Contenido Resumen ejecutivo......................................................................................................................... 2 1. Introducción .............................................................................................................................. 4 1.1. Los planes de gestión .................................................................................................................... 5 1.2. Equipo de planificación y resumen metodológico del proceso de elaboración del plan ................. 6 1.3. Contexto nacional y regional .......................................................................................................... 8 1.4. Antecedentes del área protegida y categoría de manejo ............................................................. 10 1.5. Datos básicos del área y entorno ................................................................................................. 12 2. Caracterización ....................................................................................................................... 23 2.1. Rasgos biofísicos y patrimonio natural ......................................................................................... 24 2.2. Patrimonio cultural y aspectos sociales........................................................................................ 37 3. Diagnóstico ............................................................................................................................. 38 3.1. Análisis FODA .............................................................................................................................. 39 3.2. Valores de conservación .............................................................................................................. 49 3.3. Árbol de problemas ...................................................................................................................... 53 3.4. Actores y su vinculación con la Reserva ...................................................................................... 55 3.5. Vacíos de información .................................................................................................................. 60 3.6. Desafíos ....................................................................................................................................... 61 4. Visión, misión, objetivos .......................................................................................................... 62 5. Zonificación............................................................................................................................. 66 6. Programación.......................................................................................................................... 77 7. Evaluación y seguimiento ..................................................................................................... 102 8. Reflexiones finales ................................................................................................................ 104 Agradecimientos ........................................................................................................................ 106 Bibliografía ................................................................................................................................. 107 Anexos ....................................................................................................................................... 112 Anexo I: Lista preliminar de la flora de la Reserva Natural Urbana del Oeste, Ciudad de Santa Fe ... 112 Anexo II: Participantes a los talleres .................................................................................................... 117 Intendente de la Ciudad de Santa Fe de la Vera Cruz Dr. José Manuel Corral Director de la Agencia de Cooperación, Inversiones y Comercio Exterior y del Proyecto “Reserva Natural Urbana y Gestión de Riesgos Climáticos”1 Pablo Guillermo Tabares Coordinadora del Programa Agencia de Cooperación, Inversiones y Comercio Exterior y del Proyecto “Reserva Natural Urbana y Gestión de Riesgos Climáticos” Victoria Inés Perales CONSEJO CONSULTIVO Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación Subsecretaría de Recursos Naturales de la Provincia de Santa Fe Universidad Nacional del Litoral Movimiento “Los Sin Techo” Fundación Hábitat y Desarrollo Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria Embajada de Francia en Argentina EQUIPO REDACTOR Eduardo Haene (redactor principal) María Cecilia Berón Camila Rolón Victoria Perales Pablo Tabares 1 Hasta el 2015 la iniciativa de la reserva dependió de la Dirección de Gestión de Riesgos de la Municipalidad de la Ciudad de Santa Fe, cuyo director era Eduardo Aguirre Madariaga. 1 Resumen ejecutivo El plan de gestión o plan de manejo es el máximo instrumento de planificación estratégica que contiene los acuerdos necesarios para orientar la gestión del área protegida y para su seguimiento y evaluación. En abril de 2015 por ordenanza Nº 12179 se crea la Reserva Natural Urbana del Oeste de 142 hectáreas abarcando dos de los reservorios de agua pluvial que disminuyen el riesgo de inundaciones del oeste de la ciudad de Santa Fe. Su figura legal es equivalente a la categoría de manejo V “Paisaje protegido” definido a nivel internacional y “Reserva hídrica natural o humedal” reconocida por la legislación provincial. Está ubicada en la ecorregión del Espinal, con pobre cobertura en áreas protegidas en la Argentina, apenas un 0,57 % de su superficie originaria. La Ciudad de Santa Fe no contaba con una muestra protegida de Espinal, aunque la Reserva Universitaria El Pozo (12 hectáreas) tiene muestras de la otra ecorregión de la zona: Delta e Islas del Paraná. El área se encuentra dentro de la ecorregión del “Espinal” y próxima a la de “Delta e Islas del Paraná” y cuenta con dos grandes unidades ambientales: albardón y laguna. En el albardón las comunidades bióticas detectadas son sabana de cina-cina y aromito y bosque de aliso o alisal. La laguna tiene cuatro comunidades: dos de vegetación acuática flotante (camalotal y repollar), y dos pajonales (totoral y juncal). Se detectaron 17 valores en la Reserva, entre los cuales se destacan los servicios ambientales prestados por el humedal (reservorios). Hay 32 actores vinculados con la Reserva, el mayor número y los de más poder corresponden a reparticiones municipales. Del diagnóstico se desprende que los principales desafíos son contar con un organismo específico, instrumentar la reserva en etapas para alcanzar resultados demostrativos en el corto plazo, definir instancias prácticas de participación ciudadana, y convertir la Reserva Natural Urbana del Oeste en un modelo a seguir por otros municipios de la región. Por lo tanto, definimos como visión del área: consolidar los reservorios destinados a reducir el riesgo de inundación; restaurar el área con flora autóctona y preservar la biodiversidad asociada característica de la región; contribuir y fortalecer las políticas de Gestión de Riesgo y Resiliencia de la ciudad de Santa Fe; sensibilizar y educar a la población sobre los riesgos hídricos y el cuidado del ambiente; y potenciar el área como un espacio de recreación y turismo. Como objetivos de la Reserva Natural Urbana del Oeste definimos: Mantener en buen estado los reservorios destinados a reducir los factores de riesgo de inundación por escorrentía de aguas pluviales. Conservar un humedal con la biodiversidad característica de la región. Conservar muestras de la naturaleza terrestre del Espinal típico de la cuenca del río Salado. Contribuir a las estrategias de conservación regionales, como corredores biológicos de la ciudad y su entorno. Recomponer y mantener paisajes originarios de la zona, sumando a la ciudad un valor estético especial. Constituir un escenario ideal para practicar restauración ambiental, manejo de flora y fauna, monitoreo de especies y comunidades. 2 Mantener los valores que le han sido asignados a perpetuidad. Fomentar la relación del hombre de la ciudad con la naturaleza. Proveer sitios populares de educación ambiental y esparcimiento. Brindar oportunidades para investigación, capacitación y turismo. Facilitar la participación ciudadana en la gestión del territorio. En la zonificación, por el carácter de reserva urbana, donde la educación es su principal razón de ser, priorizamos la elección de la zona de uso intensivo y, por el carácter fundacional de reservorio de inundación, la zona de aprovechamiento sostenible de los recursos. También se definen sectores para zona de uso extensivo y zona operativa; además una zona de amortiguación en su periferia. Definimos como objetivo del presente plan de gestión “guiar y facilitar la etapa inicial/fundacional de la Reserva Natural Urbana del Oeste para lograr instrumentar el proyecto”. Planteamos tres estrategias: A) Digitalizar y disponer el documento del Plan de Gestión abierto a consulta pública para promover la participación ciudadana y cumplir con la etapa de revisión y corrección. B) Desarrollar una campaña educativa a escala de la Ciudad de Santa Fe para generar conciencia del valor de la Reservas Natural Urbana del Oeste. Con ello se puede tener como resultado esperado mayor participación en el desarrollo de la Reserva, lo cual implicará mejor posicionamiento y asegurar continuidad. C) Consolidar lo antes posible un organismo administrador y en la repartición más razonable, para visibilizar la iniciativa en el organigrama municipal y afianzar su incorporación al quehacer habitual de la Ciudad. Definimos 18 proyectos. En este ciclo 2017-2020 se concentran esfuerzos en los aspectos más básicos para alcanzar una instrumentación primaria. 3 1. Introducción 4 1.1. Los planes de gestión2 Denominamos áreas naturales protegidas a un espacio geográfico claramente definido, reconocido, dedicado y gestionado, mediante medios legales u otros tipos de medios eficaces para conseguir la conservación a largo plazo de la naturaleza y de sus servicios ecosistémicos y sus valores culturales asociados (Dudley, 2008). Su administración es un desafío fascinante y complejo. Desde las últimas décadas del siglo XX se ha obtenido una experiencia valiosa sobre la temática. Trabajar en una reserva natural nueva permite darle desde el comienzo una impronta ordenada, optimizar el esfuerzo, evitar errores predecibles. La planificación da soporte a las decisiones de cada día, con los pies en el presente y el ojo en el futuro. O sabemos planificar o estamos obligados a la improvisación. Toda planificación permite optimizar los recursos disponibles e identificar las demandas básicas no cubiertas, definiendo prioridades, acciones y necesidades. La planificación estratégica define escenarios futuros, tendientes a mejorar la situación actual. Es el arte y la ciencia de formular, implementar y evaluar estrategias que permitan lograr los objetivos planteados para el área protegida. El plan de gestión (o plan de manejo) es el máximo instrumento de planificación estratégica que contiene las directrices necesarias para orientar la gestión del área protegida y para su seguimiento y evaluación. Es un acuerdo entre todos los actores de influencia en el lugar, donde en base a una caracterización y un diagnóstico, se formulan objetivos de conservación, objetivos del plan, estrategias de conservación para lograrlos y un ordenamiento del espacio o zonificación. Los planes de gestión están pensados para alcanzar metas a 3-8 años. Se articulan con los planes operativos anuales, que toman sus proyectos y suman cronogramas de tareas, responsables y presupuestos. Si el plan de gestión tiene el rol de constituirse en la “constitución” del sitio, el plan operativo y las reglamentaciones internas (como podrían ser “manuales de buenas prácticas”) equivalen a las “leyes” del sistema. Durante el proceso de elaboración se genera el ámbito indicado para el análisis y la definición de los escenarios futuros, la discusión de alternativas de gestión y la toma de decisiones sobre la base de criterios científicos, técnicos y otros saberes consultados y consensuados. Es una oportunidad para capacitar y promover el intercambio del personal del área protegida entre sí y con otros actores relacionados con la gestión del área protegida. 2 Basado en Administración de Parques Nacionales (2010). 5 1.2. Equipo de planificación y resumen metodológico del proceso de elaboración del plan Comité redactor Está compuesto por personal de la Agencia de Cooperación, Inversiones y Comercio Exterior y la Dirección de Manejo de Riesgos del Gobierno de la Ciudad de Santa Fe y un consultor externo. Este equipo es el responsable de tomar las decisiones para organizar y redactar el plan de gestión, considerando para ellos las consultas a representantes de organizaciones sociales y ambientalistas, técnicos y funcionarios de otras reparticiones y otros actores relacionados con la Reserva Natural Urbana del Oeste. Consejo Consultivo de la Reserva Natural del Oeste A fines del 2014 el Gobierno de la Ciudad aprobó un proyecto presentado ante el Fondo Francés para el Medioambiente Mundial (FFEM) para conformar la Reserva Natural Urbana del Oeste. Como parte de este emprendimiento, se creó un Consejo consultivo que trabajará durante cuatro años. Realiza encuentros semestrales para evaluar los avances y plantear los pasos a seguir. Está integrado por representantes del Gobierno de la Ciudad de Santa Fe, la Fundación Hábitat y Desarrollo, el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria, el Movimiento Los Sin Techo, la Universidad Nacional del Litoral y el referente de asuntos ambientales de la Embajada de Francia en la Argentina. Metodología Seguimos la Guía para Elaboración de Planes de Gestión de Áreas Protegidas (Administración de Parques Nacionales, 2010), con ajustes aportados por la Escuela Latinoamericana de Áreas Protegidas (Administración de Parques Nacionales, 2015). Las fases que componen el esquema metodológico están sintetizadas en la Figura 1. Para la zonificación seguimos la guía elaborada por la Administración de Parques Nacionales (2002). 6 Figura 1. Marco metodológico para planificar un área natural protegida. Fuente: Administración de Parques Nacionales (2015). 7 1.3. Contexto nacional y regional La Constitución de la Nación Argentina de 1994 brinda un marco innovador en materia ambiental. Establece en el Artículo 41: “Todos los habitantes gozan del derecho a un ambiente sano, equilibrado, apto para el desarrollo humano y para que las actividades productivas satisfagan las necesidades presentes sin comprometer las de las generaciones futuras; y tienen el deber de preservarlo. Las autoridades proveerán a la protección de este derecho, a la utilización racional de los recursos naturales, a la preservación del patrimonio natural y cultural y de la diversidad biológica, y a la información y educación ambientales”. En diciembre de 1993 entra en vigor el Convenio sobre la Diversidad Biológica cuyos objetivos principales son la conservación de la diversidad biológica, la utilización sostenible de los componentes de la diversidad biológica, y la participación justa y equitativa de los beneficios que se deriven de la utilización de los recursos genéticos. La Argentina se subscribe a este acuerdo internacional en 1994 (Ley Nacional Nº 24.375) y en 1997 se reglamenta (Decreto Nº 1347). La autoridad de aplicación es el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable (antes era Secretaría). La Argentina formuló una serie de ediciones de una Estrategia Nacional de Biodiversidad cuyo último plan de acción abarca 2016-2020 que promueve un desarrollo inclusivo que tenga como pilar a la conservación de la biodiversidad. Aquí se propusieron 21 metas prioritarias, de las cuales es oportuno recordar tres: Meta 1: articular y concertar con los diferentes organismos nacionales, provinciales y municipales involucrados en la planificación del territorio y con otros actores territoriales, el Ordenamiento Ambiental del Territorio, con una visión ecorregional que salvaguarde la biodiversidad y los servicios ecosistémicos. Para llevar a cabo este ordenamiento se establecerán tres categorías principales: 1) áreas silvestres de protección estricta, 2) áreas con un uso sustentable de los recursos naturales y 3) áreas intervenidas (o a intervenir); se mantendrán las proporciones adecuadas para cumplir las funciones de viabilidad de la conservación a largo plazo, amortiguamiento y conectividad entre áreas protegidas de acuerdo a las características de cada ecorregión y los objetivos de conservación. Meta 4: aumentar un 20% la superficie protección actual de los humedales y avanzar en la integración de los humedales al sistema de planificación pública a nivel local, regional y nacional. Meta 21: impulsar la restauración de ecosistemas degradados a diferentes escalas (locales, de paisajes o región) para: 1) Restauración de áreas degradadas y con pérdida de biodiversidad, que sean originalmente potenciales áreas con alto índice de biodiversidad, áreas con especies endémicas, especies insignia o especies de especial valor de conservación o con elevado nivel de amenaza, 2) áreas que pueden pertenecer a sistemas de soporte y apoyo, sin ser necesariamente áreas con ecosistemas de gran valor intrínseco de biodiversidad (restauración de áreas para implementar corredores biológicos o áreas de amortiguamiento de núcleos de especial valor para la biodiversidad, a escalas locales, de paisaje o región, 3) áreas con potencial uso sustentable de la biodiversidad (Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable, 2015). 8 El Programa de Gestión del Espacio Público de la Subsecretaría de Ambiente de la Municipalidad de Santa Fe de la Vera Cruz (2015) evaluó las tareas efectuadas que se articulan con el Convenio sobre la diversidad biológica. Una de estas acciones era el relevamiento botánico y forestación de la Reserva Natural Urbana del Oeste. Con la instrumentación de la Reserva Natural Urbana del Oeste la Municipalidad de Santa Fe aporta al cumplimiento de tres metas prioritarias planteadas para el país en un acuerdo internacional. Tratándose de una reserva natural urbana con una función primaria como reservorio de agua durante las inundaciones, resulta oportuno analizar la dinámica natural que tiene la ecorregión dominante: Islas y Delta del Paraná. La adaptación de la flora y fauna regional a los pulsos de crecidas será clave para comprender el potencial del área como refugio de plantas y animales silvestres. El tratamiento de la ecorregión del Espinal, dominante tierras adentro, vecinas al sitio, es importante para integrar la reserva urbana al contexto de la ciudad y su periferia. Dado que se trata de un espacio moldeado por el hombre en las últimas décadas, al conceptualizarlo como reserva natural urbana debemos plantear comunidades destino características de la zona. De lo contrario se desarrollarán comunidades urbanas o de baldío dominadas por especies exóticas que carecerán de interés conservacionista. Por ello es importante dar un detalle mínimo de las comunidades vegetales destino, para ir comprendiendo el horizonte de trabajo en el manejo del lugar. Al menos en una primera etapa de instalación, será fundamental la inclusión de las especies vegetales típicas y brindar las condiciones para su permanencia (manejo de fuego, control de especies exóticas invasoras, entre otros). A escala nacional la última estadística oficial del sistema de áreas naturales protegidas (Burkart, 2007) indica que: Hay 435 áreas protegidas, un 7,71 % de la superficie del país. Sólo el 30 % de las unidades tienen un aceptable grado de instrumentación. Las ecorregiones de la zona tienen diferente grado de cobertura protegida, entre 0,57 % para el Espinal y 27,44 % para Delta e Islas del Paraná, lo cual puede interpretarse como una situación grave e insuficiente la primera y aceptable la segunda. A escala regional existe una iniciativa de Corredores de humedales en la planicie aluvial de los ríos Paraná y Paraguay. El proyecto fue desarrollado por la Fundación Proteger y otras organizaciones no gubernamentales regionales, tanto del país como del Paraguay y de Brasil, que vienen trabajando en la coordinación de acciones de custodia ambiental y administración sustentable del eje fluvial ParaguayParaná, desde El Pantanal, pasando por los Sitios Ramsar Humedales del Chaco y Jaaukanigás y continuándose hasta el Delta del Paraná (Burkart, 2007). La Reserva natural urbana forma parte de este corredor verde, con un rol clave en la toma de conciencia a escala provincial de toda la iniciativa. Según las estadísticas nacionales de 2007, la Provincia de Santa Fe cuenta con 45 reservas que representa el 4,33 % de su territorio. A escala local, la Reserva Natural Urbana del Oeste es la primer área natural protegida promovida por el Gobierno de la Ciudad de Santa Fe. En dicha localidad desde 1988 existe la Reserva Ecológica de la Ciudad Universitaria, de la Universidad Nacional del Litoral administrada junto a la Fundación Hábitat & Desarrollo. Algunos parques grandes y humedales urbanos tienen potencial de conceptualizarse aún como 9 reserva natural urbana. Por encontrarse la ciudad en el valle de inundación del río Paraná, aún sobreviven muchos sectores silvestres en la periferia, generalmente lagunas y bañados. En la ciudad de Santa Fe y alrededores, las áreas naturales protegidas que resguardan muestras de la ecorregión del Delta e Islas del Paraná son la Reserva Universitaria El Pozo (12 hectáreas) y el Parque Provincial Cayastá (300 hectáreas); y el Espinal, la Reserva Universitaria Martín de la Peña en Esperanza (33 hectáreas). 1.4. Antecedentes del área protegida y categoría de manejo En 1997 el Gobierno de la Provincia de Santa Fe edita junto a la Administración de Parques Nacionales el documento “Sistema Provincial de Áreas Naturales Protegidas”. Describen las diez categorías de manejo en uso en ese momento por la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (con frecuencia conocida por sus siglas UICN), el organismo de referencia en áreas protegidas en el mundo. Como parte del sistema de áreas protegidas consideran unidades provinciales, municipales, universitarias y privadas (Gobierno de la Provincia de Santa Fe y Administración de Parques Nacionales, 1993). La ley provincial 11.717 de 1999 sobre medio ambiente y desarrollo sustentable promueve, entre otros aspectos: “la protección, preservación y gestión de los recursos hídricos y la prevención y control de inundaciones y anegamientos” (artículo 2, inciso e); “la creación, protección, defensa y mantenimiento de áreas naturales protegidas de cualquier índole y dimensión que contuvieran suelos y/o masas de agua con flora y fauna nativas o no, rasgos geológicos, elementos culturales o paisajes” (artículo 2, inciso f). La ley provincial 12175 de 2003 crea el sistema provincial de áreas naturales protegidas de Santa Fe. Reconocen ocho categorías o tipos de áreas naturales protegidas, en general pensadas para ambientes silvestres, no urbanos. La figura que más se acerca al concepto de la Reserva Natural Urbana del Oeste es “Reserva hídrica natural o humedal”. Al analizarse el sistema de áreas naturales protegidas de la Argentina, la Administración de Parques Nacionales plantea que “la homologación de las reservas naturales urbanas con las categorías de manejo aceptadas internacionalmente, tal vez no sea necesaria y resulte preferible tomar el concepto como un componente transversal. Obviamente por sus características y objetivos, deben considerarse entre las categorías menos restrictivas, desde paisaje protegido a reservas de uso múltiple” (Burkart, 2007). En 2008 la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza reducen a seis las categorías de manejo (Dudley, 2008). Todas los tipos de áreas tienen como objetivos en común: Conservar la composición, estructura, función potencial evolutiva de la biodiversidad. Contribuir a las estrategias de conservación regionales (como reservas clave, zonas tampón, corredores, zonas de parada para especies migratorias). Mantener la diversidad de paisajes o hábitats, ay de las especies y ecosistemas asociados. 