Una agencia de viajes es una empresa privada o persona jurídica especializada en el ámbito de los viajes. Ejerce de intermediario entre el cliente, los viajeros, y los destinos del viaje, gestionando total o parcialmente los diferentes servicios o proveedores de servicios. Tales servicios como aerolíneas, cruceros, hoteles, seguros de viaje, excursiones, guías, transporte local, visitas y comidas son los que se precisan para el disfrute del viaje requerido por el cliente. Las agencias de viajes deben atender a las necesidades y requerimientos de sus clientes para conseguir su satisfacción con el producto o servicio contratado. 2.- ¿Cual es su función? La razón de ser de las agencias de viajes es conseguir la satisfacción de sus clientes y para ello es muy importante la profesionalización de las propias agencia y de sus agentes de viajes. Las agencias de viajes deben contar con agentes titulados que acrediten solvencia técnica y conocimiento de los destinos, así como una adecuada preparación cultural y capacidades comunicativas para conseguir conocer cuales son las expectativas del cliente. La comunicación entre el cliente y el agente de viajes es fundamental para detectar cuales son sus preferencias de viajes y aquí el agente de actuar como un asesor especializado en viajes. Deben informar de los pros y contras de los destinos y servicios solicitados, aconsejando y guiando al viajero sobre las mejores alternativas de destinos que se adecuan a sus expectativas, las posibles conexiones de transporte, horarios de salida y de llegada. En caso de grandes viajes debe informar de los tiempos de transito en cambios de compañías aéreas, numero de escalas a realizar, también debe guiar al viajero sobre sobre los diferentes destinos locales a visitar, sus hoteles, categorías, tours programados, excursiones, disponibilidad de guías de habla hispana, sitios que visitar, cosas que puede hacer, consejos y recomendaciones, etc, y todo ello al precio más económico que se adecué a su presupuesto. En los últimos años el mundo está viviendo una revolución tecnológica con Internet, una ventana al exterior desde casa. Y entre otras muchas cosas, el ciberespacio está teniendo un papel cada vez más importante a la hora de buscar, organizar y contratar nuestros viajes de ocio. El 80% de las personas que buscan el destino para sus próximas vacaciones lo utiliza para informarse y el 70% de ellos compartirán después su experiencia en los medios sociales ya sea a través de fotos o simplemente para explicarla a los demás. Cada día hay más páginas de viajes en la red que amplían la oferta de manera inimaginable hasta hace bien poco, y esto no es más que el principio. Todo cambia y parece que nuestra forma de viajar también. Pero, ¿cuándo y dónde surgió la idea de los viajes organizados? Descubrámoslo, seguro que más de uno se sorprenderá. Todo comenzaría a mediados de siglo XIX, concretamente el 5 de julio de 1841, con Thomas Cook como uno de los organizadores de reuniones antialcohólicas. Parece ser que no tenían mucho éxito y cada vez acudían menos gente a ellas así que se le ocurrió premiar la asistencia con un premio que consistía en una salida a un Congreso que trataba esta adicción en Loughboroung. Para ello, contrataría un tren en el que viajarían 570 personas que, tras el pago de 1 chelín, obtendrían un billete de ida y vuelta además de incluir una merienda y la posibilidad de jugar al cricket y bailar al son de una banda. Aunque inicialmente Cook no lo tuvo fácil para convencer al director del ferrocarril que le alquilase el tren a un precio asequible, al final lo conseguiría convirtiéndose el viaje en todo un éxito, no solo por la gran asistencia sino porque durante ese día todos permanecieron alejados de las tabernas y del alcohol. Viendo las posibilidades de explotar esta idea en el futuro, fundaría poco tiempo después Thomas Cook & Son, la primera agencia de viajes de la historia. Inicialmente ofertaba circuitos por Inglaterra que en poco tiempo extendería por toda Europa y Egipto, y gran parte del éxito se basaba en negociar precios baratos con los hoteles y ferrocarriles, obteniendo así grandes beneficios. En 1851 organizaría un viaje a la Exposición Universal de Londres para 165.000 personas y cuatro años después otro a la de París. El negocio se expandiría rápidamente debiendo trasladar la sede de la empresa a Londres, llevando su idea a los EE. UU. y a otros países europeos donde concertaría los servicios de varias compañías ferroviarias. En 1856 organizó el primer tour en el que 350 personas disfrutarían de una ruta por toda Escocia, y en 1867 crearía el primer cupón de hotel conocido como “voucher”, nuestro actual bono. Puestos a ser el primero, Thomas Cook lo sería al llevar a un grupo de nueve personas a hacer la vuelta al mundo en un viaje turístico. Al mismo tiempo, el norteamericano Henry Wells crearía American Express, vinculada inicialmente al transporte de mercancías y correos para después convertirse en organización financiera emisora de cheques de viajes, y en 1920 en agencia de viajes. Cook moriría en 1892, a la edad de 84 años, pasando a su hijo la dirección de la empresa en un momento en el que sus 85 agencias distribuidas por todo el mundo la habían convertido en referencia internacional en su sector, hasta el punto que era contratada para organizar viajes de los peregrinos a la Meca. En 1931 se fusionaría con las empresas Wagons-Lits, actualmente operativa con 1.600 oficinas en más de 100 países. Para saber más: