Trabajo final: 1ª semana antes 24 Octubre. [email protected] -------------- LA LITERATURA GRIEGA Se suele dividir en tres épocas: ·LA ÉPOCA ARCAICA (MITAD S.8 A.C. - S.6 A.C.) Con representantes como Homero (poesía épica) y sus obras La Ilíada y La Odisea (realizadas alrededor del siglo 6a.C.) o Hesíodo y sus obras Teogonía y Obras y Días. Ambos autores emplearon en sus obras un tipo de verso muy solemne llamado Hexámetro. Sin embargo, mientras Homero pertenece a la poesía épica; Hesíodo habla en sus obras de sí mismo y de lo que puede enseñar a través de su experiencia (poesía didáctica). En las obras de Hesíodo se pasa del caos hasta la justicia, representada en el poder de Zeus. La poesía lírica se relacionaba más con contextos específicos, por lo que la encontramos la mayor parte de las veces de forma fragmentaria. ·LA ÉPOCA CLÁSICA (S.5 A.C. - S.4 A.C.): a esta época pertenecen la mayor parte de los autores de tragedias (Esquilo, Sófocles y Eurípides). Estos autores crean sus versiones de numerosos mitos, como por ejemplo Edipo o Medea. En la época clásica también encontramos numerosos filósofos como Sócrates y Platón. ·LA ÉPOCA HELENÍSTICA (FINALES S.4 A.C. - MEDIADOS S.2 A.C.). LA TEOGONÍA Y LA COSMOGONÍA Según la Teogonía de Hesíodo, al principio en el mundo griego existía el Caos. Este Caos comienza a generar cosas mezcladas y desordenadas de su interior. La primera cosa que escupe es Gea (La Tierra), que proporciona un primer lugar en el que los seres vivos pueden vivir. Con Gea aparece también Eros (El Amor), que no se identifica con el Eros hijo de Afrodita, sino que es la fuerza que determina de alguna forma que las cosas sigan naciendo. También aparecen La Noche y Érebo. La Noche es la oscuridad que precede al día, mientras que Érebo es la ausencia total de luz. De Gea, en el avance del mundo al orden, nacen por generación espontánea el Cielo (Urano) y el Mar (Ponto). Cuando esto sucedió la tierra se delimitó, pues encontramos el cielo y el mar. De Urano y Gea nace la primera generación divina sexuada: los Titanes (6 de cada sexo), sus hermanos los Cíclopes (en un inicio tres) y los Hecatonquiros/Centímanes (que representan la fuerza bruta). En general, los hijos de Urano y Gea son violentos y monstruosos. En esta época no hay apenas sitio para los seres vivientes, pues cielo y tierra siguen unidos y haciendo hijos en su interior, no pudiendo éstos salir. Entonces, Gea organiza un plan para quitarse a Urano de encima, literalmente. Genera una hoz en su interior y se la ofrece a sus hijos, en concreto al titán Cronos (el tiempo). Cronos corta los genitales de su padre y los arroja al mar. De la sangre que emana del miembro de Urano nacen las Erínias, las diosas de la venganza dentro de la familia. Nacen también de esa sangre los gigantes, que se dedican a la guerra, y las Melíades, ninfas que viven en los fresnos (de los que se fabrican las armas). De la espuma del mar y el semen de Urano que cae al mar nace Afrodita, que llega a Chipre y es acompañada por Eros (ya relacionado con la generación sexuada) e Hímeros (el deseo). Cuando Urano se separa de Gea, se crea un espacio donde pueden vivir los seres. Cronos, el tiempo, se convierte en el rey de los dioses, y sus hermanos ya pueden salir y reproducirse. Cronos se une con su hermana Rea/Rhea, y tiene hijos con ella, a los que se come porque su madre le advierte de que uno de ellos le va a quitar el poder. Sin embargo Rea no aguanta más y al dar a luz a su hijo pequeño Zeus, entrega a Cronos una piedra envuelta en pañales y esconde al bebé. Zeus es criado por unas ninfas y una cabra, crece y decide vengarse de su padre y salvar a sus hermanos. Métis (diosa de la inteligencia práctica), aconseja a Zeus que le dé una poción a su padre, la cual provoca que éste vomite a los hermanos de Zeus. Estos últimos, junto con Zeus, luchan contra su padre (Titanomaquia), y lo derrotan con la ayuda de los Cíclopes (que otorgan a Zeus el rayo) y los Centímanes (que le otorgan fuerza). Tras vencer a los titanes, Gea provoca que los gigantes luchen contra Zeus y sus hermanos (Gigantomaquia), y tras derrotarlos también se tienen que enfrentar a Tifón. Finalmente, tras la derrota del último, Zeus puede reinar sobre los dioses y divide el poder con sus hermanos: él se queda el cielo, Poseidón el mar, y Hades el infierno. DIOSES OLÍMPICOS Con el reinado de Zeus comienza una época en la que las fuerzas del mal ya no están entre los dioses, sino que están o bajo tierra (en el Tártaro) o en el mundo de los hombres. Los dioses olímpicos viven en el Monte Olimpo, en el norte de Grecia. Casi todos los dioses olímpicos están relacionados con Zeus, pues son o bien sus hermanos o bien sus hijos. La PRIMERA GENERACIÓN de dioses olímpicos la componen los hijos de Rea y Cronos: Zeus, Poseidón, Hades, Hestia, Deméter y Hera. La primera mujer de Zeus es Metis, de la que nace Atenea. La segunda mujer es Themis, y de su unión nace Dike (la justicia). En su tercer matrimonio, Zeus se casa con su hermana Hera, con la que tiene cuatro hijos, dos niños y dos niñas. Los dos niños son Ares (dios de la guerra) y Hefesto (dios del fuego y la herrería), mientras que las niñas (Ilitia y Hebe) no pertenecen a los dioses olímpicos. Artemis y Apolo nacen de la unión de Zeus con Leto. Hermes surge de la unión de Zeus y Maia. Dionisio nace de la relación de Zeus con la princesa tebana Sémele (una mortal). Por último en el caso de Afrodita existe una doble tradición: por un lado se dice que surgió del semen de Urano y la espuma del mar y por otro se dice que nació de la unión entre Zeus y la diosa Dioné. Los dioses olímpicos son inmortales, son dioses que viven una eterna juventud, viven completamente felices y son antropomórficos. La cultura romana adoptó gran parte de la cultura griega, y en lo referido a la mitología, adaptó los dioses griegos a los nombres romanos. 1. Zeus: es un dios relacionado con el cielo y la meteorología, puede utilizar el rayo, crear tormentas... Por otro lado, Zeus tiene un enfoque moral, considerándose también el dios de la justicia. El animal sagrado de Zeus es el águila. Otros símbolos de Zeus son Niké, el símbolo de la victoria, y el trono. Una de las características de los dioses griegos, y en especial de Zeus, es la capacidad de metamorfosearse en un fenómeno natural o un animal: en toro (Europa), en lluvia de oro (Dánae), en cisne (Leda), etc. Zeus, Hades, Poseidón, y el resto de dioses olímpicos de la primera generación son representados como hombres en su edad madura, pues representan el orden, al contrario que las siguientes generaciones que son representados más jóvenes (menos Hefesto). 2. Poseidón: es el dios del mar y del océano. Hermano de Zeus. Es un dios que se ocupa de la navegación, los terremotos y los maremotos. Se caracteriza por ser extremadamente violento y polémico en ocasiones. Su símbolo principal es el tridente. Al igual que Zeus, siempre es representado con barba y cabello largo. Poseidón es un dios alabado pero no amado, pues el mar es un elemento muy peligroso. Uno de los hijos de Poseidón es el cíclope Polifemo, surgido de la unión del dios con una ninfa. Otro hijo es Teseo, uno de los héroes más importantes de la mitología griega. 3. Hades: es el dios del infierno, del subsuelo y de los muertos. Hermano de Zeus. Se caracteriza por llevar un casco que lo hace invisible. Hades es un dios que se relaciona muy poco con las vidas de los hombres, pues su reino es el de los muertos. Dos personajes característicos de este reino del Inframundo son el perro guardián Cerbero, y el barquero del infierno, Caronte (con Caronte se relaciona Hermes, el Psicopompo, que lleva las almas desde el mundo de los vivos hasta la barca de Caronte). La esposa de Hades es Perséfone, hija de Zeus y Deméter (hermana de Zeus). Es raptada por Hades, que la hace su esposa. Sin embargo, su madre Deméter, diosa de la tierra fecunda, triste por su pérdida, deja de dar fruto, comenzando a haber hambrunas. Zeus actúa de árbitro y convence a Hades para que la devuelva a su madre. Pero Hades da de comer a su esposa una granada, fruto relacionado con el mundo subterráneo, y de esta forma consigue que el trato sea que Perséfone pase 3 meses con él en el Inframundo y el resto del año con su madre en la tierra de los vivos (de esta forma surgen las estaciones, pues cuando Deméter deja de dar fruto los tres meses que Perséfone no está, surge el invierno). MISTERIOS GRECIA: misterios órficos (Orfeo), misterios dionisíacos (Dioniso Zagreo) y los misterios eleusinos (Ciudad de Eleusis) BUSCAR 4. Hera: es otra hermana de Zeus, se relaciona con los matrimonios, la familia y los partos. Tiene cuatro hijos con Zeus, y se caracteriza por los celos, ya que su marido tiene relaciones con otras mujeres. Debido a esto, persigue a las amantes de Zeus y a los hijos de éstas, como por ejemplo Heracles, Ío o Leto. Hera está muy enfadada también con los troyanos por la historia del Juicio de Paris. Es, en definitiva, una diosa muy colérica. 