10 Ser de un tamaño suficiente como para asegurar la integridad y el mantenimiento a largo plazo de los objetivos de conservación especificados o ser susceptibles de ampliación para alcanzar dicha meta. Mantener los valores que le han sido asignados a perpetuidad. Funcionar de acuerdo con un plan de gestión y de un programa de monitoreo y evaluación que sirva de apoyo a una gestión adaptativa. Contar con un sistema de gobernanza claro y equitativo. La categoría V “Paisaje protegido” se define como “un área protegida en la que la interacción entre los seres humanos y la naturaleza ha producido un área de carácter distintivo con valores ecológicos, biológicos, culturales y estéticos significativos; y en la que salvaguardar la integridad de dicha interacción es vital para proteger y mantener el área, la conservación de su naturaleza y otros valores”. El carácter antrópico y los servicios ambientes que brinda de la Reserva Natural Urbana del Oeste la ubican en esta categoría. La Ciudad de Santa Fe crea en 2013 por ordenanza 12025 el Sistema Municipal de Áreas Naturales Protegidas y define como “Área Natural Protegida” a “todo ambiente o territorio sobre los que, por razones científicas, económicas, históricas, patrimoniales, culturales, ambientales o de seguridad para la comunidad se considere necesario aplicar acciones tendientes a preservar el sistema natural y estén orientadas a mejorar la calidad de vida humana por lo tanto estarán sujetas a un manejo legal especial que deberá establecer el Departamento Ejecutivo Municipal. Dicho manejo necesariamente debe contemplar las preexistencias sociales que impliquen procesos identitarios sobre los territorios, incorporándolos en las políticas estatales de protección propuestas”. La ordenanza Nº 12179 de abril de 2015 de la Ciudad de Santa Fe aprueba el Proyecto “Reserva Natural Urbana (RNU) y Gestión de Riesgos Climáticos” que apunta a “transformar dos de los reservorios de agua pluvial del oeste de Santa Fe, para diseñar y desarrollar una Reserva Natural Urbana con múltiples funciones: reservorio destinado a reducir los factores de riesgo de inundación por escorrentía de aguas pluviales, humedal característico del valle del Salado, espacio recreativo abierto al público y proyecto generador de desarrollo económico”. Así se crea la conocida ahora como Reserva Natural Urbana del Oeste. Consideramos reservas naturales urbanas a los sectores de la ciudad que resguardan paisajes típicos de la región con sus plantas y animales originarios (Manzione et al. s/f, Burkart, 2007). Por su ubicación estratégica y fácil accesibilidad las reservas naturales urbanas resultan particularmente significativas para: Asegurar funciones ecológicas vitales como pulmones verdes o protección de cuencas y costas. Conservar especies silvestres. Contribuir con fenómenos naturales como las migraciones. Proteger recursos culturales de valor local dentro de su paisaje natural. Fomentar la relación del hombre de la ciudad con la naturaleza. Proveer sitios populares de educación ambiental y esparcimiento. Brindar oportunidades para investigación, capacitación y turismo. Sumar a la ciudad un valor estético especial. Facilitar la participación ciudadana en la gestión del territorio. 11 En definitiva, la Reserva Natural Urbana del Oeste se puede considerar equivalente a la categoría de manejo V “Paisaje protegido” definido a nivel internacional y a “Reserva hídrica natural o humedal” reconocida por la legislación provincial. 1.5. Datos básicos del área y entorno3 La Reserva Natural Urbana se encuentra ubicada en el centro-oeste de la ciudad de Santa Fe (Argentina), capital de la provincia homónima. La ciudad se emplaza a orillas del río Salado y de la laguna Setúbal, ambos tributarios del río Paraná. Posee una población de alrededor de 400.000 habitantes. El crecimiento urbano se ha materializado hacia el norte y este, y hacia el suroeste y oeste, estos últimos en asentamientos espontáneos que son el resultado de la necesidad habitacional de familias de escasos recursos económicos. La Reserva abarca una superficie de 142 hectáreas. El límite sur de la reserva es la calle Iturraspe y al norte está delimitada por la calle Hernandarias. El límite oeste es la Avenida Circunvalación y al este del reservorio 4, la reserva se encuentra delimitada por la calle cierre de trama, y por el Jockey Club Santa Fe en el reservorio 5. En 2013 Gabriel Burgueño aportó lineamientos de manejo y paisajismo para el área. Clima El clima es templado y húmedo, con una temperatura media anual de 19 °C (período 1920-2007). En verano, las temperaturas van de 22ºC alcanzando como máximo los 38°C, y hasta 43°C; con un promedio de 27°C (ver Figura 2). El calor se hace notar en Santa Fe desde octubre - noviembre y continúa hasta pasados los primeros días de abril. En invierno, las temperaturas oscilan entre los 15°C, alcanzando como mínimo los -1°C; con un promedio de 9°C. El avance de las oleadas de aire frío procedentes de la región sur, origina bajas temperaturas que llegan a descender más allá del cero grado y generan heladas en algunos casos. La precipitación media anual es de 1.007 mm (período 1901-2007), con un valor máximo observado de 1.825 mm en 1914 y un mínimo de 480 mm en 1910. Las máximas precipitaciones medias mensuales se registraron desde noviembre a abril superando los 100 mm. Los meses de invierno son los menos lluviosos con 30 mm en promedio. Durante el siglo XX se evidencia un aumento de la temperatura media en la superficie, particularmente en latitudes medias y altas, y cambios en las cantidades e intensidades de la precipitación en varios países de la región (sur de Brasil, Paraguay y Argentina). El cambio climático podría modificar 3 Camila Rolón redactó los contenidos de clima, geomorfología, edafología e hidrología. Se consultaron en la red en septiembre de 2015 las siguientes páginas: http://www.unl.edu.ar/recorriendosantafe/wp-content/uploads/2009/11/ficha_22.pdf; http://insugeo.org.ar/publicaciones/docs/scg_14/12_la_formacion_ituzaingo.htm; http://obio.ambiente.gob.ar/ecorregiones; http://inta.gob.ar/imagenes/santafe.jpg/view; http://www.unl.edu.ar/santafe/index.php/geografia/clima.html 12 las condiciones actuales, con impactos beneficiosos o adversos, tal como ocurre en la actualidad como consecuencia del Fenómeno El Niño/Oscilación Austral. La variabilidad natural del clima, desde una escala estacional hasta una escala plurianual, ha producido efectos significativos en los países de América Latina, sugiriendo que las proyecciones del cambio climático constituyen un elemento importante para la planificación nacional y regional. Sin embargo, el cambio climático no debería ser considerado de manera aislada, sino en interacción estrecha con otros factores importantes del desarrollo, tales como las prácticas del uso de la tierra, el crecimiento de la población, la situación económica y el comportamiento de la comunidad (Canziani et al., 2000). Figura 2. Promedio de temperatura (arriba) y precipitaciones (abajo) para la localidad de Santa Fe para el período 1961-90. Fuente: Servicio Meteorológico Nacional. 13 Geomorfología El Chaco Austral o Chaco Santafesino ocupa aproximadamente la mitad del territorio provincial. Es una llanura extremadamente horizontal, con pendientes inferiores al 1 % en casi toda su extensión. Un paisaje diferente (aunque dentro de lo que se define como llanura) aparece en el este, en los terrenos depositados por el río Paraná, donde existen rasgos geomorfológicos de diverso tipo visibles a escala de campo, tales como arroyos, lagunas y campos de dunas disipadas. De acuerdo al mapeo realizado utilizando imágenes satelitales, fotos aéreas y trabajos de campo, el Chaco santafesino está formado por cuatro sistemas geomorfológicos: el Eólico, el del Salado, el del Bermejo y el del Paraná (Iriondo, 2010) La ciudad de Santa Fe se encuentra en la región de dominio fluvial, en la confluencia de los sistemas geomorfológicos del Salado y del Paraná. El sistema del Paraná constituye una faja de 90 a 100 km de ancho que comienza en la provincia del Chaco y se extiende hacia el sur cientos de kilómetros, hasta la ciudad de Santa Fe. Fue formada por la sedimentación de arenas y pelitas transportadas por el río Paraná desde su alta cuenca. Se trata de arenas cuarzosas muy maduras acompañadas por la asociación de pesados circónturmalina- estaurolita. Geomorfológicamente está caracterizada por paleocauces de diversos tamaños, según los haya formado el cauce principal del Paraná o alguno de sus brazos menores. Los paleocauces son meándricos en su mayor parte y presentan grados diversos de colmatación y enmascaramiento, derivados de procesos locales posteriores a su abandono por parte del Paraná. La actividad neotectónica ha sido significativa en épocas recientes, principalmente provocada por la aparición de fracturas de rumbo norte-sur (Iriondo, 2010). El sistema del Salado constituye el tramo final de la extensa faja aluvial desarrollada por el río Salado en la llanura argentina a lo largo del Cuaternario. En Santa Fe ocupa el área principal de los llamados Bajos Submeridionales (este del departamento 9 de Julio y oeste del departamento Vera). Se divide en cuatro unidades geomorfológicas que son el resultado de la interacción entre la dinámica del río, la actividad tectónica y las fases de sedimentación eólica. Abarca desde los derrames del Bermejo en el norte hasta la línea Saladillo-Las Conchas, aproximadamente a los 30° de latitud sur. Se observa un evidente control estructural de dirección noroeste-sudeste en sus lineamientos regionales (Iriondo, 2010). Edafología El orden predominante de los suelos en la ciudad de Santa Fe es el Molisol. En la ciudad de Santa Fe el gran grupo dominante es el Argiudol y la unidad geomorfológica presente es la Pampa llana Santafesina. Los Molisoles son básicamente suelos negros o pardos que se han desarrollado a partir de sedimentos minerales en climas templado húmedos a semiárido, aunque también se presentan en regímenes fríos y cálidos con una cobertura vegetal integrada fundamentalmente por gramíneas. La incorporación sistemática de los residuos vegetales y su mezcla con la parte mineral ha generado en el transcurso del tiempo un proceso de oscurecimiento del suelo por la incorporación de materia orgánica, que se refleja más profundamente en la parte superficial, la que se denomina epipedónmólico. Se encuentra asociado con una gran diversidad de paisajes. El material original predominante (loess) y los regímenes de humedad údico, ústico y ácuico y el de temperatura térmico, son factores que han 14 favorecido la formación de un epipedónmólico en una vasta extensión, excepto en un sector austral (régimen arídico) y en algunos otros afectados por salinidad yagua superficial, que son comunes en el centro-este de la provincia. La Pampa Llana Santafesina comprende la parte central de la provincia de Santa Fe al norte de la Pampa Ondulada. Se trata de una región plana a suavemente ondulada, con pendientes largas cuyo gradiente no supera el 1%. En el sector oriental, donde se ubica la ciudad de Santa Fe, adyacente al Río Paraná, pueden destacarse dos unidades diferentes; un antiguo albardón arenoso y una extensa planicie de escaso gradiente hacia el este, poblada de depresiones encharcables. El albardón está formado por materiales de textura arenosa y el suelo dominante es el Upsidamentálbico. Se trata de un perfil muy escasamente desarrollado que consta de un horizonte superficial A de muy poco contenido de materia orgánica, que pasa gradualmente al material originario. Las limitaciones de este perfil se deben a su escasa fertilidad y excesiva permeabilidad. La planicie está formada por áreas plano cóncavas de las que emergen lomadas muy poco elevadas. Son dominantes los Natracualfes típicos, suelos profundos, caracterizados por un horizonte superficial delgado, claro, muy poco provisto de materia orgánica, con estructura débil, al que sigue un horizonte B espeso, de textura franco-arcillosa, con alto tenor de sodio intercambiable y abundantes concreciones de hierro y manganeso. En las pequeñas lomadas aparecen Argiudoles Acuicos, y algunos suelos arenosos ubicados en sitios adyacentes al albardón. Los suelos argiudolesacuicos son frecuentes en ligeras depresiones, son profundos, imperfectamente drenados, neutros en su superficie y ligeramente alcalinos en profundidad. Las limitaciones de la planicie son la deficiencia de drenaje superficial, el hidromorfismo, la alcalinidad, la escasa permeabilidad y la anegabilidad (Barsky et al., 1991). Hidrología El área se encuentra comprendida dentro del sistema fluvial del río de la Plata, uno de los mayores del mundo, que se extiende con una superficie aproximada de 3.100.000 km 2 por los territorios de Argentina, Brasil. Bolivia, Paraguay y Uruguay. Aquí hay tres grandes unidades hidrográficas: el río Paraguay, el río Paraná y el río Uruguay (FAO- ARGENINTA- INA, 2013) La cuenca del río Paraná, sin contar al río Paraguay, abarca un área de 1.510.000 km 2, con unos 945.000 km2 fuera de territorio argentino. El sistema acuífero en el área urbana consiste en capas de arenas finas a limos, con arcillas, seguido por arenas de distinta granulometría. La recarga de este acuífero es principalmente directa proveniente de las precipitaciones y se produciría en el sector norte, donde es menor la impermeabilización por la urbanización y, eventualmente, de los cuerpos de aguas superficiales. La descarga se materializa hacia el río Salado al oeste y hacia la Laguna Setúbal al este. Sobre la base de las características litológicas del tipo de acuífero y las profundidades del nivel freático, la vulnerabilidad a la contaminación del acuífero resultó entre media y alta. La calidad del agua subterránea es apta para agua de bebida, aunque se ha constatado la presencia de nitratos en el sector norte de la ciudad (D' Elia et al., 2011). 15 Ecorregiones4 El área se encuentra dentro de la ecorregión del “Espinal” y próxima a la de “Delta e Islas del Paraná” (Burkart et al., 1999). Espinal Ocupa en la Argentina un amplio arco que rodea el pastizal pampeano en llanuras planas o suavemente onduladas con bosques bajos, sabanas y pastizales. La Reserva se encuentra dentro de la subregión del Espinal de los Algarrobos, que ocupa el centro del país y conforma una transición entre Chaco y Pampa (Burkart et al., 1999). En la Provincia de Santa Fe se reconoce una subunidad de vegetación denominada “Central” donde se encuentra la Reserva. La comunidad dominante es un bosque de tala (Celtis ehrenbergiana), algarrobo negro (Prosopis nigra), ombú (Phytolacca dioica), peje o sombra de toro (Jodina rhombifolia) y aromito (Acacia caven). En algunos sitios se suman el quebracho blanco (Aspidosperma quebrachoblanco) y el chañar (Geoffroea decorticans). El estrato arbustivo está compuesto por saúco (Sambucus australis), mistol del zorro (Castela tweedii), cedrón (Aloysia gratissima), duraznillo negro (Cestrum parquii), tabaco del monte (Trixis praestans), entre otras (Lewis, 1981). Cabrera (1994) denomina esta subunidad del Espinal como Distrito del Algarrobo, donde pueden ser habituales el negro (Prosopis nigra) o el blanco (P. alba). En el sudeste de Santa Fe y norte de la provincia de Buenos Aires, el algarrobo presente es el blanco. La Reserva Universitaria Martín de la Peña, antes de la Escuela Granja de Esperanza (Figura 3), conserva el relicto de Espinal conservado más próximo de la Reserva Natural Urbana. Allí se han registrado seis grandes unidades de vegetación (Exner et al., 2004): 1. Bosque sucesional, formación semiabierta originada por la supresión de cultivos, está dominado por algarrobos (Prosopis alba) y chañares (Geoffroea decorticans) y aromos (Acacia caven). 2. Sabana de algarrobos (Prosopis alba) y chañar (Geoffroea decorticans) con pastos halófilos (Spartina spartinae y Distichlis spicata). 3. Bosque de algarrobos y chañar. 4. Bosque de acacia negra (Gleditsia triacanthos), exótica invasora. 5. Bosque de quebracho blanco (Aspidosperma quebracho-blanco). 6. Chilcal, arbustal dominado por la chilca negra (Tessaria dodoneifolia) con la presencia esporádica de tala de burro (Lycium boerhaviaefolia, antes Grabowskia duplicata) y molle o incienso (Schinus longifolia). Valores medios anuales de las aguas del río Salado son pH: 7,9; sólidos disueltos: 3.100 mg/l; iones predominantes: cloruros y sulfatos, junto a sodio, calcio y magnesio; turbidez: 224 (Bonetto, 1976, en Barberis et al. 2013). Se reconocen cinco tipos de humedales asociados al Salado (Barberis et al., 2013). La contaminación por agroquímicos, residuos orgánicos, cromo y metales pesados está vinculada a los cambios operados en su cuenca (cultivos, ciudades, industrias) (Marchese et al., 2008). 4 Como fuente de nombres comunes de leñosas empleamos Marino y Pensiero (2006). 16 Figura 3. Relicto de Espinal en la Reserva Natural Martín de la Peña en Esperanza. Foto: E. Haene. En la región los bajos salinos están ocupados por espartillares de Spartina argentinensis (Lewis y Collantes, 1975; Collantes y Lewis, 1980; Cabrera, 1994; Feldman et al., 2009). Las comunidades hidrófilas varían con la profundidad, tamaño y fluctuaciones del nivel de agua, incluyendo juncales (Schoenoplectus californicus), vegas de Eleocharis, duraznillales de Solanum glaucophyllum, diversas variantes de comunidades de herbáceas con Ludwigia, Polygonum, Echiochloa y Paspalidium (Lewis y Collantes, 1975). La fauna del Espinal tiene elementos característicos del Chaco y la Pampa, como zorro pampeano (Lycalopex gymnocercus) y vizcacha (Lagostomus maximus), entre los mamíferos y diversas aves de bosques y sabanas como leñatero (Anumbius annumbi), espineros (Phacellodomus), pijuíes (Synallaxis), monjita blanca (Xolmis irupero), pepitero de collar (Saltator aurantiirostris), entre otras (Biassati et al., 2015; E: Haene obs. pers.). El Espinal ha sufrido una gran disminución por el avance de la agricultura, aunque ha sobrevivido en algunos sectores con ganadería (Arturi, 2006). Los sitios degradados están cubiertos por un fachinal de aromitos (Lewis, 1981). Hacia el oeste de Santa Fe, en los departamentos Castellanos y Las Colonias dominan comunidades herbáceas, dado que los bosques típicos del Espinal han sido muy modificados (Hilgert y D´Angelo, 1996). En San Agustín, departamento Las Colonias a unos 25 km de la ciudad de Santa Fe, queda un relicto de algarrobal con ejemplares de 300 años (Broda, 2010), que podría considerarse junto a la Reserva Natural Martín de la Peña sitios de referencia del Espinal de la zona (Figura 4 y Figura 5). 17 Figura 4. Algarrobo blanco (Prosopis alba) de unos 200-300 años, en el establecimiento de la familia Eberhardt, San Agustín, Santa Fe. Foto: E Haene. Figura 5. Relicto de bosque con algarrobos blancos (Prosopis alba) detectados por Rubén Broda en el establecimiento de la familia Eberhardt, San Agustín, Santa Fe. Foto: E Haene. 18 Delta e Islas del Paraná5 Abarca los valles de inundación de los ríos Paraná y Paraguay que recorren la llanura chacopampeana hasta el estuario del Plata. Representa un mosaico de paisajes bajos e inundables con selvas y bosques sobre albardones y pajonales y comunidades hidrófilas en las terrazas ribereñas. Tiene un carácter azonal dado que la influencia del río brinda condiciones climáticas favorables para la presencia de biodiversidad subtropical en latitudes de clima templado. Constituye un macrosistema fluvial, complejo, donde los flujos de energía y materiales ocurren como pulsos de inundación y sequía. Por otro lado, como el agua proviene en gran parte de otras regiones, se produce un desfasaje de algunos meses entre las precipitaciones ocurridas en las altas cuencas y los niveles de agua en los grandes ríos. Incluye ambientes acuáticos permanentes, temporarios y sectores de tierra firme, distribuidos en gradientes desde los canales principales hacia los laterales de sus llanuras aluviales. Es característica su “elasticidad”: la relación dinámica entre las superficies ocupadas en las fases de máxima inundación (o de aguas altas) y de sequía (o de aguas bajas). Muchos de los organismos presentes se hallan adaptados a estos pulsos y pueden sobrevivir en una amplia gama de condiciones ambientales, o bien migran en las épocas desfavorables. Los grandes ríos resultan importantes “corredores biológicos”, medio de dispersión y hábitat para flora y fauna norteña (subtropical e incluso tropical) que logra subsistir en regiones templadas. Por ello la ecorregión tiene una riqueza elevada, donde coexisten especies de diversas zonas. El Paraná medio tiene un régimen hidrológico caracterizado por un pulso anual aunque, en los últimos años, con un carácter errático. Si bien siguen detectándose períodos de aguas relativamente altas y bajas, pueden observarse pulsos pequeños en el ciclo anual, o bien varios años de inundación o de estiaje. Estos eventos se relacionan con fenómenos climáticos naturales como “El Niño” o “La Niña”, aunque también se los asocia al manejo hidráulico que se realiza en las altas cuencas. En el interior de las islas y en la terraza baja costera suele haber lagunas. Su composición es variada, donde resulta determinante la profundidad del agua para la instalación de diferentes comunidades vegetales, que pueden presentar a su vez momentos del año donde una o pocas especies son notables y cambiar en esta situación en otra estación. Las crecidas del río convierten momentáneamente el cuerpo lótico en uno léntico o semiléntico, que se llevan las plantas acuáticas flotantes y gran parte de la materia orgánica acumulada en el agua durante su período como laguna (eutrofización). Pasada la inundación, se produce un rejuvenecimiento ecológico donde se vuelven a iniciar los procesos de sucesión vegetal y acumulación de sedimentos orgánicos. Uno de los tipos de humedal de la planicie de inundación del río Paraná son las grandes lagunas, cuerpos leníticos de extensión importante con escasa profundidad (2-3 m) y gran elasticidad. En la vecindad de la reserva natural urbana se encuentra una de ellas: la laguna Setúbal. Los parámetros de calidad de las aguas varían entre el cauce principal del Paraná y grandes lagunas asociadas (ver Tabla 1). 5 Basado en Lewis (1981), Neiff (1990), Burkart et al. (1999), Bo (2006), Marchetti et al. (2013). 