Una suegra que era bien metiche, pero metiche, metiche, se murió

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Una suegra que era bien metiche, pero metiche, metiche, se murió, y en su tumba le pusieron este
mensaje: "Aquí descansa ella, y en la casa descansamos todos".
Un manicomio lleno de locos decidió sacar unos cuantos del lugar porque estaba muy lleno, y para eso
les hicieron una prueba a los locos, dibujaron una puerta en la pared, y el que se diera cuenta que la
puerta no era de verdad lo iban a sacar, el primer loco pasó y trató de abrir la puerta y en eso otro
loco no paraba de reírse, la sospechas del encargado fue que él ya no estaba loco, y otro loco trató de
abrir la puerta, mientras tanto el otro loco todavía seguía riéndose, en eso le llama la atención el
encargado al loco y le pregunta:
¿Y tú? ¿Por qué te ríes?
El loco contesta:
¡Es que aquí, traigo las llaves!
2
Tres hijos dejaron su hogar, se independizaron y prosperaron. Cuando se juntaron nuevamente,
hablaron de los regalos que habían podido hacerle a su madre.
El primero dijo:
-Yo construí una casa enorme para nuestra madre.
El segundo dijo:
-Yo le mandé un Mercedes con un chofer.
El tercero dijo:
Les gané a los dos: ustedes saben cuánto disfruta mama de leer la Biblia, y saben que no puede ver
muy bien. Le mandé un gran loro que puede recitar la Biblia en su totalidad. Les llevó 20 años a 12
Franciscanos enseñársela. Contribuí con $1.000.000 por año durante 20 años, pero valió la pena.
Mamá sólo tiene que nombrar el capítulo y el loro lo recita.
Pronto, la Mamá envió sus cartas de agradecimiento.
Escribió a su primer hijo:
- Andrés, la casa que construiste es tan grande. Yo vivo en un solo cuarto pero tengo que limpiar toda
la casa.
Escribió a su segundo hijo:
- Miguel, estoy demasiado vieja como para viajar. Me quedo en casa todo el tiempo, así es que nunca
uso el Mercedes.
Escribió a su tercer hijo:
Mi queridísimo Luis, fuiste el único hijo que tuvo el sentido común de saber lo que le gusta a tu
madre....
...el pollo estaba delicioso...
3
Un ladrón a la media noche se mete en una casa a robar. Entra por una ventana, y cuando está
adentro en la oscuridad oye una voz que dice:
¡Jesús te está mirando!
Entonces, el ladrón se asusta y se detiene. Luego como ve que no ocurre nada continúa. Y de nuevo la
voz le dice:
¡Jesús te está mirando!
El ladrón asustado prende la luz y ve que la voz venía de un loro que estaba en una jaula, y el ladrón
le dice:
¡Ahhh que susto me diste! ¿Cómo te llamas lorito?
Y el loro le responde:
Me llamo Pedro.
Pedro es un nombre extraño para un loro.
Y el loro le contesta:
Más extraño es el nombre Jesús para un Doberman.
4
Estaba un borracho en una esquina, cuando una mujer pasa caminando, el borracho la observa y le
dice:
¡Adiós fea!
La mujer indignada se da media vuelta y le dice:
¡Borracho!
El borracho con una sonrisa le dice:
Sí, pero a mí, mañana se me pasa.
5
Escenas
1ra Escena: Un hombre limpiando
2da Escena: Un hombre planchando
3ra Escena: Un hombre ordenando
¿Cómo se llama la película?
Misión imposible
6
En una rueda de prensa:
"Y diganos, señor intendente, ¿cuáles han sido los resultados del programa experimental de
reinserción de reclusos?"
"Pues hemos tenido una de cal y una de arena; de los dos delincuentes que se presentaron voluntarios
para el proyecto uno ha decidido hacerse abogado, pero parece que el otro quiere seguir por el buen
camino
7
En el cielo, mientras San Pedro está repartiendo las habitaciones llegan al mismo tiempo un sacerdote
y un abogado. San Pedro envía al abogado a un penthouse con TV, aire y otros lujos, mientras que al
sacerdote lo envía a una habitación sencilla con un abanico, una vela y la Biblia. El sacerdote, enojado
por lo que recibió, sale a reclamar y le dice a San Pedro:
"¿Por qué a mi, que he sido un hombre dedicado a todo lo bueno, me das una habitación sencilla y a
éste que es un abogado le das un penthouse?"