5. Ártemis: es una de las hijas de Zeus (en concreto de su unión con Leto), hermana melliza de Apolo. Se representa como una diosa joven y siempre provista de arco y flechas. Se la considera la diosa de la luna y la caza, y sus símbolos son el ciervo, el ciprés y los instrumentos de caza. Se la considera una diosa virgen. En Éfeso se relacionaba a Ártemis con una antigua diosa de la naturaleza y de los animales. Ártemis quiere defender su castidad durante toda su vida, y todos los hombres que intentan acercarse a ella terminan muertos o escarmentados. Orión por ejemplo, intenta violarla y Ártemis hace que le pique un escorpión y después lo convierte en constelación. Otro ejemplo es Acteón, que ve a la diosa y sus acompañantes desnuda, y ésta le convierte en ciervo para que sea atacado por sus propios perros. Junto con su hermano, está relacionada con las muertes rápidas y violentas (debido a su relación con las flechas). Por otro lado, Ártemis participa en algunos mitos con su hermano. Es el caso de Níobe, que desafío a Leto por tener más hijos que ella (doce); mandando Leto a Apolo y Ártemis a matar a todos sus hijos (finalmente Níobe, que llora desconsolada es metamorfoseada en una piedra con una fuente). 6. Atenea: es hija de Zeus y Metis. Zeus se come a Metis antes de que Atenea nazca porque un oráculo le vaticina que el hijo que espera de ella le va a desafiar. Atenea nace dentro de Zeus y sale de la cabeza de este. Atenea es la diosa de la sabiduría y de la guerra inteligente (siempre aparece vestida con una armadura). También es la diosa del arte manual y la costura (mito de Aracne). Los símbolos de Atenea son: el olivo, la lechuza, niké (símbolo de la victoria). 7. Afrodita: su nacimiento tiene dos tradiciones. La tradición que dice que nació del semen de Urano y la espuma del mar, y la que dice que es hija de Zeus y Dioné. Es la diosa de la belleza y del amor, y en la mayor parte de sus representaciones aparece de forma sensual y enseñando su cuerpo. Uno de sus símbolos son las palomas. Según la tradición clásica, Afrodita está casada con Hefesto (el dios más feo del Olimpo). Sin embargo, la diosa tiene muchos amantes, como por ejemplo Ares (el dios de la guerra y hermano de Hefesto), Hermes (de cuya relación nace Hermafrodito, que tiene una parte de Hermes y otra de Afrodita), Anquises (troyano y padre de Eneas). Uno de los mitos relacionados con Afrodita es el de Adonis, otro de los amores de Afrodita. Adonis era un muchacho muy hermano que nació de Mirra, una princesa siria que se enamora de su padre y se disfraza para acostarse con él. Cuando su padre se entera, manda matar a Mirra, pero Afrodita salva al niño y se lo da a Proserpina para que lo críe. Cuando Afrodita reclama de nuevo al niño, Proserpina no quiere entregárselo, y Zeus juzga que Adonis deberá pasar una parte del año con cada una de las dos. Sin embargo, Adonis tiene un accidente durante una de sus estancias con Afrodita y muere, tiñendo su sangre las rosas de rojo y surgiendo nuevas flores de él. 8. Apolo: hijo de Leto y Zeus y hermano mellizo de Ártemis. Dios relacionado con el sol, de las artes, la adivinación y de la música tranquila (en contraste con la de Dionisio que se relaciona con la fiesta). También está muy relacionado, al igual que su hermana, con el arco y las flechas, las cuales transmiten epidemias, plagas y señalan culpables. Por ejemplo, Apolo crea, al comienzo de la Ilíada, una epidemia en el campamento de los Aqueos porque Agamenón se niega a devolver a Crises (sacerdote de Apolo) a su hija. Apolo suele estar acompañado por las Musas, relacionadas con cada uno de los géneros literarios, que son 9, y que son hijas de Zeus y Mnemosine. Los símbolos de Apolo son la lira, la corona de laurel y el cuervo. Es un dios, al igual que su hermana, que se representa joven y bello. En Delfos se encuentra el templo de Apolo, y un oráculo en el cual una pitonisa emplea técnicas adivinatorias. Apolo tiene relaciones con muchas mujeres, pero también otras le rechazan. Una de estas últimas es Casandra. Casandra le pide a Apolo que le enseñe el don de la adivinación a cambio de tener relaciones con él. Sin embargo, tras aprender el don, Casandra rechaza a Apolo, castigándola éste haciendo que pueda hacer predicciones pero nadie la crea. Otra ninfa que rechaza a Apolo es Dafne. Eros castiga a Apolo por meterse con él y le lanza a Apolo una flecha para que se enamore locamente de Dafne y otra a esta para que lo rechace. Apolo comienza a perseguir a Dafne y esta le pide a su padre, el río Peneo, que la libre de la persecución de Apolo, convirtiéndola Peneo en un árbol de Laurel (de ahí que Apolo, que se queda con una rama del árbol, tenga una corona de laurel como símbolo). Apolo también se enamora de una princesa llamada Corónide. Esta se queda embarazada de Apolo, pero le es infiel con otro hombre. Un cuervo, por entonces todavía blanco, cuenta esta infidelidad a Apolo y éste decide matar a Corónide, salvando sin embargo al hijo, Asclepio (que se convertirá en el futuro dios de la medicina). El cuervo, por haber dado la mala noticia a Apolo, se hizo negro. Otro hijo de Apolo es Orfeo, un músico muy conocido. 9. Hefesto: es hijo de Hera y Zeus (según la tradición de Homero), o sólo de Hera (según la tradición de Hesíodo). Es feo y cojo, esto último debido a que bien nació cojo, bien lo tiraron Hera o Zeus del Olimpo. Pasa el tiempo con los cíclopes en su fragua bajo el monte Etna. En ella fabrica de todo (armas, la primera mujer...). Hefesto está casado con Afrodita, pero sin embargo ésta tiene muchos amantes como pueden ser Hermes y Ares. Hefesto también se enamora de otras mujeres, pero sin embargo no tiene suerte con ellas. Por ejemplo, persigue a Atenea, pero se excita tanto que su semen cae en la tierra y de él nace Erictonio, mitad hombre y mitad serpiente. 10. Hermes: es hijo de Zeus y una ninfa, Maya. Es un dios que tiene una función de mediador en diferentes contextos. Es el mensajero de los dioses y el intermediador entre el mundo de los vivos y de los muertos (Psicopompo, guía a las almas hasta el río Aqueronte, donde Caronte las recoge). Es el dios protector de los mensajeros, los ladrones y de los embajadores. Sus símbolos son las sandalias con alas, el pétaso (un sombrero), y el caduceo (un bastón con dos serpientes enrolladas). Es el fiel colaborador de Zeus, por ejemplo, duerme y mata a Argos, un monstruo con cien ojos enviado por Hera para custodiar a Ío, una amante de Zeus, al estar celosa de ella. Hermes nace, y desde pocas horas después de ese nacimiento ya da muestras de su habilidad como ladrón: sale de la cuna y roba un rebaño de vacas a su hermano Apolo, haciendo un sacrificio. Hermes construye una lira y se la da a Apolo, que renuncia al rebaño a cambio del instrumento. Hermes también está considerado el protector de los caminos. Por ello, se colocaban en los caminos, fronteras y encrucijadas unas piedras llamadas hermas, que representaban la cabeza de Hermes. Hermes no tiene muchas relaciones con mujeres, pero sus pocos hijos son importantes: de su relación con una ninfa nace Pan, mitad hombre y mitad macho cabrío (semidios de los rebaños y pastores); de su relación con Afrodita nace Hermafrodito (que posee rasgos sexuales de hombre y de mujer) 11. Ares: es hijo de Zeus y Hera. Es el dios de la guerra sangrienta y violenta. No es muy querido por los poetas griegos, pues representa la violencia, un asunto trágico y endémico. La representación de Ares es constantemente la de un dios que lleva armadura, espada, yelmo y escudo, y que se acompaña de personajes como el Terror o el Miedo. Aparece casi siempre sin barba. Está relacionado con Tracia, el territorio septentrional (del norte) de Grecia, pues los pueblos de esta zona se dedicaban prácticamente todo el tiempo a la guerra (mucho coraje y escasa inteligencia). Entre sus hijas aparecen las Amazonas, que se dedican a la guerra y tienen tan sólo un pecho para poder utilizar el arco mejor. Las Amazonas participan en la guerra de Troya. Una de las historias más importantes relacionadas con Ares es su amor con Afrodita (representando ambos realidades totalmente diferentes). Estas dos divinidades están relacionadas en la Odisea y en la tradición romana. En esta última, se afirma que Rómulo y Remo, los fundadores de Roma, son los hijos de Rea Silvia y Ares. Además, esta tradición se junta con la tradición de que los romanos descienden de Eneas (héroe troyano, hijo de Anquises y Afrodita). 