PREGUNTAS FRECUENTES SOBRE SEMINARIOS POR INTERNET1 Traducción: M. Pilar Bastida Entrevista hecha por David Kennedy de WALDORF TODAY a Eugene Schwartz (marzo 2012). ¿Puede la Educación Waldorf, puede la Antroposofía ser comunicada a través de Internet? Hace una o dos décadas la respuesta hubiese sido un firme “¡Definitivamente no!”, pero los tiempos han cambiado y los seres humanos han cambiado también (incluso aquellos empleados por colegios Waldorf). En lugar de poner todo lo antroposófico o Waldorf en un lado de la balanza, y todo lo tecnológico en el otro, hay un reconocimiento creciente de que ahora podemos desarrollar facultades para transformar la tecnología, e incluso redimirla, cuando la usamos para propósitos espirituales. Hay, por supuesto, grandes obstáculos que se levantan cuando tratamos de meter a presión el espíritu viviente y pulsante de la educación Waldorf en un microcircuito de Internet, pero con buena voluntad y conciencia de parte de ambos lados de la banda ancha, esto puede ser logrado. Desde el momento que empecé a grabar mis conferencias en los ochentas, se me dijo que: “Ni la Antroposofía ni la Educación Waldorf podían ser diseminadas sin la presencia viva de un ser humano parado frente a otro”. Tenemos que darnos cuenta, sin embargo, que las personas que tienden a decir este tipo de cosas no estaban sobre la tierra cuando Rudolf Steiner era una “presencia viviente”. Ellas aprendieron sobre Antroposofía de libros de Rudolf Steiner. Y Steiner fue claro al decir que en nuestros tiempos era posible que un maestro espiritual fuese encarnado en un libro, de forma que se hiciese “movible” y la gente pudiese encontrarlo(a) en libertad y cuando el tiempo estuviese maduro. 1 Fuente: www.waldorftoday.com/2012/04/eugene-schwartz-online-teacher-training La mayoría de profesores Waldorf menores de 30 años no tienen problema con el aprendizaje en línea, y me interesa cuando profesores que se encuentran en sus cincuentas me dicen que lo más emocionante de mi conferencia en línea fue que los ayudó a sobreponerse a sus temores hacia computadoras e Internet. Es de esperar que en las siguientes décadas muchas más personas encuentren la Antroposofía a través de la radiante luz de las pantallas de las computadoras y de otros aparatos, en lugar de a través de la luz reflejada sobre la página de un libro. Hace poco empezaste con las conferencias en línea. ¿Por qué hay tantas personas que atienden conferencias en línea, dado que son tan nuevas y no han sido probadas? No cabe duda que la economía ha jugado un rol. Los colegios ya no pueden subsidiar los entrenamientos de verano tan generosamente como lo hacían en el pasado, y hoy en día los fondos de los profesores son muy limitados. Nuestras conferencias por Internet tienen un costo moderado (nuestros costos generales son bajos) y no hay pasajes de avión, costo de hotel, o comidas – un profesor puede ahorrar varios cientos de dólares cuando se vale del servicio de Internet. Los colegios tienen en la actualidad años escolares más largos, y es limitado lo que se puede lograr en una vacación de verano corta – una conferencia con fechas fijas de seis días no funciona para todos. Nosotros ofrecemos las conferencias desde los primeros días de junio hasta fines de agosto, y un profesor puede escoger catorce días de entre estas semanas para participar. Hemos tenido madres dando de lactar a sus recién nacidos, profesores que estaban cuidando a sus padres ancianos, o profesores que estaban viajando al extranjero durante el “pico” de conferencias de julio – para todos ellos, la conferencia en línea era la única conferencia a la que podían asistir. También pienso que los profesores jóvenes, en particular, están buscando algo nuevo. No tratamos de “sustituir” con Internet “lo verdadero”, es decir, las conferencias en vivo. Más bien, cada conferencia en línea, por la forma cómo se organiza y presenta el contenido, representa un despegar completamente diferente. Por ejemplo, en los cientos de conferencias en vivo que he dado a lo largo de los años, sólo tenía una hora y cuarto para presentar la mayoría de temas – algunos se merecían dos conferencias. De otro lado, mis conferencias en línea sobre temas como El Desarrollo del Niño en el Cuarto Grado, Las Culturas de la Antigüedad en el Quinto Grado, o Astronomía en el Sexto Grado, pueden durar de entre tres a cuatro horas (divididas en segmentos de 15 a 20 minutos para que puedan ser escuchadas más fácilmente). La libertad que estas grabaciones proporcionan al conferencista hace posible que pueda incluir mucho más contenido valioso en la conferencia de lo que podría hacer en una conferencia en vivo. Y los profesores valoran el hecho de que, en cualquier momento, pueden “parar” la conferencia, dejar el cuarto, y volver más tarde. En lugar de tomar notas interminables mientras que habla el conferencista, el oyente puede regresar varias veces a los segmentos hasta dominar el contenido (y si se requiere de apuntes, uno puede abrir una ventana y acceder a un procesador de textos, mientras la grabación se encuentra en otra ventana). La presentación de diapositivas con abundante trabajo de estudiantes, y los vídeos de instrucción que son parte de cada conferencia en línea, permite que los profesores experimenten los ricos componentes visuales de la Educación