PRIMER BORRADOR TRABAJO SOBRE LOS INCAS INTRODUCCION Este trabajo pretende resumir la historia y la cultura de los Incas, la más importante civilización de la región andina en la época anterior a la llegada de los españoles, y a la vez, el más grande imperio territorial de la América prehispánica o precolombina. Y como parte central de la tarea, se dará particular importancia a las obras de ingeniería y arquitectura de esta formidable civilización. Estas disciplinas se suman a muchos logros, que en conjunto representan la capacidad creativa y enormemente original que distingue al período incaico de toda otra civilización a nivel mundial. En efecto, junto a las construcciones de carácter arquitectónico o a las obras de ingeniería, podemos listar: Su estructura social Su sistema económico de carácter redistributivo La red de caminos El cómputo y registro de los “Quipus” El sistema de pesas y medidas El calendario La organización de los ejércitos El sistema agrícola de terrazas La poesía, la danza y la música Los tejidos y la cerámica 1. LOS INCAS Y SU GEOGRAFIA La civilización incaica en su configuración política constituyó uno de los territorios más extensos que haya tenido ningún imperio sobre la Tierra: Desde el sur de la actual Colombia hasta una zona intermedia en Chile y parte del N.O. de Argentina; y desde la costa del Océano Pacífico hasta el bosque tropical amazónico. Desde ya, no dudamos en definirlo como: la más importante civilización de la región andina en la época anterior a la llegada de los españoles, y a la vez, el más grande imperio territorial de la América prehispánica o precolombina. Pero el ámbito geográfico, los Andes, era altamente complejo. “Una sucesión de espacios inhabitables: desiertos, picos altísimos, selvas”, según el cronista Cieza de León. Pero los Incas, con sus cultivos en terrazas, sus obras hidráulicas, su red vial y su eficacia en la producción y distribución de alimentos, les permitió nutrir a millones de personas y almacenar excedentes. Todas las poblaciones andinas parecen tener características raciales homogéneas. En el momento de la conquista, la población del imperio incaico podría enmarcarse dentro de los 20 a los 30 millones de habitantes. Sin embargo, distintas teorías presentan cifras abismalmente diferentes. Desde 3 millones hasta 30 millones. Dicha población se encuadraba antropológicamente en el grupo Pueblo Andino, cuyas características se resumen así: Hombres de baja estatura (1.59 a 1.62 mts.), cabeza pequeña - sobre todo en las mujeres - con algunos tipos de deformaciones craneanas, cara corta y nariz de base ancha, cabello duro, liso y negro, color de piel intensamente pigmentado, ojos de iris oscuro y torso muy desarrollado en comparación con los miembros. ////////// ////////// -22. QUECHUA, AYMARÁ Y OTRAS LENGUAS DE LOS ANDES En la época anterior a la constitución del Imperio Incaico, el panorama lingüístico representaba un mosaico sumamente complejo y poco conocido, sobre el cual vino a superponerse el QUECHUA, como lengua oficial del Imperio. La labor unificadora del quechua se acentuó con la conquista española, ya que los misioneros, por razones demagógicas, utilizaban la lengua imperial para mejor expandir su misión. Eso determinó una mayor expansión del quechua, que finalmente provocó la descomposición y muerte de multitud de lenguas locales preincaicas. Aún hoy, el quechua es preponderante en todo Perú y en partes apreciables de Ecuador, Bolivia, norte de Chile y N.O. de Argentina. Las demás lenguas, apenas sobreviven dentro de pequeños grupos indígenas, salvo el Aymará, que es hablado por una amplia población en Bolivia y Perú. 3. PACHACUTI, CREADOR DEL CUZCO Si dejamos a un lado la concepción legendaria según la cual hubo cuatro edades anteriores a la época histórica actual, el lugar de origen de los Incas debe situarse a 25 kms. al sureste de Cuzco, el el llamado Paccari-Tambo, donde se alzaba una colina llamada Tampu-Tocco (Posada con nicho), de donde salieron las primeras generaciones de los Incas. Viracocha, el creador de estas primeras generaciones, hizo salir de la cueva o ventana central a los jefes, mientras que de las dos laterales salían los diez clanes o ayllus originarios. Los jefes incaicos de esta primera generación fueron cuatro hermanos casados con sus cuatro hermanas: Ayar Manco Mama Ocllo Ayar Cachi Mama Huaco Ayar Uchu Mama Cora Ayar Auca Mama Raua Los diez clanes o tribus emigraron hasta el valle del Cuzco, donde Manco, como héroe civilizador - y según la leyenda - decidió fundar la ciudad allí donde la barra de oro que llevaba se hundiese más profundamente en la tierra. Esto sucedió en la confluencia de los ríos Huatanay y Tullomayo. La sucesión de soberanos, se fue encadenando de la siguiente manera: MANCO CAPAC, ya definido como el “héroe civilizador”. SINCHI ROCA, más un jefe militar que un soberano. Pero el estado de guerra casi