RESUMEN TEMA 11 POLÍTICAS PÚBLICAS Política de inmigración. Régimen de los extranjeros en España. Derecho de asilo y condición de refugiado. 1. Política de inmigración Introducción La política de inmigración persigue como fin último la racionalización de los flujos migratorios de tal manera que se logre con ello evitar la explotación de los inmigrantes y poder así repartir prosperidad en lugar de pobreza, cumpliendo además con el principio de la integración social de los inmigrantes. Si hacemos referencia a la evolución, la historia de la política migratoria en España presenta una división natural derivada de nuestro cambio de posición en las migraciones internacionales: Al periodo de la emigración exterior española, que corresponden las políticas de emigración vigentes hasta finales de los años setenta. Desde 1985, el acelerado cambio hacia país de inmigración, que abre la fase de políticas de inmigración. En este sentido, el desarrollo de la política de inmigración es consecuencia de la incorporación a las entonces Comunidades Europeas. Esto va a producir que se desplacen los controles de las fronteras interiores (España-Francia, por ejemplo) a las fronteras exteriores de la Unión (España-Marruecos). Actualmente, se caracteriza por ser una política basada en 4 pilares fundamentales: Control de la Inmigración irregular. Gestión de flujos migratorios. Integración de los inmigrantes. Cooperación al desarrollo con los países origen de inmigración. Organización administrativa en materia de inmigración En la actualidad, corresponde al Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, el desarrollo de la política del Gobierno en materia de extranjería, inmigración y emigración. En concreto, dentro de este Ministerio, es la Secretaría de Estado de Migraciones, la encargada de desarrollar la política de extranjería, inmigración y emigración. No obstante, el Ministerio del Interior también ostenta determinadas competencias como la tramitación y resolución de los procedimientos de protección internacional. En cuanto a la gestión de la extranjería, tenemos que hacer mención a las Oficinas de Extranjería, que son las unidades que integran los diferentes servicios de la Administración General del Estado competentes en materia de extranjería en el ámbito provincial. Las Oficinas de Extranjeros dependerán orgánicamente de la correspondiente Delegación o Subdelegación del Gobierno, y dependerán funcionalmente del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones a través de la Secretaría de Estado de Migraciones y del Ministerio del Interior, ambos en el ámbito de sus respectivas competencias. Además, otros órganos relevantes en materia de inmigración serán la Conferencia Sectorial de Inmigración, como órgano de coordinación entre el Estado y las CCAA, y el Foro para la Integración Social de los Inmigrantes, como órgano de consulta, información y asesoramiento en materia de integración de los inmigrantes. 2. Régimen de los extranjeros en España Marco Jurídico En primer lugar, si hacemos referencia al marco jurídico nacional, tenemos: -Art. 13 Constitución Española donde se dispone lo siguiente: Los extranjeros gozarán en España de las libertades públicas que garantiza el presente Título en los términos que establezcan los Tratados y la Ley. Solamente los españoles serán titulares de los derechos reconocidos en el artículo 23, salvo lo que, atendiendo a criterios de reciprocidad, pueda establecerse por tratado o Ley para el derecho de sufragio activo y pasivo en las elecciones municipales. La extradición solo se concederá en cumplimiento de un tratado o de la Ley, atendiendo al principio de reciprocidad. Quedan excluidos de la extradición los delitos políticos, no considerándose como tales los actos de terrorismo. La Ley establecerá los términos en que los ciudadanos de otros países y los apátridas podrán gozar del derecho de asilo en España. -Art. 149.1.2 Constitución Española: El Estado tiene competencia exclusiva sobre nacionalidad, inmigración, emigración, extranjería y derecho de asilo. -Código Civil (en concreto, artículos 17 a 28). -Régimen de los extranjeros no comunitarios recogido en Ley Orgánica 4/2000, de 11 de enero, sobre derechos y libertades de los extranjeros en España, y su integración social, y RD 557/2011, de 20 de abril (Reglamento ejecutivo de la Ley Orgánica 4/2000). -Régimen de los comunitarios → RD 240/2007 de 16 de febrero, sobre entrada, libre circulación y residencia en España de ciudadanos de los Estados miembros de la Unión Europea y de otros Estados parte en el Acuerdo sobre el Espacio Económico Europeo. Por su parte y haciendo mención al marco jurídico a nivel comunitario, tenemos: -Art. 79 TFUE: La Unión desarrollará una política común