RTS - Núm. 186 - Abril 2009 1 RT S Revista de Treball Social Directora: Montserrat Bacardit i Busquet Subdirectora: Rosa Mª Ferrer Valls Equipo de redacción: Manuel Miguel Pajuelo Valsera David Paricio Salas Pepita Rodríguez i Molinet Irene De Vicente Zueras Administrativa: Anna Pablos Ortuño Comité asesor: Rogeli Armengol Millans Montserrat Cusó Torelló Josefina Fernàndez Barrera Xavier Pelegrí i Viaña Milagros Pérez Oliva Carmina Puig Cruells Cristina Rimbau i Andreu Glòria Rubiol Gonzàlez Maria del Carme Sans Moyà Antoni Vilà Mancebo Diseño: Ester Lozano Vivó Corrección de estilo y traducción: Raül Cascajo i Orzáez Imprenta y maquetación: I.G. Santa Eulàlia. Sta. Eulàlia de Ronçana Depósito legal: B-19535/1968 ISSN: 0212-7210 Tiraje: 5.200 exemplars. Edita: Col. legi Oficial de Diplomats en Treball Social i Assistents Socials de Catalunya Portaferrissa 18, 1r 1a - 08002 Barcelona Tel. 93 318 55 93 - Fax 93 412 24 08 Adreça electrònica: [email protected] Subscripcions: www.tscat.org Junta de Gobierno (del Col. legi) Presidenta: M. Pilar Puig i Giner Vice-presidenta: Maria Ramos Miranda Secretaria: Carmen Martínez Esparcia Tesorera: M. Paz Cué Piedra Vocales: Sergi Carmona Romero (Vice-tresorer) Jordi Valls Llenas (Vice-secretari) Anna Argimon Paluzié Marisa Montes de Oca Aragón Vocales coordinadores/as de las delegaciones territoriales: Lleida: M. Carme Hernández Brezmes Manresa: Anna Carbonell Arrizabalaga Terres de l’Ebre: Xavier Joan Curto i Solé El equipo de redacción no se identifica necesariamente con el contenido de los artículos publicados. 2 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Sumario Sumario Editorial .....................................................................................................................................5 Dossier La immigració extranjera en Cataluña: perfiles y características Montserrat Solé i Aubia ................................................................................................................ 9 Pacte nacional per a la immigració. Un pacto para vivir juntos y juntas Oriol Amorós March y Meritxell Benedí Altés ......................................................................... 23 Tránsito e incertidumbre Càndid Palacín Bartrolí ............................................................................................................... 30 Trabajo Social e Inmigración. Balance desde la profesión Josep Vilarnau i Vila .................................................................................................................. 42 Interès professional Las personas “casi mayores”: inclusión y exclusión social Maria Camino Gastón Sola y Dolors Jordán i Vendrell .......................................................... 65 Discapacidad y Trabajo Social: una mirada sobre los enfoques y los derechos sociales Carmen Barranco Expósito ..........................................................................................................81 De la bioética clínica a la bioética social Ester Busquets i Alibés ............................................................................................................... 95 El Trabajo Social: influencias de la “reconceptualización” Montserrat Feu Closas ............................................................................................................... 101 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 3 Sumario Rosa Romeu recibe la Medalla al trabajo President Macià Rosa Maria Ferrer Valls ........................................................................................................... 113 Escola de Formació Social Sabadell-Terrassa. 50 años des pués Antònia Apolinar Martínez y Àngels Hellin Castro ............................................................. 116 Sección libre Interpretar la inmigración desde los cuentos con valores por Luis Alexis Maldonado.................................................................................................. 121 Natura y paz, por Marcel Galobart i Argemí .............................................................. 124 Libros El treball social en acció ................................................................................................. 127 El Trabajo Social Sanitario ............................................................................................. 129 El treball social en l’àmbit de la salut: un valor afegit ..................................... 132 La casa de los bastones.................................................................................................... 134 La Revista Publicaciones ........................................................................................................................ 137 Normas para la presentación de artículos en la Revista de Treball Social .................................................................................................................. 139 Boletín de suscripción ...................................................................................................... 141 4 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Editorial Editorial Hablamos de migraciones. Cataluña ha sido definida por historiadores, políticos y por medios de información como un país de acogida, donde la inmigración ha acabado siendo una necesidad estructural en nuestro sistema demográfico y económico. Los movimientos migratorios han estado presentes en muchos momentos de nuestra historia, movimientos motivados por falta de recursos y necesidad de crecimiento económico. En los años 1950-1970 los Países Catalanes recibieron grandes f lujos migratorios como efecto de la posguerra y el retroceso de las condiciones de vida en muchas regiones españolas, con crisis de subsistencia, agravadas por las políticas autárquicas del régimen franquista en su primera etapa, con un fuerte bajón de la agricultura y la minería de muchos territorios de España y que se orientó en buena parte a Cataluña fruto de la falta de mano de obra ante la expansión industrial. Éstos fueron años de dificultades tanto para los territorios de pertenencia como para los de llegada. Ciudades y pueblos que no tenían previsto ni habían programado la llegada de nuevos ciudadanos y que ofrecían puestos de trabajo, pero no los equipamientos y recursos sociales necesarios para vivir dignamente. Éstos fueron años de desarrollo político, social y económico de muchas dificultades, con el paso del tiempo se han presentado y explicado como años de gran crecimiento social y económico para Cataluña, pero también de dificultades para muchas personas y familias, especialmente las recién llegadas. Ya en el siglo XXI Cataluña vive un nuevo hecho: la llegada y establecimiento de migración intensa, persistente y de diferentes países del mundo, especialmente del sur. A los servicios sociales y los profesionales del trabajo social, nuevamente como en los años 60, les corresponde estar a primera línea, hacer la atención social a los ciudadanos recién llegados. Es por eso que hemos previsto dedicar dos números (éste y el próximo de la RTS) a presentar artículos de información, formación e intervención sobre aspectos sociales de la migración. La migración comporta repercusiones sociales de muchos niveles (demográficas, legales-jurídicas, económicas, laborales, de vivienda, de sanidad, de educación, de pluralidad religiosa, de convivencia, rechazo social y temor político, etc.). A menudo estas situaciones las vemos presentadas en los medios de comunicación y/o en ámbitos profesionales de manera parcial, pero desde el trabajo social las observamos RTS - Núm. 186 - Abril 2009 5 Editorial en su globalidad, tanto al nivel individual, familiar, como de colectivos, y es desde la intervención social que hay que ofrecer programas de atención global para las poblaciones recién llegadas. Estamos construyendo un estado del bienestar, diseñando políticas para ofrecer recursos y servicios para todo el mundo, pero desde los despachos de los trabajadores y trabajadoras sociales día tras día se constatan situaciones personales y familiares que no pueden atender sus necesidades básicas. Echando una ojeada a estas situaciones a menudo encontramos que los colectivos más desprotegidos de recursos personales, laborales y de redes sociales son los ciudadanos recién llegados. Observando y reflexionando sobre la realidad de los profesionales del trabajo social, una de las variables más presentes en el ejercicio profesional es la gran demanda asistencial; dicho de otra manera, la “presión asistencial”, la falta de recursos disponibles –especialmente falta de profesionales– y también la burocracia y lentitud de las respuestas administrativas, puntos todo ellos que afectan a la eficacia y la eficiencia de las acciones profesionales. Y no podemos olvidar la realidad de los no-ciudadanos, los invisibles, sin papeles ni derechos, que suponen un reto de primera línea para la profesión y la sociedad en su conjunto. Hacer frente a estas situaciones es una de las tareas que la profesión se tiene que plantear, mirar desde la profesión y andar por diferentes rutas y caminos para la construcción del tan comentado estado del bienestar social. 6 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Dossier La inmigración extranjera en Cataluña: perfiles y características Pacte nacional per a la immigració. Un pacto para vivir juntos y juntas Tránsito e incertidumbre Trabajo Social e inmigración. Balance desde la profesión RTS - Núm. 186 - Abril 2009 7 8 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Dossier La inmigración extranjera en Cataluña: perfiles i características Montserrat Solé i Aubia 1 Resumen El artículo expone las características de la inmigración extranjera que vive en Cataluña: los datos estadísticos, sus procedencias, culturas, religiones y lenguas que hablan, las edades y composición familiar, los puestos de trabajo que ocupan, así como su ubicación territorial en Cataluña. Palabras clave: Inmigración, extranjeros, reagrupación familiar, pluralismo lingüístico. Abstract This article presents the characteristics of the foreign immigrants living in Catalonia: statistical data, their origins, culture, religions and languages spoken, their age and family composition, the jobs they do as well as their territorial ubication in Catalonia. Key words: Immigration, foreigners, family composition, linguistic pluralism. 1 Diplomada en Treball Social y Licenciada en Ciències Polítiques i Sociologia. Jefa del Área de programación y formación. Secretaria per a la Immigració. Generalitat de Catalunya. [email protected] RTS - Núm. 186 - Abril 2009 9 La inmigración extranjera en Cataluña Introducción Muchos han sido los artículos y libros que se han escrito intentando explicar los fenómenos migratorios, sus causas y consecuencias y describiendo quiénes son los actores de estos fenómenos. La mayor parte de ellos hablan de cifras, de porcentajes, de fríos datos estadísticos y de grandes generalizaciones. El artículo que podréis leer a continuación es uno más, que lo único que lo hace diferente de los otros es que los datos son más actualizados y que se centra en el análisis de la realidad catalana. Pero antes de empezar querría hacer notar que detrás de estos datos hay personas como cualquiera de nosotros, con experiencias vitales y con unas grandes capacidades humanas que, con su esfuerzo, están ayudando a hacer avanzar nuestro país y nuestra sociedad. Detrás de la frialdad del análisis demográfico y estadístico hay vidas humanas, historias de éxitos y de fracasos, de ilusiones y frustraciones, de luchas y de desesperos y, sobre todo, de mucho esfuerzo y sufrimiento. En definitiva, de personas con nombre y apellido que conviven entre nosotros. En todo proceso migratorio hay un fenómeno de atracción (pull) y uno de expulsión (push). Hay, pues, un territorio que atrae a las personas a ir a vivir él, sea porque hay riquezas, porque hay falta de trabajadores, porque ya se han trasladado familiares o conocidos, porque hay relaciones comerciales, o porque se vive en libertad. Y a la vez, hay territorios que expulsan a su población: por falta de trabajo, por sobrepoblación, por razones políticas o religiosas, etc. Pero a todo eso hay que añadir otro factor: hace falta que haya ciertas relaciones 10 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 entre el país de emigración y el de inmigración, bien sean económicas y comerciales, históricas, de colonización y, evidentemente, de proximidad geográfica y cultural. Desde los inicios de la humanidad, muchos hombres y mujeres se han marchado del lugar donde nacieron, han emigrado. La mayoría lo han hecho por motivos económicos, políticos y religiosos, entre otros. Desde los inicios de la humanidad, muchos hombres y mujeres se han marchado del lugar donde nacieron, han emigrado. La mayoría lo han hecho por motivos económicos, políticos y religiosos, entre otros. Se podría decir, pues, que la migración es una condición inherente a la especie humana. Así pues, los procesos migratorios son un hecho natural que ha sucedido a lo largo de la historia de la humanidad y por todo el mundo. Pocas son las personas que deciden sin motivo alguno marcharse de su lugar de origen y dejar a su familia. Hay, pues, razones que las obligan a tomar esta decisión. Las razones para migrar son diversas, tan diversas como los individuos: mejorar su situación económica o profesional, reunirse con su familia, ampliar estudios, conocer mundo, huir por razones políticas o alejarse de un entorno social o de situaciones personales conflictivas “para empezar una nueva vida”. Aún así, las razones económicas y las razones políticas son las más comunes. Los movimientos de población tienen un fuerte impacto tanto en los países de origen como en los países de destino: impacto económico, impacto político e Dossier impacto cultural. De los beneficios del trabajo de los inmigrantes no se aprovecha sólo el país de residencia, sino también, en cierta medida, el país de origen, divisas que, a escala local, pueden significar una mejora importante para la familia, y, a escala estatal, una ayuda muy importante al crecimiento económico. El país acogedor se beneficia ya que los inmigrantes dan respuesta a su necesidad de una determinada mano de obra. Pero no sólo es un enriquecimiento económico, sino que también la inmigración supone la entrada de capital humano en un país. Un país rico es un país que necesita y recibe inmi-grantes. De un país pobre la gente emigra. La inmigración es, pues, un efecto de nuestra propia riqueza. La emigración supone superar una cierta selección natural. No emigran los más pobres, ni los viejos, ni los enfermos, sino los mejor preparados. En realidad, son pocos los que consiguen salir fuera del país, superar los obstáculos que encuentran por el camino, llegar al lugar de destino y establecerse. Así, contrariamente a lo que se cree, las personas que emigran no son necesariamente las más necesitadas sino las que tienen ya cierta capacidad para emprender el viaje: capacidad económica: para pagar los gastos del viaje o, sencillamente, para poder dejar a la familia sin su aportación económica durante un tiempo. capacidad relacional: disponer de una red familiar o de amistad que apoye la iniciativa tanto en el país de origen como en el de llegada. capacidad personal: tener un carácter emprendedor y decidido. A menudo, detrás del individuo que emigra hay una familia que apuesta su esperanza y sus recursos en esta persona por su capacidad personal. Las personas que emigran son las que tienen más capacidades y las más valientes. Cuando llegan aquí, sin embargo, se ven a menudo en situaciones que las convierten en débiles y en riesgo. Por lo tanto, las personas que emigran son las que tienen más capacidades y las más valientes. Cuando llegan aquí, sin embargo, se ven a menudo en situaciones que las convierten en débiles y en riesgo. A menudo, el inmigrante hace un paso atrás respecto de su situación en el país de origen cuando llega a otro país, obligado a menudo a ocupar los puestos de trabajo más precarios y los estratos más bajos de la sociedad. Su éxito en este proceso no depende, sólo, de las políticas públicas que se lleven a cabo. Está condicionado, también, y de manera decisiva, por las oportunidades de trabajo y por las expectativas de movilidad social ascendente que la estructura económica de la sociedad receptora les ofrece. Seguro que habrá conflictos, ya que los conflictos son inherentes a la gran mayoría de procesos dinámicos. En el caso de la inmigración, el solo hecho de tener que marcharse del lugar de origen y adaptarse a una nueva realidad comporta dificultades, y, a éstas, se tienen que añadir las dificultades de idioma y las diferencias culturales y sociales entre los recién llegados y los residentes en un territorio. También comporta, y a menudo se olvida, una voluntad de adaptación del conjunto RTS - Núm. 186 - Abril 2009 11 La inmigración extranjera en Cataluña de la sociedad a la nueva realidad. Es evidente que habrá un cierto número de personas que no encontrarán su sitio en la nueva sociedad, y eso generará problemas de adaptación, y también habrá grupos de personas que se resistirán a los cambios que la llegada de nuevos vecinos les provocan. Pero todo este dinamismo no es nuevo aquí. Cataluña no ha sido históricamente ajena a los movimientos migratorios: fenicios, griegos, cartagineses, romanos y germanos fueron llegando a lo largo de la Edad Antigua. Sarracenos y francos en la Edad Media. Occitanos e italianos en la época moderna. Muchos catalanes se tuvieron que marchar por motivos económicos y políticos desde finales del siglo XIX y primera mitad del XX. La llegada, ésta ya más conocida, de personas de diferentes partes del Estado español a partir de los años 20 del siglo pasado y, en los últimos 20 años, la llegada de personas de diferentes partes del mundo. Todas estas personas con diferentes orígenes se han arraigado en nuestras tierras y han ido construyendo lo que hoy somos. Es por eso que se ha popularizado la expresión que Cataluña es y ha sido tierra de acogida. Nuestra ubicación geográfica, el dinamismo económico y comercial han sido históricamente factores esenciales del crecimiento demográfico a través de la inmigración. En los últimos años, sin embargo, la diversidad de procedencias y la dimensión cuantitativa suponen un gran reto para el En los últimos años, sin embargo, la diversidad de procedencias y la dimensión cuantitativa suponen un gran reto para el conjunto de la sociedad y para los poderes políticos. 12 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 conjunto de la sociedad y para los poderes políticos. En el año 2000 el número de personas que no tenían la nacionalidad española era de 181.590. Este año la cifra es de 1.138.427 personas. Eso supone un incremento de un 520% en 8 años. A este incremento de las cifras se tiene que sumar la gran heterogeneidad de orígenes: provienen de más de 180 países y hablan más de 250 lenguas. La razón principal que impulsa a la población que nos llega actualmente no es nueva. Pero sí que podemos encontrar una serie de elementos diferenciadores: 1. La necesidad de disponer de unas autorizaciones para residir y trabajar en nuestro país. 2. Provienen de países extranjeros, con una lengua, cultura, religión y rasgos físicos más distantes y diversos. 3. Su distribución territorial, ya que no se dedican sólo a tareas industriales, sino, y sobre todo, al sector servicios, a la construcción y a la agricultura. Eso ha hecho que buena parte de los inmigrantes haya encontrado trabajo en zonas rurales o semirurales donde había habido tradicio-nalmente poca o nada de inmigración. Algunos datos básicos Aunque los primeros inmigrantes de origen extranjero llegaron a Cataluña a finales de los años 80 y principios de los 90, no ha sido hasta la entrada del nuevo siglo que las cifras han tenido un fuerte incremento. En 8 años la población catalana ha crecido más de 1 millón de personas, y más del 80% de este crecimiento es fruto de la aportación de la inmigración extranjera. Antes de entrar a hablar de cifras hay Dossier que definir de quién estamos hablando. Hay que diferenciar en primer lugar a las personas inmigradas (personas que han hecho un proceso migratorio) de las personas extranjeras (personas que no tienen la nacionalidad española). Los únicos datos estadísticos de que se dispone son los de las personas que tienen otra nacionalidad de la española. Por lo tanto, hablaremos de personas extranjeras, algunas de las cuales pueden haber hecho también un proceso migratorio. Eso significa que en los datos estadísticos no están contabilizadas las personas que adquieren la nacionalidad española de sus antepasados (como es el caso de muchos latinoamericanos) o los que la adquieren porque llevan suficiente tiempo residiendo en España. Los primeros, a pesar de no constar en las cifras, son considerados socialmente inmigrantes dado que son personas que han llegado recientemente. Por otra parte, seguramente a muchas de las personas que sí que constan en los datos estadísticos porque, por la razón que sea, no han adquirido la nacionalidad española, ya no las tendríamos que considerar inmigrantes ya que hace muchos años que viven con nosotros, y algunas han nacido en España, y, por lo tanto, no han hecho nunca ningún proceso migratorio. Otra complejidad estadística que tenemos es la fuente de los datos. Una de las fuentes básicas es el Ministerio del Interior, que contabiliza a las personas con autorización de residencia pero que facilita los datos por países de origen y por provincias españolas. La otra fuente estadística son los diferentes empadronamientos. En este caso se dispone de los datos por procedencias y municipios, y constan todas las personas con independencia de su situación administrativa. Según los últimos datos oficiales del Ministerio del Interior, referentes a 31 de marzo de 2008, en Cataluña había 907.703 extranjeros con autorización de residencia, el 21,6% del total de extranjeros del Estado español (4.192.835), aunque nuestro peso demográfico es de un 16%. Evolución de la población empadronada en Cataluña. 2000-2008 Fuente: INE. Explotación estadística del padrón de habitantes. Cifras oficiales a 1 de enero de cada año. (*) Secretaria per a la Immigració. Cifras provisionales a 1 de enero de 2008. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 13 La inmigración extranjera en Cataluña Del recuento de los padrones municipales, a 1 de enero de 2008, se observa que el total de población extranjera empadronada es de 1.138.427 personas, lo que representa un 15,4% respecto al total de la población catalana. Por lo tanto, hay una diferencia entre unas cifras y las otras de 230.724 personas que se podrían considerar personas que están en situación irregular. El porcentaje de un aproximado 20% más de población en situación irregular se ha dado a lo largo de todos los años y tiene que ver con la política de extranjería que se ha llevado a cabo, con las características del mercado de trabajo español, con altos índices de economía su- mergida y con el conjunto de trabajos que la población española no está dispuesta a aceptar; y con la proximidad geográfica, cultural y relacional con zonas con unos niveles de riqueza muy inferiores a los que ha conseguido en los últimos 30 años nuestro país. Así pues, cubriendo esta demanda implícita de puestos de trabajo, la población extranjera reúne una serie de características como: la mayoría está en plena edad laboral (921.582), la población infantil (172.929) es mayoritariamente de las personas que ya llevan un cierto tiempo en nuestro país, y la población de más de 60 años (43.916) es mayoritariamente de países comunitarios (Francia, Alemania y Gran Bretaña). Población empadronada en Cataluña a 1 de enero de 2008. Cifras provisionales (84,6%) POBLACIÓN TOTAL Género Hombres Mujeres Edad 0 a 14 15 a 29 30 a 44 45 a 59 60 a 74 75 i més Población total 7.390.083 100,0 3.676.822 49,8 3.713.261 50,2 1.062.829 1.385.157 1.946.154 1.405.840 971.916 618.187 14,4 18,7 26,3 19,0 13,2 8,4 (15,4%) Nacionalidad española 6.251.656 100,0 3.052.289 48,8 3.199.367 51,2 889.900 1.028.393 1.517.888 1.269.288 936.976 609.211 14,2 16,4 24,3 20,3 15,0 9,7 Nacionalidad extranjera 1.138.427 100,0 624.533 54,9 513.894 45,1 172.929 356.764 428.266 136.552 34.940 8.976 15,2 31,3 37,6 12,0 3,1 0,8 Fuente: Secretaria per a la Immigració. Cifras provisionales a 1 de enero de 2008. El mercado de trabajo en el que se mueven se caracteriza, en general, por la inestabilidad, los bajos salarios, la falta de cualificación y la desregulación. Con respecto a los permisos de trabajo concedidos al conjunto del Estado español durante el año 2007, el principal sector de ocupación es el de servicios (49% de los permisos de trabajo), en el que destacan el servicio doméstico, el comercio (bien como venta ambulante, bien como agentes comerciales 14 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 y dependientes) y el sector de hostelería, seguido del sector de la construcción (20,2% de los permisos), la agricultura (13,2%), la industria (6,9%) y otras actividades no clasificables (10,7% restante). Con respecto a la afiliación en la Seguridad Social de los extranjeros residentes en Cataluña, observamos que el incremento de cotizaciones al sistema se produce esencialmente por las personas de nacionalidad extranjera. En marzo de 2008 el peso Dossier Evolución del número de trabajadores afiliados a la Seguridad Social en Cataluña Fuente: MTAS. Boletín de Estadísticas Laborales. Trabajadores Extranjeros Afiliados a la Seguridad Social. de las personas extranjeras suponía un 13,5% del total de cotizaciones. Con respecto a la composición familiar, en Cataluña el 45,1% son mujeres, que proceden mayoritariamente de los países de Latinoamérica, de la Europa del Este y de Marruecos. Por lo tanto, la incidencia masculina es mayoritaria, sobre todo en algunas de las procedencias como pakistaníes, indios y africanos. Pirámide de edades en Cataluña. 1 de enero de 2008 Mujeres Hombres Fuente: Secretaria per a la Immigració. Cifras provisionales a 1 de enero de 2008. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 15 La inmigración extranjera en Cataluña La incorporación de alumnos extranjeros al sistema educativo catalán hace que se mantengan las cifras globales de alumnos totales respecto del curso 97-98. Evolución del número de alumnos matriculados aCataluña Fuente: Departament d’Educació. Estadística de l’Educació. Una de las características de la actual inmigración en Cataluña es su dispersión territorial, ya que podemos encontrar población en casi todos los municipios catalanes. Aunque el peso demográfico de la presencia de extranjeros en Cataluña recae en términos absolutos en la demarcación de Barcelona, son, en cambio, las demarcaciones de Girona, de las Terres de l’Ebre, del Camp de Tarragona y el Ámbito de Ponent (Lleida) las que se encuentran, en términos relativos, por encima de la media de extranjeros empadronados. El Ámbito 16 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Metropolitano, el Alto Pirineo y Arán y las Comarcas Centrales quedan por debajo. Esta situación también se da a escala comarcal. Así, hay comarcas que se situan por encima de la media de su demarcación, como se muestra en el siguiente mapa: Cada una de las demarcaciones catalanas presenta rasgos específicos en la presencia de extranjeros según las regiones de procedencia. Esta heterogeneidad se refleja tanto en números absolutos como relativos. Dossier Peso de la población extranjera en las comarcas catalanas Media de Catalunya: 13,5% % de extranjeros sobre el total de población de cada comarca Hasta 10,0% De 10,0% a 13,5% De 13,6% a 17,0% Más de 17,0% Fuente: INE. Explotació estadística del padró d’habitants. Cifras oficiales a 1 de enero de 2007. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 17 La inmigración extranjera en Cataluña Procedencia por regiones i nacionalidades En Cataluña residen personas de más de 180 nacionalidades diferentes. Los principales países de procedencia extra- comunitaria son Marruecos, que continúa siendo el más numeroso con un 19,1% del total de extranjeros, Rumanía (7,7%), Ecuador (7,5%), Bolivia (5,5%), Colombia (4,2%), China (3,5%) y Argentina (3,3%). Primcipales nacionalidades de la población extranjera empadronada en Cataluña. 2008 Fuente: Secretaria per a la Immigració. Cifras provisionales a 1 de enero de 2008. Personas que proceden del continente europeo La inmigración de países europeos proviene básicamente de la Europa Comunitaria: Italia (48.711), Francia (33.534), Alemania (22.947) y el Reino Unido (20.640) son los países más representados. Es una inmigración que, en los tres primeros casos, desde el Tratado de Schengen ya no tiene ninguna dificultad 18 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 para residir y trabajar en España, por lo cual a menudo ya no se les considera inmigrantes. Hace falta destacar el incremento en los últimos años de los italianos, no tanto fruto de personas que provienen de aquel país sino de los argentinos y uruguayos que han recuperado la nacionalidad italiana de sus padres o abuelos y constan en nuestras cifras como extranjeros comunitarios. Dossier La inmigración procedente de la Europa del Este es más reciente, pero es la que está teniendo un incremento más acentuado. Los colectivos más importantes son los de Rumanía (87.673), Ucrania (15.776), Rusia (14.551) y Polonia (12.946). Es una población joven con un nivel de instrucción elevado que se ve obligada a trabajar en oficios menos cualificados. Las personas que provienen de Rumanía presentan un leve perfil más elevado de hombres (53,7%), con un 38% de 15 a 29 años y, aunque están repartidos en más de 700 municipios, viven principalmente en la ciudad de Barcelona, en Lleida, Reus, Tarragona y Sabadell. Los rumanos han tenido un incremento sostenido desde el año 2001 presentando una fuerte tendencia a la irregularidad administrativa que durante el último año ha disminuido. Provienen básicamente de Bucarest y de Transilvania y, en concreto, de la provincia de Clujnapoca, así como de Moldavia. Hablan rumano, una lengua con unos 5.000 carácteres iguales al español y son mayoritariamente de la Iglesia Ortodoxa de rito bizantino. Hay que destacar también la presencia itinerante en las ciudades de personas de etnia gitana que provienen de zonas determinadas del país. Contrariamente a lo que se cree, el nomadismo es más fruto de la inmigración que de su cultura originaria, ya que en Rumanía acostumbran a formar parte de poblaciones asentadas en pueblos y barrios, y donde pretenden volver habiendo construido una casa con el dinero ganado en el proceso migratorio. Los ucranianos presentan unas cifras muy equilibradas en cuanto a género, y la media de edad mayoritaria es de 30 a 44 años. Viven en más de 430 municipios ca- talanes, por encima de todos Barcelona, donde viven el 26,4% de los ucranianos, y siguen Guissona y Lleida. Provienen sobre todo de la zona de Kiev, culturalmente son de religión ortodoxa de rito bizantino y, sobre todo los que provienen del norte y de las zonas rurales, hablan el ucraniano, una de las lenguas eslavas orientales. El ruso es también una lengua muy hablada en Ucrania. Personas que proceden del continente africano Marruecos es el país con más personas residentes en Cataluña (217.531). Es el colectivo más antiguo y numeroso. En los asentamientos provisionales de la década de los 60, siguió el establecimiento de individuos primero, y de grupos familiares a partir de los años 70. Posteriormente, desde la segunda mitad de los 80 se registró el mayor flujo que no ha dejado de parar, acentuándose en los últimos años con la llegada de jóvenes y la venida de mujeres y de menores solos, además del incremento que ha comportado el reagrupamiento familiar. Es el colectivo, seguramente, más heterogéneo en cuanto a diversidad de procedencias, niveles de formación, niveles académicos y puestos de trabajo que ocupan. A esta diversidad se tiene que añadir que muchos de ellos son de origen amazic y que, por lo tanto, hablan algunas de las variedades dialectales de esta lengua (sobre todo los que vienen de la zona del Es el colectivo, seguramente, más heterogéneo en cuanto a diversidad de procedencias, niveles de formación, niveles académicos y puestos de trabajo que ocupan. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 19 La inmigración extranjera en Cataluña Rif, que hablan tarifit, y los que vienen de la zona del Atlas, que hablan la variante taixelhit. Las personas que han sido escolarizadas hablan el darija (el árabe hablado en Marruecos). Los marroquíes son culturalmente de religión musulmana sunita y de la escuela jurídica maliki. El 61% son hombres y el 74% tiene menos de 44 años. Hay personas de nacionalidad marroquí en casi 700 municipios catalanes, destacan numéricamente la ciudad de Barcelona, Reus, Mataró, Tarragona, l’Hospitalet de Llobregat, Manresa y Badalona. Los dos colectivos más importantes del África Subsahariana proceden de Senegal (16.649) y de Gambia (15.892). Su llegada a Cataluña se inició hacia los años 70 y se incrementó en los años 80, cuando se instalan básicamente en El Maresme, y desde allí se fueron desplazando hacia otras zonas de Cataluña, sobre todo de Girona. La gran mayoría son hombres solteros, relativamente jóvenes (25-30 años). Actualmente también hay un cierto número de familias, sobre todo de los primeros que llegaron. En los últimos años se incrementa el número de personas que provienen de países próximos a los anteriores: Nigeria (6.281), Mali (6.531), Guinea Conakry (4.433) y Ghana (4.244). Las personas subsaharianas tienen unos altos niveles de pluralismo lingüístico; las lenguas que hablan en función de la zona de procedencia son: mandinga, wolof, fula, sarahulé, además de las lenguas de colonización, inglés, francés o español según cada país. Son de religión musulmana con mucha diversidad de expresiones por las influencias del animismo y de diferentes religiones de cariz sincrético, originarias del África negra. Viven en unos 200 municipios de Cataluña, 20 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 entre los que destacan Salt, Mataró, Banyoles, Olot, Sabadell, Blanes y Girona. Personas que proceden del continente americano En Cataluña hay inmigrantes de todos los países de América. Los latinoamericanos proceden en parte de la inmigración de la década de los 70, que tenía un cariz principalmente político e ideológico y que huía de las dictaduras de aquella zona. Ésta era una población cualificada, formada por intelectuales, técnicos y profesionales. Pero el grueso de la población inmigrante actual es más reciente y ha experimentado un fuerte crecimiento en los últimos años por motivaciones básicamente económicas. Son: el ecuatoriano (85.237), el boliviano (63.047), el colombiano (48.209), el argentino (37.155) y el peruano (34.020). Brasil (26.985), Chile (17.344), Uruguay (16.631) y Paraguay (12.469) son las otras procedencias de esta zona. Los latinoamericanos, a excepción del Brasil, hablan español, aunque, como veremos en algunas procedencias, mantienen la lengua amerindia. Son culturalmente de religión católica, y se produce un fuerte incremento del número de seguidores de las diferentes iglesias evangélicas, sobre todo pentecostales. Los ecuatorianos provienen básicamente de la zona de Guayaquil y de Quito. Aparte del español la lengua amerindia más hablada es el quechua. El peso de las mujeres es ligeramente más elevado (52,7%), y el 37,4% tienen entre 30 y 44 años. Del año 2000 al 2004 tuvieron un incremento muy espectacular con un alto índice de irregularidad administrativa que ha ido disminuyendo en el último año. Hay ecuatorianos en más de 470 Dossier municipios catalanes, sobre todo Barcelona seguida de l’Hospitalet de Llobregat. De Bolivia provienen básicamente de Sucre y de la Paz. Las lenguas amerindias más habladas por los bolivianos son la variante del quechua (jetxua) y el aimará. Los bolivianos han llegado posteriormente y, sobre todo, a partir del 2004, y mantienen hasta la actualidad un fuerte incremento y unos altos índices de irregularidad administrativa. Son en un 57,1% mujeres de entre 15 y 44 años que viven en unos 500 municipios de Cataluña, destacan Barcelona y l’Hospitalet. De Colombia provienen de Bogotá, Cali y Medellín, y de Perú provienen sobre todo de Lima y de Trujillo, y hablan la variante del quechua (jetxua). De Centroamérica destaca la colonia dominicana (19.992), que procede mayoritariamente de las zonas rurales más pobres de Santo Domingo. En los últimos años, están creciendo los colectivos procedentes de Honduras (11.832) y Cuba (9.218). Personas que proceden del continente asiático La inmigración asiática es menos numerosa y más alejada culturalmente. Proviene básicamente de cuatro países: La inmigración de origen chino (39.974) es una inmigración específica, dentro de una tradición que hace que se puedan encontrar comunidades chinas en casi todos los países desarrollados y dedicados básicamente a la restauración y al comercio, aunque en los últimos años han experimentado una Tienen una red de relaciones y de infraestructuras de acogida muy organizada: a par tir de familias y clanes. diversidad económica en el ámbito del comercio de importación y exportación, la venta al mayor y en los talleres textiles. Tienen una red de relaciones y de infraestructuras de acogida muy organizada: a partir de familias y clanes. De China han venido, tradicionalmente, de la provincia de Zhejang, pero últimamente también lo hacen los de las provincias de Liaoning y Shandong, todas en el este. Así pues, además del chino mandarín se hablan otras lenguas como el wu y el min. El 54% de los chinos son hombres y la media de edad mayoritaria se encuentra entre los 30 y los 44 años. Los chinos han tenido un crecimiento sostenido desde los años 90, con un incremento más destacado en los años 2005 y 2006. Hay chinos en unos 300 municipios de Cataluña, a pesar de que el 30% están en la ciudad de Barcelona, seguida de Santa Coloma de Gramenet y Badalona. Los colectivos pakistaní (30.004) y de la India (13.490) provienen básicamente de la zona del Punjab. En el caso del Pakistán del área de Rawalpindi. Así pues, además del urdu, que es la lengua oficial, hablan como lengua materna el panyabi, que los pakistaníes escriben en el alfabeto árabe y los indios en el alfabeto hindi. Los pakistaníes son mayoritariamente musulmanes chiitas, y los indios pueden ser sijs o bien seguir el hinduismo o bien el budismo. Los dos colectivos son mayoritariamente masculinos (87,3%) y de edades comprendidas entre los 30 y los 44 años. Más de la mitad viven en Barcelona ciudad, seguida de Badalona y más de 150 municipios. Desde el año 2000 han tenido un crecimiento importante con algunas puntas los años 2003 y 2006, y con una irregularidad administrativa estable. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 21 La inmigración extranjera en Cataluña Los filipinos (8.550), que junto con los chinos compartían tradicionalmente los primeros lugares de procedencia asiática, constituyen una consolidada corriente inmigratoria que se intensificó a finales de los años 70 y principios de los 80. Desde finales de los 90 tiene un crecimiento muy moder ado. Tradicionalmente estaba compuesta sobre todo por mujeres, que se ha ido equilibrando con el paso del tiempo. La mayoría habla el tagal, y los que viven en Cataluña practican la religión cristiana. Como todos los asiáticos, es un colectivo bastante hermético, con una sociabilidad básicamente endogámica y con un talante poco conflictivo. Conclusión Esta fotografía actual de la inmigración de Cataluña variará, como lo ha hecho hasta ahora. Las cifras cambian y las procedencias también. Pero lo que se mantiene estable es la demanda de un cierto tipo de mano de obra que es producto del desarrollo económico y del nivel de vida que hemos conseguido en estos últimos años. La necesidad de la inmigración se ha convertido en un hecho La necesidad de la inmigración se ha convertido en un hecho estructural de nuestra sociedad. La globalización del mundo en el que vivimos es una realidad que supera las fronteras locales. estructural de nuestra sociedad. La globalización del mundo en el que vivimos es una realidad que supera las fronteras locales. La evolución nos lleva hacia una sociedad cada vez más abierta, interconectada y multicultural. No podemos ir contracorriente. Tenemos que ser capaces de ayudar a hacer entender este hecho a los ciudadanos. Tenemos que tener la habilidad de pensar en términos globales y actuar en términos locales, dando un tratamiento normalizado al fenómeno de la inmigración que permita afrontar los posibles conflictos que puedan surgir y que, al mismo tiempo, destaque los aspectos positivos y el enriquecimiento que supone para todos el contacto entre diferentes culturas. El día que ya no vengan personas a vivir y a trabajar a Cataluña será, sin duda, un indicador de que tenemos un grave problema. Bibliografía Departament d’Educació de la Generalitat de Catalunya. Explotacions estadístiques d’educació anuals. Institut d’Estadística de Catalunya. Explotacions estadístiques del padró d’habitants anuals. Ministerio de Trabajo e Inmigración. Explotacions estadístiques laborals anuals. 