12. Dionisio: es hijo de Zeus y Sémele. Sémele le pide a Zeus que se muestre en todo su esplendor y éste, al hacerlo, la quema sin querer. El niño, Diniosio, sin embargo se salva, y Zeus se lo cose en el muslo hasta que vuelve a nacer (por lo que a Dionisio se le conoce como el dos veces nacido). Por eso está relacionado con los cultos mistéricos. Es un dios que según la tradición aparece en el mundo micénico. En la época clásica se relaciona con el Oriente, con el norte de Grecia. Tiene una gran relación con las fuerzas de la naturaleza, de lo irracional, de los valores del hombre. El culto de Dionisio es un culto orgíastico, las sacerdotisas de Dionisio, las bacantes, le rinden culto en el bosque, en un estado de éxtasis y bebiendo vino y escuchando mitos. Además, estas sacerdotisas capturan animales en el bosque, los despedazan y se los comen crudos como culto al dios. Dionisio es también el dios del vino, medicina contra las tristezas. Los símbolos de Dionisio son la corona hecha de hojas de vid y un bastón en el que se enrolla una enredadera. Dionisio está relacionado con el teatro a través de la máscara, que representa el "hacerse otro". Las Bacantes de Eurípides es la única tragedia consensuada de Dionisio. LOS HOMBRES No hay muchos mitos relacionados con la creación de los hombres. Mito de las tres edades: los hombres son creados por los dioses en la época de Cronos, donde aún reinan los titanes. Los primeros hombres se supone que nacen directamente de la tierra, son constantemente jóvenes, viven cerca de los dioses, tienen todo lo que necesitan, no hacen nada (edad de oro). Tras esta etapa, comienza la decadencia del hombre, comenzando la edad de plata, en la que sin embargo los hombres continúan viviendo cerca de los dioses. Sin embargo, los hombres dejan de venerar a los dioses y continúa una decadencia sucesiva, surgiendo los hombres de la época de bronce, que son muy belicosos. Tras la desaparición de los hombres de bronce hay un parón en la decadencia, la considerada edad de los héroes, procedentes de la guerra de Troya y la guerra contra Tebas, que buscan la gloria y el valor. Esta era termina porque muchos héroes mueren en ambas guerras y porque otros adquieren la inmortalidad. Tras esta etapa llega la época actual, la era del hierro, en la que los hombres están bajo el poder de los hombres, conocen la reproducción sexual y, aunque conocen la justicia, no siempre la practican. Gracias a Prometeo se producen una serie de cambios en los hombres, que desarrollan un progreso técnico, la necesidad del hombre de trabajar o la de unirse a una mujer. Prometeo no es un titán, pero tampoco es un dios, por lo que se sitúa en un punto intermedio. Prometeo es muy inteligente y se convierte en el ayudante de Zeus. En un primer momento, Prometeo separa los dioses de los hombres. Un día hay un banquete en el que participan los hombres y los dioses. Prometeo sacrifica un buey y tiene que repartirlo en dos montones para que Zeus elija el montón que prefiere. Prometeo intenta engañar a Zeus camuflando los montones para que el peor parezca más apetecible. Zeus, al darse cuenta, decide castigarlo y quita a los hombres el trigo y el fuego. Sin embargo, Prometeo roba una chispa del rayo de Zeus y vuelve a entregar el fuego a los hombres. Zeus vuelve a enfadarse y castiga de nuevo a Prometeo y a los hombres. El castigo para los hombres es la primera mujer, algo, según la tradición griega, muy bonito por fuera y muy dañina por dentro. Con Pandora, la primera mujer, entra en la tradición griega la generación sexuada. Hefesto construye una mujer con barro, y después todos los dioses le dan la vida y una serie de dones. Hermes lleva a Pandora a la tierra y ésta es aceptada por Epimeteo, el hermano tonto de Prometeo, que se casa con ella. En casa de Epimeteo hay una caja o una jarra, y Zeus, cuando Epimeteo no está en casa, convence a la curiosa Pandora de que abra dicha caja, en la cual se contienen todos los males del mundo (que no tienen ni voz ni apariencia). En la caja también está la esperanza, que hace que los hombres sobrevivan porque piensan que todo puede ir mejor. Por su parte, el castigo de Prometeo consiste en que Zeus lo ata a una piedra en el Cáucaso y hace que un águila le coma el hígado todos los días, hígado que se regenera durante la noche. De esta forma, Prometeo, que no puede morir pero si sufrir, es castigado de forma continua. Al final, Zeus perdona a Prometeo y envía a Heracles para que lo libere. A pesar del castigo, los hombres empiezan a olvidarse de los dioses y, gracias a la reproducción, se multiplican. Los dioses creen necesario actuar y envían un diluvio a la tierra. Zeus, sin embargo, salva a dos personas: Deucalión y Pirra, que se refugian en un monte hasta que las aguas comienzan a bajar. Entonces hacen un sacrificio a los dioses y estos les dicen que tienen que encontrar los huesos de la tierra (las piedras) y empezar a repoblar el mundo. Deucalión y Pirra comienzan a coger piedras y a tirarlas hacia atrás. De esta forma, de las piedras que tira Pirra salen las mujeres, y de las que tira Deucalión salen los hombres. Los hombres se multiplicaron otra vez de manera alarmante, y hacían mucho ruido, por lo que Zeus provocó la guerra de Troya para reducir esa población (según una tradición). [Otra tradición secundaria de la creación de los hombres dice que estos fueron creados por Prometeo con barro, de ahí su cariño para con ellos] El Origen de la Guerra de Troya Existía una nereida llamada Tetis, de la que están enamorados Poseidón y Zeus. Sin embargo, existe una profecía que dice que el hijo que nazca de la unión, va a ser más poderoso que el padre. Por eso, se decide que Tetis (madre de Aquiles) se debe casar con un mortal, y los dioses escogen a Peleo. Peleo es el rey de una ciudad en el norte de Grecia, y antes de casarse con Tetis debe conquistarla. Una vez conquistada, se celebran las nupcias. Todos los dioses acuden al banquete menos una diosa que no es invitada, Éride (la contienda, la discordia). Éride enfadada acude al banquete con una manzana dorada que lleva escrito "a la más bella". Tres diosas consideran que la manzana está destinada a ella: Atenea, Venus y Hera. Zeus no quiere decidir la contienda, así que asigna el papel de juez a un mortal, el pastor Paris. [Paris es pastor porque su madre Écuba soñó mientras estaba embarazada que va a dar a luz a una antorcha (lo que es interpretado como que será la causa de la destrucción de la ciudad). Écuba y su marido Príamo, que son los reyes de Troya, abandonan a Paris en el monte Ida, donde es amamantado primero por una osa y después recogido por unos pastores. Años después, los verdaderos padres de Paris convocan un torneo en el que Paris vence, descubriéndose que es el hijo de Príamo y Écuba.] Las diosas ofrecen a Paris un don: Atenea la sabiduría, Hera el poder de un rey y Venus el amor de la mujer más bella del mundo. Al elegir a Venus, Paris desencadena los celos de las otras dos diosas, en especial de Hera, que harán lo posible por destruir Troya. La mujer más bella del mundo, que Venus promete a Paris, es Helena, supuesta hija de Tindáreo. Sin embargo, la mujer de Tindáreo, Leda, tiene relaciones el mismo día con Zeus (metamorfoseado en cisne), y su marido, engendrando 4 hijos (Helena y Clitemnestra, y Cástor y Pólux). Otra tradición dice que Helena es hija de Némesis (diosa de la venganza) y Zeus, metamorfoseados en oca y cisne respectivamente. Leda se encuentra el huevo que puso Némesis y lo lleva a su casa, donde nace Helena. Helena es tan bella que Tindáreo decide que tienen que venir todos los príncipes de Grecia a pretenderla. Helena no se decide, pero finalmente escoge a Menelao. Sin embargo, antes de decidir, todos los príncipes son obligados a prometer que respetarán la decisión de Helena y protegerán la relación. Paris y Eneas llegan a Esparta, donde es rey Menelao, que les acoge y les ofrece toda su hospitalidad. A pesar de esto, cuando Menelao se va a Creta, Paris convence (o rapta) a Helena, rompiendo el vínculo de hospitalidad. Esto provoca la reacción de Menelao y desencadena la guerra. Según la