La enfermedad de la memoria

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JUEVES
3 DE JULIO DEL 2014
Libros
NOVELA
La enfermedad de la memoria
El mexicano Eduardo Ruiz Sosa viaja a los años 70 de su país natal a través del grupo de estudiantes Los Enfermos
CHUS MARCHADOR
ANATOMÍA DE LA
MEMORIA
AUTOR Eduardo Ruiz
Sosa
EDITORIAL Candaya
PÁGINAS 573
PRECIO 21 u
D. M. B.
[email protected]
ZARAGOZA
no se hace una
imagen de uno
mismo y, al final,
lo que los otros
recuerdan de nosotros es muy
distinto». De esa «confrontación»
nace un «nuevo relato de la memoria». Y de ahí, de ese hecho,
nació Anatomía de la memoria (editorial Candaya), la novela del
mexicano Eduardo Ruiz Sosa
que presentó en La pantera rossa
el lunes. Una novela que arranca
a principios de la década de los
setenta en el norte de México
donde Los Enfermos (un grupo
revolucionario de estudiantes)
pretende «derribar el estado tal y
como está concebido». Cuarenta
años después, Estiarte Salomón
empieza a escribir una biografía
sobre el poeta Juan Pablo Orígenes, miembro de aquel grupo.
«U
REFLEJO DE BURTON / A partir de
ahí, Ruiz Sosa anatomiza la memoria, al estilo de lo que hizo
Robert Burton con la melancolía
en su Anatomía de la melancolía:
«La relación es evidente tanto en
la estructura como en la trama
pero también en la forma de
aproximarse a la temática y a la
historia. Él hace una disección
con las herramientas de la medicina y la filosofía natural y yo
quería hacer eso con la memoria», señala el autor que va más
allá: «Es un concurso de voces y
parte del método es anatomizar.
33 El mexicano Eduardo Ruiz Sosa, en su reciente visita a Zaragoza.
Hay que partir desde el cuerpo
que es lo más superficial, luego
entrar en el organismo con la cirujía, el apéndice, la médula que
es lo más oscuro para al final remembrarse, juntar los miembros, unirlos y volver a ese cuerpo inicial que ya no será igual.
Quería acercarme a la memoria
y poder tocarla desde muchos
puntos distintos porque, en realidad, no solo la historia de
Orígenes tienen que ver con la
memoria. Todos los personajes
padecen la enfermedad de la memoria».
Algo que se va desarrollando
en una novela que «ordenada como una serie de conversaciones
o entrevistas entre los personajes» y que es lo que hace avanzar
la trama («al estilo de Lobo Antunes», apunta el autor): «Quería
que las cosas partieran de unas
cuantas preguntas pero que se
convirtieran en una conversación más que un interrogatorio
porque la entrevista al final va
empezando con preguntas pero
luego se convierte en una conversación y acaba siendo un
monólogo y es ahí donde esa estructura discursiva va naciendo». Anatomía de la memoria, como su nombre indica, está escrito como un tratado de anatomía
pero preservando el lenguaje
poético: «Creo que el arte no se
RELATOS
‘Sobreexposición’ de realidad
Laura Bordonaba firma dieciocho historias cortas de una gran intensidad emocional
D. M. B.
ZARAGOZA
La rutina punzante. La dolorosa
y la amable. La que te invita a caminar y la que te impide seguir
en una realidad que está bajo tierra. Como los cadáveres. Algunos
lo son y otros también aunque
caminen por la calle. Laura Bordonaba Plou ha agrupado dieciocho de sus relatos en Sobreexposición (editorial Pregunta). Un
libro que supone el debut de la
escritora y que engloba en sus
145 páginas la frescura de su escritura con las cicatrices del caminar por el estrecho filo de la
realidad.
Dieciocho historias unidas por
una rutina entendida en su sentido más amplio que huye de los
lugares comunes para ahuyentar el peligro de una narración
plana y convertirla en una mon-
taña rusa de sensaciones y sorpresas. Solo desde ese prisma el
lector puede abrir el libro casi al
azar por cualquier página para
poder entrar de lleno en la magia del relato corto, de la narración que nace, crece y se desarrolla en apenas cuatro páginas
como mucho.
Olmo arranca así: Durante aquel
verano sin brisa, en el que todo pareció fundirse, salimos a la terraza a
debe obviar y por más que se
mercantilice, la escritura es arte.
Ciertas cosas no se pueden decir
de otra manera que con un lenguaje poético, incluso en el día a
día. Nos ayudan a explicarlo mejor. Para hablar de algo tan maleable como la memoria, pienso
que el lenguaje con el que mejor
se puede asir este asunto es con
el de la poesía sobre todo a partir de la lectura de algunos poetas, Gamoneda, Gonzalo Rojas...
que encuentran esa manera de
nombrar lo que parece que no
existe», señala un Ruiz Sosa que
escribió esta novela gracias a la
beca de creación literaria Han
Nefkens que le permitió cursar
durante un año el máster en
Creación literaria de la Universidad Pompeu Fabra a la vez que
se dedicaba a escribir.
La novela aún encierra una
clave más, el absurdo. «Se ha hablado mucho del realismo que lo
hay pero, en realidad, el libro tira al absurdo. Es una de las palabras que creo definen ciertos
momentos de la historia, momentos en lo que uno piensa esto podía haber pasado o no pero
si pasa tampoco es una locura. El
escritor mexicano Toscana le llama realismo desquiciado, una
realidad donde la locura es normal. Yo, cambiaría desquiciado
por absurdo». H
contemplarla todos y cada uno de los
días. En el nombre de María de esta
otra forma: Me llamo María. María
de las Mercedes Salvador. Creo que,
con este nombre, mi destino estaba
abocado a ser enfermera. Casi todas
las mañanas, mientras me doy la crema hidratante, me repito: tú eres
María de las Mercedes Salvador. Un
tercer ejemplo es Contagio: La publicidad de la televisión me invitaba
a ser diferente. Ser diferente para ser
igual a los demás.
Tres formas diferentes de empezar un relato. Tres maneras de
captar la atención del lector y
tres estrategias alternativas de
conseguir captar la atención sin
necesidad de desvelar más de la
cuenta. Todo a través de una es-
critura ágil y sencilla (que no
simple) que tan pronto aborda el
tango como te recrea una escena
en la Zaragoza de postín de este
siglo XXI.
Primer premio en el XIII Concurso de Literatura Joven del Instituto Aragonés de la Juventud
en el 2006, Laura Bordonaba (Zaragoza, 1976) ha construido un
sólido primer libro de relatos
que augura un largo (y próspero)
caminar en el terreno de las historias cortas, nunca un género
menor. H
SOBREEXPOSICIÓN
AUTOR Laura Bordonaba Plou
EDITORIAL Pregunta
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