Subido por o_rodriguez1

Independencias recortadas. CONFERENCIA FERIA DEL LIBRO RAWSON, 2016, San Juan, Argentina

Anuncio
FERIA DEL LIBRO Y LAS CULTURAS POPULARES. RAWSON.
San Juan, octubre 2016
Lic. Olga Rodríguez, PUAI, Gabinete de Historia Universal,
FFHA – UNSJ
Resumen:
La conferencia pretende demostrar el proceso de las relaciones
interétnicas en América Latina, y con mayor énfasis en Argentina, a
partir del concepto “independencia” enmarcado en un contexto de
interculturalidad, necesario para la construcción de las nuevas
ciudadanías que los tiempos demandan.
La concepción histórica del término “independencia” remite a la
situación de un “colectivo nacional” que logra la emancipación de
otro que lo dominaba y la posterior organización política autónoma.
Sin embargo, al interior de aquel “colectivo nacional” se distinguen
otros “colectivos minoritarios”, lo que hace imprescindible hablar de
interculturalidad.
Los procesos vividos en la Abya Yala, nombre indígena para
América, especialmente Latina, nos exige reconocerlos para un
enfoque prospectivo, que eso es la interculturalidad al fin de
cuentas.
Hablar de interculturalidad implica reconocer la diversidad étnicocultural en un estado-nación. En nuestra “América Profunda”, los
Pueblos
Originarios
son
los
protagonistas
marginados
e
invisibilizados como sujetos de derecho desde el momento de la
invasión, a fines del siglo XV, situación que fue agudizándose con
los siglos hasta provocar el genocidio más grande de la historia de
la humanidad. Sin embargo, debemos aclarar que no hubo etnocidio
tal como lo hemos afirmado durante años, ya que los mismos
pueblos aún están presentes en las diferentes sociedades
nacionales republicanas (Sichra, 2009). Por su supervivencia, en las
peores condiciones, pero con la fuerza de la resistencia identitaria,
lograron posicionarse en las agendas públicas y constituirse en
sujetos de derecho y desde ahí podemos redefinir los sujetos
sociales y culturales que convivimos en cada país actual. De esta
manera, nos replanteamos la membresía nacional, quiénes somos
los que usamos el gentilicio correspondiente. Es la “ciudadanía
nacional” de la que habla la amplia legislación sobre derechos de
los “ciudadanos” que habitamos el país, o es sólo una parte, aquella
que las historias regionales primero y nacionales después fueron
recortando
en
función
de
las
representaciones
simbólicas
construidas por los sectores hegemónicos?.
Palabras
Claves:
relaciones
interétnicas,
independencia,
interculturalidad.
Desarrollo:
En principio vamos a tratar de exponer el tema a partir de diferentes
ejes:
I. TERRITORIO:
1. historia del territorio de Abya Yala, recortes
2. idem pero de Argentina.
3. mapa de Argentina en remate
4. Cuyo
II. LEGISLACIÓN
1. Internacional
2. Nacional
3. Cuyo
III. ENFOQUES O PARADIGMAS:
1. multiculturalidad y pluralismo cultural
IV. interculturalidad.
IV. POLÍTICAS PÚBLICAS en el siglo XXI.
1- Territorio.
Las fuentes cartográficas nos dan vasta cuenta de la constante y
continua reducción de los territorios propios de los originarios a
partir de la invasión europea, a fines del siglo XV. Hasta entonces
todo el continente era de aquellos. Con las sucesivas campañas de
conquista y colonización, se fueron creando virreinatos que
representaban a los Reyes de España, en el caso de la América
Hispana, constituyendo reproducciones administrativo-económicosocio a su imagen y semejanza. Sin embargo, en lo cultural no
pudieron hacerlo por la persistencia resiliente de las culturas de los
PPOO. Fueron y son muchas, 522 actualmente (UNICEF,
FUNPROEIB Andes,, Los pueblos Indígenas de América latina
http://www.unicef.org/lac/pueblos_indigenas.pdf),
indicando
la
misma fuente que entre el 2000 y 2008, la cantidad de indígenas
era de 28.858.580, y la población gral. De 479.824.248, por lo tanto
representaría el 6,01 %. Sin embargo, el PNUD determina que sería
del 10 %. Sin definir con precisión, pero si dar una idea cercana,
estas cifras muestran y demuestran el criterio afirmado acerca de la
continuidad histórica de los PPOO en el continente y en América
Latina.
Todas
las
investigaciones
realizadas
en
ese
sentido
han
demostrado las sucesivas y continuas políticas de invisiblización de
los PPOO y la negación de ellos como sujetos de derecho.
Situación que está cambiando frente a la organización de los PPOO
y
los
fortalecidos
movimientos
indianistas
que
fueron
intensificándose desde 1990.
POBLACIÓN ORIGINARIA EN AMÉRICA LATINA
Situación actual de los pueblos originarios de América
Latina






Se calcula que el 10% de la población es indígena.
Hay 522 pueblos indígenas que hablan 420 lenguas distintas.
108 pueblos indígenas son transfronterizos.
La mayoría de países tienen una población indígena que va del 3% al 10% del
total.
Hay 103 lenguas transfronterizas, que se hablan en dos o más países.
América Latina tiene la mayor riqueza del mundo en familias lingüísticas, con
casi 100.











44 pueblos indígenas usan hoy en día el castellano como único idioma y 55
emplean sólo el portugués.
El 26% de las lenguas indígenas está en peligro de extinción.
Los censos de población recogen la información indígena con cuestiones como
la autoidentificación, la lengua hablada, la lengua materna o el "color" o "raza".
México, Bolivia, Guatemala, Perú y Colombia concentran el 87% de indígenas
de América Latina y el Caribe.
Se estima que en México hay 9,5 millones de indígenas, según el censo de
población del año 2000.
Brasil es el país con más diversidad de pueblos indígenas, con 241 pueblos que
hablan 188 lenguas.
El porcentaje de población indígena en Bolivia es del 66,2%, según el censo del
país elaborado en 2001.
El quechua se habla en siete países: Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Chile,
Ecuador y Perú.
Argentina tiene 29 pueblos indígenas diferentes.
En Lima y Buenos Aires se habla aymara y quechua.
Más del 70% de la población mapuche habita en ciudades y centros poblados de
Chile y Argentina.
Fuentes

Datos rápidos de los pueblos indígenas en América Latina; UNICEF; fecha no
identificada.
2. MARCO JURÍDICO:
En el Derecho Indiano, que abarca toda la legislación pertinente al
indígena y sus derechos, con sus más dispares orígenes, los Reyes
Católicos pretendieron generar un parámetro de obediencia hacia el
derecho natural y de respeto hacia los indígenas, que tanto maltrato
sufrían por los administradores de sus colonias americanas.
Suponían que el estilo uniformaría y asimilaría al indígena a la
población de España en lo que a sus derechos y deberes refería,
sin embargo este criterio no era aplicable por la diversidad de
idiosincrasias y cosmovisiones de los PPOO americanos, ni por la
avaricia de sus administradores en estas tierras.
Es posible partir de las Leyes de Indias para verificarlo, pasando por
diferentes Bulas papales, tratados y declaraciones que lo fueron
modificando hasta llegar al despojo de sus territorios con diferentes
leyes.
En ese camino y siguiendo con lo preparado, es importante marcar
la intención de algunos patriotas que en el proceso por la
independencia del Virreinato del Río de La Plata, como Manuel
Belgrano, reconocieron el derecho de los naturales a sus tierras y a
su manejo. Basta para eso el Reglamento Régimen Político y
Administrativo y Reforma de los 30 Pueblos de las Misiones, en el
que establece
“A consecuencia de la proclama que expedí para hacer saber a los naturales
de los pueblos de Misiones, que venía a restituirlos a sus derechos de
libertad, propiedad y seguridad de que por tantas generaciones han estado
privados, sirviendo únicamente para las rapiñas de los que han gobernado,
como está de manifiesto hasta la evidencia, no hallándose una sola familia
que pueda decir: "estos son los bienes que he heredado de mis mayores"; y
cumpliendo con las intenciones de la Excelentísima Junta de las Provincias
del Río de la Plata, y a virtud de las altas facultades que como a su vocal
representante me ha conferido, he venido en determinar los siguientes
artículos, con que acredito que mis palabras, que no son otras que la de Su
Excelencia, no son las del engaño, ni alucinamiento, con que hasta ahora se
ha tenido a los desgraciados naturales bajo el yugo del fierro, tratándolos
peor que a las bestias de carga, hasta llevarlos al sepulcro entre los horrores
de la miseria e infelicidad, que yo mismo estoy palpando con ver su
desnudez, sus lívidos aspectos, y los ningunos recursos que les han de
dejado para subsistir:
1º Todos los naturales de Misiones son libres, gozarán de sus
propiedades, y podrán disponer de ellas como mejor les acomode,
como no sea atentando contra sus semejantes.
