Diario de lectura: Michel Foucault, “Entrevista con Michael Foucault. Salud mental y cultura” 1. El primer elemento por resaltar es la crítica al poder. Según Foucault, los marxistas, filósofos y políticos han limitado al poder a un fundamento jurídico o político, sin entender que esto solo son las herramientas por las cuales este se legitima. Se toma el todo por las partes. De igual forma, al definir el poder solo como una función para la conservación y multiplicación de las relaciones de producción, solo se le puede ver como la base de la superestructura. Para Foucault esta idea de poder resulta insuficiente, ya que limita el poder a un fundamento. El poder debe ser visto de manera efectiva, esto implica que no puede ser visto como una cosa. Es así como define el poder como: “Relaciones entre los individuos de tal manera que uno puede determinar voluntariamente la conducta de otro”. Así mismo, determina que el ejercicio del poder recaer sobre los gobiernos, debido que para gobernar es necesario determinar conductas. No obstante, el gobierno no es más que el conjunto de relaciones técnicas que permiten ejercer las relaciones de poder. 2. Foucault plantea la historia desde el análisis de los problemas histórico-sociales. A partir de preguntarse qué es la actualidad, se enfoca en identificar los puntos frágiles del presente, esto con el objetivo de detectar elementos problemáticos que no han sido estudiados y que pueden llegar a afectar nuestros sistemas de pensamiento, modos de reflexión y prácticas. En concordancia, plantea que estudia la genealogía de los problemas, debido a que las problematizaciones aparecen en momentos determinados. Según Foucault, el modo en que las cosas se han constituido en sí mismas y al tiempo cómo lo han hecho es a través de una historia precisa. Sin embargo, bajo esta estrategia, ciertas cosas han perdido su evidencia y dejan de ser visibles. En consecuencia, ciertos fenómenos que podrían haber existido anteriormente, no llegan a ser problematizados hasta que se observan desde una nueva perspectiva. Después de la segunda guerra mundial en Europa occidental existen una perspectiva analítica muy inspirada en la fenomenología, pero esta no en un sentido peyorativo, si no mas bien en un estilo de reivindicación de un análisis concreto. Sin embargo, esta dejaba una insatisfacción al ser solo una concreción de algo académico y universitario (por lo tanto era necesario ser superado). Y luego existía una segunda rama de pensamiento importante para la época, el marxismo. En este caso se proponían análisis históricos en determinados terrenos, bien analizando los conceptos de Marx, lo que era interesante, bien estudiando los saberes históricos con los que esos conceptos debían relacionarse o donde sería operatorios; en cambio, la historia marxista de lo concreto no estaba bien trabajada entre nosotros. Una tercera rama del pensamiento se plantea si existe una historicidad de la razón, es decir una historia de la verdad. Existe una corriente de pensamiento que se aleja más allá de los textos filosóficos y se acerca mas a los textos literarios, que abordaban el tema de las experiencias al limite, que permiten definir l<as fronteras de lo que se considera aceptable. SOBRE EL PODER (Entrevista con Michel Foucault). 1. Lo primero que Foucault demuestra en su obra es que el poder no debe estar ligado a priori a la represión y, asimismo, es necesario alejarse de esa valorización exclusiva de ser represivo, ya que es malo y no puede ser más que negativo. 2. En segundo lugar, Foucault considera que la manera como se ejerce y funciona el poder en una sociedad (Occidental) es mal interpretado. Si bien es cierto que existen estudios sociológicos que muestran quiénes son los amos de la industria, cómo se forma y de dónde viene el personal político. Existen también estudios más globales inspirados en el marxismo. En definitiva, para Foucault, el poder es mucho más complejo que dicha generalización. La mala interpretación de qué es el poder y quién lo ejerce, se debe a que no se están preguntando las cuestiones correctas. Para comprender realmente quién ejerce el poder, es necesario tener en cuenta que, a pesar de no estar identificados con los agentes que toman decisiones por nosotros, realmente no se sabe el porqué, ni cómo la decisión fue tomada, ni su aceptación, o mucho menos cómo es posible que hiera la categoría de persona. 