22 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 SOLÉ i AUBIA, Montserrat. La immigració estrangera a Catalunya: la il .lusió d’un viatge”. Fòrum [revista electrònica]. Núm. 7. Departament de Benestar i Família de la Generalitat de Catalunya, 2000. SOLÉ i AUBIA, Montserrat. Los Pakistaníes en España. Revista CIDOB d’Afers Internacio- nals. 2005, Núm. 68, pp: 97118. ISSN 1133-6595. SOLÉ i AUBIA, Montserrat. ¿Quién son los Pakistaníes que viven en España?. Revista de Servicios Sociales y Política Social. Consejo General de Colegios de Diplomados en Trabajo Social, 2005, Núm. 72, pp: 117-134. ISSN 1130-7633. Dossier Pacte nacional per a la immigració. Un pacto para vivir juntos y juntas Oriol Amorós March1 y Meritxell Benedí Altés2 Resumen El Govern de Catalunya, los grupos parlamentarios, las entidades municipalistas, los agentes económicos y sociales y las organizaciones miembros de la Mesa de Ciudadanía e Inmigración, en representación del tejido asociativo vinculado a la gestión de la inmigración, firmaron el 19 de diciembre de 2008 el Pacte Nacional per a la Immigració, que da las directrices de las políticas de gestión de la inmigración en los próximos veinte años. El Pacte Nacional per a la Immigració prevé 112 acciones: reforzar 65 políticas vigentes y emprender 51 medidas nuevas, con un gasto público de 3.894 millones de euros en los próximos cuatro años. El Pacte Nacional per a la Immigració explica qué nos ha pasado, escucha las demandas de la población y les da respuestas. Palabras clave: Inmigración, flujos migratorios, mercado de trabajo, servicios públicos, identidades, cultura pública común, participación, governanza, políticas de inmigración. Abstract The Government of Catalonia, the parliamentary groups, the municipalist entities, the economic and social agents and the member organizations of the Table of Citizenship and Immigration, representing the fabric linked to the management of immigration, signed the National Pact for Immigration on 19th December of 2008, which creates the guidelines of the immigration management policies for the next twenty years. The National Pact for Immigration foresees 112 actions: reinforcing 65 valid policies and creating 51 new measures, with a public expense of 3.894 million euros for the next four years. The National Pact for Immigration explains what has happened to us, listens to the demands of the population and gives answers. Key words: Immigration, migrant fluxes, labour market, public services, identity, common public culture, participation, government, immigration policy. Secretario para la Inmigración, Generalitat de Catalunya. Ingeniero técnico agrícola. Máster en Función Gerencial en las Administraciones Públicas por ESADE. [email protected] 2 Directora del Pacte Nacional per a la Immigració. Historiadora. Máster en Historia del Mundo Contemporáneo por la Universidad de Barcelona. [email protected] 1 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 23 Pacte nacional per a la immigració El Govern de Catalunya, los grupos parlamentarios, las entidades municipalistas, los agentes económicos y sociales y las organizaciones miembros de la Mesa de Ciudadanía e Inmigración, en representación del tejido asociativo vinculado a la gestión de la inmigración, firmaron el 19 de diciembre de 2008 el Pacte Nacional per a la Immigració, que da las directrices de las políticas de gestión de la inmigración en los próximos veinte años. Éste es un amplio acuerdo que ha sido consensuado después de un proceso de diagnosis, consultivo, participativo y de negociación en el que han participado unas 2.000 personas, que propone gestionar los flujos migratorios y el acceso al mercado de trabajo, adaptar los servicios públicos a una sociedad diversa y alcanzar la integración en una cultura pública común. Un proceso de elaboración que ha sido una práctica de gobernanza compartida de gobierno relacional y participativo, donde los consensos han sido fruto de la puesta en común del conocimiento y la práctica de los diferentes agentes que gestionan y piensan el hecho migratorio. Un proceso que no se extingue con la firma del Pacte, sino que justo empieza. Que toma la experiencia y el conocimiento existentes y propone un punto y aparte para mirar el futuro. Porque era del todo necesaria una reflexión y una práctica común de planificación en relación a la inmigración, que nos ofreciera un nuevo acuerdo social. Y es que el Pacte no tiene otro objetivo que el de hacer posible un nuevo acuerdo para vivir juntos y juntas. El Pacte Nacional per a la Immigració prevé 112 acciones: reforzar 65 ?políticas 24 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 vigentes y emprender 51 medidas nuevas, con un gasto público de 3.894 millones de euros en los próximos cuatro años. El Pacte Nacional per a la Immigració explica qué nos ha pasado, escucha las demandas de la población y les da respuestas. 1. Explica qué nos ha pasado Cataluña ha vivido una transformación demográfica extraordinaria en los últimos 10 años. En pocos años, hemos pasado de tener seis millones de habitantes a tener siete. Este hecho ha generado varios cambios, no sólo en el tejido productivo o en el crecimiento económico. El más significativo, quizás por ser el más visible, ha sido la transformación del paisaje humano de Cataluña. En ocasiones ha cambiado nuestro vecindario, los compañeros y compañeras de trabajo, la tienda de toda la vida, la escuela o la plaza. La inmigración está motivada por diferentes causas, todas ellas de carácter estructural. Las causas de este cambio son, entre otras: 1. Un fuerte crecimiento económico en sectores de mucha ocupación 2. Una natalidad decreciente de forma continuada entre 1977 y 1997 3. La incorporación de las mujeres al mercado de trabajo y las nuevas ocupaciones que este hecho ha generado. Eso hace que el asentamiento en Cataluña de personas de muy diversos orígenes no desaparezca de un día para el otro por motivos coyunturales. Como ha pasado anteriormente –hasta tres veces durante el siglo XX –, la inmigración del siglo XXI también ha venido para quedarse. El grueso del millón largo de personas Dossier extranjeras que son hoy nuevos catalanes y catalanas serán mañana ciudadanos y ciudadanas de pleno derecho. Por lo tanto, entendernos todos los que somos diferentes y queremos vivir juntos y juntas tiene que ser la primera prioridad del país. Así, lo más importante es hablar de integración, hablar de convivencia, hablar de futuro compartido. 2. Escucha qué dice la gente El Pacte Nacional per a la Immigració escucha qué dice la nueva ciudadanía y la que hace más tiempo que llegó. La sociedad catalana, ante la transformación vivida en estos últimos 10 años, necesita respuestas a las demandas que plantea, ya que todo cambio genera dudas. La sociedad catalana, ante la transformación vivida en estos últimos 10 años, necesita respuestas a las demandas que plantea, ya que todo cambio genera dudas. El conjunto de estas demandas se puede resumir en tres ideas: gestionar el fenómeno, evitar la competencia en los recursos públicos, vivir en una sociedad diversa, y no en una diversidad de sociedades. 3. El pacte da respuestas Para las demandas que se plantea la ciudadanía, desde el Gobierno debemos tener la capacidad de dar respuestas diversas que nos permitan afrontar una situación compleja, diversa y dinámica como es la gestión del fenómeno migratorio, respuestas que implican al conjunto de nuestra sociedad: el Gobierno, los entes locales, los agentes económicos y sociales, el tejido asociativo y los grupos parlamentarios. Respuestas que, en correspondencia con las demandas planteadas, dan lugar a los tres ejes del Pacte Nacional per a la Immigració: 1. Gestión de los flujos migratorios y acceso al mercado de trabajo. 2. Adaptación de los servicios públicos a una sociedad diversa. 3. Integración en una cultura pública común. Eje 1. Gestionar los flujos migratorios de acuerdo con el mercado de trabajo. Reto 1. Movilizar, en primer lugar, los recursos humanos internos, con especial atención a la población desocupada y al reagrupamiento familiar. Reto 2. Gestionar los flujos externos acercando legalidad y realidad. Reto 3. Gestionar los flujos migratorios de manera responsable con los países de origen. Cuando la ciudadanía nos pide gestión sobre los flujos migratorios lo hace para que éstos se produzcan con normalidad, se eviten situaciones de irregularidad y se planifiquen según las necesidades del país y de las personas que los protagonizan. Asumiendo la inmigración como un hecho estructural, tanto en periodos de crecimiento como en periodos de crisis, Cataluña apuesta por movilizar en primer RTS - Núm. 186 - Abril 2009 25 Pacte nacional per a la immigració lugar los recursos humanos internos hacia el mercado de trabajo. Hay que poner énfasis en el acceso al trabajo de las personas reagrupadas, el aumento de la tasa de actividad femenina y de la tasa de actividad juvenil, la formación ocupacional y la formación continuada. Un reciente estudio sobre las causas de la pobreza sitúa como factor de riesgo de exclusión de las familias la percepción de un único salario. El Pacte Nacional per a la Immigració entiende que es necesario que las familias cuenten con dos o tres salarios, y por eso se propone promover los cambios legislativos, los instrumentos necesarios y trabajar conjuntamente con la Administración del Estado para facilitar el acceso a la autorización de trabajo de las personas reagrupadas. Porque la movilización hacia el mercado del trabajo de este flujo se convierte en una de las primeras prioridades del Pacte y una oportunidad que hay que aprovechar, por varias razones: 1. Para mejorar el bienestar de las familias y hacerlas más fuertes ante las coyunturas económicas desfavorables. 2. Para avanzar en la igualdad entre hombres y mujeres. 3. Para mejorar el nivel de autonomía personal y de integración de las personas migradas por motivos familiares. 4. Para poner a disposición de los empleadores una mano de obra con residencia legal mucho más accesible que la contratada en origen. 5. Para moderar la demanda de nuevos flujos migratorios que se pueden alimentar con recursos humanos internos. 26 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 El Pacte Nacional per a la immigració quiere emprender con contundencia la lucha contra la economía sumergida, verdadero efecto llamada de la inmi-gración irregular y elemento que puede tensionar la competencia por el trabajo. Lucha que se podrá intensificar con los traspasos previstos en el Estatuto de Autonomía de Cataluña en materia de inmigración y en materia de trabajo, que ya se están negociando. Todos estos elementos sin dejar de lado que, como hecho estructural, la gestión de los flujos migratorios implica gestionar los flujos externos y coordinarlos con el desarrollo de los países de origen. Es decir que, a pesar del contexto de crisis en el que nos encontramos actualmente y del evidente interés por favorecer el acceso al mercado de trabajo de las personas desempleadas o que ya viven en Cataluña, no hay que perder de vista que las causas que motivan los flujos migratorios continuarán siendo vigentes cuando pase esta coyuntura. Eje 2. Adaptar los servicios públicos a una sociedad diversa Reto 1. Crear un servicio universal de acogida. Reto 2. Dimensionar los servicios públicos y garantizar el acceso a ellos a todas las personas. Reto 3. Reforzar la transversalidad y la coordinación interinstitucionales. En segundo lugar, el Pacte Nacional per a la Immigració aboga por la adaptación de los servicios públicos a una sociedad diversa. Cuando los ciudadanos y las ciudadanas no quieren tener la percepción de que compiten por los recursos públicos, hay que poner especial Dossier atención en las situaciones que pueden deteriorar la convivencia diaria en los barrios, en las plazas o en las calles. Por eso se propone adaptar los servicios públicos a la nueva realidad demográfica, tanto cuantitativa como cualitativamente. Esta nueva realidad no es la causa de los déficits de los servicios públicos, sino que hace evidente el déficit de financiación que sufre Cataluña, que requiere más recursos para dar respuestas a las nuevas demandas. Esta nueva realidad no es la causa de los déficits de los servicios públicos, sino que hace evidente el déficit de financiación que sufre Cataluña, que requiere más recursos para dar respuestas a las nuevas demandas. Así, plantea la creación de un servicio universal de acogida que fomente la autonomía personal y la movilidad social de las personas inmigradas. Propone que todas las personas que llegan a Cataluña dispongan de las herramientas necesarias para asegurar su autonomía: formación para conocer la sociedad de acogida, formación en lengua catalana, formación para entrar en el mercado de trabajo. Un servicio de acogida que incorporará las experiencias vigentes de los entes locales, el tejido asociativo y los agentes económicos y sociales. Al mismo tiempo se convierte en fundamental la adaptación de los servicios públicos, adaptación cuantitativa y cualitativa para asegurar a todas las personas el acceso a los servicios públicos, el equilibrio en su uso y evitar situaciones de competencia que pueden tensionar la convivencia. Adaptación en los servicios sociales, el servicio educativo, el servicio de salud, el servicio de ocupación, en la vivienda, el urbanismo, la seguridad ciudadana, la gestión cultural y la formación superior. Este proceso se ha venido produciendo en los últimos años pero requiere de un nuevo impulso. En último término, la adaptación de los servicios públicos implica también reforzar la coordinación entre las administraciones, los agentes económicos y sociales y la sociedad civil. Eje 3. Integrar en una cultura pública común Reto 1. Fomentar la participación en la vida pública. Reto 2. Hacer del catalán la lengua pública común. Reto 3. Convivir en la pluralidad religiosa y de creencias. Reto 4. Asegurar la igualdad entre hombres y mujeres e incluir la perspectiva de género. Reto 5. Reforzar las políticas dirigidas a la infancia, la juventud, las personas mayores y las familias. La integración como un proceso bidireccional y continuo. Y, en tercer lugar, la ciudadanía nos dice que quiere vivir en una sociedad diversa, y no en una diversidad de sociedades. Así, hay que fomentar la convivencia de todos y todas los que somos diferentes y queremos vivir juntos y juntas. Por eso, el Pacte Nacional per a la Immigració propone fomentar la integración en una cultura pública común, entendiendo la integración como un proceso RTS - Núm. 186 - Abril 2009 27 Pacte nacional per a la immigració bidireccional y continuo. Y entendiendo la cultura pública común como aquel espacio compartido de comunicación, de convivencia, de reconocimiento y de participación de nuestra sociedad diversa diferenciada. Garantizar la cohesión social y asegurar que el proyecto común que es Cataluña es compartido por todas las personas que vivimos en un territorio requiere de cinco ideas clave: la participación de todas las personas que residen en Cataluña y la lucha contra la formación de mecanismos de segregación; el uso del catalán como lengua común; el equilibrio entre el laicismo y la pluralidad religiosa; la incorporación de la perspectiva de género y la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres; y el refuerzo de las políticas dirigidas a la infancia, la juventud, las personas mayores y las familias. Se propone, pues, la participación de todas las personas que viven en el país para construir una cultura pública común. Participación social, cívica y también política. Por eso sitúa la necesidad de incorporar a las personas inmigradas y sus entidades al tejido asociativo común; y hace una especial incidencia en el trabajo comunitario. La necesidad de incorporar a las personas inmigradas y sus entidades al tejido asociativo común; y hace una especial incidencia en el trabajo comunitario. Así, propone reforzar el acceso a la participación en el tejido sindical, en el tejido empresarial, en el tejido asociativo, en las AMPA, en las asociaciones cultu28 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 rales, en las asociaciones de vecinos y vecinas y en los centros recreativos. Y el acceso al derecho político por excelencia, el derecho al voto, que se puede conseguir por dos vías: Por un lado, la participación en las elecciones municipales de aquellas personas que lleven cinco años de residencia legal continuada –o su equivalente, personas con residencia permanente. Queremos que estas personas cumplan todos sus deberes, con igualdad, como todo el mundo; que cumplan todas las normas comunes, que sean miembros de una cultura pública común. Y se lo podemos pedir con más coherencia, con más legitimidad, si estas personas, que legalmente pueden vivir para siempre entre nosotros, además de cumplir las leyes también las pueden hacer. Por el otro, en Cataluña viven más de 300.000 personas originarias de países que no fueron colonias españolas. A estas personas se los piden diez años de residencia continuada para acceder a la nacionalidad, lo que las conduce, en términos prácticos, a la obtención de la ciudadanía después de más de 17 años de residencia. Hoy éste no es un colectivo demasiado numeroso, pero en cinco años encontraremos que viven en el país centenares de miles de personas con más de diez años de residencia, con autorización legal y un proyecto de vida en Cataluña, y sin ningún derecho político. A menudo se ha producido un extenso debate en torno al derecho al voto de las personas extranjeras, y se ha insistido en la dificultad de su aplicación, por requerir de una reforma constitucional. En cambio, el acceso a la nacionalidad Dossier implica solamente la reforma del Código Civil. El Pacte también propone la consolidación del catalán como lengua pública común. Ante un contexto de diversidad lingüística creciente, se hace necesaria una lengua puente, un punto de encuentro, una puerta de entrada a la catalanidad, que permita a todas las personas que vivimos en el país comunicarnos y favorecer la igualdad de oportunidades. En Cataluña esta lengua común es la lengua catalana, que es la lengua propia del país, y es nuestra aportación singular a la diversidad cultural del mundo. Así como hace falta una lengua común para comunicarnos, para existir, también hace falta una expresión común de la pluralidad de creencias ante una sociedad cada vez más plural. Esta expresión común es el equilibrio entre aconfesionalidad y laicismo, que permitirá la expresión equilibrada de las diversas creencias religiosas de la población. Una cultura pública común es también aquella que garantiza la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres y la incorporación de la perspectiva de género a todos sus ámbitos. Una cultura pública común es también aquella que garantiza la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres y la incorporación de la perspectiva de género a todos sus ámbitos. Porque es indispensable asegurar el acceso de las mujeres inmigradas en igualdad de oportunidades a los recursos educativos, laborales y sociales y, a la vez, visibilizar su presencia y su papel en la construcción de la cultura pública común. Y, en último término, hace falta que esta cultura pública común proponga políticas de atención a la infancia, la juventud, las personas mayores y las familias. Es decir, políticas para el conjunto del ciclo de vida, ya que acercan a las personas por encima de su origen. El Pacte Nacional per a la Immigració es, pues, la propuesta conjunta que nos hacemos para decidir cómo queremos gestionar el hecho migratorio y, por tanto, el país que queremos, hoy, y de aquí a veinte años. Paco Candel, que representa en su persona una historia migratoria de referencia, decía: “Con los inmigrantes de ahora se producirá el mismo proceso que con los de antes y con los de siempre. Serán catalanes. ¡Quién lo duda!” El Pacte nos viene a decir que los que tenemos orígenes diferentes queremos hoy, en Cataluña, vivir juntos y juntas. Así de sencillo. Así de complejo. Bibliografía Un pacte per viure junts i juntes. Pacte Nacional per a la Immigració. Barcelona: Generalitat de Catalunya, 2009. ISBN 9788439379539 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 29 Tránsito e incertidumbre Tránsito e incertidumbre Anotaciones para el abordaje la cuestión migratoria Càndid Palacín Bartrolí 1 Resumen El siguiente texto aborda la cuestión migratoria desde lo social y lo psicológico. En lo social, empleando la distribución del espacio social en tres zonas debidas al sociólogo Robert Castel: inserción o afiliación, vulnerabilidad y exclusión o desafiliación, generando un interrogante sobre el lugar que ocupa el inmigrante en dicha distribución. En lo referente a lo psicológico, se intenta abordar el efecto del tránsito migratorio utilizando como marco los conceptos de imaginario (expectativas del tránsito migratorio), duelo (efectos de lo perdido) y estrés (consecuencias de un posible malestar prolongado). Finalmente se propone un modelo que integre los elementos citados. Palabras clave: Afiliación, exclusión, imaginario, duelo y estrés. Abstract The next document boards the issue of migration from social and psychological. In the social issue, in using distribution of social space in three areas of to sociologist Robert Castel: integration or affiliation, vulnerability and exclusion or disaffiliation, generating a question mark over the place of immigrants in summons distribution. With question to the psychological, to board the effect of transit migration using as a framework the notion of imaginary (expectations of transit migration), mourning (effects of the lost) and stress (consequences of a possible long malaise). Finally proposes a model that integrates all the questions. Key words: Affiliation, exclusion, imaginary, mourning and stress. Nota de agradecimiento: Agradezco al doctor Pere Notó su apoyo en la redacción del texto siguiente, así como en la dirección de la tesis de quien firma el artículo. 1 Diplomado en Trabajo Social. Licenciado en Psicología. Psicoterapeuta, miembro de la Escuela de Clínica Psicoanalítica con niños y adolescentes. Jefe Técnico de la Concejalía de Integración, Cooperación y Solidaridad del Ajuntament de Montcada i Reixac y profesor asociado de Trabajo Social en la Universidad de Barcelona. [email protected] 30 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Dossier El migratorio es un terreno atravesado por cuestiones que abarcan lo sociolaboral, lo económico, lo jurídico, lo psicológico y lo educativo, entre otros, requiere por tanto tratamientos multidisciplinares. Sin embargo, por diferentes cuestiones no dirimibles aquí, unos factores reciben mayor atención que otros. Fácil resulta escuchar enunciados del estilo: “todo es económico”, como si detrás de lo económico no hubiera una definición de sujeto deseante (consumista), creativo o un simple autómata, según la teoría económica que uno tome de referencia. Desde estas líneas se pretenden abordar aspectos sociales y psicológicos, cuya ligazón con otros factores resulta evidente: por ejemplo, lo jurídico/ administrativo preocupa, y de qué manera, configurando un malestar importante (podríamos decir un estresor) en una experiencia migratoria determinada; tal malestar puede ser fuente de sufrimiento y desestabilización (atendiendo a la vulnerabilidad del sujeto afectado), por tanto tendríamos la relación de varios factores que se determinan de una manera u otra (vulnerabilidad, indeterminación jurídica, estrés). No se pretende, por tanto, afirmar el dominio de lo psicológico o lo social (términos ya de por sí de alcance muy amplio) sobre otros planos teóricos, sino resaltar su existencia. ¿Por qué? Muchas miradas sobre lo migratorio realizan fotos lejanas que, pese a su necesidad, dejan al margen subjetividades, deseos, opciones y fracasos que acompañan a los actores principales de esta historia. Tomando la metáfora de la foto, lo que se intentaría es un zoom mediante conceptos de raigambre social: inserción o afiliación/exclusión, desafiliación y psicológica; imaginario, duelo y estrés, proponiendo finalmente un modelo que incorpore estas vertientes. Inserción, vulnerabilidad y exclusión, tres parámetros para pensar lo migratorio Una primera cuestión a tratar se refiere al estatus del inmigrante llegado al territorio, es decir, qué lugar ocupa en la estructura social y qué lugar ocupaba antes de iniciar el proceso. Sería cuestión de introducir el concepto de marginalidad y otro concepto con el que guarda una relación estrecha, a veces de sinonimia, exclusión. ¿Es el inmigrante un excluido? O también, ¿lo era en su país? ¿Correlacionan ambas cuestiones? No son tema de este texto las intrincadas sendas del llamado Estado del Bienestar (cargado de contradicciones y paradojas que precisan otro espacio), si bien es indudable que impregna lo migratorio, al configurar un marco en el que se apuntalan las expectativas de las personas procedentes del denominado Sur y, asimismo, el extranjero que alcanza el territorio se ubica en unas zonas determinadas de la estructura de ese Estado. Robert Castel, analista de la cuestión social, distingue tres zonas o espacios sociales que pueden ser útiles para aproximarse al tema: Una zona de integración o de inserción caracterizada por una situación laboral estable y la existencia de una red relacional (familia, amigos o contactos) que puede servir de sostén. Una zona de exclusión o margiRTS - Núm. 186 - Abril 2009 31 Tránsito e incertidumbre nalidad que tendría las características opuestas al primer grupo. Una zona de vulnerabilidad situada entre las dos anteriores y caracterizada por la inseguridad laboral y la fragilidad del entorno relacional. (Castel, 1992). Estas zonas son, obviamente, dinámicas, y los sujetos no están en una u otra por la impronta del destino, sino por los acontecimientos que viven. En palabras del propio autor: “El modelo propuesto no es estático. Se trata menos de ubicar a los individuos es estas «zonas» que de aclarar los procesos que les llevan de una zona a otra: por ejemplo, a pasar de la integración a la vulnerabilidad, o caer desde la vulnerabilidad a la inexistencia social” (Castel, 1997. Pág. 16). ¿Dónde ubicar a un inmigrante recién llegado desde este modelo? Si atendiéramos a las imágenes procedentes de Ceuta, Melilla o Canarias, la respuesta se nos iría de los labios casi por automatismo: la zona de exclusión (también denominada por el autor desafiliación), pero la situación no es tan clara. Si todos los inmigrantes que residen 2 en el territorio en situación de irregularidad estuviesen en la franja de la desafiliación, marginación o exclusión, la dimensión del problema sería enorme, la demanda prioritaria no serían los papeles (es decir, la estabilidad sociolaboral), sino las prestaciones básicas (techo y alimento, es decir la subsistencia) y, si bien estas últimas no están ausentes, distan de ser preferentes. Por tanto parece coherente ubicar al inmigrante llegado al territorio en la zona de vulnerabilidad, luego las circunstancias y su afrontamiento dirán hacia dónde se desliza. Se desprende, de la descripción de las anteriores zonas, que dos son los componentes relevantes para vincular a una persona a una u otra: el grado de afiliación y la situación económica. Y, en el proceso migratorio, suelen darse dos componentes: dinero, ya sea para el tránsito o la subsistencia hasta adquirir cierta estabilidad, y referentes de cualquier tipo (contactos) que puedan sostener el proceso o disminuir la incertidumbre sobre el mismo. Si tomamos estos dos elementos (dinero y contactos) como concurrentes 3 y partiendo de las zonas de Robert Castel antes descritas, podríamos considerar al inmigrante que todavía no ha iniciado su proceso en una franja próxima a la integración, ya que, sea cual sea la vía de acceso, requiere una inversión económica importante y el soporte de otras personas, de ahí que una de las pérdidas del sujeto que migra agrupadas por J. Achotegui sea el estatus (Achotegui, 2007). Lo Imaginario Si se infería, a partir de las zonas descritas anteriormente, que el inmigrante en origen no está en las esferas de la marginación,4 Sé que jurídicamente el término no es correcto, ya que la legislación vigente (Art. 30 bis. 1 Ley 4/2000) entiende como residentes a quienes disponen de algún título que les habilite para residir, y para ello no sirve el empadronamiento, por ello aquí se emplea en sentido coloquial. 3 El tema tiene, cómo no, contraejemplos: los jóvenes que atraviesan el estrecho bajo camiones, en general, cuyas edades no superan en la mayoría de los casos los dieciocho años. 4 Nuevamente debe mencionarse la existencia de contraejemplos como podrían ser los solicitantes de asilo, pero cuyo tratamiento escapa al objeto de este texto. 2 32 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Dossier debe suponerse que se trata de un sujeto movido por una serie de expectativas, asentadas a su vez en una serie de representaciones. Es el momento de introducir la noción de imaginario, concepto complejo y de uso en varias disciplinas, 5 que aquí se toma desde la vertiente psicoanalítica, la cual tampoco es unívoca. Jaques Lacan lo concibe como un registro entre otros registros (real y simbólico) ligándolo al estadio del espejo y otorgándole una función anticipatoria; en sus propias palabras: “es un drama cuyo empuje interno se precipita desde la insuficiencia a la anticipación y que para el sujeto, presa de la ilusión de la identificación espacial, maquina las fantasías que se sucederán desde una imagen fragmentada del cuerpo hasta una forma que llamaremos ortopédica de su totalidad…” (Lacan, 1984. Pág. 90). Por su propio nombre, la idea remite a la imagen. ¿De qué imagen se trata en el mundo migratorio? De Occidente, por supuesto (o el Norte, o Europa, como se le quiera llamar). Y, ¿cómo ha sido capturada tal imagen ortopédica? Suele hablarse de varias vías, la más común los medios de comunicación, cuyo alcance universal puede estar tanto en la génesis del deseo migratorio como en la formación de expectativas. Una segunda vía, relatada a menudo por los inmigrantes, vendría a través de aquellas personas que otrora migraron y retornan a su país en periodos vacacionales: lejos de traducir las dificultades de su propio proceso, otorgan una imagen triunfal de sí mismos. Un marroquí con varios años en el territorio que había adquirido cierta perspectiva sobre 5 su propio proceso recibía la presión de su hermano (en Marruecos, todavía) para que le ayudara a migrar. El primero consultaba sobre las posibles vías (regulares): “Le digo que espere a que encuentre una oferta de trabajo, no quiero que le pase lo mismo que a mí, pero me dice que siempre me quedo lo mejor para mí y él lo peor, si no le ayudo vendrá en patera”. Lo mejor, la migración; lo peor, seguir en Marruecos. No se trata de subsistencia, sino de mejora. No se trata de circunstancias objetivas (coste-beneficio de una acción) sino de una ilusión, una imagen posiblemente no contrastada y cuyo contraste (el hermano que ya ha pasado por el tránsito) no se desea escuchar; sin embargo, no se trata de algo carente de sentido, siguiendo al inclasificable Castoriadis: “Una imagen puramente caótica no es una imagen, una imagen está siempre un tanto organizada...” (Castoriadis, 2004. Pág. 67). La anterior cita confiere un segundo elemento de interés a la imagen: está organizada y, podríamos añadir, sirve para organizar conductas. No se pretende, evidentemente, dar una explicación totalizadora, para que alguien capture una imagen en tanto que atractor, se represente a sí mismo en este punto de atracción y organice sus actos para alcanzarlo. Cabe pensar que la realidad que le rodea y la previsión de futuro en el lugar donde se halla no son precisamente manantiales de esperanza (lo económico no está ausente, por supuesto). ¿Cómo se manifiesta este imaginario? Una mujer latinoamericana de 30 años indica: “Yo creía que sería distinto. Busco Para una visión exhaustiva puede consultarse el libro Lo imaginario: un estudio (Belinsky, 2007). RTS - Núm. 186 - Abril 2009 33 Tránsito e incertidumbre trabajo, pero como no tengo papeles no me pueden dar, ahora me ayudan en X y creo que el próximo mes tendré un trabajo en un gimnasio. Tengo que pagar el piso y no puedo. No puedo hablar con mis padres ni con mi familia. Me siento cansada y tengo pesadillas”. Las palabras tienen como complemento un llanto continuo. En una de sus frases más inquietantes indica: “Ya no sé cómo me ve la gente”. Había una expectativa cuyo contraste con la realidad pone en crisis la propia imagen. De la seguridad de hallar un empleo se pasa a la irregularidad (“ilegales”, según terminología coloquial), circulando con cautela para evitar a la policía (es de piel oscura y fácilmente detectable como extranjera) y con la desesperanza como incómodo aliado. En otros casos este imaginario continua vigente pese a los desniveles del presente y permite ciertos avances: “me gustaría ser ejecutiva”, explicaba una joven árabe fascinada por la imagen de Amanda de Melrose Place: “Para que el yo se preser ve, es necesario que el identificante se asegure la catectización de dos soportes: el identificado actual y el devenir de este identificado. Este «devenir» es aquello por medio de lo cual el yo se autoanticipa…” (Aulagnier, 1994. Pág. 30). Posiblemente el objetivo quede lejos, pero esta catectización del devenir, en palabras de Piera Aulagnier, servirá de sostén a sus estudios, ya de por si cuestionados por el entorno. Tendríamos, pues, dos versiones del imaginario, una que se ha deslizado hacia la penumbra por el peso de los hechos y otra que es capaz de sostener un determinado proceso a pesar de los hechos. Quedaría todavía una versión trágica, el imaginario que todo lo domina, irreducible, 34 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 cuya relación con la realidad es distante: “Yo soy inglés”, decía un joven gambiano sin vínculo alguno con Gran Bretaña y diagnosticado de esquizofrenia: la imagen sigue sosteniendo, pero en el extremo, estaríamos en el delirio. En palabras del gran psicoanalista André Green “…es el sistema de apuntalamiento indispensable para sostener al yo, que sólo sobrevive para atar su vida a la defensa de su delirio” (Green, 1990. Pág. 236). ¿Qué sucede durante el tránsito o una vez verificado éste? Es hora de dar audiencia al duelo. Se refiere a lo que se ha dejado, lo perdido en el trámite. Duelo ¿Qué sucede durante el tránsito o una vez verificado éste? Es hora de dar audiencia al duelo. Se refiere a lo que se ha dejado, lo perdido en el trámite. Es un concepto clásico introducido por Freud en el año 1915 (1917) en un prestigioso artículo denominado Duelo y melancolía, en el cual se relaciona la pérdida, la posibilidad de elaborarla y las relaciones de esta elaboración (o su ausencia) con la melancolía y con la manía, ligándolo todo a un aparato psíquico que todavía (en 1915) no tiene definitivamente conformado (lo estará en 1923), así como con el concepto de identificación y objeto (Freud, 1979). Ha tenido desarrollos y aplicaciones múltiples cuyo tratamiento requeriría otro espacio, sin embargo sí es de destacar la agrupación en siete áreas de los duelos de Dossier la migración establecidos por Joseba Achotegui: familiares y amigos; lengua, cultura; tierra; estatus social; contacto con el grupo étnico de origen y, finalmente, la propia seguridad física (Achotegui, 2007). En una frase mítica Freud indica: “La sombra del objeto cayó sobre el yo…” (Freud, 1979a. Pág. 246), enunciado referido al objeto perdido e incorporado en el seno del yo de un sujeto que ha tomado la vía melancólica. ¿Cae la sombra del país de origen sobre el yo del sujeto que ha migrado? ¿Cae la sombra de los familiares a los que dejó? O bien, ¿el sujeto busca puentes con los que transitar la pérdida? En un caso o en el otro, ¿cómo lo hace? “Me llamo Jaime”, decía un joven marroquí con varios años en el territorio. “¿Jaime? ¿No te llamas Ahmed?”, respondo. “Mejor Jaime”. Podríamos hablar de una negación,6 en este caso de aquello que nos representa en cualquier lugar, el nombre propio, y un nuevo nombre que representa a la vez otra negación, la del origen. La negación es considerada por Freud como una vía de acceso a la conciencia de una representación o contenido “a condición de que se deje negar. La negación es un modo de tomar noticia de lo reprimido; en verdad, es ya una cancelación de la represión, aunque no, claro está, una aceptación de lo reprimido” (Freud, 1979b. Pág. 253-254). Ahmed parece dividir su historia y hacer tabla rasa de parte de la misma, aquella que se desea negar. También es observable la salida opuesta: los amigos son del 6 país de origen, no se aprende el nuevo idioma, el sujeto se limita a trabajar y retornar a su casa sin un excesivo vínculo con el entorno. Nueva ficción, nueva negación: aquí se evita pensar que algo ha cambiado. Entre estas dos negaciones (si bien observables en la realidad pueden servir como tipos ideales) existe un abanico de posibilidades alrededor de cómo se tramita, evita, niega o se afronta algo que tal vez tenga como sede el sufrimiento. Y más allá, hay elementos facilitadores u obstáculos para su elaboración: no es lo mismo llegar al territorio bajo un camión solo que llegar junto a otros familiares. No es indiferente el país de origen: Senegal o Gambia tienen un grado de asociacionismo y soporte mutuo no observable en otras procedencias. Tampoco el idioma es indiferente, no es igual llegar y entenderse con cualquiera (Latinoamérica) que carecer de un idioma que permita una mínima comprensión inicial. El duelo para Freud “es, por regla general, la reacción frente a la pérdida de una persona amada o de una abstracción que haga sus veces, como la patria, la libertad, un ideal...”, y, especificando su relación con la enfermedad: “a pesar de que el duelo trae consigo graves desviaciones de la conducta normal en la vida, nunca se nos ocurre considerarlo un estado patológico ni remitirlo al médico para su tratamiento.” (Freud, 1979a. Pág. 241-242). Se trata de un trabajo penoso, ejecutado paso a paso, con un gasto importante de capacidades. Una joven afri- Sería muy largo e inadecuado para los objetivos del texto detallar por qué negación y no otro mecanismo de carácter más radical como es la escisión, introducida por Sigmund Freud y remitida en un primer momento a la psicosis (Freud, 1980a) para, después, remitirlo asimismo a la neurosis (Freud, 1980b). RTS - Núm. 186 - Abril 2009 35 Tránsito e incertidumbre cana explica un sueño en el que dice hallarse en el país de origen, junto con sus padres y hermanos, sueño que toma un carácter repetitivo pero en ningún caso angustiante: parece hablarnos del deseo de ver a personas que quedaron allí, lo que comunica sin dificultad. Algo está ausente y el sueño genera un espacio de reencuentro, pero en la cotidianeidad la joven no niega tal ausencia, simplemente se posiciona ante ella y trata de reorganizarse. En muchos casos el proceso es súbito, repentino, en otros se ha podido madurar. Dos situaciones pueden servir de ejemplo: – Durante mucho tiempo adolescentes o púberes, en cualquier caso menores de 16 años, incluidos en el pasaporte del padre, podían atravesar la frontera sin visado ni título que les habilitara para residir en territorio español. Solía darse al fin del verano, el padre retornaba de un periodo vacacional acompañado de alguno (o algunos) de sus hijos. Una vez en el territorio, si bien irregulares, las angostas sendas de la legislación de extranjería permitían acceder a una autorización de residencia (el procedimiento se denominaba “exención de visado”). ¿Cuál era el problema? La madre debía realizar los trámites habituales, no precisamente rápidos.7 El padre era, en muchos casos, un desconocido, y el referente directo hasta entonces (la madre) no estaba. – Inversamente, un tránsito mediante los tramites establecidos 8 (pese a lo incierto y agotador del proceso administrativo) podía aminorar el efecto de la pérdida objetal, ya que los referentes principales acompañaban el proceso y había tiempo (excesivo, ciertamente) para una primera elaboración. ¿Dónde vamos? ¿Qué dice papá? ¿Cómo será la escuela?, interrogantes que se inscriben en la senda del pensamiento e inician el camino de la elaboración. Podría definirse el duelo como la reacción de duración variable ante pérdidas relevantes, ligadas al país de origen, que comportaría un proceso de reorganización del inmigrante, con el reconocimiento de aquello que falta y la expectativa de establecer nuevas investiduras a partir de las posibilidades que otorga el nuevo territorio, ya sea al fin del proceso o a lo largo de éste. Dificultades en este trámite pueden comportar la permanencia del estado doloroso, hablaríamos de instalación en la situación depresiva, o bien ventilarse a la manera maníaca. Tratando de centrar lo anterior, podría definirse el duelo como la reacción de duración variable ante pérdidas relevantes, Era la denominada “reagrupación familiar”. Entre los años 1994 y 2003 no resultaba extraña la demora de un año en el trámite. 