GRIFO Y LEÓN GUARDIANES DEL MUSEO Información complementaria para profesores ¿QUÉ ES UN MUSEO? EL MUSEO DE GUADALAJARA Y PALACIO DEL INFANTADO Producción de: Con esta información se pretende dar a conocer el funcionamiento y el significado de los Museos y en concreto el del Museo de Guadalajara, para que los profesores puedan transmitirla a los alumnos antes de la visita. Contenidos 1- ¿Qué es un Museo? Definición 2- El Museo de Guadalajara 2.1- Historia del Museo de Guadalajara 2.2- Las Colecciones del Museo de Guadalajara 2.3- Cómo se formaron las Colecciones del Museo de Guadalajara 2.4- Las funciones del Museo: conservación, investigación, comunicación y exhibición de sus fondos 2.5- Quién trabaja en el Museo 2.6- Dependencias del Museo 2.7- La exposición permanente del Museo: “Tránsitos” 3- El Palacio del Infantado 3.1- Historia del Palacio del Infantado 3.2- Descripción artística GALÁPAGOS TEATRO CÁLIDO · FUNDACIÓN CAJA DE GUADALAJARA 1- ¿Qué es un museo? Definición Un Museo es una institución de carácter permanente que adquiere, conserva, investiga, comunica y exhibe para fines de estudio, educación y contemplación, conjuntos y colecciones de valor histórico, artístico, científico y técnico o de cualquier otra naturaleza cultural. Esta es la definición que da la Ley de Patrimonio Histórico Español y que asumen el Reglamento de los Museos de Titularidad Estatal y la ley de Patrimonio Histórico de Castilla-La Mancha. Pero ¿qué significa? • Es una institución de carácter permanente, es decir, que no se crea por un tiempo determinado, no es una sala de exposiciones, sino que se pretende que se mantenga indefinidamente. • Que adquiere piezas diversas de formas muy variadas y según el carácter de la ección propia del Museo. col- • Pone los medios para que se conserven y puedan estar a disposición de generaciones futuras. • Investiga, es decir, estudia sus colecciones para conocerlas. • Comunica esta información a quien quiera disponer de ella a través de la exposición y de las publicaciones, revistas, conferencias y otras actividades. • Exhibe, muestra a la sociedad sus colecciones, por medio de las exposiciones temporales y permanentes. • Con el fin de que puedan ser estudiadas por especialistas y contribuir a la educación de públicos de todo tipo a través de la contemplación de las piezas. • Los fondos del museo están compuestos por conjuntos y colecciones (piezas aisladas o grupos de ellas con características comunes, bien de época, procedencia, uso, etc) de valor histórico (en los Museos de Historia de una época, de un lugar, de un hecho histórico y entre ellos los arqueológicos), artístico (en los de Bellas Artes y Arte Contemporáneo), científico y técnico (en los de Ciencias, Técnicas, Oficios) o de cualquier otra naturaleza cultural (todo lo que se le ocurra a alguien y que tenga un interés representativo para un grupo de personas o un territorio). No es necesario y es casi imposible que un Museo tenga colecciones de todos estos tipos. GALÁPAGOS TEATRO CÁLIDO · FUNDACIÓN CAJA DE GUADALAJARA 2- El Museo de Guadalajara El Museo de Guadalajara es un Museo de carácter provincial y titularidad estatal gestionado por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha que se encuentra ubicado en el Palacio del Infantado. Tiene una larga y agitada historia. 2.1- Historia del Museo de Guadalajara Como todos los museos de ámbito provincial se creó por Real Orden Circular de 27 de mayo de 1837 con el fin de que en ellos se recogieran las numerosas obras artísticas procedentes de los conventos desamortizados que se estaban perdiendo por falta de cuidados apropiados. La venta e incautación de bienes de la Iglesia decretada por el Ministro de Hacienda de la Reina Isabel II, Juan Álvarez de Mendizábal, en 1836, hizo necesaria la creación de instituciones que custodiaran y conservaran sus bienes artísticos. El de Guadalajara es el Museo Provincial más antiguo de España, inaugurado el 19 de noviembre de 1838. Tuvo como primera sede el Convento de la Piedad (actual Liceo Caracense), donde se custodiaban unas cuatrocientas pinturas, una gran colección de libros y algunas esculturas. A este fondo, en 1844, se añadieron los sepulcros de doña Aldonza de Mendoza y de los Condes de Tendilla (que hoy están en la Iglesia de san Ginés). Como no todas las obras fueron expuestas (había tantos cuadros almacenados como en exhibición) parte de la colección se prestó a otras instituciones. En 1850 ingresó la primera colección de Arqueología, procedente de las excavaciones de Hijes y en 1860 la segunda, recogida durante las obras del ferrocarril en Espinosa de Henares. En 1861 la Diputación se instala en el Convento de la Piedad que se queda pequeño, por ello se cierra el Museo, almacenándose sus fondos y prestándose de nuevo una parte de los mismos. En 1872 se reorganiza el Museo al ceder el Duque del Infantado unas dependencias de su Palacio que se abren al público en 1873. Aquí se mantuvo hasta 1877, año en que se inician las gestiones para ceder el edificio al Ministerio de la Guerra y convertirlo en Colegio de Huérfanos. Las colecciones del Museo se trasladan al Convento de la Concepción, a un almacén, continuando la dispersión de los fondos por otras instituciones. Al hundirse parte de la cubierta del Convento en 1899 la Diputación se hace cargo de las obras que permanecían allí y las instala en distintas dependencias de su nuevo edificio, Con el tiempo se fueron relegando quedando finalmente arrinconadas en los sótanos de la Diputación hasta que en 1972 se produjo su “descubrimiento”. Entonces se tomó conciencia de su importancia y fueron enviadas por el Ministerio al Instituto de Conservación y Restauración de Obras de Arte de Madrid. Una vez restauradas sirvieron para crear el nuevo Museo de Guadalajara, el actual, con sede en el Palacio del Infantado, inaugurado en 1973, con el montaje de la sección de Bellas Artes en la que se presentó una selección de los antiguos fondos junto a obras de otras procedencias, todas de los siglos XV a XIX. En estas fechas dependía directamente del Ministerio de Cultura, pero tras la creación de las Autonomías, en 1984 pasó a ser gestionado por la Consejería de Cultura de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, aún manteniendo la titularidad estatal. En 1983 se abrió el Museo de Etnografía en otras cuatro salas del mismo edificio. En ellas se expusieron objetos relacionados con el arte y las costumbres populares de la provincia. Fue cerrada por diversos problemas en 1990. En 2007 se ha inaugurado la nueva exposición de la colección permanente que leva el nombre de TRÁNSITOS. Actualmente se está redactando un nuevo Plan Museológico que definirá los contenidos y el funcionamiento en el futuro, en el que el Museo ocupará la totalidad de un rehabilitado y modernizado Palacio del Infantado. GALÁPAGOS TEATRO CÁLIDO · FUNDACIÓN CAJA DE GUADALAJARA 2.2- Las colecciones del Museo de Guadalajara El Museo de Guadalajara custodia los objetos más relevantes del Patrimonio Cultural mueble de toda la provincia. Sus colecciones se integran en tres secciones: Bellas Artes, Arqueología y Etnografía. Su incremento no ha parado desde su inauguración hace más de cien años. La sección de Bellas Artes La colección de esta Sección es la más antigua del Museo, heredera de la del antiguo Museo inaugurado en 1838. Son, por lo tanto, los fondos constitutivos del Museo. Su origen, los conventos desamortizados, marca la temática de las obras, la mayoría de carácter religioso. En la actualidad está compuesta por más de 200 obras de pintura, escultura y mobiliario antiguo, cubriendo un espectro cronológico que va de los siglos XV a XXI. Parte de sus fondos están expuestos, pero muchos más se encuentran en los almacenes. Lo más destacado de esta Sección es la pintura y escultura barrocas, con obras maestras de Alonso Cano, Juan Carreño de Miranda, Luis Tristán, Luisa Roldán La Roldana, Bartolomé Román, talleres de José de Ribera y de El Greco y otras obras anónimas de magnífica calidad. La sección de Arqueología Es la colección más numerosa en piezas y la que más aumenta anualmente con la entrada de los objetos procedentes de las prospecciones y excavaciones arqueológicas. Cronológicamente comprenden desde el Paleolítico hasta el siglo XX. Las culturas celtibérica, visigoda e islámica son las señas de identidad de nuestra Sección de Arqueología. Se trata de objetos muy diversos de la vajilla doméstica, objetos de adorno, instrumentos variados y herramientas o armas, elementos decorativos de los edificios, inscripciones funerarias y otras piezas relacionadas con los enterramientos. Aunque son numerosas las piezas