Resumen: El lenguaje gráfico es un primer paso del proceso proyectual, el peso que tiene las expresiones gráficas en torno a la arquitectura universal es muy eminente, se entiende como una exteriorización natural de diseño, esta modalidad se usa desde los originarios representantes de la arquitectura, siendo valorados de acuerdo a su época y lugar, aunque se sabe que en los primeros vestigios de diseño el hombre se enfocaba, y tomando como referente, en el modelo de la naturaleza. Las formas gráficas en el proceso proyectual toman una gran importancia, ya que son las primeras concepciones espaciales en un diseño, inconscientemente como primer pensamiento de modelos de lenguajes gráficos surge la idea de bocetos, croquis, es decir lenguajes gráficos bidimensionales, cuando la expresión tridimensional también tiene gran valor en el desarrollo de la idea arquitectónica, se piensa del modelo volumétrico como una fruto de la idea plasmada en los bocetos o este tipo de expresiones gráficas, cuando el proceso creativo no siempre empieza en el dibujo ni termina con este, se sabe de casos donde el proceso creativo proyectual ha empezado con modelos tridimensionales, tenemos a Miguel Ángel Buonarroti con el proyecto de San Pedro de Roma, este expresa su idea de diseño con una maqueta de barro, así como también exponentes como F.O. Gehry van del boceto rápido y gestual hacia el modelo volumétrico. “A veces empiezo a dibujar sin saber exactamente a dónde voy. Hago trazos familiares que evolucionan hasta convertirse en el edificio que tengo tendencia a dibujar a partir de ahí me traslado a las maquetas, y las maquetas absorben toda la energía y necesitan información sobre la escala y las relaciones que no pueden concebirse en su totalidad en los dibujos. Los dibujos son efímeros. Las maquetas son lo específico…” Conversación con F.O. Gehry - ZAERA El proceso proyectual ha ido evolucionando a lo largo de los años. Actualmente, en la concepción arquitectónica, el diseño y la tecnología van de la mano, inicialmente los medios digitales se involucraron en el ámbito de la construcción sin embargo estos últimos años, debido al desarrollo de tecnología digital, ha creado un gran impacto en métodos de diseño y formas de trabajo. Hoy por hoy es más común el uso de medio tecnológicos no solo en el aspecto laboral sino también en el académico, el uso de interfaces educativas son una de las nuevas formas de enseñanza. “La forma es la solución al problema; el contexto define el problema” “Los modelos espaciales tienen un valor indiscutible en la génesis formal y espacial del objeto, al permitir su manipulación en su totalidad e integralmente, en forma más directa que el dibujo.”1 EL PROYECTO ARQUITECTONICO. BOIX, FERNANDO “El proyecto se integra en un volumen único capaz de albergar en su interior los espacios y las funciones que vuelven a converger en un todo. La obra se constituye en una totalidad única y unitaria que engloba, en un solo elemento y una sola forma, toda la complejidad del proyecto.”2 EL PROYECTO DE ARQUITECTURA. PINA LUPIANEZ “La maqueta nos permite tener diferentes percepciones del objeto arquitectónico, del espacio. Podemos utilizar esta poderosa herramienta como una copia mimética del objeto existente, o utilizarla como mecanismo sistemático de análisis del propio objeto.”3 EL ARQUITECTO, DE LA TRADICION AL SIGLO XXI. UNIVERSIDAD DE ALCALA La presentación de un modelo espacial sirve para una idealización objetiva y una herramienta de expresión en el proceso de diseño, es un medio de exploración a través del cual el proyectista visualiza su obra y soluciona conflictos de diseño, que van desde la volumetría hasta los materiales y acabados. El dibujante debe tener en cuenta la influencia del contexto en el proyecto, su emplazamiento situará puntos que se deben tener en cuenta, como las vías de conexión, topografía, accidentes geográficos, orientación, etc. Este metodología esta direccionada al aprendizaje de conceptos técnicos, teóricos y prácticos en donde se espera que el proyectista logre una sensibilidad espacial y volumétrica, en el que se pueda percibir un valor ordenador tanto en la idea conceptual y abstracta. Desarrollar la sensibilidad volumétrica es importante ya que permite un configuración en proyecto, juego de forma y figura hace del proyecto una