8 Con lo anterior no pretendo decir que recomiende una u otra vía, nada más lejos, tan solo constatar un efecto determinado de lo jurídico sobre aspectos sociales y psicológicos tratados. Por otra parte, si la vía regular hubiera sido, en ese periodo, una fórmula administrativa coherente, la irregular hubiera tenido, posiblemente, menor relevancia. 7 36 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Dossier ligadas al país de origen, que comportaría un proceso de reorganización del inmigrante, con el reconocimiento de aquello que falta y la expectativa de establecer nuevas investiduras a partir de las posibilidades que otorga el nuevo territorio, ya sea al fin del proceso o a lo largo de éste. Dificultades en este trámite pueden comportar la permanencia del estado doloroso, hablaríamos de instalación en la situación depresiva, o bien ventilarse a la manera maníaca. Estrés De manera operativa podríamos definir el estrés, aplicado al mundo migratorio, como aquella situación de incertidumbre en varios ámbitos y respecto al porvenir, provocadora de malestar psicológico y que, según su persistencia, puede llegar a afectar al organismo. El sujeto que lo experimenta identifica como causa un elemento externo (falta de papeles, la policía) que genera situaciones ingratas, confusión o persecución ante las cuales se ve incapacitado para clarificarlas, huir u otorgarles un sentido menos amenazador. El sostén desde lo social puede actuar como elemento que reduzca el efecto, mientras que aislamiento y soledad lo incrementan. Antes de seguir quiero referir aquellos aspectos teóricos que se han dado cita en la anterior definición, sin pretensión alguna de exhaustividad y con una consideración previa: es evidente que un mismo estresor puede constituirse en fatídico para un sujeto y dejar en la más absoluta 9 indiferencia a otro, por tanto el efecto del estímulo no es el único determinante y deben tenerse en cuenta, junto con la exigencia ambiental, condiciones de déficit personal (recursos individuales) y la inclusión de experiencias subjetivas (Neufeld, R., 1984), de ahí que en la siguiente relación se incorporen autores de corte psicoanalítico, pese a no ser un término afín a dicho corpus teórico. El concepto tiene como referente principal a Hans Selye, quien quería resaltar modificaciones, tanto físicas como psicológicas, producidas en un organismo enfrentado a una situación ingrata. Se le denomina Síndrome General de Adaptación y se le atribuyen tres fases: primero una reacción de alarma, si la situación continua, una fase de adaptación, denominada de resistencia y, finalmente, la fase de agotamiento dada la capacidad limitada del organismo para responder al estresor. El concepto se quiere diferenciar del de ansiedad indicando que uno (estrés) haría referencia a una exigencia real del medio mientras que otro (ansiedad) tomaría un carácter anticipatorio de una situación amenazante poco precisa (Amigo, Fernández, Pérez, 1998).9 Freud, por su parte, maneja conceptos como dolor y angustia, constituyendo el dolor la reacción a la pérdida y la angustia la reacción al peligro (amenaza) ante tal pérdida, dándose el primero cuando “un estímulo que ataca la periferia traspasa los dispositivos de protección contra los estímulos y pasa a actuar como un estímulo instintivo continuo…” (Freud, 1973. Pág. Delimitación poco convincente por los interrogantes que genera: ¿Qué es una exigencia real de medio? ¿Una amenaza, por imprecisa que sea, no es ya una exigencia real? RTS - Núm. 186 - Abril 2009 37 Tránsito e incertidumbre El objeto perdido es susceptible de generar un dolor que se equipara al dolor físico, mientras que la amenaza de esta ausencia dispararía la angustia. 134). El objeto perdido es susceptible de generar un dolor que se equipara al dolor físico, mientras que la amenaza de esta ausencia dispararía la angustia. Debe resaltarse cierta concordancia respecto del anterior modelo, pese a la distancia teórica: permanencia del estímulo cuando éste traspasa los dispositivos de protección, en un caso, fin del periodo de resistencia y agotamiento en el otro. Lacan complica el panorama y realiza una inversión en la cual la angustia podría ligarse a una presencia excesiva, en lugar de la ausencia o el temor de ésta (Lacan, 2006). Pese a ello no discute los efectos del estrés, sobre los cuales indica: “Se llega a un punto en el que la demanda que se le hace a la función desemboca en un déficit que supera a la propia función, lo que llega a afectar al aparato en forma tal que lo modifica más allá del registro de la respuesta funcional, para desembocar finalmente en las huellas duraderas que engendra, en el déficit lesional” (Lacan, 2006. Pág. 70). Tendríamos una función, la demanda a ésta, y la superación de la primera por la omnipresencia de la segunda. Para Sami Ali, un referente de la psicosomática, el estrés obedecería a una situación en la cual el sujeto vive un impasse resultando toda salida imposible: “Porque un estímulo se torna estresante no sólo a causa de su intensidad y 38 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 persistencia, sino sobre todo porque el sujeto que padece su contragolpe se encuentra en la incapacidad de hacer lo que fuere” (Sami Ali, 2000. Pág. 257). Aquí el énfasis está en el sujeto que lo sufre y su imposibilidad de escapatoria. Otras ópticas psicoanalíticas dividen la ansiedad en confusional, paranoide y depresiva. En la primera la amenaza es la desintegración y gobierna la confusión; la segunda, más elaborada, tendría relación con un ataque externo (real o fantaseado); y la tercera, interna, por la pérdida del objeto (Tizón, 1988). León y Rebeca Grinberg aplican directamente esta distribución de ansiedades a la experiencia migratoria, las cuales pueden ligarse, si bien no de manera sistemática, a diferentes momentos de la migración (Grinberg y Grinberg, 1996). Joseba Achotegui, por su parte, designa un grupo de estresores que le sirven para construir y enmarcar el denominado “Síndrome del inmigrante con estrés crónico y múltiple”, más conocido como Síndrome de Ulises. Incluye como estresores la soledad, el fracaso del proyecto migratorio, la vivencia de situaciones extremas de lucha por la supervivencia, el miedo y factores asociados: concurrencia de situaciones, cronicidad, intensidad y relevancia de los estresores, sensación de control ausente, red de apoyo frágil, la propia reacción sintomatológica y un sistema sanitario poco preparado para atender situaciones de complejidad particular (Achotegui, 2007). Hay personas que abandonan su país, atraviesan el Sahara, llegan a puertas de Ceuta o Melilla, o embarcan en una patera o cayuco hacia las Islas Canarias. En un Dossier caso u otro, el miedo, el hambre, el frío y la tensión por un porvenir incierto se dan cita. En ocasiones el primer intento fracasa y debe repetirse por haber sido retornados al punto de partida, como si de un siniestro juego de parchís se tratara. Cambian sus nombres y su país de origen (especialmente cuando existen convenios de devolución) para acceder al mundo deseado. Una vez en el territorio aparece la persecución: la policía puede pararles en cualquier momento, pedirles la documentación y enviarlos a un centro de internamiento por un máximo de cuarenta días. La desinformación relativa a su situación acompaña la totalidad del proceso. A menudo aflora la esperanza “hay un proceso de regularización”, génesis de ilusiones que tendrán como sede, en gran parte, el fracaso. Vuelta a empezar, trabajo en precario sin alta en la Seguridad Social, ni cumplimiento de convenios, ni derecho a la Incapacidad temporal, ni a prestaciones derivadas del desempleo, y, finalmente, pero no menos importante, la negación de una tarjeta de identidad (ausencia de reconocimiento) y el hecho de pertenecer al colectivo de ilegales (el termino cor recto es ir regular es) . La vulnerabilidad de cada cual, sus objetos internos, el soporte externo para elaborar las ansiedades y, a veces, la suerte (al tratarse de una situación jurídica tan arbitraria es evidente que juega sus cartas) aportaran un resultado determinado, pero un periodo prolongado de incertidumbre resulta discernible y tales situaciones configuran una serie de ocasiones para que se manifiesten las fases del síndrome general de adaptación hasta el agotamiento, que el sujeto llegue al impasse al que alude Sami Ali, que la demanda a la función exceda las posibilidades de esta última en el sentido de Lacan, que se disparen ansiedades más confusionales o persecutorias que depresivas o el Síndrome de Ulises. Para finalizar, y tomando los elementos hasta ahora barajados, quisiera proponer un modelo. En un primer extremo tendríamos las tres zonas de Robert Castel, que nos hablarían de la ubicación en la estructura social en origen de un sujeto que ha migrado o desea migrar; en segundo lugar tendríamos la captura del lugar de destino, es decir el imaginario y sus vicisitudes, un imaginario con tres vertientes: sostén del proceso (el contacto con la realidad permite que el sujeto lo vaya adaptando a las vicisitudes que le toca vivir); insuficiencia del mismo para afrontar la decepción (no hay posibilidad de diálogo entre lo imaginarizado y la realidad por la distancia entre ambos); y una tercera vertiente, cuando el imaginario desborda al sujeto (estaríamos cerca de lo delirante). A continuación el modelo recogería el duelo con tres posibilidades: su elaboración, su prolongación excesiva, y por ello el acercamiento a lo depresivo, y la solución maníaca o negadora. Por lo que se refiere al estrés, tendría también varios indicadores, uno de corte temporal (durante cuánto tiempo se experimentan las situaciones productoras de estrés), otro ligado a la intensidad del estresor (no es lo mismo el riesgo de muerte camino de Canarias que el temor a ser devuelto en el aeropuerto de Barajas por cualquier cuestión administrativa), y otro ligado a la intensidad de la experiencia ansiógena. Y finalmente, otra vez la tríada Robert RTS - Núm. 186 - Abril 2009 39 Tránsito e incertidumbre Castel, pero esta vez nos hablarían de un determinado destino cuyo interrogante podría ser: ¿Dónde ha desembocado el proceso? ¿Para qué un modelo de este tipo? Particularmente es capaz de explicarme considerables aspectos de los usuarios que he podido tratar a lo largo de los años invertidos en la cuestión migratoria. Por tanto la utilidad primera sería disponer de un elemento que permita un acercamiento al tema, la segunda tomaría un carácter predictivo, es decir, tomando situaciones ideales: un sujeto en la zona de integración o afiliación en su país, con un imaginario no excesivamente distanciado de la realidad, que haya podido elaborar la pérdida de sus referentes y que si bien fue sometido a estresores, éstos, o no se prolongaron más de lo necesario (por 40 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 ejemplo los tres años del arraigo), o no se llego a déficits lesionales, nos daría un sujeto en la zona de integración; por el contrario, un sujeto excesivamente joven, que parte sólo de su país de origen, sin referentes, con un imaginario desbordante por la propia proyección familiar sobre la migración, sin posibilidad de elaborar lo perdido, con una angustia permanente por no poder cumplimentar el objetivo migratorio (presencia del estresor), nos daría un sujeto cuyo destino es la zona de desafiliación. Finalmente permitiría (tal vez) la intervención (interdisciplinar) en varios aspectos de una serie de sujetos que han pasado un periodo importante de su vida en suspenso, aunque este último apartado abarca el tratamiento de los dispositivos de intervención y requeriría otro espacio. Dossier Bibliografía ACHOTEGUI, J. “El síndrome del inmigrante con estrés crónico y múltiple: El Síndrome de Ulises”. En TALARN, Globalización y Salud Mental. Barcelona: Herder, 2007. ISBN 978-84-254-2529-5. AMIGO, I.; FERNANDEZ, C. y PÉREZ, M. Manual de Psicología de la Salud. Madrid: Ediciones Pirámide, 1998. ISBN 84368-1273-5. AULAGNIER, P. Los destinos del Placer. Alienación, amor, pasión. Buenos Aires: Paidós, 1979. ISBN 950-12-4167-X BELINSKY, J. Lo imaginario: un estudio. Buenos Aires: Nueva Visión, 2007. ISBN 978-950602-558-8. CASTEL, R. “La Inserción y los nuevos retos de las intervenciones sociales”. En ÁLVAREZ URÍA, F. (Ed.) Mar ginación e Inserción. Madrid: Endymon, 1992. ISBN 84-7731-119-6. 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Núria Escala Castells: Trabajadora Social del Departament de Benestar Social del Ajuntament de Vic y anteriormente en el servicio de acogida de estudiantes extranjeros en Lovaina (Bélgica). Fina Tapias i Caus: Trabajadora Social del Departament de Justícia, área de Justicia Juvenil de las comarcas del Bages y el Berguedà. Experiencia laboral anterior en los Servicios Sociales de Atención Primaria del Ajuntament de Manresa. Rosa Florensa i Palau: Trabajadora Social en el Centro de Atención Primaria – CAP Manso de Barcelona en Pediatria, del Institut Català de la Salut. Anteriormente ha trabajado en varios servicios de salud en Cataluña y en el extranjero (EE.UU, Israel). Fina Collell i Suriñach: Trabajadora Social del Departament d’Educació en el EAP (Equipo de atención psicopedagógica) de Osona. Anteriormente había trabajado en los Servicios Sociales de Atención Primaria de la Mancomunitat la Plana (Osona Sud). Lucia Guerrero i Ruiz: Trabajadora Social del Àrea d’Urbanisme (servei d’intermediació en comunitats de veïns) del Ajuntament de l’Hospitalet de Llobregat. Anteriormente había trabajado en los Servicios Sociales de Atención Primaria y como directora del Programa municipal para la interculturalidad del mismo municipio. 2 Redactor y moderador: Trabajador Social; coordinador del programa de Inmigración y Ciudadanía del Ajuntament de Manresa. Anteriormente ha trabajado en el equipo de atención primaria del mismo municipio. [email protected]. 42 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Dossier El porqué de la mesa redonda Para abordar un elemento tan fundamental en las sociedades occidentales como es el hecho migratorio y las repercusiones que tiene en el trabajo social, se propuso escoger a una serie de profesionales que provinieran de diferentes ámbitos y servicios y que desde su realidad cotidiana y sus diferentes puntos de vista pudieran abordar, debatir, proponer y exponer qué les supone la inmigración dentro de su tarea profesional. Se prepararon seis cuestiones con el objetivo de facilitar este diálogo de forma abierta y de que promovieran exponer el máximo de temas de interés para la profesión. Estas cuestiones fueron entregadas antes del encuentro en común a cada miembro de la mesa redonda. La sesión de debate tuvo lugar el día 13 de junio en la sede del Colegio, en Barcelona, y tuvo una duración de tres horas. La mesa redonda estuvo caracterizada por la intensidad e interés por exponer opiniones, experiencias, interrogantes y propuestas que iban surgiendo a partir del trabajo llevado a cabo por las profesionales invitadas desde sus respectivos puestos de trabajo: justicia, salud, educación, vivienda, atención primaria municipal o ONG. Esperamos que el fruto de este trabajo cumpla los objetivos que pretendíamos y ayude a conocer de primera mano qué piensan y cómo afrontan los retos de la inmigración los profesionales de nuestro país, los puntos fuertes y débiles, las carencias y experiencias logradas de trabajo, dentro de un contexto de globalización y de fuerte desigualdad, y donde la inmigración sirve de espejo en el que revisar nuestra sociedad, la profesión y el mundo del presente y del futuro que entre todos ayudamos a construir. 1) ¿Qué elementos resaltaríais como más importantes en el proceso migratorio y en perspectiva de riesgo y exclusión? D. Serra: Lo primero que querría remarcar es que cuando hablamos del hecho migratorio tenemos que hablar de la persona que hace el proceso migratorio, y no tanto del inmigrante a nivel general. A partir de aquí, el elemento que resaltaría en este proceso migratorio personal sería la situación particular de cada uno: su nivel de instrucción; si viene solo o acompañado; a quién deja en su país, si –por ejemplo– es una madre que deja hijos, con quién los deja, etc. En perspectiva de riesgo de exclusión, y partiendo de este punto de cada uno a nivel personal, también querría remarcar la importancia del desconocimiento de la situación y de las principales características del país y sociedad donde llega. A partir de lo que he podido ir contrastando con las personas atendidas, te das cuenta de que muchas personas al hacer el paso de venir no han tenido demasiada información previa de dónde iban (a todos los niveles: lengua, costumbres y características culturales, etc.), y al llegar quedan desorientadas. Como colectivo concreto con un mayor riesgo de exclusión pondría a las madres con hijos sin apoyos, y a los menores no acompañados. F. Tapias: Por la especificidad del trabajo de justicia juvenil en este apartado, creo que los menores solos y sin documentación serían uno de los colectivos con mayor riesgo. La soledad que sufren, los traumas y vivencias negativas que han arrastrado en su proceso migratorio, superior a las capacidades que tienen de soportarlo, RTS - Núm. 186 - Abril 2009 43 Trabajo Social e Inmigración como menores que son, ligado al momento en el que pueden ser tutelados, así como cuando pasan ya a los 18 años, la mayoría de edad, cuando muchas veces la institución competente acaba sus funciones de tutoría y pasan a estar en la calle. Es decir, llegaron, estaban en la calle, y ahora vuelven: la sociedad de acogida les vuelve a dejar donde los ha encontrado, continúan sin papeles, y con la mayoría de edad se les cierran muchas puertas. Dentro del proceso migratorio, querría destacar la importancia de la edad con la que llegan: la edad marca mucho. Si vienen a través de un reagrupamiento familiar, vemos que no es lo mismo quien llega pongamos el caso a los 3 o a los 7 años y puede llevar a cabo una escolarización normalizada, que un chico que llega en la adolescencia –que es cuando nos llegan a Justicia–, y nos encontramos con los 44 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 choques culturales, cuando no se sienten ni de aquí ni de allí, rechazan elementos de la propia cultura y familia y de la sociedad de aquí y se mantienen en un terreno de nadie: es cuando vemos jóvenes que llegan a Justicia con esta rabia. Por eso digo que el proceso migratorio y la edad marcan mucho y podemos encontrar unos riesgos u otros. Siguiendo con esta comparación de la edad, un niño que llega al país de muy pequeño y puede hacer una escolarización completa nos llegará –en el caso que acabe viniendo al servicio– en una situación muy diferente, con otros valores, y eso mismo si nos llega como un joven integrado al mundo de los adultos, del trabajo, etc. R. Florensa: Desde mi trabajo en el campo de la salud y desde la perspectiva de la exclusión, lo primero que hace falta decir es que la ley tiene previsto que todas las Dossier personas que viven en territorio español, estén o no en situación regular, tengan cobertura sanitaria, por lo tanto y desde este punto de vista no habría exclusión. Bien, hay algún pequeño agujero, como aquellas personas que están de paso, ya que está el requisito de estar empadronados, aunque hay algunas excepciones a esta limitación (mujeres embarazadas, menores, etc.). En el caso de los irregulares se puede dar el caso del desconocimiento o temor a acudir a los centros de salud, y entonces, claro está, hay una situación de riesgo. Como trabajadores sociales, nos preocupan de forma especial aquéllos que no se atienden, no conocen, los que están tan arrinconados que creen no tener derecho, en definitiva: libertad e información, eso es lo que hay que promover al máximo. Desde la perspectiva de riesgo, creo que el factor mayor es el aislamiento, ya que te priva más de la libertad; si una persona está conectada a la red social, a personas próximas, amigos, vecinos, e inmersa dentro de la vida cultural del país donde vive, tendrá más libertad que aquélla que no lo esté, desconozca el idioma, las costumbres, crea que le pesa el color de la piel, la forma de vestir, etc. No osar y no salir del rincón es lo que la priva de la libertad. L. Guerrero: Dentro de lo que yo entiendo como proceso migratorio, querría remarcar tres aspectos diferentes como más importantes: el elemento personal, el familiar y el económico. Dentro del propio proceso, desde el momento en el que se empieza a plantear marcharse hasta que eso se lleva a cabo estaría la propia persona o familia que llega, sea hombre o mujer, y lo más personal, que tiene que ver con una pérdida: la familia que deja atrás, encontrarse solo en un nuevo mundo, la soledad, estar sin familia, la pérdida de estatus, etc. Hay quien ya tenía trabajo o un nivel de estudios antes de marcharse, y que quizás le permitía tener trabajo, pero al final se opta por dejarlo todo porque no puede continuar viviendo de aquella manera, este aspecto sería la pérdida de un estatus preexistente, que incluye elementos económicos. Porque en el nuevo mundo no podrá optar de forma rápida al nivel que quizás le correspondería (por estudios, formación, experiencia). Dentro de la pérdida también incluyo su rol familiar: podía ser un padre, una madre, con hijos, a los cuales tiene que dejar... y llega y tiene que empezar de cero. Por otra parte, la otra gran dificultad es cómo encuentra la sociedad de acogida –siguiendo la terminología de que tanto se habla–, porque una cosa es el esfuerzo que tiene que hacer el inmigrante, pero la otra parte es la sociedad. Si hablamos de la evolución de la inmigración en Cataluña y España desde unos años para aquí, yo remarcaría algunas diferencias sobre cómo la sociedad percibía y acogía a los inmigrantes, pongamos el caso hace unos 20 años, donde había más tolerancia, y en cambio ahora te encuentras con más recelo, más prejuicios, hasta llegar a la xenofobia. Creo, pues, que la situación es más difícil, aunque se mantiene una ventaja: la ilusión y la esperanza de que su situación mejore con el tiempo, que es lo que hace que continúen viviendo aquí. Así pues, remarcaría, por una parte, como riesgo, la pérdida de estatus, pasando a ser a un inmigrante, un don nadie, y por la otra, que la sociedad pone más tropiezos y restricciones que tiempo atrás (legislaRTS - Núm. 186 - Abril 2009 45 Trabajo Social e Inmigración ción, actitudes, etc.), y que también hace que unos y otros remarquen más sus diferencias culturales, de costumbres, que aquello que nos une. N. Escala: Sabemos que la exclusión social comporta la desigualdad en la redistribución de recursos, y que esta desigualdad supone un desequilibrio en muchos aspectos. Las víctimas de este desequilibrio son personas vulnerables y las podemos encontrar en relación con el género, la edad, la procedencia (mujeres, niños, jóvenes y personas mayores, inmigrantes). Si nos situamos en el proceso migratorio hoy, remarcaría dos ámbitos de vulnerabilidad importantes: la salud y la vivienda. La salud no porque estén o no estén atendidos, que eso sería otro debate, sino por la incidencia de ciertas enfermedades en un colectivo como el inmigrado, a menudo falto de apoyo y de red, y más cuando hablamos de enfermedad mental con todo lo que eso implica. El otro ámbito sería la vivienda, situación que yo calificaría de gravísima en estos momentos, y que supone un problema de primer orden dentro de la exclusión. El abanico de situaciones que se dan al inicio del proceso migratorio es variado: puede venir un hombre solo, o bien hombre con la familia en el país de origen con el objetivo de reagrupamiento, y actualmente se constata de manera especial la venida de mujeres solas. Algunos de los jóvenes vienen deslumbrados por la aventura del cambio, además de la necesidad de conseguir una vida mejor, etc. Todos ellos, cuando llegan aquí se encuentran con una situación que seguro no es la que se imaginaban, algunos pierden estatus pero se pueden ganar mínimamente la vida 46 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 porque tienen la suerte de encontrar un trabajo; otros viven y/o sobreviven. No hay una única situación que defina por ella misma y de manera general el proceso migratorio, ni el estado en el que no se encuentra la persona recién llegada tampoco. En Vic, por ejemplo, podemos encontrar inmigrantes que alquilan pisos a otros inmigrantes; que ponen negocios; tiendas varias; locutorios; barberías y peluquerías; cafeterías, restaurantes... Seguramente han dado un salto cualitativo en el proceso personal: ellos y otros que han podido subir al tren del mercado laboral y que continúan a pesar de la situación actual. Pero otros están en el paro o bien no tienen permiso de trabajo ni quizás de residencia. La persona inmigrada hoy, más allá de sus características étnicas y culturales, se encuentra de lleno con la dificultad de la inserción laboral. La situación de los jóvenes es grave: a muchos les falta la formación de base para entrar en el mundo laboral, otros cuando la tienen son excluidos por su apellido, por su color, por los prejuicios existentes en nuestra sociedad. Todo hace mucho respeto. Hace muchos años que lo veíamos venir y que lo hacemos saber. A pesar de no tener la varita mágica, hace falta un trabajo serio y coordinado con las empresas, con la educación, las instituciones, etc., que ya iremos profundizando sin duda en esta mesa redonda. Según cómo se aborde la integración de los niños y jóvenes estamos ayudando o no a crear una sociedad de bienestar donde todos encuentren su sitio, si no vamos hacia una revuelta consecuente contra la desigualdad de oportunidades, y eso en un futuro no lejano. Dossier F. Collell: Comparto lo que se ha dicho hasta ahora, es cierto y lógico. Desde mi ámbito de trabajo veo las repercusiones del choque cultural en los centros educativos en los jóvenes que han hecho una parte del proceso de escolarización en su país de origen. De entrada hay que decir, un poco similar al tema de la salud, que cualquier chico/a tiene derecho a la escolarización, sea de donde sea. La exclusión más clara la encontraría en las escuelas gueto. Éste es un riesgo que nos preocupa mucho. En mi zona de trabajo se ha hecho un gran esfuerzo con el fin de combatir esta tendencia, porque hay que luchar contra los problemas que comporta, que son muchos. Hay que hacer un gran trabajo desde las administraciones, las familias autóctonas, las inmigradas, las escuelas concertadas y las públicas y los ayuntamientos. Sin una buena implicación de todo el mundo es muy difícil combatirlo. El alumnado inmigrado acaba yendo a unas escuelas determinadas ya que no tiene acceso a otras, y se da paso a la guetización del centro. Desde Vic se ha intentado evitar que la exclusión se dé desde este punto de vista, de manera acertada o no, porque continúa habiendo varios problemas para trabajar. Desde que empezó a llegar población inmigrante se tuvo muy claro que había que trabajar este aspecto, coincidió el interés de la inspección, que hizo una apuesta seria por el tema, e hizo falta un compromiso con las concertadas, que han trabajado su parte de responsabilidad, a pesar de ciertos problemas como las cuotas, los libros y el material, acordar la cantidad de alumnado, montar las comisiones de escolarización, etc. Creo, pues, que el principal riesgo era y es evitar esta concentración, que unos alumnos no vayan sólo a unas pocas escuelas porque son las del barrio, aunque hacer el paso de ampliar los centros supone tener que trabajar aspectos como el transporte, que se acepte y se entienda que quizás hay que ir a un centro alejado, trabajar con el resto de padres y madres, ya que un problema importante es el de las actitudes de algunas familias autóctonas que no quieren llevar a sus hijos a ciertos centros si hay población inmigrada, ya que la escuela ya está etiquetada. Y por lo demás, creo que son alumnos como todos, y los maestros hacen todo lo posible y más todavía, aunque casos excepcionales encontraríamos siempre, siempre encontraríamos profesionales más o menos implicados, centros de un tipo u otro. 2) ¿De qué manera ha cambiado y/o está cambiando la inmigración vuestra tarea profesional? D. Serra: La principal variación ha sido la tipología de las personas atendidas, no tanto con respecto al trabajo social, porque el trabajo social, sus objetivos, principios y fundamentos éticos continúan siendo los mismos. Realmente la variabilidad de las personas que se atienden es muy grande, y muchas veces me he encontrado con que no he sabido estar a la altura de las circunstancias en cuanto a poder entenderlas, de conocer el lugar de donde venían, etc., además de tener mis propios prejuicios, esquemas hechos que no se corresponden con lo que el otro es realmente. Estos desconocimientos, por ejemplo en cuanto al lugar geográfico de procedencia, dónde ubicarlo en el plano, te obligan a coger un mapa y ver de dónde vienen. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 47 Trabajo Social e Inmigración Porque antes sabíamos dónde ubicar a nuestros usuarios, pero ahora la cosa ha cambiado y ha habido que hacer un aprendizaje. En Cáritas Manresa empezaron a venir personas de Marruecos –durante muchos años sólo venía inmigración marroquí–, y una vez me había situado y me parecía que ya conocía la situación, la cosa empieza a cambiar y viene gente de todas partes: del África subsahariana, de los países del este, de Suramérica, etc., que, claro está, no tiene que ver entre sí. Y es necesario ir haciendo un aprendizaje de sus características, costumbres, valores, referentes y roles dentro de la familia. Por otra parte y a partir de la cuestión planteada en este apartado querría decir que estos cambios me han obligado a ser mucho más didáctica a la hora de explicarme. Los nuevos usuarios no conocen el trabajo social, quiénes somos, nuestras funciones, los recursos... Ellos sólo saben que alguien les ha dicho que se dirijan a Cáritas, que los ayudarán, desconocen totalmente cuál es mi trabajo. Eso te obliga a ser más didáctica, a saberte explicar mejor, y también me ha obligado a hacer un trabajo de observación, a estar más pendiente de la comunicación no verbal: las miradas, gestos, cómo responden a lo que digo. F. Tapias: Como especificidad del campo de la justicia juvenil, los chicos nos llegan por medida judicial, donde la sentencia marca las funciones profesionales y lo que hay que trabajar. Este aspecto no ha variado, todo el mundo es igual. Donde sí que ha habido que hacer variaciones es en la manera de abordar aspectos más culturales con el fin de hacer entender nuestras normas judiciales, cómo funciona la justicia aquí, por qué se casti48 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 ga más una cosa que otra, etc. Por ejemplo, chicos magrebíes te dicen que si allí hicieran eso quizás les cortarían la mano, o la policía los apalearía, y en cambio aquí como vamos con el diálogo..., hasta que no han visto a qué conducen sus actos, hasta que no han llegado a un juez y a una sentencia no entienden la cosa, y ha costado ubicarse al cambio de sistema. Otro elemento donde he visto cambios hace referencia a la violencia, por ejemplo en el caso de los latinoamericanos, chicos que han subido desde pequeños en su país en medio de la violencia, con armas dentro de la vida cotidiana, cosas que nos hacen estremecer cuando te las explican. Estos grupos te han hecho ver el funcionamiento de las bandas (los ñetas, los latin kings u otros), y por otra parte las consecuencias del movimiento racista organizado (skins). Desde Justicia tenemos una ventaja que es que lo vemos todo, qué hay bajo el delito que nos llega, más allá de los síntomas o delito, qué se mueve en la calle. Aunque siempre vamos tarde, porque cuando eso nos llega es que ya han pasado muchas cosas, y hasta que en un caso está la sentencia y se puede empezar a trabajar, ya llegamos tarde. Por lo tanto, y para resumir, creo que todos estos cambios nos han obligado a trabajar más allá de la entrevista o la documentación, ver qué se esconde detrás de lo que nos llega. R. Florensa: Tal como se ha dicho antes, ya hace años empezaron a llegar inmigrantes marroquíes, y desde entonces hasta ahora hay toda una serie de cosas que hemos tenido que variar: hay que ir más allá del lenguaje, vemos una diferente concepción de la salud y la enfermedad, hay que Dossier conocer la relación entre ellos, con nosotros, la gentileza en el trato. Con respecto a estos cambios, querría comentar un caso concreto: hace tiempo me encontré con una familia inmigrada que tenía un bebé ciego ingresado en el hospital. Se valoró muy importante la atención y estimulación precoz, con el fin de evitar toda una serie de complicaciones que se podían desarrollar si no se trabajaba de esta manera. Los padres vivían lejos del centro donde podían hacer esta atención, y no estaban de acuerdo con empezar el trabajo de tratamiento. Ante la necesidad de planificar el alta del bebé opté por ir a la población donde vivían los padres y tomar contacto con la escuela y las pedagogas de educación especial, entre las cuales encontré una que se decidió a hacer el trabajo que se requería, siguiendo las directrices de los expertos, ya que la familia no estaba dispuesta a desplazarse lejos de casa. Seguidamente y previa cita, fui al domicilio con el fin de hablar con los padres y explicar la alternativa, y con lo que pasó me di cuenta de las limitaciones del lenguaje no oral. La madre me abrió, me hizo pasar y me dijo que el padre estaba descansando, y a partir de entonces ya no me decía nada más. Fue pasando el tiempo y el hombre no salía; yo había vivido en ambientes de la misma cultura que la familia, y conocía su diferente concepción del tiempo y de la relación social; así pues, pensé que la paciencia era importante y decidí esperar a ver si mientras tanto salía. Más tarde el hombre se despertó, salió, nos sentamos, y a partir de entonces la mujer se puso en acción, fue a la cocina a traer un té, y una vez todos juntos, sentados y con una taza de té en la mano pudimos hablar de la cuestión de su hijo. Si yo hubiera dicho al principio que si no salía me iba, no habría podido consensuar y encaminar una solución preparada a medida. Éste es un ejemplo que siempre he tenido presente a la hora de trabajar en situaciones de diversidad, creo que es importante ponerse en el lugar del otro, y no quedarnos con la idea de que son ellos los que se tienen que integrar, ¡porque muchas veces no saben cómo hacerlo! Hace falta que nosotros también nos integremos, nos acerquemos a su realidad y cultura, que para eso estamos en una sociedad multicultural y multilingüe. Otro elemento importante a remarcar dentro de los cambios que ha comportado la inmigración es la saturación de los servicios y el trabajo. Antes en el mismo puesto de trabajo atendía a un número determinado de personas, y ahora son muchas más, y con problemáticas más graves añadidas, con aislamiento. Eso es muy importante, porque antes quien más quien menos tenía una red de familiares, conocidos, el vecindario se conocía, y ahora muchas personas viven solas, no están conectadas, les falta la familia. Todo agrava los problemas y hace que a nivel profesional tengamos más trabajo, que requiera una mayor profundización. Eso produce cansancio, y a veces no damos de nosotros mismos todo lo que podríamos dar. L. Guerrero: Creo que la inmigración ha supuesto un gran cambio y en muchos aspectos. A nivel profesional pienso que ha supuesto un aprendizaje muy importante y ayudarnos a descubrir una parte importante de la profesión. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 49 Trabajo Social e Inmigración Cuando empecé, ya hace muchos años, en la década de los 80, no se oía hablar casi nada de la inmigración de población extranjera. Como ha dicho D. Serra, íbamos atendiendo a la gente y veíamos los cambios que estaban pasando, cómo llegaba gente de otros países, especialmente de Marruecos, con diferencias respecto de la población de aquí, con mentalidades, formas de hacer, etc., y respecto a nuestras intervenciones y formas de pensar había toda una serie de elementos que te chocaban, en relación a la comunicación, malentendidos, etc. Hacia la segunda mitad de los 80 empezaron a llegar mujeres; en esta primera época la inmigración era básicamente marroquí, de zonas concretas, y te obligaba a trabajar de manera diferente, saliendo del despacho, yendo a los sitios donde estaban, a trabajar más en grupos, a nivel de comunidad, a ayudar a organizarse, a expresar sus necesidades. Y para nosotros se trataba de una manera diferente de conocer a la gente... la verdad es que disfruté mucho. Veías de forma directa la evolución de las situaciones personales y familiares, cómo unos hacían venir a otros, cómo se podía empezar a trabajar, por ejemplo, con los hombres, por ser los primeros en llegar, y que eso te servía después para trabajar con las mujeres. Para mí fue un descubrimiento, una especificidad dentro del trabajo social, donde relacionábamos todos los ámbitos (salud, educación, promoción). Por ejemplo, veías a los profesionales del ámbito de la salud, un nuevo centro de salud, cómo trabajaba la gente en su medio, en la calle, en grupo. Era una etapa de mucha creación, la verdad es que yo lo 50 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 echo de menos, y soy consciente de que era una época concreta, y que siempre se dice aquello de que una época pasada fue mejor, y no es eso, pero sí que creo que pensabas que tu trabajo producía cambios sociales, trabajabas las necesidades, con unos horarios muy diferentes a la estructura donde nos encontramos ahora, era un trabajo de comunidad, dentro de los barrios. Una vez alguien me pidió cómo había yo llegado a hacer proyectos de este estilo, que quién me había dado el encargo: nadie, no había habido una demanda concreta. Era una manera muy vivencial de trabajar, al igual que lo podías encontrar en otros campos y profesiones, un trabajo próximo, en contacto con la gente, buscando su independencia. Para mí fue una experiencia muy buena. Con pocos recursos hacíamos un proyecto creativo, se montaba un grupo, veías a muchos profesionales trabajando y con experiencia, y comparado con hoy, a pesar de los profesionales que siguen trabajando, después del gran incremento poblacional y de diversidad, me planteo qué es lo que ha quedado como idea de cambio: cierto que han variado las circunstancias, ¿pero qué queda de todo eso? ¿Hemos podido aprovechar el conocimiento y aprendizaje de una forma estructurada? Si así fuera, vendrían a vernos antropólogos, sociólogos, gente de la Universidad, a ver cómo estaba y se está trabajando, a pedir nuestra opinión. Realmente se ha dado un gran cambio a nivel de estrategias y de política. En aquella época se valoraban servicios específicos, puente, y parece como si ahora se vaya en contra. Dossier Es una lástima para nuestra profesión, que a pesar de poder trabajar estas situaciones, ver y conocer de forma directa tantas cosas, prever los cambios, después no se pasa a estructurarlo todo y a aprovecharlo, a consolidarlo. N. Escala: Si comparamos qué pasaba a finales de los 80, la década de los 90, vemos que actualmente los servicios están desbordados. Sólo tomando un dato demográfico con datos del padrón del mes de marzo de este año, en Vic consta el 24% de inmigración. Tenemos que añadir además aquéllos que están empadronados. Creo que se da una saturación a nivel profesional, y no hablo sólo de la atención a la población inmigrada, hay que hablar de vejez, mujer, etc. Es lo mismo que pasa en otros ámbitos como educación o salud, donde el número de usuarios ha aumentado y el personal no lo ha hecho en proporción. En el caso de Vic, es cierto que se han creado nuevos servicios que han ayudado a descongestionar la primaria como el equipo de Personas Mayores y otros. Pero la realidad es que ha crecido mucho la presión, la gravedad de los casos, sumándose al hecho de la diversidad la dificultad de dar la respuesta adecuada ante la nueva pobreza. Es a partir de eso que lo que decía Lucia me ha hecho sentir nostalgia de las posibilidades que teníamos antes para trabajar desde otra óptica, de poder aprender del día a día de otra manera. Creo que había una predisposición diferente ante la realidad porque ésta también era diferente. Pienso que demasiado a menudo tenemos el sentimiento de impotencia. Se hace evidente la necesidad de reciclaje permanente para recordar qué quiere decir exactamente la diversidad de culturas y todo lo que eso implica. Por una parte se puede notar esta falta, pero por la otra también hay que hablar de los vacíos que genera la falta de comunicación, tanto la verbal como la no verbal, y no hablo de un problema que los traductores ya te solucionan. También está la dificultad al mismo tiempo de abordar globalmente las situaciones, porque si la comunicación no es mínimamente fluida, existen dificultades al mismo tiempo de analizar y clarificar la demanda para hacer un buen abordaje y adjudicar el recurso pertinente si conviene. Eso no siempre es posible y crea angustia a los profesionales. Actualmente por mi trabajo no me pasa tanto a nivel directo, pero lo sé y lo vivo a través de los compañeros. Realmente estamos desbordados ante situaciones muy graves: los derechos son universales, y en cambio los recursos son limitados. Según baremos, nosotros –referente a las ayudas sociales– estamos ayudando a familias/individuos de pobreza alta y severa. Dejamos fuera, entre otros, a las personas que se encuentran en situación de pobreza moderada (6.347€/año). Y nos encontramos ante la Universalización de los SS, según la Nueva Ley de SS. Trabajamos en medio de muchas contradicciones. Los profesionales están insatisfechos de su trabajo debido al hecho de no poder realizarlo en las condiciones adecuadas. Dificultad de poner la distancia necesaria con la realidad que se está atendiendo, etc. Por tanto, si tuviese que resaltar un cambio fundamental, es el del desbordamiento, por los motivos mencionados. F. Collell: Intentaré dar otro cariz a mi intervención. Me he sentido bastante RTS - Núm. 186 - Abril 2009 51 Trabajo Social e Inmigración identificada con lo que ha dicho Dolors; en el fondo, la tarea del profesional del trabajo social no ha cambiado mucho debido a la inmigración. Yo empecé en atención primaria, donde estuve durante 7 años, y en aquel momento no había inmigración, o no era la parte importante. El gran cambio se dio cuando pasé a educación. Es aquí donde se dio el cambio más importante para mi tarea profesional, estar enmarcada dentro de un equipo, donde en estos momentos llevo la dirección. Cuando empecé durante los 90, la figura del asistente social dentro de los equipos de EAP no estaba nada asegurada a nivel de su continuidad, se creía que irían eliminándose a medida que se jubilaran. Fue con el gran incremento migratorio que se fue viendo la necesidad de su continuidad. Y por ejemplo, en estos momentos, dentro del equipo somos dos profesionales. Por lo tanto éste sería el cambio más importante, y por el resto estaría de acuerdo con lo que se ha dicho. 