CURSO DE ECONOMÍA. DERECHO. Estas notas están orientadas a servir como un primer acercamiento a la Economía. QUÉ ES LA ECONOMÍA. A modo de un primer acercamiento, ver: Video 1: La economía eres tu. https://www.youtube.com/watch?v=t1zUi2n6I2w&feature=youtu.be 1.- Economía y vida cotidiana. La Economía, sin dudas, está instalada en la vida cotidiana, Así lo destaca uno de los más connotados exponentes de esta disciplina.. "La economía es el estudio de la humanidad en su quehacer cotidiano", sostiene Alfred Marshall (1842-1924). En nuestra vida diaria, desde que nos levantamos hasta que volvemos a la cama, estamos realizando actividades económicas. Cualquier día de nuestra vida necesitamos un gran número de bienes y de servicios que otros han generado para nuestro consumo: una casa, agua, calefacción, comida, ropa, transporte, libros y cuadernos, la universidad con sus profesores, el computador, el teléfono móvil, y un largo etcétera. En el siguiente vídeo se verá una serie de actividades económicas en las que participamos diariamente, y que constituyen lo que llamamos "Economía". Video 2: Economía y vida cotidiana. YouTube "claudioctay". https://www.youtube.com/watch?v=pjnGQxw0WzE Observación: Conforme al video, desarrollar el punto 1 de “Actividades Tema 1”, lo que constituye una prueba integral (el resto se deberá entregar al avanzar progresivamente en el Tema 1). Las actividades económicas se llevan a cabo para satisfacer las necesidades humanas mediante el consumo de bienes y servicios. Pero para que el consumo sea posible es necesario producir esos bienes y transportarlos hasta las tiendas donde podemos comprarlos, es decir, hay que distribuirlos. Y, yendo un poco más atrás, para fabricar bienes se requiere una serie de recursos: materias primas, energía, trabajo humano, herramientas y maquinaria, edificios, etc. Es decir, en última instancia, para satisfacer las necesidades humanas se necesitan recursos. De lo expuesto y en resumen, las actividades económicas son el consumo, la producción y la distribución de bienes y servicios para satisfacer las necesidades humanas. Todas ellas tienen en común el uso de recursos escasos, limitados, por lo que llevan el calificativo de "económicas". 2. La escasez de recursos y la necesidad de elegir. El problema económico básico es la insuficiencia de recursos para satisfacer todas las necesidades y deseos humanos. Las necesidades humanas tienen la característica de ser ilimitadas, esto es, en el contexto del análisis económico, una vez cubiertas las más básicas, surgen otras de orden superior, luego otras, y así casi, o tendiendo hasta el infinito. Uno de los fines de toda sociedad es la satisfacción de las necesidades de sus propios ciudadanos. Pero para conseguirlo hay que disponer de una serie de recursos que puedan convertirse en bienes y servicios aptos para el consumo de la población: alimentos, vestidos, casas, carreteras, hospitales, escuelas, etc. Los recursos productivos, por tanto, son todo aquello necesario para producir bienes y servicios: materias primas, trabajo, maquinaria, energía, construcciones, capital financiero, etc El problema es que los recursos productivos son limitados, frente al carácter ilimitado de las necesidades y los deseos que hay que satisfacer. Existe, por tanto, en la vida económica una escasez relativa, como consecuencia de esta contradicción: con los recursos disponibles no se pueden atender todas las necesidades. Este es el problema económico fundamental. Si los recursos fueran infinitos o bien las necesidades humanas fueran limitadas, no existiría el problema económico, y se podría dar satisfacción a las necesidades de toda la sociedad. Video 3: Escasez. Tomado del usuario de YouTube "Edgardo Parra" https://www.youtube.com/watch?v=PyZp7kjBL1o&feature=youtu.be La escasez es un término relativo, debido a que se miden los recursos en comparación a las necesidades que se pretenden satisfacer, y, en este sentido, esos recursos son siempre insuficientes, limitados, o escasos para cubrir todas las necesidades y todos los deseos. Sin embargo, la escala de la escasez es diferente para las distintas personas o sociedades. Por ejemplo, para un pobre o para un rico: mientras que el primero la sufre de forma dramática, el segundo la vive como una frustración por tener que privarse de algún deseo sofisticado e incluso innecesario. En cualquier caso, y dado que las necesidades tienen un carácter cultural, la escasez existe para todos, aunque a veces lo olvidemos y vivamos como si los límites no existieran. El profesor Gabriel Zanotti explica en el siguiente vídeo el olvido de la escasez, el sueño humano de vivir la vida como si tal escasez no existiera. Observación: Después de verlo, realizar el punto 2 de “Actividades Tema 1”. Video 4 :El olvido de la escasez. GABRIEL ZANOTTI https://www.youtube.com/watch?v=2EQxKE_UuC4&feature=youtu.be La actividad económica surge precisamente para superar el problema de la escasez de recursos. La imposibilidad de obtener todo lo que deseamos nos obliga a elegir qué vamos a producir con esos recursos limitados, qué necesidades se van a satisfacer y cuáles no. Los distintos protagonistas de la actividad económica, o agentes económicos, se ven obligados a tomar decisiones diariamente, debido a que su limitación de recursos les impide comprar todo lo que quisieran. Por el contrario, tienen que elegir qué hacer con su limitada cantidad de dinero y qué no hacer. En definitiva, tienen que establecer prioridades decidiendo lo que es más conveniente para ellos. Las familias y los individuos son los agentes dedicados al consumo y tienen que elegir en qué bienes gastar sus ingresos, siempre limitados: comida, casa, ropa, videojuegos, música, etc. O decidir cómo utilizar su tiempo: dedico la tarde a estudiar o a hacer deporte, o quizás voy al cine con los amigos... porque el tiempo, es decir la vida misma, es otro recurso escaso. Las empresas son los agentes económicos encargados de la producción y distribución de los bienes y servicios que consumen las familias. Ellas deben tomar decisiones sobre cómo invertir su presupuesto financiero, por supuesto limitado: qué bienes producir, cuántos trabajadores contratar, cuantos equipos adquirir, etc. El tercer agente económico es el Sector Público, que tiene carácter colectivo y actúa tanto como consumidor como productor. También este agente, generalmente los gobiernos, están obligados a tomar decisiones sobre la forma de gastar los ingresos públicos, los impuestos: viviendas, carreteras, escuelas y universidades, centros de salud, etc. En definitiva, cada uno de nosotros, en nuestro papel de consumidores o algunos en su rol de empresarios, tomamos todos los días numerosas decisiones económicas individuales. Estas decisiones, unidas a las que toma el gobierno en representación del conjunto de la sociedad, dan un resultado económico final (a nivel nacional, regional o supranacional). La Economía estudia la forma en que los individuos y las sociedades realizan sus elecciones económicas. Por ello se le suele calificar como la ciencia de la decisión. El siguiente vídeo muestra esta idea de la necesidad de elegir y de establecer prioridades: VIDEO 5: Escasez y elección. YouTube "claudioctay" https://www.youtube.com/watch?v=w-GiVkryGss&feature=youtu.be 3. Los distintos tipos de necesidades La necesidad es la sensación de carencia de algo, junto con el deseo de satisfacer dicha carencia. Para que exista una necesidad, por tanto, no basta con sentir una carencia sino que tiene que darse también el deseo o voluntad de cubrir esa carencia. Por ejemplo, un monje budista puede sentir hambre (carencia de alimento) pero, debido a su ayuno voluntario, no tiene deseo de comer; en este caso no se puede decir que el monje "necesite" comer. CARENCIA + DESEO = NECESIDAD Las necesidades económicas son aquellas cuya satisfacción exige el empleo de recursos escasos La mayoría de las necesidades humanas tienen carácter económico, puesto que para satisfacerlas se requieren recursos que son escasos. Sin embargo, no todas tienen este carácter. Por ejemplo, pasear, o tomar el sol pueden ser necesidades que no implican el uso de recursos escasos, más allá del tiempo dedicado a satisfacerlas. Pero hemos dicho que el tiempo es nuestro recurso más preciado, ¡nuestra propia vida! ¿Entonces?. Por otra partes los seres humanos tenemos otras necesidades de orden social o anímico: amig@s, afecto, aceptación... que tampoco se pueden considerar necesidades económicas. Se suelen distinguir dos tipos de necesidades humanas, aunque muchas veces los límites entre una y otra categoría no están claros. a. Necesidades básicas o primarias: son aquellas que es imprescindible satisfacer para sobrevivir, y son comunes a todo ser humano, como alimentarse, vestirse y tener una vivienda. b. Necesidades secundarias: son aquellas que no son imprescindibles para la supervivencia pero