Relativo Se conoce con el nombre de humedad relativa al porcentaje que se encuentra en el aire si se lo compara con la cantidad que éste es capaz de mantener. Por lo general, el aire contiene vapor de agua en menor cantidad de la que necesita para su saturación. La ecuación para calcular la humedad relativa consiste en dividir la densidad de vapor real por la de saturación y multiplicar el resultado por 100%, ya que la unidad que se busca es el «por ciento». Lo normal es medir la densidad de vapor en g/m3 (gramos por metro cúbico). Cuando el aire no consigue mantener el total de la humedad, ésta atraviesa un proceso de condensación que da como resultado rocío. Si enfriamos el aire manteniendo la cantidad de humedad constante, el porcentaje de humedad relativa aumentará hasta llegar al 100%. La temperatura a la cual la humedad es capaz de saturar el aire se denomina punto de rocío, y si desciende comienza la condensación antes mencionada. Aquello que se presta a la discusión o al cuestionamiento y lo que no resulta absoluto también puede ser calificado como relativo: “Sus dichos son relativos, no hay que tomarlos al pie de la letra”, “La opinión de Marcela no me afecta porque es relativa: puedo rebatir todas sus afirmaciones, pero no me interesa”, “Hay mucha humedad relativa en este ambiente”.