ALUMNO: Silvina Laura Espinosa COMISIÓN: 3ª A.T. AÑO:2020 MATERIA: Fisioterapia II TRABAJO Nª: 1 TIPO DE TRABAJO: Investigación TEMA: - Rol del Kinesiologo dentro de la pandemia-Afeccines del COVID-19 sobre el sistema respiratorio (2020): especial COVID-19 Coronavirus: los kinesiólogos son una pieza clave en la recuperación de los pacientes Estos especialistas que ven afectada su posibilidad de trabajo por el aislamiento, pero son fundamentales para ayudar a recuperar la capacidad pulmonar de quienes superaron el Covid-19.Los profesionales viven momentos de incertidumbre laboral a causa del aislamiento dispuesto para minimizar los casos de coronavirus, aunque la propia pandemia los está transformando en un engranaje determinante en la recuperación de la capacidad pulmonar en las personas afectadas. ACTUALIDAD EN LAS PROVINCIAS ARGENTINAS En Tucumán, más de 200 kinesiólogas y kinesiólogos trabajan en los hospitales públicos donde "cumplen un rol fundamental" en el tratamiento de pacientes internados, señaló Liliana Perret, titular del departamento de rehabilitación del Sistema Provincial de Salud (Siprosa), (Télam.) (2020): especial COVID-19 Como prevención por el coronavirus, los profesionales tuvieron que incorporar elementos de protección para evitar contagios: una doble máscara facial para cubrir el rostro y los ojos, además de ropa impermeable. La especialista precisó que el sistema de salud tucumano cuenta con 135 profesionales mas unos 90 que fueron sumados ante la emergencia sanitaria, estos últimos estarán hasta septiembre como mínimo. Además, otros 600 kinesiólogos se desempeñan en el sector privado y solo atienden casos de urgencias a través de videollamadas ya que los consultorios deben permanecer cerrados: "Es una alternativa que se está usando para acompañar a los pacientes que tienen un deterioro importante, como una forma de darle contención a los familiares que los cuidan en sus casas"( Perret). En San Luis, por su parte, el licenciado en kinesiología Fabio Zabala dijo a Télam que de los aproximadamente 1.500 profesionales con los que cuenta la provincia "muy pocos se especializan en vías respiratorias" y muchos menos en la actuación de las unidades de terapia intensiva, debido a que el campo de práctica es "muy reducido en San Luis". Zabala, que trabaja en el ámbito privado, sostuvo que al igual que muchos de sus colegas, la pandemia le ha provocado una crisis económica "muy importante" porque debieron cerrar sus consultorios y gimnasios y son monotributistas clase C, para los que el Estado aún analiza soluciones. El problema en la práctica kinesiológica de San Luis es que los profesionales con experiencia y capacitación para llevar adelante una buena atención en la pandemia "son muy pocos" y que la mayoría de los nuevos egresados "no pasaron por la unidad de terapia intensiva" porque la práctica es "limitada por cuestiones de infraestructura", En Córdoba, Luis Carpio, presidente del Colegio de Kinesiólogos y Fisioterapeutas de Río Cuarto, manifestó que "es una situación preocupante porque desde el inicio de la cuarentena los profesionales no están trabajando", según informó el medio digital de Río Cuarto, Lv16."Son muchos los colegas que acatan el aislamiento y, salvo en una urgencia, no podemos concurrir a nuestros consultorios", Federico Johnston, licenciado en kinesiología y fisiatría que trabaja en una clínica privada de la capital federal, que la situación laboral del sector es crítica para la mayor parte de los profesionales porque "ni los centros funcionan ni los pacientes, muchos de riesgo, pueden acudir a ellos".(Telám). De este modo, se genera un problema porque los especialistas requeridos para alistarse en los equipos de terapia intensiva que se están multiplicando por todo el país "son pocos" y el resto "no tiene dónde ni cómo trabajar",( Johnston). También los kinesiólogos de Santa Cruz viven una situación desesperante por la deuda que mantiene el gobierno con ellos por facturaciones desde octubre del año pasado. (2020): especial COVID-19 Luis Megías, prosecretario de la Asociación de kinesiólogos de Santa Cruz, "la obra social provincial (Caja de Servicios Sociales) va pagando con tres o cuatro meses de atraso; pero ahora está rota la cadena de pagos".