- FAI unha REFLEXIÓN sobre os SEGUINTES TEXTOS e RELACIÓNAOS cos puntos 2.1 e 2.2 do apartado 2.Cosmovisións científicas do universo (páx. 6-7) A información a utilizar será EXCLUSIVAMENTE a dos textos, explicacións na aula e a dos apuntamentos (os traballos feitos con información obtida da rede non será suxeitos a cualificación). A reflexión será un ensaio, escrito en Times New Roman 12, extensión mínima dunha carilla- máximo de dúas, formato PDF no que se inclúa: resumo-explicación das ideas cada un dos textos relación entre os diferentes textos relación existente entre os textos e o contido dos apuntamentos conclusión persoal Así mesmo, na vosa reflexión deberedes de tratar as seguintes cuestións: -Diferenzas máis importantes entre a cosmovisión aristotélica-ptolemaica e a cosmovisión da Modernidade . - Características básicas da ciencia moderna e as aportacións máis importantes de Copérnico, Kepler, Galileo e Newton. -Por que a Igrexa non acepta a teoría de Copérnico e doutros representantes da Cosmovisión Moderna? TEXTOS 1.- “Un pensador de la antigüedad Aristarco de Samos defendió el heliocentrismo contra todo el pensamiento propio de su época; sin embargo, su tesis no volvió a ser defendida hasta la modernidad con Copérnico” 2.- “El cosmos de Aristóteles era una esfera finita, con su centro en la Terra y limitada por la esfera de las estrellas fijas y el primer Motor…, la fuente original de todos los movimientos del Universo. En el centro del Universo estaba la Tierra esférica, y rodeándola estaban las distintas esferas, dispuestas como las capas de una cebolla. En primer lugar venían las envolturas esféricas del agua, aire y fuego… Luego, la Luna, Mercurio, Venus... Y más allá de la esfera del último planeta venía la de las estrellas fijas” (C. Crombie: Historia de la ciencia) 3.-“No nos avergonzamos al defender que los planetas describen una gran órbita alrededor del Sol, que es el centro del mundo, y lo que parece ser un movimiento del Sol es, a decir verdad, un movimiento de la Terra; ...pero el tamaño del mundo es tan grande que la distancia de la Terra al Sol, aunque apreciable en comparación con las órbitas de otros planetas, es cómo nada cuando se compara a la esfera de las estrellas fijas... Y la orden de las esferas es entonces como sigue, comenzando por las más superiores. La primera y más alta esfera es la de las estrellas fijas, que se contiene a ella misma y todo el resto, que, es inmóvil, siendo el lugar del universo a lo que se refieren el movimiento y los lugares de todos los astros...Luego sigue el primer planeta Saturno...; luego Júpiter...; luego Marte...; en cuarto lugar la Tierra...; en quinto lugar viene Venus...; en sexto Mercurio...Pero en medio de todo está el Sol... Así, en realidad, el Sol, sentado en el trono real, dirige la familia de los astros” (N. Copérnico: De Revolutionibus Orbiun Celestium) 4.- “El ser humano, en el transcurso de los siglos modernos, vio castigado su orgullo por tres graves heridas procedentes de la investigación científica. La primera, de orden cosmolóxico, fue causada por Copérnico cuando afirmó que la Tierra era de menores dimensiones que el Sol y que se movía alredor de este: la Tierra ya no era el centro del Universo” (S. Freud: Introducción al Psicoanálisis) 5.- “Yo Galileo, de 70 años de edad, constituido personalmente en juicio y arrodillado ante vosotros Rvdmos. Cardenales e Inquisidores juro que siempre creí todo lo que sostiene y predica la Santa Iglesia, por lo que debo abandonar la falsa opinión de que el Sol es el centro del mundo y no se mueve, y que la Tierra no es el centro del mundo y se mueve, y que no podía sostener, defender ni enseñar de ninguna forma esta falsa doctrina… Abjuro, maldigo y detesto estas herexías, y en general cualquiera otro error o herexía contraria a la Santa Iglesia y que si conozco a alguno que sea sospechoso de herexía lo denunciaré a este Santo Oficio. Juro igualmente y prometo cumplir todas las penitencias que me sean impuestas por este Santo Oficio… Yo Galileo Galilei, en testimonio de la verdad escribí la presente abjuración y la recité palabra por palabra en Roma, en el convento de Minerva, este 22 de junio de 1633” (Abjuración de Galileo Galilei)