Waldorf una y otra vez. ¡Y una cosa más! Toda conferencia Waldorf tiene algún miembro de la audiencia que levanta la mano repetidamente, interrumpiendo el hilo de pensamiento del conferencista, y haciendo preguntas que son personales e irrelevantes respecto al tema que se está tratando. Los profesores serios detestan esto, pero son demasiado educados como para detener a esta persona, y entonces esta persona tiraniza a todos los participantes por toda una semana. Hay muchos participantes de las conferencias en línea que han expresado gratitud de que esto no ocurra, pues los conferencistas son grabados sin audiencia, con muchos meses de anticipación. Algunos dicen que este sólo hecho ya vale el precio de la conferencia. Entonces, ¿cuál es el lado negativo? ¿Qué es lo que falta? Hay tres cosas negativas. La primera es que no ofrecemos euritmia. Pero muy pocos profesores de grado enseñarán alguna vez euritmia en su clase – para eso dependemos de instructores entrenados – así es que no es una necesidad que un profesor tenga cinco o seis sesiones de euritmia en una conferencia de una semana. Sin embargo, no se pueden negar los aspectos terapéuticos y revitalizadores de hacer euritmia durante una conferencia. Hasta que el mundo de la euritmia encuentre su propia Jane Fonda para crear sesiones de vídeo que puedan ser seguidas en casa, no las estaremos ofreciendo en nuestros segmentos en línea. La segunda es el aspecto social de una conferencia en “vivo”. Dado que la mayoría de colegios Waldorf sólo tiene un profesor por grado, fácilmente uno puede sentirse bastante sólo. En una conferencia grande, uno se encuentra con colegas que han pasado por experiencias similares durante todo un año, y uno puede socializar y compadecerse conforme uno se prepara para el año que viene (es interesante que los profesores Waldorf, de entre todas las personas, tengan que dejar sus colegios e ir a conferencias para sentirse parte de una “comunidad”). Si es que este aspecto social de la conferencia es muy importante para usted, entonces pueda ser que una conferencia en línea no le satisfaga. El tercer factor que atrae a la gente a las conferencias en vivo es bastante básico, diría que casi primario. Como me han dicho muchas profesoras: “¡En la conferencia sobre ´El Arte de Enseñar el Grado X´ tengo una semana en la que no me tengo que preocupar por cocinar ni lavar platos!” Hasta que no ofrezcamos nuestro Servicio de Comida por Internet, no creo que podamos ser de mucha ayuda allí, aunque sí me gustaría hablar con algunos esposos para que cambien sus expectativas. Pero tendría que decir que esos son los únicos aspectos negativos. Cuando se habla de contenido, integración de temas, y tiempo para digerirlo todo, las conferencias en línea son únicas. ¿Si el entrenamiento por Internet es una imagen del futuro entrenamiento de profesores, entonces no nos estaremos yendo todos a la deriva en nuestros pequeños mundos cibernéticos, cuándo es que podremos unirnos social y espiritualmente? ¡Sí, existe ese riesgo! Pero este tema ha estado con nosotros desde que las personas empezaron a experimentar la vida a través de libros, en lugar de a través de otras personas, y es en realidad parte de la experiencia del Alma Consciente. Todo en nuestros tiempos es considerado culpable de causar esta alienación, cuando lo más probable es que todo sea simplemente sintomático de los “impulsos anti-sociales” de los que Steiner habló una y otra vez. De mi parte, hago todo lo posible para “humanizar” la experiencia por Internet. He dado miles de conferencias a audiencias en vivo por más de cuatro décadas, y cuando grabo las conferencias en línea me esfuerzo por imaginarme una audiencia alrededor mío, y trato de dirigir mis palabras a seres humanos y no a los chips de una computadora. Cualquiera que sea lo suficientemente mayor como para recordar la “Edad Dorada de la Radio”, sabe que una experiencia auditiva puede estimular mucho la imaginación del oyente, y hasta Rudolf Steiner estuvo abierto a considerar acerca de cómo sus conferencias podían ser transmitidas al público. Un número de participantes en línea ha reportado sentir que ciertas porciones del audio de las conferencias les transmitían más calidez y conexión personal que las conferencias que habían escuchado en reuniones en “vivo”. Si es que vamos a usar la Internet de esta forma, todos tenemos que trabajar más arduamente para encontrarnos espiritualmente. Yo doy mucho de mí mismo en estas grabaciones, y ciertamente siento que una parte de mi ser es removida cuando las conferencias están en sesión. Por varias semanas hay cuatro o más conferencias en sesión, simultáneamente, 24/7, y yo sé que una parte de mí está presente en cada una de ellas. Otro aspecto “social” de las conferencias en línea es que son internacionales por naturaleza. Este verano no sólo tendremos participantes de Norte América, sino que se nos unirán colegas de Inglaterra e Irlanda, China y el Medio Oriente, y un número de otras naciones. En nuestro invierno, las conferencias sirven las necesidades de preparación de verano de Australia, Nueva Zelandia, y Sud África. En este respecto, las conferencias en línea pueden satisfacer las realidades de nuestra sociedad global de una forma que las conferencias en vivo no pueden – ¿y qué es más global que la Educación Waldorf?