La influencia del Islam en la vivienda turca:

La influencia del Islam en la
vivienda turca:
Sara Marrodán Castro
Ensayo__ Historia III
Ensayo Historia III
Sara Marrodán Castro
La influencia del Islam en la vivienda turca:
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‫ءﺍﻡﺱﻝﺍ ﻥﻡ ﻡﺝﺭﺕﻡﻝﺍ ﻥﻭﻙﻱﻝ ﻡﺍﺭﺕﺡﺍ ﻡﺩﻉ ﻱﻑ ﺕﻥﻙ ﺍﻡﺩﻥﻉ ﻙﻝ‬. ‫ﻥﺃ ﺏﺝﻱ‬
‫ ءﻱﺵ ﻝﻙ ﻥﻡ ﺝﺭﺥﻱ ﻥﺃ ﻉﻕﻭﺕﻥ‬، ‫ﺓﺏﻭﻝﻁﻡﻝﺍ ﺓﻕﺍﻱﻝﻝﺍﻭ‬
“El interior de tu casa es un santuario; los que lo violen llamándote
cuando estás en él faltan al respeto que deben al intérprete del Cielo.
Deben esperar a que salgas de allí; la decencia lo exige” Alá
Es esta la norma que aparece en los versículos 4 y 5 del capítulo XLIX del Corán y que rige la
vida privada de todo musulmán. El cumplimiento de los deberes religiosos conocidos como
“Los pilares de la religión”, que son: el doble testimonio de la fe, la oración, el ayuno, la
limosna, y la peregrinación, ha influido considerablemente sobre el diseño y el funcionamiento
de las ciudades del Islam. En este ensayo se pretende analizar los distintos puntos en los que
influye la religión en la ciudad y la vivienda turca. No se trata de la casa de la civilización
clásica, la casa romana, occidentalizada... sino que es una casa que no tiene fachadas, no es
visible y no forma parte de calles y plazas organizadas mediante un plan urbanístico.
La configuración de la ciudad musulmana: Se distingue
como pobre estructural y funcionalmente con respecto a las
complejas organizaciones descubiertas ya desde el mundo
helenístico y romano... Se aprecia la falta de las ágoras, los
foros, los edificios de gobierno y las salas de asambleas
públicas … No existe la vida pública, no existen ciudadanos, ni
súbditos, existen creyentes. La ciudad islámica no es pública,
carece de equipamientos de ocio, políticos, colectivos... Pero
tampoco se distinguen espacios similares en la casa, ya que si
hay algo privado en la ciudad turca, es la casa: La casa no es
sólo privada, sino privativa y sagrada, como un santuario.
(Bagdad)
La urbanización árabe, como es natural en su sociedad introvertida y fuertemente
jerarquizada, encierra a cada familia dentro de gruesas paredes, impidiendo la entrada, no sólo
de las miradas exteriores, sino de la propia luz, ya que rendijas y celosías impiden la entrada
total de luz. Las propias casas son las que forman la configuración de las calles, y no es la calle
la que configura la colocación de las casas (como ocurre en occidente), de modo que la calle
pierde todo su significado y se convierte en un estrecho paso, un simple pasillo que sirve de
acceso a las viviendas, que siempre mantienen sus puertas cerradas.
Esta falta de espacio propició dos cosas:
-La adquisición, por parte de las familias más adineradas, de espacios en la ciudad que
les permitiesen tener la construcción de patios o jardines donde descansar.
-Que las demás familias abriesen en sus casas un patio donde oxigenarse.
La influencia de la práctica de la oración en el urbanismo: La clave del Islam, el acto de
culto que contribuye a la purificación de los practicantes. Influye tanto en la configuración de la
ciudad como en el de la vivienda con lavatorios, respeto en el momento específico de la
oración, la orientación hacia la Meca de los lugares previstos para el culto, la existencia de
lugares amplios para poder ser ocupados por la mayor cantidad posible de fieles en la oración
comunitaria de los viernes.
La primera exigencia obligó a la dotación de aseos, albercas, fuentes y baños públicos
(hammams).
La segunda dio lugar a la construcción de alminares y, en determinadas capitales, de
observatorios astronómicos.
Las dos últimas exigencias determinaron cómo debían ser edificadas las mezquitas y
cumplidas sus exigencias litúrgicas
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Reglamentaciones urbanas en el Islam:
-El derecho a la calle:
En la ciudad, la ley islámica distingue entre la calle, el camino público en el toda la gente
tienen derecho a atravesarlo, y el callejón o el adarve, que la mayoría de los juristas lo
consideraron como un camino semi-privado perteneciente a las propiedades circundantes.
-El concepto del fina’:
El fina’ es un espacio abierto alrededor o a lo largo de
un edificio.
En las calles principales corresponde al espacio de la
calle situado alrededor de la puerta de la casa, donde
no debe extenderse más que la mitad de la anchura de
la calle. Mientras en los callejones, el fina’ cubre casi
todo el espacio delantero de la casa, extendiendo
hasta toda la anchura de la calle.
