Subido por Ariel Fernandez

04 - Regulación ambiental

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Regulación
ambiental
Política y
economía
ambiental
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Regulación ambiental
La evolución y expansión de las sociedades ha deteriorado los ecosistemas
por la explotación de los recursos, por eso, los países han tomado conciencia
y han decidido regular la contaminación mediante leyes de protección
ambiental e incentivos económicos para la preservación del medio
ambiente. Veamos, entonces, el marco ambiental de algunos países.
Unión Europea
Regulación
La regulación comienza en 1950 con la creación de la confederación de
estados europeos, formada inicialmente para la comercialización de carbón
y acero. En la actualidad, es un sistema federal de países independientes con
poder en el Gobierno Central, el poder se equilibra y evoluciona
constantemente.
Los principios básicos de la regulación ambiental europea son:
•
Subsidiariedad: el poder es de los Estados miembros, a menos que
exista una razón permanente para que se actúe en todo el ámbito europeo.
Es decir, el control de la contaminación es responsabilidad del Estado y no
de la Unión Europea. Al tener diferencia en las formas de control, se genera
una ventaja comparativa, por lo tanto, el poder no es tan directo.
•
El contaminador paga: a los contaminadores se les exige un pago por
el impacto ambiental, los controles y la administración necesaria. Esta
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regulación no siempre se cumple, ya que hay muchos subsidios
gubernamentales.
Todo se rige mediante directrices, éstas son leyes vinculantes que requieren
la aprobación de los países miembros para poder ponerlas en práctica en su
territorio.
Por ejemplo, en el Reino Unido, se creó una regulación basada en los MMP
(mejores métodos prácticos). Desde el punto de vista técnico, económico y
justificable para el impacto ambiental, esta regulación es más flexible que
determinar un límite de emisiones y promueve la innovación: está siguiendo
las directrices de la Unión Europea, pero con un manejo propio dentro de su
territorio (Kostald, 2001).
Incentivos
Para el control del impacto ambiental, se presentan incentivos económicos,
como por ejemplo, los impuestos. Éstos no son tan altos y se destinan
principalmente para el sostenimiento de los entes reguladores, es decir, su
valor no es tan alto como para incentivar una disminución representativa en
la contaminación por parte de las empresas.
Manejan también un sistema de permisos transferibles, con un tope de
contaminación por manufactura, así los nuevos empresarios deberán pagar
a las viejas industrias para disminuir sus emisiones y compensar las
emisiones que ellos generarán al ingresar a la rama de producción. Un
incentivo importante es el impuesto según los depósitos contaminantes
realizados en agua. Esto incentiva a que disminuyan las descargas
contaminantes para pagar menos impuestos (Kostald, 2001).
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Federación Rusa
Regulación
Dado que Rusia es un país en transición, lo es también su política ambiental,
hasta que el país se adapte al nuevo entorno económico.
Para la década de los setenta, la ex Unión Soviética comienza a tomar
decisiones orientadas al control ambiental. Ellos iniciaron un período donde
instituyeron controles para la contaminación del agua y del aire, junto con la
creación del marco básico para regular la contaminación en el país. El
enfoque regulador cuenta con estándares ambientales de salud para una
amplia variedad de contaminantes. Éstos son adaptados en escala nacional
para usarlos en todo el país, y no son absolutos, sino que dependen de la
naturaleza del uso del medio ambiente. Por ejemplo, los estándares
ambientales para el aire dependen de si el lugar de aplicación es una zona
residencial o industrial, y los del agua dependen de si ésta se utiliza para
recreación, pesca o para consumo humano.
Los estándares se usan para fijar el límite de emisiones de cierto
contaminante, esto queda impreso en el permiso establecido junto con el
impacto ambiental de éste. Es un método fuente por fuente y se basa en el
impacto ambiental y no en la tecnología ni en los costos. Esto aplica para
todas las instituciones que generen contaminantes en su ciclo productivo.
Dado que no siempre es posible cumplir con el límite de emisiones, se
generan permisos temporales, que se pueden negociar.
El ente regulador es el Comité Estatal de Protección ambiental, aunque hay
un comité por cada país miembro y también comités locales para la toma de
decisiones.
A diferencia de la mayoría de los países, tienen un “fondo ambiental”, que
es una fuente de financiación para la depuración del medio ambiente y el
respaldo para el control de la contaminación. De allí también se otorgan
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créditos subsidiados para que los contaminantes disminuyan sus emisiones
mediante el cambio de tecnologías y también se generan pagos por
compensación por daño ambiental (Kostald, 2001).
Incentivos
Usan ampliamente los impuestos como control para las emisiones.
Entre 1980 y 1990 Rusia –a raíz de los experimentos realizados por la
Federación Rusa– adopta los impuestos como incentivo para disminuir las
emisiones contaminantes.
La finalidad de los impuestos era financiar los fondos ambientales según las
emisiones causadas por los contaminadores. Por tanto, cada fuente de
contaminación debe pagar un impuesto por cada unidad de emisión que
genere.
Aunque el ingreso por estos impuestos es sustancial, es un valor muy bajo
como para que sea un incentivo a la no contaminación. Sin embargo, el
impuesto es importante para ver cómo evoluciona Rusia en los próximos
años (Kostald, 2001).
Estados Unidos
Regulación
La primera legislación a nivel nacional, que data del siglo XX, fue aprobada
en 1960, tras el crecimiento económico posterior a la II Guerra Mundial. A
través de ella, se les exigía a las empresas que instalen dispositivos
anticontaminantes en los vehículos para disminuir las emisiones.