que su satisfacción mejora el bienestar de las personas. Como afirmaba el profesor Zanotti, son esencialmente culturales, es decir, dependen del momento histórico, la zona geográfica, la clase social, el sistema económico, etc. En las sociedades económicamente desarrolladas la idea de bienestar ha ido evolucionando y se ha ampliado el concepto de necesidades básicas. Por ejemplo, hoy día la educación y la salud se consideran imprescindibles, y se entienden como necesidades primarias también aquellas que hay que satisfacer para vivir dignamente como ciudadanos. El bienestar humano no se concibe como la mera supervivencia, sino como el desarrollo integral de la persona (económico, social y cultural). Sin embargo, en la mayoría de los países del mundo, los menos desarrollados, ni siquiera están cubiertas las que se han llamado "necesidades básicas" en la clasificación. Las cifras de muertes diarias por falta de alimento o de agua potable son escalofriantes. En cualquier caso, a medida que una sociedad se desarrolla, también lo hacen sus necesidades, que evolucionan hacia formas más sofisticadas, como lo que aparece en el dominio del ocio, en las comunicaciones o en el arte. Viene bien conocer la propuesta de Abraham Maslow, norteamericano, psiquiatra y psicólogo humanista, considerado como el iniciador de la denominada “tercera fuerza de la psicología”, “la humanista” y creador de la “Teoría de la autorrealización”. Maslow en 1943, formuló “A Theory of Human Motivation”, en la que define una “jerarquía de necesidades humanas” y argumenta que a medida que los individuos van satisfaciendo las necesidades más básicas, desarrollan necesidades y deseos más elevados. La escala de las necesidades que postula Maslow, es descrita a menudo como una pirámide que consta de cinco niveles. La idea básica de esta jerarquía es que las necesidades más altas ocupan nuestra atención sólo cuando se han satisfecho las necesidades inferiores de la pirámide. Es decir, hasta que no cubro una necesidad de un nivel inferior, no sentiré las necesidades del siguiente nivel. En e-aula pueden ver una síntesis de lo que sugiere Maslow, bajo el título “Clasificación de las necesidades”. En el siguiente vídeo se relacionan las necesidades humanas y el desarrollo económico. Video 6: LAS NECESIDADES BASICAS Y DESARROLLO ECONOMICO. YouTube "claudioctay". https://www.youtube.com/watch?v=NM3EYcBT31Y&feature=youtu.be Observación: Una vez visto, realizar el punto 3 de “Actividades Tema 1”, es decir, del taller que corresponde a la primera integral. 4. Los bienes y servicios que satisfacen necesidades. El fin de la actividad económica es la satisfacción de las necesidades humanas, y para cumplir este fin se precisan bienes y servicios. Los bienes y servicios son, entonces, cualquier cosa adecuada para satisfacer las necesidades humanas. La distinción entre ambos se debe a su materialidad: los bienes son tangibles (como un automovil), mientras que los servicios son intangibles (como una visita médica). En Economía se llama utilidad a la capacidad de los bienes y servicios para satisfacer necesidades. Es decir, la utilidad mide el grado de satisfacción que nos produce el consumo de un bien o servicio y, por tanto, cuánto lo valoramos. Cuando pagamos un precio a cambio de un bien, estamos valorando su utilidad en esa cantidad de dinero. En cambio, si consideramos que un bien no nos resulta útil, no estaremos dispuestos a pagar nada por él. Aparece por cierto de interés observar la relación entre utilidad y precio. Los bienes y servicios se pueden clasificar atendiendo a diversos criterios. criterios. Estas son las distintas clasificaciones que suelen hacerse. Criterio Según la cantidad disponible Tipo de bien Libres Ejemplo El aire Económicos El agua potable De consumo: o Perecederos o Duraderos o o o El pan Una lavadora De capital: o Físico o Financiero o o Un computador Por su naturaleza Intermedios El acero Finales Un cuchillo Complementarios Café y leche Sustitutivos Café o té Independientes Azúcar y coche Públicos Un parque Privados Un coche Según su función Por su relación Según su propiedad Observa que un mismo bien puede pertenecer a las dos categorías de un mismo criterio en función de su utilización. Pensemos, por ejemplo, en un automóvil. Puede ser un bien de consumo o de capital, si lo utiliza una persona particular en el primer caso, y si lo usa una empresa como medio de transporte en el segundo. O puede considerarse un bien privado o público según quién sea su propietario. El siguiente vídeo, realizado por el espacio EfeVerde de RTVE La 2, ilustra la escasez creciente del agua potable a nivel mundial. Sin embargo, en nuestras sociedades se utiliza como si fuera un recurso libre, ilimitado. Video 7: EL AGUA UN RECURSO ESCASO. https://www.youtube.com/watch?v=D-lwZ-qfaXo&feature=youtu.be Observación: Visto el video y reflexionado sobre lo sugerido, desarrolle el punto 4 de “Actividades Tema 1”. Para resolver deben leer el informe de la ONU "Agua para todos, agua para la vida", disponible en e-aula y enviado por correo. 