UNIVERSIDAD DE CHILE FACULTAD DE CIENCIAS FORESTALES ESCUELA DE CIENCIAS FORESTALES DEPARTAMENTO DE INGENIERÍA DE LA MADERA CARACTERIZACIÓN DE LA ACCIDENTALIDAD OCUPACIONAL EN FAENAS DE SILVICULTURA Y COSECHA FORESTAL Memoria para optar al Título Profesional de Ingeniero Forestal MARCELA ALEJANDRA CARRASCO JOFRÉ Profesor Guía: Sr. René Carmona Cerda. Ingeniero Forestal, Magíster en Ciencias Forestales. Santiago, Chile 2008 UNIVERSIDAD DE CHILE FACULTAD DE CIENCIAS FORESTALES ESCUELA DE CIENCIAS FORESTALES DEPARTAMENTO DE INGENIERÍA DE LA MADERA CARACTERIZACIÓN DE LA ACCIDENTALIDAD OCUPACIONAL EN FAENAS DE SILVICULTURA Y COSECHA FORESTAL Memoria para optar al Título Profesional de Ingeniero Forestal MARCELA ALEJANDRA CARRASCO JOFRÉ Calificaciones: Nota Firma Prof. Guía Sr. René Carmona C. 6,7 …………… Prof. Consejero Dr. Javier González M. 6,6 …………… Prof. Consejero Dr. Manuel Toral I. 6,5 …………… Con amor a mis Padres y a Diego AGRADECIMIENTOS Es difícil llegar a esta instancia y evitar que un nombre trascendente se escabulla entre los vacíos memoriales, pero de seguro lo más difícil fue llegar a este momento donde parece concluir una etapa larga duración y corta satisfacción. Gracias profesor Araneda, que sin ningún interés personal o profesional me ayudo enormemente con la parte esencial de esta memoria, gracias por compartir conmigo sus conocimientos, su tiempo y extractos de su vida. Gracias profesor Carmona por su sus palabras, conocimiento y su espontaneidad. Sin duda, y sin originalidad los padres son los primeros en la lista de agradecimientos; mi madre que con su implacable paciencia tiene la capacidad de hacernos sentir especial a cada uno de los demás parásitos de la familia, ella es la única que sabe de todo y no lo inventa, es maravillosa e incansable en su pega de mama, gracias mama por ser la mejor y hacerme parte de ti. Mi papá Jaime es un caso, es especialmente excéntrico y capaz de pasar de la rabia a la risa en pocos segundos, es cariñoso y espontáneo, mucho de él también es parte mía, gracias por tu hombro siempre dispuesto para mi desahogo. Mis hermanos también merecen un reconocimiento, cada uno en su forma me acompañó en este proceso, aunque los comentarios podían ser un poco cítricos a veces, ahí estaban a mi lado cuando el asunto se tornaba más serio, gracias Claudia e Ignacio. La Claudia me dio un hermoso sobrino; Diego, él me levanta todos los días sobre todo aquellos que cuesta más hacerlo, gracias hermana. Nacho, gracias también por siempre desearme lo mejor. También quiero hacer una mención a mis tíos Pablo y Juan, a mi Tía Gume, sus hijos; Memo, Pancho, Claudia, y mi Luchito, siempre los tendré en mi corazón. Gracias a mi hueli por soportarme y por demostrarme apoyo cuando lo necesité. Ahora pasemos a otro plano, Juan Pablo, no te imaginas lo que esperaba este momento para que supieras que si eres parte de todo esto, estuviste desde cuando me ibas a dejar o buscar a la casa de alguna amiga a estudiar, esperarme cuando llegaba de terreno, hasta comprarte un computador para que yo no tuviera que conseguirme por otros lados, gracias por tu incondicionalidad, por tu amor y sobre todo por tu paciencia. Los infaltables compañeros, como no mencionarlos si están en todos los recuerdos de los rincones de Antumapu y en mi memoria en la sección de buenos momentos; Flowers, Eliana, Yolanda, Paola, Natalia, Chica, Álvaro, Iván, Lorena, Daniela y por supuesto la Tati, entre otros compañeros de terreno y de carrete que se anotan en mi cabeza. Gracias Dany por tu apoyo y tu complicidad con mi causa que la hacías tuya sin pedir nada a cambio. Gracias Lorena por tu amistad y tu apoyo incondicional, por ponerte en mis zapatos y querer abrochártelos. A ti tati, que te puedo decir, hemos dicho y lo más importante demostrado todo, gracias por tu lealtad y tu amistad incondicional. Las adoro y quiero contar con ustedes siempre. TABLA DE CONTENIDOS RESUMEN SUMMARY 1 INTRODUCCIÓN 1 2 OBJETIVOS 3 3 2.1 OBJETIVO GENERAL 3 2.2 OBJETIVOS ESPECÍFICOS 3 4 REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA 4 3.1 OCUPACIÓN FORESTAL 3.1.1 EL SECTOR FORESTAL 4 3.1.2 FAENA FORESTAL SILVICULTURA 7 3.1.3 FAENA FORESTAL COSECHA 8 3.2 EL TRABAJADOR FORESTAL 10 3.2.1 LA ALIMENTACIÓN DEL TRABAJADOR FORESTAL 3.2.2 FACTORES PSICOSOCIALES QUE AFECTAN AL TRABAJADOR FORESTAL 12 3.2.2.1 El consumo de psicotrópicos en el trabajador forestal 14 3.2.3 ELEMENTOS DE SEGURIDAD DEL TRABAJADOR FORESTAL 15 3.2.4 OBLIGACIONES Y DERECHOS DEL TRABAJADOR FORESTAL 15 3.3. LA ACCIDENTALIDAD 4 11 16 3.3.1 INDICADORES DE ACCIDENTALIDAD 18 3.3.2 ASPECTOS LEGALES 19 3.4 EL SECTOR FORESTAL CHILENO 21 3.4.1 ALCANCES DE LA LEY 16.744 21 3.4.2 ESTADÍSTICAS DE ACCIDENTALIDAD 22 3.4.3 LA ACCIDENTALIDAD Y SUS CAUSAS 28 3.4.4 LA ACCIDENTALIDAD Y SU PREVENCIÓN 31 MATERIAL Y METODOS 35 4.1 MATERIAL 35 4.2 MÉTODO 38 4.2.1 SIMBOLOGÍA DE LAS VARIABLES 38 4.2.2 PREPARACIÓN DE DATOS 39 4.2.3 ANÁLISIS DESCRIPTIVO 4.2.3.1 Análisis de variables casuísticas 43 4.2.3.2 Indicadores de accidentalidad 44 4.2.4 ANÁLISIS ESTADÍSTICO 4.2.4.1 Análisis de variables casuísticas 5 43 RESULTADOS Y DISCUSIÓN 44 44 46 5.1 ANÁLISIS DE ACCIDENTALIDAD PARA LOS RUBROS SILVICULTURA Y COSECHA 5.1.1 ANÁLISIS DE VARIABLES CASUÍSTICAS 46 46 5.1.1.1. Edad 46 5.1.1.2. Carácter actividad 48 5.1.1.3. Denuncia accidente 49 5.1.1.3.1 Porcentaje de accidentes para el quinquenio 1998-2002 49 5.1.1.3.2 Porcentaje de accidentes para el año 2003 50 5.1.1.3.3 Porcentaje de accidentes para el promedio de los períodos 19982002 y 2003 por rubro 5.1.1.4. Antigüedad en la empresa 51 52 5.1.1.4.1 Porcentaje de accidentes para el quinquenio 1998-2002 52 5.1.1.4.2 Porcentaje de accidentes para el año 2003 53 5.1.1.4.3 Porcentaje de accidentes para el promedio de los períodos 19982002 y 2003 por rubro 54 5.1.1.5. Experiencia en la labor 55 5.1.1.6. Hora accidente 57 5.1.1.7. Día semana 58 5.1.1.8. Horas Trabajadas 60 5.1.1.8.1 Porcentaje de accidentes para el quinquenio 1998-2002 60 5.1.1.8.2 Porcentaje de accidentes para el año 2003 61 5.1.1.8.3 Porcentaje de accidentes para el promedio de los períodos19982002 y 2003 por rubro 5.1.1.9. Tipo accidente 62 62 5.1.1.9.1 Porcentaje de accidentes para el quinquenio 1998-2002 63 5.1.1.9.2 Porcentaje de accidentes para el año 2003 64 5.1.1.9.3 Porcentaje de accidentes para el año 2004 65 5.1.1.9.4 Porcentaje de accidentes para el promedio de los períodos19982002, 2003 y 2004 por rubro 66 5.1.1.10. Agente accidente 67 5.1.1.11. Zona cuerpo lesionada 69 5.1.1.11.1 Porcentaje de accidentes para el quinquenio 1998-2002 69 5.1.1.11.2 Porcentaje de accidentes para el año 2003 70 5.1.1.11.3 Porcentaje de accidentes para el año 2004 72 5.1.1.11.4 Porcentaje de accidentes para el promedio de los períodos 19982002, 2003 y 2004 por rubro 5.1.1.12. Días perdidos 5.1.2 INDICADORES DE ACCIDENTALIDAD 73 74 75 5.1.2.1 Tasa de accidentalidad por actividad económica año 2005 75 5.1.2.2 Tasa de accidentalidad por actividad económica año 2003 77 5.1.2.3 Tasa de siniestralidad por actividad económica año 2003 78 5.1.2.4 Evolución tasa accidentalidad área bosque 79 5.1.2.5 Evolución tasa de siniestralidad área bosque 80 5.1.2.6 Evolución días perdidos área bosque 81 5.2 ANÁLISIS DE ACCIDENTALIDAD DEL SECTOR FORESTAL 5.2.1 ANÁLISIS DE VARIABLES CASUÍSTICAS 82 82 5.2.1.1. Edad 82 5.2.1.2. Tipo accidente 83 5.2.1.3. Agente accidente 84 5.2.1.4. Zona del cuerpo lesionado 85 5.2.2 INDICADORES DE ACCIDENTALIDAD 86 5.2.2.1 Evolución tasa accidentalidad sector forestal 86 5.2.2.3 Evolución días perdidos sector forestal 88 6 CONCLUSIONES 90 7 RECOMENDACIONES 94 8 BIBLIOGRAFÍA 96 9 APÉNDICE 103 9.1 NOMENCLATURA UTILIZADA POR LA ACHS PARA LOS RUBROS DE INDUSTRIA DE LA MADERA 9.2 FAENAS POR RUBRO 103 103 9.2.1 FAENAS DEL RUBRO SILVICULTURA 103 9.2.2 FAENAS DEL RUBRO COSECHA 104 9.3 DATOS CASUÍSTICOS ENTREGADOS POR LA ACHS 105 9.4 RESULTADOS ESTADÍSTICOS DE LAS DISTRIBUCIONES DE LOS PORCENTAJES DE ACCIDENTES ENTRE SILVICULTURA Y COSECHA POR PERIODO PARA CADA VARIABLE 106 9.4.1 RESULTADOS VARIABLE EDAD 106 9.4.2 RESULTADOS VARIABLE CARÁCTER ACTIVIDAD 106 9.4.3 RESULTADOS VARIABLE DENUNCIA ACCIDENTE 106 9.4.4 RESULTADOS VARIABLE ANTIGÜEDAD EN LA EMPRESA 106 9.4.5 RESULTADOS VARIABLE EXPERIENCIA EN LA LABOR 106 9.4.6 RESULTADOS VARIABLE HORA ACCIDENTE 107 9.4.7 RESULTADOS VARIABLE DÍA SEMANA 107 9.4.8 RESULTADOS VARIABLE HORAS TRABAJADAS 107 9.4.9 RESULTADOS VARIABLE TIPO ACCIDENTE 107 9.4.10 RESULTADOS VARIABLE AGENTE ACCIDENTE 107 9.4.11 RESULTADOS VARIABLE ZONA CUERPO LESIONADA 107 9.4.12 RESULTADO VARIABLE DÍAS PERDIDOS 107 9.5 PORCENTAJES DE ACCIDENTES POR VARIABLE Y PERÍODO PARA SILVICULTURA Y COSECHA 108 9.5.1 PORCENTAJES DE ACCIDENTES POR CATEGORÍAS DE EDAD 108 9.5.2 PORCENTAJES DE ACCIDENTES POR CATEGORÍA DE CARÁCTER ACTIVIDAD 108 9.5.3 PORCENTAJES DE ACCIDENTES POR CATEGORÍAS DE EXPERIENCIA EN LA LABOR 108 9.5.4 PORCENTAJES DE ACCIDENTES POR CATEGORÍAS DE HORA DE ACCIDENTE 108 9.5.5 PORCENTAJES DE ACCIDENTES POR CATEGORÍAS DE DÍA DE SEMANA 108 9.5.6 PORCENTAJES DE ACCIDENTES POR CATEGORÍAS DE AGENTE ACCIDENTE 109 9.5.7 PORCENTAJE DE ACCIDENTES POR CATEGORÍAS DE DÍAS PERDIDOS 9.6 RESULTADOS DEL TEST DE Z POR VARIABLE Y CATEGORIA 109 109 9.6.1 RESULTADOS VARIABLE EDAD 109 9.6.2 RESULTADOS VARIABLE CARÁCTER ACTIVIDAD 109 9.6.3 RESULTADOS VARIABLE DENUNCIA ACCIDENTE 109 9.6.4 RESULTADOS VARIABLE ANTIGÜEDAD EN LA EMPRESA 110 9.6.5 RESULTADOS VARIABLE EXPERIENCIA EN LA LABOR 110 9.6.6 RESULTADOS VARIABLE HORA ACCIDENTE 110 9.6.7 RESULTADOS VARIABLE DÍA SEMANA 110 9.6.8 RESULTADOS VARIABLE HORAS TRABAJADAS 110 9.6.9 RESULTADOS VARIABLE TIPO ACCIDENTE 111 9.6.10 RESULTADOS VARIABLE AGENTE ACCIDENTE 111 9.6.11 RESULTADOS VARIABLE ZONA CUERPO LESIONADA 111 9.6.12 RESULTADO VARIABLE DÍAS PERDIDOS 111 9.7 ACCIDENTES EN LOS RUBROS SILVICULTURA Y COSECHA DESDE EL AÑO 1993 AL 2005 112 9.8 ACCIDENTES EN LAS ÁREAS BOSQUE E INDUSTRIA DE LA MADERA DESDE EL AÑO 1993 AL 2005 112 9.9 RESULTADOS ESTADÍSTICOS DE LAS DISTRIBUCIONES DE LOS PORCENTAJES DE ACCIDENTES DEL SECTOR FORESTAL ENTRE LOS PERÍODOS 1998-2002, 2003 Y 2004 POR CADA VARIABLE 10 113 ANEXO 114 10.1 ELEMENTOS DE PROTECCIÓN PERSONAL 114 RESUMEN La influencia que tiene la seguridad en los procesos de producción es importante, así lo demuestran las significativas pérdidas económicas y la considerable disminución de competitividad de las empresas por concepto de accidentes. Las características socioculturales, el nivel de conocimientos, habilidades y aptitudes de los trabajadores, las condiciones del ambiente de trabajo, las características de la materia prima o de los productos y la tecnología empleada, corresponden a los factores que inciden en la ocurrencia de accidentes en el sector forestal. Debido a la complejidad del tema de la accidentalidad en el sector y sus diversas áreas de influencia para la empresa y los trabajadores, surge la necesidad de revisar la información estadística de la ultima década de los accidentes laborales y su casuística, lo que permitirá caracterizar la accidentalidad a través de las variables del estudio que van describiendo las condiciones en las cuales ocurren los accidentes. De acuerdo a los resultados del estudio, se observó que los rubros de silvicultura y cosecha presentan comportamientos similares en todos los análisis realizados. Además se constató que el rubro cosecha representa la actividad más peligrosa del bosque al presentar mayor número de accidentes y de días perdidos en los periodos estudiados. Los indicadores de accidentalidad reflejaron además la gravedad de los accidentes ocurridos en faenas de cosecha, resultados del aumento de la cantidad de días perdidos por accidente. En los periodos estudiados tanto silvicultura como cosecha disminuyeron el número de accidentes y solo silvicultura redujo además los días perdidos. El sector forestal presentó diferencias en su comportamiento entre los periodos considerados en el análisis realizado. Además se observo que industrias de la madera representa la actividad más peligrosa del sector al registrar mayor accidentalidad y cantidad días perdidos, también posee tasas de accidentalidad superiores a otras actividades económicas como pesca y construcción. El sector forestal mantiene tasas de accidentalidad superiores al promedio de las actividades económicas del país, debido a que el número de accidentes en el sector es superior al promedio de accidentados en las actividades económicas del país. La tasa de siniestralidad del sector forestal presenta valores preocupantes, con respecto a otras actividades económicas solo es aventajada por su componente industrias de la madera, superando así a actividades peligrosas como la pesca y la construcción. El sector forestal si bien ha disminuido sus tasas de accidentalidad con respecto a cifras pasadas, producto de la iniciativa de las empresas y de los sistemas de gestión, esta disminución se ha detenido en los últimos años, por lo que el tema de seguridad y salud ocupacional se presenta como un desafío que requiere de un rol más activo del sector y de un tratamiento integral del tema que involucre en forma participativa a la empresa, trabajadores y su entorno. Palabras claves: Accidentes, Variables Casuísticas, Silvicultura, Cosecha, Estadísticas de Accidentalidad. SUMMARY The influence of the safety in production processes is important, as evidenced by the significant economic losses and the significant decline in competitiveness of firms in respect of accidents. The sociocultural characteristics, the level of knowledge, skills and abilities of workers, conditions of the working environment, the characteristics of the materials or products and the technology used, relate to the factors that affect the occurrence of accidents the forestry sector. Due to the complexity to the accidents in the industry and influence for the company and the workers, the need for reviewing the statistical information from the last decade of occupational accidents and casuistry, which will characterize the accidents through variables ranging study describing the conditions in which accidents happen. According to the survey results, it was observed that the areas of forestry and harvesting presented similar behaviour in all analyses performed. In addition it was found that the item harvest activity represents the more dangerous activity in the forest introducing the highest number of accidents and days lost during the periods studied. Indicators of accidents also reflected the severity of accidents harvest chores, results of the increase in the number of days lost by accident. In the study period, as both silvicultura harvest decreased the number of accidents and forestry only further reduced the days lost. The forestry sector showed differences in behavior between periods considered in the analysis. It was further observed that wood represents the most dangerous sector to record highest accident rate and number of days lost, also has higher rates of injuries to other economic activities such as fishing and construction. The forestry sector maintains accident rates above the average of the country's economic activities, because the number of accidents in this sector is above the average injured in the country's economic activities. The rate of accidents in the forestry sector have values concern, with respect to other economic activities is only advantageous for its component industries of timber, thus overcoming a hazardous activities such as fishing and construction. The forestry sector has declined while their rates of accidents with respect to past figures, the result of the initiative of companies and management systems, this decline has been arrested in recent years, so the issue of safety and health Occupational presented as a challenge that requires a more active role in the sector and a comprehensive treatment of the subject in a participatory process involving the company, workers and their environment. Keywords: Accidents, Casuistic Variable, Forestry, Harvest, Accidentability statistics. 1 INTRODUCCIÓN En las últimas décadas el sector forestal chileno se ha caracterizado por la realización masiva de plantaciones; introducción de nuevas técnicas en manejo forestal; alta mecanización de operaciones en terreno; cambio tecnológico en la industria maderera; aumento de participación en los mercados internacionales; y aumento de la fuerza laboral. Este crecimiento y desarrollo del sector se ve reflejado en sus indicadores económicos, donde las exportaciones han aumentado de US$ 9,7 millones FOB (1962) hasta US$ 3.495,4 millones FOB (2005). En el contexto de la economía nacional, los productos forestales han elevado su participación en exportaciones de 1,9 % (1962) a 12,7% (2006) (INFOR, 2007). En cuanto a la fuerza laboral, ella ha crecido permanentemente, con oscilaciones menores en desempleo desde 1989 hasta la fecha, vislumbrándose que el sector forestal continuará siendo en el futuro un significativo empleador para trabajadores en operaciones forestales, industrias de la madera y servicios anexos relacionados con el sector. La fuerza laboral está conformada por 133.193 trabajadores, de los cuales 44.715 son operarios que se desempeñan en labores silvícolas y de cosecha forestal (INFOR, 2006). Se estima, además, que la sindicalización obrera del sector alcanza a un 10% de la masa (11.730 trabajadores distribuidos en 136 agrupaciones gremiales) (Ackerknecht, 2003). Como consecuencia del crecimiento experimentado por el sector, la fuerza laboral ha debido adaptarse a nuevas tecnologías y mayores exigencias de productividad y calidad. Esta adaptación involucra aspectos relacionados con la seguridad de los trabajadores, debido a que éstos pueden estar sometidos a condiciones de riesgo y acciones inseguras al no contar con la suficiente capacitación y especialización que demandan los procesos productivos actuales. Durante el año 2005, las empresas del sector forestal asociadas a la Asociación Chilena de Seguridad, (en adelante ACHS), a nivel nacional exhibieron una tasa de accidentalidad promedio de 9,09%, desglosándose en 10,03% para faenas en el bosque y 6,83% en industrias de la madera. Se registraron 5.073 accidentes, que involucraron la pérdida de 91.258 días de trabajo, por concepto de hospitalización, rehabilitación y otros, de los operarios lesionados (ACHS, 2005). Estas pérdidas se traducen económicamente en 2 pérdidas de productividad y en un aumento de costos para la empresa, debido a los costos directos que alcanzan un valor considerable, además de otros costos indirectos asociados. En Chile por concepto de accidentes, el costo anual asociado representa entre 0,9-2,8 % del PIB, lo que se traduce a lo menos en US $ 2.500 millones al año. Esta relación accidente versus pérdidas ha provocado el interés de instituciones y empresas, por realizar estudios que determinen las causas y las recomendaciones para evitarlos. Es así como la prevención de riesgos ha adquirido gran importancia no sólo por el tema social referente a la seguridad de los trabajadores, sino también por lo económico que esta asociado a las pérdidas en productividad y aumento de los costos y también comercial ya que involucra las nuevas tendencias y demandas de los mercados internacionales que enfatizan en exigir que el producto provenga de faenas manejadas sustentablemente y bajo condiciones laborales seguras. Esto se puede ver reflejado en la incorporación de sistemas de gestión de impacto ambiental y Administración de Salud y Seguridad Ocupacional Osha 18.001 por parte de las empresas chilenas. Por la influencia que tiene la seguridad en los procesos de producción, es importante y necesario revisar y actualizar la información estadística acumulada en la última década sobre los accidentes laborales y sus causas, a fin de hacer un mejor diagnóstico de la realidad de la seguridad y salud ocupacional en el sector forestal y de este modo favorecer la medición y control de la productividad en operaciones forestales e industrias de la madera. De lo anterior surge la necesidad de desarrollar esta memoria, la que pretende caracterizar la accidentalidad ocupacional en faenas de silvicultura y cosecha forestal. Para conseguir este objetivo, se utilizaron datos provenientes de la ACHS respecto a estudios casuísticos de accidentalidad para los rubros antes mencionados. El período de estudio comprende el quinquenio 1998-2002, período 2003 y 2004. También se incluirán estadísticas de accidentalidad del sector forestal que incluye área Bosque (silvicultura y cosecha) e Industrias de la Madera, para los períodos antes mencionados. Con este trabajo, se pretende aportar al sector contribuyendo a establecer un diagnóstico que describa la accidentalidad ocupacional, identificando los parámetros generales asociados al accidente, lo que permitirá tomar medidas preventivas más eficaces tendientes a elevar el nivel de seguridad de los trabajadores forestales. 3 2 2.1 OBJETIVOS OBJETIVO GENERAL Caracterizar retrospectivamente la accidentalidad ocupacional en las actividades de Silvicultura y Cosecha Forestal. 2.2 OBJETIVOS ESPECÍFICOS I. Análisis descriptivo de la accidentalidad para las actividades de silvicultura y cosecha forestal. II. Análisis de las variables descriptivas de los estudios casuísticos por actividad y periodo de estudio. III. Caracterizar la accidentalidad del sector forestal a nivel nacional, a través de variables descriptivas dispuestas por el estudio. 4 3 REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA 3.1 OCUPACIÓN FORESTAL 3.1.1 EL SECTOR FORESTAL El crecimiento del sector forestal se ha fortalecido como la segunda actividad económica más importante, y la primera basada en un recurso natural renovable (CONAF, 2005). Durante los últimos 15 años, la industria forestal se ha orientado principalmente a las exportaciones, generando aproximadamente el 13% del total anual de los retornos, con un monto exportado de US$ 3,495.4 millones en el año 2005, generando cerca de 130 mil empleos directos y más de 300 mil indirectos en las áreas de silvicultura y cosecha, industria primaria, secundaria y servicios (INFOR, 2006). Dicho crecimiento, también se refleja en el incremento del número de trabajadores que ha crecido aproximadamente en 53% desde el año 1982 al año 2004, estimándose que continuará incrementándose en el futuro, principalmente en operaciones forestales, industrias de la madera y servicios relacionados con el sector forestal, alcanzando para el 2010 los 183.000 trabajadores (Ackerknecht, 2001). La evolución ocupacional del sector forestal desde el año 1998 al 2003, ha presentado un comportamiento con leves oscilaciones, tal como se observa a continuación: Tabla 1: Evolución ocupación Forestal Ocupación Sector Forestal por Actividad, 1992-2003 (Personas) Actividades Año Total Silvicultura y Cosecha 1998 123.921 43.115 1999 123.390 43.772 2000 117.542 40.444 2001 117.333 39.528 2002 118.816 39.678 2003 122.809 42.368 Fuente: INFOR (2005). Industria Primaria Industria Secundaria 30.858 37.288 30.157 36.188 28.834 35.061 28.018 35.569 28.381 36.158 28.392 36.816 Servicios 12.660 13.273 13.203 14.218 14.599 15.233 Según las estadísticas de INFOR (2006), el sector forestal durante el año 2005, empleó a 5 un total de 133.193 personas, distribuidas en cuatro actividades, como se observa a continuación: Tabla 2: Ocupación del sector forestal del año 2005 según actividad. Ocupación del sector forestal según actividad, año 2005 actividad Nº de personas empleadas Silvicultura y Cosecha 44.715 Industrias (primaria y secundaria) 71.958 Servicios 16.520 Total 133.193 Fuente: INFOR (2006). % 33,6% 54% 12,4% 100% A nivel regional, la Región del Bío Bío, es la que concentra el mayor número de personas empleadas, concentrando el 42,7% del total, seguida por la Región del Maule, la Región de los Lagos y la Región de la Araucanía, con una participación de 14,8%, 12,2% y 11,5% respectivamente (INFOR, 2006). El sector forestal ha tendido cada vez más a la contratación de servicios externos, lo que ha llevado a la conformación de empresas de servicio forestales, (EMSEFORES) dedicadas a una o más actividades, principalmente en las áreas de silvicultura, evaluación de recursos, cosecha y transporte (Rioseco, 2003). Las empresas privadas propietarias del patrimonio forestal, manejan y cosechan el recurso a través del sistema de EMSEFORES, siendo éstas, personas jurídicas o naturales que ejecutan actividades forestales a terceros, mediante un contrato de ejecución de faenas (Paredes, 1995). La Corporación Nacional Forestal (CONAF), emplea a más de 1.800 personas, entre técnicos, administrativos y auxiliares en las labores de fomento de la actividad forestal, guardería de áreas silvestres protegidas, prevención y combate de incendios forestales, educación ambiental y administración de la legislación forestal, abarcando, como actividad forestal, no tan sólo plantaciones e industria, sino que incluye también la conservación de los recursos (CONAF, 2006). En total, el número de organizaciones relacionadas directamente con el sector forestal suman 17.405, siendo las más numerosas la de tenencia de plantaciones forestales con 6 6.952 empresas, posteriormente la Industria manufacturera secundaria con 5.206 entre pequeñas y medianas empresas, y la industria forestal primaria con 1.735 empresas (INFOR, 2005). Las áreas de silvicultura y cosecha, al compararlas con las otras actividades económicas del país, concentran en total 960 empresas, las cuales cuentan con 16.465 trabajadores en promedio, tal como se muestra a continuación: Tabla 3: Actividades económicas del país. Actividad Económica Promedio Trabajadores (1) Agricultura Silvicultura y cosecha Pesca Minería Manufacturas Construcción Elect.,Agua,Gas Comercio Transp.,Almac.,Comunic. Servicios Total Fuente: Anuario estadístico ACHS, 2005. (1) Promedio mensual. 