Fuente: Senado de la Nación. Biblioteca de Mayo, Guerra de la
Independencia, Buenos Aires, 1963, Tomo XIV, págs. 12482-12483.
http://www.elhistoriador.com.ar/documentos/independencia/belgran
o_reforma_de_los_30_pueblos_de_las_misiones.php
2. Independencias y conformación de los estados modernos
contemporáneos 1880.
En este apartado es importante referirnos a la representación social
del término “nativo” con que se denominaba a los originarios
entonces. A partir de los sucesivos movimientos independentistas y
campañas libertadoras, en los que a palabra “nativo” pasó a
nombrar a los ideólogos, pensadores y activistas que lideraron y
lograron la independencia de la Metrópolis, la Madre Patria España,
ya que ellos se auto designaban “los nacidos acá”, en franca alusión
a su condición de hijos de europeos nacidos en territorio americano,
quedando el lustre y honor de la categoría “nativos” a los próceres,
usurpando así uno de los conceptos más gráficos de la identidad
indígena americana.
En cuanto a las políticas públicas que fueron diseñándose a partir
de 1816 respecto de los indígenas, todas se remitían a su condición
servil y como fuerza de trabajo para las casas de los
administradores y familias ilustres de entonces.
En esta etapa hay que señalar además, el despojo territorial y
genocidio sufrido en las tres campañas del desierto, de Rosas a
Roca, que desde el centro-sur de Mendoza hasta el centro-sur de
Buenos Aires, pasando por nor-patagonia, sufrieron los Pueblos
Huarpe, Pehuenche, Puelche, Ranquel y Mapuche”. El “Dios
Progreso” motivaba a los administradores a extender la frontera de
la “civilización”.
Este nuevo despojo de sus territorios del que la historia habla con
ponderación (verbigracia billetes $100 con Roca) fue el último
anunciado y resaltado. Sin embargo, desde entonces, la usurpación
de tierras indígenas fue extendiéndose por los cuatro puntos
cardinales, hasta lograr el mapa actual de la Argentina Moderna,
donde no hay espacio vacíos, en blanco, como antes, los que
representaban los territorios indígenas….vacíos y en blanco, otra
manera oficial de invisibilizarlos.
3. Políticas Indigenistas: gobiernos populares 1940 hasta los
primeros movimientos indianistas: 1970-1990.
En América el período que va desde fines del XIX a las primeras 4
décadas del XX, se produjo una suerte de políticas espasmódicas
con respecto a la pertenencia del colectivo “indio”, “nativo”,
“indígena” para las políticas públicas. No hubo pertinencia
gubernamental para nada, ya que ora eran incluídos en Ministerios
del Interior, ora de Guerra, ora de Agricultura, etc., sin generar
ningún ámbito específico para un organismo de aplicación de las
políticas a ellos referidas.
Sin embargo, hay muchos ejemplos del interés, sobre todo de
presidentes caudillos, como el caso de León Portillas en México,
que
promovió
el
desarrollo
del
I
Congreso
Indigenista
Interamericano, en abril de 1940, que fue la primera reunión
continental
de
delegados
de
pueblos
indígenas
para
la
determinación de sus consideraciones y propuestas efectivas y
concretas para incorporar a las políticas de los estados nacionales
americanos. Consta en sus Actas todas sus preocupaciones y sus
objetivos reivindicatorios para lograr un cambio general en la
situación de los pueblos indígenas americanos a partir de políticas
coherentes con el universo de derechos y deberes que regían para
los ciudadanos nacionales de cada país.
