EL ABEJARUCO (Merops apiaster) © Eduardo Nogueras Abejaruco en su posadero. FICHA TÉCNICA Orden: Coraciiformes Familia: Meropidae Especie: Merops apiaster Estatus: Especie catalogada “De interés especial” en el Catálogo Nacional de Especies Amenazadas. DESCRIPCIÓN DE LA ESPECIE Es un ave inconfundible dado su colorido, ya que tiene un plumaje multicolor. La parte superior es rojiza y amarilla, la parte inferior o ventral es verde azulada, y el cuello es de color amarillo. Su tamaño es algo menor que un mirlo común y su pico es largo y apuntado. Es un ave migradora que pasa la temporada estival en la península ibérica desde abril hasta septiembre regresando a sus cuarteles africanos cuando comienza el otoño. © Eduardo Nogueras Abejarucos antes de entrar al dormidero. Es relativamente fácil de identificar, no solo por su colorido, sino también por su forma de volar - es muy acrobática, con aleteos rápidos y planeos con las alas abiertas- y por su voz con un continuo “priurr” o “riiuup”. Habita en áreas muy abiertas y diversificadas de suelo arenoso y con presencia cercana de agua. El abejaruco necesita zonas arboladas en las que dormir, cuyos árboles tengan ramas rectas donde poder posarse y donde pueda haber abundancia de insectos, preferentemente abejas (de ahí su nombre); esta cualidad las ha hecho mal vistas por los apicultores, cuando la realidad es que se alimentan de las abejas enfermas, dejando las más fuertes. Además suelen alimentarse de muchos más tipos de insectos (libélulas, mariposas, langostas viajeras y escarabajos). A los himenópteros venenosos, una vez atrapados con el pico, les golpea reiteradamente contra la rama en la que acostumbra a posarse, para extraer el venenoso aguijón del cuerpo del insecto. Parecer ser que es bastante inmune al veneno. Una vez que han comido, su estomago devuelve hacia la boca los restos que no ha podido digerir en forma de bola de color oscuro, es lo que se llama “egagrópila”, que se pueden localizar en los lugares donde suelen posarse. © Eduardo Nogueras Egagrópilas expulsadas bajo el posadero. Anidan en agujeros construidos en las paredes o taludes, e incluso en el suelo. La construcción del nido dura unas tres semanas, en las que el macho y la hembra se turnan en el trabajo. Al final de un túnel de unos 80 a 100 cms de profundidad se sitúa la cámara de incubación, donde a las tres semanas nacerán de 4 a 7 crías que necesitarán otras tres semanas para abandonarlo. © Eduardo Nogueras Nido de abejaruco. DATOS DE LA ESPECIE Longevidad: de 5 a 10 años. Peso: 50 - 70 gramos. Envergadura: 36 - 40 cms. Longitud: 27 - 29 cms. Vida social: Vive en bandadas. Son aves muy sociables. © Eduardo Nogueras Cazan insectos en pleno vuelo. EL ABEJARUCO EN LA SIERRA DE BAZA El abejaruco puede verse en la zona basal de la sierra de Baza desde el mes de abril hasta el mes de septiembre, donde regresará a África, buscando un clima más templado. Es un ave que elude la alta montaña, por lo que se le puede ver por debajo de los 1.500 metros de altitud y en dos tipos de zonas: en parajes adehesados y en zonas de terrenos blandos cercanas a corrientes de agua.