Ema Wolf (2019) Los imposibles. Alfaguara. Buenos Aires. Pp. 44
Las imposibilidades que Ema Wolf nos
presenta en este volumen de relatos
breves surgen del quiebre de la ley. No
se trata de criminales, entendámoslo
bien: se trata de hombres hechos de
lana, mujeres que crecen al revés y
seres mitológicos que no se atreven.
Los personajes centrales van en contra
de aquello que creemos puede existir y,
sin embargo, existen. Surge entonces
la pregunta sobre el motivo de nuestro
escepticismo: de la literalidad. Los
personajes se deshacen, viven sin ser
vistos, se vuelven cada vez más
infantiles, desafían las costumbres de
su comunidad o se resisten a obedecer
órdenes, ¿suena familiar? Pero claro,
cuando pensamos que la que se resiste
a obedecer es una oveja o que quien desafía las costumbres es una
gallina, ya no parece todo tan peligroso.
Un elemento constante en estas historias es la presencia de la familia que
siempre representa el lugar seguro o la ayuda a tiempo. Los personajes
arriesgan la seguridad en la que viven (o la ven amenazada por alguna
circunstancia) sabiendo que cuentan con el apoyo incondicional de los
suyos.
La lucidez con la que están escritos estos relatos los hace fuente de risas
y de reflexiones. Después de todo, en palabras de Neil Gaiman “Los
cuentos de hadas son muy reales: no porque nos digan que los dragones
existen, sino porque nos dicen que se los puede derrotar.” En este
volumen no hay dragones ni villanos, hay situaciones que son imposibles
y que, sin embargo, muchos hemos vivido y que estos personajes sortean
con gracia y humor.
Nota técnica: Si bien los relatos son brevísimos, un niño de entre 6 y 8 años de edad av
a necesitar la guía de un adulto que llame la atención sobre esas imposibilidades, de lo
contrario sólo serán relatos ocurrentes. A partir de los 9 ya pueden leerlo solitos.
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