3. El tercer punto es que el poder no puede ser estudiado sin entender las “estrategias de poder”. Por medio de las redes, los mecanismos, y técnicas, las decisiones son aceptadas. 4. Foucault comprende que las estrategias de poder van hasta engendrar saber. Esto está justificado en la medida que existe una línea casi insalvable entre el dominio del saber, que sería la verdad y la libertad, y el dominio de ejercer poder. De igual modo, argumenta que las Ciencias Humanas corren en paralelo con la instauración de nuevos mecanismos de poder y es por ellos que las sociedades pueden llegar a ser un objeto de observación científica, en la medida que los hombres cambian sus comportamientos. 5. Finalmente, asevera que la ciencia y la verdad es, sin duda, una forma de poder, en la medida que las sociedades le han otorgado un valor de coacción a la sociedad. Sin embargo, ve la necesidad de suspender un sistema de valores al cual todo debe ser sometido a prueba y confrontado. Para lo cual se pregunta, finalmente: “¿Qué es lo que hace la persona en el momento en que lo hace? The Foucault reader El problema del sujeto: 1. El trabajo principal de Foucault ha sido crear historia desde los diferentes modos por los cuales el ser humano en la cultura se ha subjetivado. Para el estudio del hombre como un objeto, Foucault ha dividido su estudio en tres categorías: La primera, las practicas divisorias: consisten en el proceso social de objetivación y categorización de los seres humanos. Esencialmente, son el modo de manipulación que combina la ciencia y las prácticas de exclusión en un sentido social. Las practicas divisorias son técnicas de dominación. La segunda es la clasificación científica: Por último, la subjetivación tiene que ver con la capacidad del sujeto de convertirse en el objeto de estudio. En este proceso Foucault analiza cómo se da el proceso de formación en la cual el individuo pasa a ser un objeto aun cuando está activo. Por otro lado, Foucault se refiere la separación de las técnicas por las cuales las personas inician una activa “formación del yo”. Esta “formación del yo” tiene una larga y complicada genealogía debido a que se debe una variedad de operaciones sobre las personas y sus cuerpos para cambiar sus comportamientos y conductas. Dichas operaciones característicamente están relacionadas con un proceso de conocimiento de sí, y al mismo tiempo de estar mediadas por una figura de autoridad externa. 2. Por otra parte, el autor describe las maneras en las que el cuerpo y las instituciones sociales se van modificando, teniendo en cuenta las relaciones de poder. Identifica, en primer lugar, que en las “prácticas divisorias” el sujeto que se ha constituido puede ser visto como una víctima capturado y coaccionado en el proceso de objetivación. No obstante, identifica que en la “clasificación científica”, la tendencia hacia la dominación es más oblicua. El problema del poder/ conocimiento: 1. Poder y el conocimiento son elementos subsidiarios del análisis hecho por Foucault. 2. Si bien Foucault en sus estudios se encarga de analizar los discursos de las ciencias, no se plantea definir si son verdaderos o no. En realidad, busca entender cómo alrededor de los discursos se generaron conceptos, y cómo fueron utilizados y desarrollados. 3. Foucault no está interesado en la búsqueda de una teoría general de la historia. 