propuesta interesante, haciéndolo más complejo pero con una claridad geométrica. En una maqueta – boceto existen principios ordenadores, que así como lo dice Boix, las cuales al ser manipuladas cambiar la percepción del proyecto. Este sistema integrador, que tiene en cuenta el espacio así como la unidad compositiva, es perteneciente al proyecto moderno. Las modulaciones son una parte interesante, ya que se les da una importancia y composición individualizada así como también integradora. Las modulaciones son importantes ya que sirven en el sistema compositivo, los tamaños y proporciones son primordiales y tienen mucha que ver en el tipo de proyecto a diseñar. La capacidad del proyectista por dar soluciones de manera abstracta, tener una percepción del objetivo del proyecto, ayudan para no divagar en lo que se quiere llegar a concluir como propuesta. Una de las maneras más eficientes son la maqueta boceto, pues tienes la oportunidad modificarla, y es las aproximación más cercana hacia el final proyectual. Es imprescindible que en el proyectista tenga la capacidad de unificar todo el proyecto en un todo, estas aptitudes se desarrollan desde el inicio de su formación, el docente ayuda a los alumnos a desarrollar este tipo de competencias. Existen principios ordenadores y los cuales ayudan a dar forma a una maqueta desde su abstracción. Tener en claro conceptos como la yuxtaposición, separación, superposición, unión, articulación e inclusión. En el inicio del proceso proyectual, las maquetas hechas no son tan complejas, ya que son utilizadas para criticar en ellas la forma y figura a la que se quiere llegar, la impresión que esta nos da, como influye el contexto en ella y que opciones escogemos para poder integrarla en un todo. Si bien es muy necesario este paso, a medida que vamos avanzando el proyecto va adquiriendo mayor complejidad la maqueta, el desarrollo de espacios interiores o módulos interiores. La integración de estos es muy importante, saber empaquetar cada zona es primordial ya que tiene que ver en la función del proyecto. Dependiendo de la forma de elaborar una maqueta se distinguen distintos modelos que forman parte del diseño y ayudan a poder definir fácilmente los elementos definitivos y los alterables en un proyecto, aunque el diseñador debe tener en la mente, como anticipación, la idea de cómo será o quedara la obra a realizar. Estos elementos básicos volumétricos o lineales se utilizan, por ejemplo para representar edificios en una maqueta urbanística, fachadas y muros en una maqueta de la sección de un edificio, y pilares o columnas no convencionales en la maqueta de una estructura. Cuando ya se tiene el proceso proyectual avanzado, se usan maquetas de detalles constructivos, es un buen uso de la maqueta ya que en los planos no se puede tener un entendimientos tan realista como se puede lograr haciendo este tipo de presentaciones, aun mas si tienes un cliente o empresa a quien hacerle una exposición. Es más, al utilizarse los detalles constructivos de manera tan real ayuda y reafirma la coherencia geométrica entre las plantas, cortes y alzados. Reafirma los sistemas estructurales usados en cada espacio. Además de poder dar a detalle acabados que se han propuesto para cada ambiente. Entonces existe una maqueta conceptual, que está en el rango inferior o inicial, y que es aquella que se genera simultáneamente con los primeros croquis, y en el escalón más elevado están las maquetas de ejecución o detalle, en la que la precisión y el detalle son las características mínimas. Las maquetas de trabajo no priorizan al detalle pero requieren ser precisas, si pueden ser de cartón por son como una prueba para modelar la forma, proporcionar la suficiente área, y adecuarse al espacio arquitectónico, definir la materialidad, pero admiten otras técnicas que aun así puedan ser modificadas con facilidad. Utilizar la maqueta como un modelo de análisis es fundamental, al menos cuando se está iniciando en el proceso de diseño, a través de ella podemos observar, en tres dimensiones, lo detalles más representativos del proyecto, así como también representarla en la escala más adecuada para sus modificaciones. Esta es la técnica en la que se trabaja a una escala reducida para acercarse al proceso constructivo real, se hacen pruebas y evaluaciones, se evalúa como si