MURCIA. 17 de julio de 2016. Domingo XVI de Tiempo Ordinario Nº 224 Revista digital de la Diócesis de Cartagena Obispo de Cartagena Marta y María Desde Roma Francisco: "El corazón del sacerdote es un corazón traspasado por el amor del Señor; por eso no se mira a sí mismo sino que está dirigido a Dios y a los hermanos" Noticias - Diferentes municipios y pedanías de la Región de Murcia celebran la fiesta de la Virgen del Carmen Miguel Ángel, a la derecha del Obispo, con los formadores del Seminario San Fulgencio Miguel Ángel Alarcón, el sexto neo presbítero La comunidad parroquial de San Miguel de Murcia celebró el domingo por la tarde la ordenación sacerdotal de uno de sus miembros, Miguel Ángel Alarcón Olivares (el sexto neo presbítero ordenado este año); una celebración a la que se sumaba toda la Diócesis de Cartagena, representada por su Obispo, sacerdotes y diferentes comunidades parroquiales, movimientos y órdenes religiosas. (p.9) - Los seminaristas menores peregrinan a Fátima y participan en un encuentro en Ciudad Rodrigo - Los jóvenes demandan más protagonismo y más formación en la consulta realizada por la Delegación de Pastoral Juvenil Sergio Palazón Cuadrado recibirá el Orden Sacerdotal este domingo en la parroquia de San Sebastián de Ricote (p.10) Síguenos en Twitter y Facebook Toda la información y mucha más, podrás encontrarla en: www.diocesisdecartagena.org Reflexión de Mons. José Manuel Lorca sobre el Evangelio del XVI Domingo de Tiempo Ordinario: Marta y María En este domingo la liturgia se detiene en un tema de mucha actualidad y nos resuelve la dialéctica que ha gastado muchos ríos de tinta, preocupando a no pocas personas. Afortunadamente tenemos la Palabra de Dios que ilumina nuestra mente para las decisiones que debemos tomar ante los retos que plantea la vida. En el Evangelio aparecen dos tipos de comportamiento, que han venido a ser un clásico, en las figuras de Marta y de María, como símbolos de la vida activa y de la vida contemplativa. ¿Quién no se ha detenido en este texto para saborear las palabras de Jesús? Uno de los modos de ser está representado por Marta, una mujer atareada con los quehaceres de la casa, resolviendo todos los problemas a causa de su divino invitado. Marta valora a quien tiene en casa y quiere que no falte un detalle, pero se está perdiendo la dicha de unos momentos increíbles al lado del Maestro, estar con Él y escucharle. Esto mismo le sucede a muchas personas de hoy, es un fenómeno muy común entre nosotros, andar súper ocupados y quejarnos de que no tenemos tiempo para lo esencial. Marta es la figura de la vida en este mundo. El otro ejemplo de vida está representado en María, la mujer que cuando entró Jesús en casa se sentó junto a Él para escuchar al que tiene palabras de vida eterna, con un poder tan grande que cura e n fe r m e d a d e s o d e t i e n e l a s tormentas. María, ante Jesús, se embelesaba y no aparta sus ojos de nuestro Señor. Para los que han visto incompatibilidad en las dos actitudes, entre el activismo y la contemplación, podemos decir que en aquella casa se abrió un horizonte nuevo y conciliador, el clima era de naturalidad y confianza y la intervención de Jesús no llevaba la menor intención de excluir, ni descalificar; habló su corazón. El Señor habla a personas a las que quiere y no pretende contraponer las dos actitudes, la escucha de la Palabra del Señor, la contemplación, y el servicio concreto al prójimo son dos buenas maneras de haberle acogido, están cargadas de sentido y en las dos hay entrega total y generosa. Las dos posturas, cada una por su lado, son también esenciales en la vida cristiana y están llamadas a entenderse. Esta es la clave, se necesitan tanto, que cuando están presentes se crece en armonía y en bondad, hasta tal punto que nunca se deben separar. El Papa Francisco nos lo explica con sabiduría con estas palabras: "Pero entonces, ¿por qué Marta recibe la reprensión, si bien hecha con dulzura? Porque consideró esencial sólo lo que estaba haciendo, es decir, estaba demasiado absorbida y preocupada por las cosas que había que "hacer". En un cristiano, las obras de servicio y de caridad nunca están separadas de la fuente principal de cada acción nuestra: es decir, la escucha de la Palabra del Señor, el estar -como Maríaa los pies de Jesús, con la actitud del discípulo. Y por esto es que se reprende a Marta". (Papa Francisco, 21 de julio 2013). La propuesta de Jesús es la de escoger la mejor parte, saber estar en Cristo, amar a Cristo, ser de Cristo, que esto da sentido a nuestras acciones de caridad en la actividad pastoral. Si Cristo es la fuente donde bebemos podremos hacer más y mejor para favorecer a los demás, especialmente a los más necesitados. Muéstranos, Señor, la luz de tu verdad a los extraviados para volver al buen camino y concédenos la Paz. Francisco: "El corazón del sacerdote es un corazón traspasado por el amor del Señor; por eso no se mira a sí mismo sino que está dirigido a Dios y a los hermanos" Rescatamos esta semana la homilía del Papa Francisco en el Jubileo de los Sacerdotes que tuvo lugar el 3 de junio en la plaza de San Pedro. La celebración del Jubileo de los Sacerdotes en la solem­ nidad del Sagrado Corazón de Jesús nos invita a llegar al corazón, es decir, a la interioridad, a las raíces más sólidas de la vida, al núcleo de los afectos, en una palabra, al centro de la persona. Y hoy nos fijamos en dos corazones: el del Buen Pastor y nuestro corazón de pastores. El corazón del Buen Pastor no es sólo el corazón que tiene misericordia de nosotros, sino la misericordia misma. Ahí resplandece el amor del Padre; ahí me siento seguro de ser acogido y comprendido como soy; ahí, con todas mis