La seguridad vial nos compete a todos Siempre creí que no hay que esperar que ocurra lo peor para hacer lo necesario. A escasos meses de asumir mi gestión, en febrero de 2008, anuncié el envío de un proyecto de ley en materia de seguridad vial al parlamento que, entre otras cuestiones, creaba la Agencia Nacional de Seguridad Vial, un organismo autárquico, con presupuesto propio que concentraría las decisiones en una sola responsabilidad política. La ley fue sancionada el 9 de abril de 2008 y promulgada el 29 del mismo mes. No es mi intención trazar aquí la cronología de esta norma sino mostrar, concretamente, la necesidad imperiosa de contar con nuevas herramientas que nos permitieran combatir un flagelo que estaba tomando los visos de una epidemia: las muertes por siniestros de tránsito. Recuerdo, también, que ese día nos acompañaban familiares de víctimas, que contribuyen desde un lugar muy particular, el dolor de haber perdido a un ser querido y nos dejan una lección, la necesidad de actuar antes que ocurra lo peor. No podíamos hablar de cifras o de estadísticas frente a ellos. Las barras, los números representan miles de vidas truncadas —especialmente de jóvenes— y de familias destruidas. Seguramente, cada uno tendría sus propias ideas acerca de cómo solucionar este problema. Pero, sin duda, en lo que todos coincidíamos era en que no había más tiempo que perder y que era necesario ponerse a trabajar de inmediato. La creación de la Agencia Nacional de Seguridad Vial significó darle a esta problemática el rango de política de Estado. Era necesario iniciar acciones que, por su propia naturaleza, serían de mediano y largo plazo. Era necesario dejar de lado falsas vanidades y asumir que esta política trascendería una gestión de gobierno y que el Estado por sí solo, sin la ayuda y el compromiso de todos los actores involucrados, obtendría magros resultados. Era necesario asumir que la seguridad vial nos compete a todos y que requiere del trabajo conjunto del Estado nacional, la sociedad civil y el sector privado. Esto es, precisamente, lo que hemos venido construyendo en estos tres años. Nos planteamos un objetivo ambicioso: reducir en cinco años el cincuenta por ciento de las muertes. Esto, que en un principio parecía una expresión de deseo, se convirtió en realidad en la pasada temporada veraniega 2011. Logramos disminuir en un cincuenta por ciento las muertes en las rutas que conducen a la Costa Atlántica, principal destino turístico del país que, entre los meses de enero y febrero, congregó a siete millones y medio de personas. Este logro, que se traduce en vidas, es el resultado de una tarea que abarca todas las problemáticas vinculadas a la seguridad vial, pero, principalmente, la concientización, la prevención, el control y la sanción. En todos estos aspectos hemos avanzado enormemente. Trabajamos en lograr un cambio cultural. Para ello es necesario crear conciencia en la sociedad brindando información constante, educando a nuestros chicos que este año recibirán en cada una de sus escuelas material didáctico y propuestas de enseñanza sobre educación vial, por primera vez en la historia de nuestro país. Creamos la primera Tecnicatura Superior en Educación Vial, que se dicta en las sedes de la Universidad Tecnológica Nacional y cuyo título está reconocido por el Ministerio de Educación de la Nación. Implementamos medidas de prevención, para lo cual diseñamos campañas específicas sobre distintas problemáticas como el consumo de alcohol al conducir, el exceso de velocidad, el uso de celulares, la falta de casco y de cinturón de seguridad mientras se está frente al volante. También firmamos un acuerdo con las empresas automotrices para que las medidas de seguridad en autos y motos no sean privilegio de unos pocos. Creímos necesario cambiar las condiciones de acceso al derecho a conducir un vehículo. Debemos ser capaces de garantizar que cada vez que se otorgue una licencia habremos tomado todos los recaudos posibles para evaluar adecuadamente las condiciones físicas, psicológicas y de conocimiento del candidato. Por eso, creamos la Licencia Nacional de Conducir, que unifica los criterios de otorgamiento de este documento en todo el país y se complementa con el Sistema Nacional de Antecedentes de Tránsito y el Sistema Nacional de Infractores, que deben ser consultados antes de expedir una licencia. De este modo estamos impidiendo que conductores inhabilitados en una jurisdicción, se muden a otra para obtener su licencia. Creemos, también, que no es necesario hacer cumplir las normas vigentes. Por eso trabajamos en el fortalecimiento de la justicia de faltas, para favorecer la aplicación efectiva la ley contra los conductores que no respetan su vida ni la de los otros. El control y la sanción de infractores deben servir para disuadir en la práctica de la conducción irresponsable. Para ello contamos con el invalorable apoyo de los agentes de control, de la Gendarmería Nacional, de los distintos cuerpos policiales de las provincias y de los bomberos, a quienes dotamos de moderna tecnología y del equipamiento necesario para el desempeño de sus funciones. Finalmente, brindamos asistencia financiera a aquellas provincias, municipios y organismos de la sociedad civil decididos a invertir en seguridad vial. Somos conscientes de que resta mucho por hacer. Sabemos que es sólo el comienzo de un largo proceso que implica un cambio cultural, pero tenemos la profunda convicción de que vamos por el camino correcto. Introducción La Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) es un organismo creado el 9 de abril de 2008, por la ley 26.363, en respuesta a una decisión de la presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, y puesto en marcha por el Ministerio del Interior. Coordina el conjunto de acciones y actores involucrados en el cumplimiento de un objetivo muy concreto: reducir la mortalidad por siniestros viales. Este organismo descentralizado del Ministerio del Interior está presidido por el ministro y conducido por un director ejecutivo designado por el Poder Ejecutivo Nacional. Entre sus atribuciones se encuentra la de ser responsable de la coordinación y seguimiento del Plan Nacional de Seguridad Vial, contemplado en el Convenio Federal1, sobre acciones en materia de tránsito y seguridad vial. 1 El Convenio Federal sobre Acciones en Materia de Tránsito y Seguridad Vial, originado en 2007, por decisión del Poder Ejecutivo, incluía propuestas sobre la constitución del Registro Nacional de Licencias de Conducir, la adopción del sistema unificado de puntaje para las licencias de conductor, el control de alcoholemia, el control de velocidades y la creación de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, entre otras. Este convenio se encuentra hoy ratificado por el decreto 1232/07. Trabaja conjuntamente con diferentes organismos involucrados en la materia, como la Comisión Nacional de Regulación del Transporte (CNRT), Vialidad Nacional, el Órgano de Control de Concesiones Viales (OCCOVI), las diferentes fuerzas de seguridad, ONGs, entidades afines y, fundamentalmente, todas las provincias argentinas. La creación de la ANSV, la definición del marco normativo y el aporte de los recursos necesarios para su financiamiento expresan, claramente, la posición del Estado nacional respecto a la seguridad vial al elevarla al rango de política de Estado. Los ejes fundamentales que guían la implementación de esta política son las tareas de concientización, prevención, control y sanción en materia vial, en todo el territorio de la República Argentina. Esta iniciativa hace posible que hoy nuestro país cuente con la conjunción virtuosa de un marco normativo de avanzada —que recoge lo mejor de la experiencia internacional en la materia—, de una institucionalidad pensada para abordar integral e integradamente las acciones estratégicas que deben llevarse a cabo y de un financiamiento específico que garantiza, en el largo plazo, la disponibilidad de recursos suficientes para alcanzar los resultados fijados. Esto nos valió el reconocimiento internacional, siendo el primer y único país de América Latina en haber sido incorporado al International Traffic Safety Data and Analisis Group (IRTAD)2 organismo de certificación de calidad de datos en materia de seguridad vial. Objetivo logrado a partir de un acuerdo de cooperación técnica entra la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) y la Dirección General de Tráfico (DGT) de España. Desde la creación de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, la disminución de fallecidos en siniestros viales ha sido progresiva. Entre los años 2008 y 2010, el índice de víctimas fatales se redujo en un veintiuno por ciento cada cien mil vehículos. Esto representa más de novecientas vidas salvadas, cifra que se hace extensiva a un número equivalente de familias. En lo que respecta específicamente al período vacacional 2011, la disminución de fallecidos ha sido considerable. Gracias al trabajo conjunto coordinado por la ANSV, 2 IRTAD www.irtad.org se logó reducir en un cincuenta por ciento el número de víctimas fatales y en un cuarenta y nueve por ciento3 los siniestros ocurridos en la Costa Atlántica —principal destino turístico de nuestro país— entre los meses de enero y febrero. Cabe destacar, también, que durante la reciente temporada de verano, la cantidad de siniestros viales a nivel nacional se redujo en un veintidós por ciento, mientras que el número de víctimas fatales disminuyó en un diecinueve y medio por ciento.4 Por otra parte, los principales índices asociados a la conducta en seguridad vial también mejoraron: el uso de cinturón de seguridad se incrementó en más del treinta por ciento; el uso de casco en algo más de un doscientos setenta por ciento en los últimos tres años y el consumo de alcohol en conductores se redujo un treinta por ciento. Estos logros son fruto de las acciones que el gobierno nacional lleva adelante mediante campañas de concientización y planes nacionales como el de control de velocidad, utilización del cinturón de seguridad y casco y de los controles de alcoholemia. A esto se suma la implementación de la Licencia Nacional de Conducir. Finalmente, para el año 2011, nos hemos planteado un importante desafío: lograr un cambio cultural a partir de la educación. Por primera vez en la historia de nuestro país se entregará material educativo a cada uno de los alumnos y docentes del nivel inicial y primario de todo el país: treinta y ocho mil escuelas públicas y privadas, cuatrocientos mil docentes y más de seis millones de alumnos. Seguimos trabajando para cumplir con el ambicioso objetivo de reducir las víctimas fatales a la mitad en cinco años. Seguridad vial: política de Estado En Argentina se producen anualmente casi doscientos mil siniestros viales de diversa magnitud. Del total, la mitad tiene como consecuencia lesionados y, en el peor de los casos, víctimas fatales. Las causas de estos siniestros son hábitos arraigados en nuestro comportamiento como conductores: invasión de sendas peatonales, cruce indebido, falta de respeto a los límites de velocidad, utilización de distractores como el celular, ingesta de alcohol, 3 Comparando igual período del año anterior en la Costa Atlántica. Fuente: ANSV. 4 Fuente: ANSV. falta o no utilización de casco en las motocicletas, desapego por las normas, inexperiencia, ausencia del cinturón de seguridad, entre otros. Los números hablan por sí solos. El índice de mortalidad producido por siniestros viales en nuestro país es muy alto. Sólo en 2008, se produjeron siete mil quinientas muertes y se superaron los cien mil heridos. Más del cincuenta por ciento de los fallecidos eran menores de treinta y cinco años. En el año 2009, luego de un intenso trabajo desarrollado por la Agencia Nacional de Seguridad Vial en todo el país, el número de víctimas fatales se redujo en algo más de un nueve por ciento. Los últimos datos de 2010 arrojaron como resultado una reducción del cinco por ciento en términos absolutos de víctimas fatales. Si bien las cifras correspondientes a los últimos años nos hablan tanto de una reducción de siniestros como de pérdida de vidas en siniestros viales, existe una serie de circunstancias que deben ser tenidas en cuenta para afianzar, definitivamente, esta tendencia. El constante crecimiento del parque automotor generó desbordes en el tránsito mundial, fenómeno del que Argentina no quedó al margen. De acuerdo al Registro Nacional de Propiedad Automotor, entre 1987 y 2010, la cantidad de vehículos se incrementó casi dos veces y media: de seis millones cuarenta mil se pasó a catorce millones ciento cincuenta mil. Si confrontamos este dato con el crecimiento de población registrado entre el Censo Nacional del 2001 y el del año 2010, la cantidad de habitantes aumentó un 10%, Argentina es actualmente uno de los tres países de América Latina con mayor tasa de motorización: 2,83 habitantes por vehículo. Según un estudio realizado por la Universidad Nacional de Tres de Febrero, solamente un cuatro por ciento de la población tiene un conocimiento adecuado de las normas de tránsito y más de la mitad piensa que es válido exceder los límites de velocidad si uno está apurado. Esto indica que nos enfrentamos al volante sin conocer las normas elementales y, por otro lado, que aun conociéndolas, muchas veces no estamos dispuestos a respetarlas. Las estadísticas revelan que en Argentina los riesgos de ser parte de un siniestro vial aumentan en los dos primeros años de manejo. Que, a pesar del incremento en el uso de cascos y de cinturón de seguridad, aun debe realizarse un gran esfuerzo para alcanzar estándares más altos, cercanos al noventa por ciento de su utilización. Que existen cerca de ocho millones cuatrocientos mil vehículos en circulación y más de catorce millones registrados. Que ocurren alrededor de doscientos mil siniestros de tránsito por año de diversa gravedad. Que los accidentes automovilísticos son la principal causa de muerte en personas de entre quince y treinta y cuatro años. Y, finalmente, que el noventa por ciento de los accidentes se producen como consecuencia de una falla humana. Para que un siniestro vial ocurra es necesaria una conjunción de factores: conductores irresponsables dispuestos a no respetar las normas, con escasa o nula conciencia sobre sus responsabilidades en evitar siniestros viales; escasas acciones de educación y difusión social permanentes sobre las reglas básicas que rigen el tránsito; caminos en mal estado y/o mal señalizados, y/o mal iluminados, y/o inadecuados para recibir tráfico muchas veces excesivo; un sistema de control y sanción que ni disuade ni castiga con la severidad necesaria estas conductas; escasa difusión y, sobre todo, errática de las brutales consecuencias —en especial sobre la cantidad de vidas perdidas— que generan los responsables de los siniestros viales y, por último, una cultura que ubica siempre en otra parte la responsabilidad de lo que acontece. Construyendo una política de Estado Esta situación de inseguridad vial comenzó su escalada a comienzos de la década del noventa, cuando se conjugaron una serie de circunstancias: el desmantelamiento del sistema ferroviario; la paridad cambiaria con el dólar que permitió a un gran número de argentinos la compra de vehículos; el ingreso al mercado argentino de vehículos importados con capacidad para desarrollar grandes velocidades y, al mismo tiempo, la escasa previsión estatal para adecuar las condiciones de circulación del transporte a esta realidad que estaba cambiando aceleradamente. El resultado ha sido ampliamente reseñado. No es casual que a partir de mediados de la década del noventa comenzaran a formarse y actuar cada vez más organizaciones sociales constituidas por víctimas y familiares de víctimas de siniestros viales. Fueron ellas las que realizaron una ingente labor para instalar la gravedad de la situación en la agenda política nacional. Las acciones que devinieron en la creación de la Agencia Nacional de Seguridad Vial reconocen como un primer antecedente la sanción de la Ley Nacional de Tránsito y Seguridad Vial Nº 24.449, en diciembre de 1994, promulgada en enero de 1995 y su decreto reglamentario Nº 779/95. Sin embargo, fue recién con el Plan Nacional de Seguridad Vial 2006–2009, sancionado bajo la presidencia del Dr. Néstor Kirchner, que esta problemática logró establecerse como una preocupación clara y concreta en el sistema político. El Plan Nacional de Seguridad Vial fue aprobado en forma unánime por todas las jurisdicciones de nuestro país mediante la resolución CFSV Nº 10/05 y la disposición SSTA Nº 05/05. En este marco, el decreto presidencial Nº 1724/2006 dispuso que el año 2007 fuera el “Año de la Seguridad Vial”, acompañado por un programa de campañas de concientización sobre la manera de circular en la vía pública. Paralelamente, se fue tejiendo el entramado necesario, ya que es imposible contar con una real política de seguridad vial sin la participación voluntaria y comprometida de las provincias y los municipios. El panorama de la seguridad vial se complejiza aún más si tomamos en cuenta que, dentro del propio Estado nacional, diversos organismos tienen competencia sobre aspectos directamente relacionados con la temática. Entre los más importantes se encuentra el Ministerio de Planificación Federal, del que dependen la Dirección Nacional de Vialidad (D.N.V.), autoridad a cargo de la construcción y desarrollo de la red troncal de caminos de la República Argentina, el Órgano de Control de Concesiones Viales (OCCOVI), organismo desconcentrado de la D.N.V., encargado de la supervisión, inspección, auditoría y seguimiento del cumplimiento de contratos de las rutas nacionales concesionadas y la Secretaría de Transporte, que regula el transporte automotor. Del Ministerio de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos dependen la Gendarmería Nacional y la Policía Federal con competencia en el control y fiscalización del tránsito en ámbitos del Estado nacional, y el Registro de la Propiedad Automotor. Por su parte, el Ministerio de Salud se encuentra vinculado como órgano rector del sistema sanitario argentino y de la producción de estadísticas de salud. A su vez, representantes del sector privado, como las empresas concesionarias de rutas, también tienen incumbencias y responsabilidades sobre el mantenimiento, construcción y desarrollo de los tramos bajo su concesión. En este contexto y por decisión del Poder Ejecutivo nacional se gestó, en 2007, el Convenio Federal sobre Acciones en Materia de Tránsito y Seguridad Vial, que incluía propuestas