Subido por Cristina Saavedra Lagos

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Sanidad Interior
Por Joel Jiménez
Sanidad Interior
Por Joel Jiménez S. Sustento ideológico.
En la primera parte analizamos los “encuentros”, que son los eventos donde se practica la Sanidad
Interior. Ahora trataremos de estudiar la parte ideológica, qué es lo que piensan, o lo que creen como
para que los lleve a practicar tales “encuentros”? Como ya lo dijimos, esta situación es parte del
fenómeno carismático, y como tal no hay iglesia carismática o neo-pentecostal que no la practique,
incluso alguna que otra iglesia histórica se siente atraída hacia esta novedad.
La cuestión no es tan simple como parece; en los diversos países que he visitado, de la misma forma
como ocurre aquí en California, la S. I. ha infectado como una verdadera plaga a muchas iglesias
cristianas, por lo que algunos cristianos sinceros han llegado a pensar que este es el verdadero
evangelio.
Es obvio que en esta época postmodernista cualquier cosa que lleve a las emociones va a tener
aceptación, pero la pregunta es si estos creyentes, o estas iglesias, están conscientes de lo que han
adoptado o simplemente se dejaron llevar por la moda de que “todo el mundo lo hace”.
La S.I. ha recibido varios nombres, tales como “Curación de las Memorias”, “Sanidad de las Heridas
del Alma”, “Psico-evangelio”1, “Salvación Psicológica”2, “Psico-espiritualidad”3, “etc. siendo el
término de “Sanidad Interior” el que más se ha popularizado.
Para que una persona pueda creer en la S.I., también debe aceptar otros postulados del carismatismo,
como la “Confesión Positiva”, la “Guerra Espiritual”, las “Maldiciones”, etc. Debido a que estos temas
ya los discutimos en los capítulos anteriores,4 sólo haremos breves comentarios al respecto.
Para los fines propios de esta investigación, he dividido este capítulo en las siguientes partes:
1. Naturaleza.- ¿Qué es realmente la S.I.
2. Origen e historia.- ¿Cómo se metió a la iglesia? y ¿quién o quienes la metieron?
3. Fundamentos.- ¿Son válidos sus argumentos?
Tenemos que agradecer a la infinidad de amigos y hermanos en Cristo que nos proporcionaron
materiales, o que nos permitieron entrevistarlos, e incluso aquellos que abrieron su corazón para
expresar sus dudas y temores con respecto a la S.I.
Por otro lado, al no ser pioneros en la investigación de la S.I., tenemos que reconocer y recomendar
ampliamente todos los escritos del Dr. Dave Hunt, en especial el libro “Seducción de la Cristiandad”,
que todo cristiano debe leer. Igualmente estamos en deuda con el Dr. Hank Hanegraff por su libro
“Cristianismo en Crisis” y a los Drs. John Ankerberg y John Weldon por su libro “Hechos a cerca del
Movimiento de la Fe”.5
1
Erdely, Jorge en su libro del mismo título. Editorial MBR, 2000.
Hunt, Dave en “Seducción de la Cristiandad”, Editorial Portavoz, p. 161, 1988.
3
Ibid, p. 163.
4
La S.I. ya se tocó brevemente en el cap. 2, pero debido a la relevancia del tema aquí lo discutimos por separado.
5
Otros libros que recomendamos son los del Dr. Jorge Erdely, a pesar de que en algunos de ellos es un poco tendencioso. El
lector ávido sabrá distinguir entre lo sustancial y lo espurio.
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Desafortunadamente algunos de estos libros no siempre se encuentran en nuestras librerías cristianas,
pero si usted puede conseguirlos, no dude en adquirirlos.
I.- ¿QUÉ ES LA SANIDAD INTERIOR?
La S. I. es una mezcla de Ocultismo con Psicología Barata o Pseudo Psicología, revestidas ambas con
terminología bíblica o cristiana.
En cuestión de porcentajes diremos que la S.I. es un 20 % ocultismo y un 80 % Pseudo Psicología.
En su aplicación la S.I. efectúa una especie de terapia grupal, donde los integrantes generalmente sin
su consentimiento, son inducidos a una experiencia de tinte hipnótico, la persona hace un “regreso” o
viaje al pasado, donde un Jesús imaginario, no el que dice la Biblia, acompaña al individuo sanando sus
heridas o memoria de situaciones dolorosas. La técnica que se emplea generalmente es la visualización.