El fina’ se extendía solo en la planta primera del
edificio, por lo que
en
las
plantas
superiores
se
disponían
unos
cuerpos salientes
conocidos
como
salidizos,
que
podían ocupar toda
una fachada o sólo una ventana. Estas piezas estaban
sostenidas por modillones. Así se conseguía una vista
lo más extensa posible, sin ser vistos gracias a las
celosías.
La intimidad, según el Corán, llevada a la práctica: La intrusión de los vecinos se considera
como algo prohibido (ya se menciona en el capítulo XLIX anteriormente) y no se tolera de
ninguna manera. Esta intrusión no se toma como el simple hecho de que se entre libremente
en las viviendas ajenas, sino que se considerarían pecados hechos arquitectónicos que
influyesen en la forma de vida privada que se debe llevar. El tema de la intimidad se refleja de
forma física en la ciudad con diferentes formas:
- La altura máxima de los edificios está controlada: La vista panorámica que
encontramos en las ciudades árabes suele ser muy homogénea, una lámina lisa
configurada por la altura similar de todos los edificios. Ésta suele centrarse en alturas
de dos o tres pisos, y difícilmente podemos encontrar edificios de cuatro. Además de
conservar las alturas en toda la ciudad, dentro de los barrios se conserva más aún esta
homogeneidad vertical. El hecho de que una vivienda supere considerablemente en
altura a la de sus vecinos se consideraría intrusión por la sociedad musulmana, y es
por esto que se evita.
- El uso de la azotea representa un peligro: Es otra acción que amenaza la intimidad
de las casas. La situación implicaría el estar por encima de las demás casas y por tanto
ampliar la visión del barrio y probablemente de los patios de las viviendas.
- El levantamiento de primorosas fachadas públicas no está permitido: El
musulmán no concibe el elevar una fachada significativa y esplendorosa que dé vista a
una calle o a una plaza, ya que estaría exhibiendo su alta condición económica. Uno de
sus principios ha de ser la modestia, por respeto a sus hermanos. Debido a esto las
fachadas importantes se construirán en los patios interiores, para su propio disfrute y
para evitar su contemplación por los vecinos que no puedan tenerla. Los métodos de
construcción de estas fachadas consisten en pequeñas piezas que van formando un
entramado de madera tallada y recortada que proporciona un aire alegre a la zona.
Este tipo de decoración podemos encontrarlo también en algunas puertas, marcos de
ventanas, cornisas...
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-
La vida privada condiciona la organización espacial de la casa: La casa islámica
es el lugar en el que más tiempo pasa la familia, es donde se desarrolla la mayor parte
de la vida diaria. Cuenta con un espacio abierto, en el que se sitúan el patio y el jardín,
y un espacio cerrado, con estancias privadas y públicas, que se dividen además según
el sexo, hay habitaciones sólo para las mujeres (el harém) y otras habitaciones sólo
para hombres (el salámlik).
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La apertura de huecos según normas: Según se trate de apertura de puertas,
ventanas o el tratamiento de azoteas encontraremos diferentes soluciones, pero todas
ellas se rigen por la misma norma (preservar la intimidad):
o Apertura de puertas: Si la vivienda en la que se va a abrir un hueco para
puerta se encuentra en una calle con menos de 7metros, y frente a ella existe
otra puerta perteneciente a otra vivienda, el nuevo hueco no puede situarse en
línea recta con el hueco preexistente, debe moverse a derecha o izquierda
alejándose del contacto casi directo con la vivienda enfrentada. Si la calle tiene
un ancho de 7-8 metros pero con una importante afluencia de tráfico, el hueco
deberá retranquearse.
o
Apertura de ventanas: Para preservar la intimidad del interior de vivienda se
establecen unas normas de alturas mínimas de hueco y de situación de este.
Así, dividimos la normativa en determinaciones de altura desde el interior y
desde el exterior, las cuales hay que cumplir simultáneamente:
- Si establecemos la normativa desde el interior encontramos que el
alfeizar de la ventana debe situarse a una altura de 2,5 metros. Esta altura
queda determinada tras una suma de alturas medias de una persona más un
objeto (cama, mesa, encimera...) al que pueda subirse. La intención es evitar la
vista directa con el exterior.
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- Según la normativa, la altura de la ventana en el exterior debe ser de
1,75 metros, la altura idónea para no ver a los ocupantes de la vivienda. Esta
altura puede reducirse cuando la cota de suelo interior sea más baja que la de
la calle.
El diseño de las viviendas:
Podemos considerar un factor
más aparte de la ley islámica,
que
influye
de
forma
determinante en la disposición
interior de las viviendas turcas:
El clima y el paisaje de cada
región influirán en la disposición
en busca del soleamiento o de
la mejor ventilación de la
vivienda. Esta es sólo una
pequeña parte de la elección
del proyecto para la vivienda
turca, ya que se regirá primordialmente por la ley islámica.