tradición que relata por ejemplo Apolodoro, hay dos expediciones a Troya. Antes de éstas, Menelao acude con Ulises a Troya a intentar solucionar el asunto diplomáticamente, pero los troyanos se niegan a devolver a Helena. Después, la primera expedición falla pues los barcos se confunden de camino. Diez años después del rapto se produce la segunda expedición, a la que acuden todos los príncipes griegos por el juramento que le hicieron a Menelao y Helena. La flota griega tiene que parar en Áulide porque no hay viento y no pueden navegar. Agamenón pregunta al adivino griego Calcante por qué no hay viento, y éste responde que es debido a la ira de Artemis, y que para aplacarla deberá sacrificar a su hija Ifigenia. Agamenón es padre de Ifigenia, pero también jefe de la expedición, por lo que acaba decidiendo sacrificarla. Envía un mensajero a su mujer Clitemnestra diciendo que Ifigenia va a casarse con Aquiles. Cuando Clitemnestra e Ifigenia llegan, se enteran de que esta última va a ser sacrificada para que los griegos puedan llegar a Troya. [Eurípides en su tragedia Ifigenia en Áulide, narra que Ifigenia se sacrifica voluntariamente, queriendo transmitir como la guerra afecta incluso a los inocentes, haciéndolos sacrificarse y estar contentos con ello]. Otra tradición dice que Ártemis se apiada de Ifigenia y la cambia en el momento del sacrificio por una cierva, llevándose a Ifigenia como sacerdotisa. El sacrificio de Ifigenia va a ser una de las causas por las que Clitemnestra matará a Agamenón tras la guerra de Troya. La Ilíada Finalmente los griegos pueden llegar a Troya y una vez allí comienza la guerra. Después de diez años de guerra, nadie ha conseguido ganar la guerra. La Ilíada cuenta los acontecimientos de 51 días del último año de la guerra. El hecho que desencadena el final de la guerra es la cólera de Aquiles. A éste le es arrebatado por Agamenón un botín de guerra, su esclava Briseida, faltándole al honor y desencadenando la reacción del héroe. Esta reacción consiste en que Aquiles abandona el combate, perdiendo los griegos a su mejor héroe (al ser hijo de Tetis es fuerte y hábil, y además su madre lo bañó en el río Estigia agarrándolo por el talón, su única parte mortal). Patroclo, el compañero de Aquiles, más mayor que él, sale al combate con las armas de Aquiles, y lo matan. Esto es lo que determina la vuelta al combate del héroe Aquiles y el enfrentamiento de éste con otro héroe, el troyano Héctor. Los héroes son mortales con cualidades superiores a las del resto de hombres. Estos héroes buscan la inmortalidad y la gloria, prefiriéndose una vida de luchas a una vida tranquila. Los héroes se caracterizan por morir jóvenes. Héctor es el hijo mayor de Príamo (que tiene 50 hijos) y Écuba, y es el representante de un héroe que lucha y se relaciona con la inmortalidad y la gloria, pero es más humano que el resto: lucha para defender a su ciudad y su familia. Héctor decide salir a luchar con Aquiles a pesar de ser consciente de que posiblemente muera. Al salir, el troyano se da cuenta de que no tiene el favor de los dioses, pero ya es demasiado tarde. Aquiles lo mata, lo ata a su carro y lo arrastra durante días. La Ilíada concluye con el encuentro de Aquiles y Príamo. Príamo llega con la ayuda de los dioses al campamento de los Aqueos y le pide a Aquiles el cadáver de su hijo, poniéndose de rodillas y besándole la mano. Se representa a vencedores y vencidos con compasión, como humanos. 1/10/13 La Odisea La Odisea se produjo en una época en la que Grecia se enfrenta con el problema de la colonización. Los griegos deben ponerse en contacto con otros pueblos y entablar relación con ellos. Las aventuras de Ulises serían una trasposición de esta situación real a la literatura. Ulises es un héroe que se asemeja más al hombre corriente. No es como Aquiles, que es hijo de una diosa y se destaca del resto de hombres por sus cualidades físicas superiores. Por el contrario, Ulises no es hijo de una diosa, es hijo de dos mortales: Laertes (rey de Ítaca) y su esposa Anticlea. Ulises se destaca por su inteligencia y por su astucia. Ulises es también muy curioso, lo que provoca muchas desgracias a sus compañeros. Este rasgo se utiliza en la tradición sucesiva, por ejemplo, en la Divina Comedia de Dante. La Odisea está dividida, al igual que la Ilíada, en 24 cantos. Esta división no es original, sino que se impone posteriormente (en el siglo III A.c.), por parte de los eruditos de la biblioteca de Alejandría. Éstos escogen la versión más digna de las obras de Homero y la dividen en esos cantos, organizándolos. La Odisea muestra la capacidad del poeta de organizar la materia de forma que se cuenta lo que pasa pero no en orden. Se comienza con Odisseo en la isla de la ninfa Calipso, y en los cuatro primeros cantos no se cuenta como ha llegado Odisseo allí, sino que se narran los hechos que están aconteciendo en Ítaca, es decir, se centran en el hijo y a esposa de Odiseo, Telémaco y Penélope. Odisseo se encuentra en la isla de Calipso porque ha desembocado la ira de los dioses. Odisseo vuelve tras la Guerra de Troya a Ítaca, pero cuando llega con sus doce naves es rechazado por una tempestad. Los dioses están enfadados con los griegos porque cuando toman la ciudad no son justos con los vencidos (por ejemplo, Neoptólemo, el hijo de Aquiles, mata a Príamo en un templo, bajo la protección de los dioses; o Ájax viola a Casandra junto a la estatua de Atenea). Odisseo, en su nuevo interno de retorno, se va encontrando con personajes que van matando a sus compañeros pero además le van haciendo olvidar quién es y le van quitando las ganas de volver a su casa. Por ejemplo, Odisseo se enfrenta con los Lotófagos (que comen una planta que te hace olvidar) o las Sirenas (seres monstruosos que ejercen una influencia increíble sobre los hombres con su canto; cantando lo que los hombres quieren oír). Tras los cuatro cantos en Ítaca, el quinto muestra a Odisseo con la ninfa Calipso. Odisseo llega sólo a la isla de Calipso porque todos sus compañeros han muerto. Calipso se enamora de él y le promete la inmortalidad si se queda con él. Odisseo, diferente de los héroes de la Ilíada, rechaza la oferta, porque sólo quiere volver a su casa y ver a su familia. Los dioses consideran entonces que Odisseo ya ha sufrido bastante por su daño a Polifemo, y Hermes dice a Calipso que deje marchar a Ulises. Ulises se embarca en un pequeño barco, y una tempestad le hace naufragar, llegando a la isla de los feacios. En esta isla es encontrado, con la mediación de Atenea, por la hija de rey de los feacios: Nausícaa. Odisseo, que es muy hábil hablando con otras personas. Éste se presenta ante Nausícaa hablándola de forma muy suave y bella, y la princesa decide ayudarle. En el banquete de los feacios Odisseo revela su identidad y comienza a contar lo que le ha pasado desde que se marchó de Troya. Entre sus aventuras, Ulises narra su llegada a una tierra con sus naves su decisión de explorarla con doce compañeros. Esa tierra es la de los cíclopes. Ulises encuentra con sus compañeros una cueva en la que encuentran quesos, y esperan a ver quién habita en ella. Ese personaje es Polifemo, un cíclope hijo de Poseidón, que vive ajeno a los dioses y a las normas sociales (representando pues a los pueblos con un desarrollo inferior a los griegos). Ulises se presenta, sin decir su nombre, ante Polifemo, pero éste cierra la cueva y se va comiendo a sus compañeros. Odisseo, desesperado, emborracha al cíclope y le dice que se llama Nadie. Después, mientras el cíclope está dormido, calienta un palo puntiagudo y se lo clava con los seis compañeros que quedan en el ojo. Sin embargo, no pueden salir de la gruta, así que se camuflan entre las ovejas de Polifemo y pasan desapercibidos ante la ceguera del cíclope. Una vez se están marchando en sus barcos, Odisseo revela su verdadero nombre a Polifemo, y éste le manda una maldición para que no pueda volver a su casa. Otra de las aventuras es la llegada de Ulises y sus compañeros a la isla de Circe. Circe es una hechicera que convierte en animales a los hombres que entran en su isla. Algunos de los compañeros de Odisseo exploran la isla den busca de comida, y Circe convierte a todos menos a uno en cerdos. Este avisa a Odisseo, que, ayudado por Hermes (que le dice como enfrentarse a la hechicera y le entrega una pócima para anular sus encantamientos), se queda como amante de Circe. Después de su estancia con Circe, ésta le explica cómo hablar con los muertos, enterándose éste de que su madre a muerto. También habla con Aquiles, que preferiría vivir como un siervo que ser el rey de los muertos, y se entera de la muerte de Agamenón. Circe también le da consejos para enfrentarse a las sirenas. Otra tempestad provoca que Odisseo pierda a todos sus compañeros y llegue a la isla de Calipso, cerrándose el círculo. Tras salir de la isla de los feacios y sufrir otra tempestad, Odiseo llega por fin a Ítaca. Entonces Ulises se propone recuperar su condición de rey, padre y esposo, teniendo que luchar para ello. Cuando consigue el apoyo suficiente (siervos fieles y su hijo Telémaco), se decide a matar a los pretendientes de su mujer Penélope. Organiza un concurso entre los pretendientes con el arco de Odisseo, no pudiendo ninguno tensarlo. Odisseo, vestido de mendigo, pide probar y, con las puertas cerradas, mata a los pretendientes y a los siervos infieles. Tras convencer a Penélope de que es el verdadero Odisseo, éste se tiene que enfrentar a un último problema, la sed de venganza de las familias de los pretendientes. Con la pacificación de estos, se acaba la Odisea. 