Documento 913812

Anuncio
3. ORACIÓN: ¿Qué le digo al Señor? ¿Qué le decimos?
Señor Jesús, te damos gracias por la posibilidad que tenemos los
seres humanos de vivir con sentido el amor que nos regalas. Te
damos gracias porque nos das la esperanza de un encuentro al
final de los tiempos. Te damos gracias también por todas alegrías
y tristezas que día tras día nos encontramos en el camino, y por
eso te damos gracias. Gracias Señor, gracias Señor.
Te pedimos perdón por las ocasiones en que hemos caído en el
error de ir al pasando, de no valorar el tiempo que nos regalas y
de ser conformistas con la sociedad y de no mirar hacia adelante,
por eso te pedimos perdón. Perdón Señor, perdón Señor.
4. CONTEMPLACIÓN:


Al mismo Jesús que ahora camina contigo y que, al final, te
dará el abrazo total.
A Jesús que se ha encarnado para nuestra salvación,
contemplarlo también en nuestros hermanos más necesitados.
5. ACCIÓN: ¿A qué me comprometo? ¿A qué nos
comprometemos?
La intención general del apostolado de la oración del Papa para el
mes de diciembre es:
Propuesta personal
Por los niños que sufren: “Que los niños abandonados o víctimas
de cualquier forma de violencia encuentren el amor y la
protección que necesitan”.
Que trate de tener una preparación profunda en este adviento
para profundizar más en mi fe, y poder recibir con alegría la
Navidad que se aproxima.
Propuesta comunitaria
Misionera: Que los cristianos, iluminados por el verbo Encarnado,
preparemos la venida del Salvador.
Que en mis comunidades trate de formar una conciencia fuerte de
preparación acerca del tiempo que estamos celebrando, y como
comunidad, tener la esperanza de encuentro con el Señor, y nos
lleve también a ser más solidarios con nuestros hermanos.
LECTIO DIVINA
COMISIÓN DIOCESANA DE ANIMACIÓN BÍBLICA
1° de diciembre de 2013
I Domingo de Adviento
¨En la Diócesis de Texcoco, nos reconocemos, valoramos y
aceptamos como personas para ser casa y escuela de comunión¨
ORACIÓN AL ESPÍRITU SANTO
Espíritu Santo ahora que comenzamos un nuevo ciclo, te pedimos
que nos ilumines en este tiempo de preparación para poder
alimentarnos con la Palabra que es vida y que nos lleve a vivir la
vigilancia para estar atentos en la espera gloriosa de Jesucristo y
que esto nos despierte una esperanza viva y gozosa de encuentro
personal con Él. Todo esto te lo pedimos por Jesucristo Nuestro
Señor. Amén.
1. LECTURA DEL TEXTO BÍBLICO (Mt 24, 37-44)
¿Qué dice el texto?
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: "Así como sucedió en
tiempos de Noé, así también sucederá cuando venga el Hijo del
hombre. Antes del diluvio, la gente comía, bebía y se casaba,
hasta el día en que Noé entró en el arca. Y cuando menos lo
esperaban, sobrevino el diluvio y se llevó a todos. Lo mismo
sucederá cuando venga el Hijo del hombre. Entonces, de dos
hombres que estén en el campo, uno será llevado y el otro será
dejado; de dos mujeres que estén juntas moliendo trigo, una será
tomada y la otra dejada.
Velen, pues, y estén preparados, porque no saben qué día va a
venir su Señor. Tengan por cierto que si un padre de familia
supiera a qué hora va a venir el ladrón, estaría vigilando y no
dejaría que se le metiera por un boquete en su casa. También
ustedes estén preparados, porque a la hora que menos lo
piensen, vendrá el Hijo del hombre". Palabra del Señor.
Pistas de reflexión
Contexto bíblico
Si queremos comprender mejor este Evangelio, lo ubicaremos
dentro de los discursos escatológicos de Jesús. El texto de hoy
está comprendido en los capítulos 24 y 25 de san Mateo.
Constituyen el último discurso de Jesús, recogido por Mateo. Se
suele llamar discurso escatológico (esjatón = último). Habla de
los últimos tiempos de la historia.
Este discurso escatológico tiene tres partes:
1. Cómo y cuándo será la venida definitiva del Señor y del fin del
mundo (24, 3-44);
2. tres parábolas para indicar las actitudes de la espera ante el fin
(24, 45-25, 30);
3. descripción plástica del juicio final (25, 31-46).
Este discurso escatológico tiene como finalidad orientar a los
discípulos: vigilancia para estar preparados, en el momento
actual. El futuro ilumina el presente.
Texto bíblico
A. Vivir atentos
El Evangelio habla de la manifestación gloriosa del Señor que
siempre está presente en el caminar de los seres humanos. Lo
importante no es como se manifiesta el Señor plenamente, sino
como se encuentran las personas en su situación de vida. Evita
que alguien se siga preguntando por el día y la hora en que
sucederá. Lo más importante es que cuando se manifiesta el
Señor como estamos dispuestos a su encuentro. Por eso esta
esperanza debe generar fidelidad en lugar de miedo o
incertidumbre.
Relativizar y orientar todas las actividades humanas a la luz de
lo que es verdaderamente importante. No dejarnos ahogar por el
activismo, las preocupaciones, lo que va suceder sino vivir el
presente, para fundamentar el futuro. No pensemos que vamos a
comer mañana si todavía hoy no hemos comido.
B. Vivir la esperanza
El Evangelio enfatiza como debe prepararse el ser humano para
este grandioso encuentro. Parte de una comparación muy sencilla
y que en aquel tiempo se entendía perfectamente: en los días de
Noé la gente comía y bebía, etc. Es decir, no hacían nada de
extraordinario. Cuando los seres humanos sólo hacemos lo
ordinario de siempre, comienzan a distraerse seriamente de la
vida y le pierden sentido.
La advertencia de Jesús no es para meter miedo en el corazón, ni
para desilusionarnos. Jesús quiere que vivamos el presente con
cautela, con la luz que el futuro nos envía, aceptándole a Él en el
presente con todas las consecuencias. La esperanza en la venida
final nos debe mantener en pie, aun en medio de nuestras
debilidades y las situaciones dolorosas de injusticia de la
sociedad, que nos hace sufrir.
La esperanza cristiana nos hace mirar el presente con ojos de fe.
Es tiempo de salvación. En la medida en que trabajemos el
tiempo presente estaremos preparando el final de nuestra vida y
de la historia.
Preguntas para la lectura:
¿Qué
¿Qué
¿Qué
¿Qué
¿Qué
¿Qué
le dice Jesús a sus discípulos?
hacia la gente en tiempos de Noé?
sucederá cuando venga el Hijo del hombre?
pide Jesús?
ejemplo les da?
pide Jesús?
2. MEDITACIÓN: ¿Qué me dice el texto?
La presencia permanente del Señor en nuestras vidas, así como la
esperanza de su manifestación definitiva, nos compromete a ser
más responsables ¿En qué nos hace reflexionar este
convencimiento? ¿Nuestra vida tiene sentido si no hacemos de lo
ordinario algo extra ordinario? ¿Cómo ando de esperanza y de
optimismo? ¿Cómo me veo: como persona de optimismo o
pesimismo? ¿En qué fundamento mi esperanza? ¿Qué debe
cambiar en mi vida para que la esperanza brille en mis actitudes y
en mi conducta?
Descargar