156.435 16.465 26.126 16.679 267.011 81.079 12.579 281.523 69.010 682.544 1.609.451 Empresas 8.415 960 499 571 12.146 6.328 782 17.095 5.963 25.865 78.624 En silvicultura y cosecha, las empresas cuentan con un número variable de trabajadores promedio por empresa, el cual depende directamente del tamaño de ésta, y se mide respecto del número de trabajadores totales que la componen, tal como se observa en la tabla 4. 7 Tabla 4: Trabajadores por empresa, según el tamaño de empresa. N° Trabajadores Promedio Trabajadores 1-10 1.715 11-25 2.632 26-50 2.876 51-100 3.313 101-499 4.808 500 y más 1.121 Total 16.465 Fuente: Anuario estadístico ACHS, 2005. Empresas 652 151 77 47 31 2 960 3.1.2 FAENA FORESTAL SILVICULTURA Esta actividad contempla un conjunto de faenas que describen las labores a ejecutar en el bosque, entre ellas; producción de plantas, preparación del sitio, plantación e intervenciones silvícolas (Apud et al, 1999). De acuerdo al mismo autor, entre las actividades destinadas a la preparación del sitio, se encuentra el roce, actividad que se desarrolla con el fin de reducir o eliminar la competencia de la vegetación natural que podría impedir o afectar el establecimiento adecuado de una plantación; labor en la cual se requiere gran cantidad de energía de parte del trabajador, debido a la exigencia física que demanda. De manera similar ocurre en las labores del área de las plantaciones, ya que demandan el uso intensivo de mano de obra, debido a que es una tarea donde se establecen en terreno plántulas producidas en vivero. Esta es una de las labores que menos ha evolucionado, ya que se ha incorporado escasa mecanización a esta actividad, principalmente por las condiciones topográficas de nuestro país que dificultan el uso de máquinas (Apud et al, 1999). En cuanto al comportamiento que ha tenido la permanencia de trabajadores en el área silvicultura, de acuerdo al Anuario estadístico de la ACHS (2005), esta ha ido decreciendo durante los últimos años, tal como se observa en la tabla 5. 8 Tabla 5: Evolución masa de trabajadores en actividades silvícolas del período 1998-2005. TRABAJADORES MENSUALES PROMEDIO SILVICULTURA TOTAL BOSQUE (1) 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 9.319 11.726 8.890 7.906 8.262 7.974 7.565 7.954 19.457 22.035 19.456 17.024 17.584 16.845 16.095 16.469 Fuente: Anuario estadístico ACHS, 2005. (1) Silvicultura y cosecha. De acuerdo al mismo anuario mencionado, el número de empresas ligadas al área silvicultura, han crecido en los últimos años, sin embargo después del año 2000 ha decrecido, tal como se observa en la tabla 7. Tabla 6: Número de empresas del sector silvicultura. EMPRESAS SILVICULTURA TOTAL BOSQUE 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 329 453 455 385 390 343 333 329 894 1.054 1.026 915 885 785 761 751 Fuente: Anuario estadístico ACHS, 2005. 3.1.3 FAENA FORESTAL COSECHA La cosecha forestal, es un área que requiere de gran trabajo en equipo, en el cual cada trabajador es parte de una cadena que se inicia con el volteo de los árboles y termina con los trozos transportados a las plantas elaboradoras. La cosecha esta constituida por varias etapas intermedias, entre ellas; el desrame, estrobado, trozado y arrumado de los fustes. En Chile, la cosecha se efectúa con distintos niveles de mecanización pero, exceptuando el uso de cosechadoras, normalmente los equipos de trabajo incluyen 9 máquinas que combinan actividades que requieren mano de obra intensiva (Apud et al., 1999). De acuerdo a Otero (1984), entre las distintas ocupaciones en el bosque hay faenas que presentan mayor carga que otras, siendo la de volteo más liviana que el arrumado y desrame; sin embargo, en el trozado aumenta significativamente la carga para el motosierrista. El área de cosecha es considerada como la actividad más peligrosa de las ejecutadas en el sector forestal, debido a que las máquinas forestales se usan al aire libre, donde el trabajador está expuesto a las variaciones del clima, el terreno y a la producción de ruidos y vibraciones mecánicas de las máquinas. Estos agentes, cuando exceden ciertos límites, pueden alterar el bienestar, producir problemas de salud física y mental y provocar accidentes de gravedad, lo que también da como resultado una baja eficiencia operacional (Apud et al., 1999). En cuanto al comportamiento que ha tenido la permanencia de trabajadores en el área de cosecha, de acuerdo al Anuario estadístico de la ACHS (2005), ésta ha ido decreciendo durante los últimos años, tal como se observa en la tabla 8. Tabla 7: Evolución masa de trabajadores en actividades de cosecha del período 19982005. TRABAJADORES MENSUALES PROMEDIO COSECHA TOTAL BOSQUE 1998 1999 2000 10.138 10.309 10.566 19.457 22.035 19.456 2001 2002 2003 2004 2005 9.118 9.322 8.871 8.530 8.515 17.024 17.584 16.845 16.095 16.469 Fuente: Anuario estadístico ACHS, 2005. 10 De acuerdo al mismo anuario mencionado, el número de empresas ligadas al área cosecha, han aumentado durante los últimos años, presentando una baja a contar del año 1999 tal como se observa en la tabla 9. Tabla 8: Número de empresas del sector silvicultura. EMPRESAS COSECHA TOTAL BOSQUE 1998 1999 2000 2001 2002 2003 2004 2005 565 612 571 530 495 442 428 422 894 1.054 1.026 915 885 785 761 751 Fuente: Anuario estadístico ACHS, 2005. 3.2 EL TRABAJADOR FORESTAL El trabajador forestal es aquel que realiza labores directas de roce, plantación, poda, raleo, corta, aserreo, madereo, cuidado y explotación de bosques, bajo las órdenes del dueño del predio, obra o faena, o de su contratista o subcontratista. El trabajador forestal cumple con una jornada de trabajo definida según estación del año y características climáticas de la zona y tiene por ello derecho a una remuneración convenida y determinada (Dirección del trabajo, 2005). Los trabajos forestales, se desempeñan principalmente en zonas alejadas de los centros urbanos, lo que dificulta el acceso a la educación, salud y comercio. Además cuando es necesario trasladar el trabajo a campamentos, esta distancia y limitaciones se incrementan. La vida en ellos, es monótona y solamente esta marcada por el inicio y termino de la jornada de trabajo y por la preparación de alimentos en la noche. El cansancio diario y la falta de estímulos inhiben posibles actividades recreativas normales (Avaria, 1979). Los trabajadores forestales, generalmente tienen ciclos de trabajo de alrededor de 12 días con 3 de descanso, en los cuales viven en campamentos, donde comparten techo y comida con sus compañeros de labores, alejados en el bosque y a kilómetros de distancia 11 de sus hogares. En este lapso, la jornada diaria comienza antes de las ocho de la mañana, en donde desayunan y luego se reúnen con su supervisor, quién les dice qué tienen que hacer en el día, además de recordarles los procedimientos y las normas de seguridad, y se les asigna un lugar de trabajo en el bosque (Lignum, 2005). El trabajo diario se divide en dos turnos de 4 horas, sin embargo los trabajadores se toman un descanso alrededor de las 10 de la mañana, en el que suelen alimentarse para recuperar fuerzas, generalmente con agua y harina. En el caso de los motosierristas, éstos son dueños de su máquina y se deben preocupar de su mantención, por lo tanto la herramienta de trabajo para un motosierrista es tan importante como su condición física o capacidad de concentración. Para mantenerse vigente es necesario ser prudente ya que por lograr mayor cantidad de volteos y por lo tanto mayores ingresos, los motosierristas tienden a lesionarse la espalda, los riñones y sobre todo manos y muñecas. En relación a la edad de los operadores forestales, los trabajadores mas jóvenes son los podadores, ya que esta actividad requiere de personas ágiles y livianas, le sigue desramadores, boyeros y por ultimo motosierristas. Un bajo porcentaje de los trabajadores tiene más de 50 años, esto se explica debido a las exigencias físicas que demanda el tipo de faenas forestales. Los trabajadores con un mayor número de años en el rubro, poseen mejor calificación y destreza adquirida por los años, lo que permite una mayor estabilidad laboral y especialización, que los aleja de otras actividades productivas (Avaria, 1979). 3.2.1 LA ALIMENTACIÓN DEL TRABAJADOR FORESTAL. Las elevadas exigencias físicas que presenta el trabajo en los bosques, la alimentación y particularmente el consumo de calorías, es de gran importancia. Los trabajos pesados requieren alimentación que proporcione unas 4.500 kilocalorías por día y que sea equilibrada en términos nutricionales (Otero, 1984). En Chile existen pocos antecedentes en relación al consumo de calorías entre los trabajadores forestales. Según Otero la ingesta calórica en un grupo de obreros forestales 12 es en promedio 3.800 Kcal./día. La dieta, esta basada en los carbohidratos, particularmente pan en un 80%. Entre los alimentos menos mencionados están en primer lugar la leche y sus derivados, verduras y el grupo de carnes y huevo (Otero, 1984). Según lo citado por Otero, la capacidad aeróbica de los trabajadores forestales esta muy relacionada con su capacidad física. Los trabajadores forestales chilenos tienen una capacidad aeróbica muy similar a la de los suecos y superior al promedio de la población laboral chilena. Sin embargo, solo utilizan el 27% de ella, mientras que los operarios europeos trabajan al 50% de su capacidad. Esta diferencia se debe a la necesidad del trabajador chileno de ajustar su ritmo de trabajo a su deficiente consumo de calorías, y otros factores como fallas en la programación del trabajo, capacitación y falta de incentivos. (Otero, 1984). 3.2.2 FACTORES PSICOSOCIALES QUE AFECTAN AL TRABAJADOR FORESTAL. Un estudio realizado por Olate y Duran (2006), analizó los factores psicosociales y su incidencia en el trabajador forestal a través de encuestas realizadas a 1.446 trabajadores pertenecientes a empresas forestales adheridas al Instituto de Seguridad del Trabajo. Según los autores, los factores psicosociales influyen directamente en el desempeño del trabajador forestal, entre ellos está el entorno familiar-social, accidentes en la actividad laboral, capacitación, motivación y expectativas. Algunos de los resultados y conclusiones del trabajo, según los factores considerados para el estudio se presentan a continuación: - Entorno familiar-social Gran porcentaje de los trabajadores encuestados tiene uno o dos hijos, además un gran número de ellos declaró que el cónyuge o pareja no trabajaba. Por otro lado, se señala que un número importante de trabajadores cae debajo de la línea de la pobreza. Respecto de la escolaridad en los trabajadores, cabe destacar que aunque en general las nuevas generaciones presentan mayor nivel de estudios, existe un porcentaje importante de jóvenes con baja escolaridad, situación que se da en jóvenes menores de 36 años de edad. Los trabajadores entre los 37 años y 48 años, presentan escasa escolaridad y 13 casos aislados con estudios de enseñanza media. En los trabajadores mayores de 49 años, el porcentaje de personas con baja escolaridad se incrementa, a lo que se suma la presencia de trabajadores sin escolaridad alguna. La escolaridad condiciona la capacidad de comprensión de instrucciones, la superación a través de capacitación y el estatus social. En este sentido, los operadores de alta mecanización son quienes presentan mayor escolaridad (enseñanza media y estudios en institutos profesionales). Esta situación es seguida por los cargos de liderazgo y estrobero, los cuales también presentan estudios de enseñanza media, pero con un mayor porcentaje de personas sólo con estudios básicos. Finalmente, los cargos de motoserrista y boyerizo, son los que presentan el menor nivel educacional. - Accidentes en la historia laboral. Un 43% de los trabajadores reconoce haber tenido uno o más accidentes en su vida laboral, siendo el cargo de motoserrista el que reconoce mayor incidencia. Se señala además, que muchos accidentados son repetitivos, es decir sufren el mismo accidente más de una vez, lo que indica que faltan acciones correctivas. - Capacitación. Alrededor de un 90% de los trabajadores forestales considera que tiene capacitación, entre ellos están los motoserristas, cargos de liderazgo y operarios de alta mecanización, con un porcentaje un poco menor (60%), están estroberos y boyerizos. Sin embargo, entre un 80% - 90% de los trabajadores forestales indica que necesita capacitarse aún más, ya que la mayoría de los trabajadores (80% a un 95%) percibe como altamente riesgosas las condiciones del trabajo forestal. Los autores señalan que la capacitación actual es insuficiente, lo que lleva al trabajador a no estar seguro de sí mismo. - Motivación y expectativas. Entre un 80% y un 100% de los trabajadores forestales señalan que sus empresas les dan colación, y alrededor de un 71% de ellos, opina que éstas son buenas. 14 Respecto de si a los trabajadores forestales les gusta el sector forestal y si seguiría en el sector, los trabajadores indican que a pesar de que el sector les gusta, a futuro muchos preferirían no seguir en él. Además a pesar de que el 73% de los trabajadores considera que es bueno el trabajo en el sector forestal y que además tienen parientes trabajando en él, el 86% indica que no le gustaría que un hijo suyo trabajara en lo mismo. Existen cargos de importancia, como lo son los motosierristas y los grueros, donde los jóvenes no estarían realizando este tipo de labores. Relacionado con este resultado, los autores señalan que a pesar de que se observa que llega gente joven al sector, éste no es capaz de cautivarlos y muchos terminan por emigrar. 3.2.2.1 El consumo de psicotrópicos en el trabajador forestal De acuerdo a un estudio realizado por Sepúlveda (2007), acerca de la prevalencia de consumo de alcohol y otras drogas en trabajadores chilenos entre 18 y 65 años, distribuidos por sectores de actividad económica, se observó los siguientes resultados: En general, el sector Agrícola/Forestal presenta el mayor porcentaje (33,8%) de consumo de medicamentos psicotrópicos del país, seguido del área de Comercio/Transporte que presenta un 32,5% de consumo. En cuanto al consumo de tabaco, el sector Minería presenta un porcentaje de 3,4% de incidencia, seguido por el sector Comercio/Transporte con 3,3% de incidencia y el sector Agrícola/ Forestal con incidencia de 3,1%, ubicándose en la categoría de riesgo intermedio. Referente al consumo de alcohol, se estimó que los principales bebedores problema corresponden al sector Minería con un 31,7% y posteriormente el sector Agrícola/Forestal con 29,8%. También existe en los trabajadores una disposición al consumo de drogas ilícitas, siendo las más consumidas la marihuana y la cocaína. En este caso, es el sector Comercio/Transporte el que presenta el mayor porcentaje (21,1%), seguido del sector 15 Industria con 16,2% de disposición al consumo y por último el sector Agrícola/Forestal con un 14,6% de disposición. 3.2.3 ELEMENTOS DE SEGURIDAD DEL TRABAJADOR FORESTAL. De acuerdo a la Dirección del trabajo (2001), los Elementos de Protección Personal (EPP) de los trabajadores forestales son todos aquellos elementos que permiten prevenir o minimizar los efectos que pueda sufrir un trabajador a raíz de un accidente del trabajo o enfermedad profesional, transitoria o permanente, provocado por la ejecución de alguna labor. El obrero forestal siempre necesita usar el equipo de protección personal, por ser la faena forestal, una faena con riesgo de que ocurran accidentes graves y mortales. Los equipos de protección personal deben ser adecuados y cómodos para el trabajador, aunque a veces puede ser muy incómodo y agregan una carga más a la pesada faena de los trabajadores forestales. Algunos de los implementos de seguridad definidos por la Dirección del Trabajo (2001) se presentan en el anexo 10.1 (Pág. 114). 3.2.4 OBLIGACIONES Y DERECHOS DEL TRABAJADOR FORESTAL Las obligaciones del trabajador forestal, según la Dirección del Trabajo (2005) son: el efectuar el trabajo personalmente y por el tiempo que dure el contrato, utilizar y mantener adecuadamente los Elementos de Protección Personal (EPP) proporcionados gratuitamente por el empleador, respetar las medidas de prevención de riesgos implementadas, especialmente tratándose de trabajos con motosierra, aserraderos y uso de plaguicidas y solicitar a su empleador que lo capacite antes de iniciar cualquier trabajo. Los derechos del trabajador forestal, según la Dirección del Trabajo (2005), son: exigir la escrituración de su contrato de trabajo en 4 ejemplares, recibir la remuneración por sus servicios en la fecha pactada, disponer de 30 minutos para colación además de descanso diario, la jornada ordinaria diaria no puede superar de 10 horas por día, pactar por escrito hasta 2 horas extraordinarias diarias y por último exigir que el empleador señale los riesgos y las medidas de prevención que se deben adoptar en el trabajo. 16 3.3. LA ACCIDENTALIDAD Según la Organización Internacional del Trabajo (OIT, 1998), el accidente laboral se define como un suceso derivado del trabajo o que ocurre dentro del mismo y que acarrea lesiones mortales o no mortales. Según Lackington (1981), los elementos que conforman el ambiente de trabajo son las personas o elementos humanos y los medios físicos de trabajo. De la interacción de estos elementos se derivan los 4 factores constitutivos del accidente: Fuente del accidente: Se refiere a la labor que efectúa el operario dentro de la empresa al momento de accidentarse. Determinando la fuente del accidente es posible enfocar las medidas o acciones preventivas orientándolas hacia la labor de mayor frecuencia de accidentes. Agente del accidente: Es el elemento físico o material que participa directamente en el desarrollo del accidente. Causa del accidente: Se refiere al elemento humano o material que provoca el accidente. Dentro de las causas se distinguen dos conceptos, de acuerdo al elemento causante del accidente: I) Acto inseguro: la causa del accidente proviene del elemento humano, debido principalmente a un comportamiento imprudente del trabajador. Este concepto involucra aspectos conductuales del operario con respecto a su trabajo, tales como, la ignorancia del peligro, negligencia, distracción, etc. II) Condición insegura: el causante del hecho proviene del elemento material. Dentro de las condiciones inseguras se pueden citar causas como partes defectuosas, maquinas y herramientas con escasa manutención, etc. Tipo de accidente: se refiere a la forma en que se genera el contacto del accidentado con el objeto o sustancia que ocasiona el accidente. Según Lackington (1981), la condición insegura se da en los medios físicos de trabajador y si estos implican una agresividad para el elemento humano, entonces se dice que existe 17 riesgo. Este riesgo es una cualidad negativa del medio físico y puede ser inherente a él o adquirida. El accidente laboral puede provocar la muerte o la incapacidad de trabajadores, interrumpiendo procesos productivos lo que implica la existencia de un costo económico real y cuantificable, además del costo social intrínsico en un accidente (Ackerknecht, 2001). El número de accidentes de trabajo y sus índices en un país dependen del empleo, de la carga de trabajo y de la peligrosidad del trabajo. Existe una relación entre el índice de incidencia de los siniestros laborales y el ciclo económico, por lo que aquél suele aumentar en épocas de crecimiento intenso y decrecer en los periodos de recesión (Gallo y Viñes, 2001). Según los mismos autores, los siniestros laborales suponen altos costos de protección social, a la sociedad en su conjunto y especialmente sufrimiento a los propios afectados y familiares. Las pérdidas totales estimadas suponen cinco veces los gastos asegurados. De acuerdo a la OIT (2006), el costo de los accidentes de trabajo y las enfermedades profesionales representa aproximadamente el 4% del PIB anual. En España los costos por siniestros laborales superan el 3% del Producto Interior Bruto (Gallo y Viñes ,2001). Los costos directos en Chile, representan el 15% de los costos totales por accidentes de trabajo y enfermedades profesionales y están compuestos por un 3% de subsidios, 9% de gastos médicos y 3% de pensiones. Los costos indirectos por su parte representan el 85% de los costos totales, porcentaje desglosado en un 42% de perdidas de productividad humana, 23% de costos de materiales, 10% de costos generales, 9% por perdidas en la productividad en los procesos y por ultimo 1% por costos a terceros (Ackerknecht, 2003a). En Chile, se gastan a lo menos US $ 2.500 millones al año por concepto de accidentes labores, en costos directos, lo que representa entre 0,9-2,8% del PIB (Cantuarias, 2007). Ahora si se consideran los costos de las paralizaciones de proceso, instalaciones que quedan sin funcionar y el global de los efectos (costos indirectos), esta cifra puede 18 alcanzar a los US $6.000 millones, lo que representa alrededor del 10% del PGB (Chávez, 2000). Según Currieco (2002) en Chile, el costo total (directo e indirecto) calculado fluctuaría entre el 8% y el 10%. Según el mismo autor la proporción entre costos directos y costos indirectos deberían fluctuar entre 1:16 y 1:20 en Chile, a diferencia de la proporción 1:4 que exhiben los países desarrollados. En el mundo, se producen 3.000 muertes por accidentes del trabajo por día, es decir cerca de 250 millones de accidentes laborales por año. Análogamente, si en el mundo mueren en promedio 33 personas, cada 100.000 habitantes, en Chile fallecen 2,6. Si en el mundo hay 7 accidentados por cada 100 personas, en Chile esa cifra se reduce a 1,5 (Pizarro y Troncoso, 2004). Las actividades con mayor porcentaje de accidentes laborales son la construcción con un 11,43%, el transporte con un 10,99% y la agricultura con un 10,61%. Cada año, el sistema de vigilancia del Ministerio de Salud en Chile, registra alrededor de 400 accidentes de trabajo fatales, el 24% de ellos ocurrido durante el trayecto (Frenz, 2005). 