de inmigración destinada a garantizar una gestión eficaz de los flujos migratorios, un trato equitativo de los nacionales de terceros países que residan legalmente en los Estados miembros, así como la prevención y lucha contra la inmigración ilegal y la trata de seres humanos. - A nivel orgánico, destacar la creación en 2004 de la Agencia FRONTEX, encargada de coordinar la cooperación operativa entre Estados miembros en el ámbito de la gestión de las fronteras exteriores; ayudar a los Estados miembros en la formación de los guardias fronterizos nacionales o asistir a los Estados miembros en circunstancias que requieran un aumento de la asistencia técnica y operativa en las fronteras exteriores. Formas para la adquisición de la nacionalidad española De entrada, aclarar la consideración de español de origen (art.17 Código Civil), donde tenemos, entre otros supuestos, las personas nacidas de padre o madre españoles o las personas nacidas en España de padres extranjeros si, al menos, uno de ellos hubiera nacido también en España. -Por carta de naturaleza: (art.21 Código Civil) otorgada discrecionalmente mediante Real Decreto, cuando en el interesado concurran circunstancias excepcionales. -Por residencia en España (art. 22 Código Civil) mediante la concesión otorgada por el Ministro de Justicia, requiriéndose que ésta haya durado diez años. No obstante, serán suficientes cinco años para los que hayan obtenido la condición de refugiado y dos años cuando se trate de nacionales de origen de países iberoamericanos, Andorra, Filipinas, Guinea Ecuatorial o Portugal o de sefardíes. Bastará un año de residencia en determinados supuestos como el que al tiempo de la solicitud llevará un año casado con español o española o el que no haya ejercitado oportunamente la facultad de optar. En todos los casos, la residencia habrá de ser legal, continuada e inmediatamente anterior a la petición. -Por opción: (art.20 Código Civil) teniendo derecho a optar por la nacionalidad española: Las personas que estén o hayan estado sujetas a la patria potestad de un español. Aquellas cuyo padre o madre hubiera sido originariamente español y nacido en España. Los que su filiación o nacimiento en España se determine después de los 18 años de edad. Los que son adoptados siendo mayores de 18 años. Son requisitos comunes para la validez de la adquisición de la nacionalidad española por opción, carta de naturaleza o residencia: Que el mayor de catorce años y capaz para prestar una declaración por sí jure o prometa fidelidad al Rey y obediencia a la Constitución y a las leyes. Que la misma persona declare que renuncia a su anterior nacionalidad. Quedan a salvo de este requisito los naturales de países iberoamericanos, Andorra, Filipinas, Guinea Ecuatorial o Portugal y los sefardíes originarios de España. Que la adquisición se inscriba en el Registro Civil español. Las concesiones por carta de naturaleza o por residencia caducan a los ciento ochenta días siguientes a su notificación, si en este plazo no comparece el interesado ante funcionario para cumplir con los requisitos citados anteriormente. Análisis de la Ley Orgánica 4/2000 La Ley Orgánica 4/2000, de 11 de enero, y su reglamento ejecutivo, aprobado por Real Decreto 557/2011, de 20 de abril, recogen en la actualidad el régimen jurídico aplicable a los extranjeros en España. Con respecto a los nacionales de los Estados miembros de la Unión Europea y aquellos a quienes sea de aplicación el régimen comunitario se regirán por las normas que lo regulan (RD 240/2007), siéndoles de aplicación la Ley Orgánica 4/2000 en aquellos aspectos que pudieran ser más favorables. - Derechos y libertades de los extranjeros en España De acuerdo con el artículo 3 de la Ley Orgánica 4/2000, de 11 de enero, los extranjeros gozarán en España de los derechos y libertades reconocidos en el Título I de la Constitución en los términos establecidos en los Tratados internacionales, en esta Ley y en las que regulan el ejercicio de cada uno de ellos. Como criterio interpretativo general, se entenderá que los extranjeros ejercitan los derechos que les reconoce esta Ley en condiciones de igualdad con los españoles. No obstante, el reconocimiento y ejercicio de algunos de esos derechos va a quedar reservado a los extranjeros que se encuentren en una determinada situación administrativa. De esta forma, y a efectos de clasificar los derechos recogidos en la Ley Orgánica 4/2000, tenemos: -Derechos reconocidos a todos los extranjeros (con independencia de que estén o no en una determinada situación administrativa, en las mismas condiciones que los españoles) El derecho a la tutela judicial efectiva y el derecho a la asistencia jurídica gratuita. El derecho y el deber de conservar la