03/10/13 Edipo El mito de Edipo está relacionado con unos mitos característicos del mundo griego que hablan sobre el delito dentro de la familia. La familia es el elemento fundamental del mundo griego, por lo que los delitos dentro de este ámbito cuestionan la estructura misma del modo de vida griego. Edipo en la tradición griega y en la tragedia de Sófocles no es culpable, sino que se enfrenta a la cruel decisión de los dioses. Zeus tiene entre sus amantes a Europa. Zeus se transforma en toro y rapta a esta mujer de origen fenicio. Con la búsqueda de Europa por parte de sus hermanos, se produce la fundación de Tebas por parte de Cadmo (hermano de Europa). Cadmo se encuentra al entrar en Grecia con un oráculo de Apolo. Le pregunta la ubicación de su hermana, y el oráculo le responde que debe dejar de buscarla y seguir a una vaca hasta que muera de cansancio. Allí donde muriera la vaca debía fundar una ciudad. Cadmo sigue esas instrucciones, fundando de esta manera la ciudad de Tebas. Cadmo obtiene de los dioses un don, los dioses le otorgan como mujer a Armonía (hija de Ares y Afrodita). Ambos tienen cuatro hijas y un hijo, hijas entre las que se encuentra Sémele (la madre de Dionisio). Del hijo varón de Cadmo y Armonía, que se llama Polidoro nace Lábdaco, el iniciador de la estirpe de Edipo. De Lábdaco nace Layo, que es tan joven cuando su padre muere que se le quita del poder. Cuando crece, Layo intenta regresar al poder pero se le deniega, por lo que Layo se va al Peloponeso, a la corte de Pélope. Layo intenta violar a uno de los hijos de Pélope, provocando que dicho hijo se suicide. Pélope maldice a Layo y a su descendencia, por lo que la estirpe de Edipo queda maldita. Layo vuelve a Tebas y se hace con el poder, casándose con Yocasta. Los dos no consiguen tener hijos, por lo que Layo va al oráculo de Apolo en Delfos a preguntar la razón de esto. Apolo no le responde el porqué de no tener hijos, sino que si tiene un hijo éste le va a matar. Layo decide no tener relaciones con Yocasta, pero un día se emborracha y deja embarazada a su mujer. Al nacer el niño, según la tradición de Sófocles, Yocasta le entrega al niño a un pastor, y antes de esto, le hacen un agujero en los pies para que no pueda moverse. El pastor se apiada de Edipo y se lo entrega a otro pastor de la vecina Corinto. Este pastor lo entrega a su vez a los reyes de Corinto (Pólibo y Mérope), que no tienen hijos. o juego de niños Edipo crece, pero en un banquete alguien le revela que los reyes de Corinto no son realmente sus padres. A pesar de que su padre le dice que no haga caso de esa declaración, Edipo comienza a plantearse cuál es su verdadera identidad. El joven acude al oráculo de Delfos a preguntar si los reyes de Corinto son verdaderamente sus padres, pero el oráculo le responde que el matará a su padre y se casará con su madre. Por tanto, Edipo no vuelve a Corinto pensando que es su verdadera casa, y se dirige a Tebas, de donde verdaderamente es. En una encrucijada, Layo y Edipo se encuentran cada uno por su camino. El conductor del carro de Layo golpea a Edipo para que se aparte, y éste mata al conductor, a su padre (aunque Edipo no lo sabe) Layo, y a todos los siervos personaje con una violencia notable y notifica que Layo ha muerto en un ataque de bandidos menos a uno que consigue escapar. Edipo prosigue su camino a Tebas, que por aquel entonces estaba siendo asolada por la Esfinge (que propone un enigma a los habitantes y mata a todo aquel que no lo responde). Nadie había contestado al enigma de la Esfinge, pero Edipo consigue resolverlo (el hombre es el único ser que anda con cuatro pies de niño, dos pies de adulto y tres pies de anciano). El premio que le otorgan en Tebas es el control del reino, que estaba siendo controlado por el hermano de Yocasta, Creonte, y el matrimonio con la reina viuda Yocasta (su verdadera madre). en este mito se marca que por mucho que uno quiera cambiar su destino siempre prevalece la voluntad de los dioses Edipo ha cumplido su destino, y tiene cuatro hijos con Yocasta: dos hombres, Polinices, Eteocles; y dos mujeres, Ismene y Antígona. En este punto comienza la tragedia de Sófocles "Edipo Rey" (los acontecimientos anteriores se conocen a través de diálogos con los personajes). Esta tragedia está considerada como una de las mejores de la tradición griega por la estructura de su trama, que funciona como una máquina perfecta. La tragedia comienza con una peste que cae sobre la ciudad de Tebas. Esta peste provoca que los tebanos y sus animales no puedan reproducirse. Edipo, que es un rey sabio y que se preocupa por su pueblo, manda a Creonte al oráculo de Delfos, contestando éste que la peste existe porque en la ciudad vive el asesino de Layo. Edipo dice que buscará al culpable y lo matará o expulsará de la ciudad. Comienza a investigar y llama a un adivino ciego, Tiresias. Tiresias sabe como están las cosas e intenta no aparecer. Sin embargo, Edipo lo hace conducir ante él, produciéndose el primer contacto entre el que ve pero no entiende (Edipo) y el que no ve pero entiende (Tiresias). Tiresias decide callar, pero ante la provocación de Edipo, que le acusa de no ser sabio, revela que Edipo fue quién mató a Layo y que ha tenido hijos con su madre. Edipo no se lo cree, y afirma que Tiresias se ha aliado con Creonte para quitarle el poder. Sin embargo, Edipo comienza a cuestionarse si de verdad fue él quién mató a Layo, aunque hablando con Yocasta ambos desmienten, ignorantes, que sus oráculos se hayan cumplido. Edipo descubre que uno de los siervos de la comitiva de Layo vive y le hace llamar. Éste, sabedor de la situación, oculta a Edipo que fue él quien mató a Layo. Entonces llega un mensajero de Corinto que comunica a Edipo que el rey de Corinto ha muerto y que puede volver a la ciudad a ser coronado rey. Sin embargo, este mensajero también revela a Edipo que no es el verdadero hijo de los reyes de Corinto. Yocasta pide a Edipo que deje la investigación, pero éste se niega pensando que Yocasta se avergüenza de que no sea hijo de reyes. Yocasta vuelve al palacio y se ahorca. Edipo prosigue su investigación e interroga al mensajero, que revela que él fue el pastor que le entregó a los reyes de Corinto, y que el siervo que sobrevivió al asesinato de Layo y su séquito es a su vez el pastor tebano que le entregó a él a Edipo. Este siervo acaba reconociendo que Edipo es hijo de Yocasta y Layo, y que también mató a éste último. Edipo, conocedor por fin de la verdad, corre al palacio y se encuentra a Yocasta ahorcada, quitándose la vista. Edipo, ciego, es expulsado de la ciudad y vagó por Grecia durante mucho tiempo, hasta que al final muere en Colono. Freud emplea el mito de Edipo para mostrar una parte del desarrollo del niño. El autor habla de dos síndromes, el síndrome de Edipo y el de Electra, que deben superarse durante la niñez y que consisten en un odio hacia el padre del mismo sexo y un amor hacia el padre del sexo opuesto. Si este síndrome no se supera, da lugar a personas que no superan esa fase de la niñez. Medea El mito de Medea se conoce principalmente a través de la obra de Eurípides del mismo nombre. Esto no significa que sea la única tradición del mito, sino simplemente la más conocido y la que mejor ha llegado a nuestro tiempo. La historia de Medea se relaciona con otro mito, el del "Jasón y los Argonautas". Este mito pertenece a otro filón de historias ajeno a la Guerra de Troya o la historia de Edipo. Se trata de una historia antigua