el proyecto estuviese en el terreno o como si ya se estableciera entre los edificios, el proyectista percibe las formas y reconoce que configuraciones espaciales debe hacer uso. “…la maqueta–boceto, está más relacionadas con la idea de esbozo, croquis o rastro,…Esta acepción revela una mirada más artística hacia la maqueta porque «tiene el carácter de idea, un concepto más abierto que transmite sugerencias de soluciones por delante de un programa»” “…la incorporación de las tecnologías a la enseñanza del proyecto arquitectónico instala el debate sobre el uso de la virtualidad en el proceso de diseño y las posibilidades que brinda como modo de aproximación al conocimiento.” ENSEÑAR CON TECNOLOGÍAS. LA MAQUETA COMO HERRAMIENTA CON VALOR DIDÁCTICO–DISCIPLINAR Y LOS MODOS DE APROXIMACIÓN AL CONOCIMIENTO EN LA ENSEÑANZA DEL PROYECTO ARQUITECTÓNICO. MARISA CUBALO El inicio proyectual es muy vulnerable, pero si hablamos de un aspecto académico, el docente debería ayudar al estudiante a resolver ese dilema según los métodos conceptuales y abstractos que genere el proyectista. Como una idea inicial si se ve como una volumetría artística, donde se aplica conceptos de diseños, estos son desarrollados de una forma coherente, son generar desorden ni alterando el medio físico de su entorno, sino más bien adaptándose a él. Actualmente cada vez es más común el desarrollo de tecnologías en el ámbito profesional, debido a que en ciertos aspectos las competencias se pueden desarrollar de una forma más rápida y de por si la tecnología ayuda inevitablemente al entendimiento de un plan proyectual, además que muchas software ayudan a no ser tan complejo el desarrollo de ciertos proyectos innovadores. Los medios tecnológicos hoy por hoy nos brindan información sobre nuevas instrumentos y además nuevas estrategias metodológicas, en las cuales desarrollaran competencias entre diseñadores, estas modifican las formas de trabajo, formas de percibir o sensibilizar, anticipar un nuevo proyecto arquitectónico. Es en este momento donde se diferencias dos niveles de uso de la tecnología, pero ambas en el mismo momento del proceso proyectual. Una de ellas es en la práctica arquitectónica, que pueda ser hecha por estudiantes, los cuales necesitan ser guiados, esta práctica es muy diferente ya que se encuentran en un conflicto por la complejidad del uso de un software en lugar de poder experimentar la creación de una volumetría a través de un método tradicional, el conocimientos de principios básicos de diseño son necesarios para poder manejas un medio tecnológico como el boceto inicial hacia un plan proyectual. El segundo nivel es hacia las competencias que desarrolla este medio en el ámbito empresarial, egresados tienen como principales objetivos el dominio perfeccionista de este software, teniendo los conocimientos de principios de diseño, se espera que puedan dar solución a los conflictos que se generan en el proceso proyectual y saber que modificaciones a nivel de volumetría se pueden dar. Entonces, ¿Es viable la integración de la tecnología modelada en estudiantes de arquitectura como parte del proceso proyectual? Los arquitectos profesionales están integrando tecnologías con una considerable información para la práctica de distintas formas de proyectar: el medio digital simplemente como una oportuna herramienta para la realización de los trabajos a comparación de los trabajos manuales existentes, además también como una herramienta de presentación entre los compañeros de trabajo como un medio de visualización y simulación, este se percibe de mejor comodidad para los clientes u observadores, permitiéndoles modificar y anticipar el proyecto constantemente. Esto tiene un impacto cultural en el proceso de diseño, ya que cambia la estructura organizacional y cultural de las empresas de diseño, requiriendo nuevas competencias en los proyectistas de arquitectura. Existe una diferente de experiencia y manejos conceptuales en los estudiantes, entonces es necesario nuevas y múltiples formas de aprendizaje en los talleres las cuales son necesarias para abordar nuevas disciplinas proyectuales. La enseñanza de estas tecnologías no solo se refiere a informar sobre estos nuevos medios de diseño sino también a afrontar nuevas metodologías donde se involucre el uso de este medio, ayudar a desarrollar