-1f0- dad. ^ Será que está mal determinado el peso atómico del cloro? Tampoco; su determinación es exacta. yQué pasa, pues? Ahora bien :^ No hemos aprendido que diversos elementos pueden tener el mismo p^so atómico, que denomínamos "isóbaros" (series de transformación radiacti^^a), y que los mismos elementos pueden pres^ntar pesos atómicas distintos y denominamos isótopos? Está visto que, ni por distracción, podemos eludir la cuestión, porque sobre tener que explicar satisfactoriamente lo que pasa con el cloro, tenemos también que razonar la isotopia y]a isobaria que dejamos solamente definidas, y... i qué le vamos a hacer ! Será menester indagar también aquí, lo que le sucede al plomo, que antes conseguimos con tres pe^os atómicos distintos. Si no lo hacemos, las consecucncias científicas pueden ser fatales. LA PER14iANENTE TABLA DE SALVACION ' No lo dudamos; nos asimos una vez más a la tabla de salvación del radio. Dice nuestro refranero que "quien la hace la paga", de modo"que ^el radio que perturbó nuestra tranquilidad habrá de restablecerla. A^ hablar de ia inestabilidad de las cosas, dirnos una relación sustanciada de la serie que llamaremos radio-plomo. En su apartado 4.° ]lega^mos al radio B, ya exhausto y sin capacídad para emitir partículas «. Em,te partículas ^3, es decir, e:ectrones. Pero vayamos a la entraña del hecho. El electrón que es lanzado por el átomo de radio B no puede ser un electrón externo, de los cont•enidos en las que llamábamos órbitas planetarias, mejor a^n ahora "órbitas electrónicas", pues sabemos que la emisión de í^n electrón extex•no no significa más que ionización. Si, pues, el radio B emitiese un el•ectrón externo no se alteraría su sustancia, sino que formaría simptemente un átomo de radio B ionizado. Pero los procesos radiactivos son procesos que forzosamente tienen que aiterar el núcleo del átomo. Ahora resulta, y esto j ustifica también mi presentimiento anterior, que en el núcleo tambíén. hay eIectrones. LDónde? En los proton•es no puede ser, porque -son núcleos de hidrógeno simplemente ,cargados con electricidad positiva, y se caracterizan por no tener ya ningún electrón. Tendrá entonces que s^r en los neutrones. Valientemente nos atrevemos a dar realidad patente a esta nueva sorpresa, y así, de camino, complicamos un poco más el átomo, cuya estructura ya habíamos predicho incompletamente acabada. Manos a la obra. Ahora todos los neutrones del núcleo están formados por un protón y un electrón--car- •- 142 -a ga general neutra-. Así podremos comprender, sin mayor aprensión, que, por la acción de potentes energías, este electrón se separe del protón, esto es, que un neutrón se descomponga en protón y electrón, y que este último sea emitido en fot•ma de partícula (3. Esto explicaría, pues, la radiación /3. Pero, yqué le ocurre entonces al núcleo de radio B? Cada partícula « emitida significa disminución de cuatro unidades en el p^2so atómico (2 protones -^- 2 neutrones) y disminución en dos unidades del número atómico (2 protones y 2 electrones) . Tendremos, pues : Sustancia Radio Radón Radio Radio ..................... ................... A ............... B ............... Peso atómico ICúm. rt(^mi^•u 226 88 222 86 218 214 8! 82 EI electrón fué emitido y el protón quedó en el núcleo (descomposición supuesta de un neutrón). Esto significa, por consiguiente, que el núcleo posee ahora un protón más que antes; tendrá, por tanto, !^3 protones y 214 - 83 ^ 131 neutrones; y eI corresponderle un número atómico de 83 significa que en el sistema periódico ha avanzado un lugar hacia la derecha. Pero a todo esto, yqué pasa, de una vez, con las diversas clases de plomo? P,ues dos cosas que tenemos que compaginar : que todas ellas son sin duda alguna plomo y que, - 143 -- sin embargo, todas tienen pesos atómicos diferentes. 1✓ stamos en el mismo sitio que hace algún rato, pero ahora ya con armas suficientes para batallar. Como la diferencia está en el peso atómico y éste lo determina el núcleo con sus protones y neutrones (suma de ambos), tal vez se diferencien en la composición del núcleo. En este caso, como el número de cargas nucleares en las tres especies de plomo es el mismo, el plomo de peso atómico 207 debería tener un neutrón más que el núcleo del plomo de peso atómico 206 y, en cambio, un neutrón menos que el de peso atómico 208. La carga nuclear no aumenta de este modo y, no aumentando, tampoco varía nada en la estructura de las esferas electrónicas. Y esto significa que tampoco varían las propiedades químicas, porque, según ya vimos, la armazón de electrones es la que las determina. Por consiguiente, a pesar de ser diferentes los pesos atómicos, las propiedades químicas son iguales y el elemento es el mismo. NUEVA DUDA SOBRE LA UNIDAD DEL PLOMO Todo lo que antecede está 7naravillosamente. A1 sabio, convencido de su verdad, nunca, le faltan buenas razones y acertadas hipótesis. Pero queda por aclarar una nuevá duda de bastante bulto, que veremos cómo la Ciencia acierta a explicar.