6CFE01-121 2/13 Productividad en masas mixtas vs. masas puras: influencia de la espesura en la interacción entre especies RIO, M.1, 2, CONDÉS, S.3 y STERBA, H.4 1 Dep. Selvicultura y Gestión de Sistemas Forestales INIA-CIFOR, Ctra. A Coruña, km 7.5, 28040 Madrid, Spain Sustainable Forest Management Research Institute UVa-INIA 3 Dept. Economía y Gestión Forestal. Escuela Técnica Superior de Ingenieros de Montes. Universidad Politécnica de Madrid. Ciudad Universitaria s/n. 28040 Madrid. 4 Dept. of Forest and Soil Sciences, BOKU University of Natural Resources and Life Sciences, Peter Jordanstrasse 82, Vienna, Austria 2 Resumen La gestión forestal de masas mixtas cobra un creciente interés debido a los potenciales beneficios que presentan frente a las masas monoespecíficas, como mayor diversidad, resiliencia, etc. La interacción entre especies es frecuentemente de complementariedad y/o facilitación, lo que conlleva un aumento de la productividad en masas mixtas. Sin embargo, esta relación depende de la composición específica, la estación, edad y densidad de la masa. A partir de datos del Inventario Forestal Nacional se han comparado los crecimientos en volumen de Pinus sylvestris, Fagus sylvatica y Quercus robur / petraea en masas puras y mixtas y bajo distintas densidades. Los resultados mostraron que la eficiencia de crecimiento del pino y del haya aumenta con la presencia de las otras especies, mientras que la del roble no se ve afectada por la presencia de pino y disminuye con la proporción de haya. El efecto de la mezcla varía con la densidad, pero con distinto patrón entre especies. Estos resultados implican que la diversificación de masas monoespecíficas con vocación productiva, además de generar beneficios ecológicos, puede conllevar una mayor producción. Palabras clave Producción, mezcla de especies, eficiencia del crecimiento, competencia, facilitación. 1. Introducción La presencia de complementariedad y/o facilitación entre especies que crecen en una masa mixta puede conllevar un aumento de su productividad, aunque este efecto de la mezcla en la producción depende de la edad, calidad de estación o la densidad de la masa (AMOROSO & TURNBLOM, 2006; PRETZSCH et al., 2010; CAVARD et al., 2011). La distribución espacial y la densidad de la masa son factores críticos en las relaciones interespecíficas, ya que la competencia es menos importante o incluso puede desaparecer cuando las densidades son defectivas (AMOROSO & TURNBLOM, 2006). Hoy en día es difícil generalizar sobre la relación entre productividad y mezcla de especies en los sistemas forestales (SCHERER-LORENZEN et al., 2005), por lo que son necesarios más estudios que consideren, además de la composición específica, distintos factores como la edad, estación o densidad de la masa. Uno de los problemas para abordar este tipo de estudios es la dificultad asociada a la obtención de datos experimentales de masas puras y mixtas con similares condiciones de crecimiento. Una alternativa son los ensayos de reemplazo en los que se comparan distintas 3/13 proporciones de mezcla (KELTY & CAMERON, 1995), llevados a cabo frecuentemente con especies de crecimiento rápido que permiten obtener resultados en un plazo de tiempo razonable. Otros estudios se basan en comparaciones de parcelas permanentes en masas puras y mixtas (PRETZSCH et al., 2010), aunque este tipo de dispositivos sólo están disponibles para un reducido número de composiciones específicas. En ausencia de este tipo de datos, una opción son los inventarios forestales a gran escala y el uso de modelos de crecimiento. Existen distintas aproximaciones de modelización para estudiar las relaciones de competencia entre especies, modelos mecanicistas o empíricos, y a distintas escalas, árbol, clase de tamaño o de rodal (PORTÉ & BARTELINK, 2002). RÍO & STERBA (2009) utilizaron datos del Inventario Forestal Nacional de España (IFN) y