Entonces San Pedro le contesta:
"¡Lo que sucede es que sacerdotes tenemos de sobra, pero éste es el primer abogado que nos llega al
cielo!"
8
Se cae la barda que divide el cielo del infierno. Y empiezan a discutir el diablo y San Pedro acerca de
quién debe de reparar el daño. Al no ponerse de acuerdo, el diablo le propone a San Pedro que
consulten con sus respectivos abogados y se vean en 2 horas. El diablo llega muy puntual y San Pedro
no aparece hasta como 8 horas después. El diablo lo aborda impaciente y le dice:
"Oye Pedro mis equipo de abogados dice que tú tienes que pagar."
A lo que San Pedro responde:
"Pues me ganaste porque en cielo no encontré un solo abogado. ¡Tú los tienes todos!"
9
Un hombre en su lecho de muerte reunió a su abogado, su doctor y el sacerdote de su parroquia y les
entregó a cada uno un sobre con $25,000 en efectivo. A cada uno le hizo prometer que tras su muerte
pondrían los tres sobres en su ataud, ya que quería tener suficiente dinero en la otra vida. Una
semana más tarde el hombre murió. En el velorio, el abogado, el doctor y el cura depositaron un
sobre en el ataud y se despidieron de su amigo.
Casualmente, los tres se encontraron meses después. El cura, sintiéndose culpable, confesó que el
sobre sólo contenía $10,000, ya que pensó que en lugar de desperdiciar ese dinero, podía
aprovecharlo para una buena obra. El doctor, conmovido por la sinceridad del cura, confesó que él
también se había quedado con parte del dinero y que el sobre sólo contenía $8,000.
Para entonces el abogado estaba que expoltaba de ira. Dijo que estaba profundamente desilusionado
del comportamiento de sus dos amigo. Y añadió: "Yo soy el único que respetó la promesa que hicimos
a nuestro amigo. Quiero que sepan que el sobre que puse en el ataud contenía la cantidad completa.
¡De hecho, mi sobre contenía mi cheque personal por los $25,000!"
10
El doctor Chinvin, que tenía fama de malo, se encontraba peleando en un juicio crucial: a su cliente se
le acusaba de violación de una menor de edad. Antes de entrar al juicio el abogado habla con su
defendido y lo alecciona:
"Mira, a todo lo que te digan responde que no".
"Trataré", responde su cliente.
Llegado el momento, el juez le pregunta al acusado:
"¿Y usted se considera culpable o inocente?"
Luego de temblar un rato, el inculpado responde:
"¡Culpable, señor juez, culpable!"
Retorciéndose en su asiento, el doctor Chinvin se preocupa:
"¡Coño e' la madre, me jodí!"
El juez prosigue:
"¿Qué puede decir la defensa?"
De inmediato, el doctor Chinvin puntualiza:
"Señor juez, mi defendido es culpable y solicito el encarcelamiento de la niña que ha perjudicado a mi
defendido".
En ese instante, la gente presente, el juez, la defensa, etc., salta y exclama:
"¡Pero usted está loco!"
Sin inmutarse, el doctor Chinvin acepta:
"Claro que no, pero si ha usted le pica un oído y usted se mete el dedo y se da pa' arriba y pa' abajo;
pa' la izquierda y la derecha, ¿quién es él que goza un bolón: el deo o el gueco?"
12
Una maestra pregunta a los chicos sobre los trabajos que realizan sus padres para ganarse la vida: "A
ver Pedro: ¿A qué se dedica tu madre?"
"¡Es doctora, señorita!"
"¡Bravo! Ven, una profesional! ¡Eso indica que las mujeres han ganado un lugar en la sociedad! ¿Y tu
papá, Elenita?"
"¡El es cartero, señorita!"
"¡Cartero!, que oficio tan sacrificado... es realmente admirable. ¡Los carteros son muy necesarios!...
¿y tu papá, Pepito?"
"¡Mi viejo toca el piano en un prostíbulo, señorita!"
"Aaahhh, ya veo", dice la maestra avergonzada, y cambia de tema para disimular: "Bueno, vamos a
ver cuánto estudiaron de geografía, saquen una hoja..."
Más tarde, terminada la clase, la maestra va a pedir explicaciones al padre de Pepito, el que la atiende
muy cordialmente:
"Mire, yo no quiero meterme en su vida privada, pero Pepito anda diciendo que usted toca el piano en
un prostíbulo."
"¡Claro! ¿Y cómo carajo quiere que le explique a mi hijo de siete años que soy abogado?"
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