expuestas, suponen un porcentaje muy bajo del total custodiado en el Museo, por lo que algunas están prestadas para su exhibición en otros municipios de la provincia: Herrería, Molina de Aragón, Hita, Zorita de los Canes. La sección de Etnografía Está formada por unos 1.300 objetos relacionados con el arte y las costumbres populares de la provincia. Estos objetos se recogieron por toda la geografía provincial para formar una amplia colección demostrativa de las formas de vida tradicionales (artesanía, apicultura, ganadería...), a las que se añadieron los fondos de la Sección Femenina, muestras del folklore popular. El abandono de la vida rural y las formas de vida tradicionales ha ocasionado que muchas de estas evidencias populares sólo puedan contemplarse en museos como el nuestro. Las colmenas hechas con un simple tronco, tornos de alfareros similares a los del Neolítico, son ejemplos de unas formas de vida ya desaparecidas. En 1983 se inauguraron las salas de exposición de Etnografía que años después hubo que cerrar por no poder ser visitables. Como en la actualidad, en ellas se mostraron muchas de las piezas empleadas tradicionalmente en los pueblos, pero no todas las que posee el Museo. GALÁPAGOS TEATRO CÁLIDO · FUNDACIÓN CAJA DE GUADALAJARA 2.3- Cómo se formaron las colecciones del Museo de Guadalajara La forma de adquirir piezas en un Museo es muy variada y depende mucho de las colecciones que lo compongan. El Museo de Guadalajara, al tener tres Secciones, cuenta con piezas de cada una de ellas: obras de arte, objetos arqueológicos y útiles etnográficos. Lo mayor parte de los cuadros y esculturas de la Sección de Bellas Artes proceden de los bienes desamortizados a la iglesia a partir de 1835. Las que poseemos en la actualidad no son todas las que formaron el antiguo Museo ya que mientras estuvo cerrado se fueron desperdigando y estropeando a lo largo de los siglos XIX y XX. Por el contrario, desde 1973 se han ido incorporando obras nuevas a la colección por donación de particulares o instituciones e incluso por compras efectuadas por el Ministerio de Cultura. Las colecciones de Arqueología, en la inmensa mayoría de los casos, proceden de las excavaciones y prospecciones arqueológicas, aunque algunas han sido donadas por particulares o instituciones que poseen este tipo de objetos. Algunas piezas ingresaron antes de 1973, pero la mayoría lo hicieron a partir de la aplicación de las Leyes de Patrimonio Histórico, estatal y autonómica, de 1985 y 1990, respectivamente, con la finalidad de asegurar su adecuada conservación y su mejor función cultural y científica, como muestras de la identidad cultural de todos los españoles. La colección de Etnografía se formó a principios de los años 80, cuando se realizaron varias campañas de recogida de materiales y documentación a lo largo de la geografía provincial, pero especialmente en las zonas más abandonadas, como los pueblos negros. Otras piezas proceden los fondos de la Sección Femenina, donaciones de particulares y algunas compras. Todas estas piezas se custodian en el Museo de Guadalajara aunque no estén expuestas. Algunas de ellas se prestan temporalmente para exposiciones o a museos locales. 2.4- Las funciones del Museo: conservación, investigación, comunicación y exhibición de sus fondos Como hemos visto en la definición, los Museos son las instituciones que adquieren, conservan, investigan, comunican y exhiben los objetos que forman parte del Patrimonio Cultural con la finalidad de educar y agradar a su público. Todos los Museos tienen que cumplir esa funciones que están reguladas por la Ley 16/85 del Patrimonio Histórico Español y por el Real Decreto 620/87 por el que se aprueba el Reglamento de Museos de Titularidad Estatal y del Sistema Español de Museos. El Museo de Guadalajara cumple también estas condiciones: • Tiene y sigue adquiriendo objetos que forman parte de las colecciones de Bellas Artes, Arqueología y Etnografía, de la manera en que hemos visto anteriormente • En él se guardan y protegen de la manera más adecuada posible, para asegurar su conservación y transmisión a las futuras generaciones. Para ello se catalogan, inventarían y fotografían con el fin de poderlas identificar y conocer la historia de cada pieza, se guardan en los depósitos, se restauran las que lo necesitan y se controlan los niveles