19 Tabla 1. Calidad de agua del río Paraná y laguna Setúbal. Fuente: Marchetti et al. (2013). Parámetros Río Paraná Laguna Setúbal Sólidos disueltos 70 mg/l 250 mg/l (el doble en bajante) Composición iónica predominante Sodio, calcio y bicarbonato Sodio, cloruro, sulfato y bicarbonato pH 7,2 - 7,7 6,2 - 8,2 La vegetación del valle de inundación del Paraná está caracterizado en la provincia de Santa Fe por una variación gradual de su composición, con mayor diversidad en el norte con “montes negros” de influencia chaqueña, y hacia el sur con “montes blancos” típicos del Delta. El río es el principal moldeador del paisaje en esta ecorregión. Donde se depositan los sedimentos gruesos se forman arenales que son colonizados por bosques de aliso (Tessaria integrifolia). La acumulación de materiales traídos por el agua, donde también empiezan a ser importantes las arcillas, favorece la formación de un albardón costero en el cual se instala el bosque de sauce criollo (Salix humboldtiana), que reemplaza al bobadal o bosque de aliso. El paulatino enriquecimiento con árboles genera una nueva etapa en la sucesión donde se instala el bosque insular. En el Paraná medio de Santa Fe el estrato arbóreo de esta formación está compuesto principalmente por laurel (Nectandra angustifolia), timbó blanco (Albizia inundata), canelón (Myrsine laetevirens), curupí (Sapium haematospermum), seibo (Erythrina crista-galli) e ingá (Inga uraguensis). Entre las plantas flotantes libres son habituales el camalote (Eichhornia crassipes) y el repollito de agua (Pistia stratiotes); entre las flotantes arraigadas gambarrusa (Myriophyllum aquaticum) y estrellita de agua (Nymphoides indica). Con 30 cm de profundidad del nivel de agua prosperan comunidades de saeta (Sagittaria montevidensis) y camalote (Pontederia cordata). En torno al camalotal prosperan hierbas semiflotantes, en primavera y principios de verano la verdolaga (Ludwigia peploides) y hacia el otoño los canutillos (Panicum elephantipes y Paspalum repens). Las hierbas acuáticas crecen rápidamente en períodos húmedos y calurosos, y pueden marchitarse en inviernos de fríos pronunciados. La ecorregión abarca la parte media e inferior del corredor fluvial Paraguay-Paraná, la cual tiene una notable diversidad de fauna que decrece gradualmente de norte a sur. Este corredor fluvial tiene la mitad de los peces de aguas continentales de la Argentina; en el Parque Nacional Pre-Delta, sobre el río Paraná a 50 km al sudeste de la reserva urbana, se han registrado 185 especies ictícolas (Almirón et al., 2015). En lagunas asociadas al Paraná Medio fueron detectadas 75 especies de peces. Otros animales vertebrados acuáticos de la ecorregión incluyen rana verde esmeralda (Hypsiboas punctatus) que habita camalotales, tortuga de laguna (Phrynops hilarii), yacaré overo (Caiman latirostris), falsas corales de estero (Helicops leopardinus y H. infrataeniatus), culebra verde acuática (Liophis semiaureus), gran variedad de aves (biguás, garzas, cigüeñas, cuervillos, espátula, patos, chajá, carau, pollas de agua, gallaretas, burritos, gallinetas e ipacaá), y mamíferos como coipo o nutria (Myocastor coypus), carpincho (Hydrochoerus hydrochaeris) y rata colorada (Holochilus sp.). 20 El área conservada de la ecorregión de Delta e Islas del Paraná más próxima a la Reserva Natural Urbana del Oeste es la Reserva Universitaria El Pozo (Aparicio et al., 2011), Figura 6. Allí se efectuaron estudios de zooplacton (Gagneten et al. 2000), peces (Rodríguez et al., 2000), aves (Pautasso, 2002; Cardozo et al., 2008). Figura 6. Laguna en la Reserva Ecológica de la Ciudad Universitaria, UNL. Foto: E. Haene. La Reserva Municipal Islote Curupí, en el cauce del río Paraná frente a la ciudad de Santa Fe, cuenta con un relevamiento florístico. Allí el bosque sobre el albardón costero está dominado por sauce criollo y aliso de río, acompañado por curupí, timbó blanco y seibo (Rodríguez et al., 2006). Entre las áreas naturales protegidas de la Provincia de Santa Fe con muestras de esta ecorregión, el Parque Provincial Cayastá (Figura 7) es el más cercano a la reserva natural urbana. Si bien, la Reserva Natural Urbana está dentro del territorio originario de la ecorregión del Espinal, el tipo de humedales artificiales formados y los terraplenes que la aíslan de las crecientes del río Salado estarían favoreciendo la aparición espontánea de plantas y animales típicos del Delta e Islas del Paraná (véase Unidades ambientales). 21 Figura 7. Monte ribereño, camalotes y canutillos en Parque Provincial Cayastá. Foto: E. Haene. 22 2. Caracterización 23 2.1. Rasgos biofísicos y patrimonio natural Unidades ambientales Se trata de un paisaje moldeado por el hombre, originado en el movimiento de tierra para conformar la protección para evitar las inundaciones con las crecientes del río Salado. Quedan conformados terraplenes en los sitios de depósito y cárcavas en los puntos de extracción, diseñados como reservorios de agua para captar los excedentes en las tormentas. El movimiento de sedimentos continúa con la llegada de partículas en suspensión y basura por los desagües pluviales de la ciudad a las cárcavas; en los terraplenes son arrojados basura y escombros desde los caminos vecinos (Figura 11 y Figura 17). Esta matriz antropizada está fuertemente moldeada por cinco disturbios: 1) pulsos de inundación en las cárcavas o reservorios, iniciadas con las lluvias y que terminan con la apertura de las compuertas de los diques; 2) herbivoría de animales domésticos; 3) jardinería (cegado de pasto, plantación de árboles); 4) fuego; y 5) dragado para profundizar cárcavas, con la elevación y ampliación de terraplenes a partir del material extraído. El conjunto, es un paisaje con un gran dinamismo ecológico. A partir de los sustratos generados por el movimiento de tierra, se han iniciado sucesiones secundarias de comunidades vegetales acuáticas y terrestres. Los disturbios pueden provocar el rejuvenicimiento de estas comunidades, sin permitir que lleguen a formaciones maduras. El entorno del sitio tiene claramente dos paisajes: la ciudad y el valle de inundación del Salado con su naturaleza originaria en diferente grado de conservación. Aunque desde la ciudad está acentuado, ambos aportan amenazas para la vida silvestre: animales exóticos predadores (perros, gatos y ratas), semillas de plantas exóticas invasoras (morera por ejemplo) y contaminación. Otra amenaza es el aislamiento estructural. La ruta con alta frecuencia de circulación y la falta de cursos fluviales que conecten los reservorios con el humedal circundante, acentúan el aislamiento del área. Así el repoblamiento de animales terrestres se ve fuertemente limitado. Sumada la presión de caza desde los barrios vecinos a la Reserva, sería esperable que algunas especies de la fauna mayor resulten aquí ausentes o más escasas que en los terrenos silvestres de la periferia. En principio, podríamos definir dos grandes unidades ambientales: laguna y albardón (ver Figura 8). En la medida que surja mayor información, se podrá ir corrigiendo o mejorando este primer acercamiento al lugar. 24 Figura 8. Corte esquemático ambiental de la Reserva Natural Urbana del Oeste. Elaborado por E. Haene. ALBARDÓN Se presentan como terrazas altas, no inundables o temporariamente con agua, en la vecindad de las cárcavas. También hay terraplenes que ingresan en la laguna, construidos para permitir el trabajo de las dragas. Los sectores con terreno removido o aportes recientes, presentan diferentes estadios de comunidades vegetales, momentos iniciales de una sucesión secundaria. Entre las pioneras, aptas para vivir en sitios alterados, sin cobertura vegetal al comienzo, se destacan aquí el ricino (Ricinus communis) que puede cubrir el suelo con plántulas en terrenos removidos pocos días atrás. En este grupo de pioneras y especialistas de lugares alterados hay un elenco nutrido de plantas exóticas, como el ricino y varias hierbas: biznaga (Ammi visnaga), tres cardos (Carduus acanthoides, Carduus thoermeri y Cirsium vulgare), sorgo de Alepo (Sorghum halepense) y, en primavera, la flor morada (Echium plantaginaeum). En la medida que las remociones del terreno y otros disturbios desaparezcan, estas formaciones típicas de sitios baldíos cederán paso a otras comunidades vegetales donde predominen especies perennes (la mayoría de las hierbas pioneras son anuales), orientándose hacia un bosque o una sabana. 25 En el contexto de una reserva natural urbana, con una oferta de especies exóticas que llegan de la ciudad, sería deseable trabajar desde etapas primarias en la producción de renovales de árboles nativos en las cantidades necesarias para asegurar la conducción hacia las comunidades destino que se definan. De lo contrario, termina dominado el albardón por unas pocas especies exóticas, sin valor conservacionista. Además en el predio alto, rellenado, donde se ubica un galpón municipal (Gorostiaga y autopista) han sido plantados especies exóticas de porte arbóreo con antecedentes de problemas en reservas urbanas por su gran poder invasivo: fresno norteamericano (Fraxinus pennsylvanica), palmera norteamericana (Washingtonia robusta), arce (Acer negundo) y palo borracho (Ceiba speciosa). La falta de control de estos ejemplares en una etapa inicial, generará en el futuro una distracción de esfuerzos y recursos de los renovales que aparecerán por la reserva, constituyéndose a su vez en nuevos focos de la invasión. Desde el punto de vista funcional, el único lugar de la ciudad de Santa Fe dedicado a la naturaleza local contará con pocos pero notables motivos para desvirtuar el paisaje destino. En la actualidad, dentro del albardón podríamos considerar la presencia de dos comunidades vegetales en la Reserva: sabana de cina-cina y aromito y bosque de aliso o alisal. Sabana de cina-cina y aromito Se trata de una comunidad vegetal espontánea, aunque originada por condiciones antrópicas dado que surge y se mantiene por influencia del accionar humano. Se presentan ejemplares aislados o en parches densos de cina-cina (Parkinsonia aculeata), Figura 9, y aromito (Acacia caven), en torno a los cuales se corta el pasto y adquieren por lo tanto el aspecto de una sabana. En la actualidad ambas leñosas tienen portes bajos, arbustivos, en particular la cina-cina de la cual es frecuente observar ejemplares con más de diez ramas principales desde la base. Su porte de 2-4 m refleja su corta edad y el aspecto arbustivo es una evidencia de haber resistido reiterados disturbios, incluso talado al ras, que originan rebrotes. En el campo de golf del Jockey Club vecino al reservorio 5 hay un algarrobo blanco (Prosopis alba), que podría tener unos 90-100 años de edad, creciendo en un terreno que no fue rellenado, donde hubo un alambrado (R. Broda, com. pers.). En el césped hemos registrado varias especies nativas de valor ornamental, como la margarita punzó (Glandularia peruviana) y una melosa (Grindelia scorzonerifolia) (ver Figura 19). Hay aquí plantaciones del 2013-2015 de seibos (Erythrina crista-galli), curupí (Sapium haematospermum), chañar (Geoffroea decorticans), aromito (Acacia caven), timbó (Enterolobium contortisiliquum), entre otros árboles. Junto al galpón municipal de Gorostiaga y la autopista hay un aromito de unos cuatro metros de alto, con una copa amplia a unos 2,5 m del suelo que brinda el sector con mejor sombra en torno a ese edificio. Este ejemplar de aproximadamente 15 años de edad es un buen ejemplo del potencial de las especies arbóreas del Espinal para emplear en zonas de uso público intensivo, donde buscamos brindar sombra y fresco en un entorno silvestre. Lo clave aquí es realizar una poda periódica para conducir la copa lejos del suelo y acelerar su crecimiento con riego en períodos de pocas lluvias. 26 Por ocupar terrazas no inundables, esta sabana podría ser conducida para recrear un bosque típico del Espinal. En el contexto de una reserva natural urbana, se pueden pensar la reconstitución de un paisaje con especies nativas de esa ecorregión. Por ejemplo un diseño de arboledas abiertas con césped enriquecido con hierbas nativas ornamentales y canteros de arbustivas bajas, florales, ofreciendo un espacio verde atractivo, diferenciado y seguro. En este sentido, es interesante apuntar que hemos detectado al piquillín de la víbora (Lycium ciliatum), que forma parte de los fachinales en los bosques en recuperación del Espinal en la Reserva Universitaria Martín de la Peña en la localidad de Esperanza. Figura 9. Sabana de cina-cina, entre autopista y reservorios de la Reserva Natural Urbana. Foto: Haene Alisal Es un bosque pionero dominado por aliso de río (Tessaria integrifolia), típico de ambientes ribereños de los ríos Bermejo-Paraguay-Paraná (Reboratti y Neiff, 1987). En la reserva se ven alisales incipientes sobre bordes de la laguna y terrazas inundables, en plena expansión y en algunos sitios de reciente instalación forman fachinales de 2-3 m de alto. Una especie acompañante es el curupí (Sapium haematospermum). Con frecuencia los alisales tienen renovales de árboles invasores, que de no controlarse pueden evolucionar hacia bosques exóticos, en vez de las selvas ribereñas típicas de la región. En la Reserva la especie más agresiva es la morera (Morus alba) originaria de Asia, que sería apropiado controlar ahora, en sus primeros estadios de instalación. Sobre la costa del reservorio 5, en el Campo de Golf, hay parches de alisos con ejemplares de tamaño adulto (Figura 16). 27 LAGUNA Son los espejos de agua y pajonales que ocupan las cárcavas. Tienen agua en superficie todo el año, con momentos de mayor profundidad durante las tormentas. No hay plantas acuáticas exóticas. Observamos cuatro comunidades, dos de vegetación acuática flotante (camalotal y repollar), y dos pajonales (totoral y juncal). Análisis del agua de los reservorios realizados in situ en agosto de 2015 indican un pH de 7,56-8, oxígeno disuelto entre 1,15 mg/l (en la bomba del Reservorio 5) y 8,4 mg/l (en el mismo reservorio, 5, cerca del ingreso al campo de Golf). Las muestras registraron en laboratorio: pH 6,7-7,4, conductividad 1177-2460 µmhos/cm, turbidez 2-9 UNT (valores más altos en los puntos cercanos a la orilla y menores en los puntos centrales del reservorio), 717-1404 mg/l sólidos totales. Se registraron 40-500 NPM/100 ml de bacterias coliformes totales y 3-21 NPM/100 ml termotolerantes. La Guía Canadiense de Calidad de Agua para la vida acuática propone los siguientes valores aceptables o adecuados: pH 6,5-9; 5,5-9, 5 mg/l de oxígeno disuelto; por lo tanto el pH está dentro de estos rangos y ninguna de las muestras alcanza los niveles recomendados de oxígeno disuelto. La concentración de Fósforo Total fue de 0,365-0,608 mg P/g indicando una condición hipereutrófica. Los valores de amonio son altos (1,74-7,11 mg/l) y reflejan descomposición de materia orgánica. La determinación cualitativa de metales en agua indica concentraciones estimativas no significativas excepto en el caso de cadmio que alcanzó 0,04-0,06 mg/l (Maine et al., 2015). En la superficie de los espejos de agua se acumula basura (Figura 13). Camalotal La vegetación acuática flotante de las lagunas tiene como dominante el aguapey o camalote (Eichhornia crassipes) (Figura 12). Forma parches densos que son arrastrados por el viento, por lo cual suelen observarse sobre los bordes o entre la vegetación acuática arraigada como son manchones de juncos; también en canales. Repollar Otra planta flotante es el repollito de agua (Pistia stratiotes) (Figura 15), que en períodos favorables de temperatura puede crecer rápidamente y extenderse en amplios sectores. Aquí ciclos de días con heladas necrosan los tejidos de plantas acuáticas típicas de zonas cálidas como el aguapey y el repollito de agua. Juncal Los pajonales de junco (Schoenoplectus californicus) forman manchones en sectores de poca profundidad de la laguna (Figura 13). 28 Totoral El pajonal de totora (Typha latifolia) ocupa sectores menos profundos que el juncal. Al igual que el junco, la totora se propaga en parches de contornos circulares a través de los tallos subterráneos (rizomas), donde resulta dominante (Figura 14). En terrenos bajos vecinos a las lagunas que periódicamente se encharcan o inundan, se presentan en manchones hierbas típicas de los humedales de la región como canutillo (Louisiella elephantipes), catays (Polygonum), lagunilla (Alternanthera phyloxeroides), cortadera (Cortaderia selloana), entre otras; una enredadera, la zarzaparrilla colorada (Muehlenbeckia sagittifolia), suele prosperar sobre estas plantas. Entre las aves frecuentes en el camalotal e inmediaciones podemos mencionar el gallito de agua (Jacana jacana) y la garcita azulada (Butorides striatus). En los espejos de agua libre son frecuentes gallaretas (Fulica), biguáes (Phalacrocorax brasilianus) y macáes (Podicipedidae). Sobre troncos emergentes, puede verse descansar a la tortuga de laguna (Phrynops hilarii). En los pajonales encontramos aves caminadoras como gallineta común (Pardirallus sanguinolentus) e insectívoros recorredores como junquero (Phleocryptes malanops). El caracol manzana o ampularia (Pomacea caniculata) es común en la laguna; sus desoves rosados se aprecian en la vegetación palustre emergente (ver Figura 20). Los reservorios ofrecen puntos panorámicos claves para admirar su gran diversidad de fauna y el contraste de las comunidades silvestres con el fondo de los edificios que asoman desde el casco urbano de Santa Fe. Alguno de esos puntos son ideales para la ubicación de observatorios de aves acuáticas, uno de los recursos didácticos más interesantes de la reserva natural urbana (en la zonificación exponemos algunos ejemplos). Figura 10. Algarrobo blanco en campo de golf del Jockey Club sobre el reservorio 5. Foto: E. Haene. 29 Figura 11. Depósitos ilegales de basura sobre reservorio 4 desde autopista. Foto: E. Haene. Figura 12. Camalotal en reservorio 5. Foto: E. Haene. 30 Figura 13. Juncal en Reservorio 4. Foto: E. Haene. Figura 14. Totoral en Reservorio 4. Foto: E. Haene. 31 Figura 15. Repollitos de agua, Reservorio 5. Foto: E. Haene. Figura 16. Alisos de río en campo de golf del Jockey Club sobre el reservorio 5. Foto: E. Haene. 32 Figura 17. Acumulación de basura sobre vertedero del reservorio 4. Foto: E. Haene. 33 Flora En un primer avance en el conocimiento de la flora de la Reserva Natural Urbana del Oeste ya se han documentado 91 especies de 32 familias botánicas (ver Anexo 1). Se aprecia el dominio de las especies nativas en la laguna y la abundancia de plantas exóticas en los albardones, de las cuales ya se registraron 19. Varias especies nativas tienen potencial ornamental (Figura 18 y Figura 19). Figura 18. Seibo en la costa del reservorio 4, en apariencia de crecimiento espontáneo. Foto: E. Haene. 34 1 2 5 4 3 Figura 19. Plantas nativas con valor ornamental fotografiadas en la Reserva Natural Urbana del Oeste. 1) Reina rosa (Tarenaya hassleriana); 2) Margarita punzó (Glandularia peruviana); 3) Melosa (Grindelia scorzonerifolia); 4) Flor de sapo (Jaborosa integrifolia);5) Malva rastrera (Modiolastrum gilliesii). Fotos: E. Haene. 35 1 2 5 3 4 Figura 20. Fauna fotografiada en la Reserva. 1) Picudo (Cholus annulatus); 2) Huevos de caracol manzana (Pomacea caniculata); 3) mariposa frotadora (Strymon eurytulus) en chilquilla (Baccharis pingraea) una de las plantas que atrae más insectos a sus flores; 4) Bicho de cesto (Oiketicus platensis); 5) Biguá (Phalacrocorax brasilianus). Fotos: E. Haene. 36 2.2. Patrimonio cultural y aspectos sociales Según la UNESCO el patrimonio cultural es la herencia cultural propia del pasado de una comunidad, con la que ésta vive en la actualidad y que transmite a las generaciones presentes y futuras. La cultura para el Diccionario de la Real Academia Española es el “conjunto de modos de vida y costumbres, conocimientos y grado de desarrollo artístico, científico, industrial, en una época, grupo social, etcétera”. Dentro del patrimonio cultural pueden distinguirse dos grupos: tangible e intangible. El patrimonio tangible está constituido por objetos que tienen sustancia física, que pueden ser palpados y que se reconocen como muebles e inmuebles. El patrimonio tangible mueble comprende los objetos arqueológicos, históricos, artísticos, etnográficos, tecnológicos, religiosos y aquellos de origen artesanal o folklórico que constituyen colecciones importantes para las ciencias, la historia del arte y la conservación de la diversidad cultural del país. Entre ellos cabe mencionar las obras de arte, libros manuscritos, documentos, artefactos históricos, grabaciones, fotografías, películas, documentos audiovisuales, artesanías y otros objetos de carácter arqueológico, histórico, científico y artístico. El patrimonio tangible inmueble está constituido por los lugares, sitios, edificaciones, obras de ingeniería, centros industriales, conjuntos arquitectónicos, zonas típicas y monumentos de interés o valor relevante desde el punto de vista arquitectónico, arqueológico, histórico, artístico o científico, reconocidos y registrados como tales. Estos bienes culturales inmuebles son obras o producciones humanas que no pueden ser trasladadas de un lugar a otro, ya sea porque son estructuras (por ejemplo, un edificio), o porque están en inseparable relación con el terreno (por ejemplo, un sitio arqueológico). El patrimonio intangible está constituido por aquella parte invisible que reside en espíritu mismo de las culturas. Está constituido, entre otros elementos, por la poesía, los ritos, los modos de vida, la medicina tradicional, y la religiosidad popular y las tecnologías tradicionales de nuestra tierra. La ciudad de Santa Fe se encuentra asentada entre los valles de inundación de dos ríos de llanura –Paraná y Salado– con sus ciclos de crecidas y bajantes periódicas. En 2003 y 2007 la ciudad de Santa Fe sufrió dos trágicas inundaciones que marcaron el inconsciente colectivo de todos los ciudadanos particularmente los de la zona oeste cercanos a la Reserva, que es por donde ingresó el agua en el año 2003. La creación de la Reserva Natural Urbana incluye acciones destinadas a desarrollar una cultura del riesgo de inundación para conservar y transmitir la memoria de las inundaciones sufridas por la ciudad de Santa Fe en el pasado, mediante la creación de soportes educativos en la RNU, la implementación de un proyecto pedagógico con las escuelas de la ciudad y la construcción de un Memorial de la Inundación en la zona. 37 3. Diagnóstico 38 3.1. Análisis FODA Se considera “interno” tanto el predio de la Reserva Natural Urbana del Oeste como lo relativo al quehacer de la Municipalidad de Santa Fe. Un reconocimiento internacional está ubicado aquí como “oportunidad”, pero también podría considerarse una “fortaleza”. Fortalezas Son todos aquellos elementos internos y positivos que diferencian al programa o proyecto de otros de igual clase. Aquí buscamos reflejar también la singularidad del área (ver Figura 21 y Figura 22). La Ciudad de Santa Fe de la Vera Cruz tiene un Sistema Municipal de Áreas Naturales Protegidas (ordenanza Nº 12025/2013). La ordenanza Nº 12179/2015 crea la Reserva Natural Urbana (RNU) y Gestión de Riesgos Climáticos con “múltiples funciones: reservorio destinado a reducir los factores de riesgo de inundación por escorrentía de aguas pluviales, humedal característico del valle del Salado, espacio recreativo abierto al público y proyecto generador de desarrollo económico”. La Municipalidad de la Ciudad de Santa Fe valora la trama verde situada al oeste de la ciudad con los siguientes planos de acción de la Reserva Natural Urbana (anexo ordenanza 12179/2015): o Restaurar y preservar la biodiversidad del a zona, característica del valle del Salado. o Acondicionar un espacio verde par a uso de los habitantes dela ciudad. o Diseñar este espacio verde como un sector de retención de aguas pluvial es que permite r educir el riesgo de inundación en período de lluvias intensas. o Mejorar la calidad de vida de los vecinos formalizando la trama urbana al oeste de la ciudad par a convertirla en un espacio atractivo. El proyecto estipula (anexo ordenanza 12179/2015): o “La construcción de un vivero destinado a reintroducir especies características de la flora local y generador de empleos para los ribereños que actualmente viven de actividades informales”; o “Acciones destinadas a desarrollar una cultura del riesgo de inundación: creación de soportes educativos en la reserva natura urbana, implementación de un proyecto pedagógico con las escuelas de la ciudad y construcción de un Memorial de la Inundación en la zona; o “La creación de huertas urbanas gestionadas por las familias (previamente capacitadas) y, por otro, la incorporación de todos los trabajadores informales que viven de la clasificación de residuos a las iniciativas de reconversión preexistentes”. o “Acciones de cooperación e intercambios con ciudades que se enfrentan a los mismos desafíos en Francia y en África”. 