Sala Civil Transitoria. Casación N°100-2004 La Libertad. Tercería de propiedad. Lima, veintisiete de octubre del dos mil cuatro. La Sala Civil Transitoria de la Corte Suprema de Justicia de la República, con los acompañados; vista la causa en la audiencia pública en el día de la fecha y producida la votación con arreglo a ley, emite la siguiente sentencia: materia del recurso: se trata del recurso de casación interpuesto por carmen dolly beth paz herrera, contra la resolución de vista de fojas trescientos ciencuentitrés, su fecha veintidós de agosto del dos mil tres, expedida por la primera sala civil de la corte superior de justicia de la libertad, que, revocando la sentencia apelada de fojas doscientos cincuentiocho, del treintiuno de diciembre del dos mil dos, que declara fundada la demanda, la declara infundada; fundamentos recurso: el recurso se sustenta en !a causal prevista en el inciso segundo del artículo trescientos ochentiséis del código procesal civil, invocando como agravios que en el presente proceso se han inaplicado los artículos mil trescientos setentiuno, mil trescientos setentidós, mil quinientos sesentiuno, mil quinientos sesentitrés, dos mil doce dos mil veintidós del código civil, ya que la recurrente recuperó la propiedad del inmueble sub litis al haberse producido la causal de resolución del contrato de compraventa suscrito entre ésta y el co-demandado, jorge portilla barraza; razón por la cual su derecho real es oponible a la medida cautelar trabada sobre el citado inmueble; la argumentación fue amparada mediante resolución de fojas treintiséis del cuaderno formado en ésta suprema corte, de fecha veintisiete de enero del presente año, pero solo respecto de los artículos mil trescientos setentiuno, mil trescientos setentidós, mil quinientos sesentitrés, dos mil doce y dos mil veintidós del código civil, y no en cuanto al artículo mil quinientos sesentiuno del referido código sustantivo por contener una norma adjetiva; considerando: primero: que, la causa de inaplicación de una norma de derecho material implica analizar si la hipótesis legal contenida en la norma cuya aplicación se pretende guarda nexo causal con los hechos establecidos en las instancias de mérito, ya que aplicarla a un caso específico, supone que el hecho concreto se encuentre subsumido en su tipo legal; segundo: que, siendo esto así, corresponde precisar los hechos que se tiene por establecidos y sobre los que se ha emitido juicio en las instancias de mérito; así tenemos que ha quedado establecido, que la actora, mediante escritura pública de compraventa del nueve de marzo de mil novecientos noventiocho, y su aclaratoria del veintisiete del mismo mes y año, inscrita en los registros públicos de la propiedad inmueble de la libertad el tres de abril de mil novecientos noventiocho, dio en venta al demandado, don jorge portilla barraza los lotes número uno y veinte, de la manzana e guión dos, de la calle borodin número setecientos cinco, de la urbanización primavera - trujillo; posteriormente, mediante escritura pública del veintidós de enero de mil novecientos noventinueve, inscrita el veintinueve de enero del mismo año, ambas partes convinieron, en forma voluntaria resolver la venta del inmueble referido, revirtiendo la propiedad dle mismo a favor de la demandante por falta de pago total del precio de venta pactado; en este acto, la accionante declaró conocer la medida cautelar de embargo en forma de inscripción ordenada por el cuarto juzgado civil de trujillo, en el expediente número mil setecientos noventicinco gión noventiocho, según resolución de fecha veintidós de julio de mil novecientos noventiocho, el veinticuatro de ese mismo mes y año; tercero.- que, conforme a lo establecido en el inciso primero del artículo mil ciento dieciocho del código civil, se reconocen las hipotecas legales del inmueble enajenado sin que su precio haya sido pagado totalmente o lo haya sido con dinero de un tercero; asimismo, el artículo mil ciento diecinueve del citado código precisa que las hipotecas a que se refiere la norma antes citada, se constituyen de pleno derecho y se inscriben de oficio, bajo responsabilidad del registrador, simultáneamente con los contratos de los que emanan, entonces al ser la hipoteca legal aquella que la ley une al crédito, no es necesario que se constituya por un contrato expreso; así, se concluye que el derecho del acreedor surge de la inscripción del contrato del cual emana ya que el segundo párrafo del mencionado artículo mil ciento cincuentinueve del código sustantivo, no se extiende a los supuestos previstos en la norma inicialmente citada: cuarto: que, siendo ello así, a la fecha de haberse dispuesto la medida cautelar cuestionada, la tercerista tenía la calidad de acreedora hipotecaria del co-demandado, por el saldo del precio impago; en virtud a ello, era titular de un derecho real frente al derecho crediticio del que emana el embargo, que se trabó sobre el inmueble materia de litis; sin embargo, tal condición de actora, no puede ser opuesta a la del embargante, como veremos en las siguientes consideraciones: quinto: que, al resolverse el contrato de compraventa por mutuo acuerdo de las partes, dicha resolución extrajudicial produce sus efectos a la causa que la motivó, conforme establece el artículo mil trescientos setentidós del código civil, siendo aplicables a dicho acto los efectos previstos en el artículo mil quinientos sesentitrés del referido código; sexto: que, de otro lado, cuando existen derechos de distinta naturaleza como en el presente caso, por un lado el derecho de propiedad alegado por la tercerista y el derivado de una medida cautelar de embargo, éste último no resulta oponible al primero, pese a encontrarse inscrito si el derecho del tercerista data de fecha anterior a la inscripción, conforme se desprende del artículo dos mil veintidós del código civil, en concordancia con el artículo dos mil doce del mismo código; septimo: que, sin embargo, debe tenerse en cuenta que la resolución del contrato es de fecha posterior a la inscripción de la medida cautelar materia de litis; además, los efectos de dicha resolución contractual no pueden perjudicar los derechos adquiridos de buena fe, conforme e establece la última parte del artículo mil trescientos setentidós del código civil, en concordancia con el artículo mil trescientos trece del mismo código, según el cual por el mutuo disenso las partes acuerdan dejar sin efecto un acto jurídico que han celebrado, acuerdo que se tendrá por no efectuado si perjudica el derecho de un tercero; en tal sentido, las alegaciones sostenidas por la recurrente carecen de sustento; sentencia: estando a las consideraciones expuestas y lo establecido en el artículo trescientos noventisiete del código procesal civil; declararon: infundado el recurso de casación interpuesto por carmen dollybeth paz herrera, a fojas trescientos ochentidós; en consecuencia no casaron la resolución de vista de fojas trescientos cincuentitrés, de fecha veintidós de agosto del dos mil tres; condenaron a la recurrente al pago de las costas y costos originados en la tramitación del presente recurso, así como a una multa de una unidad de referencia procesal; en la causa seguida por carmen dollybeth paz herrera contra geiner ronald morales peña y otro, sobre tercería de propiedad; dispusieron se publique la presente resolución en el diario oficial "el peruano", bajo responsabilidad; y los devolvieron.s.s. roman ticona lazarte rodriguez eguscuiza roca santisteban postigo huaco esqueche