Subido por Miguel Angel Montalvo Fraga

museo de tortura

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INTRODUCCION
La tortura es el acto de infligir dolor físico psicológico por parte de una
autoridad pública o de alguien amparado por ella, con el fin de obtener
información o de conseguir pruebas para esclarecer un delito. Algunos
autores proponen distinguir entre la tortura judicial y la tortura
extrajudicial
La tortura se puede realizar de varias formas. El daño físico se puede
causar mediante golpes, rotura de huesos, desgarres musculares,
aplastamiento, cortes, descargas eléctricas, desfiguración,
quemaduras, aplicación de temperaturas extremas, indigestión de
productos químicos o elementos cortantes, ahogamiento, violación,
privación del sueño etc.
El daño psicológico se puede realizar mediante la privación sensorial,
el aislamiento, la humillación sensorial o física, la manipulación sobre
la información sobre el detenido etc.
MUSEO DE LA TORTURA
En la edad mediase colgaba a los reos de un poste otras de un árbol y
se solía vendar la cara del criminal durante el suplicio. Suspendían
alguna veces a los reos de un pie y solamente y les ataban una pesa
al cuello, otra veces de un brazo o de ambos y les ataban fuertemente
hasta que expiraban. Se servían de un lazo y le ataban el cuello para
ahogarlo
El suplicio de la rueda, inventaron en Alemania en tiempos de
desorden, era muy raro antes del año de 1530y se dispuso contra los
ladrones del camino real. Las mujeres nunca han sido condenadas a
el por razones de decencia.
Las diferentes formas de tortura han sido aplicadas también como
pena corporal a los culpables de determinados delitos. Los hebreos
colgaban de un poste a una cruz a los calumniadores y a los idolatras,
y lapidaban a los blasfemos. La ley de moisés señalaba la pena de
fuego contra aquel que se hubiese casado con la madre y con la hija y
condenaba a las mujeres al mismo género de muerte. Los palazos o la
verberación era un castigo cruel bajo cuyos golpes morían a veces los
criminales. Los persas infligían diversas clases de suplicio como pena
a los reos condenados
En la antigua roma se condenaban la crucifixión a los esclavos y alas
personas de condiciones y estratos menos favorables. Antes de clavar
a los reos a la cruz solían darles azotes con correas, sarmientos u
otros instrumentos preparados al efecto.
Comúnmente los aseguraban en la cruz por medios de clavos si bien
otras veces los ataban con cuerdas. La costumbre de cortar la ccon la
hoz es muy antigua
OBJETOS DE TORTURA
La sangrienta doncella de hierro
Este aparato de tortura, que parece tener sus orígenes en Alemania,
se relaciona también con el Santo Oficio. Esta especie de ataúd
vertical con rostro femenino debía aterrorizar nada más verlo. En su
interior se alojaban un montón de clavos de hierro puntiagudos que se
clavaban en diferentes partes del cuerpo del condenado,
incrementando su angustia y martirio
El aplastacabezas
La forma y el nombre de este instrumento de tortura medieval no dejan
lugar a la imaginación. El condenado apoyaba la barbilla en la base y
la cabeza quedaba encajada en el casquete. Empleado para lograr
confesiones, los verdugos hacían girar el tornillo causando en primer
lugar la rotura de dientes y mandíbula. Si el torturador seguía
apretando, el tornillo podía llegar a destrozar el cráneo de la víctima,
expulsando su cerebro por la cavidad ocular.
El potro de tortura
Este aparato es uno de los instrumentos de tortura más conocidos.
Con el objetivo de que el procesado confesase, se le colocaba boca
arriba en esta tabla en la que era atado de pies y manos; después, se
estiraban sus extremidades mediante una polea hasta dislocarlas.
Ruedas de despedazar
Empleada para delitos muy graves, fue una de las torturas más
desmedidas y espantosas. El penado era colocado desnudo en el
suelo y con la misma rueda se le rompían los huesos y articulaciones
de las extremidades, incluídas cadera y hombros. Posteriormente se le
ataba a la rueda, que era colocada sobre un poste, y se le daba
comida y bebida hasta que moría, quedando su cuerpo a merced de
las aves carroñeras.
Cuna de Judas
Este método estaba pensado para obtener una confesión rápida. El
reo era suspendido por la cintura con una abrazadera de hierro
y quedaba colgado justo encima de una puntiaguda pirámide sujetada
por un trípode. Si el condenado se dormía o relajaba, se clavaba la
afilada punta en los genitales. Además, si no confesaba, eran los
propios verdugos los que bajaban al procesado suavemente o con
todo el peso del cuerpo.
El garrote vil
Utilizado por la Inquisición con los reos arrepentidos para que no
sufrieran los padecimientos de la hoguera, era visto como una forma
de muerte menos dolorosa. A pesar de ello, muchos de los
condenados sufrieron lentas agonías, muriendo por estrangulamiento
y no por la rotura del cuello. Este artilugio para administrar la pena
capital alcanzó en España su máximo esplendor, sobre todo, a partir
del reinado de Fernando VII, que lo institucionalizó en 1832.
La picota en tonel
Los borrachos debían tener mucho cuidado en tiempos de
la Inquisición. Algunos de ellos tuvieron que enfrentarse al escarnio
público portando este pesadísimo tonel de madera por las calles. Pero
lo peor no era eso, si no el propio cóctel de excrementos y orines que
se encontraba dentro de este artilugio, que llevaba a muchos a morir
por la insalubridad del mismo.
La rueda
Se amarraba al sentenciado a la rueda y los verdugos le asestaban
golpes con unos mazos enormes, rompiéndole las articulaciones y
cuidando de no asestarles ningún golpe fatal. Después eran
abandonados vivos sobre la rueda para que los cuervos y otras aves
carroñeras terminasen el trabajo.
CONCLUSION
En el museo se muestra lo que los seres humanos hemos hecho a lo
largo del tiempo y de cómo han ido dañando a nuestra sociedad
Los instrumentos de tortura dejan sin palabra al pensar en lo que
hemos hecho y que si siguiéramos utilizando uno de estos serian
varios castigados de una forma cruel
Me gusta mucho las maquinas de tortura
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