ESQUIZOFRENIA. CONCEPTO Y DIAGNÓSTICO La esquizofrenia presenta diversas facetas, siendo uno de los trastornos más heterogéneos dentro de los trastornos clínicos. Entre sus componentes se encuentran creencias y percepciones inusuales, una escasa competencia social y anhedonía por las relaciones sociales, además de ineficacia y alteraciones en la atención, la concentración y los procesos asociativos. En un episodio esquizofrénico activo la persona está confusa, retraída y se muestra suspicaz. Tiende a tener un juicio limitado y poca claridad en la percepción de la realidad. Es probable, por tanto, la presencia de sintomatología psicótica positiva, tales como ideas delirantes persecutorias, delirios de transmisión, inserción, robo o control del pensamiento. Estas personas deben ser tratadas con neurolépticos. En umbrales por debajo del episodio activo podemos observar aislamiento, sentimientos de incomprensión y rechazo por parte de los demás. También son frecuentes dificultades en el pensamiento, la concentración y la toma de decisiones. Son posibles la presencia de percepciones inusuales o creencias que pueden ser de naturaleza psicótica. La esquizofrenia puede estructurarse en tres planos: 1º.- Las Experiencias Psicóticas. Que hacen hincapié en los síntomas positivos de la esquizofrenia, los cuales varían en severidad, desde percepciones inusuales y pensamiento mágico hasta síntomas psicóticos característicos como los delirios de grandeza o nihilistas, que se podrían encontrar en otros cuadros clínicos. En el episodio activo nos encontramos con que la persona presenta escasa capacidad de juicio y ruptura con la realidad, así como delirios y alucinaciones percibidas como muy reales. 2º.- Indiferencia Social. La cual oscilará entre el poco interés por la vida de los demás, impasibilidad y reserva hasta una escasa habilidad para interpretar los signos normales que facilitan la comprensión de las relaciones interpersonales. Es característico la ausencia de disfrute en las relaciones cercanas; aislamiento social y el distanciamiento como forma de evitar o reducir la sensación de incomodidad que le genera el contacto interpersonal. Muestra igualmente una falta de interés por sí mismo, no importándole como le vean los demás y no tiene interés en la introspección. Las emociones fuertes le desconciertan especialmente. 3º.- Alteración del Pensamiento. Los síntomas oscilaran desde los problemas en la concentración y toma de decisiones hasta la confusión y el desconcierto, llegando a la presencia de asociaciones de ideas inconexas, aumento en las dificultades para la expresión y la comunicación. De cara a un correcto diagnóstico diferencial hay que señalar que las elevaciones en este plano que no van acompañadas de la presencia de síntomas en los otros dos planos de la esquizofrenia, podrían ser debidas a otras causas potenciales tales como depresión severa o manía, trastornos de atención, secuelas de daños cerebrales o de enfermedad, efectos de la medicación o consecuencias del abuso de alcohol o drogas. Ignacio González Sarrió. Doctor en Psicología Jurídica. Perito judicial y forense. Miembro del Turno de Peritos Forenses del Ilustre Colegio Oficial de Psicólogos. Coordinador Grupos de Trabajo en Psicología Jurídica. http://psicolegalyforense.blogspot.com NºCol.cv06179. 696102043 Valencia.