Llatí_01 29/2/08 13:20 Página 11 I La fundación de Roma: entre el mito y la historia Origen de los fundadores de Roma La historia de la fundación de Roma está cuajada de hechos legendarios, ya que ni los propios romanos sabían cómo sucedió y prefirieron crear una historia que los emparentase con los dioses, con lo cual demostraban también su condición de pueblo escogido. Según el mito fundacional, cuando los griegos se apoderaron de Troya, el príncipe troyano Eneas –hijo de la diosa Venus y del mortal Anquises– consiguió salvarse de la destrucción con su padre e hijo. Huyó hacia Italia y desembarcó en la región del Lacio, cerca de la desembocadura del río Tíber. Allí se alió con el rey aborigen Latino, se casó con su hija Lavinia, y fundaron la ciudad de Lavinio. Roma, caput mundi Príamo, rey de Troya El troyano Anquises Venus 50 hijos, entre 50 hijas, entre las cuales los cuales Paris Su hijo Ascanio fundó Alba Longa, cuyo décimo tercer rey, Numitor, fue destronado por su hermano Amulio. Este convirtió a su sobrina Rea Silvia en una virgen vestal consagrada a la castidad para que sus hijos no le pudiesen arrebatar el poder. Sin embargo, Rea Silvia concibió del dios Marte los gemelos Rómulo y Remo. Para protegerlos de Amulio los abandonó cerca del Tíber, el río creció, los arrastró y los dejó en un cerro, el Palatino. Allí los alimentó una loba y finalmente fueron recogidos por un pastor. Adultos ya, Rómulo y Remo, conociendo su origen, reunieron un ejército que consiguió acabar con Amulio y devolver a su abuelo Numitor el trono de Alba Longa. El abuelo les animó a que se establecieran en otro lugar, y los gemelos escogieron Roma. Para saber cuál de los dos sería el fundador de la ciudad consultaron el vuelo de las aves (los auspicios): parece que los auspicios designaron a Rómulo como fun-dador en la fecha mítica de 753 a. C. Sin embargo, los dos hermanos no estaban de acuerdo con la Creusa Eneas Ascanio, fundador de Alba Longa dinastía albana, a la que pertenecen los dos hermanos Numitor Marte Amulio Rea Sílvia Rómulo y Remo, fundadores de Roma interpretación de los auspicios, se pelearon y Remo fue muerto por su hermano. Rómulo se con-virtió en el primer rey de Roma. Una vez fundada la ciudad de Roma, se dieron cuenta de que no había mujeres. Entonces Rómulo invitó a una fiesta al pueblo de los sabinos, con la intención de que cada romano raptase a una de la mujeres sabinas y se la llevase a Roma. Rómulo cogió a la mujer del rey sabino, Hersilia. Enfrentados Rómulo y el marido de Hersilia, éste fue muerto. Esto hubiese podido desencadenar una guerra, pero las mujeres sabinas lo impidieron porque no querían ver morir a sus padres, hijos y maridos. Con su actitud lograron que romanos y sabinos firmasen la paz. A partir de entonces se dispuso que Roma sería gobernada alternativamente por un romano y un sabino. Es muy probable que esta leyenda tenga algo de verdad. Seguramente las tribus de latinos que vivían cerca de la desembocadura del Tíber, perseguidas por los etruscos y sabinos, se establecieron en los cerros cercanos e hicieron una federación para protegerse. El centro geográfico y estratégico de esta federación fue el cerro del Palatino, la primera de las siete colinas de Roma que fue ocupada. A finales del siglo VIII a. C. los latinos y sabinos, preocupados por el avance de los etruscos –que ya habían ocupado toda la Italia central–, formaron una unidad política y religiosa, la confederación del Septimontium (de las siete colinas). El relato legendario del rapto de las sabinas haría alusión a este hecho histórico. Las sabinas, Jacques-Louis David,(1748-1825). Eneas huyendo de Troya con Anquises, Ascanio y Creusa, Pompeo Girolamo Batoni (1708-1787).