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ELIANE ELIAS: SOMETHING FOR YOU (2007)
e
“Eliane Elias es la elegancia en el
Jazz latino”. Con estas palabras inicia
el cineasta español Fernando Trueba la
presentación de esta pianista brasileña,
en el notable filme Calle 54, del año
2000.
Para decir una palabra sobre Eliane
Elias y sobre el disco aquí presentado,
debo partir por este documental pues
gracias a él conocí a la artista y en él se
juntan de un modo sorprendente los
caminos de diversos talentos musicales
de hoy y de ayer. Lo mismo que ocurre,
como veremos, en el nuevo disco de la
otrora pianista de Vinicius de Moraes.
Calle 54 es un documental en el
que Fernando Trueba se ha dado “el
gusto”, como lo confiesa él mismo, de
juntar a algunos de los más importantes
representantes de este género musical
nacido en los ambientes latinos de Estados Unidos. Hoy es conocido como
latin jazz, pero también se lo llamó
en el pasado afrocuban jazz. En un
comienzo fue un tipo de música que
resultó de la mezcla de la gran riqueza
rítmica de la tradición caribeña, con
la estructura armónica aportada por el
jazz norteamericano. Esta fusión, que
se debió en gran medida al contacto de
los músicos de ambos “mundos” en los
grandes cabarets y casinos de la Cuba
prerrevolucionaria, se intensificó con el
correr del tiempo, sobre todo a partir de
las migraciones de cubanos que decidieron dejar la isla e instalarse en diversas
ciudades norteamericanas, siguiendo así
las huellas de algunos grandes pioneros,
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como Mario Bauzá
y Machito, que ya
en la década de los
’40 supieron instalar en New York
esa nueva música
de big bands transformadas por la
rítmica caribeña.
Sin embargo, y
aunque la presencia latina es hasta
hoy obviamente clara y predominante
en el latin jazz, no podría definirse a
este simplemente como una “música de
inmigrantes” pues en su configuración
histórica han participado con igual
importancia grandes jazzistas norteamericanos, como Charlie Parker, Dizzy
Gillespie, Carl Tjader o Miles Davis.
Hoy en día se prefiere la denominación de jazz latino a la de jazz afrocubano: se entiende que como género
incluye también la fusión con el jazz
de otros lenguajes musicales latinos,
como la música flamenca andaluza o las
diversas variantes de la música brasileña.
En este espacio se considera el aporte de
Eliane Elias.
En Calle 54 pude verla tocar el piano
por primera vez: rubia, seria; más bien
pensativa, de impecable postura técnica,
erguida frente al teclado. Su música ya
había atraído antes mi atención, cuando
alguna vez en mi trabajo escuchaba,
como música de fondo, la sección de
piano jazz de la excelente AccuRadio, en
Internet. Un interesante tema de su disco
DISCOS
El disco es un auténtico homenaje en
que la pianista brasileña sabe poner
una vez más toda su elegancia, su
buen gusto en la improvisación y su
impecable gesto técnico.
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Paulistana, de 1993, me hizo fijarme en
ella. Ahora en el filme, efectivamente y
como confirmando la presentación de
Trueba, lo que aparecía ante mis sentidos era una escena llena de elegancia.
No solo por el vestido negro ceñido y la
cuidada cabellera de la pianista. No solo
por la atmósfera creada por el cineasta
con su manejo de las cámaras y de la
luz sobre su rostro, sus manos y sus
pies descalzos. Elegancia sobre todo por
esa música sorprendente, un bossa-nova
probablemente nacido en Sao Paulo,
pero recreado en el corazón mismo de
New York, en un atardecer húmedo y
gris de ese invierno ajeno.
El disco aquí comentado, Something
for You, no tiene nada que ver con el jazz
latino, pero sí con una de sus fuentes:
el conocimiento íntimo, por parte de
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músicos latinos, de los grandes del jazz
norteamericano. El subtítulo del disco es:
Eliane Elias sings and plays Bill Evans. La
sola mención de este enorme músico, fallecido en 1980, nos abre todo un mundo
y merecería mucho más que una breve
referencia. El jazz actual está lleno de él.
Ha sido y es un referente obligado para
muchos de los principales músicos del
género. Fue la gran inspiración de Michel
Petrucciani y del contrabajista Eddie
Gómez, por mencionar a dos músicos
mayores; y lo es hoy de Michel Camilo,
de Eliane Elias y de tantos otros.
El disco es un auténtico homenaje en
que la pianista brasileña sabe poner una
vez más toda su elegancia, su buen gusto
en la improvisación y su impecable gesto
técnico. A ello agrega en varios temas su
voz pastosa, un murmullo nacido para
las melodías cadenciosas de su Brasil
originario y que ahora pone al servicio
de la música de Evans.
A los seguidores del gran Bill Evans
el disco seguramente les agradará como
el homenaje que es y, al mismo tiempo,
reavivará en ellos el deseo de escuchar
al maestro una vez más, interpretando
—sobre todo en sus grabaciones de
los años ’60 y ’70— algunos de sus
grandes temas, que ahora Eliane Elias
recrea: “Here’s Something For You”, la
conmovedora balada “Detour Ahead”,
por supuesto el célebre tema “Waltz For
Debbie” y tantos otros que el oyente devoto podrá disfrutar en una clave nueva
y sugerente.
Fernando Berríos M.
([email protected] )
Octubre 2008