permanente de las tribus que habitaban la región, serviría de alianzas de las que los incas sacarían ventaja. Y en ello mucho tuvieron que ver las virtudes militares de Sinchi Roca. LLOQUE YUPANQUI, hijo de Sinchi Roca, supo mantener aquella unión o confederación tribal inaugurada por su padre. MAITA CAPAC, hijo del anterior, al llegar a la edad adulta se hizo cargo del ejército, instaurándose así una costumbre que perduraría en los reinados siguientes. A él se atribuyen las primeras campañas militares de carácter expansivo. ////////// -3- ////////// CAPAC YUPANQUI, quinto soberano Inca, cuyo acceso al trono plantea problemas que serán habituales en lo sucesivo. Designado sucesor por su padre, tuvo que luchar contra sus hermanos para alcanzar el trono. Durante su reinado los incas se relacionaron con los andahuailas, que se incorporaron a la confederación cuzqueña, pese al domino que sobre ellos ejercía el reino de los chancas. Hasta aquí los soberanos nombrados pertenecían a la DINASTIA DE CUZCO. INCA ROCA, representa el comienzo del domino de la dinastía correspondiente a la mitad de Hanan Cuzco ó Alto Cuzco. El impulso creador de este soberano se extiende a todos los dominios: construcciones de canales, embellecimiento de la ciudad, creación de escuelas, etc. Con un ejército de unos 20.000 hombres inició una profunda penetración hasta Cochabamba y Chuquisaca, mientras por el noroeste llegó a la costa por la región de Ica. TITO CUSI HUALPA (ó YAHUAR HUACAC = “El que llora sangre”), era hijo al parecer de una bella muchacha de la tribu Huayllaca, llamada Mama Micay que se casó con Inca Roca. Pero el hijo de estos, precisamente Tito Cusi Hualpa no tuvo un reinado memorable y con un final poco feliz: La versión más probable dada por los cronistas habla de su huída al Cuzco ante un inesperado ataque de los chancas, dejando que su hijo, VIRACOCHA, organizase la defensa y se ocupara de rechazar el ataque. Luego de ésto, quedó relegado a un segundo plano y murió lejos del Cuzco, mientras su hijo le sucedía en el trono. Se llamó HATUN TUPAC, pero sería más conocido como VIRACOCHA, por habérsele aparecido esta divinidad en su juventud. VIRACOCHA reinó en medio de intensificadas luchas entre los linajes de Hurín Cuzco y Hanan Cuzco, querellas que tardaron mucho en extinguirse. Para colmo, el final de su reinado fue muy conflictivo ya que nombró sucesor al hijo de una concubina, llamado Urco. Pero animado por varios parientes, su tercer hijo legítimo, CUSI YUPANQUI, se rebeló contra su padre y se hizo con el poder. Aquí comienza la transición de la Fase Legendaria a la Fase Histórica. CUSI YUPANQUI es el reformador y verdadero creador del Cuzco y el primer constructor del imperio territorial de los Incas en el ambito andino: el TAWANTINSUYU. Es quien finalmente derrota a los tradicionales enemigos, los chancas. Hacia 1438 es coronado REY DE LOS INCAS, con el nombre con el que se haría famoso: PACHACUTI, iniciándose entonces el apogeo imperial que llevaría a la tribu a constituir el más grande imperio territorial de la América precolombina. Entre lo más destacado de su reinado figuran: El CORICANCHA, la cancha o recinto de oro, templo colmado de riquezas y de fasto, que resultó de transformar el Inticancha o recinto del Sol, que era pequeño y de humilde factura. La RECONSTRUCCION TOTAL DEL CUZCO, como una gran urbe, para lo cual requirió ampliar la población, y por consiguiente, la producción de alimentos. Ello obligó a replantear el SISTEMA DE RIEGO y a establecer un sistema de ALMACENAJE DE GRANOS para sustentar a la población obrera necesaria. ////////// ////////// -4 Cuando toda esta infraestructura fue realizada, Pachacuti abordó el problema de la CONSTRUCCION ó RECONSTRUCCION DE EDIFICIOS, BARRIOS, CANCHAS en la Capital y en el resto del territorio donde empezaron a surgir PUCARÁS, TAMBOS, TEMPLOS y DEPOSITOS por todas partes. A estas actividades creativas y laboriosas, Pachacuti unió la intensa y amplia expansión militar en el exterior. Con un poderoso ejército al mando de su hermano Capac Yupanqui, al que se habían sumado grandes contingentes de sus viejos enemigos los chancas, conquistó las regiones de Angara, Huanca y Tarma. Enterado Pachacuti que los chancas eran mejores guerreros que los propios incas, ordenó a su hermano que asesinara a los jefes chancas para evitar cualquier sublevación. Enterados los chancas, huyeron hacia las selvas orientales. Capac Yupanqui los persiguió, conquistando en su marcha la región de Cajamarca, pero no pudo dar con ellos, por lo que fue condenado a muerte por su hermano. En sucesivas campañas militares, Pachacuti conquistó los reinos de Cuismancu y Chuquimancu, en la costa, apoderándose del famoso santuario de Pachacamac, mientras en la región del lago Titicaca, dominó a los lupaca y otros pueblos rebeldes. Hacia 1463, mientras los hijos mayores de Pachacuti trataban de dominar y conquistar a los turbulentos collas, otro de sus hijos, TUPAC YUPANQUI fue nombrado su sucesor y muy pronto le encargó el mando de uno de sus ejércitos. En sus últimos años de reinado, Pachacuti persiguió sin éxito la obsesión de sojuzgar a las tribus selváticas del Oriente. El fructífero reinado de Pachacuti abarcó el período de 33 años entre 1438 y 1471. 4. LA CONSTITUCION DEL IMPERIO INCAICO Aunque la gran expansión imperial se inició durante el reinado de Pachacuti, su hijo y sucesor, TUPAC YUPANQUI fue el que trazó el perfil definitivo de las fronteras máximas del Imperio. Posteriormente, su hijo HUAYNA CAPAC consolidó la estructura interna del TAWANTINSUYU. TUPAC YUPANQUI, ya como cogobernador del imperio en los últimos años de vida de su padre, emprendió una de las más largas y fructíferas campañas militares de todos los tiempos. Sólo lo impenetrable de la selva oriental detuvo sus avances hacia el Este en los cuales alcanzó Chachapoyas. Posteriormente se dirigió a Piura y Tumbez, para luego conquistar el reino de los Cañaris. En Tomebamba, o quizás en Hatun Cañar (Ingapirca), residió algún tiempo, dedicándose a la construcción de caminos, puentes, templos, almacenes, etc., ganando la confianza de los recién conquistados, que se unen a su tropa y con los cuales lanzará el ataque contra los caras y los quiteños, larga y cruenta lucha de la que los incas surgen triunfantes, extendiendo la frontera norte hasta el río Ancasmayo. En épocas de sus campañas por Ecuador y el norte de Perú, se menciona además la expedición marítima que habría emprendido con 20.000 hombres en una flota de balsas, con indicios ciertos de haber alcanzado islas de la Polinesia. Tambien por entonces conquistó el Reino del Gran Chimú. Cuando muere su padre, Tupac Yupanqui tenía alrededor de 60 años. Cuando recibe el poder, la situación del imperio era ya, en gran parte, la que conocieron los españoles a comienzos del siglo XVI: Caminos, puentes, tambos y ////////// ////////// -5- chasquis aseguraban las mejores comunicaciones entre el Cuzco y los más apartados lugares del imperio, proporcionando una gran movilidad al ejército; el abastecimiento interregional era perfecto y la administración se había centralizado al máximo, y la “Pax Incaica” se extendía desde Quito en el norte hasta Nazca en el sur y desde la costa hasta la selva amazónica. Como en épocas anteriores, los bosques del este, con su producción de coca, de maderas finas como la chonta, bambú, plumas de brillantes coloridos, caucho, plantas medicinales y sobre todo, oro, seguía siendo un territorio ambicionado por el Inca. Tupac Yupanqui llevó los ejércitos hasta el río Madre de Dios - Amaru - y despues hasta la región del Gran Chaco, hasta el territorio de los aguerridos chiriguanos. Por último, emprendió otra campaña, esta vez hacia el Sur, llevando la frontera del Imperio hasta el río Maule, al norte de Chile, desde donde no pudo seguir avanzando, seguramente por la fuerte oposición que debieron presentarle los araucanos. Tupac Yupanqui, como lo hiciera su padre Pachacuti, tambien se distinguió por las construcciones monumentales realizadas durante su reinado: La fortaleza de SACSAHUAMÁN, al norte del Cuzco, para cuya erección trabajaron 20.000 hombres durante 30 años, y otorgarle el imponente aspecto de sus murallas en zig-zag. Los palacios de CINCHERO, su lugar predilecto de residencia, donde fue a morir hacia 1493. HUAYNA CAPAC, hijo de Tupac Yupanqui, reinó desde 1493 hasta 1525, prosiguiendo con el esplendor del imperio incaico, aunque el engrandecimiento territorial había terminado con la muerte de su padre y porque las fronteras políticas habían seguramente alcanzado sus límites naturales. 5. ATAHUALPA Y PIZARRO SE ENCUENTRAN: FINAL DEL IMPERIO INCA La conquista de los españoles fue favorecida por las luchas entre HUASCAR y ATAHUALPA, ambos hijos de HUAYNA CAPAC, ya que la llegada de Pizarro al Peru coincidió con la lucha que por el poder habían entablado los hermanos. Factores muy diversos, entre los que se destacaba la audacia de los españoles, hicieron posible que en un instante se desmoronara el Imperio. Fue cuando Pizarro tomo prisionero a Atahualpa, quien luego de ser juzgado fue condenado a la pena de muerte por toda una serie de supuestos crímenes y por aplicación de una justicia cuyo objetivo era puramente político: decapitar al imperio para que de un solo golpe cayera en manos de los conquistadores españoles. Si bien los grupos indígenas que habían sido sometidos por los Incas creyeron que los españoles eran sus “libertadores”, poco tardaron en descubrir sus intenciones, a partir de lo cual la resistencia se organizó y multiplicó, prolongándose hasta el Siglo XVI. ////////// ////////// -6- 6. ESTRUCTURA SOCIAL La organización social y los principios enunciados fundamentalmente con la ORGANIZACION DEL ESPACIO. tienen que ver Los HUACAS (Lugares sagrados) de los que en el