3) ¿Qué líneas de inter vención, preventivas y proactivas, deberían plantearse desde la profesión para dar respuesta a las necesidades y problemáticas derivadas de las migraciones hoy y para el futuro? D. Serra: Creo que Lucia ha dicho lo que yo pienso que hay que priorizar, tanto a nivel de prevención como de actuación. Sólo añadiría el apartado de las coordinaciones, no sólo con los Servicios Sociales, ya que la inmigración no afecta sólo a los Servicios Sociales, sino que hay que hacer un planteamiento transversal y en red. La inmigración no es un problema social, sino una realidad que afecta a todos los ámbitos ciudadanos. 52 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Hay que intentar, a pesar de las dificultades existentes, que el abordaje sea una cosa mutua: de la población autóctona y la inmigrada. A veces hacemos las cosas demasiado rápido, sin reflexionar, y les dejamos un poco de lado. N. Escala: Esto tiene un motivo de ser, una explicación: el desbordamiento. F. Tapias: A nivel de líneas preventivas todo lo que sea el acercamiento del servicio donde están los problemas es básico. Me centro en el grupo de población joven. Pienso que hace falta un retorno a la tarea de los educadores de calle: es allí donde están los jóvenes, quizás ellos no te vendrán al servicio por sí mismos, y hay que ir a encontrarlos, y si sumamos aquéllos que no tienen papeles, la desconfianza es absoluta. El profesional tiene que plantearse y plantearles: estoy aquí, quizás te puedo ayudar, ofrezco un punto de referencia. Siempre defiendo mucho un servicio que hay en Manresa, de dependencia municipal, que trabaja muy coordinado con Justicia: Espai Jove, formado por dos educadoras sociales y que hacen un trabajo específico, con horario amplio, de calle, en un momento en el que –parece– los servicios especializados son tan criticados hay que revalorar el trabajo que hacen. Atienden a una población desatendida y que quedaría descubierta en caso contrario, que va donde están los jóvenes, donde está el foco, el conflicto, porque lo que hace falta es ir: ¡eso es preventivo! Y por otra parte, pienso que es clave el servicio de acogida en los municipios (hablaría, sobre todo, de los casos regularizados, donde es más posible hacer este tipo de intervenciones), pensando en que sirvan de ayuda a las personas, Dossier y no en el control o el adoctrinamiento. Hay que ponerse en el lugar del otro, pensar lo que le hace falta, actuar de manera preventiva, antes de que nos lleguen a los Servicios Sociales, porque en el caso contrario siempre nos encontramos en lo mismo: nos llega cuando el problema ya está presente o ha explotado alguna situación muy difícil. R. Florensa: Siguiendo un poco con la misma línea: pienso que las políticas de acogida e integración tienen mucho que hacer, y es una tarea que va más allá de los profesionales del trabajo social. Es muy importante tejer vínculos, que cuando una persona inmigrada llega aquí tenga contactos, quien la acoja, y hablo más allá de una acogida oficial, sino en los barrios. Que puedan sentir que forman parte de algún sitio, que se les reconoce, que son alguien, así pueden evitarse muchas derivas negativas, pienso por ejemplo en el caso de la salud. Se da una vulnerabilidad a muchos niveles: dificultades en razón de idioma, costumbres, falta de amistades y familia, etc. Habría que poder ofrecer una red organizada de acogida, que cada barrio lo tuviera organizado, que hiciera llegar y asimilar la información a la gente, porque la información es fundamental. También por nuestra parte hay un gran desconocimiento de su realidad, de sus países. Conocer ayuda a entender mejor la situación del otro; si todo el mundo de la calle tuviera la información, pienso que no habría tantos problemas de rechazo, hay que luchar contra la xenofobia y el estigma que proviene tanto de la gente de la calle como de parte de algunos profesionales. Según diversos estudios, los inmigrantes no tienen unos especiales problemas de salud, pero si se encuentran con problemas específicos, entonces es especialmente grave si están solos, desconectados, al margen de toda la red social civil y oficial de que disfrutamos nosotros: se pueden evitar muchos y graves problemas sociales, de salud, familiares si existe esta relación con vínculos. La sociedad ha hecho un gran cambio; antes se conocía al vecindario, a quien vivía en la calle, en la casa; ahora no, no hay conocimiento entre vecinos. Es un tema que tendría que reponerse, a pesar de ser un trabajo muy complejo y dificultoso. A partir de mi experiencia vital en los Estados Unidos, pude valorar y mucho la importancia de la acogida, del apoyo entre vecinos, de la red de amistades. ¿Qué se podría hacer para hacer prevención? Creo que romper el aislamiento es básico, es la piedra angular. L. Guerrero: Creo que a nivel preventivo habría que recordar que mucho del trabajo hecho años atrás y muchas de las cosas que ya previmos, están sucediendo, y de poco ha servido hacer diagnósticos, prevención, etc. En su momento se nos acusaba de ser negativos, pesimistas, y ahora parece que nuestro encargo sea evitar problemas, controlar, que no se den conflictos entre población inmigrada y autóctona. Creo que como colectivo tendríamos que tener una mayor exigencia, y estar en lugares donde se toman las decisiones y la planificación. Porque trabajar, se trabaja, y no se trata tanto de una falta de previsión sino de cómo canalizar y hacer llegar a los sitios de poder la información y el conocimiento de que disponemos, porque nosotros tenemos un conocimiento muy importante. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 53 Trabajo Social e Inmigración R. Florensa: Pero necesitamos sistematizarlo. L. Guerrero: ¡Yo no creo que no lo sepamos sistematizar! Creo que el problema es que no estamos en los lugares adecuados, desde donde se planifica. Quizás no nos corresponde a nosotros hacer ciertas funciones, pero sí que se nos tendría que tener en cuenta, que se nos pudiera escuchar desde estos lugares. Parece como si sólo se pudiera trabajar ciertos temas cuando en el ámbito político hay interés, no tanto cuando interesa a la gente. Hay temas donde hace tiempo existen diagnósticos claros de situación y de hacia donde vamos, por ejemplo, no se puede afirmar, como se está haciendo, que la llegada de la población inmigrada ha sido inesperada y que por culpa de eso hay un desbordamiento en sanidad o en algún otro ámbito. A nivel demográfico, de estudios, etc., ya hace tiempo que se iba alertando del cambio, no ha sido de un día para otro. ¡Son ambigüedades como éstas las que a veces te hacen plantear para qué sirve el trabajo! N. Escala: Creo que la existencia de la red formal y no formal es muy importante al mismo tiempo de hablar de trabajo preventivo. El trabajo transversal real dentro del municipio es básico y no siempre es evidente. Creo que hay que potenciar también los espacios de encuentro entre la población autóctona y la inmigrada más allá de las fiestas étnicas y gastronómicas. Estoy de acuerdo con lo que decía Lucia, pero también pienso que nuestro trabajo se nota a faltar cuando no se hace, y es cierto, no es un trabajo vendible. A nivel profesional y tal como va el ritmo 54 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 del trabajo, no es fácil tener tiempo y espacio para reflexionar. Nos hace falta una mayor confianza en lo que hacemos, darnos cuenta del trabajo que desarrollamos a pesar de las dificultades. En relación con la atención al recién llegado, nos es imprescindible tener las herramientas y el tiempo para contrastar la situación del caso que presenta al usuario, de valorar los conceptos que hay detrás del lenguaje, sopesar los ritmos de cada uno según procedencia, porque si no el peligro es asimilarlos, que sería el camino –equivocado– más corto y rápido que nunca tendríamos que coger. Se trata de trabajar la integración de unos con los otros. F. Collell: Coincido con Núria respecto del trabajo en red, pero también resaltaría que es importante este trabajo tanto a nivel formal como no formal. Es muy importante que los servicios estén en red, tal como decía Lucia, no podemos estar duplicando servicios. Es importante que los profesionales nos entendamos entre nosotros y sepamos distinguir qué corresponde a cada uno. Nos olvidamos del trabajo verdadero porque nos estamos discutiendo entre los profesionales. Por ejemplo, ahora en torno a la inclusión. En educación se está debatiendo sobre qué es la inclusión dentro del marco escolar, pero no podemos olvidar que además del qué pensamos y opinamos, se tiene que trabajar, por el alumno, por la escuela, la familia. Hace falta poner sobre la mesa lo que tenemos y buscar la solución con más consenso, o nos perdemos. Es cierto que no estamos en los sitios adecuados, te encuentras con que quien planifica está lejos del territorio, en los despachos, y nosotros, que estamos en la Dossier base –a pesar de tenernos en cuenta– es de forma parcial. Un ejemplo de eso podría ser la discusión en torno al EBE (espacio de bienvenida educativa), del cual Vic es prueba piloto, donde creo que habría que analizar mucho mejor recursos que ya existían, y evitar lo que decíamos: no duplicar. Quien planifica tendría que estar muy en contacto con la base y saber escuchar. 4) ¿Cómo afrontáis a nivel personal y profesional las limitaciones de respuesta de la intervención profesional ante situaciones varias: por ejemplo, el marco legal, la cronicidad, falta de recursos, etc.? D. Serra: Personalmente pienso que si todo lo que me llega en estos momentos lo hubiera hecho cuando empecé, no lo hubiera podido resistir. Se dan unas situaciones extremas y duras, donde si te intentas poner en la piel del otro cada día, mal... Y después está el peligro de caer en el asistencialismo, ya que es muy fácil hacerlo delante de todo lo que te encuentras. Es la solución más a mano: se opta por X ayuda aunque no se vea claro. ¡Te obliga a ser muy objetivo, y evitar dejarte llevar por las angustias, aunque todos lo hemos hecho en más de una ocasión! Desde la institución no se opondrían en absoluto, al contrario, aceptarían una vía más asistencial, pero aquí es donde hay que hacer una apuesta profesional, pensar qué es lo mejor... Es uno de los problemas que me planteo. Porque otros elementos, como el marco legal –a pesar de su importancia–, desde mi institución no se tienen en cuenta. Realmente, para poder abordar ciertas situaciones, es muy importante la ima- ginación, los contactos personales, que también te hacen plantear dudas, por si es ético o no usarlos, y la coordinación. F. Tapias: A nivel judicial, los sentimientos de fracaso que puede tener un técnico de medio abierto cuando te llega un chico con una determinada medida de libertad vigilada, sería que debido a su situación sin salida (sin papeles, irregular, sin trabajo) hiciera alguna cosa grande conscientemente para pasar a un centro de Justicia. Es un fracaso ambivalente, ya que por una parte ha hecho un acto delictivo, y ha perjudicado a algún ciudadano, pero por la otra opta por un recurso a través del cual podrá tener opción a regularización legal una vez salga, tendrá todas las necesidades cubiertas, etc. Hace falta explicar (hablamos de chicos de 16 a 18 años) que los centros de Justicia tienen unas ventajas sobre los de tutela, con diversos técnicos, y que cuando salen lo hacen con la situación legal resuelta gracias al esfuerzo y trabajo de los profesionales que velan por el chico. Para los que no entran en este recurso, y pasados los 18 años, el técnico de medio abierto es el único referente, ya no dependen de la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia (DGAIA), están en la calle. Justicia ha hecho un piso asistido, transitorio –que sustituye en parte funciones de la DGAIA–, pensado para chicos a partir de 18 años, que posibilita ofrecerles algún recurso. Y claro está, a nivel profesional hay que recordar que la medida judicial marca un tiempo de intervención, y después de ésta se da de alta. R. Florensa: A la hora de evaluar cuáles son las circunstancias donde mayores dificultades y limitaciones encuentro, además de la pobreza u otras situaciones ya exRTS - Núm. 186 - Abril 2009 55 Trabajo Social e Inmigración puestas, yo remarcaría la situación de las mujeres solas con hijos pequeños, sin apoyos. Creo que hay pocos recursos para abordar estas situaciones. Un caso vinculado a mujeres extranjeras sería el servicio doméstico, donde trabajan día y noche, sin fiestas, con mucha explotación, y llegan a darse incluso situaciones de abusos sexuales. Creo que como profesionales tendríamos que hacer más denuncia, sumando esfuerzos: cuando coincidimos con una tipología similar de situación, habría que valorarlo, buscar soluciones, hacer fuerza a fin de que se creen recursos adecuados, favorecer la creación de políticas inclusivas de prevención de la marginación. También creo que la Revista de Treball Social tiene un papel que hacer. Y a nivel más personal, creo que para afrontar las limitaciones profesionales también es importante la vida privada, y poder hacer actividades que te enriquezcan. L. Guerrero: La falta de recursos crea una gran insatisfacción, hay unos recursos (ayudas o prestaciones), pero la gran apuesta pendiente era haber optado por dar otro tipo de respuesta más de cariz social y comunitario dirigido al común de la gente, no sólo inmigración. También estoy de acuerdo con lo que decía Núria, pero no es sólo la parte vocacional de la profesión, sino la de compromiso, donde no se trabaja sólo con el fin de ser un buen profesional. La necesidad y este compromiso es lo que te hace buscar soluciones alternativas, a pesar de las limitaciones del sistema, de los mandatos políticos, de la falta de recursos y de contradicciones como el tener que aprovechar recursos, quizás no los mejores, 56 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 simplemente por el hecho que llegan ahora y quizás después ya no los tienes. También se me plantea la limitación de las leyes, por ejemplo la de Servicios Sociales, cómo se podrá llevar a cabo y se concretará si falta infraestructura, equipamientos, etc., más allá de la atención primaria. Otra limitación que veo es la falta de unidad que tenemos como colectivo, la falta de posicionamientos comunes ante ciertos temas (por ejemplo la legislación de extranjería), que, quieras o no, tarde o temprano nos acaban afectando en el trabajo, deberíamos dar un paso adelante y no quedarnos con la frustración. Callamos demasiado. N. Escala: A pesar de las dificultades para empadronarse (por diferentes motivos) que tienen los recién llegados residentes en Vic, podemos decir que a menudo se encuentran con propietarios que no quieren firmar conforme viven en el piso o habitación alquilada... Es justo decir que la mayoría de inmigrantes están empadronados. Desde Servicios Sociales se atiende a todo el mundo por igual, al margen de si tienen papeles o no, estén empadronados o no, siempre que residan en Vic. Los casos crónicos se viven con impotencia. Nos hace falta reconocer las limitaciones, y no dar ni darse más expectativas. Las hay que con una mayor dotación de recursos tampoco se resolverían. Situaciones como las de las familias monoparentales que carecen de apoyo externo y con medios económicos precarios presentan dificultades para conciliar la vida laboral y familiar: tienen que dejar a los hijos solamente en casa ya sea de buena mañana o bien entrada la noche. Dossier Estas situaciones, junto con otras que hemos ido hablando, no son exclusivas de población inmigrada. Hay que poner en marcha recursos paliativos que realmente ayuden a las familias. F. Collell: Hay ciertos temas en los que a veces el marco legal limitaba la igualdad de acceso a ciertos recursos, como sobre logopedia, pero finalmente se resolvió. Creo que es muy importante trabajar con sentido común, imaginación, implicación del servicio, y cuando todo eso es insuficiente, saber desconectar y dar de alta los casos. Hay que tener en cuenta que en ciertos casos el afectado no es consciente de la situación, y si no hay conciencia no se puede trabajar la solución de ciertos temas. Desde un servicio como en el que estoy trabajando, está la ventaja que el alumnado se da de alta cuando se marcha del centro. Hay que reconocer el esfuerzo hecho por incrementar el nivel de recursos disponibles, ciertamente no todos los necesarios, ni se puede dar la respuesta óptima. 5) ¿Creéis que los profesionales tienen una buena formación para afrontar el trabajo con población inmigrante? ¿Se debería hacer alguna formación específica? D. Serra: Creo que sí que es necesario. Por una parte hay el abordaje y conocimiento de todos los aspectos culturales, donde quizás no es posible tener un conocimiento de toda la variabilidad, pero sí de las características generales, y eso es muy importante para entender y trabajar los valores, la familia, elementos educativos, etc. Otra cuestión, echo de menos grupos de profesionales que trabajen e inter- cambien su tarea profesional, y eso para grupos específicos. Recuerdo que cuando trabajaba en el campo de la salud había grupos de trabajadores sociales y me habían ayudado muchísimo, como apoyo y llegando a hacer propuestas como colectivo. Creo que a pesar de la falta de tiempo, o de otras limitaciones, habría que plantearlo. F. Tapias: Creo que el trabajo más importante tendría que ser en el ámbito de las estrategias, y eso es diferente al conocimiento de las características culturales, familiares, etc. Por ejemplo en el caso de trabajar con familias, cada familia es un mundo, y a eso hay que sumar el factor cultural. Creo que muchas veces nos perdemos porque en la relación de tú a tú se puede ir llevando, lo llevamos mejor, tenemos más habilidades, pero cuando tenemos que hacer el paso en otros ámbitos como el familiar la cosa cambia mucho, con las interrelaciones entre sus miembros la cosa se hace muy complicada. R. Florensa: Creo que es necesario formarnos en métodos de intervención de crisis; en el campo migratorio ?veríamos situaciones de esta índole ante las pérdidas por el proceso migratorio. Sería muy importante hacer estos abordajes cuanto antes mejor, con el fin de evitar un deterioro y unas intervenciones demasiado largas en el tiempo y poco efectivas. También hay que tener la formación sobre aspectos culturales y de la realidad de su país de origen (economía, sociedad, movimientos migratorios, etc.). L. Guerrero: De entrada pienso que siempre nos falta formación debido al propio tipo de trabajo que hacemos: las situaciones y la realidad cammbian constantemente. Por ejemplo, cuando RTS - Núm. 186 - Abril 2009 57 Trabajo Social e Inmigración empecé las ONG estaban muy poco presentes, y eso ha cambiado mucho hoy en día. Desde que estudiaba la carrera y hasta ahora se han dado muchas variaciones, hay muchos elementos vinculados a ciencias sociales, a la sociología, antropología, política, el derecho, la necesidad de conocer mucha nor mativa (por ejemplo de extranjería). En nuestro trabajo abordamos muchos temas globales. En el tema migratorio creo que se tendría que crear una especialidad, igual que cuando vas a trabajar al campo de la salud mental y te piden experiencia o formación, y en cambio, creo que en el campo migratorio se banaliza mucho. N. Escala: Realmente es necesario disponer de profesionales formados en la diversidad. Y conjuntamente con eso poder hacer reciclaje de forma permanente. No tenemos que olvidar que estamos inmersos en el desbordamiento, y eso provoca estrés, por lo tanto tendríamos que trabajar también la gestión del estrés. Ya se encuentran experiencias y herramientas de formación en esta materia, pero el día a día se nos come. Hay que saber cómo tratar a la persona, entender y conocer sus costumbres, su talante, evitando proyectarnos, poder llegar al punto de equilibrio, dando la respuesta adecuada, de acuerdo o no con la demanda expresada, pero sí de acuerdo con la necesidad. A veces no sabes cómo hacerlo a pesar de saber hacia dónde tenemos que ir. Los compañeros con los cuales trabajo, todos, amamos nuestro trabajo, y en nuestra profesión, como en otras, el aspecto profesional está muy presente. F. Collell: Claro está que hace falta una 58 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 buena formación, pero es un requisito para ser profesional, igual que pasa con un maestro, un médico, un administrativo que atiende al público. ¿Una formación muy específica para atender a la inmigración? No lo sé. Por encima de todo hace falta el respeto a la persona, y eso es un requisito para todas las profesiones. Yo también puedo ser usuaria de un servicio de Justicia y pediré que se me respete, eso es primordial. Por lo tanto, y volviendo a la cuestión planteada, yo diría que sí, pero es tan importante la formación como que la otra persona sepa escuchar y ponerse en mi lugar, en mi problema. Creo que lo más importante es el respeto, el entender y el ponerse en el lugar del otro. Con respecto a la formación específica, es lógico que cada uno dentro de su especificidad laboral la tenga. Por ejemplo, yo misma, después de 18 años ahora conozco muchas cosas de educación que antes ignoraba. N. Escala: Yo creo que realmente tenemos que conocer muchas cosas concretas para abordar ciertas situaciones de la inmigración (características de un grupo étnico, papel de la mujer, etc.), quizás hace falta que de alguna forma se aborden dentro de la carrera, pero también podría plantearse hacer algún tipo de especialización, donde además de ciertos campos como salud o justicia podría estar el de la inmigración. F. Tapias: Necesitaríamos más conocer sobre estrategias, además de los factores culturales, por tipología de casos puedes saber cuál es la estrategia más efectiva. F. Collell: ¡Pero no sería específico para inmigración! Dossier F. Tapias: Específico para grupos concretos creo que sí. Como ejemplo concreto, quiero comentar una formación que hice con el doctor Achotegui, psiquiatra del Servicio de Atención Psicopatológica y Psicosocial en Inmigrantes y Refugiados (SAPPIR), que lleva a cabo un trabajo muy importante de adaptación a la realidad de la inmigración ante trastornos y problemas de salud mental. El doctor Achotegui nos decía que con la concepción de visita que tenemos aquí nos quedaríamos sin entender nada de nada, y una visión totalmente sesgada. Cuando entendieron el concepto de tiempo del usuario, y que a partir de tres cuartos pronto la gente empezaba a decirte la verdad, lo que les pasaba, se decidió que la primera visita no podía ser más corta de 2 horas. ¡Muy bien, claro está, porque ellos lo pueden hacer! ¡Es decir, si se necesitan 2 horas, pues se hace! Según cómo se mire, es un lujo, pero está muy bien que hayan podido detectar la necesidad y que lo hayan llevado a cabo, y que la persona pueda ser atendida como lo necesita: eso es una estrategia. F. Collell: No es un tema de formación. Si eres un buen profesional, las estrategias las vas encontrando. 6) ¿Cómo vivís las reacciones ciudadanas frente a la inmigración? ¿Cómo creéis que hay que actuar a nivel profesional? D. Serra: En el tema de las reacciones, creo que es bueno reconocer que a nosotros mismos nos salen elementos de xenofobia. En lo referente a las reacciones que veo a nivel social a veces me dan mucha rabia y otras miedo, miedo que no seamos capaces de prevenir situaciones que creo que llegarán. En cuanto a lo que digo o no en contra, depende, a veces doy mi opinión y otras callo. Intento tomar posición en el terreno de la igualdad de derechos. Por ejemplo, en situaciones en las que te encuentras en una tienda, con conocidos, intento acentuar este tema de la igualdad, a veces lo consigues, se puede hablar, otra cosa es que te entiendan o cambien su posición. Y a nivel profesional, también soy de la opinión que deberíamos actuar más como colectivo. Debido a nuestro trabajo, estamos en primera línea de la sociedad, vemos lo que está pasando, tendríamos que unir esfuerzos y creo que no vamos a la una. Se dan pequeñas peleas internas, nos falta unidad, y si lo comparamos con otros colectivos profesionales todavía se hace más evidente. Cada cual trabaja en su pequeña parcela. Sería necesario que como colectivo pusiésemos sobre la mesa la realidad que vemos, y sobre aquello a lo que no podemos encontrar salida a nivel individual que se canalizase como grupo, así tendríamos más fuerza. No sabemos explicitar el conocimiento que tenemos de la realidad. L. Guerrero: Los profesionales se encuentran como faltos de formas de actuar y podemos caer en un cierto conformismo. A nivel de administración todo viene muy dirigido, se aplican los mismos proyectos a realidades diversas. Cuando empecé eso no era así, aprendíamos unos de los otros, teníamos iniciativas, en cambio ahora parece que todo el mundo hable y trabaje lo mismo, parece que se acentúa el tema del control sobre otras cosas. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 59 Trabajo Social e Inmigración Y es cierto que hay poco corporativismo como profesionales, y no explicamos ni nuestro trabajo ni la realidad. En cambio, parece que si el trabajo lo hace una ONG entonces va bien que explique lo que hace, pero nosotros nos encontramos limitados a nivel laboral y quizás la única forma de saltarnos ciertas limitaciones podría ser el colectivo. D. Serra: A veces nos dedicamos demasiado a la victimización y no somos capaces de poner en positivo lo que estamos haciendo, lo bueno que aportamos a la sociedad. No somos capaces. Tampoco tengo claro quién lo debería liderar. L. Guerrero: Tiene mucho que ver con el concepto que tenemos de la profesión. Ves a mucha gente joven que está en el despacho y su único ámbito de trabajo es el servicio, y eso limita las actuaciones y las iniciativas, se quedan en la atención individual, no se trabaja lo comunitario, y cuando se ve la necesidad de trabajar esta vertiente, entonces contratan a otras personas, quizás externas (por ejemplo mediadores, agentes cívicos, etc.). Y hablando del tema de las reacciones ciudadanas, me molesta mucho el discurso cada vez más xenófobo. ¡Hace unos años eran comentarios a medias, pero ahora te lo tiran en la cara ya que al atender población inmigrada nos acusan de favorecer que vengan a vivir a la ciudad o al barrio! ¡Como si tuviéramos interés a este nivel! Y este tipo de discurso se va extendiendo a todos los niveles. Hasta el año 2000 poco se hablaba de inmigración, había interculturalidad u otras cosas, pero ahora vuelve a estar sobre la mesa, e incluso tenemos un ministerio. Y hay que recordar que antes de que se 60 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 hablara nosotros ya estábamos trabajando. Creo que se quiere acentuar demasiado el apartado de control, y es un tema –la inmigración– que siempre estará, y hay que hacer una apuesta decidida por el conocimiento mutuo, cambiar las actitudes rígidas, las posiciones extremas. F. Tapias: Una cosa que me ha sorprendido es que población gitana que atiendo haya asumido el discurso contrario a la inmigración que puedes encontrar a nivel del resto de la sociedad. Los acusan de quedarse las ayudas y los recursos, etc. Claro que nos movemos dentro de la franja de la población más vulnerable. L. Guerrero: Tampoco ayudan mucho las noticias que se difunden, por ejemplo ahora con la crisis, que los inmigrantes se marcharán cuando estén en el paro capitalizando la prestación. No ayuda a la buena información. F. Tapias: A nivel de reacciones lo que más rabia me da es la utilización que se hace de ellas: una cosa es una persona de la calle que te pueda dar su opinión contra la inmigración, pero ves, por ejemplo, grupos de jóvenes skins, que lo han tenido todo a nivel económico, y también tienen actitudes racistas. Y como se va extendiendo a toda Europa esta visión xenófoba y racista, y se cree que no se está trabajando de forma correcta para prevenirlo. Cuando la gente dice ciertas cosas a nivel de inmigración, como el tema de la delincuencia, me veo capaz de hacer un contraargumento, porque la delincuencia ha subido en toda la sociedad, de todo tipo, no sólo con la inmigración, pero lo que he dicho antes sí que me da miedo. L. Guerrero: En referencia a eso, puedo recordar cómo hace unos años se hizo una Dossier oferta de promoción pública en la ciudad donde trabajo, y se pedían unos requisitos iguales para todo el mundo, y hubo mucha demanda. Los grupos que informábamos nos encontramos a algunas personas que cuando venían y veían a gente con rasgos extranjeros te decían que no servirían de nada las reuniones y las valoraciones si al final se les darían a ellos todos los pisos. Seguro que la falta de pisos y la sobredemanda lleva a estas actitudes. F. Tapias: Igual pasa con temas como la falta de jardines de infancia, donde se entra en una lucha por los recursos escasos Si fueran suficientes quizás la cosa cambiaría, se tendría que considerar poder cambiar ciertos criterios de valoración. R. Florensa: Creo que es muy importante hacer pedagogía y ayudar a reflexionar en torno a la idea de qué tipo de sociedad queremos, y que tenemos que promover un nivel de vida digno para todo el mundo, tanto para los que viven en ella de siempre como la gente que ha llegado hace menos tiempo. También es bueno remarcar aspectos positivos de la inmigración y de las necesidades mutuas que tenemos los unos de los otros. N. Escala: Cuando escucho como ciudadana ciertas reacciones y comentarios que se hacen lo vivo realmente mal. Ciertamente, yo también tengo contradicciones internas, hay el peligro a veces de rozar la filia y pasar a rozar la fobia, no siempre es fácil mantenerse en la posición adecuada. Sí que me crean violencia interna, ciertos comentarios, a pesar de saber que mil evidencias no hacen cambiar ni abrir los ojos ni las orejas, si éstos no quieren ver ni escuchar. Todo lo que es diferente es vivido como contrario y enemigo, una amenaza para la propia identidad, y eso duele mucho. Hacer una ‘clase magistral’ es perder el tiempo, se tiene que partir de ejemplos próximos y muy concretos. A modo de ejemplo, puede pasar que mientras estás comprando y te están haciendo un comentario negativo, otro comprador –indio, en este caso– se esté dirigiendo en catalán al vendedor, y éste paradójicamente le responde en castellano una y otra vez. Total, en la medida en que creas que el otro te puede entender, puedes contrastar el comentario con calma. No siempre es fácil. En la relación del tú a tú, intentas compensar, relativizar aquello que se te dice como verdad absoluta. Cuando a veces llaman al servicio, de forma anónima sobre este tema, les explicas que se atiende a todo el mundo por igual, que los requisitos para acceder a cualquier ayuda son los mismos sea quien sea y venga de donde venga. Trabajamos para ayudar, no para perjudicar a unos u otros. Eso lo explicas, otra cosa es que te crean. L. Guerrero: ¡Siempre nos tenemos que estar justificando! Para bien o para mal. F. Collell: Realmente cierto tipo de reacciones ciudadanas me saben muy mal. Es verdad que como cierta gente conoce que trabajas en la Administración parece como si te buscan la provocación, y tú te sientes en situación de buscar justificaciones. Por otra parte, y tal como ha dicho Núria, también te encuentras ante conflictos personales: por ejemplo, te encuentras a muchas familias que a la hora de escolarizar a sus hijos no tienen plaza en la escuela que ellos quieren, debido al reparto de alumnos inmigrantes en el centro. Puede tratarse de gente de toda la vida de Vic o RTS - Núm. 186 - Abril 2009 61 Trabajo Social e Inmigración Manlleu, que quizás sus padres ya iban a aquella escuela y ahora no pueden llevar a ella a sus hijos debido a los recién llegados. Hay que recordar que los alumnos NEES (con necesidades educativas especiales) son 8 plazas por aula de 25. Cuando los padres ven que sus hijos no caben, te dicen que es por culpa de los recién llegados y se plantea la situación de si el derecho que tienen es a plaza escolar en general o en la que ellos escogen. Se les explica que se puede escoger siempre que haya plaza, y si no se puede, el departamento busca la mejor alternativa, y que a eso hay que sumar que se intenta no crear escuelas gueto, que por eso hay reserva de unas plazas, etc., pero si no quedan satisfechos con la explicación se te plantea el problema... y el tema no queda resuelto. Sin querer estamos enfrentando a la población autóctona y la inmigrada. N. Escala: También hay que decir que te puedes encontrar una familia inmi- 62 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 grada con tres hijos, ¡y uno en cada escuela! F. Collell: Serían situaciones extremas, normalmente se procura no separar hermanos. También hay escuelas y escuelas, la concertada también es diferente entre ella. Ayuda mucho una buena implicación de inspección, y todavía así es difícil. N. Escala: Los datos que tenemos en Vic del mes de marzo de este año dicen que en las escuelas hay un 23% de alumnado extranjero, repartido el 49% en la pública y el 51% en la concertada. Realmente muy equilibrado. Y con la última intervención damos por cerrada la mesa redonda, agradeciendo la participación de todas las ponentes y quedando con el convencimiento de que todavía quedan muchas cosas por decir y muchos temas por tratar y profundizar, pero el debate, la reflexión y el trabajo continúan, seguro, en el día a día. Interés profesional Las personas “casi mayores”: inclusión y exclusión social Discapacidad y trabajo social: una mirada sobre los enfoques y los derechos humanos De la bioética clínica a la bioética social El TrabajoSocial: influencias de la “reconceptualización” Rosa Romeu recibe la Medalla al trabajo President Macià Escola de Formació Social Sabadell-Terrassa. 50 años después RTS - Núm. 186 - Abril 2009 63 64 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Interés profesional Las personas “casi mayores”: inclusión y exclusión social Maria Camino Gastón Sola1 y Dolors Jordán i Vendrell 2 “Hay personas convencidas de que no pueden vivir una vida mejor porque han tenido un pasado demasiado difícil” (Anónimo “La vida se debe tomar minuto a minuto porque nunca sabes si llegará el mañana” (M. DOLORS ORRIOLs, escritora) Resumen Una de las tareas importantes que realizan los/las trabajadores sociales es la obtención de información para poder valorar situaciones de necesidad y facilitar los recursos adecuados para promover la mejora de la convivencia y la inclusión social. Este artículo es una herramienta de información profesional y de utilidad práctica en el desarrollo de las tareas de atención directa a las personas “casi mayores” y a la vez una denuncia de una laguna importante en la disponibilidad de recursos que impide a menudo una inter vención adecuada y positiva. Palabras clave: Personas “casi mayores”, indicadores de riesgo, albergues, centro de acogida, viviendas tuteladas y/o con servicios. Abstract One of the most important tasks realized by social workers is the obtaining of information in order to value situations of need and to facilitate the adequate resources to promote the improvement of living cohabitation and social inclusion. This article is a professional information tool to be applied in our daily practice when caring for the “almost elderly”. It is also a reporting of a resources gap which prevents a suitable and positive intervention and outcome in many cases. Key words: “Almost elederly” people, risk indicators, shelters, assessment centres, sheltered housing. Diplomada en Trabajo Social. Departament d’Acció Social i Ciutadania, Servei Territorial de Girona. [email protected] 2 Diplomada en Trabajo Social. Consorci Centre d’Acolliment i Serveis Socials “La Sopa”, Ajuntament de Girona. [email protected] 1 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 65 Las personas “casi mayores”: inclusión y exclusión social Introducción Nuestra experiencia profesional en atención directa a personas sin techo en un centro de acogida y servicios sociales en la ciudad de Girona y de gestión administrativa y asignación de recursos en la Delegación Territorial de Acción Social y Ciudadanía, también en Girona, nos ha permitido investigar la situación de las personas de 55 a 64 años en situación de exclusión grave. Inclusión y exclusión se han convertido en palabras de moda. A raíz de los acuerdos europeos de Lisboa, que obligan a todos los países europeos a la lucha contra la exclusión, se han elaborado y publicado planes de inclusión a nivel de toda España y también a nivel de Cataluña, pero la experiencia diaria de los profesionales que trabajamos en este campo es que estos planes se quedan más al nivel de principios y de teoría que de una práctica real, dado que cualquier plan que no se base en legislación y no cuente con la financiación correspondiente de acuerdo con las necesidades reales de los ciudadanos se queda a la altura de los buenos propósitos y de las buenas palabras. Cumplir 65 años marca el límite entre edad laboral y edad de jubilación y condiciona o determina a menudo los recursos a utilizar y aplicar, con independencia de la situación y necesidad real de la persona. Como profesionales de los ser vicios sociales que trabajamos con personas mayores estamos comprometidos a garantizar, lo más posible, el derecho a decidir de los usuarios de servicios, pero la mayoría de las veces las personas sin techo entre 55 y 64 años se tienen que 66 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 adaptar a unos recursos sociales insuficientes y poco adecuados, con respecto a sus necesidades reales, en vez de que los recursos estén adaptados a las necesidades que hay que resolver. Es aquello que un trabajador social de Girona, amigo nuestro, bautizó como trabajar a menú, en lugar de a la carta. Indicadores de riesgo social Cuando en nuestra sociedad se habla de las personas a las que nosotros llamamos “casi mayores”, generalmente nos referimos a personas laboralmente activas o prejubiladas. Hay, sin embarg o, otro grupo de personas, casi desconocido, que debido a varios factores de riesgo (enfermedades físicas y/o psíquicas, falta de vivienda y falta de recursos económicos...) y problemáticas entrecruzadas se encuentra excluido de nuestra sociedad. Son personas válidas de 55 años hacia arriba sin enfermedades graves o totalmente invalidantes. Las personas, en función de vivir una situación de inclusión o exclusión, suelen tener una percepción positiva o negativa de ellas mismas y del mundo que las rodea. Las situaciones de exclusión extrema se dan hoy más en hombres que en mujeres, de acuerdo con nuestra experiencia profesional. Interés profesional INDICADORES DE RIESGO SOCIAL Indicadores de riesgo Procedencia Imposibilidad de acceso Baja autoestima Economía insuficiente o inexistente - Barraquisme Abuso de drogas - Calle Experiencia familiar insatisfactoria - Caravanas Enfermedades comunes - Albergues Nivel educativo mínimo - Pensiones Sin vivienda o con vivienda sin condiciones - Centros de acogida Viviendas tuteladas Viviendas con servicios Sin relaciones familiares y sociales Fuente: Elaboración propia. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 67 Las personas “casi mayores”: inclusión y exclusión social Red de recursos sociales y asistenciales en Cataluña Con la práctica del día a día, los profesionales que trabajamos con personas entre 55 y 64 años conocemos bien la falta de recursos asistenciales que tiene Cataluña. Nos encontramos a menudo con que delante de una persona que se encuentra sin red familiar y en muchos casos también social, y que vive en la calle, no podemos hacer nada. Son personas que no reciben pensiones mínimas que no pueden acceder en una vivienda digna y tampoco a realquilar una habitación en condiciones adecuadas. Eso es a causa del aumento acelerado del precio de la vivienda en España. Con respecto a los precios de una habitación de alquiler o de una habitación en una pensión, han aumentado un 100 o un 200%. Dos ejemplos: En 2001 una habitación de alquiler en Girona costaba 120 €. Actualmente cuesta unos 250/300 €. En 2001 una habitación en una pensión en Girona costaba 250/300 €. Actualmente cuesta unos 600 €. Las personas que tienen entre 55 y 64 años y que se han quedado en la calle tienen añadida, a la situación de exclusión social, la edad. Las personas que tienen entre 55 y 64 años y que se han quedado en la calle tienen añadida, a la situación de exclusión social, la edad. Son personas que todavía no pueden acceder a una vivienda tutelada y que para la sociedad ya han quedado fuera del mercado laboral, y por lo tanto, 68 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 de la posibilidad de insertarse laboralmente. Son personas que en el mejor de los casos acaban ingresando en centros de acogida y viviendo en ellos hasta que tienen 65 años, y entonces pueden optar a solicitar una plaza pública de vivienda tutelada. Centros de acogida y albergues en Cataluña: Los centros de acogida y los albergues son instituciones para alojar temporalmente a personas sin techo. En Cataluña hay centros de titularidad pública y privada. La mayoría son de titularidad privada. En los albergues la estancia suele ser de 3 a 5 días cada 3 o 5 meses, pero cambia según la nor m ativa interna de cada albergue. Los servicios que se ofrecen mayoritariamente son: comedor, ducha, lavandería, consigna, pernoctación y atención individualizada de un profesional del campo social. En los centros de acogida la estancia suele ser de 2 a 6 meses, los servicios que se prestan son los mismos que en el albergue, pero la atención social al usuario es más personalizada. El equipo técnico del centro elabora un plan de trabajo integral para cada persona, que incluye la coordinación con otras entidades locales. (Ver Anexo 1) Interés profesional MAPA DE CENTROS DE ACOGIDA, ALBERGUES, COMEDORES Y DUCHAS DE CATALUNYA Centros de acogida / Albergues Comedor social Duchas Fuente: Elaboración propia. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 69 Las personas “casi mayores”: inclusión y exclusión social Comedores y duchas sociales: Los comedores sociales ofrecen comidas y en algunos casos otros servicios como el de lavandería, ducha y ropero. Hay también servicios donde únicamente se ofrecen bocadillos o duchas. En Cataluña hay varios repartidos. En el mapa, los servicios de ropero, lavandería y consigna no se especifican, ya que están incluidos en la mayoría de estos establecimientos. (Ver Anexos 2 y 3) Viviendas tuteladas - Viviendas con servicios: La necesidad más importante para las personas “casi mayores” en exclusión social extrema es la vivienda. Es evidente que no pueden acceder al mercado privado, y con respecto a las viviendas sociales o de protección oficial, no llegan, no solamente por tener ingresos muy escasos, sino también porque hay otros colectivos, como son las familias numerosas o monoparentales, que pasan delante. Otra opción sería el acceso a las viviendas tuteladas o viviendas con servicios. De acuerdo con el Decreto 18/2003, de 22 de julio, una persona menor de 65 años puede acceder a un centro de día si hay un informe médico y social que lo justifique. Pero, paradójicamente, no se aplica el mismo criterio para el acceso a las viviendas tuteladas públicas o colaboradoras. Actualmente, y hasta que no se modifique la Orden BEF/468/2003, que regula el procedimiento y los criterios de acceso a los programas de atención a las personas mayores gestionado por el ICASS, 70 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 este requisito de edad marca un punto de inflexión que tiene como consecuencia la impotencia profesional para gestionar un recurso adecuado a las personas casi mayores en situación de exclusión grave. A causa de esta norma legal, al colectivo de personas a las cuales nos referimos en este artículo le ha sido “vetado“ este recurso de la red de asistencia social. Por tanto, los profesionales que trabajamos en la atención directa al ciudadano nos sentimos impotentes ante la necesidad planteada por el usuario de edad inferior a 65 años, que no está cubierto por la red de servicios ante la falta absoluta de centros y establecimientos adecuados al colectivo de personas en exclusión social. La aplicación de la nueva Ley de Servicios Sociales (vigente a partir del 1 de enero de 2008) obliga, en principio, a modificar el criterio de acceso a este tipo de viviendas para incluir a las personas menores de 65 años, dado que el criterio básico de intervención es la “necesidad”. (Ver Anexo 4) Interés profesional MAPA DE PLAZAS DE VIVIENDAS TUTELADAS Y VIVIENDAS CON SERVICIO EN CATALUNYA PARA GENTE MAYOR Número plazas públicas Número plazas colaboradoras Número plazas privadas (viviendas con servicios) RTS - Núm. 186 - Abril 2009 71 Las personas “casi mayores”: inclusión y exclusión social El sistema público de pensiones El inicio de las políticas de protección se situa en la Comisión de Reformas Sociales del año 1883. En 1900 se crea el primer seguro social relacionado con los accidentes de trabajo. A partir de entonces se empiezan a crear otros seguros sociales para la mejora y el bienestar de la clase obrera. En 1947 se crea el primer mecanismo de este tipo de protección general: el Seguro Obligatorio de Vejez e Invalidez (SOVI). Pronto se observó que eso era insuficiente y que había que disponer de protecciones complementarias. Fue así como nacieron las mutuas laborales, pero la diversidad trajo un desorden que implicaba discriminación en función del tipo de población laboral. En 1963 aparece la Ley de Bases de la Seguridad Social, que permite implantar un método de protección social más completo y general. A pesar de la existencia de esta ley y de la siguiente de 1966, la Ley General de la Seguridad Social, todavía siguen habiendo carencias en función de la realidad de los trabajadores y de sus salarios. No es hasta que se implantó la democracia con la aprobación de la Constitución Española que se produjeron una serie de reformas más ajustadas a las necesidades reales en los diferentes campos que configuran el sistema de la Seguridad Social. Durante las décadas de los ochenta y noventa se han ido llevando a cabo medidas para mejorar y perfeccionar la acción protectora a los colectivos no cubiertos y para dar una mayor estabilidad económica al sistema de la Seguridad Social. 72 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 No es posible comprender la situación económica de las personas “casi mayores” en situación de exclusión si no se conoce de qué pensiones pueden ser beneficiarias. Es por eso que se incluye un anexo sobre el sistema vigente de pensiones, que sin embargo no incluye los regímenes especiales, porque no suelen ser de aplicación a este colectivo. (Ver Anexo 5) Conclusiones La Constitución Española fue el punto de partida para construir la red de servicios sociales y superar situaciones anteriores donde los equipamientos residenciales dependían sobre todo de Governación (Beneficencia) y de Ayuntamientos (a menudo asilos). La Seguridad Social empezó a crear, pues, establecimientos residenciales en todo el territorio del Estado. Más adelante estos equipamientos fueron transferidos a las comunidades autónomas y pasaron a ser parte de los servicios sociales. Las residencias que se habían concebido en un principio para personas válidas se convirtieron en asistidas para personas en situación de gran dependencia. La consecuencia para las personas “casi mayores” excluidas, que suelen ser válidas en edades inferiores a los 65 años y que tienen una problemática social grave de salud y de vivienda, fue la desaparición del único recurso a su alcance, y su situación pasó a ser de solución social difícil o nula. En lo referido a los recursos actuales de atención a personas sin hogar y de viviendas tuteladas y de servicios comunes, la observación de los mapas y anexos permite constatar que en Cataluña hay: Interés profesional 1. Una dispersión de recursos que no se justifica en función de las necesidades de la población. 2. Una insuficiencia absoluta de recursos. 3. Una implicación del sector público por debajo de la iniciativa privada respecto a personas sin techo. 4. Una diferencia “excesiva” e injustificable si la comparamos con la red y disponibilidad de recursos de los servicios sociales de la Europa Occidental. Este año 2008 es el año de inicio de atención a la dependencia y de puesta en marcha de la nueva Ley de Ser vicios Sociales. Son dos pasos gigantes y que implican un antes y un después en el despliegue de los servicios sociales y en el cumplimiento de los derechos constitucionales de las personas, que hasta ahora en la práctica habían sido negados. Queda, sin embargo, una asignatura pendiente: la atención integral a personas “casi mayores” excluidas, especialmente de los recursos de acceso a la vivienda. Queda, sin embargo, una asignatura pendiente: la atención integral a personas “casi mayores” excluidas, especialmente de los recursos de acceso a la vivienda. Como dice José Manuel Orengo, alcalde de Gandia, hablando de la prestación de vivienda social: “no estamos haciendo ningún favor, estamos concediendo un derecho constitucional, el derecho a la vivenda, al margen del nivel de renta que se tenga”. (Diario Avui, 27 de enero de 2008). Como profesionales del trabajo social en el campo de la atención directa y en la gestión y asignación de recursos, creemos que plantear el acceso a la vivienda como un derecho real y posible para todo el mundo, incluyendo aquellos sectores de la población que por excluidos se convierten en invisibles para la mayoría de la población, es una condición necesaria para atender la dependencia y aplicar la nueva Ley de Servicios Sociales para todo el mundo. Dada la nueva situación legal, esperamos y confiamos que la inclusión social se llevará a cabo más allá de los grandes planes teóricos, pero nos sentimos obligadas a decir que mientras la población de personas “casi mayores” en situación de exclusión grave continúe sin disponer de recursos suficientes y adecuados, la inclusión social de la población será solamente parcial. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 73 Las personas “casi mayores”: inclusión y exclusión social Bibliografía CABRERA CABRERA, Pedro José. La acción social con personas sin hogar en España. Madrid: Càritas Espanyola, 2002. ISBN 848440-233-9. Constitució Espanyola (1978): Arts. 50; 149.1.1. Decret legislatiu 17/1994, de 16 de novembre, que té per objectiu (art. 1) ordenar, estructurar, promoure i garantir el dret a un sistema de serveis socials de responsabilitat pública en l’àmbit territorial de Catalunya. Decret 27/2003, de 21 de gener. Defineix els Serveis residencials d’estada limitada i del servei de menjador. Decret 176/2000, de 15 de maig, modificació del Decret 284/1996. Reforçar la protecció dels usuaris de serveis so- 74 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 cials quant a la qualitat dels serveis que reben dels establiments residencials. Estatut d’Autonomia de Catalunya (18 de juny de 2006) Títol I, Cap. I. Drets i Deures d’àmbit civil i social: Arts. 9.25; 18; 42. Fundació Viure i Conviure, Caixa de Catalunya. Els drets del meu demà. Manual dels drets i deures de les persones grans. 2006. D.L.: B-8588-2006. Generalitat de Catalunya. Pla d’acció per a la inclusió social de Catalunya 2003-2006. Llei 4/1994, de 20 d’abril, Defineix la Xarxa Bàsica de Serveis Socials de Responsabilitat Pública. Llei 7/1985, de 2 d’abril, Llei Reguladora de les Bases de Règim Local, on s’estableix la obligatorietat dels Ajuntaments de prestar serveis socials superant definitivament la beneficència. Llei 12/2007, d’11 d’octubre, Llei de Serveis Socials a Catalunya. Llei 13/2006, de 27 de juliol, de Prestacions Socials de Caràcter Econòmic. Llei 26/1985, de 27 de desembre, Llei de Serveis Socials a Catalunya. Llei 39/2006, de 14 de desembre, de Promoció de l’Autonomia Personal i Atenció a les persones en situació de dependència. Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales. IV Plan Nacional de Acción para la inclusión social del Reino de España 2006-2008. Centro Terapéutico y atención social Associació Rauxa Centre Resi. 1res atencions Zona Franca Centre Resi. 1res atencions Almogàvers Centre Resi. 1res atencions St. Gervasi Centre Residencial Can Planas Centre Resi. Atencions Bàsiques Horta Centre Resi. Atencions Bàsiques Meridiana BARCELONA BARCELONA* BARCELONA* BARCELONA* BARCELONA* BARCELONA* BARCELONA* RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Centre d’Acollida Centre Acolliment i SS.SS «La Sopa» Casa Acollida del Transeünt de Càrites MATARÓ GIRONA TARRAGONA Fuente: Elaboración propia Projecte Sostre Comunitat Drapaires d’Emaus Alberg Sant Joan de Déu BARCELONA BARCELONETA Fundació Verge de la Gleva BARCELONA SABADELL ACISJF “Casa de la Jove” BARCELONA 93 408 45 43 93 408 45 43 93 428 71 81 93 314 50 12 93 418 42 76 93 485 44 00 93 289 69 07 93 415 62 98 973 71 16 89 973 31 40 79 973 700 617 TEL. Albergue temporal Albergue y Centro de Acogida temporal Centro Acogida de estancia temporal Comunidad de vida Acogida Acogida (derivados ss.ss) Acogida a personas inmigrantes sin documentación 977 23 23 32 972 20 42 50 93 755 14 53 93 727 27 16 93 221 20 91 93 301 27 93 93 417 33 53 Reinserción laboral y social a mujeres a 93 215 56 26 partir de 18 años * para poder acceder a cualquiera de estos servicios (centros o albergues) hay que hablar antes con: Servei d’Inserció Social Centro de Baixa Exigencia Centro de Baja Exigencia Acogida urgencias sociales Acogida nocturna de estancia temporal Acogida nocturna de estancia temporal Acogida de estancia temporal Albergue temporal Càrites parroquial de Mollerussa MOLLERUSSA Albergue temporal Albergue y Centro de Acogida temporal Oficina Maranyosa Alberg de Transeünt de Tàrrega Albergue y Centro de Acogida temporal TIPOLOGÍA DE SERVICIO Oficina Maranyosa NOM TÀRREGA LLEIDA CIUDAD Anexo 1: CENTROS DE ACOGIDA / ALBERGUES Pl. Peixateries Velles, 11 c/ Claveria, 5 c/ Sant Simó, 13 c/ Migdia, 52 c/ Pescadors, 42 baixos c/ Cardenal Casanyes, 6-8 c/ Font Florida, 36-38 c/ València, 273, 1er 1a Av. Meridiana, 197 Av. Meridiana, 197 camí de l’Església s/n c/ Selva del Camp, 1 c/ Cister, 20-22 c/ Almogàvers, 199 c/ Carrer 60, 9 c/ Dr. Rizal, 14 c/ Palau, 22 c/ Hospital, 2, baixos extern hotels i pensions c/ Maranyosa, 12, baixos DIRECCIÓN Interés profesional 75 76 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Fundació Verge de Gleva Mañana en compañia Patronat Social de Obreras Menjador de la Lleona Nueva vida Obra so. Sta. Lluïsa Marillach Folra Menjador SAVI BARCELONA BARCELONA BARCELONA BARCELONA BARCELONA BARCELONA BADALONA FIGUERES PALAMOS Fuente: Elaboración propia Parroquia Maria Reina Esglèsia Exèrcit de Salvació Fundació Prisba BARCELONA BARCELONA BARCELONA 3 comidas Comida / cena (lunes, mierc., viern.) Cena Comida Cena Dif. Comidas (der. Ss.ss) Comida (immigrantes sin papeles) Desayuno Desayuno Cena Desayuno Comida (deriv. Ss.ss) Comida Comida Desayuno (personas con VIH/SIDA) Cena Vales (con previo informe de Ss.ss) Desayuno Desayunos i bocadillo Cena ambulante (dif. zonas) Comida todos los días de 13:45/14:30h Comida Bocadillo Reina de la Paz L’Hora de Deu M.Convent de les Josefines Menjador Social Paral.lel Menjador Social Navas Ambit Adhesió As. Rauxa, R. La Terrasseta As. Raval Obert Centre Acollida Assís Centre la Yaya Lluïsa Comunitat Sant Egidio BARCELONA BARCELONA BARCELONA BARCELONA BARCELONA BARCELONA BARCELONA BARCELONA BARCELONA BARCELONA BARCELONA Comida SERVICIOS QUE OFRECE La Panera NOMBRE LLEIDA CIUDAD 972 67 81 71 972 60 22 11 651 417 282 93 317 94 61 93 302 12 27 93 221 08 80 93 434 26 00 93 417 02 73 93 457 88 48 93 203 55 39 93 416 17 76 93 310 23 54 93 442 85 41 93 417 62 50 93 441 62 12 93 351 72 20 93 412 63 42 93 219 41 61 93 302 19 81 93 204 45 86 93 458 40 61 93 441 81 23 93 317 94 61 en obres TEL. Anexo 2: RELACIÓN COMEDORES SOCIALES c/ Mestre Falla / Poeta Marquina s/n Lado de la isglesia de Palamós c/ Arnús, 64 c/ Hospital, 2 c/ Robadors, 7 c/ Sant Carles, 33 c/ Font Florida, 36-38 c/ Elisa, 23 c/ Provença, 389 c/ Moneders, s/n c/ Robí, 18 baixos c/ Cecs de Sant Cugat, 1 Rambla del Raval, 4 c/ Ganduxer, 98 (entrada c/ Sant Casimir) Av. Paral·lel, 97 bis Av. Meridiana, 238-240 c/ Robadors, 15 c/ Fraternitat, 40 c/ Arc del Teatre, 21 local 3 c/ Tres Reis, 5 Plaça del Raspall, 1 Plaça Pedró, 1 baixos Plaça Sant Agustí,2 c/ La Panera, 7 DIRECCIÓN Las personas “casi mayores”: inclusión y exclusión social Centre de Dia Meridiana Associació Yaya Lluïsa Centre Acollida Assís Centre Obert Arrels Centre Obert Heura Fundació Prisba SAPS-Creu Roja Associació Dit i Fet Cáritas Diocesana Cáritas Interparroquial BARCELONA BARCELONA BARCELONA BARCELONA BARCELONA BARCELONA BARCELONA BANYOLES GIRONA NOMBRE BARCELONA CIUDAD Servicio de ropero Servicio de ducha y ropero Ropero 972 20 88 49 972 58 30 55 93 310 77 14 93 443 03 73 93 310 23 54 Ducha (2€ ) (+ 60 años) Ducha y lavandería 93 217 45 49 93 441 29 90 93 204 45 86 93 458 40 61 93 408 45 43 TEL. Ducha, ropero, consigna... Ducha, ropero, consigna Ducha, ropero, cortar pelo Ducha y ropero Ducha y ropero TIPOLOGÍA DE SERVICIO Anexo 3: RELACIÓN DUCHA/ROPERO (OTROS) Av. Sant Narcís, 183 c/ Muralla, 28 c/ Lledó 15, pral Av. Drassanes, 13-14 c/ Cecs de Sant Cugat,1 Av. Repúb. Argentina, 1 D c/ Riereta, 24 ba c/ Tres Reis, 5 Plaça Raspall, 1 b Av. Meridiana, 197 DIRECCIÓN Interés profesional RTS - Núm. 186 - Abril 2009 77 78 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Jocs Olímpics, 2, 5a. Pl. Girona (Gironès) Sant Diego de Califòrnia, 16-42 Balaguer (La Noguera) Plaça Poeta Miguel Hernández 1, bxos. Rubí (Vallès Occidental) c/ Afores, s/n Pça. Planell, 7-8 c/ Marina, 351 c/ Dr.Barraquer,6,entl.2a. Av. Comte Guifré, s/n c/ Garbí, 3 oficina c/ Tossa de Mar,37,1è,2a c/ del futbol,s/n. (Urb. Font del Bosc) c/ Hospital, 41-43 c/ Camp de l’empedrat, s/n. Habit. Tutelats La Creu de Palau Habit.Tutelats Comtes d’Urgell Habitatges Tutelats Rubí Montcel Habitatges Tutelats Ponts Habitatges Marina Pis T. Ajunt.St.Adrià del Bèsos Hab. Compartits Casals dels Avis Habit.amb Serveis Fund.Lacustaria.60 H.T. de la Fundació Amalia Soler Apart.Tutelats Novallar de Mediona Casa familiar Mare Déu Misericordia H.Tutelats Almeda Reus (Baix Camp) Cornellà de Llobregat (Baix Llobregat) Llagostera (Gironès) Vilafranca del Penedès (Alt Penedès) Mediona (Alt Penedès) Barcelona (Barcelonès) St. Adrià del Besòs (Barcelonès) Ripoll (Ripollès) Sant Boi de Lluçanès (Osona) Ponts (La Noguera) Barcelona (Barcelonès) L’ Hospitalet de Llobregat (Barcelonès) Olot (Garrotxa) Juan Ramón Jiménez, 4-6 Av. Amèrica, 61 c/ Uruguai, 5 Apartaments Pau Casals Hab. Tutelats L’Hospitalet-Bellvitge Edifici Parc Nou Tona (Osona) Manresa (El Bages) Sta. Coloma Gramenet (Barcelonès) Barcelona (Barcelonès) Barcelona (Barcelonès) Barcelona (Barcelonès) Barcelona (Barcelonès) LOCALIDAD-COMARCA c/ de Manresa s/n. Camí de Joncadella c/ Mare de Déu dels Àngels, 2 Muntadas, 35 Plaça Bonet i Muixí, 1 Marquès de Campo Sagrado, 35 Montnegre, 39 DIRECCIÓN Habitatges Tutelats de Tona Habit. Tutelat Teresina Torra i Sanmartí Apartaments Sophos Olimpo Habitatges Tutelats Espanya Industrial Habitatges Tutelats Josep Miracle H.t.amb Ser. Marquès campo sagrado Habit. Tutelats Montnegre NOMBRE 887 08 12 873 24 12 466 68 40 332 17 71 422 58 11 441 23 46 321 47 78 977 34 29 78 93 377 71 48 972 83 01 59 93 817 18 76 93 817 87 00 93 446 16 52 93 381 20 04 972 70 01 56 93 857 80 57 973 46 09 17 972 21 68 00 973 44 85 11 93 588 53 63 93 427 21 11 93 261 89 49 972 26 75 53 93 93 93 93 93 93 93 TELÉFONO Privat Privat Privat Privat Privat Privat/Municipal Privat/Municipal Privat/Municipal Públic (ICASS) Públic (ICASS) Públic (ICASS) Col.l-Acreditat Públic (ICASS) Privat/Municipal Públic (ICASS) Privat Públic (ICASS) Col.l-Acreditat Col.l-Acreditat Col.l-Acreditat Col.l-Acreditat Públic (ICASS) Col.l-Acreditat TIPO Anexo 4: SERVICIOS Y ESTABLECIMIENTOS SOCIALES EN CATALUÑA: VIVIENDAS TUTELADAS/ VIVIENDAS CON SERVICIOS 24 19 18 5 16 65 9 9 120 39 24 112 13 11 19 14 28 12 23 26 38 24 39 41 /col. priv./públ. PLAZAS Las personas “casi mayores”: inclusión y exclusión social G. Via Corts Catalanes, 120-124 De la Vall d’Hebrón,159-169 c/ Residència, 10 c/ Mitja de Sant Pere, 18 c/ Industria, 3 c/ Sant Miquel, 12 c/ Balmes, s/n. Rda. Collsalarca, 209-239 c/ Mestre Ros, 7-9 c/ Tordera, 8 c/ Blanqueria, 5, àtic Av. Països Catalans, 30 c/ Doctor Barraquer,6 entr.4a. c/ Carme, 56,4t. 2a. Habitatges amb serveis Gran Via Centre Collserola (Habit.Tutelats) H.Tutelats de Fuerzas Armadas Habitatge Tutelat Centre Sant Camil Hab.Tutelals Caputxins Pisos Tutelats “Casa Moreta” Hab.Tutelats Fund.Priv.Vilademany Hab.Tutelats Sabadell Gent Gran H.T.Obra Social de Cast.del Vallès Apartaments amb serveis Adorea Habitatges amb serveis Prisba Pisos amb servei.L’Onada Golden Beach Pis compartit per gent gran -2 Pis compartit per gent gran -3 Sant Adrià de Besòs (Barcelonès) Castellar del Vallès (Vallès Occidental) Girona (Gironès) Barcelona (Barcelonès) St. Carles de La Ràpita (Montsià) Sant Adrià de Besòs (Barcelonès) Vic (Osona) Taradell (Osona) Sabadell (Vallès Occidental) Barcelona (Barcelonès) Barcelona (Barcelonès) Barcelona (Barcelonès) Barcelona (Barcelonès) Vic (Osona) Cunit (Baix Penedès) Barcelona (Barcelonès) LOCALIDAD-COMARCA Fuente: Elaboración propia (la información se ha obtenido del catálogo de servicios de la Generalitat de Catalunya). c/ Osona, s/n. c/ de la Torre,28,3è,4t.i àtic DIRECCIÓN H.Tutelats Novallar de Cunit H.Tutelars Obra Religiosa Social NOMBRE 296 361 274 268 885 43 39 19 00 25 41 00 98 94 52 53 61 34 44 08 89 00 21 36 69 93 381 20 04 93 714 972 41 93 319 977 74 93 381 93 889 51 48 93 880 00 64 93 723 45 73 93 93 93 93 93 977 67 62 20 93 217 10 28 TELÉFONO Privat Privat Privat Privat Privat Privat Privat Privat Privat Privat/Municipal Privat Privat Privat Privat Privat Privat TIPO 3 11 101 10 24 4 17 24 76 158 124 19 18 6 10 12 /col. priv./públ. PLAZAS Interés profesional RTS - Núm. 186 - Abril 2009 79 Las personas “casi mayores”: inclusión y exclusión social Anexo 5: EL SISTEMA PÚBLICO DE PENSIONES PARA PERSONAS DE 55 A 64 AÑOS TIPO QUÈ ES? REQUISITOS COMPATIBILIDAD Prestación económica que • Si la persona que ha falle- • Si el cónyuge viudo/a Pensión vuelve a contraer macido estaba jubilada. de viudedad recibe el cónyuge, o pa- reja de hecho inscrita trimonio, la pensión se • O si estaba trabajando y oficialmente, de una perretira. había cotizado 500 días en sona que ha fallecido. los 5 años anteriores a su • Los separados y divorciados que no se hayan muerte. vuelto a casar recibirán • Hay que ir a la Seguridad la pensión proporcional Social y pedir la cifra que al tiempo vivido con el equivale al percentaje de difunto. lo que cobraba la persona difunta. Pensión No Contributiva (PNC) Prestación económica que • Mayores de 65 años (y • Tienen derecho a recibir garantiza a las personas personas con disminución asistencia medicofarque no han cotizado los de 18 a 64 años) macéutica gratuita y años suficientes a la Seservicios sociales. guridad Social cobrar una • No compatible con ninmensualidad para su subguna otra prestación sistència. económica. El SOVI Es el Seguro Obligatorio • No pueden tener derecho • Es compatible con la de Vejez e Invalidez (suba ninguna pensión de la Pensión de viudedad sidio) Seguridad Social a excep(PV), pero la suma de ción de la PV las dos no puede ser superior al doble de la • Mayores de 65 años. pensión mínima de viu• También aquellas perdedad. Si este límite se sonas de 60 años o más superase, se debería que sufran una incapacibajar el porcentaje a dad declarada (no derivacobrar en concepto del da de un accidente de traSOVI. bajo o enfermedad profesional indemnizable). • Ambos casos, haber cotizado 1.800 días antes del 1 de enero de 1967. Pensión parcial Esta retribución se hace • Tener hechos los 60 años. en los casos en los que la • Continuar trabajando con un persona no tiene todavía contrato a tiempo parcial. los 65 años, pero ya ha • La jornada laboral y el salacumplido 60. rio quedan reducidos entre un mínimo del 25% y un máximo del 85% de lo que sería la dedicación completa. Fuente: Elaboración propia (el listado de prestaciones se ha extraído del libro Els drets del meu demà. Manual de drets i deures de les persones grans). Fundació Viure i Conviure, Caixa de Catalunya, 2006. 80 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Interés profesional Discapacidad y Trabajo Social: una mirada sobre los enfoques y los derechos sociales Carmen Barranco Expósito 1 “Imaginemos un mundo sin barreras, una sociedad justa en la que todos los ciudadanos y ciudadanas participemos en igualdad de oportunidades” (FERNÁNDEZ G UTIÉRREZ, 2005, pág. 22) Resumen La Clasificación Internacional del Funcionamiento, la Discapacidad y la Salud aprobada por la OMS tiene un enfoque claramente orientado hacia los derechos sociales. Está basada en el Modelo Biopsicosocial que enfatiza la interacción entre la persona y el contexto socioambiental. Este nuevo enfoque de discapacidad y Modelo Biopsicosocial engarza con los movimientos de la Normalización, Vida Independiente, Modelo Universal y Modelo Político-Activista, siendo considerada la discapacidad una cuestión social y de igualdad de oportunidades. Estos aspectos conectan con los fundamentos y prácticas del trabajo social, disciplina y profesión que desde sus inicios se ha caracterizado por trabajar con la persona en interacción con el contexto social, aplicando los principios éticos que emanan de los Derechos Humanos y de la Justicia social. Estos son algunos de los aspectos que se abordan en este artículo. Palabras clave: Clasificación Internacional del Funcionamiento, Discapacidad y Salud. Modelos de Discapacidad. Derechos Sociales. Prestaciones y servicios de discapacidad. Trabajo social. 1 Diplomada en Trabajo Social. Licenciada y Doctora en Psicología. Catedrática de la E. U. de Trabajo Social. Departamento de Trabajo Social y Servicios Sociales. Facultad de Ciencias Políticas y Sociales. Universidad de La Laguna. [email protected] RTS - Núm. 186 - Abril 2009 81 Discapacidad y trabajo social Abstract The International Classification of Functioning, Disability and Health adopted by WHO has a focused approach towards social rights. It is based on the biopsychosocial model that emphasizes the interaction between the individual and the socioenvironmental context. This new approach to disability and to the biopsychosocial model links it with the movements of standardization, independent living, universal model and political activist model, disability being considered a social issue and a question of equal opportunities. These aspects connect fundamental principles and practices of Social Work, discipline and profession which has been marked since its inception by working with the person interacting with the social context, applying the ethical principles emanating from the Human Rights and from Social Justice. These are some of the issues addressed in this article. Key words: International Classification of Functioning, Disability and Health. Models of disability. Social Rights. Disability benefits and services. Social Work. 1. Enfoques teóricos de discapacidad La vigente Clasificación Internacional del Funcionamiento, de la Discapacidad y de la Salud (en adelante CIF), aprobada por la Organización Mundial de la Salud (IMSERSO, 2001), incluye el Modelo Biopsicosocial. Este modelo y la CIF parten de un enfoque global donde interaccionan los factores biológicos, psicológicos y socioambientales. La relevancia dada a los factores ambientales es patente, argumentándose que éstos tienen consecuencias positivas cuando las personas con discapacidad disponen de los servicios, prestaciones y otros recursos sociales efectivos; o efectos negativos cuando no existen o son inadecuados. 1.1. Enfoque del Modelo Biopsicosocial de discapacidad de la OMS En el mencionado modelo y en la CIF se enfatiza la importancia de los factores 82 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 ambientales, sin olvidar la atención a los factores clínicos. De ahí que en Modelo Biopsicosocial se integren el Modelo Médico y el Modelo Social (IMSERSO, 2001). Para el Modelo Médico el problema lo tiene la persona debido a la discapacidad. Por lo tanto se centra en la persona que requiere de atenciones médicas para que se cure o mejore, con la finalidad de que pueda tener una mejor adaptación social, siendo preciso contar con una política social de atención. El Modelo Social considera que la discapacidad es fundamentalmente un problema de origen social, creado por las condiciones adversas del entorno social. En consecuencia, es responsabilidad de los poderes públicos y del conjunto de la sociedad realizar las modificaciones ambientales para conseguir la plena incorporación de las personas con discapacidad a la vida social. De ahí la conexión que tiene la discapacidad con la cuestión de universalización de los derechos sociales. Interés profesional Estos aspectos médicos y socioambientales son contemplados en la estructura de la CIF, tal como se refleja en el siguiente cuadro. CIF PARTE I: FUNCIONAMIENTO Y DISCAPACIDAD FUNCIONES Y ESTRUCTURAS CORPORALES Funcionamiento (positivo +) Deficiencia (negativo) PARTE II: FACTORES CONTEXTUALES F. AMBIENTALES ACTIVIDADES Y PARTICIPACIÓN Capacidad actividad/ participación (+) Limitaciones actividad/ participación (+) F. PERSONALES Facilitador (+) Barrera (-) Fuente: Elaboración propia, basada en la OMS (2001). En la CIF se establece una interacción dinámica entre ambas partes, siendo importante conocer el alcance que se atribuye a los términos contemplados en la misma, los cuales se exponen a continuación. una persona puede experimentar al involucrarse en situaciones vitales, tales como relaciones interpersonales, empleo y otras vinculadas al contexto real en el que viven. Funcionamiento: alude a la salud global y hace referencia a las funciones y estructuras corporales, así como a la capacidad de desarrollar actividades y de participación social de la persona. Las funciones y estructuras corporales incluyen los aspectos positivos y negativos. Los positivos están vinculados al funcionamiento de las estructuras y funciones. Los neg ativos a las deficiencias. Restricciones en la participación son problemas que Factores contextuales: Incluyen los factores ambientales y los personales. Los ambientales incorporan el ambiente físico, social y actitudinal en el que la persona vive, abarcan los aspectos positivos y negativos. Los factores positivos representan los elementos facilitadores que cuando están presentes mejoran el funcionamiento y reducen la discapacidad. Los aspectos negativos representan las barreras en la realización de actividades y en la RTS - Núm. 186 - Abril 2009 83 Discapacidad y trabajo social participación social. Factores personales, la CIF no los clasifica si bien se indica la necesidad de realizar el diagnóstico con cada persona donde se refleje edad, sexo, estados de salud, forma física, estilos de vida, hábitos, educación, profesión, experiencias pasadas y actuales, patrones de comportamiento, aspectos psicológicos y otras características vinculadas con el mundo de las relaciones y de los apoyos personales y familiares. El resultado de una compleja relación entre la condición de salud de una persona y los factores contextuales (personales y ambientales). Para finalizar, es importante subrayar que la discapacidad es definida como “el resultado de una compleja relación entre la condición de salud de una persona y los factores contextuales (personales y ambientales). A causa de esta interrelación, los distintos ambientes pueden tener efectos distintos en un individuo con una condición de salud. Un entorno con barreras, o sin facilitadores, restringirá el desempeño/ realización del individuo; mientras que otros entornos que sean más facilitadores pueden incrementarlo. La sociedad puede dificultar el desempeño y realización de un individuo tanto porque cree barrera (p. ej. edificios inaccesibles) como porque no proporcione elementos facilitadores (p. ej. baja disponibilidad de dispositivos de ayuda).” (IMSERSO, 2001, pág.18) 84 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 1.2. Enfoque de la Normalización, Vida Independiente, Modelo Universal y Modelo PolíticoActivista Los enfoques de la Normalización, el Movimiento de Vida Independiente, el Modelo Universal de discapacidad y el Modelo Político-Activista en la actualidad conectan con el Modelo Biopsicosocial de la CIF. Estos modelos eclosionan y se orientan claramente hacia los Derechos Humanos y Sociales. De este modo, enfoques teóricos y derechos se alinean rumbo a la igualdad de oportunidades, al empoderamiento y fortalecimiento de las personas y de las políticas de bienestar social. Brevemente, indicar que la Normalización surge en el campo de la educación especial en los países nórdicos a finales de los años cincuenta. Desde la misma se enfatiza que las personas con discapacidad tienen que llevar una vida lo más normal y parecida al resto de la población (Wolfensberger, 1986; Perrin, 1989; Puig, 1992; Barranco, 2002). Ello significa el derecho que tiene este colectivo a vivir, estudiar, trabajar y divertirse en los mismos sitios donde lo hace el resto de las personas de la propia comunidad. Para tal fin, es preciso que se facilite la accesibilidad a los espacios y servicios comunes y ofrecer los servicios específicos que precisen. El Movimiento de Vida Independiente tiene su origen en Estados Unidos, impulsado por las personas con discapacidad. A través del mismo se proclama el derecho que tiene la persona a decidir sobre su propia vida, independientemente de la naturaleza y alcance de la discapacidad. El Modelo Universal y el Modelo Interés profesional Político-Activista son modelos sociales (OMS, 2001). En el Modelo Universal se considera que la discapacidad es una característica intrínseca a la condición humana y por tanto es universal, y que precisa de una contextualización centrada en la persona y en el entorno. Para el Modelo PolíticoActivista las personas con discapacidad son un gr upo discriminado, debido a las barreras culturales y sociales, así como a la falta de respuesta social y política, siendo preciso luchar a nivel social y político por los derechos humanos del colectivo. 