39 La denominación “reserva natura urbana” ya define un perfil del sitio. El Gobierno Municipal muestra interés en su instrumentación. 65 familias que vivían dentro de la Reserva vecina al reservorio 4 fueron realojados. La intrusión del terreno es mínima en torno al Reservorio 5. El proyecto cuenta con presupuesto. Diversas áreas del Gobierno Municipal colaboran con la instrumentación. Hay sectores de 40-100 m entre el reservorio 5 y la autopista aptos para uso público. El sistema de administración de reservorios está en funcionamiento. La Municipalidad cuenta con un galpón sobre la calle Gorostiaga, al norte del Reservorio 4. La Municipalidad tiene experiencia reciente en infraestructura de espacios verdes y la creación de un plan maestro de arbolado. La Reserva cuenta con diversidad ambiental, flora y fauna típicas de la región y humedales de belleza paisajística. Las plantaciones de árboles nativos realizadas por la Municipalidad suma recursos y brinda una experiencia de manejo en el terreno. Las compuertas de los reservorios pueden considerarse un recurso cultural para trabajar en interpretación del patrimonio. En los sectores vecinos a la autopista se corta el pasto y retira la basura. La reserva natural cumple servicios ambientales claves por cubrir parte de las necesidades básicas de la población vecina: fuente de aire puro y de sonidos naturales, barrera auditiva de la autopista. Está en marcha un proyecto de cooperación del Fondo Francés para el Ambiente Mundial para intercambiar experiencias con el “Parque Natural Urbano” en las Praderas de San Martín en Rennes (Francia). El lugar tiene un fuerte patrimonio cultural intangible, ligado a la cultura social del riesgo hídrico. Debilidades Son todos aquellos elementos, recursos, habilidades y actitudes que ya existen y constituyen barreras para lograr la buena marcha de la organización. Son problemas internos, que una vez identificados y desarrollando una adecuada estrategia, pueden y deben eliminarse (ver Figura 23). No hay en la Municipalidad un organismo que tenga como fin la administración de reservas naturales. 40 No hay antecedentes de instrumentación y manejo de reservas naturales en la Municipalidad. Las operaciones de funcionamiento y mantenimiento del sistema de reservorios de inundaciones, que incluye decisiones sobre el nivel del espejo de agua y dragado periódico, no están integrados a un manejo general de la biodiversidad y el uso público en el contexto de una reserva natural. El área carece de infraestructura básica: límites demarcados, accesos, señalización de su existencia y pautas particulares, instalaciones para personal y visitantes, entre otras mejoras. La parte de terraplén entre la autopista y el reservorio 4 con 20-30 m de ancho no es apto ni seguro para uso público. La Reserva está dividida por la Autopista de Circunvalación de Santa Fe y calle Gorostiaga, con sendos reservorios al norte y sur. Al planificar la visita, incluyendo un estacionamiento, recepción y área de servicio, una barrera de este tipo imposibilita una recorrida que integre los dos reservorios. 51 familias están asentadas informalmente en áreas de riesgo hídrico dentro de la Reserva, en las cercanías al reservorio 4. Ya se han reubicado 64 familias en zonas de cota segura mediante las de construcción de una calle de cierre de trama y generación de nuevo suelo urbano con cota adecuada en donde se construyeron 64 nuevas viviendas. No hay personal asignado en el terreno. El sitio es inseguro. El vandalismo es notorio, como lo demuestra la deposición clandestina de basura que se efectúa desde vehículos, la rotura de árboles plantados, incendios intencionales. Falta un sistema efectivo de retiro de basura del humedal. El agua del reservorio está contaminada, no es apta para consumo humano ni para bañarse. Las comunidades bióticas del predio, por aislamiento y falta de los vectores naturales de dispersión de semillas, evolucionan hacia neocomunidades donde las especies exóticas pueden tener una cobertura/abundancia importante. Estas neocomunidades, que no tienen interés conservacionista, y la ausencia de especies típicas de la región impiden/dificultan/desvirtúan el cumplimiento de los fines de la reserva natural. La presencia de muchos árboles exóticos colonizadores, dan una imagen de “baldío” al sitio. El lugar tiene poco patrimonio cultural tangible. Amenazas Son situaciones negativas, externas al programa o proyecto, que pueden atentar contra éste, por lo que, llegado al caso, puede ser necesario diseñar una estrategia adecuada para poder sortearlas (ver Figura 24). El agua que llega al reservorio, vehículos y la población vecina aportan basura. 41 Un manejo inadecuado de la reserva podría generar problemas a la comunidad vecina: olores nauseabundos, fuente de vectores de enfermedades (mosquitos, roedores), pérdida de biodiversidad, etc. La falta de un límite claro y saneamiento de la propiedad de los terrenos vecinos al Reservorio 4, genera presión sobre la Reserva Urbana. Su normalización requiere la construcción de una avenida-paseo costanera, otorgamiento de títulos a los residentes y edificación de viviendas. Esta labor llevará al menos 3-5 años de trabajo intenso con una inversión fuerte del Municipio. La comunidad de influencia de la Reserva tiene conceptualización baja de qué es una reserva natural urbana y cuáles son las alternativas de una participación ciudadana en un proyecto público como este. La insatisfacción de algunas necesidades básicas de los pobladores vecinos a los reservorios, limita su capacidad de participar, integrarse y respetar el proyecto de reserva natural urbana. La ciudad vecina es fuente de especies exóticas invasoras tanto animales (ratas, perros, gatos) como plantas (árboles de vereda, varias ornamentales en jardines). El sistema provincial de áreas naturales protegidas no contempla la figura de reserva natural urbana y no cuenta con unidades propias con estas características. Las reservas provinciales tienen una baja instrumentación, por lo cual la experiencia y modelos para aprovechar son limitados. Oportunidades Son aquellas situaciones externas, positivas, que se generan en el entorno y que una vez identificadas pueden ser aprovechadas (ver Figura 25). La reserva natural urbana está ubicada en un sitio de fácil acceso y cerca de la vivienda de vecinos que podrán aprovecharla con asiduidad. El Fondo Francés para el Medio Ambiente Mundial (FFEM), dependiente de la Agencia Francesa de Desarrollo, colabora con el financiamiento de la instrumentación de la Reserva. Los barrios vecinos carecen de suficientes espacios verdes, tanto públicos como privados, por lo cual la reserva pasa a constituirse para muchos de ellos en la mejor alternativa para cumplir una parte del derecho a un ambiente sano, una de las necesidades básicas reconocidas en la Constitución Nacional. La instrumentación de la reserva requiere de personal que podría venir de los barrios carenciados vecinos. La organización “Los sin techo” tiene experiencia y voluntad de colaborar con el Municipio para urbanizar los barrios precarios. En la vecindad de la Reserva hay ambientes silvestres en diferente grado de conservación, que son fuente de ejemplares para colonizar el sitio. Algunas especies que tienen mayores 42 requerimientos de superficie que los brindados por la reserva natural, se las observa aquí por moverse entre estos parches naturales y el área protegida. El Jockey Club de Santa Fe tiene un predio vecino al Reservorio 5 que ofrece un paisaje verde, vigilado, barrera de intrusos y otras presiones. En el consciente colectivo de los santafecinos se mantiene fresco el problema ocasionado por las inundaciones y la necesidad de mantener una solución, entre las cuales está necesidad de contar con un sistema de reservorios en funcionamiento, dos de los cuales están incluidos en la reserva natural. Santa Fe cuenta con un sistema provincial de áreas naturales protegidas (Ley 12175/2003). La Reserva Ecológica de la Ciudad Universitaria UNL, tiene un plan de manejo 2011-2020 en vigencia y trabajos de investigación publicados sobre el lugar. Es posible capitalizar los aprendizajes de las reservas naturales de la región y las urbanas del país (ver Cuadro 1). Conclusiones Del análisis FODA se puede concluir (ver Figura 26 y Figura 27): Por ser un proyecto innovador, no hay un organismo específico para administrar la reserva. El área no está instrumentada. La reubicación de pobladores intrusos y la urbanización de los barrios vecinos es un proceso complejo y costoso, que demanda una tarea de varios años. El predio está dividido en dos por la calle Gorostiaga. Es la segunda reserva natural urbana de la ciudad de Santa Fe, por lo que se puede tomar las experiencias y aprendizajes de la primera para pueden enriquecer el proyecto. Hay buena predisposición de organismos municipales, organizaciones ambientalistas no gubernamentales, especialistas de diversos organismos y universidades. Los fondos facilitados por el Gobierno Francés resultan claves para generar proyectos que incentiven la participación. 43 Cuadro 1. Aprendizajes de las reservas naturales de la región y las urbanas del país (E. Haene) Aprendizaje Referentes La investigación científica provee insumos sólidos para la gestión de un área natural protegida, pero deben generarse mecanismos de facilitación e incentivo para integrar la reserva al quehacer académico. Reserva Ecológica de la Ciudad Universitaria UNL y De la Peña. Las reservas urbanas públicas brindan oportunidades para la participación ciudadana, complementando sociedades civiles el accionar oficial del sitio. Reserva Ecológica de la Ciudad Universitaria UNL. Los viveros de plantas nativas de las reservas naturales generan ejemplares para su restauración y su difusión en la comunidad de influencia. Reserva Natural Otamendi y otras. Los viveros son claves para generar oportunidades y materiales para la capacitación y formación ambiental de los vecinos y líderes conservacionistas. Reserva Municipal Ribera Norte y otras. En superficies pequeñas y con un accionar continuado de diversos actores se ha logrado avances de restauración ambiental en reservas naturales urbanas. El control de la invasión de especies exóticas por sí solo no genera mejoras significativas en la medida que no esté acompañado de la incorporación de las plantas adecuadas para alcanzar la comunidad destino propuesta. Es clave un cuidado en riego y control de herbívoros de cada individuo plantado al menos los primeros años, cuando alcance su plena instalación. Reserva Municipal Vicente López, Ribera Norte y otras. El control de especies leñosas invasoras es factible de realizar con cortes o aplicaciones puntuales sobre el tronco minimizando al máximo un impacto ambiental negativo. Reservas privadas de la Fundación Hábitat & Desarrollo, Parques Nacionales. Las reservas naturales urbanas que conjugan gran afluencia de público y el uso de vehículos y maquinaria de diverso porte a diario (camiones de recolección de basura y retiro de poda, camionetas de personal de mantenimiento y seguridad, ambulancias, autobomba, entre otros) necesitan separar ingresos e instalaciones de visitantes y área operativa. Reserva Ecológica Costanera Sur En las reservas naturales urbanas el manejo del fuego requiere diferenciarse del accionar de los bomberos de ciudad o estructurales, que llegan cuando surge el incendio y buscan apagar el foco directamente, para orientarse al necesario en ambientes silvestres donde trabajan en forma permanente brigadistas con medidas preventivas (cortafuegos, quemas prescriptas) para controlar los focos intencionales e integrar el fuego al manejo general del área. Parques Nacionales. 44 Figura 21. Topónimos de la Reserva Natural Urbana del Oeste y alrededores. Elaborado por E. Haene. Figura 22. Principales fortalezas de la Reserva Natural Urbana del Oeste y alrededores. Elaborado por E. Haene 45 Figura 23. Principales debilidades de la Reserva Natural Urbana del Oeste y alrededores. Elaborado por E. Haene. Figura 24. Principales amenazas de la Reserva Natural Urbana del Oeste y alrededores. Elaborado por E. Haene. 46 Figura 25. Principales oportunidades de la Reserva Natural Urbana del Oeste y alrededores. Elaborado por E. Haene. Figura 26. Sumatoria de aspectos positivos (fortalezas y oportunidades) y negativos (debilidades y amenazas) de la Reserva Natural Urbana del Oeste y alrededores. Elaborado por E. Haene. 47 Figura 27. Análisis de aspectos positivos y negativos de la Reserva Natural Urbana del Oeste y alrededores. Elaborado por E. Haene. 48 3.2. Valores de conservación Por valores de conservación se entiende a una característica o proceso natural, cultural o socioeconómico de importancia presente en el área protegida (y/o entorno) que le da sentido a la conservación de dicha unidad. Siguiendo esta definición, los valores incluyen paisajes, ecosistemas, comunidades, poblaciones de especies, procesos naturales, sociales, culturales e históricos de valor científico, nacional, regional o local incluyendo algún interés particular de los actores relacionados con el área. Se entiende por problema (aspectos negativos actuales) a un acontecimiento, hecho, situación negativa o dificultad que afecta los valores de conservación o expresado de manera más general, la conservación y el desarrollo del área protegida y su entorno (Administración de Parques Nacionales, 2010). Se han detectado 17 valores de conservación en la Reserva Natural Urbana del Oeste (ver Cuadro 2). Abarcan cuatro tipos de valores: 1) especies o grupo de especies; 2) sitios y ecosistemas; 3) procesos ecológicos y servicios ambientales; 4) aspectos culturales. Por su variedad e importancia, se destacan los servicios ambientales que presta el área. Los aspectos biológicos (tipos 1 y 2) pueden mejorarse significativamente con restauración ambiental y un manejo acorde. Los aspectos culturales podrán enriquecerse en la medida que la Reserva se organice y esté abierta al público, donde pueden surgir variados servicios educativos y recreativos. El Patrimonio cultural inmaterial merece un tratamiento adicional. Lo consideramos como algo concreto, pero no contamos con fuentes de información precisa. Esto se puede deber a un vacío de información o la falta de hallazgo de lo existente. Al menos, hay dos líneas de investigación: 1) ¿qué vínculo tienen los vecinos actuales al predio con su vida silvestre?; 2) ¿cuál es el patrimonio cultural inmaterial en naturaleza regional de los santafecinos? Aquí surge una realidad de la mayor parte de las ciudades argentinas: se perdió el vínculo con la naturaleza regional y con ello su cultura asociada. El paisaje urbano suele tener carencias de “verde” y además ese espacio con vegetación, ya sea en lugares públicos o privados, no tiene que ver con la naturaleza originaria. El uso masivo de especies vegetales exóticas en jardinería y la falta de un paisajismo con identidad local son parte de una globalización cultural que en la Argentina se aprecia de una manera desproporcionada. Las reservas naturales urbanas tienen un rol clave en la recomposición de este vínculo. 49 Cuadro 2. Valores de conservación para la Reserva Natural Urbana del Oeste. Elaborado por E. Haene. Tipo Especies o grupo de especies Sitios y ecosistemas Procesos ecológicos y servicios ambientales Aspectos culturales Valor Fundamentación Aves acuáticas Constituyen el grupo faunístico más notable de la Reserva. Árboles nativos Se conservan un algarrobo centenario y parches de aliso de río. Humedales La mayor parte de la Reserva está ocupada por dos reservorios artificiales que funcionan como lagunas con vida silvestre. Mantenimiento de la diversidad específica y genética La Reserva cuenta con ambientes terrestres y acuáticos con especies de la flora y fauna típicas de la región. Aire El área constituye un “pulmón verde” en el paisaje urbano, proveedor de aire puro. Recurso paisajístico Los reservorios constituyen humedales de belleza paisajística en contraste con barrios y autopista. Reservorio de agua El área es un reservorio para reducir el riesgo de inundación en la Ciudad de Santa Fe por captación de los excedentes de precipitaciones que llegan al lugar por escorrentía de aguas pluviales. Purificación de agua A documentar Barrera auditiva La Reserva amortigua los sonidos de la autopista hacia los barrios vecinos. Servicio de polinización y dispersión de semillas Fuente de polen y polinizadores, semillas y animales dispersores. Manutención de procesos ambientales Recarga de acuíferos, atemperación de condiciones climáticas extremas, provisión de hábitat para la vida silvestre. Proveedor de plantas medicinales Potencial Avistaje de fauna Las aves acuáticas son fáciles de observar en las lagunas. Usos turísticorecreativo, educativo y científico A futuro. En el segundo semestre de 2016 se inicia un relevamiento biológico de la Universidad Nacional del Litoral. Escenario para manejo de biodiversidad Se iniciaron plantaciones de árboles nativos. A futuro, sitio óptimo para ensayar introducción de especies y restauración ambiental. Patrimonio cultural material Patrimonio cultural inmaterial Los dos reservorios (y fuera del área las bombas asociadas para verter agua al río Salado) constituyen parte de la infraestructura montada en la Ciudad de Santa Fe para minimizar el impacto de las inundaciones. Usos y creencias vinculadas a especies silvestres presentes en el área. 50 Servicios ambientales Uno de los mayores valores de las reservas urbanas son los servicios ambientales que presta. En el caso de la del Oeste resulta su razón de ser inicial. Dado que el concepto es todavía poco conocido, estimamos que merece una reseña para mejorar la comprensión de su importancia. Los servicios ecosistémicos o ambientales se definen como los componentes y procesos de los ecosistemas que son consumidos, disfrutados o que conducen a aumentar el bienestar humano tomando en cuenta la demanda de los beneficiarios, así como la dinámica de los ecosistemas (Balvanera et al., 2011). La valoración de la naturaleza a través de su capacidad para producir bienes y servicios ecosistémicos es una estratagema hábil introducida por los ecólogos para llamar la atención de los economistas ortodoxos. La visión económica neoclásica está aferrada a una concepción antropocéntrica de la naturaleza: un bien natural vale en la medida que sirva al Hombre. Es un valor de uso o un bien de cambio (Viglizzo et al., 2011). Una propuesta de abordar el tema es asimilar el “bien” a un stock de capital natural, y el “servicio” a un flujo que se genera a partir de ese stock. Es una visión equivalente a lo que los economistas denominan capital y renta del capital. El capital invertido (en un banco o una empresa) es un stock, y la renta que ese capital genera (interés bancario o utilidad empresaria) conforma un servicio. Lo cierto es que no es posible generar un servicio sin la existencia previa de un stock. Se necesita un stock de biomasa boscosa para generar un servicio de captura de carbono, una regulación de gases o una regulación del clima. Se requiere un stock de minerales en suelo y biomasa para disparar un ciclado de nutrientes en el ecosistema. Se requiere un stock de agua en un humedal para descontaminar y proveer flujos de agua pura (Viglizzo et al., 2011). No existe vida donde no hay servicios ecosistémicos. Los bosques y pastizales, en relación a la biomasa acumulada, cumplen funciones ecológicas y proveen servicios intangibles que son esenciales, como la protección del suelo, la regulación del clima local, la atenuación de disturbios (como las inundaciones), la regulación de gases atmosféricos (captura de carbono) o la provisión de refugio a la biodiversidad. Los humedales y las áreas ribereñas, a través de sus cuerpos de agua y reservorios de amortiguación de inundación, regulan flujos, purifican y proveen agua, aportan un hábitat para la biodiversidad, y reciclan nutrientes (Viglizzo et al., 2011). El desarrollo conceptual de servicios ambientales también aborda el ámbito urbano. Se reconoce que el arbolado de la ciudad captura Carbono, regula la temperatura, provee agua en calidad y cantidad, genera oxígeno, amortigua impacto de los fenómenos naturales (tormentas, inundaciones), protege y recupera suelos (estabilización de taludes), es una barrera contra ruidos (diversos estudios señalan que se logra una disminución del ruido hasta por 10 a 12 decibeles con la plantación estratégica de árboles), aporta biodiversidad, suma componentes positivos al paisaje y recursos para la recreación (Reyes Avilés y Gutiérrez Chaparro, 2010). Los espacios verdes de la ciudad aportan beneficios para la comunidad, además de los ambientales y materiales, los sociales están vinculados con la salud, el empleo, la recreación, la educación y estética (Sorensen et al., 1998). El valor total global de los servicios provistos por las áreas costeras y los humedales continentales ascienden a 17.5 trillones de dólares por año, lo que corresponde a 52% del valor total de servicios provistos por el conjunto de todos los ecosistemas del planeta. Durante el siglo XX los humedales han sido considerados tierras improductivas y focos de generación de enfermedades. Esta perspectiva ha 51 fundamentado su drenado, rellenado, y también la derivación de cursos de agua para permitir ganar tierras para usos terrestres (agropecuarios, forestales, zootécnicos o urbanos) o usos exclusivamente acuáticos (represas, acuicultura) (Kandus et al., 2011). Una de las principales causas de degradación de la calidad de los cuerpos de agua superficial son las cargas de sedimentos y de nutrientes transportados por el escurrimiento superficial proveniente de áreas agrícolas. Una de las últimas barreras de protección de los tributarios de una cuenca es la presencia de franjas de vegetación ribereña y de humedales. Ambos retienen y reducen la carga de sedimentos y nutrientes del escurrimiento superficial, y conservan o mejoran la calidad del agua. La eficacia de filtrado es sitio-específica y depende tanto de características propias de los filtros como de las áreas colectoras que determinan la cantidad de escurrimiento y sedimentos (Orúe et al., 2011). Reservorios de los picos de precipitaciones en cuencas urbanas integrados como reservas naturales urbanas cumplen un rol similar en el contexto de la ciudad. Aquí el agua además aporta basura y tóxicos contaminantes, cuyo filtrado es posible de cuantificar en un balance de calidad del torrente ingresante y el fluyente hacia un colector fluvial. En todos los casos es interesante reconocer los actores causantes del aporte adicional de sedimentos y tóxicos, aquellos que son responsables de las lagunas y vegetación ribereña que ayuda a su filtrado y los que se benefician aguas abajo. Es sorprendente el panorama diverso de escalas administrativas en juego (municipios, provincias, nación) y niveles socioeconómicos de los actores, todos interrelacionados en una trama durante mucho tiempo invisible que sólo graves problemas ambientales permiten su emergencia social, con todavía una incipiente respuesta en su manejo racional integrado. Las demandas para valuar bienes y servicios ecológicos han aumentado de forma exponencial durante el siglo XXI en respuesta a un agravamiento de los problemas ambientales del planeta, y a una opinión pública cada vez más sensibilizada acerca de su valor (Viglizzo et al., 2011). 