4. “La relación entre racionalización y el exceso del poder político es evidente. Y nosotros no podríamos necesitar esperar por una burocracia o un campo de concentración para conocer la existencia de tales relaciones. Pero el problema es: ¿Qué hacer con semejante evidente realidad? ¿Podríamos nosotros juzgar la razón? En mi opinión nada podría ser más estéril. Primero porque en este campo no hay nada para hacer con culpable o inocente. Segundo, porque no tiene sentido referirse a la razón como la entrada contraria para la sinrazón. Por último, porque semejante tribunal, podría atraparnos dentro de un juego de arbitrariedad y tampoco la rotulación de irracionalista o racionalista “. EL problema del gobierno: 1. Foucault estudia los cambios en el poder a partir del siglo XVII. En primer lugar, se aleja de la idea de que el Estado es imaginado como una clase de poder político que ignora los individuos, o que persigue solamente los intereses de la totalidad o un grupo específico de ciudadanos. No porque esta idea del Estado exista en realidad, sino porque considera que en este nuevo ordenamiento político ni la organización ni el poder son tan simples como se considera. Por el contrario, afirma que nunca se había visto una combinación en las estructuras políticas de tantas técnicas de individualización y de totalización de los procedimientos. Más adelante, el autor menciona que, para mitad del siglo XVI, una serie de tratados sobre el “arte de gobernar” comenzaron a aparecer. Ellos no fueron relacionados con las tradicionales preguntas acerca de la naturaleza del Estado, ni tampoco con el problema de cómo el príncipe podría ser el mejor para conservar el poder. Por el contrario, estos nuevos escritos se preocupaban por todos los aspectos del Estado, desde la vida familiar, hasta la vida reproductiva del ciudadano, así como introducir una consideración más detallada de la economía y el orden. En pocas palabras, se define la sociedad como un blanco político. 2. Foucault define que el gobierno no está hecho para relacionarse con los hombres, sino con los hombres en sus relaciones, sus vínculos, su fertilidad etc. 3. Foucault se encarga de retomar a los “annales” y darle un nuevo enfoque a su explicación del crecimiento demográfico y la transformación del Estado. De esta manera, lo económico y lo demográfico se vuelve puntos focales del Estado y lo modifican. A esta transformación del gobierno, Foucault le llama biopoder. El biopoder surge de dos polos distintos: 1) La especie humana, las categorías científicas. 2) El cuerpo humano. 4. Se habla del control disciplinario, y se cita el libro de Vigilar y Castigar. Sin embargo, considera que esta parte ya es clara en los apuntes inferiores referentes al libro. 5. En cuanto al sujeto y el poder, el mejor ejemplo que refleja los mecanismos de dominación desde Foucault es la idea del panóptico, el cual funciona como herramienta de vigilancia, una organización particular del espacio y de los seres humanos, y un orden visual que verifica los mecanismos de poder. El panóptico es tan perfecto en su técnica y arquitectura, que, en su forma de administración, el poder no está totalmente confiado a alguien que podría ejércelos sobre otro, sino, más bien, es una máquina en la cual todos están atrapados. Desde aquellos que ejercen el poder hasta quienes se encuentran sujetos a estos. En pocas palabras, el panóptico une al poder, al control del cuerpo y el conocimiento. 6. El panóptico, según Foucault, no solo ofrece eficiencia, sino también normalización. Un sistema finamente graduado y con intervalos medibles en los cuales los individuos pueden ser distribuidos alrededor de una norma que organiza y es el resultado de una controlada distribución. Un sistema de organización está opuesto a un sistema de ley o a un sistema de poder. 7. Concepto de bio poder: brought life and its mechanisms into the realm of explicit calculations and made knowledge:"power an agent of the transformation of human life . . .. Modem man is an animal whose politics places his existence as a living being in question Vigilar y castigar Suplicio: 1. El método de castigo grandes modificaciones después del siglo XVII. El castigo pasa de ser algo físico, de máquinas de tortura y de un espectáculo público, a ser un acto más humano y oculto. Cuando esta transformación se generó, las penas dejaron de ser punitivas. Es decir, ya no se buscaba el castigo del cuerpo, sino limitar las libertades y voluntades del sujeto. 