que cuenta la historia de unos 50 héroes griegos que bajo la guía de Jasón viajan de Grecia hasta Aea, en Cólquide, a buscar el vellocino de oro (la piel dorada de un carnero mágico). Jasón busca esta piel porque él, al igual que muchos otros héroes, es un joven que pierde su poder porque alguien se lo quita, en este caso, su tío Pelias (que cuando el padre de Jasón, Esón, rey de Yolco, muere, toma el poder porque Jasón es demasiado pequeño). Cuando Jasón crece y pretende hacerse con el poder, Pelias se niega y le dice que podrá hacerse con el trono si recupera el vellocino de oro. Jasón se embarca en la primera nave construida en el mundo griego: Argo. El héroe llega a Aea y se enfrenta con el rey de la ciudad, Eetes, padre de Medea. Ese rey poseía el vellocino porque se lo había entregado el joven Frixo, y lo había colocado situado por un dragón. Cuando Jasón le pide el vellocino de oro, Eetes, que no quiere entregárselo, le dice que antes debe superar dos pruebas: debe arar un campo con dos bueyes con aliento de fuego y después sembrar unos dientes de dragón de los que saldrán soldados. Medea, que se enamora del héroe, ayuda a Jasón a superar las pruebas. Eetes dice a Jasón que puede ir al bosque a coger el vellocino de oro, que está custodiado por el mencionado dragón. Según una tradición, Medea interviene de nuevo y ayuda a Jasón, durmiendo al dragón con una pócima. Según otra más antigua, fue el mismo Jasón el que se enfrentó al dragón con su espada, desde el interior del cuerpo del mismo monstruo. Esto subraya que según pasan los siglos, Jasón comienza a perder importancia en favor de Medea (que se va convirtiendo en la verdadera protagonista de la victoria de Jasón). En todo caso, Jasón se apodera del vellocino de oro y decide irse de Cólquide con Medea (según una tradición Medea se lo pide a Jasón y según otra es Jasón quien se la lleva). Medea es del tipo de mujeres que despiertan temor en los griegos, pues poseen un nivel de conocimiento muy alto. Hay muchas tradiciones sobre el regreso de los Argonautas a Grecia. Según una tradición, Medea no se va sola, sino que se va con su hermano Absirto, que muere en cierto punto del viaje (según algunos despedazado por Medea para tirar los pedazos al mar y retrasar a las naves de su padre para parar a recogerlo; y según otros por los Argonautas por el mismo motivo). Medea y los Argonautas llegan a Grecia, pero Pelias no quiere devolver el poder a Jasón. Entonces, Meda, haciendo gala otra vez de sus habilidades como hechicera, engaña a las hijas de Pelias (les enseña una pócima para rejuvenecer a las personas y la prueba satisfactoriamente con un carnero viejo; después, al probarlo las hijas con su padre, Medea no usa los ingredientes correctos y Pelias muere). Sin embargo, Jasón y Medea no pueden quedarse en la ciudad porque son considerados asesinos, así que deben irse a Corinto, donde son marginados. Medea tiene dos hijos con Jasón, y todo parece tranquilo, hasta que Creonte, el rey de Corinto, ofrece a Jasón la posibilidad de casarse con su hija y ser rey. Esto supone una marginación aún mayor para Medea, que lo ha dejado todo para seguir a Jasón y al final queda abandonada. Medea reflexiona sobre su condición de mujer, y en lugar de acatar la decisión de Jasón, planea eliminar a sus enemigos y, por otra parte, dejar a Jasón en la misma condición en la que está ella. Medea manda a sus hijos con unos dones para la princesa, un vestido y una diadema envenenados que le comen las carnes (muriendo también el rey Creonte al intentar salvarla). Después, para vengarse de Jasón, mata a sus hijos, dejando al héroe sin descendencia y sin poder. Eurípides justifica un crimen tan horrible diciendo que lo ha hecho porque es extranjera, y que una mujer griega no podría haberlo cometido. Después de matar a sus hijos y a la princesa de Corinto, se va de la ciudad en un carro llevado por dragones y es acogida en Atenas (de donde después será expulsada por intentar matar al príncipe de la ciudad). La mujer acaba en Persia. Medea había realizado un acto tan horrible que no hay castigo humano imaginable para ella. Medea en la tradición estoica, en concreto Séneca, es una persona normal pero que tiene en su interior unas pasiones que si no son controladas pueden anular la razón. Medea también ha tenido mucha relevancia en la pintura posterior, el cine y el ballet. 10/10/13 Atridas Pélope es el rey de una ciudad en el Peloponeso conocida como Pisa. Pélope tiene dos hijos, Atreo y Tiestes. Estos se enfrentan a un hermanastro suyo para obtener el poder de Olimpia, y Pélope los destierra. Ambos van a Micenas, y cuando el rey de la ciudad muere, se hacen con el poder. Sin embargo, ambos quieren quitarse al otro de en medio. Atreo encuentra un carnero con piel de oro y se lo entrega a su mujer, que sin embargo es la amante de Tiestes y le entrega el carnero. Ambos hermanos aceptan que se quedará con el poder el que tenga el carnero con piel de oro, convencidos de que lo tienen los dos. Tiestes sin embargo es el que realmente lo posee y se hace con el poder. Aunque Atreo consigue un favor de los dioses y vuelve a alternarse con su hermano en el poder, decide vengarse de éste por engañarle con su mujer y mata a sus hijos, sirviéndoselos en un banquete. Tiestes, cuando se entera de que se ha comido a sus propios hijos, maldice la estirpe de Atreo. Atreo tiene dos hijos: Agamenón y Menelao. Agamenón tendrá un final fatal a la vuelta de la guerra de Troya, final en el que interviene un nuevo hijo de Tiestes: Egisto, que es amante de la mujer de Agamenón, Clitemnestra. Agamenón había tenido que sacrificar a su hija Ifigenia durante la preparación de la expedición a Troya. Por ello, Clitemnestra había comenzado a sentir odio por su marido, preparando junto a su amante Egisto (primo de Agamenón), su venganza. Agamenón vuelve diez años después Troya, trayendo consigo una concubina, Casandra (hija de Príamo). En este punto comienza la Orestíada de Esquilo (una obra del compuesta por tres tragedias: El Agamenón, Coéforas y Euménidas). En El Agamenón, un gran fuego anuncia que la ciudad de Troya ha sido tomada y va a volver el rey. Cuando vuelve, Clitemnestra finge estar muy contenta de la vuelta de su esposo y le prepara una recepción muy suntuosa, con por ejemplo el paso del rey por una alfombra roja. Agamenón entra en el palacio y es entonces cuando se produce la venganza de Clitemnestra y Egisto. Cuando Agamenón se está bañando desarmado, ambos le tiran encima una red y lo matan. Casandra, que ya había profetizado su muerte, es también asesinada. Sin embargo, Agamenón y Clitemnestra tienen dos hijos más, Electra y Orestes. Orestes, que era un niño, había sido enviado fuera de la ciudad por su madre y su amante, pero Electra si presencia el asesinato de su padre. En la tradición griega la parte maternal era más débil que la paternal, por lo que ambos hijos desarrollan un sentimiento de venganza por la muerte de su padre, continuando la sangre dentro de la familia. Electra vive triste, con el recuerdo de su padre y en espera de que su hermano Orestes crezca y poder ejecutar su venganza. Orestes, por su parte, recibe un oráculo del dios Apolo, por el que debe volver a Argos y vengar a Agamenón. Orestes llega a Argos disfrazado y se reconoce con su hermana Electra, con la que comienza a planear la venganza. Electra es la que más quiere esa venganza. Orestes mata a su madre y a Egisto, pero entonces vuelven a aparecer las Eríneas (diosas de la venganza dentro de la familia). Así finalizan Las Coéforas. Las Euménides comienzan con la marcha de Orestes de Argos, perseguido por las Eríneas. Apolo manda a Orestes a Atenas, donde se desarrollará la tragedia. Allí, Atenea decide organizar un tribunal que juzgue a Orestes, siendo la divinidad que decide crear un derecho. La acusación a Orestes la llevan las Eríneas y la defensa la lleva Apolo. La mitad del tribunal está a favor de Orestes y la otra mitad en contra, pero Atenea vuelve a intervenir y determina que Orestes ya no es culpable. Antígona Es un personaje que tiene un éxito muy amplio en la tradición sucesiva. Por ejemplo, Antígona se utiliza mucho en la distinción entre la ley divina y la ley humana. Antígona es una de las hijas de Edipo y Yocasta, es decir, es hermana de Ismena, Eteocles y Polinices. Antígona es un personaje que desde el comienzo del mito se configura como un personaje muy cercano a su familia. Por ejemplo, cuando su padre se quita la vista, ella lo acompaña hasta su muerte en Colono, dolorida por la situación