DICIEMBRE 2002 UPDATE ÍNDICE Editor Administrativo: Cherine Rahmy Disposición tipográfica y diseño: Sección de Edición y Composición, Dependencia de Edición Electrónica Fotografías y publicaciones: Melitta Borovansky-König Distribución: Marie-Therese Kiriaky Información de contacto: Dependencia de Relaciones Externas Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y Delito Centro Internacional de Viena P.O. Box 500 A-1400 Viena Austria Tel.: (+43-1) 26060 5575 Fax.: (+43-1) 26060 5931 3 4 6 8 10 12 14 Correo-e: [email protected] [email protected] [email protected] El 1.° de octubre de 2002 la Oficina de las Naciones Unidas de Fiscalización de Drogas y de Prevención del Delito (OFDPD) cambió su nombre por el de Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito. El Programa Mundial contra el Terrorismo respalda las actividades del Comité contra el Terrorismo del Consejo de Seguridad. Redes de expertos locales (REL) en África: podemos cambiar las cosas La Oficina contra la Droga y el Delito fomenta las iniciativas y el control locales de las actividades de reducción de la demanda en los países africanos para impulsar las prioridades del nuevo Plan de Acción sobre la Fiscalización de Drogas de la OUA. Entrevista con el Dr. Philip O. Emafo, presidente de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) El presidente de la JIFE habla sobre la legalización, la reducción de daños y el creciente problema de las drogas sintéticas. El desarrollo alternativo significa la supervivencia para una aldea de Myanmar La aldea de Son Ke fue declarada zona libre de opio en julio de 2002, estableciendo así un modelo de desarrollo. Los estudios realizados en 2002 descubren nuevas tendencias de la producción de opio El cultivo de la adormidera aumenta considerablemente en Afganistán, pero disminuye en Myanmar y la República Democrática Popular Lao. El modelo de desarrollo sostenible del Perú La Oficina contra la Droga y el Delito colabora con los campesinos para encontrar e implantar un nuevo cultivo —la palma oleaginosa— que brinda prometedoras oportunidades para el mercado interno. El Secretario General de las Naciones Unidas visita Asia central El Organismo de Fiscalización de Drogas de Tayikistán es objeto de elogios como ejemplo a imitar de la labor de la Oficina contra la Droga y el Delito con los gobiernos. Los clubs de Viet Nam sirven de inspiración a los ex toxicómanos Un método alternativo de postratamiento y capacitación laboral para ex toxicómanos da excelentes resultados. Página de Internet: www.unodc.org Foto de la portada: La nueva estrategia contra el terrorismo y el papel de la Oficina contra la Droga y el Delito 15 16 Noticias desde el terreno Últimas noticias y novedades de Brasil, Barbados, India y Uzbekistán. Nuevas publicaciones Calendario de actividades Entre las nuevas publicaciones cabe mencionar el estudio de la adormidera en Afganistán, el deporte para prevenir el uso indebido de drogas, un examen mundial de las lecciones aprendidas en la prevención del uso indebido de drogas y otras publicaciones de promoción. UPDATE 3 DICIEMBRE 2002 ❖ La nueva estrategia contra el terrorismo y el papel de la Oficina contra la Droga y el Delito Los sucesos del 11 de septiembre de 2001 pusieron de relieve la necesidad de luchar contra el terrorismo en todos los frentes. Como consecuencia de ello, más elementos del sistema de las Naciones Unidas tienen un papel que desempeñar en los esfuerzos por combatir el terrorismo. 쎲 Disuadir a los grupos desafectos de adoptar el terrorismo. 쎲 Negar a grupos o particulares los medios de llevar a cabo actos de terrorismo. 쎲 Respaldar una amplia cooperación internacional en la lucha contra el terrorismo. Más de 100 Estados, 10 organizaciones internacionales y seis ONG participaron en un simposio celebrado en Viena en junio de 2002 para evaluar la aportación de las Naciones Unidas a la lucha contra el terrorismo. Asistieron al simposio varios miembros de un Grupo Asesor de alto nivel sobre las Naciones Unidas y el Terrorismo *. Este grupo preparó una nueva estrategia de las Naciones Unidas contra el terrorismo, que se hizo pública en septiembre de 2002. El nuevo Programa Mundial contra el Terrorismo de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito tiene un papel muy activo que desempeñar, en estrecha colaboración con el Comité contra el Terrorismo, para ayudar a dar aplicación a muchas de las recomendaciones formuladas en el informe. El principal elemento del Programa consiste en promover la ratificación de los 12 convenios, convenciones y protocolos relacionados con la prevención y la represión del terrorismo internacional y en elaborar legislación modelo para que los Estados Miembros puedan cumplir los instrumentos internacionales y la resolución 1373 del Consejo de Seguridad. El informe hace hincapié en que el sistema de las Naciones Unidas en su conjunto debe estar listo para respaldar las actividades del Comité contra el Terrorismo del Consejo de Seguridad para implantar medidas de lucha contra el terrorismo, comprendidas las actividades mundiales para: A principios de diciembre se celebró en el Instituto Internacional de Estudios Superiores en Ciencias Penales, con sede en Siracusa (Italia), una reunión de expertos en la que se examinó la metodología empleada por la Oficina contra la Droga y el Delito para elaborar herramientas legislativas y de aplicación destinadas a los instrumentos internacionales contra el terrorismo. Además, la Oficina contra la Droga y el Delito, en colaboración con el Departamento de Asuntos de Desarme de las Naciones Unidas y el Consejo Consultivo Internacional Científico y Profesional (CCICP), copatrocinó una conferencia internacional titulada “El tráfico: redes y logística de la delincuencia transnacional y el terrorismo internacional”, que se celebró en Courmayeur (Italia) en diciembre. *Anexo del documento A/57/273-S/2002/875, Informe