Cecilia Aranyossy NIUB: 18033606 Museología y Museografía, Grupo B1 Curso 2018/2019 VELÁZQUEZ Y EL SIGLO DE ORO “Velásquez y el Siglo de Oro” es una exposición temporal que se ha celebrado en el Caixa Forum de Barcelona desde 16 de noviembre 2018 hasta el 3 de marzo 2019. Se trata de la primera exposición dedicada a Diego Velázquez en la capital catalana que muestra siete obras del pintor sevillano, todas procedentes de la colección del Museo del Prado, en diálogo con otros 52 lienzos de algunos de sus contemporáneos, como Tiziano, Rubens, El Greco, Ribera o Murillo. Este acontecimiento artísticocultural ha sido organizado de forma conjunta por la Obra Social "la Caixa" y el Museo del Prado en el marco del acuerdo que mantienen desde el 2011 y coincide, además, con la celebración del 200° aniversario del museo nacional. La organización de esta exposición se enmarca en la colaboración que se mantiene entre el Museo del Prado y la Obra Social ”la Caixa”, una colaboración que nace oficialmente en 2011 a partir de la firma de un primer acuerdo en el que se estipulaba que ”la Caixa”, a través de su Obra Social, entraba a formar parte del grupo de instituciones «benefactoras» del Museo Nacional del Prado sentando las bases de una alianza estratégica que tiene como objetivo, él de acercar al público parte de la herencia artística conservada en el Prado. La materialización de este proyecto ha sido fruto de otro acuerdo, suscrito en septiembre de 2015 por el presidente de la Fundación Bancaria ”la Caixa”, Isidro Fainé, y por el presidente del Real Patronato del Museo del Prado, José Pedro Pérez Llorca, cuyo contenido, siguiendo la línea del convenio anterior, reafirma la intención por parte de ambas instituciones de reforzar la acción cultural conjunta. “Velázquez y el Siglo de Oro” es la tercera exposición coorganizada por la fundación bancaria y el museo que se acoge en el Caixaforum Barcelona tras Goya. Luces y y sombras (2012) y La belleza cautiva. Pequeños tesoros del Museo del Prado (2014) y la primera dedicada al artista sevillano que tiene lugar en la ciudad de Barcelona. La excepcionalidad de este acontecimiento junto con la voluntad de la Obra Social “la Caixa” de unirse a los actos de celebración del bicentenario del Museo Nacional del Prado han permitido que siete lienzos de Velázquez abandonaran temporalmente la sede madrileña para viajar de forma contemporánea hasta Caixaforum Barcelona, un número no casual, ya que corresponde al tope máximo de obras de Velázquez que pueden encontrarse simultaneamente fuera del Prado. Esta decisión se motiva a partir de la necesidad del museo de atender las diferentes peticiones y de tutelar el nivel de interés de las salas permanentes siendo Velázquez uno de los artistas “estrella” de la colección del museo nacional. La figura escogida para elaborar el discurso teórico y conceptual de la exposición ha sido la de Javier Portús Pérez, jefe del Departamento de Pintura Española (hasta 1700) del Museo Nacional del Prado. Se trata de una eminencia en el campo de los temas relacionados a la cultura visual del Siglo de Oro en España y, más allá de formar parte del Cuerpo Facultativo de Conservadores del Museo del Prado, tambien ha sido el autor de varias publicaciones vinculadas a las actividades del museo madrileño. Portús destaca, además, por su largo recorrido como comisario de exposiciones entre las cuales se pueden mencionar Velázquez, Rubens und Lorrain. Malerei am Hof Philipps IV (Bonn, 1999-2000, en colaboración con Andrés Úbeda), La Sala Reservada y el desnudo en el Museo del Prado (2002) y Fábulas de Velázquez: Mitología e Historia Sagrada en el Siglo de Oro (2008). El papel del comisario ha sido integrado por un equipo de especialistas quienes le han flanqueado en el proceso de “construcción” del proyecto expositivo: en el ámbito de la coordinación encontramos a Luisa Pérez Rodríguez, Carlos González Íscar (Museo del Prado) y Verónica González Celada (Fundación Bancaria “la Caixa”), al Taller de Restauración del Museo Nacional del Prado en el apartado de restauración y conservación preventiva y a Mamen Domingo y Ernest Ferré, encargados de