52 3.3. Árbol de problemas En el contexto de la planificación de reservas naturales, se entiende por problema (aspectos negativos actuales) a un acontecimiento, hecho, situación negativa o dificultad que afecta los valores de conservación o expresado de manera más general, la conservación y el desarrollo del área protegida y su entorno (Administración de Parques Nacionales, 2010). Como parte del diagnóstico del área se trabajó en la confección de “árboles de problemas” teniendo como referencia los valores de conservación del área. Los problemas observables en el terreno se colocan en el medio, a la izquierda se suman las causas y a la derecha sus consecuencias. Con flechas se indican las relaciones “causa-efecto” de los problemas. Las consecuencias permiten comprender mejor la dimensión o el impacto de los problemas detectados. Las causas ayudan a comprender las fuentes de los problemas y deberían ser los puntos para focalizar las soluciones. Para la formulación de los “árboles de problema” se realizaron dos talleres, 2 de agosto de y 7 de septiembre de 2016, con la participación de 29 actores (ver Anexo 2). Los resultados de ambos talleres se pueden sintetizar en tres gráficos temáticos: basura, aspectos sociales y ambientales ( Figura 28 a Figura 30). Figura 28. Árbol de problemas vinculados con la basura en la Reserva Natural Urbana del Oeste, Santa Fe. Elaborado por C. Berón. 53 La problemática que queda a la vista muestra cierta complejidad porque no contamos con un punto de partida en el terreno (la reserva no está instrumentada) y se aprecia que las soluciones demandan en buena medida un trabajo más allá de sus límites, a una escala de ciudad. Figura 29. Árbol de problemas vinculados a temas sociales en la Reserva Natural Urbana del Oeste, Santa Fe. Elaborado por C. Berón. Figura 30. Árbol de problemas de temas ambientales en la Reserva Natural Urbana del Oeste, Santa Fe. Elaborado por C. Berón. 54 3.4. Actores y su vinculación con la Reserva Se usa la técnica del Diagrama de Venn6.Para definir qué tamaño, color o posición se le asigna a cada actor, se presentan a continuación los siguientes criterios: Tamaño (Nivel de Poder): Define la cantidad de poder que tiene el actor sobre las decisiones o acciones de gestión en torno al área protegida, siendo los más grandes los más poderosos de tal forma que tienen la capacidad de modificar decisiones de gestión. Los de tamaño medio, tienen una relación de poder que les permite influir en las decisiones del área protegida, sin que necesariamente tengan el poder de cambiar decisiones de gestión. Los que tienen un tamaño pequeño tienen poca o nula influencia en las decisiones de gestión. Color (Enfoque de su accionar): El color define el sentido con la que han usado su poder en los últimos 5 años, siendo los de color rojo aquellos que lo han usado de forma que dificultan o significan una barrera para conseguir los objetivos de creación del área protegida. Los verdes son aquellos cuyo poder se ha usado de forma positiva en relación con los objetivos de creación del área protegida. Los amarillos son aquellos que a veces lo usan de forma positiva y en otras de forma negativa (llevan un “+ -“) o que simplemente no ejercen su poder en ningún sentido en particular. Posición (Relación con el territorio): La posición define qué tan directa es la relación entre el actor y el área protegida. Los que están en el círculo central, tienen una relación directa, de forma que sus actividades influyen o son influidas de forma directa por lo que pase en el área protegida. Los que están en el anillo del medio, tienen una relación indirecta, generalmente por medio de los que están en el círculo del centro o por otras vías, pero igualmente se ven afectados o afectan lo que pase en el área protegida. Los que están en el área externa a los anillos, tienen una relación de una forma muy indirecta, de forma tal que aun cuando existe, casi no es perceptible para la gestión del área y viceversa. Sectores y actores sociales definidos Se definieron 32 actores que integran y sectores claves de la comunidad (ver Cuadro 3). En el Diagrama de Venn (Figura 31) se puede observar su vinculación (Directa / Indirecta / Sin relación), poder (grande, medio, pequeño) y enfoque del accionar (positivo, neutro, negativo). No incluimos tres sectores que podrían tener un rol en futuras ediciones del plan de gestión: Guías de turismo, Medios de comunicación y Empresas. Tampoco figuran dos actores del gobierno nacional que suelen estar vinculados a algunas áreas naturales protegidas: Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y Sistema Federal de Manejo de Fuego. Basado en Administración de Parques Nacionales. 2015. Plan de gestióndel Parque Nacional Río Pilcomayo 2016-2021. Laguna Blanca y Puerto Iguazú, 243 páginas. 6 55 Podemos apreciar: El sector social con mayor cantidad de actores es el Municipio, representado por gran diversidad de reparticiones. Con tres a seis entidades ubicamos un segundo grupo de actores de los sectores gobiernos nacional y provincial, académico, comunidad y organizaciones no gubernamentales. El accionar se reparte entre positivo y neutro. No se considera que haya actores que tengan un accionar negativo hacia la reserva. El poder está concentrado en el Municipio (los únicos tres actores con poder grande y nueve mediano); en un segundo orden hay cuatro sectores con 2-3 mediano poder: comunidad, gobierno provincial, académico y organizaciones no gubernamentales. El análisis de los actores nos permite comprender la etapa fundacional de la reserva, donde aún no hay un organismo administrador y el poder de la gestión está repartido principalmente entre diversas oficinas municipales. En concordancia con ello, la vinculación con empresas y medios de comunicación está absorbida por las respectivas reparticiones municipales y por lo tanto estos actores no figuran. Otro aspecto que denota el período inicial de la reserva es el accionar. Por un lado la falta de emergencia o visualización de la reserva en el terreno facilita la calificación de un accionar neutro de muchos actores. Ello refleja indiferencia o falta de comprensión. Algunos de los actores considerados “neutros” como los vecinos del sector Comunidad en realidad alcanzan esa situación intermedia por la combinación de acciones positivas y negativas. El sector que evidencia mayor comprensión y compromiso con el proyecto está en Organizaciones no gubernamentales, dado que su esencia o sentido de existencia está vinculado a los objetivos del área (aspectos conservacionistas y sociales). La Argentina tiene una gran variedad de áreas naturales protegidos y entidades administradoras (gubernamentales, privadas). Las provincias y municipios que incluyen la gestión de reservas naturales en organismos que abarcan un gran arco de temas ambientales con frecuencia las dejan en una segunda prioridad ante la irrupción de situaciones de gran impacto comunitario, como basura, poda del arbolado de alineación y mantenimiento de plazas. En otros casos las áreas protegidas son administradas por reparticiones con fines de producción agropecuaria, forestal y/o turísticos, donde además de quedar relegadas pueden surgir conflictos de intereses que las perjudiquen. Los mejores ejemplos los encontramos cuando son administradas por oficinas específicas con autonomía y respaldo explícito en presupuesto y/o jerarquía en el organigrama. Posiblemente el mejor estudio de caso de la superación de una etapa fundacional en la administración de áreas protegidas en la Argentina lo encontramos en el sistema de parques nacionales. El inicio está dado por la donación de tierras del Perito Francisco Moreno en 1904, uno de los pioneros en el mundo cuando muy pocos países tenían parques nacionales. El Parque Nacional del Sud que abarcaba el terreno donado por Moreno se crea en 1922. Dos años después se crea una Comisión para impulsar este parque. Durante la gestión de Exequiel Bustillo como líder de la comisión se consolidan los primeros pasos para instrumentar los parques nacionales argentinos y en 1934 crea su organismo específico, hoy la Administración de Parques Nacionales. 56 ¿Cómo logra Bustillo pasar de una comisión ad-hoc integrada por voluntarios de la sociedad a conformar una repartición oficial autónoma? En primer lugar maduró una visión en boga en esos tiempos y le dio características propias: colonizar zonas despobladas y limítrofes a través de la creación de parques nacionales y su promoción turística. Integrante de la elite gobernante del momento, logró capitalizar sus contactos para fortalecer el proyecto. Tuvo un aliado clave que jerarquizó sus logros: su hermano Alejandro. De profesión arquitecto, comprendió la visión y la fortaleció con obras que tenían identidad propia, madurando así la imagen institucional. Fueron claves en esta etapa gestores locales y reparticiones de infraestructura que comprendieron y fortalecieron la visión de los parques nacionales argentinos7. Obviamente que las circunstancias son irrepetibles, pero la variada experiencia argentina en la temática nos puede ayudar para comprender mejor el momento que atraviesa la reserva natural urbana y las alternativas posibles hacia el futuro. Al realizar la programación del área, se repasa la ubicación de los actores en función de su vinculación con la reserva. 7 Ver Bustillo (1999) y Berjman y Gutiérrez (1988). 57 Figura 31. Vinculación de los actores con la Reserva Natural Urbana del Oeste. Elaborado por E. Haene. 58 Cuadro 3. Sectores y actores de la comunidad de la Reserva Natural Urbana del Oeste, Santa Fe. Elaborado por E. Haene. Abreviaturas: SC (Secretaría de Control), SDS (Secretaría de Desarrollo Social), SG (Secretaría de Gobierno), SHE (Secretaría de Hacienda y Economía), SOPyRH (Secretaría de Obras Públicas y Secretaría de Recursos Hídricos), SPU (Secretaría de Planeamiento Urbano). Sectores Actores Seguridad: Subsecretaría de Prevención y Seguridad Ciudadana-SG Intendencia – Secretaria General Dirección y Coordinación del Proyecto. Agencia de Cooperación, Inversiones y Comercio Exterior. Mensura: Subsecretaría de Economía-SHE – Dirección de Administración Territorial Diseño e instrumentación de infraestructura: Subsecretaria de obras de arquitecturaSPU; Secretaría de obras publicas Manejo hídrico de reservorios: Secretaría de Recursos Hídricos 1. Gobierno Municipal8 Control en autopista: Subsecretaría de Prevención y Seguridad Ciudadana-SG Cartelería en autopista (diseño e instalación): Vialidad Nacional o Provincial Asistencia social a vecinos de la Reserva: Subsecretaría de Acción Social-SDS Armado y aprobación de un plan de contingencia: Dirección de Gestión de Riesgo Cegado de césped, forestación, recolección de basura, producción de plantas para restauración, control zoonosis (perros): Subsecretaría del Ambiente-SDS 2. Gobierno Provincial 3. Gobierno Nacional 4. Académico/ científico/ escolar 5. Comunidades/ pobladores locales 6. Organizaciones no gubernamentales 8 Santa Fe Hábitat Agencia para el desarrollo social y urbano. Periodistas, comunicadores: Secretaria de Comunicación Coordinador de Distrito Oeste Áreas protegidas: Subsecretaría de Recursos Naturales, Ministerio de Medio Ambiente Dirección de Vialidad Provincial Servicio de Catastro e Información Territorial Secretaría de Ambiente y Desarrollo Sustentable de la Nación Vialidad Nacional Facultad Humanidades y Ciencias (Universidad Nacional del Litoral: UNL) Facultad de Ingeniería Química (UNL) Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas Instituto de Limnología del Litoral (INALI) Escuelas de la zona Jardines Municipales y Solares Iglesia San Pantaleón Agrupaciones vecinales Jockey Club de Santa Fe (campo de golf) Vecinos en general Empresas vecinas (Amiun, Yaguar) Fundación Hábitat & Desarrollo Movimiento Los Sin Techo Aves Argentinas Basado en http://www.santafeciudad.gov.ar/media/files/digesto/tema-134.pdf 59 3.5. Vacíos de información Se apuntan aquí tanto los aspectos que hay datos pero todavía no han sido incorporados en la redacción del plan, como aquellos otros que no cuentan con información suficiente, inclusive algunos que se podrán resolver durante la elaboración del plan de gestión. Los temas resultantes al finalizar la redacción del documento serán una guía para priorizar estudios en el lugar. Tabla 2. Datos que sumar y vacíos de información para la gestión de la Reserva Natural Urbana. Elaborado por E. Haene. Tema Vida silvestre Funcionamiento reservorio Historial de crecidas Para la restauración ambiental, es importante contar con información y sitios Estudios de vegetación y fauna de bajos representativos que puedan ser empleados salinos y humedales del Espinal regional como referencia para la región de la reserva natural urbana. Permitiría conocer mejor la situación destino a alcanzar en la restauración del bosque y monitorear los avances obtenidos Estudios de fauna del bosque de Espinal de localmente. Si alguna especie no puede la región repoblar el lugar por sus propios medios puede evaluarse su reintroducción una vez asegurados sus requerimientos ecológicos en el sitio, entre otros factores. Explicación de los pasos de cómo funcionan los reservorios hoy, sus dimensiones (superficie y profundidad en los diferentes momentos de la inundación, tiempo de Comprender cómo podrán integrarse las permanencia en cada nivel). Qué organismos comunidades bióticas con el funcionamiento están implicados y cuáles son los criterios de los reservorios. Detectar aspectos para tomar las decisiones (cuándo abrir necesarios para cambiar o ajustar para compuertas y cerrarlas). ¿Paso/sección de armonizar reservorio y biodiversidad. los conductos? ¿Pasan materiales como botellas plásticas o más grandes o hay algún filtro? Entender la cantidad y momento de Reservorios. Registro de los niveles de agua inundación, así como su posible impacto en alcanzado en los últimos años. la biodiversidad. Registro de los niveles del río Salado a la altura de Santa Fe Registro de los niveles del río Paraná a la altura de Santa Fe Croquis de la Reserva Utilidad Conocer las fluctuaciones naturales. Mapa o croquis de la reserva con niveles Comprender mejor la magnitud de la altos y bajos de agua; superficies bajo agua y dinámica hídrica y las superficies de las sin inundarse en cada momento. Perfiles de posibles comunidades bióticas destino. la Reserva, con y sin inundación. 60 Dinámica de la basura Origen de la basura que se observa en los reservorios, ¿alguien la retira o tiene interés de hacerlo? ¿Sirve la basura para reciclar? Detectar los infractores y multarlos. Agua Calidad de agua entrante y saliente a los reservorios. Autopista Cuáles son las competencias de manejo, poda y limpieza de pastos respecto a las zonas que bordean la circunvalación ¿Vialidad provincial, nacional? ¿Cuál es el límite fijo jurisdiccional? Instrumentar un sistema de monitoreo y multas para quien vuelca basura en el área de la Reserva. Analizar medidas de manejo de la basura. Si la basura es retirada en los reservorios y el agua que sale del sitio estuviera más limpia que la que entra, sería un servicio ambiental del área. Comprender posibles procesos de acumulación de materiales que llegan en suspensión. Evaluar impacto de calidad de agua en la biodiversidad. Integrar el manejo del espacio verde de la autopista vecina a la reserva, para priorizar el uso de plantas nativas y evitar las exóticas invasoras. 3.6. Desafíos Definir la estrategia institucional para instrumentar una Reserva Natural Urbana pionera a nivel municipal: 1) ¿Fundar un organismo autónomo capaz de administrar esta y futuras áreas? 2) O por el contrario, ¿coordinar con una estructura mínima la participación en la reserva de cada repartición temática de la Municipalidad? 3) O una intermedia, ¿contar con un organismo administrador de reservas con capacidad operativa propia, que requiera la intervención de otras reparticiones para trabajos puntuales, esporádicos o muy especializados? La alternativa 1 está inspirada en la Administración de Parques Nacionales; la 3 podría asemejarse a los organismos provinciales de áreas protegidas que cuentan con guardaparques y técnicos, infraestructura básica en cada sitio, movilidad y presupuesto operativo a escala de sistema y por área. ¿Hay otras variantes para analizar? ¿Qué ha pasado en tiempos recientes con instrumentación de temas nuevos en la Municipalidad? Ante la complejidad y magnitud del proceso de consolidación del área, definir una instrumentación en etapas que permita alcanzar resultados demostrativos en el corto plazo. Definir instancias prácticas de participación ciudadana. Su carácter pionero por la integralidad de su concepción y por su ubicación en la capital santafecina, brindan grandes posibilidades de convertir la Reserva Natural Urbana del Oeste en un modelo a seguir por otros municipios de la región. 61 4. Visión, misión, objetivos 62 Articulado con la caracterización y el diagnóstico, aquí definimos tres elementos cruciales de la reserva natural urbana: visión, misión y objetivos. Para definir esta parte del plan de gestión, nos basamos en el marco legal del sitio (1.4. Antecedentes del área protegida y categoría de manejo). Visión del área Nos describe la situación deseada, concreta, posible de visualizar por el lector como una pintura, una fotografía o una cámara que nos muestra un paisaje en vivo. En la gestión de un área natural protegida es fundamental para consensuar adónde queremos llegar. Debe ser clara y entendible para que además de un acuerdo de trabajo resulte una pieza clave en la comunicación de la reserva natural urbana. En un contexto técnico homogéneo, se puede definir la visión en una oración. Pero el plan de gestión está concebido para ser entendido por toda la comunidad de influencia, pues tienen derecho a conocer el patrimonio público en cuestión y opinar. Al momento de definir la visión de una reserva natural urbana, comprendemos la mayor parte de los habitantes de la ciudad han tenido pocas, ninguna o breves experiencias en áreas naturales protegidas. La naturaleza en la ciudad pasa a ser una situación novedosa. La experiencia en una plaza o parque urbano puede ser un acercamiento, pero no alcanza para comprender la verdadera magnitud del proyecto. Por ello preferimos hacer una visión amplia, detallada, a costa de caer en aspectos o seleccionar ejemplos que podrían ser subjetivos o personales, porque buscamos con un sentido didáctico que resulte palpable el concepto de reserva natural urbana. La Reserva Natural Urbana del Oeste mantiene funcionales dos reservorios del oeste de Santa Fe destinados a reducir los factores de riesgo de inundación por escorrentía de aguas pluviales. Al captar los excedentes de las precipitaciones cumple un servicio ambiental fundamental que beneficia a los pobladores de la Ciudad de Santa Fe. A su vez el predio, a través de un trabajo de restauración ambiental, puede conservar muestras representativas de la biodiversidad del valle del Salado y humedales característicos de la región, lo cual suma un paisaje singular en la ciudad, con valor estético especial. Sus atractivos naturales se combinan con el fácil acceso y la cercanía con los vecinos de Santa Fe para constituirse en un espacio recreativo y educativo diferente, cómodo, interesante, convocante, tranquilo, seguro, público, apto para actividades aeróbicas (caminar, correr, ciclismo). Nos ofrece un ambiente donde reencontrarnos con los sonidos, colores, formas y texturas de la naturaleza santafecina, dado que gran parte del entorno urbano actual tiene baja biodiversidad y abundan especies de otras regiones del mundo que no aportan identidad a la ciudad. En este marco natural tan singular se realizan experiencias breves pero inolvidables y, por su fácil accesibilidad, factibles de repetir varias veces en la vida de los ciudadanos. Resulta un lugar inspirador, ideal para desarrollar o inspirar obras artísticas (canciones, pintura, fotografía, poesías, entre otros). Aquí podemos descubrir y disfrutar la vida de los seres vivos (una mariposa que emerge de su capullo, el movimiento armónico del vuelo de una bandada de cuervillos de cañada, la apertura matinal de los pétalos de una flor) y las fascinantes interacciones que podemos apreciar aquí en directo: un picaflor se detiene en el aire para libar de una flor mientras deja granos de polen de otra flor y permite así una polinización, movimientos elegantes y acrobáticos de las aves durante su cortejo nupcial, el esmero de los pájaros para proveer de alimento nutritivo a su prole que le reclama desde el nido, la 63 salida cuidadosa de un cuis con sus crías para comer pasto tierno al descubierto. Es un lugar donde resulta protagonista la naturaleza y recibimos estímulos o facilidades para sensibilizarnos y prestar atención a detalles que en otro contexto obviaríamos, como el espectáculo del cielo al atardecer, la belleza del rocío sobre las hojas de las plantas cuando se iluminan con el sol, el placer que nos ofrece la sombra bien fresca de un árbol corpulento en una tarde calurosa y comprender así su valor. Aquí conceptualizamos con una mirada amplia el objetivo educativo del lugar, donde además de actividades didácticas también se generan oportunidades para sensibilizarnos y reflexionar con libertad. Así puntuales incentivos de materiales de comunicación e intervenciones del personal pueden conducir a analizar nuestro comportamiento diario y su vínculo con el ambiente. Será un sitio ideal para reuniones empresariales de reflexión, caminatas para la tercera edad, scouts, yoga; también realizar trabajos prácticos de estudiantes y estudios de investigadores locales. Una afluencia de público creciente podrá posicionar la Reserva como destino turístico que motivará el desarrollo económico del lugar. Por lo tanto, definimos como visión del área: Consolidar los reservorios destinados a reducir el riesgo de inundación; restaurar el área con flora autóctona y preservar la biodiversidad asociada característica de la región; contribuir y fortalecer las políticas de Gestión de Riesgo y Resiliencia de la ciudad de Santa Fe; sensibilizar y educar a la población sobre los riesgos hídricos y el cuidado del ambiente; y potenciar el área como un espacio de recreación y turismo. Misión del área Es el elemento jerárquico de más alto nivel en la planificación estratégica solamente influenciado por la categoría de manejo. Es la razón de ser del área protegida, lo que da sentido a su existencia. Es algo que no se espera alcanzar completamente, marca el horizonte, el norte, el rumbo del camino pero nunca llegamos a él. Definimos como misión del área: Consolidar un modelo de reserva natural urbana con un humedal que sirve como reservorio para captar los excedentes pluviales de la Ciudad de Santa Fe para disminuir el riesgo de inundación urbana. Objetivos del área Los objetivos son declaraciones de intenciones que responden a la pregunta “que” es lo que se quiere lograr en el corto y en el largo plazo (a través de: un plan, un programa). En el manejo de áreas protegidas, se habla de “objetos de conservación” definidos como aquellas entidades, características o valores que queremos conservar allí. Pueden ser tanto naturales como culturales, por ejemplo, especies, ecosistemas, sitios arqueológicos, tradición oral, entre otros (Administración de Parques Nacionales, 2010). Como objetivos de la Reserva Natural Urbana del Oeste definimos: Mantener en buen estado los reservorios destinados a reducir los factores de riesgo de inundación por escorrentía de aguas pluviales. Conservar un humedal con la biodiversidad característica de la región. 