(Telám) Dimitra Coufis, una de las kinesiólogas más antiguas de la ciudad de Río Gallegos, sostuvo que "daría la sensación de que la comunidad argentina se enteró o se dio cuenta de que existimos los kinesiólogos para otra cosa que no sea hacer masajes" que "silenciosamente hacemos el laburo y dejamos todo brillantito, junto con enfermería, para los médicos". En Entre Rios, Andrea Schmidt, kinesióloga especialista en cuidados intensivos en el Hospital J. José de Urquiza de la ciudad de Concepción del Uruguay, señaló que los especialistas "somos importante en la pandemia como lo somos en el día a día en la terapia intensiva. Tenemos conocimientos de anatomía, fisiología y mecánica pulmonar y las consecuencias que tienen en el resto del organismo las enfermedades criticas". En los que respecta a la atención del paciente crítico, la especialista dijo que el rol del kinesiólogo es "fundamental porque somos uno de los profesioaneles que podemos seguir su recuperación hasta el alta y devolverle a la persona su capacidad de independencia y calidad de vida anterior a la enfermedad". Por último, en lo que respecta a esta pandemia puntualmente en el hospital Urquiza, Schmid agregó que "hemos elaborado guías para el manejo de estos pacientes, sobre todo en la asistencia respiratoria mecánica, el uso de drogas sedantes y tratamiento farmacológico ajustadas a nuestra realidad y alcance". Pandemia: una nueva capacitación en Kinesiología Respiratoria Después de capacitar virtualmente a más de 5.500 kinesiólogos de toda la Argentina y el extranjero, la UGR suma una segunda edición gratuita del programa que, busca contribuir con la mejor atención sanitaria que reciben las personas afectadas por el COVID-19. (2020): especial COVID-19 VÍAS RESPIRATORIAS-AFECCIONES DEL COVID-19 SOBRE EL SISTEMA RESPIRATORIO A partir de la revisión de una selección de la literatura disponible en las últimas semanas sobre la pandemia de la COVID-19 ocasionada por el nuevo coronavirus SARS-CoV2 y como continuidad de comentarios previos publicados, se revisan algunos avances realizados en el conocimiento y en la comprensión de esta enfermedad, con énfasis en las cuestiones más relacionadas con nuestro país. Se exponen los asuntos que se consideran principales entre la multitud de información disponible en el enfrentamiento a este problema de salud mundial (Brito, 2020). Etapas de la enfermedad Dos fases bien diferenciadas: En la primera de ellas, que suele durar una semana, es el virus el que hace el daño. En la segunda, es el propio organismo el que complica el cuadro clínico Se ha descrito que el coronavirus penetra en el organismo a través de las vías respiratorias altas donde suele alojarse para dar síntomas parecidos a los de una gripe estacional. tos seca, molestias de garganta, fiebre, cansancio, malestar general En un elevado número de casos-se calcula que en más del 80 % de los contagiados con síntomas-, la infección no pasa de este punto y los pacientes acaban curados, algunos incluso pasan la infección en ausencia de síntomas y solo se enteran cuando un test diagnóstico los da como positivos. En otro grupo, afortunadamente los menosporcentaje que varía según los informes-, y que lo constituyen, sobre todo, personas con deficiencias en su sistema inmunológico de diferentes causas, quienes llegan a acumular una gran carga viral y altos niveles de copias debido a ello, el virus desciende por el sistema respiratorio para alojarse en el pulmón, donde atraviesa la barrera alveolovascular para diseminarse por todo el organismo. Estos son los enfermos que desarrollan las formas más graves, en los que se incluyen pacientes que requieren