documentación que acredite su identidad, expedida por las autoridades competentes del país de origen o de procedencia, así como la que acredite su situación en España. El derecho de reunión, manifestación y asociación. El derecho a sindicarse libremente o a afiliarse a una organización profesional y ejercer el derecho a la huelga. En relación con el derecho a la educación, los extranjeros menores de 18 años tienen derecho a la educación en las mismas condiciones que los españoles. Por su parte, los extranjeros mayores de 18 años que se hallen en España tienen derecho a la educación de acuerdo con lo establecido en la legislación educativa. En todo caso, los extranjeros residentes mayores de 18 años tienen el derecho a acceder a las demás etapas educativas posobligatorias, a la obtención de las titulaciones correspondientes, y al sistema público de becas en las mismas condiciones que los españoles. El derecho a la asistencia sanitaria, reconociéndose a todos los extranjeros, aunque no estén autorizados para residir en España, a raíz de lo dispuesto en el art.3 de la Ley 16/2003. (Ya visto en tema 7) El derecho a servicios y prestaciones sociales básicas. -Derechos reservados a los extranjeros que se encuentren en una determinada situación administrativa Derecho a la libertad de circulación y a elegir su residencia. Derecho de sufragio (sólo los extranjeros residentes en España podrá ser titulares del mismo en las elecciones municipales, atendiendo a criterios de reciprocidad, en los términos que por ley o tratado sean establecidos para los españoles residentes en los países de origen de aquellos). Derecho al trabajo. Derecho a la Seguridad Social y a los servicios sociales. Derecho a acceder a los sistemas públicos de ayudas en materia de vivienda. - Entrada en territorio español El extranjero que pretenda entrar en España deberá hacerlo por los puestos habilitados al efecto y contar con: Pasaporte o de documento de viaje equivalente válido. No estar sujeto a prohibiciones expresa de entrada. Acreditar el objeto /condiciones de la estancia (trabajo, ocio, etc.) y que cuenta con medios de vida suficientes para el tiempo que pretenda permanecer en España o que está en condiciones de obtenerlos legalmente. Con carácter general, visado. (No será exigible el visado cuando el extranjero se encuentre provisto de la tarjeta de identidad de extranjero o, excepcionalmente, de una autorización de regreso.) A los extranjeros que no cumplan los requisitos establecidos para la entrada, les será denegada mediante resolución motivada, salvo que: Soliciten protección internacional. Existan razones excepcionales de índole humanitaria, interés público o cumplimiento de compromisos adquiridos por España. - Situaciones de los extranjeros en España Los extranjeros podrán encontrarse en España en las situaciones de: Estancia Residencia Las diferentes situaciones de los extranjeros en España podrán acreditarse mediante pasaporte o documento de viaje que acredite su identidad, visado o tarjeta de identidad de extranjero, según corresponda. - Situación de estancia es la permanencia en territorio español por un período de tiempo no superior a 90 días, sin perjuicio de lo dispuesto en el artículo 33 de la LO 4/2000 para la admisión a efectos de estudios, intercambio de alumnos, prácticas no laborales o servicios de voluntariado. Transcurrido dicho tiempo, para permanecer en España será preciso obtener o una prórroga de estancia o un permiso de residencia. En este sentido, el art. 33 señala que podrá ser autorizado, en régimen de estancia, el extranjero que tenga como fin único o principal realizar una de las siguientes actividades de carácter no laboral: Cursar o ampliar estudios. Realizar actividades de investigación o formación, sin perjuicio del régimen especial de los investigadores regulado en el artículo 38 bis de esta Ley. Participar en programas de intercambio de alumnos en cualesquiera centros docentes o científicos, públicos o privados, oficialmente reconocidos. Realizar prácticas. Realizar servicios de voluntariado. En estos casos, la vigencia de la autorización coincidirá con la duración del curso para el que esté matriculado, de los trabajos de investigación, del intercambio de alumnos, de las prácticas o del servicio de voluntariado. -Situación de residencia: son residentes los extranjeros que se encuentren en España y sean titulares de una autorización para residir. Los residentes podrán encontrarse en la situación de: Residencia temporal Residencia de larga duración -La residencia temporal es la situación que autoriza a permanecer en España por un período superior a 90 días e inferior a cinco años. La duración de las autorizaciones iniciales de residencia temporal y de las