Durante esa vivencia la persona debe recordar o imaginar las experiencias que vivió desde su niñez,
incluso desde que estaba en el vientre de su madre y contarlas o expresarlas con su boca, con palabras
audibles a su maestro o tutor. Se supone que al lograr decir con sus propias palabras tales sufrimientos
la persona queda liberada y será feliz para siempre, pues ha roto todas las ataduras o maldiciones que
traía en su vida. Además con el simple hecho de decir “yo rompo esa maldición” o “yo declaro que no
me afectará más”, todo está arreglado.
El ambiente que se vive en una sesión de S.I. es siempre mística, o como ellos mismos la llaman: “una
atmósfera de la fe”.6 Es normal que se escuchen sollozos o llantos pues la persona se conmueve al
revivir su pasado tormentoso.
Al terminar la sesión la persona experimenta una catarsis indescriptible, se siente mejor como nunca,
reconfortado, alegre, aunque sea temporalmente. ¡Es el psico-evangelio que a Dios se le olvidó
presentarnos en las Escrituras!
El propósito de la S.I. es liberar a la persona de sus traumas pasados, los que le impiden ser feliz,
disfrutar de la vida y auto-realizarse, por lo que se impone a todos los creyentes, es decir, todos
necesitamos una terapia de S.I.
Generalmente la S.I. no es aplicada por profesionales, sino que cualquier líder de esas iglesias lo
aplica. Es decir, ni son Psicólogos ni Teólogos, pero eso es algo que a estos creyentes no les preocupa,
ellos creen ciegamente en la S.I. sin importar quien la realice o “ministre”, basta que sea “ungido”, o
“apóstol”, o que tenga un “manto profético”, o la “cobertura x”, etc.
Bueno hasta aquí hemos hecho la descripción del fenómeno, sin embargo surgen infinidad de preguntas
por la cantidad de incongruencias que encontramos:
1. Usted se sometería a una operación quirúrgica si supiera que la persona que va a operar no es
médico? ¡claro que no!
6
Agnes Sanford inventora de la SI. Hunt Ivid, p. 119.
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2. ¿Qué pasaría si llegara a operar una persona que no es médico? Seguramente mataría al
paciente.
3. Por otro lado, aun cuando la persona que va a operar fuera médico, ¿usted se sometería a una
operación si aún no sabe exactamente cuál es su enfermedad? ¡claro que no!
4. ¿Cómo puede estar seguro que la S.I. es realmente lo que necesita para resolver sus conflictos?
5. Si la S.I. es tan necesaria porqué no aparece en la Biblia?
6. ¿Dónde están las estadísticas de la S.I. donde se demuestre que funciona?
7. San Pablo sería un candidato ideal para la S.I. por su pasado asesino, ¿por qué no lo hizo?
8. Si la S.I. es tan importante, ¿por qué Jesús nunca la explicó?
9. ¿Porqué los primeros cristianos no necesitaron de la S.I.? ya que ellos estaban llenos de gozo y
del Espíritu, Hech. 13:52.
10. No será que la S.I. es el substituto de otro evangelio que nos tiene preparado Satanás según Gal.
1:6-9?
11. Si la S.I. tiene como énfasis obsesivo la autorrealización y la prosperidad material, ¿dónde
quedan la santidad, la justificación, la expiación, la regeneración, la adopción, la conversión y
demás temas teológicos?
12. ¿A caso no está siendo Dios substituido por una técnica pseudo-científica?
13. El hecho de que la persona sienta cierto alivio después de una sesión de S.I., ¿no significa que
funciona?
14. Si la S.I. es parte íntegro del evangelio, cómo es que Teólogos en 2000 años, ni los antiguos o
presentes, la mencionan o recomiendan? Hablemos de San Agustín, Juan Calvino, Martín
Lutero, etc. etc. etc.
Antes de pasar a los fundamentos de la S.I., echemos un vistazo a su origen y desarrollo.
II.- ORIGEN Y DESARROLLO
¿Quién la inventó?, ¿cómo llegó a la iglesia? ¿cómo es que tuvo aceptación y está teniendo auge? ¿cuál
es su trasfondo? Estas y muchas más preguntas surgieron al abordar el tema.
Todos los investigadores del fenómeno carismático coinciden en que fue Agnes Sanford la responsable
de introducir metodología ocultista dentro de la iglesia cristiana en este último tiempo.
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Recordemos que ya en sus inicios el carismatismo tuvo un origen sincrético,7 pero no fue hasta la
década de los 60 cuando abierta y descaradamente se infiltra a la iglesia con Agnes Sanford, toda la
metafísica que hoy conocemos.
¿Quién es Agnes Sanford?
Los grandes exponentes de la S.I. reconocen a Agnes Sanford como la creadora de la S.I. Ella ha
influenciado a la iglesia, y en particular a los carismáticos, más que cualquier otra mujer en el siglo
pasado.
“Ella fue para todos nosotros la precursora en el campo de la S.I., nuestra primera
mentora en el Señor, nuestra amiga y consejera, gente como Francis MacNutt, Bárbara
Shlemon, Tommy Tyson, Herman Rifle, Paula y yo mismo (John Sandford) y otros que
desde entonces han escrito y se han destacado en el campo de la SI”.8
¿De dónde tomó Agnes Sanford la técnica de la S.I.?
En su primer libro, “The Healing Light” (La luz sanadora) ella relata que la aprendió de la secta mental
conocida como la “Unidad” a través de una abierta “dama ministro” al preguntarle porqué no podía
proyectar el poder de sanidad por medio de la oración a través de la distancia. Esta dama ministro le
enseñó a usar su mente subconsciente en la oración.9
En este libro ella alaba a la “Unidad” y a otras sectas por “proyectar el poder de Dios dentro del ser
del hombre”.
En sus demás libros, que son tan crasamente paganos como para dejar a uno atónito, Agnes Sanford no
hace distinción entre la verdad y el error, a este fenómeno de la S.I. lo llama “flujo de energía”, “alto
voltaje de la creatividad de Dios”, “energía primordial”, etc. Para Sanford Jesús fue el más grande de
los psiquiatras. 10
Ella enseña que podemos crear virtudes en otras personas mediante el poder de nuestras mentes, sanar
a distancia, perdonar pecados mediante la visualización. Aprueba las salvajes danzas en la jungla...
“personas primitivas que crean una atmósfera de fe mediante pinturas de guerra y plumas”.11
Ella dice:
“El amor de Dios quedó extinguido en el hombre por la negativa vibración mental de este
mundo pecaminoso y sufriente...Literalmente rebajó sus vibraciones mentales a las
vibraciones mentales de la humanidad, y recibió para Sí mismo los pensamientos de
7
Ver el capítulo 1. El ideólogo del Carismatismo fue S. W. Kenyon, su mayor obra fue sacar lo mejor del hinduismo, del
esoterismo, del budismo, del satanismo, ponerle terminología cristiana y presentarlo como la nueva revelación de Dios.
8
Sandford, John en “The Transformation of the Inner Man” (Logos, 1982, p. 4
9
Sanford, Agnes en “The Healing Light”, Macalester, p. 143.
10
Ibid, p. 146.
11
Ibid, p. 60.
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pecado y enfermedad humanos, de dolos y muerte... De esta manera limpió las vibraciones
mentales que rodean este globo...Su sangre, esta misteriosa esencia vital... permanece
sobre la tierra, en forma de plasma, arrastrada por los vientos del cielo a toda tierra bajo
el sol, estallando en una reacción en cadena de poder espiritual... He aprendido a
combinar el enfoque sacramental con el metafísico”.12
¿Qué le parece la teología de la S.I.?
¿Cómo Sanford descubre o inventa la S.I.?
Agnes Sanford explica que su preferencia personal la llevó a adoptar una técnica diferente, a la que
llamó SI o curación de las memorias:
“¿Cómo entonces, crearé en mi misma la atmósfera de la fe: el sentimiento de que Dios
está dando respuesta a mi oración?
El método que empleo es el de el entrenamiento de la imaginación creativa...
En la curación de las memorias uno tiene que aferrarse firmemente a la imagen, en la
imaginación... de esta persona.. (sin tener en cuenta) las perversiones... (como) un santo de
Dios, y transformar en la imaginación las tenebrosas y terribles sombras de su naturaleza
en resplandecientes virtudes y fuentes de poder.
En verdad, pueden ser transformados. ¡Esto es redención!13
Luego por la influencia de Karl Jung, llegó a creer que Cristo mediante su encarnación entró en el
inconsciente colectivo de la raza humana, en la profunda mente de cada persona, estando allí
disponible para sanidad y ayuda. Esto la llevó a desarrollar su S.I. y/o curación de las memorias.14
Todos los grandes maestros de la S.I. recurren a Agnes Sanford como la máxima autoridad en el tema.
Sus libros son el libro de texto en la materia, sobre todo “The Healing Gifts of the Spirit” (Los dones
de sanidad del Espíritu). Sin embargo ella dice cosas muy espeluznantes, por ejemplo:
“Los sabios de la India han estado caminando durante muchos siglos por las excelsas
cumbres de la meditación desarrollando sus poderes psico-espirituales y dando nacimiento
a supra-almas.
Los espíritus de aquellos (muertos) por los que hemos orado en la tierra están obrando a
través de nosotros...
Uno comunica aquella fuerza sanadora al ser interno (de los enfermos) mediante la ley de
la sugestión...
Ella (le persona efectuando la curación) ha hecho una vía mental entre su espíritu, su
mente subconsciente, y el cuerpo con el cuerpo, la mente subconsciente y el espíritu del
paciente...”15
Ella dice que:
12
Ibid, p. 125.
Sonford, Agnes en “The Healing Gifts of the Spirit”, Fleming H. Revell, 1966, p. 49 y 131.
14
Hunt, Ibid, p. 122.
15
Sanford, Agnes en “Light...” op. Cit. p. 98-113.
13
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“El bautismo del Espíritu Santo” le vino a través del sol y de las aguas en el lago y del
viento en los pinos”. Etc.16
A pesar de todo, la obra de Agnes Sanford no hubiera tenido tanto éxito sin la ayuda de Morton
Kelsey, sacerdote episcopal y psicólogo, pensador sofisticado, escritor prolífero y persuasivo. Lo que
Sanford enseñaba por experiencia, Kelsey lo empleó mediante razonamiento seductivo para persuadir
a la iglesia.17
Kelsey abiertamente aboga por un espiritismo benigno, enseñando que la brujería, la magia y otras
formas de chamanismo no son malas en sí mismas, sino que son legítimas en tanto que las empleemos
con amor y para el bien18.
Tristemente los promotores de la S.I. en nuestra nación no aportan nada nuevo, cuando uno lee o
escucha a Olivia Vega, o Torcuato Luca de Tena, o Glenn Brown que nos visita constantemente, o al
Padre Gil de Monte María, etc. etc. es más de lo mismo. Tal vez el único mérito de estos sanadores
mexicanos es que se han esforzado por hacer parecer más “cristiana” la S.I., como podemos darnos
cuenta en sus exposiciones, pero no logran salvar el escrutinio científico, teológico o del sentido
común.
Tal vez usted se sorprenda por esta información que está recibiendo, pero es bueno que sepa que
siempre ha existido un nexo entre el carismatismo y el esoterismo, chamanismo o satanismo. Ellos
nunca lo han negado, más bien lo afirman clara y abiertamente. Si usted lee el libro “De la Prisión a la
Alabanza”, el autor, un pastor metodista, comenta cómo fue su transitar y búsqueda para llegar al
carismatismo:
“Un amigo me dio un libro que hablaba de un culto oriental que decía conocer el
método de abrir las mentes de la gente al poder de Dios.
Aprendí a permanecer de espaldas sobre una superficie con los pies levantados y a
practicar la meditación silenciosa.
Comencé a leer todo lo que pude hallar referente a los fenómenos psíquicos, el
hipnotismo, el espiritismo, con la esperanza de hallar una clave al secreto de
permitir al Espíritu de Dios operar en mi y a través de mi”.19
Uno no puede dejar de preguntarse:


¿Qué andaba haciendo un pastor de una iglesia histórica en todos estos enredos satánicos? o
¿Cómo explicar que se le pida ayuda al Diablo para entender a Dios?
Citado por Robert L. Wise, en “Healing of the Past”.(Presbyterian and Reformed Reneval Ministries International) p.23
Hunt, op. cit. p. 123, 124.
18
Ibid, p. 124.
19
Merlín R. Carothers, p. 39. Editorial VIDA.
16
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LOS FUNDAMENTOS DE LA SANIDAD INTERIOR
En Col. 2:8, 23, leemos:
“Mirad que nadie os haga cautivos por medio de su filosofía y vanas sutilezas, según la
tradición de los hombres, conforme a los principios elementales del mundo y no según
Cristo... tales cosas tienen a la verdad, la apariencia de sabiduría en una religión
humana... pero carecen de valor alguno contra los apetitos de la carne”.
En Estados Unidos, el Dr. Robert L. Wise, quien encabeza la “Renovación de la Iglesia Presbiteriana”
comenta que en su primera sesión de S.I. Jesús se le aparece por la técnica de la visualización:
“Comencé a visualizarme a mi mismo como un niño de 8 años... para gran asombro de mi
parte, yo, un clérigo reformado, ordenado y con un doctorado en psicología, vi que esto me
esta sucediendo, una imagen de Jesús se movió lentamente hacia mi...”20
Dice Olivia Vega, esposa de Gonzalo Vega, de los Centros Calacoaya:
“Vamos en este momento a imaginarnos cuando estábamos en el vientre materno;... vamos
a cerrar nuestros ojos y vamos a imaginarnos cuando estábamos en el vientre materno,
pero Jesús está junto a nosotros...
Cuantas veces esa concepción fue fuera del matrimonio y allí hubo un rechazo... Toda esa
etapa intrauterina; cuantas situaciones tuviste que vivir... cuantos impresiones tuvo tu
madre en el embarazo.. Que situación tan insegura el trauma del nacimiento... era un
mundo totalmente desconocido para mi”.21
En la S.I. se dan casos ridículos y risibles como los siguientes:
“Como Jesús es Señor del tiempo, puede hacer lo que nosotros no podemos... pedimos a
Jesús que nos acompañe de vuelta al pasado... es el niño interior del pasado el que está
siendo sanado..”22
Otro caso es el de una joven envuelta en las drogas y el crimen. Sentía “auto-odio” por ser hija
ilegítima. La solución no fue llevarla a Cristo, sino llevar a la joven de vuelta, en una “meditación
dirigida” en la que Jesús fue visualizado como “presente” durante el acto de fornicación que causó su
concepción, haciendo “santo y puro” un acto que no lo era.23
Ante tantas patrañas debe uno decir lo siguiente:
1. Es cierto que Jesús es Señor del tiempo, pero por las Escrituras sabemos que Dios no actúa así
con el pecador.
c20 Wise, L. Robert en “ g of the Memories: A Prayer Therapy for you”. (Christian Life Magazine), 1984, p. 63-64”
21
Vega, Olivia en “Sanidad Interior I y II”, cassettes, citado por Jorge Erdely en “Cuando el Sistema no Funciona” p. 66
22
MacNutt, Francis en “ Healing” (AveMaría Press) 1974, p. 186.
23
Stapleton, Experience, p. 22, 23.
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2. No se puede regresar el tiempo para nuestra realidad humana, creerlo sólo es engañarnos. Sería
muy cómodo, igual que en las películas de ciencia ficción, podríamos hacer que no sucediera lo
que ya sucedió.
3. El hecho de practicar o aplicar la S.I. no hace que una persona deje ser hija ilegítima. Le guste o
no, le duela o no, si una persona es hijo o hija ilegítima, jamás se podrá cambiar su situación.
Sólo falta que haya algún listo que quiera cambiar de padres o de raza, o de color, o de estatura,
etc. y el colmo de los colmos será cuando digan que por fe ya lo lograron.
4. Si esto es ridículo, es vergonzoso decir que un pecado de fornicación puede ser santificado solo
por el pretexto de hacer sentir bien a la chica, o al hija, etc. Entonces mi pecado no fue pecado.
5. Ese Jesús imaginario no es el Hijo de Dios que presenta la Biblia, pues jamás en las Escrituras
se dice que Jesús se aparece porque una persona lo visualice. Afirmarlo o aceptarlo sería
desconocer la Palabra de Dios o predicar a otro Cristo.
6. No importa el grado de vivencia, ni la calidad moral de la persona. Cuando Dios nos presenta
algo en su Palabra nadie debe estar por encima de Dios, así sea el Dr. Cho que Jesús se le
apareció como bombero.
7. Ese Jesús no es el Dios de la Creación, creador y sustentador de todo lo que existe. Es cierto
que hay una vivencia, una experiencia, un contacto, pero ese contacto no es con Dios, creemos
que esos contactos son con los demonios.
8. La visualización y la imaginería han sido durante mucho tiempo reconocidas por hechiceros
para contactar el mundo espiritual, pero no precisamente el de Dios.24
9. La S.I. no es una doctrina Bíblica, sino una estratégica satánica para embabucar a muchos
incautos.
10. Esta comprobado científicamente que tanto en el vientre como en el nacimiento la mente no
tiene la capacidad de trasportar memorias.25
Vale la pena oír al teólogo A W. Toser:
“Hay muchos Cristos falsos entre nosotros en nuestros días. John Owen, el viejo puritano,
advirtió a la gente de su tiempo: “Tenéis un Cristo imaginario, y si estáis satisfechos con
un Cristo imaginario, tenéis que daros por satisfechos con una salvación imaginaria”.26
Otro problema en la S.I. es la confusión de términos. Al leer todo lo relacionado que hemos encontrado
del tema se percibe que lo que una palabra significa en la Biblia, para ellos tiene otro totalmente
distinto. Sólo presento dos ejemplos.
24
Citado por Hunt, p. 117. No estamos en contra del uso correcto como en la arquitectura, el arte, la música, etc.
Ibid, p. 172.
26
Toser A. W. En “Total Commitment to Christ”, citado por Gems From Toser (Christian Publications, 1969, p. 24.
25
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Para la precursora de la S.I., Agnes Sanford, el hecho de que una persona a través de la imaginación o
visualización, pueda vencer sus traumas, miedos, etc, a esto ella lo llama “redención”.
Con todo respeto tenemos que decir que la Redención en las Escrituras no tiene nada que ver con la
curación de las memorias, sino con la obra soteriológica de Jesús en el Calvario.
Para los maestros de la S.I., la palabra salvación significa sanidad de los traumas. Debemos aclarar que
una de las acepciones de salvación es “salud”, por eso en la versión antigua 1909 los textos del Nuevo
Testamento aparece “salud” en lugar de salvación. Pero el mismo contexto indica que no tiene nada
que ver con visualización o sanidad de enfermedades, sino con la obra salvífica del Calvario.
Lo misma confusión ocurre con las doctrinas de Guerra Espiritual, Demonios, Maldiciones, Fortalezas,
etc.
Otro problema es como siempre el hermenéutico.
El texto preferido por los sanadores de la curación de las memorias es el de Luc. 4 18.
“El Espíritu del Señor está sobre mi, por cuanto me ha ungido para dar buenas
nuevas a los pobres; me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; a
pregonar libertad a los cautivos, y vista a los ciegos; a poner en libertad a los
oprimidos”.
Jesús no se estaba refiriendo a hacer sentir bien a la gente. “Quebrantado de corazón” en el lenguaje
bíblico es alguien dolido por sus pecados, porque ha ofendido a Dios.
El caso más chusco lo presenta Glenn Brown:
“Dios le dijo al hombre que la tierra sería maldita... la tierra produciría cardos y
espinos... El permitió que esos espinos fueran sobre su cabeza para romper la
maldición”.27
Por lo tanto concluimos que nos hay forma de sustentar la S.I., ni por medio de la Escritura, ni por la
ciencia, ni por el sentido común.
Joel Jiménez es mexicano, hijo de pastor, egresado de varios seminarios y universidades cristianas donde ha estudiado
Teología, Psicología y Música. Su enfoque ministerial ha sido la docencia, la pastoral, la consejería y la música. Tiene
estudios de actualización en Holanda, Estados Unidos, México, Cuba, Costa Rica, Ecuador y Argentina. Actualmente es
miembro de la Junta Nacional de Estados Unidos y Canadá del área hispana de la Iglesia del Nazareno y Director de
Ministerios Hispanos en el Distrito Suroeste de Ohio de la misma denominación. Cursa el Doctorado en Teología en
“Gordon Conwell Theological Seminary”, en Boston, MA. Estados Unidos. Agradeces sus comentarios a:
[email protected]
27
“Sanidad Interior”, p. 62.
9
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