del Grupo Asesor sobre las Naciones Unidas y el Terrorismo. Asamblea General/Consejo de Seguridad. Tema 162 del programa provisional. Medidas para eliminar el terrorismo internacional. ❖ RESUMEN: La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito adopta un nuevo Programa Mundial contra el Terrorismo. UPDATE 4 DICIEMBRE 2002 Redes de expertos locales (REL) en África: podemos cambiar las cosas Los problemas tradicionales de África relacionados con las drogas tienen nuevos competidores. La afluencia de cocaína y heroína, los efectos secundarios no deseados de la globalización y el aumento del comercio se están sumando a los problemas ya existentes en los países africanos relacionados con el cultivo y el uso indebido locales de cannabis y el deficiente control de la oferta de sustancias psicotrópicas lícitas. Muchos de esos países siguen aquejados de inestabilidad política y económica y están mal preparados para luchar contra el tráfico ilícito de heroína y cocaína a escala internacional —sobre todo el vinculado a la delincuencia organizada— o para poner coto al resultante aumento del uso indebido de drogas. De los 32 millones de personas que, según se estima, hacen uso indebido de drogas en África, más de 5 millones consumen cocaína, heroína o sustancias sicotrópicas. Este hecho, sumado a la endemia del VIH/SIDA en África, constituye una situación potencialmente explosiva. Además, África carece de expertos en reducción de la demanda. Los que hay se concentran sobre todo en actividades de prevención y raras veces se dedican a formular políticas y adoptar decisiones, no tienen acceso a los medios de comunicación y a los creadores de opinión y se relacionan poco con expertos externos. Para superar esas limitaciones, la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito puso en marcha un proyecto experimental en 2001 para crear redes de expertos en reducción de la demanda en África oriental, meridional y occidental. Estas redes de expertos locales (REL) brindarán a sus miembros el conocimiento y la especialización necesarios para fomentar las actividades de reducción de la demanda en esos países. En la actualidad, la REL experimental de África oriental cuenta con 10 expertos procedentes de seis países. El proyecto se ha traducido en la preparación de publicaciones regionales sobre buenas prácticas de educación preventiva entre iguales, así como sobre normas regionales de tratamiento y rehabilitación. El proyecto también ha conseguido crear un programa de estudio regional para consejeros. En 2003, los miembros de la REL pondrán en marcha nuevas actividades de reducción de la demanda en sus países, bien como parte de los proyectos de la Oficina contra la Droga y el Delito o como nuevas iniciativas locales. Los miembros de la REL, que hicieron observaciones sobre la viabilidad y el potencial de este nuevo enfoque de la reducción de la demanda, sugieren que el proyecto va por buen camino para ayudar a fortalecer los papeles de los expertos africanos. La iniciativa y el control local, que son las principales metas del proyecto, serán cruciales para la aplicación eficaz de las prioridades de reducción de la demanda que figuran en el nuevo Plan de Acción 2002-2006 para la Fiscalización de Drogas de la nueva Organización de la Unidad Africana (OUA). UPDATE 5 DICIEMBRE 2002 Dr. Reychad Abdool (Asesor en Reducción de la Demanda de Drogas para África, Oficina Regional de la Oficina contra la Droga y el Delito para África oriental, Nairobi (Kenya), y miembro fundador del Centro Goomany para la Prevención y el Tratamiento del Alcoholismo y la Toxicomanía) En su opinión, ¿cómo contribuyen las REL a mejorar la fiscalización de drogas en África? Las REL reúnen un conjunto de expertos solventes con credenciales sólidas y un historial profesional demostrado. La labor que realicen en dos esferas temáticas, a saber, la prevención entre iguales y las normas de tratamiento y los protocolos, aportará las bases para las buenas prácticas en la región y más allá de ella. He aquí tan solo un ejemplo de la forma en que las REL ayudan a mejorar la fiscalización de drogas en África. ¿Qué beneficios actuales y futuros aportan estas redes a la labor de la Oficina contra la Droga y el Delito en África? Son muchos. Los expertos, que ya de por sí son buenos comunicadores, han recibido formación para que intensifiquen su labor con los medios de comunicación. Les ayudamos a reforzar su trabajo de promoción y su posición como asesores en sus propios gobiernos e instituciones. Algunos miembros de las REL desempeñaron un papel crucial en la formulación del Plan de Acción de la OUA durante la reunión ministerial celebrada en Côte d’Ivoire en mayo de 2002. Ahora actúan a la vanguardia de las nuevas actividades. Algunos miembros ya colaboran con nosotros en proyectos en la región. Estoy seguro de que las REL nos ayudarán mucho a ejecutar un programa regional mejor y más amplio en África oriental y otras regiones. Dr. Frank Njenga (Psiquiatra, presidente del Centro Médico de Chiromo Lane y Director de Programa de la Campaña Estudiantil contra las Drogas (SCAD) de Kenya) Usted es psiquiatra, experto terapéutico y presentador del programa de televisión “Frankly Speaking” (Hablando francamente). ¿Cree que su labor y la de los demás miembros de la REL puede cambiar las cosas en África oriental? Sí, por supuesto. Las estrategias de prevención del consumo de drogas tienen que ser a la fuerza polifacéticas, inspiradas localmente y controladas por los receptores para que puedan determinar los desafíos y los problemas. El concepto de la REL tiene plenamente en cuenta esos principios. Usted ya dirige importantes iniciativas de tratamiento y prevención del consumo de drogas para la juventud de su país. ¿Le ayuda a usted en esas actividades el proyecto de la REL y su estrecho contacto con otros expertos? Sí, me ayuda. Como sé lo que pasa