64 Conservar muestras de la naturaleza terrestre del Espinal típico de la cuenca del río Salado. Contribuir a las estrategias de conservación regionales, como corredores biológicos de la ciudad y su entorno. Recomponer y mantener paisajes originarios de la zona, sumando a la ciudad un valor estético especial. Constituir un escenario ideal para practicar restauración ambiental, manejo de flora y fauna, monitoreo de especies y comunidades. Mantener los valores que le han sido asignados a perpetuidad. Fomentar la relación del hombre de la ciudad con la naturaleza. Proveer sitios populares de educación ambiental y esparcimiento. Brindar oportunidades para investigación, capacitación y turismo. Facilitar la participación ciudadana en la gestión del territorio. 65 5. Zonificación 66 La zonificación de un área protegida consiste en una subdivisión interna de carácter funcional que ordena el uso del espacio y logra con mayor eficacia el cumplimiento de los objetivos de la unidad de conservación. Permite orientar, distribuir y regular los usos y actividades admitidas en el área según su categoría de manejo y objetivos (Administración de Parques Nacionales, 2002). Para realizar la zonificación empleamos las zonas de uso empleadas habitualmente en la Argentina (ver Cuadro 4), salvo la “zona intangible” porque no es de aplicación para una reserva natural urbana con el grado de intervención que requiere la analizada. Consideramos que hoy es factible conservar muestras representativas de la diversidad ambiental de la región en reservas más extensas fuera del entorno urbano, donde destinar fracciones importantes del predio a zona intangible. En ese sentido, una reserva urbana debe contribuir significativamente a tomar conciencia de la necesidad de crear o consolidar esas otras reservas naturales más grandes y silvestres. Al ubicar las dos zonas de uso público (intensivo y extensivo), buscamos que en ambas esté presente la diversidad ambiental de la Reserva. De esta pretendemos que los visitantes tienen derecho a disfrutar y valorar en forma directa la diversidad de recursos del predio. A su vez, el resguardo de muestras del conjunto de unidades en una categoría más restrictiva, como es la “extensiva”, garantiza el mantenimiento de los recursos con menores presiones de uso. Por el carácter de reserva urbana, donde la educación es su principal razón de ser, priorizamos la elección de la zona de uso intensivo y, por el carácter fundacional de reservorio de inundación, la Zona de aprovechamiento sostenible de los recursos; luego el resto de las zonas. Las zonas de amortiguación, donde la autoridad de aplicación de la reserva natural urbana no tiene una injerencia directa o central, es claramente una propuesta para consensuar. Dado que estamos en las etapas iniciales de instrumentación del área protegida, donde aún resta mucho trabajo por realizar con la comunidad vecina, consideraremos que será una de las líneas de acción de trabajo en los próximos años para alcanzar una definición más detallada. Se procura que los límites de las zonas de manejo sean de fácil ubicación en el terreno, a fin de facilitar su aplicación. Para cada sector se detalló: Objetivos para el establecimiento del sector, Motivos de su elección, Descripción del sector y Recomendaciones de manejo (normas). Este último punto, recopilado constituirá la normativa general del área. Como prohibiciones generales para toda la Reserva Natural Urbana del Oeste se toman en cuenta las establecidas en el artículo 17 de la Ley provincial 12175 del sistema santafecino de áreas naturales protegidas: a) Todo aprovechamiento que viole o se contraponga a las características y condiciones propias de las áreas naturales protegidas. b) La introducción de especies vegetales o animales no autorizadas por su condición, tipo o cantidad. c) La introducción de sustancias tóxicas o contaminantes que puedan perturbar los sistemas naturales o causar daños en ellos. 67 d) Cualquier acto susceptible de producir un daño o alteración innecesaria de los ambientes naturales o se contraponga a las disposiciones de esta Ley. Para cumplir con mayor eficiencia la diversidad de pautas establecidas en esta zonificación, es recomendable contar con planes de contingencia y de control y vigilancia. Dado que los fuegos en ambientes naturales requieren un tratamiento diferencial al de edificios como es usual en una ciudad, también es importante contar con un plan de manejo de fuego que cuente con personal estable (brigadistas) para mantener cortafuegos y otras medidas necesarias para evitar la propagación de incendios y lograr un ataque rápido a los focos. En la programación se desarrollarán estos temas. Ver Figura 34 y Figura 35. Zona de uso público intensivo Objetivos para el establecimiento del sector Brindar un espacio donde acceder de primera mano a los recursos con fines educativos, de recreación, esparcimiento y contemplación, contando con servicios para el visitante. La educación es uno de los fines esenciales de las reservas naturales urbanas. Motivos de su elección Tiene buen acceso por Gorostiaga. Se puede contar desde la vecindad con agua potable y electricidad, analizar alternativas para cloaca. Hay partes de terreno no inundable donde instalar áreas de servicios y picnic, y desde allí salir senderos por albardón-península que ingresa al espejo de agua y por los bordes de la laguna. Sería posible acceder libremente a muestras restauradas de bosque del Espinal, selva ribereña y laguna, la totalidad de las grandes unidades ambientales del área. Aquí están dadas las condiciones para contar con un centro de visitantes, donde contar con oficina de informes y muestra didáctica, dar charlas y resultar un refugio en días de lluvia, asegurando una vivencia básica independientemente de las condiciones meteorológicas. En un punto panorámico de la laguna (Reservorio 4) resulta ideal para ubicar un observatorio de aves que permita además constituirse en un sitio ideal para concretar reuniones tranquilas o generar charlas dentro de las visitas guiadas, por ello debería tener las dimensiones para albergar unas 15-20 personas (ver modelos en Figura 32 y Figura 33). Descripción del sector Ocupa la parte norte del Reservorio 4, entre la calle Gorostiaga, la autopista, una línea imaginaria hasta la calle Juan Manuel de Estrada. Recomendaciones de manejo (normas) o Horario de 9 a 19 en primavera-verano, y de 10 a 18 en otoño-invierno. o Dejar automóviles, motos y bicicletas en el estacionamiento. 68 o o o o o o o o o o Prohibida la música con reproductores de sonido. Prohibido el consumo de bebidas alcohólicas. Prohibido hacer fuego. Arrojar residuos fuera de los cestos de basura. No espantar la fauna, ni alimentarla. Prohibido cazar y pescar. No cortar plantas y/o flores. Prohibido el ingreso al espejo de agua. Prohibido el ingreso de perros, gatos y otros animales domésticos. No fumar. En el contexto de una reserva natural urbana modelo, para las zonas de uso público sería deseable contar con un plan educativo consensuado y aprobado e instancias de capacitación para los anfitriones del área (empleados, docentes, guías de turismo, voluntarios). Figura 32. Observatorio de aves en el Wetland Center (Londres). Se llega por un sendero consolidado (apto para sillas de ruedas y coches de bebe), donde la restauración ambiental incluye pastizales nativos del lugar que ayudan aquí para constituirse en barreras visuales reforzadas con unas vallas de madera, clave para no espantar las aves acuáticas al llegar al edificio. La construcción recrea una vivienda típica de los pueblos tradicionales de la región, donde ya se usaban techos verdes con hierbas suculentas. El observatorio pasa a ser un recurso didáctico en sí mismo, permitiendo que los visitantes puedan tener una vivencia adicional, al dimensionar el hogar de sus antepasados. Foto: E. Haene. 69 Figura 33. En Inglaterra hay gran experiencia en observatorios de aves. En la imagen uno en Rye House, una reserva de la Sociedad Real de Protección de las Aves, una de las organizaciones ambientales más antiguas y con mayor cantidad de socios en el mundo. En general están hechos de madera que brinda armonía con el entorno. Son sencillos pero prácticos. Ventanales horizontales brindan buena visibilidad pero dificultan ver desde afuera la silueta humana (adentro no se prende la luz durante el día), tienen bancos y una repisa donde apoyarse y dejar anotadores y guías. Son cómodos y permiten estar a resguardo de incomodidades climáticas (frío o calor, viento, lluvia). Pueden pensarse adicionalmente como aulas en sitios panorámicos, ideales para hacer un descanso con un grupo o una parada de reflexión y diálogo con los visitantes; en esos casos sólo haría falta ajustar las dimensiones y la cantidad de asientos. Foto: E: Haene. Zona de uso público extensivo Objetivos para el establecimiento del sector Brindar un espacio más silvestre y tranquilo que la zona intensiva, para conocer en caminatas el patrimonio natural de la región con guías habilitados. Motivos de su elección El sector tiene buen acceso desde Gorostiaga y diversidad ambiental, donde el visitante puede tener una vivencia complementaria a la de zona intensiva. Grupos pequeños con guías habilitados permitiría generar condiciones más favorables para observar fauna. Sería ideal contar aquí con facilidades para ello, como un observatorio de aves. 70 Está cerca de la zona de uso intensivo, del cual el visitante puede aprovechar servicios y comodidades que no encontrará en la zona extensiva. Descripción del sector Limita con la calle Gorostiaga, autopista y el predio del golf. Dispone de un entorno menos urbanizado en el sector sur del Reservorio 5. Hay amplios terrenos para ensayar restauración de bosques del Espinal, por donde diseñar un sendero, selva ribereña y laguna. La estrechez del reservorio sería ideal para ubicar un puente-pasarela para concretar una recorrida circular y tener acceso a puntos panorámicos interesantes. Recomendaciones de manejo (normas) o Horario de 9 a 19 en primavera-verano, y de 10 a 18 en otoño-invierno. Se cierra el acceso y evacúa el sitio en caso de lluvia. o Ingresar en grupos de menos de 20 personas con guía habilitado. o Caminar por los senderos marcados. o Dejar automóviles y motos en el estacionamiento de uso público intensivo. o Prohibida la música con reproductores de sonido. o Prohibido el consumo de bebidas alcohólicas. o Prohibido fumar y hacer fuego. o Arrojar residuos en los cestos de basura. o No espantar la fauna, ni alimentarla. o Prohibido cazar y pescar. o No cortar plantas y/o flores. o Prohibido el ingreso al espejo de agua. Zona de Uso Operativo Objetivos para el establecimiento del sector Disponer de un lugar seguro para el trabajo de los operarios de mantenimiento y administración del área y el depósito de sus vehículos y maquinarias. Aquí deben tener su base de operaciones empresas contratadas, guardias de vigilancia (guardaparques, policías, bomberos), entre otros. Debe contemplarse la ubicación de los equipamientos para control inicial de incendios y separación y retiro de basura. Motivos de su elección 71 Permitir un acceso fácil a los trabajadores del área sin interferir la tranquilidad de los sectores para visitantes. Descripción del sector Ocupa un sitio alterado, en una esquina donde hay un galpón de material. Está vecino a la zona de uso público intensivo por lo cual puede compartir las instalaciones de agua potable, electricidad y cloacas. Recomendaciones de manejo (normas) o o o o Accesible para personal y vehículos autorizados. No fumar. Prohibido el ingreso de público. Prohibido el ingreso de animales domésticos. Zona de aprovechamiento sostenible de los recursos Objetivos para el establecimiento del sector Cumplir dos objetivos fundacionales de la Reserva: funcionar como reservorio para captar los picos de inundación de la ciudad (fin esencial del lugar) y desarrollar huertas orgánicas comunitarias. Motivos de su elección Se ubica en dos sectores: 1. Reservorios: espejos de agua. 2. Huertas: predio al norte de la Reserva entre autopista, calle Hernandarias y espejo de agua del Reservorio 5. Descripción del sector 1. Reservorios: Son los espejos de agua artificial, que se continuarán dragando. 2. Huertas: Terreno de relleno empleado como basurero que se convierte en huerta, accesible a los vecinos del barrio Domingo Sarmiento. Recomendaciones de manejo (normas) 1. Reservorios: o Prohibido el ingreso de público. 72 2. Huertas: o Habilitado en los horarios a determinar para los vecinos registrados. En el contexto de una reserva natural urbana modelo, sería fundamental contar con un manual de buenas prácticas de la huerta y el reservorio. Zona de amortiguamiento Objetivos para el establecimiento del sector Reducir los impactos negativos del entorno. Motivos de su elección Abarca cuatro sectores: 1. Valle de inundación del río Salado, permite contar con un refugio silvestre cercano, fuente de especies y ejemplares. 2. Autopista, fuente de ingresos clandestinos y atropellamiento de fauna, su inclusión permitiría favorecer la concientización de las personas que circulan por allí y acordar medidas con los organismos administradores. 3. Campo de Golf-Hipódromo, espacio verde privado, que actúa como protección física de la reserva y podría reducir al mínimo sus impactos negativos y potenciar los positivos. 4. Cuenca urbanizada, fuente de intrusos, animales domésticos y basura que ingresan furtivamente. Son los beneficiarios más directos de la instrumentación de la reserva y podrían cumplir roles claves en su conservación. Descripción del sector 1. Valle de inundación del río Salado: Incluye el lecho del río y sus playas inundables, con parches de vegetación silvestre. 2. Autopista: Trazado vial y jardinería en su entorno. 3. Campo de Golf-Hipódromo: Parque con césped y forestaciones. 4. Cuenca urbanizada: Incluye barrios vecinos a la reserva. Recomendaciones para la articulación del área protegida con actores externos: 1. Valle de inundación del río Salado 73 o Crear una reserva provincial. 2. Autopista o Emplear con plantas nativas. o Trabajar coordinadamente con la reserva en la prevención y manejo del fuego. o Colaborar con la toma de conciencia de la reserva y disminuir vandalismo. 3. Campo de Golf-Hipódromo o Convertir los espacios verdes en reserva privada, compatible con sus fines fundacionales. o Emplear plantas nativas. o Integrar programas de control de exóticas y vigilancia con la Reserva. 4. Cuenca urbanizada o Generar acuerdos espaciales con la administración de la Reserva para generar bordes amigables que combinen paseos públicos con miradores en puntos panorámicos y circuitos educativos. o Emplear plantas nativas en veredas y plazas, incentivar en jardines privados. o Hacer un trabajo integral de manejo responsable de mascotas, para evitar su ingreso a la Reserva. o Priorizar proyectos de reciclado de basura y su manejo óptimo. Figura 34. Zonificación de la Reserva Natural Urbana del Oeste, Ciudad de Santa Fe. Elaborado por E. Haene. 74 Figura 35. Zona de amortiguación propuesta para la Reserva Natural Urbana del Oeste, Ciudad de Santa Fe. Elaborado por E. Haene. Cuadro 4. Zonas de uso para emplear en la Reserva Natural Urbana del Oeste. Fuente: adaptado de APN (2002) Zona de Uso Público Contiene atractivos naturales y/o culturales que se consideran aptos y compatibles con la visita y disfrute público, sin comprometer su conservación o persistencia. Abarca dos tipos: Zona de Uso Público Extensivo Permite el acceso del público con guía habilitado, de forma tal que las actividades y usos aceptados causen un impacto mínimo a moderado sobre el ambiente, los sistemas o componentes naturales o culturales. En materia de infraestructura sólo se admite la construcción de facilidades mínimas y de bajo impacto como senderos, miradores, observatorios de aves. Zona de Uso Público Intensivo Acepta la mayor concentración de público visitante y actividades de más alto impacto compatibles con los objetivos de conservación de la unidad. Se admite la construcción e instalación de servicios de mayor envergadura para la atención de los visitantes, como centros educativos, estacionamientos, proveedurías, bares. 75 Zona de Uso Operativo Destinada a usos diversos relacionados con la infraestructura necesaria para la administración y el funcionamiento del área protegida. No está habilitado el ingreso de público sin un permiso especial. Es de escasa superficie y los usos en general implican niveles medios a altos de modificación ambiental. Tienen instalaciones administrativas e infraestructura de servicios incluida la red vial, como por ejemplo seccionales y destacamentos de guardaparques, Intendencias, talleres de mantenimiento, estacionamiento para el personal y maquinaria, Estaciones Biológicas, áreas destinadas al tratamiento de efluentes o tratamiento de residuos. También se denomina “zona de uso especial”. Zona de aprovechamiento sostenible de los recursos Admite asentamientos humanos y usos extractivos de los recursos naturales, además de los usos restantes. En una reserva natural urbana puede corresponder a viveros y huertas. Zona de amortiguamiento Puede ser parte de la unidad de conservación o externa a sus límites. Es una zona de transición entre un área protegida y su entorno no protegido. En ella se actuará con criterios de participación y concertación en relación con los habitantes locales, tendientes a la interacción gente-recursos en el marco de un uso sostenible de estos últimos. Es decir, la funcionalidad de esta zona es la de integrar el desarrollo con la conservación de los recursos naturales y culturales, en el marco del desarrollo sostenible. En los casos en que la zona de amortiguamiento se delimite externamente al área protegida, la actuación de la Intendencia debe ser en términos de concertación y acuerdos con los particulares y con las autoridades provinciales, municipales y organismos nacionales que estén involucrados. Con éstas, deberá procurarse la firma de convenios para instrumentar la zona de amortiguamiento, ya sea estableciendo medidas regulatorias específicas o mediante la creación de reservas provinciales. La instrumentación de una zona de amortiguamiento es tanto más necesaria cuando se trata de áreas protegidas medianas o chicas y sobre los flancos del área protegida en los que existen problemas y amenazas serias. 76 6. Programación 77 Este apartado desarrolla el componente propositivo del plan, es decir lo que se plantea hacer durante su vigencia. Consta de los objetivos del plan, las estrategias para desarrollarlos y los proyectos y actividades para ejecutar las estrategias. Esta sección propositiva se fundamenta en el análisis realizado en la caracterización y el diagnóstico y en los valores y objetivos de conservación (Administración de Parques Nacionales, 2010). Objetivos del plan Los objetivos del plan de gestión definen el alcance del plan y responden a la pregunta ¿cómo queremos que sea la situación del área protegida una vez que el plan se haya ejecutado? Son objetivos que mejoran o se adaptan en líneas generales a las limitaciones existentes (recursos humanos y financieros, capacidad de gestión, entre otros) o que plantean incrementos lógicos en el plazo de vigencia del plan. No deben ser vagos ni ambiciosos, deben poder ser desarrollados en el periodo de vigencia del plan y deben ser evaluables y cuantificables mediante indicadores (ver Evaluación y seguimiento). Los objetivos del plan de gestión deben estar claramente definidos, ser concretos, realistas y coherentes con su alcance geográfico y temporal. Un buen mecanismo para hacer esto, es direccionar el diagnóstico para que defina los grandes desafíos o retos que tiene el área protegida en el futuro, estos luego se priorizan y aquellos desafíos priorizados se transforman en objetivos (Administración de Parques Nacionales, 2010). Definimos como objetivo del presente plan de gestión “guiar y facilitar la etapa inicial/ fundacional de la Reserva Natural Urbana del Oeste para lograr instrumentar el proyecto”. Estrategias del plan Es la declaración sobre el rumbo a seguir para cambiar de la situación actual a la deseada. La estrategia responde a la pregunta “como” se llevaran adelante los objetivos del plan (Administración de Parques Nacionales, 2010). Como insumo esclarecedor para analizar estrategias, y luego los proyectos y su cronograma, formulamos en base a los puntos anteriores un “Árbol de soluciones” o cadenas de resultados (ver Figura 36). Allí quedan en el extremo inicial de las soluciones el ítem “La Municipalidad comprende el valor del área, sus beneficios y le asigna los recursos necesarios para su funcionamiento”, que pensamos desencadenante del resto del proceso, y como resultado final “La Reserva cumple su misión”. La ubicación del Municipio es acorde con lo detectado en el análisis de actores. 78 Figura 36. Árbol de soluciones de la Reserva Natural Urbana del Oeste. Elaborado por E. Haene. Podemos considerar al Gobierno Provincial y a la Comunidad de influencia con un rol doble o de ida y vuelta: son dos componentes básicos o iniciales del proceso de instrumentación del área (podrían funcionar como presiones para que la Municipalidad actúe) y a la vez son aliados que el Municipio puede contar para mejorar/ampliar su labor en la reserva. Los problemas detectados a escala de ciudad (ver Árbol de problemas) se consideran resueltos en el ítem “Otras reparticiones municipales integran su labor con los fines de la Reserva”. En los árboles de problemas y en otros puntos del diagnóstico aparece la falta de visualización y/o instrumentación de la Reserva como un problema básico. La superficie del área y la magnitud de los problemas tornan que su instrumentación completa sería costosa y llevaría varios años. Por ejemplo, el London Wetland Centre tiene 30 hectáreas, fue inaugurado en el 2000 y demandó más de nueve años su planificación e instrumentación. Recordemos que la entidad que realizó y administra este emprendimiento es la Wildfowl & Wetlands Trust patrocinada por la Reina Elizabeth II y presidida por el príncipe Carlos. En este contexto se pueden plantear tres estrategias: A) Digitalizar y disponer el documento del Plan de Gestión abierto a consulta pública para promover la participación ciudadana y cumplir con la etapa de revisión y corrección. 