un modelo empírico de masa basado en el concepto de área basimétrica máxima (STERBA, 1987) para comparar el crecimiento en volumen en masas mixtas y puras de Pinus sylvestris y Quercus pyrenaica. La utilización del área basimétrica máxima por especie permite establecer un índice de densidad comparable para distintas composiciones específicas, así como definir la proporción de especies teniendo en cuenta la potencialidad de crecimiento de cada especie (STERBA, 1998). En este trabajo se ha generalizado esta aproximación de RÍO & STERBA (2009) con el fin de estudiar el efecto de la mezcla en el crecimiento en volumen en masas formadas por más de dos especies. 2. Objetivos La hipótesis principal de este trabajo es que la densidad de la masa modifica el efecto de la mezcla de especies en la productividad, siendo mayor el efecto en densidades elevadas. Los objetivos concretos son: a) evaluar si la eficiencia de crecimiento en volumen de Pinus sylvestris L., Quercus robur L. y Q. petreae Liebl (Matts.) y Fagus sylvatica L. se ve influenciada por la presencia de las otras dos respectivas especies; b) determinar si la densidad modifica las relaciones de competencia interespecífica; c) identificar si existe una mayor producción en masas mixtas que en la respectivas masas puras. 3. Metodología 3.1. Área de estudio El área de estudio se centra en la provincia de Navarra (UTM huso 30N, X 545000– 678000; Y 4701000–4794000). En esta región el haya es actualmente la especie más importante con una extensión de 132000 hectáreas. El pino silvestre ha reemplazado con frecuencia superficies cubiertas anteriormente por haya o roble, y en la actualidad ocupa 59000 hectáreas, por lo que resulta ser la segunda especie más importante, seguida de los robles atlánticos (Quercus robur y Q. petraea) que cubren una extensión de 21000 hectáreas (NAVARRA, 2000). Para estudiar la influencia de la composición y la espesura en el incremento de volumen se han utilizado 915 parcelas del Inventario Forestal Nacional (INF), incluyendo todas las parcelas que están situadas en masas puras o mixtas de las especies Pinus sylvestris, Quercus robur / petraea y Fagus sylvatica, en la provincia de Navarra (Tabla 1). Debido a la hibridación y las dificultades para diferenciar las dos especies de roble, en este estudio se han considerado conjuntamente. Se han empleado datos del 3er y 4º IFN realizados en los años 1999 y 2008 respectivamente. En la Tabla 2 se presentan los valores de las principales variables de masa al principio del periodo de crecimiento estudiado. 4/13 Tabla 1. Número de parcelas en masas puras y mixtas P. sylvestris Q. robur/petraea F. sylvatica Masas puras 195 28 523 Masas mixtas 85 100 160 P. sylvestris 9 69 Mezcla de especies Q. F. robur/petraea sylvatica 9 69 84 84 Ambas especies 7 7 7 Total 280 128 683 Tabla 2. Principales variables de masa al principio del periodo de crecimiento, para las parcelas utilizadas en los modelos de eficiencia del crecimiento. Especies nº parcelas Pura 195 Pinus sylvestris Mixta 85 Pura 28 Q. robur / petraea Mixta 100 Pura 523 Fagus sylvatica Mixta 160 G m2/ha 22.08 Hdom m 13.01 dg cm 21.68 m3ha-1año-1 Media N pies/ha 621.03 desv típica 436.15 15.03 4.73 6.08 2.61 Media 424.98 20.30 17.67 28.78 3.52 desv típica 448.38 17.12 5.17 9.54 2.60 Media 238.66 19.51 16.31 47.60 1.75 desv típica 282.64 10.66 4.93 21.59 1.18 Media 105.19 5.67 17.08 40.10 0.71 desv típica 295.84 6.81 6.58 18.95 1.14 Media 475.58 26.49 21.62 33.24 3.54 desv típica 419.47 10.78 5.11 14.28 1.83 Media 406.41 16.16 17.54 28.21 2.53 desv típica 452.03 11.95 5.62 16.55 2.09 IV 4.01 Para calcular el área basimétrica máxima según la regla de Competencia por Densidad (ver la sección siguiente) se ha utilizado un mayor número de parcelas, incluyendo parcelas del 3er IFN localizadas en masas puras de las especies estudiadas en provincias adyacentes. En total se han