sobre la constitución del Registro Nacional de Licencias de Conducir; la adopción de un sistema unificado de puntaje para las licencias; la unificación de criterios de determinación y control de alcoholemia; la prohibición de expendio y publicidad de bebidas alcohólicas a la vera de las vías de circulación; la intensificación del control de velocidades; la implementación de un sistema de registro radarizado y fotográfico y de un sistema de control de velocidad promedio entre estaciones de peaje; el control y fiscalización del tránsito en rutas nacionales y la creación de la Agencia Nacional de Seguridad Vial. Este convenio se encuentra hoy ratificado por el decreto 1232/07. En 2008 se continuó avanzando y consolidando la acción gubernamental en pos de la seguridad vial con las siguientes acciones claves: –La ratificación del Convenio Federal sobre Acciones en Materia de Tránsito y Seguridad Vial por medio de la ley 26.353 de Tránsito y Seguridad Vial. –La sanción de la ley 26.363 de Tránsito y Seguridad Vial, por la cual se crea la Agencia Nacional de Seguridad Vial. Este conjunto de decisiones políticas permitió a la República Argentina dar un verdadero salto en su situación en relación a la seguridad vial, poniéndose en sintonía con las mejores y más actualizadas recomendaciones en la materia a nivel internacional. Agencia Nacional de Seguridad Vial Las acciones en materia de seguridad vial se encuentran enmarcadas en el contexto definido por el Plan Nacional de Seguridad Vial 2006/2009, como así también por el Acuerdo Federal firmado por los gobernadores en agosto de 2007 y ratificado por decreto presidencial en septiembre del mismo año. Este proceso ha logrado resultados alentadores sobre todo a partir de la sanción de la ley 26.363 cuya finalidad fue la creación de la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) y la fijación de los criterios y prioridades de la política de Estado en esta materia. Con la creación de la ANSV, la definición de su marco normativo y el aporte de los recursos para financiarla, el Estado nacional definió claramente al organismo encargado de llevar adelante la tarea de concientización, prevención, control y sanción en materia vial en la Argentina. Por primera vez se da la conjunción de un marco normativo de avanzada que incorpora las mejores experiencias de otros países en la materia, de una institucionalidad pensada para abordar integral e integradamente las acciones estratégicas que deben ser implementadas y un financiamiento específico que garantiza, en el largo plazo, la disponibilidad de recursos suficientes para alcanzar los resultados fijados. La ANSV se constituyó, entonces, como la herramienta institucional para consolidar y coordinar la política pública de seguridad vial en todo el territorio nacional. Su función es la de articular, coordinar y ejecutar acciones y medidas con todas las jurisdicciones nacionales, provinciales y municipales. Su responsabilidad es la de reducir la tasa de siniestralidad en el territorio argentino mediante la promoción, coordinación, control y seguimiento de las políticas de seguridad vial, nacionales e internacionales. Se hace especial hincapié en el armado de programas de educación vial, en la capacitación de conductores profesionales y de autoridades de control, en la unificación de criterios para la emisión de la Licencia Nacional de Conducir y en la Revisión Técnica Obligatoria para los vehículos, entre otros. Asimismo, se trabaja en lograr la uniformidad de la legislación de tránsito, en conocer la realidad y situación de cada jurisdicción en materia de seguridad vial, en la suscripción de nuevos convenios y en lograr la participación de las entidades intermedias y asociaciones no gubernamentales vinculadas al tránsito y la seguridad vial en los planes y programas de gobierno. Por primera vez se considera, en la Argentina, a la seguridad vial como un tema de Estado. El resultado estratégico esperado, definido por el gobierno nacional, es la reducción de la mortalidad por siniestros viales en un cincuenta por ciento en un plazo de cinco años. Esta política de Estado está centrada en cuatro principios fundamentales de los que se derivan las principales acciones que se llevan a cabo: concientización, prevención, control y sanción. El rol del Estado en la educación vial: concientización y prevención En el marco de los objetivos trazados en materia de prevención y concientización, se están llevando adelante campañas de difusión en medios gráficos, audiovisuales, radiales e impresos, que constituyen una forma de llegada efectiva a la población y una valiosa herramienta en la creación de una nueva conciencia vial. La idea es que los proyectos y acciones relacionados con las campañas de comunicación social y actividades de divulgación a la comunidad en su conjunto, cumplan con el objetivo de instalar en la sociedad la preocupación por la seguridad vial y la responsabilidad individual y colectiva por el mejoramiento de esta problemática. Las campañas gráficas y audiovisuales se centran en sensibilizar a la ciudadanía respecto a las consecuencias que las imprudencias frente al volante puedan traer. Están basadas en cinco ejes fundamentales que concentran el noventa por ciento de las causas de accidentes con mayor cantidad de pérdidas de vidas humanas: respetar las velocidades máximas; no consumir alcohol antes de conducir; utilizar cinturón de seguridad; usar casco, en caso de motocicletas o cuatriciclos, y no utilizar telefonía celular mientras se conduce. Junto con la mayor campaña en seguridad vial en medios masivos de comunicación que el Estado nacional haya realizado, existen otras iniciativas desarrolladas, en algunos casos, y coordinadas, en otros, por la ANSV, destinadas a la concientización y prevención: Restricción en la circulación de camiones en rutas nacionales Con el objetivo de facilitar el desplazamiento vehicular y evitar siniestros viales, la ANSV, en conjunto con Gendarmería Nacional, la Secretaría de Turismo de la Nación, la Subsecretaría de Transporte Automotor, la Dirección Nacional de Vialidad, la Comisión Nacional de Regulación del Transporte, los gobiernos provinciales y cámaras empresarias del transporte automotor de cargas, coordina operativos que restringen la circulación de camiones de más de tres mil quinientos kilogramos, en todas las rutas nacionales y en los accesos a la ciudad de Buenos Aires, en ocasiones especiales como inicio y cambio de quincenas en vacaciones estivales, inicio y finalización del receso invernal, Semana Santa y fines de semana largos, entre otros. Quedan exceptuados de esta medida los transportes de leche cruda, animales vivos, productos frutihortícolas en tránsito, exclusivos de prensa y unidades móviles de medios de comunicación audiovisuales, de atención de emergencias, de asistencia de vehículos averiados o accidentados, cisterna de traslado de combustibles y gas natural comprimido, transporte de gases para el funcionamiento de centros sanitarios, de medicinas y de disposición final de residuos sólidos urbanos. Entrega de cascos y alcoholímetros Esta iniciativa consiste en la entrega de un casco homologado a cada motociclista que tome un curso de seguridad vial de cuatro horas de duración. El Ministerio del Interior, a través de la ANSV, hace entrega de los cascos y de alcoholímetros a municipios y provincias de nuestro país para que sean las autoridades locales quienes, en definitiva, hagan llegar a sus vecinos los cascos y utilicen los alcoholímetros en los operativos de control. Se entregaron cascos y alcoholímetros, entre otros, en Provincia de Buenos Aires, Vicente López, Almirante Brown, Avellaneda, Azul, Bahia Blanca, Balcarce, Baradero, Berrazategui, Bragado, Cañuelas, Carlos Tejedor, Castelli, Chivilcoy, Escobar, Esteban Echeverría, General Belgrano, San Martín, Hurlingham, La Costa, La Plata, Leandro N. Alem, Lincold, Lobería, Lomas de Zamora, Malvinas Argentinas, Marchiquita, Mar del Plata, Merlo, Miramar, Moreno, Morón, Pehuajó, Pellegrini, Pinamar, Roque Peréz, San Andrés de Giles, San Fernando, San Isidro, San Miguel, Tigre, Tres Arroyos, Tres de Febrero, Villa Gesell, Zarate; y las provincias de Catamarca, Córdoba, Corrientes, Entre Ríos, Formosa, Jujuy, La Pampa, La Rioja, Mendoza, Misiones, Neuquen, Río Negro, Santiago del Estero, Salta, San Juan, Santa Cruz, Tucumán y Tierra del Fuego, con muchos de sus municipios Operativos de prevención y concientización en la Costa Atlántica La ANSV, a través de sus agentes de prevención y seguridad vial, realizó operativos en toda la Costa Atlántica, en los que controló documentación, cantidad de pasajeros por vehículo, uso de luces bajas, estado de alcoholemia, velocidad, utilización del celular durante la conducción y uso del cinturón de seguridad o del casco —en el caso de los motociclistas y conductores de cuatriciclos. La ANSV obsequió un casco homologado a aquellos conductores que no lo poseían. Por otro lado, se desarrolló la campaña de concientización Conductor Responsable, destinada a jóvenes, mediante la cual los agentes entregaron material informativo y explicaron los riesgos de la conducir bajo los efectos del alcohol, incentivando la designación de un conductor alternativo por grupo. Los operativos comenzaron en el mes de enero de 2011 y se extendieron