de temperatura y humedad • También se investiga sobre las colecciones que lo forman, para lo que cuenta con una biblioteca especializada y colabora con los investigadores que realizan trabajos sobre sus fondos. Esta investigación es fundamental para conocer las colecciones y realizar las fichas de catálogo de cada objeto, también para poder atender las consultas de los investigadores y conseguir presentarlos al público en las exposiciones de la manera adecuada. • La exhibición de sus fondos, para que lleguen a conocimiento de todos, se hace en la exposición permanentemente (“Tránsitos”), preparando exposiciones temporales (para las que se dispone de dos salas, las Salas del Duque y la Sala Azul) y colaborando en otras que se hacen fuera del Museo. GALÁPAGOS TEATRO CÁLIDO · FUNDACIÓN CAJA DE GUADALAJARA • Por último, la comunicación con los ciudadanos, buscando hacer comprensibles las exposiciones y enseñar a valorar los Museos y los objetos que los forman, se realiza a través de las actividades del Departamento de Educación y Acción Cultural, las explicaciones de las exposiciones y la difusión en la prensa de sus actividades. En el año 2007 el Museo de Guadalajara ha tenido 64.364 visitantes: 20.975 en la exposición permanente, 37.032 en las exposiciones temporales y 6.357 en actividades extraordinarias. 2.5- Quién trabaja en el Museo El director que coordina el trabajo de todos los demás y lleva a cabo las funciones de conservación, exposición y divulgación en colaboración con el resto del personal. El técnico de Museos, que se encarga del control de todos los fondos que componen las colecciones: registro de entrada, catalogación, ordenación, ayuda en el montaje de exposiciones etc, así como de otros trabajos administrativos. La técnico de gestión cultural, encargada de las tareas de divulgación y educación, trabaja para acercar el Museo al público mediante actividades, publicaciones, visitas guiadas, ayuda en el montaje de exposiciones, etc. El personal de administración que se encarga del trabajo administrativo y del funcionamiento de la biblioteca. Los ordenanzas que controlan las salas de exposiciones y almacenes, las entradas de público y también hacen trabajos de oficina. Los vigilantes que controlan las cámaras y se encargan de que no pase nada en l Museo ni de día ni de noche. El personal de mantenimiento está encargado de que funcionen las instalaciones de luz, agua, alarmas, etc. El personal de limpieza quienes se ocupan de que todo esté preparado para las visitas y los trabajadores. Otras personas trabajan de manera ocasional: • Restauradores algunos meses al año para vigilar y poner en condiciones las piezas que lo necesitan. • Arqueólogos que a través de contrataos temporales colaboran en la catalogación y puesta en orden de los fondos de arqueología, los más numerosos en entradas a lo largo del año. • Becarios que mientras aprenden cómo se trabaja en un Museo colaboran en diversas tareas. 2.6- Dependencias del Museo Los visitantes de un Museo suelen ver tan sólo las salas de exposiciones, si son investigadores ocerán la biblioteca y si solicitan actividades algunas otras dependencias en las que éstas se zan, pero un Museo tiene más espacios. conreali- Las salas de exposiciones son varias, unas dedicadas a la exposición permanente y otras a exposiciones temporales. Las salas de la exposición permanente son cuatro y están situadas en la planta baja, en la esquina sureste. GALÁPAGOS TEATRO CÁLIDO · FUNDACIÓN CAJA DE GUADALAJARA Las de exposiciones temporales están en dos sitios diferentes: • Las Salas del Duque en la planta baja, en la esquina noreste, son cinco salas y dos saletas y se emplean ara exposiciones grandes. • La Sala Azul está en la planta primera y se usa para exposiciones más pequeñas. Los Salones de Actos son dos, uno para 150 personas y otro más pequeño y se comparten con el Archivo Histórico Provincial que también está en el Palacio del Infantado. Ambos se encuentran en la primera planta. Las oficinas y despachos del personal del Museo, en los que se desarrolla la actividad administrativa, están situados en la planta baja y en la entreplanta, en la esquina noreste. También hay otro despacho en el que pueden trabajar investigadores, si lo desean, en la zona de almacenes, para acceder más fácilmente a los fondos. La biblioteca está