5. La Economía como ciencia. Se dice que la economía es la más vieja de las artes y la más joven de las ciencias. Desde los albores de la humanidad las personas se han enfrentado al problema fundamental de la escasez de recursos en comparación a sus necesidades y, por tanto, han tenido que tomar decisiones económicas, dando prioridad a unos bienes sobre otros. Sin embargo, como ciencia, la economía no nació hasta el S.XVIII de la mano de Adam Smith, primer autor que estudió la actividad económica aplicando el método científico. La Economía es una ciencia social porque se ocupa del estudio de los seres humanos, su naturaleza, sus actividades, sus instituciones y su comportamiento. En contraposición, las ciencias naturales se ocupan del estudio del mundo físico. Esta diferencia en su objeto de estudio tiene importantes consecuencias en la metodología de ambos tipos de ciencia: Las ciencias sociales tienen serias dificultades para la experimentación, dada la imposibilidad, en muchas ocasiones, de reproducir un fenómeno social concreto. El ser humano y sus relaciones sociales es complejo, variable y difícil de estudiar, y en ocasiones impredecible en su comportamiento. Las ciencias naturales, sin embargo, pueden llevar a cabo experimentos controlando las condiciones del fenómeno estudiado en un laboratorio. Esta es la razón por la que a las primeras se les denomina también ciencias "no experimentales" y a las segundas "experimentales". Los seres humanos, y los economistas también, están influidos por sus circunstancias personales, sociales y culturales, por lo que es difícil ser objetivo y liberarse de los prejuicios. En el caso de la Economía existe una dificultad adicional, que surge como consecuencia de la propia naturaleza de su objeto de estudio a escala social: la distribución de los recursos escasos en la sociedad, terreno abonado para el conflicto de intereses sociales, que se traduce en un fuerte componente ideológico de la ciencia económica. De hecho, inicialmente se le llamó Economía Política, pasando más tarde a denominarse Economía o Teoría Económica, eliminando el importante componente político. La influencia de la ideología del científico económico en el resultado de sus investigaciones se muestra en la presentación sobre el método científico que contiene la web de Economía elaborada por la Universidad de Málaga. Teorías, leyes y modelos económicos. (Web Universidad de Málaga) Antiguamente se creía que era posible llegar a conocer la verdad de las cosas mediante procesos de razonamiento lógico. Se llama deducción a un proceso exclusivamente mental que partiendo de unas premisas o informaciones iniciales conduce a unas conclusiones. Durante muchos siglos los filósofos intentaron encontrar reglas formales que garantizasen que un proceso deductivo conducía a la verdad. Actualmente los filósofos del conocimiento niegan que sea posible que la verdad de una afirmación quede garantizada por la forma en la que ha sido deducida. Pero tampoco se acepta actualmente que el empirismo garantice la verdad. Se llama empirismo al método de conocer la verdad basado en la experiencia, en los hechos, en la historia. Los teóricos del conocimiento han diseñado unos esquemas que supuestamente describen los procesos que sigue el científico en su trabajo. El punto de partida es la realidad, los hechos económicos tal como se producen en la sociedad humana. El científico los recoge, los mide y, mediante un proceso lógico que se conoce con el nombre de inducción, establece unas hipótesis. A partir de ellas, mediante un proceso deductivo, propone unas leyes o teorías explicativas que permiten predecir sucesos reales. La contrastación de esas predicciones con la realidad confirmará la validez de las hipótesis y teorías o establecerá la necesidad de su modificación. Ejemplo. Recogida de datos: Un