renovaciones se establecerá reglamentariamente. En este sentido, el RD 557/2011 señala que la autorización inicial de residencia temporal tendrá la duración de un año y las renovaciones se harán por un periodo de dos años. La autorización inicial de residencia temporal que no comporte autorización de trabajo se concederá a los extranjeros que dispongan de medios suficientes para sí y, en su caso, para los de su familia. También, la Administración podrá conceder una autorización de residencia temporal por situación de arraigo, así como por razones humanitarias, de colaboración con la Justicia u otras circunstancias excepcionales que se determinen reglamentariamente. La autorización inicial de residencia temporal y trabajo, que autorizará a realizar actividades lucrativas por cuenta propia y/o ajena, se concederá de acuerdo a lo dispuesto por los artículos 36 y siguientes de esta Ley, que luego analizaremos. -La residencia de larga duración es la situación que autoriza a residir y trabajar en España indefinidamente, en las mismas condiciones que los españoles. Tendrán derecho a residencia de larga duración los que hayan tenido residencia temporal en España durante cinco años de forma continuada, que reúnan las condiciones que se establezcan reglamentariamente. Además, en virtud del art.148.3 del RD 557/2011, la autorización de residencia de larga duración también se concederá a los extranjeros que acrediten que se encuentran en situaciones como por ejemplo, ser residentes que sean beneficiarios de una pensión de jubilación, en su modalidad contributiva, incluida dentro de la acción protectora del sistema español de la Seguridad Social o también, en el caso que se trate de apátridas, refugiados o beneficiarios de protección subsidiaria que se encuentren en territorio español y a quienes se les haya reconocido el respectivo estatuto en España, entre otros supuestos. - Autorización de residencia y trabajo Los extranjeros mayores de dieciséis años precisarán, para ejercer cualquier actividad lucrativa, laboral o profesional, de la correspondiente autorización administrativa previa para residir y trabajar. No obstante, el art. 41 de la LO 4/2000 señala excepciones, donde no será necesaria la obtención de permiso de trabajo para actividades como los profesores extranjeros invitados o contratados por una universidad española o los corresponsales de medios de comunicación social extranjeros, entre otros supuestos. Con carácter general, la autorización de trabajo se concederá conjuntamente con la de residencia. La eficacia de la autorización de residencia y trabajo inicial se condicionará al alta del trabajador en la Seguridad Social. Tanto para la autorización de residencia y trabajo por cuenta propia, como para la autorización de residencia y trabajo por cuenta ajena, destacar que: Dicha autorización inicial quedará limitada a un determinado territorio y un determinado sector de actividad. 1 año de duración. La concesión de la autorización inicial de trabajo, en necesaria coordinación con la que corresponde al Estado en materia de residencia, corresponderá a las Comunidades Autónomas de acuerdo con las competencias asumidas en los correspondientes Estatutos. A partir de la primera concesión, las renovaciones se concederán sin limitación alguna de ámbito geográfico u ocupación. Las renovaciones se efectuarán por 2 años de duración. Como particularidad, destacar que el Ministerio de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, teniendo en cuenta la situación nacional de empleo, podrá aprobar una previsión anual de las ocupaciones y, en su caso, de las cifras previstas de empleos que se puedan cubrir a través de la gestión colectiva de contrataciones en origen en un período determinado, a los que sólo tendrán acceso aquellos que no se hallen o residan en España. - Salida preceptiva del extranjero de España La salida será obligatoria en los siguientes supuestos: Expulsión del territorio español por orden judicial, en los casos previstos en el Código Penal. Expulsión o devolución acordadas por resolución administrativa en los casos previstos en la presente Ley. Denegación administrativa de las solicitudes formuladas por el extranjero para continuar permaneciendo en territorio español, o falta de autorización para encontrarse en España. Cumplimiento del plazo en el que un trabajador extranjero se hubiera comprometido a regresar a su país de origen en el marco de un programa de retorno voluntario. Deteniéndonos en el segundo supuesto, cuando los infractores sean extranjeros y realicen conductas de las tipificadas como muy graves, o ciertas conductas graves de las previstas en la Ley Orgánica 4/2000, podrá aplicarse la expulsión del territorio español, previa tramitación del