2. El objetivo del castigo varía. El objeto ya no está en la idea del castigo físico, sino en tener un cuerpo sometido. Pero este sometimiento ya no debe ser físico o por la fuerza. Este sometimiento se da por nuevos mecanismos que, al ser violentos, logran ser organizados, calculados, sutiles. Sin hacer uso de las armas o del terror, logran que el sujeto permanezca dentro del orden físico.” Es decir, puede existir un "saber" del cuerpo que no es exactamente la ciencia de su funcionamiento, y un dominio de sus fuerzas que es más que la capacidad de vencerlas: este saber y este dominio constituyen lo que podría llamarse la tecnología política del cuerpo”. 3. Con el cambio del objetivo del castigo, Foucault aclara que también se modifica la forma de juzgar al preso. El sistema ya no consiste en llevar al acusado y que no tenga forma de defenderse. Por el contrario, aparecen el sistema probatorio por el cual el acusado ya no puede ser juzgado de forma irracional. Foucault aclaro que, contrario al siglo XVIII, el condenado ya no es el encargado de imponer su propia condena, en la medida que era obligado a confesar por medio del “suplicio judicial”. El “suplicio judicial” es entendido como el ritual por el cual pasaba el preso antes de ser condenado por la justicia. El proceso consiste en tres momentos: 1. El condenado era el encargado de dictar su sentencia por medio de su confesión infligida por la tortura. 2. El espectáculo público en el que consistía el castigo 3. El castigo al alma por medio de la condena de la iglesia, lo que prolongaba la tortura hasta la eternidad. En otras palabras, el suplicio judicial se entiende como un ritual político, por el cual se hacían ver las relaciones de poder y la supremacía del rey. Sin embargo, menciona que esto cambió para el siglo XIX, debido a que ahora la justicia buscaba que en la imposición del castigo no fuera más atroz que los crímenes cometidos por el acusado. 4. Foucault anota que el sistema penitenciario ahora también se encontraba modificado, y dentro de estos cambios ya no se tenía en frente el cuerpo, el elemento que se debía castigar. Ahora el castigo se encontraba redireccionado hacia el alma y la conciencia. Por último, percibe que el poder contra el alma y la restricción de las libertades y voluntades resultaba mucho más tortuoso que el castigo sobre el cuerpo mismo. 5. Así mismo, anota que en el nuevo sistema penitenciario se encuentra directamente relacionado con las relaciones de poder, lo cual se refleja de forma obvia en la medida que aquellos que tuvieran menor cantidad de poder resultaban más fácilmente condenados. 6. “El suplicio penal no cubre cualquier castigo corporal: es una producción diferenciada de sufrimientos, un ritual organizado para la marcación de las víctimas y la manifestación del poder que castiga, y no la exasperación de una justicia que, olvidándose de sus principios, pierde toda moderación”. En los "excesos de los suplicios” se manifiesta toda una economía del poder donde el suplicio es visto como un orden cuantitativo del sufrimiento. Castigo: 1. “El castigo es una técnica de coerción de los individuos; pone en acción procedimientos de sometimiento del cuerpo —no signos—, con los rastros que deja, en forma de hábitos, en el comportamiento; y supone la instalación de un poder específico de gestión de la pena. El soberano y su fuerza, el cuerpo social, el aparato administrativo. La marca, el signo, el rastro. La ceremonia, la representación, el ejercicio. El enemigo vencido, el sujeto de derecho en vías de recalificación, el individuo sujeto a una coerción inmediata. El cuerpo objeto del suplicio, el alma cuyas representaciones se manipulan, el cuerpo que se domina: tenemos aquí tres series de elementos que caracterizan los tres dispositivos enfrentados unos a otros”. 2. Ahora el castigo o la pena impuesta debe respetar la dignidad humana, como dice Foucault en el capítulo del suplicio: Ahora la justicia debe velar por el bien del prisionero hasta el día de su muerte. Si se le ha de imponer la pena capital, la justicia se encargará de que esta sea lo menos tortuosa posible suministrándole un sedante. 