científico realiza una encuesta entre la población de un país en la que pregunta por los ingresos mensuales que obtienen las familias y el porcentaje de esos ingresos que se ha ahorrado. Establecimiento de hipótesis: A la vista de los datos el científico supone que la gente ahorra más cuanto mayores son sus ingresos. Deducción de leyes: El científico propone una fórmula matemática como función de ahorro creciente y predice el aumento que se producirá en el ahorro de todo el país como consecuencia del crecimiento anual de la renta. Contrastación: Al año siguiente, realizará de nuevo la encuesta para ver si los nuevos datos, tras el aumento de las rentas del país, se ajustan a sus previsiones. Los datos económicos suelen presentarse de dos formas: como series temporales, magnitudes que cambian de valor con el paso del tiempo, o como datos de corte transversal, en los que se muestran los valores que adoptan las magnitudes en un momento preciso del tiempo en distintos lugares o en distintos grupos sociales. En las series temporales se utilizan frecuentemente los números índice que se elaboran tomando el valor adoptado en un año determinado como base, y mostrando los siguientes en relación a éste. (Nota:: el Premio Nobel de Economía del año 2003 fue otorgado a Robert F. Engle y a Clive W.J.Granger por su trabajo con series temporales.) La recogida de datos económicos requiere la utilización de métodos matemáticos muy avanzados. Habitualmente se utilizan muestras aleatorias cuyos resultados son tratados y contrastados reiteradas veces. Los técnicos estadísticos y económetras son profesionales que dedican su vida a ese trabajo y a refinar continuamente sus métodos. Los datos recogidos servirán para adoptar decisiones importantes en materia de política económica por lo que requieren el mayor esmero. En ocasiones se acusa a los datos oficiales sobre inflación o paro de estar manipulados por intereses políticos. Alguna razón existe para ello ya que el político puede encontrar que algunos datos son electoralmente inconvenientes, pero le resultará mucho más fácil y práctico tergiversar su interpretación, dar explicaciones favorables, que modificarlos. Y cuando existe manipulación de los datos, consiste generalmente en un "fine tunning", en pequeñas modificaciones, quizá tan sólo en retrasar el impacto de alguna medida para que no aparezca reflejado en los índices hasta el mes o año siguiente. La lectura de esos datos y el conocimiento general de la realidad puede sugerir al investigador de la economía alguna hipótesis explicativa de las razones por las que los datos ofrecen esa determinada magnitud o sucesión. Esas hipótesis son las que permiten organizar los datos y dan lugar a la formulación de teorías, leyes y modelos. Las leyes expresan las regularidades encontradas en las series de datos. Las teorías son una forma de organizar las hipotéticas leyes y facilitan la comprensión del funcionamiento de la economía. Los modelos, finalmente, son artefactos intelectuales basados en las teorías que permiten realizar estimaciones de los efectos que se pueden seguir de cambios en algunos datos reales. Los modelos son muy utilizados por la ciencia económica. Están basados en unos supuestos que simplifican la realidad y formados generalmente por ecuaciones matemáticas que relacionan distintas variables. Se llaman variables exógenas aquellas cuyos valores deben ser tomados de la realidad y variables endógenas aquellas cuyo valor es deducido al operar con las ecuaciones del modelo. Un modelo tiene las mismas funciones que el prototipo mecánico de una máquina. El prototipo de un Automóvil, por ejemplo, puede que carezca de partes muy importantes, que no tenga motor ni asientos, si lo que se trata es de probar en un túnel de viento la resistencia de la carrocería. Los modelos económicos son también una representación muy simplificada de la realidad en la que no están incluidos hechos que en la práctica serán muy significativos. Una de las críticas más frecuentes a la ciencia económica es que sus resultados se obtienen a partir de modelos tan simplificados que no se parecen en nada a la realidad. Para justificar la conveniencia de los modelos la economía afirmó que de nada nos serviría el plano de una ciudad si estuviera a escala 1-1, si tuviera dibujada cada señal de tráfico a tamaño natural. Ejemplo: un modelo que representase el comportamiento del consumidor relacionaría unas variables exógenas tales como