- La separación del hombre y la mujer en la familia: Los hombres y las mujeres hacen
vidas completamente separadas y sólo se ven en las comidas o en la noche (los
matrimonios). Esta forma de vida muestra una separación, no solo de las habitaciones,
sino de las entradas y escaleras. El hombre y la mujer de la casa reciben a sus
invitados en las habitaciones destinadas para este uso, también separadas según el
sexo. Por lo general cada cónyuge cuenta con dos habitaciones, una que sirve de
vestíbulo y la otra como sala de estar.
- El desarrollo de la vida en las casas. El mobiliario: Las viviendas turcas se
distinguen por contar con un numero muy limitado de mobiliario, de modo que una
misma habitación puede ser utilizada como dormitorio, salón o comedor. El mobiliario
necesario para cada situación se guarda en grandes armarios, dispuestos en el tabique
de entrada. El único mueble que siempre se mantiene en las habitaciones es el Sedir
(un ancho banco al que se le añaden alfombras y almohadones para utilizarlo como
“sofá”) y siempre toman protagonismo las grandes y coloridas alfombras que cubren
todas las habitaciones del hogar.
- Disposición de las habitaciones en casas de familias adineradas: Vuelve a
aparecer la predilección por la búsqueda de la intimidad, Las grandes casas suelen
tener muchas habitaciones, para la familia, los parientes, los invitados... para preservar
la intimidad de la familia anfitriona las habitaciones no están comunicadas, las puertas
de acceso suelen ser bajas y estrechas para impedir lo máximo posible la visibilidad del
interior de estas. Normalmente preside la casa un gran salón, situado en la planta alta
(en la planta baja se encuentran la cocina, baños, bodegas o habitaciones de los
criados) se convierte en la habitación mas importante de toda la casa por ser la mejor
ventilada y acondicionada.
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Las viviendas a nivel de jardín (libre albedrío para los arquitectos): Las viviendas de
verano o los grandes palacios suelen situarse en grandes campos y jardines (en Estambul se
construyeron muchas a orillas del Bósforo) es por ello que las celosías no tengan razón de
existir, pueden abrirse amplios ventanales y disfrutar de las vistas panorámicas que el paisaje
ofrece. De esta manera aparecen dos tipos importantes de construcciones con este diseño: El
Yali (Podría tomarse como una residencia de verano, a orillas del río o del mar) y el Köchk (
Una especie de pabellón de una sola planta situado a lo largo de grandes paseos)
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El Yali: Este tipo de vivienda se trata de una
creación propia de Estambul debido a su
desarrollo a lo largo de Río Bósforo. La planta
suele ser simétrica y se caracteriza por su
gran salón central que ocupa todo el ancho
del edificio. Debido a sus dimensiones y a la
implantación de los ejes de simetría estas
construcciones suelen rodearse de una cierta
solemnidad, que contrasta con la continuación
del mobiliario provisional. Una de las piezas
propias de los yalis son sus cuerpos salientes,
pequeñas estancias que sobresalen de la
casa como si se asomasen a la orilla del río
desarrollando así una de las actividades que
más gustan a los habitantes de Estambul es poder contemplar el gran paisaje del mar y
la ciudad.
El Köchk o kasri: Forman parte integrante de la arquitectura palaciega, aunque no
como la que conocemos en Europa. Se trata de unos pabellones aislados (de una a
tres piezas) dispersos por los grandes jardines de los más afortunados. Altas murallas
que delimitan un amplio espacio en el que se elevan edificios sin el menos orden.
Con esta serie de ejemplos quería demostrar la gran influencia que tiene la religión musulmana
en los aspectos arquitectónicos y urbanísticos de sus ciudades. Cómo una sola norma es
llevada hasta el límite, de forma que el respeto por los vecinos y por la intimidad propia lleva a
vivir en condiciones mejorables, aunque no dispuestas a asumir. Como final planteaba dos
casos de viviendas en las que no se da tan radicalmente esta norma (aunque siguen
conservando fielmente la actuación de hombres frente a mujeres) en la que el disfrute se pone
por encima de las leyes religiosas a seguir, pero en las condiciones de alto status social y
amplias áreas en las que actuar. Sorprende el hecho de que un único libro pueda guiar las
interminables dudas de diseño que pueden surgir a un arquitecto.
Bibliografía:
- Sinán: El maestro de la arquitectura otomana / Aptullah Kuran
Editorial Universidad de Granada, 1997
- El Corán
- Web: http://www.scribd.com/doc/7340155/Ciudad-y-Vivienda-Islamica
-Web: http://www.meda-corpus.net/libros/pdf_livre_atm/atm_esp/02-atm_esp.pdf
-Web: http://perso.wanadoo.es/javgb78/Documentos/CiudadIslam1.pdf
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