Así como de otros, el Gral. J.D.Perón, por ejemplo, que a la marcha
de reclamos de miembros del Pueblo Colla, conocida como “El
Malón de la Paz” (1946), respondió de una manera nada coherente
con su imagen de presidente popular, así como con los inhumanos
atropellos y represiones de Napalpí (1947) y Rincón Bomba que si
bien no originó, tampoco sancionó a los culpables, permitiendo así
que la historia lo juzgue como a sus autores.
4. Mundialización de los movimientos indígenas 1990
El mundo entero se agrietó en años previos a 1992, unos a favor y
otros en contra de la Gran Celebración de los 500 Años del
…descubrimiento, invasión, encuentro, choque, etc…..Desde el
Instituto Indigenista Interamericano hasta la Universidad de Sevilla
se originó la Contracelebración, así empezaron los primeros actos
de la práctica del indianismo como filosofía política de la Indianidad
.(Jimenez Nuñez) Se estrenaban por entonces los primeros grupos
organizados de pueblos indígenas en toda América Latina, con sus
voces, sus memorias y sus músculos hacedores de planes de lucha
y gestas heroicas en pos de la reivindicación de sus derechos
colectivos
como
Pueblos
Preexistentes.
Innumerables
movilizaciones, discursos, sentadas frente a organismos estatales y
decisores de su presente y futuro dan prueba de este comienzo que
se verá reflejado en la primera conquista real: la modificación de la
Constitución Nacional de muchas de estas Repúblicas indigenistas,
en el mejor de los casos, entre ellas Argentina.
5. ONU: Decenios de los Pueblos Indígenas
1994-2004, 2004-
2014.
Así también la Organización de Naciones Unidas declaró el I
Decenio de los PPII (1994-2004) con el objetivo de lograr instalar en
la Agenda de los gobiernos americanos la decisión de diseñar y
ejecutar las políticas para la resolución de la desigualdad, inequidad
y despojo de los PPII. Fueron 10 años donde la inoperancia, la
soberbia y el desinterés gubernamental demostraron que frente a
500 años 10 eran muy pocos. Así fue como decretó el II Decenio
de los PPII (2004-2014), pero el resultado no fue ni con mucho el
esperado.
Esta enunciación generalizada la podemos referir a nuestro país,
marcar en las Políticas Públicas de Argentina el proceso legislativo
que fue acompañando esos hitos y analizando sus consecuencias,
referidas a su gran demanda: el territorio en la legislación y en las
políticas públicas.
VULNERACIÓN DE DERECHOS INDÍGENAS EN AMÉRICA
LATINA:
Ecuador debió, según el ”Informe sobre el estado de los derechos humanos en el mundo
de Amnistía Internacional 2012”, rendir cuentas ante la Corte Internacional de Derechos
Humanos en julio de 2011 por haber violado los derechos de un grupo de indígenas a
ser informados de las actividades de una empresa petrolera y por haber omitido un
referendo acerca de concesiones hechas en 1996 a dicha empresa en territorio de los
Kichwa, en Sarayaku, una comunidad de cerca de 120.000 personas en una región
virgen del Amazonas.
Más tarde, en octubre del mismo año, el Gobierno autorizó por decreto a las Fuerzas
Armadas de Ecuador a intervenir la ciudad Chone, en la provincia de Manabí, donde
miembros de una comunidad indígena realizaban protestas contra la construcción de una
represa que representaba la evacuación forzosa de 1.700 familias. Cientos de soldados
ingresaron al territorio y destruyeron los cultivos con tractores, informa Amnistía
Internacional en su página web.
Según Amnistía Internacional, en Ecuador no solo se han pisoteado los derechos de los
indígenas, sino que, además, se ha fortalecido el comportamiento impune de las
autoridades, ya que no se sometió a juicio a los culpables de las violaciones de sus
derechos, y, además, se mantuvieron los cargos en contra de los habitantes originarios.
De acuerdo con el informe de AI, la situación en Bolivia no es muy diferente. Allí, la
organización denuncia el abuso de autoridad y ejercicio indiscriminado de la violencia incluso contra personas discapacitadas- por parte de las fuerzas policiales a las que se
les ordenó reprimir una manifestación en febrero de 2012. "Las fuerzas de seguridad
bolivianas tienen el deber de mantener el orden público, pero siempre deben hacerlo en
cumplimiento de las normas internacionales de derechos humanos sobre el uso de la
fuerza. Las denuncias de malos tratos deben ser investigadas a fondo y con
imparcialidad", dijo Guadalupe Marengo, subdirectora del Programa Américas de AI.