usado 1087 parcelas de las cuales 221 son de Pinus sylvestris, 40 de Quercus robur y petraea y 826 de Fagus sylvatica (Tabla 3). Tabla 3. Principales variables de masa al principio del periodo de crecimiento, para las parcelas utilizadas en el ajuste de la regla de Competencia por Densidad. Especie Nº parcelas Pinus sylvestris 221 Q. robur / petraea Fagus sylvatica 40 826 N pies/ha G m2/ha Hdom m dg cm Media 803.3 28.69 13.44 22.17 desv. típica 513.8 16.56 4.74 6.94 Media 247.3 19.76 16.75 41.83 desv. típica 269.5 10.68 4.82 18.44 Media 533.3 27.15 21.26 32.46 desv. típica 488.7 11.34 5.37 14.96 5/13 3.2. Proporción de especie en función del área potencial ocupada La proporción de cada especie en las masas mixtas se ha calculado según la proporción de especie en función del área potencial ocupada propuesta por von Laer (PRODAN, 1959) como: donde para cada especie Pi es la proporción por área potencial ocupada, Gi es el área basimétrica por hectárea observada y Gmaxi es el área basimétrica máxima o potencial que dicha especie podría alcanzar en una masa pura en esa estación. Así el numerador representa la parte del área de una masa pura en espesura máxima que la especie i necesita para tener el área basimétrica observada (Gi), y el denominador es la suma de este área para todas las especies conjuntamente (STERBA, 1998). Para el cálculo de esta proporción es necesario determinar el área basimétrica potencial para cada una de las tres especies estudiadas. La metodología que se utiliza ha sido desarrollada por STERBA (1987) y descrita detalladamente por RÍO & STERBA (2009). Dicha metodología está basada en la regla de Competencia por Densidad definida por KIRA et al. (1953) y modificada posteriormente por GOULDING (1972) que relaciona el diámetro medio cuadrático dg con la densidad N y la altura dominante Hdom a través de la siguiente ecuación: STERBA (1987) muestra que calculando el área basimétrica con esta relación e igualando a cero la derivada primera de la misma dG/dN se obtiene el área basimétrica máxima: donde a0, a1, b0 y b1 son parámetros que pueden estimarse a partir de datos de parcelas de muestreo mediante una regresión no lineal entre dg, Hdom y N. Sin embargo, STERBA (1987) desarrolló un método que permite hacer compatible la regla de Competencia por Densidad con la recta de densidad máxima definida por REINEKE (1933). Así, conocida la relación de Reineke (recta de Reineke en escala doblemente logarítmica): donde los parámetros C y E dependerán de la especie, la regla de Competencia por Densidad (Eq. 2) se puede escribir en función de dichos parámetros con la expresión siguiente (RÍO & STERBA, 2009): Si los parámetros C y E son conocidos para una determinada especie (recta de máxima densidad), entonces los únicos dos parámetros que deben estimarse a partir de los datos son a1 y b0, y el área basimétrica máxima se puede calcular como: Para implementar esta metodología se han usado las parcelas de masas puras (Tabla 3). En primer lugar se ha obtenido, para cada una de las tres especies estudiadas, la recta de Reineke. Los valores del coeficiente E (Eq. 4) de dicha recta se han obtenido de estudios previos. Así, para el Pinus sylvestris se ha usado el valor EPino=-1.75 obtenido por RÍO et al. 6/13 (2001), para Fagus sylvatica se ha usado el valor propuesto por PRETZSCH & BIBER (2005) EHaya=-1.789, y para los robles el valor general propuesto por REINEKE (1933) ERoble=1.605. Una vez fijado el valor del coeficiente E se ha obtenido para cada especie el valor del parámetro C como la media de los 10 mayores valores de dicho parámetro en las parcelas correspondientes a masas puras de dicha especie. Conocidos C y E se realiza una regresión no lineal (R, 2011) que permite ajustar la regla de Competencia por Densidad, dependiendo únicamente de dos parámetros (Eq. 5) para cada una de las tres especies estudiadas. Se obtienen así los parámetros b0 y a1. Finalmente, es posible calcular el área basimétrica máxima (Eq. 6) y la proporción en función del área potencial ocupada (Eq. 1) para una altura dominante determinada. 