79 B) Desarrollar una campaña educativa a escala de la Ciudad de Santa Fe para generar conciencia del valor de la Reservas Natural Urbana del Oeste. Con ello se puede tener como resultado esperado mayor participación en el desarrollo de la Reserva, lo cual implicará mejor posicionamiento y asegurar continuidad. C) Consolidar lo antes posible un organismo administrador y en la repartición más razonable, para visibilizar la iniciativa en el organigrama municipal y afianzar su incorporación al quehacer habitual de la Ciudad. Proyectos y actividades9 Los proyectos son conjuntos de actividades con objetivo/s en común, un tiempo determinado y producto/s concretos. Tomamos la propuesta de programas y subprogramas de la Administración de Parques Nacionales (Cuadro 5) y en función de los puntos anteriores completamos con metas y proyectos para la Reserva Natural Urbana del Oeste en la medida que resulte pertinente. Uno de los primeros aspectos que vuelve a estar a la vista en esta etapa es la limitación de abordar en los próximos tres años la totalidad de los ítems expuestos a lo largo del plan de gestión. De allí la importancia de haber definido un objetivo del plan. Para explicitar mejor esta situación se plantea un grado de cumplimiento de los proyectos con los problemas detectados. En los programas se definen sus indicadores que deben ser: A). Medibles: puede registrarse y analizarse en términos cuantitativos o cualitativos. B). Precisos: es definido del mismo modo por todos. C). Consistentes: no cambia en el tiempo, de modo que la medida siempre es la misma. D). Sensibles: cambia proporcionalmente de acuerdo a los cambios efectivos del atributo o el rubro medido. E). Simples: se prefiere los indicadores simples a los complejos. Definimos 18 proyectos para los primeros tres años de la Reserva (ver Cuadro 5 y Cuadro 6). 9 Basado en Administración de Parques Nacionales (2010) 80 Cuadro 5. Esquema de la programación de la Reserva Natural Urbana del Oeste Programa 1. Operaciones Subprogramas Metas 1.1 Administración Una oficina con personal, equipos y presupuesto permite gerenciar la Reserva. Incluye articular con prensa de la Municipalidad10. 1.2 Obras y Mantenimiento La Reserva cuenta con una zona de uso público intensivo de dos hectáreas. 1.3 Control, Fiscalización y Emergencias La integridad de las personas y recursos del área está garantizada. No se registran nuevas intrusiones en el área. Proyectos Repartición municipal de la Reserva Instalaciones para personal y visitantes Mantenimiento y limpieza Seguridad Prevención y emergencias de salud Manejo del fuego Recepción visitantes 2. Uso Público 2.1 Interpretación Ambiental La Reserva cuenta con una zona de uso público intensivo de cuatro hectáreas. Senderos interpretativos Centro de visitantes Actividades personalizadas 3.1 Investigación y Monitoreo 3.2 Protección y Recuperación 3. Conservación y Uso Sustentable del Patrimonio Natural y Cultural 3.3 Uso Sustentable 3.4 Asentamientos Humanos 10 El área es un centro de investigación Investigación Están disponibles las plantas para uso intensivo y restauración Vivero de plantas nativas La Reserva cuenta con ambientes en recuperación. Se instrumenta un modelo de área de amortiguación en los bordes de la zona de uso intensivo. Los reservorios están integrados a la gestión general de la Reserva Los vecinos tienen un espacio para aprender a producir hortalizas. Los pobladores que ocupaban el predio han sido reubicados. Restauración ambiental Arbolado en el área de amortiguación de la zona de uso intensivo Manejo de reservorios Huerta comunitaria Pobladores En próximos períodos, puede contemplarse un proyecto específico de prensa. 81 Repartición Instalaciones Mantenimiento Seguridad Emergencias Fuego Recepción Senderos Centro visitantes Act. personalizadas Investigación Vivero Restauración Arbolado vecino Reservorios Huerta Pobladores Cuadro 6. Articulación de soluciones y proyectos de la Reserva Natural Urbana del Oeste. Los ítems se resumen en pocas palabras. Referencias: ++ (alta), + (media), 0 (nula). 0 0 0 0 0 0 0 0 + + 0 0 0 0 0 0 0 + + + + + + + + + + + + + 0 + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + 0 + 0 0 + + + + + + 0 0 0 0 + 0 0 0 0 + 0 + 0 + 0 + + + La Reserva forma parte de un sistema de áreas protegidas (corredor biológico) 0 0 0 0 0 0 + + + 0 0 0 0 0 0 0 0 Acuerdos con los vecinos + 0 + 0 + + 0 0 0 + 0 0 0 + 0 + + Hay un organismo para la Reserva La Reserva tiene comodidades y servicios para visitantes Los reservorios funcionan con eficiencia y su manejo es armonioso con la Reserva + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + + 0 0 0 0 0 + 0 + 0 0 0 0 0 0 + + + 0 0 0 0 + + 0 0 0 0 + 0 0 + 0 0 + + 0 + 0 + + 0 0 0 + 0 0 + 0 + + 0 0 0 0 + + + + + + 0 + + 0 0 + 0 0 + 0 + + 0 0 0 0 + + + + + + 0 + 0 0 + + 0 + + + + + + + + + + + + + + + + 0 0 + + 0 Proyectos Soluciones El Gobierno Provincial instrumenta una reserva en el valle del río Salado Otras reparticiones municipales se integran con la Reserva La Municipalidad comprende el valor del área, sus beneficios y le asigna los recursos La comunidad participa en la gestión de la Reserva El área de amortiguamiento evita problemas y aumenta superficie conservada Se mantienen en buen estado de conservación muestras de la biodiversidad regional La restauración ambiental se cumple con éxito La comunidad aprovecha la Reserva y comprende su importancia 82 Algunas soluciones planteadas tendrían poco desarrollo como “El Gobierno Provincial instrumenta una reserva en el valle del río Salado”, “La comunidad participa en la gestión de la Reserva”, “La Reserva forma parte de un sistema de áreas protegidas (corredor biológico)” y “El área de amortiguamiento evita problemas y aumenta superficie conservada”. En este ciclo 2017-2020 de proyectos se concentran esfuerzos en los aspectos más básicos para alcanzar una instrumentación primaria. Cuadro 7. Cronograma de proyectos de la Reserva Natural Urbana del Oeste 2017-2020. 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 Pobladores 1 1 Huerta 1 1 Reservorios 1 1 Arbolado vecino 1 Restauración 1 Vivero 1 Investigación 1 Act. personalizadas 14 1 Centro visitantes 3 1 Senderos 1 1 Recepción 13 Fuego 2 Emergencias 1 Seguridad 10 Mantenimiento Repartición 1 Instalaciones Año Total proyectos/año Proyectos 1 1 1 1 1 1 En base al cronograma (Cuadro 7), se pueden hacer ajustes a los períodos de ejecución de los proyectos. En una reserva natural urbana se requieren cuidados especiales para su manejo general, diferentes a los habituales en el resto de la ciudad. Para documentar aprendizajes y generar pautas consensuadas, se plantean en varios proyectos la elaboración de manuales de buenas prácticas, reglamentos y planes temáticos. Este tipo de trabajos complementarios al plan de gestión son claves para facilitar y guiar el día a día del lugar, evitando problemas y discusiones permanentes. Es fundamental para sumar nuevos actores e idealmente deberían figurar como anexos en los acuerdos y contratos. 83 Proyectos 2017-2020 de la Reserva Natural Urbana del Oeste Nombre del proyecto: 1. REPARTICIÓN MUNICIPAL DE LA RESERVA Objetivo del proyecto: Prioridad: Organizar la repartición que permitirá un gerenciamiento inicial de la Reserva. Alta Media Baja X Meta que atiende: Una oficina con personal, equipos y presupuesto permite gerenciar la Reserva. Estrategia que ejecuta: Consolidar lo antes posible un organismo administrador y en la repartición más razonable Período de ejecución: Departamento responsable del proyecto: Año 1 Año 2 X X Año 3 Secretaría de Gobierno/ Coordinación Proyecto Reserva Natural Urbana Actores claves que deben ser incorporados como Observaciones: aliados estratégicos del proyecto: El personal destinado a la Reserva, incluyendo también empresas y otras reparticiones municipales, debe contar con alternativas para comprender el valor y uso especial del sitio. Un reglamento de personal debe tener estas pautas, por ejemplo explicar por qué no se debe fumar aquí. Resultados/ Acciones requeridas para implementar el Indicador que el resultado/acción se logró exitosamente: proyecto: Fundamentar la creación de la repartición y su ubicación en el organigrama municipal. Decreto firmado. Elaboración de perfiles y funciones del personal Documento consensuado y aprobado. Selección y asignación del personal Personal en funciones. Plan operativo anual de la Reserva Plan aprobado. Presupuesto anual de la Reserva. Presupuesto asignado y ejecutado. Ejecución tareas, incluye evaluación y seguimiento. Generar noticias con los avances y articular con la repartición municipal de prensa. Memoria del plan operativo anual 84 Nombre del proyecto: 2. INSTALACIONES PARA PERSONAL Y VISITANTES Objetivo del proyecto: Prioridad: Dotar de la infraestructura y mobiliario necesario para habilitar el primer módulo de la reserva natural urbana. Alta Media Baja X La Reserva cuenta con una zona de uso público intensivo de dos hectáreas que incluye ingreso, servicios básicos para el personal y visitantes, vivero de plantas nativas, senderos interpretativos y un observatorio de aves. Meta que atiende: Estrategia que ejecuta: Período de ejecución: Año 1 Departamento responsable del proyecto: Año 2 Año 3 X Secretaría de Planeamiento urbano Actores claves que deben ser incorporados como Observaciones: aliados estratégicos del proyecto: Es fundamental mantener un estilo propio del lugar que permita apuntalar la vivencia de reserva natural urbana. Las instalaciones no deben competir con el protagonismo de la naturaleza. Como etapa inicial debe redactarse un protocolo de evaluación de impacto ambiental y buenas prácticas de obra para ensayar en el proyecto y obtener al final una versión corregida incorporando los aprendizajes. Resultados/ Acciones requeridas para implementar el Indicador que el resultado/acción se logró exitosamente: proyecto: Anteproyecto consensuado Documento Proyecto aprobado Documento Borrador de evaluación de impacto ambiental y buenas prácticas de obras Documento Financiamiento adjudicado Resolución administrativa Ejecución y monitoreo Memoria de obra terminada Protocolo corregido de evaluación de impacto ambiental y buenas prácticas de obras Documento aprobado. 85 Nombre del proyecto: 3. VIVERO DE PLANTAS NATIVAS Objetivo del proyecto: Prioridad: Producir las especies necesarias para cubrir las necesidades de la restauración ambiental del predio y de los sectores de uso público intensivo. Meta que atiende: Alta Media Baja X Están disponibles las plantas para uso intensivo y restauración ambiental. Estrategia que ejecuta: Período de ejecución: Departamento responsable del proyecto: Año 1 Año 2 Año 3 X X X Actores claves que deben ser incorporados como Observaciones: aliados estratégicos del proyecto: Resultados/Acciones requeridas para implementar el Indicador que el resultado/acción se logró exitosamente: proyecto: Pautado de necesidades edilicias, equipos y Documento elaborado. materiales para funcionar. Inauguración de las instalaciones del vivero. Obtención de los ejemplares para iniciar la multiplicación. Instalación de canteros semilleros. Inventario y memoria del Plan operativo Cantidad de especies e individuos obtenidos. Producción de plantas nativas. 86 Nombre del proyecto: 4. RECEPCIÓN VISITANTES Objetivo del proyecto: Prioridad: Generar las condiciones para que los visitantes entiendan las pautas del lugar, la oferta de actividades y la importancia del área. En la primera etapa, el público destino estratégico serán los responsables de las reparticiones municipales vinculados con la Reserva. Meta que atiende: Alta Media Baja X La Reserva cuenta con una zona de uso público intensivo de cuatro hectáreas. Estrategia que ejecuta: Período de ejecución: Departamento responsable del proyecto: Año 1 Año 2 Año 3 X X X Personal de la Reserva (subsecretaría a definir). Actores claves que deben ser incorporados como Observaciones: aliados estratégicos del proyecto: Aquí se pueden considerar los medios que permiten incentivar la visita, orientarla, generar las expectativas correctas, a través de una página en la red, folletos, afiches, presencia en ferias y atención de consultas (correo electrónico, teléfono y otros). En el terreno habrá carteles informativos, normativos e interpretativos (fuera de los senderos); además de la portada de la Reserva y los ruteros para conducir a la entrada. Incluye redacción de reglamento de la Reserva donde se detalla también días y horarios de apertura, normas y recomendaciones. Resultados/Acciones requeridas para implementar el Indicador que el resultado/acción se logró exitosamente: proyecto: Elaborar plan educativo del área. Documento consensuado y aprobado. Instalar cartelería. Redactar reglamento y comunicarlo. Elaborar calendario anual de actividades ofrecidas y comunicarlo. Ejecutar otras acciones del plan educativo. Organizar e instrumentar oficina de informes. Recibir y contestar inquietudes, quejas y sugerencias del público. Llevar un registro de número aproximado de visitantes por día y contingentes. Carteles instalados. Documento del reglamento. Documento del calendario. Memoria del plan operativo anual. Estadísticas en la Memoria. 87 Nombre del proyecto: 5. MANTENIMIENTO Y LIMPIEZA Objetivo del proyecto: Prioridad: Mantener limpio el lugar y en condiciones adecuadas para el uso público la vegetación. Alta Media Baja X La Reserva cuenta con una zona de uso público intensivo de dos hectáreas que incluye ingreso, servicios básicos para el personal y visitantes, vivero de plantas nativas, senderos interpretativos y un observatorio de aves. Meta que atiende: Estrategia que ejecuta: Período de ejecución: Departamento responsable del proyecto: Año 1 Año 2 Año 3 X X X Subsecretaría de Ambiente Actores claves que deben ser incorporados como Observaciones: aliados estratégicos del proyecto: Pobladores locales que podrían ser incorporados en calidad de “guardareserva”. Hay un sistema de separación de basura que incluye cestos diferenciados para el público y personal y recolección. El material producido en el cegado de césped y poda se destina a la compostera. El reglamento de personal debe comunicar la importancia de la separación de residuos. La jardinería requiere un tratamiento respetuoso con la vida silvestre y un estilo diferencial de paisajismo que debe estar consensuado en buenas prácticas. Corte diferenciado de la banquina de la Av. Circunvalación. Resultados/ Acciones requeridas para implementar el Indicador que el resultado/acción se logró exitosamente: proyecto: Elaborar un manual de buenas prácticas del manejo Documento aprobado. de basura. Tener carteles normativos y cestos diferenciados. Inventario en Memoria del plan operativo Elaborar un manual de buenas prácticas del manejo Documento aprobado. de la vegetación en una reserva natural urbana. Instrumentar limpieza y jardinería. Memoria del plan operativo 88 Nombre del proyecto: 6. SEGURIDAD Objetivos del proyecto: Prioridad: Contar con un sitio seguro para los trabajadores y visitantes de la Reserva. Evitar intrusiones. Alta Media Baja X La integridad de las personas y recursos del área está garantizada. No se registran nuevas intrusiones en el área. Meta que atiende: Estrategia que ejecuta: Período de ejecución: Departamento responsable del proyecto: Año 1 Año 2 Año 3 X X X Secretaría de Gobierno - Programa de seguridad institucional. Actores claves que deben ser incorporados como Observaciones: aliados estratégicos del proyecto: Los agentes de seguridad incorporados deben participar y conocer el plan de control y vigilancia. Resultados/ Acciones requeridas para implementar el Indicador que el resultado/acción se logró exitosamente: proyecto: Redactar un plan de control y vigilancia. Documento aprobado del plan preliminar de control y vigilancia. Sumar el personal requerido. Resolución aprobada. Instrumentar el control y vigilancia. Memoria del plan operativo anual. Incorporar aprendizajes y cambios en función de los Documento aprobado del plan de control y vigilancia avances en la instrumentación de la reserva. corregido. Monitorear el área mediante cámara de seguridad Cámara de vigilancia controlada por el Centro de Monitoreo para evitar vandalismos y robos. de la ciudad de Santa Fe. 89 Nombre del proyecto: 7. PREVENCIÓN Y EMERGENCIAS DE SALUD Objetivo del proyecto: Prioridad: Instrumentar las medidas necesarias para prevenir problemas de salud del personal y visitantes y contar un sistema eficiente del tratamiento de emergencias. Meta que atiende: Alta Media Baja X Garantizar la integridad de las personas y recursos del área. Estrategia que ejecuta: Período de ejecución: Departamento responsable del proyecto: Año 1 Año 2 Año 3 X X X Dirección de Gestión de Riesgos - Centro de Operaciones y Brigada de Emergencias Municipal (COBEM). Actores claves que deben ser incorporados como Observaciones: aliados estratégicos del proyecto: Se debe disponer de cobertura de salud en caso de emergencia para visitantes, comitivas de escuelas y personal de la Reserva. Resultados/Acciones requeridas para implementar el Indicador que el resultado/acción se logró exitosamente: proyecto: Elaborar un plan de contingencia. Documento aprobado. Como complemento del plan de contingencia Documento de buenas prácticas aprobado. redactar ítems relativos a la prevención de accidentes como parte de las buenas prácticas del personal y otros organismos y empresas con funciones en el área. Aprobar plan y buenas prácticas. Plan de contingencia aprobado; las buenas prácticas figuran como anexos de acuerdos y contratos de personal, otros organismos y empresas. Instrumentación. Memoria del plan operativo anual. 90 Nombre del proyecto: 8. MANEJO DEL FUEGO Objetivo del proyecto: Prioridad: Controlar con rapidez los focos de incendios accidentales o intencionales y realizar un manejo eficiente del fuego. Meta que atiende: Alta Media Baja X Garantizar la integridad de las personas y recursos del área. Estrategia que ejecuta: Período de ejecución: Departamento responsable del proyecto: Año 1 Año 2 Año 3 X X X Subsecretaría de Ambiente. Actores claves que deben ser incorporados como Observaciones: aliados estratégicos del proyecto: Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sustentable de El clima genera momentos favorables para el fuego. Las comunidades bióticas acumulan biomasa combustible. El la Nación (Plan Nacional de Manejo del Fuego). manejo implica disminuir los riesgos a través de quemas Bomberos voluntarios de la Ciudad de Santa Fe. prescriptas, el mantenimiento de cortafuegos y un sistema de detección y respuesta rápida. Existe un organismo que coordina y asesora sobre el tema a nivel nacional, puede ser un medio para capacitar el personal asignado en la Reserva. Resultados/Acciones requeridas para implementar el Indicador que el resultado/acción se logró exitosamente: proyecto: Elaborar plan de manejo de fuego. Documento aprobado Sumar el personal o los acuerdos de participación de Resoluciones aprobadas. organismos. Dotar a la Reserva con el equipamiento necesario. Inventario del equipamiento. Instrumentar el plan. Memoria del plan operativo anual. 91 Nombre del proyecto: 9. POBLADORES Objetivo del proyecto: Prioridad: Reubicar los pobladores intrusos en el predio de la Reserva. Meta que atiende: Alta Media Baja X Los vecinos tienen un espacio para aprender a producir hortalizas. Estrategia que ejecuta: Período de ejecución: Departamento responsable del proyecto: Año 1 Año 2 X X Año 3 Secretaría de Desarrollo Social Actores claves que deben ser incorporados como Observaciones: aliados estratégicos del proyecto: El área de la reserva no posee una cota segura para habitarla lo que presenta un riesgo a la hora de catástrofes de índoles hídricas (inundaciones, fuertes precipitaciones, etc.) por esta razón se debe asegurar reubicar a las familias localizadas en zonas de reservorios para garantizar una mejor calidad de vida. Resultados/Acciones requeridas para implementar el Indicador que el resultado/acción se logró exitosamente: proyecto: Relevamiento de pobladores intrusos. Documento. Coordinar reubicación e instrumentarla. Reporte de la tarea. 92 Nombre del proyecto: 10. RESTAURACIÓN AMBIENTAL DE LA ZONA DE USO INTENSIVO Objetivo del proyecto: Prioridad: Recuperar muestras representativas de las ecorregiones del Espinal y el Delta y ribera del Paraná. Meta que atiende: Alta Media Baja X La Reserva cuenta con una zona de uso público intensivo de cuatro hectáreas. Estrategia que ejecuta: Período de ejecución: Departamento responsable del proyecto: Año 1 Año 2 Año 3 X X X Subsecretaría de Ambiente Actores claves que deben ser incorporados como Observaciones: aliados estratégicos del proyecto: El convenio con la Universidad Nacional del Litoral mencionado en el proyecto Investigación proveerá una Vivero Municipal, Jardín Botánico “Ing. Lorenzo propuesta de restauración para el área. La Secretaría de Parodi” Ambiente de la Municipalidad había seleccionado plantas nativas ornamentales del valle del río Salado para el Parque Norte-Botánico de Santa Fe que pueden aprovecharse para este proyecto. Las localidades de Espinal estudiadas por Broda (2010) podrían ser tenidas en cuenta como referencia para algunas comunidades a restaurar en la reserva natural urbana. Su ejecución requiere personal para plantaciones y cuidados que podrían ser el mismo plantel del mantenimiento de la vegetación. Resultados/Acciones requeridas para implementar el Indicador que el resultado/acción se logró exitosamente: proyecto: Vivero Provincial Propuesta metodológica de restauración. Documento terminado. Elaboración de buenas prácticas de plantación y Documento preliminar. mantenimiento. Plantaciones y cuidados para evitar pérdidas por Memoria del plan operativo. vandalismo y herbivoría. 93 Nombre del proyecto: 11. HUERTA COMUNITARIA Objetivo del proyecto: Prioridad: Favorecer la producción de frutas y verduras por parte de los habitantes para su consumo y complemento de ingresos. Meta que atiende: Alta Media Baja X Los vecinos tienen un espacio para aprender a producir hortalizas. Estrategia que ejecuta: Período de ejecución: Año 1 Departamento responsable del proyecto: Año 2 Año 3 Secretaría de Desarrollo Social X Actores claves que deben ser incorporados como Observaciones: aliados estratégicos del proyecto: La reconversión de los trabajadores informales a actividades económicas sustentables exige una formación laboral acorde a los usos de la reserva, esto implica la capacitación de las familias para la producción frutihortícola en los terrenos destinados a este fin. Resultados/Acciones requeridas para implementar el Indicador que el resultado/acción se logró exitosamente: proyecto: Requerimientos técnicos para funcionar las huertas Informe elaborado. comunitarias. Diseño de huertas Documentación del diseño. Manual de buenas prácticas de huerta orgánica Documento editado. Instalación de huertas. Memoria en el plan operativo. Capacitación con los vecinos beneficiados. Reporte de la actividad. 