El recuerdo de los argentinos

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Interés general
Nueva York amaneció confiada y segura.
Nadie imaginaba lo que vendría
A un año de los atentados
Repentinamente, un avión se estrelló
contra una de las torres
Varios minutos más tarde la ciudad se
vio sacudida por el segundo impacto
El recuerdo de los argentinos
Cuatro compatriotas murieron durante el sangriento ataque a las Torres Gemelas. Uno de ellos, Pedro
Grehan, trabajaba en el piso 101. Y antes del derrumbe alcanzó a hablar por teléfono con un amigo
Los dos aviones que embistieron contra las Torres Gemelas sacudieron
también a la Argentina, no sólo por el
horror que recorrió al mundo entero,
sino porque entre los protagonistas
directos del hecho se encontraron varios compatriotas. Hubo víctimas, pero
también afortunados que hoy tratan
de rehacer una vida que nunca
volverá a ser igual.
Pedro Grehan, Mario Santoro,
Gabriela Weisman y Sergio Villanueva,
fueron los cuatro argentinos que
murieron hace exactamente un año
en el World Trade Center de
Manhattan, Nueva York. Pero, estos
son sólo los nombres que se reportaron ante las respectivas autoridades,
“por lo que el número exacto jamás se
sabrá”, según explicó el cónsul argentino en Nueva York, Alejandro Poffo.
Gabriela Weisman tenía 33 años y
motivos para celebrar: la empresa de
software Sybase en la que ella trabajaba, le había dado un aumento de categoría. Esa fatídica mañana la encontró en el piso 106 de la torre norte
junto a su amiga Clara Hernández,
realizando un curso de internet y software.
El avión impactó entre los pisos 80 y
86. Gabriela tuvo tiempo de hacer
diez llamados desde su celular a su
hermana Andrea relatándole el terror
que la invadía, antes de que la torre se
derrumbara sepultándola junto a otras
miles de personas.
Mario Santoro era un paramédico que
ese día tenía franco, no obstante se
ofreció para trabajar e integró la tripulación de la primera ambulancia que
llegó al sitio de la tragedia.
Su cuerpo fue hallado tres meses más
tarde -el 27 de diciembre-, intacto y
sólo con las huellas de descomposición
propias del paso del tiempo. Estaba
sobre una camilla y en posición de
atender a una mujer, ambos muertos
al golpearles una gigantesca viga en la
cabeza.
Pedro Grehan tenía 37 años, era analista financiero y trabajaba en la empresa Kantor, ubicada en el piso 101 de la
torre norte. Desde hacía tiempo soñaba con regresar a Buenos Aires
porque, aseguraba, “15 años en
Estados Unidos son muchos”.
Casado con Victoria Blaksley y padre
de tres hijos pequeños, cuando sintió
la explosión del impacto del avión
estaba hablando por celular con otro
argentino residente en Nueva York Matías Ferrari- al que alcanzó a decirle:
“Te dejo porque esto es un quilombo
bárbaro, no sé qué pasó...” Nunca
más se supo de Grehan.
La Plata, miércoles 11 de septiembre de 2002
El corazón de las finanzas ardió,
y el mundo entero miró hacia él
El “techo” de Nueva York no pudo
soportarlo y se derrumbó
El Perfil
Osama Ben Laden, de 45 años, pudo haber vivido rodeado de lujos, ya
que es el heredero de una incalculable fortuna. Sin embargo, se convirtió en el terrorista más buscado
La cara del saudí en
armas y encendedores
El gobierno israelí incautó un
cargamento de armas y
encendedores con imágenes de
Osama Ben Laden destinados a
la Autoridad Palestina. Los contenedores marcados con la
seña de “juguetes” fueron hallados en el puerto de Ashdod.
Ayer se difundió otro
video con su imagen
Un canal de televisión árabe
emitió ayer un video de Osama
Ben Laden, en el que elogia a
los hombres que “cambiaron el
curso de la historia”, y en el
que uno de los autores de los
atentados -Abdel Al Omarilodijo que era su entrenador.
RELATO DEL JEFE DE BOMBEROS
“Fue el peor día de mi vida”
El 11 de septiembre “fue un día
terrible, el peor de mi vida”,
dijo el director del
Departamento de Bomberos de
la ciudad de Nueva York,
Stephan Hittman, quien a pesar
de la adversidad supo salvar,
junto a su equipo de rescatistas,
a 2.000 personas que se encontraban en las Torres Gemelas.