limitaciones y mis pecados, saboreo la certeza de ser elegido y amado ( ). Ante el Corazón de Jesús nace la pregunta fundamental de nuestra vida sacerdotal: ¿A dónde se orienta mi corazón? ( ) ¿A dónde apunta, cuál es el tesoro que busca? Porque -dice Jesús- "donde esté tu tesoro, allí está tu corazón" (Mt 6,21) ( ). Los tesoros irremplazables del Corazón de Jesús son dos: el Padre y nosotros. Él pasaba sus jornadas entre la oración al Padre y el encuentro con la gente. No la distancia, sino el encuentro. También el corazón de pastor de Cristo conoce sólo dos direcciones: el Señor y la gente. El corazón del sacerdote es un corazón traspasado por el amor del Señor; por eso no se mira a sí mismo -no debería mirarse a sí mismo- sino que está dirigido a Dios y a los hermanos ( ). Para ayudar a nuestro corazón a que tenga el fuego de la caridad de Jesús, el Buen Pastor, podemos ejercitarnos en asumir en nosotros tres formas de actuar que nos sugieren las Lecturas de hoy: buscar, incluir y alegrarse. Buscar. El profeta Ezequiel nos recuerda que Dios mismo busca a sus ovejas (cf. 34,11.16). Como dice el Evangelio, "va tras la descarriada hasta que la encuentra" (Lc 15,4) ( ). Y, cuando la encuentra, olvida la fatiga y se la carga sobre sus hombros todo contento (...). Las vacaciones son un tiempo para des­ cansar, pero también para regenerarse en el espíritu, especialmente leyendo con calma el Evangelio. Así es el corazón que busca: es un corazón que no privatiza los tiempos y espacios. ¡Ay de los pastores que privatizan su ministerio! ( ). El pastor, según el corazón de Dios, no defiende su propia comodidad, no se preocupa de proteger su buen nombre, aunque sea calumniado como Jesús ( ). El pastor según Jesús tiene el corazón libre para dejar sus cosas, no vive haciendo cuentas de lo que tiene y de las horas de servicio: no es un contable del espíritu, sino un buen Samaritano en busca de quien tiene necesidad. ( ). Segunda palabra: incluir. Cristo ama y conoce a sus ovejas, da la vida por ellas y ninguna le resulta extraña (cf. Jn 10,1114). Su rebaño es su familia y su vida. No es un jefe temido por las ovejas, sino el pastor que camina con ellas y las llama por su nombre (cf. Jn 10, 3-4). Y quiere reunir a las ovejas que todavía no están con él (cf. Jn 10,16). Así es también el sacerdote de Cristo: está ungido para el pueblo, no para elegir sus propios proyectos, sino para estar cerca de las personas concretas que Dios, por medio de la Iglesia, le ha confiado. Ninguno está excluido de su corazón, de su oración y de su sonrisa. Con mirada amorosa y corazón de padre, acoge, incluye, y, cuando debe corregir, siempre es para acercar; no desprecia a nadie, sino que está dispuesto a ensuciarse las manos por todos ( ). Alegrarse. Dios se pone "muy contento" (Lc 15,5): su alegría nace del perdón, de la vida que se restaura, del hijo que vuelve a respirar el aire de casa. La alegría de Jesús, el Buen Pastor, no es una alegría para sí mismo, sino para los demás y con los demás, la verdadera alegría del amor. Esta es también la alegría del sacerdote. Él es transformado por la misericordia que, a su vez, ofrece de manera gratuita. En la oración descubre el consuelo de Dios y experimenta que nada es más fuerte que su amor. ( ) Para él, la tristeza no es lo normal, sino sólo pasajera; la dureza le es ajena, porque es pastor según el corazón suave de Dios. Queridos sacerdotes, en la celebración eucarística encon­ tramos cada día nuestra identidad de pastores. Cada vez podemos hacer verdaderamente nuestras las palabras de Jesús: "Esto es mi cuerpo que se entrega por vosotros". Este es el sentido de nuestra vida, son las palabras con las que, en cierto modo, podemos renovar cotidianamente las promesas de nuestra ordenación ( ). EL EVANGELIO, XVI Tiempo Ordinario Del Santo Evangelio según San Lucas Lucas 10, 38-42 Yendo ellos de camino, entró Jesús en una aldea, y una mujer llamada Marta lo recibió en su casa. Esta tenía una hermana llamada María, que, sentada junto a los pies del Señor, escuchaba su palabra. Marta, en cambio, andaba muy afanada con los muchos servicios; hasta que, acercándose, dijo: «Señor, ¿no te importa que mi hermana me haya dejado sola para servir? Dile que me eche una mano». DIBUJO: Mons. Lorca Planes Marta, andas inquieta y preocupada con muchas cosas; solo una es necesaria PRIMERA LECTURA Génesis 18, 1-10a SALMO RESPONSORIAL Sal 14, 2-3ab. 3cd-4ab. 5 SEGUNDA LECTURA Colosenses 1, 24-28 EVANGELIO Lucas 10, 38-42 Respondiendo, le dijo el Señor: «Marta, Marta, andas inquieta y preocupada con muchas cosas; solo una es necesaria. María, pues, ha escogido la parte mejor, y no le será quitada». La Palabra de Dios que este domingo nos propone la liturgia nos muestra el tema de la hospitalidad, entendida no solamente como un valor humano que hay que cultivar, sino sobre todo como una de las características de los discípulos de Jesús. Encontramos a Jesús en la última etapa de su viaje a Jerusalén, en una aldea cercana a la capital y siendo muy bien recibido en una casa que, por los otros evangelios, sabemos que era la de Lázaro en Betania. Estamos en la tierra de la Ley por excelencia, en la vecindad del Templo, y todo ello se refleja en la anécdota del Evangelio. En esta ocasión, Jesús aparece como huésped, recibido hospitalariamente en la casa de Lázaro, Marta y María. El Evangelio nos dice que las dos hermanas no estaban en la misma disposición para recibir su buena noticia: Marta, con su actividad y servicio absorbentes, no tenía tiempo para escuchar, mientras que María era total apertura ante la Palabra de Dios. Ellas representan las dos actitudes que encontró Jesús al llegar a la tierra santa de Judea. Al