dentro de la zona de oficinas, en la planta baja y es de uso público, aunque sus fondos están muy especializados en las colecciones del Museo. Los almacenes es frecuente que sean varios dependiendo de los fondos del Museo, en nuestro caso están repartidos por todo el edificio. Hay almacenes de Arqueología, de Etnografía que comparten espacio con piezas de Bellas Artes y de Arqueología, otros de cuadros y otros con los libros de la biblioteca que menos se usan. La zona de talleres incluye: • Los laboratorios para el estudio y la preparación de las piezas con el fin de almacenarlas convenientemente: la zona donde se lavan y dejan secar, se clasifican, se fotografían y describen. • El taller de restauración. • Los talleres de actividades que también están repartidos por el Museo, unos comparten espacio con los anteriores y otros con los almacenes. 2.7- La exposición permanente del Museo: Tránsitos TRÁNSITOS es el título de la exposición permanente del Museo de Guadalajara inaugurada en marzo de 2007. En ella se han reunido algunas de las piezas más destacadas de las colecciones de Bellas Artes, Arqueología y Etnografía. Abarca un período cronológico que comprende desde el Paleolítico hasta mediados del siglo XX. En TRÁNSITOS se ha creado un discurso unitario en torno a las ideas de la vida, la muerte y la religiosidad, presentes en todas las culturas que se han sucedido en la provincia de Guadalajara. Su título quiere expresar el camino, continuado pero lleno de etapas, trazado por nuestros antepasados y las fases por las que el ser humano, como individuo, pasa durante su existencia material de camino hacia la vi da eterna, idea común en todos los seres humanos pero con distintas formas según las épocas y culturas. Estos contenidos se han representado a través de las cuatro áreas que componen la exposición. La Vida, representada por las actividades que en ella se realizan. La Muerte, mostrada a través de las formas de enterramiento y de la guerra. Los Espacios y Objetos Sagrados, producto de la necesidad de creer en Otra Vida que satisfaga el ansia de eternidad. El Cielo en la Tierra, donde se recogen las manifestaciones artísticas que reflejan el contacto de la Divinidad o sus intermediarios con los fieles y devotos. A través del Patrimonio que custodia el Museo de Guadalajara, como legado para los que tendrán que continuar esos mismos Tránsitos, se muestra cómo todo cambia, pero también cómo permanece. GALÁPAGOS TEATRO CÁLIDO · FUNDACIÓN CAJA DE GUADALAJARA LA VIDA Es el bien más preciado de cada ser humano y a su conservación encamina una gran parte de sus actos. En la exposición está representada por las actividades cotidianas relacionadas con el trabajo y el sustento, incluyendo también las lúdicas y las vinculadas con el poder y la riqueza. Por ello se han escogido los objetos utilizados por el hombre en las diversas actividades realizadas para subsistir, los utilizados en momentos de diversión y de gozo y los que han servido para demostrar la riqueza y el poder de los grupos dominantes. LA MUERTE Cada sociedad le ha hecho frente a través de un sistema de creencias que la dignificaba y alentaba la esperanza en una vida mejor, pasando así a ser un mero tránsito que permitiría, según los casos, el renacimiento, la resurrección o el disfrute de una placentera eternidad por parte de los individuos. En la exposición está reflejada por diversas formas de enterramiento ya que para llegar a ese nuevo estado cada cultura estableció unas prácticas que definían cómo preparar los cadáveres, los objetos que debían acompañarles y los rituales que lo hacían posible. Dentro del mismo área está La Guerra, una amenaza constante durante toda la Historia de la Humanidad, representada por las armas creadas por los hombres de distintas épocas, quienes han empleado buena parte de su capacidad de inventar en no perder la vida a costa de arrebatársela al otro. LOS ESPACIOS Y OBJETOS SAGRADOS Aquí se muestran las diversas religiones y creencias que se han sucedido en nuestra provincia y que han dejado algún tipo de muestra. El hombre, para hacer más llevadera la vida terrenal y alcanzar la Otra Vida, ha practicado a lo largo de los siglos ciertos rituales con los que agradar a la Divinidad en la que creía. Los ritos suponen el uso de unos objetos concretos, específicos para cada tipo