Héctor Kohen, Fabio Fidanza, Nicolás Mazzeo (comp.) ¡Por favor, no cortar! Este libro, en cuya redacción participan sus discípulos y colegas —en muchos casos las categorías son comunes a las mismas personas—, en la investigación, la docencia y la crítica, se propone revisitar la tarea de Claudio España como crítico en el diario La Nación y el modo en que su escritura puede divulgar, extender, a un público amplio, no necesariamente cinéfilo, los ecos de la etapa del debate fundacional de los estudios sobre cine en la universidad argentina, en la que nuestra facultad ocupó un lugar pionero que no abandonó. Los autores se ocupan de seguir, en los entresijos de esos textos apretados por la diagramación, el aporte de la teoría, de la crítica especializada, que España emplea para iluminar una zona de una película de Altman, de Solanas, de Renán, de Allen. Es, en síntesis, una tarea de extensión, que España practicó aunando al rigor crítico, la desbordante pasión de su adjetivación y la habilidad de una escritura que eludía las fáciles tentaciones del lucimiento erudito y la dilución de los conceptos. CS ¡Por favor, no cortar! Claudio España y la crítica cinematográfica Héctor Kohen, Fabio Fidanza, Nicolás Mazzeo (compiladores) ¡Por favor, no cortar! Claudio España y la crítica cinematográfica COLECCIÓN SABERES CS ¡Por favor, no cortar! Claudio España y la crítica cinematográfica Héctor Kohen, Fabio Fidanza, Nicolás Mazzeo (compiladores) Decana Graciela Morgade Secretaria Hacienda Marcela Lamelza Vicedecano Américo Cristófalo Subsecretaria de Bibliotecas María Rosa Mostaccio Secretaria Académica Sofía Thisted Secretaria de Extensión Ivanna Petz Secretario de Posgrado Alberto Damiani Secretaria de Investigación Cecilia Pérez de Micou Secretario General Jorge Gugliotta Dirección de Imprenta Rosa Gómez Subsecretario de Publicaciones Matías Cordo Subsecretario de Transferencia y Desarrollo Alejandro Valitutti Subsecretaria de Cooperación Internacional Silvana Campanini Editorial de la Facultad de Filosofía y Letras Colección Saberes ISBN 978-987-4019-07-3 © Facultad de Filosofía y Letras (UBA) Subsecretaría de Publicaciones Puan 480 - Ciudad Autónoma de Buenos Aires - República Argentina Tel.: 4432-0606 int. 213 - [email protected] www.filo.uba.ar ¡Por favor, no cortar! Claudio España y la crítica cinematográfica / Claudio Heriberto España... [et al.]; prólogo de Héctor Kohen - 1a ed. - Ciudad Autónoma de Buenos Aires : Editorial de la Facultad de Filosofía y Letras Universidad de Buenos Aires, 2016. 330 p.; 20 x 14 cm - (Saberes) ISBN 978-987-4019-07-3 1. Cine Argentino. I. España, Claudio Heriberto II. Kohen, Héctor, prolog. CDD 791.43 Índice Este libro 13 Claudio España, el Centro de Investigación y Reportaje al cine argentino 19 “Un matrimonio”, un magnífico fresco, cargado de ironía 37 Comentario sobre “‘Un Matrimonio’, magnífico fresco, cargado de ironía” 41 La realización de Fernando Ayala convence con su noble contenido 45 Comentario sobre “La realización de Fernando Ayala convence con su noble contenido” 49 El viejo film de gangsters recreado con gran belleza visual, decorativismo y profundidad sentimental 53 Héctor Kohen Andrés Insaurralde Claudio España Mariano Roitenburd Claudio España María Gabriela Aimaretti Claudio España Comentario sobre “El viejo film de gangsters recreado con gran belleza visual, decorativismo y profundidad sentimental” 59 Aquello que amamos 63 “París, Texas”: film notable y de gran encanto 75 Comentario sobre “‘París, Texas’: film notable y de gran encanto” 79 La melancolía y el destierro interior, indicios en un bello film nacional 83 Comentario sobre “La melancolía y el destierro interior, indicios en un bello film nacional” 87 “Querelle” o el juego de los espejos 93 Comentario sobre “‘Querelle’ o el juego de los espejos” 97 Gabriela Fabbro Daniel López Claudio España Lucas Sebastián Martinelli Claudio España Alicia Aisemberg Claudio España María Valdez Melancolía de hoy y una notable realización 101 Comentario sobre “Melancolía de hoy y una notable realización” 105 “El exilio de Gardel”, un juego entre la realidad y la ficción 109 Claudio España Lucía Rodríguez Riva Claudio España Comentario sobre “‘El exilio de Gardel’, un juego entre la realidad y la ficción” 113 Un fresco ya mitológico que confirma su enorme valor 117 Comentario sobre “Un fresco ya mitológico que confirma su enorme valor” 121 