3.3.1 INDICADORES DE ACCIDENTALIDAD Las estadísticas de accidentalidad permiten caracterizar e identificar las debilidades o fallas del sistema de seguridad aplicado a consecuencia de los accidentes del trabajo. Los indicadores de accidentalidad, definidos por la ACHS (2002a), y que permiten identificar la magnitud y gravedad de los accidentes son: • Tasa de accidentalidad: Cantidad de accidentes del período / cantidad de trabajadores del período x 100. • Tasa de siniestralidad por incapacidades temporales o Tasa de riesgo: Cantidad de días perdidos en el período / cantidad de trabajadores del período x 100. • Días perdidos: Cantidad de días perdidos a causa del accidente o enfermedad profesional. • Índice de Frecuencia: Cantidad de accidentes del período x 1.000.000 / cantidad de horas trabajadas en el período. 19 • Índice de Gravedad: Cantidad de días perdidos en el período x 1.000.000 / cantidad de horas trabajadas en el período. • Índice de Severidad: Días perdidos / NºAccidentes. De acuerdo al informe del Ministerio de Salud del año 2001, Chile tiene una tasa de accidentalidad de 8,19%, inferior a la tasa de accidentes de América Latina, pero aún muy lejos de la Unión Europea (Dirección del trabajo, 2003). Un punto importante a considerar con respecto a la accidentalidad en Chile, según Frenz (2005), es la escasez de estadísticas de accidentes de trabajo y de enfermedades profesionales. No se dispone de información fidedigna sobre la cobertura o acceso a actividades preventivas de higiene y seguridad o atención de salud. 3.3.2 ASPECTOS LEGALES A principios de los años 60 en Chile, se producía un accidente cada 11 segundos, además el 35 % del total de trabajadores se accidentaban al año, con expectativas de sufrir 15 accidentes para los trabajadores con 45 años de vida laboral (Cantuarias, 2007). Ante este oscuro escenario, en el año 1968 se crea la Ley 16.744 de Accidentes del Trabajo y Enfermedades Profesionales. Esta ley surge con el objetivo de otorgar a los trabajadores un seguro social que los proteja, a través de normas sobre los accidentes laborales y enfermedades profesionales (Ackerknecht, 2003a). La ley 16.744, contempla el seguro de las personas que sufran un accidente del trabajo, accidente del trayecto o enfermedad profesional. Se define como accidente de trabajo a toda lesión que una persona sufra a causa o con ocasión del trabajo y que le produzca incapacidad o muerte (Art.5, ley Nº16.744). Por otro lado, se entiende como accidente del trayecto a los accidentes ocurridos en el trayecto de ida o de regreso entre la habitación y el lugar de trabajo (Art.5, Ley 16.744). Finalmente, es enfermedad profesional la causada de una manera directa por el ejercicio de la profesión (Art.5, Ley 16.744) (ACHS, 1994). Para financiar las prestaciones que otorga la ley, los empleadores cotizan mensualmente, sobre la remuneración imponible de sus trabajadores, un valor básico (0,95%) y uno 20 adicional, determinado por el riesgo presunto de la actividad económica (entre el 0% y el 3,4%) (Torres, 2000). Las empresas tienen la obligación de tomar este seguro que contempla la ley para sus trabajadores, en cualquiera de los organismos administradores de la ley, sean públicos (INP) o privados (Mutualidades). Bajo esta categoría se encuentra la Asociación Chilena de Seguridad, en adelante ACHS, organismo administrador que se define como una institución sin fines de lucro. Sus actividades comenzaron el día 26 de junio de 1958. Su acción fue oficializada por la ley 16.744 que le dió carácter de organismo administrador del Seguro de Accidentes del Trabajo y Enfermedades Profesionales (Ackerknecht, 2003a). La distribución de cobertura del sistema mutual, nos indica que el 74% del mercado se encuentra afiliado a las mutuales, el 25% a INP y el 1% poseen autoseguro. Entre el mercado de las mutuales, el 53 % pertenece a la ACHS, el 33 % a la Mutual de la Cámara Chilena de Construcción y el 14 % al Instituto de Seguridad del Trabajo (Cantuarias, 2007). Según Frenz (2005), la cuarta parte de los trabajadores chilenos no cuenta con protección legal en caso de sufrir un accidente laboral. Respecto a la organización actual del sistema de protección para el trabajador chileno, Arteaga (2005), indica que un 26% de la población laboralmente activa está desprotegida, destacando el sector Transporte con un 44% y Comercio y Agricultura, con un 45%. La siguiente tabla contiene el número de accidentes registrados en la Superintendencia de Seguridad Social según mutual desde el año 2002 al 2006. Tabla 9: Número de accidentes registrados por mutual desde el año 2002 al 2006. NUMERO DE ACCIDENTES TOTAL 2002 2003 2004 2005 2006 237.517 234.106 238.523 248.098 246.314 Asociación Chilena de Seguridad 125.919 122.385 121.854 128.202 128.203 Mutual de Seguridad C.Ch.C. 75.965 76.722 78.997 79.436 77.500 Instituto de Seguridad del Trabajo 35.633 34.999 37.672 40.460 40.611 Fuente: Superintendencia de Seguridad Social, 2006. 21 El total de días perdidos para el año 2006 fue de 3.399.468, con una tasa de accidentalidad del 7,59% (Superintendencia de Seguridad Social, 2006). 3.4 EL SECTOR FORESTAL CHILENO 3.4.1 ALCANCES DE LA LEY 16.744 Las empresas de cosecha forestal cotizan, según la normativa expuesta anteriormente, adicionalmente el 2,55% sobre el sueldo imponible del trabajador y las de silvicultura el 1,70%. (Decreto Supremo Nº 110). De esto se desprende que la cotización total (0,95% + adicional) de las empresas de explotación forestal alcanza al 3,50% y la de empresas de servicios forestales al 2,65% (Torres, 2000). Los funcionarios del servicio de salud y organismos administradores están facultados para inspeccionar la totalidad de los trabajos e instalaciones que formen parte de las faenas forestales. Corresponderá también al servicio de salud mantener registros estadísticos de los accidentes y enfermedades profesionales que ocurran en las actividades forestales (ACHS, 2002b). En el caso de los contratistas, modalidad frecuente en el sector forestal, la empresa mandante para la cual se ejecuten las actividades asume la responsabilidad subsidiaria de la vida y salud de los trabajadores contratados por la empresa de servicios que se haya adjudicado la faena, Esto de acuerdo a la Ley de Subcontratación Nº20.123, que entro en vigencia el 14 de Enero de 2007 (BCN, 2007). Los empleadores y supervisores tienen la obligación de informar oportuna y convenientemente a todos sus trabajadores acerca de los riesgos que entrañan sus labores, de las medidas preventivas y de los métodos de trabajo correctos. Los riesgos son los inherentes a la actividad que desarrollará (inciso primero, articulo 21, decreto Nº40, ley 16.744) (ACHS, 2002b). De acuerdo al mismo autor, los empleadores que ejecuten actividades de aplicación de plaguicidas, roce, volteo, raleo, cosecha de árboles, aserrío y combate de incendios forestales, obligatoriamente deberán elaborar un programa de prevención de riesgos que 22 contemple como mínimo una inducción a trabajadores recién contratados, sin experiencia (programa de capacitación y entrenamiento en el trabajo). De este modo, señala el autor, deberá aplicarse un programa de competitividad, para trabajadores con experiencia, para comprobar sus conocimientos y destrezas en el lugar de trabajo; inspecciones, observaciones, investigación de accidentes, procedimientos de primeros auxilios y evacuación del accidentado de la faena. Según esto, todo trabajador que participe en una actividad forestal deberá cumplir las medidas de prevención expuestas en el programa antes mencionado. El no cumplimiento de estas medidas del programa de prevención de riesgos los hace inmediatamente responsables en caso de accidente (Ackerknecht, 2003a). En 1987, la Asociación Chilena de Seguridad crea el Programa Prevención de Riesgos Forestales y Madereros con el fin de reducir la alta ocurrencia de accidentes en empresas forestales e industrias de la madera (Lignum, 2004). En 1997 se creó el Código de Prácticas Forestales para Chile. Realizado por el Ministerio del Trabajo y Previsión Social y la ACHS. Este documento, formula recomendaciones específicas orientadas a mejorar las condiciones de trabajo en las diversas faenas forestales, destinadas a ser consideradas por las empresas y trabajadores forestales (ACHS, 1997). 3.4.2 ESTADÍSTICAS DE ACCIDENTALIDAD El sector forestal se ha convertido en uno de los motores de la economía chilena, presentando resultados de productividad y calidad reconocidos en los mercados internacionales. Sin embargo, esta innovadora área de la economía, presenta varios desafíos. Uno de ellos, es mejorar los índices de rentabilidad del negocio por disminución de los siniestros ocupacionales (Ackerknecht, 2005). En varios países del mundo, los accidentes en el sector forestal ocupan los primeros lugares dentro del conjunto de actividades económicas. Ello se refiere tanto a la frecuencia como a la gravedad de los accidentes, característico del trabajo con objetos de 23 gran tamaño y volumen (árboles), tratados en forma manual o mecanizada (Dirección del trabajo, 2001). Al año 1993, se estimaba que los accidentes del trabajo y enfermedades profesionales ocurridos a trabajadores en operaciones forestales e industrias de la madera reportaban al país una merma en rentabilidad de aproximadamente US$ 45,0 millones, correspondiendo al 4,8 % de las pérdidas directas e indirectas que por igual concepto experimentaba la economía chilena, en general (US$ 931 millones). La estadística más trágica detrás de todo este cuadro económico lo representaba la muerte de unos 25 trabajadores en el bosque cada año (Ackerknecht, 1995). Actualmente más de US$ 11 millones pierde cada año el sector forestal por causa de los accidentes laborales y enfermedades profesionales, los que en la última década se han reducido en número, pero incrementado en gravedad (Lignum, 2004). Según la Dirección del Trabajo (2005), los riesgos más comunes en las faenas forestales son: • Durante la cosecha de madera, en la cual se registran accidentes graves y mortales por golpes, caídas de árboles y cortes. • En el uso de maquinarias como motosierra, trineumático, skidder y en torres de Madereo. El rubro aserraderos y remanufactura de la madera es la actividad económica de más alto riesgo en Chile. El año 2004, por ejemplo, las industrias de la madera asociadas a ACHS, registraron una tasa de accidentalidad, (indicador que muestra el número de accidentes ocurridos en un año en relación con la cantidad de trabajadores), de 11,3%, en tanto que el promedio de todas las áreas de la economía nacional fue de sólo un 6,9%. Por su parte, la tasa de siniestralidad por incapacidades temporales, índice que relaciona la cantidad de días perdidos con la cantidad de trabajadores en las firmas madereras, fue de 180 versus 86 que obtuvo el conjunto de todos los rubros de la economía en empresas afiliadas con dicha mutualidad (Ackerknecht, 2005). 24 Las operaciones productivas en el bosque durante el 2004, según el mismo autor, presentan un panorama más favorable al reflejar una tasa de accidentalidad de 7,3% y una tasa de siniestralidad por incapacidades temporales de 151. Siendo las actividades forestales de alta peligrosidad, donde se ha logrado una notable disminución de los accidentes, aún es preocupante el aumento progresivo en la gravedad de los mismos. (Ackerknecht, 2005). En el área Bosque la tasa bajó desde un 11,2 % el año 1994 a un 2,2 % el año 2006. En tanto, el área de Aserraderos presenta una tasa del 2,7%; Celulosa un 2,6 % y la industria de Tableros y Chapas una tasa de 3,4% (Corma, 2007a). En el año 2006, la ACHS registró 13 casos fatales en el sector forestal, de estos casos, 8 pertenecían al área bosque (silvicultura y cosecha) y 5 a industria (Corma, 2007c). Los casos fatales tienen una tendencia variable, presentando duplicación de fallecimientos en el bosque, lugar donde tradicionalmente ocurren más decesos comparados con las actividades madereras (Ackerknecht, 2003b). Según Ackerknecht (2001), en los últimos 5 años se han obtenido significativas reducciones en Tasa de Accidentalidad (26,4%) y Tasa de Riesgo (21,6%). En el 2005 se registraron las siguientes estadísticas generales de ACHS en el sector forestal: Tabla 10: Estadísticas año 2005. Item Bosque Total Empresas 751 Total Accidentes 1.125 Masa Promedio/mes 16.469 Total Días Perdidos 23.614 Días Perdidos/accidente 20,99 Casos Fatales 7 Tasa Accidentalidad 6,83 Tasa Riesgo 143 Fuente: Anuario estadístico ACHS, 2005. Industria 1.053 3.948 39.351 67.644 17,15 4 10,03 172 Sector Forestal 1.804 5.073 55.820 91.258 17,93 11 9,09 163 A nivel nacional, los puestos de trabajo que reportan más accidentes son motosierristas, estroberos y hacheros. Los tipos de accidentes más frecuentes son golpes (22,9%), sobreesfuerzos / movimientos bruscos (10,3%), contacto con objetos cortantes (8,3%), caída mismo nivel (6,3%) y caída distinto nivel (5,7%) (Ackerknecht, 2006). 25 Las zonas del cuerpo lesionadas en accidentes producidos en trabajadores forestales, según un estudio realizado por Apud et al., (1999) son resumidas en la siguiente tabla: Tabla 11: Partes del cuerpo lesionadas en trabajadores forestales. PARTE DEL CUERPO LESIONADA % DEL TOTAL DE ACCIDENTES Cabeza y cara 15.0 Tronco 3.7 Extremidad superior 6.6 Mano y muñeca 17.9 Extremidad inferior 22.1 Pie y tobillo 13.1 Columna vertebral 15.4 Lesiones múltiples 1.9 Otros 1.0 Fuente: Apud et al., (1999). Las zonas del cuerpo más afectadas por los accidentes en trabajadores forestales son columna, extremidades inferiores y mano. En faenas de silvicultura y de cosecha la zona del cuerpo comúnmente lesionada corresponde a extremidades inferiores con un 26,1% y 27,3% respectivamente. En el rubro aserraderos la zona del cuerpo más afectada corresponde a la mano con un 28,3% (Ackerknecht 2001), Según Apud et al., (1999), parte importante de los accidentes que comprometen la cabeza son producidos por golpes de ramas o conos que caen y que podrían evitarse con el uso de cascos. Por su parte, al referirse a la cara, son los ojos la parte más afectada por partículas de polvo y aserrín, lo que justifica plenamente el que, al menos, los motosierristas utilicen protección facial. Entre las lesiones más comunes que se producen en la extremidad inferior, que corresponde al área del cuerpo más afectada, están los cortes producidos por la motosierra y otras herramientas cortantes, como el hacha y rozón. En el trabajo forestal no sólo se producen accidentes, los trabajadores también están expuestos a la aparición de enfermedades derivadas de su trabajo. Las principales causas de enfermedades del trabajo son problemas ergonómicos, ruido, vibraciones, sustancias químicas y otros factores (Dirección del trabajo, 2001). 26 En la Región del Bío Bío, la tasa de accidentalidad laboral es de 5,36% (año 2006), es decir, por cada 100 trabajadores, 5,36 sufren un accidente laboral en un año. Tales resultados están por debajo del promedio nacional que alcanzan a un 6,41%. En 1997 la tasa de accidentalidad llegaba al 12,43%, cifra que se redujo a 5,36% el año 2006. Estos resultados dan cuenta del avance que existe en la región en materia de seguridad y salud ocupacional, pues en casi una década la tasa de accidentes laborales se redujo en 57% (Lignum, 2006a). Las estadísticas de accidentalidad de Corma Bío-Bío, incorporan información proporcionada por 10 empresas forestales, que en el año 2006 involucraban una masa laboral en el área bosque (silvicultura y cosecha) de 22.172 trabajadores de promedio mensual (7,1% mayor que 2005). La tasa de accidentalidad fue de 2,27, levemente inferior a la tasa obtenida el año 2005 de 2,32%. Los 503 accidentes reportados, totalizan 13.808 días perdidos, con un Índice de severidad promedio de 27,5 días perdidos por accidente. La tasa de siniestralidad resultó en 62,3 quebrando la tendencia en alza que se registraba desde el año 2003 y que llegó a 108,3 el año 2005 (Corma, 2006). En la Figura 1 se observa el porcentaje de accidentes con tiempo perdido (CTP) registrado por la Corma por unidad de gestión para el año 2006. Figura 1. Porcentaje de accidentes con tiempo perdido por unidad de gestión. Fuente: Benchmarking de empresas forestales (Corma, 2007c). En la Figura 2 se observa el porcentaje de accidentes con tiempo perdido (CTP) registrado por la Corma por puesto de trabajo para el año 2006. 27 Figura 2. Porcentaje de accidentes con tiempo perdido registrado por puesto de trabajo Fuente: Benchmarking de empresas forestales (Corma, 2007c). El año 2005, el puesto de trabajo motosierristas alcanzo un porcentaje de accidentalidad del 35%, seguido de la categoría “Otros” con un 15%, hacheros con un 13% de accidentes, 10% conductores, 9% estroberos, 7% trabajadores silvicultura, 5% aplicaciones químicas, 4% operadores y 2% podadores (Corma, 2005a). Según la misma institución, en un estudio de accidentalidad de las empresas forestales incorporadas en la Corma, la parte del cuerpo más afectada resulta ser las extremidades inferiores con 37,1% de los casos (pierna 21% y pie 13%), cabeza en un 22% y en un 16% de los casos, las manos. La lesión más frecuente es la contusión con un 42%, seguida de laceraciones y fracturas, con un 23% y 12% respectivamente. Estos porcentajes corresponden al año 2004 y se mantienen respecto de lo ocurrido durante el año 2003. Para el mismo año, el tipo de accidentes que se registró mayor frecuencia fue el golpeado por o contra objetos, en un 37% de los casos, seguido de los casos de caídas (19%) y contacto con objetos cortantes en un 15%. Todas estas estadísticas son coincidentes con la ocurrencia histórica (Corma, 2005b). Los días con mayor frecuencia de accidentes son lunes (19%) y miércoles (17,3%), con una leve tendencia a disminuir hacia el fin de semana. Además, es frecuente sufrir accidentes por la mañana (52,8%), específicamente en el bloque de 10 a 12 hrs. (21,7% de los casos del día) (Corma, 2004). Las causas inmediatas (acción y/o condición insegura) más frecuente en la accidentalidad del año 2004, es el no cumplir con procedimientos o normas establecidas (33,2%) y superficie resbaladiza (25,4%). (Corma, 2004). 28 Las causas básicas más recurrentes para el mismo año, son la motivación o actitud inapropiada (74,5%) y debilidad en normas o procedimientos de trabajo (39,7%) en los factores personales y del trabajo, respectivamente. Estas causas se pueden atribuir en parte a falencias técnicas de gestión en recursos humanos y gestión técnica en normas y procedimientos (Corma, 2004). Comparando estadísticas con Nueva Zelanda, encontramos que tanto para faenas de cosecha como silvícola tenemos similar y menor cantidad de accidentes, respectivamente pero de mayor gravedad (Corma, 2004). 3.4.3 LA ACCIDENTALIDAD Y SUS CAUSAS Las EMSEFORES presentan características que de cierta forma afectan la seguridad de las personas que en ellas laboran, por lo general no existe un programa de producción asociado a uno de prevención de accidentes, además existe desconocimiento sobre los fundamentos básicos de seguridad e higiene industrial y de los principales aspectos legales establecidos en la Ley Nº 16.744 y sus respectivos decretos que la reglamentan (Paredes, 1995). Por otro lado, el mismo autor indica que para continuar participando en el proceso productivo, las empresas de servicios dependen de resultados financieros de corto plazo y están obligados además a tener una reducida estructura administrativa y de personal poco estable, ocasionando una alta rotación de los trabajadores. Estos factores influyen directa e indirectamente en la ocurrencia de accidentes. La temporalidad de las faenas es un factor que influye en el nivel de riesgo del sector, según Avaria (1979), la rotación continua del lugar de trabajo y el bajo nivel de remuneraciones perfilan un ambiente de inseguridad en las faenas. Se estima que un 47% de los trabajadores forestales laboran en faenas temporales (Ackerknecht, 1994a). Los frentes de trabajo, están a cargo de capataces o jefes de faena con una cantidad variable de trabajadores. Esta variabilidad de jefes de faena y de trabajadores se debe al número de faenas licitadas y a la rotación externa e interna que se produce en este sistema laboral. Estas situaciones dificultan la realización de actividades de prevención de riesgos e imposibilitan la aplicación del decreto Nº 54 de la Ley 16.744; sobre la formación 29 y funcionamiento de los Comités Paritarios de Higiene y Seguridad, requisito indispensable para obtener una rebaja de cotización adicional diferenciada en conformidad al Decreto Nº 173 de la ley (Paredes, 1995). Según el mismo autor, el sistema de salario a trato, establecido por contratistas y la urgencia con que normalmente se realiza las faenas forestales debido al establecimiento de plazos y multas de partes de las empresas mandantes, originan la extensión de la jornada diaria de trabajo. El 29% de los obreros trabajaba 10-11 horas diarias por día. Sin embargo, las horas efectivas de trabajo se reducen a 4 horas para una jornada de 9 horas diarias, debido a las numerosas pausas que tienen por objetivo ajustar el nivel de actividad física (gasto kilo-calorías) a la cantidad de kilo-calorías ingerida en los alimentos. Todo estos factores, incluido el sistema salarial influyen negativamente en la accidentabilidad. El sistema a trato dificulta la experimentación o cambios en los métodos de trabajo y organización de las faenas, lo que contribuye a la reducción de productividad y al aumento de accidentes (Avaria, 1979). Por otro lado, un estudio demostró que la frecuencia de accidentes y la capacitación tienen al parecer directa relación. El 100% de los trabajadores que sufrieron accidentes más de una vez, no poseían ningún tipo de capacitación; y que el 83% de los accidentados de esta categoría sufrieron un accidente, mientras que el 90% de los trabajadores que poseían capacitación no sufrieron ningún accidente (Otero, 1984). Según otro estudio, el 84% de los trabajadores accidentados no poseían capacitación, además los trabajadores calificados correspondían al 8%; administrativos: 7,9%; y profesionales: 1,7%. Torres, 1991) El mismo estudio anterior sobre accidentes del trabajo en operaciones forestales, reveló que el 73% de los siniestros se debían a acciones inseguras; vale decir, causadas por el trabajador (uso y mantención inadecuada de herramientas, equipos y máquinas; manipulación incorrecta de materiales; y similares). En consecuencia, se establece que existe una relación directa entre esta realidad y el alto porcentaje de personal no calificado en el sector forestal, lo que justifica un intenso programa de capacitación. 