En 1960, existían dos problemas importantes para resolver con la regulación:
uno era el control de las fuentes de contaminación de manera justa, pero
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eficaz y el otro, la construcción de las nuevas industrias de manera
ambientalmente amigable para disminuir las fuentes de contaminación.
Dada la magnitud de la regulación, el Gobierno Federal (Central) dictamina
los objetivos y los Estados se encargan de los planes de acción, los cuales son
aprobados por el Gobierno Federal; sin embargo, los Estados son libres de
fijar estándares más altos que los establecidos por el Estado Central. La
regulación para las nuevas industrias es diferente de la regulación para las
viejas industrias, por lo tanto, para evitar malos manejos en la regulación
local, se estableció que la regulación para industrias nuevas se realiza a nivel
nacional y el Gobierno Central la maneja, sin importar su ubicación.
La Agencia de Protección Ambiental (EPA) de 1970 es la encargada del
control de las nuevas industrias, según la ley de 1965 para la calidad de agua
y la ley de 1970 para el aire limpio.
El uso del suelo es manejado por el Ministerio de Agricultura. Sus agentes
garantizan que los agricultores que reciben subsidios del gobierno
garanticen un plan de recuperación de suelos.
Los plaguicidas y los desechos tóxicos son controlados por la EPA. La RCRA
(Ley de Conservación y Recuperación de Recursos) tiene una regulación para
la generación, el transporte y la eliminación de éstos. La regulación exige
llevar un registro de los desechos, hacer un seguimiento de ellos y
contabilizarlos mientras se mueven en la economía.
La NEPA (Ley Nacional de Política Ambiental) se encarga de los estudios
ambientales para cualquier intervención que tenga impacto ambiental
negativo (Kostald, 2001).
Incentivos
En 1990, con el fin de disminuir la lluvia ácida, se establece un mercado para
las emisiones de azufre a través de un sistema de permisos transferibles.
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Esto ha sido un éxito, ya que se ha disminuido notoriamente la emisión de
este desecho. El precio transado del azufre es tan costoso que es un
incentivo para no contaminar.
El éxito obtenido con este incentivo ha inducido a tratar de utilizar otras
herramientas de mercado para la regulación de la contaminación. Otro
incentivo utilizado es el de colocar precio a los residuos sólidos según su
volumen, es por esta razón que las familias pagan un valor por la recolección
de basura; aunque este monto es fijo, la idea es que sea por volumen para
motivar la disminución de residuos.
Un incentivo utilizado, pero que no tiene gran impacto, es el control a las
industrias nuevas. Éstas deben pagar a las industrias viejas para que
disminuyan la contaminación y así compensar el daño que provocan al
ingresar al mercado.
En 1994 se implementa el RECLAIM (sigla en inglés Regional Clean Air
Incentives Market), que es un sistema de intercambio de emisiones. Está
evolucionando y puede funcionar bien a futuro.
Como se puede observar, estos países tienen maneras diferentes de regular
e incentivar la no contaminación, pero el objetivo es el mismo: cuidar el
medio ambiente. Por ello, se dan los acuerdos internacionales para controlar
el daño del ozono estratosférico y el calentamiento global. Para el primero
ya existe el acuerdo de Montreal y el segundo está en debate por los líderes
mundiales.
En las últimas dos décadas, han crecido los intereses relacionados con los
instrumentos de política ambiental basadas en el mercado y el análisis de
costo beneficio de políticas propuestas y aplicadas . El sistema ha
evolucionado de uno que ignora costos y se confía exclusivamente en
controles directos a uno que explícitamente considera beneficios y costos, y
les da una atención considerable a los instrumentos basados en el mercado.
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Los economistas han influido en la política ambiental de tres maneras:
defendiendo el uso de particulares instrumentos de políticas, desarrollando
métodos mejorados para analizar los costos y los beneficios, y analizando la
economía política de las políticas.
Para finalizar, en contraste con el enfoque económico de la globalización, la
corriente ambiental, pone a la naturaleza por encima de la economía y
cuestiona las prácticas actuales tanto económicas, políticas y sociales. El
enfoque ambiental señala la necesidad de un cambio total en la forma de
regir las cosas por el valor intrínseco que la naturaleza tiene (Kostald, 2001).
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Los costos de la
protección ambiental
Es importante notar que los gastos de las regulaciones para el control de la
contaminación presentan o reflejan dos cosas: el costo del control de la
contaminación y los costos innecesarios que resultan de las regulaciones
deficientes.
Por lo tanto, aunque dichas regulaciones pueden costar cifras apreciables
del PBI de un país determinado, quizá se pueda lograr un nivel de calidad
ambiental mucho mayor por el mismo precio. No se sabe hasta qué punto
los costos por las regulaciones para el control de la contaminación excedan
el menor costo posible de proporcionar la misma cantidad de calidad
ambiental.
Por ello, es preciso determinar exhaustivamente las instituciones y los
marcos normativos eficaces y eficientes que procuren menores erogaciones
de gastos y una efectividad mayor en el control de la contaminación para
generar, de este modo, una utilidad mayor en términos de PBI (Azqueta,
2007).
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Bibliografía
Azqueta, D. (2007). Introducción a la economía ambiental. Madrid, España:
Mc-Graw Hill.
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Informe
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Perelló Sivera, J. (2009). Economía ambiental.
Alicante,
España:
Universidad de Alicante.
www.uesiglo21.edu.ar
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