la renta del sujeto y los precios de los productos; las ecuaciones se basarían en hipótesis y supuestos tales como la racionalidad del sujeto y su objetivo egoísta de obtener la máxima satisfacción al consumir; las variables endógenas, los resultados del modelo, serían las cantidades de bienes adquiridas. Las teorías, leyes y modelos permiten realizar predicciones económicas susceptibles de ser contrastadas con la realidad. Las predicciones económicas son probabilísticas y no deterministas. Esto quiere decir que un modelo económico no puede predecir con exactitud cuál será el consumo de un individuo determinado pero sí puede prever el comportamiento de grandes agregados de consumidores estableciendo unos márgenes entre los que estará comprendido y estimando la probabilidad de que esa predicción se cumpla. Ejemplo: no se puede saber las decisiones que tomará Fulano de Tal si el precio de la mantequilla aumenta en un 10%, pero sí se puede predecir que el consumo de margarina aumentará entre un 17% y un 23% con una probabilidad del 98,7%. El proceso global, inducción-deducción-contrastación, tal como se ha descrito, merecería los calificativos de limpio, puro, transparente, claro... incluso podría parecer sencillo. Desgraciadamente (o afortunadamente) los científicos no son tan asépticos. Los científicos son seres humanos, no robots; tienen intereses propios, sentimientos, ideas e ideologías políticas, de las que no pueden desprenderse como el que se quita una chaqueta cuando se ponen a trabajar. Los prejuicios, las ideas previas existentes en la mente del investigador que estudia la sociedad humana, influyen inevitablemente en cada una de las etapas del proceso. Ya en el momento de elegir el tema que se va a estudiar influirá el contexto social y la ideología del individuo. La realidad está formada de innumerables hechos y no hay un criterio "aséptico" sobre qué hechos hay que seleccionar. El proceso de medición, de valoración de los datos también recibe una fuerte influencia de los juicios de valor preexistentes. Todo el círculo está por tanto viciado desde el principio. Y no se puede esperar que la contrastación redima ese pecado original ya que, al requerir de nuevo recogida y valoración de datos, consiste en demasiadas ocasiones en la búsqueda de justificaciones. Así se puede entender la pervivencia durante decenios de escuelas de pensamiento enfrentadas que proponen soluciones opuestas a los mismos problemas. Pero eso no quiere decir que todas las propuestas y teorías económicas deban ser tratadas con el mismo rasero. El economista o científico social honesto partirá de un reconocimiento de sus propias ideas y limitaciones. Después, si se esfuerza en disminuir en lo posible la influencia de su ideología sobre su trabajo, podrá alcanzar resultados válidos, es decir, utilizables por otros. Quizá la mejor medida de la calidad de un trabajo científico es el número y la diversidad ideológica de los sucesores que utilizan sus resultados. John Neville Keynes propuso distinguir entre Economía positiva y normativa. La Economía positiva es la que trata simplemente de conocer y describir la realidad tal como es. La Economía normativa, en cambio, propone la dirección en que debe modificarse la realidad y los medios para intervenir sobre ella. Para muchas generaciones de economistas la actitud ideal ha sido la positivista; hacer afirmaciones del tipo "se debe ..." manchaba la imagen aséptica del buen economista. Pero actualmente se aceptan dos reservas ante esa actitud. Por una parte, que tras cualquier formulación de tipo positivo se encuentra inevitablemente una proposición normativa, que, como hemos visto arriba, la pura descripción de la realidad estará manchada desde el principio por el color del cristal con que se mire. Por otra parte hay que aceptar que el objetivo del conocimiento de la sociedad es operar sobre ella. No se trata sólo de conocer la realidad sino de transformarla. La mayor limpieza en la actividad del economista estará, no en el infructuoso intento de evitar la influencia ideológica, sino en reconocerla y proclamarlaLa Economía se relaciona con el resto de ciencias sociales, como la filosofía, la historia, la política, la psicología, la sociología o el derecho. Pero, a diferencia de éstas, utiliza como herramienta las matemáticas, lo que le añade una cierta dificultad procedimental. Esta combinación de saberes la expresó el economista J.M. Keynes de la siguiente manera: