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ACTAS PERUANAS
DE ANESTBSIoLocIA
150 ANOS DE ANESTESIA EN EL PERU
LB47 - L997
JULIAN SANDOVAL Y BRAVO
Pionero de La Arrcstesiologín en
eL
Perú
Por: César Cortéz Román
Eran los dias de gran agitación en la Europa de
Napoleón y también en laAmérica hispana, cuando en 1808, nació Julián en la apacible ciudad
del Lago. Probatrlemente vivió desde pequeño en
la Ciudad de los Reyes (l) y sus ojos vieron el
nacimiento de la República Peruana.
Estudió en el Colegio de la Independencia (antes
de Agosto de 182I, Real Colegio de Medicina y
Cirugia de San Fernando de Lima) (24) y obtuvo
el título de médico (1840) ante el Tribunal del
Protomedicato (1)(37).
En 1843 inicia una dilatada carrera docente, regentando la cátedra de Instituciones Quirúrgicas
(L2) y el 13 de Marzo del mismo año se incorpora
al ejército Peruano como Cirujano Mayor
(Lr){25)(27)(28).
31 de Marza de 1846 es la fecha de inicio de sus
veinte anos como Director del Hospital Militar de
nSan Bartolomé,(25)(26)Í27), en el cuai hizo importantes obras y mejoras .(29X30).
Aparte de muy efimeros intentos como los Anales
Medicales de Bradin (1817) o nl.a Floresta,(1831),
hasta 1856, (Gaceta Médica de Lima), se desconoció una publicación médica nacional en regla
{19). De tal manera que cuando un Jueves 29 de
Abril de 1847, el Dr. Sandoval administra la primera anestesia en el Perú, sólo el diario uEl Co:mercio» registra ese acontecimiento bajo el titulo
dC «PRIMER ENSAYO DE ETERIZACION EN LA
CAPTTAL, (36).
El 2O de Abril, o sea días antes, el
articulista de
uAspiración del étep ensaya en si mismo y dice
que para administrar el éter se debe emplear un
aspirador graduado, para que de esa manera, la
dosis se acomode a la persona (12).
El 3 de Mayo se publica la -Operación practicada
eL 29 de Abril por eL Dn D. Julidn Sandoual en La
Bottca de Mn Rentg, en un criado delTeniente Co'
ronel D. MantrcL Foreelledo,,.
oUnmoza robusto recibió un golpe que leJracturó el
brazo derecho en dos partes: en eL cuello, del
húmero A en su tercio iryfertor: de manera que La
parte media del hu-eso tomó una dirección oblícua.
EstaJractura doble, que, además, presentaba uarías esqutrlo,s, Le ocasíonaba grandes padecimiento s. Ia reducción de una simple Jracfira, que p or sí
es graüe, ejecutada en La que hemos dícho, sobre
partes destrozadas, harto conhsas, é intensamente
irflamadas, nece sariamente deberia arrancar gritos penetrantes g terrtbles dolores: pero por Jortuna se tta hecho La operación sín haber causa.do La
menor mortificacíón al eryfermo- s entado é ste en unn
silleta, a-spiraba eL éter de una botella, que tenía
en et Jondo wta espo4j a empapada de éter sulfúnco: diclabotella estaba arma.da de dos tubos adaptados a dos aberturas de La parte superio¡ uno
curuo de cerca de 2 pies de Longihtd, g otro recto de
doble targo; el prímero puesto en La boca seruía para
la ínhalación, g el. segundo, aL que se apltcaba un
fuelle en acctón, paraJormar una corriente de uapor etéreo que salíese por el tubo opuesto. a Los
doce mínutos terúa eL eryfermo La cabeza pesada;
Los pdrpados se le cerraban, g sin embargo no dormía; se había apoderado de él como ut'ta especie
de embriaguez. Pregunta-do si"Le doliacontestó que
sí igualmente expresaba su sensÍbilidad. cuantas
uece s se te pellizcaba ó híncaba con una fij era: mas
fué grande la sorpresa aL notar que eL brazo Jracturado podía ÍLouerse sin ningún qrrcjido del enJermo, cuando poco antes eL menor contacto despertaba unfuerte dolon se cregó entonces Llegodo el
momento pre cís o : s e red4j o La Jr achra manej ando
eL brazo como st se hallase bueno, se colocó eL uendqje, las tablillas & todo en 2 minutos, g es
escusa.do repetir que sin eL más Lijero dolor del paciente. Durante la operación continuó aspirando;
luego que se termínó, se Le reconuino que como no
Lahabía sentido g decía por el contrarlo que ha-sta
las hincadas con la Qjera lrrs notaba: mas estaba
entónce s mug narcotizado, b atbucía algunas p alabras g no podía pararse; de cuyo estado no salió
sino después de haberlo saca.do aL patio para que
ACTAS PERUANAS
DE ANESTESIOLOGIA
aire Libre: Vuelto en
Le habíapasado,(36).
respíra"se
eL
s¿
no sabía
Lo
que
Don Julián contrajo matrimonio con Matilde
Orbegoso Pinillos Cacho, hija del Mariscal presidente de la República Luis José de Orbegoso y
Moncada, y fue médico personal del General
Castilla (t 1)(15)(17)(20). Se afirma que cuando el
mandatario lo llamaba por sus servicios, le
decÍa:,trátame como soldador, a fin de que no se
sintiera cohibido por su alta investidura (f)(15).
El Dr. José Santos N{ontero, de protagónica actuación médica durante la independencia nacional, fue jefe de la Sanidad Militar, hasta que su
quebrantada salud se lo permitió {17 de Agosto
de 1854). Julián Sandoval asume el cargo (13) y
muy pronto se ven los frutos de su gestión.
Colaborador y amigo de Ca.stilla y Cayetano
Heredia, ayuda a gestar el Reglamento del 23 de
Mayo de 1855 en el que se sistematiza el servicio
en el Hospital Militar. El 13 de Julio de ese mismo
año se reorganiza el cuerpo médicos militares,
sustentándolos en bases cientificas y se crea puestos médicos para unidades de tropa y buques de
la Armada (6X11).
Don Julián, colaborador del patriarca cataquence,
es miembro importante 6s l¿ uplaneada, «generación Herediana de 1856, fundadora de la nueva
Facultad de Medicina de Lima y concorde con la
Gran Revolución Liberal de mediados de la centuna {2)(12). Junto con Camilo Segura y Miguel de
los Ríos redacta el Reglamento Orgánico de la
Facultad de Medicina, para complementar la histórica ley promulgada. por Ramón Castilla el 7 de
Abril de 1855 (12).
El primer número de la nGaceta Médica de Lima»,
salió de imprenta el 15 de Agosto de 1856. A partir de entonces, Sandoval es traductor, colaboradory articulista (l IX2OX34). Veinticinco dias después, se oficializa la oSociedad Médica de Lima,
que reemplaza ala Junta Directiva de Medicina,.
El Dr. Sandoval pertenecié a las dos y fue su presidente el 58 y 60 (12X20).
Ese mismo dÍa (9 de Setiembre de 1856), es nombrado uProfesor titulap de oClÍnicas externas-hombres,. El Hospital de San Andrés» recibió a los
alumnos de D«rn Julián; hasta 1856, en que fue
nombrado titular de «Clinicas externas-mujeres,
y pasó al hospitalde Santa Ana con los alumnos,
hasta «poco antes de su muerte» (12X14)(20)(38).
El 24 de Abril de 1857, el Cirujano Mayor D. Julián
Sandoval, recibe el nombramiento de nDirector
General de Hospitales, de acuerdo con la ky Orgánica promulgada por la Convención Nacional (6
de Marzo de 1857) que consagra las disposiciones
6I
del 55. (6)(27).
trn 1860 inicia su vida polÍtica
como
representante(diputado) por la provincia de
Chucuito al Congreso Constituyente: Luego lo
serÍa a los congresos ordinarios y extraordinarios
de 1862, 64 y otros (5).
Entre 1862 y 63 reahza un üaje a Paris y Londres, cumpliendo er¡cargos de la Facultad de Medicina. Aprovecha la oportunidad para observar
los avances médicos y militares europeos(14){2O).
Al regresar se reincorpora a sus funciones en el
Congreso, Ejército y Facultad de Medicina
(r)(r4)(27).
La experiencia ganada, sus relaciones sociales y
su posición personal lo llevan a presentar ,,Al Sr.
Gral Ministro de Guerra y Marinar, un proyecto
de ley para la reglamentación de un Cuerpo de
Sanidad militar (16). Sabemos que el esfuerzo
quedó en proyecto, quizás por diferencias políticas talvés por simple indolencia. A esa desilución
se suma la de su destitucién por decreto de
Mariano Ignacio Prado(39), aunque le quedó el
corto consuelo de seguir al frente del Hospital
Militar de San Bartolomé(Sf ). Digo corto, porque
antes de un año, ese Hospital era entregado por
la administración Prado a la Beneficiencia de
Lima(4O).
A propósito del Combate del 2 de Mayo de 1866,
Leonardo Villar hace un brillante editorial en la
Gaceta Médica de Lima:
... nOh, prodigios del fuego patrio!. Por é1, los médicos, hombres que tenían compromisos que llenar en la capital, y algunos de los cuales, Cirujanos del Ejército en tiempos de la pasada administración, habian sido depuestos por el actual gobierno por diferencia de opiniones han prescindido de toda consideración, de todos sus cuidados
y hasta de la familia propia, para ir, exponiendo
su vida, a socorrer con su ciencia á la gran familia-la humar.i¿¿¿, (22).
Se referia sin duda a su amigo y colega D. Julián,
el que según nEl Peruanor, salió sorteado en la
«sexta serie de médicos, para recibir a los heridos
en el local de la estación del ferrocarril el día del
Combate, (41). Información que él mismo confirma (ll) (17).
En su afán por organizar la Sanidad Militar Peruana, y ya en vÍsperas de la Guerra del Pacífico,
Don Julian Sandoval hace un nuevo y esteril intento ante los responsables de la época. A propósito de conflictos europeos y Guerra de secesión
norteamericana, menciona las enseñanzas de
Dunant, Florence Nightingale, las Conferencias
Internacionales de Ginebra y las publicaciones de
62
ACTAS PERUANAS
oeANESTESroLocrA
la Oficina de Cirugia del Departamento de Guerra
de Washington (17). Con toda sinceridad
escribe:»Confesamos que nos ocasiona honda
pena, notar la indiferencia con que se ha mirado
en nuestro paÍs, todo arreglo del Servicio de Sanidad Militar,...,los Estados Unidos y la Alemania
nos han trazad.o el camino que debemos seguir»
(r7).
Desconozcó la existencia de alguna obra que muestre una historia real y completa de Ia atención
médica durante la Guerra del 79. La lectura desapasionada de libros y documentos peruanos,
chilenos ybolivianos hace que me atreva a concebir: Que los médicos de los países involucrados y
de otras nacionalidades cumplieron con su deber
con más optimismo que con medios materiales y
que en general, dichos profesionales, respetarorr
los emblemas de la Cruz Roja que vistieron.
nEl médico e historiador Carlos Enrique Paz Soldán
ha relatado como se gestó la creación de la Cruz
Roja en el Perú. Esta versión cuenta con el respaldo de la autoridad y seriedad del autor, quien
trasmitió lo que escuchó de labios de su abuela
Dña. Francisca Benavides de Paz Soldán, esposa
del historiador y polÍtico Mariano Felipe
Paz
Soldán que fue uno de los protagonistas del suceso. La misma narración le fue confirmada años
más tarde por su padre Carlos Paz Soldán, quien
fue miembro prominente de la Cruz Roja del Perú
por treinta años y por el Dr. Julián Sandoval. Refiere C. E. Paz Soldán que en la noche del 4 del
Abril de lB79 retomaba su abuelo a su casa de la
calle Boza, absorto por los problemas tle la inminente guerra y de las conversaciones que acababa de mantener como Ministro de Instrucción,
Culto y Beneficiencia con el Presidente Mariano
Ignacio Prado. AI llegar a su domicilio lo esperaba
en la biblioteca su antiguo amigo de la infancia el
doctorJulián Sandoval, llamado por su esposa de
Mariano Felipe. Ante el dramático problema que
afrontaba el paÍs, ambos amigos se mostraban
consternados y sostuvieron el siguiente diálogo:
Mi querido Julián-díjole Paz Soldán-hay que orgar,tzar la cooperación médica para hacer rostro
a la calamidad que ha estallado a pesar nuestro.
Asi se hará Mariano-respondió con firmeza el doctor Sandoval-y mañana pediré a la Facultad de
Medicina para que tome un acuerdo conforme a
los deseos del Presidente que me has expresado.
Te respondo que la Facultad toda, sabrá hacer
honor al encargo y bien sabes del patriotismo de
quien Ia dirige, nuestro amigo Manuel Odriozola.
El médico y el politico se despidieron con un efusivo abrazo, sellando asi el compromiso de honor
que habian contraido ante la gravedad de la situación por la que atravezaba la patria,(1).
Al dÍa sisuiente Chile declaraba la guerra al Perú.
Sandoval trasmitió el encargo al Decano de la
Facultad de lVledicina Dr. Odriozolay en la misma
fecha se convocó al cuerpo docente de Sal Fernando a seslón extraordinaria. En el acta dicha
sesión y escrlta de puño y letra por el Dr. José
Casimiro Ulloa, leemos que hecha la solicitud, se
nombró una comisión constituÍda por los doctores Julián Sandoval, Mariano Arosemena Quesada
yJosé Casimiro Ulloa, bajo la presidencia del primero (l) (18).. La comisión elaboró un proyecto
que contenia todo lo que se conocía por aquel entonces en materia de orsanización sanitaria para
tiempos de guerra. Nada se dejó de contemplar en
la organización de las AMBUI-ANCIAS CIVILES,
indicándose el personal y el material sanitario
correspondiente a cada unidad. Se trazaron modelos y dibujos explicativos de las carpas, carruajes y demás vehÍculos de transporte y, fundamentalmente, se procedió a redactar el reglamento
respectivo. el I5 de Abril, todo ello se puso a consideración de la Facultad.
El decano Odriazola elevó el proyecto al Director
General de Beneficiencia: uJuzgando conveniente
dejar al gobierno la tarea organtzar el Servicio
Sanitario Militar, en forma da Ambulancias Mili,
tares, contando para ello con el concurso de los
Cirujanos del Ejército,(1) (35).
Antes del mes de creada, quedó suprimida la Junta
Central de Ambulancias Civiles (11 de Mayo). La
misma disposición, creó la Sociedad Peruana de
la Cruz Roja, que afirmaba la adhesión nacional a
la Convención de Ginebra de f 864 (20).
Se lograron enviar al sur un total de cuatro Am=
bulancias, todas ellas llenas de generosidad popular, pero demasiado pocas para 1o que se venia
(4) (32).
La primera Ambulancia fue embarcada en el Callao con destino a Pisagua el5 de Mayo (1). El Dr.
Julián Sandoval fue Cirujano Jefe del Ejército del
Sur y Director de la Primera AmL¡ulancia Civil. No
obstante su avanzada edad-contaba entonces 71
años-se dirigió al escenario de las operaciones
bélicas, instaiándose en el lugar llamado Alto del
Molle. Dirigió la asistencia de los heridos en el
Combate de Pisagua, desde el trospicio situado a
pocas millas del puerto. Luego del desembarco de
las tropas chilenas y ante la imposibilidad de continuar la marcha del Ejército peruano, improvisó
un hospital de Sangre en la Noria, con una de las
secciones de su Ambulancia. Posteriormente asistió al encuentro de San Francisco y a lavictoriosa
ACTAS PERUANAS
DE ANESTESToLocTA
jornada deTarapacá, el27 de Noviembre de 1879
(t)
(3) (20) (s3).
A comienzos de IBBO, el gobierno de Nicolás de
Piérola nombró Cirujano Jefe de los Ejércitos al
Dr. José Casimiro Ulloa. Este nombramiento apartó a Sandoval del servicio activo (1) (4) aunque no
de la lucha (lO)"
Magdalena Peralta de dieciocho y Lola Chocano
de quince años, fueron dos humildes costureras
limeñas que vivian en la calle delAlma de Gaspar.
Ellas vendieron las pelucas confeccionadas con
sus propios cabellos para contribuir con la recaudación de fondos pro Ambulancias Civiles. uHa
habido quien recoja sus nombres de persona tan
respetable como el Dr. Julián Sandoval. anhelando porque el Perú entero recuerde con ternura
esa acción,, (8) (9).
Se perdió la guerra a pesar de
la resistencia y el
pueblo peruano soportó los duros años de la derrota. Habia mucho que hacer frente a la adversidad y D. Julián continuó en la universidad (38).
Carlos Enrique Paz Soldán relata que en n sus años
niños, la figura de Julián Sandoval le era familiar. Escribe: Me parece verlo con sus arrugas y
sus cabellos blancos, erguido pese a los años,
siempre de levita y sombrero de copa, limpio y
pulcro en su persona y bondadoso de alma, (15).
En nEl Comercio, del lunes 1O de Noviembre de
19O2, leemos:,Sensible: A las 2 de la madrugada,
dejó de existir de avanzada edad, el Dr. Julián
Sandoval. El extinto fue hombre visible entre los
de su generacién. En distintas ocasiones ocupó
asiento en el Congreso como representante. Figuró entre los médicos distinguidos de su época. Fue
nombrado durante el gobierno del General Castilla,
Cirujano Mayor del Ejército y estuvo entonces en
Europa en misión científica. El Dr. Sandoval era
miembro de la Sociedad de Beneficiencia Pública
de Lima y el catedrático más antiguo de la Facultad de Medicina a la que concurrió a dictar su
clase hasta poco antes de su muerte (38).
Fue enterrado a las cuatro de la tarde del I I de
Noviembre en el cementerio Presbitero Maestro,
San Simón 124 (23). Tenía entonces, 94 años.
Entre las publicaciones del Dr. Sandoval tenemos
impresas en la Gaceta Médica de Lirna: Informe
sobre la Vacuna (1857). Discurso acerca de la fiebre amarilla (1857), Proyecto de Sanidad Militar
(1865, Hospicio y Colegio de Maternidad (1876),
Sanidad Militar. Estudio para su organización en
el Ejército y la Armada del Perú (1876), Reglamento de PolicÍa Sanitaria para los'ó""o" de épidemia general (1876) y traducciones diversas.
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le rlc!¡icra arralrcSf Iritr's penelriltld ,l l!¡':
rihle¡ ilolore* p rrr prir friuae ¡¿ l¡n heclp l
ti.lrcJ ctuq<lo la urc¡,or ¡u'r' i
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tiScicion rl ¡,¡'ferrer»--Sc¡rlRdñ átc c!¡ t¡¡¡4
¡ill.l¡. rsp.rei,¡ ¡l ctcr rle rrl¡r [&t€¡¡a' tlu'¡
to¡rir ¡o- cl fo¡rto uar o{¡rri{ drpñFadr I
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