interior y alrededores del Cuzco había unos cuatrocientos, estaban repartidos en grupos, y cada grupo se concebía como dispuesto sobre una línea imaginaria, llamada ceque. Todas estas líneas al parecer, convergían en el centro de Cuzco, y el mantenimiento y culto de los lugares sagrados dispuestos sobre estas líneas, estaba asignado a determinados grupos sociales. El Cuzco - y según su modelo el Imperio todo - se hallaba dividido en dos mitades y cuatro barrios. A la mitad de abajo (HURIN CUZCO) correspondían el Contisuyu (Oeste) y el Collasuyu (Sur). La mitad de arriba (HANAN CUZCO) comprendía los barrios Chinchaysuyu (Norte) y Antisuyu (Este). En el Cuzco, cada barrio estaba dividido en tres secciones: Collana, Payán y Cayao. Cada sección a su vez, se dividiía en tres ceques que llevaban el mismo nombre. Esta TRIPARTICION, desde un punto de vista jerárquico está representando la situación cuzqueña, en el sentido de que los individuos collana equivalen a los incas dominadores; los cayao representan a los vencidos y los payán tienen una naturaleza ambigua. Desde el punto de vista espacial, los collana se sitúan en el centro del Cuzco, los cayao en los alrededores de la ciudad y los payán en el interior de la ciudad pero en torno al centro. Dentro de la organización imperial incaica resulta claro distinguir la nobleza real incaica del resto de la población. Esta nobleza estaba basada en el parentesco. Cada uno de los soberanos fundaba una nueva panaca, cuyos descendientes, salvo el nuevo heredero al trono, eran nobles por naturaleza, y estaban unidos por vínculos de parentesco y afecto dentro del ayllu real así formado. 7. EL INCA SOBERANO Y SUS FUNCIONARIOS A la cabeza del Estado se hallaba el INCA, rey, emperador o soberano supremo, que si en un principio era el jefe de la tribu incaica, muy pronto se iba a convertir en el monarca de un vasto Imperio. Su poder procedía directamente de INTI, divinidad solar, del que tambien descendía en sentido directo, ya que Manco Capac y Mama Ocllo eran hijos del Sol y progenitores de todos los Incas. La sucesión de un Inca desataba intereses en los que la fuerza de las panacas o ayllus reales jugaban un papel importante. Con el fin de evitar, al menos en parte, estas luchas por el poder a la hora de la sucesión, se estableció la costumbre de elevar al hijo que debía suceder al Inca, a la categoría de cogobernador, entregándole gran parte de los poderes en vida de su padre, aunque en muchas ocasiones, el hijo primeramente elegido era sustituído a última hora por otro de sus hermanos... ////////// ////////// -7Cada nuevo Inca construía su propio palacio, que sería el lugar de residencia del ayllu real o panaca fundada por él. En este palacio había recámaras especiales para el propio Inca y su coya (Mujer instruída durante cuatro años y preseleccionada por funcionarios estatales), para las concubinas, los servidores y la guardia. Los chasquis tenían dependencias separadas, pero próximas al edificio principal. Más lejos estaban los depósitos de alimentos, chicha y tejidos. Las actividades desplegadas por el Inca eran múltiples: Viajes de inspección por el territorio del Imperio, y por sobre todo, las campañas militares que llenaban por completo la vida del soberano. Entre sus diversiones, la caza era una de las preferidas. En determinadas regiones de cada provincia, la caza estaba reservada al Inca y la nobleza. La alimentación del Inca, en contraste con la de los plebeyos, era sumamente rica y variada. El maíz cocido y reducido a harina era, junto con la papa y algunos otros productos, la base de la alimentación. Las carnes más apreciadas por el Inca eran lad de llamas de menos de tres años y de vicuñas de menos de dos. LOS KHIPUS (ó QUIPUS) Los quipus eran una serie de cuerdas anudadas donde los funcionarios reales registraban datos de vital importancia para el buen funcionamiento del imperio, como muertes, nacimientos o existencias de alimentos y armas. Cada funcionario tenía a su cargo centenares, que almacenaba en vasijas. Se podría decir que el Imperio estaba gobernado por los Quipus, ya que gran parte del sistema administrativo incaico se basaba en la obtención de una información estadística lo más exacta posible, lo que era consignado y transmitido gracias al uso de los quipus. Con ellos se podía conocer en un momento dado cuaal era la población según sexo, edad, clase, etc., desde una pequeña aldea hasta la totalidad del imperio, de la misma manera que se conocía la producción de las diversas materias que debían ser distribuídas por la administración central. SISTEMA DECIMAL Toda la población del TAWANTINSUYU se agrupaba de acuerdo con un sistema aproximadamente decimal. Los grupos más pequeños eran las decurias o grupos de 10 familias o diez hombres, entre 25 y 50 años, y las decurias superiores, o grupos de 50 familias. Estos grupos tenían como jefes a plebeyos distinguidos que