Evo Morales, por su parte, apela a una reforma de la OEA, que debería, según él, "dejar
de servir a EE. UU. y renacer para servir a los pueblos de América".
Los gobernantes se ven ante la necesidad de crear puestos de trabajo talando bosques que son el pulmón
del planeta y explotando minas con métodos tóxicos para la fauna, la flora y para el hombre, y, al mismo
tiempo, deben posicionarse con respecto a los derechos de las comunidades originarias. Un dilema al que
se enfrentan también Brasil, Colombia, Guatemala, México y Perú. El Gobierno de Brasil, por ejemplo,
manifestó su desagrado tras el pedido de la CIDH de suspender la construcción de la gigantesca central
hidroeléctrica de Belomonte, en la Selva Amazónica. Según ONGs locales, el alcalde de Espinar, Perú,
Oscar Mollohuanca, fue detenido el 30 de mayo de este año sin existir una orden de detención, y se teme
que el hecho sea parte de una campaña en su contra por haber criticado públicamente el acuerdo entre el
Gobierno peruano y la empresa minera que actúa en la zona.
http://www.dw.com/es/derechos-humanos-cu%C3%A1l-es-la-situaci%C3%B3n-de-losind%C3%ADgenas/a-16015321
Por lo demás, cuando se habla de poblaciones originarias no se hace referencia a un
conjunto humano homogéneo. Por un lado, se trata de una multitud de etnias con
lenguas, creencias y costumbres muy diferentes que han conseguido permanecer en sus
territorios ancestrales. Por otro lado, de una minoría considerable que ha sido expulsada
de esos territorios y que pueblan hoy las “favelas”, las “barriadas”, etc. etc., es decir, los
grandes cinturones de miseria de las más importantes ciudades del sub-continente.
Todas estas poblaciones de origen indígena fueron y siguen siendo las principales
protagonistas del “éxodo rural” y, a pesar de los esfuerzos por conservar su identidad
cultural, han sufrido y sufren en el destierro urbano intensos procesos de aculturación.
¿Qué los ha proyectado al escenario politico?
Después de haber vivido excluidos, desde siempre, tanto política como
económicamente, los pueblos indígenas han hecho en las ultimas décadas, una súbita
irrupción en la vida política de varios países. Esta irrupción es una de las consecuencia
del desarrollo del neoliberalismo que ha llevado a muchos gobiernos a privilegiar, para
mayor beneficio de las multinacionales, la explotación a ultranza de los recursos
naturales, con destino al mercado mundial de materia primas, en particular del petroleo,
del gas, y de algunos minerales. También, para asegurarles, con vistas la crisis que nos
prepara el cambio climático, el control de otros recursos vitales, como las fuentes
potenciales de hidroelectricidad y de las grandes reservas de agua dulce.
Como una buena parte de estas riquezas naturales se encuentran precisamente en los
territorios ancestrales de los pueblos originarios, el conflicto de estas poblaciones con el
Estado era inevitable. El Estado, en efecto, propietario formal de todas las riquezas del
subsuelo, se creyó en capacidad de poder disponer de esos territorios, sin tener en
cuenta la presencia de estas poblaciones y sin respetar el Derecho a la consulta que le
impone el Convenio 169 de la OIT (Organización internacional del trabajo). Para los
gobernantes, sirvientes solícitos de las multinacionales, como para el resto de la
población, la resistencia de los pueblos indígenas fue una verdadera sorpresa.
Ocurre que esta agresión capitalista es extremadamente grave, pues no sólo tiene que
ver con la usurpación de los territorios ancestrales, sino también con los modos de
explotación de esos recursos, altamente nocivos para la naturaleza y para las
condiciones de vida de esos pueblos. En algunos casos se trata de la deforestacion, con
todo lo que implica en perdidas de biodiversidad, para implantar cultivos intensivos, a
veces de productos genéticamente modificados, y que van a ser regularmente fumigados
con agrotóxicos, dañinos para la salud humana y animal, y contaminantes de las napas
freáticas. En otros casos, de perforaciones petroleras, o de la apertura de minas, algunas
a cielo abierto, que tienen la particularidad de consumir enormes cantidades de agua, y
de contaminar así los ríos y lagunas y de impedir toda producción agrícola para la
alimentación humana o animal.
