Mesas de trabajo convocadas por el Observatorio Ciudadano del Agua y Saneamiento (OCAS) El Observatorio Ciudadano del Agua y Saneamiento ---OCAS-SMA--- inició su programa de mesas de trabajo del año invitando a representantes de la Dirección de Ecología de SMA, el Instituto de Ecología del estado de Guanajuato, la Universidad de Guanajuato-campus Irapuato-Salamanca, el Charco del Ingenio, Salvemos Río Laja A.C. y Asociación de Hoteleros para acordar acciones sobre uno de los temas más apremiantes de la región: sequía y desertificación. Lo anterior se desprende de Los Diálogos del Agua sostenidos a lo largo del 2013 como parte de la campaña para la conservación AguaVida SMA considerando como tarea insoslayable reunir a todos los sectores de gobierno, científicos, sociedad civil, empresarios y productores con el fin de alcanzar acuerdos que resuelvan la problemática del agua en San Miguel de Allende. El pasado 24 de junio los invitados se reunieron en el Hotel Mansión Virreyes donde de manera conjunta resumieron cuatro puntos que deben ser atendidos de inmediato: la insuficiencia de presupuestos para responder a la creciente sequía y desertificación de la región; la ausencia de una perspectiva humana que transforme visiones y acciones en la población; una organización ciudadana que conquiste territorios de acción que el estado no alcanza a cubrir; la articulación de acciones y políticas del estado que no logran ponerse de acuerdo. Por lo anterior, quedó claro que la ciudadanía organizada, junto con las instituciones académicas y gubernamentales deberá establecer un intercambio de experiencias, así como mapear y cartografiar los proyectos piloto estatales exitosos que están atendiendo la deforestación y erosión dramática de la zona. De ello se derivaría una red estatal de proyectos de restauración de suelos con la colaboración de todos los sectores sociales, oficiales y académicos. Sin un diálogo continuo con los diversos sectores de gobierno para incentivar visitas de campo donde se pueda apreciar y entender las distintas dinámicas y estrategias de restauración, tampoco se podrá diseñar un mecanismo propio de comunicación y educación ambiental que trascienda los programas oficiales ya establecidos. Si bien existen tecnologías y procedimientos para recuperar el deterioro ambiental, estos existen únicamente porque persiste el abuso y desaprovechamiento de los recursos naturales. Por lo anterior, se concluyó que el problema básico del deterioro ambiental es uno de consciencia y por ello la cultura del agua deberá permear desde el paternalismo de estado que impide que las zonas rurales se conviertan en espacios autosustentables, hasta el concepto depredador de desarrollo que manejan productores, empresarios y gobierno por igual. Se dijo que la agricultura puede dar un giro hacia la diversidad local. La globalización no es pensar en un solo monocultivo para todos, sino fomentar la diversidad local para que se conozca en el resto del mundo. Se reconoció que todo desarrollo urbano también debe regirse por los principios del Plan de Ordenamiento Ecológico Territorial, una estructura validada mediante consulta pública. Por otro lado, para articular las políticas dispersas en la gestión pública, es imprescindible revisar la legislación y sus contradicciones internas. Quedó claro también que OCAS debe propiciar mayores acuerdos entre investigadores, ambientalistas y políticos. Cada uno tiene su verdad y cada uno aporta su solución generando desencuentros la mayor de las veces. Finalmente, si el problema es igualmente de recursos y presupuestos, habría que revisar las prioridades para distribuir ese presupuesto que está minimizando el apoyo para la reforestación y recuperación de suelos, mientras que la mayor parte se aplica en gastos de infraestructura hidráulica. La organización ciudadana tendrá, por tanto, que construir una red de esfuerzos individuales para encauzar las políticas públicas hacia comportamientos menos agresivos, a la vez que crear sistemas paralelos con de la sociedad civil, los productores y comunidades indígenas que luchan por una ética integrada al medio ambiente. El tema de sequía y desertificación, abordado en esta primera mesa, planteó las causas básicas de deterioro y su impacto en la degradación del acuífero así como en los cuerpos de agua superficial de la región, temas que serán abordados en las siguientes reuniones de trabajo durante los meses de agosto y octubre respectivamente. Para mayores informes visite: www.aguavidasma.org