en la región, puedo evaluar los programas en varios respectos, por ejemplo, su eficacia. Podemos intercambiarnos recíprocamente los contenidos de nuestros programas. Nuestros colaboradores han visitado varios países, se han reunido con la población y se han enriquecido mutuamente. Dr. Abraham Gebregeorgis (Farmacéutico, jefe de la División de Estupefacientes y Sustancias Sicotrópicas del Gobierno de Etiopía) Dr. Gebregeorgis, usted es miembro de la REL y administrador de programa de un proyecto de la Oficina contra la Droga y el Delito de prevención del consumo de drogas en Etiopía. ¿Ayuda el hecho de que usted sea miembro de la REL a sus labores de gestión de este proyecto? Desde luego. Las REL me brindan la oportunidad de compartir la experiencia con otros expertos. Se trata de una plataforma en que uno aporta y también recibe. En mis 12 años en la profesión, he contribuido a crear un sistema de control para la utilización racional de estupefacientes y sustancias sicotrópicas. Actualmente intervengo cada vez más en asuntos de prevención del consumo de drogas. Mi pertenencia a la REL me ha ayudado considerablemente a ejecutar el proyecto de prevención apoyado por la Oficina contra la Droga y el Delito en las escuelas de Etiopía. Gracias a la labor de prevención entre iguales de las REL, he aprendido a desarrollar esa labor con resultados positivos y a utilizar las prácticas óptimas en mi país. A menudo oímos que, en África, la cooperación entre los gobiernos y las ONG sigue siendo demasiado limitada. ¿Comparte usted esa opinión, y qué piensa usted que han de hacer los miembros de las REL y la Oficina contra la Droga y el Delito para cambiar esa situación? Efectivamente creo que así es, y ese problema sigue sin resolverse en mi país. En tanto que miembros de las REL, tenemos que diagnosticar las causas principales del problema en nuestros respectivos entornos. En mi experiencia, la falta de confianza de los gobiernos en las ONG es uno de los problemas. Como miembros de las REL, tenemos que encontrar ONG que sean buenas y solventes y apoyarlas. Los miembros de las REL que trabajan en instituciones gubernamentales, como yo, pueden servir de puente. UPDATE 6 DICIEMBRE 2002 Entrevista con el Dr. Philip O. Emafo Presidente de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) “Cuando los europeos hablan de legalizar el consumo de cannabis, cabe preguntarse si están hablando de la misma sustancia que causa tanto sufrimiento en los países en desarrollo” Dr. Philip O. Emafo, presidente de la JIFE 1. La JIFE se describe como un “órgano independiente y cuasi judicial de fiscalización de drogas”. ¿Qué significa eso, y en qué se diferencia la JIFE de los demás órganos de fiscalización de drogas de las Naciones Unidas? La JIFE existe para velar, a través del diálogo con los países miembros, por que la fiscalización internacional de drogas esté bien encaminada. Es independiente en el sentido de que sus 13 miembros son elegidos a tenor de su competencia, conocimientos e imparcialidad. No representan a ningún país, sino que sirven los intereses de la comunidad internacional. Según lo estipula el artículo 9 de la Convención Única de 1961 sobre Estupefacientes, la función de la JIFE es tratar de limitar el cultivo, la producción, la fabricación y el uso de estupefacientes a la cantidad adecuada necesaria para fines médicos y científicos, asegurar su disponibilidad para tales fines e impedir su desviación. Colectivamente, la JIFE, la Comisión de Estupefacientes y la Oficina contra la Droga y el Delito colaboran para velar por que no se produzcan filtraciones del tráfico lícito de estupefacientes y sustancias sicotrópicas al trafico ilícito y por que el cultivo y la fabricación ilícitos estén debidamente fiscalizados. 2. Varios países de Europa han despenalizado el uso de la cannabis. ¿Qué piensa la JIFE sobre medidas como esas y sobre la cuestión de la legalización en general? Entrevista realizada por Cherine Rahmy, Redactora Jefa, UPDATE. La posición de la JIFE es que la cannabis plantea un problema sanitario, como lo prueban las publicaciones de investigación y el número de enfermos que se presentan en los hospitales de una serie de países en desarrollo de África, el Caribe y América Central. El uso indebido de cannabis también hace sufrir a la gente en el Afganistán, el Pakistán, la India y Filipinas. Por eso, cuando los europeos hablan de despenalizar o legalizar el uso de la cannabis, cabe preguntarse si están hablando de la misma sustancia que causa tanto sufrimiento en los países en desarrollo. Puede que la cannabis que se consume en Europa no sea la misma especie que se consume en los países en desarrollo y que está provocando un sinnúmero de problemas sanitarios a los jóvenes que se encuentran en los hospitales para recibir tratamiento. Por lo tanto, lo que preocupa a la JIFE es que el uso de la cannabis se restrinja a fines médicos y científicos, si es que los hay. Los países que son parte en la Convención Única tienen que respetar las disposiciones de los convenios y convenciones y restringir el uso de las drogas incluidas en las Listas I a IV a fines estrictamente médicos y científicos. UPDATE 3. ¿Ha examinado la JIFE alguna vez la cuestión de la denominada reducción de daños y son acordes las actividades de reducción de daños con las disposiciones de los tratados de fiscalización internacional de drogas? El criterio de la JIFE es acorde con la disposición contenida en los convenios y convenciones que prevé el tratamiento, la rehabilitación, la reinserción social y, en cierto grado, las medidas preventivas. Los miembros que redactaron la Convención Única de 1961, así como el Convenio sobre Sustancias Sicotrópicas, previeron la necesidad de paliar el sufrimiento de los que usan indebidamente drogas y para ello forjaron disposiciones relativas a la educación, el tratamiento y la rehabilitación de los toxicómanos, así como su postratamiento social. Se trata de principios que deben guiar toda actividad de reducción de daños. Ahora bien, promover el consumo de drogas ilícitamente mediante la entrega de agujas o facilitando salas para que los toxicómanos se inyecten sin la supervisión de personal médico supondría, desde mi punto de vista, incitar a la gente a que haga un uso indebido de drogas, lo que contravendría las disposiciones de los convenios y convenciones. 