3. Foucault detecta que el sistema judicial se encuentra viciado, lo que implicaba que no existía una distribución equitativa del poder punitivo. Es por ello que ve la necesidad de una reforma del sistema, lo que implicaba que la tipificación de los delitos se hiciese de forma universal y la imposición de leyes fijas. Así, los ciudadanos tendrían claridad de las consecuencias de los actos que comentaban y lo jueces solo serían un órgano de la ley. 4. Por otro lado, el castigo que se es impuesto debe tener una proporción entre la pena y la calidad del delito, que está dado por el orden social. 5. Foucault menciona que ahora no se pretende en sí castigar los actos, sino la posibilidad de la residencia del acusado. 6. Foucault encuentra en el siglo XVIII existen tres formas de organizar el poder de castigar: 1) Una idea de castigo que aún se apoya en la idea del poder monárquico. 2) El segundo y el tercer método de castigo se basa más en la idea de preventiva y correctiva y lo realiza a través de la utilización de instrumentos disciplinarios. Disciplina: 1. 2. 3. 4. 5. Foucault menciona que en el siglo XVII el cuerpo era un conjunto de características determinadas. Sin embargo, para el siglo XVIII el cuerpo es visto como un constructo, algo que se fabrica. El cuerpo pasó de ser un cuerpo inepto a una maquina útil. Esto debido a que el cuerpo se comenzó a ver como un objeto y blanco de poder. La idea de que el cuerpo pueda ser visto como un objeto que se puede analizar se debe a dos motivos: 1. El concepto anatómico- metafísico, por el cual se explica que el cuerpo se puede analizar. 2. El elemento técnico- político, el cual se puede hablar del cuerpo como un objeto de sumisión y manipulación, así el cuerpo manipulable. Es decir, esta idea se encuentra conectada con la idea de docilidad, en la medida que un cuerpo es dócil si es manipulable y transformable. Foucault comprende que las disciplinas son entendidas como los métodos por los cuales se permite el control minucioso del cuerpo. Es aquello que garantiza el control minucioso de las operaciones y garantizan una relación de docilidad y utilidad. Lo que el identifica que se ven reflejadas en el siglo XVII y XVIII por medio de las fórmulas generales de dominación. Asimismo, identifica que el momento en el que nace la disciplina es cuando se comprende que un cuerpo entre más dócil, más útil. El cuerpo entra en un proceso donde el poder se encarga de descomponerlo y armarlo de nuevo para que este sea más útil. La disciplina es la anatomía política del detalle. La disciplina consiste en la distribución de las personas en el espacio. Son varios los mecanismos que le contienen. Primero, la clausura, la localización en específico, en la 6. 7. 8. 9. 10. cual se acomoda a todos los individuos en un espacio en específico para evitar las distribuciones imprecisas. Se puede observar a cada individuo de forma precisas y analizarlo. En este sentido, los emplazamientos funcionales, que consisten en ir progresivamente codificando las instituciones disciplinarias para responder a la necesidad de vigilar, de romper las comunicaciones peligrosas y de crear un espacio útil. Finalmente, se encuentra el rango donde se especifica la clasificación de los individuos. Aclara que cuando se confluyen todas estas herramientas de dominación, se termina por crear estructuras arquitectónicas funcionales y disciplinarias. Es por ello por lo que la primera de las grandes operaciones de la disciplina es, pues, la constitución de “cuadros vivos” que transforman las multitudes confusas, inútiles o peligrosas, en multiplicidades ordenadas. En segundo lugar, las tácticas disciplinarias logran la caracterización del individuo y el ordenamiento de la multiplicidad. Foucault identifica que uno de los nuevos métodos disciplinarios extiende gran parte de su esfuerzo en el control de la actividad, el establecimiento de ritos y ocupaciones determinadas condenadas a los ciclos de repetición. Sumado a esto, identifica que la rutinización