final, Marta no puede aguantar más que la dejen sola con su diaconía y pide a Jesús que haga algo para que su hermana le ayude. Acogerle y escucharle es signo de la disponibilidad para la conversión. Nos convertimos en discípulos por medio de la escucha atenta. Pidamos al Espíritu Santo que podamos ser dóciles a la Palabra de Dios, fuente perenne de gracia y salvación. El coro en nuestras celebraciones Vamos a dedicar los artículos que quedan para cerrar el curso, a finales de julio, a la música en la liturgia. Hoy, en concreto, haremos unas sencillas reflexiones sobre el coro. El Secretariado Nacional de la Comisión Episcopal de Liturgia, que es el organismo de la Conferencia Episcopal que está al servicio de las diócesis en lo que se refiere a los temas litúrgicos, tiene un directorio sobre la música en las celebraciones litúrgicas. En ese directorio se nombra muy a menudo al coro. Concretamente quiero citar un párrafo de ese documento. Dice así: "Los pequeños coros que sostienen la asamblea con el canto a una sola voz y las grandes agrupaciones que dedican a esta actividad amplios espacios de estudio y de búsqueda, poniendo a disposición de la liturgia los frutos de su entusiasmo y de su competencia, con su participación técnicamente lograda, pueden cumplir una función de guía y acompañamiento, ofreciendo su ayuda valiosa a la plegaria común, contribuyendo eficazmente al decoro y belleza de la celebración con un servicio cada vez más intenso y cualificado". Leyendo este párrafo podemos extraer algunas características del coro al servicio de la liturgia. La primera de ellas es que el coro tiene una función ministerial dentro de la celebración: contribuye a la plegaria común. La música y el canto en la liturgia no es solamente algo que adorna o embellece la celebración, sino que está en función de ayudar a los que participan en la celebración a vivirla como una experiencia de encuentro con Cristo, ayudados en este caso por todo lo que aporta el canto y la música, que entran a formar así parte del universo simbólico de la celebración. Esto tiene mucha más importancia de lo que parece: si el coro y cada uno de sus miembros -incluyendo al director y al organista o los músicos- ejercen un ministerio en la celebración, entonces no pueden hacerlo "desde fuera", sino implicándose como cristianos en la misma celebración. Solamente viviendo la celebración ayudarán a otros a vivirla. Es análogo a lo que pasa por ejemplo con los lectores, o con cualquier otro ministerio. Antes aún de la capacitación técnica es fundamental la fe, que es lo que se va a celebrar. Esto hace que el coro forme parte de la asamblea y ejerza su función pensando en ella, en ayudarle, con una función de guía y acompañamiento, como dice nuestro párrafo. Así pues el coro no hará de la celebración un concierto, ejecutando piezas en las que el pueblo no puede participar. Habrá momentos en que esto sea adecuado -momentos por ejemplo de meditación u oración, como la acción de gracias después de la comunión-, pero hay otros en los que toda la asamblea debería cantar -por ejemplo, los cantos del "ordinario de la misa", como el Santo o el Cordero de Dios-, y en ese caso el coro debe ayudar y guiar a la asamblea para participar cantando. Una tercera característica del coro, por tanto, es una formación y un conocimiento profundo de la liturgia. No todos los cantos son igual de importantes. No todos los cantos tienen la misma función. Si por ejemplo hacemos un canto de entrada ese canto acompaña una acción -la entrada del presidente y los ministrosy por tanto cuando esa acción ha cesado no tiene sentido seguir el canto, porque la celebración se alagaría inútilmente. Detalles como ese los hay a cientos, y es conveniente conocerlos, para que el canto esté en función de la celebración, y no al revés. Finalmente, por hoy, quiero acabar señalando otra característica de la música litúrgica, como responsabilidad de los coros: no solamente la adecuación al momento litúrgico, sino también la belleza, que nos ayude a descubrir la Belleza con mayúsculas de la que aquellos cantos nos hablan y con la que nos quieren poner en sintonía y comunicación. Hecha esta introducción seguiremos la semana que viene dando alguna pista más concreta. Un saludo a todos los lectores de "Nuestra Iglesia", y especialmente a aquellos que trabajan y ejercen este ministerio tan hermoso, como es el de cantor en la liturgia. Ramón Navarro, Delegado Episcopal de Liturgia Raquel de Jesús, Carmelita Descalza Acompañada por su familia, amigos y una representación de la parroquia de La Purísima de Yecla, Raquel Romero Santa, una joven yeclana de 17 años, entró el pasado domingo 3 de julio en el monasterio de las Madres Carmelitas Descalzas de Piedrahita (Ávila), pasando entonces a llamarse Raquel de Jesús. viosa, y le dije al Señor: "Si de verdad me quieres aquí, que cuando salga que no me tiemble la voz, que me ponga nerviosa pero que no me tiemble la voz". Entonces salí a leer, no me tembló la voz y cuando me senté me dije: "¡Madre mía, que no me ha temblado la voz!". Al salir del convento me sentía súper rara, no era yo. Esa semana cuando me ponía a estudiar lo único que pensaba todo el rato era en las monjas, iba a cualquier sitio y enseguida pensaba en las monjas. Y todo esto lo llevaba a la oración. Me llamo Raquel, tengo 17 años y soy la tercera de seis hermanos. Mis padres pertenecen al Camino Neocate­ cumenal y de pequeña siempre me han inculcado la fe. Los domingos iba a Misa y pertenecía al coro. Siempre he ido creciendo en la fe y con el Señor. Comulgué y empecé con las catequesis de Confirmación, y empecé también con dirección espiritual que me ayudó mucho a iniciarme en la oración, para