Cómo educador, ¿Qué papel cumplo en la construcción de ciudadanía en los educandos que tengo a mi cargo? Antes de responder a la pregunte que compete en este escrito es relevante tener en cuenta la definición de educación que se establece y a partir de la cual se establece el trabajo como educador, pues este concepto es el rumbo que dirige la formación de los y las estudiantes así como establece los temas relevantes en dicha formación. La educación según la ley general de educación propuesta por el estado colombiano está definida como “un proceso de formación permanente, personal, cultural y social que se fundamenta en una concepción integral de la persona humana, de su dignidad, de sus derechos y de sus deberes” (Colombia, 1994). La educación es en su totalidad un proceso formativo, pero este proceso formativo no se centra en el conocimiento teórico sino en la construcción de un ser humano, un ser humano integral e interesado en lo que pase en su contexto. En consonancia a lo anterior, Marín y Tamayo (2008) proponen que “la educación debe tener un papel humanizador, en la medida que permite, a partir de los sentidos y significados entramados y encarnados en la cultura, potenciar los distintos procesos de transformación de la humanidad”. Tomando como punto de partida estas definiciones de educación, se puede observar que el interés es el formar seres humanos que aporten a la sociedad, en este sentido, el papel como educadores en la construcción de ciudadanía de los educandos es trascendente y de vital importancia. El papel del educador va más allá de exponer contenidos temáticos en diferentes áreas de conocimiento, el educador tiene el deber y más que el deber, le apasiona formar seres íntegros, educandos que a cada paso inciden en la construcción de una sociedad equitativa y con justicia social. Mi papel por lo tanto debe ser activo, entendiendo este rol activo desde diferentes ejes entre los cuales el actuar se encuentra en el primer lugar. El ejemplo como persona y profesional incide en la construcción ciudadana de los alumnos, exponer con el ejemplo la importancia de seguir las normas como también de refutar sobre las injusticias cometidas a diario, así como estar actualizado en lo que suceda en el mundo y en el contexto local permite que los y las estudiantes se impregnen de ese sentido de pertenencia hacia lo que sucede a su alrededor, esto permitirá que de a poco ellos también participen activamente de una transformación social relevante para este contexto. Por otro lado, este papel activo requiere de espacios de reflexión con los estudiantes, contextualizando las diferentes problemáticas que inciden en la situación del país y de sus propias comunidades, para cumplir con esta labor se requiere un compromiso ético consigo mismo y con los alumnos, pues el objetivo de la educación como se evidencia en los primeros párrafos es formar ciudadanos, en este sentido el compromiso radica en estar informado e informar al alumnado además de generar preguntas que permitan que ellos y ellas busquen soluciones a las diferentes problemáticas a partir de los conocimientos teóricos aprendidos. Adicional a lo anterior, las preguntas formuladas buscan incomodar a los y las estudiantes, incomodar en el sentido de hacerlos salir de su burbuja y demostrarles que cada una de sus acciones incide en como se construye y se va a construir ciudadanía, esta función como educador es muy importante pues es el momento en el que se empieza a concientizar sobre el rol activo que cada uno de ellos y ellas debe ejercer de ahora en adelante. Por otro lado, como educador se cumple un papel importante en la enseñanza de valores, pues además del contexto, se enseña como ser una persona justa, respetuosa, critica y especialmente empática. Enseñar valores permite que los y las estudiantes sepan que hacer con las problemáticas que se evidencian en el contexto, que comprendan la situación de los otros y otras y en ese sentido puedan ser un apoyo para quienes lo necesitan, en un mundo tan polarizado y dividido, las nuevas generaciones deben aprender a respetar a los y las demás, a comprender la posición del otro y aunque no la comparta entienda que es posible pensar distinto. Como educadores se tiene gran incidencia en la construcción individual (Castillo, 2003) de los y las estudiantes, que entiendan que es adecuado tener una postura ética y política y defender su creencias, respetando claro esta las creencias de los demás, este punto es esencial en la formación de un ciudadano, el tener claro que sigue y las razones por las que lo sigue. En este punto el papel como educador es el de brindar claridades frente a los postulados del estudiante e incentivarlo a que investigue y confíe en si mismo, esto permite formar seres humanos críticos frente al mundo y frente a sí mismos. Continuando con la construcción individual, como educador es esencial dar el espacio para que se expresen, que expongan sus ideas y argumentos, de esta forma se incide también en la confianza de los y las estudiantes. Como se evidencia es relevante el papel que cumple el educador en la formación del carácter de cada uno de los educandos que tiene a su cargo. Concluyendo, como se puede evidenciar, mi papel como educador dentro de la construcción de ciudadanía es un papel activo, dinámico y constante. Activo en el sentido de enseñar a partir del ejemplo además de cada día aplicar los diferentes puntos aquí mencionados a partir de diferentes estrategias metodológicas que permitan que los y las estudiantes se vean inmersos en esa construcción y acepten el papel principal que tienen en la transformación de la sociedad. Es un papel dinámico en el sentido de las diferentes estrategias que se utilizan para concientizar al estudiantado de los puntos que en este escrito se consideran esenciales en la construcción de sociedad, lo hace dinámico también los diferentes temas que como educador se deben manejar e investigar para enseñarles a los y las estudiantes a ser ciudadanos y ciudadanas justos, respetuosos y empáticos. Por último, es constante pues es un trabajo de todos los días y de todos los años, pues construir una sociedad no se hace de un día para otro, es un proceso de años cargado de muchas experiencias que tienen como objetivo precisamente entregar a la sociedad y a este país mejores personas, mejores ciudadanos y ciudadanas los y las cuales transformen y mejoren las condiciones del país y del contexto en que viven. Referencias Castillo, J. R. (2003). LA FORMACIÓN DE CIUDADANOS: LA ESCUELA, UN ESCENARIO POSIBLE. Revista Latinoamericana de Ciencias Sociales, Niñez y Juventud. Obtenido de http://www.scielo.org.co/pdf/rlcs/v1n2/v1n2a05.pdf Colombia. (08 de febrero de 1994). Ley general de educación. Ley 115 -1994. Colombia : Congreso de la republica . Marín, B., & Tamayo, G. (2008). currículo integrado: aportes a la comprensión de la formación humana. Pereira: Universidad Católica Popular del Risaralda.