30 La participación de las acciones inseguras en los tipos de accidentes se debe principalmente al uso incorrecto, mantención y transporte de herramientas, equipos y maquinarias (Torres, 1990). Más de la mitad de los accidentes corresponden a métodos incorrectos de trabajo, desconocimiento técnico y falta de adiestramiento de la masa laboral del sector, lo que implica que estos trabajadores, en su mayoría, no han recibido capacitación (Torres, 1991). El trabajador, por falta de conocimiento, tiende a imitar, experimentar y a improvisar. La falta de aptitud para trabajar en el sector forestal, es otro de los factores limitantes, ubicar al hombre en el puesto de trabajo, según sus habilidades y teniendo en consideración sus limitaciones, es el primer paso para capacitarlo adecuadamente (Sarras, 1993). Avaria (1979), plantea que las condiciones ambientales influyen en los trabajos forestales más que en cualquier otra actividad. Cada factor no controlable del medio ambiente como las precipitaciones, viento, condiciones topográficas, temperatura, etc. demandan en el trabajador forestal un esfuerzo y atención extra que lo distrae del trabajo con la consecuencia lógica de una mayor probabilidad de riesgo de accidente y de enfermedad profesional. Además, se debe agregar que las faenas forestales se desarrollan en sectores alejados de los centros poblados, lo que dificulta el traslado de los trabajadores desde sus hogares contribuyendo a crear una nueva fuente de riesgo por las condiciones del traslado. En el caso de accidentes producidos en el combate de incendios, se estudió que los factores ambientales como topografía, viento y vegetación, eran causas principales de ocurrencia de accidentes fatales. Dentro de los factores humanos, esta la falta de experiencia, condición física y mental de los combatientes, producto de una carga de trabajo excesivo o por falta de educación del personal de trabajo, ya que puede presentar un perfil psicológico inadecuado para enfrentar situaciones de peligro (Pineda, 1997). También puede ser inadecuada la toma de decisiones del jefe de brigada y subestimar el incendio. Por lo tanto la topografía abrupta y pendiente mayor al 40% junto a una alta carga de combustible, inadecuada toma de decisiones e incumplimiento de normas de seguridad son las principales causas de ocurrencia de accidentes fatales durante el combate de incendios forestales. Además en cerca del 90% de los casos fatales, existe 31 falta de experiencia y en 88,8% de los casos, el análisis psicológico demuestra que los trabajadores no se encuentran aptos para esta actividad (Pineda, 1997). En el área de aserraderos y remanufactura las principales causas de los accidentes, nos indica que estos se producen principalmente por el incumplimiento de normas y procedimientos, falta de capacitación, y reforzamiento en tareas específicas, enfermedades profesionales (fatiga, stress laboral, entre otras), baja concentración en la tarea que realiza, adversas condiciones climáticas (Corma, 2007b). En el trabajo forestal, existen múltiples factores que provocan estado anímico de cansancio o agotamiento, debido al esfuerzo físico y mental que despliegan, todos ellos derivados de las condiciones físicas del lugar de trabajo, las características individuales de los sujetos, las características del grupo con quienes se desenvuelven, el clima social del trabajo, las características propias de la actividad forestal, las variables organizacionales y elementos asociados a su vida personal y familiar (Apud et al, 1999).Todos estos factores mencionados, se conjugan indistintamente a favor de la ocurrencia de los accidentes. 3.4.4 LA ACCIDENTALIDAD Y SU PREVENCIÓN Las empresas forestales chilenas han logrado un considerable avance en materia de certificación del manejo sustentable, lo cual refleja el nivel de compromiso que tienen en relación al cuidado ambiental de su patrimonio forestal (Ackerknecht, 2001). Según Ackerknecht (2002) En cuanto a la relación de la calidad con la seguridad y salud ocupacional, las normas originales de la serie ISO 9000 hacen referencia a prevención en los siguientes aspectos: -Control de procesos: ISO 9001, Sección 4.9.1.a; ISO 9002, Sección 4.8.1.a -Responsabilidad de la dirección y objetivos de la calidad: ISO 9004, Sección 4.3.1 -Prevención de riesgos y responsabilidad legal del producto: ISO 9004 (1987), Sección 19. La Organización Internacional de Normalización (ISO) elaboró la serie ISO 14000 sobre sistemas de gestión ambiental para establecer programas de éste orden en la empresa, 32 identificando objetivos, procesos de control y verificación. Si la serie original ISO 9000 apunta a alcanzar requerimientos del cliente, control de procesos y mejoramiento continuo (Figura Nº 1), ISO 14000 también lo pretende, y más aún, pues se amplía para incluir requisitos ambientales regulatorios y otros obligatorios (Ackerknecht, 2002). Según el mismo autor, los principios y criterios FSC (Forest Stewardship Council) deben ser considerados conjuntamente con la legislación y regulaciones nacionales e internacionales, complementando (y no reemplazando) iniciativas que apoyan mundialmente el manejo forestal responsable. En su punto 4.2 expresa “El manejo forestal deberá cumplir o superar todas las leyes y/o reglamentos aplicables a la salud y seguridad de los trabajadores y sus familias” Otras iniciativas que integran procedimientos de trabajo correcto en materias ambientales y de prevención de riesgos, son “Best Forest Management Practices (Varias organizaciones)”, “Model Code of Forest Harvesting Practice (FAO)”, “Recomendaciones de Conductas de Trabajo en Faenas Forestales (ACHS)” y “Código de Prácticas Forestales para Chile (Comisión Nacional Tripartita Forestal) (Ackerknecht, 2002). En 1999 aparecieron las Occupational Health and Safety Assesment Series (OHSAS), una guía certificable para evaluar sistemas de gestión en salud y seguridad ocupacional. Las normas OSHAS 18000 permiten generar políticas y objetivos que tomen en cuenta los riesgos y peligros asociados a la actividad. Funciona como complemento de las ISO 9000 y 14000, ya que comparten aspectos y facilitan su integración (Lignum, 2005). La misma publicación, señala que los beneficios de las empresas certificadas bajo esta norma son: reducción del número de personal accidentado mediante la prevención y control de riesgos en el trabajo; asegurar una fuerza de trabajo bien certificada y motivada a través de la satisfacción de sus expectativas de empleo; y la posibilidad de integración de un sistema de gestión que incluye calidad, ambiente, salud y seguridad. Un estudio, determinó que la certificación de sistemas de gestión ambiental y de manejo forestal sostenible incide en los resultados de seguridad y salud ocupacional, impactando positivamente en la rentabilidad de las empresas forestales chilenas. La mayoría de las empresas estudiadas, después de implementar los sistemas de gestión ISO 14001:1996, 33 FSC Y OHSAS 18001:1999, obtuvieron mejoramientos en tasa de accidentalidad, tasa de riesgo y promedio de días perdidos por accidente, además de presentar mejoras en los niveles de competitividad debido a la disminución de los indicadores de seguridad ocupacional (Lignum, 2006b). Junto a la promulgación de leyes y normativas gubernamentales complementarias, las empresas forestales y madereras han desarrollado y adoptado voluntariamente procedimientos de trabajo estrictos tendientes a mejorar la calidad de vida de las personas en el ambiente laboral (Ackerknecht, 2001). Entre los planes y programas que han desarrollado las empresas forestales chilenas, en apoyo a la gestión preventiva, según la Corma (2007b), se encuentran los siguientes: • Escuela de conductores forestales. • Escuela de operadores de maquinaria y equipos de cosecha forestal. • Formación de Monitores y Líderes de Seguridad Forestal. • Programas de capacitación, entrenamiento y seguimiento continuo para las tareas consideradas críticas (motosierristas, estroberos y conductores). • Certificación y competencias laborales. En julio de 2005, la Dirección Nacional del Trabajo, CORMA y las Confederaciones y Federaciones de Trabajadores Forestales, suscribieron un Protocolo para implementar una Metodología de Asistencia al Cumplimiento de las Normas Laborales, Previsionales, de Higiene y Seguridad que aplican a las actividades productivas del Sector, participando 115 empresas de servicios de la Región del Bío Bio (Aceituno, 2006). De acuerdo a la implicancia tanto social como económica de los accidentes, es de real importancia la existencia de un programa de prevención organizado, sistematizado y permanente que evalúe las posibilidades de riesgo de accidente a modo de evitarlo a favor de la empresa y del trabajador (ACHS, 1994b). La prevención de accidentes se debe preocupar de la determinación y la eliminación o control de las condiciones o actos inseguros (Lackington, 1981). Este programa debe contar además, con la participación de los trabajadores respecto al uso responsable de los elementos de protección personal especificados para cada labor, así como también a 34 la capacitación para una correcta ejecución de las labores demandantes de cada faena (ACHS, 1994b). La calidad y la productividad en el sector forestal, particularmente con el empleo de tecnologías básicas e intermedias, sólo puede lograrse en la medida que la respuesta de los seres humanos involucrados en los sistemas de trabajo sea compatible con sus capacidades y limitaciones (Apud et al., 1999). El mismo autor, explica que es muy difícil desarrollar labores seguras y eficientes con trabajadores fatigados física y mentalmente, por exceso de trabajo, por mala organización o porque sus requerimientos no se satisfacen plenamente. Por esta razón es fundamental contar con rendimientos de referencia para cada tarea que se efectúa en el bosque. Se debe considerar, además de los aspectos tecnológicos, la carga que un ser humano puede tolerar sin fatiga y las dificultades que le impone el rodal, el terreno y el clima. La capacitación ocupacional, entiéndase como un proceso sistemático que tiene por objetivo entregar conocimientos técnicos, desarrollar habilidades y motivar a los trabajadores para que desarrollen las actividades en la forma más eficiente y segura, es la solución más eficaz a corto y mediano plazo para disminuir la accidentalidad (Sarras, 1993). Según el autor, un trabajador bien motivado y que es objeto de una preocupación personalizada por parte de la empresa y que cuenta con una remuneración adecuada y acorde con su desempeño, es el mejor recurso para obtener no sólo una elevada productividad, sino que a una mayor conciencia y compromiso con la empresa. Por tales razones, un diagnóstico sobre los posibles riesgos de accidentes, en el horario, día de semana, rango de edad, agente, etc., en las empresas, permitirá establecer las variables que inciden en la accidentalidad laboral y lograr así un método de análisis y control de estos riesgos laborales. 35 4 MATERIAL Y MÉTODO 4.1 MATERIAL La información requerida para este estudio corresponde a la bases de datos de la Gerencia de Prevención de la Asociación Chilena de Seguridad. Este organismo, sin fines de lucro, cuenta con completos informes anuales de los accidentes ocurridos en las empresas forestales afiliadas a esta institución en el área bosques e industrias de la madera. Las empresas afiliadas a este organismo representan al 50% del total de empresas forestales en el país y al 63% de la masa total de trabajadores forestales. Estos datos, son obtenidos de la Declaración Individual de Accidentes del Trabajo (DIAT) que corresponde al documento de denuncia de accidentes que administra la ACHS. Este documento contiene diversas variables relacionadas con los antecedentes laborales del accidentado, que permiten conocer la incidencia de la variable en el suceso y de este modo caracterizar el accidente en el sector forestal. Las variables incluidas en los estudios casuísticos del DIAT son: • Edad del accidentado: es necesario determinar a que clases de edad corresponden los trabajadores accidentados ya que nos permite orientar las labores de prevención según el segmento de edad que corresponda. • Carácter actividad: nos indica si el accidentado corresponde a un trabajador con contrato permanente en la empresa en la cual se desarrolla o bien, es un trabajador ocasional. • Denuncia accidente: nos entrega a información sobre el momento en el cual se realiza la denuncia, si esta fue durante el mismo día del accidente o días después del hecho. • Antigüedad en la empresa: se refiere al tiempo que lleva el trabajador accidentado en la empresa en la cual se desempeña laboralmente al momento del accidente. • Experiencia en la labor: corresponde al tiempo que el trabajador posee ejecutando la labor en la cual se accidento. • Hora accidente: nos indica la hora de la jornada laboral en la cual se produjo el accidente. 36 • Día semana: nos permite establecer el día de semana laboral más frecuente en la ocurrencia de accidentes. • Horas trabajadas: hace referencia a las horas de trabajo transcurridas hasta el momento del accidente. Esta información nos permite conocer sobre el efecto de las horas de trabajo en la ocurrencia de accidentes. • Tipo accidente: corresponde a la forma en que se produce el contacto entre el trabajador lesionado y el elemento físico del ambiente del trabajo que provoca la lesión. De acuerdo a esta definición la ACHS realizo la siguiente clasificación de tipos de accidente: Caída mismo nivel, Caída de distinto nivel, Golpeado por o contra objetos o materiales, Atrapamiento en máquinas, materiales o instalaciones, Contacto con objetos cortantes, Contacto con objetos punzantes, Contacto con fuego u objetos calientes, Proyección de partículas, Proyección de líquidos, Explosión de arco eléctrico, Sobre esfuerzo por peso excedido o movimiento brusco, Atropellamiento o choque y por ultimo otros tipos. • Agente accidente: Es definido como el elemento físico del ambiente de trabajo que provoca la lesión (ACHS, 1993). Las categorías para esta variable son: Maquinas y equipos, Herramientas con/sin motor, Materiales que se trasladan, Materiales que se proyectan, otros materiales u objetos, Humos, gases o vapores en el aire, Superficie de trabajo en altura, Superficie de trabajo en el mismo nivel, Zonas de tránsito, Vehículos para transporte de personas, Vehículos para transporte de materiales, Otros agentes. • Zona del cuerpo lesionada: hace referencia a la parte del cuerpo que resulta afectada producto del accidente. Esta información permite hacer hincapié en las medidas de control de uso de los elementos de protección personal. • Días perdidos: corresponde al número de días de ausencia laboral del trabajador lesionado producto de un accidente. La información contenida en los registros del DIAT, está desglosada por actividad económica, región y período. Para el desarrollo de este estudio, se utilizó la información correspondiente a la actividad económica Sector Forestal, el cual agrupa el área Bosques e Industrias de la Madera (clasificación preestablecida por la ACHS). 37 De acuerdo a los objetivos de esta memoria, se utilizó en forma particular el área Bosque, la cual contiene los rubros1 de Silvicultura y Cosecha Forestal. Cada uno de estos rubros, fue analizado en forma independiente, utilizando la nomenclatura2 dispuesta por la ACHS, presentada a continuación: Tabla 12: Rubro y nomenclatura asociada al área bosque. Área Bosque Rubro Nomenclatura Silvicultura 021 Cosecha 022 De la información correspondiente al sector forestal y a los rubros 021 y 022, se utilizó datos a nivel nacional de acuerdo a los siguientes períodos: • Promedio del quinquenio 1998-2002 • Año 2003 • Año 2004. Para efectos de esta memoria de título, se consideró sólo registros a nivel nacional, de modo de obtener resultados que abordaran la realidad forestal en su magnitud, donde la VII, VIII, IX y X Región representan el 95% de la actividad forestal, mientras que el 5% se distribuye en las regiones restantes del país. La información fue entregada a través de documentos impresos, por lo tanto se digitó y procesó en planillas Excel. El formato de los datos utilizado, se expresó en porcentajes y frecuencias, donde la unidad representativa corresponde a la cantidad de trabajadores accidentados por período y por rubro o área, según el caso. Las áreas estudiadas, contienen rubros y éstos a su vez, agrupan diversas actividades que describen el nivel de labores que se realizan. Las faenas o actividades incluidas en el rubro silvicultura, corresponden a las desarrolladas en el bosque in situ. Entre ellas, se encuentran actividades de preparación de suelo, plantación y mantención de esta. Cosecha, por su parte incluye actividades de volteo, madereo y carguío. Dentro de estos rubros, también se incorporan a trabajadores forestales que desempeñan labores de combatiente en incendios y guardabosques entre otros. El detalle de las clasificaciones de 1 Corresponde a la nomenclatura utilizada por la ACHS, la cual hace referencia a la agrupación de faenas o actividades involucradas en cada segmento según la actividad económica. 2 Las nomenclatura correspondiente al área Industrias de la Madera se detalla en apéndice 9.1 (Pág. 103) 38 las actividades o faenas contenidas en los rubros silvicultura y cosecha forestal, son descritas en el apéndice 9.2 (Pág. 103). 4.2 MÉTODO Las variables mencionadas, se estudiaron para los rubros silvicultura y cosecha por periodo de estudio. Es decir, se establecieron comparaciones entre los rubros para cada periodo considerado. En el caso del sector forestal, se establecieron comparaciones por variable entre los periodos considerados. Es decir, se analizó el comportamiento del sector en los periodos definidos de acuerdo a cada variable. La comparación entre variables no es posible, debido a que son de carácter independiente y no están relacionadas estadísticamente entre si. El desarrollo de la fase de introducción de datos, permitió evidenciar la ausencia de valores. Es así, como se presentaron dificultades en el acceso a la información. Si bien, esta falta de información en los registros de la ACHS no afecta los objetivos principales de esta memoria, es necesario mencionarla. El detalle de los datos entregados por la ACHS, para el análisis se encuentra en el apéndice 9.3 (Pág. 105). 4.2.1 SIMBOLOGÍA DE LAS VARIABLES Con el objetivo de facilitar la comprensión y claridad de los resultados graficados, se designaron abreviaturas para las categorías de las variables que contengan nombres extensos y o numerosas categorías. Las categorías y su simbología se presentan a continuación por variable: Tabla 13: Día Semana Lunes Martes Miercoles Jueves Viernes Sábado Domingo Tabla14:Tipo accidente Lu Ma Mi Ju Vi Sa Do Caída Golpeado por/contra Atrapamiento Contacto con objetos Proyección Sobre esfuerzo Atropellamiento o choque CA GPC ATR CCO PRO SE ACH 39 Tabla 15: Agente accidente Tabla 16: Zona Cuerpo lesionada Maquinas y equipos Herramientas con/sin motor Materiales Otros materiales u objetos Superficie de trabajo Zonas de transito Vehículos OjoPárpados Cabeza Tronco Brazo Mano Pierna Pie Lumbago Otros MAQ HER MAT OTR ST ZT VEH OP CAB TRO BRA MAN PER PIE LUM OTR 4.2.2 PREPARACIÓN DE DATOS Los rangos de algunas variables se reasignaron en nuevas categorías, para obtener una mayor representatividad en cada caso, a modo de obtener una clara y sencilla distribución y procesamiento de los datos. Este es el caso de las siguientes variables: i) Edad del accidentado El rango de edades dispuesto originalmente por la ACHS, incluye categorías desde menores de 18 hasta mayores de 61 años, distribuidas cada 3 años. Debido a que se forman numerosas categorías de acuerdo a esta distribución, se propuso agrupar clases de edad según una secuencia lógica de 10 años aproximadamente por clase. A continuación se presenta los rangos propuestos: < 21 21-30 31-40 41-50 51-60 > 60 ii) Antigüedad en la Empresa El ordenamiento original poseía 3 rangos (1mes, 12 meses, 1 año o más), la cual se redujo a 2 categorías compuestas por rangos cronológicos de 12 meses. Esto por que el rango reasignado poseía una baja frecuencia. A continuación se presenta lo propuesto: 0-12 meses 1 año o mas Iii) Experiencia en la labor Se utiliza el mismo procedimiento anterior, debido a que poseía iguales rangos, y por lo tanto se mantienen las mismas categorías. 40 iv) Hora accidente El formato original propuesto por la ACHS, presenta rangos cada una hora, las 24 horas. Es decir, contenía 24 rangos en total. Los rangos extremos no presentaron valores, debido a la ausencia de actividad laboral en esos horarios, por lo que no se contabilizaron. Se consideró entonces para el análisis, frecuencias distribuidas desde las 7 de la mañana hasta las 21 horas, agrupadas cada dos horas, como se observa a continuación. 7-9 10-12 13-15 16-18 19-21 v) Horas trabajadas Al igual que en el caso anterior, los rangos estaban dispuestos por hora, desde 1 hasta las 12 horas, lo que dificulta el análisis de los datos por la extensión y poca representatividad de estos. De este modo, se propuso agrupar los rangos en categorías cada 2 horas, como se observa a continuación: 1-2 3-4 5-6 7-8 9-10 11-12 vi) Tipo accidente Esta variable, esta clasificada en numerosos rangos que no permiten visualizar la distribución de las frecuencias. Del total de rangos originales, se aisló del estudio el rango “Otros”, ya que a pesar de contener tipos de accidentes no clasificados que debieran presentar bajos porcentajes, estos poseían una alta representatividad. Además este rango, carecía de información que explicara su valor, ya que no estaba definido originalmente. Solo se deduce, que contenía aquellos casos no encontrados en los rangos definidos por la ACHS. Además, se decidió incluir algunos rangos de tipos de accidentes en nuevas categorías, a modo de disminuir su número y mejorar la comprensión de datos. De este modo, se realizó la siguiente modificación: 41 Tabla 17: Modificación Tipo accidente Rangos ACHS Caída del mismo nivel Caída de distinto nivel Golpeado por / contra objetos mater. Atrapamiento en maq. mater.instalac. Contacto con objetos cortantes Contacto con objetos punzantes Contacto con fuego u objetos calientes Proyección de partículas Proyección de líquidos Explosión de arco eléctrico Sobre esfuerzo por peso exec.o mov. Brusco Atropellamiento o choque Categorías propuestas Caída Golpeado por / contra Atrapamiento Contacto con objetos Proyección Sobre esfuerzo Atropellamiento o choque vii) Agente accidente Como en el caso anterior, se excluyo del análisis la categoría “Otros”, por la escasa información que entrega al estudio. Como propuesta, se incluyeron los rangos originales, dentro de categorías generales, como se observa a continuación: Tabla 18: Modificación Agente accidente Rangos ACHS Maquinas y equipos Herramientas con / sin motor Materiales que se trasladan Materiales que se proyectan Otros materiales u objetos Humos, gases o vapores en el aire Superficie de trabajo en altura Superficie de trabajo en el mismo nivel Zonas de transito Vehículos para transporte personas Vehículos para transporte material Categorías propuestas Maquinas y equipos Herramientas con / sin motor Materiales Otros materiales u objetos Superficie de trabajo Zonas de transito Vehículos viii) Zona del cuerpo lesionada Se realizó la agrupación de clases utilizando los siguientes criterios; 5 sentidos identificados en la clasificación original, zonas del cuerpo utilizadas con mayor importancia en los trabajos forestales, tales como; brazo y mano, categorías según la ubicación de las partes del cuerpo afectada, y clases pertenecientes al sistema del 42 metabolismo. Algunas categorías como por ejemplo ojos y lumbago no se agruparon debido a su importancia y a su independencia lógica. La categoría otros, incluye el rango “otros” del archivo original, donde no se especifica las zonas del cuerpo afectadas a causa de los accidentes. Sólo se hace mención de casos en el que no encuentran clasificación, y además incluye clases donde el porcentaje es poco representativo o bien no pertenece a las categorías antes clasificadas como enfermedades y sistemas del metabolismo afectado. El detalle de las nuevas clasificaciones se presenta a continuación: Tabla 19: Modificación Zona del cuerpo lesionada Rangos ACHS Ojo-Párpados Cabeza Frente Cara Boca Nariz Esófago Cuello Oído Tórax Abdomen Costillas Cadera Cóccix Clavícula Pelvis Espalda-Dorsalgia Columna Brazo Antebrazo Codo Hombro Mano Muñeca Dedos manos Categorías propuestas Ojo-Párpados Cabeza Tronco Brazo Mano Rangos ACHS Pierna Muslo Rodilla Pie Tobillos Ortejos Lumbago Lesiones múltiples Piel Sistema digestivo Sistema circulatorio Multisistémico Otros Generalizado Epilepsia Neurosis Bronquios Bronquitis Crónica Reacciones de adaptación T.E.C (Demencia síndrome) Testículos Categorías propuestas Piernas Pie Lumbago Otros 43 ix) Días perdidos La clasificación de las categorías, dispuestas para el estudio, contemplan días consecutivos desde 1 hasta 26 y luego agrupa valores extremos, por lo tanto la información está distribuida en forma dispersa. Por esta razón, la agrupación de datos se realiza en rangos de 7 días, y una categoría final que incluye los valores extremos, como se muestra a continuación; 01-07 08-14 15-21 22 o Mas 4.2.3 ANÁLISIS DESCRIPTIVO 4.2.3.1 Análisis de variables casuísticas Con los datos digitalizados, se confeccionaron gráficos de barra, a fin de visualizar las diferencias entre los rubros y periodos estudiados para todas las variables casuísticas utilizadas en el estudio. Los gráficos, representan la distribución de los casos de accidentes para los rubros de silvicultura y cosecha para los periodos 1998-2002, 2003 y 2004 correspondiente por variable casuística en el ámbito nacional. El formato utilizado para el análisis grafico es en porcentajes. El análisis en cuestión, comparará los porcentajes de accidentalidad distribuidos en las distintas categorías de cada variable, en los rubros de silvicultura y cosecha. Se utilizará la media y la desviación estándar como herramienta de análisis de descripción. A modo de facilitar la comprensión de resultados se promediaron los períodos y se presentó el gráfico en aquellas variables de misma tendencia. Para el análisis de accidentalidad del Sector Forestal, se utilizó estudios casuísticos a nivel nacional. Este análisis se desarrollará en forma descriptiva y no pretende analizar en forma detallada el área industrias de la madera. El objetivo es obtener información que sirva como referente para el análisis del área Bosques y permita a su vez obtener una visión general del escenario forestal respecto al tema de la seguridad ocupacional. 