3.3. Eficiencia del crecimiento Una vez calculada la proporción en función del área potencial ocupada (Pi) para cada especie en las masas mixtas, se calcula la eficiencia de crecimiento IVpi de dicha especie i como el cociente entre el incremento de volumen por hectárea IVi y la proporción de área basimétrica de dicha especie: IVpi= IVi/Pi. De esta forma se pueden comparar, para una especie i, los crecimientos en masas puras y mixtas. Bajo la hipótesis de que la eficiencia decrecimiento (o crecimiento por superficie disponible para una especie) es una expresión de la calidad de estación, la edad y la espesura, es posible representarla en función de la altura dominante, el diámetro medio cuadrático y una medida de la espesura. Puesto que en el IFN no se conoce la edad, se usan la altura dominante de Assmann (1970) y el diámetro medio cuadrático como variables sustitutas. Así, si se tiene en cuenta que el diámetro medio cuadrático depende de la edad, la espesura y la calidad de estación, esta variable puede ser representativa de la edad para una altura dominante y una espesura determinadas. En este mismo sentido la altura dominante para un diámetro cuadrático determinado, expresará la calidad de estación. La espesura se expresa mediante la variable A, una medida de la densidad relativa basada en los mismos conceptos que la proporción de especies utilizada. A se define como: donde Gi es el area basimétrica de la especie i y Gmaxi el área basimétrica potencial de dicha especie. El cociente para cada una de las especies (Gi/Gmaxi) representa la parte del área de una masa pura en espesura completa que la especie i necesita para tener el área basimétrica observada Gi. Además hay que determinar si la eficiencia del crecimiento de una especie depende de la mezcla de las otras dos. Por lo tanto, el modelo de eficiencia de crecimiento ajustado para cada especie es el siguiente: donde IVp es el incremento de volumen por hectárea de una especie en función de su área disponible, es decir su eficiencia de crecimiento; Hdom es la altura dominante, dg el diámetro medio cuadrático, A el grado de espesura y Pi la proporción de la especie i en función del área potencial ocupada. Hay que hacer notar que las variables independientes en esta ecuación Hdom, dg y A se refieren a toda la parcela, es decir considerando conjuntamente todas las especies. Además se ha probado si existe interacción entre la proporción de especies y la espesura de la masa, incluyendo el producto de estas variables en el modelo anterior. 7/13 4. Resultados 4.1. Área basimétrica máxima en masas puras Las rectas de Reineke, obtenidas a partir de las parcelas con máxima densidad en las masas puras de cada especie en el IFN son las siguientes: Pinus sylvestris: Quercus robur y petraea: Fagus sylvatica: donde el diámetro medio cuadrático dg está en cm y la densidad N en pies por hectárea. Conocida la recta de Reineke, la regla de Competencia por Densidad depende solamente de dos parámetros los cuales se han obtenido ajustando la ecuación 5 (Tabla 4). Tabla 4. Parámetros estimados (error estándar entre paréntesis) para la regla de Competencia por Densidad. n es el número de datos y R2 el coeficiente de determinación. Species Pinus sylvestris Quercus robur and petraea Fagus sylvatica n 221 40 826 R2 0.7720 0.7393 0.6139 b0 0.3276 (0.0346) 0.2837 (0.1463) 0.1715 (0.0282) a1 0.6464 (0.0303) 0.6117 (0.1092) 0.5491 ( 0.0419) Usando la recta de Reineke junto a los parámetros que se acaban de calcular, el área basimétrica máxima de cada especie (Eq. 6) se puede obtener como: Pinus sylvestris: Quercus robur y petraea: Fagus sylvatica: dónde G es el área basimétrica en m2/ha y Hdom la altura dominante en m. 