eran designados por el curaca. Las centurias (100 familias), centurias superiores (500 familias) o los grupos de 1000, 5000 ó 10000 familias estaban mandadas por curacas. Por encima de estos grupos se hallaban los suyus, cuyos jefes formaan el consejo de gobierno cuatripartito del imperio. Esta división decimal de la población debe entenderse como aproximada, ya que hubiese sido imposible agruparla de modo exacto. ////////// ////////// -8- La relación jerárquica así establecida hacía que un determinado curaca se relacionase directamente con sus subordinados y con su inmediato superior, pero escasamente con los de su misma categoría, constituyendo una organización de carácter piramidal. Por último, los tucuiricuc (“Los que lo ven todo”) o inspectores, vigilaban el buen funcionamiento de todo el sistema. Con el fin de mantener equilibrada la población, estaba prohibida la circulación de la misma fuera de sus jurisdicciones. Para hacer más seguro el control, cada población era identificada por algún elemento en su vestimenta: Bonetes de lana para los collas del Titicaca, turbante negro para los Huancas del norte de Cuzco, cordón en la cabeza para los de Cajamarca, etc. En casos, el Estado ordenaba desplazamientos de población en su propio interés. Estos eran los micmacs ó mitimaes, que respondían a objetivos sociales, políticos, religiosos o económicos. Tambien ocurrían con fines de defensa militar o porque la densidad demográfica así lo aconsejase. En cualquier caso, los mitimaes eran agentes de aculturación que aseguraban la expansión del quechua y de la cultura inca, garantizando de esta manera la asimilación e integración de los pueblos conquistados al cuerpo social y político del TAWANTINSUYU. 8. UN INMENSO EJERCITO CONQUISTA LOS ANDES Páginas 58 / 61 9. LA AGRICULTURA INCAICA Y EL MEDIO AMBIENTE 10. LA TENENCIA DE LA TIERRA 11. REBAÑOS DE LLAMAS Y ALPACAS INUNDAN LOS ANDES 12. REDISTRIBUCION Y COMERCIO ENTRE LOS INCAS PAGINAS 64 / 81 13. LAS CUATRO EDADES DEL MUNDO 14. DIOSES, HUACAS Y ESPIRITUS 15. ORGANIZACION SACERDOTAL DE LA IGLESIA OFICIAL INCAICA 16. CEREMONIAL Y ADIVINACION PAGINAS 84 / 97 ////////// ////////// -9- ARTE, PENSAMIENTO Y URBANISMO 17. EL CUZCO, OMBLIGO DEL MUNDO Y CAPITAL DEL IMPERIO El Cuzco era por una parte una ciudad sagrada, pero al mismo tiempo, el centro de todo el imperio, su cabeza y su cerebro, desde donde se hacía toda la política del Estado. El Cuzco está situado en un valle cerrado por tres lados por colinas que están a 3.300/3.400 mts. sobre el nivel del mar. Desde sus orígenes se distinguen dos partes en la ciudad: HANAN CUZCO ó ALTO CUZCO y HURIN CUZCO ó CUZCO BAJO. Al mismo tiempo existía una división cuatripartita de la ciudad que correspondía a la división cosmogónica de las cuatro direcciones del mundo y a la división en cuatro partes o suyus del imperio. En el centro de la ciudad se hallaban los ayllus reales o panacas, compuestos por los familiares y descendientes de cada uno de los Incas, mientras en su entorno y en los arrabales de la ciudad se iban situando los miembros más pobres de la primera comunidad, así como los miembros de otras comunidades que por una u otra razón se incorporaban a la ciudad imperial. Los recién llegados habitaban en el sector correspondiente a la fracción del imperio de la cual procedían. Las calles eran rectas y largas, aunque estrechas en general, y toda su ordenación se había hecho a partir de dos plazas principales, en una de las cuales, la llamada Huaycapata (Plaza de la Alegría), se desarrollaban las más importantes ceremonias de carácter religioso o civil, con la intervención del Inca. Estas calles tenían una o dos aceras, tambien estrechas, y por su parte central corría un canal de agua, que aseguraba la más estricta limpieza de la ciudad. Las casas que bordeaban las calles principales estaban construídas en piedra y tenían hasta dos pisos, mientras que las casas de los plebeyos eran más, y más pobres, a medida que se iban alejando del centro de la ciudad. En torno a la plaza principal y en todo el sector habitado por las panacas, se multiplicaban los palacios y edificios públicos, entre los que cabe citar los siguientes: Yachawasi Cassana Coracora Kiswarkancha Kuyusmancho Hatunkancha Acllahuasi Amarukancha, etc., y no lejos, el grandioso templo del Sol, ó Coricancha. Los muros de palacios y templos, enormemente sobrios en su decoración, se destacaban por la perfección de la sillería, tan ajustadamente ensamblada, que ha podido resistir la tremenda vibración de los frecuentes terremotos. ////////// ////////// -1018. MIL CAMINOS CRUZAN EL IMPERIO Para un imperio territorial tan extenso como el de los Incas, los caminos y las comunicaciones constituían uno de los aspectos más importantes. Al igual que los romanos, los incas se preocuparon de que esta red de comunicaciones abarcase el mayor número de lugares, de que las noticias y los transportes