Conscientes del peligro vital que afrontan, muchos pueblos indígenas se han levantado
en masa contra esas implantaciones y, en la coyuntura actual, marcada por la crisis del
capitalismo, han logrado suscitar la adhesión activa de grandes sectores populares. Es
esta base social multitudinaria, y por supuesto multiétnica, la que ha hecho de las luchas
de los pueblos originarios la principal resistencia que haya encontrado hasta ahora el
neoliberalismo, y la que ha abierto nuevas perspectivas electorales, como ha ocurrido en
Bolivia, a candidatos que forman parte de esas poblaciones, o que defienden sus
principales reivindicaciones.
La importancia y la complejidad de sus reivindicaciones
La lucha indígena tiene la particularidad de cuestionar integralmente la arquitectura del
sistema que los países latinoamericanos, en el momento de la independencia, han
copiado de modelos europeos. En efecto, para satisfacer sus reivindicaciones, lo primero
que hay que hacer, inevitablemente, es refundar esos países, es decir, reformular las
cartas constitucionales, a fin de reconocer que son multinacionales, multiétnicos y
multilingues. Inmediatamente después de este reconocimiento, también inevitablemente,
hay que restituir a esos pueblos la propiedad de sus territorios ancestrales y acordarles la
capacidad jurídica de administrarlos conforme a sus intereses.
La refundación de un país, para reconocer que no es sólo de algunos sectores, sino de
todos los que lo habitan; para reconocer que algunos de esos sectores son propietarios
legítimos de los territorios en los cuales han vivido desde el alba de la humanidad, y que
en ellos gozan del derecho de administrarlos como mejor les parezca, constituyen -¿qué
duda puede caber?- conquistas revolucionarias. Conquistas que solo pueden obtenerse
en el contexto de un proceso de cambio, con una relación de fuerzas largamente
favorable a los intereses populares.
Sin embargo, no se puede ni se debe ocultar que esas reivindicaciones entrañan riesgos
mayores, debido a las contradicciones sociales y políticas que pueden generar, y que
abren la posibilidad a la manipulación o instrumentalización de esas contradicciones por
aquellos -los mismos de siempre-que no aceptan esa súbita y radical reorganización del
país. En este aspecto vale recordar las relaciones sulforosas que tuvieron los indígenas
Misquitos con la Revolucion Sandinista, precisamente cuando se estaba implementando
la autonomía de los territorios indigenas.
Entre estos riesgos potenciales, tal vez el primero, tenga que ver con la tentación
secesionista de algunas regiones ricas a las que les pesa compartir el beneficio de sus
negocios con las regiones pobres del país. Un proceso de cambio orientado a satisfacer
las reivindicaciones de las poblaciones originarias, implicando la remodelación del
sistema, es siempre una excelente ocasión para tratar de obtener la partición del
territorio nacional. Esta tentativa de secesión ya se ha visto en Bolivia, felizmente
desarticulada por el gobierno central.
Cuando se trata de reconocer y revalorizar las particularidades culturales de las
poblaciones, el carácter étnico cada una de ellas puede también revelarse un factor de
graves contradicciones internas, como se ha visto en otras regiones del mundo (en el
Este europeo, en Africa, etc.) llegando incluso a masacres y enfrentamientos fratricidas.
En este aspecto, por sólo citar un ejemplo, no debe subestimarse la utopía de ciertos
grupos indígenas de “reconstruir” el Tahuantinsuyo (el Imperio Inca), lo que implicaría
por lo menos la tentativa de reformular las fronteras nacionales actuales.
Otro problema potencial tiene que ver con la capacidad de las poblaciones indígenas,
una vez que hayan obtenido la autonomía, de asumirse como parte integrante y solidaria
de un conjunto nacional. Los países pobres, en el mundo capitalista y globalizado del
presente, sin capitales y tecnologías, no tienen la menor posibilidad de privarse de la
explotación de los recursos naturales que existen en el subsuelo de los territorios
indígenas. ¿Sabrán encontrar estas poblaciones, y el Estado, los modos de explotación
de estos recursos de manera que no entrañen perjuicios irreversibles en la naturaleza,
que beneficien a todos y que ayuden al desarrollo socio-económico del país? Algunas
experiencias recientes, en países como Ecuador, parecen indicar que este tema puede ser
también objeto de conflictos.
