues poseen un `olfato' muy fino y entienden de meteorología. Al desatarse el tifón del XX Congreso del PCUS, también en China salieron de sus galerías algunas hormigas. Se trata de los elementos vacilantes de dentro del Partido, que cambian de posición cada vez que se les presenta determinada coyuntura. Al oír decir que habían acabado con Stalin de un mazazo, se frotaron las manos y se pasaron al otro lado, gritando vivas y afirmando que Jruschov tenía razón en todo y que estas sus Señorías venían sosteniendo lo mismo que desde hacia mucho. Pero mas tarde, al recibir unos cuantos garrotazos del imperialismo y otros tantos dentro del movimiento comunista internacional, hasta el propio Jruschov se vio obligado a cambiar un poco de tono, y entonces ellos volvieron, en su tambaleo, a este lado. Es que, impedidos por la tendencia general, no podían hacer otra cosa. Hierbas que crecen sobre la tapia se mecen con el viento. En su vacilación, volver acá no es su sincero deseo, y si lo es, en cambio, pasarse al lado de allá. Que bien hicieron esos elementos de dentro y de fuera del Partido en cantar loas a los acontecimientos de Polonia y Hungría! Al abrir la boca solo decían Poznan y al cerrarla, Hungría. De esta manera se descubrió el pastel, las hormigas salieron de sus galerías y las tortugas e hicoteas también hicieron su aparición. Ellos giraron conforme giro el bastón de Gomulka, abogando por la democracia grande cuando aquél abogaba por la democracia grande. Como ahora se ha operado un cambio en la situación, permanecen mudos. Pero quedarse mucho no es su íntimo deseo; lo que realmente desean es hacerse oír." "La delegación nuestra que fue últimamente a la Unión soviética destapó allí algunos problemas. En una conversación telefónica con el camarada Chou En-lai, yo le dije que esa gente estaba cegada por sus logros y que la mejor manera de tratar con ella era poniéndola como un trapo. De qué logros se trata en este caso? De sólo cincuenta millones de toneladas de acero, cuatrocientos millones de toneladas de carbón y ochenta millones de toneladas de petróleo. Tiene todo esto algo de impresionante? Nada. Pero, que clase de comunistas, que clase de marxistas son aquellos que se ponen calenturientos con tan poquita cosa? Yo diría que eso no tendría nada de impresionante ni siquiera en el caso de que se multiplicara por diez o por cien. Ustedes no han hecho mas que extraer de este globo terráqueo unas cuantas migajas, transformarlas en acero y hacer con este unos cuantos camiones y aviones y otras cosas por el estilo. Que tiene esto de maravilloso? Pero ustedes lo han convertido en un fardo que llevan a cuestas, un fardo tan pesado que les ha hecho dejar a un lado todos los principios revolucionarios. No significa esto dejarse cegar por los logros?." "En un período posterior a la Segunda Guerra Mundial, el Partido Comunista de la Unión Soviética y los Partidos de algunos países de Europa Oriental dejaron de lado los principios fundamentales del marxismo. Tendieron un manto de silencio sobre la lucha de clases, la dictadura del proletariado, la dirección del Partido, el centralismo democrático, los vínculos del Partido con las masas, etc., y la atmósfera que allí se vivía era de escaso interés por estas cosas. Fue por eso que se produjeron los acontecimientos de Hungría. Nosotros hemos de atenernos firmemente a la teoría básica del marxismo." "El Partido Comunista ha sido blanco de no se cuántos insultos. El Kuomintang nos tildaba de `bandidos comunistas' y llamaba `elementos vinculados con los bandidos' a los que mantenían contactos con nosotros. Pero los `bandidos' resultaron mejores que los del Kuomintang, que no eran `bandidos'. Desde que el mundo es mundo, en su comienzo nada de lo avanzado ha sido aplaudido sino cubierto de invectivas. Desde su nacimiento, el marxismo y el Partido Comunista han sido objeto de injurias. Luego de transcurridos diez mil años, las cosas