viajasen sin dificultad alguna y de que no hubiese ningún impedimento para el paso de los ejércitos de conquista o de represión, desde el centro del imperio hasta los más apartados confines del mismo. Según las más recientes investigaciones, hasta ahora se calculan 23.139 kms. como integrantes de la red total de caminos incaicos, pero dada la insuficiente información sobre muchas zonas, en la realidad podríamos hablar de unos 40.000 kms. Hoy no perduran sino algunos cimientos. No fueron pensados para vehículos pesados o carruajes. Por tal razón, su trazado en las regiones más escarpadas, adquiere la forma de verdaderas escalinatas, con lo que se abreviaba el recorrido y, por consiguiente, el trabajo de construcción. En la región costera los caminos llegan a tener hasta 7.30 m. de ancho y se trazan de manera absolutamente rectilínea durante siete kilómetros o más. Por el contrario, en la región montañosa, los caminos eran mucho más estrechos y tortuosos y a veces estaban tallados en la misma roca. De esta manera se construyeron decenas de miles de kilómetros de caminos que cruzaban toda la enorme extensión del imperio incaico. De norte a sur había dos importantes caminos que recorrían prácticamente toda la extensión del Tawantinsuyu: La carretera real (Capac-ñan), que iba a través de la Cordillera, desde la frontera septentrional del imperio en el río Ancasmayo y pasaba por Quito, Hatun-Cañar (Ingapirca), Tomebamba (Cuenca), Cajamarca, Huánuco Pampa, Jauja, Vilcashuamán, Cuzco, lago Titicaca internándose en Bolivia, hasta Paria y Cochabamba y siguiendo, en Argentina por Tilcara, La Paya y Pucará de Andalgalá, para internarse en Chile y terminar en el río Maule. La carretera de la costa se iniciaba en Tumbez, atravesaba todos los valles-oasis alcanzando Pachacamac, Inkawasi, Tambo Colorado, Nazca, Chala y Arequipa, pasando luego a territorio chileno. Entre ambas carreteras troncales y principales, había una multitud de caminos transversales, de los cuales se ha comprobado la existencia de no menos de veinte que seguían los valles que descienden de los Andes a la costa, pero de los que habìan muchos más. De las muchas dificultades que debìan salvar los caminos del Inca, la más frecuente fue sin duda la de los numerosísimos cursos fluviales. Los puentes fueron la solución para salvar estas dificultades. Algunas veces se empleó el arco falso o por aproximación de hiladas, para construír puentes de poca longitud, pero la mayoría de las veces se construyeron puentes colgantes sobre la base de cinco grandes y resistentes cables de fibras vegetales, empotrados en ambas orillas mediante gruesas vigas y obras de mampostería, que servían de punto de apoyo. ////////// ////////// -11Tres de esos cables servían de soporte al piso del puento hecho a base de troncos de árbol, mientras los otros dos cables hacían las veces de pasamanos. (En muchos de estos lugares había dos puentes: uno para uso exclusivo del Inca y otro para el ejército, chasquis y administradores, o para el paso de las numerosas reatas de llamas que transportaban vituallas del ejército. El más famoso de estos puentes - que estuvo en uso hasta 1890 - fue el de San Luis Rey sobre el río Apurimac. En otros lugares donde el tránsito no era tan frecuente, había otro tipo de puente, llamado oroya, que consistía en dos cables, a uno de los cuales estaba atada una cesta en la cual podía pasar un hombre mediante el uso de otras cuerdas o cables adicionales. LOS CHASQUIS La transmisión de noticias alcanzó en esta época una perfección no igualada por ningún otro pueblo de la América precolombina. A distancias variables - desde ¼ de legua (aprox. 1 ½ km.) hasta una legua y media (aprox. 7 kms.) - según las dificultades del terreno, existían a ambos lados de la carretera, dos casa o refugios (Chuclas) en los que se hallaban preparados, noche y día, dos chasquis. Uno de ellos vigilaba el camino, mientras el otro descansaba. Al divisar la llegada de un chasqui se preparaba el otro para recibir la noticia o el pequeño paquete que había que transportar. Durante un trecho corría al lado del chasqui que llegaba hasta que aprendía de memoria la noticia o la dirección del destinatario del paquete. El chasqui llevaba en secreto el mensaje aprendido hasta la chucla siguiente, donde lo transmitía a otro chasqui que hacía el trabajo equivalente, de modo que las noticias podían viajar a una velocidad muy considerable, con un promedio de unos 10 kms. por hora. La distancia entre Quito y Cuzco, se salvaba así en cinco a diez días y sólo tres eran necesarios para llegar de Cuzco a la costa. Hablando de la costa, cabe agregar los sistemas de transporte marítimo utilizado por los incas, tales como pieles hinchadas, balsas de totora y balsas de madera. 