4.2. Eficiencia del crecimiento y crecimiento total en masas puras y mixtas Aunque el modelo inicial que se ha propuesto ha sido el mismo para todas las especies, se ha modificado en cada caso de forma que solo se han incluido los coeficientes y las interacciones estadísticamente significativos (tablas 5 y 6). Los modelos finales son los que se presentan a continuación: Pinus sylvestris: Quercus robur y petraea: 8/13 Fagus sylvatica: En estas ecuaciones IVp es la eficiencia del crecimiento en volumen de la especie en m /(ha·año), Hdom es la altura dominante de la parcela en m, dg el diámetro medio cuadrático en cm, A la espesura, y PPs, PQr y PFs las proporciones en función del área potencial ocupada de pino, roble y haya respectivamente. 3 Tabla 5. Coeficientes estimados para los modelos de eficiencia del crecimiento de las tres especies (error estándar entre paréntesis). Especie Pinus sylvestris Q. robur / petraea Fagus sylvatica a0 0.792 (0.383) 0.089 (0.774) 1.714 (0.295) a1 0.776 (0.141) 1.363 (0.294) 0.678 (0.111) a2 -0.345 (0.114) -0.821 (0.168) -0.667 (0.066) a3 0.455 (0.057) 0.666 (0.123) 0.521 (0.052) b1 b2 1.092 (0.247) 1.171 (0.155) 1.124 (0.284) b3 -0.543 (0.150) -0.836 (0.367) Tabla 6. Número de datos n, error medio absoluto AME, error cuadrático medio MSE y coeficiente de determinación R2 para los modelos de eficiencia del crecimiento de las tres especies. Especie n AME MSE adjust. R2 (%) Pinus sylvestris 279 0.3376 0.4676 65.46 Quercus robur / petraea 127 0.5950 0.7567 35.54 Fagus sylvatica 682 0.4085 0.5671 40.71 Se puede observar que la relación de la eficiencia del crecimiento en volumen con las variables dependientes es similar para todas las especies: un efecto positivo de la altura dominante y negativo del diámetro medio cuadrático. Esto puede ser interpretado como un incremento en el crecimiento cuando aumenta la calidad de estación (Hdom) y un descenso cuando aumenta la edad (dg). En general la eficiencia del crecimiento aumenta con la espesura A, aunque existen interacciones significativas entre esta variable y la proporción de especies, lo que implica que el efecto de la mezcla en la eficiencia del crecimiento depende tanto de la proporción de especies como de la espesura. Así, la eficiencia del crecimiento del pino aumenta cuando aumentan las proporciones de roble y de haya, y la influencia del haya en la mezcla es menos significativa cuando aumenta la espesura (Fig. 1.a). Para el caso del roble (Fig. 1.b) la eficiencia del crecimiento no depende de la proporción de pino, pero disminuye cuando aumenta la proporción de haya, con un efecto de la espesura marginal. Por último, la eficiencia de crecimiento del haya (Fig. 1.c) aumenta cuando la proporción de pino o de roble aumentan. En este caso el efecto de la espesura en la mezcla es diferente que en el pino: cuánto mayor es la espesura más pronunciado es el efecto positivo que ejercen las mezclas de roble y pino en el crecimiento del haya. Por último, es importante analizar el modo en el que el crecimiento conjunto de la masa está influido por las mezclas. Con pocas excepciones, el crecimiento total de las masas mixtas toma valores intermedios entre los valores de las masas puras de haya, roble y pino. Sin embargo, hay algunas proporciones en las que se observan crecimientos mayores incluso que las masas puras más productivas, es decir las de pino. La figura 2 muestra el efecto de la 9/13 mezcla en el crecimiento del volumen para una masa de 19 metros de altura dominante y dos grados distintos de espesura. Se puede observar que existe un amplio rango de proporciones de roble y haya en las cuales la producción es mayor que en la correspondiente masa pura de pino (especie más productiva). a) A=0.5 a) A=0.7 b) A=0.5 b) A=0.7 c) A=0.5 c) A=0.7 Figura 1. Eficiencia del crecimiento IVp en función de la espesura A y de la proporción de otras especies para masas con