LA ENFERMEDAD EN EL ORDEN SISTÉMICO TRANSGENERACIONAL Y FENOMENOLÓGICO

LA ENFERMEDAD EN EL ORDEN SISTÉMICO
TRANSGENERACIONAL Y FENOMENOLÓGICO
Formación en Constelaciones familiares: Grupo 3.
Instructor: Dr. Aníbal Pérez Peñaranda
Participante: Yoleida Pérez Jaramillo
Desde la visión más general, existen varias formas de tratar las enfermedades cuando se
presentan. Lo que la ciencia ha manejado y lo que más conocemos es la medicina alopática
o tradicional, dado que las enfermedades
se manifiestan
evidenciándose un o unos
síntomas y esta medicina lo trata, lo suprime con medicamentos, e intervenciones. Sin
embargo, en esta era de la información, del conocimiento y donde la medicina alopática
como ciencia ha investigado y evolucionado para mejorar todo lo que puede desencadenar
una enfermedad, también existen otras formas de abordajes desde los síntomas que se
muestran en el cuerpo, a través de la enfermedad.
En este sentido, se presenta el orden sistémico transgeneracional, que puede ser visto
desde la mirada fenomenológica para tratar los síntomas que emergen en el organismo
producto de las emociones, los resentimientos, culpas y el rechazo, entre otras; que pueden
manifestarse en forma fisica (cuerpo), como psíquica (mente). Esto visto desde la mirada
sistémica son las expresiones del amor. ¿Cuál amor? el incondicional, el que tenemos por
nuestros padres, familia, y nuestros ancestros, vividos a través de la experiencia de ellos y
la que se experimenta en el propio ser, pero que se realiza inconscientemente. En
resumidas, la enfermedad en el orden sistémico se refiere a que cuando se aborda un
síntoma, no se ve este como tal, sino lo que viene a mostrar, lo que está señalando ese
síntoma, es decir, que el síntoma no es el punto de resolución, sino lo que muestra. (El
mensaje más subliminal de la enfermedad es el síntoma) Cuando existen situaciones que no
podemos entender, lo que nos molesta, lo que no asimilamos va a la biología, entonces el
cuerpo lo dice a través de síntomas. En cada persona es individual y referido a su sistema
familiar en particular con su entorno.
Este abordaje puede ser entendido, desde las diferentes cosmovisiones como por
ejemplo la enfermedad desde la visión positivista que verifica causa-efecto, existe una
dualidad, mientras que en la visión cuántica emerge lo energético, la biografía del enfermo
que esta precedido por lo transgeneracional, se toma como un todo sin dualidad, aquí la
conciencia tiene un papel primordial, hay que tomar consciencia de esa herencia y de la
vida cotidiana que tiene que ver con la acción y la decisión. Aquí no debe haber dualidad,
sino integración, sin juicios y sin ego.
Desde la visión de algunos autores como Hamer señala, que la enfermedad es un
programa inteligente de respuesta biológica de sobrevivencia, que se produce en el sistema
y que tiene una respuesta de resolución. Mientras que Hellinger aborda la enfermedad como
una necesidad de ordenar el sistema, y que generalmente las enfermedades crónicas toman
vínculos con la madre y las mentales con el padre, ambas siguen al clan familiar (sistema).
Pues, este autor investigó y comprobó que el sistema debe ir en equilibrio y para ello sigue
un orden en el amor, de pertenencia, de jerarquía y entre dar y recibir o dar y tomar, si esto
está en desequilibrio en el sistema surgen inconvenientes, conflictos así como las
enfermedades. Entonces para visualizar lo dicho, la pertenencia es que todos los miembros
del sistema tienen derecho a pertenecer, sin exclusión de ningún tipo. La jerarquía, el orden
es que los que llegaron primero o los mayores se les debe respeto en el lugar que les
corresponda por parte de los más jóvenes, y el dar y recibir amor con equilibrio, dando y
recibiendo. Si hay desequilibrio surgen también enfermedades, resentimientos, culpas,
distanciamientos, entre otros.
Así es que finalmente para vivir en la salud, cada ser humano tiene dentro de si su
respuesta, en ese vacío esta la luz, vivir en el amor, unidad e igualdad, permitiendo,
respetando y en equilibrio con los órdenes, la jerarquía, el dar y recibir, agradeciendo, en el
presente, todo es una filosofía o tal vez un proyecto de vida que podemos decidir
practicarlo o no según nuestra cosmovisión.
Gracias a mis padres, mis ancestros, mis hermanos, mi esposo, mis hijos: el que está
presente y los ausentes, y a todos los que de una u otra forma me hacen mirar mi
cosmogonía interna y externa para vivir en coherencia, en libertad.
Pérez Jaramillo.
“La salud no es una forma de sentirse, sino una forma de estar presente”
Yoleida
Hans Georg Gadamer