avanzadas serán también vilipendiadas al inicio." En su gran obra "Sobre el tratamiento correcto de las contradicciones en el seno del Pueblo", febrero del 57, el Presidente Mao nos dijo: "El marxismo sólo puede desarrollarse en la lucha, esto es cierto no sólo para el pasado y el presente, también es necesariamente cierto para el futuro. Lo correcto se desarrolla siempre en el proceso de la lucha contra lo erróneo. Lo verídico, lo bueno y lo hermoso siempre existen en contraste con lo falso, lo malo y lo feo, siempre se desarrollan en la lucha con ellos. Cuando la humanidad desecha en general un error y acepta una verdad, una nueva verdad comienza a luchar contra las nuevas ideas erróneas. Esta lucha no cesará jamás. Esta es la ley del desarrollo de la verdad y, desde luego, la ley del desarrollo del marxismo." Y sobre no temer a la critica sino desarrollarse en ella: "Puede ser criticado el marxismo, puesto que es aceptado como ideología rectora por la mayoría del pueblo de nuestro país? Desde luego que si. El marxismo es una verdad científica y no teme a la critica. Si temiese la critica, si pudiese ser derrotado con criticas, no tendría valor alguno. Acaso, de hecho, los idealistas no critican el marxismo a diario y por todos los medios? Acaso los que se aferran a las ideas burguesas o pequeñoburguesas y no desean modificarlas, no critican el marxismo también por todos los medios? Los marxistas no deben temer la critica, venga ésta de donde viniera. Por el contrario, los marxistas tienen que templarse, desarrollarse y ampliar sus posiciones precisamente a través de la critica, en la tormenta de la lucha. La lucha contra las ideas erróneas puede compararse con la vacunación: el hombre está inmune contra la enfermedad una vez que la vacuna ha hecho efecto. La cosa creada en invernadero no puede tener gran vitalidad." Así como en cuanto a dogmatismo y revisionismo: "A la par que criticamos el dogmatismo, debemos también atender a la crítica del revisionismo. El revisionismo u oportunismo de derecha es una tendencia ideológica burguesa; es más peligroso que el dogmatismo. Los revisionistas, oportunistas de derecha, alaban de palabra el marxismo; también atacan el `dogmatismo', pero lo que atacan es precisamente la quintaesencia del marxismo. Combaten o tergiversan el materialismo y la dialéctica; combaten o intentan debilitar la dictadura democrática popular y la dirección del Partido Comunista; combaten o intentan debilitar la transformación y la construcción socialistas. Incluso después de la victoria fundamental de la revolución socialista en nuestro país, queda todavía un cierto número de gentes que sueñan con restaurar el sistema capitalista; estas gentes luchan contra la clase obrera en todos los frentes, incluido el ideológico. Y en esta lucha, tienen en los revisionistas a sus mejores asistentes. Y resaltando el carácter mas pernicioso del revisionismo: "Durante largo tiempo hasta la fecha la gente ha criticado mucho al dogmatismo. Es así como debe ser, pero con frecuencia descuida criticar al revisionismo. Tanto el dogmatismo como el revisionismo están contra el marxismo. El marxismo ciertamente tiene que avanzar; debe desarrollarse junto con la evolución de la práctica y no puede detenerse. Quedaría sin vida si permaneciera estancado y estereotipado. Pero los principios básicos del marxismo nunca deben ser violados de otra forma se cometerán yerros. Es dogmatismo enfocar al marxismo desde un punto de vista metafísico y considerarlo como algo rígido. Es revisionismo negar los principios básicos del marxismo y negar su verdad universal. El revisionismo es una forma de ideología burguesa. Los revisionistas niegan las diferencias entre el socialismo y el capitalismo, entre la dictadura del proletariado y la dictadura de la burguesía. Lo que propician es, de hecho, no la línea socialista sino la línea capitalista. En las circunstancias actuales, el revisionismo es