44 El sector forestal sólo se analizó gráficamente, para variables que registren datos de los periodos completos, es decir las variables: Edad, Tipo accidente, Agente accidente y Zona del cuerpo lesionado. Las graficas se confeccionaron con la sumatoria de los componentes del sector forestal; Bosques e Industrias de la madera, y representan el porcentaje de accidentes ocurridos en los periodos del promedio del quinquenio 19982002, año 2003 y 2004. 4.2.3.2 Indicadores de accidentalidad Actualmente, los indicadores de accidentalidad más utilizados corresponden a la tasa de accidentalidad y tasa de siniestralidad, las cuales relacionan la cantidad de accidentes y días perdidos por accidentes del trabajo por cada cien trabajadores expuestos. Estos indicadores se presentan y analizan para un periodo de 10 años comprendido desde el año 1993 al 2005. También se dió a conocer los días perdidos por accidente para el mismo rango de tiempo. La evolución de los indicadores de accidentalidad; tasa de accidentalidad, tasa de siniestralidad y días perdidos, se analizó gráficamente para los componentes del área Bosque; Silvicultura y Cosecha y para los correspondientes al sector forestal; Bosques e Industrias de la madera. Además se analizó la tasa de accidentalidad por actividad económica para los años; 2003, 2004 y 2005. Las tasas de siniestralidad por actividad económica, se analizó para el año 2003. Los valores registrados según actividad económica, corresponden a los definidos por la ACHS. 4.2.4 ANÁLISIS ESTADÍSTICO 4.2.4.1 Análisis de variables casuísticas Para el análisis estadístico, fue necesario realizar la conversión de los datos de porcentajes a frecuencias. Los datos se ingresaron en tablas y corresponden al número de accidentes para una determinada categoría de la variable en estudio y para un determinado rubro. Con estas tablas se obtuvo una descripción cuantitativa, en forma de frecuencias y porcentajes. Estos últimos son relativos al total de la muestra. Además de lo anterior, se realizó diversos contrastes acerca de la distribución de las frecuencias observadas en dicha tabla, de acuerdo a distintas hipótesis. El más clásico de estos contrastes es el de homogeneidad que propone, como hipótesis a rechazar, que ambos criterios de clasificación son homogéneos. Chi-cuadrado es una prueba no 45 paramétrica utilizada para el contraste de homogeneidad, esta prueba es aplicada en este estudio con el objetivo de conocer la heterogeneidad u homogeneidad de la distribución de frecuencia de las variables casuísticas del estudio. Se realizaron pruebas de Chi-cuadrado por cada variable y período para casuísticas que contengan más de dos rangos de clasificación, donde se contrastó frecuencias observadas y esperadas de accidentes producidos en los rubros de silvicultura y cosecha. Se pretendió determinar la homogeneidad o heterogeneidad de la distribución de frecuencias de las variables en estudio. Se consideran accidentes registrados a nivel nacional. Para el análisis de distribución de porcentajes de accidentes del sector forestal, Chicuadrado permitió contrastar el comportamiento durante los periodos; promedio de 19982002, año 2003 y 2004. Además se utilizó esta prueba, para estudiar la homogeneidad de la distribución del número de accidentes anuales registrados desde el año 1993 hasta el 2005. Se contrastó este comportamiento entre los rubros silvicultura y cosecha y entre las áreas bosques e industria de la madera. Para variables que contengan dos categorías de clasificación, se aplicó test de Z como prueba estadística para comparar proporciones (porcentajes), ya que entrega mayor confiabilidad para tablas de doble entrada. Este es el caso de las siguientes variables; Carácter actividad, denuncia accidente, antigüedad en la empresa y experiencia en la labor. En los dos últimos ítems se agruparon rangos con el fin de obtener la cantidad exigida de clases para esta prueba, debido a que como se menciono anteriormente, el resultado de la misma presenta mayor confiabilidad que la prueba Chi-cuadrado. Como se mencionó anteriormente, las variables que no presentaron diferencias en la distribución de los porcentajes en cada periodo, se graficó sólo el promedio de éstos, presentado el detalle por período en apéndice.Con el objetivo de comparar las proporciones por categoría entre los rubros silvicultura y cosecha para cada variable, se promediaron los datos de los periodos correspondientes. De este modo, se conoce si existe diferencia significativa entre las proporciones de los rubros silvicultura y cosecha promediadas por cada categoría que componen las variables en estudio. Para este análisis se aplicó el test de Z. 46 5 RESULTADOS Y DISCUSION 5.1 ANÁLISIS DE ACCIDENTALIDAD PARA LOS RUBROS SILVICULTURA Y COSECHA. El total de accidentes nacionales, para el promedio del quinquenio 1998-2002 es para silvicultura y cosecha; 721 y 985 accidentes respectivamente, en tanto los días perdidos para silvicultura y cosecha son respectivamente; 10.600 y 19.790. Para el año 2003 el número de accidentes es 488 para silvicultura y 836 para cosecha con un total de 7.969 días perdidos para silvilcultura y 19.793 días para cosecha. El año 2004 registra 436 accidentes para silvicultura y 740 casos para cosecha con 6.946 días perdidos para silvicultura y 17.316 para cosecha. 5.1.1 ANÁLISIS DE VARIABLES CASUÍSTICAS. 5.1.1.1. Edad Porcentajes de accidentes para el promedio de los periodos 1998-2002, 2003 y 2004 por rubro. Figura 4. Promedio de los porcentajes por categoría de Edad de los periodos 1998-2002, 2003 y 2004 para silvicultura y cosecha. Fuente: Elaboración propia. 47 De acuerdo a estos resultados se puede apreciar que la clase de edad entre 21-30 años presenta mayor porcentaje de accidentes, con 33,4% para silvicultura y un 35% de los casos para cosecha. Estos porcentajes se traducen respectivamente en 173,3 casos producidos en el rubro silvicultura de un total de 519 accidentes nacionales promedio y 285,9 accidentes en el rubro cosecha de un total de 815 casos promedio ocurridos a nivel nacional para este periodo. Silvicultura y cosecha en esta categoría superan a la medía en un 16,7% y un 18,4% respectivamente, con una desviación de 12,3% para silvicultura y 13,2% para cosecha. Se puede deducir que la categoría joven se accidenta con mayor frecuencia tanto en los rubros de silvicultura como en cosecha. Según el gráfico el máximo para los dos rubros, se produce en la clase 21-30 y luego tiende a disminuir a medida que avanza la clase de edad. Por otra parte es importante señalar que las clases de edad de los extremos presentan menor frecuencia de accidentes, esto se puede deber a que el número de trabajadores forestales que pertenecen a estas categorías de edad es menor con respecto a las otras clases de edades. Así lo confirma la literatura, donde se señala que un bajo porcentaje de trabajadores forestales exceden los 50 años, debido a las exigencias físicas del trabajo. Según el análisis estadístico, en ambos rubros las edades de los trabajadores no difieren según las categorías de edad, es decir las distribuciones de edades de los accidentados entre silvicultura y cosecha son homogéneas. Esta situación se presenta en los tres periodos estudiados. Los resultados de las pruebas estadísticas para cada período se presentan en el apéndice 9.4.1 (Pág. 106). En el periodo 2003, en el rubro silvicultura, se accidentan principalmente adultos, esto resulta interesante ya que supuestamente en esa categoría de edad los trabajadores poseen mayor experiencia y responsabilidad con su actitud laboral. Los porcentajes de ocurrencia por categoría de edad por período para silvicultura y cosecha se presentan en el apéndice 9.5.1 (Pág. 108) Al comparar el porcentaje de accidentes en cada categoría de edad para el promedio de los períodos, no se observaron diferencias significativas entre los accidentes distribuidos en los rubros de silvicultura y cosecha por rango de edad. La tabla de resultados para estas categorías, se encuentra en el apéndice 9.6.1 (Pág. 109). 48 5.1.1.2. Carácter actividad Porcentaje de accidentes para el promedio de los periodos 1998-2002 y 2003 por rubro. Figura 10. Promedio de los porcentajes por categoría Carácter actividad de los periodos 1998-2002 y 2003 para cada rubro. Fuente: Elaboración propia. Para los rubros silvicultura y cosecha se observa igual comportamiento, donde los accidentes se concentran en las actividades de carácter permanente con cerca del 90% de casos (85% y 91% para silvicultura y cosecha respectivamente), superando a la medía en un 34,8% en silvicultura y un 41% en cosecha, con una desviación de 49,2% para el rubro silvicultura y 58,2% para cosecha. Se declararon en promedio 514,2 casos en silvicultura y 798,9 para cosecha en total. En general la tendencia y el porcentaje de casos por categorías son homogéneos para los rubros analizados. Existe una leve diferenciación en la categoría ocasional donde silvicultura supera en número de casos de accidentes con respecto a cosecha, luego en la siguiente categoría esta diferencia se invierte. La significativa ocurrencia de accidentes en actividades permanentes nos indica que a pesar de representar una condición estable para el trabajador por la característica de permanencia en la empresa, la inseguridad laboral con respecto a la accidentalidad es alta. Esto se puede deber a dos causas, por un lado y debido al problema de irregularidad de contratación de los trabajadores, puede ser que un número importante de ellos no se encuentre en los registros por razones de temporalidad de los trabajos, por otro lado se 49 puede pensar que los trabajadores permanentes en la empresa, no cuentan con un programa de prevención efectivo y adecuado a sus necesidades, considerando que los accidentes se producen mayormente debido a acciones inseguras de los trabajadores por falta de capacitación. Al comparar la proporción de accidentes ocurridos entre los rubros silvicultura y cosecha en el tipo de actividad, se observaron diferencias significativas, tanto para la categoría permanente como ocasional en los periodos 1998-2002 y 2003. Los resultados del análisis estadístico para cada periodo se presentan en el apéndice 9.4.2 (Pág. 106). Los porcentajes de ocurrencia por categoría de carácter actividad para silvicultura y cosecha por período se presentan en el apéndice 9.5.2 (Pág. 108). Para el promedio de los periodos, la comparación de las proporciones de accidentes entre los rubros por categoría (ocasional y permanente), mostró diferencias significativas entre silvicultura y cosecha. Los resultados de este análisis estadístico se encuentran en apéndice 9.6.2 (Pág.109) 5.1.1.3. Denuncia accidente 5.1.1.3.1 Porcentaje de accidentes para el quinquenio 1998-2002 Figura 11. Porcentaje de accidentes distribuidos en las categorías de denuncia para el promedio del quinquenio 1998-2002. Fuente: Elaboración propia 50 Tanto en silvicultura como en cosecha la denuncia de los accidentes se realiza el mismo de ocurrido el hecho. En la categoría mismo día silvicultura registra 60,9% de los casos superando a la medía en un 2,8%, mientras que cosecha presenta un 63,2% de los casos superando a la medía en un 9,1%. La dispersión de los datos 4% para silvicultura y 12,9% en cosecha. Los porcentajes equivalen respectivamente para el rubro silvicultura y cosecha; 380,7 y 582,4 casos para la categoría mismo día y 340,3 y 403 casos para la categoría días después. Aunque la mayoría de los accidentes se denuncian el mismo día, es importante considerar que los accidentes denunciados días después presenta una importante frecuencia, lo que indicaría que no existe un seguimiento regular una vez ocurrido el hecho. Las pruebas estadísticas demostraron que al comparar la proporción de accidentes ocurridos en silvicultura y cosecha en la denuncia del accidente, se observaron diferencias significativas (P=0,05) tanto para las categorías mismo día y días después. Los valores estadísticos están en apéndice 9.4.3 (Pág. 106) 5.1.1.3.2 Porcentaje de accidentes para el año 2003 Figura 12. Porcentaje de accidentes distribuidos en las categorías de denuncia para el año 2003. Fuente: Elaboración propia. El comportamiento presentado gráficamente por los distintos rubros es homogéneo, no existe una diferencia significativa entre ellos para las dos categorías de esta variable. Según los resultados la denuncia se realiza mayormente el mismo día del accidente en 51 los dos rubros. El rubro silvicultura registra un total de 297,2 y 190,8 casos respectivamente para las categorías mismo día y días después, mientras que el rubro cosecha presenta 528,4 y 307,7 casos respectivamente para las categorías mencionadas. Los accidentes denunciados el mismo día representan 60,9% para silvicultura, superando la medía en un 10,9% y 63,2% para cosecha superando en un 13,2% a la medía. La desviación para los datos de silvicultura es de 15,4%, para cosecha es de 18,7%. La categoría días después disminuyo con respecto a los datos registrados en el periodo 1998-2002, esto se puede deber a la existencia de una mayor conciencia y control en las empresas. Según la ley 16.744 el empleador tiene la obligación de denunciar el hecho, sin embargo la ley también señala que si el empleador no hace la denuncia, es obligación del accidentado o del comité paritario hacerlo al respectivo organismo administrador, por lo tanto esta disminución se puede deber también a una mayor conciencia de los mismos trabajadores. A diferencia del periodo 1998-2002, el análisis estadístico mostró que al comparar los porcentajes de silvicultura y cosecha de la categoría mismo día, no se observaron diferencias significativas, mientras que en la categoría días después se presentaron diferencias entre los porcentajes de silvicultura y cosecha. Los resultados de estas pruebas se presentan en el apéndice 9.4.3 (Pág. 106). 5.1.1.3.3 Porcentaje de accidentes para el promedio de los períodos 1998-2002 y 2003 por rubro. Figura 13. Promedio de los porcentajes por categoría Denuncia accidente de los periodos 19982002, 2003 y 2004 para cada rubro. Fuente: Elaboración propia. 52 La prueba estadística demostró que al comparar el porcentaje de accidentes en la categoría mismo día de denuncia por rubro, no se observaron diferencias significativas entre silvicultura y cosecha. En cambio, se presentó diferencias en el porcentaje de accidentes denunciados días después entre silvicultura y cosecha. Los resultados se presentan en el apéndice 9.6.3 (Pág. 109). 5.1.1.4. Antigüedad en la empresa 5.1.1.4.1 Porcentaje de accidentes para el quinquenio 1998-2002. Figura 14. Porcentaje de accidentes distribuidos en las categorías antigüedad en la empresa para el promedio del quinquenio 1998-2002. Fuente: Elaboración propia. La mayoría de los accidentes se producen en trabajadores que poseen un año o más de antigüedad en la empresa, esto tanto para trabajos relacionados con silvicultura y con cosecha. Para el periodo analizado la categoría un año o más, el porcentaje para el rubro silvicultura es 53,2% y 58,1% para el rubro cosecha. Los trabajadores que llevan menos de 12 meses en la empresa se accidentan en un 46,8% en labores silvícola y un 41,9% en cosecha. Los datos presentan una desviación de 4,5% en silvicultura y 11,5% en cosecha. Según esta casuística y contrario a la lógica, los trabajadores que poseen mayor tiempo desempeñándose en empresas relacionadas con faenas silvícola y de cosecha, se accidentan con mayor frecuencia, esto se puede deber a que la confianza de éstos es excesiva al momento de ejecutar los trabajos y esta confianza se transforma en acciones inseguras que facilitan la existencia de un accidente. También puede influir la actitud 53 desafiante de estos trabajadores, que sienten la convicción de ejecutar bien sus tareas, lo que dificulta el proceso de aprendizaje de mejores técnicas de ejecución del trabajo o incluso de procedimientos orientados a mejorar la seguridad de ellos mismos. Otro punto que vislumbra este resultado, es sobre la escasa preocupación de las empresas en temas de seguridad de los trabajadores, considerando que mayoritariamente los accidentados llevan más de 1 año en la misma empresa, aun así ésta no entrega la preocupación y dedicación pertinente a sus trabajadores. Es importante considerar, que la categoría de menor antigüedad laboral, también presenta porcentajes importantes, especialmente en silvcultura, esto se puede deber a la temporalidad de las faenas de este tipo de actividades. El análisis estadístico muestra que, tanto en la categoría de 0-12 meses como en un año o más, en ambos rubros la antigüedad de los trabajadores difiere significativamente entre silvicultura y cosecha. Los resultados se encuentran en el apéndice 9.4.4 (Pág. 106). 5.1.1.4.2 Porcentaje de accidentes para el año 2003 Figura 15. Porcentaje de accidentes distribuidos en las categorías antigüedad en la empresa para el año 2003. Fuente: Elaboración propia. La casuística indica que los accidentes ocurren en mayor porcentaje en aquellos trabajadores de 1 año o más de antigüedad en la empresa indistintamente para cada rubro. Para esta categoría silvicultura registra un 51% y un 54,3% en cosecha. En los 54 accidentes que ocurren en la categoría de 0 a 12 meses de antigüedad los porcentajes son de 49% y 45,7% para silvicultura y cosecha respectivamente. Los datos se dispersan en un 1,4% en el rubro silvicultura y un 6,1% en cosecha. Los trabajadores silvícola aunque se accidentan mayormente en labores de mayor antigüedad, presentan un importante porcentaje de accidentes en la categoría de menor antigüedad (49%), mientras que cosecha presenta accidentados mayormente en trabajadores que poseen mayor antigüedad en la empresa, sin una diferenciación significativa entre las categorías. Es factible pensar que las actividades o tareas que requieran mayor responsabilidad sean también las que representen mayor riesgo y por lo tanto se asignen a trabajadores de mayor antigüedad en la empresa, de esta forma se explicaría la mayor accidentalidad en este segmento. En este período y a diferencia del anterior, no se observaron diferencias entre las distribuciones de los años de antigüedad de los trabajadores entre silvicultura y cosecha. Los resultados se presentan en el apéndice 9.4.4 (Pág. 106). 5.1.1.4.3 Porcentaje de accidentes para el promedio de los períodos 1998-2002 y 2003 por rubro. Figura 16. Promedio de los porcentajes por categoría Antigüedad en la empresa de los periodos 1998-2002, 2003 para cada rubro. Fuente: Elaboración propia. 55 El análisis estadístico demostró que existen diferencias significativas entre los rubros, en los porcentajes de cada categoría de antigüedad entre silvicultura y cosecha. Los resultados se presentan en apéndice 9.6.4 (Pág. 110). 5.1.1.5. Experiencia en la labor Porcentaje de accidentes para el promedio de los períodos 1998-2002 y 2003 por rubro. Figura 19. Promedio de los porcentajes por categoría Experiencia en la labor de los periodos 19982002 y 2003 para cada rubro. Fuente: Elaboración propia. De acuerdo al gráfico, se observa que los porcentajes por categorías son similares, la diferencia entre rubros es poco notoria, por lo tanto el comportamiento para silvicultura y cosecha es gráficamente uniforme. En faenas silvícola se accidentan el 64,1% del total de casos equivalente a 387,5 accidentes en la categoría 1 año o más, cosecha por su parte registra el 75,3% que representa a 588,1 accidentes en la misma categoría. Los datos se dispersan en un 19,9% para silvicultura y 35,8% para cosecha. El mayor porcentaje de accidentalidad ocurre en trabajadores que poseen un año o más de experiencia en la labor que desempeñan, esto es independiente de la antigüedad laboral que posean en la empresa en la cual se encuentren trabajando al momento del hecho. El nivel de incidencia es importante en esta categoría y se puede explicar, tal como en el caso anterior, debido a la imprudencia de los trabajadores al ejecutar labores en las cuales perciben tener el control de sus acciones a causa de la supuesta seguridad 56 que les provoca el tener experiencia, por lo tanto disminuye el nivel de cuidado y concentración transformando a la confianza en un elemento de riesgo. Muchos de estos trabajadores pueden llevar años realizando sus faenas, sin embargo esto no quiere decir que posean aptitudes o que cuenten con la capacitación necesaria para desempeñar sus labores en forma segura, de hecho según la literatura el 73% de los accidentes ocurre por acciones inseguras de los trabajadores como lo son el mal uso e inadecuada mantención de las herramientas y equipos y la manipulación incorrecta de materiales. Según el análisis estadístico, no se observaron diferencias entre la proporción de accidentes ocurridos entre silvicultura y cosecha en la experiencia en la labor en los períodos 1998-2002 y 2003. Estos resultados se encuentran en el apéndice 9.4.5 (Pág. 106). Los porcentajes de ocurrencia por categoría de experiencia en la labor para silvicultura y cosecha se presentan en el apéndice 9.5.3 (Pág. 108). Al comparar el porcentaje de accidentes la categoría de 0-12 meses para el promedio de los períodos, se observaron diferencias significativas entre los accidentes distribuidos en los rubros de silvicultura y cosecha. En cambio, la categoría de un año o más de experiencia, no presento diferencias significativas entre los porcentajes de silvicultura y cosecha para el promedio de los períodos. Los valores estadísticas se presentan en el apéndice 9.6.5 (Pág. 110). 