4. La fabricación ilícita de drogas sintéticas y su creciente uso indebido en muchas partes del mundo son algunos de los mayores desafíos a que se enfrenta la comunidad internacional. ¿Qué piensa usted de esas cuestiones y qué medidas apoya la JIFE para contrarrestarlas? Es lamentable que las drogas ilícitas de fabricación sintética sigan atrayendo la atención de los jóvenes. Todas las naciones del mundo tienen que abordar este problema de forma integral. La Comisión de Estupefacientes debería formular recomendaciones a los gobiernos nacionales. Es preciso incrementar las actividades de represión y ejercer mayor control sobre la información que circula en Internet. Tenemos que sensibilizar a nuestros gobiernos para que promulguen leyes idóneas que prohíban el tráfico y la fabricación ilícitos de esas drogas. Asimismo, hay que sensibilizar a los jueces para que tomen las debidas medidas al condenar a los traficantes de drogas y a los fabricantes ilícitos de drogas. Luego tiene que haber también alguna forma de intercambiar más información entre los funcionarios de represión de los distintos países. Es menester que los padres participen; deben servir de modelo a sus hijos. También hay que vigilar debidamente a los encargados de las discotecas para que no se distribuyan drogas ahí ni en las fiestas “rave”. 5. La JIFE ha mantenido consultas con las autoridades del Afganistán, que es uno de los principales productores de opio ilícito. ¿Podría decirnos qué resultados ha obtenido la visita que la JIFE hizo al país en agosto? La misión de la JIFE salió del Afganistán con la impresión de que el Gobierno estaba empeñado en reducir drásticamente el cultivo ilícito de la adormidera. El problema fundamental reside en que, pese a su buena voluntad y su empeño, carecen de recursos. La administración talibana pudo terminar con el 7 DICIEMBRE 2002 cultivo en la zona que controlaba basándose en que el cultivo de la adormidera era contrario al Islam, pero en la actualidad existe un Gobierno que ha sido elegido democráticamente y que tiene que administrar sus asuntos de forma democrática. Por lo tanto, no pueden ser tan arbitrarios como las autoridades talibanas. Todo lo que pueda hacer la comunidad internacional para ayudar a que el Gobierno democráticamente elegido del Afganistán garantice que se pone fin al cultivo lo antes posible resultaría sumamente útil. Lamentablemente, desde que salimos del Afganistán en agosto, ha habido noticias de un aumento del cultivo de adormidera en comparación con el año pasado. No se puede permitir que esto ocurra. Esta situación puede deberse a que el gobierno de transición tiene una autoridad limitada en ciertas zonas del Afganistán. Al parecer, pasará cierto tiempo antes de que el actual Gobierno amplíe su control a todas las partes del Afganistán debido a la existencia de los denominados caudillos en distintas provincias del país. 6. Un mandato fundamental de la JIFE es el de asegurar que se disponga de drogas con fines médicos y científicos en todos los países. ¿En qué medida se ha logrado ese objetivo, y qué hace la JIFE para que se siga progresando? En la esfera de la utilización y la fiscalización de los estupefacientes lícitos se han registrado grandes progresos gracias a la comunicación que la Secretaría de la JIFE mantiene con los gobiernos. Las desviaciones que se producen de fuentes lícitas de estupefacientes son escasas. Las sustancias sicotrópicas, en cambio, plantean un problema debido a la gran cantidad que se produce y a las condiciones comerciales que, en ocasiones, dan lugar a que haya “vertidos” al tráfico ilícito. Me atrevería a decir que muchos países colaboran con la JIFE en el sentido de que, cuando sospechan que se va a producir una desviación, alertan inmediatamente a la secretaría de la JIFE que, a su vez, toma las medidas necesarias para detener todo tipo de tráfico ilícito de estas sustancias sicotrópicas. Hace algunos años, el opio se producía en cantidades que no bastaban para cubrir las necesidades mundiales con fines médicos y científicos. Al transcurrir los años, ese problema ha dejado de existir porque cierto número de países se dedican a producir opiáceos y hay suficiente para fines médicos en todo el mundo. El problema que nosotros apreciamos actualmente es que algunos países no suministran fondos suficientes para adquirir los estupefacientes que se necesitan para atenciones de salud. En algunos casos, los profesionales de la salud se muestran también poco inclinados a recetar estupefacientes ya que temen que los enfermos puedan adquirir dependencia. Otros no se molestan en recetar estupefacientes por el papeleo y los trámites que ello supone. La Junta ha declarado una y otra vez que no se debe negar a los enfermos el uso de estupefacientes y sustancias sicotrópicas cuando resulten necesarios para fines médicos y científicos. La JIFE seguirá promoviendo y propagando esta idea porque la intención que contienen los convenios y las convenciones de que haya estupefacientes y sustancias sicotrópicas disponibles para fines médicos no deja lugar a dudas. UPDATE 8 DICIEMBRE 2002 El desarrollo alternativo si supervivencia para una ald Ey Hka dirá a quien quiera oírla que la vida en la aldea de Son Ke ha sido siempre cuestión de supervivencia. Durante años, esa supervivencia dependía del opio, el único cultivo viable en el terreno montañoso del nordeste de Myanmar. Pero el traslado forzoso de la aldea hace