mas pernicioso que el dogmatismo. Una de las importantes tareas nuestras del momento, en el frente ideológico, es desplegar la critica al revisionismo." ("Discurso ante la Conferencia Nacional del Partido Comunista de China sobre el trabajo de propaganda"). En las ya referidas "Notas de lectura sobre el `Manual de la economía Política' de la Unión Soviética", se hace un importante deslinde sobre el surgimiento de las relaciones socialistas de producción y necesidad de combatir al revisionismo: "El proletariado debe `unir en torno a si a todos los trabajadores a fin de eliminar el capitalismo' (pag.327). Esta formulación es correcta. Pero aquí es preciso igualmente hablar de la toma del poder político. `El proletariado no encontrará jamás Una economía socialista completamente hecha' y `los elementos de la economía socialista no pueden desarrollarse en una sociedad burguesa fundada sobre el sistema de la propiedad privada' (pág.328). En realidad, no solamente estos elementos `no pueden desarrollarse' sino que no pueden ni siquiera existir. En una sociedad capitalista, los sectores socialistas de economía cooperativa y de economía del Estado no están siquiera en condiciones de nacer. Es evidente que no se puede hablar de su desarrollo. Es la diferencia principal entre nosotros y los revisionistas. Estos últimos dicen que en una sociedad capitalista ciertas empresas, tales como los servicios públicos urbanos, tienen un carácter socialista. Afirman que el pasaje al socialismo puede efectuarse pacíficamente, por la prolongación del capitalismo. Se trata de una grave deformación del marxismo." Y: "En los planos ideológico, político y organizativo, la escisión entre los bolcheviques y los mencheviques en Rusia abrió el camino a la Revolución de Octubre. Si no hubiera habido lucha entre los bolcheviques y los mencheviques, si no hubiera habido lucha contra el revisionismo de la Segunda Internacional, habría sido imposible que la Revolución de Octubre triunfara. Luchando contra todos los revisionismos y todos los oportunismos, el leninismo nació y se desarrollo. Sin el leninismo no hubiera habido victoria de la revolución rusa." El Presidente Mao Tsetung en los años sesentas sentó estas sustantivas y trascendentes conclusiones: "En la lucha entre el marxismo-leninismo y el revisionismo, todavía no se ha determinado quién vencerá a quién, puesto que es muy posible que el revisionismo triunfe y nosotros seamos derrotados. Nos valimos de esta posibilidad de ser derrotados para advertir al pueblo, encontramos que esto fue muy valioso para permanecer alertas contra el revisionismo y para prevenir y oponernos al revisionismo". Y sobre sus fuentes: "La influencia burguesa es la fuente interna del revisionismo, y la capitulación ante la presión del imperialismo, su fuente externa". Así como la clave es: "la cuestión de si la dirección del Partido y del Estado está en manos de los marxistas no de los revisionistas". La necesidad de destacar centralmente "el problema de prevenir la aparición del revisionismo", lo cual demanda "ser verdaderos marxista-leninistas y no, como Jruschov, revisionistas disfrazados de marxista-leninistas"; y más aun nos emplaza: "hay que estar vigilantes contra el surgimiento del revisionismo, especialmente contra el surgimiento del revisionismo en el Comité Central de nuestro Partido". Y apuntando a la raíz misma del problema, las dos grandes orientaciones estratégicas de: "Hay que combatir el egoísmo y criticar el revisionismo" y "Combatir el concepto de lo privado y repudiar el revisionismo". Asimismo, las siguientes conclusiones merecen destacarse muy especialmente por su inmensa repercusión en la lucha de clases internacional: "El ascenso del revisionismo al Poder es, precisamente, el ascenso de la burguesía al Poder". "La Unión Soviética actualmente está bajo la dictadura de la burguesía, dictadura de la gran burguesía, dictadura de tipo fascista