la parte de diseño y de gráfica. Como comisario de la exposición, Portús tambien ha curado el concepto del catálogo, editado conjuntamente por “la Caixa” y el Prado, a cuya redacción han contribuido varios autores, entre otros Miguel Falomir, Gabriele Finaldi y Miguel Morán Turina. El título de la exposición matiza desde el principio el protagonismo de la figura de Velazquéz dentro de la recopilación, hecho que se ve ulteriormente remarcado por el papel central jugado por sus obras en la construcción del discurso expositivo. El título se convierte en la declaración sobre la naturaleza del proyecto desarrollado y sobre la tipología de enfoque empleada. 1 En el caso de la exposición analizada, indica, además, otro aspecto que complementa el planteamiento de la narración interna. De hecho, este anticipa el constante dialogo presente en la exposición entre siete pinturas estrella y piezas de artistas contemporáneos a Velazquéz, en un juego de miradas que recalca la originalidad del maestro sevillano dentro del lenguaje y los estímulos internacionales que caracterizan la pintura del Siglo de Oro. Como puntualizado por Javier Portús, solo teniendo en cuenta las influencias mútuas y la condición itinerante de los artistas en el panorama europeo se puede explicar “el poliedro que fue Velázquez: su versatilidad temática y su evolución estilística”. 2 De ahí que los lienzos procedentes del Prado se acoplen a otros de Tiziano, Rubens, Ribera, 1 BELCHER, M. “Organización y diseño de exposiciones. Su relación con el museo”, Ediciones TREA, Gijón, 1994, pág. 110 2 Velázquez y el Siglo de Oro. Obra Social “la Caixa”, Barcelona, 2018, pág. 20 Zurbarán, Brueghel y Van Dyck, entre otros. Sin embargo, el título de la exposición puede crear, en cierta medida, unas falsas expectativas sobre el contenido efectivo de la misma. “Velazquéz y el Siglo de Oro” podría llevar a imaginarse una exposición de matíz monográfico caracterizada por una preponderante presencia de obras del autor de “Las Meninas” cuando realmente se trata de un discurso polifacético en el que la mayoría de la obra pictórica corresponde a otros artistas. Aún así, la elección del título, condicionada seguramente por razones publicitarias, se puede justificar considerado que son las pinturas de Velazquéz las que ocupan un papel destacado y las que marcan el ritmo y la repartición temática del discurso expositivo. “Velázquez y el Siglo de Oro” se presenta como una exposición de vertiente tematica ya que parte de una linea argumental y recurre a los objetos para ilustrar el tema. 3 La pieza expuesta, entonces, se convierte en el vehículo material y visual para transmitir al público el excursus temático y determina, tanto a nivel espacial como conceptual, la puesta en escena de la muestra. Los objetos que constituyen el corpus físico de la exposición aquí tratada son ejemplares originales, de carácter artístico que, por su naturaleza, no permiten al espectador un contacto táctil directo sino un acercamiento mediado unicamente por la contemplación. Concretamente se trata de las siete pinturas de Velázquez junto con otras 52 de diferentes autores procedentes en ambos casos de la colección del Museo Nacional del Prado. Dentro del espacio montado para la exposición, los ejemplares escogidos se presentan al público enmarcados y colgados a media altura a unas paredes efimeras de tonalidad gris. Aplicados a los muros se encuentran, junto a cada objeto expuesto, los rótulos que permiten su identificación y que se componen a partir de las siguientes informaciones: el nombre y la cronología del autor de la obra, el título, la fecha de realización, la técnica empleada, las medidas, el número de catálogo y, solamente en los casos más destacados, un breve texto explicativo. El uso de una luz centrada permite una distribuición lumínica uniforme sobre la superficie pictórica siendo así funcional a una correcta visibilización de las pinturas. Además, esta tipología de iluminación ofrece la posibilidad de crear una atmósfera particular, una atmósfera que destaca los objetos del vacío oscuro circunstante permitiéndoles, de tal manera, resplandecer.4 Como se puede leer en el dosier de prensa de la exposición “las 59 obras se agrupan de forma temática para resaltar la existencia de intereses estilísticos comunes en artistas de procedencias geográficas diferentes y para entender las influencias que Velázquez recibió a lo largo de su carrera”.5 Esta disposición de los cuadros, que ve la mezcla en cada sección de artistas de 3 BELCHER, M. “Organización y diseño de exposiciones. Su relación con el museo”, Ediciones TREA, Gijón, 1994, pág. 86 4 Idem pág. 156 5 Área de Comunicación de la Obra Social ”la Caixa”, Velázquez y el Siglo de Oro, Barcelona, 15 de noviembre 2018 [Comunicado de prensa], pág. 2. Disponible online: https://prensa.lacaixa.es/obrasocial/exposicion-velazquez-siglo- procedencias diversas, tiene dos consecuencias importantes dentro del discurso expositivo. Por un lado, esta perspectiva temática permite romper de manera efectiva la barrera de las escuelas nacionales, criterio expositivo vigente en el Museo del Prado hasta hoy en día, contextualizando y yuxtaponiendo las diferentes producciones artísticas de la Europa del Siglo de Oro. En segundo lugar, este “juego de comparaciones y correlaciones entre pintores españoles e internacionales” crea un entramado de discursos que, a su vez, da vida a un entorno común, compartido por todas las obras, en el que se valida aún más el lazo temático de la exposición.6 Es necesario matizar que la exposición tiene como puntos de referencia las pinturas de Velázquez siendo estas el molde que determina el relato presentado y, dentro de este, la elección de las 52 restantes obras. De hecho, es justamente alrededor de estos siete cuadros que se fija el eje temático de cada sección convirtiéndolos en el trait d'union narrativo y en el reclamo publicitario de la muestra. Sin lugar a duda, la posibilidad de poder contemplar en primera persona esta selección de obras maestras es el principal factor que mueve a una amplía franja de público quien, a través de su presencia, anima los distintos espacios y salas siendo la pieza final que otorga vida al complejo engranaje expositivo.7 De hecho, el nexo, aunque sea circunstacial, entre el potencial visitante y la exposición se plasma fuera del espacio de la muestra, mérito del radio de acción conseguido por la publicidad, concretándose finalmente en el momento de la visita. Al penetrar el espacio de la exposición, se produce la transición del individuo del mundo cotidiano a una dimensión plasticamente y conceptualmente significante caracterizada por su fuerte carga comunicativa y por el objetivo último de influir al espectador de una forma determinada. 8 En el caso de “Velázquez y el Siglo de Oro” este cambio se realiza accediendo, en primera instancia, al Centro Cultural CaixaForum Barcelona y prosiguiendo hasta unos de los pabellones destinado a albergar el proyecto en cuestión. El primer impacto que el interior puede producir en el visitante es el de adentrarse en un ambiente reflexivo y profundo, sensación amplificada por la penumbra que domina en las varias salas. Se trata de un único espacio dividido en diferentes sectores correlatos que se articulan a partir de unas paredes efímeras. Estas, además de servir de soporte para las obras expuestas, van creando una serie de ambientes semindependientes que corresponden a las siete áreas temáticas vinculadas a las pinturas de Velázquez siendo así fundamentales para establecer el ritmo espacial de la exposición. De hecho, el modelo de circulación utilizado delínea una ruta en forma de peine que facilita la repartición temática de los sectores y al mismo tiempo permite un flujo bidireccional oro-caixaforum-barcelona-esp__816-c-29248__.html 6 Área de Comunicación de la Obra Social ”la Caixa”, Velázquez y el Siglo de Oro, Barcelona, 15 de noviembre 2018 [Comunicado de prensa], pág. 2. Disponible online: https://prensa.lacaixa.es/obrasocial/exposicion-velazquez-siglooro-caixaforum-barcelona-esp__816-c-29248__.html 7 BELCHER, M. “Organización y diseño de exposiciones. Su relación con el museo”, Ediciones TREA, Gijón, 1994, pág. 209 8 Idem, pág. 51 otorgándole libertad de movimiento al espectador. 