dos años supuso nuevos problemas para sobrevivir. Casi la mitad de la familia de Ey Hka no lo logró. La aldea de Son Ke se encontraba en Wa, región septentrional de Myanmar en el triángulo de oro, donde convergen Myanmar, Tailandia y la República Democrática Popular Lao. La región está controlada por el grupo étnico Wa que, tras años de luchar contra el Gobierno de Myanmar, intercambió las armas por la paz y la autoadministración. No obstante, la región cuya administración asumieron los Wa tiene un largo historial de cultivo y consumo de opio. La zona representa el 22% del cultivo de opio de Myanmar y es una fuente cada vez más importante de drogas sintéticas. El cultivo de opio en todo Myanmar se ha reducido espectacularmente en un 50% desde 1997 y, sometidos a presión internacional e interna, los Wa se han comprometido a dejar de cultivar drogas para el año 2005. Pero las metas de los Wa se han visto complicadas por decenios de aislamiento y subdesarrollo que han dejado tras de sí la ausencia de unos conocimientos básicos de administración pública para poder aplicar políticas de eliminación de las drogas. Para solucionar el problema, los Wa han recurrido a los traslados forzosos. La aldea se Son Ke fue trasladada en mayo de 2000. Ey Hka se acuerda de que le avisaron con un mes de antelación, probablemente para que vendiera su ganado y organizara la marcha de su familia. Los habitantes de las aldeas adyacentes, aprovechándose de su situación, le compraron el ganado por una tercera parte de su verdadero valor. Le dijeron que podía llevar consigo todo lo que pudiera transportar. “Tuvimos que andar durante un día entero por el bosque. Y yo sólo podía llevar a mis hijos”, dice. Finalmente, llegaron a una carretera donde un camión llevó a los aldeanos a 300 kilómetros al sur. Las autoridades de Wa meridional dieron la bienvenida a los aldeanos en su nuevo hogar con algunos materiales para tejados y poco más. El marido de Ey Hka, que ya estaba enfermo, falleció poco después de su llegada. El paludismo, avivado por las altas temperaturas y las aguas estancadas, se llevó a cuatro de sus diez hijos. Como la mayoría de los habitantes de su aldea, Ey Hka no pudo hacer otra cosa sino dedicarse de nuevo al único medio de subsistencia que conocía —trabajar para unos agricultores vecinos dedicados al cultivo de la adormidera por medio dólar al día. Aik Sey, el jefe de la aldea, confiesa que los dos primeros años fueron sumamente duros. De los 92 hogares que había en un principio sólo quedan 60. En 2001 murieron 44 personas —más del 10% de la población de la aldea. La desnutrición compitió con el paludismo en cobrarse víctimas. Una comida fija al día era signo de riqueza y casi la mitad de los residentes no podían contar ni siquiera con un cuenco de arroz al día. UPDATE 9 DICIEMBRE 2002 ignifica la dea de Myanmar Así era la vida en Son Ke en marzo de 2002 cuando la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito inició su programa de asistencia humanitaria. La Oficina prestó su apoyo en los ámbitos de la agricultura, la sanidad, la enseñanza y la infraestructura. Entre los primeros proyectos de base figuraban un equipo sanitario móvil, el saneamiento del agua y el medio ambiente y la distribución de ropa y arroz. Se entregaron mejores variedades de semillas y se enseñaron técnicas agrícolas básicas para promover la nutrición y la seguridad alimentaria. Se suministró electricidad para accionar una bomba de agua y, finalmente, se construyó una escuela. La Oficina contra la Droga y el Delito envió a uno de sus funcionarios locales con carácter permanente para que actuara como facilitador del desarrollo comunitario. En octubre de 2002, Aik Sey se encuentra ante una escuela de bambú de la que salen canciones infantiles que constituyen la música de fondo. Los cambios que se han registrado en su aldea le abruman. Dice que la incidencia del paludismo y la tasa global de mortalidad han caído en picado —sólo se ha registrado un caso de paludismo desde abril de 2002. Mientras se pasea por la aldea, Aik Sey señala huertas plantadas con cosechas lícitas, lo que constituye un paso más hacia la autosuficiencia. La aldea de Son Ke no solo ha logrado la suficiencia alimentaria, sino que de hecho hay excedentes. Aik Sey dice que la comunidad proyecta invertir sus ingresos complementarios en adquirir un tractor y mecanizar la producción. En Son Ke puede comprobarse la mejora de la calidad de la vida, pero las repercusiones positivas son más trascendentales. En julio de 2002 se declaró zona libre de opio a la aldea y al valle circundante, estableciendo así un modelo de desarrollo y demostrando a las comunidades vecinas una salida viable. El futuro se muestra más prometedor con los hijos que le quedan a Ey Hka, que ahora van a la escuela. Ella sabe que hoy la vida en Son Ke es algo más que la mera supervivencia. UPDATE 10 DICIEMBRE 2002 ❖ Los estudios realizados en 2002 descubren nuevas tendencias de la producción de opio “La elevada magnitud del cultivo de opio en Afganistán este año no es la manifestación del fracaso de las autoridades afganas ni de la actuación internacional para ayudarlas a fiscalizar las drogas. La siembra de la cosecha de 2002 tuvo lugar durante el colapso total del imperio de la ley en otoño de 2001, mucho antes de que se hubiera formado el nuevo gobierno del Sr. Hamid Karzai”. Sr. Antonio María Costa, director ejecutivo de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito. Hace falta ayudar más a los afganos en su lucha contra el cultivo del opio Tras registrar un marcado descenso en 2001, la producción de opio se reanudó a gran escala en Afganistán en 2002 hasta alcanzar la cifra estimada de 3.400 toneladas métricas. No obstante, ese total sigue siendo inferior en un 25% a la mayor cifra de producción de la historia registrada en 1999 (4.600 toneladas métricas). Además, el 90% de los cultivos sigue