• Este es uno de los muchos testimonios que recibimos, fruto del oír los mensajes de la Palabra de Dios por medio de nuestro sitio en Internet. www.iglesiadelinternet.com Este es uno de los muchos testimonios que recibimos, fruto del oír de la Palabra de Dios: “El mensaje de la gracia me liberó de condenación” Estimado pastor Erich, Yo he sido enormemente bendecido y estoy sumamente alegre por la serie de mensajes denominada: Maravillosa gracia. Hace aproximadamente 2 o 3 meses atrás tuve la oportunidad de ponerme en contacto por primera vez con este poderoso y genial mensaje de la gracia divina. Un amigo me contó de ello. Igual que la mayoría de las personas, al principio me puse muy escéptico al respecto y rechazé el mensaje. Pero, dado a que sabía que no debía guiarme por lo que me indicaban mis emociones o mi mente, poco tiempo más tarde comencé, junto con un buen amigo mío, a probar por medio de la Palabra si esa enseñanza sobre la gracia era así como Ud. la predicaba. Muy poco tiempo después pudimos reconocer la veracidad y el poder de este mensaje. Yo comencé a actuar de acuerdo a dicho mensaje. A pesar que tenía muchas dudas en mi mente todavía, en mi interior sin embargo podía sentir gozo y paz. Hace ya unas cuantas semanas que me he apropiado completamente de esta verdad, y a causa de ello por primera vez en mi vida, he sido verdaderamente liberado de condenación, algo que me plagaba desde hacía muchísimo tiempo. Antes, cuando recibía liberación no pasaba mucho tiempo sin que me volviese a plagar ese constante sentimiento que tenía que volver a confesar todos mis pecados porque si no… iba a recibir el castigo. Nunca antes me he sentido tan libre y tampoco nunca antes he podido amar tanto al Señor como ahora. A veces, hasta me da la impresión como que voy a estallar de tanta gracia. Desde el momento en que me decidí a aceptar por completo la gracia de Dios para mí, Él me dijo que ahora yo había alcanzado un nuevo peldaño en la fe donde ya no giraba más todo alrededor de mi persona y por eso podía servir a otros en una forma más efectiva. Los motivos por los cuales antes yo pasaba mucho tiempo ocupándome solamente de mí mismo eran: sentimientos de culpa y condenación; conciencia de pecado; temor de hacer errores; y a causa de ello volver a caer bajo condenación. Era un continuo círculo vicioso. Esto me agobiaba tanto que estaba constantemente ocupado con mis propios problemas y apenas tenía paz. A veces incluso, esta conciencia de pecado y esta inseguridad, me hacían sentir como que me iba a volver loco. Pero, en el momento en que reconocí lo que significan la gracia y la obra completa de Cristo en la cruz para mí, todo esa carga despareció de manera que ahora puedo andar con y para el Señor hacia adelante sin ningún tipo de impedimento. Creo que, a pesar de la relativamente buena enseñanza que existe sobre el tema, hay todavía muchos creyentes que se encuentran en la misma disyuntiva en la que yo estaba: condenación, conciencia de pecado y temor les impiden andar en la fe en toda circunstancia. Es por ello que me llené de entusiasmo al escuchar su serie, pues solo la gracia de Dios tiene el poder necesario para arrancar de nosotros toda religiosidad y nos permite entrar en la completa paz, gozo y plenitud divinas. Eso lo digo por experiencia propia. ¡Muchísimas gracias por vuestro genial ministerio! Si Usted también ha sido bendecido, le animamos a compartir su testimonio para que a su vez miles de personas sean beneficiados. Los Testimonios se publican de manera anónima. Le animamos a escribirnos, nuestra dirección de contacto es: [email protected]