19. CIUDADES, FORTALEZAS, FACTORIAS Y ADMINISTRACIONES La arquitectura desarrollada por los incas a lo largo del siglo XV y el primer tercio del siglo XVI es uno de los aspectos de la cultura de este pueblo que lo sitùa en una posición privilegiada y relevante respecto de los demàs del área andina e incluso de todos los pueblos de la América precolombina. Sería imposible resumir en pocas líneas lo que se sabe acerca de los aspectos técnicos de la arquitectura de los incas o describir los innumerables tipos de ciudades del inmenso Tawantinsuyu. Vamos a mencionar, por ello, algunas a título de ejemplo: Pisac, ciudad situada a 80 kms. de Cuzco y construída sobre un cerro, presenta multitud de barrios. Uno de los más importantes y mejor conservados es el de Intihuatana. El conjunto presenta una planta general de forma triangular o trapezoidal. En el lado sur se abre la puerta principal y única de todo el recinto en el que se incluyen, al menos, diecisiete unidades independientes. /////////// /////////// -12 Hatun Kenko ó Kenko Chico es un conjunto de rocas talladas y construcciones incas, no lejos de Cuzco, cuyos elementos más destacados son los canales tallados en la roca que, en forma de zig-zag, tienen tres o cuatro metros de longitud. Es importante la construcción subterránea a la que se accede por medio de dos puertas y, sobre todo, el llamado “anfiteatro”, explanada limitada por un muro curvado que da la impresión de una elipse con diecinueve grandes hornacinas. El poblado de Chinchero está situado a 28 kms. de Cuzco en el camino de Yucay y constituye una de las principales residencias de la panaca de Topa Inca Yupanqui, quien moriría allí en 1493. En términos generales, pueden señalarse tres sectores o zonas en Chinchero: Las construcciones civiles o residenciales, entre las que se destacan: el edificio o Palacio del Inca, la serie de los Tres Palacios y la Plaza de las Hornacinas. El área religiosa, en la que se debe mencionar el ushnu, con tres piedras talladas en forma de trono. Las andenerías agrícolas, en las que se hallan mucha rocas talladas, de las que Titicaca es de enorme tamaño. Ollantaytambo, asentamiento situado a 68 kms. de Cuzco, en cuyo recinto hay numerosos edificios de extraordinario interés: El Intihuatana “El amarradero del Inca” El Pumamarca El Baño de la Ñusta El Incamisana Pinculluna Manyaraqui Patacalli Machu Picchu, la ciudad incaica más conocida, se halla en un marco ambiental de extraordinaria belleza, en la vertiente atlántica de la Cordillera, sobre el espinazo de una montaña a 2.700 m. sobre el nivel del mar y a 400 m. por encima del valle del río Urubamaba. Todo el conjunto urbanístico está dominado por un espacio amplio y alargado a manera de Gran Plaza Ceremonial, rodeada por elevaciones a ambos lados, de manera que la plaza viene a ser una especie de cubeta. El lado oriental está cubierto por grupos de viviendas. En esta zona se desarrolla una unidad que se repite indefinidamente y que está compuesta por una entrada cubierta y un patio central en cuyo perímetro se construyeron cuatro o cinco habitaciones. Cada una de éstas se relacionaba con las demás mediante estrechas callejas, presentando el conjunto un carácter muy abigarrado. La zona de la ciudad más elaborada y con construcciones más importantes desde el punto de vista arquitectónico es la que se desarrolla sobre el espacio que se levanta a occidente de la Plaza Ceremonial. Entre los monumentos más importantes de este sector hay que mencionar los siguientes: La Casa de la Ñusta, edificio de dos plantas, adornado interiormente con numerosas hornacinas y realizado con el tipo de sillería más perfecto de cuantos ofrece la arquitectura inca, ////////// ////////// -13 Junto a ella, una estrecha y perfecta escalera da acceso al Torreón Militar, el cual se apoya sobre una enorme roca, con un frente inclinado, bajo el que se han hecho construcciones adicionales para adaptarla a una cámara. El Torreón presenta un frente curvado con ventanas, teniendo detrás de él un muy bello muro con numerosas hornacinas, todo ello construído en granito gris-blanco. Otro importante conjunto es el llamado Templo de las tres ventanas, espacio abierto de 10.50 m. de longitud por 4.70 de ancho, en uno de cuyos muros se aprecian tres ventanas abiertas al exterior, de forma trapezoidal y perfectísima talla. En el ángulo noroeste de la ciudad se halla el Templo Principal, compuesto igualmente por tres muros con grandes piezas monolíticas que cierran un espacio de 6.70 m. de ancho por 7.70 m. de longitud y en cuyo interior hay varios monolitos con aspecto de habver servido como mesas de altar. El Intihuatana, roca tallada característica que se halla rodeada por una serie de muros, puertas, pasillos, etc. sobre una construcción que, en parte, se apoya sobre una roca natural. El número de ciudades, fortalezas, asentamientos administrativos o de valor económico, tambos y otras mil construcciones son, prácticamente, infinitos: Racchi, Huanuco, Pampo, Ingapirca, Tomebamba, etc., son algunos de los incontables existentes. 