del cuerpo genera que los controles minuciosos del poder se inserten en el individuo. También aclara que los nuevos controles disciplinarios incluyen la articulación del cuerpo y el gesto. No es solo ocupar el tiempo del individuo, sino lograr que las rutinas y ejercicios que se le son impuestos sean gestos eficaces y útiles. Finalmente, la utilización del cuerpo debe ser exhaustiva. Es decir, que el cuerpo en el tiempo que trabaje llegue a un mayor agotamiento. Bajo estas nuevas técnicas disciplinarias hay un nuevo objetivo: el cuerpo natural, el cuerpo susceptible de operaciones específicas, que tienen su orden y su tiempo. El cuerpo se ha convertido en un blanco para los nuevos mecanismos de poder. Al igual, menciona que las disciplinas que analizan el espacio, que descomponen y recomponen las actividades, deben ser también comprendidas como aparatos que sirven para la capitalización del tiempo. Esto por medio de dividir el tiempo en segmentos, la imposición de las series y un esquema analítico. De igual forma, menciona que, al dominar el tiempo de los individuos, se termina por articular el poder directamente sobre el tiempo, asegurando así su control. Foucault identifica que aparece una nueva exigencia en la disciplina, la cual ya no solo consiste en el arte de distribuir cuerpos, de extraer de ellos y de acumular tiempo, sino de componer fuerzas para obtener un aparato eficaz. Esto se evidencia en diversas maneras: 1) La combinación de los cuerpos, es decir, la fuerza del cuerpo no es ya la variable que lo define, sino la posición que ocupa. La reducción del cuerpo a su funcionalidad. 2) Los métodos disciplinarios del cuerpo deben formar un tiempo compuesto, es decir, lograr que la extracción del sujeto sea lo óptimo posible. 3) La sistematización del mando, que toda actividad que realiza el individuo disciplinado debe tener un orden especificado que logre obtener el resultado deseado. El poder disciplinario tiene como función principal enderezar conductas. La disciplina no busca encadenar las fuerzas para reducirlas, sino multiplicarlas y usarlas. Es así como “fabrica” individuos como objetos e instrumentos de ejercicios. Al mismo tiempo, es entendida como un poder modesto que funciona según el modelo de una economía calculada y permanente. Se define que el éxito del poder disciplinario se debe a su uso de instrumentos simples: la inspección jerárquica, la sanción normalizada y su combinación en un procedimiento especifico, el examen. 11. 12. 13. 14. La sanción normalizada: Existen cuatro elementos que componen a la sanción. 1. El mecanismo penal. 2. Que el castigo no solo es disciplinario, sino también tiene función correctiva 3. El castigo tiene un doble sistema, es gratificación y sanción. 4. La distribución del castigo de acuerdo con los rangos, es decir, un sistema de recompensa y castigo. Asimismo, menciona que la sanción normalizadora es el encargado de infringir castigos disciplinarios a aquellos individuos a quien no encaje en los presupuestos permitidos por la sociedad y dependiendo de dónde se desenvuelva el castigo puede ser correctivo o punitivo. El poder de la normalización obliga a la homogeneidad. Foucault menciona que de los métodos efectivos para orientar y dirigir las mentes se encuentra en la utilización de la inspección jerárquica que funciona como un regulador de la conducta. De igual modo, este régimen es capaz de introducirse en cada aspecto de la vida cotidiana para alinear a todos los seres en la sociedad. Crea una estructura piramidal jerarquizada, en donde el superior tiene la posibilidad de observar a todos con facilidad. El panoptismo: consiste en la idea arquitectónica de Bentham donde desde una estructura en forma de domo permite observar todo lo que sucede a su alrededor. Foucault lo lleva a plantearlo en la sociedad, donde se comprende que el objetivo máximo de las relaciones de poder es lograr vigilar sin ser detectados. Lograr que la vigilancia y el dominio no quede solo en restringido a ciertas actividades es específico, sino que trascienda al ámbito privado del individuo