correspondiente expediente administrativo y mediante la resolución motivada que valore los hechos que configuran la infracción. La expulsión llevará consigo la prohibición de entrada en territorio español. La duración de la prohibición se determinará en consideración a las circunstancias que concurran en cada caso y su vigencia no excederá de cinco años. No obstante, cuando el extranjero suponga una amenaza grave para el orden público, la seguridad pública, la seguridad nacional o para la salud pública, podrá imponerse un período de prohibición de entrada de hasta diez años. No será preciso expediente de expulsión para la devolución de los extranjeros en los siguientes supuestos: Los que habiendo sido expulsados contravengan la prohibición de entrada en España. Los que pretendan entrar ilegalmente en el país. (La disposición adicional décima de la LO 4/2000 señala un régimen especial para Ceuta y Melilla donde se establece que los extranjeros que sean detectados en la línea fronteriza de la demarcación territorial de Ceuta o Melilla mientras intentan superar los elementos de contención fronterizos para cruzar irregularmente la frontera podrán ser rechazados sin ulterior procedimiento, a fin de impedir su entrada ilegal en España) No se llevará a cabo la orden de devolución, y quedará en suspenso su ejecución cuando: Se trate de mujeres embarazadas y la medida pueda suponer un riesgo para la gestación o para la salud de la madre. Se formalice una solicitud de asilo, hasta que se haya decidido su inadmisión o su admisión a trámite. Cuando la devolución no se pudiera ejecutar en el plazo de 72 horas, se solicitará de la autoridad judicial la medida de internamiento en un centro que no tendrá carácter de penitenciario. El internamiento se mantendrá por el tiempo imprescindible para los fines del expediente, siendo su duración máxima de 60 días. 3. Derecho de asilo y condición de refugiado Marco jurídico en materia de asilo y protección internacional -Art. 13.4 C.E La Ley establecerá los términos en que los ciudadanos de otros países y los apátridas podrán gozar del derecho de asilo en España. (Se establece una reserva de ley) -En este sentido, la ley que la actualidad marca el régimen jurídico actual en esta materia es la Ley 12/2009, de 30 de octubre, reguladora del derecho de asilo y de la protección subsidiaria. Análisis de la Ley 12/2009 Esta ley tiene por objeto establecer los términos en que las personas nacionales de países no comunitarios y las apátridas podrán gozar en España de la protección internacional constituida por dos figuras: El derecho de asilo La protección subsidiaria -El derecho de asilo es la protección dispensada a los nacionales no comunitarios o a los apátridas a quienes se reconozca la condición de refugiado. Dicha condición de refugiado se reconoce a toda persona que, debido a fundados temores de ser perseguida por motivos de raza, religión, nacionalidad, opiniones políticas etc... se encuentra fuera del país de su nacionalidad y no puede o, a causa de dichos temores, no quiere acogerse a la protección de tal país, o al apátrida que, careciendo de nacionalidad y hallándose fuera del país donde antes tuviera su residencia habitual, por los mismos motivos no puede o, a causa de dichos temores, no quiere regresar a él. -El derecho a la protección subsidiaria es el dispensado a las personas de otros países y a los apátridas que, sin reunir los requisitos para obtener el asilo o ser reconocidas como refugiadas, pero respecto de las cuales se den motivos fundados para creer que si regresasen a su país de origen en el caso de los nacionales o, al de su anterior residencia habitual en el caso de los apátridas, se enfrentarían a un riesgo real de sufrir alguno de los daños graves previstos en el art. 10 de esta ley (condena a pena de muerte, tortura o tratos inhumanos etc..) y que no pueden o, a causa de dicho riesgo, no quieren, acogerse a la protección del país de que se trate. - Procedimiento para el reconocimiento de la protección internacional -Presentación de la solicitud: El procedimiento se inicia con la presentación de la solicitud, que deberá efectuarse mediante comparecencia personal de los interesados que soliciten protección. o en caso de imposibilidad física o legal, mediante persona que lo represente. Dicha comparecencia deberá realizarse sin demora y, en el plazo máximo de un mes desde la entrada en el territorio español o, en todo caso, desde que se produzcan los acontecimientos que justifiquen el temor fundado de persecución o daños graves. Una vez presentada la solicitud, el solicitante tendrá los siguientes derechos: a ser documentado como solicitante de protección internacional a asistencia jurídica gratuita e intérprete a que