57 5.1.1.6. Hora accidente Porcentaje de accidentes para el promedio de los períodos 1998-2002 y 2003 por rubro. Figura 22. Promedio de los porcentajes por categoría Hora accidente de los periodos 1998-2002, 2003 para cada rubro. Fuente: Elaboración propia. Según el gráfico se establece que entre las 10-12 hrs. se produce el mayor porcentaje de accidentes para silvicultura y cosecha, con un 33,4% y 36,5% respectivamente, superando a la medía en un 13,4% para silvicultura y en 16,5% en cosecha. Este horario resulta ser de máxima producción, lo mismo sucede en el horario de 16-18hrs donde se presenta un número importante de accidentes registrados para los dos rubros con un 29,4% en silvicultura y un 28,9% en cosecha. Silvicultura registra en promedio 185,9 accidentes y cosecha 300,8 en el horario de más alta accidentalidad. La distribución de frecuencias para los rubros en estudio resulta homogénea, ya que poseen igual tendencia, con una desviación de 12,1% para silvicultura y 13% para cosecha. El horario 10-12 hrs. donde se produce la mayor ocurrencia, resulta ser de máxima producción, como se menciono anteriormente, donde el trabajador forestal requiere mayor concentración en sus labores, lo mismo sucede en el horario de 16-18 hrs. donde también se presenta un número importante de accidentes registrados para los dos rubros. Estos horarios representan un pick importante en la distribución de accidentes, y se puede explicar debido a la intensidad de las actividades alcanzadas después de un tiempo de acomodarse al trabajo o bien después de alimentarse y descansar. 58 Las categorías extremas, más el horario correspondiente a la colación, presentan bajas frecuencias debido a la disminución de actividades. Tal como en estudios anteriores el horario de mañana es donde se sufre la mayor cantidad de accidentes, especialmente el bloque de 10-12 hrs. El análisis estadístico muestra que en ambos rubros las horas de ocurrencia de los accidentes, no difieren según las categorías de horas del accidente. Los resultados se encuentran en el apéndice 9.4.6 (Pág. 107). Los porcentajes de ocurrencia por categoría de hora accidente para silvicultura y cosecha se presentan en el apéndice 9.5.4 (Pág. 108). Al comparar el porcentaje de accidentes en cada categoría de hora de accidente por rubro, no se observaron diferencias significativas entre silvicultura y cosecha para el promedio de los períodos 1998-2002 y 2003, es decir hay evidencia estadística para afirmar que no existe diferencia entre las proporciones de accidentes ocurridos entre los rangos horarios de 10-21 horas. La tabla de resultados para estas categorías se encuentra en el apéndice 9.6.6 (Pág. 110). 5.1.1.7. Día semana Porcentaje de accidentes para el promedio de los períodos 1998-2002 y 2003 por rubro. Figura 25. Promedio de los porcentajes por categoría Día semana de los periodos 1998-2002, 2003 y 2004 para cada rubro. Fuente: Elaboración propia. 59 En silvicultura, los días lunes y miércoles producen mayor ocurrencia de accidentes sumando un 36,7% del total de accidentados para este rubro y con una dispersión de datos en las categorías de 5,3%. En las actividades relacionadas con cosecha los días lunes y martes, registran mayor accidentalidad con un 36,6% de los casos y una dispersión de los datos de 5,1%. Según estos resultados, el lunes es el día coincidente para los dos rubros, donde ocurren con mayor frecuencia los accidentes; 111,9 casos para silvicultura (18,7% del total, superando a la medía en un 4,4%) y 176,2 para cosecha (19,3 % del total, valor superior a la medía en 5,1%), tal como en otros estudios realizados anteriormente. Estableciendo una comparación entre rubros diríamos que existe una diferencia significativa para el día miércoles en el caso de silvicultura, donde supera a cosecha en un 2,4%, por su parte cosecha es superior a silvicultura en un 1,2% el día viernes. El día lunes es el día de mayor accidentalidad, este resultado se explica por la baja motivación que existe en los trabajadores después del fin de semana, se dificulta la concentración y el comienzo de la dinámica de trabajo y de la semana laboral. Otra razón que explicaría esta frecuencia, es el cansancio con el cual podría llegar el trabajador al desempeñar actividades agrícolas durante el fin de semana en su hogar. Los días de semana con mayor porcentaje de accidentalidad se concentran desde lunes a viernes, eso se entiende debido a que los días sábado y domingo disminuyen las actividades laborales en las empresas forestales. Sin embargo el día sábado presenta porcentajes de ocurrencia importantes, lo que indicaría que las jornadas laborales se extenderían hasta este día para los dos rubros. En los periodos 1998-2002 y 2003, no se presentaron diferencias significativas entre las distribuciones de accidentes en los días de semana entre silvicultura y cosecha. La tabla de resultados se presenta en el apéndice 9.4.7 (Pág. 107). Los porcentajes de ocurrencia por categoría de día de semana para silvicultura y cosecha se presentan en el apéndice 9.5.5 (Pág. 108). Al comparar los rubros entre cada día de semana, no se observaron diferencias significativas entre silvicultura y cosecha para el promedio de los períodos 1998-2002 y 2003. El apéndice 9.6.7 (Pág. 110) contiene la tabla de resultados de cada categoría. 60 5.1.1.8. Horas Trabajadas El total de casos registrados por rubro para esta variable es de 118 accidentes para el rubro silvicultura y 253 accidentes para el rubro cosecha. Estas cifras son bastante menores al total de accidentes declarados en el resto de las variables, es decir cerca del 76% para silvicultura y 70% en cosecha de los accidentes no fueron declarados por las empresas. 5.1.1.8.1 Porcentaje de accidentes para el quinquenio 1998-2002 Figura 26. Porcentaje de accidentes distribuidos en las categorías de Horas trabajadas para el promedio del quinquenio 1998-2002. Fuente: Elaboración propia. Silvicultura registra el 28,8% de los datos en la categoría de 3-4 horas trabajadas, superando a la medía en 22,4% y cosecha lo hace con un 30,7% de los accidentes, 12,1% mayor a la medía. Estos porcentajes representan respectivamente para silvicultura y cosecha, 108,4 y 142,7 casos. La desviación de los datos del rubro silvicultura es de 11,6% y en el rubro cosecha es de 12,5%. La distribución de porcentajes es similar entre los rubros, las categorías que poseen mayor concentración de datos, están entre una y ocho horas trabajadas, ya que es la duración de jornadas normales de trabajo. Las primeras horas de trabajo resultan más criticas, ya que es donde ocurren mayormente los accidentes, esto se debe a que la actividad productiva para las labores silvícola y de 61 cosecha se desarrolla más intensamente en las primeras horas de la jornada laboral y es donde justamente el trabajador se ve más expuesto a accidentes. Además siempre hay que considerar que el factor climático, ya sea frió, viento, lluvia, etc., incide en forma transversal en todas las situaciones. El análisis estadístico muestra que en ambos rubros, las horas trabajadas no difieren según las categorías de horas. Los valores se presentan en el apéndice 9.4.8 (Pág. 107). 5.1.1.8.2 Porcentaje de accidentes para el año 2003 Figura 27. Porcentaje de accidentes distribuidos en las categorías de Horas trabajadas para el año 2003. Fuente: Elaboración propia. En la categoría de 3-4 horas trabajadas se observa un significativo porcentaje para el rubro de silvicultura, que supera a la medía en 43,2% y que alcanza el 45% del total de accidentes registrados para este rubro, notoriamente superior a 29,2% que se registra en cosecha en la misma categoría de horas, porcentaje superior a la medía en solo 28,2%. Estos porcentajes representan a 53 accidentes declarados en silvicultura y a 74 en cosecha. Los datos se dispersan en un 16,1% en silvicultura y un 12% en cosecha. Al igual que en el caso anterior, la accidentalidad se concentra principalmente hasta las 8 hrs. trabajadas, coincidente con un jornada laboral normal. 62 En este período y a diferencia del anterior, se observaron diferencias entre las distribuciones de las horas trabajadas entre silvicultura y cosecha. Los resultados se presentan en el apéndice 9.4.8 (Pág. 107). 5.1.1.8.3 Porcentaje de accidentes para el promedio de los períodos1998-2002 y 2003 por rubro. Figura 28. Promedio de los porcentajes por categoría Horas trabajadas de los periodos 1998-2002 y 2003 para cada rubro. Fuente: Elaboración propia. Al comparar los rubros entre cada categoría de horas trabajadas, no se observaron diferencias significativas entre los accidentes ocurridos en silvicultura y cosecha para el promedio de los períodos 1998-2002 y 2003. La tabla de resultados para estas categorías se encuentra en el apéndice 9.6.8 (Pág. 110). 5.1.1.9. Tipo accidente El porcentaje de accidentes registrado para silvicultura en la categoría excluida para el estudio “Otros”, es 41%, promedio para los periodos considerados. Para cosecha este valor representa un 35%. El total de accidentes calculado para el estudio, al excluir la categoría “Otros”, es de 443,4 casos para silvicultura y de 640,5 para cosecha durante el periodo promedio del quinquenio 1998-2002. El año 2003 se contabilizan 278,2 accidentes en silvicultura y 63 558,5 en cosecha. Para el año 2004 el total es de 253,3 y 458,8 para silvicultura y cosecha respectivamente. 5.1.1.9.1 Porcentaje de accidentes para el quinquenio 1998-2002. Figura 29. Porcentaje de accidentes distribuidos en las categorías de Tipo de accidente para el promedio del quinquenio 1998-2002. Fuente: Elaboración propia. Las categorías consideradas para el estudio, indican que el tipo de accidente GPC, es el más común para los dos rubros. Cosecha posee el 40,6% de accidentes en este rubro (260,2 casos), en el tipo Golpeado por o contra, donde alcanza su máximo valor, superando a la medía en un 26,3%. El tipo caída, contacto con objetos y sobreesfuerzo presentan porcentajes similares sumando 46,3% del total de casos. Los porcentajes para este rubro se dispersan en un 13% entre las categorías. En silvicultura registra el 29,3% de los accidentes en la categoría GPC con 129,8 casos, siendo 15% mayor a la medía, siguiendo en menor porcentaje encontramos el tipo CA, CCO y SE sumando el 59,5% de los accidentes declarados para este rubro. Este rubro presenta una dispersión de 10,6%. Al igual que en estudios realizados anteriormente, el tipo golpeado por o contra, presenta mayor ocurrencia de accidentes, esto se explica debido a que las labores forestales se ejecutan utilizando maquinarias, herramientas y materias prima como la madera, que poseen gran peso y se transforman en materiales peligrosos al no contar con una adecuada manipulación. 64 La alta accidentalidad exhibida en el tipo de accidente golpeado por o contra en cosecha, nos indica que existe un incorrecto manejo de los materiales utilizados en las faenas de madereo, carguío y transporte, además de la ausencia de los elementos de protección personal necesarios para estas actividades. Los tipos de accidentes caídas y contacto con objetos están en segundo y tercer lugar de ocurrencia respectivamente, al igual que los resultados de estudios anteriores. Además el trabajador forestal se encuentra en constante exposición a los factores ambientales, lo que explicaría el tipo de accidentes caídas, ya que la superficie resbaladiza es una de las causas importantes de las caídas. La topografía del terreno, la vegetación y el clima inciden significativamente en el tipo caídas y golpeado por o contra. El tipo contacto con objetos, se explica por el hecho de estar en contacto con elementos del bosque como las ramas, árboles, arbustos, insectos, etc. El inadecuado uso y mantención de equipos y maquinarias, así como su transporte también incide en la ocurrencia de este tipo de accidente. El análisis estadístico muestra diferencia significativa en la distribución de accidentes en tipo de accidente entre los rubros silvicultura y cosecha. En el apéndice 9.4.9 (Pág. 107) se encuentra la tabla de resultados de la prueba estadística. 5.1.1.9.2 Porcentaje de accidentes para el año 2003 Figura 30. Porcentaje de accidentes distribuidos en las categorías de Tipo de accidente para el año 2003.Fuente: Elaboración propia. 65 La distribución de los porcentajes de accidentes tiene el mismo comportamiento para los dos rubros, exceptuando en el tipo de accidente GPC, donde cosecha presenta un número superior de accidentes con respecto a silvicultura, lo mismo sucede en el tipo CA, CCO, PRO, SE donde silvicultura es superior pero la diferencia entre rubros es menor. Los datos en silvicultura se dispersan en un 11,9%, mientras que en cosecha la dispersión es de 14,2%. El tipo GPC, incide con un 44,9% para cosecha (30,6% mayor a la medía) y un 37,7% para silvicultura (23,4% superior a la medía), representando 250,8 y 104,9 casos respectivamente para cada rubro. En importancia le siguen las categorías CA, CCO y SE, sumando un 39,2% de los accidentes ocurridos en cosecha y un 47,5% en silvicultura. Para este periodo y a diferencia del periodo 1998-2002, no se encontraron diferencias en la distribución de los tipos de accidente entre silvicultura y cosecha. Los resultados se encuentran en el apéndice 9.4.9 (Pág. 107). 5.1.1.9.3 Porcentaje de accidentes para el año 2004 Figura 31. Porcentaje de accidentes distribuidos en las categorías de Tipo de accidente para el año 2004. Fuente: Elaboración propia. El tipo de accidente más común en faenas silvícola y de cosecha es el golpeado por o contra objetos, con un porcentaje de ocurrencia del 42% en silvicultura, siendo 27,7% mayor a la medía y 41,5% en cosecha, 27,2% superior a la medía. La frecuencia correspondiente a estos porcentajes es de 106,4 y 190,2 respectivamente. En segundo 66 lugar para silvicultura, las categorías que inciden en los accidentes son; caída y sobreesfuerzo, que suman un 37,9% de los datos, mientras que en cosecha las mismas categorías suman un 30,3%. Con menores frecuencias encontramos a los tipos atrapamiento (4,8%) y atropellamiento (1,4%) en rubro silvicultura y los tipos proyección (6%) y atropellamiento (1,3%) en rubro cosecha. la desviación para los porcentajes distribuidos en las categorías es de 14% para silvicultura y de 13,1% para cosecha. La proporción de accidentes en el tipo de accidente golpeado por o contra en el rubro silvicultura y cosecha, a diferencia de los periodos anteriores, presentan valores similares, es decir el número de accidentados por golpe de los rubros silvicultura y cosecha tienden a nivelarse durante los periodos estudiados. Para el periodo 2004 y al igual que en el 2003, las distribuciones del tipo de accidente no difieren significativamente entre los rubros silvicultura y cosecha. Los resultados están en el apéndice 9.4.9 (Pág. 107). 5.1.1.9.4 Porcentaje de accidentes para el promedio de los períodos1998-2002, 2003 y 2004 por rubro. Figura 32. Promedio de los porcentajes por categoría Tipo accidente de los periodos 1998-2002, 2003 y 2004 para cada rubro. Fuente: Elaboración propia. Para el promedio de los períodos, el análisis estadístico muestra que la proporción de accidentes ocurridos en el tipo caída y golpeado por o contra, difiere entre los rubros silvicultura y cosecha. Las categorías de tipo de accidente restantes no presentan 67 diferencias entre las proporciones de silvicultura y cosecha para el promedio de los períodos 1998-2002,2003 y 2004. La tabla de resultados para esta variable se encuentra en el apéndice 9.6.9 (Pág. 111). 5.1.1.10. Agente accidente El total de casos en esta variable se modifica al excluir del estudio la categoría “otros”, por lo tanto para silvicultura el total de casos evaluados corresponde a 312,9 y a 488,8 accidentes en cosecha. Porcentaje de accidentes para el promedio de los períodos 1998-2002, 2003 y 2004 por rubro. Figura 36. Promedio de los porcentajes por categoría Agente accidente de los periodos 1998-2002, 2003 y 2004 para cada rubro. Fuente: Elaboración propia. El agente que produce el accidente en forma más frecuente para el promedio de los periodos es los materiales, ya sea por manipulación o por manejo de éstos en un 28,7% en silvicultura (14,4% superior a la medía), y un 32% en cosecha (17,7% mayor a la medía). El número de casos es de 67,1 para silvicultura y de 133,4 para cosecha en promedio bajo la categoría mencionada. Es similar la distribución de los accidentes entre los rubros, en los distintos agentes por categorías con una desviación de 8,8% para silvicultura y 9,9% para cosecha. En segundo grado de importancia como agente causal de accidentes en silvicultura se encuentra otros materiales u objetos y superficie de trabajo con un 19,7 y un 18,7% de los casos. En el rubro de cosecha la segunda 68 participación se encuentra en otros materiales u objetos con un 18,3% y en máquinas y equipos con un 15,2%. Por otro lado zonas de tránsito tienen menor incidencia como agente causal, originando solo un 3,5% para silvicultura y un 1,7% para cosecha. El agente materiales hace referencia a materiales en proceso, productos terminados y materias primas, es decir el accidente puede ocurrir al transportar de manera inadecuada los materiales o bien utilizarlos en forma despreocupada. En la categoría otros materiales u objetos se clasifican agentes no considerados en la categoría materiales como por ejemplo elementos naturales del bosque, insumos, o elementos que pertenezcan a la infraestructura del lugar donde se ejecuten las faenas. Para el promedio de períodos 1998-2002, 2003 y 2004, no se observaron diferencias entre las distribuciones de los agente del accidente entre silvicultura y cosecha. En el apéndice 9.4.10 (Pág. 107) se presentan los resultados de las prueba estadísticas. Los porcentajes de ocurrencia por categoría de agente de accidente para silvicultura y cosecha se presentan en el apéndice 9.5.6 (Pág. 109). Al comparar el porcentaje de accidentes en cada categoría de agente del accidente para el promedio de los períodos 1998-2003, 2003 y 2004, se observaron diferencias significativas entre silvicultura y cosecha en el agente máquinas y equipos, en cambio para las categorías de agente de accidente restantes no se encontraron diferencias entre los rubros. La tabla de resultados por categorías se encuentra en el apéndice 9.6.10 (Pág. 111). 69 5.1.1.11. Zona cuerpo lesionada 5.1.1.11.1 Porcentaje de accidentes para el quinquenio 1998-2002. Figura 37. Porcentaje de accidentes distribuidos en las categorías de Zona cuerpo lesionada para el promedio del quinquenio 1998-2002. Fuente: Elaboración propia. La parte del cuerpo lesionada más afectada por accidentes es la pierna con un 17,2% en el rubro silvicultura, siendo 6,1% mayor a la medía y un 18,5% en el rubro cosecha, 7,4% superior a la medía. Los trabajadores silvícola se han lesionado la pierna en 124,1 accidentes y en el rubro cosecha lo hacen 182,3 casos. En segundo lugar la parte del cuerpo más lesionada corresponde a la mano con un 14,6 de los casos para silvicultura y cosecha. La distribución de accidentes entre las categorías es homogénea, no existe una diferencia importante entre los rubros, el comportamiento en silvicultura y cosecha es similar para esta variable, con una desviación del 3,3% para silvicultura y 3,9% para cosecha. Claramente tanto la pierna como la mano son las partes del cuerpo más utilizadas en las faenas de silvicultura y cosecha, por esta razón presentan mayor accidentalidad, siendo estos resultados congruentes con lo registrado en estudios anteriores. Las lesiones más frecuentes producidas en las distintas zonas del cuerpo, corresponden a contusiones en primera instancia, seguida de laceraciones y fracturas. En las manos, generalmente se producen contusiones por golpes de las herramientas y equipos utilizados en las faenas como el hacha, el rozón o las tijeras de podar, también se 70 da el caso de compresiones o aplastamientos de los dedos al momento de arrumar la madera. Entre las lesiones más comunes que se producen en la extremidad inferior, que corresponde al área del cuerpo más afectada en el periodo considerado, están los cortes producidos por la motosierra y otras herramientas cortantes, como el hacha y rozón. Los ojos y párpados son afectados principalmente por partículas de polvo y aserrín, lo que justifica plenamente el que, al menos, los motosierristas utilicen protección facial, mientras que parte importante de los accidentes que comprometen la cabeza son producidos por golpes de ramas o conos que caen y que podrían evitarse con el uso de cascos. En general estos resultados pueden ser causados por la falta del uso de los elementos de protección en las zonas dañadas, sumado a la exposición y uso intensivo de estas extremidades. De acuerdo al análisis estadístico, la distribución de zona del cuerpo lesionada de los trabajadores accidentados en los rubros silvicultura y cosecha no difieren significativamente. La tabla de resultados se encuentra en el apéndice 9.4.11 (Pág. 107). 5.1.1.11.2 Porcentaje de accidentes para el año 2003 Figura 38. Porcentaje de accidentes distribuidos en las categorías de Zona cuerpo lesionada para el año 2003. Fuente: Elaboración propia. 71 La zona del cuerpo lesionada más común en el caso de las labores silvícola y de cosecha es la mano, con un 21,7% para silvicultura (10,6% superior a la medía) y un 19,5% para cosecha (superior en 8,4% a la medía de la población). El tronco y el brazo son la segunda parte del cuerpo más afectado a causa de los accidentes, para el rubro silvicultura, mientras que para cosecha es solamente el brazo. A pesar de que la tendencia es la misma para silvicultura y cosecha, silvicultura es superior a cosecha en las categorías mano, brazo, tronco, ojo-párpados y otros, mientras que cosecha es superior en las categorías Pierna, Cabeza, Pie y Lumbago. La desviación es de 5,5% para silvicultura y 4,5% para el rubro cosecha. La mano es la zona más lesionada en los rubros estudiados, esto nos indica la importancia vital de esta extremidad para el trabajador forestal por su intensivo uso y sobre todo nos señala que es una zona que requiere de habilidad y fuerza para ejecutar las exigentes maniobras con las herramientas y con las materias primas del bosque. A diferencia de lo expuesto en literatura, donde se señala que la extremidad inferior es la más afectada, tanto para silvicultura como para cosecha, la zona del cuerpo más lesionada corresponde a la mano. El análisis estadístico muestra que en ambos rubros las zonas del cuerpo lesionadas difieren según las categorías de las zonas del cuerpo lesionadas, a diferencia del periodo 1998-2002 donde no se observan diferencias. Los resultados están en el apéndice 9.4.11 (Pág. 107). 72 5.1.1.11.3 Porcentaje de accidentes para el año 2004 Figura 39. Porcentaje de accidentes distribuidos en las categorías de Zona cuerpo lesionada para el año 2004. Fuente: Elaboración propia. La mano es la zona del cuerpo más accidentada tanto para silvicultura como cosecha con un 19, 3 % y 20,4 % respectivamente, siendo 8,1 % superior a la medía en silvicultura y 9,4 % en cosecha. El número de casos accidentados en la mano es de 84,2 en silvicultura y 150,9 casos en cosecha. La distribución de frecuencias es uniforme en los dos rubros, teniendo una desviación de 4 % para silvicultura y 4,5 % para cosecha. En segundo lugar las zonas tronco y pierna se accidentan en el rubro silvicultura, y en el rubro cosecha lo hacen en brazo y pierna. En silvicultura y cosecha existen actividades donde la mano se utiliza intensamente, es el caso de los podadores, que sufren constantes cortes en las manos a causa del filo de los serruchos o el aprisionamiento con las tijeras de podar, la carencia de elementos de protección como los guantes y la incomoda posición de trabajo que deben mantener cuando trepan los árboles. Al igual que en el período 1998-2002, en el período 2004 las pruebas estadísticas muestran que en ambos rubros las zonas del cuerpo lesionada no difieren según las zonas del cuerpo estudiadas. Los resultados se presentan en el apéndice 9.4.11 (Pág. 107). 