cuidados intensivos para su asistencia, y con una elevada letalidad. Con la investigación y la minuciosa observación se ha llegado a la explicación de que ante la agresión viral el sistema inmunitario genera en una segunda etapa y en los grupos de riesgo se produce una descarga masiva e incontrolada de lo que se ha venido en llamar “la tormenta de citoquinas”, unas proteínas del tipo de las interleucinas 1, 6 (2020): especial COVID-19 y 8 que, en su “afán por aniquilar al invasor”, producen una reacción inflamatoria tan desproporcionada que es la que bloquea el sistema alveolar perpetuando la insuficiencia respiratoria, cada vez más intensa, hasta que sobreviene el fracaso final. La Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica ha dividido la evolución de los enfermos en tres fases: la primera se relaciona con el inicio de la infección y la respuesta viral, va desde el día 1 al día 7 aproximadamente desde el inicio de los síntomas; la segunda se denomina pulmonar o neumónica, del día 7 al día 10 o 15; y en los que van a la gravedad, mayores de 65 años y pacientes inmunodeprimidos o con otros factores de riesgo-, una tercera, hiperinflamatoria, a partir del día 10 a 15. Es muy interesante el hallazgo de que la positividad del PCR-dado por la mayoría como el “patrón de oro” en el diagnóstico confirmatorio- depende del momento de la enfermedad en que se realice esta prueba. Lo que explica la existencia de enfermos con PCR negativos. (11) Dylan Griswold, en un trabajo aprobado para publicación (preprint) en la Journal of Heart and Lung Transplantation, propone tres estadios de la COVID-19 según severidad, que se corresponden con hallazgos clínicos, respuestas a los tratamientos y resultados finales: El estadio I (ligero): se corresponde con una infección temprana, que abarca un período de incubación asintomático o de síntomas inespecíficos, como fiebre, malestar general y tos seca; El estadio II (moderado): se presenta con una participación pulmonar, con dos subclases: IIa sin hipoxia y IIb con hipoxia (oxigenación baja, respiración superficial y disnea); y el estadio III (grave) tiene como representación una inflamación sistémica con manifestaciones extrapulmonares, shock, vasoplegia, además de distress respiratorio e incluso fallo cardiorrespiratorio. El cambio en la evolución de una pequeña proporción de pacientes que se agravan y requieren súbitamente de cuidados intensivos a consecuencia de una verdadera tempestad fisiopatológica y clínica y que, aunque comienza en los pulmones, se extiende a múltiples órganos y sistemas, ha llevado a expresar a algunos autores que se produce una verdadera tempestad en el organismo del enfermo, que abarca “desde el cerebro hasta los dedos de los pies”. Es, en esos casos, en los que la enfermedad puede atacar cualquier órgano del cuerpo con consecuencias devastadoras. Conocer y entender esta posible evolución puede ayudar mucho a los médicos en la primera línea de asistencia de esta enfermedad: (2020): especial COVID-19 - Durante la Etapa II, donde el propio organismo complica el cuadro clínico,resulta paradójico, −¿¡tras haber aniquilado al virus!?−. La incertidumbre sobre si es el virus en sí, o la respuesta del sistema inmunitario desregulado de la persona, lo que finalmente provoca el daño multiorgánico de un paciente, dificulta que los médicos determinen cuál es la mejor manera de tratamiento a los pacientes gravemente enfermos. -. ¿Es la respuesta inmune exagerada presente en los casos más graves, un elemento muy importante para sugerir el uso de tratamientos inmunosupresores que pudieran ayudar? -¿Será otra tendencia dañina, últimamente reportada, de alteraciones en coagulación de la sangre la que transforme casos leves en emergencias que amenazan la vida? -¿Qué explica la sorprendente caída de oxígeno en sangre que algunos reportan en pacientes que nunca antes tuvieron disnea ni dificultades respiratorias serias? (2020): especial COVID-19 Gracias a las bondades de Internet y a la solidaridad de muchos amigos, hoy se comparten entre profesionales de la salud los avances continuados en la información relacionada con la pandemia de la COVID-19, para beneficio de todos, como siempre debía ser, especialmente los aspectos relacionados con el mejor manejo de la epidemia y el cuidado de los enfermos. Tal es el caso de una serie de videos muy interesantes que se han publicado en YouTube, como, por ejemplo, entre otros, varios del Dr. Iván Moreno, médico internista del Hospital de Lliria, en Valencia, donde explica qué han aprendido en esa institución tras varias semanas luchando en primera fila en la atención a enfermos infectados con el nuevo coronavirus. Hacerlo de forma periódica le permite a este profesional actualizar y corregir muchos de los consejos, recomendaciones y opiniones que van cambiando según se conoce con mayor detalle la pandemia y se divulgan las mejores experiencias mundialmente. Otras manifestaciones clínicas Con el mejor estudio de la clínica y la evolución de los enfermos, se han descrito otros síntomas y signos propios de la infección sistémica del virus SARS-CoV2 que pudieron pasar inadvertidos en las primeras descripciones, así como manifestaciones clínicas de complicaciones evolutivas que se han observado en pacientes con predisposiciones o padecimientos previos. Estas presentaciones menos habituales de COVID-19 representan una fuente oculta importante de la propagación del virus, no son criterios reconocidos con frecuencia como de diagnóstico, de sospecha ni indicación de pruebas microbiológicas, por lo que hay que mantener una vigilancia clínica estrecha y medidas preventivas sobre ellas. (6) También hay que tener cuidado en no absolutizarlas con enfoques muy especializados, que pueden fragmentar la asistencia médica de los enfermos y desviar la atención principal hacia aspectos muy particulares, en ocasiones no decisivos en el manejo de estos. Sus manifestaciones son: • Manifestaciones neurológicas: Mareos, cefalea, alteraciones del conocimiento, accidentes cerebrovasculares agudos, ataxia, convulsiones, alteraciones del gusto, del olfato y de la visión, síntomas de músculos esqueléticos con dolores de tipo neuropático y, más raramente se han descrito síndrome de Guillian Barré, encefalopatía hemorrágica necrotizante aguda, mielitis posinfecciosa. También se ha sugerido que es muy probable que la disfunción ventilatoria de los pacientes no solo tenga su base en las lesiones pulmonares, sino también en la afectación del centro cardiorrespiratorio en el tallo cerebral. • Manifestaciones cardiacas agudas: Arritmias y lesión cardiaca aguda. Los trastornos que pueden desencadenar complicaciones cardiacas son: insuficiencia cardiaca de inicio agudo, infarto de miocardio, miocarditis y paro cardiaco, así como cualquier enfermedad que plantee mayor demanda cardiometabólica a los pacientes.El daño miocárdico es una complicación frecuente entre los pacientes más graves por COVID19. El 50 % de los pacientes hospitalizados tienen una enfermedad médica crónica y de (2020): especial COVID-19 ellos, el 40 % presentan una enfermedad cardiovascular o cerebrovascular, con aumento de la actividad inflamatoria sistémica y procoagulante. • Manifestaciones hematológicas: Estado de hipercoagulación en pacientes críticos con riesgo de CID y microangiopatía trombóticas, púrpura trombocitopénica inmunológica, linfohistiocitosis hemofagocítica. • Síntomas oftalmológicos: Ojo seco, visión borrosa, sensación de cuerpo extraño, congestión conjuntival. • Manifestaciones cutáneas (similares a la afectación cutánea que ocurre durante las infecciones virales comunes): Erupción eritematosa, urticaria generalizada, vesículas similares a la varicela , erupción cutánea con petequias, acroisquemia. • Manifestaciones renales: Insuficiencia renal aguda, referida en casos críticos, como parte de la disfunción múltiple de órganos. • Manifestaciones gastrointestinales: Diarreas, vómitos, dolor abdominal.La transmisión de la infección, de acuerdo con la evidencia existente, ocurre fundamentalmente en los casos leves, en la primera semana de la presentación de los síntomas, desde 1 a 2 días antes hasta 5 o 6 días después. En los pacientes más graves esta transmisión sería más intensa y más duradera. Confirmación diagnóstica LOS ADULTOS MAYORES, LOS DE MAYOR RIESGO DE ENFERMAR GRAVEMENTE Y MORIR EN LA PANDEMIA DE COVID-19 Los autores de un editorial reciente de la British Medical Journal plantean cuatro aspectos que se debieran considerar en el grupo de los adultos mayores, especialmente los que viven en los países de bajos y medianos ingresos, debido a los efectos de la COVID-19 • Primero. Debido a los cambios en las dinámicas familiares, muchos ancianos cuidan a los menores para que sus padres trabajen. Si los abuelos enferman o mueren, las implicaciones para las familias extendidas serán muy grandes. Más aún, estos roles de cuidadores hacen casi imposible que ellos puedan hacer un aislamiento efectivo. • Segundo. El creciente número de “ancianos muy ancianos” que actualmente están recluidos en hogares de ancianos, asilos e instituciones similares, cuyas condiciones no siempre son las adecuadas en su cuidado, donde viven frecuentemente hacinados en condiciones que favorecen la trasmisión de infecciones. Los residentes en esos centros son muy dependientes del equipo que los cuida y se estima que, en caso de producirse un brote en ellos, alrededor del 60 % de los ancianos se verán afectados. • Tercero. La capacidad de los sistemas de salud para manejar las nuevas demandas que surgirán especialmente para aquellos que requieran apoyo de ventilación, incluirán un número elevado precisamente de ancianos, lo que repercutirá tanto en el número de (2020): especial COVID-19 personal capacitado para tales labores, como en el equipamiento disponible. A esto se añade la limitada experiencia previa de esos servicios en el manejo de ancianos críticos antes de esta enfermedad. • Cuarto. La no inclusión de los adultos mayores en las políticas públicas que provocan existencias precarias de muchos, que dependen de otros para su cuidado y apoyo. Los ancianos en muchos lugares enfrentan barreras para obtener alimentos y otros productos esenciales si se adoptan medidas de aislamiento y cuarentena. Muchos adultos mayores en diversos países son analfabetos. TRATAMIENTO Se ha insistido mucho en que no se conoce un tratamiento etiológico eficaz que haya sido suficientemente probado y demostrado, lo que no quita la inclusión en protocolos de Anales de la Academia de Ciencias de Cuba; Vol. 10, No. 2 (2020): especial COVID-19 actuación de una enorme cantidad de terapéuticas recomendadas y aplicadas, sobre todo en los casos más graves, y también de medidas profilácticas de muy variadas características, en este caso dirigidas especialmente a los supuestos grupos de mayor riesgo. Los pacientes deben recibir cuidados de apoyo para ayudar a aliviar los síntomas. En los casos graves, el tratamiento debe incluir atención médica para cuidados críticos, dirigida a apoyar el funcionamiento de los órganos vitales. Precisamente la Organización Panamericana de la Salud ha publicado el pasado 16 de abril un extenso documento de revisión sistemática que ratifica la ausencia de evidencias demostrables de eficacia de los diversos tratamientos que se ensayan. Ya hoy la cantidad de guías de práctica clínica, protocolos de actuación, regímenes de todo tipo, inundan la literatura médica y están disponibles, sobre todo en los medios digitales. Varios autores de esos documentos alertan que, como la “COVID-19 es una epidemia muy dinámica con un perfil clínico incierto, el personal sanitario debe estar preparado para modificaciones de las guías a medida que se cuente con más información”,y trabajar mientras con protocolos provisionales lo más coherentes posibles.Por tanto, todas las