competencias donde el alumna se familiarice con el método en cuestión. El uso de nuevas metodologías donde se desarrollen habilidades, destrezas, pensamientos y aptitudes que posibilitan el manejo de estas herramientas, el uso de la maqueta aun así no puede ser desplazada pues es donde se darán los primeros conocimientos básicos, pero si se pueden dar métodos para integrar tanto el método tradicional como digital en la arquitectura y que los estudiante sean capaces de proponer un desarrollo diferente en los proyectos arquitectónicos. “El espacio físico del taller se complementa con diversos espacios virtuales basados en la interactividad y multidireccionaldad, la textualidad, la conectividad, los nuevos modos de leer y escribir y los nuevos géneros discursivos” ENSEÑAR CON TECNOLOGÍAS. LA MAQUETA...- MARISA CUBALO “La dicotomía entre dos mundos, uno tangible material y muy antiguo, y el otro virtual, no real, aunque de máxima actualidad, fruto exclusivo de los más recientes avances tecnológicos.” MAQUETA O MODELO DIGITAL. LA PERVIVENCIA DE UN SISTEMA Eduardo Carazo Lefort El método proyectual consiste en una serie de pasos que son necesarios seguir en un orden lógico, no divagar en el plan proyectual es necesario para obtener lo fines requeridos, este orden lógico esta dictado por la experiencia y el conocimiento previo, la creatividad es necesario para hacer un buen resultado en el proyecto pero no solo consiste en la imaginación, tener en cuenta la realidad del proyecto, y tener un conocimiento sobre el tema, como ya se ha dicho, se deben resolver conflictos que se presenten en el camino y el proyectista debe estar en la capacidad de afrontarlos. La importancia de la maqueta en el proceso proyectos son destacado ya que son más asequibles a su revisión y validación. En cambio, los modelos digitales son planteado desde una base una base de modelo estructural, son de una u otra forma más limitados, se parametran y no dejan explayarse más allá, eso aún más para un estudiante aunque tiene una gran finalidad, es conseguir un máximo resultado en la percepción del diseño con un menor esfuerzo, pero en ambos casos se puedo conceptualizar y codificar el proceso de diseño, las ideas son ratificadas en forma volumétrica después de afianzar el modelo de diseño. El taller procura entender los avances de la tecnología contemporánea para poder dar respuestas a los requerimientos de los estudiantes, y se generen competencias y habilidades tanto en ellos como una comunicación asertiva entre el docente y estudiante, este taller permite recrear o imaginar realidades alternas, nuevos escenarios posibles en los que la arquitectura pudiese participar. Generar nuevas métodos donde se puede resolver las necesidades de las personas. Es en este momento donde se generan no solo respuestas sino preguntas de como tener una metodología donde el estudiante pueda establecer un plan proyectual. Los espacios proyectuales trascienden la concepción del encargo tradicional y nos sitúan ante la necesidad de pararnos frente a escenarios cambiantes, en que la rigidez acusa fragilidad. La flexibilidad no se debe confundir con volubilidad. Un hacer que se adapta rápidamente a nuevos contextos requiere fundamentos firmes sobre los que anclar las decisiones. Esta firmeza se logra a través de un hacer constante, el rigor de la práctica y la persistencia de la utopía. La arquitectura se inscribe en la dimensión artística, hermanada con diversas expresiones literarias, plásticas y escénicas. Es fundamental, entonces la prevalencia de las exploraciones estético-culturales en los planteamientos del taller, a fin de generar arquitectura apropiada y actual, con manejo del lenguaje -imagen, forma y espacio-. Las herramientas son tan diversas como las manos que las ocupan. Todas están permitidas –dentro de lo ético y estético- a lo largo del proceso, sin embargo, no se debe abandonar el trabajo “análogo”. Trabajo y corrección sobre papel y presentación impresa como expresión material de la arquitectura del proyecto. El taller debiese operar, entonces, con la hibridación de lo digital y lo manual en el trabajo proyectual, haciendo uso de la técnica como medio y no como fin, adaptándose a las nuevas tecnologías y liderando su aplicación en cuanto sirvan al proceso creativo y la concreción de la arquitectura.