tener esa intimidad con Dios como todo cristiano debería tener. En una peregrinación a Granada y Sevilla con la parro­ quia (a los 13 años), en una exposición del Santísimo recuerdo que caí de rodillas y le pregunté al Señor qué era lo que quería de mí. En ese momento me puse a llorar. Le pregunté que si no me quería para formar una familia, que si me quería para ser religiosa o misionera. En ese momento le dije que monja de clausura no, pero que lo demás, bueno Terminé muy rara de la peregrinación. Y eso lo llevaba a la oración y a la dirección. Entonces comencé a visitar conventos. Fui a Elche, donde conocí a las Carmelitas Descalzas. En ese momento salió la madre y salieron también las novicias. A la superiora le conté como había sentido la llamada y en lugar de tomárselo como una tontuna de una cría, se lo tomó en serio, me ayudó y me animó. Ahí empecé a mantener relación con el convento. Esa misma tarde en la oración yo le preguntaba al Señor si ese verdaderamente era mi sitio; entonces recuerdo que en la Misa me tocaba leer, yo me pongo muy ner- Lo que me ayudó a decir que sí al Señor en la vida con­ sagrada contemplativa fue el ejemplo de Santa Teresita del Niño Jesús, cómo siendo carmelita es patrona de las misiones. Yo también quería ser misionera. Me ayudaba que ella cada paso que daba en el convento era por las misiones. Entonces me dije: "si ella es patrona de las misiones en la clausura pues yo también lo puedo ser". ¿Cómo de Elche me voy a Piedrahita? Estas hermanas ya tenían el número máximo de religiosas en la comu­ nidad, 21, entonces las más jóvenes con la madre, deci­ dieron irse a fundar a otros sitios para dar la oportunidad de que otras chicas pudieran entrar. Cuando me lo dijeron yo tenía dos posibilidades: quedarme en Elche, que está más cerca, o irme a Piedrahita (Ávila). Lo puse en la oración, pero yo tenía claro que me quería ir con la madre que era la que me había ayudado desde un principio, la que me había animado y con las más jóvenes que eran las que siempre salían (al locutorio). Es en la oración, donde he encontrado la paz, esa intimidad con el Señor, la perseverancia de todos los días. La alegría es inmensa Carisma Para mí la cruz más grande que he podido tener en estos cuatro años de vocación ha sido los estudios. A mí siempre me han costado mucho los estudios. Al ponerme a estudiar me podía la pereza, la desgana, me costaba muchísimo, pero el Señor siempre me daba su mano. Y sobre todo también la presencia de la Virgen María. Yo soy de Yecla y el pueblo es muy mariano. La Virgen María me ha ayudado siempre, ella como una madre ha estado siempre a mi lado, en to­ das las caídas, me ha ayudado siempre a levantarme. Las Carmelitas Descalzas pertenecen a la gran familia del Carmelo, renovado por Santa Teresa de Jesús que infundió un carisma propio, orientado a la unión con Dios por medio de la constante oración y la contemplación, viviendo los consejos evangélicos en una comunidad fraterna, en obsequio de Jesucristo y al servicio de la Madre Iglesia. Quiero animar a los jóvenes, que estén dispuestos a decirle que sí al Señor, a que no tengan miedo, que nuestros planes no son los del Señor. Que nosotros muchas veces tenemos nuestros planes: casarme, tener este trabajo, irme a tal sitio a estudiar Pero el Señor tiene otros planes para nosotros. Que estemos dispuestos a lo que el Señor nos pida en cada momento y no tengamos miedo a decirle que sí, que Él siempre nos va a ayudar y nos va a dar siempre su mano. Esta vida contemplativa eclesial se desarrolla en un clima que armoniza la soledad y el silencio con la comunión fraterna, en una familia a semejanza del "pequeño colegio de Cristo" que tiene por centro el amor del Señor y por norma la caridad fraterna, junto a una generosa abnegación evangélica. Estoy muy contenta, estoy a punto de entrar en el convento. Estos años he visto la presencia del Señor continuamente en mi familia, en mis amigos. La alegría es inmensa. Que siempre estemos dispuestos a decirle que sí al Señor en todo lo que nos pide. Así narraba su testimonio vocacional Raquel Romero Santa, esta joven yeclana de 17 años, momentos antes de entrar en el monasterio de Carmelitas Descalzas de Piedrahita (Ávila). Actualmente forman la comunidad siete monjas profesas y dos postulantes. Desde la parroquia de La Purísima de Yecla se desplazó a Piedrahita un autobús con jóvenes del coro y catequistas, acompañados también por su párroco, José Antonio Abellán, y el sacerdote Asensio Morales, párroco de Santa María la Real de Aledo. Antes de entrar en clausura, Raquel se despidió de sus cuatro hermanas y de su hermano mayor, Pablo, seminarista de cuarto curso en el Seminario Mayor de San Fulgencio; y recibió la bendición de sus padres y de los sacerdotes presentes. Mientras su familia y amigos se despedían de ella emocionados, Raquel de Jesús (su nombre de religiosa) no dejó en ningún momento de sonreír. El trabajo es también esen­ cial en su vida contemplati­ va, así como el tiempo de recreación, al que dedican dos horas diarias. Profesan un amor especial a la Virgen, como Madre y modelo de vida, es la patro­ na de la Orden Santa María del Monte Carmelo. Y se ali­ mentan espiritualmente de la Palabra de Dios. En palabras de su regla: "meditar día y noche en la Ley del Señor" y del carisma que les dejaron plasmado en sus escritos Santa Teresa de Jesús y San Juan de la Cruz, al que se asoció la Santa de Ávila en su tarea fundacio­ nal. Hospitalidad Santa Teresa, Cartagena Durante 100 años este hogar ha acogido a miles de personas sin techo en Cartagena, y desde hace tres años también da de comer a más de 100 personas cada día. 1916. "Durante años las potencias extranjeras