indicaciones adoptadas deben ser flexibles y dinámicas en el tiempo y en cada lugar. Aspectos relacionados con la ética médica son muy debatidos en el mundo y muy importantes a tener en cuenta a la hora de introducir medicamentos o procedimientos de eficacia no demostrada en estos casos, respetando el consentimiento informado de pacientes y familiares, el apego a lo establecido en el Código de Nuremberg y en la Declaración de Helsinski, el derecho universal a la asistencia sanitaria de las personas y a la no discriminación en la atención, la posibilidad de aplicación de tratamientos “compasionales” y de cuidados paliativos, entre otros. (2020): especial COVID-19 GUIA PARA EL KINESIOLOGICO .A finales de 2019, un nuevo virus, llamado co­ronavirus 2 (nCoV19), desató una epidemia en Wu­han, China. La Organización Mundial de la Salud (OMS) la denominó enfermedad Coronavirus 2019 (nCoV19).Al momento en que se desarrollaron estas guías, el nCoV19 se ha convertido en una pandemia, afectando más de 650.000 personas en más de 80 países, provo­cando 30.000 muertes (al 27/3/2020 con 660.000 casos confirmados) en todo el mundo. La gran mayoría de los pacientes con nCoV19 pre­sentan una enfermedad leve (80%), mientras algunos desarrollarán formas más severas, requiriendo oxige­noterapia suplementaria (15%) y aproximadamente un 5% deben ser ingresados a unidad de cuidados inten­sivos (UCI), de los cuales la mayoría requiere soporte ventilatorio (intubación y ventilación mecánica). Diferentes guías han sido publicadas acerca del control de infecciones, detección y diagnóstico en la población general, pero hay informacion limitada y desorganizada sobre el manejo inicial de pacientes críticos con enfermedad grave debido a nCoV19.2. REVISTA ARGENTINA DE TERAPIA Esta guía fue desarrollada por miembros del Capítulo de Kinesiología Intensivista (CKI) de la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva (SATI), con amplia experiencia en la temática desarrollada, basándose en guías y bibliografía de reciente publicación, y alcanza el nivel de recomendación.Específicamente, los objetivos son: 1. Recomendar prácticas de rutina seguras para el manejo de pacientes nCoV19, en relación a los mecanismos de protección personal contra el con­tagio. (2020): especial COVID-19 2. Recomendar prácticas estándar y seguras de cui­dado de la vía aérea que deben adoptarse en pa­cientes con nCoV19 con falla respiratoria aguda (FRA) 3. Recomendar prácticas estándar y seguras de cui­dados respiratorios a implementarse en pacientes con FRA por nCoV19. 4. Recomendar un enfoque consistente per flexi­ble para el manejo de los pacientes en FRA por nCoV19, independientemente de su ubicación(prehospitalario, departamento de emergencias (ED) o UCI. 5. Recomendar pautas para el manejo del recurso hu­mano para kinesiólogos involucrados en el cuidado de estos pacientes. Un enfoque sistemático favorecerá la práctica clínica, transformándola en segura y efectiva durante los episodios de manejo de la vía aérea y soporte ventilatorio, que implica la colaboración de múltiples profesionales de diferentes disciplinas .La “práctica estandarizada” debe cumplir con de­terminados criterios. Debe ser :• Segura: elija opciones que no expongan al paciente o al personal a riesgos innecesarios .• Simple: elija soluciones sencillas que se puedan ejecutar de manera eficiente en terapias intensi­vas de distintas categorias, locaciones y realidades socioeconómicas del país. • Familiar: cuando sea posible, confíe en las practi­cas habituales de su unidad, y que sean familiares para el equipo de salud .