de ceremonia y habitualmente se desarrollan en espacios sacralizados, los santuarios, que han existido en casi todas las culturas. En este apartado de la exposición se presentan piezas arqueológicas y etnográficas, junto a algunos de los mejores cuadros del Museo, representativos de la religiosidad de las diferentes culturas históricas documentadas en la Provincia. EL CIELO EN LA TIERRA Como final del recorrido, en esta área se muestra el gran privilegio de un creyente que consigue ser escuchado por la Divinidad gracias a sus méritos. Un tema que inspiró a numerosos artistas de nuestra civilización occidental, y que en esta sala tiene varios ejemplos muy notables: obras de Carreño de Miranda, de las Escuelas de El Greco y Ribera, en cuyas escenas los cielos se rompen para mostrar a la Divinidad y a quienes tuvieron acceso a ella, pasando a la posteridad como representantes divinos o intermediarios entre el Cielo y la Tierra. GALÁPAGOS TEATRO CÁLIDO · FUNDACIÓN CAJA DE GUADALAJARA 3- El Palacio del Infantado Desde su construcción, en 1482, el Palacio fue la casa principal de los Duques del Infantado, sede del Museo Provincial, Colegio de Huérfanos de Guerra, y tras un intervalo de décadas en las que permaneció en ruinas después del bombardeo de 1936, se abrió de nuevo como Biblioteca Pública, Archivo Histórico y Museo Provincial de Guadalajara. 3.1- Historia del Palacio El Palacio del Infantado fue construido hacia 1482 por el segundo Duque del Infantado, don Iñigo López de Mendoza, para servir como casa a los Duques y a la familia Mendoza. Esta familia llegó a Guadalajara hacia mediados del siglo XIV, y a partir del reinado de los Reyes Católicos se convirtió en una de las más importantes e influyentes en la historia de España. Por ello en el edificio se alojaron personajes tan importantes como los Reyes Católicos, su nieto el Emperador Carlos V o el rey Francisco I de Francia, y en él se celebró la boda de Felipe II con Isabel de Valois en 1560. La familia Mendoza estuvo siempre muy preocupada por el arte, ya que la posesión de palacios y obras artísticas era símbolo de riqueza y de poder. Así realizaron numerosas construcciones por Guadalajara, como el Palacio de don Antonio de Mendoza (hoy instituto Liceo Caracense), las actuales iglesias de los Remedios y de San Francisco y el Convento de Carmelitas de San José, y también por toda Castilla (como el Hospital de la Santa Cruz de Toledo, hoy Museo provincial). Para la construcción del Palacio del Infantado se contrató a un arquitecto de origen bretón, Juan Guas, y para su decoración al tallista Egas Cueman. De este palacio original se conservan la fachada principal y el Patio de los Leones, luego modificados. Unos años más tarde se levantó la fachada del jardín, realizada por Lorenzo de Trillo. En el siglo XVI, el quinto Duque del Infantado aumentó el número de dependencias para dar cabida a su elevado número de familiares y sirvientes y lo adaptó al nuevo estilo imperante: el Renacimiento. Por ello modificó la altura y el estilo de las columnas del patio, creó plantas intermedias con balcones y ventanas en la fachada e hizo decorar con pinturas al fresco varias salas de la planta inferior, bajo las cuales excavó otras dependencias semisubterráneas. En el siglo XVII, doña Ana de Mendoza, sexta Duquesa del Infantado realizó pequeñas modificaciones sin valor artístico, como la reorganización interior del ala este. En este mismo siglo la familia se trasladó con la corte a Madrid. Desde entonces el Palacio fue utilizado tan sólo como residencia ocasional, hasta que en 1873 se cedió una parte para instalar el Museo Provincial, que tuvo que ser desalojado cuando, en 1878, los Duques llegaron a un acuerdo con el Ministerio de Guerra para que se instalara el Colegio de Huérfanos de Guerra, motivo por el que se realizaron más adaptaciones. Años más tarde, en 1909, el derribo de la iglesia de Santiago obligó a realizar una fachada en el lado este, ya que la existente carecía de interés por haber estado siempre oculta por la iglesia, encargándose la nueva obra al arquitecto Ricardo Velázquez Bosco. Como Colegio permaneció hasta el 6 de diciembre de 1936, día en que el Palacio del Infantado fue bombardeado con proyectiles incendiarios, resultando seriamente dañado: sólo quedaron en pie las fachadas, las galerías del Patio