9 Este cáracter permeable del espacio expositivo está remarcada, además, por la partición transversal del pabellón, alcanzada a través de la colocación de una pantalla en tejido semitransparente que conlleva una gran ventaja: creando un limes penetrable por la mirada, mantiene intacta la unidad visual del ambiente y de las diferentes secciones sin generar bloques cerrados que destruirían el diálogo planteado entre las obras. Más allá de los ámbitos temáticos que forman la muestra, el proyecto contempla la presencia de dos espacios singulares. Por un lado, ubicado a la izquierda del eje de entrada se halla el espacio didáctico - educativo denominado “Pintura en Vivo” que, basándose en las características pictóricas del Siglo de Oro, “propone a las familias que creen su proprio retrato o bodegón y aprendan sobre conceptos como la composición, el simbolismo de los objetos y los efectos de la luz”. 10 Por otro lado, en una sala contigua se guardan las cajas empleadas durante el traslado de las obras desde el Museo del Prado con el fin de remarcar el cáracter excepcional de la muestra y el papel fundamental del transporte en el desarrollo de cualquier exposición. Analizando el montaje del espacio es posible afirmar que, incluso en la disposición interior, hay una clara voluntad de transmitir el discurso a la base del proyecto expositivo. Un ambiente que hace eco a los dialogos entre obras y pintores generando una dimensión diafana y penetrable, la misma que caracterizaba las relaciones entre los artistas del Siglo de Oro, y que funge de envoltorio físico y conceptual a la experiencia del visitante. En este sentido, es necesario tener en cuenta el nexo que une la organización del discurso con su puesta en escena siendo el diseño de la exposición uno de los pasos indispensables para la concreción del tema y de los contenidos de la misma. El diseño general de la exposición comprende la imagen gráfica de la exposición, el diseño general de la sala, el color de las paredes, la parte gráfica, los soportes de promoción y difusión (invitaciones, folleto, carteles, carpeta de prensa, publicidad, páginas web), el montaje museográfico, multimedia (en su caso) y, finalmente, el material educativo.11 El enfoque adoptado por Mamen Domingo y Ernest Ferré, los dos arquitectos escogidos para cuidar este aspecto de la muestra, preve poner en énfasis, a través del empleo de una determinada museografía, los dos aspectos que sustentan la base conceptual de “Velázquez y el Siglo de Oro”: entender mejor la originalidad de la obra del pintor sevillano y destacar la multitud 9 Idem, pág. 139 10 Área de Comunicación de la Obra Social ”la Caixa”, Velázquez y el Siglo de Oro, Barcelona, 15 de noviembre 2018 [Comunicado de prensa], pág. 5. Disponible online: https://prensa.lacaixa.es/obrasocial/exposicion-velazquez-siglooro-caixaforum-barcelona-esp__816-c-29248__.html 11 Resolución de 17 de diciembre 2018, del Museo Nacional del Prado, por la que se publica el Convenio con la Fundación Bancaria La Caixa. Boletín Oficial del Estado, 10, de 11 de enero 2019, 2108 a 2127, pág. 2116. Recuperado de: https://www.boe.es/diario_boe/txt.php?id=BOE-A-2019-302 de estímulos visuales y creativos que recibió a lo largo de su carrera rompiendo así, de facto, la barrera de las escuelas nacionales. Como mencionado anteriormente, ya en el montaje de la exposición se patenta esta voluntad de crear una dimensión diafana y penetrable marcada por unos espacios dialogantes que generan una continuidad visual, como en el caso de la pantalla semitrasparente que atraviesa la sala, y que no interrumpen la trama discursiva. De tal manera se convierten en el reflejo conceptual de las mútuas influencias artísticas que dieron vida a la estética pictórica del Siglo de Oro en cuyo contexto la muestra se propone remarcar el papel destacado de la figura de Velázquez. De hecho, los siete sectores temáticos (El arte, El saber, La mitología, La corte, El paisaje, La naturaleza muerta y La religión) que componen el recorrido de la visita se construyen alrededor de siete obras del pintor mencionado otorgándole así un protagonismo indiscutido dentro del proyecto expositivo. Los