“En 150 años, 752 bomberos
murieron haciendo su trabajo
de servicio en Nueva York. El 11
de septiembre, perdimos la
mitad de ese número, 343”,
lamentó Hittman, al visitar la
Argentina para compartir su
experiencia profesional sobre
cómo reconstruir y motivar
equipos de trabajo.
Al ser consulado sobre las condiciones de trabajo en las que se
encuentra el grupo a un año de
los atentados explicó: “nos
hemos involucrado en un entre-
namiento para dar una respuesta más agresiva a las emergencias relacionadas con el terrorismo. El 11 de septiembre no fue
un colapso tradicional de un
edificio, sino que se trató de un
ataque, un acto de guerra.
Nunca habíamos experimentado
algo así”. Y sobre la forma en
que el gobierno manejó la
situación de crisis, dijo: “creo
que todos hicieron un esfuerzo
considerable para ser lo más
abiertos posible. Además agregó- tanto el gobierno como
la prensa deben hacer un
esfuerzo de colaboración para
proveer información en áreas
que preocupan y continúan
siendo sensibles, como el ámbito
de seguridad, en el campo del
terrorismo, para prever cosas
que nunca pensamos que sucederían, como un ataque químico,
biológico, o nuclear”.
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A un año de los atentados Interés general
La Plata, miércoles 11 de septiembre de 2002
En cuestión de minutos su gemela
también se convirtió en escombros
Para entonces ya se tenía la certeza
de que se trataba de un atentado
Las escenas de pánico y desesperación
se sucedieron una tras otra
El polvo afectó a miles de personas.
Muchas de ellas aún tienen secuelas
Primer impacto.
Primer derrumbe
10 hs. La torre sur se
desploma
World Trade Center
Un Boeing 767 de American Airlines
se estrella contra la torre norte.
La zona antes
Piso 80
Segundo impacto.
9.03 hora de Nueva York
Un Boeing 757 de United Airlines
choca contra la otra torre.
Torre
Sur
Torre
Norte
MANHATTAN
Segundo derrumbe
10.29 hs. La torre
norte también cae
Río Hudson
La zona después
Daños finales
También es atacado el Pentágono.
CANADÁ
Se desaloja a 24.000 personas
Nueva
York
Pennsylvania
Washington DC
Washington
destrucción
total
estructuras
dañadas
Casa Blanca
Capitolio
Océano atlántico
PENTÁGONO
Un cuarto avión, que se
supone también había
sido secuestrado, se
precipitó a tierra en
Pittsburgh, Pennsylvania
9.40 hora de Nueva York
Un tercer avión comercial
se precipita sobre el
Pentágono. El edificio
comienza a arder.
Congreso
Ascensores
La Casa Blanca y el
Congreso son evacuados
inmediatamente como
medida de prevención
Torre Norte Torre Sur
Ascensores
Planta de las torres
Estructura
interna
El avión daña la estructura interna
Estructura externa
revestida en vidrio
419 metros
110 pisos
Zona impacto
Pisos de
hormigón y estructura
interna de acero
Estructura
externa
La explosión genera un incendio
63,5 metros
Más de tres mil personas perdieron la
vida en el criminal ataque
CAMBIO LA CINEMATOGRAFIA
El ataque terrorista
8.48 hora de Nueva York
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Debido a las altas temperaturas
ceden los pilares, las torres
colapsan y se desmoronan
Hollywood
rinde culto
a la guerra
Las películas bélicas estadounidenses tras los atentados
del 11 de septiembre retrotraen a Hollywood a la propaganda de guerra, con historias
sin contexto político, con
guiños que apuntan al reclutamiento de soldados y la imagen de un alto mando en el
que vale la pena confiar.
A años luz de “Apocalipse
Now”, “Pelotón” o “Jardines
de piedra”, los temas centrales
que obsesionan ahora a los
guionistas pasan por convencer de que hay un buen
motivo para la guerra exportada a tierras lejanas, y mostrar
una “actitud en combate”.
Las nuevas películas no muestran aldeas arrasadas con
napalm por las fuerzas invasoras de los Estados Unidos,
como en “Apocalypse Now”.
Los últimos filmes bélicos centran la mirada en la derrota de
Vietnam (1965 a 1975) en
“Fuimos héroes”, una
operación en Somalía (1993)
en “La caída del Halcón
Negro”, una acción fallida en
Serbia (1992) y una batalla exitosa contra Japón (1943).
Ya no son alienígenas los que
atacan el “estilo de vida americano”. La cara del nuevo
enemigo no aparece; más bien
los films promueven un sentido del deber.