de los Leones y del jardín y una esquina entre la fachada principal y el jardín. Durante años estuvo en ruinas, siendo presa del saqueo y la destrucción por las inclemencias del tiempo. En 1960 los Duques y el Ayuntamiento, propietarios del Palacio, lo cedieron finalmente al Ministerio de Cultura, empezándose entonces una rehabilitación que se prolongó hasta 1972, fecha en la que se abrió de nuevo como sede de la Biblioteca Pública y el Archivo Histórico Provincial, y, un año más tarde, también del Museo Provincial. Desde entonces es el edificio más visitado y querido de Guadalajara, testigo de una intensa actividad cultural y escenario de los acontecimientos más notables de la ciudad. GALÁPAGOS TEATRO CÁLIDO · FUNDACIÓN CAJA DE GUADALAJARA 3.2- Descripción artística El Palacio del Infantado es una auténtica joya de la arquitectura civil europea. Originalmente obra del arquitecto Juan Guas y del escultor Egas Cueman, fue construido siguiendo una estética propia del gótico final, reflejando una mezcla de estilos e influencias artísticas. En planta es un edificio cuadrangular con fachadas ricamente decoradas, patio central, alrededor del cual se distribuyen las estancias en cuatro alas, y jardín al sur y al oeste. Está construido en piedra caliza de Tamajón. Las diversas remodelaciones y reconstrucciones sufridas por el Palacio han hecho que en él se recojan las influencias de varios estilos arquitectónicos, aunque tras el incendio de la Guerra Civil se destruyó gran parte del edificio, por lo que en la actualidad sólo se conservan la fachada principal (siglo XV), la del jardín (siglo XV) y la lateral (principios del siglo XX), el Patio de los Leones (siglos XV y XVI) y las Salas del Duque (siglo XVI). LAS FACHADAS El Palacio presenta en la actualidad tres fachadas históricas, aunque modificadas, que dan al norte (la principal), al este (la lateral) y al oeste (la del jardín). La cuarta es una obra moderna de los años 60. • La fachada principal fue construida hacia 1482 por Juan Guas y Egas Cueman; en ella se combinan elementos góticos y mudéjares con añadidos posteriores renacentistas. El edificio fue concebido como mezcla de palacio y fortaleza, de ahí que la puerta esté descentrada y protegida por los garitones y que los vanos fueran originalmente escasos y de pequeño tamaño. De origen mudéjar son la superficie cubierta de puntas de diamante y las dos cornisas de mocárabes: la que soporta la galería superior y la que hay bajo el escudo principal apoyada en columnas decoradas con bolas, simulando el conjunto un alfiz. De carácter gótico es la galería corrida con ventanas y garitones rodeados y separados por adornos del mismo estilo (columnas, arcos, tracerías, escudos y motivos vegetales), la decoración de la puerta principal y los dos salvajes que sostienen el gran escudo de la familia sobre ella. En el siglo XVI se abrieron la puerta pequeña, las ventanas de la planta baja y varios balcones, de estilo renacentista, rematados por un frontón triangular. En la restauración de los años 60 se eliminaron algunos de los añadidos del siglo XVI, como numerosas ventanas a diferentes alturas y un balcón principal situado sobre la puerta. • La fachada del jardín, también conocida como Galería del Estanque, fue construida por el arquitecto alcarreño Lorenzo de Trillo hacia 1496. Está formada por una doble arquería superpuesta, con arcos de medio punto y columnas prismáticas, de inspiración renacentista, sin embargo presenta los paramentos decorados en toda su superficie con hiladas de arquitos apuntados, a modo de mocárabes, de influencia mudéjar. Viene a ser una interpretación personal y muy temprana de las prototípicas “logias” o galerías italianas, plasmada por Lorenzo de Trillo. • La fachada lateral, es más moderna, de 1909, cuando al ser derribada la iglesia de Santiago, adosada al Palacio por el lado este, quedó al descubierto un ala que no armonizaba con la dignidad del resto del edificio. Por esta razón se encargó al arquitecto historicista Velázquez Bosco una nueva fachada, para la que se inspiró en las reformas del V duque. Posteriormente fue rehecha, en la rehabilitación de los años 60, eliminando la mitad de las ventanas y elevando la puerta sobre el nivel de la calle. GALÁPAGOS TEATRO CÁLIDO · FUNDACIÓN CAJA DE GUADALAJARA EL PATIO DE LOS LEONES Desde la puerta