altura dominante 19 m y diámetro medio cuadrático de 30 cm. 10/13 8.00 8.00 0.0 % Oak 7.00 0.0 % Oak 7.00 6.00 0.2 0.3 5.00 0.4 0.5 4.00 0.6 3.00 0.7 0.8 2.00 0.1 IV all species m3/ha·year IV all species m3/ha·year 0.1 6.00 0.2 0.3 5.00 0.4 0.5 4.00 0.6 3.00 0.7 0.8 2.00 0.9 1.00 Pure Pine 0.9 1.00 Pure Pine Pure Oak 0.00 0.0 0.1 0.2 0.3 0.4 0.5 0.6 % Beech 0.7 a) A=0.5 0.8 0.9 1.0 PureBeech Pure Oak 0.00 0.0 0.1 0.2 0.3 0.4 0.5 0.6 % Beech 0.7 0.8 0.9 1.0 PureBeech b) A=0.7 Figura 2. Crecimiento total de las tres especies en función de la espesura A y de las mezclas de roble y haya. La proporción de pino será siempre 1 menos la suma de las proporciones de las otras dos especies. Hdom=19 m y dg=30 cm. 5. Discusión En este trabajo se ha encontrado que en las masas mixtas analizadas el efecto de la mezcla sobre la productividad depende de la composición específica. Para la mezcla de pino silvestre y haya se obtuvo un efecto significativo en la eficiencia de crecimiento en volumen de las dos especies, mientras que para mezclas de robles con pino o haya el efecto fue nulo o negativo para los robles. La mayor eficiencia de crecimiento para el pino silvestre cuando se mezcla con frondosas se podría explicar por la menor competencia interespecífica debida a las diferentes características de las especies estudiadas, tales como arquitectura de copa, tolerancia a la sombra, tipo de sistema radical, etc. (RUIZ DE LA TORRE y CEBALLOS, 1979). Además de este posible efecto por complementariedad de nichos, es probable que exista también facilitación asociada con el desfronde de las frondosas. La interacción encontrada entre el pino y roble coincide con los resultados presentados por PEROT & PICARD (2012), que identificaron a partir de un modelo de crecimiento una mayor competencia intraespecífica que interespecífica en masas mixtas de Quercus petraea - Pinus sylvestris en Francia y, en consecuencia una mayor producción en masas mixtas que puras. El efecto negativo en el crecimiento del roble cuando se mezcla con el haya, es similar al encontrado por HEIN & DHOTE (2006). AUSSENAC & DUCREY (1977) encontraron que la baja transmitancia de luz de los hayedos dificulta el desarrollo de roble. En un estudio relativo a la competencia radical en masas mixtas de haya y roble se constatóque el haya muestra una mayor capacidad competitiva que el roble (LEUSCHNER et al., 2001). Con respecto al haya, el efecto positivo en el crecimiento en volumen cuando se mezcla tanto con pino como con robles, es debido probablemente a la elevada competencia intraespecífica observada para esta especie (PRETZSCH Y BIBER, 2005). En masas mixtas es frecuente que exista una reducción de la competencia o complementariedad cuando la competencia interespecífica por un recurso limitante es menor que la intraespecífica (KELTY & CAMERON, 1995). Dado que los recursos limitantes pueden cambiar dependiendo de la estación, el desarrollo de la masa, la densidad etc., los diferentes tipos de interacciones entre especies también pueden variar con estos factores. Nuestros resultados indican que la densidad de la masa es un factor clave en las interacciones entre especies. Para roble y haya, el efecto de la mezcla (negativo y positivo respectivamente) fue mayor al aumentar la densidad de la masa, lo que sugiere una interacción más fuerte entre 11/13 las especies cuando los recursos disponibles son menos abundantes para cada árbol debido a la alta densidad. Esta tendencia creciente en la interacción entre especies a medida que aumenta la densidad del rodal ha sido constatada en ensayos en los que la espesura es un factor controlado (AMOROSO & TURNBLOM, 2006). Por el contrario, en el caso del pino silvestre el efecto positivo de la mezcla con haya disminuye a medida que aumenta la densidad. Este patrón puede explicarse por cambios en los factores limitantes del crecimiento según aumenta la densidad. A