La cosmovisión indígena, ¿un nuevo paradigma post-capitalista?
La cosmovisión indígena, panteista y animista, que les impone a las poblaciones un
respeto sagrado a la naturaleza (a la Pachamama), parece corresponder a la principal
exigencia del momento actual frente a los desafíos que se derivan del cambio climático.
En efecto, el extraordinario desarrollo de la producción de riquezas, de las últimas
décadas, concentrada en un escaso numero de compañías multinacionales, se ha hecho
en detrimento de la salud del planeta, al extremo de poner en peligro inminente la vida
de ciertas especies, entre ellas, la de los seres humanos.
Combatir las causas del cambio climático y tratar de salvar todo lo que puede aún ser
salvado en los ecosistemas impone, a la humanidad entera, un comportamiento frente a
la naturaleza semejante al de las poblaciones originarias. Este comportamiento, de
asociar indisolublemente su propia vida, a la vida de la Pachamama, es una de las
manifestaciones del instinto de conservación que el hombre moderno ha olvidado. A tal
punto llega la enajenación que nos ha provocado la sociedad capitalista.
Sin embargo, un cambio súbito de mentalidad a nivel mundial, es imposible, por mucho
que millones de personas internalicen muy rápidamente el respeto por la naturaleza. El
verdadero cambio en la relación del hombre con la naturaleza sólo podrá ser la
consecuencia de una modificación radical de las formas de producción de bienes y
servicios, y esa modificación sólo podrá ser la consecuencia, también, de un cambio de
sistema social, regido por otros valores que los de la sociedad capitalista.
Desde ese punto de vista, la cosmovisión de las poblaciones originarias, esta lejos de
representar una alternativa, o un nuevo paradigma post-capitalista, como lo pretenden
algunos intelectuales y dirigentes indígenas, pues toda alternativa pasa necesariamente
por la definición de las características principales de la sociedad que se quiere construir,
y de los medios para alcanzarla. Eso no impide, evidentemente, que los valores que los
pueblos indígenas han sabido preservar -el respeto de la naturaleza, la solidaridad, la
cooperación, el sentido de pertenencia a la comunidad, la armonía social, entre otros-,
formen parte de los preceptos éticos de la nueva sociedad.
Fuente: http://www.kaosenlared.net/noticia/129936/pueblos-originarios-luchas-socialesamerica-latina
Sobre estes anúncios
Relacionado
Bolivia-Ecuador: El Estado contra los pueblos indiosEm "Cultura livre"
El movimiento indígena lucha por un cambio de sistemaEm "Conhecimento livre"
Los pueblos indígenas de la Amazonía confrontan al neoliberalismoEm "Conhecimento
livre"
Filed under: Conhecimento livre, Cultura livre, Direitos, Ecologia, Mundo Marcado: |
povos indigenas, povos originarios
o
B
Podemos marcar grandes hitos relevantes en los procesos
históricos vividos:1
1. Invasión y conquista de los territorios: de 1492 a 1816.La
Colonia.
Desde el Derecho Indiano, que conforma todo el aparato de leyes,
bulas, tratados, etc, escritos sobre los derechos indígenas, al
principio no se hablaba de “colonias de ultramar” sino de Reinos de
Ultramar, tanto durante los Reyes Católicos como durante el
reinado de los Habsburgos.. Este fundamento establece su estado
jurídico como pertenencias de la Corona de Castilla, es decir, la
Reina Isabel. Recién en el XVIII se empezó a usar el término
“colonia” dado el surgimiento de nuevas teorías económicas,
especialmente el capitalismo, por la potencialidad económica que
estas “colonias” tenían, lo que llevó a resignificarlas en ese marco.
Así, los más de 500 pueblos sufrieron la expropiación de sus
territorios, los que desmembrados según los intereses de cada
soberano, fueron conformando diferentes Virreinatos primero y
Naciones Estado después..