principal, a través de un zaguán, se accede al patio central, un espacio cuadrangular con dos cuerpos de columnas y arcos góticos. Es el elemento central del Palacio, en torno al que se configuran todos los espacios. Con una riquísima decoración gótica flamígera, su nombre viene dado por los relieves de la planta baja: parejas de leones enfrentados sujetando tolvas de molino, el emblema del primer Duque del Infantado, y entre cada pareja los escudos de Mendoza y de Luna, sobre las columnas. En los arcos de la planta superior están esculpidas parejas de grifos, animales mitológicos de carácter protector, también enfrentados y encadenados a árboles de la vida. Por el interior las esquinas están reforzadas con ocho arcos escarzanos (arcos rebajados), decorados con pajecillos que sostienen los escudos de Mendoza y Luna. Las columnas del piso alto son helicoidales y es posible que originalmente también lo fueran las del bajo, que en la actualidad son lisas y de estilo renacentista, correspondiendo al la reforma del quinto Duque. Los techos de las galerías del patio estaban cubiertos con artesonados, que se quemaron durante la Guerra Civil; actualmente queda uno de ellos en una esquina del piso inferior. LOS SALONES PRINCIPALES En el primer palacio las distintas estancias se repartían en dos plantas nobles y una superior de menor categoría. En la primera se encontraban los salones principales, que durante siglos llamaron la atención de los visitantes ya que estaban decorados con fantásticos artesonados policromados y dorados, con frisos esculpidos con diferentes motivos que dieron nombre a cada una de las estancias: Salón de Salvajes, Linajes, Cazadores, Consejos, etc., en ellos además había suntuosas chimeneas. Todos fueron destruidos en el incendio de 1936. En la planta baja aún se conservan otras estancias nobles, las que reformó el quinto Duque entre 1570 y 1580 tomando como modelo las obras que en el Alcázar de Madrid estaba realizando Felipe II. Son varios salones y saletas de estilo renacentista, decorados con pinturas al fresco, y conocidos como Salas del Duque. Con ellas se pretendió ampliar el espacio disponible. Las pinturas fueron realizadas entre 1578 y 1580 por el pintor italiano Rómulo Cincinato que había venido a España por orden de Felipe II para trabajar en las obras reales. Responden a la idea renacentista de reflejar la gloria de la familia que las encargaba, en este caso los Mendoza, a través de historias ejemplares de heroísmo, representaciones abstractas de los más altos valores, destacando y recordando las hazañas de los antepasados y refiriéndose a hechos míticos e históricos, demostrando además un culto a la Historia, la Literatura y el Arte. De las estancias que se decoraron en su momento, tres se perdieron en el incendio de 1936, llegando hasta hoy tres salas y dos saletas: • Sala de Cronos: en la que las pinturas representan el tiempo vencedor sobre todas las cosas. • Sala de las Batallas: decorada con los hechos militares, reales y míticos, más destacados de la familia Mendoza. • Saleta de Roma: dedicada a las victorias de los héroes romanos. • Saleta de los Dioses: en la que se representan diversas divinidades clásicas. En ambas la decoración lo ocupa todo, techo y paredes. • Sala de Atalanta: se narra la historia de Atalanta, inspirada en una de las historias de las “Metamorfosis” de Ovidio. GALÁPAGOS TEATRO CÁLIDO · FUNDACIÓN CAJA DE GUADALAJARA Estas salas conservan también los frisos de azulejos, realizados en Talavera en el siglo XVI expresamente para el Palacio, con unos motivos que tuvieron tanto éxito que todavía hoy se siguen produciendo. Durante estos diez años se hicieron otras remodelaciones como la introducción de una entreplanta y la apertura de un sótano con salida a la calle a través de la puerta lateral de la fachada principal. EL JARDÍN Inicialmente debió existir un jardín de estilo mudéjar del que nada conocemos, que ocupaba, como en la actualidad, los lados oeste y sur. En el siglo XVI fue rediseñado incluyéndose un gran estaque artificial en el que se podía navegar en barca, un laberinto vegetal y numerosas estatuas y fuentes monumentales traídas desde Italia. El que hoy existe fue creado en los años 80 del siglo XX con un nuevo estanque y un laberinto vegetal. GALÁPAGOS TEATRO CÁLIDO · FUNDACIÓN CAJA DE GUADALAJARA