73 5.1.1.11.4 Porcentaje de accidentes para el promedio de los períodos 1998-2002, 2003 y 2004 por rubro. Figura 40. Promedio de los porcentajes por categoría Zona cuerpo lesionada de los periodos 19982002, 2003 y 2004 para cada rubro. Fuente: Elaboración propia. Según el análisis estadístico, silvicultura y cosechan no presentan diferencias en la proporción de accidentes registrados por categoría de zona del cuerpo lesionado, excepto en la categoría cabeza, donde si se observó diferencias entre los rubros. La tabla de resultados se encuentra en el apéndice 9.6.11 (Pág. 111). 74 5.1.1.12. Días perdidos Porcentaje de accidentes para el promedio de los períodos 1998-2002 y 2003 por rubro. Figura 43. Promedio de los porcentajes por categoría Días perdidos de los periodos 1998-2002 y 2003 para cada rubro. Fuente: Elaboración propia. Los días perdidos más comunes en todos los períodos, según los resultados, van desde uno a siete días en los dos rubros. Silvicultura concentra 54% en esta categoría, superando a la medía en un 29% y cosecha presenta 46,8%, siendo 21,8% mayor a la medía, lo que se traduce en 326,3 y 426,2 casos respectivamente para silvicultura y cosecha. Los datos se dispersan 20,5% en silvicultura, mientras que la desviación en cosecha es del 16,1%. En silvicultura, las faenas involucradas son múltiples, pero menos riesgosas que en cosecha, donde se trabaja con maquinaria de gran peso y materias primas de mayor volumen que en el caso de faenas como las podas o raleos. Es por esto que cosecha presenta porcentajes levemente superiores de accidentalidad en las categorías que involucran más días perdidos, lo que indicaría una mayor gravedad de los accidentes, deducción que es comprobada en literatura y estudios especializados. Mientras que silvicultura concentra mayormente la accidentalidad en los primeros 7 días perdidos. Los resultados exhiben diferencias con otros estudios en la cantidad de días perdidos por accidente, ya que éstos son superiores a una semana. 75 El análisis estadístico muestra que en ambos rubros los días perdidos por accidente difieren significativamente en los períodos 1998-2002 y 2003, según la distribución de accidentes en las categorías de días perdidos. Los resultados se encuentran en apéndice 9.4.12 (Pág. 107). Los porcentajes de ocurrencia por categoría de días perdidos para silvicultura y cosecha se presentan en el apéndice 9.5.7 (Pág. 109). Al comparar la proporción de accidentes ocurridos en silvicultura y cosecha en los días perdidos, se observaron diferencias significativas tanto en 1-7 días perdidos como en 22 o más días perdidos por accidente. En las categorías restantes no se encontraron diferencias entre silvicultura y cosecha, el detalle de estos resultados se encuentran en el apéndice 9.6.12 (Pág. 111). 5.1.2 INDICADORES DE ACCIDENTALIDAD 5.1.2.1 Tasa de accidentalidad por actividad económica año 2005 Figura 44. Tasa de accidentalidad por actividad económica año 2005. Fuente: ACHS, 2005. La tasa de accidentalidad de Silvicultura incluye los rubros del área bosques; silvicultura y cosecha. En el contexto de actividades económicas a nivel nacional, el área bosque presenta una tasa de 6,8%, es decir 6,8% de los trabajadores se accidentaron el año 2005 en el área bosque, esto equivale a sostener que en el área bosque, 6,8 de cada 100 trabajadores sufrió algún accidente el año 2005. Este valor se encuentra bajo la medía en un 0,6%, lo que nos indicaría que a pesar de representar una actividad peligrosa, la tasa 76 de accidentalidad es baja comparada con actividades económicas comúnmente de riesgo como el transporte o la construcción. Sin embargo, la cifra es significativamente mayor al sector minero en un 3,8% y mayor al promedio de actividades registradas en la ACHS (6,6%). La desviación estándar de estos datos, es de 2,4%, es decir, la dispersión de los datos es cercana al promedio. La tasa de accidentalidad de todas las actividades económicas para el año 2005 en el país era de 6,8%, es decir en chile a nivel nacional se accidentaron la misma cantidad de personas que en el sector forestal. En forma desglosada las tasas de accidentalidad exhibidas para silvicultura y cosecha son de 5,03 y 8,52% respectivamente para el año 2005.Industrias de la madera, en tanto, registro una tasa del 10,3%, por lo que la convierte en la segunda actividad más riesgosa para el año 2005, después de construcción. El número de casos fatales para el sector forestal el año 2005, fue de 11 registros, desglosado en 7 casos para bosque y 4 para industria de la madera. El año 2004, industrias de la madera registró una tasa de accidentalidad del 11,3%, en tanto que el promedio de todas las actividades económicas del país fue de solo un 6,9%. Para el mismo año bosque registró una tasa del 7,3%. Los casos fatales registrados en el sector forestal para este año son 17, de estos 6 casos para bosque y 11 para industrias de la madera. A diferencia del periodo anterior, industrias presenta mayor fatalidad que bosques, además el número de casos fatales aumenta para el sector forestal. Para el año 2003 se registro una tasa de accidentalidad para el sector forestal, incluyendo el área bosques e industrias de la madera del 11,16%, es decir el 11,16% de los trabajadores del sector forestal se accidentaron el año 2003. En el área bosque para ese mismo año la tasa fue de 7,95% y de 12,66% para el área industrias de la madera. En la figura 45 se pueden observar los valores de las tasas por actividad económica para el año 2003. 77 5.1.2.2 Tasa de accidentalidad por actividad económica año 2003 Figura 45. Tasa de accidentalidad por actividad económica año 2003. Fuente: Ackerknecht, 2003. La accidentalidad en industrias de la madera además de superar a la tasa de bosque y del sector forestal, también es superior al área construcción, minería y de transporte, convirtiéndose así en la segunda actividad después de pesca más, riesgosa del país el año 2003. Tenemos que pensar que en la actividad forestal se utiliza como principal materia prima un objeto de gran peso y tamaño como lo es el árbol, por lo que se explica la peligrosidad de las faenas involucradas, además consideremos que estas faenas se desarrollan en condiciones ambientales adversas, donde no es posible un total control de las variables del lugar de trabajo que puedan afectar al trabajador. El año 2003, registró 9 muertes en el área bosques y 6 en industria de la madera, sumando 15 casos fatales en el sector forestal. Es decir y al igual que en el año 2005, bosque presenta mayor número de muertes con respecto a industrias, esto indicaría la severidad de los siniestros ocurridos en esta área del sector forestal. En el caso de combate de incendios se producen casos fatales por factores ambientales y por falta de experiencia de los combatientes y de aptitud para este tipo de faenas de alto riesgo. La tasa de siniestralidad para el año 2003, como se observa en la figura 46, presenta valores superiores en el sector forestal a todas las actividades económicas consideradas, 78 de hecho solo es superada por industrias de la madera, actividad económica que pertenece al sector forestal. Estos resultados indican la gravedad de los siniestros ocurridos en labores forestales, particularmente en área industrias de la madera, ya que la cantidad de días perdidos a causa de accidentes de trabajo o enfermedades profesionales es superior con respecto a todas las actividades económicas del país. Es decir los accidentes producidos en el sector, afectan en forma significativa la calidad de vida de los trabajadores, al necesitar más tiempo para la recuperación de lesiones o enfermedades producto del trabajo. Esto se explica por lo señalado anteriormente, ya sea por que el lugar de trabajo que lo constituye el medio ambiente, donde no es posible controlarlo en su totalidad, además de trabajar con elementos de que producen mayores secuelas físicas por su gran tamaño y peso. 5.1.2.3 Tasa de siniestralidad por actividad económica año 2003 Figura 46. Tasa de siniestralidad por actividad económica año 2003. Fuente: Ackerknecht, 2003. La tasa exhibida para industrias de la madera es de 213, este valor nos indica que producto de los accidentes de trabajo y de enfermedades profesionales se pierden en promedio 213 días por cada 100 trabajadores. Las actividades económicas presentan en promedio una tasa de 141, valor superado por industrias de la madera en 60 días, diferencial bastante alto considerando que en chile existen también otras actividades 79 peligrosas como construcción y pesca que aportan al promedio, cifras altas de siniestralidad. El año 2004, la tasa de siniestralidad fue de 180 para industrias de la madera contra 86 que obtuvo el conjunto de todos los rubros de la economía en empresas afiliadas a la ACHS. 5.1.2.4 Evolución tasa accidentalidad área bosque Figura 46. Evolución tasa accidentalidad área bosques. Fuente: Elaboración propia. Se puede observar que la tasa de accidentalidad del rubro cosecha es superior a la registrada por silvicultura en todos los periodos considerados. La suma de estas actividades registra valores intermedios entre los rubros silvicultura y cosecha. Desde el año 1993 en adelante se observa una baja sostenida de la tasa de accidentalidad del área bosque, disminuyendo desde 18,4% el año 1993 hasta un valor de 6,83% para el año 2005, donde el rubro cosecha presenta la mayor disminución de tasas en el tiempo. El promedio de los indicadores de silvicultura es 8,9% y el de cosecha es 11,9%. El total de bosque promedia una tasa de 10,6%. Es decir el rubro cosecha posee mayor accidentalidad que silvicultura y que el área bosque. A pesar de que se observa una tendencia a la baja en este indicador, actores del sector forestal han señalado la inmovilidad de los valores de accidentalidad en los últimos años, 80 es decir las tasas se han mantenido en el ultimo tiempo, lo que indicaría una conformidad de los resultados considerando las bajas importantes que se alcanzaron anteriormente. El análisis estadístico muestra que la distribución de los accidentes anuales en los rubros silvicultura y cosecha, difieren significativamente en los años 1993 al 2005 (X212gl=491,4; P=1,5E-97). Es decir, el número de accidentes anuales de silvicultura y cosecha se distribuyen en forma desigual entre los años estudiados. La tabla con el número de accidentes por rubro para los años 1993 al 2005 se encuentra en el apéndice 9.7 (Pág. 112). 5.1.2.5 Evolución tasa de siniestralidad área bosque Figura 47. Evolución tasa de siniestralidad área bosques. Fuente: Elaboración propia. La tasa de siniestralidad del rubro cosecha es superior a silvicultura y a la suma de éstas áreas en todos los años presentados, siendo relativamente constante el diferencial que mantiene con el resto de las áreas en todos los periodos. Se puede observar que la distribución es homogénea en los tres casos considerados, presentando una tendencia general a la baja con un leve aumento cada 2 a 3 años, esta situación se hace más notoria en el rubro cosecha, mientras que en silvicultura la curva tiende a regularse en los últimos años. El total bosque el año 1993 alcanzaba una tasa de 284, disminuyendo hasta 143 en el año 2005. El promedio de los indicadores de silvicultura es 135,1 y el de cosecha es 230,2. El total de bosque promedia una tasa de 187,4. 81 5.1.2.6 Evolución días perdidos área bosque Figura 48. Evolución días perdidos área bosques. Fuente: Elaboración propia. Se observa una tendencia al aumento de días perdidos por accidente tanto en silvicultura como en cosecha, donde tal como en los casos anteriores cosecha continua obteniendo los valores más altos. En el área bosque se registraron aproximadamente 17 días perdidos en el año 1993, mientras que para el año 2005 este valor aumentó a 21 días. El promedio de días perdidos en silvicultura es de 16 días aproximadamente, en cosecha es de 20 y en el área bosques en promedio se registran 18 días perdidos aproximados. Tanto en el rubro silvicultura como en cosecha, la distribución de los datos presenta el mismo comportamiento hasta el año 2002, el año 2003 silvicultura disminuye sus días perdidos, para luego seguir bajando durante el 2004 y aumentar significativamente el año 2005, mientras que cosecha aumenta el año 2003, para luego tender a la baja durante los próximos años. Se deduce que los días perdidos han ido aumentando en el tiempo, debido a que los accidentes ocurridos en estas actividades se tornan más peligrosos, presentando mayor gravedad en los daños ocasionados. 82 5.2 ANÁLISIS DE ACCIDENTALIDAD DEL SECTOR FORESTAL El total de accidentes nacionales del sector forestal para el promedio del quinquenio 19982002 fue de 6.845,6 con 111.080 días perdidos, donde el área bosque presento 1.706 accidentes con 30.390 días perdidos y el área industrias de la madera registro 5.139 accidentes con 81.690 días perdidos. El año 2003 el número de accidentes total fue de 5.887 con un total de 98.602 días perdidos, presentando 1.324 accidentes en el área bosque con 27.762 días perdidos y 4.563 accidentes con 70.840 días perdidos para industrias de la madera. El año 2004 registró 5.546 accidentes con 92.307 días perdidos. Para el mismo año, en el área bosque la accidentalidad fue de 1.176 casos con 24.262 días perdidos, el área industrias de la madera registró 4.370 accidentes con 68.045 días perdidos. 5.2.1 ANÁLISIS DE VARIABLES CASUÍSTICAS. 5.2.1.1. Edad Porcentaje de accidentes para los periodos 1998-2002, 2003 y 2004. Figura 49. Porcentaje de accidentes distribuidos en las categorías de edad del sector forestal para el promedio del quinquenio 1998-2002, año 2003 y 2004.Fuente: Elaboración propia. El rango de edad que presenta mayor proporción de accidentes para el sector forestal, es el de 21 a 30 años de edad en todos los periodos considerados, con un 28,8% para el promedio del quinquenio 1998-2002, 34,3% en el 2003 y para el año 2004 un 32,2% de ocurrencia. Las frecuencias o número de accidentes ocurridos en trabajadores de 21-30 años para los tres periodos considerados son; 1969 para el promedio del quinquenio 83 1998-2002, 2019 casos en el año 2003 y 1786 en el año 2004. En el año 2003, el porcentaje es superior en la categoría de edad de 21-30 y 31-40 años con respecto a los periodos restantes. En general, el periodo promedio 1998-2002 presenta menor frecuencia de accidentes con respecto a los otros periodos estudiados, distribuidos en las categorías de la variable edad. Los datos del promedio del quinquenio, se dispersan en un 11,5%, con una medía de 13,7%. Para el 2003 se registra 16,7% de medía que el periodo anterior y una desviación del 13,7%, los parámetros para el año 2004 son de 14,2% como promedio y 11,2% de dispersión de los datos. El análisis estadístico muestra que en los períodos 1998-2002, 2003 y 2004, las edades de los trabajadores difieren según los tramos o categorías de edad. El resultado se presenta en el apéndice 9.9 (Pág. 113). 5.2.1.2. Tipo accidente Porcentaje de accidentes para los periodos 1998-2002, 2003 y 2004. Figura 50. Porcentaje de accidentes distribuidos en las categorías tipo accidente del sector forestal para el promedio del quinquenio 1998-2002, año 2003 y 2004. Fuente: Elaboración propia. El mayor porcentaje de accidentalidad para los tres periodos en estudio se produce en la categoría golpeado por/ contra con un 31,9% para el promedio del quinquenio 1998-2002, 33,7% para el año 2003 y 35,6% para el periodo 2004. El número de accidentes 84 registrados para los periodos considerados en orden cronológicos son; 1.472 para el primer periodo, 1.330 casos para el 2003 y 1.270 para el año 2004. En general los tres periodos presentan la misma tendencia en la distribución del número de accidentes en las categorías de tipo de accidente. Golpeado por o contra es un tipo de accidente que se produce cuando el elemento que provoca la lesión va a hacia el trabajador. Los datos se dispersan en un 9,5%, 10,1% y 10,9% respectivamente en los periodos 1998-2002, 2003 y 2004. El promedio de los datos distribuidos en las categorías de tipo accidente es 14,3% coincidente en todos los periodos. Las pruebas estadísticas muestran que la distribución del tipo de accidente entre los periodos 1998-2002, 2003 y 2004 difiere significativamente. El resultado se presenta en el apéndice 9.9 (Pág. 113). 5.2.1.3. Agente accidente 3.1 Porcentaje de accidentes para los periodos 1998-2002, 2003 y 2004. Figura 51. Porcentaje de accidentes distribuidos en las categorías agente accidente del sector forestal para el promedio del quinquenio 1998-2002, año 2003 y 2004. Fuente: Elaboración propia. Materiales es el agente de accidente más frecuente en todos los periodos estudiados con un porcentaje de ocurrencia de 34% en promedio del quinquenio 1998-2002, 33,7% y 33,8% respectivamente para el año 2003 y 2004. El número de casos para el primer periodo en la categoría materiales es de 1239, 1030 para el año 2003 y 998 accidentes en 85 el periodo 2004. Se observa un comportamiento similar en la distribución de los accidentes en las categorías de la variable agente en los periodos considerados. El promedio para el primer y segundo periodo es 12,5% y 14,3% para el año 2004. Las frecuencias se dispersan entre las categorías en un 11,7% para el promedio de 19982002, 11,6% para el año 2003 y 11,8% para el año 2004. El análisis estadístico muestra que en los períodos 1998-2002, 2003 y 2004, el agente del accidente difiere significativamente.. El resultado se presenta en el apéndice 9.9 (Pág. 113). 5.2.1.4. Zona del cuerpo lesionado Porcentaje de accidentes para los periodos 1998-2002, 2003 y 2004. Figura 52. Porcentaje de accidentes distribuidos en las categorías zona del cuerpo lesionada del sector forestal para el promedio del quinquenio 1998-2002, año 2003 y 2004. Fuente: Elaboración propia. La zona del cuerpo más lesionada, es la mano en los tres periodos considerados con un 25,2% para el promedio 1998-2002, 30,5% para el año 2003 y 34,9% para el 2004. Estos porcentajes representan respectivamente para los periodos promedio 1998-2002, 2003 y 2004; 1.725, 1.796 y 1.936 número de accidentes en la categoría mano. La tendencia de la distribución de los datos es similar en los periodos considerados, sin embargo para el promedio 1998-2002, se puede observar una ocurrencia importante para la categoría brazo, superior a los periodos restantes. El valor promedio para los tres periodos 86 considerados es 11% y la desviación estándar es 6,5% para el promedio 1998-2002, 8,1% para el 2003 y 9,3% en el año 2004. Para esta variable se manifiesta una tendencia equivalente para los periodos evaluados, sin embargo durante el año 2000 la zona del cuerpo que se vio más afectadas es la pierna, esta variación se puede deber al tipo de actividad realizada en el periodo en cuestión, estas actividades están directamente relacionadas con las demandas de productos del mercado por lo que una variación en este aspecto, influye en el tipo de actividad a desarrollar y el aumento productivo, a su vez incide en las zonas del cuerpo mayormente utilizadas para realizar estas laborales. Se afirma que un aumento en la producción incide en un aumento de la accidentalidad en forma directa. También es importante señalar que la ocurrencia de accidentes en la mano ha ido incrementándose en los periodos de estudio considerado. Esto refleja una despreocupación de las empresas en revertir esta situación y al contrario permita que aumente. Las pruebas estadísticas muestran que la distribución de las zonas del cuerpo lesionada entre los periodos 1998-2002, 2003 y 2004 difieren significativamente. El resultado se presenta en el apéndice 9.9 (Pág. 113). 5.2.2 INDICADORES DE ACCIDENTALIDAD 5.2.2.1 Evolución tasa accidentalidad sector forestal Figura 53. Evolución tasa de accidentalidad. Fuente: Elaboración propia. 87 Se deduce del gráfico, que el sector forestal y sus componentes poseen una tendencia lineal mantenida en todo los periodos considerados. Desde el año 1993 en adelante se observa una baja sostenida de la tasa de accidentalidad en todas las áreas, es así como el sector forestal disminuye desde 20,9% el año 1993 hasta un valor de 9,09% para el año 2005. El promedio de los indicadores de bosque es de 10,5% y el de industrias es 15,7%. El total del sector promedia una tasa de 13,9%. El rubro Industrias presenta mayor tasa de accidentalidad con respecto a bosque y a la suma de los componentes en todos los periodos, sin embargo, es la actividad que ha disminuido significativamente sus tasas en el tiempo. Esto se puede deber a una mayor preocupación y gestión por parte de los departamentos de prevención en las empresas. El análisis estadístico muestra que la distribución de los accidentes anuales en bosques e industrias de la madera, difieren significativamente en los años 1993 al 2005 (X212gl=1220,2; P=7,7E-254). Es decir el número de accidentes anuales de bosque e industria de la madera se distribuyen en forma desigual entre los años estudiados. La tabla con el número de accidentes por área para los años 1993 al 2005 se encuentra en el apéndice 9.8 (Pág. 112). 5.2.2.2 Evolución tasa siniestralidad sector forestal Figura 54. Evolución tasa de siniestralidad. Fuente: Elaboración propia. 88 La tasa de siniestralidad del área industrias es superior a bosque y a la suma de estas áreas en todos los años presentando fluctuaciones inversas a las registradas por el área bosque. Es así, como en el año 1994 bosque presento una baja significativa en la tasa con respecto a lo registrado en el año 1993, mientras que industrias disminuyo su tasa pero en menor magnitud. En general se observa que la distribución de los datos en industrias se mantiene con tendencia a la baja, excepto por un leve aumento registrado en el año 2000. En el área bosque, la distribución se comporta de manera más irregular donde existen mayores fluctuaciones en los datos. El total sector forestal el año 1993 alcanzaba una tasa de 317 disminuyendo hasta 163 en el año 2005. El promedio de los indicadores de bosque es 188,4 y el de industria es 241. El total del sector forestal promedia una tasa de 222,7. Bosque es el área que presenta mayor disminución en sus tasas considerando los años graficados. 5.2.2.3 Evolución días perdidos sector forestal Figura 55. Evolución días perdidos sector forestal Fuente: Elaboración propia. Se observa una tendencia al aumento de días perdidos por accidente tanto en bosque como en industrias, donde a diferencia de los casos anteriores bosque obtiene los valores más altos. Este indicador da a conocer la gravedad de los accidentes producidos en bosque. El área industria se tiende a homogeneizar con el sector forestal, mientras que bosque va aumentando su diferencial respecto de industrias y del sector forestal. En este último caso, se registraron aproximadamente 15 días perdidos en el año 1993, mientras 89 que para el año 2005 este valor aumentó a 18 días. El promedio de días perdidos en bosque es de 18 días aproximadamente, en cosecha es de 16 días aproximados, al igual que en el sector forestal. En bosque, la distribución de los datos presenta fluctuaciones con tendencia a la alza de días perdidos, a pesar de que se presentan bajas en los años 1994,1999 y 2004. Para el caso de industrias, las bajas se presentan en los mismos años que lo sucedido en bosque pero con oscilaciones más sinuosas. 