• Confiable: elija las opciones que se consideren exi­tosas según la mejor evidencia disponible. • Robusto: elija opciones que alcancen los criterios antes descriptos ante variaciones en las caracte­rísticas del paciente, del entorno y la disponibili­dad del recurso humano y técnico Riesgos para los profesionales de la salud La transmisión del virus se produce principalmen­te a través de la propagación de gotas. Estas gotas pre­cipitan por la gravedad pudiendo causar transmisión directa por contacto cercano o de superficie (el virus puede permanecer activo durante horas o días). Muchos procedimientos habituales llevados a cabo por los kinesiólogos, o aquellos en los que éstos participan son generadores de aerosoles. Los aerosoles están compuestos de partículas más pe­queñas que contienen el virus. Estas partículas en el aire pueden viajar grandes distancias, permanecer suspendidas por determinado tiempo e inhalarse, au­mentando el riesgo de transmisión. Los eventos que generan aerosoles son aquellos que implican inevitablemente la generación de un flujo de gas, especialmente de alta velocidad También existen otros procedimientos que expo­nen al personal a un riesgo potencial de contagio, pero que en forma directa no se asocian a la presencia de un flujo (2020): especial COVID-19 de gas sino que están acompañados por otro evento asociado que sí lo genera: la laringoscopía, in­tubación orotraqueal, traqueostomía, la aspiración traqueal y nasofaríngea y la broncoscopía “provocarán” aerosolización si inducen la tos o se acompaña de generación de flujo (por ventilación o aspiración). Muchos de estos eventos pueden prevenirse mediante bloqueo neuromuscular adecuado y evitando procedi­mientos concurrentes de generación de aerosoles, de modo que si se realizan correctamente y sin complica­ciones, pueden efectuarse sin ocasionar aerosolización y dispersión del virus. Los cuidados de la vía aérea artificial, como el po­sicionamiento y fijación del tubo endotraqueal y el control de la presión del balón de neumotaponamiento, son cruciales para minimizar el riesgo de eventos generadores de aerosoles durante los cambios de posición del paciente que ante la desconexión accidental o desplazamiento del tubo pueden aumentar la conta­minación del entorno Además de los riesgos para la salud del personal infectado, la imposición de licenciar a los involucrados disminuye el número de recurso humano capacitado disponible para la atención de los pacientes en un momento de alta demanda. La nCoV19 ha sido clasificada como una enferme­dad infecciosa de alta consecuencia, enfatizando el riesgo significativo para los trabajadores del sistema de salud.Debe ser prioritario proporcionar un entor-no de trabajo seguro, gestionando los puntos siguientes :• Protección del personal y sustentabilidadEl control de la exposición al nCoV19 es el méto­do fundamental para proteger al personal de la salud y puede ser representado por una jerarquía de controles .• Ingeniería de controlesLos controles están diseñados para eliminar el peligro en la fuente, antes de entrar en contacto con el trabajador. Los controles administrativos y el equipo de protección personal (EPP) se utilizan frecuentemente cuando los peligros no son contro­lados con las medidas habituales en los procesos existentes .• Jerarquía de ControlesLos pacientes deberán ser colocados en áreas de control superior antes de usar las áreas de control inferior .Las áreas de atención al paciente incluyen:• Salas de aislamiento con presión negativa utili­zadas para aislar a los pacientes con infecciones capaces de transmisión respiratoria. Una sala de presión negativa tiene una antesala funcional pa­ra ponerse y quitarse el EPP. Las precauciones del EPP siguen siendo necesarias. El retiro de la pro­tección es realizado en la antecámara. El número de este tipo de salas es limitado en nuestro país • Salas de aislamiento estándar, que pueden ser usadas para aislar a los pacientes capaces de transmitir la infección por microgotas o por con­tacto. Estas salas no tienen capacidad de presión negativa y por lo tanto no existen los controles de ingeniería .