se comunique su solicitud al ACNUR a la suspensión de cualquier proceso de devolución, expulsión o extradición que pudiera afectar al solicitante a conocer el contenido del expediente en cualquier momento a la atención sanitaria en las condiciones expuestas a recibir prestaciones sociales específicas en los términos que se recogen en esta Ley En este sentido, solicitada la protección, la persona extranjera no podrá ser objeto de retorno, devolución o expulsión hasta que se resuelva sobre su solicitud o ésta no sea admitida. -Inadmisión a trámite de las solicitudes: El Ministro del Interior, a propuesta de la Oficina de Asilo y Refugio, podrá, mediante resolución motivada, no admitir a trámite las solicitudes por falta de requisitos o por falta de competencia para el examen de las solicitudes. -Instrucción del procedimiento: La Oficina de Asilo y Refugio, dependiente del Ministerio del Interior, es el órgano competente para la tramitación de las solicitudes de protección internacional. - Propuesta y Resolución: Finalizada la instrucción de los expedientes, se elevarán a estudio de la Comisión Interministerial de Asilo y Refugio, que formulará propuesta al Ministro del Interior, quien será el competente para dictar la correspondiente resolución por la que se conceda o deniegue, según proceda, el derecho de asilo o la protección subsidiaria. Transcurridos seis meses desde la presentación de la solicitud sin que se haya notificado la correspondiente resolución, la misma podrá entenderse desestimada, sin perjuicio de la obligación de la Administración de resolver expresamente y de informar a la persona interesada del motivo de la demora. Como particularidad en el marco de este procedimiento, hay que destacar que cabe una tramitación de urgencia. En este sentido, el Ministerio del Interior, de oficio o a petición del interesado, acordará la aplicación de la tramitación de urgencia, previa notificación al interesado, en circunstancias tales como: solicitudes que parezcan manifiestamente fundadas o las formuladas por menores no acompañados, entre otros supuestos. - Efectos de la resolución estimatoria de concesión de derecho del asilo o protección subsidiaria La concesión del derecho de asilo o de la protección subsidiaria implicará en todo caso, el reconocimiento de los siguientes derechos: la protección contra la devolución en los términos establecidos en los tratados internacionales firmados por España el acceso a la información sobre los derechos y obligaciones relacionados con el contenido de la protección internacional concedida, en una lengua que le sea comprensible a la persona beneficiaria de dicha protección la autorización de residencia y trabajo permanente, en los términos que establece la Ley Orgánica 4/2000, de 11 de enero, sobre derechos y libertades de los extranjeros en España y su integración social la expedición de documentos de identidad y viaje a quienes les sea reconocida la condición de refugiado, y, cuando sea necesario, para quienes se beneficien de la protección subsidiaria el acceso a los servicios públicos de empleo el acceso a la educación, a la asistencia sanitaria, a la vivienda, a la asistencia social y servicios sociales, a los derechos reconocidos por la legislación aplicable a las personas víctimas de violencia de género, en su caso, a la seguridad social y a los programas de integración, en las mismas condiciones que los españoles el acceso, en las mismas condiciones que los españoles, a la formación continua u ocupacional y al trabajo en prácticas, así como a los procedimientos de reconocimiento de diplomas y certificados académicos y profesionales y otras pruebas de calificaciones oficiales expedidas en el extranjero la libertad de circulación el acceso a los programas de integración con carácter general o específico que se establezcan el acceso a los programas de ayuda al retorno voluntario que puedan establecerse el mantenimiento de la unidad familiar en los términos previstos en la presente Ley y acceso a los programas de apoyo que a tal efecto puedan establecerse. - Efectos de las resoluciones denegatorias de la protección internacional La no admisión a trámite o la denegación de las solicitudes de protección internacional determinarán, según corresponda, el retorno, la devolución, la expulsión, la salida obligatoria del territorio español o el traslado al territorio del Estado responsable del examen de la solicitud de asilo de las personas que lo solicitaron, salvo que se dé alguno de los siguientes supuestos: Que la persona interesada reúna los requisitos para permanecer en España en situación de estancia o residencia Que se autorice su estancia o residencia en España por razones humanitarias determinadas en la normativa vigente