2. Los derechos sociales en el ámbito de la discapacidad: avances y deficiencias en su aplicación Los derechos sociales se concretan en las políticas sociales y se han de hacer visibles en la práctica y vida diaria de las personas con discapacidad y familia, a través del acceso al conjunto de servicios y prestaciones destinados a la población general, como servicios y prestaciones específicas. Servicios y prestaciones de los sistemas de bienestar social como salud, educación, empleo, pensiones, vivienda y medio ambiente, ocio, deportes y cultura. Con tal finalidad, los mencionados sistemas precisan contar con dotación presupuestaria adecuada, marco legislativo, infraestructuras, personal, planes, programas, proyectos, catálogo de servicios y prestaciones para que los derechos sociales pasen de ser quimera a realidad (Barranco, 1998). Una visión sobre la extensión de los derechos sociales es la realizada por Rueda (1996), destacando el autor las siguientes características: son colectivos, están orien- tados hacia la igualdad de toda la ciudadanía, son fundamentales para el desarrollo de las personas, están amparados en leyes, la administración pública los ha de promover y han de ser puestos al uso de la población. Partiendo de las características indicadas de los derechos sociales, a continuación se presentan unas referencias al marco de las políticas sociales públicas y a las leyes principales en el marco internacional, europeo y español, así como un análisis sobre la realidad social de las personas con discapacidad. Cierra este apartado un cuadro, en el que se recogen las principales prestaciones y servicios específicos en discapacidad. a) Los derechos sociales en el marco internacional. Tienen como base de referencia el artículo 25 de los Derechos Humanos. De especial relevancia para avanzar en esta línea son las Normas Uniformes para la Igualdad de Oportunidades, aprobadas por la Asamblea de Naciones Unidas en 1993. En las mismas se insta a los estados a que promuevan la igualdad, mediante la sensibilización a la sociedad sobre los derechos, necesidades y contribuciones de las personas con discapacidad. Igualmente, se recomienda que promuevan la atención médica, rehabilitación, educación, empleo, cultura, deporte y ocio, así como el acceso a las pensiones y a disfrutar de una vida en familia. También, que impulsen la investigación, planificación, evaluación, coordinación y la cooperación entre las organizaciones. Un paso importante en la conquista de los derechos sociales en el marco mundial es la “Convención Internacional sobre los RTS - Núm. 186 - Abril 2009 85 Discapacidad y trabajo social Un paso importante en la conquista de los derechos sociales en el marco mundial es la “Convención Internacional sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad”, aprobada en diciembre de 2006 por Naciones Unidas. Derechos de las Personas con Discapacidad”, aprobada en diciembre de 2006 por Naciones Unidas. Su transcendencia radica en que estará regida por el derecho internacional, que tiene fuerza vinculante y será de obligado cumplimiento para los estados que la ratifiquen. Los principios de la mencionada Convención, según el artículo 3, son: a) el respeto de la dignidad inherente, la autonomía individual, incluida la libertad de tomar las propias decisiones, y la independencia de las personas; b) la no discriminación; c) la participación e inclusión plenas y efectivas en la sociedad; d) el respeto por la diferencia y la aceptación de las personas con discapacidad como parte de la diversidad y la condición humana; e) la igualdad de oportunidades; f) la accesibilidad; g) la igualdad entre el hombre y la mujer; h) el respeto a la evolución de las facultades de los niños y las niñas con discapacidad y de su derecho a preservar su identidad. Señalar que a través de los diferentes organismos de Naciones Unidas, OMS, OIT y UNESCO existen recomendaciones específicas para promover la salud, la igualdad laboral y la educación. b) Los derechos sociales en el marco europeo: la Carta Europea de los 86 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Derechos Fundamentales de la Unión Europea, proclamada en Niza el 7 de diciembre de 2000, reafirma la prohibición de toda discriminación basada en la discapacidad (artículo 21), así como el derecho fundamental de las personas con discapacidad, a beneficiarse de medidas destinadas a garantizar la autonomía, la integración social y profesional y la participación en la vida de la comunidad (artículo 26). Otros referentes fundamentales son: a) Directiva de 27 de noviembre del mismo año y la Directiva de 27 de noviembre de 2001, que aluden a la igualdad de trato en el empleo y ocupación; b) la Resolución del Consejo de 5 de mayo de 2003, que versa sobre la igualdad de oportunidades en educación y fo rmación para los alumnos y estudiantes con discapacidad; c) la Agenda de Política Social (2006-2010) de la Unión Europea, que incluye un eje sobre igualdad de oportunidades y la inclusión de las personas con discapacidad; y d) Plan de Acción del Consejo de Europa para la promoción de derechos y la plena participación de las personas con discapacidad en la sociedad: mejorar la calidad de vida de las personas con discapacidad en Europa 2006-2015. c) Los derechos sociales en el marco nacional. El punto de arranque, en la etapa de la España democrática, es la Constitución de 1978, en la que se reflejan los derechos y deberes en los siguientes artículos: 1) 9.2, participación de todos los ciudadanos en la vida política, económica, cultural y social; 2) art. 10, dignidad de la persona; 3) art. 14, igualdad; y 4) art. 49, que especifica el deber de los poderes Interés profesional públicos a realizar una política de previsión y de atención en materia de discapacidad. A partir de nuestra Carta Magna se han desplegado las siguientes leyes específicas en discapacidad: Ley 13/1982, de 7 de abril, de Integración Social del Minusválido (LISMI), que desarrolla el referido artículo 49 de la Constitución Española. En el mismo se especifica la responsabilidad de los poderes públicos en la promulgación de medidas legislativas de protección, promoción y prevención en todos los ámbitos de la vida de las personas, salud, educación, empleo, prestaciones y servicios sociales. Ley 26/1990, de 20 de diciembre, de la Seguridad Social sobre prestaciones no contributivas, siendo desarrollada dicha ley en diversos Decretos. El Real Decreto 1971/ 1999, de 23 de diciembre, recoge el procedimiento para el reconocimiento, declaración y calificación del grado de discapacidad. Ley 51/2003, de 2 de diciembre, de igualdad de oportunidades, no-discriminación y accesibilidad universal de las personas con discapacidad, que determina las medidas de acción positiva para promover la igualdad de oportunidades, así como medidas contra la discriminación. Medidas de acción positiva, tales como trato más favorable en normas, criterios y prácticas, así como apoyos complementarios, prestaciones económicas, ayudas técnicas, asistencia personal, servicios especializados, ayudas y servicios auxiliares para la comunicación. Ley 41/2003, de 18 de noviembre, de protección patrimonial de las personas con discapacidad, en la que se modifican el Código Civil, la Ley de Enjuiciamiento Civil y la Normativa Tributaria. Ley 39/2006, de 14 de diciembre, de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de dependencia. Esta Ley tiene por objeto regular las condiciones básicas que garanticen la igualdad en el ejercicio del derecho subjetivo de la ciudadanía a la promoción de la autonomía personal y atención a las personas en situación de dependencia. En la misma ley se recoge que la creación de un Sistema para la Autonomía y Atención a la Dependencia, con la colaboración y participación de todas las Administraciones Públicas. También, que se garantizará, por la Administración General del Estado, un contenido mínimo común de derechos para todos los ciudadanos en cualquier parte del territorio del Estado español. De lo expuesto hasta el momento, observ amos que en los documentos referenciados de los derechos y políticas sociales las directrices internacionales, las europeas y las españolas están en la misma dirección, orientadas claramente a conseguir una sociedad incluyente para toda la ciudadanía. Al echar una mirada a la realidad social, se nos devuelve una imagen que a todas luces nos indica direcciones RTS - Núm. 186 - Abril 2009 87 Discapacidad y trabajo social paralelas, entre los derechos sociales legislados y los aplicados, tal como se evidencia en los datos que se exponen a continuación. d) Análisis de la realidad social. En el marco internacional, los datos existentes nos muestran que este colectivo alcanza niveles inferiores a la población general en los parámetros de formación y empleo, en países como Japón, Estados Unidos y los 25 de la Unión Europea (Observatorio de Discapacidad, 2001). Asimismo, según las estimaciones de la Organización Internacional del Trabajo, en el año 2001 existían unos 386 millones de personas con discapacidad en edad de trabajar, alcanzando el desempleo hasta el 80%. Avanzando en este análisis de la realidad, en el marco europeo y español, igualmente se verifica que hoy estamos muy lejos de la sociedad incluyente para todas las personas. En esta dirección, a continuación se presentan algunos datos procedentes de la encuesta de EUROSTAT (2001), realizada en 1996, la encuesta del Instituto Nacional de Estadística (INE, 2002), el estudio laboral efectuado por Pereda, De Prada y Actis (2003), sobre el empleo en España y, finalmente, los reflejados en Fernández Gutiérrez (2005). Concretamente, del análisis de la información cabe destacar los siguientes aspectos por área: Educación. Según los estudios mencionados en la Unión Europea muchas personas con discapacidad se ven excluidas de la enseñanza general y confinadas en centros específicos que no les ofrecen ninguna oportunidad de intercambios sociales 88 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 ordinarios. En Educación Secundaria, España presenta los niveles de formación más bajos de Europa (media europea 49%, y España 39%). Inserción laboral y pensiones. En la Unión Europea, las personas con discapacidad sufren tasas de desempleo dos o tres veces superiores a la media de la población sin discapacidad, y la duración de su desempleo es más larga que la del resto de la población. Nuevamente, España registra la menor tasa de ocupación de la Unión Europea y mayor discriminación laboral en mujeres. Igualmente, en nuestro país el 56% de las personas con discapacidad que están en edad laboral perciben pensiones, teniendo una de las mayores tasas de la Unión Europea, después del Reino Unido, Dinamarca y Bélgica. Vivienda, Transporte y Seguridad Social. Según la Unión Europea, las viviendas adaptadas son costosas; los sistemas de transporte y edificios públicos siguen siendo inaccesibles para las personas con discapacidad; asimismo la Seguridad Social presta una asistencia mínima e insuficiente en pensiones y ayudas. Otros datos sociales. Con respecto a las personas de más de 65 años, el 20% viven solas y de éstas el 3,14% reciben atención domiciliaria, mientras que en la Unión Europea es del 25%. Estas cifras nos alertan de la necesidad de reforzar los servicios de atención y promoción Interés profesional de la autonomía a las personas con discapacidad y a sus familias. Sirvan estos datos para verificar el gran esfuerzo que es preciso realizar para aproximarnos a la igualdad de oportunidades y a la justicia social para toda la ciudadanía. En esta dirección, indicar que con respecto a los Servicios Sociales es fundamental que se promulgue una ley nacional para que los Servicios Sociales puedan constituirse en el denominado “Cuarto Pilar del Sistema de Bienestar Social”. También, para salir del estancamiento que se alude en la siguiente manifestación: “Hoy, al cabo de 25 años, siendo conscientes de los avances producidos con la creación del Sistema Público de Servicios Sociales, testificamos el estancamiento que se ha producido y los déficits que existen para poder alcanzar las garantías que tienen otros sistemas de Bienestar Social como la Sanidad o la Educación” (De las Heras, 2002). “Hoy, al cabo de 25 años, siendo conscientes de los avances producidos con la creación del Sistema Público de Servicios Sociales, testificamos el estancamiento que se ha producido y los déficits que existen para poder alcanzar las garantías que tienen otros sistemas de Bienestar Social como la Sanidad o la Educación” (De las Heras, 2002). A estas carencias de marco legislativo en Servicios Sociales, hay que añadir la inexistencia de un catálogo de servicios y prestaciones comunes en todo el territorio nacional sobre discapacidad. Ante esta carencia, en el siguiente apartado se presenta un repertorio de prestaciones y servicios. e) Prestaciones y servicios. Las prestaciones y servicios están destinados a satisfacer las necesidades sociales básicas y las capacidades de autonomía y desarrollo humano de las personas, siendo elementos esenciales de los derechos sociales, tal como se ha ido comentando. Servicios y prestaciones han de tener un carácter universal para toda la ciudadanía, incluyéndose en un catálogo para todo el territorio nacional. La realidad es que en nuestro país no hay un catálogo de servicios y prestaciones de discapacidad básico. En consecuencia, se está incumpliendo la aplicación de los derechos sociales universales, ya que cada persona con discapacidad tendrá unos servicios y prestaciones que estarán determinados por la comunidad autónoma en la que resida. Esta situación se puede verificar navegando por las páginas web de las distintas comunidades y de la Administración central del Estado, entre otras. A título orientativo, en el siguiente cuadro se reflejan los servicios y prestaciones que se vienen aplicando en discapacidad en España. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 89 Discapacidad y trabajo social SERVICIOS Y PRESTACIONES SOCIALES ESPECÍFICAS DE DISCAPACIDAD ÁREAS EDUCACIÓN, CULTURA Y DEPORTE EMPLEO Y FORMACIÓN OCUPACIONAL SERVICIOS SOCIALES, SALUD Y SEGURIDAD SOCIAL 90 SERVICIOS, PRESTACIONES Y PROGRAMAS – Centros Específicos de Educación Especial, Centros Ordinarios de Integración Preferente para Alumnado con Necesidades Educativas Especiales, Centros Ordinarios con Aulas Enclave, Aulas de Aprendizaje Profesional, Residencias Escolares Específicas… – Programas de Garantía Social de Inserción Sociolaboral, Programas de Formación para la Transición a la Vida Adulta… – Equipo de Orientación Educativa y Psicopedagógica Específicos (EOEPs). – Subvenciones para deportes y cultura; becas para estudios... – Aula Enclave Laboral, Programa de Escuelas Taller y Casa de Oficios. – Cursos y subvenciones del Servicio de Formación y Empleo… – Ayudas para la creación de Centros Especiales de Empleo, el autoempleo, incentivos a las empresas por contratación laboral de personas con discapacidad, creación de Cooperativas y Sociedades Laborales... – Derecho a reserva de cupo para oposiciones y empleo. – Derecho familiar a jornada reducida. – Centros Ocupacionales, Centros de Atención a Minusválidos Psíquicos, Centros de Atención a Minusválidos Físicos, Centros de Recuperación de Minusválidos Físicos, Centros de Atención Diurna, Centro Base, Centro Estatal de Autonomía Personal y Ayudas Técnicas... – Servicio de alojamiento: Residencias, Pisos Tutelados, Pisos Protegidos… – Unidades de Salud Mental, Unidades de Internamiento Breve, Centros de Rehabilitación Psicosocial... – Servicio de Estimulación Precoz, Servicio de Atención Temprana, Servicio de Ayuda a Domicilio, Servicio de Atención Personal, Servicio de Teleasistencia, Ser vicio de Respiro Familiar... – Equipo de Orientación y Valoración. – Prestaciones Económicas a Institucionales e Individuales para programas, adquisición de ordenadores, farmacia; material ortopédico… – Prestaciones Económicas de la LISMI (a extinguir): Subsidio de Garantía de Ingresos Mínimos, Compensación Económica Terceras personas, Movilidad... RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Interés profesional SERVICIOS SOCIALES, SALUD Y SEGURIDAD SOCIAL – Prestación económica por hijo a cargo: hasta los 18 años (33% de discapacidad), y de 18 en adelante, si tiene 65% o más; orfandad y subsidio a favor de familiares. – Pensiones contributivas de invalidez y de jubilación. Homologación de la Incapacidad Permanente Total, Incapacidad Absoluta y Gran invalidez... – Pensión no Contributiva: por invalidez y jubilación… – Carné de Familia Numerosa: la persona con discapacidad computa doble. VIVIENDA – Ayudas económicas para la adquisición de viviendas públicas; eliminación de barreras de acceso a la vivienda y en la propia vivienda. –Exención del Impuesto de Matriculación y descuento del IGIC por la compra de un vehículo adaptado, Exención del Impuesto de Circulación; subvenciones para la adaptación de vehículo, Tarjeta Europea TRANSPORTE de Estacionamiento, Tarjeta de RENFE, Abono Social de Telefónica... Y COMUNICACIÓN – Servicios de Intérpretes de Lengua de Signos, Intermediación para Persona con Discapacidad Auditiva, Transporte Adaptado, Asesoramiento y ayudas para eliminación de barreras físicas y de la comunicación; accesibilidad… HACIENDA – Desgravación de la Renta Familiar, reducción IRPF para las personas trabajadoras con discapacidad, deducciones del IRPF para adquisición y accesibilidad a la vivienda, separación matrimonial, pensión alimenticia; incapacitación y representación legal, Impuesto de Sucesiones… Fuente: Barranco (1999 y 2006). Para poder acceder a la mayoría de las prestaciones y servicios reflejados en el cuadro, se precisa del certificado de discapacidad. Además, conviene señalar que para avanzar en la eliminación de barreras y obstáculos que impiden hacia la sociedad incluyente para toda la ciudadanía es preciso seguir generando igualdad de oportunidades. En esta dirección, se puede tomar como referente la Ley 39/2006, de Autonomía y Dependencias, que en su artículo 1 expresa que la Ley tiene por objeto regular las condiciones básicas que garanticen la igualdad en el ejercicio del derecho subjetivo de ciudadanía a la promoción de la autonomía personal y atención a las personas en situación de dependencia, (…) con la garantía por la Administración General del Estado de un contenido mínimo común de derechos para todos los ciudadanos en cualquier parte del territorio del Estado español, contemplándose en la ley un mismo baremo y un mismo catálogo de RTS - Núm. 186 - Abril 2009 91 Discapacidad y trabajo social prestaciones y ser vicios para toda España. A modo de resumen, es preciso destacar el avance en materia de desarrollo de los derechos sociales, con políticas sociales mundiales y locales que abogan por la sociedad incluyente para todos. El análisis de la realidad y los datos expuestos nos revelan la discriminación social que tiene el colectivo de personas con discapacidad con respecto al resto de la población, presentando menores cotas de bienestar social en educación, empleo, salud, vivienda y transporte, entre otras. Igualmente, se detecta que prevalece el enfoque tradicional asistencial con medidas de compensación social a través de las prestaciones, frente a las políticas activas de empleo generadoras de mayor autonomía e independencia, menor coste social y económico. 3. Fundamentos y práctica del trabajo social en el ámbito de la discapacidad El trabajo social, a lo largo de sus más de cien años de historia, ha venido participando en la construcción de los enfoques teóricos de la discapacidad y en el desarrollo de los derechos sociales, junto a otras disciplinas y en mestizaje profesional. Los enfoques de discapacidad y modelo biopsicosocial conectan con los fundamentos éticos y teóricos del trabajo social. Esta disciplina y profesión, desde sus inicios se ha caracterizado por trabajar con la persona en interacción con el contexto social, aplicando los principios éticos que emanan de los Derechos Humanos y de la Justicia Social, tales como autodetermi92 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Los enfoques de discapacidad y modelo biopsicosocial conectan con los fundamentos éticos y teóricos del trabajo social. Esta disciplina y profesión, desde sus inicios se ha caracterizado por trabajar con la persona en interacción con el contexto social. nación, vivir con dignidad, participación, justicia social, disfrutar del progreso social y el deber de contribuir a él. De igual modo, desde el trabajo social se aplican enfoques que están en sintonía con los de discapacidad. Desde estos planeamientos teóricos y éticos las trabajadoras y trabajadores sociales trabajan para potenciar las capacidades de desarrollo humano de las personas con discapacidad y de sus familias, satisfaciendo las necesidades sociales. Desarrollo humano que es definido como: “un proceso de ampliación de las capacidades y opciones de las personas, el despliegue de las potencialidades y ejercicio de capacidades del conjunto humano, en el cual se amplían las oportunidades de cada ser humano” (Naciones Unidas, 2000). Estos aspectos se encuentran desarrollados en Martínez Román (2003). En trabajo social, entre los derechos sociales y las necesidades sociales existe una estrecha relación. En este sentido, las necesidades sociales son entendidas como derechos sociales universales, desde un enfoque global e interactivo (De las Heras, 2002). Derechos sociales que parten del artículo 25 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. En este artículo se concreta el derecho universal que toda Interés profesional persona tiene a un nivel de vida adecuado de salud, bienestar social, alimentación, vestido, vivienda, asistencia médica, servicios sociales, seguros en caso de desempleo, enfermedad, invalidez, viudedad, vejez y otras situaciones de pérdida de sus medios de subsistencia por circunstancias independientes a su voluntad. Derechos sociales y necesidades sociales forman parte de la ética, objetivos y prácticas de la acción profesional de las trabajadoras y trabajadores sociales. Acción profesional que se realiza con los objetivos de potenciar la igualdad de oportunidades y la justicia social, trabajando con las personas con discapacidades en interacción con el medio socioambiental. Con las personas que presentan discapacidades físicas, intelectuales, sensoriales y mentales, a nivel individual y colectivo, para movilizar sus capacidades, satisfacer las necesidades sociales, dinamizar e impulsar las redes de apoyo, promover el desarrollo humano, la convivencia y el crecimiento personal, incidiendo tanto en los aspectos materiales como inmateriales. Acción profesional, que parte del valor único e incuestionable de cada persona, la escucha, respeto y acompañamiento para potenciar su autonomía y el fortalecimiento, facilitando los apoyos que precisan. Se trabaja con el medio socioambiental para potenciar el bienestar social, profundizar sobre las barreras que impiden el desarrollo humano y la participación plena y efectiva de las personas con discapacidad en la sociedad, en igualdad de condiciones con las demás. También para establecer marcos de cooperación y contribuir a su mejora o resolución, generando políticas de bienestar social concretadas en planes, programas, prestaciones y servicios en los diversos ámbitos de la acción social. 4. Reflexión final En la sociedad actual del tercer milenio y en el ámbito de la discapacidad se han conseguido avances importantes, debido a la eclosión social y a la acción de los movimientos de las personas con discapacidad, profesionales, gobiernos, organizaciones y disciplinas sociales, entre las que se encuentra el trabajo social. De igual modo, el análisis de la realidad nos indica la necesidad de generar cambios, intensificando las acciones de los colectivos mencionados, promovidas por los gobiernos, para reducir y eliminar la actual situación de discriminación social en la que se encuentran las personas con discapacidad. Situaciones que precisan de una mayor aplicación de los derechos sociales universales expuestos, engarzándolos con los enfoques y modelos comentados. La finalidad es conseguir avanzar en el Estado de Bienestar Social y lograr mayores niveles de igualdad de oportunidades vinculadas a la formación, empleo, género, vida independiente, accesibilidad, vivienda, cultura, deporte y participación en la vida comunitaria de las personas con discapacidad. En esta dirección se propone dirigir la mirada para caminar rumbo a la utopía posible de la sociedad incluyente para toda la ciudadanía. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 93 Discapacidad y trabajo social Bibliografía BARRANCO, C. (1998). “Derechos Humanos y Discapacidad. Quimera y Realidad”. En Entorno Social, edición 25, 19 y en http://www.entorno.es. BARRANCO, C. La Calidad percibida en Centros de Atención a Personas con Discapacidad Psíquica de Tenerife. Un enfoque integrado de la Calidad de Vida, Calidad de Servicio y Calidad de Vida Laboral. 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Para hacerlo primero de todo nos centraremos en el origen y la evolución de la bioética. Seguidamente haremos una lista de los elementos necesarios para definir la bioética. También explicaremos cuáles son los instrumentos que utiliza la bioética para clarificar y resolver las cuestiones éticas que se le plantean en el día a día. Dentro del conjunto de estos instrumentos hablaremos de los cuatro principios de la bioética (no maleficencia, beneficencia, autonomía, justicia), las metodologías de toma de decisión y los comités de ética. Paraules clau: Bioética, bioética clínica, bioética social, comités de ética. Abstract In this article we try to explain what bioethics are and how we can pass on to social bioethics from the application of clinical bioethics. To do so, first of all we will focus on the origin and the evolution of bioethics. Next we will list the necessary elements to define bioethics. We will also explain which are the instruments that bioethics use to clarify and to solve the ethical questions that are suggested on a daily basis. When discussing the set of these instruments we will talk about the four principles of bioethics (non-maleficence, beneficence, autonomy, justice), the methodologies of decision-making and the ethics committees. Key words: Bioethics, clinical bioethics, social bioethics, ethics committees. 1 Diplomada en Enfermeria. Licenciada en Filosofía. Investigadora del Institut Borja de Bioètica – Universitat Ramon Llull. Profesora de bioética de la Universitat de Vic. [email protected] RTS - Núm. 186 - Abril 2009 95 De la bioética clínica a la bioética social 1. Orígenes y evolución de la bioética El impulso inicial de la bioética responde al deseo de poner en marcha un nuevo tipo de reflexión y una nueva práctica que sea capaz de integrar las aportaciones de las ciencias de la vida y de la salud y los valores humanos. Este deseo tiene sus raíces en los años cincuenta y sesenta en los Estados Unidos y empieza a brotar con fuerza en el año 1970, cuando todo un grupo de científicos y humanistas estadounidenses se esforzarán para sacar adelante este proyecto de hacer dialogar las ciencias y las humanidades y se sentarán a deliberar para orientar y buscar respuestas nuevas a los problemas nuevos en el ámbito de las ciencias de la vida y las ciencias de la salud. El esfuerzo de estas personas tiene su estímulo en una convergencia de factores sociales, políticos, económicos, médicos... que toman mucho relieve en la sociedad estadounidense de aquel momento y, sobre todo, en las novedades y los interrogantes aportados por tres grandes revoluciones, todavía hoy en plena efervescencia: la revolución biológica (que nos da un dominio sobre la reproducción, la herencia y el sistema nervioso), la revolución ecológica (que hace darse cuenta de que el crecimiento económico no necesariamente implica mejor calidad de vida), y la revolución medicosanitaria (que crea nuevas tecnologías, promueve la autonomía del paciente y plantea la necesidad de establecer políticas sanitarias ante la escasez de recursos). Al frente de todo este movimiento, y ya desde primera hora, se situarán dos personajes que reclaman la paternidad de esta nueva disciplina: Van Rensselaer Potter, bioquímico y oncólogo, y el doctor 96 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 André Hellegers, ginecólogo y profesor en la Universidad de Georgetown (Washington). Ambos representan y promueven, ya desde el principio, dos visiones diferentes de la bioética. Según Potter, que es reconocido por todo el mundo como el creador de la palabra bioética (1970), la supervivencia de la humanidad y el equilibrio de nuestro ecosistema están en peligro. Por eso se debe adquirir una nueva sabiduría que nos proporcione el conocimiento de cómo usar el conocimiento. Y a esta nueva sabiduría Potter la llama bioética. Por tanto, Potter da a Por eso se debe adquirir una nueva sabiduría que nos proporcione el conocimiento de cómo usar el conocimiento. Y a esta nueva sabiduría Potter la llama bioética. la bioética un enfoque globalizador, pone el acento en la vida en su sentido más amplio. Hellegers, en cambio, da a la bioética un sentido diferente y más restringido. Según Hellegers, que es el primero en introducir la bioética en el ámbito académico universitario y en hacerla resonar en los medios de comunicación social, la bioética tiene que ser un lugar de diálogo interdisciplinario entre científicos y humanistas con el objetivo de estudiar las cuestiones éticas concretas que se plantean en la investigación biomédica y en la práctica clínica. Por lo tanto, Hellegers da a la bioética un enfoque biomédico, pone el acento en la salud más que en la vida en su sentido más amplio. Esta segunda visión, la de Hellegers, que es la mayoritariamente aceptada hasta el día de hoy, quedará perfectamente recogida, y de alguna manera oficilializada, en la bioética norteamericana (ABEL, 2001). Interés profesional En esta historia de la bioética pronto tendríamos que poder hablar también de la bioética social, una bioética que no solamente ponga el acento en la salud, sino también en las cuestiones éticas del ámbito social. Pese a que la bioética clínica es la que se ha impuesto en todo el mundo hay que decir que ésta no ha olvidado del todo la dimensión social, porque la bioética clínica también contempla los aspectos sociales. Por eso actualmente hay bastantes trabajadores o trabajadoras sociales que están participando en este diálogo bioético. 2. ¿Qué es la bioética? Definiciones de bioética hay muchas y cada una acentúa unos aspectos y deja otros en la penumbra. Nosotros creemos que una buena respuesta a la pregunta “¿de qué hablamos cuando hablamos de bioética?” tendría que incluir estos puntos esenciales: 1) La bioética es un nuevo saber que tiene un aspecto teórico y uno práctico que son inseparables. El aspecto teórico recuerda que la bioética es una reflexión de orden ético, un proceso de razonamiento que busca fundamentar los juicios morales. El aspecto práctico recuerda que la bioética es un procedimiento de toma de decisiones, un método que, conjugando hechos y valores, ayuda a tomar decisiones racionales, razonables y prudentes. 2) La bioética, tanto en su reflexión como en su método de trabajo, es esencialmente multidisciplinar e interdisciplinar. Con estas dos palabras se quiere decir que la bioética, para comprender mejor los problemas que se quieren estudiar, promueve el diálogo entre saberes diversos y hace que estos saberes interaccionen entre ellos, se fecunden mutuamente, y así se pueda llegar a tomar las mejores decisiones posibles. 3) El saber bioético tiene por objetivo clarificar y resolver las cuestiones de tipo ético que plantean los avances de las ciencias de la vida y de la salud y sus aplicaciones, teniendo en cuenta que las respuestas que se darán a estas cuestiones tendrán una incidencia en la sociedad presente y futura y en su sistema de valores. 3. Los temas de la bioética Ahora que ya sabemos qué tipo de saber es la bioética es la hora de fijarnos en los contenidos, en los temas que estudia. Sin embargo, en la clasificación de temas tendremos que recurrir a la bioética clínica, pero al final también esbozaremos posibles temas de la bioética social. Una posible lista de temas sería ésta: Inicio de la vida (técnicas de reproducción humana asistida, aborto, embriones congelados, consejo genético). Envejecimiento y muerte (obstinación terapéutica, muerte digna, suicidio asistido y eutanasia, curas paliativas, no inicio o retirada de soporte vital). Genética (manipulación del genoma humano, clonación, eugenesia). Experimentación en seres humanos (embriones sobrantes, experimentación con niños, adultos, moribundos, trasplante de órganos). Relación profesionalusuario (Derechos de los ciudadanos en relación a la salud y la atención sanitaria, consentimiento informado, confidencia-lidad, humanización de la atención). Intervenciones con seres y medios vivientes no humanos (experimentación con animales, conservación de especies, cambio climático, armas biológicas). Distribución de recursos (conceptos de justicia, políticas de salud, medicalización y aumento del gasto sanitario). RTS - Núm. 186 - Abril 2009 97 De la bioética clínica a la bioética social De todos estos temas hay algunos que la bioética social se podría hacer suyos: confidencialidad, consentimiento informado, distribución de recursos sociales o políticas sociales... De todos estos temas hay algunos que la bioética social se podría hacer suyos: confidencialidad, consentimiento informado, distribución de recursos sociales o políticas sociales... Naturalmente, habría que pensar desde dentro de la propia profesión de trabajo social cuáles serían los temas o cuestiones éticas más específicas que abordar en el ámbito social. En el estudio de los temas concretos la bioética clínica se plantea la pregunta ya c lásica en bioética: “¿Todo lo que es técnicamente posible de hacer, es aceptable éticamente?”. Y las posibles respuestas, la bioética las elabora en el marco que le es propio: el diálogo entre la racionalidad cientificotécnica, la racionalidad eticofilosófica y la racionalidad juridicopolítica, tres racionalidades que son diferentes (pluridisciplinariedad) pero que la bioética se esfuerza en hacer interaccionar (interdisciplinariedad) (BUSQUETS y MIR, 2005). 4. Los cuatro principios de la bioética Hay muchos principios morales que nos pueden ayudar a clarificar y resolver las cuestiones éticas que se nos plantean en la práctica profesional, pero la bioética norteamericana ha privilegiado cuatro: No maleficencia, Beneficencia, Autonomía y Justicia (BEAUCHAMP y CHILDRESS, 1999). Son los llamados cuatro principios de la bioética. 98 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 A la hora de definir los cuatro principios no hay unanimidad. Actualmente su sentido todavía no está bien precisado y es objeto de debate entre los expertos. Para no alargarnos más de la cuenta, aquí nos limitaremos a hacernos eco de la manera más común, hasta el día de hoy, de definir estos principios. El principio de NO MALEFICENCIA designa la obligación de no hacer daño al otro, aunque él nos lo pida o lo desee. Este principio remite a una característica fundamental de la medicina hipocrática: primum non nocere (primero no hacer daño); incluye también la obligació de hacer aquello que está indicado de hacer ya que la omisión produciría un daño. El principio de BENEFICENCIA no se refiere a un acto de caridad o de bondad, sino a un deber, a una obligación. Por lo tanto, el principio de beneficencia recuerda el deber de hacer el bien, de promover el bien, pero teniendo en cuenta que este bien no es independiente de la autonomía individual. El principio de beneficencia solamente se puede comprender en toda su profundidad a la luz de los valores del sujeto al cual se quiere hacer el bien, y, por lo tanto, hay que vincularlo al principio de autonomía. El principio de AUTONOMÍA ?hace referencia a la capacidad del sujeto humano de tomar libremente sus decisiones. Sin embargo, en bioética, respetar la autonomía del otro no sólo quiere decir respetar su capacidad de escoger y de poder actuar con conocimiento de causa y sin coacción, sino también ayudarlo a escoger aquello que respetará la dignidad de la persona humana. No se puede olvidar que la autonomía, en sentido ético, es ciertamente la capacidad de decidir, pero de decidir en la dirección de lo que es bueno y justo. Interès professional El principio de JUSTICIA tiene dos dimensiones complementarias. Por una parte exige que tratemos a todo el mundo con la misma consideración y respeto: que no discriminemos a las personas en razón de etnia, sexo, profesión, ideología, religión, orientación sexual, poder económico, etc. Y, por la otra, reclama una distribución equitativa de los recursos y cargas entre los ciudadanos, con el fin de evitar discriminaciones tanto en las políticas de salud pública como en las políticas sociales. Vemos, pues, que estos cuatro principios de la bioética son igualmente válidos para resolver problemas éticos que se puedan originar en el ámbito de las profesiones o instituciones de carácter social, porque un trabajador o trabajadora social, tanto en el ejercicio de su profesión como en la resolución de problemas éticos, tendrá que procurar no hacer daño (no maleficencia), hacer el bien (beneficencia), respetar las decisiones de las personas (autonomía) y no discriminar a nadie (justicia). 5. Metodologías de toma de decisión Además de estos cuatro principios y de otras referencias éticas (no todo vale, respetar la vida, el imperativo categórico, la utilidad social, los derechos humanos, etc.) la bioética utiliza diversas metodologías con el fin de optimizar la corrección ética en la toma de decisiones en el ámbito de las ciencias de la vida y de las ciencias de la salud. Hay que recordar que una metodología es el camino que se sigue para llegar a un determinado objetivo. Todas las metodologías que se utilizan en bioética comparten el mismo objetivo: ayudar a resolver problemas y/o dilemas éticos; pero los pasos que se siguen para llegar al objetivo varían de una metodología a otra. Por falta de espacio nos saltamos las metodologías norteamericanas y europeas y diremos que, básicamente, debajo de todas las metodologías hay una estructura común. Los pasos que se acostumbra a seguir son los siguientes: 1. Análisis de los hechos: aspectos biológicos, psíquicos, sociales, económicos, legales... 2. Identificación de los problemas éticos del caso y posibles respuestas. 3. Toma de decisión. 4. Justificación racional y razonable de la decisión tomada. (FERRER y ÁLVAREZ, 2003). 6. Los comités de ética Finalmente, y grosso modo, ?nos fijamos en otro instrumento que ha creado la bioética para clarificar y resolver cuestiones éticas originadas por el desarrollo de las ciencias de la vida y de la salud. Se trata de los comités de ética. Los comités de ética son un grupo multidisciplinar que a través del diálogo interdisciplinar pretende reflexionar y dar respuesta a las cuestiones éticas que plantea el desarrollo y la aplicación de las ciencias de la vida y de la salud. En el ámbito de la salud hay diferentes tipos de comités de ética, los que dependen de una Los comités de ética son un grupo multidisciplinar que a través del diálogo interdisciplinar pretende reflexionar y dar respuesta a las cuestiones éticas que plantea el desarrollo y la aplicación de las ciencias de la vida y de la salud. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 99 De la bioética clínica a la bioética social instancia nacional o supranacional y los comités locales. El objetivo de los comités nacionales o supranacionales consiste en elaborar informes sobre problemas éticos suscitados por el progreso del conocimiento en los ámbitos de la biología, de la medicina y de la salud y publicar recomendaciones sobre estos ámbitos. Dentro de los comités locales encontramos los Comités Éticos de Investigación Clínica (CEIC) y los Comités de Ética Asistencial (CEA). Los CEIC tienen la función de “velar por la corrección desde el punto de vista metodológico, ético y legal de cualquier proyecto de investigación que comporte algún riesgo físico o psicológico para un ser humano” (DOGC, 2006). En cambio, los CEA tienen entre sus funciones destacadas: a) Asesorar éticamente en decisiones puntuales, clínicas y sanitarias; b) Formular orientaciones y protocolos comunes de actuación en situaciones clínicas y sanitarias habituales que planteen problemas éticos; c) Organizar programas, cursos y cualquier otras actividades formativas en el ámbito de la bioética (ABEL, 1999). Es cierto que actualmente hay muchos trabajadores o trabajadoras sociales que ya forman parte de los CEA, pero lo que cada vez parece más claro es que la función de los comités de ética se tiene que extender también a otros ámbitos profesionales. Las instituciones de carácter social tendrían que empezar a constituir sus propios comités de ética, adaptados, naturalmente, a su realidad. Es una tarea de todos los trabajadores y trabajadoras sociales contribuir al desarrollo de lo que en este artículo hemos denominado bioética social. Si hemos hablado tanto de la bioética clínica es porque tal vez su bagaje pueda servir de guía para este reto que tienen entre manos todos los trabajadores y trabajadoras sociales. Bibliografía ABEL, Francesc. Bioética: orígenes, presente y futuro. Madrid: IBB - Fundación MAPFRE Medicina, 2001. ISBN 84-7100-799-1. ABEL, Francesc. “Comités de bioética: necesidad, estructura y funcionamiento”, en COUCEIRO, Azucena (ed.) Bioética para clínicos. Madrid: Triacastela, 1999. ISBN 84-921418-9-1. BEAUCHAMP, T. L. i CHIL- 100 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 DRESS, J. F. Principios de ética biomédica. Barcelona: Masson, 1999. ISBN 84-458-0480-4. BUSQUETS, Ester i MIR, Joan. Infermeria i bioètica. Esplugues de Llobregat: IBB - URL, 2005. O bé BUSQUETS, Ester i MIR, Joan. Infermeria i comitès de bioètica. Esplugues de Llobregat: IBB - URL, 2005. Decret 406/2006, de 24 d’oc- tubre, pel qual es regulen els requisits i el procediment d’acreditació dels comitès d’investigació clínica. DOGC núm. 4748, de 26-10-2006. FERRER, Jorge José i ÁLVAREZ, Juan Carlos. Para fundamentar la bioética. Bilbao: Universidad de Comillas - Desclée de Brouwer, 2003. ISBN 84330-1814-0. Interés profesional El Trabajo Social: influencias de la “reconceptualización” 1 Montserrat Feu Closas 2 Resumen Este artículo analiza las influencias que el denominado movimiento de la “reconceptualización del trabajo social” en la América Latina tuvo sobre el despliegue del trabajo social y de la profesión en nuestro país en los años 70. Se basa en el análisis de los documentos de los espacios de debate y reflexión existentes, en especial a partir de los congresos y jornadas que de forma periódica agrupaban a los profesionales en ejercicio. La primera parte recoge el discurso de los profesionales haciendo un paralelismo con el contexto social y político del proceso de “transición” del franquismo a la democracia. Finalmente, hace una reflexión en torno a la necesidad de una “reformulación”, de la “sistematización” de la práctica profesional del trabajo social en el momento actual. Palabras clave: Reconceptualización, agente de cambio, contextualización, sistematización. Abstract In this article the author analyses the influences of the so-called movement of the ‘reconceptualization of social work’ in Latin America had on the development of social work and on the profession in Spain in the 1970s. It is based on the analysis of the documents of the existing spaces of debate and of reflection, especially starting with congresses and conferences that periodically united the practising professionals. In the first part of the article, the professional discourse making a parallelism with the social and political context of the process of transition from franquisme to democracy is collected. Finally the author reflects on the need to reformulate, on the systematization of the professional practice of social work today. Key words: Reconceptualization, change agent, contextualization, systematization. En recuerdo de las colegas Rosa Roca, Maria Urpina y Teresa Fábregas, comprometidas en la renovación de la profesión y que murieron en el viaje hacia las Jornadas Nacionales de Asistentes Sociales de Pamplona en 1977. 