94 Nombre del proyecto: 12. SENDEROS INTERPRETATIVOS Objetivo del proyecto: Prioridad: Conocer, valorar y disfrutar los recursos de la Reserva, a través de senderos de interpretación en el área de uso intensivo. Meta que atiende: Alta Media Baja X La Reserva cuenta con una zona de uso público intensivo de cuatro hectáreas. Estrategia que ejecuta: Período de ejecución: Año 1 Departamento responsable del proyecto: Año 2 Año 3 X X Coordinación del Proyecto Reserva Natural Urbana – Secretaria de Planeamiento Urbano Actores claves que deben ser incorporados como Observaciones: aliados estratégicos del proyecto: Se plantean tres senderos: 1) Vivero de plantas nativas; 2) El algarrobal santafecino; y 3) Una reserva natural urbana para aliviar inundaciones. Cada sendero tiene un cartel de inicio y una serie de 3-5 paradas con su cartel interpretativo para que cuente con la opción de ser auto-guiado. El sendero 3 puede incluir un observatorio de aves sobre la laguna. Los senderos deben partir del área de recepción de visitantes y tener un recorrido circular. Resultados/Acciones requeridas para implementar el Indicador que el resultado/acción se logró exitosamente: proyecto: Elaboración de los senderos Documento del guión. Instalación de los senderos Detalle en la Memoria del plan operativo anual. Monitoreo y ajustes de los senderos Informe en la Memoria. 95 Nombre del proyecto: 13. CENTRO DE VISITANTES Objetivo del proyecto: Prioridad: Articulado con el plan educativo, disponer de una muestra didáctica Alta Media Baja para mejorar la comprensión de los valores de la Reserva y desarrollar algunos tópicos de difícil comprensión o que no está X facilitada su interpretación con los recursos disponibles en el terreno. La Reserva cuenta con una zona de uso público intensivo de cuatro hectáreas. Meta que atiende: Estrategia que ejecuta: Período de ejecución: Año 1 Departamento responsable del proyecto: Año 2 Año 3 X Coordinación del Proyecto Reserva Natural Urbana – Personal Reserva (subsecretaria a definir) Actores claves que deben ser incorporados como Observaciones: aliados estratégicos del proyecto: El centro es un medio más contemplado en el plan educativo. En forma preliminar, se pueden plantear como tópicos posibles presentación de la reserva y su integración en el control de inundaciones, manejo integrado de los reservorios, corredores biológicos regionales, necesidad de hacer restauración ambiental, entre otros. Es clave que el edificio donde se instale la muestra tenga las características necesarias para un centro de visitantes y se diseñe integralmente con su contenido y funcionamiento. Resultados/Acciones requeridas para implementar el Indicador que el resultado/acción se logró exitosamente: proyecto: Pautar necesidades edilicias para la muestra. Documento del proyecto de edificio consensuado. Elaborar el guión del centro articulado con el plan Documento con el guión. educativo. Instrumentar el centro. Inventario y crónica en la Memoria del Plan operativo. Monitoreo y ajustes. Memoria del Plan operativo. 96 Nombre del proyecto: 14. ACTIVIDADES PERSONALIZADAS Objetivo del proyecto: Prioridad: Articulado con el plan educativo, ofrecer actividades entretenidas y Alta Media Baja didácticas para los visitantes y, fuera o dentro del área, para los X actores claves, incluyendo su capacitación. La Reserva cuenta con una zona de uso público intensivo de cuatro hectáreas. Meta que atiende: Estrategia que ejecuta: Período de ejecución: Año 1 Departamento responsable del proyecto: Año 2 X Año 3 X Personal Reserva (subsecretaria a definir) Actores claves que deben ser incorporados como Observaciones: aliados estratégicos del proyecto: Reserva Ecológica de la Ciudad Universitaria; Figuran en el calendario anual de actividades de la Reserva, donde aprovechar los mejores momentos y Reserva Escuela Granja de Esperanza estaciones para trabajar con los recursos del lugar. Es fundamental contar con personal entrenado para hacer estas acciones. Constituyen las mejores opciones para educación y capacitación. Resultados/Acciones requeridas para implementar el Indicador que el resultado/acción se logró exitosamente: proyecto: Elaborar un calendario de actividades. Documento redactado. Producir cada una y capacitar a quien la instrumenta. Reporte del trabajo realizado. Instrumentar las actividades. Monitoreo y ajuste de las actividades. Memoria del plan operativo. 97 Nombre del proyecto: 15. INVESTIGACIÓN Objetivo del proyecto: Prioridad: Alta Promover estudios biológicos en el área. Meta que atiende: Media Baja X La biodiversidad del área es conocida. Estrategia que ejecuta: Período de ejecución: Departamento responsable del proyecto: Año 1 Año 2 Año 3 X X X Laboratorio de ecotoxicología de la Facultad de Humanidades y Ciencias Actores claves que deben ser incorporados como Observaciones: aliados estratégicos del proyecto: Universidad Nacional del Litoral, CONICET, INTEC. Está vigente un convenio firmado entre la Municipalidad y la Universidad Nacional del Litoral para hacer un relevamiento biológico del área. Permitirá contar con estudios de base para fundamentar y comparar avances de la restauración ambiental. En próximas ediciones del plan se puede ampliar los temas de estudio. Resultados/Acciones requeridas para implementar el Indicador que el resultado/acción se logró exitosamente: proyecto: Relevamiento biológico del área. Documento con resultados. Monitoreo de biodiversidad El registro de novedades figura en la Memoria del plan operativo. 98 Nombre del proyecto: 16. ARBOLADO EN EL ÁREA DE AMORTIGUACIÓN DE LA ZONA DE USO INTENSIVO Objetivo del proyecto: Prioridad: Generar un entorno favorable de la reserva y evitar el uso de especies exóticas invasoras. Alta Media Baja X Se instrumenta un modelo de área de amortiguación en los bordes de la zona de uso intensivo. Meta que atiende: Estrategia que ejecuta: Período de ejecución: Año 1 Departamento responsable del proyecto: Año 2 Año 3 X Subsecretaría de Ambiente/ Arbolado Público Actores claves que deben ser incorporados como Observaciones: aliados estratégicos del proyecto: Definir dentro del Plan de Arbolado Público cuales son las especies autóctonas que podrán estar en el área de Vivero Municipal, Jardín Botánico “Ing. Lorenzo amortiguación de la reserva y que no influyan de forma Parodi” negativa en el territorio. Vivero Provincial Resultados/Acciones requeridas para implementar el Indicador que el resultado/acción se logró exitosamente: proyecto: Producir o conseguir los ejemplares. Inventario de ejemplares Plantación y cuidados. Reporte en Memoria del plan operativo Comunicación a los vecinos. Reporte 99 Nombre del proyecto: 17. MANEJO DE RESERVORIOS Objetivo del proyecto: Prioridad: Mantenimiento y limpieza de los reservorios para su correcto funcionamiento en el sistema de drenaje pluvial y para el mantenimiento de la biodiversidad asociada a estos humedales. Meta que atiende: Alta Media Baja X Los reservorios están integrados a la gestión general de la Reserva. Estrategia que ejecuta: Período de ejecución: Año 1 Departamento responsable del proyecto: Año 2 X Año 3 X Secretaría de Recursos Hídricos Actores claves que deben ser incorporados como Observaciones: aliados estratégicos del proyecto: La creación de la reserva generó nuevos usos y administradores de los reservorios. Integrar las acciones de los dos organismos requiere un trabajo novedoso. Resultados/Acciones requeridas para implementar el Indicador que el resultado/acción se logró exitosamente: proyecto: Requerimientos de manejo de los reservorios por la Documento editado. Secretaria de Recursos Hídricos. Requerimientos de manejo del humedal y su Documento con los resultados del trabajo de la Universidad biodiversidad por la Reserva. Nacional del Litoral. Acuerdo de trabajo entre ambos organismos. Acta acuerdo. 100 Nombre del proyecto: 18. MANEJO DE ESPECIES EXÓTICAS Objetivo del proyecto: Prioridad: Favorecer la restauración ambiental a través del manejo de especies exóticas invasoras. Alta Media Baja X Meta que atiende: La Reserva cuenta con una zona de uso público intensivo de cuatro hectáreas. Estrategia que ejecuta: Consolidar lo antes posible un organismo administrador y en la repartición más razonable. Desarrollar una campaña educativa. Período de ejecución: Departamento responsable del proyecto: Año 1 Año 2 Año 3 X X X Personal de la Reserva (subsecretaría a definir). Actores claves que deben ser incorporados como Observaciones: aliados estratégicos del proyecto: Vivero Provincial Vivero Municipal, Jardín Botánico “Ing. Lorenzo Parodi” El convenio con la Universidad Nacional del Litoral puede aportar antecedentes, diagnóstico y caracterización. El proyecto debería estar contemplado en un plan con cinco líneas de acción: prevención, detección temprana, erradicación, control y mitigación (Administración de Parques Nacionales, 2007). Resultados/ Acciones requeridas para implementar el Indicador que el resultado/acción se logró exitosamente: proyecto: Elaboración de un plan del proyecto, consensuado con actores involucrados. Documento terminado. Instrumentar acciones en el terreno. Memoria del plan operativo. Desarrollar una campaña educativa para actores claves y la comunidad vecina a la Reserva. Memoria del plan operativo. 101 7. Evaluación y seguimiento 102 La instrumentación del plan de gestión se realiza de una manera ordenada a través de los planes operativos anuales o bianuales. Se toman los programas del plan de gestión a desarrollar en el período considerado y se detalla con más precisión: responsable, cronograma de actividades y presupuesto. Los planes de gestión deben ser herramientas flexibles para guiar el camino a seguir. Los aprendizajes y los cambios de la realidad, en parte dados por los avances logrados en el área protegida, nos ofrecen escenarios y desafíos nuevos. La experiencia ya existente nos permite anticipar las situaciones a encontrar en el camino de la instrumentación de un sitio nuevo como la Reserva Natural Urbana del Oeste. Pero la complejidad de la administración de las reservas y las particularidades del contexto de cada una nos lleva a ser precavidos y prestar atención a la evaluación y el seguimiento de su instrumentación. La evaluación es una valoración lo más sistemática posible del grado en que se han alcanzado determinados objetivos establecidos de antemano, entre los que pueden considerarse los objetivos del plan de gestión. También pueden evaluarse los resultados, los instrumentos y los métodos, o la eficiencia de la gestión. La información para la evaluación puede proceder de fuentes muy diversas, pero a menudo el seguimiento tiene un papel esencial en la obtención de datos básicos para la evaluación. Por otro lado, el seguimiento o monitoreo es el proceso de observación repetida en el espacio y en el tiempo, de uno o más elementos del medio, de acuerdo a protocolos preestablecidos, mediante el uso de métodos de obtención de datos comparables. El seguimiento permite tomar medidas correctivas cuando la situación analizada discrepa con lo propuesto en el plan, es decir, permite ajustar permanentemente la intervención para el logro de sus objetivos. La evaluación permite medir el logro de los objetivos del plan, en relación con un punto de partida o situación inicial hasta la situación actual, luego de que una intervención haya sido realizada. La evaluación y el seguimiento permiten: A) Medir el grado de cumplimiento de los proyectos y/o actividades, medir los resultados alcanzados (esperados o no) y dar cuenta del éxito del plan, B) Identificar lecciones aprendidas para la intervención en curso u otras futuras (producción de conocimiento) C) Contribuir (como insumo) a la toma de decisiones informadas por diferentes actores. En los últimos años se ha generado una valiosa experiencia en evaluación y seguimiento para medir la efectividad del manejo de áreas naturales protegidas (Cifuentes et al., 2000; Tacon et al., 2005; Arguedas Mora, 2015). 103 8. Reflexiones finales 104 El proceso de elaboración de este plan de gestión siguió los lineamientos deseados en la temática. En general hemos aprovechado los aprendizajes del principal organismo del país en áreas naturales protegidas: la Administración de Parques Nacionales. La legislación municipal y provincial más la experiencia en reservas naturales urbanas y otro tipo de áreas protegidas en la Argentina nos permitieron hacer los ajustes que estimamos conveniente. La particularidad de que la Reserva Natural Urbana del Oeste se trate de un proyecto pionero e innovador en el ámbito de la Municipalidad de la Ciudad de Santa Fe nos ha permitido abordar la iniciativa con libertad, pero a la vez con limitaciones lógicas. En la práctica ello significó concentrar un gran esfuerzo en la comunicación y facilitación para comprender el proyecto por los actores involucrados. Por ejemplo, la Municipalidad tiene trayectoria y aprendizajes en espacios verdes como plazas y grandes parques. Pero la Reserva Natural Urbana tiene características propias que la diferencian sustancialmente de esos lugares. Adaptar las acciones tradicionales de los organismos municipales y otros actores a las necesidades del área es un proceso en el que hay que seguir invirtiendo energía. Si bien la participación es uno de los aspectos destacados de la planificación, este punto de partida que hemos tenido trajo aparejada la limitación de opinar sobre un proyecto que no está materializado y es novedoso. Uno de los principales vacíos de información detectados fue el conocimiento de la naturaleza del sitio y la metodología adecuada para hacer su restauración ambiental. Durante la redacción del plan la Municipalidad firmó un convenio con la Universidad Nacional del Litoral para resolver el tema y a la vez involucrar estudiantes y profesionales con el área. Los resultados estarán disponibles durante el primer año de ejecución del plan. Gran parte de los esfuerzos fueron orientados a lograr un diagnóstico que reúna la mirada de los actores claves. Talleres y reuniones permitieron conocer sus puntos de vista y hemos hecho lo posible para sintetizarlo en este plan. En la programación del plan, nuestra atención se concentró en consensuar la infraestructura y equipamiento con los profesionales de la Municipalidad dedicados a su elaboración. Se hicieron reuniones, salidas a sitios demostrativos, consulta a expertos, idas y vueltas de las ideas y cómo materializarlas, bocetos y correcciones. Con más información, un sitio demostrativo y actores involucrados, confiamos que en el próximo período de planificación se salvarán estas limitaciones de la etapa inaugural, en particular la participación de la comunidad. 105 Agradecimientos A Rubén Broda, Hernán Hadad, Martín de la Peña, Carlos D’Angelo, Alejandra Maine, Gabriela Sánchez, Gustavo Marino, Cristian Walker, Fernanda Bainotti y Camila Rolón por sus aportes en la caracterización del área. A la Secretaría de Desarrollo Social y la Subsecretaría de Ambiente, la Secretaría de Recursos Hídricos, la Dirección de Gestión de Riegos, la Secretaría de Obras Públicas, la Secretaría de Planeamiento Urbano, la Secretaría de Comunicación y Desarrollo Estratégico, la Agencia de Hábitat de la Municipalidad de Santa Fe; A la Subsecretaría de Recursos Naturales del Gobierno de la Provincia de Santa Fe; A la Facultad de Humanidades y Ciencias, la Facultad de Ingeniería Química, la Facultad de Ciencias Veterinarias, la Facultad de Ingeniería y Ciencias Hídricas pertenecientes a la Universidad Nacional del Litoral; Al Museo de Ciencias Naturales Florentino Ameghino; A la ONG Capibara “Derecho, Naturaleza y Sociedad”; Al Club de Observadores de Aves Sirinda; Y al grupo universitario Capibara de la Facultad de Ciencias Veterinarias que colaboraron en los talleres en la etapa de diagnóstico del Plan de Gestión. 106 Bibliografía Administración de Parques Nacionales. 2002. 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Haene (obs. pers.). Estas últimas han sido fotografiadas y determinadas a partir de la Flora vascular de la Provincia de Santa Fe (Pensiero et al., 2005), complementado con la Flora de Entre Ríos (Burkart 1969, 1974 y 1979; Burkart y Bacigalupo, 2005; y Burkart et al. 1987). Para los nombres científicos, se sigue el Catálogo de las Plantas Vasculares del Cono Sur12. DICOTILEDONEAS Amaranthaceae 1. Lagunilla (Alternanthera phyloxeroides) (2) 2. Yuyo colorado (Amaranthus hybridus, antes A. quitensis)* (1) Apiaceae o Umbelíferas 3. 4. 5. 6. 7. Biznaga (Ammi visnaga)* (1, 2) Carda (Eryngium sp.) (1) Carda erizo (Eryngium echinatus) (2) Redondita de agua (Hydrocotyle bonariensis) (1) Redondita de agua (Hydrocotyle ranunculoides) (2) Apocynaceae 8. Tasi (Funastrum clausum) (2) 9. Plumerillo negro (Oxypetalum solanoides) (1) Asteraceae 10. 11. 12. 13. 14. 15. 16. 17. 18. 19. 20. 21. 11 12 Altamisa (Ambrosia tenuifolia) (1, 2) Artemisa (Artemisia annua)* (1) Chilquilla (Baccharis pingraea) (2) Amor seco (Bidens pilosa) (1) Cardo (Carduus acanthoides)* (1) Cardo del caballo (Carduus thoermeri)* (2) Cardo negro (Cirsium vulgare) * (2) Gamochaeta sp. (1) Melosa (Grindelia scorzonerifolia) (1, 2) Lechuga cimarrona (Lactuta serriola) * (2) Guaco (Mikania periplocifolia) (1) Achicoria silvestre (Picrosia longifolia) (2) Por Eduardo Haene http://www.darwin.edu.ar/Proyectos/FloraArgentina/fa.htm 112 22. 23. 24. 25. 26. Margarita de bañado (Senecio bonariensis) (1) Vara de oro (Solidago chilensis) (1, 2) Cerraja (Sonchus oleraceus)* (1, 2) Aliso de río (Tessaria integrifolia) (1, 2) Abrojo (Xanthium cavanillesii) (1) Bombacaceae 27. Palo borracho (Ceiba speciosa) * (cultivado) (2) Boraginaceae 28. Flor morada (Echium plantaginaeum)* (1, 2) 29. Cola de gama (Heliotropium curassavicum var. argentinum) (1, 2) Brassicaceae 30. Nabo (Brassica rapa)* (1) 31. Lepidium aletes var. integrifolium (1) Capparaceae 32. Reina rosada (Tarenaya hassleriana) (2) Chenopodiaceae 33. Yuyo blanco (Chenopodium album)* (1) Convolvulaceae 34. Campanilla (Ipomea cairica) (1) 35. Campanilla (Ipomoea indica) (1) Euphorbiaceae 36. Tártago, ricino (Ricinus communis) * (2) 37. Curupí (Sapium haematospermum) (2) (algunos cultivados) Fabaceae o Leguminosas 38. 39. 40. 41. 42. 43. 44. 45. 46. 47. 13 Aromito (Acacia caven) (1, 2) (algunos cultivados) Timbó (Enterolobium contortisiliquum) (2) (cultivados) Seibo (Erythrina crista-galli) (2) (algunos cultivados) Chañar (Geoffroea decorticans) (2) (cultivado) Trébol de olor blanco (Melilotus albus)* (1, 2) Hierba de la vergüenza (Mimosa pudica) (1) Pok'ó r'aík (Mimosa strigillosa) (2)13 Cina-cina (Parkinsonia aculeata) (1, 2) Algarrobo blanco (Prosopis alba) (2) Arvejilla vellosa (Vicia villosa microphylla)* (1) Nombre mocoví, que significa “que tiene vergüenza” (Scarpa y Rosso, 2014). 113 Gentianaceae 48. Yuyo amargón (Centaurium pulchellum)* (1) Lamiaceae o Labiadas 49. Cola de león (Leonorus sibiricus)* (1) 50. Teucrium versicarium (2) Malvaceae 51. 52. 53. 54. 55. 56. 57. Malvavisco (Abutilon grandifolium) (2) Malvavisco (Abutilon pauciflorum) (1) Malvastrum sp. (1) Malva rastrera (Modiolastrum gilliesii) (1, 2) Escoba dura (Sida rhombifolia) (2) Escoba dura (Sida spinosa) (2) Malva de zorro, malvavisco (Sphaeralcea bonariensis) (1, 2) Meniantaceae 58. Camalotillo (Nymphoides indica) (1) Oleacaceae 59. Fresno norteamericano (Fraxinus pennsylvanica) * (cultivado) (2) Onagraceae 60. Flor de la oración (Oenothera affinis) (1) 61. Flor de noche (Oenothera indecora) (1) Oxalidaceae 62. Vinagrillo (Oxalis articulata) (1) Passifloraceae 63. Pasionaria, mburucuyá (Passiflora caerulea) (1, 2) Plantaginaceae 64. Llantén (Plantago tomentosa) (1) Portulacaceae 65. Flor de seda (Portulaca grandiflora) (2) Primulaceae 66. Murajes (Anagallis arvensis)* (1) Ranunculaceae 67. Cabello de ángel (Clematis montevidensis) (1) Salicaceae 114 68. Sauce criollo (Salix humboldtiana) (2) Sapindaceae 69. Arce (Acer negundo) * (cultivado) (2) Solanaceae 70. 71. 72. 73. 74. 75. 76. Flor de sapo (Jaborosa integrifolia) (1, 2) Piquillín de la víbora (Lycium ciliatum) (2) Palan-palan (Nicotiana glauca) * (1) Chucho blanco (Nierembergia aristata) (1, 2) Huevito de gallo (Salpichroa origanifolia) (1) Yerba mora (Solanum pilcomayense) (1) Tutía (Solanum sisymbriifolium) (1) Verbenaceae 77. 78. 79. 80. 81. Margarita punzó (Glandularia incisa) (1) Margarita punzó (Glandularia peruviana) (2) Yerba del mosquito (Phyla nodiflora var. minor, antes Phyla canescens) (1, 2) Verbena (Verbena intermedia) (1) Verbena (Verbena montevidensis) (1) MONOCOTILEDONEAS Alismataceae 82. Saeta (Sagittaria montevidensis) (1) Araceae 83. Repollito de agua (Pistia stratiotes) (1, 2) Areceae 84. Palmera de Washington (Washingtonia robusta) * (cultivada) (2) Cannaceae 85. Achira (Canna indica) (1) Cyperacea 86. Pasto cebollita, pasto bolita (Cyperus entrerrianus) (1) 87. Sombrilla (Cyperus eragrostis) (1) 88. Junco (Schoenoplectus californicus) (1, 2) Iridaceae 89. Canchalagua (Sisyrinchium chilense) (1) Poaceae 115 90. Caña de Castilla (Arundo donax)* (2) 91. Cebadilla criolla (Bromus catharticus) (2) 92. Cortadera (Cortaderia selloana) (1, 2) 93. Pasto ruso, pata de gallo (Eleusine tristachya) (1) 94. Eustachys sp. (1) 95. Canutillo (Louisiella elephantipes) (2) 96. Flechilla (Nasella neesiana) (1, 2) 97. Pasto horqueta (Paspalum notatum) (1) 98. Paja colorada, cola de zorro (Schizachyrium condensatum) (1) 99. Cola de zorro (Setaria parviflora) (1) 100. Sorgo de Alepo (Sorghum halepense)* (1, 2) 101. Pasto alambre (Sporobolus indicus) (1) Pontederiaceae 102. Aguapey, camalote (Eichhornia crassipes) (2) Typhaceae 103. Totora (Typha latifolia) (1, 2) PTERIDOPHITAS Azollaceae 104. Helechito de agua (Azolla filicoides) (1) 116 Anexo II: Participantes a los talleres Municipalidad de la Ciudad de Santa Fe Andrea Valsagna, Secretaria de Comunicación y Desarrollo Estratégico. Andrés Francesconi, Coordinador Ejecutivo del Programa de Arquitectura y Diseño Urbano. Ariel Levatti, Coordinador Ejecutivo del Programa de Comunicación Territorial. Claudio Canesini, Director Ejecutivo del Programa Gestión del Espacio Público. Eduardo Rudi, Subdirector Ejecutivo de la Agencia Santa Fe Hábitat. Emiliano Koppl, Coordinador Distrito Oeste. Graciela De Paula, Directora Ejecutiva del Programa de Promoción Social. Gustavo Bertolin, Director Ejecutivo del Programa de Estaciones de Bombeo, Terraplenes y Defensas. José Rodríguez, Director Ejecutivo del Programa de Planificación de Obras Urbanas. María Belén Constanzo, integrante del Programa Gestión del Espacio Público. María Cecilia Berón, integrante del equipo técnico del Proyecto Reserva Natural Urbana. Mario Alarcón, Coordinador Ejecutivo del Programa de Promoción Social. Mario Bardus, Subsecretario Operativo de Recursos Hídricos. Martín González, Director Ejecutivo del Programa de Arquitectura y Diseño Urbano. Mauro Cosachov, Director de Gestión de Riesgos. Mercedes Tejedor, Subdirectora del Programa 100 ciudades resilientes. Nora Muruaga, Directora Ejecutiva del Programa Solares. Pablo Del Prete, Coordinador Ejecutivo del Programa Administrativo de Coordinación General. Pablo Tabares, Director de la Agencia de Cooperación Internacional, Inversiones y Comercio Exterior. Roberto Celano, Subsecretario de Ambiente. Gobierno de la Provincia de Santa Fe Natalia Algañaraz Martos, integrante del Subsecretaría de Recursos Naturales. Universidad Nacional del Litoral Betina Mariño, docente Facultad de Ciencias Veterinarias. Gabriela Sánchez, investigadora Facultad de Ingeniería Química. Gustavo Marino, docente Facultad de Ciencias Agrarias. 117 Hernán Hadad, investigador Facultad de Ingeniería Química. Museo de Ciencias Naturales Florentino Ameghino Leonardo Leiva, Unidad Cultural Zoología. Club de Observadores de Aves Sirinda Claudia Gottig, integrante. Pablo Capovilla, integrante. Grupo Capibara, Facultad de Ciencias Veterinarias, Universidad Nacional del Litoral Jennifer Roberton, integrante. Martín Barraza Imhoff, integrante. Pablo Capovilla, integrante. Capibara “Naturaleza, derecho y sociedad” Rafael Colombo, co-fundador. 118