• Salas de cohortes abiertas, no tienen presión nega­tiva y no tienen controles de ingeniería. (2020): especial COVID-19 Equipos de Protección Personal Colocacion del EPP, en el orden que se describe 1°: Camisolín hemorrepelente. • Debe cubrir completamente el torso desde el cuello hasta las rodillas y los brazos hasta el final de las muñecas. Debe envolver la espalda . • Atar los lazos del camisolín sobre la parte posterior del cuello y la cintura. 2°: Barbijo. N95: es indicación su uso ante procedimientos y prácticas que puedan generar aerosolización de material biológico. Quirúrgico: para toda práctica con pacientes o en zona contaminada, sin generación de aerosoles. • Se deben atar los lazos del barbijo por detrás de la cabeza sobre la línea de los pabellones auriculares y el cuello en líneas paralelas, ajustando la banda flexible al puente nasal. • Asegurar el ajuste a la cara por encima de la nariz y por debajo del mentón. 3°: Antiparras: con protección lateral y cierre hermético. • Colocar sobre la cara y los ojos y ajustarlas. 4° Máscara Facial: cobertura facial total y de cuello. • Ubicar por encima de las anteriores. 5°: Guantes. • Colocar hasta cubrir las muñecas y el extremo de la manga del camisolín. Retiro del EPP, en el orden que se describe Recuerde sacarse todo el EPP antes de salir de la habitación del paciente. El objetivo es sacarse el EPP de manera segura y evitar contactar su ropa o piel con materiales potencialmente infecciosos. 1°: Retirar camisolín y guantes. • El frente y las mangas del camisolín, y el exterior de los guantes están contaminados. Evite tocarlos. • Si sus manos se contaminan al quitarse el camisolín o los guantes, lávese las manos o utilice desinfectante a base de alcohol. • Libere el camisolín con sus manos y retire desde la parte delantera y aléjelo de su cuerpo tocando la parte exterior sólo con las manos con los guantes colocado - Mientras se saca el camisolín, enróllelo de adentro hacia afuera. - Mientras se saca el camisolín, quítese los guantes al mismo tiempo, tocando el interior sólo con las manos desnudas. Coloque el camisolín y los guantes en un contenedor de residuos. 2°: Lavarse las manos. (2020): especial COVID-19 3°: Retirar la máscara facial. Tomar desde la parte posterior, la parte frontal está contaminada. °: Antiparras. • Evitar tocar el exterior de las antiparras, ya que está contaminado. Si sus manos se contaminan al sacarse las antiparras, lávese las manos o utilice desinfectante a base de alcohol. Retirar las antiparras desde la parte posterior sin tocar la parte delantera. • Si las antiparras son reutilizables, colóquelas en el recipiente designado para su lavado. De lo contrario, deséchelas en un contenedor de residuos. Luego, lávese las manos nuevamente. 5°: Barbijo. • Evitar tocar el frente del barbijo, ya que está contaminado. Si sus manos se contaminan durante la extracción del barbijo, lávese las manos o utilice desinfectante a base de alcohol. Tomar los lazos inferiores del barbijo, luego los que están en la parte superior, y quitarlos sin tocar el frente. • Descartar en un contenedor de basura. Si es un barbijo N95 o reutilizable y no está visiblemente sucio o quebrado, podría guardarse en una bolsa de papel madera para otro uso posterior. Luego lavarse las manos nuevamente. ESPECTATIVAS A FUTURO LA VACUNA Aunque la ciencia en el desarrollo de vacunas ha avanzado de manera importante, fabricarlas a menudo requiere técnicas laboriosas que no están diseñadas para producir rápidamente miles de millones de dosis. En todo el mundo, 50 posibles vacunas contra el SARS-CoV2 ahora mismo están en las primeras etapas de desarrollo, de acuerdo con la OMS. Si la historia nos ha enseñado algo, es que los científicos terminarán por producir una versión eficaz, aunque no a muy corto plazo, para inmunizar a aquellos que no hayan enfermados y estén susceptibles de contraer la COVID-19 en el futuro. Lo que no sabemos es si se compartirán los beneficios, dadas las posiciones economicistas egoístas adoptadas por no pocos países desarrollados con grandes posibilidades de su obtención y producción. (2020): especial COVID-19