estando concentrado en tan solo cinco provincias (Helmand, Nangarhar, Badakhshán, Uruzgán y Kandahar), de acuerdo con el estudio anual sobre la adormidera de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito publicado en octubre. La Oficina contra la Droga y el Delito ha llevado a cabo estudios anuales de la adormidera en Afganistán desde 1994. En 2002, los problemas de seguridad en algunas zonas del país obligaron a la Oficina a adaptar su metodología, utilizando para ello imágenes emitidas por satélite de alta resolución complementadas por una detallada verificación sobre el terreno, para lo que los técnicos recogieron las coordenadas de GPS de las plantaciones de adormidera y realizaron estudios concretos sobre el terreno. Los investigadores visitaron más de 900 aldeas en 16 provincias. La Oficina contra la Droga y el Delito volvió a abrir su oficina nacional en Kabul en febrero y nombró representante en el país a Mohammad-Reza Amirkhizi. La oficina participa en una amplia gama de proyectos, entre los que figuran el fortalecimiento de la comisión de fiscalización de drogas de Afganistán, la asistencia a los sectores de represión y justicia penal y la cooperación transfronteriza con los Estados vecinos en la lucha contra los estupefacientes. La Oficina también dedica su labor a un contrato social experimental con agricultores de las provincias de Kandahar y Badakhshán, por el que se les proporcionan pequeñas cantidades de ayuda financiera en el entendimiento de que produzcan cultivos comerciales distintos de la adormidera. Otra esfera de la actividad de la Oficina contra la Droga y el Delito en Afganistán es la que atañe a la reducción de la demanda de drogas. Tras un cuarto de siglo de enfrentamientos militares, un gran segmento de la población afgana se ha hecho adicta al opio y a la heroína. La Oficina analiza el grado del uso indebido de drogas en el país y desarrolla servicios de prevención, tratamiento y rehabilitación. UPDATE 11 DICIEMBRE 2002 Disminuye la producción de opio en Myanmar y la República Democrática Popular Lao Estudio del opio en Myanmar El primer estudio de la historia realizado por la Oficina contra la Droga y el Delito en la totalidad del Estado de Shan en Myanmar, donde se cultiva más del 90% de la adormidera del país, estimó que la producción de opio disminuyó en el país de 1.097 toneladas métricas en 2001 a 828 toneladas métricas en 2002. Como parte del estudio realizado en Myanmar, más de 150 investigadores visitaron casi 2.000 aldeas y midieron sobre el terreno 6.000 campos de opio. Afganistán fue el mayor productor de opio en 2002, pero Myanmar cuenta con una superficie cultivada más extensa, que asciende, según se ha estimado, a 81.400 hectáreas. En 2002, los agricultores de Afganistán produjeron 46 kilos de opio por hectárea en comparación con 10 kilos tan solo por hectárea en Myanmar. Las actividades que la Oficina desarrolla actualmente en Myanmar se concentran en el desarrollo alternativo, la promoción y la prevención. Estudio del opio en la República Democrática Popular Lao (la estimación de 2002 es preliminar) 300.000 RESTO DEL MUNDO 282.000 REPÚBLICA DEMOCRÁTICA POPULAR LAO 250.000 222.000 183.000 200.000 hectáreas Por tercer año consecutivo, la Comisión Nacional Lao de Fiscalización y Supervisión de Drogas llevó a cabo, con apoyo técnico de la Oficina contra la Droga y el Delito, un estudio de la adormidera en el país. El estudio estimó que en 2002 había 14.052 hectáreas de adormidera cultivadas, lo que representa una reducción de la superficie total de adormidera de más del 18% en comparación con la estimación de 2001. El estudio confirmó la continuación de la tendencia a la baja del cultivo de la adormidera en la República Democrática Popular Lao desde 1998, año en que el cultivo alcanzó un total estimado de 26.800 hectáreas. CULTIVO ILÍCITO MUNDIAL DE ADORMIDERA 1990-2002 150.000 144.000 MYANMAR 100.000 50.000 AFGANISTÁN 1990 1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 Los tres estudios de la adormidera forman parte del mandato de la Oficina contra la Droga y el Delito de ayudar a los Estados Miembros a vigilar las tendencias de las drogas ilícitas en todo el mundo con objeto de conocer mejor la magnitud y la evolución del problema y formular las respuestas más eficaces. PRODUCCIÓN ILÍCITA MUNDIAL DE OPIO 1990-2002 Para más información visite: http://www.odccp.org/ odccp/crop_monitoring.html (la estimación de 2002 es preliminar) 7.000 RESTO DEL MUNDO ❖ RESUMEN: Se estima que bastante más del 90% del opio y la coca ilícitos tiene su origen en Afganistán, Myanmar y la República Democrática Popular Lao en Asia; y en Bolivia, Colombia y Perú en América Latina. toneladas métricas 6.000 5.620 5.000 5.764 REPÚBLICA DEMOCRÁTICA POPULAR LAO 4.691 4.600 4.000 MYANMAR 3.000 2.000 1.626 AFGANISTÁN 1.000 1990 1991 1992 1993 1994 1995 1996 1997 1998 1999 2000 2001 2002 UPDATE 12 DICIEMBRE 2002 ❖ El modelo de desarrollo sostenible del Perú Las familias campesinas de los depauperados y remotos valles andinos del Perú tienen pocas opciones para enfrentarse a unas condiciones socioeconómicas muy duras. Atrapados entre la presión de los narcotraficantes y los grupos insurgentes, el cultivo de la coca suele ser la única fuente de ingresos posible. La meta de la labor de desarrollo alternativo de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito en los valles cocaleros del Perú es la de cambiar la situación. En regiones como los valles fluviales de Ucayali, Huallaga y Aguyatia, la Oficina colaboró con los campesinos para determinar e implantar un nuevo cultivo viable —la palma oleaginosa— que ofrece prometedoras oportunidades en el mercado interno. La producción de aceite de palma es una actividad compleja. Los cultivos de palma son permanentes y exigen una fase de producción agrícola prolongada (tres años) antes de la primera cosecha. Además, su cultivo precisa