2 Diplomada en Trabajo Social. Licenciada en Historia. [email protected] 1 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 101 El Trabajo Social: influencias de la “reconceptualización” 1. Introducción Esta reflexión en torno a las influencias en nuestro país de la denominada “reconceptualización del trabajo social” en Latinoamérica, la he planteado a partir del análisis de diferentes documentos de la época, fruto de diferentes espacios de reflexión y de debate que se llevaron a cabo, especialmente en las jornadas y congresos de la profesión que iban agrupando periódicamente a los asistentes sociales en ejercicio. También, con el conocimiento directo de profesionales que trabajaban en esta época y de mi experiencia, inicié mi actividad profesional como asistente social en un barrio periférico de Barcelona, en el año 1971. Recordando y revisando este proceso, podemos afirmar, pues, que cada “generación” de trabajadores/as sociales tenemos un referente como experiencia. Es ya una constatación que la construcción del trabajo social en España y la evolución que ha hecho la profesión tiene un paralelismo con los importantes cambios económicos, sociales y políticos que se han dado en el país a lo largo del siglo XX , en especial con el proceso de transición hacia el actual estado democrático y con la participación de la profesión en el proceso de despliegue del sistema de protección social. En este contexto, el trabajo social no se podía limitar solamente a dar ayuda a la población con más necesidades, sino que se encontraba inmerso en el contexto comunitario, junto con los movimientos sociales y políticos, con acciones dirigidas al restablecimiento de las libertades democráticas y los derechos sociales, con el fin de crear las condiciones políticas y materiales hacia un cambio. 102 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 2. Situación social y política del país i desarrollo de la profesión en los años 70 Hace falta situar la profesión de asistente social en el contexto social y político de los últimos años del franquismo, caracterizado todavía por la carencia de los derechos sociales y los derechos políticos, por la existencia de unos movimientos sociales muy fuertes de oposición al régimen y de reivindicación de las libertades básicas, ubicados especialmente en los barrios periféricos de las grandes ciudades industriales del país; al mismo tiempo con el despliegue de los partidos políticos, de la ideología marxista y del movimiento sindical que luchaban en la clandestinidad contra la dictadura y con un compromiso hacia el cambio para conseguir un estado democrático. Concretamente en Cataluña, son barrios con una composición social de población venida de las zonas agrarias de Andalucía, de Extremadura y de Castilla con el proceso de industrialización del país. En este contexto hay que destacar la tarea de Cáritas Diocesana, con una red de asistentes sociales en las parroquias y que estaban ubicados en los barrios periféricos de Barcelona. En las directrices de Cáritas de estos años se hablaba de suscitar la toma de conciencia ante la situación social en la que vivía el país y el proceso de cambio que se estaba dando, haciendo tareas de formación y de concienciación, promoviendo la participación comunitaria y favoreciendo la vida asociativa. Es ya en los años 60 que aparece el trabajo social comunitario como un instrumento “liberador” para la población y sus necesidades, en contraposición a la Interés profesional profesión como elemento “integrador”, integrador de la persona en una sociedad considerada injusta y con unas grandes desigualdades sociales y una falta de libertades. En nuestro país, igual que en los países de la América Latina, se van perfilando dos sectores de profesionales: las que defendían un trabajo social más “técnico”, al margen de la ideología política, y orientaciones consideradas como más “progresistas”, que defendían el compromiso del trabajo social para el cambio social y que tienen un paralelismo con el movimiento de la “reconceptualitzación”. En cuanto a la for mación de los profesionales son años de un cierto despliegue de las escuelas de asistentes sociales en el país así como de consolidación de las asociaciones profesionales con la puesta en marcha en Madrid de la FEDASS (Federación Estatal de Asociaciones de Asistentes Sociales), en 1967. En relación al compromiso por un trabajo social con la comunidad, hay que destacar la importancia de la venida a nuestro país en el año 1966 del experto italiano Marco Marchioni para dirigir un proyecto de desarrollo comunitario en Velez-Màlaga (Andalucía), en el que participaron asistentes sociales de Cataluña, y su posterior colaboración en numerosos cursos y seminarios en diferentes ciudades del país; también hay que destacar la importancia de las teorías de Paulo Freire, que venían de Brasil. En la Asociación de Asistentes Sociales de Barcelona ya el año 1965 había un grupo de asistentes sociales de comunidad, con un trabajo de reflexión con el fin de consensuar objetivos sobre su trabajo, de los que destacamos: despertar el sentido de cooperación de los vecinos; formación de grupos; motivación y movili- zación para la solución de sus problemas. Ya más adelante, en 1972, el grupo hace la siguiente definición en torno al trabajo social: “el trabajo social debe tendir siempre a una acción social de justicia social”, “el objetivo del trabajo social no es el de dar soluciones de emer gencia o paliativas, sino ver la problemática de las personas, grupos y comunidades, en la realidad de la vida cotidiana para actuar sobre esta realidad”. Las teorías sobre la “reconceptualización del trabajo social”, como ver al asistente social como un agente de cambio, el tema de la toma de conciencia de la población y la necesidad de un replanteamiento de los métodos de trabajo tradicionales llegan a estos sectores, que se planteaban cuestiones parecidas ligadas a la realidad sociopolítica del país como: ¿Contribuye el trabajo social en nuestro país a la adaptación de las personas, grupos y comunidades al sistema político, o bien su finalidad de acuerdo con los principios de la profesión y en el momento político que vive el país, será la contribución al cambio social y por tanto al cambio político? Por lo tanto, ¿es necsario un trabajo con la población para la toma de conciencia de sus necesidades juntamente con las fuerzas progresistas del país que luchan contra la dictadura? 3. El movimiento de reconceptualización del trabajo social en este contexto. El discurso de los profesionales En los países de la América Latina aparecen las propuestas de la “reconceptualización” al principio de los años 70 como movimiento de los asistentes sociales RTS - Núm. 186 - Abril 2009 103 El Trabajo Social: influencias de la “reconceptualización” que contribuyeron de una forma muy positiva a la definición de los métodos del trabajo social. Hay que destacar, en este proceso, la importancia del Documento de Araxa (1967); de Teresópolis (1970) y del Tercer Seminario de la Asociación Latinoamericana de Escuelas de Trabajo Social (1971). Las influencias concretas que el movimiento de la reconceptualización latinoamericana tuvo en nuestro país se ven reflejadas en el discurso de los asistentes sociales de la época, sobre todo en las jornadas más significativas y en los congresos organizados cada cuatro años a escala estatal a partir del año 1968, en los que de una forma continuada se plantean cuestiones que eran centrales en el movimiento de la “reconceptualización latinoamericana”: el asistente social como agente de cambio el término “concientizar” a la población la necesidad de un replanteamiento metodológico y técnico del trabajo social Podemos afirmar que cuando aparece el movimiento de la “reconceptualización” el trabajo social en España no está aislado sino que participa en el movimiento europeo en torno a la implantación de la profesión y sus funciones. En 1968 se celebra en Barcelona el Primer Congreso de Asistentes Sociales del país que sigue las directrices del Consejo de Europa (1967). En el año 1967 se crea en Madrid la En 1968 se celebra en Barcelona el Primer Congreso de Asistentes Sociales del país que sigue las directrices del Consejo de Europa (1967). 3 FEDAAS (Federación Estatal de Asistentes Sociales), que se plantea la defensa de las funciones profesionales y de una formación de nivel superior. Cabe destacar también en estos años dos seminarios de la FEISS (Federación Española de Escuelas de Trabajo Social), celebrados en 1971 en Manresa (Barcelona) y en Los Negrales (Madrid), en los que se plantea una revisión de los objetivos y de la metodología básica por el trabajo social en aquel momento: En el Seminario de Manresa se da a conocer el llamado Método Básico elaborado por Montserrat Colomer, que suponía un avance metodológico que rompía con la dicotomía de las inter venciones más “tradicionales” que fragmentaban el trabajo social de casos, de grupo y de comunidad y que podemos decir que tiene un paralelismo con los planteamientos metodológicos que se daban en el movimiento de la “reconceptualización”. Hay que destacar también la creación en Barcelona, en 1973, del GITS (Grupo de Investigación y Formación Permanente en Trabajo Social), grupo que tuvo una gran influencia en la formación continuada de los profesionales de estos años. En el II Congreso de Madrid de 1972, 3 en la primera ponencia se hace referencia explícita a la reconceptualización del trabajo social, asumiendo el Congreso en sus conclusiones la definición de la “profesión como agente de cambio”. Hay que destacar que esta definición, que fue bastante mayoritaria, no fue compartida por todo el mundo y que hubo discrepancias con los sectores más “progresistas” de la profesión, que tenían militancia activa en Memoria del II Congreso Nacional de Asistentes Sociales. Madrid junio 1972. Madrid: FEDASS, 1973. 104 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Interés profesional diferentes partidos políticos y/o en organizaciones obreras. En el tema de la concientització en “la toma de conciencia del contenido de la profesión y de las exigencias que lleva consigo”, destacamos las siguientes conclusiones del Congreso: “Es urgente el planteamiento de ir a las causas de los problemas, a través de una investigación que nos sitúe en la realidad. Tenemos la responsabilidad de denunciar los hechos a través de sugerencias constructivas.” “Se considera necesaria la definición: a) del concepto “Asistente Social como agente de cambio”; b) del término “concienciar”. “Se hace necesaria la integración del trabajador social en una dimensión de macroactuación, pasando del trabajo paliativo al preventivo”. Se tenía, sin embargo, conciencia de que los agentes de cambio reales eran los movimientos sociales y las organizaciones obreras políticas organizadas en la clandestinidad y con las que este sector estaba comprometido. En esta línea tuvieron una gran importancia las VI Jornadas de Levante,4 organizadas en Valencia en 1975 con el tema “Rol del asistente social en el proceso de cambio”, que reunieron a unos 140 asistentes sociales y a 27 estudiantes de Valencia, Cataluña y Aragón. Las Jornadas se plantearon a partir de un trabajo previo de los participantes a partir de una encuesta en la que vemos que se reflejan los temas de la “reconceptualización”. – ¿Cómo entiendes el cambio social en nuestra realidad? – ¿Aceptas que el trabajo social puede contribuir al proceso de cambio? 4 – ¿Figura en nuestros objetivos profesionales la concientització? – ¿Cómo conciencia el asistente social en su campo de trabajo? ¿Por qué? En una ponencia en la que participé en grupo denominada Trabajo social dentro del proceso de cambio, con un fuerte contenido ideológico, planteábamos una desmitificación del término asistente social como agente de cambio que circulaba a partir del congreso estatal de 1972. Decíamos que en su momento este planteamiento fue válido, para avanzar en el paso de la imagen benefico-paternalista que tenía la profesión hacia que las personas, los grupos y las comunidades fueran actores reales de su cambio; y a la vez exponíamos que el término agente de cambio se había incorporado desde el contexto latinoamericano sin haber hecho un análisis sobre su adecuación a la realidad concreta de nuestro país. Planteábamos la necesidad de replantear este concepto viendo el trabajo social como impulsor para el cambio, como una opción ideológica para un tipo de cambio que llevase a la transformación social. También veíamos que esta contribución al cambio no era específica de nuestra profesión sino una opción común con las personas y grupos sociales comprometidos con el cambio. La ponencia Objetivos del trabajo social planteaba qué respuestas concretas se estaban dando a las exigencias de la sociedad y ver cuál tenía que ser el “replanteamiento del trabajo social” hacia: formular una teoría, definición de unos objetivos, delimitación del rol profesional y cómo operar en la realidad social de una forma dinámica y eficaz. Aquí también se hace “VI Jornadas de Levante”, en RTS, nº 58, 2º trimestre 1975. Barcelona: Asociación de Asistentes Sociales. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 105 El Trabajo Social: influencias de la “reconceptualización” referencia a los análisis sobre la toma de conciencia que proceden de la realidad concreta de la América Latina y se pone en cuestión la validez de los mismos en nuestro país. Se constata que podemos estar analizando una realidad con una teoría que procede de una realidad muy diferente –la latinoamericana–, y que por lo tanto tendremos que hacer una elaboración teórica propia situada en nuestro contexto social y político. La polémica que se dio en estas Jornadas quedará siempre en nuestro recuerdo, polémica entre las diferentes tendencias en relación a la función de la profesión en una realidad social cambiante –estábamos iniciando ya el proceso de transición política–. Para ver el estado de opinión del colectivo de participantes, es interesante ver los datos de la votación de las conclusiones de las Jornadas: un 60% manifiesta que acepta el método científico (referido al materialismo dialéctico) como instrumento para formular una teoría del trabajo social; un 72% considera imprescindible conseguir las libertades mínimas, concretadas en las libertades democráticas, proponiendo tener una mayor presencia pública y la denuncia publica de las situaciones de injusticia social ?hecha desde el cuerpo profesional; y un 92% manifiesta que debe ser un compromiso de todos incidir en la mejora de la formación de los profesionales, ya sea con la transformación de las escuelas de trabajo social existentes o bien con la creación de nuevas escuelas con independencia de la ideología dominante. Se hace también un llamamiento a la necesidad de un trabajo coordinado entre las escuelas y las asociaciones de asistentes sociales del país. Es interesante recoger otra reflexión de la época en torno a las influencias de la 106 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 “reconceptualización”. En el estudio sobre los asistentes sociales en Cataluña de Estruch y Güell (1976), hecho a partir de la definición del “asistente social como agente de cambio” del Congreso de 1972 y de las posiciones manifestadas en las VI Jornadas de Levante de 1977. Hacen un análisis comparativo del grupo que se denomina agentes de cambio, considerándolo como un grupo de élite de la profesión, que representa al grupo que tuvo mayor influencia en las concepciones latinoamericanas. Plantean que ésta es una opción falsa, ellos consideran que el objeto del trabajo social es siempre “integrador” y se pronuncian por un marco ideológico en torno a un asistente social “liberal” en sentido amplio, concepto que consideran más compatible y legítimo con el ejercicio profesional. Las conclusiones de esta investigación vienen a confirmar las hipótesis iniciales que se plantean los autores en torno a la “crisis de la profesión”, planteando que es una profesión que quiere sustituir un marco ideológico por otro y que por eso entra en una “crisis de identidad”. Que ante esta supuesta crisis surgen los diversos intentos de “reconceptualización”, de “redefinición” de nuevos marcos ideológicos y que eso produce una decontextualitzación del proceso histórico de la propia profesión, que hay que partir de la realidad de la profesión y no de los “sueños de los profesionales”. Sobre la formación consideran que hay que enfrentarse a la complejidad, no al reduccionismo y servirse de las aportaciones de las ciencias sociales. Otros autores como T. Zamanillo (1991) manifiestan que en el esfuerzo realizado en el movimiento de “reconceptualización” convergen dos dimensiones, una Interés profesional de reflexión teórica y otra de voluntad de cambio, primando más la segunda que la primera. Este movimiento constituye un reto frente al colonialismo intelectual de los países anglosajones y la necesidad de dar respuestas más adecuadas a los grandes problemas que envuelven la desigualdad en América Latina. Los conceptos expresaban, igual que en nuestro país, una voluntad “revolucionaría”, en el sentido de un cambio social, pero al mezclar al mismo tiempo supuestos metodológicos y contenidos altamente ideológicos eso no favoreció la posterior sistematización y formulación de hipótesis aplicadas a la realidad social. En Latinoamérica es interesante la reflexión que hace Sela Sierra (1970) sobre estos planteamientos al afirmar que: “En el natural impulso renovador del primer momento, muchas palabras y sus usos sociales fueron proscritas y otras fueron cobrando progresivamente auge y notoriedad, hasta llegar a convertirse en objeto indispensable de consumo”... “palabras o expresiones como método científico, praxis, concientización, dialéctica, etc. Esta enfermedad de palabras llegó a obstaculizar la posibilidad de diálogos auténticos entre profesionales.” El III Congreso de Sevilla de 1976, con el tema “Acción Social y Trabajo Social”, 5 coincide con el final de la dictadura y con el inicio de la transición, y en sus conclusiones también se hace referencia al cambio social y político: “partiendo del análisis crítico de la realidad actual optamos por una acción transformadora para llegar a una sociedad democrática 5 6 donde se respeten los derechos individuales y sociales del hombre”. “Contribuir a la toma de conciencia y acciones de los miembros de la Comunidad respecto a las causas inmediatas y estructurales de los problemas” “Potenciar a los grupos y a las asociaciones comunitarias en un marco de libertad democrática –derechos de expresión, reunión, asociacionismo y manifestación–, pidiendo una amnistía y la derogación de leyes y jurisdicciones especiales”. Es en este Congreso que se acuerda el cambio en la denominación asistente social por trabajador social y del término servicio social por el de trabajo social. La FEDASS organiza las III Jornadas Nacionales de Asistentes Sociales de Pamplona en 1977,6 con el tema “Del paternalismo a la identidad profesional”, planteándose que el cambio democrático debe comportar el reconocimiento de los derechos sociales universales para todos los ciudadanos, sin los cuales no se pueden plantear alternativas a la beneficencia. Podemos decir que estas Jornadas plan-tearon las bases de los contenidos de política social y trabajo social que todavía son vigentes. Entre los temas más básicos hay que destacar: La función bàsica del trabajo social, con una doble vertiente asistencial y preventiva y reivindicando su carácter transformador tanto a escala macrosocial como microsocial. El Bienestar Social, entendido de forma dinámica y participativa y rechazando posturas “funcionalistas”, proponiendo la puesta en marcha de políticas sociales participativas. III Congreso Nacional de Asistentes Sociales. Acción Social – Sevilla 27-30 mayo 1976. Madrid, FEDASS, 1977. Memoria de las III Jornadas Nacionales de Asistentes Sociales. Pamplona 1977. Madrid: FEDASS, 1978. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 107 El Trabajo Social: influencias de la “reconceptualización” Los principios metodológicos del trabajo social, como principios operacionales, como base para el ejercicio profesional con una actitud científica y democrática. Para finalizar el recorrido de más de 10 años, tenemos el IV Congreso Nacional de Valladolid en 1980, con el tema “Por unos Servicios Sociales para todos y todas. Defensa de la universalidad de los derechos sociales”, 7 sobre la necesidad de la implantación del sistema de servicios sociales en el país, con la presentación de un manifiesto dirigido al Congreso de Diputados y a la opinión pública. Podemos ver, pues, que el referente de estos Congresos y Jornadas lleva hacia una nueva etapa de la profesión. Estamos hablando de diez años –entre 1970 y 1980– en los que se establecen las bases actuales de la profesión en el país. Por lo tanto, podemos afirmar, también, que como en las etapas anteriores, en la década de los años 80 la profesión tiene un papel muy activo en el nuevo contexto social y político, con la creación de las bases para la puesta en marcha y desarrollo posterior del llamado “sistema de servicios sociales” en las diferentes comunidades autónomas, defendiendo la universalidad de los servicios y de las prestaciones junto con los otros sistemas como la salud y la educación. Con el reconocimiento de los estudios a nivel universitario (1983) y la incorporación progresiva de las escuelas de trabajo social del país a las estructuras universitarias, se da un paso cualitativo muy importante que permite una mejora de los 7 Con el reconocimiento de los estudios a nivel universitario (1983) y la incorporación progresiva de las escuelas de trabajo social del país a las estructuras universitarias, se da un paso cualitativo muy importante que permite una mejora de los contenidos de la formación. contenidos de la formación, junto con el inicio de una larga reivindicación para conseguir el nivel de licenciatura para los estudios de Trabajo Social. Podemos afirmar, pues, que se dan una serie de paralelismos con el movimiento de la “reconceptualización” latinoamericano con la evolución de la profesión de asistente social en nuestro país en estos años. En primer lugar y a nivel muy general, en relación con unos contextos de regímenes políticos autoritarios y/o populistas, con una visión paternalista-benéfica de la profesión, y a nivel más específico por los condicionamientos en torno a la evolución de la identidad profesional. La “reconceptualización” suponía un cambio de perspectiva ideológica que aportaba elementos metodológicos nuevos, que permitían un cambio de mirada en torno a la profesión y su objeto de trabajo. En una visión más global del trabajo social como contribución al cambio social hacían falta nuevas aportaciones metodológicas, y se introducía al mismo tiempo el debate sobre las esencias, los principios del trabajo social. Vemos, por lo tanto, que IV Congreso Nacional de Asistentes Sociales. “Por unos Servicios Sociales para todos y para todas”. Valladolid, 1980. Madrid: Consejo General de Colegios de Diplomados en Trabajo Social y Asistentes Sociales, 1988. 108 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Interés profesional en el trabajo social español que venía influenciado especialmente por las teorías anglosajonas, este nuevo enfoque se acercaba más a nuestra cultura y a nuestra situación social y política, en la que surgen grupos más críticos, más radicales, que tratan de conciliar dos elementos: el ideológico y el científico. La idea de compromiso profesional hacia el cambio social, con un fuerte contenido ideológico, basada por una parte en las corrientes de la sociología crítica, con la influencia en los sectores de la iglesia más progresistas de las teorías de la “teología de la liberación” procedentes de América Latina y por las teorías marxistas y revolucionarios de la época comprometidos hacia un cambio político. También es en estos años que se da una convergencia con el movimiento europeo de la “antipsiquiatría”, que planteaba la apertura a la comunidad de las instituciones “cerradas”, movimiento en el que participaron activamente asistentes sociales que trabajaban en el sector de la salud mental. 4. ¿Podemos hablar hoy de “reconceptualización”? Dando un salto en el tiempo, de la situación de la profesión en los años 70 al momento actual, son más de treinta años en los que muchas cosas han pasando. Podemos afirmar, y está comprobado, que los profesionales de trabajo social en nuestro país, en la transición hacia la democracia, han participado activamente en el despliegue del sistema de protección social existente, abriendo vías hacia una sociedad más justa y solidaria. Se trata de todo el proceso de puesta en marcha de las políticas sociales en el país, en especial de los servicios sociales municipales, con asistentes sociales que asumieron responsabilidades políticas y técnicas, con una fuerte implantación de la profesión en las administraciones públicas y sus servicios de bienestar así como también a nivel de la iniciativa social. Sin embargo, también hay que constatar que a lo largo de este proceso de despliegue y consolidación de los servicios de bienestar aparecen nuevas situaciones sociales, nuevas problemáticas, con una serie de repercusiones sobre la vida cotidiana de los ciudadanos, con “viejos” problemas todavía no resueltos del todo y la nueva complejidad de la situación social actual. Y por lo tanto un aumento de la sensación de “riesgo social”, de “inestabilidad”, de “precariedad”. Nuestro país tiene todavía un sistema democrático muy “joven”, con muchas contradicciones, con un sistema de bienestar todavía muy débil y con pocos recursos si lo comparamos con otros países europeos de larga tradición democrática. Vemos que esta nueva situación confronta la profesión con una situación social compleja y a la vez contradictoria en relación a nuestro objeto de trabajo, la población y sus interrelaciones con el medio social. Podemos afirmar que estos cambios sociales son nuevos retos para el trabajo social. ¿Cómo podemos conocer y entender mejor lo que es nuevo? Por otra parte, se produce como una dicotomía entre el discurso y la práctica de la intervención social, de la necesidad de un retorno al trabajo con la comunidad –a veces haciendo referencia a aquel “trabajo comunitario” que se hacía en los años 70– y que con el recuerdo queda como mitificado y pierde el sentido real que tuvo en el RTS - Núm. 186 - Abril 2009 109 El Trabajo Social: influencias de la “reconceptualización” contexto social y político de la época. Se habla mucho de transversalidad, de “trabajo en red”, de los retos no resueltos del todo, de la coordinación interprofesional e interinstitucional, de la necesidad del trabajo interdisciplinario, de recuperar los principios para un trabajo social más participativo que contribuya a la creación de la llamada “nueva ciudadanía”; de las aportaciones del trabajo social al discurso interdisciplinario junto con las otras profesiones y disciplinas que intervienen a nivel social. Haciendo un paralelismo con el movimiento de la “reconceptualización” de los años 70, creo que ahora podríamos hablar también de la necesidad de una cierta “reconceptualización del trabajo social”, en el sentido de “repensar”, de “reformular”, de “sistematizar” el trabajo social que estamos haciendo en relación a la realidad social actual. Haciendo un paralelismo con el movimiento de la “reconceptualización” de los años 70, creo que ahora podríamos hablar también de la necesidad de una cierta “reconceptualización del trabajo social”, en el sentido de “repensar”, de “reformular”, de “sistematizar” el trabajo social que estamos haciendo en relación a la realidad social actual. Por lo tanto nuevamente nos plantean una serie de dilemas que son inherentes a los cimientos de la profesión: ¿Es que el trabajo social debe ser neutro o es inherente a él una cierta visión de la sociedad? ¿Cómo puede contribuir el trabajo social a la 110 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 mejora de esta sociedad, al trabajo por una sociedad más justa y solidaria? Hoy no podemos hablar de “el asistente social como agente de cambio”, tal como lo planteábamos en aquellos años, pero creo que podríamos hablar de “el asistente social como agente de democratización”, pero en que lo “ideológico” actúa desde otra perspectiva. Podríamos hablar de una “conceptualización” entre teoría/práctica, de una sistematización de la intervención que parte del conocimiento de la realidad social y de la práctica profesional basada en diferentes modelos y técnicas; en una “ética” propia, en unos valores democráticos, en intervenciones que favorezcan la participación, el diálogo, el reconocimiento de la diversidad, los procesos de toma de conciencia de las desigualdades sociales y las reivindicaciones por unos cambios estructurales. 5. Redefinición de las intervenciones en función de las nuevas relaciones sociales En el contexto actual se habla mucho de “retorno a la sociedad civil”, de “multiculturalidad”, de nuevas formas de participación social en las que vuelve a tomar fuerza la idea de territorio: ciudadanos – técnicos – instituciones – servicios – administraciones. ¿Cómo vivir juntos en una sociedad diversa, multicultural, favoreciendo la convivencia, el diálogo, la cohesión social? Se habla de programas integrales, transversales, se constata la necesidad de la articulación entre políticas económicas y políticas sociales. Ante esta situación actual, muy condicionada por el neoliberalismo y la globa-lización, aparece un nuevo paradigma para el trabajo social en este proceso para la construcción Interés profesional de una sociedad más justa y más solidaria. Habrá que revitalizar la confianza en la capacidad de respuesta de los ciudadanos: individuos, grupos y comunidades para hacer frente a sus condiciones de vida. Hará falta que el trabajo social reformule sus posiciona-mientos teóricos-metodológicos para ir más allá del binomio necesidad/recurso/ prestación, que al mismo tiempo pide el propio sistema de protección social para su desarrollo. No hay verdades universales, hay que tener en cuenta la diferencia, los particularismos, las identidades plurales. Toma fuerza la idea de “ciudadanía”, de ciudadanos de pleno derecho, lo que tiene que ver con su vida cotidiana, con la participación de los usuarios en el sistema de bienestar, con la mejora de su calidad de vida. Creo que en la situación actual el trabajo social tendrá que encontrar un enfoque diferente. Hay que romper la dicotomía muchas veces existente entre lo individual y lo colectivo, hay que ver la identidad colectiva como un proceso interactivo entre diferentes identidades, intereses, relaciones sociales. Hay que establecer mediaciónes entre lo singular y lo colectivo, son los actores sociales los que producen las acciones colectivas y hace falta que los trabajadores sociales lo perciban. Como más compleja es una sociedad más asimétricas son las relaciones sociales, la vida cotidiana en nuestras sociedades occidentales está sometida a nuevas complejidades, a la incertidumbre, a la vulnerabilidad. El trabajo social debe tener en cuenta a nivel teórico y metodológico esta complejidad, con el fin de poder trabajar con intereses e identidades plurales. Son necesarios nuevos 8 planteamientos para un trabajo más “transversal”, más “integral” e “integrado” con las redes sociales de cada territorio, lo que comporta nuevos posicionamientos profesionales. Un trabajo social que esté dispuesto a reflexionar sobre sí mismo y sobre los retos que tiene planteados y también sobre las posibilidades para hacerles frente. En la investigación efectuada sobre las representaciones sociales de la profesión y su relación con el contexto social actual, a partir de una muestra de trabajadores/ as sociales en ejercicio en Cataluña desde diferentes ámbitos, 8 vemos que los trabajadores/as sociales hoy están también en plena observación sobre su práctica profesional, y pese a las limitaciones y dificultades existentes, manifiestan la necesidad de reflexión sobre sus intervenciones y sus inquietudes e ideas para la mejora de su ejercicio profesional. Nos hablan de la necesidad, del deseo, de dar la vuelta al ejercicio profesional actual, de las dificultades de hacer planteamientos colectivos como profesión ante la nueva realidad social que estamos viviendo y de las contradicciones sociales, económicas y políticas, de salir del silencio y evidenciar las nuevas situaciones sociales a partir de su conocimiento. Hay que hacer un esfuerzo permanente en la sistematización de nuestras prácticas profesionales y en la generación de discursos constructivos en relación al momento histórico del país y de la profesión. BARBERO, José Manuel; FEU, Montserrat y VILBROD, Alain. La identidad inquieta de los trabajadores sociales. Barcelona: Col .legi Oficial de Diplomats en Treball Social i Assistents Socials de Catalunya, 2007. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 111 El Trabajo Social: influencias de la “reconceptualización” El último Congreso de la profesión, el X Congreso Estatal de Trabajadores Sociales (Gran Canaria 2004), se manifestó en este sentido, declarando que hay que hacer un esfuerzo permanente en la sistematización de nuestras prácticas profesionales y en la generación de discursos constructivos en relación al momento histórico del país y de la profesión. En conclusión, es una apuesta por un trabajo social que se puede llamar “no discriminatorio”, que dé poder al otro para poder hacer frente a nuevas situaciones de desigualdad e injusticia social. En definitiva, del trabajo social como elemento de construcción y/o de reconstrucción social. Desde la experiencia vivida en los años de la “reconceptualización”, hay que decir que recordamos aquellos espacios de debate y confrontación tan apasionados, que nos conducían a menudo a utopías casi siempre imposibles pero tan necesarias para la reflexión, el debate y la revitalización constante del trabajo social. Bibliografía ANDER-EGG, E. Servicio Social para una nueva época. Buenos Aires: Editorial Humanitas, 1967. COLOMER, Montserrat. Método Básico de Trabajo Social. Madrid: Euroamérica, S. A., 1973. ISBN 84-0282-2 “Document d’Araxa”, a RTS, gener-març 1970. Asociación de Asistentes Sociales de Barcelona. ESTRUCH, J. i GÜELL, A. Sociología de una profesión. Los asistentes sociales. Barcelona: Ed. Península, 1973. ISBN 84-2971195-3 112 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 FEU, Montserrat. “La construcción del trabajo social en España”, en ALAYON, N. (dir.) Trabajo social latinoamericano. A 40 años de la reconceptualización. Buenos Aires: Espacio Editorial, 2005. ISBN: 950-802200-0 LAS HERAS, Mª Patrocinio. “La construcción histórica de una profesión” en II Foro de Trabajo Social “Pasado, presente y futuro del Trabajo Social”. Universidad Pontificia de Comillas, Madrid, 2000. Pàg.15-82. ISBN: 84-89708-80-0 Memoria del Ier Congreso de Asistentes Sociales, 23-26 mayo 1968. Madrid: FEDASS, 1969. Metodología del Servicio Social. Teresópolis. Buenos Aires: Editorial Humanitas, 1971. PORCEL, Amparo. “El treball social a Catalunya en els anys 70”, a RTS núm. 80, desembre 1980. Asociación de Asistentes Sociales de Barcelona. “Reconceptualización del Servicio Social”, a Selecciones de Servicio Social, núm. 12. Buenos Aires, desembre 1970. Interés profesional Rosa Romeu recibe la Medalla al trabajo President Macià Rosa Maria Fer rer Valls1 Rosa Romeu i Tarragona, asistenta social, ha sido galardonada en la edición de 2008 con la Medalla al trabajo President Macià. Esta distinción se creó en 1938 con el objetivo de recompensar los méritos laborales tanto de las personas como de las empresas. En 1982 la Generalitat de Catalunya consideró imprescindible su rehabilitación. Con el reconocimiento que se hace de la Medalla al trabajo President Macià se quiere agradecer e incentivar a trabajadores y trabajadoras a continuar luchando y contribuyendo a la construcción económica y social de Cataluña. Pionera y defensora del trabajo social comunitario Rosa Romeu nació en Preixens (La Noguera, Lleida) en 1935. En 1963 obtuvo el título de asistente social y empezó a trabajar en la Comisión Católica Española de Inmigración, dependiente de Cáritas Diocesana. Dos años después encaminó su actividad profesional en los barrios del suroeste del Besòs con el fin de ayudar a su desarrollo comunitario desde varias facetas: Cooperativa de Viviendas sociales, creación de un jardín de infancia y un cen1 tro de educación primaria y secundaría, un hogar de jubilados, asociaciones de vecinos, grupos de mujeres, una universidad popular, una escuela de adultos, centros de tiempo libre, una asociación de personas con discapacidad y grupos de promoción de la salud. Al mismo tiempo, formaba parte del colectivo de supervisores de la Escuela de Asistentes Sociales y también del grupo GITS (Grupo de Investigación en Trabajo Social), que tanto contribuyó a la formación continuada de los Asistentes Sociales. Al llegar la democracia, Rosa Romeu fue de las primeras asistentes sociales que inició los servicios sociales municipales, primero en el Ayuntamiento de Sant Adrià del Besòs y después en el de Barcelona como asistente social del albergue municipal, y más tarde (1981) en el distrito municipal de Nou Barris como responsable de los Servicios Sociales. En 1994 pasó a la Diputación de Barcelona, donde fue jefa de Sección de Programas Sociales y asesora de la diputada presidenta del Área. Su experiencia profesional y su incansable actividad la han hecho participar en otras ocupaciones relacionadas con el trabajo social, entre las cuales destaca su Subdirectora de la RTS RTS - Núm. 186 - Abril 2009 113 Rosa Romeu recibe la medalla President Macià tarea docente en la Escuela Universitaria de Trabajo Social de la Universidad de Barcelona, donde ha impartido la asignatura de Trabajo Social Comunitario, y se ha convertido en un referente del tema, tanto a nivel de Cataluña como del resto del Estado. Y de ninguna manera podemos olvidar la participación de Rosa Romeu en el equipo de la Revista de Treball Social (RTS) desde el año 1982 hasta 1996. Muchos años en los que sus aportaciones a los debates previos y a las concreciones finales fueron un estímulo para el resto de miembros del equipo y una oportunidad para los lectores y lectoras de la publicación. Actualmente, nuestro compañera Rosa Romeu es una persona clave en la Fundació Catalana de l’Esplai, iniciativa sin ánimo de lucro creada con la finalidad de impul114 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 sar la educación en el ocio de niños, jóvenes y adultos, donde colabora de manera voluntaria desde su constitución en 1996. Capacidad de trabajo y compromiso social El acto de entrega de Medallas y Placas al trabajo President Macià tuvo lugar el día 28 de noviembre de 2008 en la Llotja de Mar. La celebración estuvo presidida por el presidente de la Generalitat de Catalunya, José Montilla, y por la consejera de Trabajo, Mar Serna. La sala gótica de la Llotja lucía espléndidamente para acoger a todas las personas galardonadas y a las autoridades, familiares y amigos que no se querían perder tan señalada ocasión. El presidente de la Generalitat, en su discurso, defendió los valores del trabajo, el esfuerzo, Interés profesional la excelencia, el riesgo y el compromiso. Unos valores que, en palabras del presidente, los homenajeados de este año representan con creces, y son estos valores los que han marcado su trayectoria. Por otra parte, en su presentación, la consejera de Trabajo ha manifestado que la Medalla al trabajo President Macià de este año pone énfasis en las personas que han demostrado un alto espíritu de superación personal y profesional y que han mostrado una especial dedicación en su trabajo diario en beneficio de los intereses de la sociedad. Una gran pantalla instalada delante de todo el mundo iba explicando la trayectoria de los nuevos titulares de las medallas y placas que aquel día se otorgaban, a la vez que significaba los motivos que los hacían merecedores del galardón. De Rosa Romeu se dijo: “su gran capacidad de trabajo, su compromiso social, su actividad altruista y voluntaria, así como la importante dedicación en tiempo a los proyectos de trabajo social comunitario, han permitido a Rosa Romeu i Tarragona contribuir a la fundación y al desarrollo de un gran número de asociaciones y fundaciones que enriquecen hoy día la red asociativa de nuestro país.” Después del acto oficial, la fiesta siguió en torno a una copa de cava, y una feliz Rosa Romeu lo pudo celebrar con sus familiares, amigos y colegas. Nosotros nos mostramos muy satisfechos del reconocimiento hecho a una trabajadora social que ha tenido un itinerario profesional para todos los momentos de nuestra historia reciente: la dictadura, la transición y la democracia, siempre con desbordante vitalidad y con un fuerte compromiso personal y profesional. ¡Felicidades, Rosa! RTS - Núm. 186 - Abril 2009 115 Escola de Formació Social Sabadell-Terrassa. 50 años Escola de Formació Social Sabadell Terrassa. 