habían estado abasteciéndose del mineral de las minas de La Unión y de Cartagena para la primera contienda, y una vez abastecidos, no siguieron llevándose ma­ terial. Aquello que era un pulmón para la ciudad, supuso su debacle. Cartagena entró en una época de carencia muy fuerte". De esta forma Vicente Villar, presidente de la Hospitalidad Santa Teresa, hace un recorrido por la situación de la ciudad portuaria en los años en los que se abrió esta casa de acogida. "Fue una época de hambruna que se agravó con enfermedades endémicas y con una gran inundación que hubo en 1919", recuerda. En esa situación un grupo de hombres decidieron buscar una solución para poder acoger a todas aque­ llas personas que habían perdido su casa, que no tenían dónde refugiarse. En el barrio de San Antón crearon un hogar para que pudieran pernoctar las personas sin techo. "Bajo el auspicio del párroco del barrio, Juan Gallego, y con espíritu de caridad y amor al prójimo, crearon la hospitalidad, con una casa que costaba 25 pesetas, y empezaron a acoger gente", relata Villar. Poco a poco aquello fue cambiando de lugar y los servicios aumentaron, hasta el día de hoy. Actualmente cuentan con 30 residentes en el alber­ gue, a los que se les da una atención total: servicio de peluquería, ropero, aseo, comidas y descanso, así como un lugar para el tiempo libre y formación, que se distribuye en distintos talleres. Entre las personas que acoge la Hospitalidad Santa Teresa hay algunos inmigrantes que llegan a través de la Comunidad Autónoma; transeúntes que, por medio del Ayun­ tamiento de Cartagena, pasan la noche allí; así como familias que necesitan asistencia, ya sea por proble­ mas de convivencia o por siniestros, como puede ser un incendio en la vivienda. Todo esto sin costes para los usuarios, pues la Hospi­ talidad recibe ayuda para su mantenimiento a través de la subvenciones de las distintas administraciones, una importante base social que aporta una gran colaboración, así como una serie de eventos que realizan a lo largo del año para sacar dinero y de otras formas de caridad que les ayudan a seguir adelante. Hogar y comedor La función principal de esta asociación sin ánimo de lucro es la de dar techo a los que no lo tienen. Las personas llegan hasta aquí ya sea por medio de la Policía o los Servicios Sociales, o incluso por libre. "En cualquier caso, cuando una persona llega a la Hospitalidad inmediatamente le damos atención. Al día siguiente valoramos si debemos ponerlo en cono­ cimiento de alguna de las administraciones y si no, nuestra trabajadora social valora la necesidad de esa persona y en función de eso se prorroga su estancia tanto como se considere oportuno", explica el presi­ dente de este hogar cartagenero. Hace tres años comenzaron un nuevo proyecto que les haría ampliar su ayuda a más del doble de perso­ nas: un comedor, que se encuentra a seis metros de la Hospitalidad. En él se da de comer a los 30 usuarios del hogar, a 15 personas más que lo solicitan y a 20 familias, que se llevan la comida a casa y que suman en total unas 70 personas más. Para ellos hay una comida de mediodía y un pack para la cena. La trabajadora social de la Hospitalidad realiza previamente un estudio pormenorizado a todos los usuarios del comedor, en el que se valora si tienen o no ingresos, si están en paro, la edad que tienen, y si hay o no niños en casa. Miguel Ángel Alarcón ya es sacerdote de la Diócesis de Cartagena La comunidad parroquial de San Miguel de Murcia celebró el domingo la ordenación sacerdotal de uno de sus miembros, Miguel Ángel Alarcón Olivares; una celebración a la que se sumaba toda la Diócesis de Cartagena, representada por su Obispo, sacerdotes y representantes de diferentes comunidades parroquiales, movimientos y órdenes religiosas. A las 19:00 horas comenzó la Eucaristía presidida por Mons. José Manuel Lorca Planes. En su homilía, el Obispo utilizó algunas de las palabras de Miguel Ángel que, la semana pasada, recogíamos en esta revista diocesana. "Dices que la persona está hecha para el Señor y que descubrir esto es la mayor y la más bella noticia que puedas escuchar. No estás lejos de la espiritualidad viva que nos trae la Palabra de Dios Dios escucha y no desprecia ni al afligido, ni al pobre, ni al prisionero. En esto también llevas razón, porque cuando has descubierto a Dios en tu vida es una experiencia "increíble, especial, irrepetible, divertida, única, impresionante" y apasionante", dijo el Obispo al ordenando, a quien además invitó a poner siempre en el centro de su vida a Cristo, "tu fundamento sacerdotal, la verdad que no debes olvidar y el centro de atención de toda tu vida sacerdotal". El nuevo presbítero dio las gracias a Dios por su sacer­ docio y al Obispo por "su entrega y generosidad". Agradeció también el apoyo de su familia y amigos, y de su "otra familia" la del seminario; a los formadores, "ellos han vendado mis heridas y las han curado", y a sus compañeros del Seminario Mayor de San Fulgencio y seminaristas menores, sin los cuales -explicó- "no sería el neo presbítero que soy ahora". En su agradecimiento tuvo también palabras para los movimientos de la Iglesia, en donde se nota "el soplo del espíritu", especialmente para los Cursillos de Cristiandad, donde redescubrió a Jesucristo en su vida. Agradeció también su experiencia misionera en Calcuta con las Misioneras de la Caridad, que marcó definitivamente su vocación al sacerdocio. La Diócesis celebra la fiesta de la Virgen del Carmen ¡Salve! Reina de los mares". Así comienza el canto de la Salve Marinera dedicada a la Virgen del Carmen, patrona de los marineros. Las distintas parroquias de la Diócesis que cuentan con esta advocación como titular, ya han comenzado las actividades entorno a la celebración del 16 de julio, fiesta de Nuestra Señora del Carmen. La parroquia de Ntra. Sra. del Carmen de Murcia, cele­ brará misas a las 8:30, 12:00 y 19:00 horas. Tras la última saldrá una procesión por las calles del barrio. En la iglesia del Carmen de Cartagena habrá misas a las 9:00, 11:00 y 19:30 horas, en esta última se realizará la imposición del escapulario a los feligreses asistentes. Lorca también celebra la fiesta de la Virgen del Carmen, en la parroquia que la tiene como titular habrá Misa a las 9:30 y a las 20:00 horas. Al finalizar la Misa de la tarde, se realizará la procesión por las calles del barrio. En Águilas, la Eucaristía será en la lonja, a las 11:00 horas. A las 20:00 horas comenzará la procesión maríti­ ma, por la bahía. En el Puerto de Mazarrón la Misa será a las 18:00 horas en la lonja, desde donde saldrá después la procesión marítima. En San Pedro del Pinatar, a las 8:00 horas, Misa en la Plaza de la Constitución, y después, romería hacia Lo Pagán, donde se embarcará a la Virgen para la procesión marítima. También se celebra esta fiesta en Mula. El día 16 habrá Misa en la ermita a las 8:30 y a las 20:30 horas. Al finalizar la celebración de la tarde tendrá lugar la procesión. Y en Caravaca de la Cruz, la comunidad de Padres Car­ melitas Descalzos también celebra esta fiesta. El sábado, habrá Misa Solemne a las 19:30 horas y posterior procesión por las calles de Caravaca. Otras localidades también celebran esta fiesta: Santiago de la Ribera (San Javier); La Garapacha (Fortuna); Car­ rasquilla (Lorca); Avileses y Santo Ángel (Murcia); Isla Plana, Los Urrutias, Galifa y El Portús (Cartagena); y Leyva (Mazarrón). "El Señor me ha colmado de su ternura", Sergio Palazón Cuadrado Sergio, el séptimo y último sacerdote ordenado este curso, recibirá el Orden el próximo sábado, a las 19:00 horas, en la parroquia de San Sebastián de Ricote. "El Señor ha sido paciente y misericordioso conmigo", dice emocionado Sergio al comenzar a hablar de cómo y cuándo sintió la llamada al sacerdocio. A sus 45 años, es el mayor de cuantos se han ordenado este año y sonríe al hacer memoria de las diferentes señales que Dios ha puesto en su vida, "son muchos años", dice. De familia cristiana, de niño, junto a sus cuatro hermanos, escuchaba en su casa los pasajes del Evangelio que les leía su padre. También, juntos, en familia, rezaban el Rosario e iban a Misa los domingos. Siempre sintió la llamada al sacerdocio, pero en los primeros años de juventud comenzó a alejarse poco a poco de la Iglesia. Transcurrieron los años y Sergio trabajaba ya como funcionario de la Administración de Justicia, cuando a los 35 años sintió que Dios lo llamaba para ser sacerdote de su Iglesia. "Era una tarde de mayo de 2005. Al terminar de leer un libro, que narraba el supuesto juicio a San Pedro a través del Evangelio de San Marcos, el Señor me dejó ver su amor por todos los hombres; que el mal del mundo no era cosa suya, sino una consecuencia de nuestra libertad". Este acontecimiento cambió el rumbo de su vida, o como él dice: "lo devolvió al lugar del que nunca debió salir". En ese momento regresó a su mente la figura del sacerdote, aunque pensó que para él sería imposible. A partir de entonces, comenzó a implicarse más y más en la Iglesia, a través de la Eucaristía y la confesión, y buscó un director espiritual. María ha guiado siempre su vocación, desde aquellos rezos en familia del Rosario hasta el momento de su ordenación, que tendrá lugar en la festividad de la Virgen del Carmen: "Ella fue cambiando mi corazón sin darme cuenta". En una ocasión le llegó al trabajo una felicitación navideña en la que aparecía una imagen de la Virgen María con el Niño Jesús en brazos: "la pegué en la puerta del armario del trabajo, sin darle mayor importancia. De forma silenciosa esta imagen fue desplegando sobre mí toda su ternura, hasta que me di cuenta de que su contemplación me llenaba de paz. Sentí entonces la necesidad de que estuviera en mi casa. Sin darme cuen­ ta, después de muchos años, volví a abrirle las puertas de mi corazón a María". Y fue en 2009, a través de María, en una vigilia de la Inmaculada en su parroquia de Ricote, cuando Sergio se "rindió" a la voluntad de Dios. En 2010 entró en el Seminario Mayor de San Fulgencio, "han sido unos años duros, difíciles y al mismo tiempo llenos de gozo. Es como si, de la mano de María, el Señor me hubiera ido llevando por el desierto de mi vida. No ha habido dolor, frustración o miedo que haya sentido antes que el Señor no haya hecho que vuelva a vivir en el seminario, para verlo con una mirada nueva y así salir renovado, porque me ha hecho ver mi pobreza y que a pesar de todo me quiere así, que siempre está conmigo". La pastoral en el seminario le ha hecho crecer en diferentes lugares: junto a las Misioneras de la Caridad; en el Hogar de Nazaret de las Misioneras de la Sagrada Familia; en las parroquias de San Benito de Murcia y del Espíritu Santo de Espinardo; junto a los seminaristas menores; y por último, en la parroquia de Ntra. Sra. del Carmen de Murcia, donde ha servido como diácono. "Este año ha sido de gracia y bendiciones. El Señor me ha colmado de su ternura. He sido muy feliz siendo diácono". "Venid a mí los que estáis cansados y agobiados que yo os aliviaré". Con estas palabras del Evangelio de Mateo, Sergio resume su propia historia de amor y salvación e invita así a su ordenación sacerdotal que tendrá lugar este sábado, a las 19:00 horas, en la parroquia de San Sebastián de Ricote. Con 39 años entró en el seminario y ahora, consciente de que Dios no se cansa de llamar a quien elige, asegura que "nunca es tarde para