menores densidades, el desfronde del haya puede facilitar el crecimiento de pino a través de una mejora en el ciclo de nutrientes y en el almacenamiento de agua, ya que hay suficiente espacio disponible. Sin embargo, a mayores densidades este efecto de facilitación puede ser menos aparente debido a una mayor competencia aérea y radical por los recursos limitantes. Cuando Pinus sylvestris y Fagus sylvatica crecen en masas mixtas, ambas especies presentan mayores eficiencias de crecimiento que en sus respectivas masas puras (Fig. 2). Esta mayor producción para esta mezcla de especies ya fue descrita por ASSMANN (1970) en un resumen sobre los resultados obtenidos en diferentes experimentos de mezclas de pino silvestre-haya en centro Europa. Del mismo modo, BROWN (1992) encontró un mayor crecimiento en volumen por hectárea en masas mixtas de Pinus sylvestris y Quercus petraea que en masas puras. Para la mezcla de haya y roble, el crecimiento del haya se ve beneficiado de la mezcla con el roble, mientras que para el roble el efecto es negativo. En este caso el efecto positivo de la mezcla es mayor con densidades elevadas, llegando a superar el crecimiento en el volumen total de los hayedos puros (Fig. 2). El hecho de que para determinadas proporciones de especies se obtiene un mayor crecimiento en volumen que en las correspondientes masas puras tiene importantes implicaciones para la gestión forestal. En el área de estudio, esto es particularmente interesante ya que los pinares puros de pino silvestre, tradicionalmente favorecidos, se pueden diversificar sin una pérdida importante en la producción de madera de esta especie, con los consiguiente beneficios de mayor diversidad, mayor resiliencia, etc. (GRIESS & KNOKE, 2011). La metodología empleada en este trabajo permite estudiar a partir de datos de inventarios forestales el efecto de la mezcla de especies en las eficiencias de crecimiento para masas de más de dos especies, así como determinar las proporciones que resultan en un mayor crecimiento en volumen (Fig. 2). La principal limitación de los datos utilizados es la falta de información sobre la calidad de estación y, por lo tanto, los resultados podrían estar influenciados por factores no considerados (VILÀ et al., 2005). Sin embargo, la inclusión de la altura dominante y diámetro medio cuadrático como sustitutos de la edad y de la calidad de estación evitan en cierta medida esta limitación. Los resultados presentados en este trabajo se avalan no solo por el gran número de parcelas de haya-pino y haya-roble, sino también por los estadísticos de ajuste de los modelos, su interpretación biológica y su coincidencia con otros estudios. Sin embargo, la capacidad competitiva de las especies estudiadas es probable que varíe bajo diferentes condiciones climáticas (MEIER et al., 2011). Por lo tanto, las relaciones entre especies identificadas pueden diferir en otras áreas o bajo otras condiciones ambientales. 6. Conclusiones La eficiencia del crecimiento de las especies estudiadas varía entre las masas puras y mixtas dependiendo de la composición específica y de la espesura del rodal. La espesura del rodal se muestra como un factor clave en la interacción entre especies, no siendo siempre mayor la interacción entre especies en espesuras elevadas. 12/13 . 7. Agradecimientos Queremos agradecer a Roberto Vallejo, jefe del Inventario Nacional Forestal español, por todos los datos facilitados. 8. Bibliografía AMOROSO, M.M.; TURNBLOM, E.C.; 2006. Comparing productivity of pure and mixed Douglas-fir and western hemlock plantations in the Pacific Northwest. Can. J. For. Res. 36, 1484-1496. ASSMANN, E.; 1970. The principles of yield study. Studies in the organic production, structure, increment and yield of forest stands. Oxford Pergamon Press. 506 pp. Oxford. AUSSENAC, G.; DUCREY, M.; 1977. 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