LECCIÓN Nº 2 Enero 2021. “Dios restituye lo se perdió” Introducción Muchas de las personas que vienen a la iglesia están contentas porque Dios les ha perdonado sus pecados y van a ir al cielo, pero mientras tanto viven una vida de angustia de tristeza y de miseria creyendo que es el destino que le ha tocado, la biblia dice que satanás vino para hurtar y matar y destruir (San Juan 10: 10) pero Jesús dijo yo he venido para que tengan vida y vida en abundancia y esta vida tiene que ver con el plan de Dios de restituirnos todo lo que hemos perdido. Muchas de estas pérdidas pueden haber sucedido por descuidos o malas decisiones o tal vez el diablo nos robó o nosotros mismo la entregamos por desobediencia o pecado, o por cuestiones naturales como la pandemia del virus que ha causado perdidas de trabajos, de salud. Desarrollo 1. Tiempo de tristeza. Joel 1: 4 El libro del profeta Joel nos muestra que hubo un tiempo difícil, de mucho dolor, el conflicto había afectado también al pueblo de Dios, el mal había acechado, los problemas habían venido. 2. Dios nunca deja las cosas a media. Joel 2:18 - 19 Dios tiene un plan y ese plan lo va a llevar a cabo, Dios nunca deja las cosas por la mitad y Él se duele por el sufrimiento del hombre y le ofrece al hombre la oportunidad de la restitución de todas aquellas cosas que han perdido. 3. Tiempo de restitución. Joel 2: 23 – 29 Dios mandaría la lluvia temprana y tardía para la siembra y la cosecha, el pueblo de Dios comería hasta saciarse y les daría todo lo que necesiten. Este 2021 será un tiempo de restitución, no lloraremos por lo que pasamos, por lo que sufrimos sino que nos alegraremos porque Dios nos devolverá todo. El Señor no solo pondrá un freno y barrerá con todo aquello que trae angustia y dolor sino que está en marcha el plan rescate para devolvernos todo. Conclusión Joel 2: 21 El Señor se encargará de traer liberación sobrenatural, de restituir lo que hemos perdido. Cuando el pueblo buscó a Dios y se volvió a Él, Dios que no duerme se encargó del devastador para destruirlo. Es por eso que no debemos tener temor, alegrémonos porque Dios obrará en nuestro favor.