alemán, dictadura de tipo hitleriano". "La Unión Soviética, Yugoslavia y los otros países donde la camarilla revisionista contemporánea se encuentra en el Poder han cambiado o están en proceso de cambiar de color, restaurando el capitalismo y pasando de la dictadura del proletariado a la dictadura de la burguesía". Y: "Si los revisionistas llegan a usurpar la dirección en China, los marxista-leninistas de todos los países deberían denunciarlos y combatirlos con firmeza, ayudar a la clase obrera y a las masas populares chinas a oponerse al revisionismo." Además, comparando comunistas y revisionistas: "En comparación con ustedes, la camarilla dirigente revisionista de la Unión Soviética, la camarilla de Tito de Yugoslavia y las otras camarillas de renegados y vendeobreros de toda calaña no son más que un montón de polvo mientras ustedes se yerguen como una elevada montaña que atraviesa las nubes. Son ellos sirvientes y cómplices del imperialismo ante quien se postran, en tanto que ustedes son intrépidos revolucionarios proletarios que se atreven a combatir contra el imperialismo y sus lacayos y a combatir contra todos los tiránicos enemigos del mundo." Y resaltando que el pueblo quiere la revolución, apoya el marxismo y rechaza el revisionismo: "Los pueblos de todos los países, las masas populares, que constituyen más del noventa por ciento de la población total, invariablemente quieren la revolución y apoyarán al marxismo-leninismo. No respaldarán al revisionismo. Aunque por el momento algunos lo apoyan, terminarán por desecharlo. Ellos despertarán gradualmente, combatirán contra el imperialismo y los reaccionarios de todos los países, y lucharán contra el revisionismo." El Presidente Mao establece la inexorable perspectiva: "Ya sea en China o en otros países del mundo, hablando en general, más del noventa por ciento de la población apoyará finalmente el marxismo-leninismo. En el mundo aún hay muchas personas que, debido al engaño de la socialdemocracia, el revisionismo, el imperialismo y toda la reacción, aún no han tomado conciencia política. Pero, de todos modos despertarán gradualmente y apoyarán el marxismo-leninismo. La verdad del marxismo-leninismo es irresistible. Las masas populares se levantarán invariablemente en revolución. La revolución mundial triunfará inexorablemente." Así será! El marxismo-leninismo-maoísmo vencerá ineluctablemente! Hemos considerado con amplitud y detenimiento cuatro cuestiones fundamentales del marxismoleninismo-maoísmo: 1) la violencia revolucionaria, 2) la lucha de clases, 3) el socialismo y la dictadura del proletariado, y 4) la lucha contra el revisionismo; cuatro cuestiones fundamentales para cumplir nuestra área de conquistar el Poder en todo el país y, firmemente adheridos al internacionalismo proletario, servir a la revolución mundial; cuestiones fundamentales que, ante la nueva ofensiva contrarrevolucionaria revisionista, encabezada por Gorbachov y Teng, y la arremetida imperialista convergente, adquieren cada día mayor importancia y trascendencia. Cuatro cuestiones fundamentales que son, además de problemas candentes de la actualidad, parte medular del marxismo-leninismo-maoísmo; más aún tratándose del socialismo y la dictadura del proletariado que plantean no solo la cuestión trascendental de la construcción de la primera fase del comunismo sino el carácter de clase del Estado de todo el período de transición, dictadura del proletariado que es la esencia del socialismo y el eje histórico que lleva al comunismo. Así pues, enarbolar estas cuatro cuestiones fundamentales en la actualidad es parte insoslayable de enarbolar, defender y aplicar el marxismo-leninismo-maoísmo, principalmente el maoísmo, la invencible y todo poderosa ideología del proletariado; haciendo cada vez más nuestro el gran llamado del Presidente Mao Tsetung: "Marxista-leninistas de todos los países, unios; pueblos revolucionarios del mundo entero unios; derrocad al imperialismo, al revisionismo contemporáneo y a todos los reaccionarios de los diversos países! Se edificara, sin duda alguna, un mundo nuevo libre de imperialismo, de capitalismo y de todo sistema de explotación!" Y así, reafirmándonos una vez mas sobre la victoria ineluctable del marxismo-leninismo-maoísmo y del comunismo sobre la faz de la Tierra, cumplamos con la mayor firmeza y decisión los acuerdos de la reciente última sesión del Comité Central; principalmente lo sancionando en la III parte de "Desarrollemos la guerra popular y construyamos la conquista del Poder!": "1. Dar gran salto en la incorporación de las masas a la guerra popular. La vieja sociedad peruana y su evolución solo dan y darán al pueblo mas hambre, explotación, opresión y genocidio, mientras a los jóvenes les niega el futuro. El problema de la tierra; la nueva acumulación; y el mayor dominio imperialista. La supuesta superación de la inflación y de la crisis golpeara al pueblo mas brutalmente que nunca. El pueblo solo tiene un camino: desarrollar la guerra popular y conquistar el Poder en todo el país. Combatir y resistir por la guerra popular! 2. Desarrollar la guerra de movimientos: perspectiva necesaria. La guerra de movimientos y la guerra de guerrillas. La teoría y la línea militar del Partido. La guerra de movimientos paso necesario de la guerra popular. Estudiar la guerra de movimientos en el maoísmo y aplicarla cada vez más a nuestras condiciones concretas. 3. Construir la conquista del Poder! Construir! y Conquistar el Poder en todo el país! y Desarrollar la guerra Popular!, tres cuestiones indesligablemente unidas. Desarrollar la construcción del Nuevo Estado, cuestión básica y central de la construcción; formar gobierno y desarrollar la organización estatal. Construcción del Partido y del EGP. "Tres bases y tres guías": `Fortalecer la consolidación y forjar cuadros"; "Potenciar el Ejército Guerrillero Popular e impulsar especialmente las fuerzas principales"; "Desarrollar el Nuevo Poder y construir Comites Populares Abiertos". Campaña de "Apoyar el Nuevo Poder". Campaña de Rectificación, lucha de dos líneas y combatir el revisionismo como peligro principal. 4. Servir a la revolución proletaria mundial. Internacionalismo proletario. Movimiento proletario internacional y movimiento de liberación nacional. Movimiento Revolucionario Internacionalista. Movimiento Comunista Internacional. "Proletarios y naciones oprimidos del mundo, unios!", "Proletarios de todos los países, unios!" 5. CAMPAÑA. Apuntar contra las elecciones generales aplicando el boicot; seguir abriendo comites populares abiertos, desarrollando la guerra popular e impulsar la guerra de movimientos; todo en cumplimiento de las tareas políticas establecidas por el Partido. 6. El Partido guiándose por el marxismo-leninismo-maoísmo, pensamiento gonzalo garantiza el rumbo de la revolución!" Es dentro de este contexto y perspectiva que consideramos la segunda vuelta de las elecciones generales, a cumplirse en junio; y teniendo en cuenta la experiencia de la década transcurrida y, mas aun, los brillantes resultados obtenidos recientemente por la política de boicot, concretados en la forja y crecimiento de un masivo torrente antielectoral ligado al desarrollo de la guerra popular, se impone la necesidad política de seguir aplicando el boicot mas firme y decididamente hoy. La voz de orden es simple y concreta: No votar! Y la consigna clara y resuelta: Elecciones, no! Guerra popular, si! VIVA EL X ANIVERSARIO DE LA GUERRA POPULAR! ABAJO LA INTERVENCIÓN IMPERIALISTA, PRINCIPALMENTE YANQUI! CONQUISTAR EL PODER EN TODO EL PAÍS! VIVA EL PARTIDO COMUNISTA DEL PERÚ! VIVA EL PRESIDENTE GONZALO! GLORIA AL MARXISMO-LENINISMO-MAOISMO! Mayo, 1990. COMITE CENTRAL PARTIDO COMUNISTA DEL PERÚ Notas: * Se refiere a la lucha revolucionaria de barricadas que tuvo lugar en Berlín el 18 y 19 de marzo de 1848. **Ver Manifiesto, capítulo III, punto c).