otros dos compenentes que ocupan un lugar relevante dentro del diseño de la muestra son el color y la iluminación ya que son precisamente estos los medios que determinan, por un lado, el corte contemplativo del espectador y, por el otro, el tono final de la exposición. En este caso, la gradación cromática seleccionada para hacer de fondo a las pinturas exhibidas ha sido una tonalidad grisácea que influye en la percepción reduciendo los contrastes y manteniendo intactos los valores del color. Además, la elección de este particular matiz cromático es funcional a generar una atmósfera íntima, relajante y acogedora puesto que, segun los psicólogos del color, las gradaciones oscuras tienen esta puntual virtud.12 Al igual que el color, tambien la luz participa en la psicólogia del comportamiento y en la éstetica de la percepción. La iluminación centrada de las obras tiene el objetivo de garantizar un correcta visibilización de las mismas y, a la vez, las subraya como hilo conductor y como protagonista físico de la exposición. La diafanidad lumínica que se genera alrededor de estas pinturas contribuye en acrecentar la calidez y el cáracter intimísta del ambiente pero añade tambien un aura reflexiva, casi de misterio, latente en el constraste entre la luz candente y la penúmbra circunstante. Y es en este espacio entre luces y sombras que el visitante recurre a partir de los objetos concretos, las 59 pinturas expuestas, un discurso temático y conceptual que se va hilvanando a lo largo de las varias salas y que, en definitiva, se convierte en el fundamento real de la exposicion. Personalmente creo que el proyecto expositivo “Velázquez y el Siglo de Oro” ha cumplido con los própositos planteados tanto a nivel discursivo como a nivel visual, en lo que sería el montaje físico de la muestra. El enfoque temático adoptado ha conseguido subrayar, a partir de la figura central de Velázquez, la dimensión europea del Siglo de Oro y ha sido eficaz en indagar los diálogos y las 12 BELCHER, M. “Organización y diseño de exposiciones. Su relación con el museo”, Ediciones TREA, Gijón, 1994, pág. 161 influencias recíprocas que unían a los artistas de concreta etapa histórico-artística ofreciendo así una perspectiva que va más allá de la rígida división en escuelas nacionales. La incorporación del espacio educativo Pintura en Vivo ha potenciado aún más la el mensaje comunicativo de la exposición ampliándolo tambien a los visitantes más pequeños y a las familias a través de un enfoque que mezcla la parte lúdica con la experiencia didáctica. El diseño y el montaje de las salas han sabido evidenciar la transparencia y los “colóquios artísticos” que fundamentan el discurso expositivo y, además, el hecho de que no se incorporaran audiovisuales al recorrido de la muestra ha logrado condensar la atención en los reales protagonistas del proyecto: las pinturas. Sin embargo, sin quitarle el lugar privilegiado que pertoca a las obras expuestas, habría sido provechoso dedicar una sección a los vehículos que favorecían la circulación de ideas en la Europa del siglo XVI y XVII, como grabados o tratados, ya que estos objetos, más allá de los viajes personales de los pintores, solían convertirse en una de las primarias fuentes de influencia y de emulación entre los artistas siendo tambien significativos en el desarrollo de aquellos estilos dialogantes a la base de la pintura del Siglo de Oro. BIBLIOGRAFÍA BELCHER, M. “Organización y diseño de exposiciones. Su relación con el museo”, Ediciones TREA, Gijón, 1994 Velázquez y el Siglo de Oro. Obra Social “la Caixa”, Barcelona, 2018 Área de Comunicación de la Obra Social ”la Caixa”, Velázquez y el Siglo de Oro, Barcelona, 15 de noviembre 2018 [Comunicado de prensa]. Disponible online: https://prensa.lacaixa.es/obrasocial/exposicion-velazquez-siglo-oro-caixaforum-barcelonaesp__816-c-29248__.html Resolución de 17 de diciembre 2018, del Museo Nacional del Prado, por la que se publica el Convenio con la Fundación Bancaria La Caixa. Boletín Oficial del Estado, 10, de 11 de enero 2019, 2108 a 2127. Recuperado de: https://www.boe.es/diario_boe/txt.php?id=BOE-A-2019-302 ANÉXO DOCUMENTAL