decirle a Dios que sí; lo más hermoso que he podido experimentar es que sea cual sea la situación, mientras estamos vivos para Dios nunca es tarde. Siempre estamos a tiempo de empezar de nuevo, como el buen ladrón. En sus brazos todo tiene solución". Los seminaristas de Bachiller participan en un encuentro en Ciudad Rodrigo Del 10 y al 14 de julio, el Seminario de San Cayetano de Ciudad Rodrigo ha acogido un encuentro de semi­ naristas de Bachillerato de toda España, en el que han participado siete seminaristas del Seminario Menor de San José, acompañados por su rector, Sebastián Chico, y su formador, Jesús García. Este encuentro, que se realiza anualmente variando el lugar de acogida, pretendía ser lugar en el que compartir experiencias, reflexionar y fortalecerse, con tiempo para el ocio, la formación y la vida espiritual. "Es una forma de conocer la realidad de cada diócesis, que los semi­ naristas conozcan otras realidades, todo en un ambiente lúdico. Ellos han podido compartir sus experiencias y fortalecerse en su vocación, viviendo y viendo que hay otros jóvenes como ellos", explica Jesús García. "Están en un momento crítico de su vida en el que tienen que tomar muchas decisiones. Para los seminaristas de primero -explica el formador- se abre un horizonte nuevo que es más grande que el seminario, que la diócesis y que ellos mismos. Conocen cómo es la vida en otros seminarios y valoran la realidad que cada uno de ellos vive y las oportunidades que les da la Iglesia. Los de segundo se confirman en su vocación". Durante estos días han estado acompañados por el Obispo de Ciudad Rodrigo, Mons. Cecilio Raúl Berzosa Martínez. Y uno de los días también estuvo con ellos el Obispo de Orense, Mons. Leonardo Lemos Montanet. En la noche del miércoles tuvo lugar una vigilia de oración en la que los jóvenes de segundo de Bachiller, que este año pasan al seminario mayor, dieron su tes­ timonio vocacional. Los seminaristas menores peregrinan a Fátima El santuario mariano de Fátima ha sido el lugar elegido para la peregrinación de este año del Seminario Menor San José. Allí han pasado tres días un grupo de 20 semi­ naristas, tres de ellos de la Diócesis de Guadix, junto a tres monitores y uno de sus formadores, José Antonio Ibáñez. Unos días para profundizar en su fe a través de María. Las actividades han girado en torno al lema de la peregrinación: "¿Queréis consagraros a Dios?", una de las frases que la Virgen dijo a los pastorcillos en una de sus apariciones. "Ha sido una experiencia intensa y enriquecedora", cuenta el formador, "pues han podido profundizar en toda la espiritualidad que emana del santuario y del mensaje de la Virgen". Han participado en todas las actividades propias del lugar, como el rezo del Rosario internacional y la Misa del día 13 de julio, en la que participa gente de todo el mundo. Todo, en un ambiente de convivencia y fraternidad. Además, también han tenido tiempo para visitar la aldea donde nacieron los pastorcillos y conocer en profundidad las seis apari­ ciones de Fátima. "A los seminaristas les ha servido para potenciar su devoción a la Virgen y para darse cuenta de la univer­ salidad de la Iglesia. Un tiempo para el encuentro con Dios y con la comunidad y un momento de enriquecimiento personal", explica José Antonio Ibáñez. Los jóvenes demandan más protagonismo y más formación El pasado mes de marzo comenzaba la consulta a jóvenes y agentes de pastoral juvenil lanzada por la Delegación de Pastoral Juvenil. Unos cuestionarios con los que poder recopilar información sobre la acción catequética y formativa que se está llevando a cabo en las parroquias, así como la situación de los jóvenes hoy. Un documento cuyas conclusiones pudieran ayudar tanto a la Delegación para su trabajo diario como al Obispo en la elaboración de su nuevo Plan Pastoral. "Ha habido una respuesta aceptable. Habríamos querido más, pero aun así es importante escuchar la voz de los jóvenes y tener el pulso de cómo es su situación actual­ mente", explica el Delegado de Pastoral Juvenil, Antonio Jiménez Amor. Desde todas las zonas pastorales de la Diócesis han llegado las respuestas a estas consultas que el lunes se entregaron a Mons. Lorca Planes, proponiéndole cinco líneas para la elaboración de su Plan Pastoral, extraídas de las opiniones recogidas: Buscar y elaborar recursos de catequesis permanente que ayuden a los itinerarios de fe; fomentar la cultura del testimonio cristiano; seguir trabajando con los agentes de pastoral juvenil; apostar por el trato personal y cercano con los más jóvenes; y favorecer la vida espiritual. Los jóvenes indican que se sienten parte de la Iglesia aunque piden que sea más cercana, joven y misionera; demandan tener un mayor protagonismo en la pastoral evangelizadora y recibir una formación mayor; y con­ fiesan que necesitan mayor compromiso y vida espiri­ tual y celebrativa. El Delegado de Pastoral Juvenil asegura que desde estas consultas también se piden más actividades que favorezcan una mayor experiencia de encuentro con Cristo y que se anime la vida en parroquias, movimien­ tos y asociaciones. La consulta a los agentes de pastoral juvenil se realizó con un método más elaborado, a través de tres premisas: ver, juzgar y actuar. Lo hicieron con textos del Magisterio de la Iglesia y del Evangelio. El Bohío, de fiesta por San Cristóbal La parroquia de El Bohío (del barrio de Los Dolores de Cartagena) celebró el pasado do­ mingo la fiesta de su titular, San Cristóbal. Los actos religiosos comenzaron con un triduo el viernes que estuvo dedicado a los enfermos y el sábado a los fieles difuntos. El domingo participaron en la celebración dos hermandades invitadas: la de Nuestra Señora de los Do­ lores y la de San Ginés de la Jara. Al finalizar la Misa, el párroco, José Luis Riquelme, bendi­ jo un centenar de vehículos que se acercaron hasta la parroquia, entregándoles además un banderín a los conductores con la imagen de su patrón. Después tuvo lugar la procesión con el santo. La jornada finalizó con un ágape parroquial. Miembros de la parroquia de Puente Tocinos participan en un curso de Biblia en Palencia Durante esta semana, el párroco y tres feligresas de la Parroquia Nuestra Señora del Rosario de Puente Tocinos están participando en un curso bíblico en Dueñas (Pa­ lencia). Bajo el título "Curso Palabra-Vida 2016. Una comunidad llamada a renovarse desde la misericordia", este curso pretende acercar a los participantes al im­ pacto del mensaje de Jesucristo, a través de la lectura de las cartas del Nuevo Testamento que ofrecen pistas y caminos evangélicos que ayudan a vivir en clave de misericordia. "La comunidad a la que va dirigida la carta de Santiago, era una comunidad envejecida, contaminada por una sociedad, marginadora de los débiles, que necesitaba recuperar la frescura de los orígenes y el vigor profético. El autor de la carta descubre que los grandes problemas que la asediaban tenían que ver con la misericordia, y hace de esta el eje sobre el que giran sus indicaciones y exhortaciones para que la comunidad vuelva a Jesús", explica José Antonio Cano, párroco de Puente Tocinos. Virgen del Carmen Virgen del Carmen, s.XX. Antonio Carrión Valverde. Parroquia de San Francisco Javier de San Javier. El siglo XX nos ha dejado en la Diócesis grandes obras de escultura de importantes maestros como la talla policromada de la Virgen del Carmen, de San Javier, obra de Antonio Carrión Valverde. La túnica y escapulario marrón junto con el manto blanco distinguen la iconografía carmelitana, vinculando estrechamente a la Virgen con los miembros de la Orden del Monte Carmelo que llevan con orgullo vestir el hábito de María. El Niño Jesús sujeta los escapularios estableciendo una sagrada relación, como una oferta salvífica, con quien se acerca a la imagen; pues vestir con el escapulario de la Virgen es portar prenda de salvación si el fiel cristiano se reviste del amor de María e imita sus virtudes. La belleza del rostro de esta imagen de la Virgen, como orgullosa Madre de Cristo a quien sujeta con firmeza, atrae la mirada de cuantos hombres de San Javier se adentran en el mar sabiendo que sus vidas están en las manos de una Madre que sostiene y protege, pudiendo repetir como rezan los gozos de la Virgen del Carmen: "Pues sois de nuestro consuelo el medio más poderoso: sed nuestro amparo amoroso, Madre de Dios del Carmelo". Francisco Alegría Director Técnico Museo de la Catedral Padre Pío. Entre el cielo y la tierra (Giulio Base, 2000) Esta película narra la historia biográfica del padre Pío de Pietrelcina. Un sacerdote hu­ milde procedente de San Giovanni Rotondo (Italia). En 1903 ingresó en la Orden de los Frailes Menores Capuchinos en Morcone. Fue ordenado sacerdote el 10 de agosto de 1910 en la Catedral de Beneveto, y en febrero de ese año se estableció en San Giovanni Rotondo, donde permaneció hasta su muerte, el 23 de septiembre de 1968. Recibió los estigmas el 20 de septiembre de 1918. La vida de este santo italiano, que construyó el Hospital Casa de Sollievo della Sofferenza, fue una historia de amor, incomprensión y sufrimiento. A pesar de los misterios, milagros, sospechas de las autoridades eclesiales y la envidia de otros sacerdotes, el Padre Pío sintió que Dios lo había escogido para aliviar el sufrimiento de sus vecinos. El libro de la oración (Lawrence G. Lovasik) ¿Qué es orar? ¿Cómo lograr que sea eficaz y tenga fruto, a pesar de los numerosos obstáculos que sobrevienen en la vida diaria? El Hijo, sabe una orar, vez ha cumplinado su misión, Quien sabe vivir, dijo San Agustín.se presenta en debien los suyos entregándoles Lawrence G.medio Lovasik, conocido por los lectores de Patmos, se propone en este libro el d facilitar algunas nociones sobre el arte de la oración: qué es orar, cómo hacerlo, cómo lograr que sea realmente eficaz y que tenga fruto, a pesar de los numerosos obstáculos que podemos encontrar en nuestra vida diaria. Porque nada hay más útil que la oración, -recuerda San Vicente de Paúl- por eso hemos de estimarla, amarla mucho y poner esmero en hacerla bien. Sábado de julio 2016 16 ORDENACIÓN SACERDOTAL DE SERGIO PALAZÓN Lugar: Parroquia San Sebastián, Ricote. Hora: 19:00 horas 16 23-27 Sábado de julio 2016 16 16 FIESTA DE LA VIRGEN DEL CARMEN, Murcia A las 11:00 horas, Misa en la Lonja. Lugar: Parroquia de Nuestra Señora del Carmen, Murcia. Y a las 20:00 horas, procesión marítima con la imagen de la Virgen del Carmen. Misas a las 8:30, 12:00 y 19:00 horas, tras la última, procesión por las calles del barrio. 16 Sábado FIESTA DE LA VIRGEN DEL CARMEN, Lorca FIESTA DE LA VIRGEN DEL CARMEN, Caravaca Lugar: Parroquia de Nuestra Señora del Carmen, Lorca. Lugar: Iglesia conventual de Nuestra Señora del Carmen, Caravaca de la Cruz. Misas a las 9:30 horas y 20:00 horas, al finalizar esta última habrá procesión por las calles del barrio. de agosto 2016 FIESTA DE LA VIRGEN DEL CARMEN, Águilas Sábado de julio 2016 Sábado de julio 2016 Lunes de julio 2016 18 PEREGRINACIÓN DIOCESANA A LAS JMJ DE CRACOVIA Hasta el 3 de agosto Misa a las 19:30 horas y después procesión. EVENTOS FUTUROS, PARA IR RECORDANDO JULIO, AGOSTO Y SEPTIEMBRE: Visitas nocturnas a la Torre de la Catedral; los martes, miércoles y jueves, a las 22:00 horas. JULIO, AGOSTO Y SEPTIEMBRE: A solas en la Catedral. De martes a sábados a las 13:15, 14:15, 15:15 y 16:15 horas. 1 de SEPTIEMBRE: Bajada de la Virgen de la Fuensanta.