[4•B] Domingo, 10 de marzo de 2013 SLP/PULSO LA CÁBALA Los atenidos El presidente Peña hizo el compromiso en campaña de arreglar el Centro Histórico que los potosinos en décadas no han sido capaces de rescatar. A ver si nuestras autoridades se van acordando que el resto de la ciudad también está tiradísima. Y eso no le corresponde a Peña solucionarlo. El proyecto de transformación para la zona de andenes de la ex- estación de ferrocarril, en El Montecillo. E l 14 de mayo de 2009, la Secretaría de Desarrollo Urbano, Vivienda y Obra Pública del gobierno marcelista contrató a Consultoría en Desarrollo Social (CODESC, S.C.), para que le hiciera un Plan de Ordenación de la Zona Conurbada Intermunicipal de San Luis Potosí. El pago acordado por este servicio fue de 2 millones 693 mil 964 pesos con 70 centavos. Como es natural suponer que ese Plan de Ordenación debe ser una maravilla y fue pagado con recursos públicos, lo conducente es pedir una copia. Seduvop respondió que esa información “se encuentra reservada por el Comité de Información Pública de esta Secretaría a partir del 20 de julio del año 2010, por encontrarse en procedimiento legal”. Se entenderá entonces que la contratación para este Plan acabó en pleito. Y bueno sería que nos explicaran el porqué, por lo menos para saber si algún día veremos el Plan de marras, con lo dada que ha sido esta administración a enfrascarse en ruidosas guerras y malquerencias de las que hasta ahora no saca ningún provecho para San Luis. El tal despacho existe, al menos en página web. Qué pasó con el encargo que le hicieron, pues ni idea. Si se pierde, o si no lo hubo, o si no sirvió para nada el trabajo que les vendieron, no sería raro. Con la ciudad capital del Estado deprimida en su desorden, descuido y disfuncionalidad creciente, a sus autoridades, estatales y municipales les ha encantado gastar dinero en estudios y proyectos de grandes soluciones que nunca se aplican, se olvidan o se desechan. La administración municipal de Jorge Lozano Armengol, con recurso de Fonatur y de la Secretaría de Turismo, también encargó a un especialista de la Universidad Iberoamericana una propuesta y diagnóstico de imagen urbana de San Luis Potosí. El estudio proyectaba una “city” moderna y funcional en el área del Barrio del Montecillo, con edificios de departamentos, centros comerciales y lugares de esparcimiento, y sugirió que donde hoy están las vías, y los residuos en pie de los andenes de la estación, una terminal intermodal como de urbe del primer mundo. El estudio incluyó como eje un programa de rescate del Centro Histórico, por décadas la promesa incumplida de nuestros gobiernos, mientras en otros lugares con menos escandalera propagandística han hecho mucho más. El documento aquel disgustó a los hoteleros porque entre las debilidades les plantó en la cara la “insuficiente calidad y funcionalidad de los servicios turísticos (17% de cuartos con categoría turística, escasas inversiones, carencia de estacionamiento adecuado)” y las miserias de nuestro sistema de transporte público. El documento destacó como amenaza para el primer cuadro de la ciudad algo que ya vemos: la degradación del Centro y Barrios por pérdida de población, comercio informal, zonas de tolerancia, grafiti, pandillerismo, basura, carencia de estacionamiento. Ante esta degradación a las autoridades lo único que se les ocurre es autorizar más cantinas, antros de la peor factura y otros folcloroides con pretensiones de “arte naif ”, para que la zona “se vea animada” por las noches. Fuera de los proyectos, de develaciones de placas de plástico, de promesas vacías, y sueños guajiros, no hemos sido capaces más que de darle una ligera repintada a nuestra cuadro urbano de origen, nada más para disfrazar lo que hemos permitido por décadas que se haga con él: derruirlo, pintarrajearlo, abandonarlo, cederlo como territorio pandilleril, achangarrarlo y sujetar de sus ruinas y estatuas las mantas de puestos fritangueros. Lo que los potosinos no hemos hecho en décadas con nuestro Centro, nos prometió hacerlo el candidato presidencial que ganó la elección. Qué bueno si lo cumple; qué vergüenza que los potosinos necesiten “papi Presidente” para hacer lo que solitos hicieron con sus centros históricos los queretanos, los guanajuatenses y los zacatecanos. Acá nos falta decisión para todo. En San Miguel de Allende al que grafitea una barda así le va; en San Luis, nos atoramos en la ridícula discusión sobre si estamos siendo muy duros con el vándalo en cuestión, un resentidillo necesitado de terapia de abrazos, o seguramente un “pobre chico” inconforme hasta con la madre que lo parió. ¿Qué se va a hacer con el Centro?, pues lo sabrán Peña y sus colaboradores en este encargo. Después de peregrinar por varias secretarías para que le aclararan con cuál de ellas tratará lo del gran rescate presidencial, el gobernador Toranzo se enteró que va a ser Sectur la que llevará el proyecto. Habrá otras dependencias que vean algunos aspectos: Semarnat, los permisos; Sedato, cuestiones de ordenamiento de suelo, tal vez; SCT, algo de vialidades. INAH, fincas protegidas. Por ahí les presentaron ya unos adelantos, con pasos a desnivel en la Alameda. Quizá lo que planean hacer sea en buena parte tomado de los proyectos que autoridades potosinas mandaban hacer un periodo sí y al siguiente también..., para guardarlos en los cajones de los escritorios y archiveros. Desde luego, el mérito será por completo del presidente Peña. Que no se le quiera colgar nadie; si acaso, que faciliten