50 años después Antònia Apolinar Martínez 1 / Àngels Hellin Castro2 Una iniciativa que arraiga ¡Cómo pasa el tiempo! ¡Ya hace 50 años! Por iniciativa de los jóvenes empresarios del textil, socios del Institut Sallarès i Pla de Sabadell, con el apoyo incondicional de la mayoría de instituciones vallesanas, empie za una aventura que permitió cambiar muchas de las estructuras del tejido social de la comarca. Inmediatamente se incorporó el Institut Industrial de Terrassa. El resultado fue la Escola de Formació Social Sabadell - Terrassa. En un momento en el que la industria crecía con rapidez y la mano de obra inmigrada, también, en un momento en el que las corrientes de la Doctrina Social de la Iglesia empujaban a romper viejos esquemas de beneficencia y de paternalismo, se daban las condiciones para que la formación académica de los futuros trabajadores social fuera un éxito. Barcelona, Bruselas, Viena habían tomado la iniciativa en Europa, habían apostado por liderar una nueva profesión y Sabadell no se quedó atrás. Fue la sexta escuela de ámbito estatal, la tercera de Cataluña y la primera ubicada fuera de una gran ciudad. Pensemos que el Sabadell de 1 2 la época tenía poco más de 78.000 habitantes. 50 años después, los trabajadores sociales vallesanos hemos querido conmemorarlo. Lo hemos hecho no tanto pensando en el pasado sino intentado ligar la historia con la realidad presente y vislumbrar líneas de futuro. Si hace 50 años el ámbito profesional que surgía con fuerza eran los asistentes sociales de empresa, hoy lo son los de la atención primaria municipal, aunque tenemos que decir que éstos no son únicos, ni tampoco excluyentes. Conmemoramos iniciativas del pasado con los ojos puestos en el futuro Nos pareció que dentro de los actos conmemorativos de este aniversario había que mostrar a la población en general lo que hacen y dónde hacen su trabajo, cuál Con este objetivo se presentó una exposición fotográfica de Emma Villegas, fotógrafa y trabajadora social que pretende divulgar mediante la combinación de fotografías y textos de prestigiosos autores la tarea cotidiana de estos profesio- Trabajadora social PADES de paliativas de la Corporació Sanitària Parc Taulí. [email protected] Trabajadora social Centre Sociosanitari Albada. Corporació Sanitària Parc Taulí. [email protected] 116 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Interés profesional nales. Como colofón y gracias a la implicación del Gremi de Fabricants de Sabadell –que desde el primer día estuvo al lado de la iniciativa– ha quedado constancia escrita de ello, ya que el Gremi ha editado el catálogo de la misma. Dicen que una imagen vale más que 1000 palabras, y la exposición de Emma recoge en 20 imágenes los diferentes ámbitos de intervención de los trabajadores sociales de manera muy entendedora. La vida de las personas y de las instituciones es dinámica y cambiante. Sólo hay que abrir los ojos para ver cómo es de diferente la fisonomía de nuestro entorno inmediato, como es de diferente la dinámica y el comportamiento de los ciudadanos con indiferencia del lugar de procedencia, de residencia o de situación sociofamiliar. La Escuela de Formación Social Sabadell - Terrassa nació en aquél lejano 1978 gracias al cobijo de la Iglesia, ha pasado por el reconocimiento universitario y ahora quiere que la profesión pueda entrar por la puerta grande del Plan de Bolonia. La dinámica de la historia liga con la dinámica de la profesión Precisamente porque la historia es dinámica y no nos podemos quedar rememorando el pasado con nostalgia, porque hay que mirar el futuro con serenidad y tocando de pies en el suelo, un futuro socioeconómico que conforma el contexto social de cada momento, un futuro implicado –si no quieres a la fuerza– en estructuras globalizadas que no tienen nada que ver con las de ahora hace 50 años, es preciso echar un vistazo al futuro profesional. En este marco ha sido muy oportuna la intervención de Cristina Rimbau, trabajadora social y psicóloga, jefa de estudios de la Escuela Universitaria de Trabajo Social de la Unive rsidad de Barcelona. El hoy y el mañana del trabajo social en el marco de la Europa de los 27 fue el hilo conductor que ha repasado la actividad académica a lo largo de todos estos años y que ha comportado la consolidación de una profesión, la nuestra. De escuelas de la Iglesia a escuelas universitarias, de una titulación sin valor académico al reconocimiento de una diplomatura. Un largo camino que no se detiene. La libre circulación de personas y de capitales que han aportado los diferentes tratados de la Unión Europea comporta, también, una cierta armonización en la formación académica y en la homologación de titulaciones. Cristina Rimbau ha vivido en primera persona –como alumna, durante 10 años como directora de una escuela universitaria y actualmente como jefa de estudios– todas estas transformaciones, y las reflexiones que aportó a los asistentes al acto interesaron tanto a los profesionales jubilados como a las nuevas generaciones de profesionales que se incorporan al fascinante mundo del trabajo social. No se entiende el trabajo social sin comunicación El conocimiento de las situaciones anómalas no se entiende si no se expresan, la intervención profesional no es eficaz sin comunicación. Hoy, que han entrado con fuerza las nuevas tecnologías de comunicación, hoy que es más fácil aplicar la RTS - Núm. 186 - Abril 2009 117 Escola de Formació Social Sabadell-Terrassa. 50 años informática que el cara a cara, nos preguntamos: ¿no se pierde alguna cosa por el camino? Es por ello que pareció que era casi una obligación, hablarlo. Es por ello que se pidió a Salvador Cardús, periodista, escritor, doctor en Ciencias Económicas y actualmente profesor titular de Sociología de la Faculdad de Ciencias Políticas y Sociología de la Universitat Autònoma de Barcelona, que nos diese su punto de vista sobre el tema. Hablando de Las paradojas de la comunicación, Salvador Cardús, con su razonamiento lógico y su lenguaje conciso, expuso las ventajas e inconvenientes, los pros y los contras de la realidad y aportó elementos de reflexión que pueden ayudar a ser conscientes de una situación que nos tiene que llevar a aprovechar los beneficios de la técnica sin perder la interrelación personal. Con Cardús puedes estar de acuerdo o no, pero nunca te deja indiferente, siempre te hace pensar. Se debe decir pero también se debe escribir Muestra fotográfica, experiencia de expertos, reflexiones, pero también muestra escrita. Dentro de este mismo entorno se presentó la monografía El treball social en l’àmbit de la salut. Un valor afegit, de Pilar Porcel i Omar, diplomada en trabajo social, y publicada por la Acadè- 118 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 mia de Ciències Mèdiques i de la Salut de Catalunya i de Balears. Éste es el primer trabajo publicado por la Academia en materia de trabajo social, y a la vez trae el número 1 de la nueva colección de Monografías Médicas que publica la entidad. Todo un reto y todo un éxito. Es cierto que lo que el trabajo social aporta a la vida de las personas –en este caso, personas enfermas– es un valor añadido a la tarea de otros profesionales de las ciencias de la salud que repercute en la calidad de vida individual y familiar, valor que seguramente no hemos sabido cuantificar. Ésta debe ser una de las asignaturas pendientes que muy bien expresa la autora de la Monografía. Todo se acaba bien si empieza bien Como colofón, los actos lúdicos también tuvieron cabida. Se pudo disfrutar de un pequeño concierto a cargo del grupo A Capella Eufonos, que fue una delicia. Con esta muestra se han recordado los inicios de la profesión, las raíces del trabajo social en una comarca pero también su desarrollo en el tiempo. De aquí a 50 años los protagonistas de hoy no estaremos, pero el trabajo social seguirá desarrollándose y los profesionales de mañana también podrán beber de la tarea, la doctrina y otras metodologías que se habrán ido forjando en el tiempo. Sección libre Interpretar la inmigración desde los cuentos con valores Natura y paz RTS - Núm. 186 - Abril 2009 119 120 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Sección libre Interpretar la inmigración desde los cuentos con valores Luis Alexis Maldonado 1 Los procesos migratorios siempre han tenido una importancia relevante para el desarrollo de la sociedad. Hoy, en este mundo global, estamos viviendo unos flujos migratorios considerables, que dibujan una sociedad multicultural. Este hecho no sólo nos debe hacer reflexionar, sino también actuar. Es por esto que quiero relatar tres pequeños cuentos y tratarlos desde la clave de la inmigración, para pensar acerca de algunas de las ideas que genera el proceso migratorio desde la sutileza de un cuento, dejando que su interpretación nos lleve a nuestras vivencias cotidianas y realce los grandes valores que se dan en una relación intercultural. Puercoespín (T RECHERA, 2003: 18) “En un crudo día invernal los puercoespines de una manada se apretaron unos contra otros para prestarse mutuo calor. Al hacerlo se hirieron recíprocamente con sus púas y tuvieron que separarse. Obligados de nuevo a juntarse por el frío, volvieron a pincharse y a distanciarse. 1 Estas alternativas de aproximación y alejamiento duraron hasta que les fue dado hallar una distancia media en la que ambos males resultaron mitigados.” (Shopenahuer) Reflexión: Esperar que el resultado o consecuencia de la inmigración sea el hacernos daño o dejar que se enfríen las relaciones no es una buena opción para nuestra sociedad. Quizás, como en el cuento, tenemos que aprender a llegar a un punto medio donde dar el calor necesario y poder mantener nuestros espacios sin invadir el de los demás. Está comprobado que en la convivencia de los seres humanos siempre existirá el conflicto, la convivencia tiene sus pros y sus contras. Por lo tanto, se debe aprender a convivir y conseguir que las situaciones alegres de la convivencia sean mucho más gratificantes que los conflictos. El vendedor de globos (MENEPACE , 2005) “En la plaza del pueblo se ponía un vendedor de globos. Tenía una forma muy Licenciado en Ciencia Religiosa por la Universidad Católica del Norte, Chile. Bachiller en teología. Facultad de Teología de Barcelona, profesor del CEP. Doctorando en la Universidad de Barcelona. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 121 Interpretar la inmigración desde los cuentos con valores peculiar de vender sus globos. Soltaba un hermoso globo y dejaba que se paseara por los aires hasta llegar a lo más alto del cielo. Muchos niños lanzaban su mirada al cielo, se entusiasmaban y les pedían a sus padres que les compraran un globo. Así el señor vendía sus globos de distintos colores y formas. El vendedor observó que un niño de piel oscura miraba fijamente con tristeza cómo los globos seguían subiendo y le ofreció uno de sus globos. El niño no lo tomó y le pregunto: ¿Usted cree que el globo negro que tiene en el montón podrá subir como los otros? El vendedor comprendió su tristeza e inquietud y le dijo: “Haz tu mismo la prueba. Suéltalo y veras como tu globo sube igual que los demás”. Con ansiedad el niño soltó su globo y contempló con alegría como su globo negro ascendía velozmente como los otros. ¡Qué gran felicidad irradiaba su carita! El vendedor, que era un hombre sabio, le dijo: “Lo que hace subir el globo no es ni la forma ni el color, sino lo que tiene dentro”. Reflexión: El color de la piel nos diferencia pero no nos debe discriminar. En el mundo en el que vivimos se considera que respetar y tolerar a los otros es un gran valor; sin embargo, ya quisiéramos que fuera algo totalmente asumido por el ser humano. Cuando se acoge a un inmigrante se le acoge como persona, lo importante es lo que tenemos dentro, y lo que nos hace ser persona no es el color de la piel sino el hecho de ser. Por tanto nos atrevemos a decir que el problema de la inmigración se suavizará cuando veamos al otro no como individuo diferente sino como una persona concreta que viene a nuestro país tratando, en general, de tener una vida mejor. 122 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Un europeo en África (PANIKKAR , 1999: 207) “Un joven fue a un país del África a realizar trabajos voluntarios, sin idea de colonizar ni de ser superior. Decidió trabajar con chicos realizando gimnasia y deporte. Pasó las dos semanas con ellos, y el último día del taller les motivó a realizar una carrera. El objetivo era correr unos 200 metros hasta llegar al árbol donde él estaría, y el primero en llegar recibiría como premio una caja de galletas y golosinas que había traído de Barcelona. Eran unos 8 chicos. Dio la salida y menuda fue su sorpresa cuando los 8 niños se tomaron de la mano y corrieron todos juntos hacia la meta, para poder repartirse el premio…” Ref lexión: Cuántos problemas nos ahorraríamos si permitiéramos que las culturas o sociedades pudieran retroalimentarse en los grandes valores que ellas sustentan. En este caso, los niños le enseñan al profesor inmigrante que la competencia es secundaria al compartir. Vale la pena realizar un pequeño esfuerzo y pensar mutuamente qué valores nos estamos transmitiendo o nos podemos transmitir con estos “nuevos vecinos”, para crecer, salir ganando y tener la mejor convivencia posible. Si todos nos juntamos de la mano podremos repartir el premio de convivir en paz. Así pues, cada uno desde su entorno y sus posibilidades: Debe buscar alternativas para mejorar la convivencia con nuestros vecinos, amigos, compañeros… mediatizando y buscando puntos de encuentro (puercoespín). Sección libre Debe tomar conciencia de que lo básico e importante es el ser humano en sí, con sus inquietudes, sentimientos, razonamientos y que esto debe priorizarse frente a las diferencias físicas y culturales (vendedor de globos). Y finalmente, debe tener bien presente que no somos ni perfectos ni los mejores. Cada cultura tiene sus valores y lo interesante es que todos podemos aprender de los demás, sólo es necesario el estar abiertos, el escuchar y el saber descubrir y apreciar los tesoros que tienen otras culturas. Bibliografía TRECHERA, J. Trabajar en equipo: talento y talante. Bilbao: Desclée de Brouwer, 2003. ISBN: 84-330-1759-4. PANIKKKAR, R. El espíritu de la política. Barcelona: Peninsula, 1999. ISBN 8483071915. MENAPACE, M. Cuentos rodados. Buenos Aires: Patria Grande, 2005. ISBN 950-546-143-7. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 123 Natura y paz Natura y paz La genialidad de Gaudí ofrece tranquilidad entre el ruido de la gran ciudad. (L’eixample de Barcelona desde la Sagrada Família) El sonido de la campana acompaña el silencio pirinenco. (Campanar de la iglesia de Sant Joan de Boí) Autor: Marcel Galobart i Argemí 124 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Libros El treball social en acció: mètode i autogestió de la pràctica professional El Trabajo Social Sanitario: Atención primaria y atención especializada. Teoría y práctica El treball social en l’àmbit de la salut: un valor afegit La casa de los bastones RTS - Núm. 186 - Abril 2009 125 126 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Libros El treball social en acció Mètode i autogestió de la pràctica social La acción del trabajo social BARBERO GARCÍA, Josep Manuel. El treball social en acció: mètode i autogestió de la pràctica professional. Barcelona: Impuls a l’Acció Social, 2008. ISBN 97884-934987-4-0 Hay libros que queridamente centran su objetivo en el análisis teórico de los hechos y de las perspectivas y hay otros que presentan la descripción de experiencias realizadas. Unos y otros son importantes, representan, respectivamente, el factor de la teoría y el de la práctica. Pero todavía hay un tercer tipo de libros que combinan una sólida construcción teórica con el fruto de la acción realizada en un campo concreto. A esta categoría de libros pertenece la obra de Josep Manuel Barbero, doctor en sociología y diplomado en trabajo social, publicada recientemente por la Editorial Impuls a l’Acció Social, colección Llibres a punt, en abril del 2008 con el título El treball social en acció: mètode i autogestió en la pràctica professional. Este libro de Barbero es el cuarto volumen de esta colección, hecho desde la personalidad de su autor, trabajador social en el Ayuntamiento de Girona de 1981 a 1994, donde actuó en diversas responsabilidades y dirigío un centro cívico, y lo que puede considerarse como su segunda etapa como profesor e investigador en la Universidad de Barcelona, donde trabaja desde 1995. Esta doble experiencia de Josep Manuel Barbero es la gran calidad de este libro, porque a lo largo de diez capítulos que constituyen una amplia panorámica del campo concreto del trabajo social, siempre están presentes los dos elementos que tiene este autor: el fundamento teórico y la experiencia concreta de trabajo en la realidad de esta época. RTS - Núm. 186 - Abril 2009 127 El treball social en acció Barbero hablando de este libro dice: “toma como punto de partida una obra anterior titulada Viure el Treball Social, que vio la luz en 1996; aquella obra se agotó muy pronto y varias personas me fueron animando a hacer una nueva edición. El caso es que cuando me puse en materia no consideré adecuado limitarme a una reedición. El tiempo no pasa de manera gratuita y alguna comprensión también se ha modificado. Los cambios que tenía que realizar en los contenidos eran bastante importantes (una revisión y ampliación) como para tener que hablar de una obra diferente. Según creo, ya no se trata de una opera prima, sino que es una obra más madura”. Efectivamente, este libro es una obra de madurez de Barbero, que es capaz de señalar todos los elementos que hay que evaluar a la hora de hacer trabajo social hoy y de combinarlo con la voluntad que sea capaz de crear progreso. Barbero divide el libro en tres partes. La primera está dedicada, especialmente, a lo que el clásico llama “el análisis de la realidad”. La segunda parte, a la descripción de los elementos que sistemáticamente valora el trabajador social en la acción diaria y, finalmente, la tercera part e describe las prioridades de esta acción en la sociedad actual. Editado en formato de bolsillo, este nuevo libro de Josep Manuel Barbero es una herramienta cómoda que nos puede acompañar en la acción cotidiana, porque está escrito con el estilo directo, propio de quien acaba una reunión de vecinos y le esperan en el despacho para seguir tratando problemas de la comunidad. Rosa Domènech Ferrer 128 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Libros El Trabajo Social Sanitario Atención primaria y atención especializada. Teoría y práctica COLOM MASFRET, Dolors. El Trabajo Social Sanitario: Atención primaria y atención especializada. Teoría y práctica. Consejo General de Colegios Oficiales de Diplomados en Trabajo Social y Asistentes Sociales. Madrid: Siglo XXI, 2008. ISBN 978-84323-1359-2 Dolors Colom es por encima de todo una trabajadora social sanitaria, una persona comprometida con la profesión, prolífica en cuanto a producción de artículos, libros, conferencias y cursos de formación, y también una persona osada si nos fijamos en el hecho de que es una de las pocas trabajadoras sociales del Estado español que vive como freelance de su profesión. Conoce bien las instituciones porque ha trabajado en ellas y se ha relacionado con ellas, pero no está ligada a ninguna, básicamente porque necesita sentirse libre. Pero más allá de todo eso es una persona apasionada. Libertad y pasión por la vida y por la profesión –me atrevería a decir– son los rasgos que llaman más la atención en su persona. Esta pasión la transmite en cualquier conversación, en cualquier acto de los que participa y, cómo no, en su libro. El libro que tenemos entre manos es una defensa a muerte del trabajo social sanitario, un compendio de argumentos y razones para aquéllos que lo cuestionan, un repaso por la historia desde sus orígenes a principios de siglo, un análisis actual de qué está pasando en el Estado español, de qué nos pasa a nosotros, los profesionales, en tono de autocrítica siempre constructiva, y una visión futura inspirando y aportando los cambios que tenemos que RTS - Núm. 186 - Abril 2009 129 El Trabajo Social Sanitario introducir en nuestra práctica para hacer el giro deseado. El texto articula perfectamente los contenidos teóricos con los prácticos y se refiere en exclusiva al trabajo social sanitario y lo sitúa en la atención primaria, la sociosanitaria y la atención especializada. Su reflexión la lleva a pensar que todos estos ámbitos tienen diferencias organizativas pero coinciden en la aplicación y la puesta en práctica de los procedimientos del trabajo social. Opta por el término Trabajo Social Sanitario y no por Trabajo Social en Salud. Para ella, la salud es un término genérico y válido para muchos ámbitos del trabajo social y no exclusivo del mundo sanitario. Al contrario, el trabajo social sanitario encuentra los límites en los mismos de las instituciones sanitarias. Inicia el recorrido del libro en los Estados Unidos al final del siglo XIX e investiga textos originales. Para mí, ésta es la parte más valiosa del libro y la que más agradezco a Dolors. Es un placer leer las opiniones de Mary Richmond, de Gordon Hamilton, del doctor Cabot, de Mary E. Wood y Florence Hollis... y ver que son de absoluta actualidad, que se preguntaban por las mismas cosas que nos preguntamos ahora; en el contenido del trabajo social sanitario en sí mismo, en la interacción con otras disciplinas, en el diagnóstico social, en la intervención... Encontraréis frases y fragmentos de trabajos de estos autores que son verdaderas joyas, y además despierta el interés por leer los textos originales. Mary Richmond, como no podía ser de otra manera, ocupa un papel especial y central en el libro, es a partir de sus pro130 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 puestas que Dolors Colom elabora y propone un modelo de trabajo social sanitario capaz de responder con eficacia y eficiencia las necesidades y requerimientos del Estado del Bienestar. No echaréis de menos la parte en la que analiza el Sistema Nacional de Salud y mucho menos lo que supone otra parte fundamental del texto, la que enfatiza sobre la falta de un sistema de información propio e integrado que permita complementar y ampliar la información médica con la social. La que insiste que el trabajo social sanitario se tiene que atrever también a hablar en términos de indicadores aritméticos, de datos, de la necesidad de la evaluación de nuestra intervención, la que elude las memorias anuales inespecíficas y defiende el análisis de resultados a nivel cuantitativo y cualitativo, la que opta por la aplicación de índices de complejidad y estimula la implantación de modelos capaces de responder con eficacia a estas exigencias. Como buena conocedora de la práctica profesional actual nos invita a pensar sobre la confusión entre diagnóstico social sanitario y la clasificación social sanitaria de problemas que utilizamos en nuestra práctica. En este sentido, siguiendo a la autora me atrevo a decir que los profesionales cada vez diagnosticamos menos y a la contra clasificamos más a través de los sistemas de codificación de problemas que nos brindan las historias clínicas de nuestras instituciones. En todo el libro se insiste en que el trabajo social sanitario tiene que ser una acción estratégica, que se tiene que edificar sobre la base de una investigación aplicada y en la planificación. No hay espacio Libros para la improvisación, los procedimientos y los procesos no lo permiten. Hace falta que los profesionales del trabajo social entremos en el mundo de la calidad y la gestión por procesos, exactamente igual y en los mismos términos en que lo hace cualquier servicio de las organizaciones sanitarias en las que trabajamos. Tenemos que definir procesos propios que al mismo tiempo tienen que permitir generar información propia y hacer propuestas específicas y particulares. Siguiendo este hilo argumental el libro acaba en su último capítulo con una propuesta específica, la del Modelo Issis, que habla sobre la gestión del caso social sanitario y del servicio de trabajo social sanitario. La aplicación práctica y concreta de todo aquello a lo que se había referido en apartados anteriores. Para ir finalizando esta pequeña reseña quiero añadir que el libro lo componen casi 400 páginas de trabajo social sanitario en estado puro. Un manual imprescindible para aquellos que trabajamos en el sector y para los futuros profesionales. Que viene avalado por la propia trayectoria de la autora, por Demetrio Casado, que hace el prólogo, y por el Consejo General de Colegios de Trabajo Social, que ha financiado su publicación en una apuesta por contribuir al desarrollo de nuestra profesión. Desde que tuve el libro en las manos hasta después de su lectura, el sentimiento que me ha predominado es el agradecimiento. Agradecimiento por habernos brindado un compendio, un manual de trabajo social sanitario, por haber sido valiente y comprometida en muchas de sus afirmaciones y sentencias (sólo quien escribe se arriesga a poner sobre la mesa sus pensamientos, aciertos y desaciertos y hacerlos públicos), por el trabajo inmenso de revisión sistemática de textos, para hacerlos entendedores y compartirlos con nosotros y, por encima de todo, por preguntarse y buscar respuestas. Alguien dijo que una profesión que sólo se centra en la práctica y que no reflexiona sobre lo que hace está condenada al fracaso. Para acabar querría enviar un recuerdo final para Petruska, su perra, que según Dolors, si hablase sería de trabajo social sanitario, y curiosamente la única perra del mundo que no me da miedo. Pepita Rodríguez i Molinet RTS - Núm. 186 - Abril 2009 131 El treball social en l’àmbit de la salut El treball social en l’àmbit de la salut: un valor afegit PORCEL i OMAR, Pilar. El treball social en l’àmbit de la salut: un valor afegit. Barcelona: Acadèmia de Ciències Mèdiques i de la Salut de Catalunya i de Balears, 2008. DL GI-1430/08 132 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 La medicina ha cambiado mucho en los últimos 50 años y no sólo por los grandes avances científicos y tecnológicos experimentados, que ha habido y muchos, sino por el cambio conceptual que se ha producido en el ejercicio de la profesión. La medicina ha pasado de ser un “asunto privado” entre médico y enfermo a diseñar programas sanitarios de alcance social aunque con atención personalizada. Esta nueva estrategia ha hecho necesaria la incorporación de otros profesionales, además del médico y de la enfermera, en la atención sanitaria. Uno de estos nuevos profesionales que tiene un papel indiscutible en el proceso sanitario es el/la trabajador/a social. La medicina tradicional había estado muy focalizada en las clases acomodadas, y por otra parte era una medicina poco efectiva, con unos medios diagnósticos y de tratamiento escasos. En los últimos 50 años la medicina se ha puesto al alcance de toda la población y se ha tecnificado de una forma espectacular; estos cambios son difíciles de asumir, especialmente para personas desfavorecidas socialmente, culturalmente y económicamente. En este marco la atención social es fundamental y ésta es la idea que magníficamente desarrolla esta monografía. La autora, Pilar Porcel, es una trabajadora social que ha hecho de todo en su vida laboral, asistencia directa, gestión, docencia e investigación, y ahora nos presenta este libro fruto de su esfuerzo por hacer conocer el trabajo social y reconocer la tarea de tantos Libros profesionales que invertimos todos nuestros esfuerzos. La tesis que desarrolla Pilar es que la atención sanitaria tiene que estar dirigida a la persona integral, y para eso harían falta actuaciones sociales más activas tanto en el ámbito de atención primaria como hospitalaria. En la atención primaria haría falta que los trabajadores sociales participaran de una forma activa en las tareas de investigación de las ABS, que mantuvieran una relación colaborativa con asociaciones de vecinos, de enfer mos, escuelas, otras entidades cívicas y hospitales de referencia, y sobre todo que mantuvieran una relación fluida, participativa y constante con los médicos de cabecera. La atención primaria, según la autora, tiene que ser el objetivo primordial de la atención social, pues es aquí, cerca del ciudadano, donde se puede hacer una tarea socialmente más efectiva. En el ámbito hospitalario la situación es diferente y probablemente todavía más deficitaria desde el punto de vista de la atención social. La medicina moderna ha optado por la especialización y la superespecialización, que es buena para el diagnóstico y el tratamiento de enfermedades concretas, pero tiende a olvidar que el enfermo es un todo indivisible portador de otros problemas, personales, familiares y sociales, donde la atención social tiene un papel primordial. Esta tarea, además, tiene que tener en cuenta las características del paciente y de la enfermedad, ya que es muy diferente el paciente agudo del crónico, del traumático, o del portador de una enfermedad mental. La monografía está estructurada en nueve capítulos. Primero analiza la estructura del sistema sanitario en Cataluña y la legislación vigente que incorpora y regula la asistencia social, y después revisa los fundamentos del trabajo social y su desarrollo en la Atención Primaria y en los hospitales, dedica un capítulo a la atención sociosanitaria y otro a los recursos, o mejor a la falta de recursos que sufre el sistema. Esta monografía, editada con gusto y un cierto encanto por la Academia de Ciencias Médicas y de la Salud de Cataluña y de Baleares, no es sólo un ensayo filosófico de la atención social, sino que está enriquecida por un gran número de aportaciones de agentes responsables de la planificación sociosanitaria y de trabajadores del ámbito, lo cual le da un añadido de calidad extraordinario. Montserrat Gil i Prades RTS - Núm. 186 - Abril 2009 133 La casa de los bastones La casa de los bastones DELGADO CASINO, Rosa. La casa de los bastones. Barcelona: Incipit Editores, 2007. ISBN: 978-84-8198-687-7 La casa de los Bastones es, sobre todo, un relato de la cotidianidad. De cómo, día a día, se desenvuelven las personas que viven y trabajan con una discapacidad visual y de cómo, de la manera más natural, sus vidas pasan por diferentes momentos y fases, exactamente como las de cualquier persona. A través de la historia de la SEC, una agencia donde se trabaja por, con y para las personas con discapacidad visual, la autora refleja situaciones e historias personales. Los personajes, tanto profesionales como usuarios de la agencia, son cercanos y podrían representar a cualquier persona de nuestro entorno: un vecino, un compañero de trabajo, un familiar o amigo... Es esta cercanía, que consigue la autora con la descripción de las situaciones que han sido vividas por ella en su bagaje profesional, la que hace que la historia nos envuelva y nos atraiga. La novela describe cómo los personajes viven el proceso de duelo que implica perder la vista o tenerla notablemente mermada. Cómo, con el apoyo y el seguimiento profesional y familiar, se adaptan, cada uno a su manera, cada uno a su ser y entender, a la nueva situación. En el camino de la profesión, es de agradecer que las personas que empezaron la andadura antes que nosotros nos guíen con narraciones como ésta, dándonos una visión optimista de nuestra labor, no siempre gratificante ni sencilla. ¡Gracias, Rosa, por compartir tus vivencias y tus años de trabajo con nosotros! Juani López Martínez 134 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 La revista Publicaciones Presentación de artículos Suscripción RTS - Núm. 186 - Abril 2009 135 136 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Publicaciones Números anteriores Inclusión-Exclusión: opuestos o complementarios? Número 180 - Abril 2007 Hablando de la calidad Número 181 - Agosto 2007 Autonomía personal: nueva ley, nuevas prácticas (I) Número 182 - Diciembre 2007 Autonomía personal: nueva ley, nuevas prácticas (II) Número 183 - Abril 2008 Aprendiendo del pasado, proyectándonos hacia el futuro (I) Número 184 - Agosto 2008 Aprendiendo del pasado, proyectándonos hacia el futuro (II) Número 185 - Diciembre 2008 Migraciones: el valor de la interculturalidad (I) Número 186 - Abril 2009 Año 2009. Temas Migraciones: el valor de la interculturalidad (II) Número 187 - Agosto 2009 Trabajo Social en el ámbito de la justicia Número 188 - Diciembre 2009 Nota a los lectores: La Revista de Treball Social (RTS) ofrece un espacio de comunicación con los lectores con la voluntad de recibir comentarios, sugerencias, cartas, notas y todo lo que los lectores quieran comunicar a la dirección de la revista. Envia tus aportaciones por correo postal a: RTS c/ Portaferrisa, 18, 1r 1a - 08002 Barcelona o bien por correo electrónico a: [email protected] RTS - Núm. 186 - Abril 2009 137 Recomanacions 138 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Presentación de artículos NORMAS PARA LA PRESENTACIÓN DE ARTÍCULOS EN LA REVISTA DE TRABAJO SOCIAL (RTS) La Revista de Trabajo Social, editada por el Col .legi Oficial de Diplomats en Treball Social i Assistents Socials de Catalunya, es una publicación con más de 30 años de antigüedad que se edita con periodicidad cuatrimestral. Su objetivo es transmitir el conocimiento de los ámbitos del trabajo social, los servicios sociales, el bienestar social y las políticas sociales a la comunidad científica, a los profesionales y a los colectivos interesados. La RTS está abierta a todos los colaboradores que lo deseen para presentar artículos sobre investigaciones originales teóricas o experimentales, trabajos teóricos y metodológicos, descripciones de experiencias profesionales, ensayos, etc., siempre en relación con el trabajo social, las políticas sociales y los servicios de bienestar social. Los artículos tienen que ser inéditos. A pesar de ello, el equipo de redacción podrá reproducir textos publicados en otras lenguas y en otros ámbitos geográficos, si lo cree oportuno. El equipo de redacción estudiará los artículos recibidos e informará al autor/a de la aceptación para la publicación. Podrá también recomendar modificaciones y, si el artículo se considera no publicable, se le comunicarán los motivos. El contenido de los artículos es responsabilidad exclusiva de los autores. Extensión. Los artículos de la sección “Dossier” tendrán una extensión máxima de 12 páginas, los de las secciones “Interés profesional”, un máximo de 6 páginas; los de “Sección Libre” 3 páginas, y los comentarios de “Libros” no excederán las 2 páginas. Los artículos se presentarán en formato electrónico, letra Arial cuerpo 12; interlineado 1,5; márgenes 3 cm. Lenguas. Los artículos pueden presentarse en catalán o en castellano indistintamente. Los datos tienen que ir en la cabecera de los artículos. En la primera página se hará constar título y subtítulo, si se tercia; nombre y apellidos del autor/a principal y relación de otros autores/as si el trabajo es de equipo; título académico, centro de trabajo y cargo; también se incluirán el número de teléfono y la dirección de correo electrónico. A continuación el resumen, no superior a 10 líneas, en el idioma escogido y, si es posible, en inglés. Al final del resumen las palabras clave, en número no superior a 5. Irán al final del texto, siguiendo el orden alfabético y de acuerdo con las siguientes normas de referencia: ISO 690, 1987 (UNE 50-104-94) para documentos impresos e ISO 690-2 para documentos electrónicos, bases de datos y programas informáticos. Documentos impresos. – Monografias (libros): APELLIDOS (mayúscula), Nombre o nombre de la entidad responsable. Título (en cursiva). Otros responsables: traductor, editor, etc. (opcional). Edición. Lugar de publicación: Editorial, año. Extensión del libro (opcional). Colección (opcional). Notas (opcional). Número ISBN. – Partes de monografias (capítulo del libro): APELLIDOS (mayúscula), Nombre o nombre de la entidad responsable del capítulo. Título del capítulo. En APELLIDOS (mayúscula), Nombre o nombre de la entidad responsable del libro. Título del libro (en cursiva). Lugar de publicación: Editorial, año, situación en la publicación fuente (volumen, páginas, etc.). RTS - Núm. 186 - Abril 2009 139 – Publicaciones en serie (revistas): Título (en cursiva). Responsabilidad de la revista. Edición. Identificación del fascículo (fecha y/o número). Lugar de publicación: Editorial, año. Serie (opcional). Notas (opcional). Número ISSN. – Artículos de publicaciones en serie (revistas): APELLIDOS (mayúscula), Nombre o nombre de la entidad responsable del artículo. Título del artículo. Colaboradores/as en el artículo (opcional). Título de la revista (en cursiva). Edición, año, volumen, número, páginas. – Legislación: País. Título. Publicación (en cursiva), fecha de publicación, número, páginas. Documentos electrónicos. – Textos completos: APELLIDOS (mayúscula), Nombre o nombre de la entidad responsable. Título (en cursiva) [tipo de soporte]. Responsable(s) secundario(s) (opcional). Edición. Lugar de publicación: Editor, fecha de publicación, fecha de actualización/revisión [Fecha de consulta] (obligatorio para los documentos en línea; opcional para el resto). (Colección) (opcional). Notas (opcional). Disponibilidad y acceso (obligatorio para los documentos en línea; opcional para el resto). Número normalizado (opcional). – Partes de textos: APELLIDOS (mayúscula), Nombre o nombre de la entidad responsable del documento base. Título del documento base (en cursiva) [tipo de soporte]. Responsable(s) secundario(s) del documento base (opcional). Edición. Lugar de publicación: Editor, fecha de publicación, fecha de actualización/revisión [Fecha de consulta] (obligatorio para los documentos en línea; opcional para el resto). Capítulo o designación equivalente a la parte. Título de la parte. Numeración dentro del documento base (opcional). Localización dentro del documento base (opcional). Notas (opcional). Disponibilidad y acceso (obligatorio para los documentos en línea; opcional para el resto). Número normalizado (opcional). – Publicaciones en serie (revistas electrónicas): Título (en cursiva) [tipo de soporte]. Edición. Lugar de publicación: Editor, fecha de publicación [Fecha de consulta] (obligatorio para los documentos en línea; opcional para el resto). Serie (opcional). Notas (opcional). Disponibilidad y acceso (obligatorio para los documentos en línea; opcional para el resto). Número normalizado. – Artículos y otras contribuciones de publicaciones en serie (revistas electrónicas): APELLIDOS (mayúscula), Nombre o nombre de la entidad responsable de la contribución. Título de la contribución. Título de la revista (en cursiva) [tipo de soporte]. Edición. Número del fascículo. Fecha de actualización/revisión [Fecha de consulta] (obligatorio para los documentos en línea; opcional para el resto). Localización dentro del documento base. Notas (opcional). Disponibilidad y acceso (obligatorio para los documentos en línea; opcional para el resto). Número normalizado. Las gráficas, dibujos y tablas llevarán las correspondientes referencias, indicando con qué parte del texto están relacionadas. Los artículos se enviarán a la dirección electrónica de la RTS: [email protected] Los artículos, una vez publicados, pasan a ser propiedad de la RTS. Los autores/as recibirán tres ejemplares del número de la revista en el cual se ha publicado su trabajo. 140 RTS - Núm. 186 - Abril 2009 Boletín de suscripción Tarifas Suscripción anual: 43 euros Extranjero (tarifa única): 54 euros Números sueltos: 15 euros Datos personales Nombres y apellidos: ............................................................................................................ NIF: ....................................... Dirección: ...................................................................................................................................... C.P.: ....................................... Población: ........................................................................................................................................................................................ Teléfono: ........................................... Tel. móvil: ................................................ E-mail: ................................................... Datos Bancarios Banco o Caja: ............................................................................................................................................................................ Domiciliación Agencia: ......................................................................................................................................................... Población: ........................................................................................................................................................................................ 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