de su progenitor. Una vez que Edipo muere, Antígona vuelve a Tebas, donde se estaba desarrollando una lucha entre Eteocles y Polinices, acordando finalmente que se turnarán en el poder. Sin embargo, cuando a Etocles le toca ceder el poder a Polinices, éste primero se niega, acudiendo Polinices a Argos para reclutar un ejército y luchar contra su hermano. La expedición de Argos es liderada por siete paladines, entre los que se encuentra Polinices, que se situaron en cada una de las siete puertas de Tebas. En el combate, los dos hermanos se enfrentan y ambos mueren, siendo en este punto cuando comienza la tragedia de Sófocles: Antígona (442-441 a.C.). El tema de la tragedia es la decisión del nuevo rey de Tebas, Creonte (hermano de Yocasta y tío de Antígona), de enterrar como un héroe a Eteocles (que luchaba por Tebas), y dejar sin sepultura a Polinices (que luchaba con Argos para recuperar el poder de Tebas). El problema que se presenta desde el principio es la oposición entre Creonte, que representa una idea de que las relaciones familiares no están por encima de los intereses del Estado, y Antígona, que representa que hay que cuidar las relaciones familiares. Además, Creonte piensa que su decisión no se puede contestar, que su poder es absoluto. Antígona, desobedeciendo las órdenes de Creonte, echa, sin ser descubierta, algo de polvo sobre el cuerpo de su hermano Polinices, siendo esto suficiente para completar el ritual de la sepultura. Sin embargo, Creonte obliga a retirar el polvo del cuerpo del muerto, volviendo Antígona a actuar y siendo descubierta en esta ocasión. Antígona y Creonte se enfrentan, defendiendo cada uno sus argumentos. Antígona se caracteriza por el exceso, siempre intenta llegar hasta el final de las cosas como su padre Edipo, e incluso prefiere su muerte a no sepultar a su hermano. Creonte cree que Antígona está poniendo en duda su poder, y al no disculparse esta por su acción, decide condenarla a muerte, encerrándola en una cueva para que muera de hambre y sed. Mientras está encerrada, Antígona se pone a hablar con el coro de la tragedia, denotándose una especie de relación patológica con los muertos. La mujer hace un canto de lamentaciones por su suerte, por, por ejemplo, no haber podido tener hijos. Es una mujer que según los griegos ha renunciado a su papel como mujer, prefiriendo y considerando más importante honrar a su hermano muerto que tener marido o descendencia. Sacrifica toda su vida por su familia, para ella es mejor honrar a los muertos que a los vivos, y además piensa que cuando muera se reunirá con su familia en el Hades. Antígona simboliza la forma de actuar sin utilizar la razón y sin tener en cuenta las consecuencias, que en este caso son la muerte. Creonte por su parte hace gala de ser el representante del Estado, hace a la perfección la distinción de la familia y el Estado; y por ello no trata igual a Polinices y a Eteocles. Esto trae una reacción de los dioses, pero en primer lugar de otros personajes como su hijo. Éste le reprocha lo que está haciendo contra Polinices y Antígona, a lo que Creonte contesta afirmando que Hemón (su hijo) dice eso porque está enamorado de Antígona y que ya encontrará otra mujer. Antígona se ahorca en la cueva, y cuando Hemón llega para ayudarla y la encuentra muerta, se suicida con una espada. Después, un mensajero avisa a la esposa de Creonte, de que su hijo y Antígona han muerto, y ésta se suicida también. De esta forma, Creonte, por su decisión de no seguir los consejos de los demás y no admitir contestación a su poder, se queda solo. A través de esta tragedia, Sófocles quiere enviar un mensaje a su conciudadanos ateniense: hay que reinar de forma que se contente al pueblo, pero también se debe tener piedad y se debe guardar respeto a las tradiciones griegas. Enfrentamiento ente leyes escritas y derechos no escritos. Antígona ha tenido mucho éxito en la tradición sucesiva. Por ejemplo, Hegel emplea la Antígona de Sóflocles para exponer un espíritu ético en contraposición: por un lado la ley positiva (Estado) y por otro la no escrita, la divina (familia). Antígona es empleada como símbolo de las mujeres y de la ley divina, mientras que Creonte es el símbolo de la ley del estado. 2 interpretaciones más totalmente diferentes: -Antígona: obra de teatro de 1941, Jean Anouiln---->Hace una versión modernizada de la obra de Sófocles. Antígona es representada como una mujer de los años 30, muy joven, que encarna la rebelión y tiene todavía que desarrollar su identidad. Creonte, por su parte, se representa como un funcionario, que actúa de forma cínica para lograr sus intereses. Anouil no se centra tanto en el tema político, sino en el individual, mantiene una visión más afectiva. Creonte no es un personaje totalmente negativo, tan sólo simboliza una forma de ver la vida muy cínica. -Antígona de Sófocles: de B. Brecht, 1948.-->Utiliza la historia para expresar su oposición al gobierno nazi y a la ideología capitalista. Es una versión totalmente modificada del texto de Sófocles. Brecht coloca la escena en Berlín en 1945, y Antígona e Ismena ven a su hermano Polinices ahorcado en la calle por las SS. Polinices no es un personaje que ha venido a asediar la ciudad, sino que ha decidido desertar. Creonte es un representante del poder absoluto. Aunque esté ambientada en Berlín, Creonte es el rey de Tebas, y queriendo más poder, decide atacar Argos. Para ello, manda a los jóvenes de su ciudad a morir sin ningún problema, entre los que están Eteocles y Polinices. Eteocles muere, y Polinices decide desertar. Eteocles, que ha muerto intentando conquistar Argos, tendrá sepultura oficial, mientras que Polinices será asesinado para convertirse en un ejemplo de que el poder no tiene oposiciones. La reacción de las hermanas es distinta. Ismena intenta no enfrentarse al poder, mientras que Antígona retira el cuerpo de su hermano. Esto deriva en la condena de Antígona. Al final, Creonte pierde el poder, pues tras un momento de triunfo, los Tebanos pierden la batalla y el pueblo de Tebas se opone a Creonte, dándose cuenta de que han depositado demasiado poder en una persona. Antígona es en esta obra el símbolo de la lucha que tiene que hacer el pueblo alemán contra el poder nazi, pero que sin embargo no ha hecho. Orfeo Orfeo es un personaje, un músico, que con su lira y su poesía puede conmover a las piedras, hacer que el viento deje de soplar y amansar a los animales. De esta forma, es uno de esos individuos de la tradición griega que es capaz de controlar la naturaleza. Es un chamán, pues puede realizar acciones que el resto de mortales no pueden hacer, y además pertenece a medias al mundo divino y al mundo mortal. Por parte materna es hijo de la musa Calíope; y por parte paterna puede ser hijo de Eagro (rey de Tracia), o del mismo dios Apolo. Orfeo proviene de Tracia, una región que está relacionada con prácticas chamánicas y mistéricas (muchos de los personajes griegos con cualidades excepcionales provienen de esta zona septentrional de Grecia). Orfeo participa en la expedición de los Argonautas, consiguiendo con su música controlar a los remeros de la barca y salvando a sus compañeros de las sirenas (que se callan al oír el canto del poeta). Sin embargo, el mito que más está relacionado con Orfeo es el mito de su amor con Eurídice, cuya relación ha tenido un éxito increíble. Eurídice es una ninfa de la que se enamora Orfeo, con el que se casa. Tras la boda, Eurídice es acosada por un pastor, que intenta violarla, Eurídice echa a correr pero sin embargo es mordido en el talón por una serpiente y muere. Orfeo, desesperado y desolado, intenta vencer a la muerte, y viaja al Inframundo. Gracias al poder de su canto y su música consigue llegar al Hades: convence a Caronte y a Cerbero de que le dejen pasar, consigue que las almas de los muertos no le hagan nada, y, finalmente, logra convencer a los reyes del Inframundo de que le devuelvan a Eurídice. Sin embargo, Hades y Perséfone le imponen una condición para recuperar a su esposa: debe caminar delante de su mujer y no girar la cabeza para mirarla hasta salir del mundo de los muertos. Orfeo consigue hacer esto hasta casi el final del camino, pero entonces gira un segundo la cabeza y ve a su mujer, que desaparece de nuevo y para siempre, arrastrada por Hermes al mundo de los muertos. Esto refleja que la poesía puede vencer aparentemente a la muerte, pero nunca de forma definitiva. Hay otra versión, como en el Alcestis de Eurípides, en la que Orfeo si consigue salvar a su esposa y vivir con ella