durante todo el verano. Conciencia vial en la playa y taller itinerante El receso de verano constituyó una buena oportunidad para desplegar una importante campaña de concientización dirigida a turistas. Promotoras de la ANSV recorrieron diariamente las playas de la Costa Atlántica, entregando folletos e invitando a participar de juegos interactivos sobre seguridad vial dentro de las actividades del Taller Itinerante, mediante los cuales la familia aprenden sobre cuestiones tales como los riesgos de conducir al mismo tiempo que se utiliza un celular o la importancia del uso del cinturón de seguridad. El taller tiene como principal objetivo generar conciencia a través de juegos destinados a toda la familia. Cuenta con un auto roll-over que permite experimentar un vuelco a cuarenta kilómetros por hora, y comprobar la importancia de la utilización del cinturón de seguridad. También posee un dummy robot, que interactúa con los participantes a través de una charla de concientización, respondiendo a sus preguntas. También, el taller contaba con un cine dinámico que, a partir de butacas dotadas con movimientos de simulación, permite experimentar maniobras de riesgo que acercan al participante a una situación de accidente real. Además, se pueden realizar test lúdicos de reflejos que, a través de un contador, registra y compara los tiempos de reacción de las distintas personas al ser sometidas a pruebas de distracción. Durante 2010, el Taller Itinerante recorrió las localidades de Mar del Plata, Pinamar, Villa Gesell, La Plata, Mendoza (Festival de la Vendimia), Castelli, Zárate, Santa Fe, Tandil, C.A.B.A., Rosario, Bahía Blanca, San Martín de los Andes, Villa la Angostura, Bariloche, Chacabuco, Venado Tuerto, Balcarce, Pehuajó, Córdoba y Roque Pérez. Cumplir la ley: control y sanción La heterogeneidad y fragmentación histórica referida a las responsabilidades sobre el control y la fiscalización vial en la Argentina, han imposibilitado durante mucho tiempo establecer prioridades geográficas y procedimientos de control a nivel nacional. Prácticamente todas las jurisdicciones nacionales, provinciales y municipales tienen competencias compartidas en esta materia. A partir de 2009, la Agencia Nacional de Seguridad Vial comenzó a diseñar políticas y a coordinar operativos de control vial a partir de acuerdos institucionales con los organismos involucrados: Gendarmería Nacional, policías jurisdiccionales, Policía Federal, provincias y municipios, siempre, en el marco de la normativa vigente. Uno de los atrasos más evidentes de nuestro país en materia de seguridad vial era el referido a la incorporación de tecnología —disponible a nivel internacional— para mejorar la prevención, control y fiscalización vial. Desde un principio, la ANSV priorizó la incorporación de la más moderna tecnología como herramienta clave para llevar adelante su política en materia de prevención (radares fijos y móviles), control (hardware y software que posibiliten el control inmediato de antecedentes de tránsito e infracciones a los agentes de seguridad vial) y fiscalización (hardware y software para optimizar los procedimientos judiciales por infracciones; la informatización de registros y las bases de datos). A esto se suma la labor referida a la actualización de la normativa en la materia y la construcción de consensos institucionales, interjurisdiccionales y ciudadanos, que permitan la adopción de políticas de control y sanción acordadas. Como principales acciones, referidas al control y sanción, se destacan: Adhesión de las provincias a la ley 26.363 Actualmente suman veinte las provincias adheridas —incluida la Ciudad Autónoma de Buenos Aires— a la Ley de Tránsito y Seguridad Vial5. Con la adhesión a esta ley, las provincias acuerdan tener el mismo marco normativo en materia de seguridad vial, comprometiéndose a compatibilizar los criterios, las metodologías y los objetivos de las políticas y medidas estratégicas para el desarrollo de un tránsito seguro. Asimismo, la adhesión constituye el primer paso para ser incluido en el Registro Nacional de Antecedentes de Tránsito e Inhabilitados, formar parte del Sistema Nacional de Licencias de Conducir y del sistema de quita de puntos (scoring) y participar en la coordinación de controles de fiscalización vial conjuntamente con la ANSV. 5 Sancionada en 2008. Ratificación del Pacto Federal de Seguridad Vial.6 Ley 26.353.7 La ratificación, por parte del Congreso Nacional, del Convenio Federal sobre Acciones en Materia de Tránsito y Seguridad Vial, suscripto el 15 de agosto de 2007, entre el Estado nacional, las provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, permitió homogeneizar y dar consistencia a los múltiples esfuerzos realizados en cada jurisdicción en pos de revertir la siniestralidad vial en nuestro país. De ahí que se trabaje en el establecimiento de criterios unívocos respecto a la emisión de licencias de conducir en todo el territorio nacional, a la constitución del Sistema Nacional de Antecedentes de Tránsito, a la penalización de conductas infractoras — fijación de parámetros de medición de alcohol en sangre, inobservancia de las velocidades máximas, no utilización del cinturón de seguridad o del casco, utilización de distractores mientras se conduce, especialmente, celulares—, al control de los requisitos para la circulación de los vehículos y al control y fiscalización de tránsito en las rutas nacionales, entre otros. Integración del Registro Nacional de Inhabilitados Acorde con el propósito de lograr consenso institucional, interjurisdiccional y ciudadano, en julio de 2009 finalizó su integración el Registro Nacional de Inhabilitados, que da constancia de las personas impedidas por la Justicia de Faltas para conducir, ya sea por razones de salud, psicofísicas o por cuestiones penales. Esto significó un paso importante para impedir que un individuo inhabilitado para conducir en un distrito, obtenga su licencia en otro. El Registro brinda a cada jurisdicción una base de datos única de aquellas personas inhabilitadas para conducir, que deberá ser consultada al momento de dictar sentencia en procedimientos contravencionales y al expedir nuevas licencias o renovar las existentes. Controles en rutas de todo el país 6 Ratificado por decreto del Poder Ejecutivo nacional Nº 1232, del 11 de septiembre de 2007. 7 Sancionada el 28 de febrero de 2008 y promulgada el 25 de marzo del mismo año. Las medidas de concientización, prevención y la aplicación de sanciones mejoran la conducta e inciden directamente en la cantidad de víctimas fatales y siniestros viales. Esto quedó evidenciado durante la temporada de verano 2011—que contempla a los meses de enero y febrero— en que los controles apostados en las bases de operaciones de todas las regiones del país (NOA, NEA, Sur, Centro y accesos a Capital Federal) arrojaron como resultado una reducción de la cantidad de siniestros viales a nivel nacional del veintidós por ciento8, mientras que el número de víctimas fatales disminuyó en un veinte por ciento en relación a igual período de 2010. El resultado más alentador fue el alcanzado en la Costa Atlántica, principal destino turístico de nuestro país al que acudieron –entre los meses de enero y febrero— siete millones y medio de personas. El número de víctimas fatales se redujo en un cincuenta por ciento, mientras que los siniestros viales, en un cuarenta y nueve por ciento respecto al año anterior, consolidándose una tendencia descendente en las principales vías de acceso a la Costa Atlántica por tercer año consecutivo. Esto se debió al trabajo conjunto de la ANSV, Gendarmería y las policías provinciales en las principales rutas turísticas de la Argentina, así como la masiva campaña de concientización y educación que, en materia vial, viene realizando la Agencia con otras instituciones y organizaciones no gubernamentales preocupadas por esta problemática. A la reducción de siniestros y víctimas fatales, hay que añadir como dato altamente positivo, el cambio de hábito en los conductores evidenciado por una reducción del trece por ciento de las velocidades promedio, un aumento del treinta y tres por ciento en el uso de cinturón de seguridad en rutas nacionales; un incremento de casi el veinte por ciento en la utilización del casco, y una reducción del seis al tres por ciento en tests de alcoholemia positivos. Por otro lado, entre el 1º de enero y 26 de febrero de 2011, se realizaron siete mil doscientos operativos viales en el país, se labraron casi cuarenta y dos mil actas de infracción, se retuvieron once mil ochocientas licencias, se remitieron seis mil cuatrocientos vehículos y se constataron mil trescientas cincuenta alcoholemias positivas. En cuanto a la tarea que la ANSV desarrolló sobre el transporte interjurisdiccional de pasajeros, más allá de los operativos de rutina, se instalaron diez mil setecientos 8 Respecto a los mismos meses del año anterior. cuarenta y cinco GPS9 de control, seguimiento e investigación en las unidades de larga distancia. Entrega de equipamiento de última generación para controles viales En el marco del Pacto Federal en materia de seguridad vial, las leyes nacionales 25.353 y 26.363, y sus reglamentaciones, y los posteriores convenios de cooperación que confieren la articulación entre la ANSV, provincias, municipios