20. LAS CIENCIAS Y LAS ARTES Para los incas, el control de las tareas agrícolas, junto a la observación astronómica, fueron causas fundamentales para la elaboración de un calendario. El calendario inca era mucho más parecido al occidental que el de los pueblos mesoamericanos, ya que en su composición se incluían doce períodos o quillas, apoyados sobre los dos solsticios: el de verano el 21 de diciembre y el de invierno el 21 de junio. Basándose en datos de los cronistas y el sistema de ceques y huacas del Cuzco, Zuidema ha podido reconstruír el calendario incaico, dándole un sentido mucho más coherente del que tenía. El calendario agrícola de los incas comenzaba en agosto cuando se preparaban los campos par la siembra del maíz en septiembre.Durante los dos meses siguientes se regaban los campos utilizando los diferentes sistemas hidráulicos. En diciembre se hacía la siembra de las papas, la oca y las legumbres. Durante el mes de enero, en que las lluvias se intensificaban en cantidad y frecuencia, se escardaban los campos, mientras que en febrero y marzo, al tiempo que el maíz crecía y maduraba, se trataba de defender la cosecha de los pájaros y otros animales. Los meses de abril y mayo eran los más alegres, ya que llegaba el momento de la recolección de otras plantas y el almacenamiento de los diferentes productos agrícolas. Así como mayas y aztecas utilizaban un sistema vigesimal para sus cuentas, los incas aplicaron el sistema decimal a todo, utilizando el sistema de cuerdas con nudos (Quipus) para la contabilidad. ////////// ////////// -14LOS QUIPUS (Parte II) El quipu es un conjunto de cuerdas o cordones, unidos todos ellos en un punto o atados sucesivamente a otro cordón, sobre los cuales pueden observarse pequeños nudos de un solo color o de diversos colores, situados a determinadas distancias de la base o atadura. Tales nudos pueden tener valor numérico o bien ser de carácter mnemotécnico para recordar historias, leyendas, poemas o cualquier otro género de composiciones literarias o de informaciones orales. La interpretación más segura hecha hasta ahora de un buen número de quipus es la de carácter numérico. El sistema empleado sería de carácter decimal, utilizando un criterio de posiciones y representando el cero mediante la ausencia de nudos en un determinado lugar. De esta manera los grupos de nudos colocados más cerca de la atadura al cordón principal representaría los millares, el grupo siguiente las centenas y a continuación las decenas y unidades. La confección y lectura de tales quipus estaba encomendada a personas especializadas, los khipocamayocs, que no solamente conocían las reglas de carácter matemàtico sino tambien la simbología de los colores: amarillo = oro blanco = plata rojo = soldados verde = muertos en batalla carmçin = el Inca marrón = curacas etc. En cuanto a medidas de longitud tenían la rikra ó braza, distancia entre los dedos pulgares de ambos brazos cuando éstos se hallaran tendidos horizontalmente. La sykia era la media braza, equivalente a la vara castellana. El cuchuch tupu, equivalente al codo castellano, era la distancia desde el codo a la extremidad de la mano. Las medidas de capacidad más frecuentes eran: la pokcha = 27,7 litros el runku, para medir coca o ají y que debía ser un gran cesto chekta runcu (Media cesta) cutmu (1/4 de canasta) sillcu (1/8 de canasta) Medidas de superficie: papacancha o tupu (Aprox. 20x20 varas) Entre aymarás y quechuas había grandes diferencias en este rubrol El yapu (Aprox. 1 ½ legua española) La medicina de los Incas era muy avanzada, pero no había abandonado los procedimientos “mágicos”. La ciencia médica entre los Incas fue uno de los campos en que alcanzaron un más alto desarrollo, especialmente en el campo de la cirugía. ////////// ////////// -15- Al igual que otros pueblos conquistadores, los incas NO FUERON grandes creadores en el terreno de las artes plásticas. De allí que, por ejemplo, SU ARQUITECTURA DEBA SER CONSIDERADA Y ADMIRADA MAS POR SU SOLIDEZ Y POR LA PERFECCION TECNICA, QUE POR LA BELLEZA DE SUS FORMAS O SU DECORACION. Artes como la escultura monumental o el relieve o la pintura mural, fueron sistemáticamente ignoradas por los incas. Su cerámica fue extremadamente sencilla. Se distinguieron en el trabajo de la madera, con la elaboración de un tipo de vasija, el kero, de forma semicilíndrica, con decoración pintada, artesanía que se continuaría durante la Colonia, proporcionando bellos ejemplares. En cuanto a la creación literaria poco es lo que se puede decir de una auténtica literatura precolombina. La mayor cantidad de ejemplos procede de la tradicion oral post-conquista, entre cuyos géneros cabe destacar: el jailli el arawi el wawaki el taki el waynu etc. Pero no debemos dejar de mencionar algunas obras dramáticas, siendo la más famosa el Ollantay. Otras, de valor desigual, son La muerte de Atahualpa y Ushka Paucar.