90 6 CONCLUSIONES De acuerdo al análisis de accidentalidad del sector forestal y sus componentes, se observó una disminución en el número de accidentes y días perdidos en los tres períodos analizados, situación que se repite en el área bosque e industrias de la madera, siendo las bajas más importantes, las registradas en el período 2003. En el rubro silvicultura, el número de accidentes y días perdidos, también disminuyó en los períodos considerados en el estudio, siendo el promedio del quinquenio 1998-2002 el período con valores más altos. Por su parte, el rubro cosecha presentó la misma tendencia en el número de accidentes, mientras que en los días perdidos sólo presentó una disminución en el año 2004. El rubro cosecha presenta mayor número de accidentes y días perdidos que el rubro de silvicultura, representando la actividad más peligrosa de las desarrolladas en el bosque. Industrias de la madera se identifica como la actividad más peligrosa del sector forestal al registrar mayor número de accidentes y días perdidos que en el área bosque. Los trabajadores jóvenes se accidentan con mayor frecuencia en silvcultura, cosecha y en el sector forestal, quienes se desempeñan como podadores y desramadores principalmente. Por otro lado, existe un bajo porcentaje de trabajadores mayores de 50 años que siguen trabajando en el sector forestal. La inseguridad de los trabajadores empleados bajo carácter permanente es alta debido a que presentan mayor número de accidentes que los trabajadores temporales u ocasionales, tanto en silvicultura como en cosecha, por lo tanto la condición estable no parece favorecer la seguridad de los trabajadores. La denuncia de accidentes en los rubros silvicultura y cosecha se realiza el mismo día de ocurrido el siniestro. Los trabajadores de mayor antigüedad en las empresas relacionadas con faenas silvícola y de cosecha, se accidentan con mayor frecuencia que aquellos de menor tiempo en la 91 empresa, esta tendencia se presenta en forma más significativa en las actividades de cosecha. El mayor porcentaje de accidentalidad ocurre en trabajadores que poseen un año o más de experiencia en la labor que desempeñan al momento del siniestro. Esto ocurre indistintamente en silvicultura y cosecha. El horario que concentra mayor ocurrencia de accidentes es el de 10 a 12 hrs. en los rubros silvicultura y cosecha. En segunda prioridad el horario de 16-18hrs presenta un número importante de siniestros ocurridos en ese rango de horas. El día lunes presenta la mayor ocurrencia de accidentes en faenas silvícola y de cosecha. En silvicultura el día miércoles se concentra la segunda ocurrencia más importante, mientras que en cosecha es el día martes. Los accidentes suceden principalmente en las primeras horas de trabajo, específicamente en las primeras 3 a 4 horas. Esta situación se repite en faenas de silvicultura y cosecha. El tipo de accidente más común en los trabajadores de silvicultura, cosecha y en el sector forestal, es el golpeado por o contra, esto se relaciona con la inadecuada manipulación de las herramientas y equipos, con el descuido del trabajador respecto de los elementos del lugar de trabajo y la falta de elementos de protección personal. El agente que produce los accidentes con mayor frecuencia son los materiales en silvicultura, cosecha y en el sector forestal, estos accidentes pueden ocurrir al transportar los materiales o al utilizarlos en forma inadecuada. Las manos corresponden a las zonas del cuerpo más afectadas producto de un accidente, esto es indistintamente para silvicultura, cosecha y el sector forestal. Sin embargo, piernas y brazos presentan una ocurrencia importante en todas las áreas estudiadas. Además se observó que existe una tendencia a aumentar la cantidad de accidentes con lesiones en las manos. 92 Las zonas del cuerpo lesionados es un indicador relevante al momento de diseñar en forma localizada los elementos de protección, también refleja la necesidad del uso de estos elementos. Los días perdidos son de 1 a 7, producto de accidentes ocurridos en faenas de silvicultura y cosecha. De acuerdo a la casuística estudiada, las variables que presentan igual tendencia en los períodos estudiados son: edad, carácter actividad, experiencia en la labor, hora accidente, día semana, agente accidente y días perdidos. El sector forestal reveló diferencias en el comportamiento de distribución de los accidentes en las variables; edad, tipo accidente, agente accidente y zona cuerpo lesionada, entre los períodos considerados. La base de datos utilizada para el estudio, permitió dilucidar deficiencias importantes en el sistema de registro de los datos, debido a la carencia de información y al incorrecto uso y clasificación de la misma. Considerando el tipo de información que entregaba la casuística estudiada, las variables que permitieron un análisis más profundo y constructivo son; edad del accidentado, antigüedad en la empresa, experiencia en la labor, hora del accidente, tipo de accidente, agente del accidente y zona cuerpo lesionado. La tasa de accidentalidad y de siniestralidad registrada en faenas de cosecha es superior a las presentadas en silvicultura y a la suma de estas actividades, es decir a bosque. Se observa además, que el comportamiento de estos rubros con respecto al número de accidentes difiere entre si durante la última década. Igual situación se presenta entre las áreas bosque e industria de la madera. Industrias de la madera presenta tasas de accidentalidad superiores al sector forestal y pesca, manufacturas y transporte entre otras actividades económicas. 93 Los días perdidos por accidente se han incrementado en el tiempo, es decir los siniestros traen secuelas cada vez más delicadas y que necesitan un mayor cuidado y tiempo de recuperación. El sector forestal si bien ha reducido sus tasas de accidentalidad, esta disminución se ha detenido en los últimos años. El sector forestal mantiene tasas de accidentalidad superiores al promedio de las actividades económicas del país. En forma preocupante se observa que aún siguen falleciendo personas en el bosque producto de un accidente laboral. Del sector forestal, el área bosque presenta mayor número de casos fatales. La tasa de siniestralidad del sector forestal presenta valores alarmantes, es así como con respecto a otras actividades económicas solo es aventajada por el componente del sector; industrias de la madera, superando así a actividades peligrosas como la pesca y la construcción. Los valores altos de siniestralidad del sector forestal, con respecto a otras actividades económicas, reflejan no tan solo la gravedad de los accidentes que ocurren en el sector, sino que además una despreocupación importante por el tema ya que no ha evolucionado en el tiempo y se ha observado que sus valores siguen incrementándose. Los accidentes producidos en el sector forestal afectan de manera importante la calidad de vida de los trabajadores y su entorno, ya que requieren de mayor tiempo de recuperación por la gravedad de las lesiones o enfermedades. 94 7 RECOMENDACIONES Se recomienda estudiar el accidente según el lugar o máquina donde ocurrió, e identificar en los registros casuísticos, el tipo de labor que desarrolla el trabajador al momento del accidente. También relacionar los días efectivamente perdidos por categoría de clasificación de las variables, para conocer la gravedad de los siniestros. Es importante aplicar un tratamiento estadístico adecuado a la información recogida al momento del accidente, de este modo poseer una correcta descripción de la situación para posteriormente diseñar metodologías de corrección y prevención efectivas. Referente a la casuística, se recomienda especificar claramente las categorías de clasificación, realizando en forma previa, una investigación que permita representar las situaciones o variables que se puedan presentar en la práctica. Incorporar al registro de accidentes de trabajo, los datos y resultados del proceso de asistencia de salud al accidentado, de modo de obtener un seguimiento de la situación del trabajador afectado. Respecto a la organización de las faenas, se hace necesario incorporar pausas de trabajo en las horas consideradas como críticas, es decir de 10-12hrs en el bloque de la mañana y de 16-18hrs en la tarde. Los programas de capacitación deben orientar sus lineamientos al desarrollo de habilidades de los trabajadores, la transmisión de conocimientos técnicos y sobre todo a la motivación por realizar las labores de la forma más eficiente y segura. El método de enseñanza o instrucción de los programas de capacitación, debe ser transmitido en un lenguaje cercano a los trabajadores, con el fin de lograr real conciencia e interiorización de los riesgos asociados a cada actividad. La capacitación y control a trabajadores forestales en prevención de riesgos debe ser permanente, siendo necesario implementar sistemas de gestión y certificación orientados al tema de seguridad como lo es la OSHA. 18001. Un sistema de gestión exitoso debe disminuir la accidentalidad y aumentar la competitividad de la empresa. 95 Las entidades de formación profesional y técnica del área forestal debieran incorporar dentro de su formación curricular, conocimientos sobre seguridad y prevención de riesgos. Las instituciones pertinentes al tema de seguridad en el país, debieran desarrollar acciones y programas dirigidos a sensibilizar a empresarios y trabajadores sobre seguridad y salud en el trabajo, así como exigir a las empresas la realización programada y periódica de acciones de información, formación y participación de sus trabajadores. 96 8 BIBLIOGRAFÍA ACEITUNO, M. 2006. Seguridad y salud ocupacional. En: VI TALLER de seguridad y salud ocupacional [Diapositivas]: 17 de noviembre de 2006. III Encuentro internacional forestal, maderero, tableros, celulosa y papel. Concepción, Chile. [en línea]:<http:// www.cormabiobio.cl/6accionar/ferias/Seguridad/corma-aceituno.pdf> [Consulta: 5 de diciembre del 2006]. ACHS, 1994a. Memoria anual 1994. 119p. ACHS, 1994b. Recomendaciones de conductas de trabajo en Faenas Forestales. Santiago, Chile. 87p. ACHS, 1997. Código de prácticas forestales. 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Talca, Chile. 58p 103 9 APENDICE 9.1 NOMENCLATURA UTILIZADA POR LA ACHS PARA LOS RUBROS DE INDUSTRIA DE LA MADERA 251 252 259 260 271 272 RUBROS INDUSTRIA DE LA MADERA: Aserraderos, talleres de acepilladura y otros Envases madera, caña y artículos menudos Fabricación productos de madera, corcho y otros Fabricación muebles y accesorios Fabricación pulpa de madera, papel y otros Fabricación artículos de pulpa, madera y otros 9.2 FAENAS POR RUBRO 9.2.1 FAENAS DEL RUBRO SILVICULTURA FAENAS EJECUTOR Viveros forestales Fumigador Habilitación de terrenos: Roce Quema Habilitador Operario de roce a fuego Plantación: Técnicas de plantación Plantador Intervenciones silvícolas: Desbroce manual y químico Raleos Poda Marcación Desbrozador y limpiador Raleador Podador Marcador Otros oficios observados Combatiente Guardabosque Motosierrista Obrero forestal Mecánico Otros 104 9.2.2 FAENAS DEL RUBRO COSECHA FAENAS EJECUTOR Volteo Motosierrista Madereo Estrobero Boyero Conductor de tractor forestal articulado Operador de cosechadora mecanizada Operador de torre de madereo Carguío Operador cargador mecanizado simple Operador cargador mecanizado avanzado Otros oficios observados Arrumador Chofer Obrero forestal Hachero Podador Mecánico Despicador Rozador Otros 105 9.3 DATOS CASUISTICOS ENTREGADOS POR LA ACHS Variables Edad Carácter actividad Denuncia accidente Antigüedad en la empresa Experiencia en la labor Hora accidente Día semana Horas trabajadas Tipo accidente Agente accidente Zona del cuerpo lesionada Días perdidos 1998-2002 Nacional Sector Silvicultura Cosecha Forestal X x x X x X x X x x X x x X x X x x X x X x x X x x X x x X x - 2003 Nacional Silvicultura x x x x x x x x x x x x x: Datos proporcionados por la ACHS. - : Datos inexistentes de acuerdo a los registros de la ACHS. Cosecha x x x x x x x x x x x x 2004 Nacional Sector Forestal x x x x x x x x x x x x Silvicultura x x x x - Cosecha x x x x - Sector Forestal x x x x - 106 9.4 RESULTADOS ESTADÍSTICOS DE LAS DISTRIBUCIONES DE LOS PORCENTAJES DE ACCIDENTES ENTRE SILVICULTURA Y COSECHA POR PERIODO PARA CADA VARIABLE 9.4.1 RESULTADOS VARIABLE EDAD X25gl 9,23 8,66 8,45 Edad 1998-2002 2003 2004 P 0,1 0,123 0,133 9.4.2 RESULTADOS VARIABLE CARÁCTER ACTIVIDAD Carácter actividad 1998-2002 2003 Categoría Ocasional Permanente Ocasional Permanente Z 2,42 -2,42 4,76 -4,76 P 0,007760 0,992240 0,000001 0,999999 9.4.3 RESULTADOS VARIABLE DENUNCIA ACCIDENTE Denuncia accidente 1998-2002 Categoría Mismo día Días despúes Mismo día Días despúes 2003 Z -2,59 2,59 -0,833 0,833 P 0,995 0,005 0,798 0,202 9.4.4 RESULTADOS VARIABLE ANTIGÜEDAD EN LA EMPRESA Antigüedad en la empresa 1998-2002 2003 Categoría 0-12 meses 1 año o más 0-12 meses 1 año o más Z 2,01 -2,01 1,16 -1,16 P 0,022 0,978 0,123 0,877 9.4.5 RESULTADOS VARIABLE EXPERIENCIA EN LA LABOR Experiencia en la labor 1998-2002 2003 Categoría 0-12 meses 1 año o más 0-12 meses 1 año o más Z 0,65 -0,62 -0,11 0,11 P 0,258 0,732 0,544 0,456 107 9.4.6 RESULTADOS VARIABLE HORA ACCIDENTE Hora accidente 1998-2002 2003 X25gl 7,07 6,9 P 0,132 0,141 9.4.7 RESULTADOS VARIABLE DÍA SEMANA Día semana 1998-2002 2003 X25gl 1,91 6,12 P 0,928 0,410 9.4.8 RESULTADOS VARIABLE HORAS TRABAJADAS Horas trabajadas 1998-2002 2003 X25gl 2,96 12,55 P 0,706 0,028 9.4.9 RESULTADOS VARIABLE TIPO ACCIDENTE Tipo accidente 1998-2002 2003 2004 X25gl 26,89 9,68 12,28 P 0,0002 0,1388 0,0560 9.4.10 RESULTADOS VARIABLE AGENTE ACCIDENTE Agente accidente 1998-2002 2003 2004 X25gl 5,2 7,06 8,44 P 0,519 0,316 0,208 9.4.11 RESULTADOS VARIABLE ZONA CUERPO LESIONADA Zona cuerpo lesionada 1998-2002 2003 2004 X25gl 10,2 18,62 9,91 P 0,251 0,017 0,271 9.4.12 RESULTADOS VARIABLE DÍAS PERDIDOS Días perdidos 1998-2002 2003 X25gl 13,73 8,85 P 0,003 0,031 108 9.5 PORCENTAJES DE ACCIDENTES SILVICULTURA Y COSECHA POR VARIABLE Y PERÍODO PARA 9.5.1 PORCENTAJES DE ACCIDENTES POR CATEGORÍAS DE EDAD EDAD 1998-2002 Silvicultura 1998-2002 Cosecha 2003 Silvicultura 2003 Cosecha 2004 Silvicultura 2004 Cosecha < 21 8,70 5,40 6,10 6,90 6,40 6,50 21-30 35,00 33,70 30,60 33,50 27,10 33,20 31-40 29,90 32,10 31,80 27,00 13,90 16,60 41-50 17,70 18,20 19,50 23,60 20,30 19,00 51-60 6,70 8,40 10,10 7,60 10,40 7,90 > 60 2,00 2,20 1,90 1,40 1,80 1,10 9.5.2 PORCENTAJES DE ACCIDENTES POR CATEGORÍA DE CARÁCTER ACTIVIDAD CARÁCTER ACTIVIDAD 1998-2002 Silvicultura 1998-2002 Cosecha 2003 Silvicultura 2003 Cosecha Ocasional 11,3 7,4 19,5 10,2 Permanente 88,7 92,6 80,5 89,8 9.5.3 PORCENTAJES DE ACCIDENTES POR CATEGORÍAS DE EXPERIENCIA EN LA LABOR EXPERIENCIA EN LA LABOR 1998-2002 Silvicultura 1998-2002 Cosecha 2003 Silvicultura 2003 Cosecha 0-12 meses 34,40 32,90 38,10 38,40 1 año o más 65,60 67,10 61,90 61,60 9.5.4 PORCENTAJES DE ACCIDENTES POR CATEGORÍAS DE HORA DE ACCIDENTE HORA ACCIDENTE 1998-2002 Silvicultura 1998-2002 Cosecha 2003 Silvicultura 2003 Cosecha 7-9 14,46 15,81 7,29 7,62 10-12 32,26 33,40 35,19 40,56 13-15 20,19 19,28 22,57 18,05 16-18 27,68 28,24 32,29 29,66 19-21 5,41 3,27 2,66 4,10 9.5.5 PORCENTAJES DE ACCIDENTES POR CATEGORÍAS DE DÍA DE SEMANA DÍA SEMANA 1998-2002 Silvicultura 1998-2002 Cosecha 2003 Silvicultura 2003 Cosecha Lunes 17,70 19,30 20,10 19,40 Martes Miércoles Jueves Viernes Sábado Domingo 16,90 17,30 17,4 15,10 11,10 4,50 17,50 15,80 16,3 15,50 11,60 4,00 16,40 19,10 16,6 14,30 11,30 2,20 17,00 15,50 16 16,60 11,70 3,80 109 9.5.6 PORCENTAJES DE ACCIDENTES POR CATEGORÍAS DE AGENTE ACCIDENTE AGENTE ACCIDENTE 1998-2002 Silvicultura 1998-2002 Cosecha 2003 Silvicultura 2003 Cosecha 2004 Silvicultura 2004 Cosecha MAQ HER MAT OTR ST ZT VEH 7,83 14,11 10,94 17,05 10,69 14,75 14,52 15,12 12,98 13,05 12,92 15,56 25,81 32,46 39,19 34,53 23,16 28,48 21,66 19,76 11,45 14,95 24,50 20,00 17,74 12,50 18,83 14,11 20,27 15,76 5,07 1,21 1,53 1,68 2,90 2,42 7,37 4,84 5,09 4,63 5,57 3,03 9.5.7 PORCENTAJE DE ACCIDENTES POR CATEGORÍAS DE DÍAS PERDIDOS DÍAS PERDIDOS 1998-2002 1998-2002 2003 2003 Silvicultura Cosecha Silvicultura Cosecha 1-7 53,70 46,80 54,40 46,80 8-14 25,40 25,70 22,90 23,80 15-21 8,3 8,8 7,1 9,4 22 o Más 12,6 18,7 15,6 20 9.6 RESULTADOS DEL TEST DE Z POR VARIABLE Y CATEGORIA 9.6.1 RESULTADOS VARIABLE EDAD Categorías < 21 21-30 31-40 41-50 51-60 > 60 Zcalculado 0,86 -0,64 0,2 -0,51 0,51 0,44 Ztabla 1,96 1,96 1,96 1,96 1,96 1,96 Resultado Acepto Acepto Acepto Acepto Acepto Acepto 9.6.2 RESULTADOS CARÁCTER ACTIVIDAD Categorías Zcalculado Ocasional 3,43 Permanente -3,43 Ztabla 1,96 1,96 Resultado Rechazo Rechazo 9.6.3 RESULTADOS DENUNCIA ACCIDENTE Categorías Mismo día Días despúes Zcalculado -1,9 1,9 Ztabla 1,96 1,96 Resultado Acepto Acepto 110 9.6.4 RESULTADOS ANTIGÜEDAD EN LA EMPRESA Categorías Zcalculado 0-12 meses 8,1 1 año o más -8,1 Ztabla 1,96 1,96 Resultado Rechazo Rechazo 9.6.5 RESULTADOS EXPERIENCIA EN LA LABOR Categorías Zcalculado 0-12 meses 4,53 1 año o más -4,53 Ztabla 1,96 1,96 Resultado Rechazo Rechazo 9.6.6 RESULTADOS VARIABLE HORA ACCIDENTE Categorías 7-9 10-12 13-15 16-18 19-21 Zcalculado -0,29 -1,2 1,07 0,23 0,7 Ztabla 1,96 1,96 1,96 1,96 1,96 Resultado Acepto Acepto Acepto Acepto Acepto 9.6.7 RESULTADOS VARIABLE DÍA SEMANA Categorías Lunes Zcalculado -0,33 Ztabla 1,96 Resultado Acepto Martes Miercoles Jueves Viernes Sabado Domingo -0,29 1,21 0,47 -0,65 -0,28 -0,34 1,96 1,96 1,96 1,96 1,96 1,96 Acepto Acepto Acepto Acepto Acepto Acepto 9.6.8 RESULTADOS VARIABLE HORAS TRABAJADAS Categorías 1-2 3-4 5-6 7-8 9-10 11-12 Zcalculado -0,24 0,64 -0,43 -0,46 1,28 -0,53 Ztabla 1,96 1,96 1,96 1,96 1,96 1,96 Resultado Acepto Acepto Acepto Acepto Acepto Acepto 111 9.6.9 RESULTADOS VARIABLE TIPO ACCIDENTE Categorías CA GPC ATR CCO PRO SE ACH Zcalculado 2,12 -2,14 -1,83 -0,2 0,35 1,61 0,71 Ztabla 1,96 1,96 1,96 1,96 1,96 1,96 1,96 Resultado Rechazo Rechazo Acepto Acepto Acepto Acepto Acepto 9.6.10 RESULTADOS VARIABLE AGENTE ACCIDENTE Categorías MAQ HER MAT OTR ST ZT VEH Zcalculado -2,08 -0,33 -0,85 0,42 1,61 1,43 1,13 Ztabla 1,96 1,96 1,96 1,96 1,96 1,96 1,96 Resultado Rechazo Acepto Acepto Acepto Acepto Acepto Acepto 9.6.11 RESULTADOS VARIABLE ZONA CUERPO LESIONADA Categorías OP CAB TRO BRA MAN PER PIE LUM OTR Zcalculado 0,5 -2,03 0,5 -0,49 -0,02 -0,29 0,35 0,08 1,8 Ztabla 1,96 1,96 1,96 1,96 1,96 1,96 1,96 1,96 1,96 Resultado Acepto Rechazo Acepto Acepto Acepto Acepto Acepto Acepto Acepto 9.6.12 RESULTADOS VARIABLE DÍAS PERDIDOS Categorías 01-07 08-14 15-21 22 o más Zcalculado 2,74 -0,19 0,86 -2,78 Ztabla 1,96 1,96 1,96 1,96 Resultado Rechazo Acepto Acepto Rechazo 112 9.7 ACCIDENTES EN LOS RUBROS SILVICULTURA Y COSECHA DESDE EL AÑO 1993 AL 2005. ACCIDENTES Silvicultura 1993 1.141 1994 1.226 1995 1.063 1996 1.067 1997 975 1998 959 1999 959 2000 822 2001 513 2002 451 2003 491 2004 436 2005 400 Cosecha 2.848 2.426 2.110 1.728 1.338 1.172 944 843 835 814 843 740 725 TOTAL BOSQUE 3.989 3.654 3.173 2.795 2.313 2.131 1.723 1.665 1.348 1.265 1.334 1.176 1.125 9.8 ACCIDENTES EN LAS ÁREAS BOSQUE E INDUSTRIA DE LA MADERA DESDE EL AÑO 1993 AL 2005. SECTOR ACCIDENTES BOSQUE INDUSTRIAS FORESTAL 1993 3.940 7.542 11.531 1994 3.740 7.346 11.000 1995 3.173 7.066 10.239 1996 2.795 6.404 9.199 1997 2.313 6.702 9.015 1998 2.131 6.085 8.216 1999 1.723 4.596 6.319 2000 1.665 5.399 7.064 2001 1.348 4.937 6.285 2002 1.265 5.079 6.344 2003 1.334 4.575 5.909 2004 1.176 4.370 5.546 2005 1.125 3.948 5.073 113 9.9 RESULTADOS ESTADÍSTICOS DE LAS DISTRIBUCIONES DE LOS PORCENTAJES DE ACCIDENTES DEL SECTOR FORESTAL ENTRE LOS PERÍODOS 1998-2002, 2003 Y 2004 POR CADA VARIABLE. Variable Edad Tipo accidente Agente accidente Zona cuerpo lesionada X210gl 255,7 312,5 555,2 330,97 P 3,43E-49 3,53E-61 6,91E-113 4,33E-65 114 10 ANEXO 10.1 ELEMENTOS DE PROTECCIÓN PERSONAL Ropa protectora. Protege contra cortes, frío, calor y agua. La protección contra cortes es por medio de un acolchado de seguridad fabricado a base de varias capas con fibras de alta resistencia a la tracción. Por ejemplo cuando la cadena de la motosierra en movimiento toca estas fibras, se estiran y resisten el movimiento de ella. Para las faenas forestales normales, el acolchado protector sólo cubre la parte delantera de los pantalones y la parte posterior de los guantes de seguridad. Para la protección contra agua se usa ropa impermeable, que es de uso común en las faenas forestales que se realizan en épocas de invierno. Calzado protector. Evita accidentes como cortes, resbalones y caídas, producidas por las imperfecciones del terreno. También protege de infecciones de heridas, picaduras de insectos y contacto con humedad. El calzado protector de goma resiste bastante bien los cortes de las motosierras. El calzado de seguridad debe tener un forro resistente a los cortes en la parte delantera y punteras metálicas. Si hace calor resulta incómodo utilizar botas de goma y es mejor utilizar botas de cuero o zapatos de caña alta. Es muy importante que la suela externa esté bien adaptada y fabricada para evitar resbalones y caídas, que son muy comunes. En zonas donde el suelo está con hielo o nieve, o donde se camina sobre troncos resbaladizos, el preferible usar calzado con clavos en la suela o suela con dibujo profundo y que se limpie solo. Casco protector. Los cascos protegen contra la caída de ramas y árboles, fuego, así como el retroceso de una motosierra. El casco debe ser lo más liviano posible para minimizar la tensión del 115 cuello. Los cascos forestales llevan dispositivos incorporados para montar una visera y orejeras de protección auditiva. Las orejeras de los protectores auditivos deben colocarse directamente en contacto con la cabeza. Existen diferentes materiales para la confección del casco, dependiendo de las condiciones en que se va a usar, por ejemplo en incendios forestales debe ser resistente al fuego. Protección facial y ocular. El protector ocular o pantalla facial protege los ojos y la cara contra astillas o aserrín y golpes y rasguños con ramas. El protector debe estar montado en el casco de seguridad de tal forma que pueda ser movido con facilidad. Protectores auditivos. El ruido de la motosierra produce sordera. Para prevenir se usan los protectores auditivos pueden ser tapones u orejeras. Las orejeras sólo son eficaces si se colocan bien apretadas contra la cabeza. Cualquier separación entre la cabeza y los aros de las orejeras reducirá su eficacia notablemente. Los tapones tienen el riesgo de causar infección cuando no se mantienen limpios o no se desechan cuando corresponda. Es importante decir que el motosierrista debe usar protector auricular (orejeras) cuando realiza su trabajo. Protección respiratoria. Los gases, vapores y humos presentes en algunas labores forestales (fumigaciones, quemas, etc.) son un riesgo para la salud, la protección frente a este es el uso de máscaras respiratorias adecuadas al contaminante. Elementos de protección del motoserrista Los trabajadores que utilizan la motosierra para realizar su trabajo deben conocer y usar su equipo de protección personal completo y conocer los elementos de seguridad 116 obligatorios de las motosierras, además de realizar el trabajo en forma correcta para reducir al mínimo los riesgos que involucra el uso de esta herramienta. Los elementos de seguridad del motoserrista son: - Mango frontal de protección con freno de cadena: protege la mano izquierda y detiene la sierra en caso de rebote. - Atrapador de cadena: atrapa la cadena si se corta. - Protector posterior: protege la mano derecha si se corta la cadena. - Seguro trabador: evita que la cadena funcione en forma accidental. - Protección antivibración: reduce la vibración que se trasmite a las manos. - Protector de la barra de guía: evita las lesiones (cortaduras) al transportar, guardar o caminar con la motosierra.