y organismos e instituciones preocupados velar por la seguridad vial en todas las rutas nacionales, el Ministerio del Interior hace entrega, regularmente, de equipamiento de última generación destinado al control vial. En este marco, Gendarmería Nacional recibió veinte vehículos totalmente equipados para estos fines, y listos para ser incorporados a su flota de patrullaje, además un camión de control de seguridad vial de última generación que es una unidad logística de traslado de motos y tecnología en seguridad vial. Con anterioridad, los bomberos voluntarios habían recibido treinta y tres móviles con equipos de rescate para ser apostados en los puntos críticos de las rutas argentinas, garantizando la inmediata llegada de los agentes al lugar del siniestro. Control de micros de larga distancia La Agencia Nacional de Seguridad Vial participa de la regulación, implementación y fiscalización del sistema de monitoreo satelital de vehículos afectados al transporte automotor de pasajeros y cargas. Es así que incrementó los controles en todos los micros de larga distancia, en especial en aquellos que partieron de la terminal de Retiro rumbo a los principales destinos turísticos del país. Se intensificaron los controles de alcoholemia, documentación, monitoreo a través de GPS, cantidad de horas trabajadas por los choferes frente a horas de descanso. También se monitorearon las velocidades máximas permitidas con dispositivos GPS colocados en las unidades, que envían cada minuto un informe al centro principal de seguimientos de la ANSV. 9 Glotal Positioning System: Sistema de Posicionamiento Global. Cabe destacar que la Agencia aplicó este tipo de controles a las unidades que partieron de Retiro, durante 2010, con destino a Salta, Puerto Iguazú, Posadas, Mendoza, Córdoba, Rosario, Mar del Plata, Bariloche y Entre Ríos. Se monitoreó un total de treinta y ocho mil trescientos ochenta viajes a través de dispositivos GPS y se efectuaron veintinueve mil cuatrocientos controles de alcoholemia. Creación de Bases Operativas Regionales Las Bases Operativas de la ANSV son espacios desde los que se coordinan, a nivel regional, las acciones diarias de control —velocidad, alcoholemia, utilización de casos y cinturón de seguridad— con el objetivo de salvar vidas. Estratégicamente ubicadas, las bases cuentan con móviles y agentes de prevención y seguridad vial que trabajan con Gendarmería Nacional, las policías provinciales, los bomberos voluntarios y los agentes municipales. A las ya existentes de Hudson (Autopista La Plata – Buenos Aires), Cañuelas (Ruta Nacional 205), Río de las Pavas, Salta (Ruta Nacional 34), Acceso Norte (autopista Panamericana, Km. 25, con ingerencia sobre Pilar, Zárate, Campana y Tigre), se sumó en el mes de diciembre último, la de Monasterio (autovía 2, Km. 144, Dolores), con alcance a los municipios de General Pueyrredón, Mar Chiquita, Miramar, Villa Gesell, Pinamar y Partido de la Costa. Para la realización de sus tareas, las Bases Operativas cuentan con trescientos agentes, doscientos móviles anaranjados, ciento veinte radares móviles y seiscientos alcoholímetros distribuidos en todo el país. Asimismo coordinan las acciones de Gendarmería Nacional, afectando dos mil ochocientos efectivos, quinientas setenta motos y doscientos cincuenta móviles — entre patrulleros y camionetas—, además de las policías provinciales, agentes municipales y bomberos voluntarios. Actividades de capacitación y difusión Las actividades de capacitación y difusión incluyen proyectos, acciones y aplicación de metodologías innovadoras destinadas a mejorar el conocimiento de diversos aspectos relacionados a la seguridad vial, en especial, el respeto por las normas. Las estrategias varían según las diferentes poblaciones objeto: educación vial en las escuelas, talleres específicos para los actores clave vinculados a la seguridad vial, formación de agentes viales, reforma de las escuelas de conductores, entre otros. En el convencimiento de que la capacitación es uno de los pilares fundamentales de la política vial iniciada por el gobierno nacional, la ANSV ha organizado jornadas de capacitación, congresos y conferencias —tanto de carácter nacional como internacional— destinados a abordar esta problemática, además de haber creado, en colaboración con la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), la primera Tecnicatura en Seguridad Vial del país con el fin último de lograr un cambio cultural en la sociedad. Centro de formación en seguridad vial En junio de 2010, el Ministerio del Interior, a través de la ANSV, puso en marcha el Centro de Formación en Políticas y Gestión en Seguridad Vial10. El Centro ofrece programas destinados a fortalecer la capacidad de gestión de aquellos organismos que trabajan para procurar un tránsito seguro en nuestro país. Entre sus objetivos se encuentran: brindar a los responsables de la seguridad vial (funcionarios y técnicos nacionales, provinciales y municipales) un conjunto de herramientas que posibiliten conducir, planificar y gestionar las áreas de seguridad vial con mayor eficiencia. Para cumplir estas metas se pusieron en marcha diferentes programas y acciones que van desde cursos y seminarios de capacitación hasta el otorgamiento de becas para carreras de formación en seguridad vial y la promoción de la educación vial en la escolaridad obligatoria. Por otra parte, el centro de formación ofrece asistencia técnica a todas aquellas personas e instituciones del país que soliciten orientación, derivación y canalización de requerimientos de educación vial, y que trabajan en pos del cumplimiento del objetivo de la ley 26.363. Dentro del área, además, se pueden solicitar “Declaraciones de Interés” de aquellas acciones ya puestas en marcha y que a lo largo de los años hayan resultado fructíferas en la tarea de capacitación y concientización de la población respecto a la necesidad de un cambio cultural en la manera de movilizarnos y transitar por la vía pública. 10 Disposición Nº 64. El Centro de Formación en Seguridad Vial se complementa con la Tecnicatura Superior en Gestión Vial, desarrollada de manera conjunta con la Universidad Tecnológica Nacional, y la incorporación de contenidos curriculares en la escuela pre primaria y primaria. Tecnicatura Superior en Seguridad Vial El Ministerio del Interior junto al de Educación, presentaron, en el mes de agosto de 2010, la primera Tecnicatura Superior en Seguridad Vial del país, que se dicta en las sedes de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN). La tecnicatura tiene como objetivo formar egresados capaces de desempeñarse en un equipo interdisciplinario con responsabilidad directa en las tareas básicas de gestión, control, prevención y asesoramiento en temáticas de seguridad vial. Por ello, se encuentra dirigida a personal municipal y de las fuerzas de seguridad abocados a esta temática. Con esta iniciativa se pretende aportar conocimientos que permitan la profesionalización de todos aquellos que tienen la responsabilidad de aplicar políticas públicas en seguridad vial, con el objetivo de conseguir un cambio cultural que redunde en una mayor seguridad vial en nuestro país. La formación en seguridad vial, a nivel terciario y universitario, se desarrolla en el país desde el año 2000, tanto en instituciones de gestión privada como estatal. La tecnicatura, en su carácter de carrera de pregrado, constituye un primer paso en la formación de agentes vinculados a la problemática vial en nuestro país. Organizada en cinco cuatrimestres, bajo la modalidad presencial, su dictado está a cargo de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) y cuenta con el reconocimiento oficial del Ministerio de Educación de la Nación (Res ME 1342/06). De este modo, los agentes y funcionarios vinculados de manera directa a los municipios (agentes de tránsito, personal de los municipios afectado al área de licencias, control vehicular, juzgado de faltas, personal de la policía afectada al área de seguridad vial, personal de Gendarmería, etc.) contarán con la posibilidad de profesionalizar la actividad que realizan, para lo que existen fondos destinados a becas. En el año 2010 se becaron alumnos en cuatro sedes regionales, que ya se encuentran cursando, de manera presencial, las primeras materias de las diferentes áreas que abarca la carrera, para el año 2011 se proyecto abrir diez sedes regionales, abarcando todas las regiones del país. Su dictado tendrá lugar en las subsedes que la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) Provincia de Buenos Aires, Avellaneda, La Plata, San Nicolás y Cañuelas, Chaco, Resistencia, Neuquén, Tucumán, San Juan, Santa Cruz, Córdoba y Santa Fe, Jornada de capacitación en legislación de tránsito, transporte y seguridad vial El Centro de Formación y Gestión de Políticas de la Seguridad Vial de la ANSV, dictó un curso de capacitación sobre legislación de tránsito, transporte y seguridad vial, dirigido tanto a los agentes de control y fiscalización de la ANSV como a los integrante de las fuerzas de seguridad nacionales que prestan servicios en las distintas jurisdicciones. Con el objetivo de brindar conocimiento se abordaron temas referidos a la problemática del tránsito y la seguridad vial, a la Licencia Nacional de Conducir y al Formulario Naranja, a los controles