Tarkovski y un sacrificio que trasunta belleza 125 Comentario sobre “Tarkovski y un sacrificio que trasunta belleza” 129 El último film de Huston es, sencillamente, maravilloso 133 Comentario sobre “El último film de Huston es, sencillamente, maravilloso” 137 “Frida”, es una bellísima biografía, inquietante y llena de encanto 143 Comentario sobre “‘Frida’ es una bellísima biografía, inquietante y llena de encanto” 147 “Mala sangre”, atractivo film de un joven director francés 151 Comentario sobre “‘Mala sangre’, atractivo film de un joven director francés” 155 Pablo Guallar Claudio España Dana Zylberman Claudio España Nicolás Ezequiel Mazzeo Claudio España Héctor Kohen Claudio España Mario Laborem Claudio España Martín Alomar Almodóvar logra una comedia con mucho brillo y frescura 161 Comentario sobre “Almodóvar logra una comedia con mucho brillo y frescura” 165 Claudio España, director del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata 169 El horror de lo cotidiano en una película con notables valores 179 Comentario sobre “El horror de lo cotidiano en una película con notables valores” 183 El indiscreto encanto de audaz trama de amor 187 Comentario sobre “El indiscreto encanto de audaz trama de amor” 191 La violencia de las imágenes 195 La seducción de “Corazón salvaje” 201 Comentario sobre “La violencia de las imágenes” y “La seducción de ‘Corazón salvaje’” 205 Una obra notable entre la ficción y el laberinto 211 Claudio España Luciana Caresani José Miguel Onaindia Claudio España María Mercedes Revuelta Claudio España Elina Adduci Spina Claudio España Claudio España Tamara Accorinti Claudio España Comentario sobre “Una obra notable entre la ficción y el laberinto” 215 Solanas: una obra muy personal 219 Comentario sobre “Solanas: una obra muy personal” 223 La angustia de Batman por ser apenas un hombre y no un monstruo 227 Comentario sobre “La angustia de Batman por ser apenas un hombre y no un monstruo” 231 Un gran espectáculo que no apuesta a la emoción 237 Comentario sobre “Un gran espectáculo que no apuesta a la emoción” 241 La muerte por todas partes 245 Comentario sobre “La muerte por todas partes” 249 Kurosawa: un gran homenaje a los suyos 253 Comentario sobre “Kurosawa: un gran homenaje a los suyos” 257 Con el film de Polaco regresa la polémica 261 Raúl Illescas Claudio España Pablo Piedras Claudio España Armando Capalbo Claudio España Jorge Sala Claudio España Mariano Veliz Claudio España Iván Morales Claudio España Comentario sobre “Con el film de Polaco regresa la polémica” 267 Con realismo 273 Comentario sobre “Con realismo” 277 Melodrama moderno, con la dimensión de la tragedia 283 Comentario sobre “Melodrama moderno, con la dimensión de la tragedia” 287 Carta de lectores 293 Comentario sobre “Carta de lectores” acerca de Match Point 295 Claudio España y sus aportes a la enseñanza universitaria 301 Los autores 313 Fabio Fidanza Claudio España Sebastián Russo Claudio España Ana Laura Lusnich Claudio España (Crítico de cine) Fernando Madedo Ricardo Manetti Material complementario. Críticas de Claudio España http://publicaciones.filo.uba.ar/por-favor-no-cortar El indiscreto encanto de audaz trama de amor La Nación, viernes 17 de agosto 1990 “Una película de amor” (“Krótki film o milosci”, Polonia, 1988), en colores, en polaco y presentada por Transeuropa, en el Trocadero, Lorca, Savoy. Guión: Kieslowski, Krzysztof Piesiewicz. Fotografía: Witold Adamek. Música: Zbigniew Preisner. Intérpretes: Grazyna Szapolowska, Olaf Lubaszenko, Stefania Iwinska. Dirección: Krzysztof Kieslowski. 87 minutos. Para mayores de 16 años. Para exponer el sentido universal de los antiguos Mandamientos de la fe cristiana, el polaco Krzysztof Kieslowski no recurre a las reconstrucciones históricas: su “Decálogo” —diez films que ilustran libremente una reflexión ética sobre los preconceptos que los seguidores de Jesús tomaron de las tablas de Moisés para, coincidir en el sentido cristiano del amor— habla sobre los hombres y las mujeres de hoy, en Polonia. Se tomó una sola libertad: presentarlos dentro de y frente a un mismo decorado realista, que convierte a 10 films en obras de cámara, ceñidas al presente y en un espacio convencional a la vez pesado y anónimo; un complejo arquitectónico de monobloques no lejanos a la metrópolis y habitados por gente del común. Médicos, carteros, prostitutas, viajeros solitarios. “Decálogo 6” o “Una película de amor” —gestada para la TV y los cines— es la primera que conocemos del “Decálogo”. Junto con la número 5 “No matarás”, son las más difundidas. Estos trabajos llevaron a Kieslowski a la consideración mundial, le hicieron ganar el premio Europa y hoy se compara su obra con los El indiscreto encanto de audaz trama de amor 187 films introspectivos de Bergman y con el misticismo de Tarkovski. No es poco decir. “Una película de amor” nos enfrenta de entrada con el acto condenable: un joven de 19 años pasa la mayor parte de sus noches retozando en la contemplación de una vecina del edificio de enfrente, a través de un catalejo. Sabe de ella que lleva una vida solitaria, que es muy bella, que no tiene escrúpulos en desnudarse o en encontrarse sucesivamente con varios hombres sin cerrar las ventanas. “Esas mujeres lloran porque están solas y se sienten abandonadas después del paso furtivo del hombre”, le dice al chico la vieja dueña de la casa donde vive; mujer en quien se representa una moral más rígida (también la hipocresía cuando debe negar al muchacho y cuando ella también aprovecha el catalejo) y que es menos comprensiva que los protagonistas y que el mismo Kieslowski. Ese personaje admite, incluso, una lectura política sobre el autoritarismo. “Antes me masturbaba, ahora no”, le dice el joven Tomek a la mujer espiada, cuando fatalmente se encuentran. Si ella no entiende del todo que ocurre, se le deja al espectador entender que el chico está loco de amor. El acto condenatorio se diluye por obra del máximo sentimiento humano. “Nos” compromete Kieslowski no trivializa la situación, se compromete con ella y “nos compromete”. En una conferencia sobre la modernidad, el filósofo Jürgen Haberlas señala: “La conciencia estética representa continuamente un drama dialéctico entre el secreto y el escándalo público, le fascina el horror que acompaña al acto de profanar y, no obstante, siempre huye de los resultados triviales de la profanación”. Es lo que 188 Claudio España intenta Kieslowski desde la intención provocadora. Su protagonista, Tomek, tienen menos suerte: bañado en la sangre de la culpa va a parar al hospital. Desde aquí juega el truco del punto de vista: tras espiar por un lente a la mujer, nos convertimos en el objeto espiado, es decir, en el mundo de ella. El enunciado da una vuelta de perspectiva y, en la segunda mitad del film, nos instalamos dentro de la casa de la mujer, que comienza a espiar hacia la ventana del chico (percibirá el espectador alguna incomodidad). La dirección de la mirada y la falta del objeto del otro lado vuelven curiosa y comprensiva a la chica, la transforman con inquietud, la obligan a dirigirse al departamento de enfrente y, en un último enrosque del punto de vista, la mujer toma el telescopio y espía su propia ventana: allá está ella misma, solitaria, prostituida, sin tiempo para mirarse desde adentro, para descubrirse y modificarse. Los resultados son maravillosamente inteligentes. Recursos propios del cine sirven a Kieslowski para encontrar un sentido: la historia de dos enamorados-sin-saberlo que no entienden nada de sí por preocuparse en otear al otro. Esto parece una moraleja, pero Kieslowski supera las moralejas. El director sólo procura la reflexión del espectador, a quien atrapa con encanto, con audacia, con suavidad y con el sano deseo de conmoverlo. Claudio España El indiscreto encanto de audaz trama de amor 189 Comentario sobre “El indiscreto encanto de audaz trama de amor” La Nación, viernes 17 de agosto de 1990 El encanto de lo indiscreto Elina Adduci Spina Muchos son los teóricos que han reflexionado sobre la percepción cinematográfica estableciendo vínculos con cierto tipo de voyeurismo. Para el espectador, esta actividad supondría el placer de una contemplación resguardada por la distancia y la escisión que asegura la pantalla de cine. En estos términos, ver una película siempre implica un pacto tácito entre una exhibición y un mirón, entre una ficción, una “realidad” y una fantasía.1 En Una película de amor (Krótki film o milosc), Krzysztof Kieslowski pone en juego algunas de estas cuestiones, ya que el voyeurismo actúa como el elemento mediador entre el amor y el (auto) conocimiento, los dos temas centrales del film. Si en el plano diegético el voyeurismo parte de los dos protagonistas, en el espectador se produce una duplicación: al voyeurismo propio del acto perceptivo se le suma aquel que corresponde a la complicidad que resulta de una 1 Según Metz, “El film tiene algo de sueño, algo de fantasma, algo del intercambio y de identificación cruzada entre el voyerismo y el exhibicionismo”. En Metz, C. (1970). El significante imaginario. Psicoanálisis y cine. Buenos Aires: Paidós. Comentario sobre “El indiscreto encanto de audaz trama de amor” 191 mirada (o subjetiva) compartida con los personajes. Es decir, los vemos a ellos y vemos lo que ellos ven (y tal vez por eso surge una especie de “triplicación” en la que también nos vemos a nosotros mismos). Si el espectador es un voyeur, el crítico de cine sería el “voyeur por excelencia”, ya que es quien está legitimado por un campo cultural o por un medio determinado para realizar una reelaboración reflexiva de la obra a partir de su singular recepción. En “El indiscreto encanto de una audaz trama de amor” —crítica apropósito del film de Kieslowski—, Claudio España tal vez avanza un paso más al citar a Jürgen Habermas para declarar que la conciencia estética tiene que ver con un “acto de profanación”. Voyeurismo y profanación, dos expresiones que culturalmente tienen una carga negativa, parecieran aquí mutar su significado y virar hacia el terreno de la productividad. Si tal como dice España, en la película el acto condenatorio se diluye por obra del amor —“el máximo sentimiento humano”—, nosotros podemos afirmar que en la instancia crítica el “fisgoneo” está en función de la producción de una obra reflexiva. Según la perspectiva adoptada, la crítica puede ser abordada a partir de una predominancia metatextual (como discurso crítico que transmite de manera transparente otro discurso) o intertextual (como proceso creativo atravesado por una multiplicidad de textos). Si bien reconocemos el carácter metatextual de la crítica de España, su preponderancia intertextual hace que el texto base de Kieslowski se convierta en una hebra más de un nuevo tejido, de una nueva obra. En este vínculo entre película y crítica se produce una relación de homologación ya que el acto de espiar con un catalejo, por parte de los protagonistas, se emparenta a la actividad crítica de España en la que, a partir de otro tipo de 192 Elina Adduci Spina lente, examina el film en su profundidad y extensión. Pero este voyeurismo compartido no tiene que ver con una operación onanista. Por el contrario, se presenta como una acción que, movida por una fuerte pasión, se dirige hacia la búsqueda del conocimiento de un otro, que finalmente termina convirtiéndose en conocimiento de sí mismo. Acá, una vez más, entra en juego el intertexto, porque este también tiene que ver con la mirada y con la incorporación de otro elemento para la creación de una nueva unidad, se trate de un individuo o de una obra. España hace especial hincapié en un atractivo procedimiento efectuado por Kieslowski, por medio del cual asume un compromiso que nos invita a comprometernos como espectadores. Por un lado, a la hora de presentar el valor universal de los Diez Mandamientos cristianos, la película evita la solemnidad de la reconstrucción histórica y opta por una escenificación de tipo realista que se instala en la problemática de los hombres y mujeres comunes de la Polonia de su tiempo. Una vez más, esta operación también se encuentra reflejada en la crítica ya que alejada del protocolo académico formula una reflexión en un lenguaje cotidiano, pero no por eso falto de rigor erudito. Por otro lado, este compromiso adquiere otro matiz cuando la enunciación del film efectúa una transformación del punto de vista en el momento en el que se produce un cambio de roles y Magda —la protagonista femenina— pasa de ser objeto a sujeto de la observación. Por esos azares de la vida, hoy, veinticinco años después de su publicación, la crítica de Claudio España corre con la misma suerte: su carácter reflexivo pasa a ser objeto de un nuevo análisis, y su estatuto de obra se entrelaza con un nuevo pensamiento. Una vez más nuestras premisas de voyeurismo y profanación se hacen presentes para dar lugar a una productividad que pareciera infinita. De hecho, si en Comentario sobre “El indiscreto encanto de audaz trama de amor” 193 este momento estamos siendo leídos, esa indiscreta lectura, que de algún modo también nos corrompe, es la encantadora certera señal de que la rueda sigue y seguirá su curso. 194 Elina Adduci Spina