De “colonia externa” pasaron a ser “colonia interna”, con la misma
lógica del sacro mercado capitalista que sólo busca la maximización
del capital a través de su más valorado “recurso” económico: la
tierra. Así, los territorios fueron vaciados de sus significaciones y
simbolismos originarios y pasaron al mercado del “progreso” y del
“desarrollo”. Y para ejemplificar este paradigma político-económico
nos sirve el ejemplo del afiche de los billetes de circulación
nacional. Un país que aprecia a sus próceres qué valora más, la
independencia o la usurpación? La libertad o el crecimiento?, la vida
o la muerte?...Leamos el mensaje de los billetes de $100. de $50,
de $20, de $10, de $5 y de $2….
Y para ser más comprensivos y gráficos, analizaremos
las dos
últimas leyes sancionadas respecto de la tierra en Argentina, la Ley
Nacional 26.160 de Relevamiento Técnico-Jurídico-Catastral de las
Tierras Indígenas, sancionada en noviembre del 2006.
La Ley 26.160, declara la emergencia en materia de posesión y propiedad
de las tierras que tradicionalmente ocupan las comunidades originarias del
país, en principio por el término de 4 años, aunque ya se determinaron dos
prórrogas más (2018??) disponiendo durante ese lapso la suspensión de la
ejecución de sentencias, actos procesales o administrativos, cuyo objeto sea
el desalojo o desocupación de tierras.
La Ley, su decreto Reglamentario 1122/07 y la Resolución del INAI
Nº 587/07 a través de la cual se crea el Programa Nacional Relevamiento
Territorial de Comunidades Indígenas (RETECI), desde el cual se espera
lograr:
1. Crear las condiciones para la implementación de los derechos
constitucionalmente reconocidos con relación a las tierras y territorios.
2. Instrumentar el reconocimiento constitucional de los territorios de las
comunidades de los pueblos indígenas que habitan en Argentina.
3. Garantizar la participación indígena a través del CPI en la
elaboración, ejecución y seguimiento de los proyectos que deriven del
Programa.
4. Realizar el relevamiento técnico, jurídico y catastral de la situación
dominial de las tierras ocupadas por las comunidades indígenas.
En Argentina, la aplicación de esta ley, al finalizar el segundo período,
2014, había concretado solamente el relevamiento del 30 % de las
comunidades de PPOO existentes en el país, y en ningún caso había
avanzado sobre los otros dos item de la ley: los aspectos jurídicos y
catastrales de los territorios relevados, habiéndose gastado el presupuesto
completo de dos períodos, $60.000.000, sólo en el relevamiento técnico.
En la provincia de San Juan, sólo se ha realizado la aplicación de esta ley
en este aspecto, en 3 comunidades huarpe, y existen, hasta hoy 18???. Es
decir, ni siguiera un 15%
En cuanto a la Ley de Venta de Tierras Fiscales, sancionada en el 2011, a
propuesta de la entonces Presidente de la Nación, Cristina Fernández,
podemos decir que, el concepto “tierras fiscales” refiere a tierras sin título
dominial alguno, o las que los tuvieron lo perdieron por falta de pago de
impuesto a la tierra.
Y acá, el problema no es sólo para los PPOO, sino para todos los
argentinos, dado que se presentan dos problemas. Uno, que es de
antecedente, la Resolución 166/2009del Ministro Randazzo, donde se pone
a la venta la franja territorial de resguardo de la soberanía nacional, es
decir, la franja de 150 km fronterizos en la zona continental, y 50 km en la
zona marítima. Con esta resolución, Argentina pierde la zona de seguridad
necesaria en todo el perímetro de su territorio, además, que en muchos
casos son territorios indígenas, resguardados por la Constitución Nacional
que dice que “no se pueden vender ni grabar ni enajenar” (Art. 75, inc. 17)
de ningún modo.
Con esta Resolución primero, y la ley después, es que hoy tenemos un
mapa nacional lleno de banderas internacionales:
MAPA Argentina de Remate
http://www.iprofesional.com/notas/119812-La-Argentina-de-rematevenden-tierras-estratgicas-a-precios-ms-baratos-que-un-abono-a-la-TVpor-cable
CONCLUSIONES
Descargar