de tránsito, al transporte interjurisdiccional y, finalmente, al servicio de control de transporte en la vía pública. Conferencia internacional de seguridad vial en el transporte por carreteras Con motivo de desarrollarse por primera vez en la Argentina la Asamblea General de la Unión Internacional de Transporte por Carreteras (IRU), la Agencia Nacional de Seguridad Vial organizó, el pasado mes de abril, en el marco de la asamblea, una conferencia internacional de seguridad vial referida al tema. La Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC) junto a la Agencia Nacional de Seguridad Vial, reunieron a prestigiosos expertos, nacionales e internacionales, que abordaron el tema de la seguridad vial desde experiencias desarrolladas en sus países y plantearon alternativas para lograr un cambio de comportamiento efectivo en los usuarios de carreteras. Participaron de la conferencia, entidades empresarias, instituciones ligadas a la seguridad vial, autoridades internacionales, nacionales, provinciales y municipales, como así también responsables de la infraestructura de nuestras rutas. I Congreso Nacional de Educación y Seguridad Vial – Aprendiendo Seguridad Vial. La Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), junto al Ministerio de Educación de la Nación, el Consejo Federal de Educación (CFE) y el Consejo Federal de Seguridad Vial (CFSV), organizaron el primer encuentro nacional de la temática, con resultados altamente positivos, que determinaron varias de las políticas en Educación Vial que hoy han sido puestas en marcha en nuestro país. Además contó con presencia federal e internacional de los profesionales, instituciones, escuelas y universidades más destacados en la materia. II Congreso Iberoamericano de Seguridad Vial La Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), el Instituto Vial Íbero-Americano (IVIA) y la Asociación Argentina de Carreteras (AAC), organizaron junto con la Dirección General de Tráfico de España (DGT) y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el II Congreso Iberoamericano de Seguridad Vial, que tuvo lugar el pasado mes de octubre en Buenos Aires. Reconocidos especialistas internacionales expusieron la problemática de la seguridad vial, desde un punto de vista técnico, estratégico y político, ante representantes de más de veinte países. A través de los distintos paneles se abordaron, también, temas relacionados con la seguridad vial como: la educación y las campaña de comunicación, la conciencia social y los instrumentos para un cambio cultural, la experiencia de España, el ejercicio del poder de la policía, los sistemas inteligentes de transporte (ITS), la infraestructura y la emergentología, entre otros. Declaración de Buenos Aires El Ministerio del Interior y la Agencia Nacional de Seguridad Vial adhirieron a la declaración del II Congreso Iberoamericano de Seguridad Vial, en la que se destaca el rol que una agencia líder debe tener en materia de seguridad vial. En la declaración se sostiene que “el establecimiento de agencias líderes efectivas se mantiene como una prioridad para muchos países”. Y a su vez destaca lo adecuado de que esta conferencia se haya realizado en la Argentina, “donde la nueva agencia líder —ANSV— ya está generando un impacto positivo y mostrando el camino que hay por delante para esta región y otras regiones en el mundo en las que estamos trabajando”. Primera jornada de concientización y prevención para conductores profesionales Organizada por la Agencia Nacional de Seguridad Vial, la jornada, destinada a conductores profesionales, abordó temas referidos al marco legislativo nacional, al rol de ANSV, a la Licencia Nacional de Conducir y a las investigaciones en materia de prevención de siniestros de tránsito. También se trató la conducción segura, tomando como premisa fundamental el respeto por las normas y por los usuarios de la vía pública. Yahoo! Argentina difundirá campañas de seguridad vial El Ministerio del Interior, a través de la ANSV, acordó con el director ejecutivo de Yahoo! Argentina trabajar conjuntamente en la difusión de campañas de educación vial. Yahoo! exhorta a los conductores a obedecer las reglas de tránsito y a conducir con seguridad, por lo cual la empresa se comprometió a apoyar los mensajes que emita la Agencia Nacional de Seguridad Vial. Simulacro de siniestro vial La Agencia Nacional de Seguridad Vial realizó el primer ensayo integral de un hecho de tránsito en la localidad de San Bernardo, el pasado mes de febrero. Este ejercicio de capacitación y de coordinación interdisciplinaria estuvo destinado a todos los servicios de emergencia que participan en un siniestro vial. Fue el primero de doce que se harán en varias jurisdicciones, a partir de los cuales se elaborará un protocolo de acción que será presentado para su aprobación ante organismos internacionales. El simulacro consistió en un choque en cadena de un micro contra un automóvil — detenido sobre la calzada—, y de dos vehículos que circulaban detrás, en el mismo sentido. Como consecuencia del impacto, uno de los vehículos se incendió y el resto sufrieron daños al colisionar con los primeros. La cantidad de víctimas fue de veinticuatro y presentaron distintas lesiones: quemaduras, fracturas, aplastamiento y otras propias de una colisión. Participaron de esta experiencia, además de la ANSV, la municipalidad del Partido de la Costa, la Dirección Nacional de Protección Civil, la Dirección Provincial de Emergencias Sanitarias de la provincia de Buenos Aires, la policía bonaerense, los bomberos voluntarios, la Cruz Roja Argentina, periodistas y actores locales. Eduvial 2010 La Agencia Nacional de Seguridad Vial realizó la primera Feria Nacional de Educación Vial, denominada Eduvial 2010, en el predio ferial de Palermo. El propósito fue crear un espacio temático interactivo, una manera para llegar a los alumnos, docentes y directivos de todos los niveles educativos de forma amena, creando conciencia de que la seguridad vial debe ser insertada, definitivamente, en la currícula educativa. Más de tres mil estudiantes participaron de juegos, parques infantiles, espacios interactivos, dramatizaciones, proyecciones de cortometrajes, documentales y videos organizados tanto por la ANSV, como por ONGs y empresas. A su vez, los docentes asistieron a charlas y talleres en el auditorio del predio. Agencia Nacional de Seguridad Vial en la ONU Representantes de la ANSV participaron del Foro Mundial para la Armonización de la Reglamentación sobre Vehículos, celebrado el pasado 15 de noviembre en Ginebra. En el foro se trató principalmente la unificación de las exigencias reglamentarias sobre la seguridad de los vehículos para facilitar su comercio mundial. La ANSV fue especialmente invitada por el secretario general del foro, Juan Ramos García, en calidad de oyente. No obstante, “se espera que en el futuro Argentina se convierta en un miembro pleno”, tal como lo menciona la declaración del foro, publicada en el boletín oficial de la ONU. Además, el documento sostiene que deben llevarse adelante “gestiones coordinadas con países de la región como Brasil y Uruguay para contribuir a mejorar la seguridad vehicular en toda la región”. Finalmente, los representantes de la Agencia informaron sobre las acciones que la Argentina ha ido implementando de manera paulatina para mejorar la seguridad vehicular, entre las que se encuentran la instrumentación de medidas de seguridad como: apoya cabezas laterales, airbag, sistema de ABS, apoya cabezas central trasero, cinturón de seguridad sonoro y encendido automático de luces en los vehículos. Acuerdo para instalar dispositivos de seguridad en vehículos El Ministerio del Interior firmó, el 26 de octubre de 2010, un acuerdo con representantes de la Asociación de Fabricantes de Automotores (ADEFA), Cámara de Importadores de Automotores (CIDOA), Cámara de Importadores y Fabricantes de Moto vehículos de Argentina (CIFEMA), Cámara Argentina de la Moto (CAM) y Cámara de Iberoamérica, con el propósito de instrumentar una serie de medidas de seguridad para autos, motos y ciclomotores previstas por la ley. El acuerdo prevé la ampliación de las medidas implementadas el año pasado (los apoya cabezas laterales, los airbags, y el sistema de ABS) con el apoya cabezas central trasero, el cinturón de seguridad sonoro y el encendido de luces automáticas para todos los vehículos. Con respecto a las motos se acordó incorporar el encendido automático de luces, a partir de abril, en el caso que superen los 250 centímetros cúbicos, y, a partir de junio, para los ciclomotores. Fortalecimiento de la gestión local de la seguridad vial Fondo de incentivo para estimular la seguridad vial El Fondo de Incentivo funciona en la órbita de la Agencia Nacional de Seguridad Vial y está destinado a estimular la inversión en seguridad vial de las provincias, municipios y organismos de la sociedad civil. Su objetivo es contribuir a reducir el número de muertes y lesiones ocasionadas en siniestros de tránsito en la red vial de nuestro país mediante el reembolso de montos preestablecidos a las jurisdicciones adheridas a la ley 26.363, en el marco del Plan Nacional de Seguridad Vial. Para ello, cada jurisdicción deberá presentar su plan de seguridad vial a cinco años, de manera tal que los fondos sean destinados