en la tierra (aunque no es el tema de la obra, la victoria de Orfeo se entresaca de una frase). Hay otra tradición que dice que los dioses del Inframundo no devolvieron a Orfeo a la verdadera Eurídice sino una sombra, pues como quiso conservar su vida y también a su esposa, los dioses le castigaron. Según una tradición, al no poder recuperar a su esposa, Orfeo se aleja de las mujeres y se dedica sólo al canto y a la música. Esto produce la reacción de las mujeres, que lo matan y lo despedazan. Según la tradición predominante, su cabeza sigue cantando y llega a través de un río a la isla de Lesbos (otro centro de la poesía), donde es colocada en el templo de Apolo. Otra versión es que las mujeres no castigan a Orfeo porque estén enfadadas por rechazarlas, sino porque comienza a amar a los niños (relaciones homoéroticas, pues en el mundo griego las relaciones entre hombres y mujeres eran una etapa del desarrollo sexual y afectivo que luego muchas veces desaparecía). Una tercera opción de la muerte de Orfeo, procedente de una religión diferente de la original, decide revelar a los hombres, y sólo los hombres, lo que ha visto. Las mujeres, enfadadas porque a ellas no se les revelan esos conocimientos, cogen las armas de Orfeo y lo despedazan. El personaje de Orfeo reaparece ya en la época cristiana. Los cristianos comienzan a reflexionar sobre Orfeo porque, por ejemplo, algunos autores lo oponen a Cristo. Mientras que Orfeo tiene un poder hechizador y da a los hombres un conocimiento falso; Cristo tiene un poder verdadero y bueno y otorga a los hombres el conocimiento verdadero. Por otra parte, totalmente contraria, hay en algunos escritores eclesiásticos una imagen de que en la figura de Orfeo despedazado se ve la imagen de Jesús que se sacrifica para su pueblo. Por otra parte, en el mundo medieval se vuelve a identificar a Orfeo como primer exponente de la poesía. En el renacimiento se redescubren los textos clásicos, pero los humanistas también se dan cuenta de que esta tradición es irreconciliable con la tradición cristiana haciéndose diferentes usos de la imagen de Orfeo. Por ejemplo, Orfeo aparece mucho en las obras musicales (La fábula de Orfeo, una ópera de Claudio Monteverdi, por ejemplo). En el siglo XVIII hay otra obra muy importante en la que aparece Orfeo que es el Orfeo ed Euridice de Gluck. Anouil (el mismo autor de la Antígona moderna) realiza en 1941 una adaptación contemporánea de Orfeo. En esta obra Eurídice y Orfeo son dos jóvenes que se encuentran en la estación del tren (Eurídice es una actriz y Orfeo un músico), y se enamoran decidiendo iniciar una relación sin pasado. Eurídice sin embargo se va y encuentra la muerte en un accidente. En la representación de Anouil, se trata del intento de Orfeo y Eurídice de crear una relación perfecta, lo que no es posible por el pasado. Tiresisas Tiresias es un adivino muy conocido en la tradición griega, muy relacionado con la ciudad de Tebas. Además de su don de adivinación, los dioses otorgaron a Tiresias la posibilidad de vivir una vida mucho más larga que otros personajes (se habla de 7 generaciones, casi desde la creación hasta la caída de Tebas). Aunque Tiresias está muy relacionado con Tebas, también aparece en la Odisea en el canto décimo y el canto undécimo. Circe recomienda a Odisseo que hable con Tiresias para saber sobre su futuro, y Odisseo le hace caso. Para ello, el héroe griego tiene que sacrificar animales para que los muertos beban la sangre de las víctimas y puedan relacionarse con él. Tiresias, sin embargo, no tiene que beber esta sangre, pues al contrario que el resto de los muertos, el no ha olvidado su vida anterior al beber el agua del río Estigia. Cuando Odisseo le hace sus preguntas, Tiresias le adivina lo que le va a pasar, y le anuncia cuándo y cómo será su muerte. Tiresias es un personaje muy querido en la tradición griega. Según la tradición tebana es descendiente de los Espartos, que son unos guerreros (cinco) nacidos de los dientes de un dragón que mató Cadmo (el fundador de la ciudad de Tebas), y se relacionan con las cinco familias más importantes de la ciudad de Tebas. Tiresias es nieto de uno de los Espartos (relacionados con la tierra), y por parte de madre es hijo de una ninfa llamada Cariclo (las ninfas también se relacionan con la tierra y la naturaleza). Por ello Tiresias está muy relacionado con la tierra y la naturaleza, pero también con las serpientes (pues los Espartos se relacionan con ellas). Según la tradición, Tiresias está paseando por el monte y se encuentra con dos serpientes enroscadas que se están apareando. El adivino golpea a la hembra, y como castigo es convertido en mujer durante siete años. Pasado este tiempo, Tiresias se vuelve a encontrar en el monte con las serpientes y golpea esta vez al macho, recuperando su sexo original. Así, Tiresias se cambia de sexo, algo muy relacionado con la relación chamánica: Tiresias no se queda en los límites humanos, pero además resulta que mientras que los héroes solo eran hombres, los adivinos eran hombres y mujeres. Tiresias tiene una hija o hijas. Su hija se llama Manto, que después de la toma de Tebas sería ofrecida a Apolo con el que tendría un hijo (uniéndose los dos grandes grupos de adivinación, el de Apolo y el de Tebas). Otra tradición dice que Manto no es sino la representación femenina de Tiresias. La ceguera también es importante, y además en el mundo griego se pensaba que la incapacidad de ver al exterior permitía ver al interior, desarrollando la imaginación o la interpretación de los signos (por eso se dice que Homero era un poeta ciego, por ejemplo). La ceguera de Tiresias tiene tres explicaciones. La primera se relaciona con una discusión entre Zeus y Hera para saber que sexo disfruta más del acto sexual. Ambos eligen a Tiresias como árbitro, pues ha experimentado ambos sexos. Tiresias dice que las mujeres gozan más, y Hera enfadada le quita la vista, mientras que Zeus le otorga en agradecimiento el don de la adivinación. Otra explicación es que Tiresias observa desnuda a Atenea mientras se baña en una fuente con otras ninfas. Atenea furiosa le quita la vista, pero la madre de Tiresias, que se encuentra allí, consigue que a cambio Atenea le ofrezca el don de la adivinación. La tercera y última explicación es que Tiresias ha tenido una relación muy cercana a los dioses, y cuenta a los hombres los detalles y los secretos de dicha relación, castigándole los dioses quitándole la vista. El adivino es un personaje que en el mundo de la ciudad griega tiene una gran importancia, pero como es un personaje que hace un trabajo de interpretación de los signos de los dioses, muchas veces son acusados de ser personajes que sólo buscan el dinero y les da igual actuar en contra del poder. Tiresias se representa como un hombre viejo, que a veces es acompañado por un niño. De esta forma, con su edad, se subraya su autoridad y el don de los dioses de vivir más de lo normal (algo de lo que Tiresias no está muy contento pues ha tenido que narrar las tragedias de los distintos reyes de Tebas). Cuando la ciudad de Tebas es tomada por los argivos, Tiresias se va de la ciudad. En su camino, le entra sed y bebe de una fuente en la que vive una ninfa. Al beber, no se sabe si porque el agua está fría o envenenada, Tiresias muere. Al sepultarlo y bajar al Inframundo, al contrario del resto de muertos, que pierden la memoria, Tiresias mantiene su don y sus recuerdos. Además, es probable que recupere su vista y sigue ejerciendo su papel de adivino. Esto se debe a la orden de Perséfone. Tiresias es un tipo de héroe muy particular, pues sus condiciones le impiden dedicarse a la guerra, aparece en toda la tradición como viejo, goza de una condición particular en el mundo de los muertos pero no es una condición de felicidad. Así, sus condiciones son: su relación con la tierra, su capacidad de superar los límites humanos y su poder de conocer el pasado, el presente y el futuro. Ezra Pound emplea a Tiresias en sus cantos adaptación de la Odisea de comienzos del siglo XX. Tiresias aparece en el primero de los cantos, que es la traducción del canto undécimo de la Odisea (la bajada a los infiernos de Odisseo). También aparece en la poesía de T. S. Elliot, siendo un personaje capaz de centrarse en los elementos interiores de las cosas más que en los exteriores. Posee la capacidad de conocer toda la realidad. Por último, además de la tradición literaria, es presente en canciones. Por ejemplo, en 2011 se incluye en una canción de un cantautor italiano, Vinicio Capossela.