una mano de obra agrícola intensiva. Plantar una hectárea de palmas cuesta 800 dólares de los EE.UU. y, de esta cantidad, los campesinos aportan mano de obra por un valor equivalente a 450 dólares. El programa de la Oficina contra la Droga y el Delito proporciona la cantidad restante que se necesita para semillas y asistencia técnica. También negocia con el Ministerio de Agricultura y los gobiernos regionales créditos para fertilizantes y la rehabilitación de carreteras de acceso. A la complejidad del cultivo contribuye el hecho de que resulte necesaria una planta de extracción de aceite para extraer dos productos, el aceite de palma crudo y el aceite de palmiste, antes de que se puedan vender a las refinerías. Los proyectos de desarrollo alternativo de la Oficina DELIA ISUIZA, de 42 años, ha sido beneficiaria del programa desde 1994. ❖ RESUMEN: Actualmente, cada familia que tiene un promedio de cinco hectáreas de cultivos de palma gana 3.500 dólares de los EE.UU. al año y hay posibilidades de crecimiento. “El día de la cosecha, recojo la palma, corto la fruta y mi marido se la lleva a la empresa para venderla. Solían decir que las mujeres no trabajaban, ¿no es cierto? Puede que haya algunas mujeres que no ayudan a sus maridos, pero desde que nos hemos estado organizando se pueden comprobar los resultados de nuestro trabajo. ¡Nada nos parará a las mujeres!” UPDATE 13 contra la Droga y el Delito se basan en la participación en los costos. La Oficina suele aportar dos terceras partes de la cantidad estimada de 1 millón de dólares EE.UU. que cuesta una planta industrial y la otra tercera parte la negocian los campesinos a través de sus organizaciones. Cuando ya se han recaudado los fondos, los campesinos siguen contribuyendo, pagando para ello por los terrenos donde se construirá la planta y ayudando a levantarla. El primer proyecto de aceite de palma de la Oficina contra la Droga y el Delito dio comienzo en 1991 con el cultivo de 1.500 acres (625 hectáreas) y finalizó con éxito en 1997 al inaugurarse la planta de extracción de aceite en Neshuya, Ucayali. Se fundó una organización campesina de base denominada COCEPU (Comité de Palmicultores de Ucayali) para ayudar a crear capacidades locales de gestión de proyectos, servicios de extensión, la construcción de la planta de extracción y la comercialización del aceite. La totalidad de las 270 familias que participaban en el proyecto de cultivo de palma se asociaron a la organización, y la asociación, así como campesinos a título particular, se hicieron accionistas de la planta. DICIEMBRE 2002 Actualmente, disponiendo en promedio de cinco hectáreas de cultivos de palma, cada familia ingresa 3.500 dólares EE.UU. al año y hay posibilidades de crecimiento. Al ser accionistas de la planta, los palmicultores pueden acceder a créditos, han abierto cuentas bancarias y han construido casas. En el plano regional, se reconoce que el proyecto es un modelo de desarrollo agrícola sostenible y contribuye a la diversificación de la economía regional. Además, la planta de extracción da trabajo a 30 personas. La Oficina Contra la Droga y el Delito ha puesto en marcha otros dos proyectos de palmicultura, uno en Aguaytia en el que participan 200 familias y otro en Caynarachi, en el Bajo Huallaga, en el que participan 400 familias. Ambos proyectos se iniciaron en 1999 y se prevé recoger las primeras cosechas a finales de 2003. El programa de la Oficina contra la Droga y el Delito tiene éxito gracias al compromiso a largo plazo de las familias campesinas. HECTOR ORÉ, de 56 años, ha sido beneficiario del programa desde 1991. NAZARIO ADRIANO, de 38 años, ha sido beneficiario del programa desde 1999. “Sí, por supuesto, la palma oleaginosa es un plan a largo plazo, pero los años pasan deprisa ... Los expertos dicen que hacen falta cuatro a cinco años. Mis plantas ya tienen seis meses.” “Sé que la gente quiere meterse en eso de la palma. Y yo les he dicho que están cultivando coca y la cosecharán cada tres meses. Con la palma, cosechamos todas las semanas durante el invierno y cada 15 días durante el verano, así que hay mucho beneficio. Tengo una cuenta en el Banco de Materiales y destino el dinero a pagar las letras que he firmado para mi casa.” UPDATE 14 DICIEMBRE 2002 El Secretario General de las Naciones Unidas visita Asia central Durante su primer viaje a Asia central, el Secretario General visitó Tayikistán, donde se reunió con el equipo de Naciones Unidas en el país para examinar su programa. En esta ocasión, el Sr. Kofi Annan visitó el Organismo de Fiscalización de Drogas de Tayikistán y lo presentó como ejemplo positivo de colaboración entre las Naciones Unidas y los gobiernos y una buena muestra de la labor que la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito lleva a cabo en todo el mundo para desarticular las actividades de los delincuentes. El Organismo tayiko se creó con financiación, capacitación y asistencia técnica de la Oficina. Tras haber cumplido tres años de existencia, el Organismo se ha convertido en un elemento principal para interceptar remesas de drogas ilícitas y desempeña un papel fundamental para coordinar las actividades de los organismos nacionales, los grupos de la sociedad civil y los contrapartes internacionales en la lucha contra el uso indebido y el tráfico ilícito de drogas. Los clubs de Viet Nam sirven de inspiración a los ex toxicómanos Los clubs de moda de Hanoi no son para bailar. Los clubs “B93”, creados para fomentar la autoayuda y el apoyo recíproco entre ex toxicómanos, son un ejemplo de la sostenibilidad de los proyectos de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito. En 1998, la oficina extrasede de la Oficina contra la Droga y el Delito en Viet Nam, en colaboración con el Gobierno, concibió un proyecto (B93) para hacer frente al elevado costo de organizar programas de tratamiento basados en centros y a la elevada tasa de recaídas con un enfoque complementario de tratamiento y rehabilitación basado en la comunidad. Cuando el proyecto B93 llegó a su fin, al principios del año 2000, su labor inspiró a los servicios proveedores de tratamiento, que crearon los clubs B93 como alternativa para prestar servicios de postratamiento y de capacitación laboral a ex toxicómanos. Los primeros clubs se establecieron en abril del 2000 en siete ciudades y provincias y en la actualidad existen más de 50 en Hanoi con casi 450 socios permanentes. Por regla general, los miembros de los clubs de la misma comunidad se reúnen todas las mañanas para hacer gimnasia o practicar deportes. Si alguien no aparece, se hace una comprobación para saber por qué y concretar el apoyo necesario en caso de que esté consumiendo drogas nuevamente. Una encuesta realizada el año pasado entre los miembros de los clubes concluyó que más del 70% se habían desenganchado de su toxicomanía. NOTICIAS DESDE EL TERRENO UPDATE 15 DICIEMBRE 2002 Brasil El pasado octubre se firmó un acuerdo entre la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito, la Policía Federal Brasileña e Itaipú Binacional, la empresa pública que explota la mayor central hidroeléctrica del mundo. La policía patrullará el río Paraná desde la presa del embalse de Itaipú hasta el Puente de la Amistad en la frontera de Brasil y Paraguay para tratar de impedir la inmigración ilegal, el contrabando de armas y municiones y el tráfico de estupefacientes, así como de sustancias químicas precursoras. Barbados La Oficina Regional del Caribe organizó un simposio sobre el tema “Potenciar el papel de los medios de comunicación en la lucha contra la corrupción” para altos representantes de esos medios en Barbados, Guyana, Jamaica y Trinidad. Los participantes formularon recomendaciones para lanzar una campaña mediática destinada a hacer frente a la corrupción; presionar a los gobiernos para que se replanteen las legislaciones gravosas sobre difamación; alentar a las editoriales de prensa para que fomenten el buen gobierno, la rendición de cuentas y la transparencia; y fomentar la formación en materia de periodismo de investigación. India La Oficina Regional para Asia meridional organizó una exposición de arte de once pintores indios muy conocidos que plasmaron de forma contundente en sus lienzos el vínculo entre el uso indebido de drogas y el VIH/SIDA. La exposición viajará por la India y otros países de la región para llamar la atención de los dirigentes, los políticos, la sociedad civil y el público ante este creciente problema. Uzbekistán La primera conferencia sobre la dimensión regional del uso indebido de drogas en Asia central, celebrada en Tashkent, reunió a más de 350 expertos, investigadores y ONG, con el objetivo de lograr un conocimiento más profundo del problema. Se examinaron los resultados de dos evaluaciones dirigidas por la Oficina contra la Droga y el Delito. En sus recomendaciones, la conferencia puso de relieve la necesidad de controlar la creciente tendencia del consumo de drogas inyectables, que se ha vinculado directamente a la propagación del VIH/SIDA. UPDATE 16 DICIEMBRE 2002 Nuevas publicaciones Afganistán Opium Poppy Survey 2002 La Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito publicó el pasado 24 de octubre su estudio anual sobre la adormidera en Afganistán, en el que se pone de relieve que, si bien la producción de opio registró un importante aumento en el país en 2002, el total se sitúa un 25% por debajo de la producción de 1999, que fue un récord. Además, el 90% del cultivo se sigue concentrando en cinco provincias (Helmand, Nangarhar, Badakhshán, Uruzgán y Kandahar). El estudio se sirvió de imágenes satelitales de alta resolución complementadas con una verificación exhaustiva sobre el terreno. Sport: using sport for drug abuse prevention Lessons Learned in Drug Abuse Prevention: a Global Review Con su análisis mundial de las lecciones aprendidas, este informe se propone facilitar la distribución de información sobre enfoques prometedores actuales y pasados de la prevención del uso indebido de drogas. Las lecciones se refieren al diseño y la preparación de proyectos, las alianzas y redes, los recursos, los enfoques, la capacitación, la sostenibilidad y la creación de redes. Fue preparado en colaboración con la Fundación Mentor. Cartel de Nakata Hidetoshi Nakata, el jugador más Como parte de la serie de guías orientativas editadas por el proyecto de la Red Mundial de Jóvenes de la Oficina contra la Droga y el Delito, en esta publicación se examina la manera en que el deporte puede servir para apoyar enfoques de la prevención del uso indebido de sustancias “de la juventud para la juventud”. Se estudian en ella los valores y las limitaciones del deporte, las formas de servirse del deporte para prevenir el uso indebido de sustancias por los jóvenes y la manera de poner en marcha un programa deportivo. joven de la historia que ha sido nombrado Futbolista Asiático del Año, se ha unido a la campaña “El deporte contra las drogas” de la Oficina contra la Droga y el Delito. Además de su brillante carrera profesional en Italia, donde juega en el AC Parma, Nakata fue uno de los jugadores clave de la selección nacional japonesa en el Campeonato del Mundo de 2002. Su sitio de Internet se puede visitar en www.nakata.net Calendario de actividades 3 a 7 de febrero de 2003 77.º período de sesiones de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes. Viena (Austria). 2 a 15 de abril de 2003 46.º período de sesiones de la Comisión de Estupefacientes. Viena (Austria). 16 a 17 de abril de 2003 Serie de sesiones a nivel ministerial de la Comisión de Estupefacientes. Viena (Austria). 13 a 22 de mayo de 2003 12.º período de sesiones de la Comisión de Prevención del Delito y Justicia Penal. Viena (Austria). Printed in Austria V.02-59669—December 2002—1,300 United Nations publication