al sostenimiento de esta política de Estado. En este marco, durante el último trimestre de 2010, se presentaron ciento treinta y un proyectos locales de seguridad vial. De las intervenciones llevadas a cabo por dichas jurisdicciones, el diecisiete y medio por ciento corresponde a planes locales de seguridad vial, el veintinueve por ciento a señalética horizontal y vertical, reductores de velocidad y pequeñas obras, el diecinueve por ciento a operativos de control de seguridad vial, el treinta y dos por ciento a campañas de concientización en radio y TV, entre otros. En la actualidad, ciento setenta y cinco jurisdicciones se encuentran trabajando con la ANSV en el fortalecimiento del marco institucional y de la gestión para la seguridad vial. Convenio de financiamiento “Uno más Uno” de inversión en seguridad vial El Programa Federal de Fortalecimiento de la Gestión en Seguridad Vial de las Provincias, aprobado por el Concejo Federal, brinda asistencia financiera no retornable a los gobiernos provinciales adheridos a la Ley de Tránsito 24.449 que así lo soliciten. En el marco de este programa se inscribe el Convenio de Financiamiento “Uno más Uno”, cuyo objetivo es estimular el compromiso y la inversión en seguridad vial por parte de los gobiernos provinciales. La operatoria consiste en la presentación de un proyecto y su costo de ejecución para ser evaluados por la ANSV que, de aprobarlo, otorgará una cifra equivalente a la que la provincia invierta en seguridad vial. El programa contó para el año 2010 con treinta millones de pesos que fueron otorgados a aquellas provincias que presentaron sus proyectos, destinando el dinero, principalmente, a la compra de móviles y equipamiento general tanto para los agentes de tránsito como para los controles que realizan. Préstamo del Banco Mundial El Banco Mundial otorgó a la ANSV un préstamo de treinta millones de dólares destinados a reducir el número y la gravedad de los siniestros en el sistema vial de la Argentina. Estos recursos permiten brindar apoyo a las provincias, municipios y ONGs ocupadas en la materia, a la vez que coordinar políticas. En una primera etapa se están realizando tareas de consolidación de la labor realizada por la ANSV en sus primeros años de vida, mejoras específicas en corredores viales que mejoren la seguridad y evaluación de resultados. Por otra parte, existe la posibilidad de que las provincias suscriban un Fondo de Incentivo del Banco Mundial por el cual el dinero invertido en la implementación de prácticas y políticas de seguridad vial será reembolsado por el organismo. Licencia Nacional de Conducir En nuestro país, la jurisdicción en materia de tránsito es local, provincial y municipal11, dado que no fue delegada a la Nación por las provincias. Como consecuencia, existen más de mil ochocientos centros de emisión de licencias, en su gran mayoría, de jurisdicción municipal. Esta situación genera criterios heterogéneos de evaluación así como también diferencias en los costos y gran variedad de modelos de licencias. A su vez, existe una constante fuga de vecinos hacia localidades más “benévolas” en el otorgamiento de licencias. Ante esta realidad, se comenzó a trabajar con los diferentes actores involucrados en la redacción de la ley 26.363 de Seguridad Vial, que crea el Sistema Nacional de Licencias de Conducir. La ANSV es la encargada de establecer las características y procedimientos para otorgar, emitir e imprimir la nueva licencia. Con el lanzamiento de la Licencia Nacional de Conducir12 se inicia un proceso de unificación progresivo que convivirá, en un principio, con el sistema anterior hasta ser 11 12 Artículo 121 de la Constitución Nacional. La Licencia Nacional de Conducir es un documento único que la autoridad competente de cada jurisdicción provincial, municipal y de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, otorga a un ciudadano con el objeto de habilitarlo legalmente a conducir un vehículo, sea con carácter particular o profesional, previo cumplimiento de los requisitos establecidos por la Ley Nacional de Tránsito 24.449. reemplazado en su totalidad. Esta nueva licencia se sustenta en tres pilares fundamentales: la educación, la tecnología y la seguridad. Las licencias actuales serán válidas hasta su vencimiento, momento en el cual serán sustituidas por la nueva licencia. El diseño de un modelo único de licencia además de facilitar los controles interjurisdiccionales, frustra cualquier intento de falsificación ya que cuenta con treinta y cinco medidas de seguridad además desde el software de emisión de licencias se generarán 2 códigos 2D, los cuales se imprimirán en la licencia. Estos códigos contendrán información de seguridad asociada tanto a la licencia como a su titular. Las tecnologías a utilizar son: DataMatrix y PDF 417. El código DataMatrix posibilita la lectura a través de equipos móviles (teléfonos celulares, PDAs) equipados con cámaras de fotos y un software de decodificación e interpretación. El código PDF 417 contendrá la información completa de la licencia tales como DNI, sexo, nacionalidad, fecha de nacimiento, nombre y apellido, domicilio, vigencia de la licencia, clases de vehículos que puede conducir, grupo y factor sanguíneo y puede ser leído mediante dispositivos equipados con scanners de códigos de barra 2D. Las provincias que emitirán la nueva licencia a partir de su adhesión a la Ley Nacional, a la fecha, son: Buenos Aires, Río Negro, Neuquén, Misiones, La Pampa, La Rioja, Jujuy, Formosa, Corrientes, Chaco, Chubut, Mendoza, Catamarca, Salta, San Juan, Santa Cruz, Santiago del Estero, Tucumán, Tierra del Fuego. A las que se suma la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Las provincias de San Luis, Córdoba, Santa Fe y Entre Ríos se encuentran en proceso de adhesión a través de sus legislaturas. Es importante destacar que, para aquellas personas que aspiren a obtener la licencia por primera vez, se incorporó la instancia de capacitación obligatoria además de un examen teórico práctico sobre educación y ética ciudadana, conducción, señalamiento y legislación. Las licencias se otorgarán por un plazo de cinco años, debiendo en cada renovación superar un examen psicofísico. En caso de que el titular registrase antecedentes por infracciones graves o en cantidad superior a la que determina la reglamentación, deberá revalidar los exámenes teórico-prácticos. Para la expedición de la nueva licencia se están creando y homologando Centros de Emisión de Licencia Nacional de Conducir, en todo el país cuyo objetivo es estandarizar los criterios de otorgamiento de las nuevas licencias. El proceso de nivelación y homologación de estos centros es responsabilidad de la ANSV, ya que sólo aquellos que sean certificados por la agencia podrán emitir las licencias. A la fecha existen cincuenta Centros Nacionales de Emisión certificados por la ANSV, que ya emitieron trescientos mil licencias a un promedio de tres mil diarias Sistema Nacional de Antecedentes de Tránsito El Sistema Nacional de Antecedentes de Tránsito (Si.N.A.T.) surge a partir de la implementación de la Licencia Nacional de Conducir. Es el órgano encargado de recopilar, administrar y mantener actualizado el Registro Nacional de Antecedentes de Tránsito con los datos relativos a infractores, prófugos, inhabilitados por la imposición de sanciones firmes y toda aquella información que resulte relevante, así como también de intercambiar datos con los distintos registros distribuidos en el territorio nacional. El Si.N.A.T. posee una base de datos única a nivel nacional que permite a todos los organismos adheridos consultar y cargar información referida a ciudadanos con antecedentes. Estos mismos organismos serán notificados a la hora de dictar sentencia en procedimientos contravencionales y/o judiciales relacionados con la materia. En la órbita del Si.N.A.T. funciona el registro de inhabilitados, con los datos de aquellas personas que no pueden manejar por haber cometido faltas graves. Quienes estén inhabilitados en una jurisdicción ya no podrán trasladarse a otra para obtener una nueva licencia. Se puede acceder al registro a través de Internet y deberá ser consultado con anterioridad a la emisión o renovación de las licencias. Sistema Nacional de Infracciones El acta de infracción se labra mediante un dispositivo portátil parecido a una palm13, de forma rápida y segura. En el mismo momento en que los agentes de prevención y seguridad vial cumplen con esta tarea, la información se transmite on line al Sistema Nacional de Infracciones (SINAI). Esto permite eliminar los tiempos de envío de las actas, así como la posibilidad de que se extravíen. 13 Personal Digital Asisstant (PDA), Ayudante Personal Digital. Por otro lado, los cinemómetros —que miden el exceso de velocidad— se encuentran conectados a estos dispositivos permitiendo que se adjunte la foto de la infracción de velocidad al acta. El acta única de infracción cuenta con importantes medidas de seguridad que garantizan tanto la autenticidad del soporte papel y su inmediata digitalización, como la uniformidad de la información. Un aplicativo web, una PC y conexión a Internet permiten que se pueda acceder a las actas desde cualquier punto del país permitiendo, además, su seguimiento hasta el efectivo juzgamiento, la condena, absolución o pago voluntario. La implementación del SINAI se sustenta en el desarrollo y la puesta en funcionamiento del Sistema de Información de Infracciones y Antecedentes de Tránsito (SINAT). Observatorio vial Los observatorios son instrumentos institucionales de alta eficiencia y ponderación técnica con incidencia en la producción de información. Su principal tarea es generar información oportuna, objetiva y confiable que contribuya a la toma de decisiones. En el caso particular del Observatorio de Seguridad Vial, la información generada está destinada a facilitar el diseño, implementación y evaluación de políticas e intervenciones viales, que redunden en una reducción de la siniestralidad vial en todo el territorio nacional. La ley 26.363 definió la creación del Observatorio de Seguridad Vial en la órbita de la Agencia Nacional de Seguridad Vial14 con el propósito de investigar, evaluar y concluir los actos y hechos vinculados con el uso de la vía pública, la circulación, las actividades vinculadas con el transporte, los vehículos y las personas, las concesiones viales, la estructura y el medioambiente vial, y con el objeto de establecer la situación existente y promover las medidas conducentes a su mejora. También se encarga, a través de las diferentes áreas que la componen, de determinar la situación de seguridad vial en todo el país; investigar las causas de los siniestros viales; determinar alternativas de mayor conveniencia de acuerdo a condiciones y disponibilidad tecnológica con la coordinación de las distintas jurisdicciones; presentar propuestas de mejora a las distintas aéreas de la Agencia Nacional de Seguridad Vial; investigar, analizar y evaluar soluciones, avances y mejoras desarrolladas en otras jurisdicciones o países; establecer vínculos con organismos similares nacionales o 14 Reglamentada por el decreto 1716/2008, anexo VII, art. 18. internacionales para desarrollar trabajo y estrategias conjuntas y confeccionar mapas de riesgo y “puntos negros” en base a información estadística. Formulario Naranja Basándose en experiencias exitosas de países como España, Francia y Reino Unido, y en el trabajo mancomunado de expertos y representantes de cada una de las provincias, la ANSV creó el Formulario Naranja. Esta herramienta permite la recolección de datos estadísticos para el análisis exhaustivo y desagregado de diversas variables, cumpliendo con las exigencias internacionales de unicidad, trazabilidad, control e indicadores de comparación tanto interprovincial como internacional. El formulario, de uso específicamente estadístico, permite la identificación del siniestro por medio de un número único al que se asocian vehículos y personas involucradas, permitiendo procesos de control exhaustivos y el cruce de información con otras bases de datos, como por ejemplo, la de la Superintendencia de Seguros, registros del Ministerio de Salud, registros periciales y/o judiciales. La incorporación del Formulario Naranja por parte de las provincias, requiere de la firma de un convenio específico, que operativiza su uso, y de la capacitación e inducción inicial a los agentes provinciales a cargo de especialistas del Observatorio de Seguridad Vial. Además, el Observatorio ha puesto a disposición de los agentes involucrados y público en general, un aula virtual orientada a reforzar contenidos e iniciar procesos de capacitación continua. Evolución de la siniestralidad vial 2008–201015 Los siguientes datos dan muestra de las variaciones logradas en los principales índices de siniestralidad vial desde la puesta en marcha de la Agencia Nacional de Seguridad Vial hasta la finalización del año 2010. Siniestros viales16 15 Datos provisorios. 16 Observatorio Vial. Agencia Nacional de Seguridad Vial. La variación porcentual de la cantidad de siniestros, entre los años 2008 y 2010, fue de aproximadamente del 12%. Total de Siniestros 240000 220000 212197 200000 197061 180029 180000 173402 160000 140000 120000 2006 2007 2008 2009 2010 2011 La variación porcentual de la cantidad de siniestros cada cien mil vehículos, entre los años 2008 y 2010, fue de aproximadamente 19,34%. Siniestros Viales c/ 100.000 vehiculos registrados 1800 1700 1600 1500 1400 1300 1200 1100 1000 2006 1711,28 1517,89 1333,65 1224,32 2007 2008 2009 2010 2011 La variación porcentual de la cantidad de siniestros cada cien mil habitantes, entre los años 2008 y 2010, fue de aproximadamente 13,69%: Siniestros viales c/ 100.000 hab. 550 533,88 495,80 500 448,56 450 427,95 400 350 300 250 2006 2007 2008 2009 2010 2011 Fallecidos en el lugar del hecho La variación porcentual de la cantidad de fallecidos en el lugar del hecho, entre los años 2008 y 2010, fue de aproximadamente el 14,03%. Fallecidos en el lugar del hecho 4700 4654 4600 4500 4400 4300 4234 4200 4175 4100 4000 4001 3900 2006 2007 2008 2009 2010 2011 La variación porcentual de la cantidad de fallecidos en el lugar del hecho cada cien mil vehículos, entre los años 2008 y 2010, fue de aproximadamente el 15,67%. Fallecidos en el lugar del hecho c/ 100.000 hab. 12.5 11,7 11.5 10.5 10,54 10,5 9,87 9.5 8.5 7.5 6.5 2006 2007 2008 2009 2010 2011 La variación porcentual de la cantidad de fallecidos en el lugar del hecho cada cien mil vehículos, entre los años 2008 y 2010, fue de aproximadamente el 21,20 %, lo cual proyecta alrededor de novecientas personas menos fallecidas. Fallecidos en el lugar del hecho c/ 100.000 vehiculos registrados 40 35,85 33,67 35 31,37 30 28,25 25 20 15 10 2006 2007 2008 2009 2010 2011 Antecedente provincial En el año 2007, durante la gestión en el Ministerio de Gobierno, se decretó la emergencia vial en la provincia de Buenos Aires.17 Se originaron, entonces, acciones que requirieron de la labor coordinada con otros organismos del gobierno provincial con competencia en la materia. Esto se sumó a la política de modernización integral que se venía desarrollando en el área, a través del ministerio, cuyo énfasis estaba puesto en una serie de medidas proactivas para recuperar la presencia del Registro Único de Infractores de Tránsito (RUIT), en el marco de los nuevos lineamientos de seguridad vial, centrados en la prevención, control y sanción de faltas. Esto permitió definir tres líneas de acción: 17 DNU Nº 40/07. –Modernización e informatización del RUIT –Sistema Centralizado de Licencias de Conducir –Nuevo Sistema de Control de Velocidad Modernización del Registro Único de Infractores de Tránsito El RUIT es el organismo, a nivel provincial, responsable de crear la base de antecedentes de infracciones de tránsito de toda la provincia y de regular la emisión de licencias de conducir. Su finalidad es mantener actualizada la base de datos de actas de infracción y sentencias firmes, en el marco de la legislación provincial de tránsito. Entre las medidas de modernización adoptadas, se cuentan la apertura de una nueva sede de atención, la informatización de los principales procesos y la adquisición de equipos de última generación para prestar un servicio ágil y certero. El proceso de digitalización llevado a cabo entonces, permitió al RUIT informatizar el total de las sentencias firmes e inhabilitaciones de tránsito efectuadas por las autoridades correspondientes. Además de esta tarea que permitió conocer la realidad jurídica de los conductores, el RUIT desarrolló aplicativos de software propios para diferentes tareas: articulación de información con municipios y programas para la impresión centralizada de la licencia de conducir, entre otros. Sistema centralizado de licencias de conducir El RUIT entregaba los interiores de las licencias de conducir en blanco para ser completadas y emitidas por los distintos municipios de la provincia de Buenos Aires. Esto favorecía a la falsificación de las licencias otorgadas en el territorio provincial. Se crea, entonces, el Sistema de Emisión Centralizada de Licencias de Conducir, como parte del Plan de Seguridad Vial diseñado durante la gestión en la cartera provincial. Este sistema habilita al RUIT a unificar el formato de las licencia y a imprimirlas de manera centralizada, incorporando medidas de seguridad documental a fin de evitar adulteraciones o falsificaciones. El nuevo sistema, que fue implementado paulatinamente, permite la toma del trámite on line en los municipios, que remiten la información al RUIT para la confección de la nueva licencia. En ese entonces, una de las medidas esenciales que incorpora el nuevo sistema de emisión de licencias es la de reconducir la consulta del Registro Único de Infractores de Tránsito, previamente a la elaboración del documento. Esta certificación es otorgada por el RUIT conjuntamente con el Registro Nacional de Antecedentes de Tránsito (RENAT), gracias a la integración de las direcciones de tránsito de la provincia en un mismo sistema. Nuevo sistema de control de velocidad Con el dictado de la mencionada emergencia vial en la provincia de Buenos Aires, se establecieron nuevos métodos de control, entre ellos, la instauración de equipamiento para la medición de velocidad en los distintos caminos, rutas, autopistas y semiautopistas del territorio provincial. El Ministerio de Gobierno adquirió, entonces, equipos fijos y móviles, destinados a la policía de seguridad vial e instaló cinemómetros fijos en los distintos tipos de vías de la provincia de Buenos Aires.