lo que leyes domésticas marcan. Ni el gobernador que no ha tenido con esta ciudad capital la atención ni de bachearle las vialidades estatales, ni el alcalde sin conexiones todavía en el priismo gobernante del Centro y en riesgo de pasar a la historia como un infortunado administrador de miserias y sobresaltos financieros. Los funcionarios peñistas andan muy cautos con el tema. No admiten “colados” ni a nadie a quien le vean intenciones de aprovechar la ocasión para subir proyectos adicionales pero ajenos. Tampoco se ha definido todavía la participación de actores locales, por lo menos en lo “consultivo” o algo así de “vestidor” pero poco demandante. Que Peña arregle el Centro, qué bueno. Pero es el Centro y nada más. A ver si nuestras indolentes y chiquiteras autoridades ya se van responsabilizando de algo en lo que resta de esta ciudad desordenada, mal iluminada, de servicios deficientes y clasista hasta en sus detalles más básicos. En el poniente, por ejemplo, apenas hay espacio para el peatón, banquetas angostas y muy deficientes, o no lo hay. Mejor la plaza comercial del hombre más rico del mundo tuvo la atención de construir amplias banquetas externas; nuestros desarrolladores locales creen que todo mundo anda en auto. Es una ciudad en guerra continua con los camioneros urbanos, pero que no es capaz de imaginarse otro transporte público que no sea el que existe. Una ciudad que pelea el adoquín porque lo supone “colonial”, pero su autoridad no puede mantener más o menos parejo ese problemático material y deja los “chimuelos” de cantera extenderse hasta formar baches enormes. En el colmo del chambonismo, han llegado a “parchar” con asfalto y grava los huecos. Las abuelas llamaban “atenidos” a quienes tenían el hábito de descargar sus obligaciones en otros. De esos hay que les encanta el poder, pero no las responsabilidades, mucho menos los problemas. Desobligados con arte para escurrir el bulto y que otro lo cargue. Ateniditos, pues. ROLLOS SUELTOS ROLLOS SUELTOS ROLLOS SUELTOS POR ADRIANA OCHOA NO LO VIERON. El gobernador de Zacatecas, Manuel Alonso, andaba preguntando a los potosinos asambleístas del PRI, el pasado domingo, por su homólogo Fernando Toranzo Fernández, a quien no vio en la clausura de la XXI Asamblea Nacional del tricolor, un acto al que un gobernador priista no le da la vuelta por fiaca, aburrimiento o pretexto menor. A CANADÁ. Al zacatecano le extrañó no ver a su colega potosino primero porque ese cierre en el partido era el evento del presidente Enrique Peña Nieto, jefe real del PRI nacional, y segundo porque ambos tenían en agenda un viaje a Toronto al día siguiente, a la Feria Mundial de Minería, invitados por firmas mineras canadienses con proyectos en proceso. Y así como no fue al evento priista del domingo, Toranzo no fue al viaje a Canadá, aunque ambos estaban agendados y hasta avanzada angloparlante se envió. LA VERSIÓN. Es más, desde el domingo los colaboradores de Toranzo se habían hecho a la idea de una ausencia de un par de días o más de su jefe. Y que falla una turbina del avión oficial…; bueno, al menos esa fue la versión que se dio el lunes, con el “pos´ que siempre no se fue siempre no se fue”. Se trataría de una avería menor, porque el martes Toranzo andaba tocando puertas en Hacienda, y se fue en el avión oficial. “ACARREADO FEELING” . Por cierto, priistas que fueron llevados a la XXI Asamblea en camiones contratados por el PRI y los colaboradores de la diputada Rosa María Huerta, andaban medio sentidones con el indigno trato que les dieron de “militancia de redilas”, a ojos de priistas de todo el país. “Estuvo de la fregada”, nos decía una priista. BIEN ORGANIZADO. Tres unidades (Matehuala, Rioverde, Valles), ninguna llena. Pero aparte, los viajeros sabían que los encargados de organizar el viaje, Marco Octavio Álvarez y Guillermo Cabrera, tuvieron las acreditaciones desde el sábado pero quedaron de entregarlas al día siguiente. El problema es que “se les hizo tarde” o se quedaron dormidos, pero la delegación potosina fue la última en entrar al auditorio. DESACIERTO. La salida estuvo peor. Que a alguien se le ocurrió suponer que el evento iba a ser larguísimo y citó a los autobuses de regreso para la tarde. Pero el presidente Peña despachó pronto y no habiendo otro chivo que brincar, a sus casas, señores. La delegación priista de SLP se quedó esperando horas en el PRI por sus camiones de regreso. Y ni un sandwich de gasolinera. DESATENTOS. Que los asambleístas vallenses se hallaron a su alcalde, Juan José Ortiz Azuara, y despepitaron su molestia. Que ni botellas de agua tuvieron la atención de proveerles. de las netas La tira de las netas La tira de las Los que suelen mostrarse muy valientes y muy hombres frente a sus amigos y nos insultan con palabras como maricón, joto o puto, cuando nos encuentran solas, nos cortejan” Dayana Reséndiz, reina gay de Ciudad Valles, respecto del dictamen de la Suprema Corte que censura el uso de estos vocablos como manifestaciones discriminatorias. Pulso (8/III). No es alegría, es una frustración. Yo trabajé mucho para verlo preso, para documentar los delitos de su gobierno” Patricia Poleo, periodista venezolana asilada por represión en Florida, respecto de la muerte de Hugo Chávez. El Sentinel (6/III). Los caudillos no dejan herederos y lo que ocurrirá a partir de ahora en Venezuela es totalmente incierto” Mario Vargas Llosa, Nobel de literatura, y su análisis sobre las consecuencias para Venezuela tras la muerte de Hugo Chávez Frías. El País (10/III).