MOLESTIAS COTIDIANAS

MOLESTIAS
COTIDIANAS
INTRODUCCIÓN A LOS PROYECTOS
Marta Marín y Paula Pérez
21/12/2013
INTRODUCCIÓN A LOS PROYECTOS
Hoy en día vivimos en una sociedad que convive con molestias cotidianas que abarcan
nuestro día a día. Molestias que tenemos tan asimiladas que forman parte de nuestras
vidas, de tal manera que no somos conscientes o pasamos por alto, o bien, que no se han
encontrado soluciones para mejorarlas o eliminarlas. Por este motivo, nosotras
queremos diseñar o rediseñar un producto que facilite una mayor comodidad a las
personas a partir de una molestia.
Tras una intensa y minuciosa observación sobre todas las actividades y pasos que
realizábamos durante aproximadamente un mes, hemos coincidido en estas molestias:
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Cuando aparcas a un parking de centro comercial (grande) a veces no te
acuerdas de dónde has dejado el coche o bien cuando no quieres entrar en un
parking es un molestia ir dando vueltas y vueltas para encontrar un sitio vacío.
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Debido a los posibles retrasos o adelantos de minutos que puede llevar un
autobús, cuando llegas a la parada no sabes si ya ha pasado y si todavía está al
pasar y además con bastante retraso.
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A veces cuando suena el despertador no lo escuchas debido a un sueño
profundo, por eso podría hacerse un cojín despertador vibrador.
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Perder uno de los calcetines de un par.
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Cuando llueve las alfombras no quitan adecuadamente el agua que pude ensuciar
las casas.
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Cuando se abre la puerta principal de casa se va el calor/frío.
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Timbre es irritante.
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Cuando hay que hacer manualidades con pequeños objetos el pegamento los
ensucia.
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Las gafas provocan sudores entre cejas.
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Es muy incomodo ir a recoger las pelotas de fútbol cuando se ha hecho un tiro
largo.
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Por la noche y en ocasiones durante el día no ves lo que hay dentro de un bolso
y no encuentras nada.
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Es inevitable dejar huellas en el celo que harán que éste pierda su función de
pegar correctamente.
INTRODUCCIÓN A LOS PROYECTOS
Vistas estas propuestas para iniciar un proyecto de elaboración de un producto para su
mejora, hemos escogido la molestia del celo en cuanto a manualidades.
EL CELO COMO MOLESTIA
El celo es una cinta de papel de plástico transparente adhesiva que se utiliza desde hace
muchos años. Sin embargo, nunca se ha planteado como facilitar su uso o mejorarlo.
Cuando se realizan manualidades que requieren un nivel de presentación minucioso, el
celo tiene un inconveniente y, dado a que no se han creado soluciones mejores, los
mecanismos que ayudan a cortarlo y a no perder su cabo no solucionan que se queden
huellas en él, dificultando así su adhesión.
Las soluciones que hemos encontrado las expondremos mediante dibujos que ayuden
entender su funcionamiento. En primer lugar, el iCelo:
Como podemos observar, es un mecanismo no muy complejo que con pocos añadidos y
cambios en su mecanismo podemos conseguir un resultado muy placentero. Su
estructura es muy similar al objeto ya creado que sujeta el celo y lo cortas presionando
sobre la cuchilla, sin embargo hay unas notables mejoras. En primer lugar, hay una
especie de púa que encaja en el agujero situado en la parte de debajo del objeto con el
INTRODUCCIÓN A LOS PROYECTOS
fin de pegarse al trocito de celo que esta descubierto. Una vez sujeto, se tira de la púa
sacando el celo del interior de la cajita hasta el largo que deseemos y lo pegamos a
donde teníamos previsto. Cuando ya está pegado, pulsamos los dos botones azules que
sobresalen del objeto y la cuchilla situada en el surtidor de la cinta adhesiva cortará el
celo.
En segundo lugar, creamos el Cleanadd:
Es un mecanismo que consiste en el formato original del celo pero con un añadido en el
anillo interior, el cual está cubierto. Éste tiene un hueco donde encaja una púa con una
pequeña cuchilla y en el otro lado del anillo una púa sin cuchilla. El motivo de esta
combinación de púas se debe a su funcionalidad: mientras la púa sin cuchilla se pega,
tira y tensa de la punta del celo, la otra con cuchilla corta presionando desde abajo la
cinta adhesiva y automáticamente el celo de pega en la púa, de modo que se prescinde
de la necesidad de coger el celo con los dedos.
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